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Capítulo I Introducción<br />
INTRODUCCIÓN<br />
La industria química y la de combustibles líquidos están basadas fundamentalmente en<br />
el petróleo y gas natural cuyas reservas se estiman suficientes para los próximos 20-30<br />
años. Sin embargo, puesto que ambas materias primas pueden volverse más escasas o<br />
quedar sometidas a las fluctuaciones políticas o económicas de los países productores, es<br />
preciso pensar en el empleo de otras materias alternativas.<br />
Entre éstas, el carbón, los aceites vegetal o mineral y sobre todo la biomasa (residuos<br />
orgánicos), a partir de su gasificación con vapor y oxígeno pueden ser transformables a gas<br />
de síntesis, una mezcla fundamentalmente de monóxido de carbono e hidrógeno, que puede<br />
ser empleado como punto de partida para una amplia gama de procesos 1 . Asimismo, el gas<br />
natural, relativamente más abundante que el petróleo, es una importante alternativa para la<br />
producción, por diferentes vías, de gas de síntesis 2 .<br />
La industria química utiliza actualmente el gas de síntesis para una serie de procesos,<br />
los más importantes se reseñan en la Fig.I.1. Todos ellos, menos la producción de metanol,<br />
utilizan catalizadores solubles. Otros procesos, fundamentalmente para la producción de<br />
oxigenados, están a la espera de una mejora para su aplicación industrial (Fig.I.2), siendo<br />
algunos de ellos ya probados con éxito a escala de laboratorio.<br />
O<br />
(CH3C)2O<br />
CH3CO2H<br />
CH3OH<br />
CH3OH<br />
CH3OH<br />
CO + H2<br />
C3H6<br />
C1-C6 Alcoholes<br />
CH3CH2CH2CH2OH<br />
Fig. I.1 Producción en marcha de productos químicos a partir de gas de síntesis<br />
La mejora en los procesos pasa por el desarrollo de catalizadores heterogéneos<br />
1 J.E.Lyons, G.W.Parshall. Catalysis Today 22 (1994) 313-334.<br />
2 M.A. Peña, J.P. Gómez, J.L.G. Fierro. Applied Catalysis A: General 144 (1996) 7-57.<br />
2
Capítulo I Introducción<br />
específicos que contengan las propiedades adecuadas, físicas y químicas, para orientar la<br />
reacción, al menor costo posible, hacia el producto deseado.<br />
O<br />
CH3CH(OCCH3)2<br />
(VAM precursor)<br />
CH2 CH2<br />
OCH3 OH<br />
CH3CO2CH3 CH3OH<br />
CH2O, CH3OH<br />
-H2O<br />
CH2 CH2<br />
OH OH<br />
CH3OH<br />
CO + H2<br />
-H2O<br />
CH3CHO<br />
-H2O<br />
CH3OH<br />
Fig. I.2 Productos potenciales basados en el gas de síntesis<br />
HCO2CH3<br />
CH3CH2OH<br />
En el campo de los combustibles, la reacción de hidrogenación del monóxido de<br />
carbono es aún más atractiva y sus posibilidades han aumentado desde que los procesos<br />
ordinarios de destilación de petróleo han comenzado a no ser adecuados para producir<br />
combustibles líquidos en la cantidad y calidad necesarias.<br />
En realidad fue en el periodo entre los años 20 y 40, y especialmente durante la II guerra<br />
mundial, cuando Fischer y colaboradores, principalmente Tropsch y Pichler, desarrollaron<br />
un gran esfuerzo en investigación para llegar a producir grandes cantidades de gasolina y<br />
diesel a partir de la hidrogenación de CO (proceso Fischer-Tropsch), procedente de la<br />
gasificación de carbón.<br />
Después de la guerra, los esfuerzos en ese sentido continuaron en otros laboratorios por<br />
todo el mundo, pero cuando de nuevo el petróleo de otras fuentes inundó los mercados, a<br />
mediados de los años 50, casi todas las investigaciones en ese terreno terminaron, ya que<br />
era mucho más económico producir combustibles a partir del petróleo que del carbón.<br />
Solamente en zonas donde había reservas de carbón en lugar de petróleo y la mano de obra<br />
era barata, como en Sudáfrica, se siguió trabajando en el tema (proceso SASOL) 3 .<br />
Sin embargo tanto la gasificación de materiales pesados, deficientes en hidrógeno, como<br />
la utilización de gas natural, puede resultar un camino muy adecuado para producir<br />
3 M.E.Dry. The Sasol Fischer-Tropsch Processes. B.Leach, ed. App. Industrial Catal. Academic Press 2 (1983) Chap.5.<br />
3
Capítulo I Introducción<br />
combustibles y productos químicos limpios.<br />
Las restricciones impuestas por las Enmiendas a la Ley del Aire Limpio (Clean Air Act<br />
Amendments CAAA) de 1990, al contenido en contaminantes de los combustibles, obligan<br />
a la reformulación de gasolinas, con menor contenido en alcanos ligeros, olefinas,<br />
aromáticos (especialmente benceno) y heteroátomos (metales y, especialmente, azufre y<br />
nitrógeno); y mayor en alcanos ramificados y productos oxigenados a fin de mantener el<br />
índice de octano. También obligará a la síntesis de combustibles alternativos más limpios<br />
(etanol, metanol, hidrógeno) lo que, a corto plazo, va a suponer la mejora de los procesos<br />
existentes y a largo, el diseño de nuevos catalizadores y nuevos procesos. En esta línea, el<br />
proceso Fischer-Tropsch (F-T), con las reacciones del gas de síntesis, ha recibido un nuevo<br />
impulso redescubriéndose su enorme potencial 4,5 .<br />
La síntesis catalítica a partir de CO e H2 conduce a una gran variedad de productos:<br />
parafinas, olefinas, alcoholes, aldehídos, dependiendo de los catalizadores aplicados y de<br />
las condiciones del proceso (Fig. I.3).<br />
Gasolina<br />
Diesel<br />
CO + H2, CO2<br />
Gas de síntesis<br />
Alcoholes<br />
C1-C6<br />
Fig. I.3 Productos a partir del gas de síntesis<br />
Metanol<br />
Dimetil Ether<br />
Iso<br />
OlefinaC4H8<br />
Éteres<br />
Tanto el carbón, como el gas natural y la biomasa, que pueden ser empleados para<br />
suministrar el gas de síntesis, son muy abundantes y no es de esperar una escasez de los<br />
mismos, especialmente de la biomasa.<br />
4 W.O.Haag, J.C.Kuo and I.Weller. Gasification for Synthesis of Fuels and Chemicals. Cap. V in Coal Gasification,<br />
Direct App. and Synthesis of Chemicals and Fuels (1987) 117-205.<br />
5 G.A.Mills. Status and Future Opportunities for Conversion of Synthesis Gas to Liquid Energy Fuels. DOE Report<br />
NREL/TP-412-5150 (1993).<br />
4
Capítulo I Introducción<br />
Sin embargo se debe admitir que, bajo las condiciones industriales habituales, los costes<br />
de producción de combustibles líquidos a partir de gas de síntesis son más elevados que los<br />
correspondientes a partir del petróleo. No obstante, cada vez es más imperiosa la necesidad<br />
de contemplar en las operaciones su costo ecológico, por lo que el valor del combustible<br />
debería depender, además: 1º- de criterios medioambientales; 2º- de la eficacia del<br />
combustible en comparación con los ya establecidos y 3º- de la posibilidad de suministrar<br />
coproductos de elevado precio: productos químicos o electricidad. Todo ello puede hacer<br />
rentable la síntesis de combustibles líquidos, más aún, si se introducen nuevas mejoras en<br />
catalizadores y procesos.<br />
En este momento, se están desarrollando nuevas tecnologías, por SASOL 6 , la Royal<br />
Dutch/Shell 7 y la Exxon 8 , que han registrado hasta 100 patentes sobre el tema en los<br />
últimos diez años, lo que augura a esta reacción un futuro prometedor.<br />
En la Tabla I.1 se dan algunas de las reacciones típicas de la hidrogenación de CO 9 .<br />
Tabla I.1 Reacciones de síntesis que pueden ocurrir en la hidrogenación de CO<br />
Metanación<br />
Parafinas<br />
Olefinas<br />
Metanol<br />
Alcoholes superiores<br />
3H2 + CO <br />
2(n+1)H2 + nCO <br />
2nH2 + nCO <br />
2H2 + CO <br />
2nH2 + nCO <br />
CH4 +H2O<br />
CnH2n+2 + n H2O<br />
CnH2n + n H2O<br />
CH3OH<br />
CnH2n+1OH + (n-1)H2O<br />
La termodinámica para la formación de estos compuestos orgánicos ha sido ya<br />
calculada y discutida por numerosos autores 10,11,12 . En concreto, el producto con menor<br />
energía de formación es el metano, mientras que el acetileno y formaldehído son los más<br />
difíciles de formar a temperatura ambiente. En la Fig.I.4 se da la energía libre de formación<br />
de algunos productos en función de la temperatura, por lo que es teóricamente posible<br />
producir una enorme variedad a temperaturas razonables.<br />
6<br />
Reactor de lecho fluido, 1989 o de Slurry, 1993.<br />
7<br />
Shell Middle Dystillate Synthesis SMDS, 1991.<br />
8<br />
Advanced Gas Conversion for the 21 Century AGC-21, 1993.<br />
9<br />
M.A.Vannice. The Catalytic Synthesis of Hydrocarbons from Carbon Monoxide and Hydrogen, Catalysis Rev.-Sci.<br />
Eng. 14:2 (1976) 153-191.<br />
10<br />
G.A. Mids and F.W. Steffgen. Catal. Rev. Sci. Eng. 8 (1973) 159.<br />
11<br />
R.B.Anderson. Catalysis, Vol.4, P.E.Emmett ed., Reinhold, New York, 1956.<br />
12<br />
J.P.Hindermann, G.J.Hutchiup and A.Keinermann. Catal. Rev.-Sci. Eng. 35 (1993) 35.<br />
5
Capítulo I Introducción<br />
Fig. I.4 Energía libre standard de formación de algunos productos a partir de CO + H2<br />
Sin embargo también pueden presentarse, simultáneamente, una serie de reacciones no<br />
deseadas (Tabla I.2).<br />
Tabla I.2 Reacciones de síntesis no deseadas que pueden ocurrir<br />
Gas de agua CO + H2O CO2 + H2<br />
Reacción de Boudouard 2CO C + CO2<br />
Deposición de Coque H2 + CO C + H2O<br />
Formación de carburos xM + C MxC<br />
La primera de ellas es la más susceptible de formarse ya que el agua es un producto<br />
primario de la reacción. Esto da lugar a que en los productos intermedios entre a formar<br />
parte el CO2 en lugar del agua y sobre todo a que se cambie la proporción H2/CO en los<br />
reactantes, conduciendo a productos distintos de los esperados. La segunda y la tercera<br />
reacción pueden conducir a la deposición de coque sobre los catalizadores, contribuyendo<br />
a su desactivación.<br />
G o/n (kJ/mol) de CO<br />
100<br />
50<br />
0<br />
-50<br />
-100<br />
-150<br />
0 100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000 1100<br />
Temperatura (K)<br />
CH 3 OH<br />
C 2 H 5 OH<br />
C H<br />
2 6<br />
CH<br />
4<br />
Los carburos metálicos, formados por la cuarta reacción, son generalmente inactivos en<br />
la reacción de hidrogenación de CO. Las reacciones se pueden dirigir por una elección<br />
cuidadosa del catalizador y del rango de temperatura. Así, por ejemplo, el níquel es<br />
especialmente adecuado para la formación de metano 13 ; el hierro, para hidrocarburos<br />
C 8 H 16<br />
13 H.Pines. The Chemistry of Catalytic Hidrocarbon Conversions. Academic Press (1981) 276-293.<br />
C 2 H 4<br />
C 4 H 8<br />
6
Capítulo I Introducción<br />
cortos y productos oxigenados y el Co para hidrocarburos con más de un átomo de carbono<br />
por molécula. El Ru produce ceras parafínicas de elevado peso molecular y el Rh,<br />
fundamentalmente, productos oxigenados.<br />
El mecanismo más aceptado en la síntesis F-T (Fig. I.5) supone los siguientes pasos 14 :<br />
adsorción disociativa del CO; hidrogenación del carbón adsorbido para formar grupos CH3<br />
e hidrogenación de estos grupos metilo para formar metano. Compuestos de elevado peso<br />
molecular se forman por la inserción, bien de grupos -CH2 en el enlace M-C para dar<br />
hidrocarburos, o por moléculas de CO que dan lugar a aldehídos y alcoholes. La<br />
disociación del CO y formación de CH4 se atribuyen a los metales Fe, Ni, Co y Ru; la<br />
inserción de CO puede producirse en óxidos de los metales de transición o bien sobre Pt o<br />
Pd en los que la disociación es más difícil. En la síntesis de F-T, el proceso de inserción de<br />
CO no debe ser muy importante, ya que la cantidad de productos oxigenados que se<br />
obtiene, en general, no es muy grande. Existen, no obstante, algunos catalizadores que<br />
incrementan la selectividad hacia productos oxigenados en detrimento de los<br />
hidrocarburos, en los cuales la inserción de CO debe cobrar mayor importancia.<br />
CH3OH<br />
C2H5OH<br />
C3H7OH<br />
Cn+1H2n+3OH<br />
H *<br />
kMeOH<br />
H *<br />
kH<br />
H *<br />
kH<br />
H *<br />
kH<br />
CO *<br />
CHxCO *<br />
*<br />
ka<br />
CO *<br />
kCO<br />
CO* *<br />
C2HyCO<br />
kCO<br />
CO* *<br />
CnHzCO<br />
kCO<br />
kd<br />
ki<br />
CO<br />
*<br />
C * + O * H O + *<br />
kp<br />
H *<br />
C1Hx *<br />
C2Hy *<br />
kp<br />
CnHz *<br />
kp<br />
CHx *<br />
CHx *<br />
CHx *<br />
Cn+1Hw<br />
H *<br />
kH<br />
H *<br />
kH<br />
H *<br />
kH<br />
CH4<br />
C2H4,C2H6<br />
CnH2n,CnH2n+2<br />
Fig. I.5 Esquema del mecanismo propuesto para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Xu Siaodin et al 15 proponen el mecanismo de reacción de la Fig.I.5 para la producción<br />
de alcoholes superiores.<br />
14 D.V.Krylow, O.S.Morozova and T.I.Knomenko. “Catalysts for Synthesis from CO and H2, Development of Catalysts<br />
