Decargar la tesis - Ingenio
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APRENDIZAJE ORGANIZATIVO, CAPACIDADES E<br />
INNOVACIÓN: TRES ESTUDIOS EN EL SECTOR CERÁMICO<br />
ESPAÑOL E ITALIANO<br />
TESIS DOCTORAL<br />
PRESENTADA POR:<br />
Ana Isabel Fernández Mesa<br />
DIRIGIDA POR:<br />
Dr. Joaquín Alegre Vidal<br />
Dr. Ricardo Chiva Gómez<br />
Valencia, 2012
APRENDIZAJE ORGANIZATIVO, CAPACIDADES E<br />
INNOVACIÓN: TRES ESTUDIOS EN EL SECTOR CERÁMICO<br />
Dr. Joaquín Alegre Vidal<br />
Departamento de Dirección de Empresas<br />
‘Juan José Renau Piqueras’<br />
Universitat de València<br />
ESPAÑOL E ITALIANO<br />
TESIS DOCTORAL<br />
PRESENTADA POR:<br />
Ana Isabel Fernández Mesa<br />
DIRIGIDA POR:<br />
Valencia, 2012<br />
Dr. Ricardo Chiva Gómez<br />
Departamento de Administración de<br />
Empresas y Márketing<br />
Universitat Jaume I
A Juan Bautista
AGRADECIMIENTOS<br />
Este es el apartado de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> que esperaba con más ilusión. No únicamente por el hecho<br />
de finalizar <strong>la</strong> <strong>tesis</strong>, sino porque tengo <strong>la</strong> gran fortuna de haber contado con un grandísimo<br />
apoyo por parte de muchas personas que merecen ser destacadas en este trabajo.<br />
En primer lugar, quiero agradecer el apoyo a todo un departamento, al departamento de<br />
Dirección de Empresas Juan José Renau Piqueras. No quiero concretar en decir cada uno de los<br />
nombres que son importantes para mí porque corro el riesgo de que me falte alguno y no me lo<br />
perdonaría nunca. Sin embargo, sí que me gustaría resaltar que me siento muy orgullosa de ser<br />
uno de sus miembros y que sin <strong>la</strong> ayuda de los profesores que lo conforman hoy no podría estar<br />
escribiendo estas pa<strong>la</strong>bras.<br />
En segundo lugar, aunque no por ello menos importante, me gustaría agradecer el<br />
acogimiento prestado por el instituto INGENIO, el cual cuenta con profesionales de mucha<br />
calidad profesional y humana. Especialmente quiero agradecer a Isabel el mostrarme <strong>la</strong>s<br />
oportunidades que existían para empezar con este proyecto. Así como a Antonio, por<br />
orientarme, apoyarme y darme <strong>la</strong> confianza de transmitirle mis inquietudes. En INGENIO me<br />
he sentido desde un primer momento como una más. La empatía y compañerismo que se<br />
respira en el ambiente hace que pese a que sólo han pasado unos meses desde que me uní al<br />
instituto, es como si estuviera aquí desde siempre.<br />
Quisiera dar <strong>la</strong>s gracias a mi familia y amigos, por entender y respetar el esfuerzo que<br />
suponía <strong>la</strong> realización de este trabajo y ofrecerme su apoyo incondicional. En especial a mis<br />
padres, por los principios y valores que me han inculcado y por estar orgullosos del esfuerzo<br />
que supone cada tarea. Así como a mis hermanos Jaime y Tere, por su forma de ver <strong>la</strong> vida,<br />
siempre aportando optimismo. Sin duda he de resaltar el apoyo de mi marido, Juan Bautista,<br />
por saber estar ahí y por tolerar que dividiera mi tiempo conformándose siempre con el resto. Él<br />
es <strong>la</strong> persona que más sacrificios ha hecho para que hoy pueda estar escribiendo estas pa<strong>la</strong>bras.<br />
Finalmente he de destacar <strong>la</strong> <strong>la</strong>bor en esta <strong>tesis</strong> de Ricardo y Ximo. Gracias a Ricardo por<br />
sus horas de dedicación a supervisar este trabajo y por saber transmitirme su inquietud<br />
investigadora demostrándome que <strong>la</strong> pasión y <strong>la</strong> creatividad en este oficio es algo muy<br />
importante. A Ximo le debo mucho. Él fue el profesor que confió en mí en todo momento,<br />
incluso cuando yo misma dudaba de mis capacidades, supo transmitirme seguridad, confianza<br />
y fue capaz de darme el empuje que necesitaba. Sin duda es a él a quien debo <strong>la</strong> oportunidad de<br />
poder empezar en esta carrera profesional. Como dice Ximo, <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> es sólo un primer paso, por<br />
lo que a partir de ahora empieza un <strong>la</strong>rgo camino en el que espero seguir contando con su<br />
apoyo y con el de Ricardo, ya que son mi modelo a seguir.
RESUMEN<br />
La innovación se puede asociar a <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de cambiar y<br />
combinar recursos generando de forma interna habilidades que logren<br />
incrementar <strong>la</strong> capacidad de <strong>la</strong> compañía para desarrol<strong>la</strong>r procesos o<br />
productos nuevos. En años recientes muchos estudios tratan de explicar este<br />
tipo de re<strong>la</strong>ciones, sin embargo, <strong>la</strong> investigación se encuentra en una etapa<br />
preliminar y por ello algunos de estos estudios muestran resultados<br />
inconcluyentes e incluso contradictorios. Para poder llegar a entender estas<br />
re<strong>la</strong>ciones es necesario observar<strong>la</strong>s con mayor detenimiento profundizando<br />
en variables que median entre los conceptos y que nos ayudan a darles una<br />
mejor explicación. Por lo que el objetivo de esta <strong>tesis</strong> es c<strong>la</strong>rificar <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción<br />
entre diversas capacidades organizativas y los resultados en innovación. Para<br />
ello nos apoyamos en <strong>la</strong> perspectiva de capacidades dinámicas.<br />
La <strong>tesis</strong> está compuesta por tres artículos científicos independientes más un<br />
capítulo teórico en el que se desarrol<strong>la</strong> <strong>la</strong> perspectiva de capacidades<br />
dinámicas desde sus inicios. El objetivo del capítulo teórico es dar soporte a<br />
los estudios empíricos presentados.<br />
El primer artículo investiga <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo y el desempeño innovador. Proponemos a <strong>la</strong> gestión del diseño<br />
como una capacidad dinámica que media entre ambos conceptos. En el<br />
segundo artículo examinamos <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> orientación emprendedora<br />
y los resultados en innovación tomando como variable mediadora <strong>la</strong><br />
capacidad de aprendizaje organizativo. Por último, en el tercer estudio,<br />
proponemos al éxito comercial de <strong>la</strong> innovación como una variable<br />
dependiente de <strong>la</strong> competencia en tecnología de <strong>la</strong> información y<br />
demostramos que <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje interno y externo median<br />
entre ambos conceptos.<br />
Los tres modelos p<strong>la</strong>nteados son testados mediante <strong>la</strong> utilización de<br />
ecuaciones estructurales en una muestra de PYMES españo<strong>la</strong>s e italianas de <strong>la</strong><br />
industria cerámica.
RESUM<br />
La innovació es pot associar a l'habilitat de l'empresa de canviar i combinar<br />
recursos generant de forma interna habilitats que aconsegueixin incrementar<br />
<strong>la</strong> capacitat de <strong>la</strong> companyia per desenvolupar processos o productes nous.<br />
En anys recents, molts estudis tracten d'explicar aquest tipus de re<strong>la</strong>cions,<br />
però, <strong>la</strong> investigació es troba en una etapa preliminar i per això alguns<br />
d'aquests estudis mostren resultats no concloents i fins i tot contradictoris.<br />
Per poder arribar a entendre aquestes re<strong>la</strong>cions cal observar-les amb més<br />
deteniment aprofundint en variables que hi ha entre els conceptes i que ens<br />
ajuden a donar-los una millor explicació. Per tant, l'objectiu d'aquesta tesi és<br />
ac<strong>la</strong>rir <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ció entre diverses capacitats organitzatives i els resultats en<br />
innovació. Ens recolzem en <strong>la</strong> perspectiva de capacitats dinàmiques.<br />
La tesi està composta per tres articles científics independents més un capítol<br />
teòric en què es desenvolupa <strong>la</strong> perspectiva de capacitats dinàmiques des dels<br />
seus inicis. L'objectiu del capítol teòric és donar suport als estudis empírics<br />
presentats.<br />
El primer article investiga <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ció entre <strong>la</strong> capacitat d'aprenentatge<br />
organitzatiu i el resultat innovador de <strong>la</strong> companyia. Proposem a <strong>la</strong> gestió del<br />
disseny com una capacitat dinàmica que hi ha entre ambdós conceptes. En el<br />
segon article examinem <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ció entre l'orientació emprenedora i els<br />
resultats en innovació prenent com a variable mediadora <strong>la</strong> capacitat<br />
d'aprenentatge organitzatiu. Finalment, en el tercer estudi, proposem a l'èxit<br />
comercial de <strong>la</strong> innovació com una variable dependent de <strong>la</strong> competència en<br />
tecnologia de <strong>la</strong> informació i demostrem que les competències d'aprenentatge<br />
intern i extern estan entre ambdós conceptes.<br />
Els tres models p<strong>la</strong>ntejats són testats mitjançant <strong>la</strong> utilització d'equacions<br />
estructurals en una mostra de PYMEs espanyoles i italianes de <strong>la</strong> indústria<br />
ceràmica.
ABSTRACT<br />
Innovation can be associated with the company's ability to change and<br />
combine resources internally, generating skills that increase the company´s<br />
capacity for developing processes and products. In recent years many studies<br />
have tried to exp<strong>la</strong>in these re<strong>la</strong>tionships, however, the research is still at a<br />
preliminary stage and therefore some of these studies show inconclusive or<br />
even contradictory results. To understand these re<strong>la</strong>tionships we must<br />
observe more closely if there are variables that mediate between these<br />
concepts helping us to provide a better exp<strong>la</strong>nation. Therefore, the aim of this<br />
thesis is to c<strong>la</strong>rify the re<strong>la</strong>tionship between different organisational<br />
capabilities and innovative performance. To do this, we rely on the dynamic<br />
capabilities view.<br />
The thesis consists of three separate scientific papers plus a theoretical<br />
chapter that develops the dynamic capabilities view. The aim of the<br />
theoretical chapter is to support the empirical papers presented.<br />
The first paper investigates the re<strong>la</strong>tionship between organizational learning<br />
capability and innovation performance. We propose design management as a<br />
dynamic capability that mediates between the two first concepts. In the<br />
second article we examine the re<strong>la</strong>tionship between entrepreneurial<br />
orientation and innovation performance. We take organizational learning<br />
capacity as a mediating variable. Finally, in the third study, we propose the<br />
commercial success of innovation as a dependent variable of information<br />
technology competence and we show that internal and external learning<br />
p<strong>la</strong>ys a vital role between them.<br />
The three proposed models are tested using structural equations in a sample<br />
of Spanish and Italian SMEs ceramic tile industries.
ÍNDICE:<br />
CAPÍTULO 1. INTRODUCCIÓN ..................................................................................... 1<br />
1.0 Introducción al tema de investigación de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> doctoral ....................................... 3<br />
1.1 Justificación y objetivos de <strong>la</strong> investigación ................................................................ 6<br />
1.2 Metodología ..................................................................................................................... 9<br />
1.2.1 La industria cerámica ...................................................................................... 9<br />
1.2.2 Técnicas estadísticas utilizadas en <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> doctoral .................................. 11<br />
1.3 Estructura de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> doctoral ..................................................................................... 16<br />
1.4 Bibliografía ..................................................................................................................... 18<br />
CAPÍTULO 2: MARCO TEÓRICO GENERAL ............................................................ 23<br />
2.0 Objetivos y contenido del capítulo ............................................................................. 25<br />
2.1 Perspectiva de <strong>la</strong> empresa basada en los recursos ................................................... 26<br />
2.1.1 Re<strong>la</strong>ción de <strong>la</strong> Perspectiva de <strong>la</strong> Organización Industrial con <strong>la</strong><br />
Perspectiva Basada en Recursos ........................................................................... 32<br />
2.1.2 Críticas a <strong>la</strong> perspectiva basada en los recursos ....................................... 36<br />
2.2 Aprendizaje organizativo............................................................................................. 43<br />
2.3 Capacidad de aprendizaje organizativo .................................................................... 50<br />
2.3.1 Perspectiva individual .................................................................................. 51<br />
2.3.2 Perspectiva social .......................................................................................... 53<br />
2.3.3 Las dimensiones de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo .............. 57<br />
2.3.3.1 Experimentación ............................................................................ 58<br />
2.3.3.2 Aceptación del riesgo .................................................................... 59<br />
2.3.3.3 Interacción con el entorno ............................................................ 60<br />
2.3.3.4 Diálogo ............................................................................................ 60<br />
2.3.3.5 Participación o toma de decisiones participativa...................... 62<br />
2.4 Capacidades dinámicas ................................................................................................ 63<br />
2.4.1 Capacidades dinámicas y gestión del conocimiento ................................ 75<br />
2.4.2 Tipos de capacidades dinámicas ................................................................. 82<br />
2.5 Bibliografía ..................................................................................................................... 86<br />
I
CAPÍTULO 3: CAPACIDAD DE GESTIÓN DEL DISEÑO: ¿CUÁL ES SU ROL EN<br />
LA PYME? .......................................................................................................................... 103<br />
3.1 Introducción ................................................................................................................. 104<br />
3.2. Marco teórico general ................................................................................................ 106<br />
3.2.1 Gestión del diseño ....................................................................................... 106<br />
3.2.2 Capacidad de Aprendizaje Organizativo ............................................... 112<br />
3.3 Hipó<strong>tesis</strong> ...................................................................................................................... 114<br />
3.3.1 Capacidad de Aprendizaje Organizativo y Capacidad de Gestión del<br />
Diseño .................................................................................................................... 115<br />
3.3.2 Capacidad de Gestión del Diseño e Innovación de Producto ............... 116<br />
3.3.3 La Capacidad de Aprendizaje Organizativo y <strong>la</strong> Innovación de<br />
Producto: Un caso para <strong>la</strong> mediación ................................................................ 117<br />
3.4 Metodología ................................................................................................................. 118<br />
3.4.1 Muestra ......................................................................................................... 118<br />
3.4.2 Medida de <strong>la</strong>s Variables ............................................................................. 120<br />
3.5 Resultados .................................................................................................................... 121<br />
3.5.1 Propiedades Psicométricas de <strong>la</strong>s Esca<strong>la</strong>s de Medida ............................ 121<br />
3.5.2 Contraste de hipó<strong>tesis</strong>................................................................................. 125<br />
3.6 Discusión ...................................................................................................................... 127<br />
3.7 Bibliografía ................................................................................................................... 130<br />
3.8. Anexo ........................................................................................................................... 138<br />
CAPÍTULO 4: EL PAPEL MEDIADOR DE LA CAPACIDAD DE APRENDIZAJE<br />
ORGANIZATIVO ENTRE LA ORIENTACIÓN EMPRENDEDORA Y EL<br />
DESEMPEÑO INNOVADOR ....................................................................................... 141<br />
4.1 Introducción ................................................................................................................. 143<br />
4.2 Marco teórico e hipó<strong>tesis</strong>............................................................................................ 145<br />
4.2.1 Re<strong>la</strong>ción entre Orientación Emprendedora y el Resultado de <strong>la</strong><br />
Organización ......................................................................................................... 145<br />
4.2.2 Re<strong>la</strong>ción entre Orientación Emprendedora e Innovación ..................... 146<br />
4.2.3 Re<strong>la</strong>ción entre Capacidad de Aprendizaje Organizativo e Innovación<br />
................................................................................................................................. 148<br />
4.3 Metodología ................................................................................................................. 150<br />
II
4.3.1 Muestra ......................................................................................................... 150<br />
4.3.2 Medida de <strong>la</strong>s Variables ............................................................................. 152<br />
4.3.3 Análisis Estadístico ..................................................................................... 154<br />
4.3.4 Propiedades Psicométricas de <strong>la</strong>s Esca<strong>la</strong>s de Medición ......................... 154<br />
4.4 Resultados .................................................................................................................... 157<br />
4.5 Discusión ...................................................................................................................... 159<br />
4.6 Bibliografía ................................................................................................................... 164<br />
4.7 Anexos .......................................................................................................................... 172<br />
4.7.1 Anexo 1: Ítems del cuestionario ................................................................ 172<br />
4.7.2 Anexo 2: Análisis Factoriales Confirmatorios ......................................... 175<br />
CAPÍTULO 5: COMPETENCIA EN TECNOLOGÍA DE LA INFORMACIÓN Y<br />
ÉXITO COMERCIAL DE LA INNOVACIÓN ........................................................... 179<br />
5.1 Introducción ................................................................................................................. 181<br />
5.2 Marco teórico general ................................................................................................. 184<br />
5.2.1 Competencia en Tecnología de <strong>la</strong> Información ....................................... 184<br />
5.2.2 Aprendizaje Organizativo .......................................................................... 187<br />
5.2.3 Competencia de Aprendizaje Externo ...................................................... 188<br />
5.2.4 Competencia de Aprendizaje Interno ...................................................... 188<br />
5.3 Hipó<strong>tesis</strong> ....................................................................................................................... 189<br />
5.4 Metodología ................................................................................................................. 193<br />
5.4.1 Muestra ......................................................................................................... 193<br />
5.4.2 Medida de <strong>la</strong>s Variables ............................................................................. 195<br />
5.4.3 Análisis Estadísticos .................................................................................... 196<br />
5.4.4 Propiedades Psicométricas de <strong>la</strong>s Esca<strong>la</strong>s de Medición ......................... 196<br />
5.5 Resultados .................................................................................................................... 198<br />
5.6 Discusión ...................................................................................................................... 201<br />
5.7 Bibliografía ................................................................................................................... 205<br />
5.8 Anexos .......................................................................................................................... 215<br />
5.8.1 Anexo 1: Ítems del cuestionario ................................................................ 215<br />
5.8.2 Anexo 2: Análisis Factoriales Confirmatorios ......................................... 217<br />
III
CAPÍTULO 6: CONCLUSIONES GENERALES ........................................................ 219<br />
6.0 Introducción ................................................................................................................. 221<br />
6.0.1. Conclusiones del artículo 1 (capítulo 3): Capacidad de Gestión del<br />
Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME? ................................................................. 222<br />
6.0.2 Conclusiones del artículo 2 (capítulo 4): El papel mediador de <strong>la</strong><br />
Capacidad de Aprendizaje Organizativo entre <strong>la</strong> Orientación Emprendedora<br />
y el Desempeño Innovador ................................................................................. 223<br />
6.0.3 Conclusiones del artículo 3 (capítulo 5): Competencia en Tecnología de<br />
<strong>la</strong> Información y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación ........................................ 224<br />
6.1 Contribuciones e implicaciones ................................................................................ 225<br />
6.2 Limitaciones y futuras líneas de investigación ....................................................... 228<br />
6.3 Bibliografía ................................................................................................................... 230<br />
IV
LISTA DE TABLAS<br />
Tab<strong>la</strong> 1.1: Estructura de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> ........................................................................................ 17<br />
Tab<strong>la</strong> 2.1: Esquema de definiciones de recurso en sentido amplio ............................. 29<br />
Tab<strong>la</strong> 2.2: Obtención de ventajas competitivas según el modelo de <strong>la</strong> economía<br />
industrial y el modelo basado en los recursos ................................................................ 36<br />
Tab<strong>la</strong> 2.3: Resumen y valoración de <strong>la</strong>s críticas a <strong>la</strong> perspectiva de recursos y<br />
capacidades (RBV) .............................................................................................................. 42<br />
Tab<strong>la</strong> 3.1. Media, desviación típica, Alpha Reliabilities, corre<strong>la</strong>ciones y Alpha de Cronbach<br />
.............................................................................................................................................. 122<br />
Tab<strong>la</strong> 3.2: Ítems del cuestionario sobre gestión del diseño ........................................ 138<br />
Tab<strong>la</strong> 3.3: Ítems del cuestionario sobre Capacidad de Aprendizaje Organizativo<br />
.............................................................................................................................................. 139<br />
Tab<strong>la</strong> 3.4: Ítems del cuestionario sobre Desempeño Innovador en Productos ........ 140<br />
Tab<strong>la</strong> 4.1: Media, desviación típica, Alpha Reliabilities, corre<strong>la</strong>ciones y Alpha de<br />
Cronbach ............................................................................................................................ 156<br />
Tab<strong>la</strong> 4.2: Ítems del cuestionario .................................................................................... 172<br />
Tab<strong>la</strong> 5.1: Media, desviación típica, Alpha Reliabilities, corre<strong>la</strong>ciones y Alpha de Cronbach<br />
.............................................................................................................................................. 197<br />
Tab<strong>la</strong> 5.2: Ítems del cuestionario ................................................................................... 215<br />
V
LISTA DE FIGURAS<br />
Figura 1.1: Pregunta general de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> y de los tres estudios presentados ................. 9<br />
Figura 1.2: Selección de una técnica multivariante ........................................................ 13<br />
Figura 2.1: Re<strong>la</strong>ción entre el análisis tradicional “DAFO”, el modelo del atractivo de<br />
<strong>la</strong> industria y el modelo basado en los recursos ............................................................. 35<br />
Figura 2.2: Proceso de aprendizaje organizativo ............................................................ 49<br />
Figura 2.3: Capacidades dinámicas .................................................................................. 71<br />
Figura 2.4: Modelo de investigación de capacidades dinámicas ................................. 72<br />
Figura 2.5: Marco Integrador ............................................................................................. 75<br />
Figura 2.6: Aprendizaje, capacidades dinámicas y rutinas ............................................ 76<br />
Figura 2.7: Actividades en el ciclo de evolución del conocimiento ............................. 77<br />
Figura 2.8: Límites y superposiciones en el campo de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas y <strong>la</strong><br />
gestión del conocimiento.................................................................................................... 81<br />
Figura 3.1: Modelo de investigación .............................................................................. 118<br />
Figura 3.2. Análisis Factorial Confirmatorio de <strong>la</strong> Capacidad de Gestión del Diseño<br />
.............................................................................................................................................. 124<br />
Figura 3.3. Modelo Directo .............................................................................................. 125<br />
Figura 3.4. Modelo Mediado ........................................................................................... 126<br />
Figura 4.1: Modelo conceptual ........................................................................................ 150<br />
Figura 4.2: Modelo de Ecuaciones Estructurales .......................................................... 159<br />
Figura 4.3: AFC de <strong>la</strong> Capacidad de Aprendizaje Organizativo ................................ 175<br />
Figura 4.4: AFC del Desempeño Innovador .................................................................. 176<br />
Figura 4.5: AFC de <strong>la</strong> Orientación Emprendedora ....................................................... 177<br />
Figura 5.1: Modelo directo ............................................................................................... 199<br />
Figura 5.2: Modelo Mediado ........................................................................................... 200<br />
Figura 5.3: AFC de Competencia en Tecnología de <strong>la</strong> Información y Comunicación<br />
.............................................................................................................................................. 217<br />
Figura 5.4: AFC de <strong>la</strong> Competencia de Aprendizaje Externo ..................................... 217<br />
Figura 5.5: AFC de <strong>la</strong> Competencia de Aprendizaje Interno ...................................... 218<br />
VII
VIII
1<br />
Capítulo 1:<br />
Introducción
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
2
3<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
1.0 INTRODUCCIÓN AL TEMA DE INVESTIGACIÓN DE LA TESIS<br />
En un entorno competitivo global y dinámico, <strong>la</strong> innovación es un aspecto<br />
c<strong>la</strong>ve de <strong>la</strong> competitividad de <strong>la</strong>s empresas (Nonaka y Takeuchi, 1995). Por<br />
ello ha recibido mucha atención por parte de los políticos y <strong>la</strong> comunidad<br />
científica (Fagerberg y Verspagen, 2009).<br />
La innovación puede ser entendida como el factor más importante en <strong>la</strong><br />
creación de valor (Barlett y Ghoshal, 1990; Hitt et al., 1996; Andersson et al.,<br />
2002) y como el conocimiento convertido en nuevo producto, servicio o<br />
proceso (o como cambios significativos en los existentes) que se introducen en<br />
el mercado (Moran y Ghoshal, 1996).<br />
Un aspecto destacado por <strong>la</strong> literatura es <strong>la</strong> necesidad de <strong>la</strong>s empresas de<br />
realizar productos o prestar servicios absolutamente innovadores gracias a su<br />
capacidad de crear a menor coste y más rápidamente que los competidores,<br />
tecnologías, competencias y aptitudes esenciales (Praha<strong>la</strong>d y Hamel, 1990). En<br />
definitiva, generar de forma interna habilidades que logren incrementar <strong>la</strong><br />
capacidad de <strong>la</strong> compañía para innovar. De esta forma, <strong>la</strong> innovación se<br />
puede asociar a <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de cambiar y combinar recursos.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
En <strong>la</strong> presente <strong>tesis</strong> consideramos algunas de estas capacidades o<br />
competencias que posibilitan <strong>la</strong> innovación en <strong>la</strong> empresa: <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo, <strong>la</strong> capacidad de adoptar una orientación<br />
emprendedora, <strong>la</strong>s competencias en tecnología de <strong>la</strong> información, <strong>la</strong><br />
capacidad de gestionar el diseño y <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje interno y<br />
externo. A continuación presentamos estas capacidades y explicamos su<br />
re<strong>la</strong>ción con <strong>la</strong> innovación.<br />
La capacidad de aprendizaje organizativo se define como <strong>la</strong>s características o<br />
factores organizativos y directivos que facilitan el proceso de aprendizaje<br />
organizativo o que permiten que una organización aprenda (Dibel<strong>la</strong> et al.,<br />
1996; Goh y Richards, 1997; Hult y Ferrell, 1997). Esta capacidad ha sido<br />
considerada como una pieza c<strong>la</strong>ve en el desempeño organizativo y se vincu<strong>la</strong><br />
al potencial de <strong>la</strong> empresa para innovar y crecer (Jerez-Gómez et al., 2005;<br />
Alegre y Chiva, 2008).<br />
Por otro <strong>la</strong>do, <strong>la</strong> orientación emprendedora explica cómo es puesto en práctica el<br />
espíritu emprendedor (Ire<strong>la</strong>nd y Webb, 2007) que abarca tanto <strong>la</strong> creación de<br />
empresas como <strong>la</strong> posterior renovación dentro y fuera de <strong>la</strong> compañía<br />
(Sharma y Chrisman, 1999). Las empresas se vuelven más emprendedoras<br />
para conseguir identificar y explotar nuevas oportunidades y a este proceso<br />
se le conoce como emprendimiento corporativo o intra-emprendimiento.<br />
Recientemente, han surgido estudios que proponen que <strong>la</strong> orientación<br />
emprendedora es un c<strong>la</strong>ro antecedente del rendimiento de <strong>la</strong> innovación<br />
(Rauch et al., 2009).<br />
Lograr <strong>la</strong> competencia con respecto a <strong>la</strong>s herramientas y procesos utilizados<br />
para gestionar <strong>la</strong> información, es decir, <strong>la</strong> competencia en tecnología de <strong>la</strong><br />
información, ha adquirido mucha importancia dado el importante incremento<br />
de información en el mercado actual. Esta competencia se define como el<br />
grado en que <strong>la</strong> empresa es conocedora de <strong>la</strong> forma de dirigir efectivamente<br />
<strong>la</strong> tecnología de <strong>la</strong> información para gestionar <strong>la</strong> información dentro de <strong>la</strong><br />
4
5<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
empresa (Tippins y Sohi, 2003). Mediante <strong>la</strong> utilización eficaz de<br />
competencias en TI dentro del departamento de investigación y desarrollo de<br />
una organización, el tiempo de desarrollo de producto se puede reducir<br />
(Bullinger et al., 2000). Además, dado que <strong>la</strong> creación, diseminación y uso del<br />
conocimiento es facilitada por <strong>la</strong> tecnología de <strong>la</strong> información (Davenport et<br />
al., 2008), si esta tecnología aumenta permitirá <strong>la</strong> existencia de capacidades de<br />
conocimiento críticas para el sostenimiento de iniciativas de gestión del<br />
mismo que posibiliten <strong>la</strong> innovación (A<strong>la</strong>vi y Leidner, 2001).<br />
La actividad de diseño consiste en <strong>la</strong> visualización creativa de conceptos, p<strong>la</strong>nes<br />
e ideas, que están representados a través del uso de bocetos, y que tiene por<br />
objeto proporcionar instrucciones para crear algo que no existe, o al menos no<br />
lo hace en esa forma o manera (Walsh, 1996; Bruce and Cooper, 1997). El acto<br />
de diseñar requiere una combinación de pensamiento lógico e intuitivo y se<br />
dice que es esencial para <strong>la</strong> innovación porque representa el aspecto creativo<br />
donde <strong>la</strong>s ideas se materializan dado que se trata de <strong>la</strong> unión de <strong>la</strong>s<br />
capacidades técnicas y <strong>la</strong>s exigencias de los consumidores (Walsh, 1996;<br />
p.514). Existen estudios que tratan <strong>la</strong> gestión del diseño como un concepto<br />
que depende de <strong>la</strong>s habilidades de <strong>la</strong> gerencia (Chiva y Alegre, 2009), por lo<br />
que en el presente estudio <strong>la</strong> tratamos como una capacidad.<br />
La competencia de aprendizaje externo se refiere a <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de<br />
crear e integrar nuevo conocimiento a través de <strong>la</strong> interacción con el entorno<br />
y con otras organizaciones (Bapuji y Crossan, 2004). Es decir, <strong>la</strong> empresa<br />
reconfigura <strong>la</strong>s prácticas a través de <strong>la</strong> transformación de conocimiento. Un<br />
ejemplo de esto puede ser <strong>la</strong> combinación de conocimiento corriente con<br />
conocimiento nuevo proveniente de <strong>la</strong> adquisición de tecnología y de <strong>la</strong><br />
interacción con el entorno y otras organizaciones (Ettlie y Pavlou, 2006). El<br />
nuevo conocimiento proveniente del aprendizaje externo se incluye en <strong>la</strong> base<br />
de conocimiento de <strong>la</strong> empresa y representa un imput importante para el<br />
proceso de innovación (Chang, 2003).
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
La competencia de aprendizaje interno se refiere al conocimiento creado por <strong>la</strong><br />
propia acumu<strong>la</strong>ción de experiencia de <strong>la</strong> empresa a través del uso de sus<br />
propios recursos y se extiende principalmente a través de <strong>la</strong>s actividades de<br />
investigación, desarrollo e implementación de mejores prácticas. Es algo que<br />
se incluye en <strong>la</strong> base de conocimiento de <strong>la</strong> empresa y juega un rol importante<br />
en el proceso de innovación (Cohen y Levinthal, 1990; Kessler et al.2000).<br />
Una vez introducidas estas capacidades nos gustaría resaltar que <strong>la</strong><br />
perspectiva de recursos y capacidades ha ido evolucionando debido a que <strong>la</strong><br />
realidad de <strong>la</strong>s empresas ha cambiado. La perspectiva basada en los recursos<br />
no nos es suficiente para entender cómo algunas empresas de éxito logran<br />
tener una respuesta oportuna frente a un mercado cada vez más turbulento.<br />
Las empresas que consiguen permanecer en el mercado actual lo hacen<br />
gracias a poseer una innovación de productos rápida y flexible así como una<br />
capacidad de gestionar y redistribuir <strong>la</strong>s competencias internas y externas de<br />
forma adecuada (Teece et al., 1990). Se dice que estas empresas poseen<br />
capacidades dinámicas (Teece et al., 1997; Zollo y Winter, 2002; Helfat et al.<br />
2007; Wang y Ahmed, 2007; Easterby-Smith et al., 2009; Ambrosini y<br />
Bowman, 2009).<br />
1.1 JUSTIFICACIÓN Y OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN<br />
Pese a que por el momento <strong>la</strong> literatura ha encontrado distintas capacidades<br />
que afectan a los resultados en innovación (Alegre y Chiva, 2008; Rauch et al.,<br />
2009; Joshi et al., 2010), estas afirmaciones hechas por <strong>la</strong> literatura quedan<br />
demasiado inexploradas, es decir, son demasiado generales y dejan mucho<br />
camino por recorrer para poder llegar a entender <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones que se<br />
p<strong>la</strong>ntean. El principal objetivo de este estudio es tratar de dar una mejor<br />
explicación a <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre distintas capacidades y sus resultados en<br />
innovación y para ello nos basamos en <strong>la</strong> perspectiva de recursos.<br />
6
7<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
Dado que <strong>la</strong> perspectiva de recursos ha evolucionado para tener en cuenta el<br />
cambio en los mercados, actualmente y tal como indicábamos anteriormente,<br />
<strong>la</strong> perspectiva de capacidades dinámicas es <strong>la</strong> base que da sustento a muchos<br />
de los estudios que se realizan (Ambrosini y Bowman, 2009). Por ello, en el<br />
primer artículo nos ha parecido interesante ver bajo este prisma uno de los<br />
estudios que ha tenido mayor relevancia dentro del grupo de investigación.<br />
Nos referimos al estudio de Alegre y Chiva, (2008) en el que se comprueba<br />
cómo <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo afecta a los resultados en<br />
innovación. Nuestra inquietud es observar si dado que el aprendizaje<br />
organizativo genera capacidades dinámicas, serán éstas <strong>la</strong>s que posibiliten<br />
que se produzca un mayor desempeño innovador. Es decir, tratamos de dar<br />
una explicación más c<strong>la</strong>ra de por qué <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo afecta a los resultados en innovación. Y una vez encontramos<br />
esta nueva variable nos preguntamos ¿Qué tipo de capacidad dinámica es?<br />
Esta segunda pregunta viene impulsada por el hecho de que <strong>la</strong> literatura ha<br />
acuñado ciertas capacidades como capacidades dinámicas. Un ejemplo de<br />
esto es el estudio de Zollo y Singh (2004) en el que se trata <strong>la</strong> capacidad<br />
dinámica de implementar <strong>la</strong>s adquisiciones. En su estudio explican que pese<br />
a que se supone que el aprendizaje se consigue con <strong>la</strong> curva de experiencia, se<br />
comprueba que en acontecimientos poco frecuentes y heterogéneos, como <strong>la</strong>s<br />
adquisiciones, <strong>la</strong> generalización de <strong>la</strong>s lecciones puede ser un error dado que<br />
cada caso es distinto y seña<strong>la</strong>n <strong>la</strong> necesidad de generar una capacidad<br />
dinámica de implementar <strong>la</strong>s adquisiciones a fin de obtener resultados<br />
positivos. Del mismo modo, existen otros estudios que tratan otros tipos de<br />
capacidades dinámicas, como por ejemplo el estudio de Ettlie y Pavlou (2006)<br />
sobre <strong>la</strong> capacidad dinámica de gestionar de forma conjunta nuevos<br />
productos, u O´Connor (2008) sobre <strong>la</strong> capacidad dinámica de producir<br />
innovaciones radicales.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
En este estudio nos preguntamos qué capacidad dinámica puede estar<br />
mediando entre <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> innovación de<br />
producto y además de ponerle un nombre, probamos de forma empírica su<br />
re<strong>la</strong>ción mediadora entre ambos conceptos.<br />
En el segundo artículo partimos de estudios recientes que proponen que <strong>la</strong><br />
orientación emprendedora es un c<strong>la</strong>ro antecedente del rendimiento de <strong>la</strong><br />
innovación (Rauch et al., 2009). Parece lógico querer probar esta re<strong>la</strong>ción de<br />
forma empírica e intentar profundizar en el<strong>la</strong> para comprender<strong>la</strong> con mayor<br />
c<strong>la</strong>ridad. Está c<strong>la</strong>ro que aquellos directivos que tengan una c<strong>la</strong>ra orientación<br />
emprendedora serán más aversos al riesgo y por lo tanto pueden ser capaces<br />
de generar más innovaciones y con ello obtener un rendimiento de <strong>la</strong><br />
innovación superior al de sus competidores (Rauch et al., 2009). Sin embargo,<br />
nosotros creemos que si <strong>la</strong> dirección posee una c<strong>la</strong>ra orientación<br />
emprendedora estará posibilitando <strong>la</strong> existencia de ciertas capacidades<br />
organizativas, y serán estas capacidades <strong>la</strong>s que hagan que sean posibles<br />
mayores resultados en innovación de producto o proceso. Por ello, un<br />
objetivo de esta <strong>tesis</strong> es probar de forma empírica que entre <strong>la</strong> orientación<br />
emprendedora y los resultados en innovación existen variables que median <strong>la</strong><br />
re<strong>la</strong>ción.<br />
Por último, hemos encontrado algunos estudios que re<strong>la</strong>cionan <strong>la</strong><br />
competencia en tecnología de <strong>la</strong> información con los resultados en innovación<br />
de <strong>la</strong> compañía. Sin embargo, algunos de estos estudios encuentran que no<br />
existe re<strong>la</strong>ción entre ambos conceptos, en concreto no encuentran re<strong>la</strong>ción con<br />
el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación (Joshi et al., 2010). Tratamos de dar<br />
respuesta a esta diferencia en los resultados, probando que esta diferencia se<br />
debe a que no existe una re<strong>la</strong>ción directa entre competencia en tecnología de<br />
<strong>la</strong> información y el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación, sino que esta re<strong>la</strong>ción se<br />
produce de forma indirecta mediante <strong>la</strong> existencia de otras competencias.<br />
8
9<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
Para poder cumplir con eficacia cada uno de los gaps que presentamos, nos<br />
ha parecido importante realizar una revisión teórica desde <strong>la</strong> perspectiva de<br />
recursos a <strong>la</strong> perspectiva de capacidades dinámicas, pasando por <strong>la</strong> literatura<br />
de aprendizaje donde surgió esta segunda. Con esta revisión pretendemos<br />
estar más preparados para abordar <strong>la</strong>s cuestiones que nos p<strong>la</strong>nteamos.<br />
En <strong>la</strong> figura 1.1 se muestran cada uno de los objetivos de investigación y<br />
cómo todo ello está respaldado por el enfoque de capacidades dinámicas.<br />
Figura 1.1: Pregunta general de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> y de los tres estudios presentados.<br />
¿Cómo afectan <strong>la</strong>s capacidades internas a los resultados en innovación?<br />
Estudio 1 Estudio 2 Estudio 3<br />
¿Qué variables<br />
median entre <strong>la</strong><br />
Capacidad de<br />
Aprendizaje<br />
Organizativo y los<br />
resultados en<br />
Innovación de<br />
Producto?<br />
Innovación de<br />
producto<br />
1.2 METODOLOGÍA<br />
1.2.1 La industria cerámica<br />
¿Cómo afecta <strong>la</strong><br />
Orientación<br />
Emprendedora a los<br />
resultados en<br />
innovación<br />
tecnológica?<br />
Innovación de<br />
producto y proceso<br />
¿Por qué existen<br />
estudios que<br />
muestran resultados<br />
contradictorios<br />
cuando estudian <strong>la</strong><br />
re<strong>la</strong>ción TICresultados<br />
en<br />
innovación?<br />
Éxito comercial de <strong>la</strong><br />
innovación<br />
La parte empírica de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> doctoral se ha desarrol<strong>la</strong>do en <strong>la</strong> industria<br />
cerámica españo<strong>la</strong> e italiana. El distrito industrial español está situado en<br />
Castellón (Comunidad Valenciana) y el italiano en Sassuolo (Emilia-<br />
Romagna). Estos distritos también se han enfrentado a <strong>la</strong>s presiones<br />
crecientes de <strong>la</strong> globalización, en particu<strong>la</strong>r a <strong>la</strong>s presiones de los productores<br />
de menor coste como China y Brasil. Sin embargo, pese a que si observamos<br />
de forma conjunta ambos distritos podemos seña<strong>la</strong>r que su producción ha
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
descendido un 15% en los últimos 10 años y sus ingresos un 40% (ASCER,<br />
2009), ambas siguen siendo de gran relevancia a nivel mundial.<br />
En Castellón existe una fuerte unión entre el sector y <strong>la</strong> universidad local<br />
(Universitat Jaume I), en <strong>la</strong> cual se encuentra el Instituto Tecnológico de <strong>la</strong><br />
Cerámica (ITC). El ITC es una oficina de transferencia de investigación sobre<br />
cerámica que ofrece conjuntamente con <strong>la</strong> universidad un título de ingeniería<br />
química de cerámica que es único en el mundo; lo que garantiza un<br />
suministro constante de ingenieros cualificados de cerámica industrial en el<br />
distrito. El ITC tiene significativos recursos, de hecho en el año 2005 (nuestras<br />
muestras son del 2004 y del 2006) contaba con 100 investigadores a jornada<br />
completa. Es una fuente muy respetable de transferencia de conocimiento que<br />
subsiste gracias a financiación pública nacional y proyectos europeos. En<br />
consecuencia, existe un amplio flujo de información y conocimientos a través<br />
de <strong>la</strong> red del distrito y esto ayuda a que exista más innovación (Meyer-Stamer<br />
et al., 2004). En Sassuolo los recursos institucionales son mucho menores.<br />
Existe el “Ceramic Bologna Centre” (CBC), pero este empleaba menos de 20<br />
investigadores en 2005. En este distrito <strong>la</strong> información fluye a través de <strong>la</strong>s<br />
interacciones entre los productores de cerámica y los productores de<br />
maquinaria cerámica situados en <strong>la</strong> región de Emilia-Romagna (Meyer-<br />
Stamer et al., 2004; Hervas-Oliver et al., 2008; Hervas-Oliver et al.,<br />
2011).Como resultado de esto, <strong>la</strong> industria de maquinaria italiana para <strong>la</strong><br />
cerámica es líder mundial, contando con el 70% de <strong>la</strong> exportación a nivel<br />
mundial en 2009 (Acimac, 2010).<br />
Existe mucha cooperación entre <strong>la</strong>s empresas de ambas regiones, de hecho <strong>la</strong>s<br />
empresas de Castellón tienen sucursales de vidrio en Emilia- Romagna y <strong>la</strong>s<br />
empresas italianas que se dedican al equipamiento de maquinaria para <strong>la</strong><br />
cerámica tienen base de operaciones en Castellón (Hervas-Oliver et al., 2011).<br />
Esto proporciona a <strong>la</strong>s empresas fuentes de conocimiento (lo que Hervas-<br />
Oliver et al., 2011 denominan “una tubería”) para poder competir en el<br />
10
11<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
mercado de forma complementaria compartiendo conocimiento (Hervas-<br />
Oliver et al., 2008). Este intercambio de conocimiento les permite focalizarse<br />
en actividades de mayor valor para <strong>la</strong> innovación (Maskell et al., 2006,<br />
Hervas-Oliver et al., 2008, Trippl et al., 2009). Lo que convierte a este sector<br />
(ya que podemos estudiar de forma conjunta a los distritos industriales de<br />
Castellón y Sassuolo como si se tratara de uno sólo) en un sector muy idóneo<br />
para nuestro estudio.<br />
El desarrollo de <strong>la</strong> parte empírica en un mismo sector nos proporciona<br />
interesantes ventajas. El motivo principal que nos hace decantarnos por esta<br />
alternativa es que podemos contro<strong>la</strong>r que los procesos de gestión del<br />
conocimiento y <strong>la</strong> innovación sean únicos, ya que éstos pueden variar<br />
considerablemente entre <strong>la</strong>s industrias (Santarelli y Piergiovanni, 1996). Tal<br />
como seña<strong>la</strong>n Ianmarino y McCann (2006:1027), “<strong>la</strong> evolución de <strong>la</strong>s<br />
empresas en una industria y en un grupo específico depende principalmente<br />
de <strong>la</strong>s condiciones subyacentes del conocimiento, el denominado ‘régimen<br />
tecnológico’, que es una combinación particu<strong>la</strong>r de apropiabilidad (del<br />
resultado de <strong>la</strong> actividad innovadora) de <strong>la</strong>s oportunidades tecnológicas<br />
(posibilidades de innovación, dada <strong>la</strong> inversión en investigación), el grado de<br />
acumu<strong>la</strong>ción de conocimiento tecnológico (grado en que <strong>la</strong> innovación<br />
producida en el pasado favorece <strong>la</strong> probabilidad de innovar en <strong>la</strong> actualidad)<br />
y <strong>la</strong>s características de <strong>la</strong> base de conocimiento (tipo de conocimientos en que<br />
se basan <strong>la</strong>s actividades de <strong>la</strong> empresa)”. Por lo tanto, centrando nuestro<br />
análisis en un mismo sector, podemos aproximarnos con mayor precisión a<br />
sus características particu<strong>la</strong>res y a <strong>la</strong> base tecnológica y de conocimiento<br />
necesaria en dicho contexto, que influirá en sus patrones de innovación.<br />
1.2.2 Técnicas estadísticas utilizadas en <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> doctoral<br />
La parte empírica de este estudio se basa en el análisis multivariante. En<br />
sentido amplio, este tipo de análisis se refiere a todos los métodos estadísticos<br />
que analizan simultáneamente medidas múltiples de cada individuo u objeto
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
sometido a investigación (Hair et al., 2006). Cualquier análisis simultáneo de<br />
más de dos variables, como es el caso de los artículos que se presentan en esta<br />
<strong>tesis</strong>, puede ser considerado como un análisis multivariante. Definir el<br />
análisis multivariante en sentido estricto es difícil ya que <strong>la</strong> literatura no lo<br />
define de <strong>la</strong> misma forma (Hair et al.2006):<br />
(1) Para algunos investigadores, multivariante significa simplemente<br />
examinar re<strong>la</strong>ciones entre más de dos variables. En este sentido, muchas<br />
técnicas multivariantes son extensiones del análisis univariante (análisis de<br />
distribuciones de una so<strong>la</strong> variable) y del análisis bivariante (c<strong>la</strong>sificaciones<br />
cruzadas, corre<strong>la</strong>ción, análisis de <strong>la</strong> varianza y regresiones simples utilizadas<br />
para analizar dos variables). Por ejemplo, una regresión simple (con una<br />
variable predictor) se extiende al caso multivariante para incluir varias<br />
variables predictor.<br />
(2) Otros usan el término sólo para problemas en los que se supone que<br />
todas <strong>la</strong>s variables múltiples tienen una distribución normal multivariante.<br />
Sin embargo, para ser considerado verdaderamente multivariante, todas <strong>la</strong>s<br />
variables deben ser aleatorias y estar interre<strong>la</strong>cionadas de tal forma que sus<br />
diferentes efectos no puedan ser interpretados separadamente con algún<br />
sentido.<br />
(3) Y finalmente, otros autores afirman que el propósito del análisis<br />
multivariante es medir, explicar y predecir el grado de re<strong>la</strong>ción de los valores<br />
teóricos (combinaciones ponderadas de variables). Por tanto, el carácter<br />
multivariante reside en los múltiples valores teóricos (combinaciones<br />
múltiples de variables) y no sólo en el número de variables u observaciones.<br />
En nuestros estudios analizamos múltiples re<strong>la</strong>ciones por lo que utilizamos el<br />
análisis multivariante. Una vez definido el tipo de análisis debemos de<br />
realizarnos varias preguntas para decidir qué técnica multivariante será <strong>la</strong><br />
apropiada en nuestro estudio (figura 1.2)<br />
12
Figura 1.2. Selección de una técnica multivariante<br />
Múltiples re<strong>la</strong>ciones de<br />
variables<br />
dependientes e<br />
independientes<br />
Modelo de<br />
ecuaciones<br />
estructurales<br />
Análisis de<br />
corre<strong>la</strong>ción<br />
canónica<br />
¿Cuál es <strong>la</strong><br />
esca<strong>la</strong> de<br />
medida de<br />
<strong>la</strong>s variables<br />
predictor?<br />
¿Cuántas<br />
variables están<br />
prediciendo o<br />
explicando?<br />
Varias variables<br />
dependientes en una<br />
re<strong>la</strong>ción única<br />
¿Cuál es <strong>la</strong><br />
esca<strong>la</strong> de<br />
medida de <strong>la</strong>s<br />
variables<br />
dependientes<br />
Análisis de<br />
corre<strong>la</strong>ción<br />
canónica con<br />
variables<br />
ficticias<br />
Análisis<br />
multivariante<br />
de variables<br />
Regresión<br />
múltiple /<br />
Análisis de<br />
conjunto<br />
¿Qué tipo de<br />
re<strong>la</strong>ciones<br />
están siendo<br />
examinadas?<br />
Dependencia Interdependencia<br />
Una variables dependiente<br />
en una re<strong>la</strong>ción única<br />
¿Cuál es <strong>la</strong><br />
esca<strong>la</strong> de<br />
medida de <strong>la</strong><br />
variables<br />
dependiente<br />
Análisis<br />
discrimante<br />
múltiple / Modelos<br />
de probabilidad<br />
lineal<br />
Análisis<br />
factorial<br />
Es <strong>la</strong><br />
estructura de<br />
re<strong>la</strong>ciones<br />
entre:<br />
Variables Casos /<br />
Encuestados<br />
Análisis<br />
cluster<br />
Análisis<br />
multidimensional<br />
Punto<br />
de<br />
decisión<br />
13<br />
¿Cómo<br />
son los<br />
atributos?<br />
Análisis de<br />
correspondencia<br />
Leyenda:<br />
Objetos<br />
Métrica No métrica Métrica No métrica Métrico No métrico<br />
Métrica No métrica<br />
Fuente: Adaptado de Hair et al. (2006)<br />
Técnica<br />
multivariante<br />
elegida
