Paco Moncayo: CARTA ABIERTA LAS FALACIAS DEL ... - La Hora

En el supuesto no consentido, que la negociación realizada a partir de 2001, con el país
quebrado y en el peor momento de la situación aeroportuaria, entre otras cosas por las Torres
Gemelas destruidas, haya sido malo, ¿Cómo es posible que, con las ventajas actuales, se haya
renegociado un contrato que paradójicamente cuesta más: USD 758.038 millones frente a
USD 600.009 millones que costaba en el contrato anterior?. Renegociación en la que, dicho
sea de paso, se RATIFICARON todos los contratos anteriores, incluidos los de concesión y
construcción que tanto cuestionaron.
Contrato 2005 Contrato 2010
USOS (miles de dólares)
Costos de construcción 413 700
Costos de Desarrollo 66 000
Contribución Vías 14 000
Gastos financieros 82 000
Reserva 24 700
USOS (miles de dólares)
Costos de Construcción 449 454
Costos Renegociación 50 000
Costos de Desarrollo 35 285
Contribución vías 14 000
Seguros 9 017
Otros
TOTAL INV. 581 509
Gastos financieros 99 377
Reserva Servicios deuda 23 652
TOTAL USOS 704 538
CONTINGENTE 53 500
TOTAL 600 900 TOTAL 758 038
Finalmente, cabe mencionar que es cierto que según el contrato renegociado, la Municipalidad
recibirá alrededor de 400 millones más por concepto de participación fruto de la alianza
estratégica, y eso es positivo; pero hay que decir la verdad completa: será en 35 años. Si
cualquier economista trae a valor presente lo que recibirá la Municipalidad, constatará que es
mucho menor de lo entregado a los concesionarios por concepto de nuevos rubros en el
contrato, por su participación del 89% en los ingresos del actual aeropuerto, e infinitamente
menor de lo que le cuesta a Quito dos años de retraso, el incremento de precios y la no
construcción de la vía GUALO – PUEMBO, que además de servir de acceso al aeropuerto,
contribuía a la solución de la movilidad en el valle de Tumbaco.
La vía escogida por Oyacoto implica un recorrido mayor para llegar al aeropuerto, no
contribuye en nada a la solución del grave problema de movilidad del valle de Tumbaco, y ya
tiene atrasos por las variantes que han debido introducir por la falta de estudios adecuados
antes de su adjudicación.
La historia señalará a los responsables de este grave daño a Quito. El Mandatario podrá insistir
en sus mentiras, pero la historia recogerá la verdad sobre ésta y otras de sus falacias.