Structures and Reaction Mechanisms”, Kinetics and Catalysis 35:6 (1994) 741-755.<br />
15 Xu Siaodin, E.B.M. Doesburg and J.J.F.Scholten. Catalysis Today 2 (1987) 125.<br />
H *<br />
7
Capítulo I Introducción<br />
Para la obtención de hidrocarburos, el proceso F-T transcurre principalmente por la<br />
polimerización de especies (-CH2)x. Puesto que la probabilidad de incorporación de los<br />
sucesivos grupos -CH2 a los compuestos ya formados es una cuestión estadística, Schulz y<br />
Flory dedujeron una ecuación para la distribución de productos en función del número de<br />
átomos de carbono. La ecuación viene dada por:<br />
logC log 1 / nlog<br />
<br />
n<br />
donde Cn es la fracción de productos con n átomos de C y , la probabilidad de<br />
crecimiento de la cadena ; esta probabilidad de crecimiento puede formularse como<br />
p<br />
<br />
<br />
cadena.<br />
p f<br />
donde p es la velocidad de propagación y f , la de terminación de la<br />
Debido a que Anderson 16 fue quien sugirió la relación Cn=Ci n-1 , donde i es la etapa del<br />
proceso de polimerización, la distribución de productos obtenida bajo esta relación se<br />
denomina distribución de Anderson-Schulz-Flory (ASF).<br />
Productos en moles(u.a.)<br />
100<br />
10<br />
1<br />
=0.71<br />
=0.75<br />
=0.85<br />
=0.84<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40<br />
Número de Carbonos<br />
Fig. I.6 Distribución ASF de productos en diversos catalizadores a distintas temperaturas<br />
En la Fig.I.6 se da la distribución de productos para diversos catalizadores a distintas<br />
16 R.B.Anderson. “Catalysis”, P.H.Emmet, ed. Vol. 4, Rheinhold, N.Y. (1956) 257.<br />
=0.93<br />
=0.88<br />
=0.86<br />
Co<br />
Fe<br />
Ru<br />
8
Capítulo I Introducción<br />
temperaturas 17 . En esta representación se ve rápidamente la falta de selectividad en la<br />
hidrogenación de CO. Para bajos valores de , se obtiene principalmente metano y a<br />
medida que aumenta se obtiene una mezcla de hidrocarburos.<br />
De la tabla I.1, se puede deducir la importancia de la relación H2/CO. Para la<br />
producción de parafinas y alcoholes de elevado peso molecular es conveniente una relación<br />
de 2 o próxima a 2.<br />
Igualmente, hay que destacar que, puesto que la mayor parte de las reacciones<br />
involucradas se obtienen con pérdida importante de volumen, un aumento en la presión<br />
facilitará la reacción y conducirá a hidrocarburos y oxigenados de elevado peso, siendo<br />
más favorables las bajas presiones para la obtención de productos ligeros, especialmente<br />
metano.<br />
La mayor parte de los catalizadores se preparan por precipitación. En general, requieren<br />
para mejorar su estabilidad ante el sinterizado térmico, la inclusión de un soporte en la<br />
fórmula, especialmente los de hierro, para el que se ha probado óxido de zinc, dolomita,<br />
kieselgurh y alúmina. También se suelen añadir diversos promotores, especialmente<br />
alcalinos, pero sólo cuando se trabaja a baja presión, porque pierden mucho de su validez<br />
cuando se trabaja a presión elevada 18 .<br />
Como consecuencia de todo lo anterior se deduce que, tanto el catalizador, la fase activa<br />
y soporte, como las condiciones de reacción, presión y temperatura y la relación H2:CO,<br />
pueden orientar la reacción hacia determinados productos, por lo que es preciso conocer el<br />
alcance de todas las modificaciones que se incorporen al proceso.<br />
Como se ha señalado antes, a la hora de fabricar combustibles líquidos, los catalizadores<br />
más adecuados son los que tienen Co o Fe en su composición. En el caso del Fe, se<br />
producen también productos oxigenados, pero en menores proporciones que en los<br />
catalizadores de Rh.<br />
Recientemente, la Royal Dutch/Shell, de Amsterdam, ha construido una planta en<br />
Malasia, de 14000 barriles por día con una inversión de 660x10 6 dólares USA, para<br />
producir hidrocarburos de elevado peso molecular a partir de gas natural. Emplean un<br />
catalizador de Co en unas condiciones que proporcionan un alto valor de la constante de<br />
crecimiento (constante de Anderson-Schulz-Flory). El producto obtenido, ceras, es<br />
17 J.Eilers, S.A.Postlima and S.T.Sie. Catal. Letters 7 (1990) 253.<br />
18 M.E.Dry. The Fischer-Tropsch Synthesis, Catalysis Science and Tech. Vol.1. Springer-Verlag, New York. Ed.<br />
J.R.Anderson and M. Boudart (1981).<br />
9
Capítulo I Introducción<br />
hidrocraqueado, para producir gasolina y combustible diesel de alta calidad 19 .<br />
Así, si el crecimiento de las cadenas estuviera regulado por limitaciones estéricas del<br />
catalizador, es decir si dejara de aplicarse la distribución ASF, el tratamiento necesario de<br />
hidrocraqueo podría ser eliminado, o cuando menos disminuido, lo que redundaría en los<br />
costes de la operación, contribuyendo a la mejora del proceso.<br />
El crecimiento de las cadenas puede ser controlado, en principio, por una limitación en<br />
el tamaño de los poros, siempre que el resto de las funciones catalíticas pudieran ser<br />
mantenidas. Puesto que la fase activa en los catalizadores convencionales es generalmente<br />
Co, Fe o Rh, el empleo como soporte de materiales de la naturaleza señalada y con tamaño<br />
de poro controlado podría introducir notorias ventajas sobre los catalizadores<br />
convencionales. Dentro de esta línea el empleo de arcillas pilareadas parece prometedor.<br />
Las arcillas pilareadas (PILC) han alcanzado un considerable interés como catalizadores<br />
en los últimos años. Introducidas por Vaughan, Lussier y Magee en el año 1979 20 , basados<br />
en la formación de compuestos interlaminares por derivados orgánicos, pretendían suplir<br />
las limitaciones de las zeolitas en el craqueo e hidrocraqueo de las fracciones pesadas del<br />
petróleo, proceso que había sido necesario por la escalada de precios que se planteó en<br />
1973. En pocas palabras, consisten en la substitución de los cationes intercambiables e<br />
interlaminares de las arcillas tipo esmectita, por grandes oligocationes de metales,<br />
fácilmente hidrolizables, y su anclaje a las láminas por efecto térmico. Constituyen galerías<br />
de dimensiones dadas por el tamaño de los oligocationes incorporados y por la distancia<br />
entre ellos, determinada por la capacidad de cambio y su superficie interlaminar.<br />
El interés surge esencialmente de la posibilidad de controlar la química de superficie<br />
(acidez, propiedades redox) y la microtextura (área superficial y micro y mesoporosidad)<br />
de los materiales sintetizados. Esto ha sido explorado ya por varios autores, modificando<br />
bien la naturaleza de la arcilla, bien la naturaleza de las especies pilareantes.<br />
La síntesis de las arcillas pilareadas comprende dos pasos esenciales: i) un cambio<br />
catiónico de la arcilla natural por hidroxicationes poliméricos y ii) una calcinación capaz de<br />
transformar los hidróxidos en óxidos anclados a la lámina de la arcilla.<br />
Las condiciones que se requieren de la arcilla son: una carga media entre 0,6 y 1,2e por<br />
celda unidad y tener los cationes de cambio hidratados o hidratables, a fin de que el enlace<br />
entre las láminas sea débil y permita la difusión a su interior de los grandes cationes<br />
generadores del pilar.<br />
19 R.R.Chianelli, J.E.Lyons and G.A.Mills. Catalysts for Liquid Transportation Fuels from petroleum, coal, residual oil<br />
and biomas, Catalysis Today 22 (1994) 361-396.<br />
20 D.R.W.Vaugan, R.J :Lussich and J.S.Magge. U.S.Patent 4.173.090 (1979).<br />
10
Capítulo I Introducción<br />
Por parte del catión se requiere: un tamaño superior a 8Å (tamaño máximo de poro que se<br />
ha conseguido en las zeolitas, material que se intentaba sustituir en reacciones de craqueo e<br />
hidrocraqueo); una carga no demasiado baja, a fin de que la distancia entre los pilares permita<br />
la difusión y alojamiento de las moléculas en su interior; y, finalmente, una estabilidad<br />
térmica adecuada.<br />
Los parámetros más importantes que afectan a la formación y a las propiedades de los<br />
cationes polinucleares son: concentración del ion metálico, basicidad o grado de hidrólisis,<br />
temperatura de preparación, tiempo y temperatura de envejecimiento, tipo de contraión<br />
utilizado y método de preparación 21 .<br />
Desde el trabajo preliminar de Vaughan et al 22 , han aparecido en la literatura numerosos<br />
artículos, relativos a estos materiales. Revisiones muy importantes están expuestas en un<br />
volumen especial de Catalysis Today editado por R.Burch 23 y el trabajo muy documentado de<br />
Figueras et al 24 en Catalysis Reviews.<br />
Varios oxicationes se han intercalado en esmectitas con distinto éxito. El núcleo más<br />
estudiado corresponde al Al 25,26 pero también hay referencias muy importantes sobre Zr 27,28 y<br />
Ti 2930,31 . Menos importantes son las de Si 32,33 , Cr 34,35 y Fe 36,37 , y le siguen Mg 38 , Ni 39 Cu 40,41 y<br />
Mo 42 . Más recientemente han aparecido referencias sobre Ta 43 y V 44 .<br />
Además de reacciones ácido-base, pueden realizarse cualquier tipo de reacciones que<br />
necesiten entornos confinados y temperaturas no muy altas. Así, pueden emplearse en<br />
21 J.Sterte. Catalysis Today 2 (1988) 219.<br />
22 D.E.W. Vaughan, P.K. Maher, E.W. Alberx. Zl.S.Patent 3.775.345 (1973).<br />
23 R. Burch. Catalysis Today 3 (1988) 2-3.<br />
24 F.Figueras. Cat. Rev. Sci. Eng. 30 (1988) 3.<br />
25 D.E.W. Vaughan and R.J. Lussier. Proceed. 5th. Int. Zeolite Conf., Ed. L.U.C. Rees, Heyden Press (1980).<br />
26 M. Montes and A. Gil. Langmuir 10 (1994) 1.<br />
27 D.E. Vaughan, R.J. Lussier and J.S. Magee. U.S.Patent 4.176.090 (1979).<br />
28 F. Figueras, A. Mattnod-Bashi, G. Fetter, A. Thrier and V.J. Zanchetta. J.Catalysis (1989) 119.<br />
29 D.E.W. Vaughan, R.J. Lussier and J.S. Magee. U.S.Patent 4.176.090 (1979).<br />
30 J. Sterte. Clays and Clay Miner. (1986) 34.<br />
31 Guida, Y. Fushan and L. Zhongui. Preprints Symp. for scientific bases for the preparation of heterogeneous catalysts,<br />
Louvain la Neuve (1986 ).<br />
32 T. Endo, M.M. Mortland and T.J. Pinnavaia. Clays and Clay Miner. (1980) 28.<br />
33 W. Hou, Q. Yan, Y. Fu. J. Chem. Soc., Chem. Comm. (1994).<br />
34 T.T. Pinnavaia, M. Tzou and S.D. Landau. J. Am. Chem. Soc. (1985 ) 107.<br />
35 A. Jimenez Lopez, J. Maza Rodriguez, P. Oliver Pastor, M. Maireles Torres and E. Rodriguez Castellon. Clays and Clay<br />
Miner. 3 (1993) 41.<br />
36 S. Yamanaka, T. Doi, S. Sako and M. Hattori. Mat. Sci. Bull. (1984) 19.<br />
37 F. Bergaya, N, Hassoun, J. Barrault and L. Gatineau. Clay minerals (1993) 28.<br />
38 S. Guida, Master thesis. Research Institute of Petroleum Processing, Beijing, China. (1982).<br />
39 S. Yamanaka and G.W. Brinley. Clays and Clay Miner 26 (1978) 21.<br />
40 R.Sun Kou.<strong>Tesis</strong> doctoral. UCM. (1994).<br />
41 R.C. Barklie, O. Braddell and D.H. Doff: Pillared layered structures. Ed. I.V. Mitchell. Elsevier, London (1990).<br />
42 S. Christiano and T.J. Pinnavaia. J. of solid state chem. (1986) 64.<br />
43 G Guiu and P. Grange. J. Chem. Soc., Chem. Comm. (1994).<br />
44 S. Narayanan, K. Deshpande and B.P. Prasard. J. Molecular Cat. 3 (1994) 88.<br />
11
Capítulo I Introducción<br />
activación de Cl 45,46,47 , deshidrogenación-deshidratación de alcoholes, hidrogenación de<br />
CO 48 , catálisis redox, así como en fotoquímica y fotocatálisis y, especialmente, en química<br />
"suave" y catálisis homogénea.<br />
En relación con la reacción que nos ocupa, hidrogenación de CO, Atkins y Ashton 49<br />
mostraron que arcillas pilareadas con Si e impregnadas con Ru, Fe y K son efectivas para la<br />
conversión de gas de síntesis a hidrocarburos y lo mismo hicieron Bartley y Burch 50 con Zr-<br />
PILC impregnada con nitrato de Cu.<br />
Un intento interesante ha sido la preparación de pilares mixtos de Al-Fe basados en la<br />
existencia de catalizadores tradicionales de Fe sobre alúmina, con buen rendimiento para la<br />
reacción de interés, puesto que la alúmina promovida por Fe de los catalizadores<br />
tradicionales, es útil para la reacción 51 .<br />
Dentro de esta línea se ha pretendido hacer uso de una supuesta selectividad de forma 52 ,<br />
para la producción de olefinas ligeras 53,54 y fueles 55 . Barrault et al 56 trabajando con una<br />
laponita pilareada con Al-Fe a 100Pa, 450ºC y una relación H2/CO=1 encontraron que,<br />
dependiendo de la relación Fe/Al+Fe, se producían diferentes catalizadores que presentaban<br />
una gran selectividad a olefinas ligeras y, en general, propiedades similares a las de cualquier<br />
catalizador convencional. En un trabajo posterior, los mismos autores detectaron que la<br />
