magnetoterapia

pues ha comprendido que no está enfermo –en el sentido que se
creía anteriormente– sólo está perdido –confundido– y en busca
del sendero de la evolución tan deseada.
Algunas personas transitan por la vida olvidando que también son
un cuerpo, así como saben que son una mente que piensa y se sienten
condicionadas por las emociones que invaden su experiencia vital.
Un ser humano es todo eso y mucho más, sin embargo, es el cuerpo
el protagonista cuando intenta detener una vida desenfrenada por
intermedio de un accidente, o produce los mecanismos que disparan
una enfermedad orgánica que indica que se cometieron abusos en su
contra. Es el cuerpo que se manifiesta, es el vehículo que señala los
reclamos de una mente que necesita detener su ritmo, las quejas de
un sistema orgánico que ha sido maltratado. El cuerpo lanza un pedido
de auxilio, exige que se respeten sus características únicas, que
están a cargo de esa persona única que es cada ser humano.
Sólo cuando el cuerpo nos obliga a pensar en él, nos damos cuenta
de que nuestra vida toda y nuestro cuerpo en particular, son inseparables.
La vida es una unión entre cuerpo, mente y alma, no hay
disolución posible. El cuerpo y el alma tienen mucho que comunicarse
mutuamente. Ha llegado el tiempo de empezar a activar esa
comunicación.
En el nuevo paradigma (conjunto de ideas y creencias aceptadas
como verdaderas) estamos revisando y ordenando todos los supuestos
anteriores. Los científicos de todos los tiempos han realizado
sus trabajos de investigación sobre un patrón de ideas que se
denomina paradigma. Se trata de un modelo o un conjunto de supuestos
que cada época acepta. Estas creencias se van debilitando
hasta ser reemplazadas por nuevas teorías y una nueva visión del
mundo. Una nueva visión está haciendo su entrada en esta época,
que compromete a la ciencia, a la política, a la literatura, a la economía,
a la religión y al destino del hombre. Una propuesta que surge
a partir de esta nueva visión, es reemplazar el concepto del hombre
máquina, que se divide en partes por el concepto de hombre total
(sistemas holísticos). El gesto terapéutico está en función de la naturaleza
básica de los seres humanos, se trata de la esencia del hombre.
El contacto personalizado hace la diferencia al medir estadísticamente
los resultados de los tratamientos para conservar la salud.
El paciente es ante todo, una persona.
50 :: Magnetoterapia
Graciela Pérez Martínez