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unnin' CORRER EN INVIERNO
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organizando desafíos en la Cordillera.
Más allá del clima, Mariano Álvarez considera
que hay factores importantes a la hora de
convocar a una carrera, como “la calidad del
evento, los antecedentes del organizador, el
motivo convocante o el costo”.
BATALLA A LAS BAJAS TEMPERATURAS
Lo importante en esta época es tomar los
recaudos necesarios. “El frío es un obstáculo que
se puede superar con buena indumentaria. Hoy
encontramos gran variedad de marcas y telas
nuevas que nos permiten entrenar en días fríos o
lluviosos”, aconseja el organizador de La Misión.
“Lo más importante es hacer una buena
entrada en calor, con buena dilatación de
vasos sanguíneos, realizando un calentamiento
general y uno específico en base al estímulo
de la jornada, no olvidar hacer trabajos de
flexibilidad leves al comienzo y un poco más
profundos al terminar”, sugiere Mezzadri.
Desde la organización de los eventos, las
precauciones están a la orden del día. “Durante
el invierno se intenta comenzar las carreras
un poco más tarde por la mañana, contar con
guardarropas bien equipados para que la gente
pueda entrar bien en calor y luego poder dejar
sus abrigos para correr cómodos”, explica
Kogan, del Club de Corredores.
El clima incide de manera más o menos
benévola según se trate de carreras de calle
o de aventura. “Por lo general, las carreras de
calle tienen mayor tolerancia al mal clima, las
carreras de aventura se complican, ya que los
accesos a veces son difíciles, y creo que afecta
mucho más la lluvia que el frío. El frío, al menos
el nuestro, que raramente baja de 4 ó 5 grados,
con sol, es buenísimo para correr. De hecho, las
mejores marcas se obtienen con temperaturas
inferiores a los 10 o 12 grados”, afirma Álvarez.
En lugares más inhóspitos, donde el atractivo
es justamente ése, el secreto de una buena
organización reside en tomar las precauciones
necesarias para que un posible mal tiempo
no arruine los planes. “Si uno hace eventos
de aventura debe tener siempre esquemas
alternativos por el clima. No hay que desafiar a
la naturaleza, solo hay que aceptar sus reglas
y saber cuándo avanzar y cuándo no”, asegura
Aznarez.
En definitiva, la agenda de carreras en los
meses de invierno ofrece una amplia oferta
para correr en la ciudad o en otros puntos
del país. Hay eventos para todos los gustos,
rendimientos y temperamentos, lo importante
es que el calendario sigue caliente y a los
runners no hay frío que los pare.