selectividad a hidrocarburos C6-C8 aumentaba con el contenido de Fe, mientras que disminuía<br />
la de las olefinas; también encontraron que la distribución de hidrocarburos no se ajusta a la<br />
distribución ASF y apuntan que ello podría asimilarse a una cierta selectividad de forma.<br />
Sin embargo, no está demostrado en los planteamientos anteriores que se mantengan, a lo<br />
largo de la reacción, los pilares Al-Fe diseñados. De hecho, la experiencia en el laboratorio,<br />
trabajando con pilares mixtos Al-Fe, ha mostrado la inestabilidad de los mismos en reacción y<br />
su degradabilidad en el tiempo. Por tanto, parece mucho más adecuado trabajar por<br />
impregnación directa, utilizando el material pilareado como soporte.<br />
De esta manera, se mantendrían las características de la fase activa de los catalizadores<br />
45 E. Gutierrez and E. Ruiz-Hizky: Pillared Layered Structures. Ed. I.V. Mitchell. Elsevier, London (1990) 199-208.<br />
46 G. Poncelet and A. Schutz. Chemical Reactions in organic and inorganic constrained systems. NATO-ASI Series, Ser C<br />
(1985) 165.<br />
47 M.L. Occelli and R.J. Rennard. Catalysis Today 2 (1988) 309.<br />
48 E.Kikuchi, R.Hamaha, M.Nakamo, M.Takihara and Y.Morita. J.Ppn. Pet.Int. 26 (1983) 116.<br />
49 M.P.Atkins, A.G. Ashton. European Patent Appl. EP 0.150.8998 (1985).<br />
50 G.J.J. Bartley and R. Burch. Appl. Catal. 28 (1986) 209.<br />
51 V.Perrichon, H.Charcoset, J.Barrault and C.Forguy. Appl. Catal. 7 (1983) 21.<br />
52 J.Barrault, C.Zivkov, F.Bergaya, L.Gatineau, N.Hassoun, H.van Damme and D.Mari. J. Chem. Soc. Chem. Commun.<br />
(1988) 1403.<br />
53 B.Denise, C.Hanon and R.P.A.Sweeden, Proc. 8 th ICC 2 (1986) 93.<br />
54 L.F.Nazar, G.A.Dzin, F.Hughes, J.Godberg and D.Rancourt, Angew. Chem. Int. Ed. Engl. 22 (1983) 624.<br />
55 P.D.Ceasar, J.A.Brennan, W.E.Garwood and J.J.Ciric. J. of Catalysis 56 (1979) 274.<br />
56 J.Barrault, L.Gatineau, N.Hassoun and F.Bergaya. Energy and Fuels 6 (1992) 760.<br />
12
Capítulo I Introducción<br />
convencionales, al mismo tiempo que se establecería un límite de crecimiento a las cadenas<br />
en el sistema poroso de la arcilla.<br />
Las arcillas pilareadas han mostrado una gran selectividad para la adsorción de parafinas<br />
normales C6-C10 57 , que son las interesan en este trabajo, por lo que se considera que utilizando<br />
estos materiales se puede dirigir la reacción a la producción de combustibles líquidos.<br />
Según todo esto, la tesis que se presenta pretende demostrar que:<br />
“Los materiales pilareados son válidos para actuar como soporte de fase activa y su<br />
textura y microestructura son capaces de orientar los productos de reacción que, en el caso<br />
de la hidrogenación de monóxido de carbono, va dirigida a la producción de combustibles<br />
líquidos”<br />
La preparación de PILCs puede partir de arcillas naturales o sintéticas, habiendo elegido en<br />
este trabajo el aprovechamiento de materiales naturales existentes en España.<br />
Por lo tanto, las distintas etapas del objetivo principal se pueden enumerar:<br />
1- Selección de un material natural español, con características adecuadas para la<br />
preparación de PILCs.<br />
2- Síntesis de PILCs que puedan ser utilizados como soporte en la reacción de Fischer-<br />
Tropsch.<br />
3- Preparación de catalizadores soportados sobre los PILCs sintetizados para dicha<br />
reacción.<br />
4- Aplicación para la obtención de combustibles líquidos a partir de la hidrogenación de<br />
CO.<br />
Para ello, después de la introducción general (Cap. I), se seleccionará la materia prima a<br />
partir del conocimiento de sus características principales (Cap. III) mediante la serie de<br />
técnicas descritas en el Capítulo II. A continuación se procederá a preparar los materiales<br />
pilareados por distintos métodos, estudiando las modificaciones que estos métodos introducen<br />
en sus propiedades y estabilidad térmica y química (Cap. IV). Posteriormente, se tratará la<br />
preparación de los precursores metálicos y las modificaciones que introducen en el soporte<br />
(Cap. V), para finalmente estudiar su reactividad y selectividad justificando los resultados<br />
57 M.L.Ocelli, Parulekar and J.W.Higtower. Proceed. 8 th Int. Congress on Catalysis IV (1984) 735.<br />
13
Capítulo I Introducción<br />
obtenidos en función de las modificaciones detectadas (Cap. VI). Una recapitulación de todo<br />
el trabajo y las conclusiones obtenidas del mismo, en función de la <strong>Tesis</strong> propuesta, se hará en<br />
el Capítulo VII, para finalizar con una reseña de las fuentes bibliográficas utilizadas en cada<br />
uno de los apartados de la Memoria.<br />
14
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
EQUIPOS Y TÉCNICAS EXPERIMENTALES EMPLEADAS<br />
En este capítulo se presenta la metodología y principios básicos de las técnicas empleadas<br />
en las medidas de caracterización y actividad de los materiales preparados, así como las<br />
características y especificaciones de los equipos utilizados en cada caso.<br />
1. Caracterización<br />
1.1 Análisis elemental<br />
El análisis elemental de las muestras previamente disgregadas se realizó por<br />
Espectrofotometría de Absorción Atómica.<br />
1.1.1 Espectrofotometría de Absorción Atómica<br />
Durante las últimas décadas, la espectrofotometría de Absorción Atómica (EAA) ha sido<br />
una de las técnicas más empleadas para el análisis químico cuantitativo. Elwell y Gidley 1<br />
hacen una detallada discusión sobre esta técnica y Angino y Billings 2 presentan una<br />
aplicación particular a materiales geológicos, como son las arcillas naturales.<br />
La técnica se basa en el fenómeno descrito por la ecuación de Planck<br />
* 0 A A h h h<br />
...<br />
II.1.<br />
1 2 3<br />
donde h es la constante de Planck y 1 , 2 , ... son frecuencias de radiación.<br />
Esta ecuación muestra que un átomo en estado excitado (A * ) se encuentra en equilibrio con<br />
átomos en estado fundamental (A 0 ) emitiendo una serie de radiaciones características ( 1 ,<br />
2 , ...) para cada uno de los diferentes elementos. O de otra manera, que un átomo en<br />
estado elemental se puede excitar por absorción de una radiación característica que puede<br />
ser empleada para identificar la concentración de los átomos en cuestión.<br />
Las muestras para su análisis tienen que estar perfectamente disgregadas en una disolución<br />
líquida para luego ser convertidas en aerosol por un sistema de nebulización.<br />
Las medidas pueden ser realizadas, tanto en emisión como en absorción atómica, utilizando<br />
una llama como celda de absorción.<br />
En el caso de emisión, la llama sirve con un propósito doble: convierte la muestra (ya en<br />
aerosol) en vapor atómico y luego lleva térmicamente a los átomos a un estado excitado.<br />
1 W.T.Elwell and J.A.F.Gidley. Atomic Absorption Spectrophotometry, 2 nd Ed., Pergamon Press, Oxford (1966).<br />
2 E.E.Angino and G.K.Billings. Atomic Absorption Spectrometry in Geology, Elsevier, Amsterdam (1967).<br />
16
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Cuando estos átomos regresan al estado base, emiten energía (luz), la cual es detectada por<br />
el instrumento (Ec.II.1 de izquierda a derecha).<br />
La intensidad de la luz tanto emitida como absorbida está en relación con la concentración<br />
de los elementos de interés en solución.<br />
En absorción atómica, la única función de la llama es convertir la muestra que se encuentra<br />
como aerosol en vapor atómico, el cual puede absorber luz de una fuente de luz primaria<br />
característica del elemento en estudio. Como fuente de emisión se emplea una lámpara de<br />
cátodo hueco de la misma naturaleza del elemento a estudiar, la cual emite radiación que es<br />
absorbida por los átomos en estado fundamental, en una cuantía proporcional a la<br />
concentración del elemento en cuestión en la celda de absorción (llama).<br />
La relación entre la luz incidente (I0) y la emergente (I) a la salida del medio absorbente,<br />
con la concentración C del elemento a medir, está dada por la ley de Lambert y Beer<br />
log . .<br />
I<br />
K L C<br />
I<br />
0 II.2.<br />
donde K es una constante que depende de las condiciones experimentales y de la naturaleza<br />
del material a medir, L representa el camino óptico (en cm) y C la concentración (en g/l).<br />
No se conocen desviaciones a esta ley cuando se aplica a materiales completamente<br />
homogéneos y bajas concentraciones, pero aparecen variaciones cuando no es así. Para ello<br />
se traza una “curva de calibrado”, representando gráficamente logI0/I frente a C.<br />
1.1.2 Procedimiento de análisis<br />
- Disgregación de las muestras<br />
Varios métodos, tanto alcalinos como ácidos, ha sido descritos en bibliografía para la<br />
disgregación de silicatos con el objeto de hacer su análisis químico elemental.<br />
Entre los métodos más empleados está el descrito por Langmyhr y Paus 3 (disgregación<br />
ácida) y el de fusión alcalina con metaborato de litio, presentado por Medlin et al 4 .<br />
Para el caso de las muestras objeto de este trabajo, se empleó el método de Medlin et al,<br />
completado con el trabajo de Yule y Swanson 5 .<br />
El procedimiento es el siguiente : se mezclan íntimamente, en un crisol de platino-oro, 200<br />
mg de muestra calcinada a 1000ºC y finamente molida (
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Posteriormente se funde en horno mufla a 1000ºC hasta que la fusión sea completa<br />
(aproximadamente 15 minutos), se retira e inmediatamente se enfría en agua y se agrega 10<br />
ml de HNO3 concentrado y H2O desionizada hasta cubrir el crisol. Se agita<br />
magnéticamente hasta la disolución completa de la muestra.<br />
- Reactivos y soluciones<br />
Al producto de la disgregación, se agrega 20 ml de solución EDTA (8 g de EDTA en 10 ml<br />
de H2O, 40 ml de amoníaco concentrado y enrasado con H2O a 1 l) y se enrasa a 200 ml<br />
con H2O. El EDTA se añade para retener al Fe y otros elementos que pueden interferir.<br />
Ésta constituye la disolución madre (M) donde se mide Na, K y Mn.<br />
Los demás elementos se analizan en las siguientes disoluciones.<br />
Disolución A : 20 ml de disolución M más 10 ml de solución de Na (solución de 10.000<br />
ppm de Na, a partir de NaCl), se enrasa a 100 ml con agua desionizada. En esta solución se<br />
mide Si y Al lo antes posible. La solución de sodio disminuye los efectos de ionización en<br />
la medida del Al, pero aparece una “absorción aparente” que aumenta con el<br />
envejecimiento de la solución.<br />
Disolución B : 5 ml de disolución M más 1 ml de disolución de La2O3 (58,64 g de La2O3<br />
más el HCl concentrado, necesario para su disolución, llevado a 1 l con H2O) se enrasa a<br />
100 ml con agua desionizada. En esta disolución se mide Fe, Ca y Mg. La incorporación de<br />
La suprime las interferencias químicas producidas por los aluminatos y silicatos al medir<br />
Ca y Mg y evita la ionización que se produce en la medida del Ca.<br />
Conjuntamente se prepara una solución de aforo con 50 ml de HNO3, 3 g de LiBO2 , 100<br />
ml de disolución EDTA y llevado a 1 l con agua desionizada, que se utiliza en la<br />
preparación de los patrones.<br />
El agua desionizada se obtuvo de un equipo de la marca Millipore, con una impedancia<br />
de 18,2M.<br />
Los patrones para el calibrado del equipo de EAA fueron preparados con las<br />
disoluciones adecuadas para evitar interferencias en el análisis.<br />
En la Tabla II.1 se presenta la relación de soluciones utilizadas en la preparación de<br />
patrones. En la segunda columna se muestran las concentraciones preparadas a partir de<br />
patrones de 1000 ppm, de donde se deduce el volumen inicial de cada patrón antes de<br />
añadir soluciones adicionales. Estas concentraciones son las que caen dentro del rango de<br />
respuesta lineal del equipo. De la tercera columna se extraen las disoluciones agregadas a<br />
cada patrón para evitar o disminuir interferencias y en la última columna está indicado el<br />
18
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
volumen de enrase.<br />
<br />
- Equipo utilizado<br />
El análisis químico elemental de las disoluciones en cuestión se llevó a cabo en un<br />
Espectrofotómetro de Absorción Atómica de la marca Perkin-Elmer, modelo 3030, donde<br />
la celda de absorción es una llama de aire-acetileno o nitroso-acetileno.<br />
La ganancia, la corriente de la lámpara y el proceso de señales y datos es controlado por un<br />
ordenador. El cero y las concentraciones de calibración se ajustan automáticamente, dando<br />