Para los artículos desarrol<strong>la</strong>dos en esta <strong>tesis</strong> <strong>la</strong> técnica apropiada es el<br />
modelo de ecuaciones estructurales, ya que permite examinar<br />
simultáneamente una serie de re<strong>la</strong>ciones de dependencia. Según Hair et al.<br />
(2006) los modelos de ecuaciones estructurales se distinguen por tres<br />
características: (1) <strong>la</strong> estimación de re<strong>la</strong>ciones de dependencia múltiples y<br />
cruzadas, (2) <strong>la</strong> capacidad de representar conceptos no observados en<br />
estas re<strong>la</strong>ciones y tener en cuenta el error de medida, y (3) <strong>la</strong> definición de<br />
un modelo para explicar el conjunto completo de re<strong>la</strong>ciones.<br />
(1) La primera de estas características hace referencia a que<br />
inicialmente el investigador, a través de una revisión teórica, su propia<br />
experiencia y los objetivos de <strong>la</strong> investigación, diferencia qué variables<br />
independientes predicen cada variable dependiente. Con posterioridad,<br />
algunas variables dependientes se convierten en independientes en<br />
re<strong>la</strong>ciones ulteriores, dando lugar a <strong>la</strong> naturaleza interdependiente del<br />
modelo estructural. Además, muchas de <strong>la</strong>s mismas variables afectan a<br />
cada una de <strong>la</strong>s variables dependientes, pero con distintos efectos. El<br />
modelo estructural expresa estas re<strong>la</strong>ciones entre variables dependientes e<br />
independientes incluso cuando una variable dependiente se convierte en<br />
variable independiente en otras re<strong>la</strong>ciones.<br />
(2) La segunda característica supone <strong>la</strong> habilidad de los modelos de<br />
ecuaciones estructurales para incorporar variables <strong>la</strong>tentes al análisis. Una<br />
variable <strong>la</strong>tente es un concepto teórico supuesto y no observado que sólo<br />
puede ser aproximado mediante variables observables o manifiestas.<br />
Además, se parte de <strong>la</strong> idea de que no se puede medir perfectamente un<br />
concepto y que siempre hay algún grado de error de medida. En nuestras<br />
investigaciones, <strong>la</strong>s distintas capacidades son variables no observables<br />
directamente. También se dispone de <strong>la</strong> estimación de <strong>la</strong> fiabilidad y <strong>la</strong><br />
validez de <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s de medida.<br />
14
15<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
(3) Por último, <strong>la</strong> tercera ventaja se re<strong>la</strong>ciona con <strong>la</strong> construcción de un<br />
modelo, entendiendo como una representación de <strong>la</strong> teoría, es decir, un<br />
conjunto sistemático de re<strong>la</strong>ciones que ofrece una explicación exhaustiva y<br />
consistente de un fenómeno (Hair et al., 2006). Aunque los modelos deben<br />
ser desarrol<strong>la</strong>dos siguiendo <strong>la</strong> teoría, también pueden tener su base en <strong>la</strong><br />
experiencia y <strong>la</strong> práctica obtenida por observación del comportamiento del<br />
mundo real.<br />
Batista y Coenders (2000) distinguen cinco razones por <strong>la</strong>s que los<br />
métodos de ecuaciones estructurales son cada vez más utilizados en <strong>la</strong>s<br />
ciencias sociales. Estos modelos permiten:<br />
(1) Trabajar con variables <strong>la</strong>tentes, que son medidas a través de<br />
indicadores, así como evaluar <strong>la</strong> calidad de <strong>la</strong> medición.<br />
(2) Considerar los fenómenos en su verdadera complejidad desde una<br />
perspectiva más realista, abandonando <strong>la</strong> estadística univariante y<br />
bivariante e incorporando múltiples variables tanto endógenas como<br />
exógenas.<br />
(3) Considerar conjuntamente medida y predicción, análisis factorial y<br />
“path análisis”, es decir, evaluar los efectos de variables <strong>la</strong>tentes entre sí,<br />
sin contaminanción debida al error de medida.<br />
(4) Introducir <strong>la</strong> perspectiva confirmatoria en el modelo estadístico, lo<br />
cual permite al investigador introducir su conocimiento teórico en <strong>la</strong><br />
especificación del modelo antes de <strong>la</strong> estimación.<br />
(5) Descomponer <strong>la</strong>s covarianzas observadas y no sólo <strong>la</strong>s varianzas,<br />
dentro de una perspectiva del análisis de <strong>la</strong> interdependencia.<br />
En definitiva, <strong>la</strong> metodología de ecuaciones estructurales es <strong>la</strong> única<br />
técnica multivariante que permite <strong>la</strong> estimación simultánea de ecuaciones<br />
múltiples. Estas ecuaciones representan el modo en que diferentes<br />
constructos se re<strong>la</strong>cionan con variables observables, así como <strong>la</strong> forma en<br />
que los constructos o variables <strong>la</strong>tentes se re<strong>la</strong>cionan entre sí. De esta<br />
forma, <strong>la</strong> aplicación de modelos de ecuaciones estructurales para evaluar
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
re<strong>la</strong>ciones teóricas, es equivalente a realizar un análisis factorial y de<br />
regresión en un solo paso. Debido a estas ventajas c<strong>la</strong>ve, <strong>la</strong> metodología de<br />
ecuaciones estructurales se ha convertido en una técnica muy popu<strong>la</strong>r en<br />
<strong>la</strong>s ciencias sociales (Hair et al., 2006).<br />
Con todo, <strong>la</strong>s características de <strong>la</strong> modelización de ecuaciones<br />
estructurales hacen de el<strong>la</strong> una metodología apropiada e idónea para el<br />
contraste de <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> que se proponen en los artículos que<br />
presentamos.<br />
1.3 ESTRUCTURA DE LA TESIS DOCTORAL<br />
Esta <strong>tesis</strong> se desarrol<strong>la</strong> mediante tres artículos empíricos sustentados por<br />
un capítulo teórico. Hemos escogido el enfoque de “<strong>tesis</strong> como producto”,<br />
cuyo objetivo es desarrol<strong>la</strong>r habilidades investigadoras a través del<br />
proceso de producción científica en formato de artículos publicables<br />
(Krathwohl, 1988). Estos tres artículos se encuentran en proceso de<br />
revisión en revistas científicas 1 . Cada uno es un artículo individual en sí<br />
mismo; contiene introducción, teoría, resultados y discusión.<br />
En el capítulo teórico no se pretende realizar una revisión exhaustiva de<br />
todos los conceptos que se desarrol<strong>la</strong>n en <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> identificando los gaps de<br />
<strong>la</strong> literatura, como se suele hacer en <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> convencional, sino dar<br />
sustento al enfoque en el que se apoyan los tres estudios. Para ello,<br />
basándonos en <strong>la</strong> perspectiva de recursos observamos cómo ha sido<br />
estudiado el concepto desde sus inicios. Posteriormente el entorno en el<br />
que compiten <strong>la</strong>s empresas cambia convirtiéndose en un entorno<br />
turbulento y, consecuentemente, <strong>la</strong> perspectiva de recursos deriva en una<br />
nueva perspectiva, <strong>la</strong> de capacidades dinámicas. Además, <strong>la</strong> literatura<br />
sobre aprendizaje organizativo contribuye al entendimiento de esta<br />
1 Para dar coherencia y unidad a <strong>la</strong> <strong>tesis</strong> se presentan los artículos traducidos al castel<strong>la</strong>no y con<br />
un formato homogéneo.<br />
16
17<br />
Capítulo 1: Introducción<br />
segunda, por lo que estos conceptos también se incluyen en el capítulo<br />
teórico.<br />
Tab<strong>la</strong> 1.1: Estructura de <strong>la</strong> <strong>tesis</strong><br />
Capítulo 1: Introducción<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño ¿Cuál es su rol en<br />
<strong>la</strong> PYME?<br />
Capítulo 4: El papel mediador de <strong>la</strong> Capacidad de Aprendizaje<br />
Organizativo entre <strong>la</strong> Orientación Emprendedora y el<br />
Desempeño Innovador<br />
Capítulo 5: Competencia en Tecnología de <strong>la</strong> Información y<br />
Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Capítulo 6: Conclusiones generales<br />
Tras esta introducción se presenta el marco teórico general,<br />
posteriormente los tres artículos científicos independientes y por último<br />
<strong>la</strong>s conclusiones generales, en <strong>la</strong>s que se puede observar de forma conjunta<br />
cada una de <strong>la</strong>s conclusiones de los tres artículos independientes.<br />
Artículos<br />
independientes
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
1.4 BIBLIOGRAFÍA<br />
Acimac (2010). Press area. Avai<strong>la</strong>ble from: http://www.acimac.it/<br />
(Acceso 30 de septiembre del 2010).<br />
A<strong>la</strong>vi, M. y Leidner, D. E. (2001). Review: Knowledge management and<br />
knowledge management systems: Conceptual foundations and<br />
research issues. MIS Quarterly, 25(1), 107-136.<br />
Alegre, J. y Chiva, R. (2008). Assessing the impact of organizational<br />
learning capability on product innovation performance: An empirical<br />
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Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
22
23<br />
Capítulo 2:<br />
Marco teórico general
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
24
25<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
2.0 OBJETIVOS Y CONTENIDO DEL CAPÍTULO<br />
El presente capítulo sirve como marco teórico general para los tres<br />
artículos presentados. Realizamos una reflexión sobre <strong>la</strong> perspectiva<br />
basada en recursos, el aprendizaje organizativo, <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> perspectiva de capacidades dinámicas. Por<br />
lo que no presentamos <strong>la</strong> suma de los marcos teóricos de los tres artículos<br />
sino <strong>la</strong> evolución del enfoque teórico en el que se apoyan.<br />
La idea central de <strong>la</strong> perspectiva basada en recursos es que <strong>la</strong> empresa<br />
consiste esencialmente en un conjunto de recursos y capacidades, y que<br />
estos recursos y capacidades son los determinantes principales de su<br />
estrategia y resultados. El conocimiento se considera un recurso y el<br />
proceso por el cual se adquiere es el aprendizaje. Si además tenemos en<br />
cuenta que para adaptarse a los cambios del entorno es necesario<br />
modificar esta base de recursos y capacidades podemos concluir que los<br />
conceptos que presentamos están totalmente re<strong>la</strong>cionados.<br />
Los cuatro apartados presentan una estructura parecida. En primer lugar<br />
realizamos una revisión de <strong>la</strong>s definiciones dadas al concepto.<br />
Posteriormente profundizamos en <strong>la</strong> literatura y por último concluimos<br />
con una visión crítica.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
2.1 PERSPECTIVA DE LA EMPRESA BASADA EN LOS RECURSOS<br />
Según Grant (1996), los fines básicos de <strong>la</strong> Dirección Estratégica son<br />
explicar (1) el desempeño de <strong>la</strong> empresa y (2) los determinantes de <strong>la</strong><br />
decisión estratégica. Ambos fines están re<strong>la</strong>cionados, dado que los<br />
determinantes de <strong>la</strong> decisión estratégica suelen ir encaminados a producir<br />
un desempeño empresarial óptimo.<br />
La perspectiva de <strong>la</strong> empresa basada en los recursos (Resourced Based<br />
View) también conocida como teoría de recursos y capacidades o<br />
perspectiva basada en recursos surgió en 1959 con el libro titu<strong>la</strong>do “The<br />
Theory of the Growth of the Firm”, cuyo autor es Penrose. En este primer<br />
trabajo se menciona que <strong>la</strong> heterogeneidad de recursos puede explicar <strong>la</strong><br />
diferencia de resultados entre <strong>la</strong>s empresas, pero no es hasta 1984 cuando<br />
esta afirmación empieza a tomar relevancia con el trabajo de Wernefelt.<br />
Posteriormente existen otros autores como Peteraf, Barney o Grant, entre<br />
otros, que han ido asentando <strong>la</strong>s bases de esta perspectiva.<br />
Ésta se fundamenta en <strong>la</strong> tradición económica (Fernández y Suarez, 1996)<br />
e incorpora elementos de <strong>la</strong> escue<strong>la</strong> austríaca (Hayek, 1945; Kirzner, 1973),<br />
escue<strong>la</strong> de Chicago (Stigler, 1968), enfoques evolucionistas 2 (Schumpeter,<br />
1912; Nelson y Winter, 1982), teorías económicas del comportamiento o<br />
teorías del comportamiento administrativo (Simon, 1947; March y Simon,<br />
1958; Cyert y March, 1963) así como especialmente elementos de <strong>la</strong><br />
economía de <strong>la</strong>s organizaciones (Williamson, 1975, 1985). Su análisis se<br />
centra en <strong>la</strong> empresa y sus recursos en vez de en el poder de mercado y<br />
posicionamiento en él (Porter, 1980, 1985).<br />
2 La teoría evolucionista indica que el desempeño económico puede explicarse<br />
de forma análoga a los procesos de evolución biológica y para ello considera los<br />
conceptos Darwinianos de mutación, selección y herencia. Equipara estos tres<br />
conceptos a los siguientes mecanismos funcionales: innovación tecnológica (<strong>la</strong><br />
cual provee <strong>la</strong> variación o mutación), los mercados (que proveen <strong>la</strong> selección) y<br />
<strong>la</strong>s estructuras institucionales (que aportan el sistema de retención o herencia).<br />
26
27<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
La idea central de esta perspectiva es que <strong>la</strong> empresa consiste<br />
esencialmente en un conjunto de recursos y capacidades, y que estos<br />
recursos y capacidades son los determinantes principales de su estrategia<br />
y resultados. A los beneficios que surgen por <strong>la</strong> posesión de recursos<br />
superiores les denominamos rentas ricardianas 3 .<br />
Esta perspectiva basada en los recursos tuvo un profundo impacto sobre <strong>la</strong><br />
formu<strong>la</strong>ción estratégica. Hasta el surgimiento de esta nueva perspectiva el<br />
interés principal de <strong>la</strong> estrategia había sido <strong>la</strong> selección del sector y <strong>la</strong> toma<br />
de una posición ventajosa en él y se entendía que <strong>la</strong>s empresas tendían a<br />
adoptar estrategias simi<strong>la</strong>res. Esta perspectiva destaca el carácter único de<br />
cada empresa y propone que <strong>la</strong> c<strong>la</strong>ve de <strong>la</strong> rentabilidad no está en hacer lo<br />
mismo que <strong>la</strong>s otras empresas, sino más bien en explotar <strong>la</strong>s diferencias.<br />
Así, para establecer una ventaja competitiva, se debe de formu<strong>la</strong>r e<br />
imp<strong>la</strong>ntar una estrategia que explote <strong>la</strong>s características únicas del conjunto<br />
de recursos y capacidades de una empresa.<br />
Dado que el punto de partida consiste en <strong>la</strong> identificación y valoración de<br />
los recursos y capacidades disponibles en <strong>la</strong> empresa, debemos de<br />
entender a qué nos referimos con estos dos términos. Existen muchos<br />
trabajos que tratan de explicar qué es un recurso y qué es una capacidad y<br />
qué diferencias existen entre ambos. Algunos de los trabajos le dan a<br />
ambos el nombre de recurso distinguiendo entre recurso en (1) sentido<br />
amplio y (2) en sentido estricto (Camisón, 1999; 2002).<br />
Se entiende por recurso en sentido amplio a aquel medio que sirve para<br />
alcanzar un objetivo marcado de antemano. Esta acepción de recurso<br />
3 Las rentas ricardianas reciben su nombre en honor al economista británico del<br />
siglo XIX David Ricardo. Ricardo explicó por qué <strong>la</strong> tierra fértil era capaz de<br />
generar altos ingresos aun cuando el mercado del trigo fuera competitivo: <strong>la</strong><br />
renta ricardiana (o derivada de <strong>la</strong> escasez) es el ingreso que obtiene un recurso<br />
escaso por encima del mínimo requerido para que dicho recurso se incorpore al<br />
proceso productivo.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
incluiría también al concepto de capacidad ya que se considera que <strong>la</strong>s<br />
capacidades de una empresa representan también recursos con los que<br />
ésta cuenta. Así, Fernández y Suarez (1996), entienden como recurso<br />
cualquier factor de producción que se encuentre a disposición de <strong>la</strong><br />
empresa de forma estable. Una posición simi<strong>la</strong>r es <strong>la</strong> de Barney (1991;<br />
2001) para quien los recursos de <strong>la</strong> empresa incluyen todos los activos,<br />
capacidades, procesos organizativos, atributos empresariales, información,<br />
conocimiento, etc. Que son contro<strong>la</strong>dos por <strong>la</strong> empresa y que le permiten a<br />
su dirección concebir e imp<strong>la</strong>ntar estrategias que mejoren su eficiencia y<br />
eficacia. Este investigador distingue tres tipos de recursos: el capital físico<br />
(tecnología física, p<strong>la</strong>nta y equipamiento de <strong>la</strong> empresa, su localización<br />
geográfica y el acceso a materias primas); el capital humano (formación,<br />
experiencia, inteligencia o re<strong>la</strong>ciones superior-subordinado); y por último,<br />
el capital organizativo, que recoge el entramado de re<strong>la</strong>ciones que se<br />
producen en <strong>la</strong> empresa, sistemas de p<strong>la</strong>nificación formal e informal,<br />
sistemas de coordinación y control, y <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones informales entre<br />
grupos intraempresa e interempresa.<br />
Otra de <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>sificaciones de los recursos en sentido amplio es <strong>la</strong> realizada<br />
por Wernerfelt, (1984) y Hall (1992) en <strong>la</strong> que los recursos de <strong>la</strong> empresa se<br />
dividen entre activos tangibles (activos físicos) y activos intangibles<br />
(procedimientos). Adicionalmente, <strong>la</strong> ejecución de <strong>la</strong>s actividades genera<br />
otros activos internos bajo <strong>la</strong> forma de habilidades, rutinas organizativas o<br />
conocimientos internos de <strong>la</strong> empresa así como activos externos tangibles<br />
(como por ejemplo los contratos) y activos externos intangibles (como <strong>la</strong><br />
imagen de marca y <strong>la</strong>s redes de co<strong>la</strong>boración). Respecto a esta<br />
c<strong>la</strong>sificación, es importante hacer hincapié en que el uso de los servicios<br />
productivos de los activos físicos produce una depreciación de su valor,<br />
mientras que el uso de los activos intangibles no sólo no reduce su valor<br />
sino que incluso es muy probable que lo aumenten 4 . Posteriormente,<br />
4 Itami (1987) se refiere a éstos últimos como “activos invisibles”.<br />
28
29<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Aaker (1989) y Hall (1993), dividen los recursos intangibles entre los que<br />
son materializados en activos y cuya propiedad está protegida legalmente<br />
(patentes, marcas, licencias, et.), y los que no son materializados en activos<br />
(cultura, reputación, conocimiento, habilidades y capacidades).<br />
En <strong>la</strong> tab<strong>la</strong> 2.1 incluimos un esquema con el que pretendemos sintetizar <strong>la</strong>s<br />
distintas definiciones con <strong>la</strong>s que se han intentado explicar los recursos en<br />
sentido amplio (es decir, entendiendo <strong>la</strong> capacidad como recurso).<br />
Tab<strong>la</strong> 2.1: Esquema de definiciones de recurso en sentido amplio (es decir,<br />
entendiendo <strong>la</strong> capacidad como recurso)<br />
AUTOR(ES) CLASIFICACIÓN/DEFINICIÓN DE RECURSO<br />
Fernández y Suarez<br />
(1996)<br />
Barney (1991)<br />
Aaker (1989)<br />
Hall (1993)<br />
Cualquier factor de producción a disposición de <strong>la</strong><br />
empresa de forma estable<br />
Recurso de capital<br />
físico<br />
Recurso de capital<br />
humano<br />
Recurso de capital<br />
organizativo<br />
*Recursos intangibles<br />
materializados en<br />
activos y cuya<br />
propiedad está<br />
protegida legalmente<br />
*Recursos intangibles<br />
no materializados en<br />
activos<br />
Tecnología utilizada<br />
P<strong>la</strong>nta<br />
Equipo productivo<br />
Localización geográfica<br />
Acceso a materias primas<br />
Formación<br />
Experiencia<br />
Buen juicio<br />
Inteligencia,…<br />
Re<strong>la</strong>ciones intraempresa<br />
Re<strong>la</strong>ciones interempresa<br />
Sistemas de coordinación<br />
y control<br />
Sistemas de p<strong>la</strong>nificación<br />
formal e informal<br />
Patentes<br />
Marcas<br />
Licencias,…<br />
Cultura<br />
Reputación<br />
Conocimiento<br />
Habilidades<br />
Capacidades
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Continuación tab<strong>la</strong> 2.1: Esquema de definiciones de recurso en sentido<br />
amplio (es decir, entendiendo <strong>la</strong> capacidad como recurso)<br />
AUTOR(ES) CLASIFICACIÓN/DEFINICIÓN DE RECURSO<br />
Recursos tangibles El uso produce<br />
depreciación de<br />
valor<br />
Recursos intangibles* El uso aumenta el<br />
valor<br />
Activos internos Habilidades<br />
Rutinas<br />
Wernerfelt (1984)<br />
organizativas<br />
Conocimientos<br />
Hall (1992)<br />
internos<br />
Activos externos Tangibles<br />
(ej. Contratos)<br />
Intangibles<br />
(ej. Imagen de<br />
marca y redes de<br />
co<strong>la</strong>boración)<br />
Fuente: E<strong>la</strong>boración propia<br />
Los recursos en sentido estricto serán definidos como el conjunto de<br />
factores disponibles que son poseídos o contro<strong>la</strong>dos por <strong>la</strong> empresa (Amit<br />
y Schoemaker, 1993; p.35). En cambio, <strong>la</strong> capacidad sería <strong>la</strong> facultad de<br />
gestionar adecuadamente los recursos para realizar una determinada tarea<br />
dentro de <strong>la</strong> empresa. Por lo tanto, dentro de este contexto, <strong>la</strong>s<br />
capacidades se refieren a <strong>la</strong> competencia de una empresa para desplegar<br />
los recursos, usualmente en combinación, usando procesos organizativos,<br />
para producir un fin deseado (Amit y Schoemaker, 1993; p.35). Así pues,<br />
<strong>la</strong> simple posesión de recursos por parte de una organización no explica<br />
su potencialidad, ya que es importante <strong>la</strong> forma en que éstos son<br />
combinados y explotados, lo cual determinará sus capacidades o<br />
competencias. En este sentido, resulta adecuado distinguir entre <strong>la</strong><br />
posesión de un recurso y <strong>la</strong> capacidad de utilizar de forma eficiente y<br />
eficaz los servicios que este recurso puede prestar (Ventura, 1996; p.85).<br />
30
31<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Según esta c<strong>la</strong>sificación <strong>la</strong>s capacidades están unidas al capital humano, se<br />
apoyan sobre todo en los activos intangibles, particu<strong>la</strong>rmente en el<br />
conocimiento tecnológico y organizativo de <strong>la</strong> empresa, gobiernan <strong>la</strong><br />
transformación de los inputs en outputs, crean valor añadido y determinan<br />
<strong>la</strong> eficiencia y grado de innovación de <strong>la</strong> empresa (Fernández et al.., 1997;<br />
p. 13). De acuerdo con Grant (1991; p. 122), son patrones complejos de<br />
coordinación entre personas y entre recursos y personas, los cuales<br />
pueden ser perfeccionados a través del aprendizaje. Para explicarlo, este<br />
autor recurre al concepto de rutinas organizativas de Nelson y Winter<br />
(1982), con lo cual <strong>la</strong>s capacidades no sólo dependen de los activos de <strong>la</strong><br />
empresa, sino de <strong>la</strong> habilidad para combinar<strong>la</strong>s, integrar<strong>la</strong>s y movilizar<strong>la</strong>s<br />
a través de dichas rutinas. Las rutinas no son más que <strong>la</strong>s pautas<br />
predecibles y regu<strong>la</strong>res de actuación mediante <strong>la</strong>s que se determinan <strong>la</strong>s<br />
tareas a efectuar, así como <strong>la</strong> forma en que deben llevarse a cabo.<br />
Grant (1991; p. 122) seña<strong>la</strong> que <strong>la</strong>s rutinas son para <strong>la</strong> organización lo<br />
mismo que <strong>la</strong>s habilidades para el individuo. Se llevan a cabo de <strong>la</strong> misma<br />
forma que <strong>la</strong>s habilidades de los individuos, por lo que son aplicadas casi<br />
automáticamente sin precisar prácticamente coordinación consciente. Así<br />
mismo, estas rutinas necesitan una cantidad importante de conocimiento<br />
tácito y hacen referencia a contingencias que ocurren frecuentemente. Por<br />
este motivo, tan sólo un limitado repertorio de rutinas puede ser<br />
desempeñado muy eficientemente de forma coordinada. De <strong>la</strong> misma<br />
forma que <strong>la</strong>s habilidades individuales son adquiridas mediante <strong>la</strong><br />
práctica continuada en el tiempo, <strong>la</strong>s habilidades de una organización son<br />
desarrol<strong>la</strong>das y sostenidas sólo a través de <strong>la</strong> experiencia. Así, <strong>la</strong> ventaja<br />
de una empresa establecida sobre un nuevo competidor consiste<br />
básicamente en <strong>la</strong>s rutinas organizativas que <strong>la</strong> empresa establecida ha<br />
perfeccionado a través del tiempo. Sin embargo, esta ventaja puede<br />
desaparecer, o incluso convertirse en un <strong>la</strong>stre en el caso de industrias en<br />
<strong>la</strong>s cuales el cambio tecnológico es rápido.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
En resumen, una capacidad es, en esencia, una rutina, y <strong>la</strong> organización es<br />
en sí misma, un conjunto de rutinas. Así pues, es un concepto dinámico<br />
que expresa <strong>la</strong> conjunción entre recursos y pautas organizativas por medio<br />
de <strong>la</strong>s cuales se logra coordinar e incentivar <strong>la</strong> adecuada interre<strong>la</strong>ción<br />
entre un conjunto de recursos tecnológicos y humanos para desarrol<strong>la</strong>r<br />
una función o actividad determinada (Ventura, 1996; p. 85).<br />
Las capacidades pueden incluir más elementos además de <strong>la</strong>s rutinas,<br />
tales como <strong>la</strong>s habilidades tecnológicas, los activos complementarios<br />
(Teece et al., 1990), los sistemas de dirección, los sistemas físicos y los<br />
valores (Leonard-Barton, 1992; Leonard-Barton et al., 1994).<br />
De acuerdo con Fernández y Suárez (1996), <strong>la</strong>s capacidades, al igual que<br />
<strong>la</strong>s rutinas que <strong>la</strong>s sustentan, están organizadas de forma jerárquica<br />
(Collis, 1991; Teece y Pisano, 1994; Grant, 1995):<br />
- Las capacidades estáticas o de primer nivel están asociadas a<br />
actividades funcionales de <strong>la</strong> empresa.<br />
- Las capacidades dinámicas (Teece et al., 1997) o de segundo nivel, están<br />
basadas en <strong>la</strong>s competencias re<strong>la</strong>tivas al cambio y <strong>la</strong> innovación. Estas<br />
capacidades facilitan <strong>la</strong> interacción de varias actividades funcionales y<br />
están muy vincu<strong>la</strong>das con el desarrollo de nuevos productos<br />
(Eisenhardt y Martin, 2000).<br />
- Las capacidades de aprender a aprender y de aprender más rápido que<br />
<strong>la</strong> competencia (Collis, 1994) serían consideradas como capacidades de<br />
tercer nivel.<br />
2.1.1 Re<strong>la</strong>ción de <strong>la</strong> Perspectiva de <strong>la</strong> Organización Industrial con <strong>la</strong><br />
Perspectiva Basada en Recursos<br />
En línea con <strong>la</strong> conclusión del apartado anterior reafirmamos que <strong>la</strong> RBV<br />
ha sido desarrol<strong>la</strong>da como complemento del modelo del atractivo de <strong>la</strong><br />
industria o el también l<strong>la</strong>mado como perspectiva de <strong>la</strong> organización<br />
industrial (OIV). Éste fue propuesto por Bain (1968) y Porter (1979, 1980,<br />
32
33<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
1985) principalmente y trata de explicar como el performance de <strong>la</strong><br />
empresa variará dependiendo de <strong>la</strong> estructura que exista en su industria.<br />
En los años 80 el enfoque de <strong>la</strong> investigación estratégica se centró en el<br />
análisis del entorno microeconómico de <strong>la</strong> empresa. Basándose en el<br />
paradigma estructura-conducta-resultados (ECR) de <strong>la</strong> Economía<br />
Industrial (Bain, 1959), los primeros trabajos empíricos de este enfoque<br />
comparaban <strong>la</strong> rentabilidad media de distintos sectores, tratando de<br />
encontrar diferencias significativas asociadas con <strong>la</strong>s variables<br />
representativas de <strong>la</strong> estructura del mercado. Este p<strong>la</strong>nteamiento se basa<br />
en los siguientes supuestos:<br />
(1) Entre <strong>la</strong>s empresas de una misma industria no existen diferencias en<br />
cuanto a recursos estratégicamente relevantes, ni estrategias<br />
adoptadas, así como tampoco en cuanto a los resultados obtenidos<br />
(Porter, 1981; Rumelt, 1984).<br />
(2) Toda heterogeneidad desarrol<strong>la</strong>da en una industria tiene una duración<br />
corta, ya que los recursos que <strong>la</strong>s empresas utilizan para implementar<br />
sus estrategias se caracterizan por una elevada transferibilidad, es<br />
decir, pueden ser comprados y vendidos en el mercado (Barney,<br />
1986a).<br />
El trabajo de Porter (1980) aporta herramientas bien definidas que<br />
permiten comprender por qué algunas empresas o industrias tienen más<br />
posibilidades de ser más rentables que otras. En este sentido, el análisis de<br />
<strong>la</strong>s “cinco fuerzas competitivas” constituye, en esencia, un mapa<br />
estructural de <strong>la</strong> economía de una industria: un mapa sobre el grado en el<br />
cual los competidores, los entrantes en el mercado, los productos<br />
sustitutos, y el poder de negociación con proveedores y clientes ejercen<br />
presiones sobre los márgenes de una empresa en una determinada<br />
industria. Así, una industria con unas economías de esca<strong>la</strong> significativas,<br />
con importantes oportunidades de diferenciación, con unos mercados de
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
proveedores y clientes perfectamente competitivos, y cuyos posibles<br />
productos sustitutos se reve<strong>la</strong>n insatisfactorios para su mercado, resulta<br />
mucho más atractiva que otra con pocas barreras de entrada y compuesta<br />
por un elevado número de empresas de tamaño simi<strong>la</strong>r suministradas por<br />
unos pocos proveedores y que ofertan unos productos poco diferenciados<br />
a un pequeño número de clientes (Cockburn et al. 2000).<br />
Los trabajos e<strong>la</strong>borados desde <strong>la</strong> perspectiva de <strong>la</strong> Economía Industrial<br />
han tendido a centrarse en el análisis de <strong>la</strong>s oportunidades y amenazas del<br />
entorno competitivo (Lamb, 1984), y han tratado de describir <strong>la</strong>s<br />
condiciones ambientales que propician elevados niveles de desempeño<br />
(Caves y Porter, 1977; Porter, 1980, 1985). La Economía Industrial hace<br />
énfasis en el atractivo de <strong>la</strong> industria como determinante de una<br />
rentabilidad superior. La implicación de este enfoque para <strong>la</strong> dirección es<br />
que ésta debe identificar y posicionarse en industrias con entornos<br />
atractivos evitando <strong>la</strong>s presiones competitivas mediante su influencia en <strong>la</strong><br />
estructura de <strong>la</strong> industria y en el comportamiento de los competidores. Sin<br />
embargo, esta perspectiva no tiene en cuenta que <strong>la</strong>s empresas ubicadas en<br />
una misma industria pueden obtener distintos beneficios. Es por ello que<br />
<strong>la</strong> perspectiva de recursos y capacidades sirve de complemento para<br />
poder entender mejor <strong>la</strong> realidad.<br />
En <strong>la</strong> figura 2.1 mostramos que existe una estrecha re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong><br />
identificación de oportunidades y amenazas del entorno (análisis externo)<br />
y <strong>la</strong> identificación de fortalezas y debilidades de <strong>la</strong> empresa (análisis<br />
interno).<br />
34
35<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Figura 2.1: Re<strong>la</strong>ción entre el análisis tradicional “DAFO”, el modelo del<br />
atractivo de <strong>la</strong> industria y el modelo basado en los recursos.<br />
ANÁLISIS INTERNO ANÁLISIS EXTERNO<br />
FORTALEZAS<br />
DEBILIDADES<br />
MODELO<br />
BASADO<br />
EN LOS<br />
RECURSOS<br />
Fuente: Barney (1991).<br />
OPORTUNIDADES<br />
AMENAZAS<br />
MODELO DEL<br />
ENTORNO DE<br />
LA VENTAJA<br />
COMPETITIVA<br />
Otra de <strong>la</strong>s diferencias a destacar entre <strong>la</strong> perspectiva de <strong>la</strong> organización<br />
industrial y <strong>la</strong> basada en los recursos es el tipo de rentas obtenidas con<br />
cada una de el<strong>la</strong>s. Tal como nos indica Grant (1991) <strong>la</strong>s rentas obtenidas en<br />
el modelo de economía industrial están basadas en el poder de mercado y<br />
tienen el nombre de rentas de monopolio y <strong>la</strong>s rentas obtenidas en el<br />
enfoque de recursos son <strong>la</strong>s derivadas de los recursos que proporcionan<br />
retornos por encima de su coste real y reciben el nombre de rentas<br />
ricardianas.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Tab<strong>la</strong> 2.2: Obtención de ventajas competitivas según el modelo de <strong>la</strong><br />
economía industrial y el modelo basado en los recursos<br />
ECONOMÍA INDUSTRIAL ENFOQUE DE RECURSOS<br />
Hipó<strong>tesis</strong> - Entre <strong>la</strong>s empresas de una<br />
misma industria no existen<br />
diferencias en cuanto a recursos<br />
estratégicamente relevantes, a<br />
<strong>la</strong>s estrategias que adoptan, ni a<br />
los resultados, (Porter, 1981;<br />
Rumelt, 1984);<br />
Origen de <strong>la</strong><br />
Ventaja<br />
Competitiva<br />
Tipo de<br />
rentas<br />
obtenidas<br />
- Toda heterogeneidad<br />
desarrol<strong>la</strong>da en una industria<br />
tendrá una corta duración ya<br />
que los recursos que <strong>la</strong>s<br />
empresas utilizan para<br />
implementar sus estrategias se<br />
caracterizan por una elevada<br />
transferibilidad, es decir pueden<br />
ser comprados y vendidos en el<br />
mercado (Barney, 1986a).<br />
- Análisis externo:<br />
posicionamiento en una<br />
industria atractiva<br />
Fuente: Adaptado de Alegre (2003)<br />
- Rentas del monopolio<br />
derivadas del poder de mercado<br />
(Grant, 1991).<br />
2.1.2 Críticas a <strong>la</strong> perspectiva basada en los recursos<br />
36<br />
- Es posible que <strong>la</strong>s dotaciones de<br />
recursos estratégicos de <strong>la</strong>s<br />
empresas de una misma industria<br />
sean heterogéneas<br />
- Es posible que esos recursos no<br />
sean perfectamente movibles<br />
entre empresas, y por lo tanto, <strong>la</strong><br />
heterogeneidad en <strong>la</strong> dotación de<br />
recursos puede ser duradera<br />
(Barney, 1991).<br />
- Análisis interno: dotación<br />
diferencial de recursos<br />
- Rentas Ricardianas derivadas<br />
de los recursos que proporcionan<br />
retornos por encima de su coste<br />
real (Grant, 1991).<br />
La perspectiva basada en los recursos (RBV) ha sido fuertemente<br />
criticada. Nosotros estamos de acuerdo con Penrose, (1959,1995) y con<br />
Kraaijenbrink et al. (2010) en que para avanzar en <strong>la</strong> teoría se debe de<br />
mover <strong>la</strong> RBV a un marco esencialmente dinámico y subjetivista. Nos<br />
gustaría destacar el trabajo de Kraaijenbrink et al. (2010) en el que se<br />
seña<strong>la</strong>n 8 críticas generalizadas a <strong>la</strong> RBV:
37<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
a) No tiene implicaciones directivas o validez operativa (Priem y Butler,<br />
2001). La RBV les indica a los gerentes que sus recursos deben de cumplir<br />
<strong>la</strong>s condiciones VRIO para ser ventaja competitiva, pero no indica nada<br />
sobre cómo deben hacerlo (Connor, 2002; Miller, 2003). Ante esta crítica,<br />
Barney (2005) indica que nunca fue pretensión de <strong>la</strong> RBV proporcionar<br />
recetas de gestión. Van de Ven, (2007) también defiende que esta misma<br />
crítica está presente en toda <strong>la</strong> investigación de “management” y todavía<br />
no se ha resulto.<br />
b) Implica <strong>la</strong> regresión infinita (Collis, 1994; Priem y Butler, 2001). Collis<br />
(1994:148) indica “una empresa que tiene <strong>la</strong> capacidad superior de desarrol<strong>la</strong>r<br />
estructuras que mejoren <strong>la</strong> innovación de sus productos, superarán a <strong>la</strong> empresa<br />
que tiene <strong>la</strong> capacidad de producir productos más innovadores hoy”. Esto es<br />
debido a que una capacidad de segundo orden (desarrol<strong>la</strong>ndo<br />
estructuras que mejoran <strong>la</strong> innovación de productos), será a su debido<br />
tiempo más valiosa que una capacidad de primer orden (innovación de<br />
producto), <strong>la</strong> RBV sugiere que <strong>la</strong>s empresas deben de esforzarse en<br />
conseguir capacidades de segundo orden. El problema puede estar en<br />
que este paso se puede extender hasta el infinito, llevando a <strong>la</strong>s<br />
principales empresas a una búsqueda interminable de <strong>la</strong>s capacidades de<br />
orden cada vez más alto.<br />
Ante esta crítica se observa que introducir una capacidad de tercer orden<br />
daría lugar a una teoría artificial que no tendría mucho sentido. Lado et<br />
al. (2006) seña<strong>la</strong>ron que <strong>la</strong> regresión infinita es un problema sólo para<br />
aquellos que consideran <strong>la</strong> gestión de <strong>la</strong> ciencia económica. Este<br />
problema se puede observar en <strong>la</strong>s teorías matemáticas abstractas pero<br />
en una teoría aplicada, como <strong>la</strong> RBV, los niveles son cualitativamente<br />
diferentes. Además, algo que podría ser beneficioso es centrarse en <strong>la</strong>s<br />
interacciones entre niveles en lugar de considerar los niveles más altos.<br />
Por ejemplo, podríamos considerar <strong>la</strong>s interacciones entre competencias<br />
operativas y “meta-competencias” (Mahoney, 1995; Teece, 2007).
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
c) La aplicabilidad de <strong>la</strong> RBV es demasiado limitada. Este argumento se<br />
presenta en tres versiones:<br />
1. En <strong>la</strong> primera versión, Gibbert (2006a, 2006b) sostiene que <strong>la</strong><br />
idea de <strong>la</strong> singu<strong>la</strong>ridad de los recursos (heterogeneidad e<br />
inmovilidad al mismo tiempo) imposibilita que <strong>la</strong> teoría pueda ser<br />
generalizada.<br />
2. En <strong>la</strong> segunda, Connor (2002) argumenta que sólo se puede<br />
aplicar a <strong>la</strong>s grandes empresas con un poder de mercado<br />
significativo. Las ventajas competitivas sostenibles en <strong>la</strong>s empresas<br />
más pequeñas y ágiles no pueden estar basadas en los recursos<br />
estáticos, y por lo tanto quedan fuera de los límites de <strong>la</strong> RBV.<br />
Afirma que en <strong>la</strong>s empresas pequeñas <strong>la</strong>s ventajas competitivas<br />
pueden venir dadas por <strong>la</strong> generación de capacidades. Esta<br />
argumentación nos recuerda otra limitación de <strong>la</strong> RBV, <strong>la</strong><br />
aplicabilidad es únicamente para tratar de alcanzar ventajas<br />
competitivas sostenibles, es decir, para aquel<strong>la</strong>s empresas<br />
satisfechas con su posición competitiva, no sería aplicable.<br />
3. Y por último, Miller (2003) indica que so<strong>la</strong>mente <strong>la</strong>s<br />
empresas que ya poseen los recursos VRIO pueden adquirir y<br />
aplicar recursos adicionales. Miller seña<strong>la</strong> que <strong>la</strong>s empresas son<br />
dependientes a su trayectoria que limitará su desempeño actual y<br />
futuro.<br />
d) No es factible <strong>la</strong> aplicabilidad de <strong>la</strong>s ventajas competitivas sostenibles.<br />
Eisenhardt y Martin (2000) y D´Aveni (1994) concluyen que <strong>la</strong>s<br />
condiciones cambian y una ventaja competitiva sólo será sostenible a<br />
través de “capacidades dinámicas” o “aprendizaje organizativo” que<br />
permite a <strong>la</strong> empresa adaptarse más rápidamente que su competencia.<br />
Una empresa debe seguir innovando ya que su flujo de ingresos está<br />
constantemente expuesto a nuevos competidores, productivos sustitutos,<br />
38
39<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
etc. Aunque en algunos entornos estáticos se podrían obtener ventajas<br />
competitivas sostenibles, entornos dinámicos requieren capacidades<br />
dinámicas (Helfat et al., 2007).<br />
e) La perspectiva de recursos y capacidades no es una teoría. La proposición<br />
de que <strong>la</strong> perspectiva de recursos y capacidades podría ser una teoría <strong>la</strong><br />
realizó Conner (1991) y Kogut y Zander (1992). Estos autores indicaron<br />
que se podría tratar de una teoría de <strong>la</strong> empresa y <strong>la</strong> diferenciaban de<br />
otras teorías como <strong>la</strong> teoría de los costes de transacción (Williamson y<br />
Winter, 1991). Cinco años más tarde, se puso mucho interés en <strong>la</strong> RBV<br />
para tratar de estudiar si el conocimiento era un nuevo recurso<br />
estratégico y se realizaba mucho hincapié en discutir si <strong>la</strong> RBV era una<br />
teoría (Barney, 1996; Conner y Praha<strong>la</strong>d, 1996; Foss, 1996a, 1996b; Kogut<br />
y Zander, 1996; Grant, 1996; Liebeskind, 1996; Spender, 1996).<br />
Finalmente, el comentario que ha tenido mayor repercusión es el de Foss<br />
(1996a, 1996b), el cual concluye que <strong>la</strong> RBV es insuficiente como teoría de<br />
<strong>la</strong> empresa. No obstante los creadores de <strong>la</strong> RBV mantienen que no<br />
pretende ser una teoría ya que no aspira a explicar los límites de <strong>la</strong>s<br />
empresas (Barney y C<strong>la</strong>rk, 2007). Dado que <strong>la</strong> teoría de costes de<br />
transacción sí que aspira a ello, <strong>la</strong> RBV se podría considerar como<br />
complementaria a esta.<br />
f) El VRIO aunque es necesario no es suficiente para explicar <strong>la</strong> RBV.<br />
Uno de los argumentos que sustentan esta crítica es que no existe soporte<br />
empírico suficiente. Dos revisiones recientes (Armstrong y Shimizu,<br />
2007; Newbert, 2007) afirman que los estudios empíricos han obtenido<br />
sustento modesto, implicando que se deben de tener en cuenta otros<br />
factores cuando se explican <strong>la</strong>s ventajas competitivas sostenibles. La<br />
crítica no se limita únicamente a los temas de metodología sino que<br />
apuntan a que el criterio VRIO no es necesario para explicar <strong>la</strong>s ventajas<br />
competitivas sostenibles. En esta línea, Foss y Knudsen, (2003) defienden
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
que los únicos criterios necesarios son <strong>la</strong> inmovilidad de recursos y <strong>la</strong><br />
incerteza. Becerra (2008) apunta a que los criterios a seguir son <strong>la</strong><br />
incertidumbre, especificidad de recursos y <strong>la</strong> innovación a nivel de<br />
empresa.<br />
Estos comentarios sugieren desacuerdos acerca de <strong>la</strong> naturaleza de los<br />
mercados, los individuos, así como los recursos y los roles que estos<br />
juegan en <strong>la</strong> generación de ventajas competitivas sostenibles. Por lo que<br />
se deriva de ello, se p<strong>la</strong>ntean dos críticas alternativas. La primera pone<br />
en juicio que el análisis VRIO que se realiza a nivel de componente sea el<br />
apropiado ya que incide en el nivel de recurso individual. Y <strong>la</strong> segunda<br />
incide en el conocimiento de los directivos para poder reconocer estos<br />
recursos y aprovecharlos.<br />
El valor de los recursos es demasiado indeterminado como para proveer una<br />
teoría útil.<br />
Se observa que <strong>la</strong> RBV tiene una tendencia tautológica, así como un<br />
problema con <strong>la</strong> definición de valor (Priem y Butler, 2001). Bowman y<br />
Ambrosini (2000) intentan definir el valor y para ello sugieren 3<br />
conceptos: el valor de uso percibido (<strong>la</strong> percepción del valor por parte de<br />
los clientes), el valor monetario total (el montante de dinero que los<br />
clientes están dispuestos a pagar), el valor de cambio (lo que realmente<br />
se paga). Makadok (2001) distingue entre el valor de los recursos que se<br />
realiza a priori y el valor de <strong>la</strong>s capacidades que se realiza a posteriori.<br />
Priem y Butler, (2001) argumentan que éste es determinado de forma<br />
exógena por el mercado y Barney (2001) simpatiza con esta afirmación.<br />
Sin embargo, es difícil establecer una medida objetiva de medición para<br />
el valor de los recursos.<br />
40
g) La definición de recurso es impracticable.<br />
Las definiciones de recursos son todas inconclusivas:<br />
41<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
“Por recurso se entiende todo aquello que pueda ser considerado como fortaleza o<br />
debilidad de una determinada empresa. Más formalmente, los recursos de una<br />
empresa en un momento dado se podrían definir como aquellos activos (tangibles<br />
e intangibles) que están vincu<strong>la</strong>dos de forma semipermanente a <strong>la</strong> empresa<br />
(Wernerfelt, 1984:172).”<br />
“Los recursos de <strong>la</strong> empresa pueden ser definidos como el stock disponible de<br />
factores propios o contra<strong>la</strong>dos por <strong>la</strong> empresa (Amit y Schoemaker, 1993:35)”.<br />
“Los recursos de <strong>la</strong> empresa incluyen todos los activos, capacidades, procesos<br />
organizativos, atributos de <strong>la</strong> empresa, información, conocimiento, etc.<br />
Contra<strong>la</strong>dos por <strong>la</strong> empresa que posibilitan que <strong>la</strong> empresa conciba o implemente<br />
estrategias que mejoran <strong>la</strong> eficacia y eficiencia (Barney, 1991a:101; Barney,<br />
2002:155)”<br />
Que no exista consenso en <strong>la</strong> definición de recurso nos lleva a dos<br />
posibles problemas. El primero es <strong>la</strong> falta de consenso entre aquellos<br />
recursos que son un imput y <strong>la</strong>s capacidades que permiten a <strong>la</strong> empresa<br />
seleccionarlos, desplegarlos y organizar insumos. El segundo es no<br />
reconocer cómo diferentes tipos de recursos pueden contribuir a <strong>la</strong>s<br />
ventajas competitivas de diferente forma.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Tab<strong>la</strong> 2.3: Resumen y valoración de <strong>la</strong>s críticas a <strong>la</strong> perspectiva de<br />
recursos y capacidades (RBV).<br />
Crítica Valoración<br />
a. La teoría RBV no<br />
tiene implicaciones<br />
directivas<br />
b. La RBV implica <strong>la</strong><br />
regresión infinita<br />
c. La aplicabilidad de <strong>la</strong><br />
RBV es demasiado<br />
limitada<br />
d. No es factible <strong>la</strong><br />
aplicabilidad de <strong>la</strong>s<br />
ventajas competitivas<br />
sostenibles<br />
e. La RBV no es una<br />
teoría de <strong>la</strong> empresa<br />
No todas <strong>la</strong>s teorías deben tener implicaciones<br />
directivas.<br />
A través de su diseminación, <strong>la</strong> RBV tiene un<br />
impacto evidente<br />
Si <strong>la</strong> aplicamos solo como una teoría abstracta<br />
matemática. En una aplicación teórica como <strong>la</strong><br />
RBV, los niveles son cualitativamente diferentes.<br />
Puede ser fructífero centrarse en <strong>la</strong>s interacciones<br />
entre niveles en vez de considerar anteriores<br />
niveles superiores como fuente de ventajas<br />
competitivas sostenibles.<br />
Generalizar acerca de <strong>la</strong> singu<strong>la</strong>ridad es<br />
imposible por definición.<br />
La aplicación de <strong>la</strong> RBV es posible en empresas<br />
pequeñas y startups mientras que se esfuercen<br />
por conseguir ventajas competitivas sostenibles.<br />
La “path dependence” no es un problema si no<br />
nos centramos en los extremos.<br />
La aplicación de <strong>la</strong> RBV es aplicable a <strong>la</strong>s<br />
empresas solo en entornos predecibles.<br />
Por inclusión de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas, <strong>la</strong><br />
RBV no es puramente estática, sin embargo esta<br />
sólo explica <strong>la</strong>s fuentes de ventajas competitivas<br />
ex post, no ex ante.<br />
Aunque ninguna ventaja competitiva puede<br />
durar para siempre, un foco en <strong>la</strong> ventaja<br />
competitiva sostenible sigue siendo útil<br />
La RBV no es suficiente para explicar por qué<br />
existe <strong>la</strong> empresa.<br />
En lugar de exigir que lo haga, se debería<br />
desarrol<strong>la</strong>r una teoría de <strong>la</strong> ventaja competitiva<br />
sostenible y dejar <strong>la</strong>s explicaciones de <strong>la</strong><br />
existencia de <strong>la</strong> empresa a <strong>la</strong> economía de costos<br />
de transacción.<br />
42
43<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Continuación tab<strong>la</strong> 2.3: Resumen y valoración de <strong>la</strong>s críticas a <strong>la</strong><br />
perspectiva de recursos y capacidades (RBV).<br />
Crítica Valoración<br />
f. El análisis VRIO<br />
aunque es necesario no<br />
es suficiente<br />
g. El valor de los recursos<br />
es demasiado<br />
indeterminado como<br />
para proveer una teoría<br />
útil<br />
h. La definición de<br />
recurso<br />
impracticable<br />
es<br />
Fuente: Kraaijenbrink, Spender y Groen (2010)<br />
2.2 APRENDIZAJE ORGANIZATIVO<br />
El criterio VRIO no es siempre necesario y suficiente<br />
para explicar <strong>la</strong>s ventajas competitivas de <strong>la</strong>s<br />
empresas.<br />
La RBV no considera suficientemente <strong>la</strong>s sinergias<br />
dentro de los recursos como fuentes de ventaja<br />
competitiva sostenible.<br />
La RBV no reconoce suficientemente el papel que<br />
los modelos de juicio y modelos mentales de los<br />
individuos desempeñan en <strong>la</strong> evaluación y <strong>la</strong><br />
creación de valor.<br />
La conceptualización actual del valor convierte a <strong>la</strong><br />
RBV en una teoría incompleta o tautológica.<br />
Se necesita una noción de valor más creativa y<br />
subjetiva.<br />
Las definiciones de recurso no son concluyentes.<br />
La RBV no reconoce diferencias entre recursos como<br />
insumos y recursos que permiten <strong>la</strong> organización de<br />
los insumos.<br />
No se reconoce cómo diferentes tipos de recursos<br />
pueden contribuir a <strong>la</strong> ventaja competitiva<br />
sostenible de diferente manera.<br />
En los últimos años el aprendizaje organizativo se ha vuelto un área de<br />
estudio de gran relevancia como recurso estratégico (Argote, 2011). Ha<br />
sido ámpliamente estudiado por los académicos del área de recursos<br />
humanos, que se basan en enfoques psicológicos del aprendizaje (Chiva y<br />
Alegre, 2005). Esta literatura enfatiza el importante papel jugado por <strong>la</strong><br />
Gestión de Recursos Humanos en el desarrollo de un clima que favorezca<br />
el aprendizaje organizativo (Jones y Hendry, 1994; Kamoche y Mueller,<br />
1998). Así diversos estudios han seña<strong>la</strong>do el efecto positivo de estrategias<br />
específicas de recursos humanos sobre el aprendizaje, tanto en lo referente<br />
a <strong>la</strong>s estrategias de selección de personal (Williams, 2001), como a <strong>la</strong>s
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
prácticas de formación y desarrollo (O´Dell y Grayson, 1998), evaluación<br />
del rendimiento (McGill y Slocum, 1993) y retribución (Lei et al., 1999).<br />
También ha sido estudiado por los académicos del área de gestión<br />
estratégica y de <strong>la</strong> tecnología. En esta última se intentan desarrol<strong>la</strong>r<br />
herramientas de <strong>la</strong> tecnología de <strong>la</strong> información para mejorar <strong>la</strong> gestión<br />
del conocimiento (ampliamos esta idea en el capítulo 5). En ambas áreas se<br />
utiliza el término conocimiento organizativo con asiduidad (Organizational<br />
Knowledge) en vez de aprendizaje organizativo (Simon, 1947; Penrose,<br />
1959; Hayek, 1989).<br />
Podemos definir el aprendizaje organizativo como <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong><br />
organización de procesar conocimiento modificando su comportamiento<br />
(Jerez-Gomez et al., 2005). Para que se provoque esta modificación será<br />
muy importante el contexto social que ayudará a <strong>la</strong> construcción de<br />
creencias comunes (Chiva y Alegre, 2005).<br />
El pensamiento sobre el aprendizaje organizativo ha ido evolucionando a<br />
lo <strong>la</strong>rgo del tiempo, permitiendo <strong>la</strong> aparición de multitud de perspectivas.<br />
En un principio existían dos explicaciones fundamentales sobre cómo <strong>la</strong>s<br />
organizaciones aprenden (Cook y Yanow, 1996; Easterby-Smith et al.,<br />
1998; Cohen y Levinthal, 1990): <strong>la</strong> perspectiva individual o cognitiva y <strong>la</strong><br />
perspectiva social.<br />
Tal y como Chiva y Alegre (2005) explican, <strong>la</strong> perspectiva individual<br />
considera el aprendizaje como un fenómeno individual y<br />
consecuentemente entiende que <strong>la</strong>s organizaciones aprenden a través de<br />
<strong>la</strong>s personas (por ejemplo: Huber, 1991). La perspectiva social, sin<br />
embargo, considera al aprendizaje como un fenómeno social y en<br />
consecuencia entiende que <strong>la</strong>s organizaciones aprenden a través de<br />
comunidades y grupos (por ejemplo: Brown y Duguid, 1991).<br />
44
45<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Easterby-Smith y Araujo (1999) indica que <strong>la</strong> primera enfatiza el proceso<br />
técnico del aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> segunda el proceso social. La<br />
perspectiva técnica o individual, asume que el aprendizaje organizativo tiene<br />
entre sus funciones el responder, procesar e interpretar de forma eficaz <strong>la</strong><br />
información, tanto interna como externa. Esta información suele ser<br />
predominantemente explícita, aunque puede ser cuantitativa o cualitativa.<br />
Los autores más conspicuos de esta perspectiva son Huber (1991), Argyris<br />
y Schön (1978) y Levinthal y March (1993). Por otro <strong>la</strong>do, <strong>la</strong> perspectiva<br />
social se centra en <strong>la</strong> forma en que <strong>la</strong>s personas le dan sentido a sus<br />
experiencias en <strong>la</strong> organización, <strong>la</strong>s cuales pueden proceder de fuentes<br />
explícitas o implícitas. Desde esta perspectiva, el aprendizaje es algo que<br />
emerge de <strong>la</strong>s interacciones sociales, normalmente en el lugar de trabajo.<br />
Esta perspectiva incluye a su vez tres percepciones del aprendizaje<br />
organizativo: como construcción social (Brown y Duguid, 1991), como<br />
proceso político (Coopey, 1994) y como proceso cultural de <strong>la</strong><br />
organización (Lave y Wenger, 1991; Cook y Yanow, 1993). De acuerdo con<br />
Easterby-Smith y Araujo (1999), existe una tendencia de afianzamiento de<br />
<strong>la</strong> perspectiva social en el aprendizaje organizativo.<br />
