Érase una vez

el fin, se celebró el funeral al que acudió muchísima gente no solo del pueblo sino de diferentes
partes de España.
Dentro de este proyecto, yo me veré identificado con el personaje de Alicia. El proyecto arranca
desde mi feliz infancia con mi abuela, con meriendas, dibujos, risas, cuentos y una imaginación
desbordante propia de un niño. Alicia además de cumplir muchas de las anteriores
características es la más indicada para poder moverse por el mundo del país de las maravillas.
Una vez que hemos contextualizado el proyecto, pasemos a ver las obras ya desentrañar que
parte de la historia representan dentro del proyecto:
#1 El jardín
La primera obra de la serie es la representación de mis momentos felices de la infancia con mi
abuela. He mezclado una idea surrealista de mundo feliz con el capítulo 7 de Alicia en el país
de las maravillas (una merienda de locos).
En este capítulo Alicia avanza por el bosque hasta encontrarse una gran mesa donde se
encuentran el Sombrerero, la Liebre de Marzo y el Lirón. La historia avanza con una merienda
cargada de un sin fin de locuras y charlas surrealistas.
Mi idea ha sido la de poder entretejer mis recuerdos de mi infancia donde pasé gran parte de
ella en casa de mi infancia con este capítulo del libro. He introducido elementos que por sí
solos en la obra no adquieren un gran significado y necesitan de explicación previa para poder
relacionarlos con mis recuerdos.
Cuando era pequeño mis padres viajaban bastante y me dejaban con mi abuela. Lo que comenzó
como una especie de castigo terminó convirtiéndose en una de mis cosas favoritas. Mi abuela
y yo teníamos muy buena relación y aunque con un carácter muy parecido que ocasionaba
alguna que otra riña, nos entendíamos. En casa de mi abuela nació mi afición por el dibujo,
pues él era el principal medio para entretenerme, sin embargo, encontré otras formas como
hacer castillos de naipes, jugar a la brisca con mi abuela y sus vecinas y por supuesto comer.
En casa de mi abuela pasaba los días comiendo. No es de extrañar que de pequeño tuviera
sobrepeso y no de comer bollería sino de las comidas de mi abuela.
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