una curva de calibración con su ecuación de ajuste.<br />
- Condiciones de análisis<br />
En el análisis de los elementos, sodio, calcio y potasio se determinaron por emisión<br />
atómica. El resto de los elementos fueron analizados por absorción atómica, utilizando<br />
como fuentes de radiación lámparas de cátodo hueco marca Intensitrón.<br />
Las condiciones de medida: longitud de onda, anchura de rendija, rango de linearidad y<br />
composición de la llama, fueron en todo momento las indicadas en el manual<br />
correspondiente de Perkin-Elmer; y son los que se muestran en la Tabla II.2 para los<br />
elementos de interés.<br />
Tabla II.1 : Preparación de patrones para EAA<br />
Patrón Concentraciones Solución a añadir Enrase<br />
Fe 2 ; 5 y 10 ppm 2 ml de disolución de La2O3 100 ml con H2O<br />
10 ml de disolución de aforo desionizada<br />
Ca 1 ; 3 y 5 ppm 2 ml de disolución de La2O3 100 ml con H2O<br />
10 ml de disolución de aforo desionizada<br />
Mg 0,3 ; 0,5 y 1 ppm 2 ml de disolución de La2O3 100 ml con H2O<br />
10 ml de disolución de aforo desionizada<br />
Na 0,2 ; 0,5 ; 0,8 y 1 ppm se enrasa con solución de aforo 100 ml<br />
K 0,5 ; 1 y 2 ppm se enrasa con solución de aforo 100 ml<br />
Al 5 ; 10 ; 20 y 50 ppm 25 ml de solución de aforo 100 ml con H2O<br />
10 ml de solución de Na<br />
desionizada<br />
Mn 1 ; 2 ; 2,5 y 4 ppm se enrasa con solución de aforo 100 ml<br />
Si 25 ; 50 y 100 ppm 10 ml de solución de aforo<br />
5 ml de solución de Na<br />
Tabla II.2: Condiciones de medida por EAA<br />
50 ml con H2O<br />
desionizada<br />
19
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Elemento Modo (nm) Rendija Llama Rango lineal<br />
(nm)<br />
(mg/l)<br />
Na emisión 589,0 0,2 aire-acetileno 1<br />
K emisión 766,5 0,4 aire-acetileno 2<br />
Ca emisión 422,7 0,2 N2O-acetileno 5<br />
Si absorción 251,6 0,2 N2O-acetileno 150<br />
Al absorción 309,3 0,7 N2O-acetileno 100<br />
Mg absorción 285,2 0,7 aire-acetileno 0,5<br />
Mn absorción 279,5 0,2 aire-acetileno 2<br />
Fe absorción 248,3 0,2 aire-acetileno 5<br />
Co absorción 240,7 0,2 aire-acetileno 3,5<br />
Rh absorción 343,5 0,2 aire-acetileno 15<br />
donde es la longitud de onda característica del elemento utilizado en el análisis.<br />
1.2 Análisis Mineralógico<br />
El estudio de la composición mineralógica se realizó por la técnica de difracción de Rayos-<br />
X, la cual también se utilizó para analizar los cambios producidos en los nuevos materiales<br />
obtenidos.<br />
1.2.1 Difracción de Rayos-X<br />
La mayoría de los sólidos están compuestos por substancias cristalinas, con sus átomos<br />
formando redes tridimensionales que pueden actuar como rejillas de difracción para rayos<br />
incidentes monocromáticos con una longitud de onda del orden de la distancia<br />
interatómica. Supuestas las condiciones, cada substancia cristalina produce un<br />
difractograma único que puede ser empleado para su identificación. Como fuente de<br />
radiación, los Rayos-X cumplen con las exigencias requeridas y su difracción se viene<br />
usando desde 1912 como una técnica analítica para identificar no solo cualitativamente<br />
sino también cuantitativamente los compuestos constituyentes de una substancia.<br />
- Producción de Rayos X<br />
Los Rayos X (R-X), descubiertos en 1895 por Röentgen, son producidos cuando partículas<br />
cargadas con suficiente energía cinética (generalmente electrones) son desaceleradas<br />
rápidamente.<br />
Un tubo de R-X consta de un par de electrodos a alto voltaje, en el que los electrones<br />
producidos por aplicación de una cierto voltaje, viajan rápidamente desde el cátodo hacia el<br />
20
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
ánodo contra el que chocan, irradiando energía en todas las direcciones desde el punto de<br />
impacto. Esta radiación está situada en el espectro electromagnético entre la luz ultravioleta<br />
y la radiación gama en un rango aproximado en longitudes de onda () entre 0,1 y 100 Å,<br />
dependiendo del voltaje aplicado.<br />
El flujo de energía a través de un área unitaria perpendicular a la dirección de propagación<br />
de la onda, es lo que se denomina intensidad de la radiación I.<br />
Cuando el voltaje es aumentado por encima de cierto valor crítico, característico para cada<br />
material (ánodo), aparecen unas intensidades máximas, superpuestas con el espectro<br />
continuo, denominadas líneas características K, L, M, ... en orden de crecientes,<br />
correspondientes a la energía liberada cuando los electrones internos de los átomos del<br />
ánodo son desplazados y caen otros electrones externos sobre los huecos producidos.<br />
Dentro de las líneas K, que son las de mayor energía, se encuentran las componentes K y<br />
K. Estas líneas tienen la característica de ser muy intensas (por ej. para el Cu, 90 veces<br />
mayor que el espectro continuo) y muy angostas (
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
La orientación de los planos en una red, pueden ser simbólicamente representados por los<br />
índices de Miller, definidos por los recíprocos de las intersecciones fraccionales que tienen<br />
los planos con los ejes cristalográficos; se denotan h, k, l y definen un conjunto de planos<br />
paralelos denominados planos h k l (Fig.II.1).<br />
La distancia entre los planos paralelos hkl se denomina dhkl, y es función de los índices del<br />
plano y de las constantes de red (longitudes de ejes y ángulos entre ellos para la celda<br />
unidad).<br />
- Difracción<br />
c<br />
c/l<br />
b/k<br />
(hkl) b<br />
a/h<br />
Fig.II.1 Designación de planos por los índices de Miller<br />
En 1912 Von Laue, basándose en que los cristales son compuestos de átomos igualmente<br />
espaciados y en que la longitud de onda de los R-X es del orden de la distancia<br />
interatómica, concluyó que sería posible difractar R-X por medio de cristales.<br />
La difracción es principalmente debida a la existencia de relaciones entre las fases de dos o<br />
más ondas, que surge como una diferencia de caminos de los rayos correspondientes a cada<br />
una. Dos ondas están completamente en fase, cuando su diferencia de camino es nula o<br />
difiere en un número entero de longitudes de onda, por lo que aparece un reforzamiento de<br />
la amplitud total resultante y, por lo tanto, un máximo de intensidad.<br />
Bragg, expresó las condiciones necesarias para la difracción entre planos de átomos, en una<br />
forma matemáticamente simple conocida como Ley de Bragg<br />
a<br />
n 2d sen <br />
II.3.<br />
donde n es un número entero (denominado orden de reflexión), es la longitud de onda<br />
incidente, d la distancia interplanar que, para el caso en que sean los planos hkl, es dhkl, y <br />
es el ángulo formado entre el rayo incidente y la muestra.<br />
Por lo tanto, de II.3, para un conocido, variando podemos encontrar las distancias d<br />
características de la muestra (Fig.II.2). Cada línea de difracción primaria puede ir<br />
acompañada de otras, secundaria, terciaria, etc., dependiendo del orden de difracción n.<br />
22
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Las direcciones de difracción están determinadas únicamente por la forma y tamaño de la<br />
celda unidad. Cada substancia cristalina produce un difractograma único. En una mezcla de<br />
componentes cada substancia producirá su difractograma independientemente de las otras y<br />
por lo tanto puede ser empleado para la identificación de tales mezclas. Además existe una<br />
relación entre las intensidades de las líneas de difracción de cada substancia y su cantidad<br />
en la muestra, por lo que también puede emplearse para el análisis cuantitativo.<br />
1.2.2 Difractómetro de polvo<br />
D<br />
<br />
<br />
A<br />
B<br />
<br />
C<br />
dhkl<br />
dhkl<br />
Fig.II.2 Condición de Difracción de Bragg<br />
El método utilizado para análisis de catalizadores por DRX es el denominado “método del<br />
polvo”.<br />
El material a examinar es reducido a un fino polvo y ubicado en un portamuestra de<br />
metacrilato, sobre el que se hace incidir un haz de R-X monocromático.<br />
Cada partícula de polvo es un diminuto cristal, o colección de pequeños cristales orientados<br />
con respecto al haz incidente. Considerando una reflexión particular hkl, algunos cristales<br />
estarán orientados de manera que formen un correcto ángulo de Bragg para la reflexión,<br />
por lo que se produce la difracción y aparece un pico.<br />
El difractómetro consiste en un tupo de R-X, un portamuestras plano con la muestra<br />
pulverulenta centrada en el centro óptico de un goniómetro y un detector (contador de<br />
radiaciones) ubicado sobre el borde del sistema angular (Fig.II.3).<br />
El portamuestra gira en torno a su eje O con una velocidad . El haz de R-X proveniente<br />
del tubo es colimado por una rendija de divergencia D. El haz difractado converge sobre<br />
una rendija R e incide en la ventana del detector de radiaciones. Tanto la rendija de<br />
recepción como el contador, forman una unidad móvil que se desplaza en torno al eje del<br />
goniómetro a una distancia r (radio del difractómetro). Su posición respecto al haz directo<br />
puede leerse en una escala adicional (ángulo 2). Evidentemente, para que la rendija y el<br />
23
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
contador estén en condiciones de recoger los haces “reflejados” por la muestra, deberán<br />
desplazarse a una velocidad angular constante 2. Esta es una de las características<br />
esenciales del difractómetro: asegurar el perfecto sincronismo del giro 1:2, muestra:<br />
rendija-contador.<br />
En la Fig.II.3 se presenta un esquema básico del difractómetro.<br />
Anodo<br />
Rendija de<br />
divergencia<br />
Fig.II.3 Esquema básico del difractómetro<br />
Para la obtención de resultados más precisos, el barrido se puede efectuar en modo<br />
“discontinuo”. Éste consiste en mantener inmóvil el contador a un determinado ángulo 2,<br />
durante un tiempo fijo. Una vez registrado el número de cuentas en ese tiempo, se desplaza<br />
el contador a un nuevo ángulo 2 y se vuelve a hacer la medida.<br />
El número de cuentas obtenido por unidad de tiempo es proporcional a la intensidad de R-<br />
X (I) incidente sobre el detector. La intensidad I en función del ángulo 2, se representa<br />
gráficamente, lo que se denomina difractograma de R-X.<br />
- Equipo utilizado<br />
Detector<br />
Muestra<br />
Rendija de<br />
recepción<br />
El difractómetro utilizado es de la marca SEIFERT-XRD3000. El tubo de R-X trabaja a<br />
una tensión de 40 KV con una intensidad de corriente de 40 mA. El material utilizado<br />
como ánodo es de cobre y el material filtro para la obtención de la radiación K es de<br />
níquel. La longitud de onda de la radiación K del Cu utilizado es de 1,540598Å.<br />
Los difractogramas se obtuvieron por el método del polvo. Las medidas, utilizando el<br />
método :2, se hicieron con un barrido en 2 desde 2º a 75º, con pasos de 0,02º y con un<br />
O<br />
<br />
2<br />
24
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
tiempo de retención en cada ángulo de 1 segundo.<br />
Se utilizaron dos rendijas de recepción, de 3 y 1 mm, y una de divergencia de 2 mm.<br />
1.3 Análisis estructural<br />
Las características fundamentales de la estructura cristalina de las arcillas, justifican la<br />
retención de grandes cantidades de agua, ya sea de adsorción, cristalización o composición,<br />
eso hace que un estudio de la pérdida de agua por análisis térmico pueda ayudar a conocer<br />
la estructura del material. Además, pensando en la aplicabilidad de los materiales, es<br />
conveniente identificar los grupos superficiales, su acidez y reducibilidad.<br />
1.3.1 Análisis térmicos<br />
El análisis térmico (AT) incorpora técnicas de evaluación que contemplan a la temperatura<br />
como variable principal: el material que se desea ensayar es sometido a alguna secuencia<br />
térmica que puede consistir en un simple proceso de calentamiento o enfriamiento desde<br />
una temperatura a otra, o mantener una temperatura constante (isoterma). En la mayoría de<br />
los casos, la muestra es calentada a una cierta velocidad hasta una temperatura elevada.<br />
La base principal de las principales técnicas de AT es medir los cambios de parámetros en<br />
un determinado material en función de un programa térmico dado. Le Chatelier 7 fue uno de<br />
los pioneros en esta técnica aplicada a las arcillas, encontrando la temperatura de<br />
deshidratación de varias de ellas.<br />
Los datos son normalmente presentados como una función de la temperatura o del tiempo<br />
de análisis, en unidades apropiadas para la técnica.<br />
1.3.1.1 Análisis termogravimétrico (ATG)<br />
