El arenal de Sevilla de Lope de Vega Hablan en ella las personas ...

para hallarle brevemente,
porque a ver tantas galeras
cubre sus blancas riberas
agora infinita gente.
Que no hay hombre, no hay mujer,
que no salga al arenal 1
a mirar grandeza tal
cual nunca se espera ver,
porque han bajado galeras
de toda Italia y venido
a la ocasión que has oído 1
mil naciones estranjeras.
Por la carta de su padre
en Medina se decía,
y por el llanto que hacía
su afligida y triste madre, 2
que estaba en Sevilla herido
de cuatro ladrones fieros,
quedando de sus aceros
en esta arenal tendido.
Y pues no fue con la flota 2
de Tierrafirme, y Alberto
tiene salud, ten por cierto
que ha tomado otra derrota,
y que aquí se habrá quedado
a lo fértil de la tierra, 3
o que para aquesta guerra
debe de estar alistado.
LUCINDA La contraria estrella mía,
Florelo, con que nací
no querrá que para mí 3
dichoso amanezca un día.
Desde Medina he venido
por este honroso interés
en el hábito que ves
a buscar mi bien perdido, 4
porque, conforme a quien soy,