Revista Vol.3

Continuación...
LEY 26 de marzo de 1915 se llevó a cabo una investigación forense. Los testigos clave fueron Charlie Stielow y su
cuñado, quienes testificaron que la noche del asesinato escucharon gritos que venían del otro lado de la calle. Se
levantaron y miraron hacia la puerta pero no vieron ni escucharon nada sospechoso, así que volvieron a la cama.
Ambos hombres negaron tener un arma. Las autoridades locales decidieron contratar a un detective privado de
Buffalo, Nueva York llamado George Newton. Poco después de hacerse cargo de la investigación, Newton descubrió
que Charlie Stielow tenía un revólver calibre 22. Sobre la base de ese descubrimiento y el hecho de que había mentido,
Charlie fue arrestado el 21 de abril de 1915. En un esfuerzo por determinar si se trataba del arma homicida, Newton
trajo a un hombre al caso llamado Dr. Albert Hamilton.
La contratación del señor Hamilton fue el primer error que se cometió en la investigación, este señor era un fabricante
de medicamentos, que se hizo pasar por un criminalista. Este señor se auto proclamó experto en la identificación de
armas de fuego lo que era falso. Luego que Hamilton examinara los proyectiles encontrados en las víctimas este
certificó que fueron disparados por el arma de Stielow. Hamilton nunca probó el arma de Stielow para llegar a esta
conclusión.
El segundo error en la investigación fue la supuesta confección de Stielow, el 23 de abril, mientras Newton y tres
agentes de policía lo interrogaban en la cárcel del condado, se dijo que Stielow había confesado los asesinatos. Sin
embargo, se negó a firmar una versión escrita de su confesión. En el juicio se alegó que esta confesión fue forzada. A
pesar de esto Stielow fue encontrado culpable. Luego de varias mociones para un nuevo juicio, el gobernador
Whitman conmuto la sentencia de Stielow y se abrió una nueva investigación con un verdadero especialista en la
identificación de armas de fuego Charles Waite, quien determinó que el arma de Stielow no disparó los proyectiles
encontradas en las víctimas. Este caso da inicio a la ciencia de la identificación hoy en día practican los examinadores
de armas de fuego.
Escrito por Profa. Carmen Suliveras
Actividades JUST 2050
0 3
Identificar sospechoso