En esta técnica el parámetro en estudio en función de la temperatura es la variación<br />
porcentual del peso de la muestra (ATG). Es una de las técnicas más antiguas en el campo<br />
de la mineralogía de arcillas, donde uno de las primeras aplicaciones fue reportada por<br />
Nernst y Riesenfeld 8 en 1903. Wendlandt 9 resume el desarrollo del ATG y muestra sus<br />
aplicaciones a distintos tipos de muestras.<br />
Consiste en colocar la muestra en una microbalanza, donde el platillo con la muestra está<br />
7 M.M. Le Chatelier. Bull. Soc. Min. 10 (1887) 204-211.<br />
8 W.Nernst and E.H.Riesenfeld. Chem. Berichte 36 (1903) 2086-2093.<br />
9 W.W.Wendlant. Thermal Analysis, Wiley, N.Y. (1984).<br />
25
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
introducido en un horno de alta precisión, y en una atmósfera dinámica o estática de un gas<br />
determinado. El aumento o disminución del peso se registra en función de la temperatura o<br />
del tiempo teniendo en cuenta la velocidad de calentamiento del horno.<br />
Las aplicaciones son variadas, pero además de la estabilidad térmica de las muestras, se<br />
puede detectar la existencia de especies intermedias y el contenido de solventes, y, en<br />
función de la atmósfera de trabajo, la adsorción-desorción de moléculas, propiedades<br />
ácido-base y reductoras-oxidativas.<br />
- Equipo utilizado<br />
Para los análisis termogravimétricos, se ha utilizado un equipo de la marca Perkin-Elmer,<br />
formado por una microbalanza TGS-2, un controlador de temperatura y sistema de análisis<br />
System 7/4 y una estación de datos 3700. El rango de temperaturas permitido es de 25-<br />
1000ºC, la velocidad de calentamiento puede variar entre 0,1 y 200ºC/min y la cantidad de<br />
muestra entre 5 y 50 mg. La sensibilidad es de 0,2g y la pérdida de peso se da<br />
directamente en porcentaje del peso de la muestra.<br />
El equipo dispone de un sistema de entrada de gases (N2, H2, O2, He, aire, etc.) con el fin<br />
de realizar los análisis en atmósfera controlada.<br />
En todos los casos de estudio de pérdidas de peso en distintas atmósferas, los análisis se<br />
realizaron a una velocidad de calentamiento de 10ºC/min.<br />
1.3.1.2 Análisis térmico diferencial (ATD)<br />
En general todas las reacciones químicas son procesos que transcurren con<br />
desprendimiento o con absorción de energía clasificándose en reacciones exotérmicas y<br />
endotérmicas respectivamente. Sin embargo, hay procesos físicos que no implican cambio<br />
químico, pero que transcurren también con intercambios energéticos, como son: fusión,<br />
vaporización, cambio de fase, etc. Estos procesos que, aunque no alteran la composición<br />
química de la muestra, alteran sustancialmente las propiedades físicas de la misma (dureza,<br />
elasticidad, propiedades ópticas, etc.) pueden tomarse como referencia en la caracterización<br />
básica y control de calidad de los materiales.<br />
La técnica de Análisis Térmico Diferencial (ATD) detecta los cambios de la capacidad<br />
calorífica asociados con las transiciones de fase y reacciones que experimenta una muestra.<br />
Las bases del ATD nacen con la invención del termopar por Roberts-Austen 10 en 1899,<br />
aunque la instrumentación no fue notoriamente mejorada hasta la incorporación de<br />
10 W.C.Roberts-Austen. Proc. Insts. Mech. Eng. 35 (1899).<br />
26
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
computadoras en el control de experimentos y recogida de datos, introducida en 1980 como<br />
señala Giese 11 .<br />
En esencia, el ATD consiste en comparar la temperatura de la muestra con la de un<br />
material inerte utilizado como referencia mientras ambos son calentados con la misma<br />
velocidad en un mismo horno. Cualquier diferencia de temperatura (T) es detectada y es<br />
proporcional al cambio de entalpía.<br />
La diferencia de temperatura medida es:<br />
donde TM= temperatura de la muestra<br />
TR= temperatura de referencia<br />
T T M - TR<br />
II.4.<br />
Si al aumentar la temperatura del horno, la muestra gasta parte de esa energía en<br />
producir una reacción química o cambio físico en lugar de aumentar su temperatura,<br />
entonces T0 y el proceso es exotérmico.<br />
La elección de la velocidad de calentamiento juega un papel muy importante y depende<br />
del tipo de proceso que se produzca con el calentamiento.<br />
Lo que se obtiene es la variación T en función de TR, donde el área bajo la curva<br />
debería ser proporcional a la entalpía del proceso; en la práctica esto no es real por la<br />
pérdida y ganancia entre la muestra y el aparato ATD. Aunque en los equipos actuales este<br />
efecto ha sido disminuido, ésta es considerada una técnica cualitativa, pero muy importante<br />
en la determinación de los tipos de procesos involucrados en función de la temperatura.<br />
- Equipo utilizado<br />
El equipo utilizado para las medidas de análisis térmico diferencial es de la marca Perkin-<br />
Elmer, modelo DTA 7. Este modelo es un instrumento controlado por un ordenador PC y<br />
opera con el diseño de flujo de calor. Tiene la posibilidad de utilizar hasta ocho rampas de<br />
temperatura para el estudio de reacciones endo y exotérmicas.<br />
Consiste en un horno de alta temperatura con dos portamuestras gemelos e igualmente<br />
cargados de la muestra de referencia y el problema. Los componentes fundamentales del<br />
sistema son los termopares de Pt y Pt/Rh que se utilizan para evaluar las temperaturas de la<br />
muestra y del material de referencia y, por lo tanto, la señal diferencial de temperatura T.<br />
11 R.F.Giese. CMS Workshop Lectures Series, Vol 3 “Thermal Analysis in Clay Science”, The Clay Mineral Society,<br />
Colorado-USA (1990).<br />
27
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Características técnicas principales<br />
Rango de temperatura: desde ambiente a 1100ºC<br />
Precisión en temperaturas: ± 0,2ºC<br />
Velocidades de calentamiento y enfriamiento: 0,1-100ºC/min<br />
Temperatura mínima de incremento: 0,1ºC/min<br />
Enfriamiento del horno: automático con aire a presión<br />
Atmósferas: Estáticas o dinámicas con aire, N2,<br />
O2, Ar, He, principalmente<br />
1.3.2 Grupos superficiales<br />
1.3.2.1 Espectroscopía Infrarroja con transformada de Fourier<br />
Los métodos espectroscópicos se basan en la absorción o emisión de radiación por una<br />
molécula (o grupo funcional químico de un material dado) mediante el paso de un nivel<br />
cuántico bajo a otro superior (absorción), o viceversa (emisión), cuando es ubicado ante un<br />
campo electromagnético como se vio para EAA.<br />
La diferencia de energía entre estos estados cuánticos está dada por:<br />
E h<br />
II.5.<br />
donde h es la constante de Planck, igual a 6,63x10 -27 ergios/seg y es la frecuencia de la<br />
radiación incidente, a la cual se produce la absorción (si E>0) o emisión (si E
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Interferómetro de<br />
Las diferentes combinaciones de masas atómicas y energías Michelson de enlace constituyen sistemas<br />
que vibran a diferentes frecuencias cuando la molécula absorbe radiación electromagnética.<br />
Además los diferentes Muestra movimientos vibracionales del átomo en la misma molécula<br />
producen Detector<br />
absorción característica a diferentes números de onda. Por lo tanto, con radiación<br />
en el rango IR (espectroscopía IR), se pueden determinar grupos funcionales químicos en<br />
una determinada muestra, comparando las frecuencias de vibración obtenidas con las<br />
conocidas en la bibliografía 12 .<br />
La espectroscopía IR es una técnica aplicada desde varias décadas atrás pero su gran auge<br />
se presenta desde 1975, cuando aparecen en el mercado los espectrómetros con<br />
Transformada de Fourier 13 . Un espectrómetro de infrarrojo por transformada de Fourier<br />
(IR-TF) consta de tres componentes básicos: una fuente, un interferómetro de Michelson y<br />
un detector 14 . Básicamente, el principio de funcionamiento es el siguiente:<br />
Un barrido en IR-TF es un desplazamiento mecánico completo (ida y vuelta) de un espejo<br />
móvil de velocidad constante (Fig.II.4). La fuente de infrarrojo, de banda ancha (entre 4000<br />
y 400 cm -1 en número de onda), emite radiación sobre el interferómetro. El haz emitido se<br />
divide en dos ramas de igual intensidad, una a través de un espejo fijo y otra a través del<br />
móvil que luego se recombinan para incidir sobre la muestra y de allí al detector, en el caso<br />
en que la muestra se interponga al detector. El espejo móvil varía el camino óptico de la<br />
radiación y, para ciertas diferencias de camino, aparecen interferencias constructivas o<br />
destructivas en la recombinación de los rayos, dando un interferograma o espectro en el<br />
tiempo (donde el tiempo está referido a la posición del espejo). En el caso de no interponer<br />
una muestra, el interferograma da la intensidad de la radiación emitida en función del<br />
tiempo para todo el rango de frecuencias de la radiación. En la Fig.II.4 se presenta un<br />
esquema de un sistema IR-TF.<br />
Fuente de I-R<br />
Espejo fijo<br />
Beamsplitter<br />
Señal<br />
Espejo móvil<br />
fuente mocromática<br />
Posición del espejo móvil<br />
12 M.L.Hair. Infrarred Spectroscopy in Surface Chemistry, Marcel Dekker, Inc. N.Y. (1967).<br />
13 P.R.Griffiths and J.A. de Haseth. “Fourier Transform Infrarred Spectrometry” John Wiley and Sons, Inc. N.Y. (1986).<br />
14 D.W.Green and T.Reedy. "Fourier Transform Infrarred Spectroscopy". Ed. J.R.Ferraro and L.J.Basile, Academic Press<br />
29
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Fig.II.4 Esquema básico de un sistema IR-TF<br />
Si la intensidad de la radiación es policromática (B()), puede ser representada en función<br />
del tiempo por la transformada de Fourier (Ec.II.7) donde es la frecuencia de la radiación.<br />
Su transformada de Fourier inversa es:<br />
<br />
2it<br />
I( t) B( ) e d<br />
<br />
<br />
<br />
2it<br />
B( )<br />
I( t) e dt<br />
<br />
Por lo que la transformada de Fourier del interferograma (I(t)) da el espectro de infrarrojo,<br />
que es la intensidad de la radiación en función de la frecuencia.<br />
Cuando la radiación incide sobre la muestra, parte de ella se transmite, parte se absorbe y<br />
parte se refleja.<br />
El porcentaje de radiación transmitida para cada frecuencia está dada por<br />
IM<br />
<br />
%T 100<br />
<br />
I0<br />
<br />
<br />
donde IM es la intensidad detectada a través de la muestra e I0 es la intensidad de la<br />
radiación sin muestra. Se puede representar así el %T en función de , obteniendo el<br />
espectro en estudio (espectroscopía de transmisión).<br />
- Equipo utilizado<br />
Para el análisis por Espectroscopía Infrarroja se utilizó un Espectrómetro Infrarrojo con<br />
Transformada de Fourier marca Nicolet modelo 5ZDX, con un rango de espectro de 4000-<br />
400 cm -1 . El detector es del tipo MCT (mercurio-cadmio-teluro) con una ventana de KBr.<br />
La velocidad del espejo móvil del interferómetro es de 0,32 cm/seg y las diferencias de<br />
camino son medidas con un láser de He-Ne.<br />
N.Y. (1978).<br />
II.7.<br />
II.8.<br />
II.9.<br />
30
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Los parámetros de análisis y la obtención de datos son controlados por una computadora<br />
PC conectada en serie.<br />
-Preparación de las muestras<br />
La espectroscopía IR-TF, se utilizó para la caracterización de arcillas, por espectroscopía<br />
de transmisión. Las muestras fueron preparadas por dos métodos, el de la pastilla con<br />
bromuro potásico y el de pastillas autosoportadas.<br />
Las pastillas con KBr (transparente a la radiación IR) son preparadas para la identificación<br />
de los grupos superficiales de las muestras. La técnica consiste en mezclar perfectamente 1<br />
mg de muestra seca finamente molida con 200 mg de KBr. Con esta mezcla se forma una<br />
pastilla de aproximadamente 1 cm. de diámetro, haciendo vacío con una bomba rotatoria y<br />
en una prensa a 10 Toneladas durante aproximadamente 2 minutos. El análisis de IR-TF, se<br />
realizó por transmisión, con 32 barridos para cada espectro.<br />
Las pastillas autosoportadas son utilizadas para el estudio de centros ácidos superficiales<br />
por adsorción-desorción de piridina. La técnica consiste en moler finamente 20 mg de<br />
muestra seca y colocarla uniformemente en un papel de pesar sobre una placa de acero. La<br />
uniformidad se obtiene con una cuchilla fina logrando una forma circular de<br />
aproximadamente 1 cm de diámetro. Posteriormente se cubre con otro papel de pesar y otra<br />
