RAG 2017 web edicion 12 dic

exalumno del Campestre, Miguel Ocampo, y uno del Moderno, Iván Jaramillo,
para contribuir con dos grandes cambios en BiciRolo: pasó a llamarse MUVO,
teniendo en cuenta que se requería un nombre más internacional y de fácil recordación,
además que se estableció la tecnología como corazón del negocio.
Para esa época, en China se estaba viviendo la revolución de las bicicletas compartidas;
se habían abandonado los sistemas con anclaje fijo y se estaba empezando
a implementar el alquiler de bicicletas convencionales mediante candados
inteligentes integrados a la bicicleta. Estas empresas emergentes también operaban
un modelo cien por ciento privado como el de MUVO, por lo que el equipo
tomó la decisión de desarrollar el primer sistema en el mundo de bicicletas eléctricas
compartidas sin anclaje fijo y de vocación privada.
¿En qué se traducía esto? En que MUVO iba a implementar lo que la alcaldía
bogotana había intentado por más de veinte años y además lo iba a hacer con la
última tecnología en bicicletas compartidas y bicicletas eléctricas.
Hoy por hoy, MUVO es una app por medio de la que se presta el servicio de alquiler
de bicicletas eléctricas de punto a punto y les ofrece a los bogotanos una
nueva alternativa de transporte saludable, ecológico y rápido. El proceso de uso
es muy sencillo y se resume en tres pasos: descargar la app y registrarse junto
con un medio de pago; ir a una estación y desbloquear la bicicleta escaneando el
código QR en el candado inteligente de la bicicleta, ubicado en la llanta trasera;
usar la bicicleta, devolverla en la estación más cercana al destino final y cerrar el
candado. Cada media hora de uso tiene un costo de tres mil pesos ($3.000 COP) y
el cobro se hace automáticamente al finalizar el viaje a la tarjeta de crédito registrada.
La app también muestra un resumen del recorrido realizado.
Utilizar MUVO no solo genera un beneficio en movilidad (reduce el tiempo de
desplazamiento alrededor de un cincuenta por ciento respecto al carro), sino que
también genera una serie de beneficios sociales. Contribuye con la movilidad
de la ciudad y reduce la huella de carbono (un usuario frecuente de MUVO está
dejando de emitir 7.095 gramos de CO2 mensuales). Por otra parte, está demostrado
que movilizarse en bicicletas de pedaleo asistido tiene un efecto positivo
en la salud. Cuando un usuario finaliza un viaje la app le muestra los kilómetros
recorridos, el CO2 ahorrado y las calorías quemadas.
En este momento cuenta con siete estaciones distribuidas entre la calle 72 y la
calle 100, y entre la carrera 7 y la autopista norte, y a medida que aumente el
número de usuarios aumentará también el número de estaciones para cubrir una
mayor área de la ciudad.
¡Los invitamos a que descarguen la app de MUVO y utilicen el sistema! Para
conocer más sobre este gran emprendimiento gimnasiano, visiten la página
www.muvo.bike!
21