Cook y Yanow (1996) tienen una visión ligeramente distinta. Estos autores<br />
explican que <strong>la</strong>s teorías del aprendizaje organizativo han tomado<br />
tradicionalmente dos orientaciones; <strong>la</strong> primera se centra en el aprendizaje<br />
individual como modelo para <strong>la</strong> acción organizativa, o lo que es lo mismo<br />
en el aprendizaje de <strong>la</strong>s organizaciones basado en los procesos de aprendizaje<br />
de <strong>la</strong>s personas, <strong>la</strong> segunda en el aprendizaje de los individuos en contextos<br />
organizativos. Ambas orientaciones basan su entendimiento del aprendizaje<br />
organizativo sobre <strong>la</strong> actividad cognitiva del aprendizaje individual. Sin<br />
embargo, estos autores proponen una segunda perspectiva basada en el<br />
concepto de cultura organizativa, <strong>la</strong> cual deja de <strong>la</strong>do el modelo de<br />
aprendizaje de los individuos. Por lo que en realidad su visión no difiere<br />
en gran medida del resto de autores.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Sin embargo, Sanchez y Heene (1997) sugieren que el conocimiento y el<br />
aprendizaje organizativo no pueden ser entendidos adecuadamente si<br />
proyectamos simplemente sobre <strong>la</strong>s organizaciones conceptos prestados<br />
de estudios de conocimiento y aprendizaje individual. Así pues, se oponen<br />
a <strong>la</strong> perspectiva cognitiva del aprendizaje organizativo, <strong>la</strong> cual se centra y<br />
basa en los individuos, debiendo ser <strong>la</strong> organización el objeto de estudio.<br />
Para poder entender mejor esta discusión vamos a profundizar en <strong>la</strong><br />
definición de ambas perspectivas. Para ello, empezando por <strong>la</strong> perspectiva<br />
individual observamos que <strong>la</strong> mayoría de los autores han examinado cómo<br />
aprenden los individuos en <strong>la</strong>s organizaciones o han analizado cómo <strong>la</strong>s<br />
teorías del aprendizaje individual pueden ser aplicadas al aprendizaje de <strong>la</strong>s<br />
organizaciones. Ambos enfoques, basados en el aprendizaje individual,<br />
sugieren una re<strong>la</strong>ción entre el aprendizaje organizativo y <strong>la</strong>s l<strong>la</strong>madas<br />
teorías cognitivas, por lo que Cook y Yanow (1993) <strong>la</strong>s denominan<br />
perspectiva cognitiva.<br />
Algunos autores han utilizado el concepto de aprendizaje mediante<br />
errores para dirigirse al aprendizaje organizativo tanto en el nivel<br />
agregado u organizativo como en el nivel de los individuos en dicho<br />
contexto. Sin embargo, no podemos olvidar que el aprendizaje mediante<br />
errores tiene una esencia básicamente cognitiva e individual (Sitkin, 1992)<br />
por lo que a pesar de <strong>la</strong> re<strong>la</strong>tiva aceptación de estas extrapo<strong>la</strong>ciones,<br />
existen una serie de problemas derivados de tras<strong>la</strong>dar a <strong>la</strong>s organizaciones<br />
conceptos que son inherentes a los individuos. Estos problemas han sido<br />
tratados en raras ocasiones por los autores.<br />
Esta perspectiva cognitiva p<strong>la</strong>ntea a su vez dos orientaciones: <strong>la</strong> primera<br />
entiende que <strong>la</strong>s organizaciones efectúan procesos de aprendizaje<br />
simi<strong>la</strong>res a <strong>la</strong>s personas y <strong>la</strong> segunda que el aprendizaje organizativo<br />
ocurre cuando ciertas personas c<strong>la</strong>ve en <strong>la</strong> organización aprenden y como<br />
consecuencia tienen lugar cambios organizativos. El último de estos dos<br />
46
47<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
suele percibir el aprendizaje organizativo a partir de <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre<br />
cambio organizativo y cognición individual.<br />
Huysman (1999) manifiesta que con <strong>la</strong> publicación de los trabajos de Lave<br />
y Wenger (1991) y Brown y Duguid (1991), emergió una nueva perspectiva<br />
del aprendizaje organizativo. Esta perspectiva <strong>la</strong> podemos calificar como<br />
social, al entender que el aprendizaje organizativo surge de <strong>la</strong>s<br />
interacciones sociales. De acuerdo con el<strong>la</strong>, el aprendizaje organizativo se<br />
centra en <strong>la</strong> forma en que <strong>la</strong>s personas interpretan o dan sentido a sus<br />
experiencias en el trabajo.<br />
Desde esta perspectiva, el aprendizaje organizativo es una actividad social<br />
y no individual y cognitiva. El lenguaje es un elemento esencial del<br />
proceso de aprendizaje, y el aprendizaje siempre se asocia a <strong>la</strong> práctica<br />
organizativa. Esta perspectiva implica que los individuos son seres<br />
sociales que construyen juntos <strong>la</strong> comprensión de lo que les rodea, y<br />
aprenden de <strong>la</strong> interacción social dentro de sistemas sociales como <strong>la</strong>s<br />
organizaciones (Gherardi et al., 1998).<br />
Easterby-Smith y Araujo (1999) entienden que hay tres visiones muy<br />
re<strong>la</strong>cionadas dentro de esta perspectiva: <strong>la</strong> idea del aprendizaje como<br />
proceso cultural, como construcción social y como proceso político. En <strong>la</strong> idea<br />
del aprendizaje como proceso cultural destacan Cook y Yanow (1993).<br />
Estos autores analizan <strong>la</strong>s organizaciones y grupos, para decirnos que<br />
éstas actúan y hacen cosas que los individuos no podrían hacer, tales como<br />
interpretar <strong>la</strong> novena sinfonía de Beethoven, o jugar al Baloncesto. Así<br />
pues, el know-how supuesto en <strong>la</strong> producción de un ordenador o de un<br />
coche reside en el grupo, en <strong>la</strong> organización y no en el individuo. El<br />
aprendizaje organizativo no es, desde su punto de vista, una actividad<br />
cognitiva, ya que <strong>la</strong>s organizaciones no poseen lo que <strong>la</strong>s personas poseen<br />
(cerebro, órganos sensitivos, etc.). Por lo tanto, debemos analizar qué es lo<br />
que <strong>la</strong>s organizaciones poseen, para averiguar <strong>la</strong> naturaleza de su
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
aprendizaje. En consecuencia, se p<strong>la</strong>ntea <strong>la</strong> idea de cultura organizativa<br />
como base para el entendimiento del aprendizaje organizativo.<br />
Finalmente, Cook y Yanow (1993) definen aprendizaje organizativo como<br />
<strong>la</strong> adquisición, sustentación, o cambio de significados compartidos por <strong>la</strong>s<br />
personas a través de artefactos culturales y de <strong>la</strong>s acciones colectivas del<br />
grupo.<br />
Si consideramos que el aprendizaje organizativo es el proceso de<br />
adquisición de conocimiento por parte de un grupo, <strong>la</strong> diferencia entre <strong>la</strong><br />
perspectiva cognitiva y <strong>la</strong> social o cultural radicaría en cómo ese<br />
conocimiento es introducido. En <strong>la</strong> primera se introduce a través de <strong>la</strong>s<br />
cabezas de sus miembros, o bien a través del comportamiento de <strong>la</strong><br />
organización como si fuera una persona. La segunda, p<strong>la</strong>ntea que lo hace a<br />
través del trabajo en grupo, los procesos colectivos, o <strong>la</strong> interacción de sus<br />
miembros.<br />
Posteriormente existen trabajos que tratan de dar cabida tanto a <strong>la</strong><br />
perspectiva individual como a <strong>la</strong> social, y para ello enfatizan que el<br />
aprendizaje organizativo es un proceso por el cual <strong>la</strong>s organizaciones<br />
aprenden (Sun, 2003; Jerez-Gómez et al., 2005; Alegre y Chiva, 2008; Chiva<br />
y Alegre, 2009). En este proceso <strong>la</strong>s organizaciones cambian o modifican<br />
sus modelos mentales, reg<strong>la</strong>s, procedimientos o conocimiento logrando<br />
mejorar su desempeño (Cyert y March, 1963; Hedberg, 1981; Argyris y<br />
Schön, 1978; Senge, 1990; Brown y Duguid, 1991; Dibel<strong>la</strong> et al.1996). Este<br />
proceso proviene de <strong>la</strong> adquisición de conocimiento de los individuos y<br />
progresa con los intercambios e integración de este conocimiento en <strong>la</strong><br />
creación de un conocimiento colectivo (Hedberg, 1981), enraizado en los<br />
procesos y cultura organizativa. Este conocimiento colectivo es<br />
almacenado en <strong>la</strong> l<strong>la</strong>mada memoria organizativa (Walsh y Ungson, 1991),<br />
que afectará al tipo de conocimiento adquirido y <strong>la</strong> forma en que se<br />
interpreta y comparte. Es decir, lo que un individuo aprende en <strong>la</strong><br />
organización depende en gran medida del conocimiento que posean otros<br />
48
49<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
miembros en <strong>la</strong> organización (Simon, 1991), por lo que partimos de una<br />
base de conocimiento común. Jerez-Gomez et al., (2005) muestran de<br />
forma visual <strong>la</strong> continuidad y dinamismo del proceso de aprendizaje<br />
(figura 2.2).<br />
Figura 2.2: Proceso de aprendizaje organizativo<br />
NIVEL<br />
ETAPA<br />
DE<br />
APRENDIZAJE<br />
Adquisición Transferencia Integración<br />
Conocimiento<br />
Individual<br />
Fuente: Jerez-Gómez et al. (2005)<br />
Individual Grupo Organizativo<br />
Conocimiento<br />
Colectivo<br />
Jerez-Gómez et al. (2005) en su análisis del aprendizaje como proceso<br />
resaltan tres aspectos c<strong>la</strong>ve. El primero, el conocimiento y, más<br />
específicamente, su adquisición y creación, junto con <strong>la</strong> difusión e<br />
integración dentro de <strong>la</strong> organización, resultando un recurso estratégico<br />
c<strong>la</strong>ve (Grant, 1996; Zander y Kogut, 1995: Teece et al., 1997). Esto da lugar<br />
a <strong>la</strong> idea de que el aprendizaje organizativo tiene una naturaleza colectiva<br />
que va más allá del aprendizaje individual de <strong>la</strong>s personas (Shrivastava,<br />
1983). En segundo lugar, <strong>la</strong> creación y diseminación de nuevo<br />
conocimiento implica <strong>la</strong> existencia constante de cambios internos que<br />
pueden ocurrir en el nivel cognitivo o de comportamiento (Fiol y Lyles,<br />
1985). Y por último, estos cambios internos conducen a un proceso<br />
constante de mejora que permiten mantener o mejorar <strong>la</strong>s acciones de <strong>la</strong>s<br />
empresas (Fiol y Lyles, 1985; Garvin, 1983; Slocum et al., 1994) o incluso<br />
alcanzar una ventaja competitiva basada en su capacidad diferenciada de<br />
aprendizaje
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
2.3 CAPACIDAD DE APRENDIZAJE ORGANIZATIVO<br />
La capacidad de aprendizaje organizativo ha sido considerada como un<br />
factor c<strong>la</strong>ve para mejorar <strong>la</strong> eficacia y potencial organizativo para innovar<br />
y crecer (Jerez-Gómez et al., 2005). En consecuencia, <strong>la</strong>s organizaciones y<br />
académicos han incrementado su atención en desarrol<strong>la</strong>r <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo y crear organizaciones que aprenden.<br />
Consideraremos <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo como <strong>la</strong>s<br />
características organizativas y directivas que facilitan el aprendizaje<br />
organizativo o que permiten que una organización aprenda (Goh y<br />
Richards, 1997; Chiva y Alegre, 2009). Por lo que el concepto de capacidad<br />
de aprendizaje organizativo (Dibel<strong>la</strong> et al., 1996; Goh y Richards, 1997;<br />
Hult y Ferrell, 1997; Yeung et al., 1999; Jerez-Gómez et al., 2005; Chiva et<br />
al., 2007; Chiva y Alegre, 2009) subraya <strong>la</strong> importancia de los factores<br />
facilitadores del aprendizaje organizativo o <strong>la</strong> propensión de una<br />
organización para aprender.<br />
El aprendizaje organizativo se suele definir como un proceso (Sun, 2003),<br />
mientras que <strong>la</strong> organización que aprende se define a través de <strong>la</strong><br />
existencia de condiciones organizativas que favorecen el aprendizaje<br />
(Lähteenmäki et al., 2001). En consecuencia el análisis de los factores que<br />
facilitan el aprendizaje organizativo se ha tratado tradicionalmente en <strong>la</strong><br />
literatura de <strong>la</strong> organización que aprende. No obstante, tanto <strong>la</strong><br />
investigación de <strong>la</strong> literatura del aprendizaje organizativo como <strong>la</strong> de <strong>la</strong><br />
organización que aprende han sugerido factores que facilitan el<br />
aprendizaje (Chiva y Alegre, 2009).<br />
Para ello, siguiendo el p<strong>la</strong>nteamiento de Chiva y Alegre (2009), hemos<br />
tenido en cuenta <strong>la</strong>s dos perspectivas acerca de cómo aprenden <strong>la</strong>s<br />
organizaciones: perspectiva individual y perspectiva social, además de <strong>la</strong><br />
literatura de <strong>la</strong> organización que aprende.<br />
50
51<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
En <strong>la</strong> perspectiva individual se define al aprendizaje organizativo como una<br />
reacción ante un estímulo del entorno (un cambio en <strong>la</strong> competencia, en <strong>la</strong><br />
tecnología etc.), que puede ser debido a <strong>la</strong> influencia del paradigma<br />
estímulo – respuesta de <strong>la</strong> psicología cognitiva individual – o al deseo de<br />
solucionar un problema determinado. Además, los factores que lo facilitan<br />
o promueven tienden a centrarse en los individuos, o dicho de otro modo<br />
pretenden impulsar el aprendizaje individual.<br />
En <strong>la</strong> perspectiva social el aprendizaje organizativo no se produce como una<br />
reacción ante un estímulo del entorno, sino que se deben de tener en<br />
cuenta otros factores además del entorno. Otra diferencia con respecto a <strong>la</strong><br />
perspectiva individual es que se produce de forma constructiva (es decir,<br />
no sólo de forma reactiva). Los factores que lo posibilitan parecen<br />
centrarse en mayor medida en <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre <strong>la</strong>s personas de <strong>la</strong><br />
organización. Sin embargo, los individuos no son descartados en esta<br />
aproximación, por lo que los aspectos recogidos en <strong>la</strong> perspectiva<br />
cognitiva son válidos aquí. Por otro <strong>la</strong>do, desde <strong>la</strong> perspectiva individual<br />
parece que el aprendizaje organizativo pueda ser p<strong>la</strong>nificado. Sin<br />
embargo, desde <strong>la</strong> perspectiva social se hace hincapié en el componente<br />
espontáneo de éste (Huysman, 1999).<br />
2.3.1 Perspectiva individual<br />
En general, el aprendizaje organizativo es percibido como una forma de<br />
corregir errores y de adaptarnos a <strong>la</strong>s demandas del entorno. Algunos<br />
autores como Duncan y Weiss (1979) y Shrivastava (1983) lo afirman<br />
explícitamente. Así pues, <strong>la</strong>s organizaciones necesitan aprender para<br />
adaptarse de forma exitosa a los cambios del entorno. Cuanto mayor sea <strong>la</strong><br />
incertidumbre de un entorno, mayor será <strong>la</strong> necesidad de aprender<br />
(Huysman, 1999). De acuerdo con Fiol y Lyles (1985), <strong>la</strong> literatura del<br />
aprendizaje organizativo parece estar de acuerdo en que <strong>la</strong>s
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
organizaciones deben adaptarse a su entorno para ser competitivas e<br />
innovadoras.<br />
El motivo principal del aprendizaje organizativo, según esta perspectiva,<br />
sería <strong>la</strong> adaptación al entorno, incluyendo el aprovechamiento de<br />
oportunidades y <strong>la</strong> respuesta a <strong>la</strong>s amenazas. Esta suposición recoge<br />
únicamente <strong>la</strong> retroalimentación negativa, al suponer que el sistema<br />
organizativo no puede reorganizarse o auto - diseñarse (Hedberg, 1981).<br />
Así pues, Fiol y Lyles (1985) afirman que existen cuatro factores<br />
contextuales que afectan a <strong>la</strong> probabilidad de que el aprendizaje ocurra:<br />
una cultura enfocada al aprendizaje, una estrategia flexible, una estructura<br />
organizativa que permita <strong>la</strong> innovación y <strong>la</strong>s nuevas ideas, y por supuesto<br />
el entorno externo.<br />
Tannenbaum (1997) muestra que el entorno <strong>la</strong>boral o interno de una<br />
organización puede determinar el aprendizaje organizativo. Un entorno<br />
adecuado para el aprendizaje es aquel en el que <strong>la</strong>s personas conocen los<br />
objetivos y estrategias organizativas, desarrol<strong>la</strong>n tareas en <strong>la</strong>s que pueden<br />
aplicar lo que han aprendido, son responsables de su aprendizaje y están<br />
motivadas para ello, los errores son tolerados, <strong>la</strong>s nuevas ideas son<br />
valoradas y apoyadas por los directivos, supervisores y compañeros, <strong>la</strong>s<br />
estrategias apoyan el aprendizaje y el desarrollo de nuevas ideas y por<br />
último, <strong>la</strong> empresa es un lugar en el que se minimizan <strong>la</strong>s limitaciones al<br />
aprendizaje.<br />
Hedberg (1981) sugiere diversas acciones para facilitar el aprendizaje<br />
organizativo. La primera de el<strong>la</strong>s es <strong>la</strong> promoción de <strong>la</strong> experimentación, ya<br />
que ésta permite conocer mejor el entorno, aunque comenta que <strong>la</strong>s<br />
organizaciones al evitar <strong>la</strong> incertidumbre también suelen rechazar <strong>la</strong><br />
experimentación. Para ello, sugiere contratar a personas que acepten <strong>la</strong><br />
ambigüedad y <strong>la</strong> incertidumbre, así como recompensar <strong>la</strong> curiosidad. La<br />
segunda de sus acciones es <strong>la</strong> regu<strong>la</strong>ción de <strong>la</strong> conciencia, estar abiertos a<br />
52
53<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
diferentes estímulos del entorno para conseguir estar alerta. Según dicho<br />
autor, cuando <strong>la</strong> estabilidad es elevada se deben reducir los filtros, al igual<br />
que incrementar <strong>la</strong> heterogeneidad y el grado de conflicto. Sin embargo<br />
cuando <strong>la</strong>s organizaciones acaban de embarcarse en nuevas estrategias,<br />
deberían utilizarse los filtros e incrementar <strong>la</strong> homogeneidad. La tercera<br />
acción sería el diseño de entornos internos como el <strong>la</strong>boral y organizativo,<br />
buscando entre otras cosas <strong>la</strong> aceptación del riesgo y del error. Por último,<br />
propone <strong>la</strong> cuarta acción que es el logro de equilibrios dinámicos, a través de<br />
cierto grado de conflicto u oposición, heterogeneidad e insatisfacción.<br />
Hedberg (1981) basa muchas de estas ideas en el concepto de <strong>la</strong>s<br />
organizaciones que se auto - diseñan, cuya esencia es también utilizada<br />
por autores de <strong>la</strong> perspectiva social (Weick y Westley, 1996).<br />
2.3.2 Perspectiva social<br />
La perspectiva social entiende que el aprendizaje organizativo emerge de<br />
<strong>la</strong>s interacciones sociales. Siguiendo estas ideas, el motivo fundamental<br />
del aprendizaje organizativo no sería <strong>la</strong> adaptación al entorno, sino <strong>la</strong><br />
continua interacción por parte de los miembros de <strong>la</strong> organización con<br />
éste.<br />
De acuerdo con Daft y Weich (1984), esta visión implica abandonar <strong>la</strong><br />
presunción de que <strong>la</strong>s organizaciones deben adaptarse al entorno, así<br />
como dejar <strong>la</strong> idea de <strong>la</strong>s amenazas y oportunidades.<br />
A pesar de que Hedberg (1981) puede ser incluido dentro de <strong>la</strong><br />
perspectiva cognitiva, muchas de sus ideas entroncan con <strong>la</strong> perspectiva<br />
social. Este autor explica <strong>la</strong> existencia de lo que denomina<br />
“desaprendizaje” (unlearning), lo cual define como el descarte del<br />
conocimiento que a su vez permite <strong>la</strong> adquisición de nuevo conocimiento<br />
o el aprendizaje. Esta idea está basada en el concepto de Estímulo -<br />
Respuesta del aprendizaje individual, a <strong>la</strong> vez que tiene una naturaleza
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
reactiva, al desencadenarse dicho “desaprendizaje” a partir de <strong>la</strong><br />
existencia de problemas.<br />
Weick y Roberts (1993) utilizan el concepto de mente colectiva para<br />
explicar el desempeño organizativo en situaciones que requieren una alta<br />
fiabilidad, seguridad y una ausencia de errores (ejemplo: una compañía de<br />
aviación). La mente colectiva es definida como un patrón de<br />
interre<strong>la</strong>ciones en un sistema social. Así pues, cuando <strong>la</strong>s interre<strong>la</strong>ciones y<br />
<strong>la</strong> comprensión global aumenta, disminuyen los errores organizativos.<br />
Según Weick y Roberts (1993) una cultura que favorezca y fomente el<br />
individualismo, <strong>la</strong> supervivencia de los mejores, reactiva etc. no permitirá<br />
<strong>la</strong> subordinación de <strong>la</strong>s personas al sistema, ni <strong>la</strong> representación colectiva,<br />
con lo que <strong>la</strong> comprensión se reduce a <strong>la</strong> individualidad. La cooperación<br />
es fundamental para el desarrollo de <strong>la</strong> mente colectiva. Así pues, un<br />
desempeño fiable requiere el desarrollo de una mente colectiva en forma<br />
de sistema complejo basado en <strong>la</strong> confianza.<br />
Weick y Westley (1996) p<strong>la</strong>ntean que una yuxtaposición de orden y<br />
desorden precede al aprendizaje organizativo, lo cual es a su vez generado<br />
y facilitado por (1) el humor, (2) <strong>la</strong> improvisación y (3) <strong>la</strong>s pequeñas victorias.<br />
Dichos momentos de yuxtaposición lo son también de equilibrio entre <strong>la</strong><br />
exploración y <strong>la</strong> explotación (March, 1991; He y Wong, 2004; Ho et al.,<br />
2011), donde no todo es aprendizaje radical sino que también existe un<br />
aprendizaje más bien adaptador.<br />
(1) Estudios del humor en <strong>la</strong>s organizaciones sugieren que es un<br />
vehículo para expresar <strong>la</strong>s críticas y contradicciones de <strong>la</strong>s políticas y<br />
procesos, de <strong>la</strong>s ambigüedades y de <strong>la</strong>s conexiones no reconocidas (Hatch<br />
y Ehrlich, 1993). Barsoux (1996) argumenta que “el humor hace <strong>la</strong> confusión<br />
organizativa más soportable y concede atención a áreas olvidadas por <strong>la</strong> dirección.<br />
También aumenta <strong>la</strong> confianza, facilita el cambio e incrementa <strong>la</strong> pluralidad de<br />
visión. En definitiva, el humor ayuda a romper <strong>la</strong>s barreras entre <strong>la</strong>s personas y<br />
54
55<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
hace a una organización más participativa y sensible. Así pues, un entorno repleto<br />
de humor facilitará el aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> renovación.”<br />
(2) La improvisación consiste en variar, combinar y volver a combinar<br />
un conjunto de elementos dentro de un esquema que da coherencia al<br />
todo. Estos autores equiparan <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong> improvisación en <strong>la</strong>s<br />
conversaciones en <strong>la</strong> organización a <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong> improvisación en<br />
<strong>la</strong> música jazz. Según estos autores, <strong>la</strong>s personas reconocen esta<br />
experiencia como social, no como individual. Dichas experiencias son<br />
difíciles de repetir, en parte debido al componente de improvisación, por<br />
lo que parece complicado programar el aprendizaje.<br />
(3) En cuanto a <strong>la</strong>s pequeñas victorias, estos autores no parecen creer en<br />
los cambios dramáticos y revolucionarios, sino en los pequeños cambios<br />
que a su vez desembocan en otros, lo cual nos recuerda al concepto de<br />
realimentación positiva.<br />
Carley (1992) supone que <strong>la</strong> experiencia conduce al aprendizaje, y éste<br />
mejora el desempeño. La experiencia, afirma, es función de <strong>la</strong> posición de<br />
<strong>la</strong>s personas en <strong>la</strong> organización y de <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre éstas. Así pues,<br />
mantiene que organizaciones con diferentes estructuras deberían mostrar<br />
distintas habilidades para aprender. Además, <strong>la</strong> movilidad de los trabajadores<br />
afectará al aprendizaje, ya que afecta a <strong>la</strong> localización y situación de <strong>la</strong><br />
experiencia en <strong>la</strong> organización.<br />
Dicho estudio sugiere que mientras los equipos en general aprenden más<br />
rápido y mejor que <strong>la</strong>s jerarquías, a éstas últimas les afectan menos los<br />
índices altos de rotación o movilidad de personal, ya que sus directivos<br />
actúan como almacenes de conocimiento.<br />
Para Dixon (1997), el aprendizaje organizativo consistía en <strong>la</strong> construcción<br />
de significado colectivo, el cual se creaba a través del diálogo, lo cual era<br />
simi<strong>la</strong>r a los p<strong>la</strong>nteamientos de Weick y Roberts (1993) que afirman que<br />
para el desarrollo de <strong>la</strong> mente colectiva se requiere <strong>la</strong> estimu<strong>la</strong>ción de <strong>la</strong>s
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
interre<strong>la</strong>ciones de los miembros de <strong>la</strong> organización. Dichas interre<strong>la</strong>ciones son<br />
<strong>la</strong> pieza c<strong>la</strong>ve de <strong>la</strong> perspectiva cultural y su expresión c<strong>la</strong>ve reside en el<br />
concepto de diálogo (Dixon, 1997; Isaacs, 1993; Schein, 1993).<br />
Isaacs (1993: 24-25) explica que existen dos tipos de conversaciones, el<br />
debate y el diálogo. En el debate una parte gana y <strong>la</strong> otra pierde, mientras<br />
que el diálogo es un proceso de pensamiento e inquisición colectiva.<br />
Schein (1993: 40) p<strong>la</strong>ntea además que el diálogo es un elemento necesario<br />
para el entendimiento de <strong>la</strong>s culturas y subculturas de <strong>la</strong>s organizaciones<br />
y que el aprendizaje organizativo depende de dicha comprensión de <strong>la</strong><br />
cultura.<br />
Para Isaacs (1993) y Schein (1993) <strong>la</strong>s fases que nos llevan al pensamiento<br />
como grupo, al aprendizaje organizativo o lo que ellos denominan<br />
“metálogo”, son primeramente <strong>la</strong> suspensión, cuya idea radica en<br />
escucharse a uno mismo, aceptar <strong>la</strong>s diferencias con los demás y crear una<br />
confianza mutua, y en segundo lugar el diálogo, que trata de confrontar<br />
<strong>la</strong>s presunciones de <strong>la</strong>s personas, reve<strong>la</strong>ndo sentimientos y creencias.<br />
Asimismo, para promover <strong>la</strong> existencia de diálogo es necesario generar un<br />
sentimiento de ecuanimidad, de participación y motivación para <strong>la</strong><br />
búsqueda de soluciones, así como una predisposición a abandonar <strong>la</strong>s<br />
presunciones personales (Schein, 1993: 45).<br />
Elkjaer (1999) mantiene que el aprendizaje organizativo no puede ser<br />
p<strong>la</strong>nificado, ni puede surgir en un entorno de control y regu<strong>la</strong>ción.<br />
Considera que <strong>la</strong>s características que favorecerán este aprendizaje son: <strong>la</strong><br />
participación en <strong>la</strong> toma de decisiones por parte de los distintos niveles de<br />
<strong>la</strong> organización, el conocimiento de los miembros de <strong>la</strong> organización de <strong>la</strong><br />
historia o pasado, así como de <strong>la</strong>s directrices de futuro: misión, objetivos,<br />
estrategias etc. Y por último <strong>la</strong> experimentación.<br />
56
57<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
2.3.3. Las dimensiones de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo<br />
En este apartado realizamos una recopi<strong>la</strong>ción de <strong>la</strong> literatura y resumimos<br />
<strong>la</strong>s dimensiones más importantes de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo. Fundamentalmente, nos referiremos a trabajos basados en <strong>la</strong><br />
organización que aprende (Ulrich et al. 1993; Dibel<strong>la</strong> et al.1996; Hult y<br />
Ferrell, 1997; Goh y Richards, 1997; Yeung et al. 1999 y Jerez-Gómez et al.<br />
2005) y trabajos recientes que tratan tanto <strong>la</strong> literatura del aprendizaje<br />
organizativo como <strong>la</strong> literatura de <strong>la</strong> organización que aprende (Chiva et<br />
al. 2007 y Chiva y Alegre, 2009).<br />
Encontramos los factores facilitadores del aprendizaje organizativo (o <strong>la</strong>s<br />
variables contextuales que facilitan el aprendizaje) en <strong>la</strong> literatura de <strong>la</strong><br />
organización que aprende (Jerez-Gómez et al., 2005). Por ello, <strong>la</strong> mayoría<br />
de los trabajos que definen <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo lo<br />
hacen desde esta literatura (ejemplo Ulrich et al., 1993; Goh y Richards,<br />
1997; Jerez-Gómez et al. 2005). No obstante, existen trabajos que integran<br />
toda <strong>la</strong> literatura para definir <strong>la</strong>s dimensiones que componen el concepto<br />
que nos ocupa. Nos referimos a los trabajos de Chiva et al. (2007), Alegre y<br />
Chiva (2008) y Chiva y Alegre (2009). Estos trabajos recogen <strong>la</strong>s<br />
propuestas realizadas por <strong>la</strong> perspectiva social ( Brown y Duguid, 1991;<br />
Weick y Westley, 1996), <strong>la</strong> perspectiva individual (Hedberg, 1981; Popper<br />
y Lipshitz, 2000) y <strong>la</strong> organización que aprende (Ulrich et al., 1993; Pedler<br />
et al., 1997).<br />
Dado que en el trabajo de Chiva y Alegre (2009) se realiza una propuesta<br />
de medición para evaluar <strong>la</strong> capacidad del aprendizaje organizativo, nos<br />
basamos en el<strong>la</strong> para medir este concepto en los artículos empíricos que se<br />
presentan en esta <strong>tesis</strong>.<br />
Ulrich et al. (1993) consideran que <strong>la</strong>s dimensiones c<strong>la</strong>ve de <strong>la</strong> capacidad<br />
de aprendizaje organizativo son: 1) construcción de un compromiso con <strong>la</strong><br />
capacidad de aprendizaje organizativo - invertir en aprendizaje, hacer del
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
aprendizaje un elemento c<strong>la</strong>ve de <strong>la</strong> estrategia, etc. -; 2) trabajar para crear<br />
ideas con impacto - adquisición de competencias, experimentación,<br />
observación del entorno, mejora continua-; y por último 3) trabajar para<br />
generalizar ideas con impacto. Goh y Richards (1997) p<strong>la</strong>ntean que <strong>la</strong>s<br />
dimensiones de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo son: 1) <strong>la</strong><br />
c<strong>la</strong>ridad de los objetivos y misión, 2) liderazgo comprometido y<br />
delegación, 3) experimentación, 4) transferencia de conocimiento y 5)<br />
trabajo en equipo y resolución de problemas en grupo. Hult y Ferrell<br />
(1997) proponen cuatro orientaciones: equipo, sistema, aprendizaje y<br />
memoria. Jerez-Gómez et al. (2005) describen 4 dimensiones: compromiso<br />
con el aprendizaje, perspectiva sistémica, apertura y experimentación, y<br />
transferencia de conocimiento.<br />
Por último, y tras una exhaustiva revisión de <strong>la</strong> literatura, Chiva et al.<br />
(2007) y Chiva y Alegre (2009) identificaron cinco factores fundamentales<br />
que facilitan el aprendizaje organizativo: experimentación, aceptación del<br />
riesgo, interacción con el entorno, diálogo y <strong>la</strong> toma de decisiones<br />
participativa. Estos autores desarrol<strong>la</strong>n estas dimensiones para crear un<br />
instrumento de medida de <strong>la</strong> capacidad del aprendizaje organizativo. En<br />
<strong>la</strong> presente <strong>tesis</strong> utilizaremos este instrumento de medida en dos de los<br />
tres artículos.<br />
2.3.3.1 Experimentación<br />
La experimentación es, sin duda, <strong>la</strong> dimensión más respaldada por <strong>la</strong><br />
literatura (Hedberg, 1981; Nevis et al., 1995; Tannenbaum, 1997; Weick y<br />
Westley, 1996; Ulrich et al., 1993; Goh y Richards, 1997; Pedler et al., 1997).<br />
Nevis et al. (1995) consideran que <strong>la</strong> experimentación implica intentar<br />
hacer nuevas cosas, mostrar curiosidad sobre cómo funcionan <strong>la</strong>s cosas, o<br />
llevar a cabo cambios en los procesos de trabajo. La experimentación<br />
implica <strong>la</strong> búsqueda de soluciones innovadoras a los problemas, basadas<br />
en el posible uso de distintos métodos y procedimientos (Garvin, 1993).<br />
58
59<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Weick y Westley (1996) explican que para el aprendizaje organizativo son<br />
más importantes los pequeños cambios o experimentaciones (pequeñas<br />
victorias), que los grandes cambios.<br />
El flujo continuo de ideas, <strong>la</strong> experimentación, o <strong>la</strong>s propuestas que<br />
desafían el orden establecido, son dimensiones incluidas en los trabajos<br />
sobre el entorno creativo (Amabile et al., 1996; Isaksen, 1999). La<br />
experimentación es considerada por estos autores como una manifestación<br />
del entorno creativo. Otros aspectos vincu<strong>la</strong>dos a dicho entorno son el<br />
sentido del humor (Weick y Westley, 1996), el nivel de autonomía y <strong>la</strong><br />
implicación de <strong>la</strong>s personas en <strong>la</strong> mejora de los procesos, es decir personas<br />
que desean aprender y mejorar (Hedberg, 1981; Popper y Lipshitz, 2000),<br />
lo cual es asociado por Tannenbaum (1997) con una formación de calidad<br />
que fomente el aprendizaje.<br />
2.3.3.2. Aceptación del riesgo<br />
La exploración es asociada habitualmente al aprendizaje organizativo e<br />
incluye actividades y características tales como <strong>la</strong> búsqueda, <strong>la</strong> variedad,<br />
experimentación, <strong>la</strong> flexibilidad, el descubrimiento, <strong>la</strong> innovación y <strong>la</strong><br />
aceptación del riesgo (March, 1991). Existen diversas acciones que son<br />
sugeriedas para facilitar el aprendizaje organizativo, entre estas destaca el<br />
diseño de entornos que asuman <strong>la</strong> toma de riesgos y acepten los errores<br />
(Hedberg, 1981). La aceptación o toma del riesgo implica <strong>la</strong> posibilidad de<br />
errores y fracasos. Kouzes y Posner (1987) enfatizan que el aprendizaje de<br />
los éxitos y de los errores generados por <strong>la</strong> toma de riesgos es <strong>la</strong> l<strong>la</strong>ve que<br />
abre <strong>la</strong> puerta de <strong>la</strong>s oportunidades empresariales.<br />
Sitkin (1996: 541) llega a afirmar que el fracaso es un requisito esencial<br />
para un aprendizaje organizativo eficaz, para lo cual examina los<br />
beneficios y desventajas del éxito y del error. Si el objetivo es promover<br />
estabilidad y un desempeño a corto p<strong>la</strong>zo, el éxito es aconsejable, ya que<br />
éste tiende a alentar el mantenimiento del statu quo. Los beneficios del
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
error son, según Sitkin (1996: 547-551), <strong>la</strong> tolerancia al riesgo, estimu<strong>la</strong>ción<br />
de <strong>la</strong> atención sobre los problemas y búsqueda de soluciones, facilidad de<br />
reconocimiento e interpretación de los problemas, y variación en <strong>la</strong>s<br />
respuestas organizativas. A partir de este trabajo, muchos autores han<br />
subrayado <strong>la</strong> importancia de tomar riesgos y asumir errores para que <strong>la</strong>s<br />
organizaciones aprendan (Popper y Lipshitz, 2000; Ulrich et al., 1993).<br />
2.3.3.3. Interacción con el entorno<br />
De acuerdo con Nevis et al. (1995), los investigadores han enfatizado <strong>la</strong><br />
importancia de <strong>la</strong> observación, apertura e interacción con el entorno (ej.<br />
Ulrich et al., 1993; Goh y Richards, 1997).<br />
Las dimensiones de interacción con el entorno y el diálogo hacen hincapié<br />
a <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong>s conexiones para el aprendizaje organizativo. Las<br />
interacciones no son simplemente <strong>la</strong> manera en que el conocimiento<br />
individual es compartido, tal y como lo entienden Huber (1991), Kim<br />
(1993) y Crossan et al. (1999). En línea con <strong>la</strong>s ideas de Oswick et al. (2000),<br />
<strong>la</strong>s interacciones sugieren que el conocimiento está siempre evolucionado<br />
y cambiando y que <strong>la</strong> razón por <strong>la</strong> que <strong>la</strong>s personas interactúan es para<br />
mejorar y desarrol<strong>la</strong>r su conocimiento.<br />
Las re<strong>la</strong>ciones y conexiones con el entorno son muy importantes, ya que <strong>la</strong><br />
organización intenta evolucionar simultáneamente con su entorno<br />
cambiante. Hedberg (1981) considera al entorno como el desencadenante<br />
del aprendizaje organizativo. Los entornos más turbulentos generan<br />
organizaciones con mayor necesidad y deseos de aprender (Popper y<br />
Lipshitz, 2000).<br />
2.3.3.4. Diálogo<br />
Isaacs (1993) y Schein (1993) rechazan <strong>la</strong> idea de que el aprendizaje<br />
organizativo pueda existir sin diálogo. Dixon (1997: 25) entiende que en el<br />
proceso de aprendizaje organizativo, el diálogo es de vital importancia.<br />
60
61<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Aunque el diálogo es visto a menudo como el proceso a través del cual se<br />
vincu<strong>la</strong> el aprendizaje individual y organizativo, Oswick et al. (2000)<br />
demuestra que es el diálogo el que genera tanto el aprendizaje individual<br />
como el organizativo, creando significado y comprensión. La visión del<br />
aprendizaje organizativo como una construcción social implica el<br />
desarrollo de una comprensión común, desde una base social y a partir de<br />
<strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre <strong>la</strong>s personas (Brown y Duguid, 1991: 47).<br />
Los autores de <strong>la</strong> perspectiva social (Brown y Duguid, 1991; Weick y<br />
Westley, 1996) subrayan <strong>la</strong> importancia del diálogo y <strong>la</strong> comunicación<br />
para el aprendizaje organizativo. Nevis et al. (1995) mantienen que el<br />
aprendizaje es función de <strong>la</strong>s interacciones diarias y espontáneas entre <strong>la</strong><br />
gente. La oportunidad de conocer personas de otras áreas y grupos<br />
incrementa el aprendizaje. De forma simi<strong>la</strong>r, Goh y Richards (1997)<br />
aconsejan apoyar el trabajo en equipo y <strong>la</strong> resolución de problemas en<br />
grupo, haciendo especial hincapié en los equipos multifuncionales. Al<br />
trabajar en equipo el conocimiento puede ser compartido y desarrol<strong>la</strong>do<br />
entre sus miembros (Senge, 1990; Garvin, 1993).<br />
Easterby-Smith et al. (2000: 792) mantienen que <strong>la</strong> literatura aparta una<br />
visión del diálogo donde se busca el consenso y es integradora, y se dirige<br />
hacia otra donde se busca el pluralismo, e incluso el conflicto. Oswick et<br />
al. (2000) advierten que el auténtico diálogo provoca aprendizaje<br />
organizativo porque crea, en lugar de suprimir, percepciones plurales.<br />
Personas o grupos de personas con diferentes visiones que se unen para<br />
resolver un problema o para trabajar, crean una comunidad dialogante.<br />
El pluralismo, <strong>la</strong> heterogeneidad, <strong>la</strong> variedad son aspectos que no han sido<br />
tradicionalmente tomados en cuenta por <strong>la</strong> literatura de aprendizaje<br />
organizativo, especialmente por <strong>la</strong> perspectiva cognitiva. No obstante, y<br />
según Easterby-Smith et al. (2000), dichos aspectos han ido atrayendo cada<br />
vez más <strong>la</strong> atención de los académicos de nuestra área (Weick y Westley,
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
1996; Pedler et al., 1997; Nevis et al., 1995), a pesar de que algunos trabajos<br />
clásicos ya lo mencionaran (Hedberg, 1981; March, 1991).<br />
2.3.3.5. Participación o toma de decisiones participativa<br />
La política no es un problema que deba ser solucionado si queremos que<br />
el aprendizaje tenga lugar, sino una característica del proceso social<br />
(Argyris, 1986). Puede ser definida como <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones y negociaciones<br />
entre los agentes con distintos intereses. El medio a través del cual dichos<br />
conflictos se resuelven es el poder (Morgan, 1997). El poder determina<br />
quién consigue qué, cuándo y cómo. De acuerdo con Morgan (1997: 156)<br />
cuando introducimos términos como autocracia o democracia para<br />
describir <strong>la</strong> naturaleza de una organización estamos dibujando<br />
paralelismos entre <strong>la</strong>s organizaciones y los sistemas políticos. En cada una<br />
de estas pa<strong>la</strong>bras el sufijo –cracia, derivado del griego kratia, significa<br />
poder y se une a un prefijo que indica <strong>la</strong> naturaleza de ese poder.<br />
Coopey y Burgoyne (2000) mantienen que <strong>la</strong> política es un aspecto<br />
fundamental del aprendizaje y para que <strong>la</strong> variedad favorezca el<br />
aprendizaje, tal y como hemos apuntado anteriormente, debe prevalecer<br />
un sistema democrático y participativo. La participación es definida como<br />
el nivel de influencia que los empleados tienen en el proceso de toma de<br />
decisiones (Cotton et al., 1988). Las organizaciones democráticas (Morgan,<br />
1997) se definen a través de formas participativas de gobierno y<br />
co<strong>la</strong>boración. Scott-Ladd y Chan, (2004) mantienen que <strong>la</strong> participación<br />
facilita el aprendizaje organizativo.<br />
En esta línea, distintos trabajos mencionan <strong>la</strong> importancia del compromiso<br />
de los líderes y directivos en el aprendizaje (Goh y Richards, 1997; Popper<br />
y Lipshitz, 2000; Nevis et al. 1995; Tannenbaum, 1997). Goh y Richards<br />
(1997) mantienen que los directivos deben estar comprometidos con el<br />
aprendizaje, para lo cual necesitan crear un clima de igualitarismo y<br />
confianza donde el grupo pueda aprender. La participación es<br />
62
63<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
considerada como el elemento básico para crear dicho clima (Nevis et al.,<br />
1995; Goh y Richards, 1997; Pedler et al., 1997).<br />
La toma de decisiones participativa se refiere al nivel de influencia que<br />
tienen los trabajadores en el proceso de toma de decisiones (Cotton et al.,<br />
1988). Las organizaciones ponen en práctica <strong>la</strong> toma de decisiones<br />
participativa para beneficiarse de los efectos motivacionales que tienen<br />
una mayor implicación de los trabajadores, <strong>la</strong> satisfacción <strong>la</strong>boral y el<br />
compromiso organizativo (Daniels y Bailey, 1999; Latham et al., 1994; Witt<br />
et al., 2000; Scott-Ladd y Chan, 2004).<br />
2.4 CAPACIDADES DINÁMICAS<br />
Los primeros trabajos de <strong>la</strong> perspectiva basada en recursos tenían un<br />
carácter fundamentalmente estático; persiguiendo en primer lugar,<br />
determinar los requisitos de los recursos y capacidades que generan<br />
ventajas competitivas sostenibles (Barney, 1991; Grant, 1991; Peteraf, 1993;<br />
Amit y Schomaker, 1993), y en segundo lugar, identificarlos y evaluarlos.<br />
Posteriormente, los investigadores de esta corriente adaptaron su enfoque<br />
a los mercados turbulentos (Teece et al., 1997; Zollo y Winter, 2002; Helfat<br />
et al. 2007; Easterby-Smith et al., 2009). En estos mercados, en los cuales el<br />
entorno es sumamente cambiante, son <strong>la</strong>s capacidades dinámicas <strong>la</strong>s que<br />
resultan ser fuente de ventaja competitiva sostenible, ya que mediante<br />
éstas los directivos pueden afrontar los cambios de forma rápida.<br />
Si observamos este concepto desde un punto de vista totalmente interno,<br />
observamos que algunos usuarios de <strong>la</strong> teoría de recursos y capacidades<br />
distinguen entre los recursos que pertenecen totalmente a <strong>la</strong> empresa,<br />
como el capital físico o los nombres de marcas, y aquellos recursos que son<br />
menos tangibles como <strong>la</strong>s rutinas organizativas y <strong>la</strong>s capacidades (Teece et<br />
al. 1997). Del mismo modo, también se puede distinguir entre recursos<br />
estáticos y dinámicos. Los estáticos son aquellos que pueden ser<br />
considerados como un stock de activos y que tienen una vida finita
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
(Rumelt, 1984; Barney 1986b, 1991; Peteraf, 1993). Los recursos dinámicos<br />
pueden residir en <strong>la</strong>s capacidades, así como en <strong>la</strong> capacidad de <strong>la</strong><br />
organización de aprender, lo cual genera oportunidades adicionales a<br />
través del tiempo (Collis, 1994; Teece et al., 1997).<br />
El “working paper” de Teece et al. (1990) es, probablemente, <strong>la</strong> primera<br />
contribución al desarrollo explícito de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas. En este<br />
working paper (1990, p.11) indican: “nuestra visión de <strong>la</strong> empresa es algo más<br />
rica que <strong>la</strong> perspectiva basada en los recursos (…) no es sólo el conjunto de<br />
recursos lo que importa, sino el mecanismo por el cual <strong>la</strong>s empresas aprenden y<br />
acumu<strong>la</strong>n nuevas habilidades y capacidades, así como <strong>la</strong>s fuerzas que limitan <strong>la</strong><br />
velocidad y dirección de este proceso”. Estas ideas se publicaron formalmente<br />
por primera vez en 1994. En esta publicación se explicaba que <strong>la</strong><br />
perspectiva basada en los recursos no era capaz de aportar luz a cómo<br />
algunas empresas de éxito demostraban <strong>la</strong> capacidad de respuesta<br />
oportuna, su innovación de productos era rápida y flexible y poseían <strong>la</strong><br />
capacidad de gestión adecuada para coordinar y redistribuir eficazmente<br />
<strong>la</strong>s competencias internas y externas. Apuntaban que es esencial<br />
considerar <strong>la</strong> naturaleza de los cambios del entorno externo y por lo tanto<br />
el papel de <strong>la</strong> gestión estratégica, que es principal para <strong>la</strong> “adaptación,<br />
integración y reconfiguración de <strong>la</strong>s habilidades de <strong>la</strong> organización internas y<br />
externas”. Su argumento deriva de que muchas empresas de éxito no<br />
fueron capaces de adaptarse al entorno cambiante.<br />
Posteriormente, Teece et al. (1997) recogen sus ideas previas y proponen<br />
una definición para <strong>la</strong>s capacidades dinámicas: “<strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa<br />
de integrar, construir y reconfigurar <strong>la</strong>s competencias internas y externas para<br />
hacer frente a los entornos que cambian rápidamente”. No obstante, pese a que<br />
Teece, Pisano y Shuen parecen ser los instigadores de <strong>la</strong> perspectiva de<br />
capacidades dinámicas, Ambrosini y Bowman, (2009) afirman que su<br />
trabajo parece estar inspirado en el de Nelson y Winter (1982); “Una teoría<br />
evolutiva del cambio estratégico”, en el cual se aborda el rol de <strong>la</strong>s rutinas y <strong>la</strong><br />
64
65<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
manera en que dan forma y restringen el modo en que <strong>la</strong>s empresas crecen<br />
y hacen frente a entornos cambiantes.<br />
Algo más tarde, Zollo y Winter (2002) indican que <strong>la</strong> definición de Teece et<br />
al. (1997) es tautológica al definir <strong>la</strong> capacidad como una habilidad y<br />
presentan esta otra definición de capacidad dinámica: “patrón de actividad<br />
colectiva aprendido y estable, a través del cual <strong>la</strong> organización genera y modifica<br />
sistemáticamente sus rutinas operativas, en <strong>la</strong> búsqueda de una mejora de <strong>la</strong><br />
eficacia”.<br />
No obstante, podríamos c<strong>la</strong>sificar a <strong>la</strong> mayoría de definiciones de<br />
capacidades dinámicas en dos grupos; aquellos autores que <strong>la</strong>s definen<br />
de forma prescriptiva, es decir, asumiendo que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas<br />
son siempre buenas y son fuente de ventaja competitiva sostenible y<br />
aquellos que no incluyen “fuente de ventaja competitiva sostenible” en su<br />
definición. Entre los primeros, además de <strong>la</strong> definición de Teece et al.<br />
(1997) destacan <strong>la</strong>s siguientes:<br />
Griffith y Harbey (2001, p.597) indican que “una capacidad dinámica global es<br />
<strong>la</strong> creación de dificultades para imitar <strong>la</strong> combinación de recursos, incluyendo <strong>la</strong><br />
coordinación efectiva de re<strong>la</strong>ciones inter-organizativas en una base global que<br />
proporciona a <strong>la</strong> empresa una ventaja competitiva”.<br />
Lee et al. (2002, p.734) mencionan que “<strong>la</strong>s capacidades dinámicas son<br />
concebidas como fuente de ventaja competitiva en regímenes Schumpeterianos de<br />
cambios rápidos”.<br />
Wang y Ahmed (2007, p.35) definen <strong>la</strong>s capacidades dinámicas como “<strong>la</strong><br />
orientación del comportamiento de una empresa para integrar, reconfigurar,<br />
renovar y recrear sus recursos y capacidades constantemente y, sobre todo,<br />
mejorar y reconstruir sus capacidades centrales en respuesta a los cambios del<br />
entorno para lograr y mantener una ventaja competitiva”.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Entre los segundos (es decir, entre aquellos que no incluyen a <strong>la</strong>s ventajas<br />
competitivas sostenibles en su definición) nos encontramos, entre otras, <strong>la</strong>s<br />
siguientes:<br />
Eisenhardt y Martin (2000, p.1107) han utilizado <strong>la</strong> siguiente definición:<br />
“<strong>la</strong>s capacidades dinámicas son los procesos empresariales que integran,<br />
reconfiguran, obtienen y apartan recursos para ajustarse a los cambios del<br />
mercado o incluso para generarlos. Son, por lo tanto, <strong>la</strong>s rutinas organizativas y<br />
estratégicas mediante <strong>la</strong>s cuales <strong>la</strong>s empresas alcanzan nuevas configuraciones de<br />
recursos en función de <strong>la</strong> evolución de los mercados”.<br />
Zahra et al. (2006, p.918) nos indican que son “<strong>la</strong>s habilidades de reconfigurar<br />
los recursos y rutinas de <strong>la</strong> empresa en <strong>la</strong> forma prevista y adecuada para <strong>la</strong> toma<br />
de decisiones”.<br />
La diferencia entre ambos grupos de definiciones es que podemos<br />
considerar a <strong>la</strong>s primeras como tautológicas; si <strong>la</strong> empresa tiene<br />
capacidades dinámicas, tendrá buenos resultados y si tiene buenos<br />
resultados esto se deberá a <strong>la</strong>s capacidades dinámicas (Priem y Butler,<br />
2001; Cepeda y Vera, 2007).<br />
Helfat et al. (2007, p.1) definen a <strong>la</strong>s capacidades dinámicas como “<strong>la</strong><br />
capacidad de una organización de crear a propósito, extender, o modificar su base<br />
de recursos”. Easterby- Smith et al. (2009) afirman que esta definición es lo<br />
suficiente precisa para ser útil y a su vez suficiente amplia para permitir a<br />
los estudiosos aprender más acerca de <strong>la</strong> naturaleza y el origen de <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas a través de <strong>la</strong> investigación. Además, no entra en<br />
conflicto con <strong>la</strong>s definiciones dadas por Teece et al. (1997) sobre que <strong>la</strong><br />
perspectiva de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas permite a <strong>la</strong> empresa responder<br />
a los cambios del entorno ni con <strong>la</strong> amplia definición de Eisenhardt y<br />
Martin (2000) sobre que el<strong>la</strong>s pueden también ser fuente de cambio<br />
disruptivo. Apunta hacia que <strong>la</strong> asociación directa entre ventaja<br />
competitiva y capacidades dinámicas es tautológica del mismo modo que<br />
66
67<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
lo es <strong>la</strong> perspectiva de recursos y capacidades. Al mismo tiempo estos<br />
autores rechazan <strong>la</strong> visión de que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas son algo más<br />
que <strong>la</strong>s mejores prácticas con equifinal efecto en el performance.<br />
Argumentan que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas contribuirán a <strong>la</strong> ventaja<br />
competitiva dependiendo del mismo tipo de factores identificado por<br />
Peteraf y Barney (2003) para <strong>la</strong> RBV. Igualmente, indican que <strong>la</strong>s<br />
herramientas analíticas desde <strong>la</strong> RBV deben ser aplicadas a <strong>la</strong> cuestión de<br />
si determinadas capacidades dinámicas confieren una ventaja competitiva<br />
sostenible (Amit y Schoemaker, 1993; Dierickx y Cool, 1989).<br />
Mientras Helfat et al. (2007) desvincu<strong>la</strong>n a <strong>la</strong>s ventajas competitivas de <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas, otros investigadores conectan a <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas con <strong>la</strong>s ventajas competitivas pero de una forma indirecta. Por<br />
ejemplo, Zott (2003, p.98) argumenta que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas están<br />
indirectamente re<strong>la</strong>cionadas con el desempeño de <strong>la</strong> empresa en <strong>la</strong><br />
medida en que tratan de lograr el cambio de un conjunto de recursos de <strong>la</strong><br />
empresa, así como <strong>la</strong>s rutinas y <strong>la</strong>s competencias que afectarán al<br />
desempeño económico. Sin embargo, Helfat et al. (2007) indican que<br />
aunque es cierto que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas afectan a los recursos,<br />
rutinas y competencias, esta renovación no tiene por qué ser valiosa, con<br />
lo que no tiene por qué crear ningún recurso VRIO, es decir, el nuevo set<br />
de recursos puede que solo proporcione paridad competitiva o incluso sea<br />
irrelevante al mercado. Del mismo modo, el efecto de <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas en <strong>la</strong>s ventajas y el performance podría ser negativo. Tras estas<br />
deducciones, Ambrosini y Bowman (2009) nos proponen que <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas nos pueden llevar a 4 posibles resultados (figura<br />
2.3). En primer lugar, si <strong>la</strong> base de recursos resultante es inimitable por un<br />
periodo <strong>la</strong>rgo de tiempo y <strong>la</strong>s rentas son sostenibles podríamos obtener<br />
ventajas competitivas sostenibles. En segundo lugar, podríamos obtener<br />
ventajas competitivas pero no sostenibles. En tercer lugar conseguiríamos<br />
paridad competitiva dentro de <strong>la</strong> industria. Y por último, <strong>la</strong>s capacidades
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
dinámicas nos conducirían al fracaso si el nuevo stock de recursos es<br />
irrelevante para el mercado.<br />
Una vez concluido que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas pueden llevar a 4<br />
posibles resultados, Helfalt et al. (2007) Indican que los resultados de <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas deben ser evaluados y para ello proponen dos<br />