placa de acero y se coloca en prensa a 10 T durante 5 minutos. La pastilla así obtenida se<br />
pone en estufa a 60ºC durante una noche (con los papeles de preparación) para poder<br />
sacarla fácilmente. Por último se introduce en una celda construida para el análisis de<br />
adsorción-desorción de piridina.<br />
1.3.3 Reducibilidad<br />
Da a conocer las posibilidades de reducción de las agrupaciones de elementos dentro de los<br />
materiales, a fin de pasar, en este caso, a la fase activa del proceso.<br />
1.3.3.1 Reducción Térmica Programada<br />
La técnica de reducción térmica programada (RTP) determina el número de especies<br />
reducibles presentes en un catalizador y revela la temperatura a la cual ocurre la reducción.<br />
Hurst et al 15 presentan una importante revisión del tema aplicado a catálisis.<br />
15 N.W.Hurst, S.J.Gentry, A.Jones and B.D.McNicol. Catal. Rev.-Sci. Eng. 24:2(1982) 233-309.<br />
31
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Un importante aspecto de los análisis de RTP es que las muestras no deben tener<br />
características especiales sino solamente contener metales reducibles.<br />
Durante la preparación de catalizadores, generalmente lo que se obtiene son las especies<br />
activas en sus fases oxidadas. Para diferentes reacciones, lo que interesa es que la fase<br />
activa esté en forma metálica, por lo que resulta de vital importancia estudiar las<br />
condiciones para obtener dichas fases.<br />
La reacción entre óxidos metálicos (OM) e hidrógeno para formar metales M y vapor de<br />
agua, puede ser representada por la ecuación general<br />
OM(s) + H2(g) M(s) + H2O(g) II.10.<br />
El cambio de energía libre (Gº) en condiciones standard (T y P constantes) para la<br />
reducción, es negativo para un número determinado de óxidos, por lo tanto la reducción de<br />
ellos es termodinámicamente factible.<br />
Sin embargo, teniendo en cuenta las presiones parciales de los gases, el cambio de energía<br />
libre del proceso es :<br />
PH<br />
O<br />
G G<br />
2<br />
RTlog(<br />
)<br />
por lo que, aunque Gº > 0, la reducción se puede llevar a cabo si G < 0.<br />
P<br />
H2<br />
II.11.<br />
El método experimental de RTP es tal que el vapor de agua es constantemente extraído de<br />
la zona de reacción mientras es producido, por lo que la P H2O puede llegar a ser lo<br />
PH<br />
2O<br />
suficientemente baja como para que el término RTlog(<br />
) de la Ec.II.11. sea lo<br />
suficientemente negativo para que G < 0 aunque Gº > 0.<br />
Para el análisis de RTP, se pesa la muestra, se seca en un gas inerte para eliminar agua<br />
adsorbida y se pone en contacto con un flujo de gas de análisis (generalmente H2 en un<br />
arrastre de Ar) a temperatura ambiente. Mientras el flujo de gas se mantiene constante, la<br />
temperatura de la muestra se incrementa linearmente con el tiempo y se evalúa el consumo<br />
de H2 por adsorción/reacción. Los cambios en la concentración del gas de mezcla son<br />
determinados generalmente por un detector de conductividad térmica (TCD), de donde se<br />
obtiene el hidrógeno consumido del flujo inicial.<br />
- Equipo utilizado y condiciones de análisis<br />
En los análisis de RTP, se utilizó un equipo de la marca Micromeritics, modelo TPD/TPR<br />
P<br />
H2<br />
32
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
2900.<br />
Especificaciones técnicas del TPR/TPD 2900<br />
Sistema de temperatura<br />
Rango: desde temp. ambiente (TA) hasta 1100ºC<br />
Selección: digital, 1ºC de incremento<br />
Veloc. de calentamiento<br />
máxima:<br />
desde TA a 500ºC; 50ºC/min<br />
desde 500ºC a 750ºC; 30ºC/min<br />
desde 750ºC a 1100ºC; 10ºC/min<br />
Gases<br />
Análisis: H2, CO, O2, N2O, NH3, etc.<br />
Arrastres: He, Ar y otros gases inertes<br />
Preparación: H2, O2, He, Ar y otros<br />
Flujo de gases<br />
Análisis: 50 a 60 cm 3 por minuto<br />
Arrastres: 5 a 200 cm 3 por minuto<br />
Preparación: 5 a 100 cm 3 por minuto<br />
Todas las líneas de gases y válvulas pueden ser calefactadas hasta 250ºC.<br />
Los datos obtenidos en el experimento son almacenados y posteriormente analizados por<br />
un ordenador, conectado directamente al instrumento.<br />
- Condiciones de análisis<br />
La muestra (entre 20 y 50 mg) es colocada en un portamuestra de cuarzo fundido que<br />
soporta hasta 1100ºC. Una vez secada a 200ºC en He, la muestra se expone al gas de<br />
análisis (90 cm 3 /min de Ar y 10 cm 3 /min de H2), el cual antes de llegar al detector pasa por<br />
una trampa fría para retener el agua. La trampa fría es un vaso Dewar con una mezcla de<br />
isopropanol y nitrógeno líquido (~ -110ºC), aunque para experimentos de mayor tiempo de<br />
duración (más de 8 horas) se preparó una mezcla frigorífica con hielo seco y acetona 16 que,<br />
aunque su punto de fusión es mayor (-78ºC) mantiene durante más tiempo la temperatura<br />
por debajo del punto de congelación del H2O. El gas de arrastre es Ar en lugar de He, ya<br />
que este último tiene un valor de conductividad térmica muy cercano al H2 que es el que<br />
realmente interesa.<br />
1.3.4 Acidez<br />
33
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Como señala Jacobs 17 , una descripción de la acidez superficial de un sólido requiere la<br />
determinación de su naturaleza, fuerza ácida y número de sitios ácidos.<br />
1.3.4.1 Número total de centros<br />
Mediante técnicas de adsorción-desorción de amoníaco en el equipo de ATG, se analizó<br />
tanto el número de centros ácidos como su fuerza ácida frente a la temperatura.<br />
- Adsorción-desorción de NH3 por ATG<br />
Las muestras fueron previamente secadas a 500ºC, durante tres horas en atmósfera de N2,<br />
tomándose como peso de la muestra el resultante del tratamiento. La adsorción se llevó a<br />
cabo a temperatura ambiente durante 2 horas, haciendo pasar un flujo de 50 cc/min de<br />
amoniaco gaseoso y un flujo adicional de N2 en el arrastre, registrándose la adsorción de<br />
moléculas como aumento de peso en el termograma correspondiente. La fracción<br />
fisisorbida fue eliminada por arrastre con N2 hasta estabilización. La fracción residual es<br />
considerada como fracción quimisorbida y referida tanto en miliequivalentes de moléculas<br />
adsorbidas por gramo de muestra, como en número total de centros ácidos por gramo de<br />
muestra, suponiendo un determinado mecanismo de quimisorción. La “fuerza ácida” se<br />
determinó por desorción térmica de la fracción adsorbida a una velocidad de calentamiento<br />
de 10ºC/min, en atmósfera inerte hasta 600ºC y referida como miliequivalentes de base<br />
retenidos a la temperatura de que se trate.<br />
- Equipo utilizado<br />
Estos análisis se llevaron a cabo con el equipo de análisis termogravimétrico descrito<br />
anteriormente en el punto 1.3.1.1.<br />
1.3.4.2 Naturaleza de los centros<br />
El estudio de la acidez superficial juega un papel muy importante en catálisis. Benesi y<br />
Winquist 18 remarcan esta importancia y consideran el estudio de la acidez superficial por<br />
medio de la adsorción de moléculas básicas. Swoboda 19 y Bailey 20 utilizan la piridina como<br />
molécula sonda para la caracterización ácida de la superficie de sólidos.<br />
- Espectroscopía IRTF de moléculas adsorbidas<br />
La técnica consiste en adsorber piridina sobre una pastilla autosoportada una vez<br />
16 Handbook of Chem. and Phys. Ed. David R. Lide, 73 rd Ed. 1992-93<br />
17 P.A.Jacobs. Characterization of Heterogeneous Catalysts, Cap. 8, F.Delannay, Marcel Dekker Inc. ed., N.Y. (1984).<br />
18 H.A.Benesi and B.H.C.Winquist. Adv. Catal. 27 (1978) 97-182.<br />
19 A.R.Swoboda and G.W.Kunze. Proc. 15 th Nat. Conf., Pittsburg, Pennsylvania.<br />
20 S.W.Bailey, ed. Pergamon Press, N.Y. (1966) 277-288.<br />
34
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
desgasificada, y luego desorberla a distintas temperaturas evaluando cada paso por<br />
espectroscopía IR-TF. La piridina se adsorbe en centros ácidos superficiales tanto de tipo<br />
Lewis como Brönsted que tienen frecuencias características en infrarrojo.<br />
-Equipo utilizado<br />
Se utilizó un equipo de vidrio Pyrex como sistema de adsorción de piridina, que consta de<br />
tres partes fundamentales:<br />
a) Sistema de vacío: constituido por una bomba rotatoria marca Edwards y una bomba<br />
difusora de aceite de silicona con una trampa de condensación. El vacío que se alcanza<br />
es del orden de 10 -4 mm de Hg. Las medidas del vacío alcanzado son realizadas con un<br />
manómetro McLeod (Fig.II.5).<br />
b) Celda de adsorción: se ha empleado una celda convencional de vidrio Pyrex, con llaves<br />
sin grasa y ventanas de NaCl de 2,5 cm de diámetro. Mediante una cadena de oro e imán<br />
se puede desplazar la muestra desde la zona de tratamiento térmico a la de análisis<br />
(Fig.II.6).<br />
c) Control y medida de la temperatura: sobre la misma celda de adsorción se dispuso de<br />
una resistencia de hilo Khantal y se aisló con una manta de material sustituto de<br />
amianto, controlando la tensión de calentamiento mediante un Variac (estabilizador de<br />
tensión). El control y medida de la temperatura se realizó con un controlador PID,<br />
modelo REX-C10, a través de un termopar de cromel-alumen (tipo K) a la altura de la<br />
pastilla.<br />
El horno de la difusora se alimenta mediante un estabilizador de tensión hasta la<br />
temperatura óptima de funcionamiento.<br />
En las Fig.II.5 y II.6, se presentan los esquemas del equipo de vidrio y la celda de<br />
adsorción, respectivamente.<br />
35
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Fig.II.5 Esquema del equipo de vidrio utilizado para quimisorción de piridina<br />
Fig.II.6 Esquema de la celda de quimisorción para el análisis por IR<br />
- Condiciones de análisis<br />
36
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
La metodología de trabajo para cada análisis se puede sintetizar de la siguiente manera:<br />
Después de desgasificar todo el sistema, se procedió a la desgasificación de la celda con la<br />
pastilla, a una temperatura de 500ºC durante 1 hora, donde se hizo el primer IR.<br />
Posteriormente, con el sistema en vacío, se abre la válvula del balón que contiene la<br />
piridina (Py), por lo cual ésta entra al sistema con la celda, y se deja durante 2 horas hasta<br />
alcanzar un equilibrio. Se cierra la entrada de Py y se evacua a través de la rotatoria toda la<br />
piridina fisisorbida en el sistema. Se vuelve a realizar un espectro de la pastilla, de donde<br />
se evalúa la Py adsorbida a temperatura ambiente. Por último, se calienta la celda a<br />
distintas temperaturas desgasificando permanentemente para estudiar la fuerza de<br />
adsorción en función de la temperatura por espectroscopía IR.<br />
1.3.5 Capacidad de intercambio catiónico<br />
Las arcillas -en particular la montmorillonitas- poseen cationes débilmente ligados que<br />
compensan la deficiencia de carga debida a sustituciones isomórficas en su estructura.<br />
Estos cationes son intercambiables, propiedad de la cual se aprovecha para introducir<br />
cationes de interés.<br />
La medida de la cantidad de cationes que son intercambiables se denomina: capacidad de<br />
intercambio catiónico (CEC) y se expresa en miliequivalentes de cationes intercambiables<br />
por 100 gr. de arcilla.<br />
Chabra et al 21 describieron un método para determinar la CEC que es el generalmente<br />
utilizado con algunas variantes. Consiste en tratar 5 gr. de muestra, previamente secada a<br />
110ºC durante toda la noche, con 250 ml. de una disolución de acetato amónico 1M<br />
(pH=7,0), manteniendo la mezcla en agitación constante por 24 horas, para permitir que los<br />
cationes de cambio sean sustituidos por el ion amonio. Posteriormente, se filtra en kitasato<br />
con vacío o por centrifugado y el exceso de acetato es eliminado por lavado con agua<br />
desionizada hasta completar un volumen de 500 cc. Esta operación se repite hasta que no<br />
se extraen más cationes (4 o 5 veces).<br />
La cantidad de cationes intercambiados se analiza en las aguas de lavado por EAA.<br />
1.4 Análisis Textural<br />
Comprende el conocimiento de la disposición espacial de la materia dentro de los<br />
37
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
materiales en estudio y requiere, fundamentalmente, la determinación del área superficial y<br />
la porosidad de las muestras.<br />
El análisis de la textura de los catalizadores, en particular de las arcillas, juega un papel<br />
muy importante en la caracterización de las distintas etapas del proceso de síntesis.<br />
La textura está definida por diferentes variables entre las que deben destacarse, como<br />
