Aristóteles - Materiales y recursos

felicidad produce al hombre, hay otras virtudes acordes con la naturaleza
humana que completan la idea de felicidad y también nos permiten ser felices,
por eso Aristóteles distingue entre virtudes dianoéticas o intelectuales y
virtudes morales o éticas.
Las dianoéticas son las que están dirigidas a la actividad contemplativa y son
la sabiduría encaminada al conocimiento o mundo teórico (ciencia) y la
prudencia o sabiduría práctica encaminada a al vida.
Las morales, no hace una clasificación sistemática aunque afirma que están
dirigidas a otras dimensiones del hombre como los apetitos, los instintos, los
sentimientos, las emociones.
Aristóteles da una definición general de virtud como cualquier actividad
intelectual o moral; por ejemplo la prudencia o la amistad, el saber comer o el
saber beber. Decía que la virtud consiste en un habito os disposición
permanente que se manifiesta en la práctica o acción como un justo medio
entre dos extremos igualmente vicioso; por ejemplo saber beber seria entre
estar bebido permanentemente o no beber nada, hay una virtud o justo medio
que consiste en beber lo que hay beber cuando hay que beber.
Este justo medio no es abstracto o general sino subjetivo o personal de
acuerdo con las circunstancias de cada uno, cada uno tiene que saber escoger
su justo medio.
Aristóteles dijo: “la virtud es una disposición electiva que consiste en un termino
medio respecto a nosotros definido por la razón y tal y como lo decide un
hombre prudente”.
3. Relaciona el pensamiento de Aristóteles con su marco histórico,
sociocultural y filosófico.
MARCO HISTÓRICO
Los datos de la biografía de Aristóteles indican que la situación política de la
época era poco estable.
En la época de Aristóteles la polis se encontraba en su declive y la auténtica
cultura griega estaba a punto de desaparecer con ella.
Grecia tuvo su máximo esplendor a partir de la victoria contra los persas,
alcanzada al final de las Guerras Médicas (500-479 a. de C). Pericles fue el jefe
y Atenas el referente supremo de la hegemonía griega. Esta unidad no impedía
la independencia o autonomía de la polis. La polis era un verdadero Estado,
que unificaba no sólo la política sino igualmente la sociedad y la cultura. Los
griegos participaban en su organización y gobierno, excepto las mujeres, los
extranjeros y los esclavos. Se trataba de la democracia.
Al esplendor sucedió la crisis. Pericles muere y dos años antes había estallado
la Guerra del Peloponeso (431-404 a. de C.) con la ruptura entre Esparta y
Atenas, ya que tenían dos modelos de Estado incompatibles. Así fracasó la
democracia de Pericles, fundamentada en la palabra (logos) y en la ley
(nomos). En ella cada ciudadano se podía expresar libremente en la Asamblea,
todos eran iguales ante la ley.
Con el triunfo de Esparta sobre Atenas, la sociedad se va deshaciendo en
medio de una lucha de intereses y disputas por el poder y el dominio de los
ciudadanos. Esparta impone el régimen de los Treinta Tiranos, que se