herramientas (varas de medición); <strong>la</strong> adaptación evolutiva, que se refiere<br />
a lo adecuada que es <strong>la</strong> capacidad para <strong>la</strong> creación, ampliación y<br />
modificación de <strong>la</strong> base de recursos, y <strong>la</strong> adaptación técnica que mide <strong>la</strong><br />
dimensión de <strong>la</strong> calidad del desempeño de <strong>la</strong> capacidad (es decir, en qué<br />
medida <strong>la</strong> capacidad permite los resultados previstos). De este modo<br />
distinguiríamos entre “doing the right things” (adaptación evolutiva) y<br />
“doing things right” (adaptación técnica).<br />
Ambrosini y Bowman (2009) proponen <strong>la</strong> siguiente figura (figura 2.3) en <strong>la</strong><br />
que se observa los resultados a los que pueden conducir los procesos de<br />
creación de valor. Estos mismos autores argumentan que existen<br />
facilitadores e inhibidores internos y externos de <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas. Explican que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas son procesos<br />
moldeados por posiciones y trayectorias. Estos procesos incluyen<br />
coordinación e integración, aprendizaje y reconfiguración. Las posiciones<br />
y trayectorias son fuerzas internas y externas que facilitan y obstaculizan<br />
<strong>la</strong>s capacidades dinámicas:<br />
- La posición interna se refiere a los activos de <strong>la</strong> empresa, es decir,<br />
sus activos tecnológicos, complementarios, financieros, <strong>la</strong> reputación y<br />
activos estructurales. La posición externa se refiere al vis a vis de <strong>la</strong><br />
empresa con el entorno institucional y el mercado. Teece et al. (1997)<br />
explican que <strong>la</strong> posición de <strong>la</strong> empresa influirá en <strong>la</strong> postura estratégica y<br />
en cómo se podrá obtener <strong>la</strong> ventaja competitiva.<br />
- La trayectoria hace referencia a <strong>la</strong> historia de <strong>la</strong> empresa y al<br />
conocimiento que posea.<br />
68
69<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
En cuanto a los factores externos, Ambrosini y Bowman (2009)<br />
argumentan que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas pueden variar con los niveles<br />
de dinamismo del entorno. Aragon-Correa y Sharma (2003) apuntan hacia<br />
una perspectiva contingente y reconocen que <strong>la</strong>s características del<br />
entorno como <strong>la</strong> incertidumbre, <strong>la</strong> complejidad y <strong>la</strong> munificiencia influyen<br />
en el desarrollo de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas. Winter (2003) también<br />
indica que el cambio en <strong>la</strong> industria actúa como factor contingente en <strong>la</strong><br />
decisión de desarrol<strong>la</strong>r y desplegar capacidades dinámicas. Madhow y<br />
Osegowitsch (2000) mostraron en su estudio empírico que <strong>la</strong> dependencia<br />
de <strong>la</strong> trayectoria (“path dependence”) es un fenómeno importante en <strong>la</strong><br />
perspectiva de capacidades dinámicas. Su estudio reve<strong>la</strong> que el país de<br />
origen de <strong>la</strong> compañía es un factor que forma parte de <strong>la</strong> historia de <strong>la</strong><br />
empresa, su trayectoria y posición y, como resultado, el impacto en <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas que aplican. Estos autores explican que el país de<br />
<strong>la</strong> empresa forma <strong>la</strong> experiencia de <strong>la</strong> empresa y consecuentemente el<br />
conocimiento y capacidades que adquiere.<br />
Los factores internos que afectan a <strong>la</strong>s capacidades dinámicas, según<br />
Ambrosini y Bowman (2009) incluyen a; (1) los directivos, (2) <strong>la</strong> posición y<br />
trayectoria, (3) el capital social, (4) el liderazgo y (5) <strong>la</strong> confianza.<br />
(1) Que los directivos juegan un rol importante en <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong><br />
empresa para adaptarse a <strong>la</strong>s nuevas circunstancias es algo que ha sido<br />
ampliamente estudiado (Eisenhardt y Martin, 2000; Tripsas y Gavetti,<br />
2000; Adner y Helfat, 2003; Helfat et al. 2007), ya que uno de los aspectos<br />
principales del rol gerencial es desarrol<strong>la</strong>r capacidades dinámicas (Harreld<br />
et al. 2007). La capacidad para realizar esto dependerá de su motivación,<br />
habilidad y experiencia (Zahra et al. 2006). Así como de su capacidad de<br />
interpretar el entorno de negocios, que será tan importante como el<br />
dinamismo del entorno en sí. Es decir, <strong>la</strong> c<strong>la</strong>ve estará en su capacidad de<br />
juzgar qué capacidades desarrol<strong>la</strong>r y cómo y dónde desarrol<strong>la</strong>r<strong>la</strong>s
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
(Aragon-Correa y Sharma, 2003) que se verá influenciada por su<br />
experiencia pasada.<br />
(2) En <strong>la</strong> posición y trayectoria interna destacan dos aspectos en el<br />
desarrollo de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas: el aprendizaje y los recursos<br />
existentes. Eisenhardt y Martin (2000) explican que los mecanismos de<br />
aprendizaje dependientes de <strong>la</strong> trayectoria (path dependence) forman <strong>la</strong><br />
creación y desarrollo de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas. Zollo y Winter (2002)<br />
añaden que <strong>la</strong> evolución del ciclo de conocimiento permite a <strong>la</strong>s empresas<br />
el cambio de <strong>la</strong> forma de realizar <strong>la</strong>s cosas. Estos autores proponen que <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas emergen desde <strong>la</strong> co-evolución de los procesos de<br />
acumu<strong>la</strong>ción de experiencia tácita con <strong>la</strong> articu<strong>la</strong>ción y codificación de<br />
actividades de conocimiento explícito. Lavie (2006) sostiene que <strong>la</strong><br />
existencia de recursos así como sus características (complejidad,<br />
ambigüedad, integración e interdependencia), influirá en los tipos de<br />
capacidades dinámicas que puedan ser desarrol<strong>la</strong>das así como su<br />
efectividad. Todo esto sugiere que, en muchos casos, tanto <strong>la</strong> creación de<br />
capacidades dinámicas, como el desarrollo a través del aprendizaje y <strong>la</strong><br />
repetición serán dependientes de <strong>la</strong> trayectoria (path dependence).<br />
(3) El capital social y en particu<strong>la</strong>r los vínculos sociales individuales<br />
tanto internos como externos, permiten el intercambio de información, <strong>la</strong><br />
innovación y nuevas formas de pensar que a su vez ayuda a los gerentes a<br />
comprender <strong>la</strong> adquisición, integración y liberación de recursos (Blyler y<br />
Coff, 2003).<br />
(4) Otro factor importante para facilitar <strong>la</strong>s capacidades dinámicas es el<br />
liderazgo, así como <strong>la</strong> capacidad de hacer y deshacer compromisos,<br />
asumir riesgos y crear una cultura de aprendizaje organizacional<br />
(Rosenbloom, 2000).<br />
(5) En cuanto a <strong>la</strong> confianza, Pablo et al. (2007) ofrecen evidencia de que<br />
además del liderazgo, <strong>la</strong> confianza es esencial en <strong>la</strong> creación de un clima<br />
70
71<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
organizacional propicio para aprender a utilizar <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas, así como para <strong>la</strong> creación de recursos en general.<br />
Figura 2.3: Capacidades dinámicas<br />
Entorno Externo/ trayectorias y posiciones<br />
Complejidad<br />
Incertidumbre<br />
Munificencia<br />
Características del país de origen<br />
Procesos de creación de valor Salidas<br />
Procesos<br />
de<br />
creación<br />
DC<br />
Capacidades<br />
dinámicas<br />
Base de<br />
recursos<br />
Ventaja competitiva sostenible<br />
Ventaja competitiva temporal<br />
Paridad competitiva<br />
Fracaso<br />
Entorno Interno/trayectorias y posiciones<br />
- Comportamiento empresarial: Percepciones, racionalidad limitada,<br />
proactividad, liderazgo.<br />
- El conocimiento complementario de <strong>la</strong> organización y recursos<br />
- Capital social<br />
Fuente: Ambrosini y Bowman (2009)<br />
Wang y Ahmed (2007) explican que los factores que componen <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas más importantes son; <strong>la</strong> capacidad de adaptación,<br />
<strong>la</strong> capacidad de absorción y <strong>la</strong> capacidad de innovación. Estos factores<br />
permiten sustentar <strong>la</strong> capacidad de <strong>la</strong> empresa para integrar, renovar y<br />
reconfigurar <strong>la</strong>s capacidades dinámicas con el entorno externo. Los tres<br />
factores están corre<strong>la</strong>cionados, pero son conceptualmente distintos. La<br />
capacidad de adaptación enfatiza <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de adaptarse<br />
oportunamente al entorno mediante <strong>la</strong> flexibilidad de los recursos y<br />
capacidades. La capacidad de absorción resalta <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong><br />
asimi<strong>la</strong>ción del conocimiento externo y <strong>la</strong> combinación con el<br />
conocimiento interno para ponerlo en práctica en <strong>la</strong> empresa. La<br />
capacidad de innovación liga de forma efectiva <strong>la</strong> capacidad de
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
innovación inherente a <strong>la</strong> organización con <strong>la</strong>s ventajas del mercado en<br />
términos de nuevos productos o mercados.<br />
Estos autores proponen el modelo integrador indicado en <strong>la</strong> figura 2.4 en<br />
el que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas están compuestas por <strong>la</strong>s tres<br />
capacidades indicadas anteriormente <strong>la</strong>s cuales son afectadas por los<br />
procesos fundamentales de <strong>la</strong> empresa; integración, reconfiguración,<br />
renovación y recreación.<br />
Figura 2.4: Modelo de investigación de capacidades dinámicas<br />
Dinamismo<br />
del mercado<br />
Características<br />
comunes<br />
Procesos<br />
específicos<br />
de <strong>la</strong><br />
empresa<br />
P1<br />
Capacidades<br />
dinámicas<br />
P2<br />
P3<br />
Factores componente<br />
-Capacidad adaptativa<br />
-Capacidad de absorción<br />
-Capacidad de<br />
innovación<br />
Procesos fundamentales<br />
-Integración<br />
-Reconfiguración<br />
-Renovación<br />
-Recreación<br />
Fuente: Wang y Ahmed (2007)<br />
72<br />
Estrategia de<br />
<strong>la</strong> empresa<br />
P2<br />
P3<br />
P2<br />
P3<br />
Capacidad de<br />
desarrollo<br />
P3<br />
Desempeño<br />
de <strong>la</strong><br />
empresa<br />
-Desempeño<br />
en el<br />
mercado<br />
-Desempeño<br />
financiero<br />
Re<strong>la</strong>ción directa<br />
Re<strong>la</strong>ción indirecta<br />
Wang y Ahmed (2007) definen el dinamismo del mercado como un factor<br />
influenciado por <strong>la</strong> capacidad de desarrollo y evolución de <strong>la</strong> empresa<br />
(Eisenhardt y Martin, 2000). Estos autores indican que un mercado<br />
dinámico puede ser causado por un factor principal o <strong>la</strong> combinación de<br />
varios factores, incluyendo <strong>la</strong> innovación de <strong>la</strong> industria tecnológica, el
73<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
cambio en <strong>la</strong> regu<strong>la</strong>ción, el ciclo económico y <strong>la</strong> naturaleza cambiante de <strong>la</strong><br />
competencia en <strong>la</strong> industria. Y <strong>la</strong>s empresas que operan en <strong>la</strong> industria en<br />
un momento del tiempo necesitan crear capacidades básicas (core<br />
capabilities) en respuesta a los cambios del mercado y por lo tanto cuanto<br />
más dinámico es un mercado mayor es el nivel de capacidades dinámicas<br />
que <strong>la</strong> empresa debe demostrar, por lo que proponen al dinamismo del<br />
mercado como antecedente de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas de <strong>la</strong> empresa.<br />
Esto es contradictorio con Eisenhardt y Martin (2000) que afirman que <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas no trabajan muy bien en lo que se refiere a<br />
mercados más cambiantes en los cuales <strong>la</strong> aparente estabilidad de <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas se rompe y se convierten en procesos inestables<br />
que son difíciles de sostener.<br />
La capacidad de desarrollo es el resultado de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas<br />
de <strong>la</strong> empresa (Wang y Ahmed, 2007). Ésta envuelve <strong>la</strong> comparación de<br />
los mismos aspectos de <strong>la</strong>s capacidades de <strong>la</strong> empresa en diferentes<br />
puntos del tiempo y será distinta para cada una de <strong>la</strong>s empresas de <strong>la</strong><br />
industria porque cada una de <strong>la</strong>s empresas tendrá una forma de construir<br />
capacidades. La c<strong>la</strong>ve para <strong>la</strong> subsistencia y éxito de <strong>la</strong> empresa reside en<br />
su habilidad para crear un abanico de capacidades distintivas que le<br />
permita tener éxito en <strong>la</strong> competición con el resto de empresas (Dierickx y<br />
Cool, 1989). Cuanto mejor equipada de recursos esté una empresa y mejor<br />
sea su capacidad para utilizarlos, mayores posibilidades tendrá de<br />
desarrol<strong>la</strong>r ventajas estratégicas más complejas (Amit y Schoemaker, 1993;<br />
Spanos y Lioukas, 2001). Además, <strong>la</strong> elección estratégica (estrategia de <strong>la</strong><br />
empresa) será <strong>la</strong> encargada de decidir en qué capacidades se focalizan<br />
mayores niveles de capacidades dinámicas, es decir, si una empresa quiere<br />
conseguir diferenciación, sus capacidades dinámicas irán orientadas a<br />
concentrar sus activos para desarrol<strong>la</strong>r capacidades de innovación y<br />
cuando vaya orientada al liderazgo en costes sus capacidades dinámicas<br />
irán orientadas a <strong>la</strong> eficiencia y al recorte de costes (Wang y Ahmed, 2007).
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Por lo que, <strong>la</strong> capacidad de desarrollo será el resultado de <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas, a menudo dirigida por <strong>la</strong> estrategia de <strong>la</strong> empresa.<br />
Por último, estos autores proponen que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas<br />
conducen a un performance a <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo superior, pero <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción es<br />
indirectamente mediada por el desarrollo de capacidades que, a su vez, es<br />
mediado por <strong>la</strong> estrategia de <strong>la</strong> empresa; <strong>la</strong>s capacidades dinámicas son<br />
propensas a conducir a un mejor desempeño empresarial en particu<strong>la</strong>r y<br />
serán desarrol<strong>la</strong>das en línea con <strong>la</strong> elección estratégica de <strong>la</strong> empresa.<br />
A partir de <strong>la</strong>s ideas expuestas hasta el momento diseñamos <strong>la</strong> figura 2.5.<br />
En el<strong>la</strong> observamos tres c<strong>la</strong>ros antecedentes de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas;<br />
(1) los procesos de creación de capacidades dinámicas, es decir, su<br />
experiencia y aprendizaje, (2) el entorno interno que integrará el<br />
comportamiento gerencial, <strong>la</strong> posición y trayectoria de <strong>la</strong> empresa, el<br />
capital social, el liderazgo y <strong>la</strong> confianza y (3) el dinamismo del mercado.<br />
Seguidamente <strong>la</strong>s capacidades dinámicas afectarán al desarrollo de<br />
capacidades y a <strong>la</strong> base de recursos que a su vez influirán a <strong>la</strong> existencia de<br />
ventajas competitivas sostenibles, ventajas competitivas temporales,<br />
paridad competitiva o fracaso. La re<strong>la</strong>ción entre capacidades dinámicas y<br />
desarrollo de capacidades vendrá mediada por <strong>la</strong> estrategia empresarial. Y<br />
<strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> base de recursos y <strong>la</strong> existencia o inexistencia de<br />
ventajas competitivas será moderada por características del entorno como<br />
<strong>la</strong> complejidad, incertidumbre o munificiencia así como características del<br />
propio país. Finalmente, estos resultados afectarán al performance de <strong>la</strong><br />
compañía.<br />
74
Figura 2.5: Marco Integrador<br />
Procesos<br />
de<br />
creación<br />
CD<br />
Entorno<br />
Interno<br />
Dinamismo<br />
del mercado<br />
Capacidades<br />
dinámicas<br />
Estrategia de<br />
<strong>la</strong> empresa<br />
Desarrollo de<br />
capacidades<br />
Base de<br />
recursos<br />
Entorno<br />
externo<br />
75<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Salidas<br />
Ventaja competitiva<br />
sostenible<br />
Ventaja competitiva<br />
temporal<br />
Paridad competitiva<br />
Fracaso<br />
Performance<br />
Empresarial<br />
Fuente: Adaptación propia a partir de Wang y Ahmed (2007) y Ambrosini y<br />
Bowman (2009)<br />
2.4.1 Capacidades dinámicas y gestión del conocimiento<br />
Las capacidades dinámicas están ligadas a los mecanismos para el cambio<br />
y por lo tanto también a <strong>la</strong> innovación y al aprendizaje organizativo (Fiol y<br />
Lyles, 1985), lo cual conecta con <strong>la</strong> gestión del conocimiento (Easterby-<br />
Smith y Lyles, 2003; Easterby- Smith y Prieto, 2008).<br />
Zollo y Winter (2002) consideran que Teece et al. (1997) no tienen en<br />
cuenta de dónde vienen <strong>la</strong>s capacidades dinámicas cuando aportan su<br />
definición para este concepto por lo que proponen una nueva definición:<br />
“patrón de actividad colectiva aprendido y estable, a través del cual <strong>la</strong><br />
organización genera y modifica sistemáticamente sus rutinas operativas, en <strong>la</strong><br />
búsqueda de una mejora de <strong>la</strong> eficacia
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Figura 2.6: Aprendizaje, capacidades dinámicas y rutinas<br />
Fuente: Zollo y Winter (2002)<br />
MECANISMOS DE APRENDIZAJE<br />
-Acumu<strong>la</strong>ción de experiencia<br />
-Articu<strong>la</strong>ción de conocimiento<br />
-Codificación de conocimiento<br />
CAPACIDADES DINÁMICAS<br />
- Procesos de I+D<br />
- Reestructuración,<br />
reingeniería<br />
- Post-adquisición, Integración<br />
EVOLUCIÓN DE LAS RUTINAS OPERATIVAS<br />
Zollo y Winter (2002) defienden que existen tres mecanismos envueltos en <strong>la</strong><br />
creación y evolución de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas: (1) <strong>la</strong> acumu<strong>la</strong>ción de<br />
experiencia y rutinas organizativas, (2) <strong>la</strong> articu<strong>la</strong>ción de conocimiento y (3) <strong>la</strong><br />
codificación de conocimiento.<br />
(1) La acumu<strong>la</strong>ción de experiencia se refiere al proceso de aprendizaje<br />
central que se ha asociado tradicionalmente con el desarrollo de rutinas<br />
operativas, ya que éstas reflejan <strong>la</strong> sabiduría de <strong>la</strong> experiencia al ser el<br />
resultado del aprendizaje mediante <strong>la</strong> prueba y el error, y de <strong>la</strong> selección y<br />
<strong>la</strong> retención de comportamientos pasados (Gavetti y Levinthal, 2000). (2)<br />
La articu<strong>la</strong>ción de conocimiento es el proceso mediante el cual el<br />
conocimiento implícito es articu<strong>la</strong>do a través de discusiones colectivas,<br />
sesiones informativas, y procesos de evaluación del desempeño. (3) Y por<br />
último, <strong>la</strong> codificación del conocimiento tiene lugar cuando los individuos<br />
codifican sus nociones de <strong>la</strong>s implicaciones del rendimiento de rutinas<br />
internas en herramientas escritas, tales como manuales, p<strong>la</strong>nos, hojas de<br />
cálculo, sistemas de apoyo, etc.<br />
76
77<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Estos tres mecanismos interaccionan de forma continua y entre ellos se<br />
produce adaptación mutua así como mejora en el conjunto de rutinas<br />
existentes.<br />
Las capacidades dinámicas surgen de <strong>la</strong> coevolución de procesos de<br />
acumu<strong>la</strong>ción de experiencia tácita con actividades de articu<strong>la</strong>ción y<br />
codificación del conocimiento explícito (Zollo y Winter, 2002). La figura<br />
2.7 muestra de forma gráfica este ciclo:<br />
Figura 2.7: Actividades en el ciclo de evolución del conocimiento<br />
Estímulo Externo y<br />
retroalimentación<br />
GENERACIÓN DE<br />
VARIACIÓN<br />
Exploración,<br />
Recombinación<br />
RETENCIÓN<br />
Promulgación<br />
Rutinización<br />
Fuente: Zollo y Winter (2002)<br />
SELECCIÓN<br />
INTERNA<br />
Evaluación,<br />
Legitimación<br />
REPLICACIÓN<br />
Compartir/Transferir<br />
Conocimiento<br />
Variación adaptativa<br />
Resolución de problemas<br />
El ciclo de evolución del conocimiento incluye cuatro fases: generación de<br />
variación, selección interna, replicación y retención. En <strong>la</strong> fase de<br />
variación, los individuos y grupos generan ideas acerca de cómo enfocar<br />
sus viejos problemas de forma nueva o como hacer frente a nuevos<br />
cambios. La fase de selección implica <strong>la</strong> evaluación de ideas por su<br />
potencial para hacer a <strong>la</strong> empresa más eficaz. A través de <strong>la</strong> articu<strong>la</strong>ción<br />
del conocimiento, análisis y debate, <strong>la</strong>s ideas se vuelven explicitas y es<br />
seleccionada <strong>la</strong> mejor. La fase de replicación se basa en <strong>la</strong> codificación de<br />
<strong>la</strong> iniciativa de cambio seleccionada y su difusión a <strong>la</strong>s partes relevantes de<br />
<strong>la</strong> empresa. La aplicación de cambios en diversos contextos genera nueva<br />
información acerca de los resultados de <strong>la</strong>s rutinas y puede iniciar una
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
nueva variación del ciclo. En <strong>la</strong> fase de retención, los cambios se<br />
transforman en rutinas y el conocimiento se integra en el comportamiento<br />
humano.<br />
Easterby-Smith y Prieto (2008) sostienen que en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción existente entre<br />
capacidades dinámicas y gestión del conocimiento han destacado tres<br />
debates: (1) <strong>la</strong>s capacidades dinámicas vienen del knowledge (Eisenhardt<br />
y Martin, 2000), (2) <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre recursos, rutinas y capacidades (Helfat<br />
y Peteraf, 2003; Zollo y Winter, 2002; Winter, 2003) y (3) el rol del<br />
aprendizaje en <strong>la</strong>s capacidades dinámicas (Bowman y Ambrosini, 2003;<br />
Teece et al., 1997).<br />
(1) Eisenhardt y Martin (2000) afirman que aunque el modelo de Teece<br />
et al., (1997) trabaja bien en entornos moderadamente dinámicos, no<br />
trabajan muy bien en lo que se refiere a mercados más cambiantes en los<br />
cuales <strong>la</strong> aparente estabilidad de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas se rompe y se<br />
convierten en procesos inestables que son difíciles de sostener (Eisenhardt<br />
y Martin, 2000, p.1106). También cuestionan si <strong>la</strong>s capacidades son únicas<br />
para empresas individuales, reflejando idiosincrasia individual y<br />
dependencia de <strong>la</strong> trayectoria o si exhiben puntos en común entre <strong>la</strong>s<br />
empresas por lo que no pueden constituir fuentes de ventaja competitiva.<br />
La distinción viene en cómo cada empresa desarrol<strong>la</strong> y utiliza <strong>la</strong> ventaja<br />
competitiva dando así pie a distintas formas de ventaja competitiva.<br />
(2) El segundo debate basa su atención a <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre recursos,<br />
rutinas y capacidades discutiendo si el foco debe estar en <strong>la</strong> adaptación de<br />
recursos mismos (Helfat y Peteraf, 2003) o en <strong>la</strong>s rutinas que hacen<br />
operativos los recursos, o a <strong>la</strong>s rutinas que permiten que los recursos sean<br />
reconfigurados (Zollo y Winter, 2002). Collis (1994) y posteriormente<br />
Winter (2003) intentan conducir este tema pero diferenciando a <strong>la</strong>s<br />
capacidades jerárquicamente en nivel cero (operativo), nivel uno<br />
(dinámico) y nivel 2 (aprendizaje) que linca con el resto de niveles. Las<br />
capacidades operativas o rutinas orientan a <strong>la</strong> organización hacia el<br />
78
79<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
funcionamiento operativo, <strong>la</strong>s capacidades dinámicas son dedicadas a <strong>la</strong><br />
modificación de rutinas operativas y finalmente <strong>la</strong>s capacidades de<br />
aprendizaje facilitan <strong>la</strong> creación y modificación de capacidades dinámicas.<br />
(3) En cuanto al rol del aprendizaje existen autores que afirman que el<br />
aprendizaje es un tipo específico de proceso que liga <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas, <strong>la</strong>s cuales están basadas en <strong>la</strong> repetición, experimentación e<br />
identificación de nuevas oportunidades (Bowman y Ambrosini, 2003;<br />
Teece et al., 1997). Otros indican que existe un aprendizaje denominado<br />
“aprendizaje de asignación de recursos” y este es relevante para el<br />
desempeño de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas (Zott, 2003). Y por último dentro<br />
de esta corriente que vincu<strong>la</strong> el aprendizaje con <strong>la</strong>s capacidades dinámicas<br />
tenemos el estudio mencionado anteriormente de Zollo y Winter (2002) en<br />
el que se considera a <strong>la</strong>s capacidades dinámicas como resultado del<br />
aprendizaje para dar forma a <strong>la</strong>s capacidades operativas (esto refleja <strong>la</strong><br />
idea de que el aprendizaje puede ser considerado una capacidad dinámica<br />
de segundo orden).<br />
Las capacidades dinámicas surgen de <strong>la</strong> perspectiva de recursos de <strong>la</strong><br />
empresa teniendo en cuenta al entorno y su dinamismo, mientras <strong>la</strong><br />
gestión del conocimiento es únicamente interna y vincu<strong>la</strong>da a <strong>la</strong>s teorías<br />
basadas en el conocimiento de <strong>la</strong> empresa (Easterby-Smith y Prieto, 2008).<br />
La premisa de los estudios sobre capacidades dinámicas es que <strong>la</strong>s<br />
organizaciones deben usar y renovar su abanico de recursos y capacidades<br />
para sostener <strong>la</strong>s ventajas competitivas en entornos cambiantes. Sin<br />
embargo, <strong>la</strong> perspectiva basada en el conocimiento se centra en el stock de<br />
recursos de conocimiento en <strong>la</strong> empresa, en comprender qué es el<br />
conocimiento, en definir <strong>la</strong>s tipologías de gestión del conocimiento y en<br />
cómo pueden ser gestionadas mejor.<br />
El conocimiento puede ser entendido como algo que los individuos,<br />
grupos y organizaciones tienen (conocimiento como posesión) y como
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
algo que los individuos, grupos y organizaciones hacen (conocimiento<br />
como práctica). Las investigaciones basadas en <strong>la</strong>s herramientas y sistemas<br />
de tecnologías de <strong>la</strong> información han sido muy numerosas y se presentan<br />
como una herramienta para codificar y organizar el conocimiento (A<strong>la</strong>vi y<br />
Leidner, 2001) y extender <strong>la</strong> transferencia de conocimiento (Ko et al., 2005)<br />
así como mecanismos de coordinación (Tanriverdi, 2005).<br />
Algo que también tiene mucha importancia son los procesos sociales que<br />
permiten <strong>la</strong> transmisión de conocimiento tácito. El conocimiento a nivel<br />
estratégico debe ir encaminado a guiar a los miembros de <strong>la</strong> organización<br />
en <strong>la</strong> manipu<strong>la</strong>ción de conocimiento, así como <strong>la</strong> producción y consumo<br />
de recursos en el proceso. A nivel táctico trata de favorecer los procesos<br />
específicos de creación, captura, transferencia e integración de<br />
conocimiento; esto facilita <strong>la</strong> manipu<strong>la</strong>ción de recursos para desarrol<strong>la</strong>r <strong>la</strong><br />
necesidad de conocimiento en el día a día del trabajo.<br />
En <strong>la</strong> figura 2.8 podemos observar como Easterby- Smith y Prieto (2008)<br />
proponen 3 campos de investigación en los que confluyen <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas y <strong>la</strong> gestión del conocimiento; (1) el aprendizaje sustenta <strong>la</strong><br />
investigación sobre gestión del conocimiento y <strong>la</strong> investigación sobre<br />
capacidades dinámicas, (2) <strong>la</strong>s capacidades dinámicas se manifiestan<br />
cuando <strong>la</strong> empresa trata de conseguir exploración y explotación al mismo<br />
tiempo, (3) <strong>la</strong>s capacidades dinámicas y <strong>la</strong> gestión del conocimiento han<br />
identificado recursos de conocimiento críticos para conseguir y sostener<br />
ventajas competitivas.<br />
(1) Ambos campos de investigación reconocen que el conocimiento<br />
cambia y <strong>la</strong> adaptación está directamente re<strong>la</strong>cionada con el concepto de<br />
aprendizaje (Zollo y Winter, 2002).<br />
(2) Las actividades de exploración tienen como objetivo introducir<br />
variación y generar y seleccionar nuevas ideas con objeto de incrementar<br />
<strong>la</strong> innovación mientras <strong>la</strong> explotación trata de replicar los métodos<br />
80
81<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
existentes con objeto de incrementar <strong>la</strong> eficiencia. Existe consenso en <strong>la</strong><br />
literatura acerca de que el grado de éxito en los negocios depende del<br />
potencial de <strong>la</strong> organización en conseguir actividades de explotación y<br />
exploración de forma simultánea (Levinthal March, 1993; March, 1991;<br />
Oshri et al., 2006; Filippini et al., 2011) y <strong>la</strong>s capacidades dinámicas se<br />
manifestarán cuando esto ocurra.<br />
(3) Algunos de los componentes esenciales para el desarrollo de<br />
capacidades dinámicas son; <strong>la</strong>s habilidades y conocimiento personales,<br />
sistemas físico técnico, sistemas de gestión y estructurales, y valores<br />
culturales y normas (Tidd et al., 1997; Lawson y Samson, 2001). En el<br />
campo de <strong>la</strong> gestión del conocimiento existe también convergencia acerca<br />
de factores culturales, estructurales, humanos y tecnológicos como<br />
elementos c<strong>la</strong>ve para el éxito de <strong>la</strong>s infraestructuras de gestión del<br />
conocimiento <strong>la</strong>s cuales pueden soportar <strong>la</strong> generación, adquisición,<br />
retención, transferencia y utilización de conocimiento (Shu-Hui, 2004).<br />
Figura 2.8: Límites y superposiciones en el campo de <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas y <strong>la</strong> gestión del conocimiento (GC, gestión del conocimiento;<br />
CCDD, capacidades dinámicas; IT, tecnología de <strong>la</strong> información).<br />
CAPACIDADES DINÁMICAS GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO<br />
Perspectiva de recursos y<br />
capacidades<br />
Capacidades dinámicas como<br />
cambio en rutinas que<br />
reconfiguran recursos<br />
Impacto del mercado y del<br />
dinamismo del entorno en<br />
<strong>la</strong>s capacidades dinámicas<br />
Aprendizaje sustenta<br />
<strong>la</strong> GC y <strong>la</strong>s CCDD<br />
Exploración vs<br />
explotación<br />
Fuente: Easterby-Smith y Prieto (2008)<br />
Infraestructuras<br />
del conocimiento<br />
que permiten<br />
CCDD<br />
Perspectiva basada en el<br />
conocimiento<br />
Soluciones IT y<br />
herramientas para <strong>la</strong> GC<br />
explícito (posesión)<br />
Proceso social para<br />
gestionar el conocimiento<br />
tácito (práctica)<br />
Táctica y estrategia de GC
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
2.4.2 Tipos de capacidades dinámicas<br />
Las capacidades dinámicas a menudo han sido consideradas sin<br />
especificar <strong>la</strong> naturaleza de <strong>la</strong> capacidad (Teece et al., 1997). Sin embargo,<br />
se entiende que existe un repertorio de capacidades dinámicas que<br />
permite que <strong>la</strong> empresa realice subsecuentes cambios y adaptaciones en<br />
prácticas locales logrando que éstas no se conviertan en rigideces para <strong>la</strong><br />
empresa (Leonard-Barton, 1992). Por ello, estudios empíricos recientes<br />
conceptualizan el uso de capacidades dinámicas específicas re<strong>la</strong>cionadas<br />
con <strong>la</strong>s adquisiciones (Zollo y Singh, 2004), <strong>la</strong>s alianzas (Kale et al., 2002),<br />
<strong>la</strong> I + D (Henderson y Cockburn, 1994; Yeoh y Roth, 1999), <strong>la</strong><br />
comercialización (Morgan et al., 2003) , el desarrollo conjunto de nuevos<br />
productos (Ettlie y Pavlou, 2006; Marsh y Stock, 2006; Prieto et al., 2009),<br />
<strong>la</strong>s principales innovaciones (O'Connor, 2008) y <strong>la</strong> gestión del<br />
conocimiento (Alegre et al., 2011).<br />
Autores como Henderson y Cockburn, (1994) y Yeoh y Roth, (1999)<br />
apuntaban hacia <strong>la</strong> existencia de unas capacidades en investigación y<br />
desarrollo que posibilitan <strong>la</strong> reconfiguración de recursos necesaria para<br />
conseguir ventajas competitivas sostenibles. Ellos se encuentran en <strong>la</strong><br />
corriente que empieza a vislumbrar el necesario diálogo sobre tipos de<br />
capacidades dinámicas.<br />
Zollo y Singh (2004) observan tras <strong>la</strong> revisión teórica sobre adquisiciones,<br />
que existen diferencias entre <strong>la</strong>s empresas adquirientes y adquiridas en<br />
cuanto a retornos económicos. Las empresas adquiridas obtienen retornos<br />
positivos mientras <strong>la</strong>s empresas adquirientes no sólo no obtienen retornos<br />
positivos, sino que además algunas incluso llegan a tener retornos<br />
negativos. Para poder entender este fenómeno Zollo y Singh (2004)<br />
estudian cómo procesos específicos de aprendizaje que tienen lugar en <strong>la</strong><br />
fase de gestión tras <strong>la</strong> adquisición, afectan a <strong>la</strong> variación de resultado. Esto<br />
lo hacen bajo <strong>la</strong> intuición de que a fin de mejorar el rendimiento en <strong>la</strong><br />
82
83<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
adquisición es necesario desarrol<strong>la</strong>r <strong>la</strong> capacidad de implementar<br />
adquisiciones. Para poder observar esto de forma práctica estudian cómo<br />
<strong>la</strong> codificación de conocimiento que realizan <strong>la</strong>s empresas en <strong>la</strong>s<br />
adquisiciones les ayudan a crear competencias. Finalmente concluyen que<br />
<strong>la</strong>s empresas aprenden directamente por <strong>la</strong> articu<strong>la</strong>ción y codificación de<br />
<strong>la</strong>s lecciones que aprendieron de <strong>la</strong>s experiencias anteriores a través del<br />
proceso creativo en sí. Es decir, pese a que lo lógico sería pensar que el<br />
aprendizaje se consigue por <strong>la</strong> curva de experiencia, se comprueba que en<br />
acontecimientos poco frecuentes y heterogéneos, como <strong>la</strong>s adquisiciones,<br />
<strong>la</strong> generalización de <strong>la</strong>s lecciones puede ser un error dado que cada caso es<br />
distinto (Cormier y Hagman, 1987; Cohen y Bacdayan, 1994; Haleblian y<br />
Finkelstein, 1999). Por ello, en este caso es importante generar una<br />
capacidad dinámica de implementar <strong>la</strong>s adquisiciones a fin de obtener<br />
resultados positivos.<br />
De una forma simi<strong>la</strong>r, Kale et al., (2002) estudian por qué existe<br />
heterogeneidad de resultados en <strong>la</strong>s alianzas que realizan distintas<br />
empresas. Al igual que Zollo y Singh (2004) investigan <strong>la</strong> inversión en<br />
codificación del conocimiento, ellos observan <strong>la</strong> inversión en “funciones<br />
de alianzas”, es decir <strong>la</strong> inversión en departamentos o unidades de <strong>la</strong><br />
empresa que se encarguen de <strong>la</strong> aplicación de know-how re<strong>la</strong>cionados con<br />
<strong>la</strong>s alianzas. Encontraron que el éxito en <strong>la</strong>s alianzas incrementa cuando <strong>la</strong><br />
empresa realiza este tipo de inversiones. Es más, esas inversiones en<br />
unidades dedicadas a <strong>la</strong>s alianzas son un mejor predictor del éxito de <strong>la</strong><br />
alianza que <strong>la</strong> propia experiencia en alianzas de <strong>la</strong> compañía. Los<br />
resultados sugieren que una empresa que invierte en <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestionar alianzas es capaz de mejorar <strong>la</strong> probabilidad de éxito. Por lo que<br />
de ello deducimos que es más importante poseer <strong>la</strong> capacidad de<br />
adaptarse a <strong>la</strong>s circunstancias particu<strong>la</strong>res de cada una de el<strong>la</strong>s que el<br />
hecho de poseer conocimiento de alianzas previas. Esto nos lleva a <strong>la</strong><br />
intuición de que existe una capacidad dinámica re<strong>la</strong>cionada con <strong>la</strong>s alianzas.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Estudios recientes sugieren que <strong>la</strong> gestión en capacidades dinámicas es<br />
crítica en el desarrollo de productos nuevos (Marsh y Stock, 2006; Verona<br />
y Ravasi, 2003). El estudio de Prieto et al., (2009) conceptualiza <strong>la</strong><br />
capacidad dinámica de desarrollo del producto como un constructo<br />
multidimensional que incluye <strong>la</strong> generación, integración y reconfiguración<br />
de conocimiento. Aunque los tres procesos propuestos son distintos, están<br />
interre<strong>la</strong>cionados y por ello pueden generar ventajas competitivas. Desde<br />
un enfoque simi<strong>la</strong>r, Morgan et al., (2003) analizan a través del estudio de<br />
una muestra de empresas exportadoras chinas e inglesas cómo <strong>la</strong> base de<br />
conocimiento es c<strong>la</strong>ve para desarrol<strong>la</strong>r y utilizar capacidades de p<strong>la</strong>nificación<br />
e implementación del marketing con el objetivo de adaptarse a los<br />
requerimientos de sus mercados de exportación.<br />
O'Connor (2008) indican que existe una capacidad dinámica para <strong>la</strong> creación<br />
de innovaciones importantes (major innovation). Las innovaciones<br />
importantes están compuestas por innovaciones radicales e innovaciones<br />
realmente nuevas. El marco de O'Connor (2008) está compuesto por siete<br />
elementos que forman un sistema de gestión. Estos elementos del sistema<br />
son (1) una estructura identificable; (2) un mecanismo de interfaz (3)<br />
procesos exploratorios; (4) desarrollo de habilidades requeridas y talento;<br />
(5) mecanismos de gobierno y toma de decisiones en el proyecto, cartera<br />
de innovaciones importantes y niveles de sistemas de innovaciones<br />
importantes; (6) métrica de resultados apropiada y (7) un contexto de<br />
liderazgo y cultura apropiado. Estos autores proponen que <strong>la</strong> teoría de<br />
sistemas ofrece una nueva forma de pensamiento acerca del desarrollo y<br />
gestión de <strong>la</strong>s de capacidades dinámicas.<br />
Por último, nos gustaría destacar el trabajo de Alegre et al. (2011) en el que<br />
se estudia cómo <strong>la</strong> capacidad dinámica de gestión del conocimiento (CDGC)<br />
media entre <strong>la</strong>s prácticas de gestión del conocimiento y el rendimiento de<br />
<strong>la</strong> innovación.<br />
84
85<br />
Capítulo 2: Marco teórico general<br />
Pese a que los sistemas de GC pueden mejorar <strong>la</strong> eficiencia, también<br />
pueden hacer a <strong>la</strong> empresa inflexible para tratar con nuevas situaciones, ya<br />
que <strong>la</strong>s prácticas arraigadas pueden crear rigideces (Leonard-Barton,<br />
1992). Por ello, Alegre et al., (2011) explican que <strong>la</strong> CDGC ofrece a <strong>la</strong><br />
empresa <strong>la</strong> posibilidad de reconfigurar sus prácticas de GC cuando es<br />
necesario. Por lo tanto, permiten tener una configuración de prácticas de<br />
GC específicas y difíciles de imitar. Esta capacidad dinámica se utiliza<br />
para desarrol<strong>la</strong>r o combinar <strong>la</strong>s prácticas de GC de una forma nueva y<br />
flexible sustentando <strong>la</strong> renovación organizativa cuando sea necesario, por<br />
lo que actúa como refuerzo en <strong>la</strong> efectividad de <strong>la</strong>s prácticas de GC (Zott,<br />
2003; Grewal & Slotegraaf, 2007).<br />
Tras esta revisión sobre tipos de capacidades dinámicas podemos intuir<br />
que todavía existe mucho que investigar sobre otros tipos de capacidades<br />
dinámicas. Suponemos que futuros estudios tratarán de ampliar el abanico<br />
de capacidades existentes. Por ello, nos gustaría empezar esta <strong>tesis</strong> por un<br />
artículo que trata de dar a conocer una capacidad dinámica que por el<br />
momento no ha sido tratada como tal. Nos referimos a <strong>la</strong> capacidad<br />
dinámica de gestión del diseño.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
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Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
102
RESUMEN<br />
103<br />
Capítulo 3:<br />
Capacidad de Gestión del diseño:<br />
¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
La gestión del diseño es un concepto de creciente importancia y por ello<br />
está adquiriendo mayor relevancia en <strong>la</strong> literatura. El objetivo de este<br />
artículo es presentar a <strong>la</strong> gestión del diseño como una capacidad dinámica<br />
y analizar su rol mediador entre <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo<br />
y el desempeño innovador. Para ello testamos el modelo p<strong>la</strong>nteado<br />
mediante <strong>la</strong> utilización de ecuaciones estructurales en una muestra de 182<br />
PYMES españo<strong>la</strong>s e italianas de <strong>la</strong> industria cerámica. Los resultados<br />
sugieren, en primer lugar, que existe un vínculo positivo entre <strong>la</strong><br />
capacidad de aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> innovación de producto. En<br />
segundo lugar, observamos que <strong>la</strong> inclusión de <strong>la</strong> capacidad de gestión del<br />
diseño en el análisis ayuda a proporcionar una explicación para esta<br />
re<strong>la</strong>ción. Esto significa que es importante <strong>la</strong> capacidad de diseño para que<br />
se produzcan resultados innovadores relevantes a través de <strong>la</strong> capacidad<br />
de aprendizaje de <strong>la</strong> compañía. Finalmente se realizan algunas sugerencias<br />
para futuras líneas de investigación que pueden complementar este<br />
estudio y cubrir algunas de <strong>la</strong>s limitaciones.<br />
Pa<strong>la</strong>bras c<strong>la</strong>ve: Gestión del diseño, capacidad dinámica, desempeño<br />
innovador, capacidad de aprendizaje organizativo.<br />
C<strong>la</strong>sificación JEL: M10, L10
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
3.1 INTRODUCCIÓN<br />
El diseño es de suma importancia para <strong>la</strong>s pequeñas y medianas empresas<br />
(PYMEs) ya que éste puede mejorar el desarrollo de productos, y ser una<br />
fuente c<strong>la</strong>ve para <strong>la</strong> innovación (Brazier, 2004). Diseñar es el resultado de<br />
un proceso que traduce <strong>la</strong>s ideas y oportunidades en realidad a través del<br />
desarrollo consistente de <strong>la</strong> creatividad (Bruce y Bessant, p.25). El final de<br />
este proceso requiere de consumidores dispuestos a adquirir el nuevo<br />
producto o servicio, por lo que podemos concretar que diseñar es ser<br />
creativo ofreciendo servicios o productos que conecten con <strong>la</strong>s necesidades<br />
del consumidor. En <strong>la</strong> realidad actual, esta creatividad es primordial dado<br />
el entorno competitivo al que se enfrentan <strong>la</strong>s PYMEs, por lo que es<br />
importante saber gestionar<strong>la</strong>. Así que el buen diseño no surge por<br />
casualidad, sino más bien como resultado del proceso de <strong>la</strong> gestión (Bruce<br />
y Bessant, 2002). Las actividades organizativas, prácticas, o habilidades<br />
que son consideradas para el desarrollo del diseño reciben el nombre de<br />
gestión del diseño (Gorb y Dumas, 1987).<br />
La gestión del diseño está captando mayor atención entre empresarios e<br />
investigadores (Perks et al., 2005; Abecassis-Moedas, 2006; Abecassis-<br />
Moedas y Mahmoud-Jouini, 2008; Verganti, 2008). A pesar de que el<br />
diseño se ha re<strong>la</strong>cionado de forma empírica con el performance<br />
(Hertenstein et al., 2005), Chiva y Alegre (2009a) seña<strong>la</strong>n que <strong>la</strong> gestión del<br />
diseño juega un papel importante en <strong>la</strong> determinación de los efectos de <strong>la</strong><br />
inversión en diseño sobre el performance.<br />
Argumentamos que se requiere un esfuerzo para conectar <strong>la</strong> gestión del<br />
diseño con el cambio organizativo y <strong>la</strong> perspectiva de recursos (RBV) de <strong>la</strong><br />
empresa. A menudo se han considerado <strong>la</strong>s capacidades dinámicas sin<br />
especificar <strong>la</strong> naturaleza de <strong>la</strong> capacidad (Teece et al, 1997, Teece, 2007).<br />
Estudios empíricos recientes están conceptualizando y utilizando<br />
capacidades dinámicas específicas conectadas con <strong>la</strong>s adquisiciones (Zollo<br />
y Singh, 2004), <strong>la</strong>s alianzas (Kale, Dyer y Singh, 2002), <strong>la</strong> investigación y<br />
104
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
desarrollo (Yeoh y Roth, 1999), el márketing (Morgan, Zhou, Vorhies, y<br />
Katsikeas, 2003), el desarrollo conjunto de nuevos productos (Ettlie y<br />
Pavlou, 2006), <strong>la</strong>s innovaciones radicales (O'Connor, 2008) y <strong>la</strong> gestión del<br />
conocimiento (Alegre et al., 2011). Por lo tanto, el primer objetivo de este<br />
artículo es expandir el rango específico de capacidades dinámicas<br />
consideradas en <strong>la</strong> literatura, conceptualizando e implementando <strong>la</strong><br />
capacidad de gestionar el diseño como una capacidad dinámica. Además,<br />
utilizamos <strong>la</strong>s capacidades dinámicas como marco para explicar <strong>la</strong>s<br />
diferencias intra industriales (Nelson, 1991; Zott, 2003) en desempeño en<br />
innovación, aprovechando <strong>la</strong> ventaja de que <strong>la</strong>s PYMEs se caracterizan por<br />
su flexibilidad y capacidad de adaptación al entorno, por lo que son el<br />
escenario idóneo para el estudio de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas.<br />
Dado que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas surgen del aprendizaje (Zollo y<br />
Winter, 2002; Easterby-Smith y Prieto, 2008) identificamos a <strong>la</strong> capacidad<br />
de aprendizaje organizativo como el antecedente de <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestión del diseño. Por lo que, dado que estudios anteriores demuestran<br />
que <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo afecta de forma positiva a <strong>la</strong><br />
innovación producto (Alegre y Chiva, 2008), nuestro segundo objetivo<br />
será profundizar en esta re<strong>la</strong>ción comprobando si <strong>la</strong> capacidad de gestión<br />
del diseño media entre ambas.<br />
Llevamos a cabo un análisis sobre una muestra de 182 empresas italianas y<br />
españo<strong>la</strong>s del sector cerámico, que está caracterizado por el pequeño<br />
tamaño de sus empresas. Las empresas fueron entrevistadas con ayuda de<br />
cuestionarios administrados, los cuales fueron contestados por dos<br />
directivos de cada empresa. La muestra obtenida representó alrededor del<br />
50% de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción objetivo. Tras depurar y validar <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s realizamos<br />
un análisis factorial confirmatorio. Seguidamente p<strong>la</strong>nteamos modelos de<br />
ecuaciones estructurales con indicadores robustos utilizando el software<br />
EQS 6.1. Estos análisis han aportado evidencia de <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción mediadora de<br />
105
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
<strong>la</strong> capacidad de gestión del diseño entre <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo y <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
En <strong>la</strong>s siguientes secciones introducimos, en primer lugar, el concepto de<br />
gestión del diseño, seguidamente <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> capacidad dinámica de gestión del diseño y<br />
por último, para finalizar el marco teórico, incluimos <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre<br />
capacidad dinámica de gestión del diseño y <strong>la</strong> innovación de producto. A<br />
continuación, describimos <strong>la</strong> metodología utilizada en el estudio empírico,<br />
detal<strong>la</strong>mos <strong>la</strong>s medidas de <strong>la</strong>s variables y analizamos los principales<br />
resultados alcanzados en el estudio. El trabajo concluye con <strong>la</strong>s<br />
implicaciones académicas y prácticas de <strong>la</strong> investigación.<br />
3.2 MARCO TEÓRICO GENERAL<br />
3.2.1 Gestión del diseño<br />
El diseño es un proceso creativo en el cual son conceptualizados y<br />
especificados los productos y procesos. Juega un rol vital en <strong>la</strong>s empresas<br />
a <strong>la</strong> hora de explotar con éxito su investigación innovadora (Langdon y<br />
Rothwell, 1985). En sentido amplio, se puede definir como <strong>la</strong> concepción y<br />
p<strong>la</strong>nificación de los objetos hechos por el hombre (Bruce y Bessant, 2002).<br />
La actividad de diseño consiste en <strong>la</strong> visualización creativa de conceptos,<br />
p<strong>la</strong>nes e ideas, que están representados a través del uso de bocetos, y que<br />
tiene por objeto proporcionar instrucciones para crear algo que no existe, o<br />
al menos no lo hace en esa forma o manera (Walsh, 1996; Bruce y Cooper,<br />
1997). El acto de diseñar requiere una combinación de pensamiento lógico<br />
e intuitivo. Además, es esencial para <strong>la</strong> innovación, ya que representa el<br />
aspecto creativo, donde <strong>la</strong>s ideas se materializan. Se trata de <strong>la</strong> unión de<br />
<strong>la</strong>s capacidades técnicas y <strong>la</strong>s exigencias de los consumidores (Walsh,<br />
1996; p.514).<br />
106
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
El diseño de producto es un aspecto esencial para <strong>la</strong> innovación de<br />
producto (Roozenburg y Eekels, 1995; Perks, Cooper y Jones, 2005). Tal<br />
como indican Utterback et al., (2006) el diseño de producto no se limita a<br />
<strong>la</strong> facilidad de uso y el estilo sino que incluye materiales y selección de<br />
proveedores, creación de prototipos, <strong>la</strong> gestión del proceso de diseño, etc.<br />
(Utterback et al., 2006). Los proyectos de desarrollo de productos en<br />
PYMEs operan bajo fuerte restricción de recursos ya que este tipo de<br />
empresas tienen una cantidad de presupuesto y tiempo limitada, además<br />
de carecer habitualmente de <strong>la</strong>s habilidades requeridas para el diseño<br />
(Bruce et al., 1999; Lewis y Brown, 1999). De hecho, en algunas PYMEs, el<br />
diseño es considerado como otra de <strong>la</strong>s actividades involucradas en el<br />
proceso de desarrollo de productos que suele quedar en segundo p<strong>la</strong>no<br />
frente a <strong>la</strong>s demás actividades del proceso, como por ejemplo <strong>la</strong> atención<br />
a los clientes (Lindmand y Otero-Neira, 2008).<br />
En el entorno competitivo actual, <strong>la</strong> forma de organizar <strong>la</strong> función de<br />
diseño ha evolucionado desarrollándose nuevas tendencias. Muchos<br />
estudios muestran que <strong>la</strong>s empresas con altos niveles de recursos internos<br />
son más capaces de explotar los recursos externos (Belso-Martinez et al.,<br />
2011). Consideramos que <strong>la</strong> gestión eficiente de <strong>la</strong> función de diseño es<br />
una capacidad interna vital, incluso si <strong>la</strong> función está externalizada. De<br />
hecho, externalizar el diseño se está volviendo una importante opción para<br />
<strong>la</strong>s empresas (Utterback et al., 2006), especialmente para <strong>la</strong>s PYMEs<br />
(Berends, et al. 2011). Éstas últimas recurren a diseñadores con experiencia<br />
que pueden mitigar <strong>la</strong> falta de habilidad de diseñar dentro de <strong>la</strong> empresa y<br />
de este modo crear soluciones que <strong>la</strong> empresa no podría crear por sí<br />
misma. Esto ha provocado un incremento importante en <strong>la</strong> profesión de<br />
consultoría de diseño. Los diseñadores pueden transformar e integrar el<br />
conocimiento acerca de diferentes contextos socioculturales para proponer<br />
nuevas soluciones estéticas (Dell´Era y Verganti, 2009). Además, dado que<br />
los recursos de <strong>la</strong>s PYMEs son limitados, los gastos en diseño pueden ser<br />
107
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
contro<strong>la</strong>dos mediante <strong>la</strong> implicación de los diseñadores en los proyectos<br />
como un coste variable (Bruce y Morris, 1994; Berends et al., 2011). El<br />
diseño para <strong>la</strong> innovación de nuevos productos en PYMEs puede ser<br />
extendido a través de un <strong>la</strong>rgo periodo de tiempo de meses e incluso años.<br />
Esto puede tener impacto en <strong>la</strong> dinámica del proceso (Visser, 2009); <strong>la</strong><br />
compañía será más competitiva si tiene <strong>la</strong> capacidad de realizar esta<br />
función mejor y más rápida. Por ello, en <strong>la</strong> PYME, externalizar <strong>la</strong> función<br />
de diseño será una opción importante. Sin embargo, en los últimos años<br />
también se ha observado un incremento en <strong>la</strong> aparición de una nueva<br />
función de dirección dentro de <strong>la</strong> empresa que se encarga de <strong>la</strong> gestión del<br />
diseño. Esto nos lleva a considerar tres formas distintas de organizar <strong>la</strong><br />
función de gestionar el diseño: solo dentro de <strong>la</strong> empresa, solo<br />
externalizado o como combinación del diseño en <strong>la</strong> empresa y el<br />
externalizado (Bruce y Morris, 1994). La función del diseño dentro de <strong>la</strong><br />
empresa implica <strong>la</strong> existencia de un departamento o área de diseño que<br />
puede ser incluida dentro del departamento comercial o el técnico o<br />
depender directamente de <strong>la</strong> dirección general. La externalización de <strong>la</strong>s<br />
actividades de diseño significa que <strong>la</strong>s actividades de diseño son<br />
puramente realizadas en el exterior; proveedores, consultores, etc. Sin<br />
embargo, el diseño se gestiona dentro de <strong>la</strong> empresa, es decir, existe<br />
alguien con responsabilidad para el diseño: suministro, puesta en marcha,<br />
servir de en<strong>la</strong>ce y evaluador de los diseñadores externos. Por último, <strong>la</strong><br />