señalan Hermana y Calvo 22 , las siguientes:<br />
Area superficial: superficie por unidad de masa del sólido, con dimensiones L 2 /M (L:<br />
longitud, M: masa).<br />
Volumen específico de poro: volumen de la totalidad de poros por unidad de masa del<br />
sólido, con dimensiones L 3 /M.<br />
Radio de poro: radio de la sección transversal de cada poro o cavidad, con dimensión L. En<br />
general la forma de los poros en un catalizador no es geométricamente perfecta, por lo que<br />
esta magnitud es considerada como el valor que tendría el radio de la sección transversal de<br />
un poro cilíndrico que, a efectos catalíticos, se comportase igual que el poro real.<br />
Una mejor descripción de la estructura porosa del catalizador se obtiene mediante la<br />
“distribución de tamaños de poro”, que da el volumen de poro correspondiente a cada valor<br />
de radio de poro considerado. Del estudio de la distribución se puede deducir qué radios de<br />
poro son los más frecuentes y en qué cuantía se encuentran.<br />
La IUPAC 23 hace las siguientes distinciones de acuerdo al tamaño de poro.<br />
microporos: < 2 nm<br />
mesoporos: entre 2 y 50 nm<br />
macroporos: > 50 nm<br />
Para la medida de estas variables texturales, hay dos técnicas especialmente extendidas, la<br />
adsorción de gases, en particular de nitrógeno y la porosimetría de intrusión de mercurio.<br />
1.4.1 Isotermas de adsorción<br />
Consiste en el estudio de las cantidades de gas adsorbidas por el sólido, en función de la<br />
presión relativa del gas en contacto, a temperatura constante.<br />
La curva característica de estas medidas es la isoterma de adsorción, que puede ser<br />
obtenida por distintos métodos.<br />
El método volumétrico estático es el más usual, en el que se mide el volumen de gas<br />
21 R.Chabra, J.Pleysier and A.Cremers. Proc. Int. Conf. Clay, Illinois (1975) 439.<br />
22 E.Hermana Tezanos y F.Calvo Mondelo. Química e Industria, 18:5 (1992).<br />
38
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
adsorbido en la muestra por disminución de presión en la fase gaseosa. Se introduce una<br />
cantidad conocida de gas puro en un volumen cerrado que contiene el adsorbente<br />
(muestra), mantenido a temperatura constante. A medida que la adsorción progresa, la<br />
presión en el volumen cerrado va disminuyendo hasta que se establece el equilibrio. La<br />
cantidad de gas adsorbido a la presión de equilibrio viene dado por la diferencia entre la<br />
cantidad de gas introducida y la requerida para llenar el espacio alrededor del adsorbente;<br />
es decir, el volumen muerto, a la presión de equilibrio. La isoterma de adsorción se<br />
construye punto a punto mediante introducción de cargas sucesivas de gas sobre el<br />
adsorbente, con la ayuda de una técnica volumétrica de dosificación y la aplicación de las<br />
leyes de los gases. El volumen muerto se conoce con precisión, por admisión de un gas<br />
cuya adsorción sea despreciable, como es el caso del helio.<br />
Antes de la determinación de una isoterma de adsorción, la muestra debe desgasificarse, es<br />
decir eliminar todas las especies fisisorbidas de la superficie de la misma.<br />
1.4.1.1 Area Superficial.<br />
Para su medida, la IUPAC recomienda la utilización del método desarrollado por Brunauer,<br />
Emmet y Teller (método BET) 24 .<br />
Basados en la adsorción física de gases a temperaturas próximas a la de condensación de<br />
los mismos, los autores propusieron un método de análisis e interpretación de resultados<br />
que se basa en las siguientes premisas:<br />
a. Los experimentos deben realizarse de manera que la quimisorción no sea relevante.<br />
b. El mecanismo de adsorción es interpretado suponiendo una homogeneidad total de la<br />
superficie del sólido (ecuación tipo Langmuir)<br />
c. El estado físico de las moléculas adsorbidas se identifica al líquido y de los datos de<br />
estado líquido se obtienen los parámetros que se emplearán en el método.<br />
d. El calor de adsorción de la segunda capa es menor que el de la primera e igual que el<br />
de las sucesivas.<br />
e. Se desprecia la interacción lateral entre los adsorbatos en direcciones paralelas a la<br />
superficie.<br />
En la mayor parte de los casos reales no se cumplen estas condiciones. Sin embargo, la<br />
teoría se ha revelado útil incluso para estos casos, permitiendo datos reproducibles.<br />
23 IUPAC. Manual on Catalyst Characterization. J. Haber. Pure and Appl. Chem. 63 (1991) 1227-1246.<br />
24 S.Brunauer, P.Emmett and E.Teller. J. Am. Chem. Soc. 60 (1938) 309.<br />
39
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Mediante consideraciones cinéticas bajo las suposiciones anteriores se llega a la ecuación<br />
BET<br />
siendo<br />
P 1 C 1<br />
<br />
V (P P) V C V C<br />
P<br />
P<br />
ads o m m o<br />
<br />
P: presión parcial del gas que se adsorbe<br />
Po: tensión de vapor del gas a la temperatura que se realiza la adsorción<br />
Vm: volumen de gas adsorbido cuando se ha formado una monocapa<br />
C: constante dependiente del calor de condensación y adsorción del adsorbato.<br />
Vads: volumen de gas adsorbido a la presión P.<br />
II.12.<br />
Si manejamos los datos experimentales correspondientes a la zona en que se está formando<br />
la monocapa inicial, la representación de los datos experimentales de P/Vads(Po-P) frente a<br />
P/Po será una línea recta según la ecuación II.12. En esta recta, de la pendiente y la<br />
ordenada al origen se puede calcular C y Vm.<br />
En la práctica, esta linearidad se presenta para un cierto intervalo de valores de P/Po. Gregg<br />
y Sing 25 muestran distintas condiciones en que se cumple esta relación lineal para diversos<br />
sistemas. La representación de los datos experimentales indica, en cada caso, el intervalo<br />
de P/Po adecuado para la aplicación de la ecuación BET.<br />
Una vez conocido el volumen de la monocapa, la superficie específica viene dada por:<br />
VmNA m<br />
Sg<br />
II.13.<br />
Mg<br />
donde N es el número de Avogadro, M el volumen molar y g el peso de la muestra de<br />
adsorbente empleado y Am la sección ocupada por la molécula adsorbida, que se puede<br />
calcular asimilando el estado adsorbido al estado líquido; para el caso del nitrógeno, a la<br />
temperatura de condensación(-196ºC), se admite 0,162 nm 2 (IUPAC).<br />
1.4.1.2 Micro y mesoporosidad. Distribución de tamaños de poros<br />
Una vez superada la zona de adsorción mono-multicapa, el vapor puede condensar en<br />
los poros de la muestra, si es porosa, a presiones por debajo de la tensión de vapor en<br />
función del tamaño de poros involucrado.<br />
Los datos experimentales de volumen adsorbido frente a la presión relativa permiten<br />
25 S.J.Gregg and K.S.Sing. Adsorption Surface and Porosity. Academic Press, London 1967.<br />
40
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
determinar la distribución de radios de poros del adsorbente.<br />
El método se basa en la consideración de que los vapores condensan en los espacios<br />
reducidos por un efecto capilar siguiendo la ecuación de Kelvin<br />
P V<br />
log cos<br />
Po<br />
rRT<br />
2<br />
<br />
II.14.<br />
siendo P la presión de vapor en equilibrio de un líquido contenido en un poro de radio r y<br />
Po es la tensión de equilibrio del mismo líquido, pero dispuesto en una superficie plana.<br />
Los términos y V son la tensión superficial y el volumen molar respectivamente y es el<br />
ángulo de contacto entre el líquido y las paredes del poro.<br />
Para el caso del nitrógeno, a través de la ecuación de Kelvin, se calcula r(rk) en Å por<br />
4, 14<br />
rk<br />
<br />
log( P / Po<br />
) II.15.<br />
El radio real del poro r, está relacionado con el radio de Kelvin rk, por la relación<br />
r rk t<br />
II.16.<br />
siendo t el espesor de la capa absorbida previamente al momento en que se produce la<br />
condensación.<br />
En el transcurso de una adsorción, tienen lugar los dos efectos simultáneos: la adsorción<br />
sobre la superficie libre o sobre capas ya adsorbidas, representado por la ecuación BET y la<br />
condensación en capilares o poros cuyo radio Kelvin satisfaga la ecuación II.15, para el<br />
caso del nitrógeno a un determinado valor P/Po.<br />
Los valores de t, equivalentes al número de capas adsorbidas en una superficie libre de<br />
poros conforme aumenta la presión relativa del adsorbible, se pueden obtener de distintas<br />
ecuaciones diseñadas al respecto. Una de ellas, derivada estadísticamente es la ecuación de<br />
Halsey 26<br />
t =<br />
5 <br />
<br />
ln (P / P0 ) <br />
1/ 3<br />
II.17.<br />
en donde es el espesor de cada capa dependiente de la naturaleza del adsorbible y del<br />
26 C.P.Halsey. J.Chem. Phys. 16 (1948) 931.<br />
41
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
empaquetamiento de las moléculas constituyentes de las mismas.<br />
Harkins y Jura 27 propusieron la siguiente relación<br />
t =<br />
13,99 <br />
<br />
<br />
0,034 - log (P / P0 ) <br />
1/ 2<br />
II.18.<br />
también de forma empírica, basados en métodos calorimétricos, y siempre trabajando con<br />
sólidos no porosos.<br />
Lippens 28 y de Boer 29 mostraron que si una capa multimolecuar de N2 adsorbido se<br />
puede formar libremente sobre una superficie, el espesor estadístico (en Å) se puede<br />
calcular como<br />
V <br />
t 3, 54 <br />
II.19.<br />
<br />
donde V=Volumen adsorbido a un determinado P/P0 y Vm es el volumen de N2 requerido<br />
para llenar una monocapa según el método BET. De Boer et al 30 determinan que este valor<br />
no depende casi de la naturaleza del adsorbente. Por lo tanto, proponen que en ausencia de<br />
condensación capilar, la variación de t con la presión relativa puede ser ajustada por una<br />
curva t “universal”.<br />
Graficando V en función de la t seleccionada, se obtiene una “isoterma standard<br />
reducida”. La comparación de los datos obtenidos a partir de una isoterma de adsorción<br />
correspondiente a un sólido poroso con una isoterma standard reducida correspondiente a<br />
un sólido no poroso es lo que denominaron “método t” y del cual se puede sacar<br />
información de la estructura porosa. En el caso en que no haya restricción para la<br />
formación de multicapas de adsorbatos, ausencia de condensación, esta gráfica es una recta<br />
que pasa por el origen cuya pendiente, es la medida del área superficial del adsorbente,<br />
dada por :<br />
V m<br />
S t = 15,47 V<br />
t II.20.<br />
Si hubiese restricciones, sólidos porosos, las curvas podrían tomar distintas formas. En<br />
caso de condensación dentro de poros mas grandes, al aumentar t se produce una<br />
desviación de dicha recta hacia arriba en la gráfica V vs. t. Si los poros son llenados a bajas<br />
27 W.D.Harkins and G.J.Jura, J. Chem. Phys. 11 (1943) 431.<br />
28 B.C.Lippens, B.G.Linsen and J.H.de Boer. J. of Catal. 3 (1964) 32.<br />
29 B.C.Lippens and J.H.de Boer. J. of Catal. 4 (1965) 319.<br />
30 H.H.de Boer, B.G.Linsen and T.J.Osinga. J. Catal. 4 (1965) 643.<br />
42
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
presiones relativas por adsorción en multicapas, la desviación que se produce para t<br />
crecientes es hacia abajo; esto último es característico de muestras mesoporosas con poros<br />
en forma de rendija.<br />
Lecloux y Pirard 31 sugieren que la adsorción está relacionada con la interacción sólido-<br />
gas y diseñan hasta cinco isotermas distintas que se apartan entre si, fundamentalmente, a<br />
bajas presiones relativas, admitiendo distintos grados de interacción. Así, basan la elección<br />
de la isoterma standard en el valor de la constante CBET de la isoterma que, como se ha<br />
señalado anteriormente, está relacionada con el calor neto de adsorción.<br />
A partir del conjunto de datos experimentales (Vads= f(P/Po)) se puede determinar el<br />
volumen desorbido o adsorbido, para cada intervalo de P/Po, y a partir de allí y por<br />
aplicación de la ecuación de Kelvin los radios de poro rk correspondientes. Si a ese<br />
volumen se le suma posteriormente el volumen de la fracción ya adsorbida se obtendrá el<br />
volumen total de poros con radio r.<br />
Barret, Joyner y Halenda 32 desarrollaron un método de cálculo para la distribución de<br />
poros en general (método BJH). Pierce 33 presentó un método sistemático de cálculos para<br />
el caso de poros cilíndricos.<br />
- Equipo utilizado<br />
Para el análisis de las muestras se ha utilizado un equipo volumétrico de adsorción-<br />
desorción de nitrógeno, marca Micromeritics ASAP-2000 con las siguientes características<br />
principales:<br />
Medidas de presión<br />
Rango: 0 a 950 mm Hg<br />
