Harry_Potter_y_la_Piedra_Filosofal_01
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Hagrid, poniendo <strong>la</strong> mano en el hombro de <strong>Harry</strong> y obligándole a dob<strong>la</strong>r <strong>la</strong>s<br />
rodil<strong>la</strong>s.<br />
—Buen Dios —dijo el cantinero, mirando atentamente a <strong>Harry</strong>—. ¿Es<br />
éste... puede ser...?<br />
El Caldero Chorreante había quedado súbitamente inmóvil y en silencio.<br />
—Válgame Dios —susurró el cantinero—. <strong>Harry</strong> <strong>Potter</strong>... todo un honor.<br />
Salió rápidamente del mostrador, corrió hacia <strong>Harry</strong> y le estrechó <strong>la</strong> mano,<br />
con los ojos llenos de lágrimas.<br />
—Bienvenido, <strong>Harry</strong>, bienvenido.<br />
<strong>Harry</strong> no sabía qué decir. Todos lo miraban. La anciana de <strong>la</strong> pipa seguía<br />
chupando, sin darse cuenta de que se le había apagado. Hagrid estaba<br />
radiante.<br />
Entonces se produjo un gran movimiento de sil<strong>la</strong>s y, al minuto siguiente,<br />
<strong>Harry</strong> se encontró estrechando <strong>la</strong> mano de todos los del Caldero Chorreante.<br />
—Doris Crockford, <strong>Harry</strong>. No puedo creer que por fin te haya conocido.<br />
—Estoy orgullosa, <strong>Harry</strong>, muy orgullosa.<br />
—Siempre quise estrechar tu mano... estoy muy comp<strong>la</strong>cido.<br />
—Encantado, <strong>Harry</strong>, no puedo decirte cuánto. Mi nombre es Diggle,<br />
Dedalus Diggle.<br />
—¡Yo lo he visto antes! —dijo <strong>Harry</strong>, mientras Dedalus Diggle dejaba caer<br />
su sombrero a causa de <strong>la</strong> emoción—. Usted me saludó una vez en una tienda.<br />
—¡Me recuerda! —gritó Dedalus Diggle, mirando a todos—. ¿Habéis oído<br />
eso? ¡Se acuerda de mí!<br />
<strong>Harry</strong> estrechó manos una y otra vez. Doris Crockford volvió a repetir el<br />
saludo.<br />
Un joven pálido se ade<strong>la</strong>ntó, muy nervioso. Tenía un tic en el ojo.<br />
—¡Profesor Quirrell! —dijo Hagrid—. <strong>Harry</strong>, el profesor Quirrell te dará<br />
c<strong>la</strong>ses en Hogwarts.<br />
—P-P-<strong>Potter</strong> —tartamudeó el profesor Quirrell, apretando <strong>la</strong> mano de<br />
<strong>Harry</strong>—. N-no pue-e-do decirte l-lo contento que-e estoy de co-conocerte.<br />
—¿Qué c<strong>la</strong>se de magia enseña usted, profesor Quirrell?<br />
—D-Defensa Contra <strong>la</strong>s Artes O-Oscuras —murmuró el profesor Quirrell,<br />
como si no quisiera pensar en ello—. N-no es al-algo que t-tú n-necesites,<br />
¿verdad, P-<strong>Potter</strong>? —Soltó una risa nerviosa—. Estás reuniendo el e-equipo,<br />
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