mezc<strong>la</strong> del diseño dentro y fuera de <strong>la</strong> empresa se refiere a empresas que<br />
tienen departamentos de diseño pero también obtienen trabajos de diseño<br />
de fuera de <strong>la</strong> empresa. En cada una de <strong>la</strong>s formas de organizar <strong>la</strong> función<br />
de diseño, observamos que es indispensable que <strong>la</strong> compañía tenga <strong>la</strong><br />
habilidad de gestionarlo.<br />
Berends, et al. (2010.p.89) indican que el diseñador externo puede tener<br />
distintos niveles de implicación dado que pueden ser integrados en<br />
distinta medida en los proyectos de desarrollo de productos. Según Perks<br />
108
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
et al. (2005) podemos encontrar tres formas de integrar el diseño a <strong>la</strong><br />
empresa y <strong>la</strong> implicación del diseñador puede venir explicada por este<br />
grado de integración: (1) el diseño como una especialización funcional, (2)<br />
el diseño integrado en un equipo multifuncional, y (3) el diseño como líder<br />
del proceso de innovación de productos. Esta tipología se refiere a <strong>la</strong><br />
integración organizativa de los diseñadores internos o externos, que van<br />
desde un factor funcional a <strong>la</strong> gran fuerza innovadora.<br />
Por último, encontramos que si somos capaces de combinar <strong>la</strong> función de<br />
diseño de forma externa e interna podemos resolver algunos de los<br />
problemas que p<strong>la</strong>ntea el seguimiento del diseño desde una única<br />
perspectiva. Pero debemos tener en cuenta que <strong>la</strong> integración de<br />
profesionales internos y externos debe hacerse de forma cuidadosa para<br />
asegurarnos de que realmente estén trabajando juntos (Bruce y Morris,<br />
1994). La tensión entre el miedo a dar información comercialmente<br />
sensible y <strong>la</strong> necesidad de construir una re<strong>la</strong>ción abierta y de confianza es<br />
especialmente importante.<br />
Existen distintas formas de diferenciar entre <strong>la</strong>s fases que se pueden<br />
encontrar en el proceso de diseño: (1) los procesos de alternancia entre <strong>la</strong><br />
divergencia y convergencia, (2) <strong>la</strong> diferenciación entre <strong>la</strong>s fases de fijación<br />
de objetivo y establecimiento y desarrollo de <strong>la</strong> idea, (3) <strong>la</strong> fase analítica<br />
conceptual y <strong>la</strong> técnico-creativa. (1) La primera, diferencia entre <strong>la</strong><br />
exploración de muchas direcciones de desarrollo y creación de nuevas<br />
ideas, estrategias y redes a lo que denomina divergencia y <strong>la</strong> integración y<br />
refinamiento de ideas generadas en <strong>la</strong> fase de divergencia que recibe el<br />
nombre de convergencia (Howard et al., 2008). (2) La segunda dimensión<br />
es <strong>la</strong> alternancia entre el establecimiento y el desarrollo de metas (Dorst y<br />
Cross, 2001). (3) Por último, Iváñez (2000) entiende el diseño de producto<br />
como un proceso de dos fases: <strong>la</strong> analítico-conceptual y <strong>la</strong> técnico-creativa.<br />
La primera tiene como objetivo evaluar y analizar el contexto socio-<br />
económico y <strong>la</strong>s tendencias dentro del mercado objetivo, junto con los<br />
109
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
aspectos comerciales, estratégicos, productivos, logísticos y tecnológicos<br />
de <strong>la</strong> empresa así como aspectos re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong> imagen y <strong>la</strong><br />
comunicación, todos ellos determinantes de <strong>la</strong>s características del<br />
producto. Por otra parte, <strong>la</strong> fase técnico-creativa implica una<br />
interpretación formal y creativa de <strong>la</strong>s características antes mencionadas,<br />
así como <strong>la</strong> resolución técnica necesaria para determinar el producto. Estas<br />
convergencias y requisitos implican una complejidad en el proceso,<br />
necesariamente apoyada y sostenida por ciertas actividades de gestión,<br />
prácticas o habilidades que son consideradas por <strong>la</strong> literatura como<br />
gestión del diseño.<br />
Debido a ello, <strong>la</strong> literatura da definiciones sobre gestión del diseño que<br />
pese a que pueden ser muy específicas o muy amplias, todas el<strong>la</strong>s<br />
enfatizan <strong>la</strong> necesidad de ciertas actividades gerenciales o habilidades que<br />
optimizan el proceso de diseño. Basando nuestra definición en Gorb y<br />
Dumas (1987), <strong>la</strong> consideraremos como una serie de actividades o<br />
prácticas gerenciales que son requeridas para conseguir el proceso de<br />
diseño. Podemos entender<strong>la</strong>s de diferentes formas, dependiendo de los<br />
aspectos o actividades resaltadas. Las principales actividades incluidas<br />
dentro del concepto y mencionadas en <strong>la</strong> literatura pueden ser c<strong>la</strong>sificadas<br />
en 4 grupos. (1) El primer grupo de actividades están vincu<strong>la</strong>das a <strong>la</strong>s<br />
decisiones sobre los aspectos organizativos del diseño: <strong>la</strong> existencia de una<br />
función de diseño en <strong>la</strong> empresa, el uso de habilidades externas, etc.<br />
(Bruce y Morris, 1994; Topalian, 1994). (2) La segunda actividad consiste<br />
en <strong>la</strong> transmisión de información y conocimiento acerca de <strong>la</strong> empresa<br />
(objetivos, prioridades, competidores, estrategia de diseño, medición post-<br />
evaluación y retroalimentación) a los diseñadores (Topalian, 1994; Dickson<br />
et al., 1995; Olson et al., 2000). (3) El tercer grupo incluye actividades<br />
asociadas con <strong>la</strong> creación de un contexto organizativo que favorezca el<br />
proceso de diseño, con especial énfasis en <strong>la</strong> comunicación, diálogo,<br />
estímulo a <strong>la</strong> creatividad, <strong>la</strong> participación y el apoyo a <strong>la</strong> gestión para<br />
110
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
aumentar su importancia (Gorb y Dumas, 1987; Rothwell y Gardiner,<br />
1989; Dickson et al., 1995). (4) Por último, llegamos a <strong>la</strong>s actividades que<br />
forman parte de <strong>la</strong> gestión operativa de los recursos humanos y de otros<br />
recursos dentro del proceso de diseño del producto en sí: <strong>la</strong> participación<br />
de los clientes y proveedores en el proceso, el uso de herramientas de<br />
diseño asistido por ordenador, <strong>la</strong> evaluación de <strong>la</strong> fabricación, estimación<br />
de costos de nuevos productos, etc (Topalian, 1994; Dickson et al., 1995).<br />
Dickson et al. (1995) sugieren cinco habilidades de gestión del diseño y<br />
explican que estas deben ser gestionadas por los directivos de pequeñas<br />
empresas de crecimiento alto. Nosotros revisamos el concepto de estos<br />
autores y lo adaptamos a <strong>la</strong> literatura de capacidades dinámicas<br />
considerando que <strong>la</strong> gestión del diseño es una capacidad dinámica. De<br />
esta forma, <strong>la</strong> gestión del diseño es conceptualizada como un constructo<br />
de orden superior compuesto por 5 de primer orden. Estos factores son de<br />
simi<strong>la</strong>r importancia y recogen mucha de <strong>la</strong>s habilidades y actividades<br />
seña<strong>la</strong>das en <strong>la</strong> literatura. (1)Habilidades básicas, que implican <strong>la</strong> gestión de<br />
<strong>la</strong>s actividades básicas del proceso de diseño para realizar diseños de<br />
calidad elevada, fabricación y productos de bajo costo, y garantizar que se<br />
diseñen nuevos productos y se pongan en marcha de forma rápida. (2)<br />
Habilidades especiales, que se refieren a <strong>la</strong> capacidad de gestión de algunas<br />
actividades especiales necesarias para el proceso de diseño de productos<br />
(estimación de costes del nuevo producto, pruebas de fabricación etc.). (3)<br />
Participación de otros. La tercera habilidad implica <strong>la</strong> participación de<br />
clientes y proveedores en el proceso de diseño y obtención de nuevas<br />
ideas de producto desde los clientes. (4) Cambio organizativo. La cuarta<br />
habilidad es <strong>la</strong> capacidad de gestionar el cambio, tanto en general como en<br />
re<strong>la</strong>ción con el movimiento hacia el diseño concurrente y <strong>la</strong> gestión de<br />
equipos multifuncionales. (5) Habilidades de innovación. La quinta habilidad<br />
es <strong>la</strong> capacidad de gestionar <strong>la</strong> innovación mediante <strong>la</strong> toma de conciencia<br />
111
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
rápida de <strong>la</strong>s innovaciones, de <strong>la</strong> competencia y <strong>la</strong> imitación y <strong>la</strong> búsqueda<br />
de nuevas ideas de diseño, no sólo con "me-too" imitaciones<br />
3.2.2 Capacidad de Aprendizaje Organizativo<br />
La capacidad de aprendizaje organizativo (CAO) ha sido considerada<br />
como un factor c<strong>la</strong>ve para mejorar <strong>la</strong> eficacia y potencial organizativo para<br />
innovar y crecer (Jerez-Gómez et al., 2005). En consecuencia, <strong>la</strong>s<br />
organizaciones y académicos han incrementado su atención en desarrol<strong>la</strong>r<br />
<strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo y crear organizaciones que<br />
aprenden.<br />
Anderson et al. (2001) enfatizan que <strong>la</strong> gestión del diseño en PYMEs es<br />
frecuentemente informal y no p<strong>la</strong>nificada y ocurre a través del proceso de<br />
interacción dentro de <strong>la</strong>s redes sociales y de negocio. La evidencia sugiere<br />
que el aprendizaje en PYMEs es normalmente no intencionado, incidental<br />
o accidental, y el conocimiento se genera mayormente por procesos en <strong>la</strong><br />
toma de decisiones de prueba y error (Mat<strong>la</strong>y, 2000). Esto también muestra<br />
que los procesos de aprendizaje son temporales y contextuales (Zhang et<br />
al., 2006) y pueden ocurrir a través de re<strong>la</strong>ciones sociales que son cruciales<br />
para el proceso de innovación (Pittaway y Rose, 2006). Por ejemplo, <strong>la</strong><br />
inversión en toma de decisiones se puede entender como un proceso de<br />
aprendizaje (Ekanem y Smallbone, 2007).<br />
Consideraremos <strong>la</strong> CAO como <strong>la</strong>s características organizativas y directivas<br />
que facilitan el aprendizaje organizativo o que permiten que una<br />
organización aprenda (Goh y Richards, 1997; Chiva y Alegre, 2009b). Esto<br />
subraya <strong>la</strong> importancia de conseguir factores organizativos de aprendizaje<br />
o <strong>la</strong> propensión de <strong>la</strong> compañía para aprender.<br />
Para ello, siguiendo el p<strong>la</strong>nteamiento de Chiva y Alegre (2009b), hemos<br />
tenido en cuenta <strong>la</strong>s dos perspectivas acerca de cómo aprenden <strong>la</strong>s<br />
organizaciones: perspectiva individual y perspectiva social.<br />
112
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
En <strong>la</strong> perspectiva individual se define al aprendizaje organizativo como<br />
una reacción ante un estímulo del entorno (un cambio en <strong>la</strong> competencia,<br />
en <strong>la</strong> tecnología etc.), que puede ser debido a <strong>la</strong> influencia del paradigma<br />
estímulo – respuesta de <strong>la</strong> psicología cognitiva individual – o al deseo de<br />
solucionar un problema determinado. Además, los factores que lo facilitan<br />
o promueven tienden a centrarse en los individuos, o dicho de otro modo<br />
pretenden impulsar el aprendizaje individual.<br />
En <strong>la</strong> perspectiva social el aprendizaje organizativo no se produce como<br />
una reacción ante un estímulo del entorno, sino que se deben de tener en<br />
cuenta otros factores además del entorno. Otra diferencia con respecto a <strong>la</strong><br />
perspectiva individual es que se produce de forma constructiva (es decir,<br />
no sólo de forma reactiva). Los factores que lo posibilitan parecen<br />
centrarse en mayor medida en <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre <strong>la</strong>s personas de <strong>la</strong><br />
organización. Sin embargo, los individuos no son descartados en esta<br />
aproximación, por lo que los aspectos recogidos en <strong>la</strong> perspectiva<br />
cognitiva son válidos aquí. Por otro <strong>la</strong>do, desde <strong>la</strong> perspectiva individual<br />
parece que el aprendizaje organizativo pueda ser p<strong>la</strong>nificado. Mientras<br />
que desde <strong>la</strong> perspectiva social se hace hincapié en el componente<br />
espontáneo de éste (Huysman, 1999).<br />
Chiva y Alegre (2009b) proponen 5 dimensiones de CAO:<br />
experimentación, asunción del riesgo, interacción de <strong>la</strong> organización con el<br />
entorno, diálogo, toma de decisiones participativa. De acuerdo con<br />
Thomke (2001), (1) <strong>la</strong> experimentación es un mecanismo básico de<br />
emprendimiento para <strong>la</strong> innovación de <strong>la</strong>s compañías: el desarrollo de<br />
nuevos productos requiere numerosos experimentos para testar <strong>la</strong><br />
tecnología y el mercado. Las ideas y propuestas nuevas representan el<br />
punto de inicio de <strong>la</strong> innovación (Koc y Cey<strong>la</strong>n, 2007). (2) La asunción del<br />
riesgo es necesaria para <strong>la</strong> generación de nuevas ideas (Amabile et al.,<br />
1996) y suele ser tolerada para promover <strong>la</strong> innovación. El aprendizaje<br />
también ocurre a través de (3) <strong>la</strong> interacción de <strong>la</strong> organización con el entorno.<br />
113
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
La incertidumbre en <strong>la</strong> demanda del cliente, el desarrollo tecnológico y <strong>la</strong><br />
turbulencia competitiva son factores ambientales cruciales que deben ser<br />
supervisados y analizados (Wheelwright y C<strong>la</strong>rk, 1992; Ca<strong>la</strong>ntone et al.,<br />
2002). El aprendizaje externo se deriva de <strong>la</strong>s alianzas y redes (Chang,<br />
2003; Chipika y Wilson, 2006), <strong>la</strong> transferencia de tecnología (Edmonson et<br />
al, 2003) o <strong>la</strong> co<strong>la</strong>boración en I+D con <strong>la</strong>s universidades e institutos de<br />
investigación (Pedler et al., 1997; Azagra-Caro et al., 2006). Por lo tanto, <strong>la</strong><br />
interacción con el entorno representa otro importante mecanismo de<br />
aprendizaje para <strong>la</strong> innovación (Brown y Eisenhardt, 1995). Por otro <strong>la</strong>do,<br />
<strong>la</strong> dimensión (4) diálogo, está formada por <strong>la</strong> diversidad de los miembros<br />
del equipo, <strong>la</strong> generación de ideas y el fomento de <strong>la</strong> comunicación. Este<br />
mecanismo de aprendizaje puede tener un impacto positivo en <strong>la</strong><br />
innovación mediante <strong>la</strong> exposición de los individuos a una mayor<br />
variedad de ideas inusuales y por aumentar <strong>la</strong> cohesión y coordinación<br />
interna del grupo. Por último, (5) <strong>la</strong> toma de decisiones participativa aumenta<br />
<strong>la</strong> participación y compromiso de innovar (Damanpour, 1991). De acuerdo<br />
a Hurley y Hult (1998), cuando se anima a los miembros de un grupo a<br />
aprender y desarrol<strong>la</strong>r nuevas ideas, pudiendo influir en <strong>la</strong>s decisiones de<br />
grupo, el grupo es más innovador.<br />
3.3 HIPÓTESIS<br />
Proponemos el modelo que se muestra en <strong>la</strong> figura 3.1 basándonos en <strong>la</strong><br />
discusión previa sobre gestión del diseño y diseño de producto. En este<br />
modelo se conceptualiza <strong>la</strong> capacidad dinámica de gestión del diseño<br />
siguiendo a Dickson et al. (1995), como un constructo de orden superior<br />
compuesto por cinco factores de primer orden representando habilidades<br />
básicas, habilidades especiales, participación de otros, cambio<br />
organizativo y habilidades de innovación. Este modelo explica que el<br />
efecto de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo sobre <strong>la</strong> innovación de<br />
producto es mediado por <strong>la</strong> capacidad dinámica de gestión del diseño. En<br />
consecuencia, son representadas, desarrol<strong>la</strong>das y testadas tres hipó<strong>tesis</strong> (1)<br />
114
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
<strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre capacidad de aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> innovación de<br />
producto, (2) <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo y<br />
<strong>la</strong> capacidad dinámica de gestión del diseño, y (3) <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong><br />
capacidad dinámica de gestión del diseño y <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
3.3.1 Capacidad de Aprendizaje Organizativo y Capacidad de Gestión del<br />
Diseño<br />
El aprendizaje organizativo es un proceso complejo, con diferentes<br />
perspectivas y enfoques (Chiva y Alegre, 2005). La literatura sobre<br />
aprendizaje organizativo trata de analizar y determinar cómo se logra el<br />
aprendizaje en <strong>la</strong>s organizaciones. Para poder entender este hecho existen<br />
diferentes tipologías y c<strong>la</strong>sificaciones que lo analizan. Shipton (2006)<br />
analiza <strong>la</strong> literatura y encuentra dos tipologías: prescriptiva versus<br />
normativa e individual versus organizacional. La primera de <strong>la</strong>s dos<br />
distingue entre una literatura prescriptiva, normativa y orientada a <strong>la</strong><br />
práctica de una literatura explicativa, descriptiva y escéptica, centrada en<br />
entender <strong>la</strong> naturaleza y procesos de aprendizaje (Tsang, 1997). La<br />
segunda tipología examina el nivel de análisis; individual que considera<br />
que el aprendizaje organizativo es una actividad que surge en <strong>la</strong>s<br />
organizaciones de forma natural con <strong>la</strong>s prácticas diarias de los individuos<br />
(Simon, 1991, Huber, 1991, Chiva y Alegre, 2005) y el organizacional, que<br />
considera que el aprendizaje es un esfuerzo sistemático y p<strong>la</strong>nificado para<br />
capturar, compartir y aplicar los conocimientos de los individuos y los<br />
grupos a que pertenecen (Zollo y Winter, 2002).<br />
Mucha de <strong>la</strong> investigación en el área de aprendizaje organizativo se ha<br />
centrado en <strong>la</strong>s características que facilitan el proceso de aprendizaje<br />
(Pedler, Burgoyne y Boydell, 1997; Jerez-Gómez, Céspedes Lorente y Valle<br />
Cabrera, 2005).<br />
Dado que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas permiten a <strong>la</strong> empresa integrar,<br />
construir y reconfigurar <strong>la</strong>s competencias internas y externas para hacer<br />
115
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
frente a entornos que cambian rápidamente; cuánto más dinámico sea un<br />
mercado, mayor será el nivel de capacidades dinámicas que <strong>la</strong> empresa<br />
debe mostrar (Wang y Ahmed, 2007). Estas capacidades son posibles<br />
gracias al aprendizaje organizativo (Easterby-Smith y Prieto, 2008).<br />
Nosotros argumentamos que los elementos de gestión del diseño de<br />
Dickson et al (1995)- habilidades básicas, habilidades especiales,<br />
participación de otros, cambio organizativo y habilidades de innovación-<br />
incluyen <strong>la</strong> noción de reconfiguración de competencias y, por lo tanto,<br />
podría considerarse como una capacidad dinámica. Este tipo de<br />
capacidades se basan en <strong>la</strong> creación de conocimiento y pueden constituir<br />
algunas de <strong>la</strong>s fuentes de ventaja competitiva más duraderas, ya que<br />
permiten <strong>la</strong> generación de habilidades organizativas únicas y se actualizan<br />
continuamente (Teece et al., 1997). Dado que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas<br />
surgen del aprendizaje (Zollo y Winter, 2002; Easterby-Smith y Prieto,<br />
2008), sugerimos que <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo es un<br />
antecedente de <strong>la</strong> capacidad dinámica de gestión del diseño. Por lo que:<br />
Hipó<strong>tesis</strong> 1: La Capacidad de Aprendizaje Organizativo tiene un efecto positivo en<br />
<strong>la</strong> Capacidad de Gestión del Diseño.<br />
3.3.2 Capacidad de Gestión del Diseño e Innovación de Producto.<br />
Se pretende evaluar <strong>la</strong> influencia de <strong>la</strong> capacidad de gestión del diseño en<br />
<strong>la</strong> innovación de productos. Debido a que <strong>la</strong> innovación consiste en <strong>la</strong><br />
explotación exitosa de nuevas ideas (Amabile et al., 1996), se requiere del<br />
cumplimiento de dos condiciones para poder afirmar que existe<br />
innovación: <strong>la</strong> novedad y el uso. En general, el requisito de novedad se<br />
verifica desde que el proceso de innovación pone en práctica una<br />
invención, un descubrimiento científico o una nueva producción o técnica<br />
de gestión. El requisito de utilidad se confirmará a través de su uso o el<br />
éxito comercial. Si <strong>la</strong> innovación implica características nuevas, o<br />
significativamente mejoradas del servicio o producto propuesto a los<br />
clientes, es una innovación de producto. Esta innovación de producto<br />
dependerá fuertemente de <strong>la</strong>s capacidades internas de <strong>la</strong> empresa (Vega-<br />
116
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
Jurado et al., 2009), así como de <strong>la</strong> habilidad de gestionar <strong>la</strong> función de<br />
diseño. Las innovaciones de producto se distinguen de <strong>la</strong>s innovaciones<br />
de proceso en que no requieren de <strong>la</strong> utilización de métodos de equipos<br />
y/o de unos conocimientos nuevos o significativamente mejorados para<br />
prestar el servicio. Y de <strong>la</strong>s innovaciones de mercadotecnia en que no es<br />
necesaria <strong>la</strong> existencia de un cambio significativo de <strong>la</strong>s funciones o los<br />
usos del producto (OECD, 2005).<br />
Dado que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas posibilitan <strong>la</strong> adaptación al entorno y<br />
en concreto <strong>la</strong> capacidad de gestión del diseño tiene entre sus funciones <strong>la</strong><br />
búsqueda de nuevas ideas de diseño es lógico hipotetizar que:<br />
Hipó<strong>tesis</strong> 2: La capacidad de gestión del diseño tiene un efecto positivo en <strong>la</strong><br />
innovación de producto.<br />
3.3.3. La Capacidad de Aprendizaje Organizativo y <strong>la</strong> Innovación de<br />
Producto: Un caso para <strong>la</strong> mediación<br />
La innovación implica <strong>la</strong> generación e implementación de nuevas ideas,<br />
procesos y productos. Los procesos de aprendizaje organizativo consisten<br />
en <strong>la</strong> adquisición, diseminación y uso del conocimiento y por lo tanto<br />
están fuertemente re<strong>la</strong>cionados con el resultado de <strong>la</strong> innovación de<br />
producto (Lemon y Sahota, 2004). Siguiendo a Chiva et al. (2007)<br />
proponemos que <strong>la</strong> CAO consiste en cinco dimensiones: experimentación,<br />
toma de riesgo, interacción con el entorno externo, diálogo y toma de<br />
decisiones participativa.<br />
La literatura muestra una asociación positiva entre <strong>la</strong>s dimensiones de<br />
CAO y <strong>la</strong> innovación de producto (Damanpour, 1991; Amabile et al., 1996;<br />
Koc y Cey<strong>la</strong>n, 2007; Ca<strong>la</strong>ntone et al., 2002; Chipika y Wilson, 2006; Azagra-<br />
Caro et al., 2006; Alegre y Chiva, 2008). Y entre <strong>la</strong> capacidad de gestión<br />
del diseño y <strong>la</strong> innovación de producto; ya que son <strong>la</strong>s capacidades<br />
dinámicas <strong>la</strong>s que posibilitan <strong>la</strong> adaptación de <strong>la</strong> empresa al entorno. En<br />
concreto, <strong>la</strong> capacidad de gestión del diseño muestra una fuerte re<strong>la</strong>ción<br />
117
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
entre sus dimensiones y <strong>la</strong> innovación de producto. Dado que <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas surgen del aprendizaje (Zollo y Winter, 2002;<br />
Easterby-Smith y Prieto, 2008) es lógico entender que es <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo <strong>la</strong> que posibilita <strong>la</strong> existencia de <strong>la</strong> capacidad<br />
dinámica de gestión del diseño, afectando esta última a <strong>la</strong> innovación de<br />
producto. Por lo que:<br />
Hipó<strong>tesis</strong> 3: La capacidad de gestión del diseño actúa como variable mediadora<br />
entre <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
Figura 3.1: Modelo de investigación<br />
Capacidad de<br />
Aprendizaje<br />
Organizativo<br />
3.4 METODOLOGÍA<br />
3.4.1 Muestra<br />
Capacidad de<br />
Gestión del<br />
Diseño<br />
118<br />
Innovación de<br />
Producto<br />
Las hipó<strong>tesis</strong> son testadas en una única industria, los productores de<br />
cerámica. La producción de azulejo cerámico es una industria en gran<br />
medida globalizada. Los mayores productores de cerámica son China,<br />
seguido de España, Italia, Brasil y Turquía. Sin embargo, <strong>la</strong>s empresas<br />
italianas y españo<strong>la</strong>s son <strong>la</strong>s principales exportadoras mundiales. Esto se<br />
debe principalmente a su valor agregado de alta calidad, conseguido a<br />
través del énfasis en el diseño, <strong>la</strong> tecnología y <strong>la</strong> imagen corporativa<br />
(Cámara de Comercio de Valencia, 2004).
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
Los productores de baldosas de cerámica italiana y españo<strong>la</strong> tienen<br />
importantes rasgos comunes. La mayoría de ellos son considerados como<br />
PYME, ya que en general no exceden en promedio de 250 trabajadores, y<br />
tienden a concentrarse geográficamente en distritos industriales (Enright y<br />
Tenti, 1990; Alegre et al, 2004.). El distrito industrial italiano de baldosas<br />
de cerámica se encuentra en Sassuolo (norte de Italia) y el español en<br />
Castellón (este de España). El volumen de producción total de los dos<br />
distritos es simi<strong>la</strong>r.<br />
Varios estudios han analizado <strong>la</strong> innovación de productos en <strong>la</strong> industria<br />
cerámica y han encontrado que los esmaltes y el diseño, son <strong>la</strong>s áreas más<br />
importantes de <strong>la</strong> mejora del producto (Alegre et al, 2004). Las empresas<br />
de nuestra muestra indican que <strong>la</strong>s características diferenciadoras de sus<br />
productos son los esmaltes, <strong>la</strong>s propiedades antideslizantes y <strong>la</strong> mejor<br />
resistencia a <strong>la</strong>s he<strong>la</strong>das. Por otro <strong>la</strong>do, cuando se les pregunta por<br />
novedades en diseño en sus productos, nos hab<strong>la</strong>n de nuevos tamaños y<br />
estética.<br />
Al centrar nuestra recopi<strong>la</strong>ción de datos sobre <strong>la</strong> industria cerámica, <strong>la</strong><br />
gama de variaciones extrañas que pueden influir en los constructos se<br />
reduce. El análisis de un solo sector tiene <strong>la</strong> ventaja de que evita los<br />
problemas típicos de los estudios intersectoriales: <strong>la</strong> diversidad<br />
tecnológica y económica de los productos (Coombs et al., 1996; Santarelli y<br />
Piergiovanni, 1996). Reconocemos <strong>la</strong> deficiencia de este muestreo, pero<br />
creemos que <strong>la</strong>s ventajas de este enfoque son mayores que los<br />
inconvenientes de <strong>la</strong> limitada generalización.<br />
El trabajo de campo se llevó a cabo entre junio y noviembre de 2004. El<br />
cuestionario se envió a dos directores de <strong>la</strong> empresa; los directores de<br />
producción respondieron a los aspectos re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong> gestión del<br />
diseño y <strong>la</strong> innovación, mientras que los directores de recursos humanos a<br />
los aspectos re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo.<br />
119
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
La encuesta se realizó entre junio y noviembre de 2004. Para garantizar<br />
que los ítems del cuestionario fueran plenamente comprensibles en el<br />
contexto de <strong>la</strong> industria cerámica se llevó a cabo un pre-test con cuatro<br />
técnicos del Centro Español de Innovación y Tecnología en Diseño<br />
Industrial Cerámico (ALICER). El cuestionario se construyó mediante<br />
esca<strong>la</strong>s Likert de 7 puntos. Esta técnica está en consonancia con estudios<br />
anteriores (Lyon et al. 2000).<br />
Finalmente, obtuvimos un total de 182 cuestionarios, 81 de <strong>la</strong>s empresas<br />
italianas y 101 de <strong>la</strong>s empresas españo<strong>la</strong>s. La muestra obtenida representó<br />
alrededor del 50% de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción objetivo, en concreto: 47,40% de los<br />
productores italianos y 52,08% de los españoles (Cámara de Comercio<br />
Valenciana, 2004; Assopiastrelle, 2006). Tanto el número de respuestas<br />
como <strong>la</strong> tasa de respuesta puede considerarse satisfactoria (Spector, 1992;<br />
Williams, Garvin, y Hartman, 2004). Para comprobar si hay sesgo de no<br />
respuesta, se compararon el volumen de ventas y número de empleados<br />
de <strong>la</strong>s personas que respondieron y de <strong>la</strong>s que no respondieron. Esta<br />
comparación no reveló diferencias significativas.<br />
3.4.2 Medida de <strong>la</strong>s Variables<br />
Capacidad de Aprendizaje Organizativo. Medida por el instrumento<br />
desarrol<strong>la</strong>do por Chiva y Alegre (2009b). Esta es una esca<strong>la</strong> con 14 items<br />
que incluye 5 diferentes dimensiones consistentes con <strong>la</strong> literatura previa:<br />
experimentación, asunción de riesgo, interacción con el entorno, dialogo y<br />
toma de decisiones participativa. La esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos variaba<br />
desde totalmente en desacuerdo a totalmente de acuerdo.<br />
Capacidad de Gestión del Diseño. Utilizamos <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> de medida de Dickson<br />
et al. (1995) concibiendo sus constructos como una capacidad dinámica.<br />
Innovación de producto. Se utilizó <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> de medición proporcionada por<br />
el Manual de Oslo (OCDE, 2005) para <strong>la</strong> evaluación de los objetivos<br />
económicos de <strong>la</strong> innovación. Esta esca<strong>la</strong> fue propuesta por <strong>la</strong> OCDE para<br />
120
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
dar algunos conductores coherentes para los estudios de innovación,<br />
logrando así una mayor homogeneidad y comparabilidad entre ellos. A<br />
día de hoy, muchos estudios utilizan esta esca<strong>la</strong>, ya que ha sido validada<br />
(P<strong>la</strong>-Barber y Alegre, 2007).<br />
3.5. RESULTADOS<br />
3.5.1 Propiedades Psicométricas de <strong>la</strong>s Esca<strong>la</strong>s de Medida<br />
Las propiedades psicométricas de <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s de medida fueron evaluadas<br />
de conformidad con <strong>la</strong>s prácticas aceptadas (Gerbing y Anderson, 1988;<br />
Tippins y Sohi, 2003), incluyendo <strong>la</strong> validez de contenido, fiabilidad,<br />
validez discriminante, validez convergente y dimensionalidad de <strong>la</strong><br />
esca<strong>la</strong>. La tab<strong>la</strong> 3.1 presenta <strong>la</strong>s corre<strong>la</strong>ciones de los factores, medias y<br />
desviaciones típicas.<br />
La validez de contenido se establece a través de una revisión de <strong>la</strong><br />
literatura existente y por medio de entrevistas personales con expertos del<br />
sector industrial azulejero de cerámica (cuatro técnicos del área de diseño<br />
y arquitectura del Instituto Tecnológico de Cerámica. Esta área tiene el<br />
nombre de ALICER). Hemos calcu<strong>la</strong>do el coeficiente alfa y el indicador de<br />
fiabilidad compuesta para evaluar <strong>la</strong> fiabilidad de <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> (Fornell y<br />
Larker 1981; Bou-Llusar et al., 2009). Todas <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s poseen un<br />
coeficiente alfa aceptable y fiabilidad de los indicadores compuestos de al<br />
menos 0,70.<br />
121
Tab<strong>la</strong> 3.1. Media, desviación típica, Alpha Reliabilities, corre<strong>la</strong>ciones y Alpha de Cronbach<br />
1.- Exper.<br />
Mean s.d. CR 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
5.22 1.13 0.76 (0.74)<br />
2.-As. Riesgo 4.6 1.34 0.71 0.53** (0.81)<br />
3.-Entorno 4.77 1.33 0.82 0.59** 0.60** (0.82)<br />
4.-Dialogo 5.39 1.02 0.83 0.60** 0.38** 0.52** (0.82)<br />
5.-Dec. Part. 4.59 1.4 0.87 0.45** 0.56** 0.63** 0.49** (0.87)<br />
6.-Hab. Bás. 5.07 1.17 0.8 0.52** 0.41** 0.47** 0.49** 0.38** (0.91)<br />
7.-Hab.Espec. 4.8 1.47 0.87 0.49** 0.45** 0.50** 0.44** 0.42** 0.75** (0.92)<br />
8.-Part. Otr. 5.11 1.28 0.82 0.42** 0.32** 0.52** 0.54** 0.37** 0.65** 0.59** (0.74)<br />
9.-Cambio 5.0 1.3 0.86 0.52** 0.42** 0.57** 0.55** 0.42** 0.76** 0.71** 0.72** (0.74)<br />
10.-H. Innov 5.15 1.33 0.72 0.45** 0.37** 0.46** 0.44** 0.37** 0.62** 0.65** 0.54** 0.68** (0.74)<br />
11.-Innov. Pr. 5.06 1.11 0.91 0.47** 0.38** 0.46** 0.55** 0.33** 0.53** 0.55** 0.54** 0.61** 0.61** (0.91)<br />
** Coeficiente de corre<strong>la</strong>ción estadísticamente significativo (p
Se utilizó el análisis factorial confirmatorio (AFC) para medir <strong>la</strong> validez<br />
discriminante de <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s (figura 3.2), comparando <strong>la</strong>s diferencias de χ 2<br />
entre un modelo factorial confirmatorio restringido con una corre<strong>la</strong>ción<br />
interfactor establecida en 1 (que indica que son <strong>la</strong> misma construcción) y<br />
un modelo sin restricciones con una corre<strong>la</strong>ción interfactor “set free”.<br />
Todas <strong>la</strong>s diferencias χ 2 fueron significativas, proporcionando evidencia<br />
de <strong>la</strong> validez discriminante (Anderson y Gerbing 1988; Gatignon et al<br />
2002; Tippins y Sohi 2003). El AFC también se utilizó para establecer <strong>la</strong><br />
validez convergente mediante <strong>la</strong> confirmación de que todos los ítems de <strong>la</strong><br />
esca<strong>la</strong> cargaban significativamente en <strong>la</strong> construcción de sus factores<br />
(Anderson y Gerbing 1988). Adicionalmente, también se confirmó <strong>la</strong><br />
validez convergente mediante <strong>la</strong> comparación de <strong>la</strong>s diferencias de χ 2<br />
entre un modelo “constrained confirmatory” con una corre<strong>la</strong>ción<br />
interfactor establecida en 0 (que indica que no existe re<strong>la</strong>ción entre los dos<br />
constructos) y un modelo sin restricciones con una corre<strong>la</strong>ción interfactor<br />
“set free”. Todas <strong>la</strong>s diferencias de χ 2 se consideraron significativas,<br />
proporcionando evidencia de <strong>la</strong> validez convergente (Gatignon et al.,<br />
2002).<br />
123
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Figura 3.2. Análisis Factorial Confirmatorio de <strong>la</strong> Capacidad de Gestión del Diseño<br />
HB1<br />
HB2<br />
HB3<br />
HB4<br />
HE1<br />
HE2<br />
HE3<br />
HE4<br />
IO1<br />
IO2<br />
IO3<br />
CO1<br />
CO2<br />
CO3<br />
HI1<br />
HI2<br />
0.67(1)<br />
0.73<br />
0.71<br />
0.73<br />
0.68(1)<br />
0.84<br />
0.79<br />
0.85<br />
0.75(1)<br />
0.74<br />
0.83<br />
0.79(1)<br />
0.88<br />
0.79<br />
0.76(1)<br />
0.73<br />
Habilidades<br />
Básicas<br />
Habilidades<br />
Especiales<br />
Implicación<br />
de Otros<br />
Cambio<br />
Organizativo<br />
Habilidades<br />
de<br />
Innovación<br />
0.80<br />
0.97(1)<br />
0.88<br />
0.94<br />
0.86<br />
124<br />
Capacidad de<br />
Gestión del<br />
Diseño<br />
Χ 2= 204,49 p=0.000; d.f.=99; Χ 2/ d.f.=2.06<br />
NFI=0.90; NNFI=0.92; CFI=0.93; RMSEA=0.06<br />
(1) El parámetro fue igua<strong>la</strong>do a 1 para fijar <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> de <strong>la</strong> variable <strong>la</strong>tente. Las<br />
estimaciones de los parámetros están estandarizadas. Todas <strong>la</strong>s estimaciones de los<br />
parámetros son significativas a un nivel de confianza del 95%.<br />
Se testaron <strong>la</strong> dimensionalidad de los constructos a través de <strong>la</strong>s cargas de<br />
los elementos de medición de los factores de primer orden, y <strong>la</strong>s cargas de<br />
los factores de primer orden en los factores de segundo orden. Todas <strong>la</strong>s<br />
cargas fueron superiores a 0,40 y significativas (p
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
capacidad de gestión del diseño y <strong>la</strong> innovación, realizamos el test de<br />
factor simple de Harman (Podsakoff y Organ, 1986; Podkasoff et al., 2003)<br />
para evaluar <strong>la</strong> medida, no encontrando problemas de este tipo.<br />
3.5.2 Contraste de hipó<strong>tesis</strong><br />
Hemos probado <strong>la</strong> presencia de un efecto de mediación mediante <strong>la</strong><br />
realización del análisis de <strong>la</strong> competencia del modelo. El primer modelo<br />
(efecto directo) examina <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción directa entre <strong>la</strong> CAO y el resultado de<br />
<strong>la</strong> innovación de producto. La figura 3.2 muestra los resultados de los<br />
análisis. El estadístico χ 2 para cada modelo es significativo, y los índices<br />
pertinentes sugieren un buen ajuste general (Tippins y Sohi, 2003).<br />
Figura 3.3. Modelo Directo<br />
CAO1<br />
CAO<br />
0.57**<br />
125<br />
Desempeño<br />
en Innovación<br />
de Producto<br />
Χ 2= 67.035 p=0.000; d.f.=20<br />
NFI=0.997; NNFI=0.996; CFI=0.998; RMSEA=0.114<br />
.....<br />
I1 I7
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Figura 3.4. Modelo Mediado<br />
Habilidades<br />
básicas<br />
Habilidades<br />
especiales<br />
Capacidad de<br />
Aprendizaje<br />
Organizativo<br />
Participación<br />
de otros<br />
0.952 (1) 0.86 0.80 0.94<br />
Capacidad de<br />
Gestión del<br />
Diseño<br />
126<br />
Cambio<br />
organizativo<br />
0.72** 0.73**<br />
0.04 n.s.<br />
Desempeño<br />
en Innovación<br />
de Producto<br />
Χ 2= 532.876 p=0.000; d.f.=245<br />
NFI=0.975; NNFI=0.985; CFI=0.986; RMSEA=0.081<br />
0.89<br />
Habilidades<br />
de<br />
innovación<br />
(1) El parámetro fue igua<strong>la</strong>do a 1 para fijar <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> de <strong>la</strong> variable <strong>la</strong>tente. Las<br />
estimaciones de los parámetros están estandarizadas. Todas <strong>la</strong>s estimaciones de los<br />
parámetros son significativas a un nivel de confianza del 95%.<br />
En primer lugar, el modelo de efecto directo ha sido probado<br />
satisfactoriamente. Hay evidencia de un vínculo positivo entre CAO y los<br />
resultados en innovación de productos. En segundo lugar, <strong>la</strong> inclusión de<br />
<strong>la</strong> capacidad de gestión del diseño en el análisis ayuda a proporcionar una<br />
explicación para esta re<strong>la</strong>ción positiva: <strong>la</strong> capacidad de gestión del diseño<br />
actúa como variable mediadora que aumenta el efecto positivo (Grewal y<br />
Slotegraaf, 2007). El efecto mediador de <strong>la</strong> capacidad de gestionar el<br />
diseño en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre CAO y resultados de <strong>la</strong> innovación de producto<br />
es demostrado por <strong>la</strong> secuencia siguiente, tal como sugieren Tippins y<br />
Sohi (2003): (1) Primero, <strong>la</strong> mediación parcial del modelo explica más<br />
varianza de <strong>la</strong> variable dependiente que el modelo directo (R 2 =0,591 vs.<br />
R 2 =0,329); (2) existe una re<strong>la</strong>ción positiva entre CAO y <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestión del diseño; (3) existe una re<strong>la</strong>ción positiva entre <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestión del diseño y <strong>la</strong> innovación de producto, y (4) <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción<br />
significativa entre CAO y el resultado de innovación de producto indicada
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
en el efecto directo del modelo se convierte en baja y no significativa en el<br />
modelo de mediación parcial. Esta secuencia proporciona pruebas<br />
convincentes de un c<strong>la</strong>ro efecto de mediación de <strong>la</strong> capacidad de gestión<br />
del diseño y el resultado en innovación de producto. Así, a nuestro<br />
entender, el modelo de mediación parcial representa una contribución<br />
significativa de <strong>la</strong> influencia positiva (<strong>la</strong> cual se apoya tanto por <strong>la</strong> teoría<br />
como por algunas investigaciones empíricas anteriores) de CAO en el<br />
desempeño de innovación. El impacto positivo que <strong>la</strong> implementación de<br />
<strong>la</strong>s prácticas de CAO tiene en el resultado de <strong>la</strong> innovación está mediado<br />
por <strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño. Estos resultados apoyan nuestras<br />
hipó<strong>tesis</strong> de investigación.<br />
3.6 DISCUSIÓN<br />
Este estudio examina los efectos de <strong>la</strong> CAO y <strong>la</strong> capacidad de gestión del<br />
diseño en los resultados en innovación de producto de <strong>la</strong> PYME. Dado que<br />
el resultado de <strong>la</strong> innovación de producto varía entre los productores de<br />
azulejo cerámico, tratamos de comprender esta asimetría a través de <strong>la</strong><br />
lente de CAO y <strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño. Encontramos fuerte<br />
soporte para el modelo de investigación y <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> presentadas en <strong>la</strong><br />
Figura 3.4 – en otras pa<strong>la</strong>bras, existen evidencias convincentes de que <strong>la</strong><br />
CAO y <strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño mejoran el resultado en <strong>la</strong><br />
innovación de productos. Un análisis de los efectos directos e indirectos,<br />
muestra que el efecto indirecto prevalece cuando los dos se tienen en<br />
cuenta. Por lo que <strong>la</strong> CAO puede mejorar <strong>la</strong>s ventajas competitivas<br />
sostenibles en los resultados en innovación de producto, pero lo hace<br />
indirectamente a través de su capacidad para gestionar el diseño. Por lo<br />
tanto, <strong>la</strong>s ventajas competitivas sostenibles en <strong>la</strong> industria de azulejo<br />
cerámico requerirán de estrategias que enfoquen su atención en <strong>la</strong> CAO y<br />
en <strong>la</strong> gestión del diseño. Sin embargo, se debe prestar especial atención a<br />
<strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño, ya que el impacto de <strong>la</strong> CAO en el<br />
127
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
resultado en <strong>la</strong> innovación de producto está mediado por <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestionar el diseño de <strong>la</strong> compañía.<br />
La innovación es una salida (outcome) importante para el proceso de <strong>la</strong><br />
empresa y ha sido mostrada como resultado c<strong>la</strong>ve para conseguir un<br />
mayor desempeño general en <strong>la</strong> compañía. Nuestros resultados tienen<br />
implicaciones importantes para <strong>la</strong> toma de decisiones re<strong>la</strong>cionadas con el<br />
aprendizaje organizativo y <strong>la</strong> gestión del diseño, particu<strong>la</strong>rmente en el<br />
contexto de <strong>la</strong> innovación de producto en <strong>la</strong> PYMEs. Este estudio también<br />
apoya <strong>la</strong>s nuevas tendencias en <strong>la</strong> investigación de <strong>la</strong> perspectiva basada<br />
en los recursos que buscan no sólo identificar los activos críticos<br />
específicos de una industria en particu<strong>la</strong>r, sino también mejorar nuestra<br />
comprensión de todo el proceso de creación de ventajas competitivas al<br />
considerar el papel de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas.<br />
Limitaciones<br />
Debemos tener en cuenta que este trabajo presenta una serie de<br />
limitaciones. En primer lugar, los datos fueron recogidos en un mismo<br />
momento del tiempo, por lo que no se puede demostrar de manera<br />
concluyente <strong>la</strong> causalidad ni descartar <strong>la</strong> causalidad inversa. Por otra<br />
parte, <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción objetivo de este estudio se limitaba estrictamente a<br />
incluir un conjunto bastante homogéneo de empresas. Aunque un método<br />
de muestreo restrictivo aumenta <strong>la</strong> confianza de que los resultados se<br />
derivan de <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> principales, este tipo de muestreo limita <strong>la</strong><br />
generalización de los resultados de <strong>la</strong> investigación.<br />
Investigaciones futuras<br />
Los resultados de este estudio proporcionan una guía para futuras<br />
investigaciones. El efecto mediador de <strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño<br />
debe tenerse en cuenta durante <strong>la</strong> investigación sobre aprendizaje<br />
organizativo e innovación de productos; estas capacidades dinámicas son<br />
un paso importante entre <strong>la</strong>s prácticas operativas de <strong>la</strong> organización y el<br />
128
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
rendimiento. En segundo lugar, <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre CAO y <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestionar el diseño necesita análisis adicionales desde una perspectiva<br />
longitudinal. Y por último, sería interesante que futuras investigaciones<br />
distinguieran entre innovaciones de producto radical e incremental.<br />
129
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
3.7 BIBLIOGRAFÍA<br />
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137
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
3.8ANEXO<br />
Tab<strong>la</strong> 3.2: Ítems del cuestionario sobre Gestión del Diseño.<br />
Por favor, indique el grado de acuerdo / desacuerdo con los aspectos que se<br />
indican a continuación.<br />
Con respecto a <strong>la</strong>s habilidades básicas en diseño de producto:<br />
Muy mal gestionado Muy bien gestionado<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
1. Diseñar productos dotándolos de calidad. 1-2-3-4-5-6-7<br />
2. Diseñar productos que permitan fácilmente su fabricación. 1-2-3-4-5-6-7<br />
3. Diseñar productos para que tengan un bajo coste. 1-2-3-4-5-6-7<br />
4. Diseñar y <strong>la</strong>nzar al mercado nuevos productos rápidamente. 1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto a <strong>la</strong>s habilidades especializadas en diseño de producto:<br />
5. Utilizar eficazmente <strong>la</strong>s últimas herramientas D.A.O. (Diseño Asistido<br />
por Ordenador o CAD).<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
6. Estimar el verdadero coste de los nuevos productos durante el proceso<br />
de diseño.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
7. Encontrar personas con excelentes habilidades para el diseño. 1-2-3-4-5-6-7<br />
8. Comprobar <strong>la</strong> factibilidad productiva de los nuevos productos durante<br />
el proceso de diseño.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto a <strong>la</strong> implicación de clientes y proveedores en el proceso de diseño<br />
de producto:<br />
9. Implicar a los clientes en el proceso de diseño. 1-2-3-4-5-6-7<br />
10. Implicar a los proveedores en el proceso de diseño. 1-2-3-4-5-6-7<br />
11. Conseguir nuevas ideas de producto de los clientes. 1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto al cambio organizativo y al trabajo en equipo / creatividad en<br />
diseño de producto:<br />
12. Ser capaces de cambiar <strong>la</strong> forma de hacer <strong>la</strong>s cosas en el diseño de<br />
producto.<br />
13. Lograr que distintos departamentos o áreas de su empresa trabajen<br />
juntos en el diseño de producto.<br />
14. Sustituir el denominado diseño "secuencial" (los diseñadores crean un<br />
diseño y se lo entregan a los siguientes en <strong>la</strong> cadena de desarrollo de<br />
producto, olvidándose del producto) por el diseño "integrado"<br />
(co<strong>la</strong>boración de todos los departamentos o grupos en el diseño y<br />
desarrollo de nuevos productos, desde <strong>la</strong> primera a <strong>la</strong> última fase).<br />
138<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto a <strong>la</strong>s habilidades de innovación en diseño de producto:<br />
15. Encontrar nuevas ideas de diseños, evitando <strong>la</strong>s imitaciones. 1-2-3-4-5-6-7<br />
16. Enterarse rápidamente de <strong>la</strong>s innovaciones e imitaciones de sus<br />
competidores.<br />
1-2-3-4-5-6-7
Capítulo 3: Capacidad de Gestión del Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
Tab<strong>la</strong> 3.3: Ítems del cuestionario sobre Capacidad de Aprendizaje Organizativo<br />
Por favor, indique el grado de acuerdo / desacuerdo con los aspectos que se<br />
indican a continuación.<br />
Con respecto a <strong>la</strong> aportación de ideas, <strong>la</strong> experimentación y <strong>la</strong> creatividad:<br />
Totalmente en desacuerdo Totalmente de acuerdo<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
17. La gente recibe apoyo cuando presenta nuevas ideas. 1-2-3-4-5-6-7<br />
18. La iniciativa recibe a menudo una respuesta favorable, por<br />
lo que <strong>la</strong> gente se siente animada a p<strong>la</strong>ntear nuevas ideas.<br />
Con respecto a <strong>la</strong> aceptación del riesgo:<br />
139<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
19. Se estimu<strong>la</strong> a los trabajadores para que acepten riesgos. 1-2-3-4-5-6-7<br />
20. La gente a menudo se "<strong>la</strong>nza" hacia temas que desconocen. 1-2-3-4-5-6-7<br />
21. Se presentan habitualmente ideas que todavía no han sido<br />
probadas.<br />
Con respecto al entorno:<br />
22. Es parte del trabajo de todos recoger información sobre lo<br />
que pasa fuera de <strong>la</strong> empresa.<br />
23. Tenemos sistemas y procedimientos para recibir, cotejar y<br />
compartir información del exterior de <strong>la</strong> empresa.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
24. Se alienta <strong>la</strong> interacción con el entorno. 1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto al diálogo, <strong>la</strong> comunicación y el trabajo en equipo:<br />
25. A los empleados se les anima a comunicarse entre sí. 1-2-3-4-5-6-7<br />
26. Hay una comunicación abierta en los grupos de trabajo. 1-2-3-4-5-6-7<br />
27. Los directivos facilitan <strong>la</strong> comunicación. 1-2-3-4-5-6-7<br />
28. El trabajo en equipo entre personas de distintos<br />
departamentos es una práctica habitual.<br />
Con respecto a <strong>la</strong> participación:<br />
29. Los directivos implican frecuentemente a empleados en<br />
decisiones importantes.<br />
30. La política de <strong>la</strong> empresa está significativamente influida<br />
por <strong>la</strong>s opiniones de los empleados.<br />
31. Toda <strong>la</strong> gente participa en <strong>la</strong> determinación de <strong>la</strong> política y<br />
estrategia de <strong>la</strong> empresa.<br />
32. La gente se siente involucrada en <strong>la</strong>s principales decisiones<br />
de <strong>la</strong> empresa.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Tab<strong>la</strong> 3.4: Ítems del cuestionario sobre Desempeño Innovador en Productos<br />
Por favor, indique el nivel de desempeño de su empresa en comparación con <strong>la</strong><br />
competencia en los siguientes aspectos:<br />
Mucho peor En el mismo nivel Mucho mejor<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
33. Reemp<strong>la</strong>zo de los productos desfasados 1 2 3 4 5 6 7<br />
34. Ampliación de <strong>la</strong> gama de productos 1 2 3 4 5 6 7<br />
35. Desarrollo de nuevas gamas de productos 1 2 3 4 5 6 7<br />
36. Desarrollo de productos respetuosos con el medio ambiente 1 2 3 4 5 6 7<br />
37. Evolución de <strong>la</strong> cuota de mercado 1 2 3 4 5 6 7<br />
38. Apertura de nuevos mercados exteriores 1 2 3 4 5 6 7<br />
39. Apertura de nuevos mercados nacionales 1 2 3 4 5 6 7<br />
140
141<br />
Capítulo 4:<br />
El papel mediador de <strong>la</strong> Capacidad de<br />
Aprendizaje Organizativo entre <strong>la</strong><br />
Orientación Emprendedora y el<br />
Desempeño Innovador<br />
RESUMEN<br />
Este trabajo examina <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> orientación emprendedora y los<br />
resultados en innovación tomando como variable mediadora <strong>la</strong> capacidad<br />
de aprendizaje organizativo. Esta cuestión de investigación es importante<br />
porque nos permite comprender mejor <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre orientación<br />
emprendedora y resultado organizativo considerando una medida<br />
próxima al resultado como es el resultado en <strong>la</strong> innovación. Para el<br />
contraste empírico se utiliza una muestra de 182 empresas industriales<br />
italianas y españo<strong>la</strong>s y se modeliza un sistema de ecuaciones estructurales.<br />
Los resultados muestran que <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo<br />
funciona como mecanismo que interviene en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong><br />
orientación emprendedora y los resultados en innovación, ejerciendo un<br />
efecto mediador que explica el efecto positivo de <strong>la</strong> primera sobre el<br />
segundo.<br />
Pa<strong>la</strong>bras c<strong>la</strong>ve: Capacidad de aprendizaje organizativo, resultados en<br />
innovación, orientación emprendedora, innovación en productos,<br />
innovación en procesos.<br />
C<strong>la</strong>sificación JEL: M10, L26
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
142
4.1. INTRODUCCIÓN<br />
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
El emprendimiento es un campo de investigación joven que está captando<br />
<strong>la</strong> atención de un número creciente de investigadores (Ire<strong>la</strong>nd et al., 2005;<br />
Runyan, et al., 2008). L<strong>la</strong>mamos emprendimiento al espíritu emprendedor<br />
que abarca <strong>la</strong> creación de empresas y <strong>la</strong> renovación posterior tanto dentro<br />
como fuera de esta (Sharma y Chrisman, 1999:17) y orientación<br />
emprendedora a cómo es puesto en práctica este espíritu emprendedor<br />
(Ire<strong>la</strong>nd y Webb, 2007).<br />
Numerosos estudios afirman que existe una re<strong>la</strong>ción positiva entre <strong>la</strong><br />
orientación emprendedora y el resultado empresarial (Runyan et al., 2008;<br />
Rauch et al., 2009). Sin embargo, existen otros trabajos como por ejemplo<br />
el de George et al. (2001) que no han podido probar esta re<strong>la</strong>ción. Creemos<br />
interesante buscar una medida próxima al resultado de <strong>la</strong> organización<br />
como pueden ser los resultados en innovación. Siguiendo los estudios de<br />
Rauch et al. (2009) que proponen <strong>la</strong> orientación emprendedora como<br />
antecedente del rendimiento de <strong>la</strong> innovación, el siguiente paso puede ser<br />
examinar en más profundidad estas dos variables identificando pasos<br />
intermedios entre ambas.<br />
