Enfermería Facultativa Número 383

ENFERMERÍA FACULTATIVA
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¿UN NUEVO
ÉXITO DE JAMES
CAMERON?
IRENE BALLESTEROS. Madrid
“Los Sully se mantienen unidos”
es una de las frases más
repetidas de la nueva entrega
de James Cameron, Avatar: el
sentido del agua. Un espectáculo
visual de tres horas de
duración que ha despertado
pasiones y también múltiples
críticas. ¿Un gran fracaso o
un enorme éxito? Las opiniones,
son como los colores,
puestos a elegir hay un mar
de diversas opciones. Lo que
es indiscutible es que la segunda
entrega de Avatar es
una de esas películas que marcan
la diferencia para gastarse
el dinero en ir al cine. Un espectáculo
de animaciones faciales,
interpretaciones corporales
y la mejor captura de
movimiento jamás vista.
En Avatar 2, el agua le da
sentido a todo, a la muerte, a
CINE
la vida, a la naturaleza, a la familia.
De hecho, es la familia
la gran protagonista de este
blockbuster. Una familia unida
e inquebrantable, que deja
ver la unión entre hermanos,
la complicidad entre una pareja
fuerte y sólida y la ternura
del amor por los hijos. Esos
por los que Neytiri y Jake
Sully luchan hasta el final.
Colores espectaculares, paisajes
deslumbrantes, movimientos
fascinantes y una trama
intensa que ya ha recaudado
180 millones en taquilla.
Durante las tres horas de
este gran film también se ve a
“Liberad a Willy”, “Lo imposible”,
“Titanic” e incluso
también quedan retales de un
“Tarzán” que ya habíamos olvidado.
Grandes películas que
Una
película que
marca la
diferencia
quedan plasmadas en este
gran espectáculo de lo visual.
Y es que, si algo funciona de
forma independiente, la combinación
puede ser explosiva,
¿no? Esto es, precisamente lo
que representa esta película,
un mix de grandes genialidades
que juntas hacen que
Avatar 2 deba ser recordada
como algo más que una película
de James Cameron que
arrasará las taquillas. Debemos
rendirnos a su técnica, a
sus actores y actrices y recordar
la magia de los Na’vi.
Tras los créditos no hay nada
más que ver, tan sólo escuchar
al gran The Weekend y
esperar con paciencia a que
estos dos años que separan esta
entrega de su continuación
pasen rápido.