Oraciones Que Rompen Maldiciones - Ondas del Reino

PLANES DE LOS MALVADOS EN CONTRA DE LOS CRISTIANOS
rey en el trono. Es típico del enemigo acusar a los ungidos
de Dios.
Los fariseos decían que Jesús echaba demonios por el
poder de Belcebú. Lo acusaban de usar el poder de Satanás
para liberar a las personas. Cuando se le dice a alguien
"hijo de Belial" se le está diciendo inútil, malvado, vil. Simí
acusaba a David de ser asesino, responsable de la caída de
Saúl. Este es un ejemplo más de la forma en que este espíritu
ataca y acusa a los ungidos del Señor.
Pero Abisay hijo de Sarvia exclamó: -¡SimÍ maldijo
al ungido del Señor, y merece la muerte!
-2 Samuel 19:21, cursivas añadidaspor el autor
Ya vuelto a su puesto David en Jerusalén, Simí vino a
verle y se arrepintió de lo que había dicho. Abisay quería
mandarlo a matar por haber maldecido al ungido del Señor,
pero este tuvo misericordia de Simí y no lo castigó.
David entendía que sobre quienes tocan a los ungidos
del Señor sobreviene el juicio. Se negó a tocar a Saúl aun
cuando su vida corría peligro. En el caso de Simí, la misericordia
prevaleció por sobre el castigo debido a la actitud
arrepentida de Simí.
Los intercesores firmes ayudan a cubrir a los hombres y
mujeres de Dios contra los ataques de Belial. Una maldición
es una obra del mal que se pronuncia contra alguien o algo.
Las palabras que se pronuncian contra quienes sirven a Dios
son flechas espirituales que el enemigo manda para dañar
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