La literatura nos muestra una fuerte re<strong>la</strong>ción entre capacidad de<br />
aprendizaje organizativo (CAO) y el rendimiento de <strong>la</strong> innovación (RI).<br />
La innovación consiste en <strong>la</strong> implementación exitosa de ideas creativas<br />
dentro de <strong>la</strong> organización (Amabile et al., 1996) y su objetivo es <strong>la</strong><br />
implementación exitosa de procesos de aprendizaje tanto individuales<br />
como colectivos que se realizan con el fin de resolver problemas. Como<br />
resultado, <strong>la</strong> innovación parece depender de <strong>la</strong> capacidad de <strong>la</strong> compañía<br />
de aprender (Alegre y Chiva, 2008). De hecho, existen autores que afirman<br />
que si <strong>la</strong> empresa es innovadora, <strong>la</strong> gerencia debe diseñar <strong>la</strong>s<br />
características organizativas que enmarcan una c<strong>la</strong>ra orientación de<br />
aprendizaje. Específicamente, algunos factores culturales como <strong>la</strong><br />
descentralización en <strong>la</strong> toma decisiones, <strong>la</strong> tolerancia al error o <strong>la</strong>s<br />
143
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
re<strong>la</strong>ciones sociales han demostrado afectar al conocimiento y al<br />
aprendizaje organizativo (Hult et al., 2004; Bueno y Ordoñez, 2004; Koc y<br />
Cey<strong>la</strong>n, 2007). Por todo lo anterior, entendemos que <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo puede mediar entre <strong>la</strong> orientación emprendedora<br />
y los resultados en <strong>la</strong> innovación. Por lo que el objetivo del presente<br />
artículo será c<strong>la</strong>rificar si se produce esta re<strong>la</strong>ción.<br />
El Enfoque Basado en Recursos (RBV) ofrece un marco teórico<br />
esc<strong>la</strong>recedor para el análisis de <strong>la</strong> orientación emprendedora (Shum y Lin,<br />
2010), <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo (Bustinza, Molina, Arias-<br />
Aranda, 2010) y su re<strong>la</strong>ción con los resultados en <strong>la</strong> innovación (Bakar y<br />
Ahmad, 2010). Este enfoque establece que un resultado de <strong>la</strong> organización<br />
superior se consigue sólo cuando <strong>la</strong> empresa posee recursos y capacidades<br />
valiosas, idiosincrásicas e inimitables que puedan ser fuente de ventajas<br />
competitivas sostenibles (Wernerfelt, 1984; Barney, 1986; Amit y<br />
Schoemaker, 1993). Dentro de este marco, <strong>la</strong> línea basada en <strong>la</strong>s<br />
capacidades dinámicas establece que una mejora del resultado de <strong>la</strong><br />
organización se explica por <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa para renovar<br />
constantemente su base de recursos y capacidades, previniendo de ese<br />
modo <strong>la</strong> imitación y consiguiendo <strong>la</strong> superioridad mediante <strong>la</strong> mejora<br />
continua (Teece et al., 1997; Eisenhardt y Martin, 2000). La capacidad de<br />
aprendizaje organizativo, entendida como una capacidad que posibilita <strong>la</strong><br />
existencia de capacidades dinámicas, es pues crucial en <strong>la</strong> generación de<br />
ventajas competitivas sostenibles y, por tanto, en <strong>la</strong> obtención de rentas<br />
económicas.<br />
Esta introducción es seguida por el desarrollo del marco teórico y <strong>la</strong>s<br />
hipó<strong>tesis</strong> concernientes a <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> orientación emprendedora y<br />
los resultados en <strong>la</strong> innovación. La tercera sección describe <strong>la</strong> metodología<br />
usada para reunir <strong>la</strong> base de datos y testar <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> en una muestra de<br />
empresas del sector industrial de azulejo cerámico de Italia y Castellón.<br />
Para ello, llevamos a cabo un test a través de <strong>la</strong> modelización de<br />
144
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
ecuaciones estructurales y presentamos los resultados en <strong>la</strong> cuarta sección.<br />
Los resultados proporcionan evidencia empírica de <strong>la</strong> importancia del rol<br />
que tiene <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong><br />
orientación emprendedora y los resultados empresariales. Estos resultados<br />
son de gran relevancia para los directivos porque ellos proporcionan <strong>la</strong>s<br />
líneas de cómo implementar <strong>la</strong> actitud de <strong>la</strong> orientación emprendedora y<br />
sacar el máximo partido de el<strong>la</strong>. El artículo concluye con <strong>la</strong> discusión de<br />
resultados y sus implicaciones, así como sugerencias para futuras líneas de<br />
investigación.<br />
4.2 MARCO TEÓRICO E HIPÓTESIS<br />
4.2.1 Re<strong>la</strong>ción entre Orientación Emprendedora y el Resultado de <strong>la</strong><br />
Organización<br />
La pa<strong>la</strong>bra “entrepreneur” deriva de <strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras francesas “entre” (que<br />
significa entre) y “prende” (que significa coger o tomar). Originalmente,<br />
este término es utilizado para describir a <strong>la</strong>s personas que asumen riesgos<br />
entre compradores y vendedores, o que realizan una tarea de riesgo como<br />
por ejemplo, el inicio de una nueva empresa.<br />
Las empresas se vuelven más emprendedoras para conseguir identificar y<br />
explotar nuevas oportunidades. Para <strong>la</strong>s empresas existentes, este proceso<br />
es l<strong>la</strong>mado emprendimiento corporativo o intra-emprendimiento y<br />
desarrol<strong>la</strong> nuevos caminos de gestionar los negocios implicando cambios<br />
en los patrones de comportamiento organizativo de <strong>la</strong>s empresas (Macri et<br />
al., 2002). El término orientación emprendedora tiene sus raíces en <strong>la</strong><br />
literatura de proceso de e<strong>la</strong>boración estratégica (e.g., Mintzberg, 1973), el<br />
cual incorpora <strong>la</strong> p<strong>la</strong>nificación, análisis, toma de decisiones, sistema de<br />
valores, misión y muchos aspectos de <strong>la</strong> cultura de una organización<br />
(Hart, 1992). De acuerdo con Mintzberg, Raisinghani y Theoret quienes<br />
seña<strong>la</strong>ron que <strong>la</strong> p<strong>la</strong>nificación estratégica es "importante, en términos de<br />
medidas adoptadas, recursos comprometidos, o establecimiento de<br />
precedentes", <strong>la</strong> orientación emprendedora puede entenderse como los<br />
145
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
procesos de e<strong>la</strong>boración de <strong>la</strong> estrategia empresarial llevados a cabo para<br />
tomar <strong>la</strong>s decisiones c<strong>la</strong>ve, así como promulgar el propósito organizativo,<br />
mantener su visión, y crear ventajas competitivas.<br />
4.2.2 Re<strong>la</strong>ción entre Orientación Emprendedora e Innovación<br />
Nasution et al. (2011) sugieren que algunos componentes que han sido<br />
asociados al emprendimiento son: propensión a <strong>la</strong> asunción de riesgos<br />
(Sathe, 1989), libertad y autonomía (Kuratko y Hodgetts, 2001), y<br />
proactividad e innovación (Yeoh y Jeong, 1995).<br />
La propensión a <strong>la</strong> asunción de riesgos implica una disposición a aprovechar<br />
<strong>la</strong>s oportunidades que atañen riesgo. Se define a los propensos al riesgo<br />
como aquellos empresarios que suelen asumir riesgos moderados en<br />
situaciones en <strong>la</strong>s que poseen algún grado de control o habilidad para<br />
obtener un beneficio (Cunningham y Lischeron, 1991).<br />
La autonomía se refiere a <strong>la</strong> medida en que los empleados son capaces de<br />
tomar decisiones sobre su propio trabajo (Hornsby et al., 1993). También<br />
se puede definir como “hacer <strong>la</strong>s cosas sin miedo a lo que otros puedan<br />
pensar (Lee, 1997, p.95). Las personas con un alto nivel de autonomía<br />
suelen preferir el trabajo auto-dirigido, sin importarles <strong>la</strong> opinión de los<br />
demás y <strong>la</strong>s normas; prefieren tomar decisiones solos (Lee, 1997). En cierto<br />
sentido, se puede entender como <strong>la</strong> necesidad de dar poder a los<br />
empleados de <strong>la</strong>s organizaciones para que puedan tomar decisiones sobre<br />
su proceso de trabajo y evitar <strong>la</strong>s críticas a aquellos errores que puedan<br />
cometer para fomentar <strong>la</strong> innovación.<br />
La proactividad consiste en <strong>la</strong> perseverancia, adaptabilidad y <strong>la</strong> voluntad de<br />
asumir ciertas responsabilidades frente al fracaso (Pitt et al., 1997). Se<br />
define en términos de <strong>la</strong> propensión de <strong>la</strong> empresa para ser agresiva y<br />
competir de forma proactiva frente a sus rivales (Yeoh y Jeong, 1995).<br />
También se define como <strong>la</strong> búsqueda continua de oportunidades y <strong>la</strong><br />
146
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
respuesta a <strong>la</strong>s condiciones cambiantes del mercado (Morgan y Strong,<br />
1998; Venkatraman, 1989).<br />
La dimensión común en muchos de los trabajos sobre emprendimiento<br />
corporativo es <strong>la</strong> innovación. El resultado de <strong>la</strong> innovación de <strong>la</strong> empresa<br />
incluye <strong>la</strong> innovación en producto y proceso; estos dos tipos de resultado<br />
de <strong>la</strong> innovación están muy re<strong>la</strong>cionados (Utterback y Abernathy, 1975) y<br />
constituyen un proceso muy complejo que generalmente envuelve <strong>la</strong>s<br />
funciones de todas <strong>la</strong>s empresas. Un “producto” es un bien o servicio<br />
ofrecido al consumidor, mientras que el “proceso” es el camino por el cual<br />
el producto o servicio es producido y entregado (Barras, 1986). De este<br />
modo, <strong>la</strong> innovación en producto se define como el producto o servicio<br />
introducido para encontrar <strong>la</strong>s necesidades del mercado o de un uso<br />
externo y <strong>la</strong> innovación de proceso es entendida como un nuevo elemento<br />
introducido dentro de <strong>la</strong>s operaciones de producción o funciones<br />
(Damanpour y Gopa<strong>la</strong>krishnan, 2001). La innovación de producto está<br />
enfocada al mercado y tiene como objetivo satisfacer al consumidor,<br />
mientras <strong>la</strong> innovación en proceso se enfoca en los trabajadores internos<br />
de <strong>la</strong> compañía y tiene como objetivo incrementar <strong>la</strong> eficiencia (Utterback<br />
y Abernathy, 1975).<br />
La innovación es un factor crucial en el resultado de <strong>la</strong> empresa como<br />
consecuencia de <strong>la</strong> evolución del entorno competitivo (Wheelwright y<br />
C<strong>la</strong>rk, 1992; Newey y Zahra, 2009). La importancia de <strong>la</strong> innovación para<br />
el resultado a <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo de <strong>la</strong>s compañías ha sido ampliamente<br />
defendida en <strong>la</strong> literatura. Consecuentemente, se considera que el<br />
resultado en <strong>la</strong> innovación tiene efectos directos en el resultado de <strong>la</strong><br />
empresa (Wheelwright y C<strong>la</strong>rk, 1992; Newey y Zahra, 2009; Baker y<br />
Sinku<strong>la</strong>, 2009) y puede ser considerada como <strong>la</strong> variable dependiente más<br />
precisa de <strong>la</strong> orientación emprendedora (Ire<strong>la</strong>nd et al., 2003).<br />
147
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Podemos definir el emprendimiento empresarial como el proceso de<br />
mejora de <strong>la</strong> capacidad de <strong>la</strong> empresa para adquirir y utilizar <strong>la</strong>s<br />
habilidades de los distintos miembros de <strong>la</strong> empresa y de este modo<br />
utilizar <strong>la</strong> capacidad de innovación (Rutherford y Holt, 2007; Elche y<br />
González, 2008). Por lo que, según esta definición, el emprendimiento es<br />
necesario para conseguir que <strong>la</strong> empresa sea capaz de innovar. Así que:<br />
H1: La orientación emprendedora afecta positivamente al resultado en <strong>la</strong><br />
innovación.<br />
4.2.3 Re<strong>la</strong>ción entre Capacidad de Aprendizaje Organizativo e<br />
Innovación<br />
Por un <strong>la</strong>do encontramos que <strong>la</strong> innovación implica <strong>la</strong> generación e<br />
implementación de nuevas ideas, procesos o productos. Y por otro, que los<br />
procesos de aprendizaje organizativo consisten en <strong>la</strong> adquisición,<br />
diseminación y uso del conocimiento y por lo tanto tienen una fuerte<br />
re<strong>la</strong>ción con <strong>la</strong> innovación de productos (Argote et al., 2003; Lemon y<br />
Sahota, 2004). Hemos conceptualizado <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo (CAO) como <strong>la</strong>s habilidades o características que facilitan los<br />
procesos de aprendizaje organizativo mediante <strong>la</strong> creación, diseminación<br />
y uso del conocimiento. Seguimos <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> utilizada por Chiva et al. (2007)<br />
que propone que CAO consiste en cinco dimensiones: experimentación,<br />
asunción de riesgo, interacción con el entorno externo, dialogo y toma de<br />
decisiones participativa.<br />
La literatura muestra una re<strong>la</strong>ción positiva entre <strong>la</strong>s dimensiones de CAO<br />
y <strong>la</strong> innovación. De acuerdo con Thomke (2001), (1) <strong>la</strong> experimentación es<br />
un mecanismo básico de emprendimiento para <strong>la</strong> innovación de <strong>la</strong>s<br />
compañías: el desarrollo de nuevos productos requiere numerosos<br />
experimentos para testar <strong>la</strong> tecnología y el mercado. Las ideas y<br />
propuestas nuevas representan el punto de inicio de <strong>la</strong> innovación (Koc y<br />
Cey<strong>la</strong>n, 2007). (2) La asunción del riesgo es necesaria para <strong>la</strong> generación de<br />
148
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
nuevas ideas (Amabile et al., 1996) y suele ser tolerada para promover <strong>la</strong><br />
innovación. El aprendizaje también ocurre a través de (3) <strong>la</strong> interacción de <strong>la</strong><br />
organización con el entorno. La incertidumbre en <strong>la</strong> demanda del cliente, el<br />
desarrollo tecnológico y <strong>la</strong> turbulencia competitiva son factores<br />
ambientales cruciales que deben ser supervisados y analizados<br />
(Wheelwright y C<strong>la</strong>rk, 1992; Ca<strong>la</strong>ntone et al., 2002). El aprendizaje externo<br />
se deriva de <strong>la</strong>s alianzas y redes (Chang, 2003; Chipika y Wilson, 2006), <strong>la</strong><br />
transferencia de tecnología (Edmonson et al, 2003) o <strong>la</strong> co<strong>la</strong>boración en<br />
I+D con <strong>la</strong>s universidades e institutos de investigación (Pedler et al., 1997;<br />
Azagra-Caro et al., 2006). Por lo tanto, <strong>la</strong> interacción con el entorno<br />
representa un importante mecanismo de aprendizaje para <strong>la</strong> innovación<br />
(Brown y Eisenhardt, 1995). Por otro <strong>la</strong>do, <strong>la</strong> dimensión (4) diálogo, está<br />
formada por <strong>la</strong> diversidad de los miembros del equipo, <strong>la</strong> generación de<br />
ideas y el fomento de <strong>la</strong> comunicación. Este mecanismo de aprendizaje<br />
puede tener un impacto positivo en <strong>la</strong> innovación mediante <strong>la</strong> exposición<br />
de los individuos a una mayor variedad de ideas inusuales y por<br />
aumentar <strong>la</strong> cohesión y coordinación interna del grupo. Por último, (5) <strong>la</strong><br />
toma de decisiones participativa aumenta <strong>la</strong> participación y compromiso de<br />
innovar (Damanpour, 1991). De acuerdo a Hurley y Hult (1998), cuando se<br />
anima a los miembros de un grupo a aprender y desarrol<strong>la</strong>r nuevas ideas,<br />
pudiendo influir en <strong>la</strong>s decisiones de grupo, el grupo es más innovador.<br />
Por lo que nosotros esperamos que <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo sea el link que puede ayudar a <strong>la</strong> empresa a canalizar su<br />
orientación emprendedora hacia <strong>la</strong> mejora de sus resultados en<br />
innovación. Consecuentemente, proponemos <strong>la</strong> siguiente hipó<strong>tesis</strong>;<br />
H2: La capacidad de aprendizaje organizativo actúa como variable mediadora<br />
entre <strong>la</strong> orientación emprendedora y el resultado en <strong>la</strong> innovación<br />
Basándonos en <strong>la</strong> discusión sobre orientación emprendedora, capacidad<br />
de aprendizaje organizativo y resultado en innovación, proponemos el<br />
modelo conceptual mostrado en <strong>la</strong> Figura 4.1. En <strong>la</strong> figura 4.1, <strong>la</strong><br />
149
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Capacidad de Aprendizaje Organizativo (CAO) y el Resultado en <strong>la</strong><br />
Innovación (RI) son factores de segundo orden, mientras que <strong>la</strong><br />
Orientación Emprendedora (OE) es de primer orden. El tamaño y <strong>la</strong><br />
localización se incluyen en el modelo como variables de control. Para<br />
reducir <strong>la</strong> confusión, no se muestran <strong>la</strong>s variables <strong>la</strong>tentes.<br />
El propósito de mostrar este modelo es explicar <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre<br />
orientación emprendedora y performance innovador mediante un dibujo<br />
que incluye el paso intermedio entre ambos.<br />
Figura 4.1: Modelo conceptual<br />
Orientación<br />
Emprendedora<br />
4.3 METODOLOGÍA<br />
4.3.1 Muestra<br />
Capacidad de<br />
Aprendizaje<br />
Organizativo<br />
150<br />
Desempeño<br />
en Innovación<br />
País<br />
Tamaño<br />
Dada <strong>la</strong> naturaleza de <strong>la</strong> investigación y <strong>la</strong> consecuente inexistencia de<br />
fuentes de datos secundarios, recurrimos a encuestas para obtener <strong>la</strong><br />
información necesaria para <strong>la</strong> realización de este estudio. Nos centramos<br />
en una única industria, debido a que el conocimiento y el aprendizaje que<br />
participa en los procesos de innovación probablemente serán más<br />
homogéneos (Santarelli y Piergiovanni, 1996). En concreto, examinamos<br />
<strong>la</strong>s industrias de cerámica italiana y españo<strong>la</strong> del azulejo, ya que es una<br />
pob<strong>la</strong>ción bastante homogénea y ello nos permite contro<strong>la</strong>r ciertos factores
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
de contingencia como el tamaño, <strong>la</strong> industria y <strong>la</strong> cultura nacional (Lyon<br />
et al., 2000; Rauch et al., 2009). La industria de producción de azulejo se<br />
encuentra en gran medida globalizada. En el momento de obtención de <strong>la</strong><br />
muestra, <strong>la</strong> producción de cerámica italiana y españo<strong>la</strong> representaba el<br />
77% de <strong>la</strong> producción de <strong>la</strong> UE (Ascer 2006). Siendo el 44% producido en<br />
España (ITC, 2004).<br />
Los productores de azulejo de cerámica italiana y españo<strong>la</strong> se organizan<br />
de manera simi<strong>la</strong>r. La mayoría de ellos son considerados como PYMEs, ya<br />
que por lo general no exceden de un promedio de 250 trabajadores.<br />
Tienden a concentrarse geográficamente en distritos industriales: Sassuolo<br />
en el norte de Italia y Castellón en el este de España (Valencia, Cámara de<br />
Comercio de 2004).<br />
En <strong>la</strong> producción de azulejo de cerámica, <strong>la</strong> acumu<strong>la</strong>ción tecnológica se<br />
genera principalmente por (1) el diseño, construcción y operación de<br />
sistemas de producción compleja (trayectoria esca<strong>la</strong> intensiva), y (2)<br />
conocimientos, habilidades y técnicas emergentes de investigación<br />
académica química (trayectoria basada en <strong>la</strong> ciencia). Estudios previos<br />
proporcionan pruebas convincentes de que los productores de azulejo de<br />
cerámica italiana y españo<strong>la</strong> muestran una conducta significativa hacia <strong>la</strong><br />
innovación (Enright y Tenti 1990; Oltra et al., 2002).<br />
La encuesta se realizó entre junio y noviembre de 2004. Para garantizar<br />
que los ítems del cuestionario fueran plenamente comprensibles en el<br />
contexto de <strong>la</strong> industria cerámica se llevó a cabo un pre-test con cuatro<br />
técnicos del Centro Español de Innovación y Tecnología en Diseño<br />
Industrial Cerámico (ALICER). El cuestionario se construyó mediante<br />
esca<strong>la</strong>s Likert de 7 puntos, técnica que está en consonancia con estudios<br />
anteriores (Lyon et al., 2000) y fue dirigido a los directivos de <strong>la</strong>s<br />
empresas. Los directores generales respondieron a los aspectos<br />
re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong> orientación emprendedora (Moreno y Casil<strong>la</strong>s de 2008;<br />
151
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Escribá-Esteve et al 2008). Los directores de producción respondieron a <strong>la</strong>s<br />
preguntas de resultado en <strong>la</strong> innovación, ya que es el director de<br />
producción <strong>la</strong> persona de <strong>la</strong> empresa con más conocimiento en <strong>la</strong>s<br />
actividades en materia de innovación (Ca<strong>la</strong>ntone et al., 2002). Por último,<br />
los directores de Recursos Humanos respondieron a los aspectos<br />
re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo (Wang 2008).<br />
Las encuestas se hicieron mediante entrevista personal a cada uno de los<br />
encuestados. Para favorecer el ratio de respuesta ofrecimos un informe con<br />
los resultados extraídos a <strong>la</strong>s empresas participantes.<br />
Finalmente, obtuvimos un total de 182 cuestionarios, 82 de <strong>la</strong>s empresas<br />
italianas y 100 de <strong>la</strong>s empresas españo<strong>la</strong>s. La muestra obtenida representó<br />
alrededor del 50% de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción objetivo, en concreto: 47,40% de los<br />
productores italianos y 52,08% de los españoles (Cámara de Comercio<br />
Valenciana, 2004; Assopiastrelle, 2006). Tanto el número de respuestas<br />
como <strong>la</strong> tasa de respuesta puede considerarse satisfactoria (Spector, 1992;<br />
Williams et al., 2004). El sesgo de no respuesta se evaluó a través de una<br />
comparación de <strong>la</strong>s estadísticas de <strong>la</strong> muestra con valores de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción<br />
conocida como el volumen de ventas anuales o el número de empleados.<br />
Existen páginas web pertenecientes a <strong>la</strong>s asociaciones de productores de<br />
azulejos de cerámica que ofrecen esta información para <strong>la</strong> mayoría de <strong>la</strong>s<br />
empresas de <strong>la</strong> industria; tanto en Italia (Assopiastrelle 2006) como en<br />
España (Ascer 2006).<br />
4.3.2 Medida de <strong>la</strong>s Variables<br />
Para medir el resultado en <strong>la</strong> innovación utilizamos tres dimensiones<br />
diferentes que están en consonancia con <strong>la</strong> literatura previa: <strong>la</strong> eficacia de<br />
<strong>la</strong> innovación en productos y <strong>la</strong> eficacia y eficiencia de <strong>la</strong> innovacion en<br />
procesos. Estas dimensiones han sido ampliamente discutidas en <strong>la</strong><br />
investigación sobre innnovación (Brown y Eisehardt, 1995; OECD, 2005).<br />
El manual de Oslo OECD proporciona una esca<strong>la</strong> de medición detal<strong>la</strong>da<br />
152
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
para <strong>la</strong> evaluación de los objetivos económicos de innovación de producto<br />
y proceso y esta es <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> que proponemos para <strong>la</strong> medición de <strong>la</strong><br />
eficacia de innovación en productos y procesos. Esta esca<strong>la</strong> fue propuesta<br />
por <strong>la</strong> OECD para proporcionar algunas directrices coherentes para los<br />
estudios sobre innovación, logrando así una mayor homogeneidad y<br />
comparabilidad entre los diversos estudios que existen sobre <strong>la</strong> materia.<br />
La eficiencia de <strong>la</strong> innovación en procesos es <strong>la</strong> tercera dimensión tenida<br />
en cuenta para medir el resultado en <strong>la</strong> innovación. Es ampliamente<br />
aceptado que <strong>la</strong> eficiencia de <strong>la</strong> innovación puede ser determinada por el<br />
coste y el tiempo involucrado en el proyecto de innovación (Wheelwright<br />
y C<strong>la</strong>rk, 1992; Brown y Eisenhardt, 1995; Chiesa et al., 1996). El<br />
instrumento de medida utilizado fue una esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos que<br />
variaba desde mucho peor en comparación con <strong>la</strong> competencia a mucho<br />
mejor en comparación con <strong>la</strong> competencia.<br />
La orientación emprendedora fue medida utilizando nueve items (ver<br />
anexos) con una esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos propuesta por Covin y Slevin<br />
(1989). Esta esca<strong>la</strong> de medida ha sido utilizada satisfactoriamente por un<br />
número considerable de estudios empíricos (Covin et al., 2006; Green et<br />
al., 2008; Escribá-Esteve et al., 2008).<br />
En consonancia con el concepto teórico adoptado en <strong>la</strong> revisión teórica, <strong>la</strong><br />
capacidad de aprendizaje organizativo es medida por el instrumento<br />
desarrol<strong>la</strong>do por Chiva y Alegre (2009). Esta es una esca<strong>la</strong> con 14 items<br />
que incluye 5 diferentes dimensiones consistentes con <strong>la</strong> literatura previa:<br />
experimentación, asunción de riesgo, interacción con el entorno, dialogo y<br />
toma de decisiones participativa. La esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos variaba<br />
desde nada importante para <strong>la</strong> organización a muy importante para <strong>la</strong><br />
organización.<br />
Fueron tenidas en cuenta <strong>la</strong>s variables de control; localización y tamaño. Se<br />
pretende contro<strong>la</strong>r si estar asentado en un determinado distrito industrial<br />
153
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
que proporciona acceso a un mercado de trabajo, así como estar dentro de<br />
un marco institucional específico, tiene un impacto significativo en los<br />
resultados en innovacion (1=empresas localizadas en Italia; 2=empresas<br />
localizadas en España). Por otro <strong>la</strong>do, existen numerosos estudios que<br />
afirman que el tamaño afecta al resultado en <strong>la</strong> innovación (Rogers, 2004;<br />
Filipescu y Rialp, 2009), por ello se preguntó a <strong>la</strong>s personas entrevistadas<br />
<strong>la</strong> c<strong>la</strong>sificación de su compañía dentro de <strong>la</strong>s 4 categorías de <strong>la</strong> Comisión<br />
Europea.<br />
4.3.3 Análisis Estadístico<br />
Para el análisis empírico se realizaron modelos de ecuaciones estructurales<br />
con indicadores robustos. Este tipo de análisis multivariado de segunda<br />
generación puede resolver varios problemas que pueden ocurrir en el<br />
análisis de regresión múltiple, y sobre todo permite analizar <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones<br />
al mismo tiempo, incluidas <strong>la</strong>s mediciones de error en el modelo, por lo<br />
que es posible identificar una posible sobreestimación o subestimación de<br />
<strong>la</strong> fuerza de <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre los constructos. Desde el punto de vista<br />
teórico, esta técnica confirma <strong>la</strong>s medidas de fiabilidad y validez de los<br />
constructos. Nuestro modelo de investigación se estimó utilizando el<br />
software EQS 6.1. La muestra está compuesta por 182 empresas; por lo<br />
tanto está muy por encima del límite mínimo de 100 sujetos que se<br />
considera para realizar los análisis de modelos de ecuaciones estructurales<br />
(Williams et al., 2004).<br />
4.3.4 Propiedades Psicométricas de <strong>la</strong>s Esca<strong>la</strong>s de Medición<br />
Las propiedades psicométricas de <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s de medida fueron evaluadas<br />
de conformidad con <strong>la</strong>s prácticas aceptadas (Anderson y Gerbing, 1988;<br />
Tippins y Sohi, 2003), incluyendo <strong>la</strong> validez de contenido, fiabilidad,<br />
validez discriminante, validez convergente y dimensionalidad de <strong>la</strong> esca<strong>la</strong>.<br />
La validez de contenido se establece a través de una revisión de <strong>la</strong><br />
literatura existente y por medio de entrevistas personales con expertos del<br />
154
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
sector industrial azulejero de cerámica (cuatro técnicos del área de diseño<br />
y arquitectura del Instituto Tecnológico de Cerámica. Esta área tiene el<br />
nombre de ALICER). Hemos calcu<strong>la</strong>do el coeficiente alfa y el indicador de<br />
fiabilidad compuesta para evaluar <strong>la</strong> fiabilidad de <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> (Fornell y<br />
Larker 1981; Bou-Llusar et al., 2009). Todas <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s poseen un<br />
coeficiente alfa aceptable y fiabilidad de los indicadores compuestos de al<br />
menos 0,70.<br />
La validez discriminante se evaluó mediante análisis factorial<br />
confirmatorio (AFC), comparando <strong>la</strong>s diferencias de χ 2 entre un modelo<br />
factorial confirmatorio restringido con una corre<strong>la</strong>ción interfactor<br />
establecida en 1 (que indica que son <strong>la</strong> misma construcción) y un modelo<br />
sin restricciones con una corre<strong>la</strong>ción interfactor “set free”. Todas <strong>la</strong>s<br />
diferencias χ 2 fueron significativas, proporcionando evidencia de <strong>la</strong><br />
validez discriminante (Anderson y Gerbing 1988; Gatignon et al 2002;<br />
Tippins y Sohi 2003). El AFC (ver anexos) también se utilizó para<br />
establecer <strong>la</strong> validez convergente mediante <strong>la</strong> confirmación de que todos<br />
los ítems de <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> cargaban significativamente en <strong>la</strong> construcción de<br />
sus factores (Anderson y Gerbing 1988). Adicionalmente, también se<br />
confirmó <strong>la</strong> validez convergente mediante <strong>la</strong> comparación de <strong>la</strong>s<br />
diferencias de χ 2 entre un modelo “constrained confirmatory” con una<br />
corre<strong>la</strong>ción interfactor establecida en 0 (que indica que no existe re<strong>la</strong>ción<br />
entre los dos constructos) y un modelo sin restricciones con una<br />
corre<strong>la</strong>ción interfactor “set free”. Toda diferencia de χ 2 se consideraró<br />
significativa, proporcionando evidencia de <strong>la</strong> validez convergente<br />
(Gatignon et al., 2002).<br />
155
Tab<strong>la</strong> 4.1. Media, desviación típica, Alpha Reliabilities, corre<strong>la</strong>ciones y Alpha de Cronbach<br />
1.- Or. Empr. 4.12 1.13<br />
2.- Experimen. 5.25 1.12<br />
3.-As. Riesgo 4.58 1.39<br />
4.-Entorno 4.79 1.34<br />
5.-Dialogo 5.48 1.08<br />
6.-Dec. Part. 4.58 1.41<br />
7.-Eficacia de <strong>la</strong><br />
innov. Prod.<br />
7.-Eficacia de <strong>la</strong><br />
innov. Proc.<br />
7.-Eficaciencia del<br />
proc. Inno<br />
Mean S.D. CR 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
5.08 1.11<br />
4.92 1.12<br />
4.70 1.22<br />
0.76 (0.84)<br />
0.71 0.26** (0.79)<br />
0.82 0.14* 0.54** (0.74)<br />
0.83 0.23** 0.61** 0.61** (0.83)<br />
0.87 0.30** 0.62** 0.42** 0.55** (0.87)<br />
0.80 0.10 0.47** 0.57** 0.63** 0.51** (0.88)<br />
0.87 0.52** 0.49** 0.40** 0.47** 0.58** 0.34** (0.92)<br />
0.82 0.39** 0.46** 0.43** 0.49** 0.57** 0.42** 0.85** (0.94)<br />
0.86 0.48** 0.51** 0.50** 0.52** 0.50** 0.45** 0.80** 0.79** (0.92)<br />
7.-País 1.55 0.50 - 0.87 -0.22** -0.52** -0.40** -0.08** -0.50** -0.11 -0.23** -0.37** -<br />
8.- Tamaño 3.07 1.60 - 0.31** 0.37** 0.40** 0.34** 0.19** 0.32** 0.29** 0.34** 0.37** -0.37** -<br />
** Coeficiente de corre<strong>la</strong>ción estadísticamente significativo (p
Se testaron <strong>la</strong> dimensionalidad de los constructos a través de <strong>la</strong>s cargas de<br />
los elementos de medición de los factores de primer orden, y <strong>la</strong>s cargas de<br />
los factores de primer orden en los factores de segundo orden. Todas <strong>la</strong>s<br />
cargas fueron superiores a 0,40 y significativas (p
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
próxima al resultado de <strong>la</strong> organizaicón como son los resultados en <strong>la</strong><br />
innovación.<br />
La variable de control, tamaño, no tiene efecto significativo en RI. Existen<br />
numerosos estudios sobre <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre tamaño empresarial e<br />
innovación. La literatura existente asume que, debido a <strong>la</strong> falta de<br />
recursos, <strong>la</strong>s pequeñas empresas están en desventaja para desarrol<strong>la</strong>r sus<br />
innovaciones con respecto a <strong>la</strong>s empresas de mayor tamaño (Aiken y<br />
Hage, 1971; Ettlie y Rubenstein, 1987; Stock et al., 2002). A pesar de esto,<br />
otros trabajos han encontrado una re<strong>la</strong>ción negativa entre el tamaño y <strong>la</strong>s<br />
innovaciones (Aldrich y Auster, 1986; Wade, 1996). Estudios recientes<br />
apuntan hacia que <strong>la</strong> c<strong>la</strong>ve sobre estas re<strong>la</strong>ciones puede deberse a <strong>la</strong>s<br />
características de <strong>la</strong> industria sobre <strong>la</strong> que se realiza el estudio (Moen,<br />
1999; López-Rodríguez y García-Rodríguez, 2005). Algunos de los estudios<br />
demuestran que en industrias de alta intensidad tecnológica el tamaño no<br />
es un factor relevante (Preece et al, 1999; P<strong>la</strong> y Alegre, 2007). En concreto,<br />
en nuestro estudio sobre empresas de mediano nivel tecnológico tampoco<br />
se demuestra que sea un factor relevante, por lo que estaría en<br />
consonancia con aquellos estudios que indican que esta re<strong>la</strong>ción tiene que<br />
ver con <strong>la</strong> industria sobre <strong>la</strong> que se realiza el estudio (Moen, 1999; López-<br />
Rodríguez y García-Rodríguez, 2005).<br />
158
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
Figura 4.2: Modelo de Ecuaciones Estructurales<br />
Orientación<br />
Emprendedora<br />
0.337**<br />
Por otro <strong>la</strong>do, <strong>la</strong> variable de control localización (indicada como “país” en<br />
<strong>la</strong> figura) tampoco muestra resultados significativos. Esto está en<br />
consonancia con <strong>la</strong> afirmación de que en ambos países <strong>la</strong>s condiciones son<br />
muy parecidas, por lo que en esta muestra se pueden tratar los datos de<br />
forma conjunta.<br />
4.5 DISCUSIÓN<br />
0.376**<br />
R 2 =0.114<br />
Capacidad de<br />
Aprendizaje<br />
Organizativo<br />
El emprendimiento y <strong>la</strong> orientación emprendedora han recibido una gran<br />
atención en los últimos años. A pesar de que se considera que <strong>la</strong> OE tiene<br />
un impacto positivo en el resultado de <strong>la</strong> organización, esta re<strong>la</strong>ción<br />
requiere un mayor análisis y por ello en este estudio proponemos una<br />
medida próxima al resultado como es el resultado en <strong>la</strong> innovación.<br />
Nuestro estudio sugiere que <strong>la</strong> orientación emprendedora actúa como<br />
antecedente de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo y el resultado en<br />
innovación. Al mismo tiempo, <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo<br />
actúa como variable mediadora entre ambas. Este estudio realiza una<br />
contribución importante a <strong>la</strong>s investigaciones recientes de <strong>la</strong> orientación<br />
emprendedora sobre el performance (Rauch et al. 2009).<br />
159<br />
0.540**<br />
Desempeño<br />
en Innovación<br />
País<br />
Χ 2= 1764.697 p=0.000; d.f.=978; χ 2 /d.f.=1.80<br />
NFI=0.96; NNFI=0.98; CFI=0.983; RMSEA=0.67<br />
0.01 n.s.<br />
R 2 =0.571<br />
0.05 n.s.<br />
Tamaño
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
También sugerimos que los factores organizativos que facilitan el proceso<br />
de aprendizaje de <strong>la</strong> organización inciden en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre OE y los<br />
resultados en <strong>la</strong> innovación al estar ambas variables mediadas por CAO.<br />
La OE es una actitud que debe ser reforzada por ciertas condiciones<br />
organizativas que facilitan el aprendizaje y producen implicaciones<br />
positivas en el resultado en <strong>la</strong> organización. El aprendizaje organizativo es<br />
un elemento básico de <strong>la</strong> innovación, al igual que se consideran esenciales<br />
el desarrollo de nuevas ideas o conceptos para desarrol<strong>la</strong>r nuevos<br />
productos y procesos.<br />
El presente estudio contribuye a <strong>la</strong> literatura de emprendimiento<br />
proporcionando evidencia de <strong>la</strong> importancia de ciertas características<br />
organizativas, CAO, para que <strong>la</strong> orientación emprendedora tenga un<br />
impacto positivo en los resultados en <strong>la</strong> innovación y ello contribuya en<br />
los resultados empresariales. Esta actitud directiva requiere ciertas<br />
prácticas organizativas que catalizan sus efectos en <strong>la</strong>s organizaciones,<br />
específicamente en los resultados en innovación. La OE tiene un efecto<br />
directo pequeño en los resultados en innovación si no se facilita el<br />
aprendizaje en <strong>la</strong> organización. El aprendizaje organizativo ha sido<br />
seña<strong>la</strong>do como una joven área de investigación en el emprendimiento<br />
(B<strong>la</strong>ckburn y Kova<strong>la</strong>inen, 2009); nosotros sostenemos que mucha de su<br />
relevancia radica en sus efectos sobre los resultados en innovación y<br />
consecuentemente en el resultado general.<br />
La orientación emprendedora puede ser considerada como un<br />
determinante importante del resultado general. Sin embargo, Rauch et al.<br />
(2009) seña<strong>la</strong>n que existen considerables variaciones cuando se testa <strong>la</strong><br />
re<strong>la</strong>ción OE- resultado general. Sugerimos que esta variación puede<br />
deberse a que no se han tenido en cuenta <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones intermedias.<br />
Nuestros resultados pueden explicar por qué algunas empresas pueden<br />
manifestar un resultado inferior mientras sus directivos muestran una<br />
c<strong>la</strong>ra orientación hacia el emprendimiento: puede ser que no exista<br />
160
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
aprendizaje organizativo. Esta afirmación está en consonancia con el<br />
enfoque basado en recursos: <strong>la</strong> habilidad por parte de <strong>la</strong> dirección de<br />
facilitar el aprendizaje organizativo generando en <strong>la</strong> organización <strong>la</strong><br />
capacidad de aprender será muy importante en <strong>la</strong> creación de ventajas<br />
competitivas sostenibles y, por tanto, en <strong>la</strong> obtención de rentas<br />
económicas.<br />
Esta investigación proporciona un completo estudio sobre los efectos de<br />
<strong>la</strong> orientación emprendedora sobre el resultado general mediante <strong>la</strong><br />
aproximación del resultado en innovación y ofrece una explicación de <strong>la</strong>s<br />
diferencias en resultado que se pueden encontrar dentro de una misma<br />
industria (Nelson, 1991; Zott, 2003; Easterby-Smith y Prieto, 2008). Dado<br />
que los resultados empresariales pueden variar entre los productores de<br />
azulejo cerámico, apuntamos hacia que esta asimetría puede ser debida a<br />
<strong>la</strong>s actitudes gerenciales (OE), características organizativas que faciliten el<br />
aprendizaje organizativo (CAO) y el resultado en innovación. Los<br />
resultados sugieren que <strong>la</strong> ventaja competitiva en <strong>la</strong> industria cerámica<br />
requiere que <strong>la</strong>s estrategias empresariales se centren en <strong>la</strong> OE y <strong>la</strong> CAO<br />
para lograr obtener mayores resultados en los resultados en <strong>la</strong> innovación<br />
y esto incremente el resultado general. Estos hal<strong>la</strong>zgos representan una<br />
contribución en el extremo de <strong>la</strong> gestión estratégica que puede explicar <strong>la</strong>s<br />
diferencias en resultados dentro de una industria particu<strong>la</strong>r.<br />
Además, pretendemos contribuir en <strong>la</strong> literatura sobre aprendizaje<br />
organizativo sugiriendo <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong> actitud de los directivos para<br />
implementar de forma efectiva los factores o condiciones para aprender<br />
dentro de <strong>la</strong>s organizaciones.<br />
Como implicaciones prácticas nos gustaría subrayar que a pesar de que los<br />
directivos reconocen <strong>la</strong> importancia del emprendimiento y de <strong>la</strong> OE, su<br />
participación para ello suele ser escasa y suelen ignorar <strong>la</strong>s demandas que<br />
realiza el resto de <strong>la</strong> organización en el proceso hacia su consecución. En<br />
161
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
este artículo, sugerimos implementar un enfoque de aprendizaje<br />
organizativo cuando <strong>la</strong> dirección ha escogido seguir una OE. Una acción<br />
directiva inicial puede ser mejorar <strong>la</strong>s dimensiones de CAO –<br />
experimentación, asunción de riesgo, interacción con el entorno, dialogo y<br />
toma de decisiones participativa – así ese proceso de aprendizaje y de<br />
innovación puede ser más fructífero. Además, destacamos <strong>la</strong> importancia<br />
de medir los efectos de <strong>la</strong> OE en <strong>la</strong> organización mediante el análisis de<br />
sus resultados en innovación. La innovación es un concepto c<strong>la</strong>ve para <strong>la</strong>s<br />
organizaciones de hoy, ya que representa <strong>la</strong> esencia de sus ventajas<br />
competitivas.<br />
Las conclusiones de este trabajo están sujetas a una serie de limitaciones<br />
algunas de <strong>la</strong>s cuales sugieren futuras líneas de investigación. En primer<br />
lugar, analizando el contenido, nos hemos centrado en <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo como una variable intermedia entre <strong>la</strong> OE y los<br />
resultados en innovación. Sin embargo, no se han tenido en cuenta otros<br />
temas re<strong>la</strong>cionados con el aprendizaje como el aprendizaje adaptativo y<br />
generativo o <strong>la</strong>s intervenciones de los recursos humanos (Sadler-Smith y<br />
Badger 1998; Wang, 2008; Chiva et al., 2010) que pueden ser incorporados<br />
en nuestro modelo conceptual. Investigaciones futuras podrían estar<br />
encaminadas a explicar el rol de estos conceptos en nuestro modelo. En<br />
segundo lugar, existen otras limitaciones basadas en los métodos<br />
utilizados. Como con otras investigaciones cross-sectional, <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción<br />
testada en este estudio representa una foto en el tiempo. Mientras que es<br />
probable que <strong>la</strong>s condiciones bajo <strong>la</strong>s cuales se recogieron los datos sigan<br />
siendo iguales, no tenemos garantías de que esto sea así. Además, <strong>la</strong> OE<br />
puede tener implicaciones adicionales en los resultados en innovación en<br />
el <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo, pero como esto no es un estudio longitudinal no podemos<br />
evaluar los efectos. Futuros estudios longitudinales podrían evaluar los<br />
outcomes de <strong>la</strong> OE en el <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo de ambos, CAO y los resultados en <strong>la</strong><br />
innovación.<br />
162
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
El uso de esca<strong>la</strong>s de medida constituye un método aceptado de<br />
investigación que es particu<strong>la</strong>rmente útil para testar <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones teóricas<br />
entre los conceptos, como lo son <strong>la</strong> OE, <strong>la</strong> CAO y los resultados en <strong>la</strong><br />
innovación (Covin et al., 2006; Green et al., 2008). Sin embargo, se podría<br />
profundizar más en estas re<strong>la</strong>ciones si utilizamos métodos de<br />
investigación cualitativa utilizando algunos de los casos de <strong>la</strong> muestra.<br />
Esto puede ser útil para describir casos concretos que no siguen <strong>la</strong>s<br />
hipó<strong>tesis</strong> de este estudio (como por ejemplo aquellos casos de empresas<br />
que tengan una alta orientación emprendedora pero un bajo resultado en<br />
<strong>la</strong> innovación).<br />
Debido a que esta investigación se basa en el análisis de una única<br />
industria, se obtienen los beneficios de tratar con empresas que son<br />
probablemente homogéneas tecnológicamente y económicamente. Sin<br />
embargo, se debe enfatizar que los resultados de una única industria<br />
deben de ser tratados con precaución. Futuros estudios podrían ir<br />
encaminados a evaluar los efectos de <strong>la</strong> orientación emprendedora en <strong>la</strong><br />
capacidad de aprendizaje organizativo y los resultados en <strong>la</strong> innovación<br />
en otras industrias.<br />
163
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
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171
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
4.7 ANEXOS<br />
Anexo 1)<br />
Tab<strong>la</strong> 4.2: Ítems del cuestionario<br />
A.- CAPACIDAD DE APRENDIZAJE ORGANIZATIVO (CAO)<br />
Por favor, indique el grado de acuerdo / desacuerdo con los aspectos que se<br />
indican a continuación.<br />
Con respecto a <strong>la</strong> aportación de ideas, <strong>la</strong> experimentación y <strong>la</strong> creatividad:<br />
Totalmente en desacuerdo Totalmente de acuerdo<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
40. La gente recibe apoyo cuando presenta nuevas ideas. 1-2-3-4-5-6-7<br />
41. La iniciativa recibe a menudo una respuesta favorable, por lo que<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
<strong>la</strong> gente se siente animada a p<strong>la</strong>ntear nuevas ideas.<br />
Con respecto a <strong>la</strong> aceptación del riesgo:<br />
42. Se estimu<strong>la</strong> a los trabajadores para que acepten riesgos. 1-2-3-4-5-6-7<br />
43. La gente a menudo se "<strong>la</strong>nza" hacia temas que desconocen. 1-2-3-4-5-6-7<br />
44. Se presentan habitualmente ideas que todavía no han sido<br />
probadas.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto al entorno:<br />
45. Es parte del trabajo de todos recoger información sobre lo que<br />
pasa fuera de <strong>la</strong> empresa.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
46. Tenemos sistemas y procedimientos para recibir, cotejar y<br />
compartir información del exterior de <strong>la</strong> empresa.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
47. Se alienta <strong>la</strong> interacción con el entorno. 1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto al diálogo, <strong>la</strong> comunicación y el trabajo en equipo:<br />
48. A los empleados se les anima a comunicarse entre sí. 1-2-3-4-5-6-7<br />
49. Hay una comunicación abierta en los grupos de trabajo. 1-2-3-4-5-6-7<br />
50. Los directivos facilitan <strong>la</strong> comunicación. 1-2-3-4-5-6-7<br />
51. El trabajo en equipo entre personas de distintos departamentos es<br />
una práctica habitual.<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
Con respecto a <strong>la</strong> participación:<br />
52. Los directivos implican frecuentemente a empleados en<br />
decisiones importantes.<br />
53. La política de <strong>la</strong> empresa está significativamente influida por <strong>la</strong>s<br />
opiniones de los empleados.<br />
54. Toda <strong>la</strong> gente participa en <strong>la</strong> determinación de <strong>la</strong> política y<br />
estrategia de <strong>la</strong> empresa.<br />
55. La gente se siente involucrada en <strong>la</strong>s principales decisiones de <strong>la</strong><br />
empresa.<br />
172<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
1-2-3-4-5-6-7
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
B.- DESEMPEÑO INNOVADOR<br />
Por favor, indique el nivel de desempeño de su empresa en comparación con <strong>la</strong><br />
competencia en los siguientes aspectos:<br />
Eficacia de <strong>la</strong> innovación de productos<br />
Mucho peor En el mismo nivel Mucho mejor<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
56. Reemp<strong>la</strong>zo de los productos desfasados 1 2 3 4 5 6 7<br />
57. Ampliación de <strong>la</strong> gama de productos 1 2 3 4 5 6 7<br />
58. Desarrollo de nuevas gamas de productos 1 2 3 4 5 6 7<br />
59. Desarrollo de productos respetuosos con el medio ambiente 1 2 3 4 5 6 7<br />
60. Evolución de <strong>la</strong> cuota de mercado 1 2 3 4 5 6 7<br />
61. Apertura de nuevos mercados exteriores 1 2 3 4 5 6 7<br />
62. Apertura de nuevos mercados nacionales 1 2 3 4 5 6 7<br />
Eficacia de <strong>la</strong> innovación de procesos:<br />
Mucho peor En el mismo nivel Mucho mejor<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
63. Mejora de <strong>la</strong> flexibilidad productiva 1 2 3 4 5 6 7<br />
64. Disminución de los costes de producción mediante reducción de<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
los costes <strong>la</strong>borales por unidad<br />
65. Disminución de los costes de producción mediante recortes en los<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
consumos de materiales<br />
66. Disminución de los costes de producción mediante recortes en el<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
consumo de energía<br />
67. Disminución de los costes de producción mediante reducción de <strong>la</strong><br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
tasa de producción rechazada<br />
68. Disminución de los costes de producción mediante reducción de<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
los costes de diseño<br />
69. Disminución de los costes de producción mediante reducción del<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
ciclo de fabricación<br />
70. Mejora de <strong>la</strong> calidad del producto 1 2 3 4 5 6 7<br />
71. Mejora de <strong>la</strong>s condiciones <strong>la</strong>borales 1 2 3 4 5 6 7<br />
72. Reducción de los daños medio-ambientales 1 2 3 4 5 6 7<br />
Eficiencia del proceso de innovación:<br />
Mucho peor En el mismo nivel Mucho mejor<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
73. Duración media de los proyectos de innovación (p.e. nuevos 1 2 3 4 5 6 7<br />
productos, nuevos componentes)<br />
74. Dedicación para el desarrollo de proyectos de innovación (horas de 1 2 3 4 5 6 7<br />
trabajo de todas <strong>la</strong>s personas implicadas)<br />
75. Coste medio por proyecto de innovación 1 2 3 4 5 6 7<br />
76. Grado de satisfacción general con <strong>la</strong> eficiencia de los proyectos de 1 2 3 4 5 6 7<br />
innovación<br />
173
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
C.- ORIENTACIÓN EMPRENDEDORA<br />
Por favor caracterice <strong>la</strong> postura estratégica de su empresa:<br />
Totalmente<br />
de acuerdo<br />
con <strong>la</strong> frase<br />
de <strong>la</strong><br />
izquierda<br />
174<br />
Totalmente<br />
de acuerdo<br />
con <strong>la</strong> frase<br />
de <strong>la</strong><br />
derecha<br />
1 2 3 4 5 6 7<br />
En general, los altos directivos de esta empresa ponen énfasis ...<br />
77. En acciones de marketing para<br />
productos ya existentes<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
En actividades de I+D, liderazgo<br />
tecnológico e innovaciones.<br />
¿Cuántas nuevas líneas de producto ha introducido su empresa en el mercado en los<br />
últimos cinco años?<br />
78. Ninguna<br />
productos<br />
nueva gama de<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
Muchas gamas nuevas de productos<br />
79. Los cambios en líneas de<br />
Los cambios en líneas de productos<br />
producto han sido 1-2-3-4-5-6-7 han sido generalmente radicales<br />
principalmente pequeños<br />
En re<strong>la</strong>ción con sus competidores, esta empresa....<br />
80. Normalmente responde a <strong>la</strong>s<br />
Normalmente inicia acciones a <strong>la</strong>s<br />
acciones que inician los 1-2-3-4-5-6-7 que los competidores responden<br />
competidores<br />
81. En muy pocas ocasiones es <strong>la</strong><br />
Muy frecuentemente es <strong>la</strong> primera<br />
primera empresa en introducir<br />
empresa en introducir nuevos<br />
nuevos productos, técnicas 1-2-3-4-5-6-7 productos, técnicas administrativas,<br />
administrativas,<br />
productivas, etc.<br />
tecnologías<br />
tecnologías productivas, etc.<br />
82. Generalmente intenta evitar<br />
Generalmente adopta una postura<br />
confrontaciones con sus<br />
competidores, prefiriendo una<br />
postura de "vive y deja vivir"<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
muy agresiva frente a sus<br />
competidores<br />
Por lo general, los altos directivos de esta empresa tienen ...<br />
83. Gran preferencia por proyectos<br />
Una gran preferencia por proyectos<br />
de bajo<br />
rentabilidades<br />
seguras)<br />
riesgo (con<br />
normales y<br />
1-2-3-4-5-6-7<br />
de alto riesgo (con posibilidades de<br />
rentabilidades muy elevadas)<br />
En general, los altos directivos de esta empresa creen que...<br />
84. Debido a <strong>la</strong> naturaleza del<br />
Debido a <strong>la</strong> naturaleza del entorno,<br />
entorno, es mejor explorarlo<br />
son necesarios actos valientes y de<br />
gradualmente a través de una 1-2-3-4-5-6-7 gran ca<strong>la</strong>do para alcanzar los<br />
actuación tímida y de forma<br />
progresiva<br />
objetivos de <strong>la</strong> empresa<br />
Cuando afrontamos tomas de decisiones en condiciones de elevada incertidumbre,<br />
nuestra empresa...<br />
85. Generalmente adopta una<br />
Generalmente, adopta una postura<br />
postura cautelosa de “esperar y<br />
valiente y agresiva para maximizar<br />
ver” para minimizar <strong>la</strong> 1-2-3-4-5-6-7 <strong>la</strong> probabilidad de explorar<br />
probabilidad de adoptar<br />
oportunidades potenciales<br />
decisiones erróneas
Anexo 2)<br />
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
Figura 4.3: AFC de <strong>la</strong> Capacidad de Aprendizaje Organizativo<br />
EX1<br />
EX2<br />
AR1<br />
AR2<br />
IE1<br />
IE2<br />
IE3<br />
DI1<br />
DI2<br />
DI3<br />
DI4<br />
DP1<br />
DP2<br />
DP3<br />
0.72(1)<br />
0.90<br />
0.87(1)<br />
0.68<br />
0.68(1)<br />
0.81<br />
0.89<br />
0.84(1)<br />
0.78<br />
0.81<br />
0.74<br />
0.78(1)<br />
0.87<br />
0.87<br />
Experiment.<br />
Asunción de<br />
riesgos<br />
Interacción<br />
con el<br />
entorno<br />
Diálogo<br />
Toma de<br />
decisiones<br />
participativa<br />
175<br />
0.84(1)<br />
0.92<br />
0.74<br />
0.78<br />
Χ 2= 120 (p=0.000); d.f.=72;<br />
NFI=0.92; NNFI=0.96; CFI=0.96; RMSEA=0.06<br />
0.85<br />
Capacidad de<br />
aprendizaje<br />
organizativo<br />
(1) El parámetro fue igua<strong>la</strong>do a 1 para fijar <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> a <strong>la</strong> variable <strong>la</strong>tente. Todos los<br />
parámetros estimados son estandarizados y significativos para un nivel de confianza<br />
del 95% (t≥ 1.96).
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Figura 4.4: AFC del Desempeño Innovador<br />
EP1<br />
EP2<br />
EP3<br />
EP4<br />
EP5<br />
EP6<br />
EP7<br />
EX1<br />
EX2<br />
EX3<br />
EX4<br />
EX5<br />
EX6<br />
EX7<br />
EX8<br />
EX9<br />
EX10<br />
EZ1<br />
EZ2<br />
EZ3<br />
EZ4<br />
0.81(1)<br />
0.76<br />
0.82<br />
0.76<br />
0.83<br />
0.76<br />
0.74<br />
0.80(1)<br />
0.78<br />
0.79<br />
0.79<br />
0.82<br />
0.69<br />
0.80<br />
0.79<br />
0.83<br />
0.77<br />
0.87(1)<br />
0.86<br />
0.84<br />
0.86<br />
Eficacia de <strong>la</strong><br />
innovación de<br />
productos<br />
Eficacia de <strong>la</strong><br />
innovación<br />
de procesos<br />
Eficiencia del<br />
proceso de<br />
innovación<br />
176<br />
0.98(1)<br />
0.95<br />
0.89<br />
Desempeño<br />
innovador<br />
Χ 2= 411.5 (p=0.000); d.f.=186; χ 2 /d.f.= 2.21<br />
NFI=0.853; NNFI=0.902; CFI=0.913; RMSEA=0.082<br />
(1) El parámetro fue igua<strong>la</strong>do a 1 para fijar <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> a <strong>la</strong> variable <strong>la</strong>tente. Todos los<br />
parámetros estimados son estandarizados y significativos para un nivel de confianza<br />
del 95% (t≥ 1.96).
Capítulo 4:El papel mediador de <strong>la</strong> CAO entre OE y Desempeño Innovador<br />
Figura 4.5: AFC de Orientación Emprendedora<br />
OE1<br />
OE2<br />
OE3<br />
OE4<br />
OE5<br />
OE6<br />
OE7<br />
OE8<br />
OE9<br />
0.64(1)<br />
0.48<br />
0.47<br />
0.65<br />
0.67<br />
0.56<br />
0.74<br />
0.67<br />
0.63<br />
177<br />
Orientación<br />
Emprendedora<br />
Χ 2= 50.86(p=0.000); d.f.=27<br />
NFI=0.874; NNFI=0.910; CFI=0.933; RMSEA=0.073<br />
(1) El parámetro fue igua<strong>la</strong>do a 1 para fijar <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> a <strong>la</strong> variable <strong>la</strong>tente. Todos los<br />
parámetros estimados son estandarizados y significativos para un nivel de confianza<br />
del 95% (t≥ 1.96).
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
178
179<br />
Capítulo 5:<br />
Competencia en Tecnología de <strong>la</strong><br />
Información y Éxito Comercial de <strong>la</strong><br />
Innovación<br />
RESUMEN<br />
Muchas compañías han desarrol<strong>la</strong>do estrategias que incluyen fuertes<br />
inversiones en tecnologías de <strong>la</strong> información con el objetivo de mejorar sus<br />
resultados en innovación de productos. Sin embargo, ciertos trabajos<br />
cuestionan incluso su re<strong>la</strong>ción positiva con los resultados empresariales y<br />
sugieren <strong>la</strong> mediación de otros aspectos. Este estudio propone al éxito<br />
comercial de <strong>la</strong> innovación como una variable dependiente de <strong>la</strong><br />
competencia en tecnología de <strong>la</strong> información. Basándonos en <strong>la</strong> literatura<br />
sobre <strong>la</strong> perspectiva de capacidades dinámicas proponemos que <strong>la</strong>s<br />
competencias de aprendizaje interno y externo juegan un papel c<strong>la</strong>ve en <strong>la</strong><br />
re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong>s competencias en tecnología de <strong>la</strong> información y el éxito<br />
comercial de <strong>la</strong> innovación. Utilizamos ecuaciones estructurales para<br />
testar <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> en una muestra de 186 empresas azulejeras de <strong>la</strong><br />
industria cerámica. Los resultados sugieren que <strong>la</strong>s competencias en<br />
tecnología de <strong>la</strong> información mejoran el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación y<br />
que esta re<strong>la</strong>ción está totalmente mediada por <strong>la</strong>s competencias de<br />
aprendizaje interno y externo.<br />
Pa<strong>la</strong>bras c<strong>la</strong>ve: Competencia en tecnología de <strong>la</strong> información, capacidades<br />
dinámicas, éxito comercial, aprendizaje interno, aprendizaje externo.<br />
C<strong>la</strong>sificación JEL: M10, M15, O32
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
180
5.1 INTRODUCCIÓN<br />
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
La tecnología de <strong>la</strong> información (TI) permite ahorrar tiempo, hacer una<br />
gestión más eficaz y mejorar <strong>la</strong> información, dado que es un facilitador de<br />
<strong>la</strong> información sobre conocimientos c<strong>la</strong>ve (Phiri, 1999). Por ello, avances<br />
recientes en tecnologías de <strong>la</strong> información han creado cambios sustanciales<br />
en los entornos de negocios y especialmente cambios en <strong>la</strong>s prácticas de<br />
negocios; acortando los ciclos productivos, permitiendo el rápido<br />
desarrollo tecnológico y originando finalmente, entornos hiper-<br />
competitivos (Wind y Mahajan, 1997; Segars y Grover, 1999; Segars y Dean<br />
2000).<br />
Las empresas que son capaces de realizar cambios de forma rápida y<br />
adaptarse a <strong>la</strong>s nuevas tecnologías pueden poseer una ventaja competitiva<br />
frente al resto de competidores que sean más lentos y estén peor<br />
informados (Barney et al., 2001). Sin embargo, existen estudios que no<br />
muestran una re<strong>la</strong>ción positiva entre <strong>la</strong> TI y el resultado de <strong>la</strong> compañía<br />
(Devaraj y Kohli, 2003). Una explicación para esto es que <strong>la</strong> TI es necesaria<br />
pero insuficiente para conseguir una ventaja competitiva (Clemons y Row,<br />
1991), por lo que existen investigadores de gestión estratégica que <strong>la</strong><br />
re<strong>la</strong>cionan con otros componentes específicos de <strong>la</strong> estrategia de <strong>la</strong><br />
empresa (Rivard et al., 2006), así como con componentes derivados de <strong>la</strong><br />
perspectiva de recursos y capacidades (Tippins y Sohi, 2003; Lin et al.,<br />
2008). Éstos últimos afirman que no sólo es importante <strong>la</strong> inversión<br />
realizada por parte de <strong>la</strong> empresa en tecnologías de <strong>la</strong> información, sino<br />
que también será c<strong>la</strong>ve el aprendizaje organizativo y el conocimiento<br />
poseído por <strong>la</strong> compañía.<br />
El concepto de “conocimiento como recurso” de <strong>la</strong> compañía sugiere que<br />
el conocimiento puede ser transmitido, recombinado, y utilizado para<br />
crear valor (Grant, 1996a). Por lo tanto, gracias a <strong>la</strong> creación y transferencia<br />
efectiva del conocimiento se pueden crear ventajas competitivas (A<strong>la</strong>vi,<br />
2000), especialmente gracias al conocimiento tácito colectivo (Brown y<br />
181
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Eisenhardt, 1997; Orlikowski, 2002; Nonaka, 1994). El concepto de<br />
reconfiguración de recursos es esencial en <strong>la</strong> habilidad dinámica de<br />
coordinar, expandir y reconfigurar los recursos de conocimiento en <strong>la</strong><br />
construcción de nuevas competencias funcionales (Iansiti y C<strong>la</strong>rk, 1994;<br />
Pisano, 1994; Teece y Pisano, 1994; Eisenhardt y Brown, 1999).<br />
Debido a que <strong>la</strong>s capacidades dinámicas surgen del aprendizaje (Zollo y<br />
Winter, 2002; Marsh y Stock, 2006; Easterby-Smith y Prieto, 2008) es muy<br />
fácil conectar al conocimiento con <strong>la</strong>s capacidades dinámicas de <strong>la</strong><br />
compañía, ya que podemos entender <strong>la</strong> capacidad de reconfiguración de<br />
conocimiento como una capacidad dinámica. El aprendizaje interno se<br />
refiere al nuevo conocimiento creado por <strong>la</strong> propia acumu<strong>la</strong>ción de<br />
experiencia utilizando sus recursos mientras que el aprendizaje externo se<br />
refiere al nuevo conocimiento creado e integrado dentro de <strong>la</strong> empresa a<br />
través de <strong>la</strong> interacción con el entorno y otras organizaciones (Kessler et<br />
al.,2000; Chang, 2003; Bapuji y Crossan, 2004).<br />
La creación y uso del conocimiento está asociada con <strong>la</strong> innovación, ya que<br />
esta consiste en <strong>la</strong> explotación exitosa de nuevas ideas (Amabile et al.,<br />
1996). Podemos considerar que el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación es una<br />
aproximación de los resultados generales de <strong>la</strong> compañía, ya que existen<br />
estudios que afirman que aquel<strong>la</strong>s empresas con mayores resultados de <strong>la</strong><br />
innovación obtienen mayor desempeño general (Darroch, 2005).<br />
Aunque recientemente se ha probado <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre competencia en<br />
tecnología de <strong>la</strong> información, conocimiento o aprendizaje y resultados de<br />
<strong>la</strong> compañía (Tippins y Sohi, 2003; Lin et al., 2008) algunos estudios no han<br />
sido concluyentes (Powell y Dent-Micalef, 1997; Devaraj y Kohli, 2003).<br />
Por este motivo, en el presente trabajo proponemos que es necesario<br />
profundizar en el entendimiento de esta re<strong>la</strong>ción. Para ello establecemos<br />
una nueva variable dependiente muy ligada a los resultados<br />
empresariales, el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación. Estudios anteriores<br />
consideran que el resultado innovador tiene un efecto directo en el<br />
182
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
resultado general de <strong>la</strong> compañía (Wheelwright y C<strong>la</strong>rk 1992; Renko et al.<br />
2009; Baker y Sinku<strong>la</strong> 2009).<br />
Además, algunos trabajos que tratan de explicar <strong>la</strong> existencia de una<br />
re<strong>la</strong>ción entre TI e innovación, tanto de forma teórica (Davenport, 1993;<br />
Holsapple y Singh, 2003, Davenport et al., 2008) como empírica<br />
(Sabherwal and Sabherwal, 2005), obtienen resultados contradictorios<br />
(Joshi et al., 2010), sobre todo en lo que se refiere al éxito en <strong>la</strong><br />
comercialización de los productos. En el presente estudio proponemos que<br />
dos variables intermedias ayudan a explicar esta re<strong>la</strong>ción y posibilitan el<br />
entendimiento de por qué en ocasiones <strong>la</strong>s inversiones en tecnología de <strong>la</strong><br />
información no generan mayores resultados innovadores. Estas variables<br />
son <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje interno y externo. La competencia en<br />
tecnología de <strong>la</strong> información reforzará <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje<br />
interno y externo y serán estas <strong>la</strong>s que afectarán al éxito comercial de <strong>la</strong><br />
innovación.<br />
Utilizamos ecuaciones estructurales para testar <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> en una<br />
muestra de 186 empresas italianas y españo<strong>la</strong>s del sector azulejero<br />
cerámico. Estas empresas representan el 50% del total del target objetivo.<br />
Los resultados proporcionan evidencia empírica de que <strong>la</strong> competencia en<br />
TI está positivamente re<strong>la</strong>cionada con el aprendizaje interno y externo. Y<br />
en segundo lugar, <strong>la</strong>s competencias en aprendizaje interno y externo<br />
juegan un rol importante en determinar los efectos de <strong>la</strong> TI en el éxito<br />
comercial de <strong>la</strong> innovación.<br />
En <strong>la</strong>s secciones siguientes revisamos <strong>la</strong> literatura sobre competencia en<br />
TI, competencia en aprendizaje interno y externo y capacidades<br />
dinámicas. Seguidamente, presentamos <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong>, describimos <strong>la</strong><br />
metodología utilizada en el estudio empírico, detal<strong>la</strong>mos <strong>la</strong>s medidas de<br />
<strong>la</strong>s variables dependientes e independientes y analizamos los principales<br />
resultados alcanzados en el estudio. El trabajo concluye con <strong>la</strong>s<br />
implicaciones académicas y prácticas de <strong>la</strong> investigación.<br />
183
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
5.2 MARCO TEÓRICO GENERAL<br />
5.2.1 Competencia en Tecnología de <strong>la</strong> Información<br />
Antes de 1990 mucha de <strong>la</strong> literatura sobre TI se basaba en su potencial<br />
para alterar todo un conjunto de variables estratégicas y de estructura<br />
industrial, incluyendo <strong>la</strong>s posiciones en costes, economías de esca<strong>la</strong> y<br />
poder de mercado (Cash y Konsynski, 1985; Porter, 1985; Clemons, 1986).<br />
Posteriormente, <strong>la</strong> literatura se ha interesado por <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> TI y<br />
componentes específicos de <strong>la</strong> estrategia empresarial, como <strong>la</strong> exploración<br />
del entorno (Maier et al., 1997), <strong>la</strong>s ventajas competitivas (Mata et al.,<br />
1995), los resultados empresariales (Dollinger, 1984; Powell y Dent-<br />
Micallef, 1997; Bharadwaj, 2000), <strong>la</strong> acumu<strong>la</strong>ción de conocimiento (Grant,<br />
1996), el aprendizaje organizativo (Tanriverdi, 2006) y <strong>la</strong> innovación<br />
abierta (Huang, 2011).<br />
Las estrategias en TI pueden ser c<strong>la</strong>sificadas en dos categorías generales:<br />
(1) <strong>la</strong>s TI de exploración del entorno y (2) <strong>la</strong>s estrategias de uso de <strong>la</strong> TI<br />
(Bergeron et al., 2004). (1) Las estrategias de TI de exploración del entorno<br />
suelen implementarse a través de herramientas de compartición de<br />
conocimiento tácito. Por otro <strong>la</strong>do, (2) <strong>la</strong>s estrategias de <strong>la</strong> empresa en TI<br />
suelen poner más atención en <strong>la</strong>s estrategias de uso de <strong>la</strong> TI y<br />
consecuentemente invierten más recursos en estas. Esto es debido al<br />
énfasis que se le otorga a <strong>la</strong> conversión de conocimiento explícito en<br />
documentos para que se puedan compartir electrónicamente a través de<br />
intranets. Sin embargo, para compartir el conocimiento tácito se suelen<br />
utilizar estrategias que requieran de re<strong>la</strong>ciones interpersonales y por lo<br />
tanto no es necesaria tanta inversión en TI. Éstas pueden incluir redes de<br />
discusión online, videoconferencias, e-mail, así como otras herramientas<br />
de co<strong>la</strong>boración (Scheepers et al., 2004).<br />
Por el momento existen muchos estudios que hacen referencia a <strong>la</strong><br />
inversión en TI (Sircar et al., 2000; Thatcher y Oliver, 2001), dando por<br />
hecho que una mayor inversión mejorará el valor de <strong>la</strong> TI en <strong>la</strong> compañía.<br />
184
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Este enfoque subestima cuestiones como <strong>la</strong> obsolescencia de los equipos o<br />
el rápido decrecimiento del precio del hardware, que provoca que mucho<br />
del material que tiene <strong>la</strong> compañía pierda su valor de forma rápida. Por<br />
ello, en el presente estudio asumimos un enfoque de competencia.<br />
Consideramos que lograr <strong>la</strong> competencia con respecto a <strong>la</strong>s herramientas y<br />
procesos utilizados para gestionar <strong>la</strong> información ha adquirido mucha<br />
importancia dado el importante incremento de información en el mercado<br />
actual.<br />
Existen diversos autores que han aportado una definición al concepto<br />
“Competencia en TI” (CTI). Si los c<strong>la</strong>sificamos de forma cronológica<br />
destacaríamos en primer lugar <strong>la</strong> aportación de Ross et al., (1996) que<br />
define a esta competencia como <strong>la</strong> habilidad de contro<strong>la</strong>r los costes<br />
re<strong>la</strong>cionados con TI, ofrecer los sistemas cuando sea necesario, y afectar a<br />
los objetivos de negocio mediante <strong>la</strong> aplicación de TI. Seguidamente,<br />
Sambarmurthy y Zmud (1997) y Feeny y Wilcocks (1998), se refieren a <strong>la</strong><br />
competencia en TI como los activos distintivos, competencias,<br />
conocimientos, procesos y re<strong>la</strong>ciones que permiten a <strong>la</strong>s empresas<br />
adquirir, desplegar y gestionar los productos y servicios de TI en <strong>la</strong><br />
configuración de <strong>la</strong>s innovaciones y <strong>la</strong>s estrategias empresariales.<br />
Bharadwaj (2000) <strong>la</strong> entiende como <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de<br />
movilizar y desplegar <strong>la</strong> base de recursos de TI en combinación o co-<br />
presencia con otros recursos y capacidades. Nosotros nos quedamos con <strong>la</strong><br />
definición de Tippins y Sohi (2003), en <strong>la</strong> que se define como el grado en<br />
que <strong>la</strong> empresa es conocedora de <strong>la</strong> forma de gestionar efectivamente <strong>la</strong> TI<br />
para gestionar <strong>la</strong> información dentro de <strong>la</strong> empresa. Estos autores<br />
c<strong>la</strong>sifican <strong>la</strong> TI en distintas categorías (Bharadwaj, 2000) sugiriendo tres<br />
dimensiones para <strong>la</strong> medición del concepto. En este trabajo asumimos esta<br />
medición de Tippins y Sohi (2003) en <strong>la</strong> que el concepto es valorado como<br />
un constructo de segundo orden compuesto por tres factores de primer<br />
orden. Estos factores tienen un nivel de importancia simi<strong>la</strong>r; representan<br />
185
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
recursos co-especializados que proporcionan una medida de <strong>la</strong> habilidad<br />
de <strong>la</strong> organización para comprender y utilizar herramientas TIC y<br />
procesos necesarios para gestionar el mercado y <strong>la</strong> información de los<br />
clientes.<br />
Conocimiento en TI<br />
Dado que el conocimiento es información combinada con experiencia,<br />
contexto, interpretación y reflexión, representa un componente tácito que<br />
es difícil de cuantificar (Davenport et al., 1998:43). Como con otros<br />
dominios específicos del conocimiento, el conocimiento en TI se distingue<br />
por ser una selección de otras concepciones más generales del<br />
conocimiento (Capon y G<strong>la</strong>zer, 1987). El conocimiento técnico ha sido<br />
descrito como contexto basado en el saber hacer. Es decir, dadas ciertas<br />
circunstancias específicas, <strong>la</strong> correcta secuencia de acciones y<br />
administración de reg<strong>la</strong>s de decisión apropiadas puede conducir a<br />
resultados predecibles. En este estudio, al igual que en el estudio de<br />
Tippins y Sohi (2003) el conocimiento en TI se conceptualiza como el<br />
grado en que una empresa posee un conjunto de conocimientos técnicos<br />
acerca de los objetos, tales como sistemas computarizados.<br />
Operaciones en TI<br />
Las operaciones técnicas comprenden actividades llevadas a cabo para<br />
conseguir un fin específico (Mitcham y Mackey, 1983). Pueden ser<br />
consideradas como los métodos, técnicas y requerimientos para completar<br />
una tarea específica (Granstrans, 1982). Consisten en procesos<br />
heterogéneos que son dirigidos a <strong>la</strong> producción de bienes y servicios<br />
económicos (Nelson et al., 1967). Esta conceptualización se corresponde<br />
con <strong>la</strong> idea de proceso tecnológico de Capon y G<strong>la</strong>zer (1987), que es un set<br />
de ideas y pasos utilizados para conseguir un objetivo (por ejemplo, un<br />
producto terminado). Las operaciones técnicas también son pensadas<br />
como una manifestación del conocimiento técnico cuya implementación<br />
resulta en operaciones técnicas o capacidades. Las capacidades no sólo<br />
representan una comprensión profunda de los dominios de conocimiento<br />
186
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
interno, sino que también reflejan una habilidad de exportar el<br />
conocimiento a otras operaciones incongruentes (Leonard-Barton, 1995).<br />
En este estudio seguiremos a Tippins y Sohi (2003) que conceptualizan <strong>la</strong>s<br />
operaciones en TI como una extensión a través de <strong>la</strong> cual <strong>la</strong> empresa<br />
utiliza <strong>la</strong> TI para gestionar el mercado y <strong>la</strong> información del cliente.<br />
Elementos de TIC<br />
Los elementos de <strong>la</strong>s TIC son fácilmente medibles (Reardon et al., 1996),<br />
actúan como facilitadores y son responsables del actual incremento de<br />
producción y difusión de <strong>la</strong> información (G<strong>la</strong>zer, 1991). Como<br />
herramienta, los objetos técnicos se refieren a los artefactos que ayudan en<br />
<strong>la</strong> adquisición, procesamiento, almacenamiento y uso de <strong>la</strong> información<br />
(Martin 1988:24). Para este estudio <strong>la</strong> conceptualización de elementos de <strong>la</strong><br />
TI representan el hardware, software y personal de apoyo.<br />
5.2.2 Aprendizaje Organizativo<br />
En este trabajo seguimos a aquellos trabajos que indican que una futura<br />
línea de investigación del aprendizaje organizativo debería ser estudiar<br />
como éste es afectado por los desarrollos tecnológicos (Argote, 2011).<br />
Dentro de esta nueva corriente encontramos estudios como el de Antonelli<br />
y Ferraris (2011) el cual destaca que para <strong>la</strong> introducción de innovaciones<br />
tecnológicas y organizativas se requiere de <strong>la</strong> generación de nuevos<br />
conocimientos. Esta generación de conocimiento se caracteriza por<br />
atributos específicos: el conocimiento es un output específico de <strong>la</strong><br />
actividad y al mismo tiempo un imput para <strong>la</strong> generación de nuevo<br />
conocimiento. Debido a <strong>la</strong> indivisibilidad del conocimiento, el acceso al<br />
conocimiento existente en cada momento del tiempo es una condición<br />
necesaria para <strong>la</strong> generación de conocimiento nuevo. Sin embargo,<br />
ninguna empresa puede disponer de todo el conocimiento existente, por lo<br />
tanto, <strong>la</strong>s empresas no generan el nuevo conocimiento tecnológico de<br />
forma individual. El carácter doble del conocimiento como resultado de<br />
un proceso de investigación y <strong>la</strong> entrada en <strong>la</strong> generación de conocimiento<br />
187
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
destaca además <strong>la</strong> complementariedad básica y <strong>la</strong> interdependencia de los<br />
agentes en el proceso de innovación: <strong>la</strong> innovación es en sí el resultado<br />
colectivo de <strong>la</strong> acción intencional e interactiva de los agentes económicos<br />
(Blume y Dur<strong>la</strong>uf 2001 y 2005).<br />
5.2.3 Competencia de Aprendizaje Externo<br />
Se refiere a <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de crear e integrar nuevo<br />
conocimiento a través de <strong>la</strong> interacción con el entorno y con otras<br />
organizaciones (Bapuji y Crossan, 2004). Es decir, <strong>la</strong> empresa reconfigura<br />
<strong>la</strong>s prácticas a través de <strong>la</strong> transformación de conocimiento. Un ejemplo de<br />
esto puede ser <strong>la</strong> combinación de conocimiento corriente con conocimiento<br />
nuevo proveniente de <strong>la</strong> adquisición de tecnología y de <strong>la</strong> interacción con<br />
el entorno y otras organizaciones (Ettlie y Pavlou, 2006). El nuevo<br />
conocimiento proveniente del aprendizaje externo se incluye en <strong>la</strong> base de<br />
conocimiento de <strong>la</strong> empresa y representa un imput importante para el<br />
proceso de innovación (Chang, 2003). Este aprendizaje será más rápido si<br />
se sustenta en <strong>la</strong> experiencia acumu<strong>la</strong>da y <strong>la</strong> base de conocimiento<br />
presente en <strong>la</strong> empresa (Malerba, 1992; Levinthal y March, 1993).<br />
Una forma de interaccionar con el entorno externo puede ser mediante <strong>la</strong>s<br />
alianzas en I+D Quintana y Benavides (2011). El acceso al conocimiento<br />
diverso pero a <strong>la</strong> vez re<strong>la</strong>cionado con <strong>la</strong> base tecnológica de <strong>la</strong> empresa<br />
beneficia, por un <strong>la</strong>do, su absorción mediante aprendizaje asociativo, y por<br />
otro, permite incrementar <strong>la</strong>s posibilidades de desarrol<strong>la</strong>r innovaciones<br />
tecnológicas en áreas familiares, así como de mejorar de forma continua y<br />
aplicar con nuevos propósitos <strong>la</strong>s tecnologías centrales (Knudsen, 2007;<br />
Zhang et al., 2007, Vanhaverbeke et al, 2009).<br />
5.2.4 Competencia de Aprendizaje Interno<br />
Se refiere al conocimiento creado por <strong>la</strong> propia acumu<strong>la</strong>ción de<br />
experiencia de <strong>la</strong> empresa a través del uso de sus propios recursos. El<br />
aprendizaje interno se desarrol<strong>la</strong> principalmente a través de <strong>la</strong>s<br />
actividades de investigación y el desarrollo e implementación de mejores<br />
188
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
prácticas. Es algo que se incluye en <strong>la</strong> base de conocimiento de <strong>la</strong> empresa<br />
y juega un rol importante en el proceso de innovación (Cohen y Levinthal,<br />
1990; Kessler et al.2000).<br />
El personal de <strong>la</strong> empresa puede crear y diseminar nuevo conocimiento<br />
dentro de los límites de <strong>la</strong> organización, requiriendo de <strong>la</strong> existencia de<br />
procesos de explotación. Desde <strong>la</strong>s teorías evolutivas, esto implica un<br />
aprendizaje acumu<strong>la</strong>tivo que permite incrementar <strong>la</strong>s capacidades<br />
corrientes de <strong>la</strong> empresa. Esta acumu<strong>la</strong>ción de aprendizaje interno juega<br />
un rol crucial para <strong>la</strong> empresa en términos de creación de valor, ya que<br />
permite incrementar su habilidad de explotar nuevas oportunidades<br />
(Penrose, 1959: Spender y Grant, 1996). En este sentido, <strong>la</strong> capacidad de<br />
absorción es una c<strong>la</strong>ra capacidad de aprendizaje, basada en el<br />
conocimiento previo (Cohen y Levinthal, 1990).<br />
Nuestra medición de <strong>la</strong>s competencias en aprendizaje externo e interno<br />
está basada en un enfoque de doble circuito de aprendizaje o doble bucle,<br />
ya que supone <strong>la</strong> modificación de <strong>la</strong>s prácticas, objetivos y normas<br />
implícitas de <strong>la</strong> organización (Argyris y Schön, 1978). La característica de<br />
este tipo de aprendizaje es que se asume que los trabajadores y mandos<br />
intermedios transmiten <strong>la</strong> información sobre sus opiniones acerca de si se<br />
debería de cambiar alguna de <strong>la</strong>s prácticas de <strong>la</strong> empresa que implica a su<br />
vez cambios en <strong>la</strong> estrategia que se está implementando.<br />
5.3 HIPÓTESIS<br />
La cuestión del tiempo en el proceso de innovación se convierte en el<br />
parámetro más difícil en el mercado competitivo. Cuanto más rápido se<br />
desarrolle un producto más probabilidades de conseguir una ventaja<br />
competitiva (Filippini et al., 2004). Por lo tanto, en un departamento de<br />
investigación y desarrollo se debe aplicar una técnica de desarrollo de<br />
productos rápida. El desarrollo rápido de productos requiere de sistemas<br />
de equipo orientados a <strong>la</strong> comunicación, que abran nuevas vías de<br />
cooperación. Mediante <strong>la</strong> utilización eficaz de competencias en TI dentro<br />
189
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
del departamento de investigación y desarrollo de una organización, el<br />
tiempo de desarrollo de producto se puede reducir (Bullinger et al., 2000).<br />
Además, <strong>la</strong> tecnología de <strong>la</strong> información es un buen instrumento para<br />
construir un entorno de co<strong>la</strong>boración, tales como el boletín electrónico o el<br />
portal de intercambio de conocimientos. Estos entornos pueden llevar a<br />
cabo el pensamiento creativo y agilizar <strong>la</strong> eficiencia y <strong>la</strong> eficacia de un<br />
proceso de innovación (Li et al., 2006) afectando favorablemente a <strong>la</strong><br />
innovación de producto.<br />
La competitividad y supervivencia de <strong>la</strong> compañía depende cada vez más<br />
de su capacidad de conocimiento para producir innovaciones<br />
continuamente (Cohen y Levinthal, 1990). Por ello, dado que <strong>la</strong> creación,<br />
diseminación y uso del conocimiento es facilitada por <strong>la</strong> tecnología de <strong>la</strong><br />
información (Davenport et al., 1998), si esta tecnología aumenta permitirá<br />
<strong>la</strong> existencia de capacidades de conocimiento críticas para el sostenimiento<br />
de iniciativas de gestión del mismo que posibiliten <strong>la</strong> innovación (A<strong>la</strong>vi y<br />
Leidner, 2001). Por lo que;<br />
H1: La competencia en tecnología de <strong>la</strong> información afecta de forma positiva al<br />
resultado de <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
Joshi et al. (2010) explican que existe mucha TI que puede ayudar a<br />
mejorar <strong>la</strong> capacidad de adquisición del conocimiento de dentro de <strong>la</strong><br />
compañía; como por ejemplo los directorios de empleados que llevan a<br />
identificar en qué empleados c<strong>la</strong>ve reside el conocimiento o los<br />
sofisticados mecanismos inteligentes integrados en <strong>la</strong>s tecnologías de<br />
búsqueda, recuperación y estructuración de datos. A<strong>la</strong>vi y Leidner (2001)<br />
proponen a <strong>la</strong> TI como herramienta para <strong>la</strong> mejora de <strong>la</strong> capacidad de<br />
asimi<strong>la</strong>ción de conocimiento de <strong>la</strong> compañía. Esta se produce mediante <strong>la</strong><br />
creación de memoria organizativa en forma de repositorios de<br />
conocimiento. A partir del aprendizaje organizativo, <strong>la</strong>s empresas pueden<br />
acumu<strong>la</strong>r conocimiento valioso para su almacenamiento y posterior uso<br />
por parte de los empleados (Tippins y Sohi, 2003) y <strong>la</strong>s herramientas de TI<br />
ayudarán a que se produzca este almacenaje.<br />
190
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
La TI refuerza el aprendizaje interno de <strong>la</strong> compañía (Joshi et al., 2010). A<br />
su vez, desde <strong>la</strong> perspectiva de recursos y capacidades, <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprender se define como <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa de desarrol<strong>la</strong>r o<br />
adquirir nuevos recursos y habilidades basados en el conocimiento que<br />
sean útiles para ofrecer nuevos productos (Hull y Covin, 2010). En<br />
concreto, definimos al aprendizaje interno como <strong>la</strong> adquisición de nueva<br />
información y conocimiento por parte de los miembros de <strong>la</strong> organización<br />
gracias a <strong>la</strong> interacción con otras unidades o miembros de dentro de <strong>la</strong><br />
organización (Schroeder et al., 2002). Esta interacción se verá reforzada<br />
por <strong>la</strong> TI. Hao-Chen Huang, (2011) sugieren que el aprendizaje interno<br />
incrementa <strong>la</strong> capacidad de innovación tecnológica de un equipo de<br />
investigación y desarrollo y esto podrá resultar en un incremento en<br />
innovación de producto. Por lo que nosotros esperamos que <strong>la</strong><br />
competencia de aprendizaje interno sea el link que puede ayudar a <strong>la</strong><br />
empresa a canalizar su competencia en TI hacia <strong>la</strong> mejora de sus<br />
resultados en innovación de producto. Consecuentemente, proponemos <strong>la</strong><br />
siguiente hipó<strong>tesis</strong>:<br />
H2: La competencia de aprendizaje interno actúa como variable mediadora entre<br />
<strong>la</strong>s competencias en TI y el resultado de <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
Shneiderman (2007), nos hab<strong>la</strong> de herramientas que ayudan a que se<br />
produzca interacción social gracias a que facilitan <strong>la</strong> conexión entre los<br />
grupos e individuos. Un ejemplo de éstas podrían ser los tablones de<br />
anuncios, software de mensaje electrónico, sa<strong>la</strong>s de chat, tecnologías RSS<br />
para sintetizar y compartir información desde múltiples fuentes y los<br />
wikis y los blogs para <strong>la</strong> integración de conocimiento e ideas. Todo esto<br />
acelera el conocimiento por descubrimiento y <strong>la</strong> innovación (Shneiderman,<br />
2007). Este tipo de herramientas será muy útil para <strong>la</strong> generación de<br />
competencias de aprendizaje externo.<br />
La habilidad para adquirir, asimi<strong>la</strong>r y explotar conocimiento externo está<br />
re<strong>la</strong>cionada con el conocimiento previo de <strong>la</strong> empresa, que incluye<br />
habilidades básicas como el uso de un lenguaje común (Faems et al., 2007).<br />
191
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Por lo que debemos de tener en cuenta <strong>la</strong> homogeneización del lenguaje<br />
que se produce mediante <strong>la</strong> utilización de TI como un factor que ayudará<br />
a que se produzca este tipo de conocimiento. Esta tecnología de <strong>la</strong><br />
información aumenta <strong>la</strong> participación y el diálogo entre los individuos con<br />
el propósito de aumentar el desarrollo de conocimiento y <strong>la</strong> integración.<br />
Así, <strong>la</strong>s herramientas de TI pueden fomentar y proveer <strong>la</strong> capacidad de<br />
integración social formal e informal, gracias al soporte de varios<br />
mecanismos de integración social (Joshi et al. 2010). Por ejemplo, el uso de<br />
video conferencias y trabajo en grupo facilita <strong>la</strong> integración formal,<br />
mientras varias herramientas como <strong>la</strong>s prácticas de e-community y los<br />
blogs, crean oportunidades para <strong>la</strong> integración informal.<br />
Dewet y Jones (2001) sugieren que <strong>la</strong> aplicación de TI aumenta <strong>la</strong><br />
capacidad de hacer frente a los socios externos, clientes y partes<br />
interesadas a través de <strong>la</strong> expansión de los límites de <strong>la</strong>s actividades que<br />
realiza <strong>la</strong> organización. Del mismo modo, <strong>la</strong> fortaleza del conocimiento<br />
retenido en una organización mejora con <strong>la</strong> calidad de <strong>la</strong>s interacciones y<br />
co<strong>la</strong>boración de los grupos de individuos que lo utilizan, con <strong>la</strong> mejor<br />
comprensión acerca de cómo codificar el conocimiento y <strong>la</strong>s fuentes<br />
disponibles para su actualización. Ese proceso de refuerzo del<br />
conocimiento promueve <strong>la</strong> capacidad de innovación (Subramaniam y<br />
Youndt, 2005). Por lo que podemos esperar que <strong>la</strong> competencia de<br />
aprendizaje externo sea el link que facilita que <strong>la</strong> empresa pueda canalizar<br />
su competencia en TI hacia <strong>la</strong> mejora de sus resultados en innovación de<br />
producto. Por ello proponemos que;<br />
H3: La competencia de aprendizaje externo actúa como variable mediadora entre<br />
<strong>la</strong>s competencias en TI y el resultado de <strong>la</strong> innovación de producto<br />
192
5.4 METODOLOGÍA<br />
5.4.1 Muestra<br />
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Dada <strong>la</strong> naturaleza de <strong>la</strong> investigación y <strong>la</strong> consecuente inexistencia de<br />
fuentes de datos secundarios, recurrimos a encuestas para obtener <strong>la</strong><br />
información necesaria para <strong>la</strong> realización de este estudio. Utilizamos<br />
compañías industriales, ya que en este tipo de compañías <strong>la</strong> adquisición<br />
de conocimiento externo es complementaria a <strong>la</strong> I+D interna, lo que<br />
contribuye al desarrollo de conocimiento tecnológico previo (Cassiman y<br />
Veugelers, 2006). Esto será importante para poder observar tanto <strong>la</strong><br />
competencia de aprendizaje interno como externo.<br />
Nos centramos en una única industria, debido a que el aprendizaje que<br />
participa en los procesos de innovación probablemente será más<br />
homogéneo (Santarelli y Piergiovanni, 1996). En concreto, examinamos <strong>la</strong>s<br />
industrias de cerámica italiana y españo<strong>la</strong> del azulejo, ya que es una<br />
pob<strong>la</strong>ción bastante homogénea y ello nos permite contro<strong>la</strong>r ciertos factores<br />
de contingencia como el tamaño y <strong>la</strong> industria (Bonavia y Marin, 2006;<br />
Oltra y Flor, 2010).<br />
La industria de producción de azulejo se encuentra en gran medida<br />
globalizada. En el momento de obtención de <strong>la</strong> muestra, <strong>la</strong> producción de<br />
cerámica italiana y españo<strong>la</strong> representaba el 77% de <strong>la</strong> producción de <strong>la</strong><br />
UE (Ascer 2006). Siendo el 44% producido en España (ITC 2004).<br />
Los productores de azulejo de cerámica italiana y españo<strong>la</strong> se organizan<br />
de manera simi<strong>la</strong>r. La mayoría de ellos son considerados como PYMEs, ya<br />
que por lo general no exceden de un promedio de 250 trabajadores y<br />
tienden a concentrarse geográficamente en distritos industriales: Sassuolo<br />
en el norte de Italia y Castellón en el este de España (Valencia, Cámara de<br />
Comercio de 2004).<br />
En <strong>la</strong> producción de azulejo de cerámica, <strong>la</strong> acumu<strong>la</strong>ción tecnológica se<br />
genera principalmente por (1) el diseño, construcción y operación de<br />
193
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
sistemas de producción compleja (trayectoria esca<strong>la</strong> intensiva), y (2)<br />
conocimientos, habilidades y técnicas emergentes de investigación<br />
académica química (trayectoria basada en <strong>la</strong> ciencia). Estudios previos<br />
proporcionan pruebas convincentes de que los productores de azulejo de<br />
cerámica italiana y españo<strong>la</strong> muestran una conducta significativa hacia <strong>la</strong><br />
innovación (Enright y Tenti 1990; Oltra et al., 2002).<br />
La encuesta se realizó entre octubre y diciembre de 2006 (anexo). Para<br />
garantizar que los ítems del cuestionario fueran plenamente<br />
comprensibles en el contexto de <strong>la</strong> industria cerámica se llevó a cabo un<br />
pre-test con cuatro técnicos del Centro Español de Innovación y<br />
Tecnología en Diseño Industrial Cerámico (ALICER). El cuestionario se<br />
construyó mediante esca<strong>la</strong>s Likert de 7 puntos y fue dirigido a los<br />
directivos de <strong>la</strong>s empresas. Los directores de Recursos Humanos<br />
contestaron a <strong>la</strong>s preguntas referentes a <strong>la</strong> gestión del conocimiento (Wang<br />
2008) y tecnología de <strong>la</strong> información mientras los directores de producción<br />
a <strong>la</strong>s preguntas de resultado en <strong>la</strong> innovación, ya que es el director de<br />
producción <strong>la</strong> persona de <strong>la</strong> empresa con más conocimiento en <strong>la</strong>s<br />
actividades en materia de innovación (Ca<strong>la</strong>ntone et al., 2002). Las<br />
encuestas se hicieron mediante entrevista personal a cada uno de los<br />
encuestados. Para favorecer el ratio de respuesta ofrecimos un informe con<br />
los resultados extraídos a <strong>la</strong>s empresas participantes.<br />
Finalmente, obtuvimos un total de 186 cuestionarios, 97 de <strong>la</strong>s empresas<br />
italianas y 89 de <strong>la</strong>s empresas españo<strong>la</strong>s. La muestra obtenida representó<br />
alrededor del 50% de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción objetivo. Tanto el número de respuestas<br />
como <strong>la</strong> tasa de respuesta puede considerarse satisfactoria (Spector, 1992;<br />
Williams et al., 2004). El sesgo de no respuesta se evaluó a través de una<br />
comparación de <strong>la</strong>s estadísticas de <strong>la</strong> muestra con valores de <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción<br />
conocida como el volumen de ventas anuales o el número de empleados.<br />
Existen páginas web pertenecientes a <strong>la</strong>s asociaciones de productores de<br />
azulejos de cerámica que ofrecen esta información para <strong>la</strong> mayoría de <strong>la</strong>s<br />
194
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
empresas de <strong>la</strong> industria; tanto en Italia (Assopiastrelle 2006) como en<br />
España (Ascer 2006).<br />
5.4.2 Medida de <strong>la</strong>s Variables<br />
Para medir el resultado en innovación de producto utilizamos <strong>la</strong> esca<strong>la</strong><br />
propuesta por Gatignon et al. (2002) que está compuesta por 3 items. Esta<br />
esca<strong>la</strong> ha sido utilizada satisfactoriamente por un número considerable de<br />
estudios empíricos (Mu y Di Benedetto, 2011). El instrumento de medida<br />
utilizado fue una esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos que variaba desde totalmente en<br />
desacuerdo a totalmente de acuerdo.<br />
La competencia en tecnologías de <strong>la</strong> información y comunicación fue medida<br />
utilizando <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> de medida propuesta por Tippins y Sohi, (2003). Esta<br />
esca<strong>la</strong> está compuesta por 3 dimensiones: conocimiento de <strong>la</strong>s TIC,<br />
operaciones en TIC y elementos de TIC. La esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos<br />
variaba desde nada de acuerdo a muy de acuerdo.<br />
La competencia en aprendizaje externo está compuesta por 5 items<br />
re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong> habilidad de <strong>la</strong> empresa para adquirir y crear<br />
conocimiento co<strong>la</strong>borando con otros agentes externos a <strong>la</strong> empresa. Y <strong>la</strong><br />
competencia en aprendizaje interno está compuesta por 6 ítems re<strong>la</strong>cionados<br />
con <strong>la</strong>s habilidades de <strong>la</strong> empresa para ayudar a crear y gestionar el<br />
desarrollo de conocimiento interno (ver anexo). Para medir ambas<br />
competencias de aprendizaje se ha utilizado una esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos<br />
que seña<strong>la</strong> el grado de acuerdo y desacuerdo del entrevistado con <strong>la</strong>s<br />
afirmaciones propuestas. Estas esca<strong>la</strong>s han sido utilizadas<br />
satisfactoriamente en estudios anteriores (Alegre et al., 2011).<br />
Fue tenida en cuenta <strong>la</strong> variable de control; poder de mercado. Se pretende<br />
contro<strong>la</strong>r si el poder de mercado tiene un impacto significativo en los<br />
resultados en innovación. Para ello se preguntó por <strong>la</strong> cuota de mercado y<br />
el incremento de <strong>la</strong>s ventas (esca<strong>la</strong> likert de 7 puntos).<br />
195
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
5.4.3 Análisis Estadísticos<br />
Para el análisis empírico se realizaron modelos de ecuaciones estructurales<br />
con indicadores robustos. Este tipo de análisis multivariado de segunda<br />
generación puede resolver varios problemas que pueden ocurrir en el<br />
análisis de regresión múltiple (Dhanaraj y Beamish, 2003), y sobre todo<br />
permite analizar <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones al mismo tiempo, incluidas <strong>la</strong>s mediciones<br />
de error en el modelo, por lo que es posible identificar una posible<br />
sobreestimación o subestimación de <strong>la</strong> fuerza de <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones entre los<br />
constructos. Desde el punto de vista teórico, esta técnica confirma <strong>la</strong>s<br />
medidas de fiabilidad y validez de los constructos. Nuestro modelo de<br />
investigación se estimó utilizando el software EQS 6.1. La muestra está<br />
compuesta por 186 empresas; por lo tanto está muy por encima del límite<br />
mínimo de 100 sujetos que se considera para realizar los análisis de<br />
modelos de ecuaciones estructurales (Williams et al., 2004).<br />
5.4.4 Propiedades Psicométricas de <strong>la</strong>s Esca<strong>la</strong>s de Medición<br />
Las propiedades psicométricas de <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s de medida fueron evaluadas<br />
de conformidad con <strong>la</strong>s prácticas aceptadas (Gerbing y Anderson, 1988;<br />
Tippins y Sohi, 2003), incluyendo <strong>la</strong> validez de contenido, fiabilidad,<br />
validez discriminante, validez convergente y dimensionalidad de <strong>la</strong><br />
esca<strong>la</strong>.<br />
La validez de contenido se establece a través de una revisión de <strong>la</strong><br />
literatura existente y por medio de entrevistas personales con expertos del<br />
sector industrial azulejero de cerámica (cuatro técnicos del área de diseño<br />
y arquitectura del Instituto Tecnológico de Cerámica. Esta área tiene el<br />
nombre de ALICER). Hemos calcu<strong>la</strong>do el coeficiente alfa y el indicador de<br />
fiabilidad compuesta para evaluar <strong>la</strong> fiabilidad de <strong>la</strong> esca<strong>la</strong> (Fornell y<br />
Larker 1981; Bou-Llusar et al., 2009). Todas <strong>la</strong>s esca<strong>la</strong>s poseen un<br />
coeficiente alfa aceptable y fiabilidad de los indicadores compuestos de al<br />
menos 0,70.<br />
196
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Tab<strong>la</strong> 5.1: Media, desviación típica, Alpha Reliabilities, corre<strong>la</strong>ciones y<br />
Alpha de Cronbach<br />
Mean s.d. CR 1 2 3 4 5 6 7<br />
1.- CTI 4,72 1,46 0,91 (0.88)<br />
2.-OTI 4,54 1,48 0.71 0,65** (0.92)<br />
3.-ETI 4,12 1,59 0.67 0,58** 0,64** (0.83)<br />
4.-CAI 3,97 1,61 0.95 0,21** 0,11 0,21** (0.94)<br />
5.-CAE 3,96 1,42 0.94 0,09 -0,03 0,13 0,74** (0.88)<br />
6.-ECI 5,26 1,51 0.94 0,30** 0,12 -0,06 0,22** 0.00** (0.90)<br />
7.-PM 4,53 1,50 0.89 -0,09 0,03 0,04 0,52** 0.48** 0.09 (0.82)<br />
NOTA: ** Coeficiente de corre<strong>la</strong>ción estadísticamente significativo (p
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
confirmatory” con una corre<strong>la</strong>ción interfactor establecida en 0 (que indica<br />
que no existe re<strong>la</strong>ción entre los dos constructos) y un modelo sin<br />
restricciones con una corre<strong>la</strong>ción interfactor “set free”. Toda diferencia de<br />
χ 2 se consideraron significativas, proporcionando evidencia de <strong>la</strong> validez<br />
convergente (Gatignon et al., 2002).<br />
Se testó <strong>la</strong> dimensionalidad de los constructos a través de <strong>la</strong>s cargas de los<br />
elementos de medición de los factores de primer orden y <strong>la</strong>s cargas de los<br />
factores de primer orden en los factores de segundo orden. Todas <strong>la</strong>s<br />
cargas fueron superiores a 0,40 y significativas (p
Figura 5.1: Modelo directo<br />
CT1<br />
….. ….. ....<br />
CT4<br />
OT1<br />
OT6<br />
ET1<br />
ET5<br />
Conocimiento<br />
de <strong>la</strong>s TIC<br />
Operaciones<br />
en TIC<br />
Elementos<br />
de TIC<br />
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Competencia<br />
en TIC<br />
199<br />
0.162**<br />
Χ 2= 410.60 p=0.000; d.f.=166; χ 2 /d.f.=2.47<br />
NFI=0.988; NNFI=0.992; CFI=0.993; RMSEA=0.089<br />
R 2 = 0.067<br />
Resultados en<br />
Innovación de<br />
Producto<br />
PM1<br />
Poder de<br />
mercado<br />
(Control)<br />
…..<br />
EC1<br />
....<br />
EC3<br />
0.186**<br />
En el segundo modelo mostramos <strong>la</strong> mediación parcial que examina <strong>la</strong><br />
misma re<strong>la</strong>ción introduciendo <strong>la</strong>s competencias en aprendizaje interno y<br />
externo como variables mediadoras. La inclusión de estas variables en el<br />
análisis ayuda a proporcionar una explicación a <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción positiva entre<br />
<strong>la</strong> competencia en TI el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación. La figura 5.2<br />
muestra los resultados de los análisis. El estadístico χ 2 para cada modelo<br />
es significativo, sin embargo y los índices son superiores 0,90 por lo que<br />
sugieren un buen ajuste general (Tippins y Sohi, 2003).<br />
PM<br />
2
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Figura 5.2: Modelo Mediado<br />
CT1<br />
….. ….. ....<br />
CT4<br />
OT1<br />
OT6<br />
ET1<br />
ET5<br />
Conocimiento<br />
de <strong>la</strong>s TIC<br />
Operaciones<br />
en TIC<br />
Elementos<br />
de TIC<br />
Competencia<br />
en TI<br />
0.202**<br />
Χ 2= 1263.52 p=0.000; d.f.=426<br />
NFI=0.968; NNFI=0.977; CFI=0.979; RMSEA=0.103<br />
200<br />
CI1 ..….. CI6<br />
Competencia<br />
en Aprendizaje<br />
Interno<br />
0.268** 0.383** R2 = 0.31<br />
0.107ns<br />
R 2 = 0.04<br />
Competencia<br />
en Aprendizaje<br />
Externo<br />
CE1 ….. CE5<br />
R 2 = 0.07<br />
Resultados en<br />
Innovación de<br />
Producto<br />
-0.381**<br />
PM1<br />
Poder de<br />
mercado<br />
(Control)<br />
…..<br />
EC1<br />
....<br />
EC3<br />
0.121<br />
El efecto mediador de <strong>la</strong>s competencias en aprendizaje interno y externo<br />
en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción competencia en TI y resultados en innovación de producto<br />
es demostrado, tal como sugieren Tippins y Sohi (2003) por <strong>la</strong> secuencia<br />
siguiente: (1) Primero, <strong>la</strong> mediación parcial del modelo explica más<br />
varianza de <strong>la</strong> variable dependiente que el modelo directo (R2=0,31 vs.<br />
R2=0,06); (2) existe una re<strong>la</strong>ción significativa entre TI y <strong>la</strong>s competencias<br />
en aprendizaje interno y externo; (3) existe una re<strong>la</strong>ción significativa entre<br />
competencias en aprendizaje interno y externo y el éxito comercial de <strong>la</strong><br />
innovación, y (4) <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción significativa entre <strong>la</strong> competencia en TI y los<br />
resultados en innovación de producto se convierte en baja y no<br />
significativa en el modelo de mediación parcial. Esta secuencia<br />
proporciona pruebas convincentes de un c<strong>la</strong>ro efecto de mediación de <strong>la</strong>s<br />
competencias de aprendizaje interno y externo en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción. Así, a<br />
nuestro entender, el modelo de mediación parcial representa una<br />
contribución significativa de <strong>la</strong> influencia – <strong>la</strong> cual es apoyada tanto por <strong>la</strong><br />
teoría como por algunas investigaciones empíricas anteriores - de <strong>la</strong><br />
PM<br />
2
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
competencia en TI en el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación. Por lo que<br />
nuestras hipó<strong>tesis</strong> 2 y 3 obtienen soporte.<br />
5.6 DISCUSIÓN<br />
La posibilidad de que <strong>la</strong> competencia en tecnología de <strong>la</strong> información<br />
proporcione ventajas competitivas a <strong>la</strong> compañía ha recibido gran interés<br />
en los últimos años. A pesar de que se considera que <strong>la</strong> inversión en TI<br />
tendrá un impacto positivo en el resultado empresarial, parece ser que esta<br />
re<strong>la</strong>ción no se da en todos los casos. Tippins y Sohi (2003) intentan dar luz<br />
a esta controversia y para ello proponen al aprendizaje organizativo como<br />
variable intermedia en esta re<strong>la</strong>ción. El aprendizaje organizativo será<br />
necesario para que <strong>la</strong>s inversiones en TI provoquen mayores resultados<br />
generales. Nosotros creemos que es necesario más esfuerzo para poder<br />
entender este fenómeno, por lo que establecemos una nueva variable<br />
dependiente muy ligada a los resultados empresariales, los resultados en<br />
innovación. Estudios anteriores demuestran que aquel<strong>la</strong>s empresas con<br />
mayores resultados innovadores también obtienen mayor resultado<br />
general (Baker y Sinku<strong>la</strong> 2009). Además, incluimos dos variables<br />
intermedias, <strong>la</strong> competencia en aprendizaje interno y <strong>la</strong> competencia en<br />
aprendizaje externo.<br />
Podemos resaltar que nuestro principal objetivo es examinar los efectos de<br />
<strong>la</strong> competencia en TI y del aprendizaje interno y externo en el éxito<br />
comercial de <strong>la</strong> innovación. Tratamos de explicar por qué los resultados en<br />
innovación de producto varían entre <strong>la</strong>s empresas. Para ello nos centramos<br />
en una única industria, <strong>la</strong> cerámica italiana y españo<strong>la</strong>, caracterizadas por<br />
ser líder mundial en términos de tecnología, productividad, calidad y<br />
diseño y por tener unas características muy parecidas en ambos países, de<br />
forma conjunta. Observamos los efectos que pueden tener en los<br />
resultados en innovación producidos en esta industria <strong>la</strong> competencia en<br />
TI y el aprendizaje interno y externo de <strong>la</strong>s compañías que <strong>la</strong> conforman.<br />
Si examinamos de forma conjunta los efectos directos e indirectos,<br />
201
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
comprobamos que los efectos indirectos prevalecen sobre los directos. Por<br />
lo que <strong>la</strong> competencia en TI puede mejorar <strong>la</strong>s ventajas competitivas<br />
sostenibles en el rendimiento de <strong>la</strong> innovación de productos, pero lo hace<br />
de forma indirecta a través de <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje interno y<br />
externo. Por lo tanto, <strong>la</strong>s ventajas competitivas sostenibles en <strong>la</strong> industria<br />
del azulejo cerámico requerirán de estrategias que enfoquen su atención<br />
en <strong>la</strong> competencia en TI. Sin embargo, éstas deberán prestar especial<br />
atención a <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje interno y externo, ya que el<br />
impacto de <strong>la</strong> competencia en TI en el resultado en innovación está<br />
mediado por ambas competencias. La innovación es un output importante<br />
dentro de los procesos empresariales siendo un factor crítico para el<br />
resultado económico de <strong>la</strong> compañía.<br />
En segundo lugar, dado que <strong>la</strong>s empresas están incrementado el uso de<br />
soportes de sistemas digitales e impulsando sus iniciativas de gestión del<br />
conocimiento, los investigadores de sistemas de <strong>la</strong> información resaltan <strong>la</strong><br />
necesidad de estudios que nos ayuden a entender los roles de <strong>la</strong> TI en <strong>la</strong><br />
gestión del conocimiento y <strong>la</strong> innovación de <strong>la</strong>s empresas (por ejemplo,<br />
A<strong>la</strong>vi y Leidner, 2001; Sambamurthy y Subramani, 2005; Joshi et al., 2010).<br />
Por ello, nuestra conceptualización e investigación empírica ayuda a<br />
enriquecer esta literatura.<br />
Sorprendentemente, pese a que <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong> competencia de<br />
aprendizaje interno y el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación es positiva,<br />
nuestros resultados muestran una re<strong>la</strong>ción negativa entre el aprendizaje<br />
externo y el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación. Para poder entender este<br />
resultado realizamos análisis adicionales para estudiar cómo se comportan<br />
cada una de <strong>la</strong>s variables que componen el constructo. Tras observar <strong>la</strong>s<br />
corre<strong>la</strong>ciones de <strong>la</strong>s variables que forman al aprendizaje externo con<br />
respecto al éxito comercial de <strong>la</strong> innovación, descubrimos que aquel<strong>la</strong>s<br />
variables que muestran una fuerte re<strong>la</strong>ción negativa con respecto al éxito<br />
comercial son <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>cionadas con <strong>la</strong> co<strong>la</strong>boración con asociaciones del<br />
202
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
sector (compuestas por <strong>la</strong>s empresas de <strong>la</strong> industria y por lo tanto,<br />
empresas competidoras entre sí). La literatura nos indica que <strong>la</strong><br />
cooperación con competidores es considerada por algunas industrias<br />
como peligrosa. A pesar de <strong>la</strong> ventaja de intercambiar el conocimiento<br />
tecnológico en <strong>la</strong> co<strong>la</strong>boración con los competidores, éstos son<br />
potencialmente peligrosos porque venden en mercados simi<strong>la</strong>res al de <strong>la</strong><br />
empresa y supone un riesgo el que puedan acceder a los recursos en I+D<br />
de <strong>la</strong> empresa (Tsai 2009). Este riesgo se entiende por Veugelers y<br />
Cassiman (1999) como posibles efectos secundarios involuntarios<br />
"involuntary outgoing spillovers". Estos autores explican por qué el acceso<br />
al conocimiento del competidor es <strong>la</strong> fuente menos frecuente. Entendemos<br />
que este es el caso de <strong>la</strong> industria cerámica. No obstante, <strong>la</strong>s variables<br />
“cooperación con <strong>la</strong>s instituciones de investigación” y “adquisición de<br />
tecnología”, muestran una corre<strong>la</strong>ción positiva con respecto al éxito<br />
comercial de <strong>la</strong> innovación, por lo que en <strong>la</strong> industria cerámica será<br />
importante el aprendizaje que se obtiene a través de estas dos fuentes para<br />
alcanzar un mayor éxito comercial de <strong>la</strong> innovación.<br />
Estos resultados tienen implicaciones importantes para <strong>la</strong> toma de<br />
decisiones sobre <strong>la</strong>s competencias en TI y <strong>la</strong>s competencias en aprendizaje<br />
interno y externo, sobre todo en el contexto de <strong>la</strong> innovación de productos.<br />
Con este estudio también reforzamos <strong>la</strong>s nuevas tendencias en <strong>la</strong><br />
investigación sobre <strong>la</strong> perspectiva de recursos y capacidades que buscan<br />
no sólo identificar los activos críticos específicos de una industria en<br />
particu<strong>la</strong>r, sino también mejorar nuestra comprensión de cómo esto ocurre<br />
en entornos cambiantes al considerar <strong>la</strong>s capacidades dinámicas.<br />
Desde un punto de vista práctico nuestros resultados muestran que <strong>la</strong><br />
simple inversión en TI por sí misma no puede proveer valor estratégico,<br />
sino que ayudará al soporte y refuerzo de <strong>la</strong>s capacidades organizativas<br />
c<strong>la</strong>ves para <strong>la</strong> innovación y <strong>la</strong>s ventajas competitivas. Las empresas deben<br />
focalizar su atención en factores intermedios como <strong>la</strong>s competencias en<br />
203
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
conocimiento interno y externo y los resultados en innovación de<br />
producto para determinar qué beneficios pueden derivarse de <strong>la</strong>s<br />
inversiones en TI que favorecen <strong>la</strong> asunción de esta competencia. Los<br />
resultados sugieren que los gerentes no deberían dedicarse al análisis del<br />
impacto directo de <strong>la</strong>s TI, sino que deberían encontrar maneras de mejorar<br />
<strong>la</strong> TI en su rol de captación y refuerzo de <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje<br />
de <strong>la</strong> empresa, que ayudan a que una empresa sea más innovadora. Es<br />
decir, no solo se trata de invertir en TI sino que se deben de realizar unas<br />
políticas adecuadas para <strong>la</strong> generación de competencias de aprendizaje<br />
interno y externo, posibilitando de este modo que <strong>la</strong>s inversiones en TI se<br />
traduzcan en un mayor éxito comercial de <strong>la</strong> innovación.<br />
Limitaciones<br />
Los resultados del presente estudio están sujetos a ciertas limitaciones. En<br />
primer lugar, los datos fueron recogidos de forma transversal, es decir, en<br />
un único momento del tiempo, por lo que no se puede demostrar de<br />
manera concluyente <strong>la</strong> causalidad ni descartar <strong>la</strong> causalidad inversa. Por<br />
otra parte, <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción objetivo de este estudio se limita a un conjunto<br />
bastante homogéneo de empresas. Aunque esto aumenta <strong>la</strong> confianza de<br />
que los resultados se derivan de <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> principales, no podemos<br />
generalizarlos.<br />
Investigaciones futuras<br />
Los resultados de este estudio proporcionan una guía para futuras<br />
investigaciones. El efecto mediador de <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje<br />
interno y externo debe tenerse en cuenta en <strong>la</strong> investigación sobre<br />
competencia en TI y resultados de <strong>la</strong> innovación de productos. La re<strong>la</strong>ción<br />
entre competencia en TI y resultados en innovación de producto necesita<br />
análisis adiciones desde una perspectiva longitudinal. Investigaciones<br />
futuras pueden distinguir entre innovación de producto radical e<br />
incremental.<br />
204
5.7 BIBLIOGRAFIA<br />
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
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214
5.8 ANEXOS<br />
Anexo 1)<br />
Tab<strong>la</strong> 5.2: Ítems del cuestionario<br />
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
A.- COMPETENCIA EN TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y<br />
COMUNICACIÓN (TIC)<br />
Por favor, indique el grado de acuerdo / desacuerdo con los siguientes aspectos<br />
re<strong>la</strong>cionados con <strong>la</strong>s TIC:<br />
CONOCIMIENTO DE LAS TI<br />
CT1. En general, nuestros empleados de apoyo técnico informático<br />
están al día en sus conocimientos.<br />
CT2. Nuestra empresa domina <strong>la</strong> tecnología informática.<br />
CT3. Estamos al día en cuanto a innovaciones informáticas<br />
CT4. Tenemos el conocimiento necesario para desarrol<strong>la</strong>r y mantener<br />
conexiones informáticas de comunicación con nuestros clientes y<br />
proveedores<br />
OPERACIONES EN TI<br />
OT1. Nuestra empresa es experta en recoger y analizar información<br />
sobre nuestros clientes y nuestros proveedores via sistemas<br />
informáticos.<br />
OT2. De forma rutinaria utilizamos sistemas informáticos para<br />
acceder a información procedente de bases de datos externas<br />
OT3. Utilizamos sistemas informáticos para analizar <strong>la</strong> información<br />
de los clientes y de los proveedores<br />
OT4. Utilizamos sistemas de apoyo a <strong>la</strong> toma de decisiones<br />
frecuentemente cuando procesamos <strong>la</strong> información sobre nuestros<br />
clientes y proveedores.<br />
OT5. Nos basamos en sistemas informáticos para recoger, almacenar<br />
y procesar <strong>la</strong> información sobre nuestros clientes y proveedores.<br />
ELEMENTOS DE TI<br />
ET1. Nuestra empresa tiene un departamento formal de Sistemas de<br />
Gestión de <strong>la</strong> Información<br />
ET2. El directos de nuestra empresa incluye dentro de sus tareas<br />
principales <strong>la</strong> gestión de nuestra tecnología de <strong>la</strong> información<br />
ET3. Cada año presupuestamos una cantidad de fondos importante<br />
para nuevo hardware y software (de tecnología de <strong>la</strong> información).<br />
ET4. Nuestra empresa crea aplicaciones informáticas específicas<br />
cuando surge <strong>la</strong> necesidad.<br />
215<br />
Tippins y Sohi<br />
(2003)
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
B.- CAPACIDADES DE GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO<br />
Nivel de desempeño de su empresa en comparación a <strong>la</strong> competencia en los<br />
siguientes aspectos (esca<strong>la</strong> LIKERT de 7 puntos):<br />
CONOCIMIENTO EXTERNO<br />
CE1. Capacidad para obtener información del estado y los<br />
progresos de <strong>la</strong> ciencia y <strong>la</strong>s tecnologías relevantes mediante<br />
sistemas de prospectiva y vigi<strong>la</strong>ncia tecnológica<br />
CE2. Disponibilidad y eficacia de los sistemas de captación<br />
de información relevante, continua y actualizada sobre los<br />
competidores, mediante sistemas de inteligencia<br />
competitiva<br />
CE3. Habilidad para <strong>la</strong> creación de conocimientos mediante<br />
<strong>la</strong> cooperación con <strong>la</strong>s asociaciones del sector<br />
CE4. Habilidad para <strong>la</strong> creación de conocimientos mediante<br />
<strong>la</strong> cooperación con <strong>la</strong>s instituciones de investigación<br />
216<br />
Fleisher (2001); Chang<br />
(2003)<br />
Fleisher (2001);<br />
Myburgh (2004)<br />
Chang (2003)<br />
CE5. Adquisición de tecnología Jacobsson et al. (1996)<br />
CONOCIMIENTO INTERNO<br />
CI1. Grado de cualificación académica del personal de<br />
I+D+I<br />
CI2. Capacidad para mantenerse en <strong>la</strong> frontera tecnológica<br />
del negocio<br />
CI3. Habilidad para organizar el esfuerzo de innovación e<br />
I+D+I<br />
CI4. Eficacia en <strong>la</strong> definición de mecanismos de seguimiento<br />
y revisión de los proyectos de I+D+I<br />
CI5. Eficacia en <strong>la</strong> asignación de recursos humanos al<br />
departamento de I+D+I<br />
CI6. Capacidad para coordinar e integrar todas <strong>la</strong>s fases del<br />
proceso de I+D+I y sus interre<strong>la</strong>ciones con <strong>la</strong>s tareas<br />
funcionales de ingeniería, producción y marketing<br />
E.- INNOVACIÓN TECNOLÓGICA<br />
Jacobsson et al. (1996)<br />
Wheelwright y C<strong>la</strong>rk<br />
(1992); Tidd, Bessant y<br />
Pavitt (1997)<br />
Takeuchi y Nonaka<br />
(1986); Tidd et al. (1997)<br />
Wheelwright y C<strong>la</strong>rk<br />
(1992); Tidd et al. (1997)<br />
Jacobsson et al. (1996)<br />
Takeuchi y Nonaka<br />
(1986); Weelwright y<br />
C<strong>la</strong>rk (1992)<br />
Con referencia a <strong>la</strong> innovación tecnológica más importante de los últimos tres años<br />
indique el grado de acuerdo o desacuerdo con respecto a <strong>la</strong>s siguientes afirmaciones<br />
(esca<strong>la</strong> LIKERT de 7 puntos)<br />
ÉXITO COMERCIAL PERCIBIDO DEL PRODUCTO<br />
EC1. La innovación fue imp<strong>la</strong>ntada con éxito en <strong>la</strong> empresa<br />
EC2. La innovación ha significado un éxito comercial para<br />
<strong>la</strong> empresa<br />
EC3. La innovación ha alcanzado <strong>la</strong>s expectativas de <strong>la</strong><br />
empresa en cuanto a impacto en <strong>la</strong>s ventas<br />
Gatignon, Tushman,<br />
Smith y Anderson<br />
(2002)
Anexo 2)<br />
Capítulo 5: CTI y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Figura 5.3: AFC de <strong>la</strong> Competencia en Tecnología de <strong>la</strong> Información y<br />
Comunicación<br />
CT1<br />
CT2<br />
CT3<br />
CT4<br />
OT1<br />
OT2<br />
OT3<br />
OT4<br />
OT5<br />
OT6<br />
CT1<br />
CT2<br />
CT3<br />
CT4<br />
CT5<br />
0.77(1)<br />
0.94<br />
0.91<br />
0.76<br />
0.80(1)<br />
0.81<br />
0.77<br />
0.92<br />
0.87<br />
0.82<br />
0.78(1)<br />
0.84<br />
0.76<br />
0.82<br />
0.56<br />
Conocimiento<br />
de <strong>la</strong>s TIC<br />
Operaciones<br />
en TIC<br />
Elementos<br />
de TIC<br />
217<br />
0.91<br />
0.84(1)<br />
0.92<br />
Competencia<br />
en TIC<br />
Χ 2= 244.68 p=0.000; d.f.=87<br />
NFI=0.856; NNFI=0.881; CFI=0.901; RMSEA=0.098<br />
Figura 5.4: AFC de <strong>la</strong> Competencia de Aprendizaje Externo<br />
OE1<br />
OE2<br />
OE3<br />
OE4<br />
OE5<br />
0.93(1)<br />
0.84<br />
0.71<br />
0.70<br />
0.67<br />
Competencia<br />
de Aprendizaje<br />
Externo<br />
Χ 2= 22.77(p=0.000); d.f.=5<br />
NFI=0.952; NNFI=0.923; CFI=0.962; RMSEA=0.139
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
Figura 5.5: AFC de <strong>la</strong> Competencia de Aprendizaje Interno<br />
OI1<br />
OI2<br />
OI3<br />
OI4<br />
OI5<br />
OI6<br />
0.84(1)<br />
0.71<br />
0.90<br />
0.90<br />
0.88<br />
0.81<br />
218<br />
Competencia<br />
de Aprendizaje<br />
Interno<br />
Χ 2= 29.81(p=0.000); d.f.=9<br />
NFI=0.966; NNFI=0.960; CFI=0.976; RMSEA=0.112
219<br />
Capítulo 6:<br />
Conclusiones generales
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
220
221<br />
Capítulo 6: Conclusiones generales<br />
6.0 INTRODUCCIÓN<br />
Esta <strong>tesis</strong> nos ha permitido ac<strong>la</strong>rar <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre diversas capacidades y<br />
los resultados en innovación de <strong>la</strong> compañía a través de <strong>la</strong> perspectiva de<br />
capacidades dinámicas. En años recientes muchos estudios tratan de<br />
explicar este tipo de re<strong>la</strong>ciones, sin embargo, <strong>la</strong> investigación se encuentra<br />
en una etapa preliminar y por ello algunos de los estudios muestran<br />
resultados inconcluyentes. Para poder llegar a entender estas re<strong>la</strong>ciones es<br />
necesario observar<strong>la</strong>s con mayor detenimiento profundizando en variables<br />
que median entre los conceptos y que nos ayudan a darles una mejor<br />
explicación.<br />
En este último capítulo se muestran <strong>la</strong>s conclusiones finales de los tres<br />
artículos, de forma que el lector puede tener una visión c<strong>la</strong>ra de los<br />
estudios presentados tras <strong>la</strong> lectura de <strong>la</strong> introducción y <strong>la</strong> conclusión<br />
general. Para ello mostramos de forma esquemática cada una de <strong>la</strong>s<br />
conclusiones de los artículos y posteriormente <strong>la</strong>s contribuciones teóricas e<br />
implicaciones prácticas de forma conjunta. Para finalizar el capítulo se<br />
incluye un apartado de limitaciones y futuras líneas de investigación.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
6.0.1 Conclusiones del artículo 1 (capítulo 3): Capacidad de Gestión del<br />
Diseño: ¿Cuál es su rol en <strong>la</strong> PYME?<br />
Este estudio está en línea con aquellos estudios que tratan de dar una<br />
explicación a por qué <strong>la</strong>s empresas obtienen diferentes resultados en<br />
innovación. En concreto, nos centramos en <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
Nos preguntamos si dado que el aprendizaje organizativo genera<br />
capacidades dinámicas, serán éstas <strong>la</strong>s que posibilitan que se produzca un<br />
mayor desempeño innovador. Es decir, explicamos por qué <strong>la</strong> capacidad<br />
de aprendizaje organizativo afecta a los resultados en innovación.<br />
Recurrimos al concepto de diseño, ya que éste es c<strong>la</strong>ve para mejorar el<br />
desarrollo de productos, por lo que es de gran importancia para <strong>la</strong><br />
innovación. Dado que diseñar es hacer productos que conecten con <strong>la</strong>s<br />
necesidades de los consumidores, no existe duda de que en un entorno<br />
turbulento como el actual saber gestionar <strong>la</strong> función de diseño será c<strong>la</strong>ve<br />
para <strong>la</strong> creación de ventajas competitivas.<br />
Mostramos que pese a que tanto <strong>la</strong> capacidad de aprender como de<br />
gestionar el diseño afectan al resultado en innovación, existe un efecto<br />
mediador de <strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño entre <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo y el resultado en innovación de producto. Esto<br />
significa que <strong>la</strong>s empresas deben de tener en cuenta no sólo <strong>la</strong> capacidad<br />
de aprender para tener mayores resultados en innovación de producto,<br />
sino que también deben prestar mucha atención a <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestionar el diseño, dado que <strong>la</strong> capacidad de aprender afectará a <strong>la</strong><br />
capacidad de gestionar el diseño y será ésta última <strong>la</strong> que posibilite <strong>la</strong><br />
existencia de un resultado en innovación de producto superior.<br />
Otro objetivo que pretendíamos cubrir es demostrar que <strong>la</strong> capacidad de<br />
gestionar el diseño es una capacidad dinámica. Explicamos que <strong>la</strong><br />
decisión sobre el diseño del producto está muy ligada a los cambios que se<br />
producen en el entorno y que generan cambios en <strong>la</strong>s preferencias de los<br />
222
223<br />
Capítulo 6: Conclusiones generales<br />
consumidores, por ello esta capacidad implica <strong>la</strong> reconfiguración de<br />
recursos. Esta argumentación teórica está muy en línea con estudios<br />
previos que conceptualizan que existen capacidades dinámicas específicas<br />
para el desarrollo de ventajas competitivas (Alegre, Sengupta y Lapiedra,<br />
2011). Además, demostramos de forma empírica que es <strong>la</strong> capacidad de<br />
aprendizaje organizativo <strong>la</strong> que posibilitará <strong>la</strong> existencia de este tipo de<br />
capacidades.<br />
Para realizar <strong>la</strong>s pruebas empíricas se utilizan PYMEs. Las pequeñas<br />
empresas constituyen <strong>la</strong> base de <strong>la</strong> industria nacional y son responsables<br />
de un gran número de innovaciones tecnológicas en los países<br />
industrializados (Rothwell, 1989), lo que <strong>la</strong>s convierte en un escenario<br />
idóneo a <strong>la</strong> par que interesante para el estudio sobre cómo distintos<br />
conceptos afectan a los resultados en innovación. Además, <strong>la</strong> flexibilidad<br />
que caracteriza a este tipo de empresas posibilita observar mejor <strong>la</strong><br />
existencia de capacidades dinámicas.<br />
6.0.2 Conclusiones del artículo 2 (capítulo 4): El papel mediador de <strong>la</strong><br />
Capacidad de Aprendizaje Organizativo entre <strong>la</strong> Orientación<br />
Emprendedora y el Desempeño Innovador<br />
En este artículo partimos de estudios teóricos recientes que proponen que<br />
<strong>la</strong> orientación emprendedora es un c<strong>la</strong>ro antecedente del rendimiento de<br />
<strong>la</strong> innovación (Rauch et al., 2009). En estos estudios se afirma que aquellos<br />
directivos que tengan una c<strong>la</strong>ra orientación emprendedora serán más<br />
aversos al riesgo y por lo tanto pueden ser capaces de generar más<br />
innovaciones y con ello obtener un rendimiento de <strong>la</strong> innovación superior<br />
al de sus competidores (Rauch et al., 2009). En el presente estudio<br />
argumentamos que <strong>la</strong> razón para que una orientación emprendedora<br />
incremente el resultado innovador es <strong>la</strong> capacidad que tiene <strong>la</strong> gerencia<br />
para posibilitar <strong>la</strong> existencia de ciertas capacidades organizativas. Por lo<br />
que no sólo será necesaria una orientación emprendedora, sino que será
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
necesaria <strong>la</strong> implementación de políticas de apoyo a <strong>la</strong> generación de<br />
ciertas capacidades organizativas. Para cumplir nuestro objetivo<br />
probamos de forma empírica que entre <strong>la</strong> orientación emprendedora y los<br />
resultados en innovación existen variables mediadoras.<br />
Nuestros resultados sugieren que <strong>la</strong> orientación emprendedora actúa<br />
como antecedente de <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo y el<br />
resultado en innovación. Al mismo tiempo, <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje<br />
organizativo actúa como variable mediadora entre ambas. Es decir, si<br />
deseamos obtener un mayor resultado innovador a través de una actitud<br />
de <strong>la</strong> gerencia emprendedora será necesario implementar a su vez<br />
estrategias que posibiliten el aprendizaje organizativo.<br />
Estos resultados están en consonancia con el enfoque basado en recursos:<br />
<strong>la</strong> habilidad por parte de <strong>la</strong> dirección que posea una orientación<br />
emprendedora de facilitar el aprendizaje organizativo generando en <strong>la</strong><br />
organización <strong>la</strong> capacidad de aprender, será muy importante en <strong>la</strong><br />
creación de ventajas competitivas sostenibles y, por tanto, en <strong>la</strong> obtención<br />
de rentas económicas.<br />
6.0.3 Conclusiones del artículo 3 (capítulo 5): Competencia en<br />
Tecnología de <strong>la</strong> Información y Éxito Comercial de <strong>la</strong> Innovación<br />
Recientemente se ha discutido <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre competencia en tecnología<br />
de <strong>la</strong> información y resultados en innovación de <strong>la</strong> compañía. Sin<br />
embargo, algunos de estos estudios encuentran que no existe re<strong>la</strong>ción<br />
entre ambos conceptos, en concreto no encuentran re<strong>la</strong>ción con el éxito<br />
comercial de <strong>la</strong> innovación (Joshi et al., 2010). Tratamos de dar respuesta a<br />
esta diferencia en los resultados, probando que <strong>la</strong>s diferencias se deben a<br />
que no existe una re<strong>la</strong>ción directa entre <strong>la</strong> competencia en tecnología de <strong>la</strong><br />
información y el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación, sino que esta re<strong>la</strong>ción se<br />
produce de forma indirecta mediante <strong>la</strong> existencia de competencias de<br />
aprendizaje interno y externo.<br />
224
225<br />
Capítulo 6: Conclusiones generales<br />
Los resultados demuestran que <strong>la</strong> competencia en TI mejora <strong>la</strong>s ventajas<br />
competitivas sostenibles en el éxito comercial de <strong>la</strong> innovación, pero lo<br />
hace de forma indirecta a través de <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje<br />
interno y externo. Por lo tanto, <strong>la</strong>s ventajas competitivas sostenibles en <strong>la</strong><br />
industria del azulejo cerámico requerirán de estrategias que enfoquen su<br />
atención en <strong>la</strong> competencia en TI y en <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje<br />
interno y externo, siendo el impacto de <strong>la</strong> competencia en tecnología de <strong>la</strong><br />
información dependiente de <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje interno y<br />
externo.<br />
6.1 CONTRIBUCIONES E IMPLICACIONES<br />
Consideramos que esta <strong>tesis</strong> realiza contribuciones importantes a nivel<br />
académico, de carácter tanto teórico como empírico, así como a nivel<br />
práctico para directivos y agentes responsables de <strong>la</strong>s políticas públicas. A<br />
continuación se exponen algunas de estas contribuciones y <strong>la</strong>s<br />
implicaciones en cada caso.<br />
Damos un importante paso a nivel académico demostrando de forma<br />
empírica que el aprendizaje organizativo genera capacidades dinámicas.<br />
Esta <strong>tesis</strong> también apoya <strong>la</strong>s nuevas tendencias en investigación sobre <strong>la</strong><br />
perspectiva basada en los recursos que buscan no sólo identificar los<br />
activos críticos específicos de una industria en particu<strong>la</strong>r, sino también<br />
mejorar nuestra comprensión de cómo esto ocurre en entornos cambiantes<br />
al considerar el papel de <strong>la</strong>s capacidades dinámicas. Además<br />
conceptualizamos un nuevo tipo de capacidad dinámica avanzando en <strong>la</strong><br />
línea de estudios recientes que tratan de dar nombre a capacidades<br />
dinámicas específicas.<br />
Por otro <strong>la</strong>do, sugerimos que los factores organizativos que facilitan el<br />
proceso de aprendizaje de <strong>la</strong> organización inciden en <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción entre <strong>la</strong><br />
orientación emprendedora y los resultados en <strong>la</strong> innovación al estar ambas<br />
variables mediadas por <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo. La
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
orientación emprendedora es una actitud que debe ser reforzada por<br />
ciertas condiciones organizativas que facilitan el aprendizaje y producen<br />
implicaciones positivas en el resultado de <strong>la</strong> organización. Por lo que <strong>la</strong><br />
presente <strong>tesis</strong> contribuye a <strong>la</strong> literatura de emprendimiento<br />
proporcionando evidencia de <strong>la</strong> importancia de ciertas características<br />
organizativas que son necesarias para que <strong>la</strong> orientación emprendedora<br />
tenga un impacto positivo en los resultados en <strong>la</strong> innovación y ello<br />
contribuya a los resultados empresariales. Nuestros resultados pueden<br />
explicar por qué algunas empresas manifiestan un resultado inferior<br />
mientras sus directivos muestran una c<strong>la</strong>ra orientación hacia el<br />
emprendimiento: puede ser que no exista aprendizaje organizativo. Esta<br />
afirmación está en consonancia con <strong>la</strong> perspectiva basada en los recursos:<br />
<strong>la</strong> habilidad por parte de <strong>la</strong> dirección de facilitar el aprendizaje<br />
organizativo generando en <strong>la</strong> organización <strong>la</strong> capacidad de aprender será<br />
muy importante en <strong>la</strong> creación de ventajas competitivas sostenibles y, por<br />
tanto, en <strong>la</strong> obtención de rentas económicas. Además, también<br />
pretendemos contribuir en <strong>la</strong> literatura sobre aprendizaje organizativo<br />
sugiriendo <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong> actitud de los directivos para implementar<br />
de forma efectiva los factores o condiciones para aprender dentro de <strong>la</strong>s<br />
organizaciones.<br />
Y para finalizar con <strong>la</strong>s implicaciones académicas, observamos que los<br />
investigadores de sistemas de <strong>la</strong> información resaltan <strong>la</strong> necesidad de<br />
estudios que nos ayuden a entender los roles de <strong>la</strong> TI en <strong>la</strong> gestión del<br />
conocimiento y <strong>la</strong> innovación de <strong>la</strong>s empresas (por ejemplo, A<strong>la</strong>vi y<br />
Leidner, 2001; Sambamurthy y Subramani, 2005; Joshi et al., 2010). Por<br />
ello, nuestra conceptualización e investigación empírica ayuda a<br />
enriquecer esta literatura.<br />
En cuanto a implicaciones prácticas, argumentamos que <strong>la</strong> dirección que<br />
posea orientación emprendedora debe de invertir en incrementar el<br />
aprendizaje organizativo de <strong>la</strong> compañía, ya que <strong>la</strong> existencia de<br />
226
227<br />
Capítulo 6: Conclusiones generales<br />
orientación emprendedora no explica por sí so<strong>la</strong> que existan resultados<br />
positivos en innovación. A pesar de que los directivos reconocen <strong>la</strong><br />
importancia del emprendimiento y de <strong>la</strong> orientación emprendedora, su<br />
participación para ello suele ser escasa y suelen ignorar <strong>la</strong>s demandas que<br />
realiza el resto de <strong>la</strong> organización en el proceso hacia su consecución. En<br />
esta <strong>tesis</strong>, sugerimos implementar un enfoque de aprendizaje organizativo<br />
cuando <strong>la</strong> dirección ha escogido seguir una orientación emprendedora.<br />
Una acción directiva inicial puede ser mejorar <strong>la</strong>s dimensiones de <strong>la</strong> CAO<br />
– experimentación, asunción de riesgo, interacción con el entorno, dialogo<br />
y toma de decisiones participativa – así ese proceso de aprendizaje y de<br />
innovación puede ser más fructífero. Además, también será importante <strong>la</strong><br />
inversión en políticas de gestión del diseño, ya que éstas inciden de forma<br />
directa en <strong>la</strong> innovación de producto.<br />
Por otro <strong>la</strong>do nuestros resultados han mostrado que <strong>la</strong> simple inversión en<br />
TI por sí misma no puede proveer valor estratégico, sino que ayudará al<br />
soporte y refuerzo de <strong>la</strong>s capacidades organizativas c<strong>la</strong>ves para <strong>la</strong><br />
innovación y <strong>la</strong>s ventajas competitivas. Las empresas deben focalizar su<br />
atención en factores intermedios como <strong>la</strong>s competencias en conocimiento<br />
interno y externo y los resultados en innovación de producto para<br />
determinar qué beneficios pueden derivarse de <strong>la</strong>s inversiones en TI que<br />
favorecen <strong>la</strong> asunción de esta competencia. Los gerentes no deberían<br />
dedicarse al análisis del impacto directo de <strong>la</strong>s inversiones que realizan en<br />
TI, sino que deberían encontrar maneras de mejorar <strong>la</strong> TI en su rol de<br />
captación y refuerzo de <strong>la</strong>s competencias de aprendizaje de <strong>la</strong> empresa,<br />
que ayudan a que una empresa sea más innovadora. Es decir, no sólo se<br />
trata de invertir en TI, sino que se deben de realizar unas políticas<br />
adecuadas para <strong>la</strong> generación de competencias de aprendizaje interno y<br />
externo, posibilitando de este modo que <strong>la</strong>s inversiones en TI se traduzcan<br />
en un mayor éxito comercial de <strong>la</strong> innovación.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
6.2 LIMITACIONES Y FUTURAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN<br />
Debemos tener en cuenta que este trabajo presenta una serie de<br />
limitaciones, algunas de <strong>la</strong>s cuales abren <strong>la</strong> puerta a investigaciones<br />
futuras. En primer lugar, los datos fueron recogidos en un mismo<br />
momento del tiempo (investigación cross-sectional o transversal). Por lo<br />
que:<br />
- No se puede demostrar de manera concluyente <strong>la</strong> causalidad ni<br />
descartar <strong>la</strong> causalidad inversa en ninguno de los artículos.<br />
- Las re<strong>la</strong>ciones testadas representan una foto en el tiempo. Mientras<br />
que es probable que <strong>la</strong>s condiciones bajo <strong>la</strong>s cuales se recogieron los<br />
datos sigan siendo iguales, no tenemos garantías de que esto sea<br />
así.<br />
- Las distintas capacidades estudiadas podrían tener implicaciones<br />
adicionales en los resultados en innovación en el <strong>la</strong>rgo p<strong>la</strong>zo, pero<br />
como esto no es un estudio longitudinal no podemos evaluar los<br />
efectos.<br />
Por todo ello, estudios futuros podrían tratar de probar estas re<strong>la</strong>ciones de<br />
forma longitudinal.<br />
Por otro <strong>la</strong>do, dado que esta investigación se basa en el análisis de una<br />
única industria, se obtienen los beneficios de tratar con empresas que son<br />
probablemente homogéneas tecnológicamente y económicamente. Este<br />
método de muestreo restrictivo aumenta <strong>la</strong> confianza de que los<br />
resultados se derivan de <strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> principales. Sin embargo, se debe<br />
enfatizar que los resultados de una única industria deben de ser tratados<br />
con precaución no pudiendo generalizar. Futuros estudios podrían ir<br />
encaminados a evaluar los efectos de <strong>la</strong>s distintas capacidades en los<br />
resultados en <strong>la</strong> innovación de otras industrias.<br />
228
229<br />
Capítulo 6: Conclusiones generales<br />
Otro aspecto que debemos tener en cuenta es que <strong>la</strong> utilización de esca<strong>la</strong>s<br />
de medida constituye un método aceptado de investigación<br />
particu<strong>la</strong>rmente útil para testar <strong>la</strong>s re<strong>la</strong>ciones teóricas entre los conceptos,<br />
como lo son <strong>la</strong> OE, <strong>la</strong> CAO y los resultados en <strong>la</strong> innovación (Covin et al.,<br />
2006; Green et al., 2008) así como otros de los conceptos que presentamos.<br />
Sin embargo, se podría profundizar más en estas re<strong>la</strong>ciones si utilizamos<br />
métodos de investigación cualitativa tratando algunos de los casos de <strong>la</strong><br />
muestra. Esto puede ser útil para describir casos concretos que no siguen<br />
<strong>la</strong>s hipó<strong>tesis</strong> de este estudio (como por ejemplo aquellos casos de<br />
empresas que tengan una alta orientación emprendedora, alta capacidad<br />
de gestionar el diseño y alta capacidad de aprendizaje organizativo y sin<br />
embargo, tengan un bajo resultado en <strong>la</strong> innovación).<br />
Futuros estudios sobre <strong>la</strong> capacidad de gestionar el diseño podrían<br />
distinguir en cómo incide esta capacidad distinguiendo entre innovaciones<br />
de producto radical e incremental. Este es un aspecto interesante que<br />
todavía no ha sido tratado por <strong>la</strong> literatura. Así mismo, dado que hemos<br />
probado que se debe tener en cuenta el efecto mediador de <strong>la</strong>s<br />
competencias de aprendizaje interno y externo cuando investigamos sobre<br />
competencia en tecnología de <strong>la</strong> información y éxito comercial de <strong>la</strong><br />
innovación, creemos interesante probar si este modelo se cumple si<br />
incluimos otros resultados de innovación como <strong>la</strong> innovación derivada de<br />
nuevas o mejores formas organizativas.<br />
Y por último, hemos tratado <strong>la</strong> capacidad de aprendizaje organizativo<br />
como una variable intermedia entre <strong>la</strong> OE y los resultados en innovación.<br />
Consideramos que serían interesantes estudios que explicaran el rol del<br />
aprendizaje adaptativo y generativo o <strong>la</strong>s intervenciones de los recursos<br />
humanos (Sadler-Smith y Badger 1998; Wang, 2008; Chiva et al., 2010).<br />
Podríamos tratar de explicar cuál es el rol de estos conceptos en nuestro<br />
modelo.
Aprendizaje Organizativo, Capacidades e Innovación<br />
6.3 BIBLIOGRAFIA<br />
A<strong>la</strong>vi, M. y Leidner, D. E. (2001). Review: Knowledge management and<br />
knowledge management systems: Conceptual foundations and<br />
research issues. MIS Quarterly, 25(1), 107-136.<br />
Alegre, J., Sengupta, K. y Lapiedra, R. (2011). Knowledge management<br />
and innovation performance in a high-tech SMEs industry.<br />
International Small Business Journal, doi:10.1177/0266242611417472<br />
Chiva, R., Grandío, A. y Alegre, J. (2010). Adaptive and generative<br />
learning: Implications from complexity theories. International Journal of<br />
Management Reviews, 12(2), 114-129.<br />
Covin, J. G., Green, K. M. y Slevin, D. P. (2006). Strategic process effects on<br />
the entrepreneurial orientation-sales growth rate re<strong>la</strong>tionship.<br />
Entrepreneurship Theory and Practice, 30(1), 57-81.<br />
Green, K. M., Covin, J. G. y Slevin, D. P. (2008). Exploring the re<strong>la</strong>tionship<br />
between strategic reactiveness and entrepreneurial orientation: The<br />
role of structure-style fit. Journal of Business Venturing, 23(3), 356-383.<br />
Joshi, K., Chi, L., Datta, A. y Han, S. (2010). Changing the competitive<br />
<strong>la</strong>ndscape: Continuous innovation through IT-enabled knowledge<br />
capabilities. Information Systems Research, 21(3), 472-495.<br />
Rauch, A., Wiklund, J., Lumpkin, G. y Frese, M. (2009). Entrepreneurial<br />
orientation and business performance: An assessment of past research<br />
and suggestions for the future. Entrepreneurship Theory and Practice,<br />
33(3), 761-787.<br />
Rothwell, R. (1989). Small firms, innovation and industrial change. Small<br />
Business Economics, 1(1), 51-64.<br />
Sadler-Smith, E. y Badger, B. (1998). The HR practitioner's perspective on<br />
continuing professional development. Human Resource Management<br />
Journal, 8(4), 66-75.<br />
Sambamurthy, V. y Subramani, M. (2005). Special issue on information<br />
technologies and knowledge management. MIS Quarterly, 29(1), 1-8.<br />
Wang, C. (2008). Entrepreneurial orientation, learning orientation, and<br />
firm performance. Entrepreneurship Theory and Practice, 32(4), 635-657.<br />
230