Relación de presión (P/Po) mínima: 0,00007<br />
Resolución en nitrógeno: 0,052 mm Hg<br />
Precisión del transductor: 0,1% en lectura a escala total<br />
Sistema de vacío<br />
Bombas rotatorias: 2 bombas Edwards independientes para desgasificación y<br />
análisis<br />
Vacío alcanzado: 5 x 10 -4 mm Hg<br />
Sistema de desgasificación<br />
Rango de temperatura: desde ambiente hasta 350ºC con mantas calefactoras<br />
en portamuestras de vidrio<br />
Selección: digital, con incrementos de 1ºC<br />
Precisión: 10ºC<br />
31 A.Lecloux and J.P.Pirard. J. of Colloid and Interf. Science 70 (1979) 2.<br />
32 E.P.Barret, L.G.Joyner and P.H.Halenda, J. Amer. Chem. Soc. 73 (1951) 373.<br />
33 C.Pierce, J. Phys. Chem. 57 (1953) 149.<br />
43
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Gas de llenado: el mismo utilizado para medir la presión de saturación<br />
Po, nitrógeno<br />
Sistema de nitrógeno líquido<br />
Capacidad: Dewar de 1,9 l que mantiene su nivel para el análisis<br />
durante aproximadamente 60 hs sin necesitar reposición.<br />
La incorporación de datos, tanto de la muestra como las condiciones de análisis es<br />
controlada por un ordenador PC con el paquete informático de Micromeritics ASAP 2010,<br />
V2.0, bajo Windows 3.1.<br />
- Condiciones de análisis<br />
Las muestras entre 0,3 y 0,8 g, se desgasificaron previamente a 300ºC durante<br />
aproximadamente 18 h, hasta llegar a completar este proceso, con una presión final del<br />
orden de 1x10 -3 mm Hg.<br />
El análisis fue realizado en portamuestras de vidrio, a temperatura de nitrógeno líquido, -<br />
196ºC (77 K).<br />
Se adoptó una tabla de presiones adecuada para la toma de datos haciendo un estudio<br />
previo, tanto para la adsorción como para la desorción.<br />
De los primeros datos, a presiones relativas inferiores a 0,2, se obtuvo la superficie<br />
específica (Ec.II.13.), tomando como referencia la superficie transversal de la molécula de<br />
N2 (0,162 nm 2 ) y aplicando la ecuación BET (Ec.II.12.).<br />
El análisis de microporos se hizo utilizando el “método t” aplicándose los criterios dados<br />
por Lecloux y Pirard.<br />
Las gráficas de distribución de volumen de poro se obtuvieron a partir de una u otra rama<br />
de la isoterma, en función del modelo de poro predominante en cada muestra, aplicando el<br />
método BJH.<br />
1.4.2 Porosimetría de intrusión de mercurio<br />
Esta técnica se utiliza principalmente para el estudio de la macroporosidad (d >50nm),<br />
aunque, dependiendo del equipo, se puede alcanzar tamaños de poros de hasta 1,8 nm de<br />
radio.<br />
La penetración de mercurio en orificios pequeños implica la creación de una gran<br />
superficie del líquido como consecuencia de la división de la masa en múltiples canales.<br />
Debido a la tensión superficial del mercurio, será preciso realizar un trabajo que será<br />
inversamente proporcional al radio de poro en el que se pretende hacerlo penetrar. Este<br />
44
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
trabajo (PdV) se puede escribir:<br />
dS PdV<br />
II.21.<br />
siendo S la superficie creada, es decir, la del poro llenado; la tensión superficial del<br />
mercurio, P la presión aplicada y V el volumen introducido en el poro de radio r.<br />
Desarrollando esta ecuación para poros cilíndricos se llega a la llamada ecuación de<br />
Washburn 34 , que muestra la dependencia entre el radio de poro r y la presión necesaria para<br />
introducir en él el mercurio y está dada por<br />
2 <br />
P <br />
r<br />
cos<br />
II.22.<br />
siendo el ángulo de contacto mercurio-muestra que, siguiendo los valores recomendados<br />
por la IUPAC, se considera 141º. La tensión superficial del mercurio, dependiente de la<br />
temperatura se toma como 484 dynas/cm para 25ºC (a 50ºC es 472 dynas/cm). Por lo tanto,<br />
si el radio de poro r se expresa en Å y la presión P en Pascal, para valores de temperatura<br />
ambiente, la Ec.II.22 se simplifica a:<br />
que es la expresión más comúnmente usada.<br />
r<br />
<br />
P<br />
75000 II.23.<br />
El porosímetro de mercurio, desarrollado por Ritter y Drake 35 , es un aparato capaz de<br />
aplicar presiones crecientes al mercurio y determinar el volumen que penetra en un sólido<br />
sumergido en él, en cada intervalo de presiones. Se obtiene así una secuencia de datos<br />
V=f(r), que constituye la distribución de volumen de poro en función del radio del mismo y<br />
de la que se puede obtener la superficie específica de la muestra (Ec.II.21), sin<br />
planteamiento previo de la forma de los poros involucrados.<br />
La limitación de estos equipos radica en que los poros pequeños son inaccesibles a menos<br />
que se empleen presiones muy elevadas, por lo que aparece el inconveniente de una posible<br />
ruptura de la textura, que a veces se puede detectar. Por lo tanto, esta técnica es más fiable<br />
para datos de mesoporos medios y macroporos, complementando datos de adsorción.<br />
Además, dado que esta técnica determina la superficie de poros accesibles al Hg, las<br />
superficies específicas de sólidos microporosos o con poros de cuello estrecho, darán<br />
valores menores que los obtenidos por procesos de adsorción. No obstante, Rootare y<br />
Prenzlow 36 han mostrado que para sólidos con superficies específicas menores de 100<br />
34 E.W.Washburn. Proc. Nat. Acad. Sci., USA, 7 (1921) 115.<br />
35 Ritter and Drake. Ind. Eng. Chem. Anal. 17 (1945) 782.<br />
36 H.M.Rootare and C.F.Prenzlow. J.Phys. Chem. 71:8 (1967) 2733.<br />
45
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
m 2 /g, la concordancia de los resultados por las dos técnicas es bueno (alrededor del 95%).<br />
Las técnicas de adsorción de N2 y porosimetría de Hg son complementarias para el estudio<br />
en todo el rango de poros.<br />
- Equipo utilizado<br />
En la determinación de la macroporosidad, se ha utilizado un porosímetro marca Fisons<br />
con dos módulos, para distintos rangos de presión, Pascal 140 y Pascal 240.<br />
Pascal 140: Se utiliza para la preparación de las muestras para el análisis y la medida de la<br />
porosidad en las regiones ultramacro y macroporos. El volumen de poros es medido por un<br />
sistema capacitivo. Las principales especificaciones técnicas son las siguientes:<br />
Rango de presión en operación: 0,1 a 400 kPa<br />
Resolución en presión: 0,1 kPa a máxima escala<br />
Precisión: mejor que 0,25%<br />
Resolución en volumen: 0,1 mm 3 (para el portamuestra usado)<br />
Rango de medidas en radio de poros: 1,900 a 58000 nm<br />
Rango de medidas en volumen de poros: 0,1 a 500 mm 3<br />
Pascal 240: es un instrumento automático para la determinación de tamaños de poros y<br />
volumen por medio de intrusión de Hg a alta presión. Las principales especificaciones<br />
técnicas son:<br />
Rango de presión en operación: 0,1 a 200 MPa<br />
Resolución en presión: 0,011 MP para presiones hasta 100 MPa<br />
Precisión: mejor que 0,2%<br />
Resolución en volumen: 0,1 mm 3<br />
Rango de medidas en radio de poros: 3,7 a 7500 nm<br />
Rango de medidas en volumen de poros: 0,1 a 500 mm 3<br />
Ambos módulos están acoplados a un PC, para el manejo de datos y control remoto de<br />
los instrumentos.<br />
2. Actividad catalítica<br />
Un catalizador es una entidad que cambia la velocidad de una reacción tomando parte<br />
íntimamente de ella, pero sin llegar a ser producto. Blanco y Linarte 37 destacan que los<br />
catalizadores a nivel industrial se utilizan para aumentar la velocidad de reacción o para<br />
37 J.Blanco y R.Linarte. Catálisis: Fundamentos y aplicaciones. Inst. Mexicano del Petróleo (1974) México.<br />
46
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
modificar la selectividad del proceso a un producto determinado. Lo más ambicioso sería<br />
mejorar tanto la conversión como la selectividad a determinados productos.<br />
Las medidas de estos valores, para una determinada reacción química, requieren de un<br />
cuidadoso diseño del sistema de reacción y de la toma de datos con sus adecuados<br />
controladores.<br />
2.1 Reacción<br />
Los test de actividad catalítica para la reacción elegida -hidrogenación de CO-, se<br />
realizaron en dos equipos: a presión atmosférica y a 20 bares de presión. Los reactores<br />
utilizados en ambos casos son de lecho fijo.<br />
2.1.1 Reacción a presión atmosférica<br />
- Equipo utilizado<br />
-Reactor: vidrio Pyrex, en forma de U, con un diámetro de 1,3 cm en la zona de reacción y<br />
una placa porosa filtrante Pyrex Nº2. El reactor se coloca dentro de un horno de alta<br />
precisión. En una de las ramas del reactor se produce el precalentamiento de los reactivos a<br />
temperatura de reacción y en la otra rama, la mezcla se desplaza de abajo hacia arriba,<br />
pasando por la placa porosa antes de entrar en contacto con el catalizador, obteniendo así<br />
un flujo homogéneo en temperatura y desplazamiento a través de la muestra.<br />
-Control de reacción: tanto el control de los gases de entrada, como el de la temperatura<br />
de reacción se realiza con un equipo montado por el grupo de Ingeniería y Control de<br />
Procesos del I.C.P. Básicamente consta de tres controladores de flujo másico para He, H2 y<br />
CO y dos controladores de temperatura PID, para el horno del reactor y la línea de salida de<br />
productos. Además, el sistema consta de una válvula de “by pass” de los gases a través del<br />
reactor y de un manorreductor digital para verificar la presión de carga durante la reacción.<br />
En la Fig.II.7 se muestra un esquema del equipo.<br />
Tanto las líneas de paso de reactivos como las de productos son de acero inoxidable y se<br />
mantienen calefactadas durante los experimentos.<br />
47
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
Cont. Flujo Másico<br />
Reactivos<br />
PSI<br />
Válvula<br />
de paso<br />
Reactor Productos<br />
H2 CO He<br />
H2<br />
Condiciones de reacción<br />
Fig.II.7 Esquema del equipo de reacción a presión atmosférica<br />
Se utilizó una carga de catalizador de 0,5 g en cada experimento. Previo a la reacción, las<br />
muestras se secaron “in situ” en una corriente de He de 50 cm 3 /min a 200ºC durante 3<br />
horas. Posteriormente se redujeron en un flujo de 100 cm 3 /min de He y 10% de H2 durante<br />
6 h a 500ºC. Se dejó enfriar hasta temperatura ambiente en He. La reacción se realizó<br />
siempre con la misma relación H2/CO=2 en un rango de temperatura entre 250 y 500ºC y<br />
con un flujo total de reactivos en condiciones normales de 75 cm 3 /min, siendo el tamaño de<br />
partícula de catalizador entre 0,25 y 0,4 mm.<br />
2.1.2 Reacción a alta presión<br />
- Equipo utilizado<br />
Temp.<br />
Horno<br />
C He<br />
O<br />
Llaves de Paso<br />
Equipo de control de<br />
flujos y de temperaturas<br />
Temp.Linea<br />
Manómetro<br />
Cromatógrafo<br />
Horno<br />
-Reactor: tubular, de acero inoxidable 316, de 2,54 cm de diámetro.<br />
Condensador<br />
-Control de reactivos: los gases de entrada, He, H2 y CO se controlan mediante<br />
controladores de flujo másico marca Brooks, modelo 5850 TR. La presión de reacción se<br />
mantuvo a (20 0,1)bares por una válvula de aguja accionada por un motor eléctrico con<br />
un controlador RKC modelo REX-C100, además de un dispositivo de doble seguridad para<br />
eliminar sobrepresiones accidentales. Los gases reactantes, la válvula de control de presión<br />
y una válvula a cuatro vías para desviar -o no- los gases al reactor, se encuentran en una<br />
“caja caliente” para evitar condensaciones. Todas las líneas se mantienen calefactadas por<br />
la misma causa. Las temperaturas de la caja caliente y de las líneas son controladas por<br />
dispositivos RKC, modelo REX-C10 hasta aproximadamente 180ºC. El control de la<br />
temperatura de reacción (hasta 320ºC) es llevado a cabo por un dispositivo RKC, modelo<br />
48
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
REX P800. Todos los dispositivos de control se encuentran en un mismo panel montado en<br />
módulos por el grupo de Ingeniería y Control de Procesos del Instituto de Catálisis y<br />
Petroleoquímica (Fig.II.8).<br />
He H2 CO<br />
Productos<br />
Reactor<br />
Fig.II.8 Esquema del equipo de alta presión utilizado<br />
Condiciones de reacción: La carga de catalizadores utilizado en todos los casos es de<br />
aproximadamente 0,35 g.<br />
Después de un secado de la muestra “in situ” en una corriente de He de 50 cm 3 /min a<br />
200ºC durante 1 h, se sometió a una reducción en una corriente de 100 cm 3 /min, de una<br />
mezcla de He con el 10% de H2, durante 3 h a 600ºC. Una vez enfriada la muestra hasta<br />
temperatura ambiente, se introdujo la mezcla reaccionante (50cm 3 /min de H2+CO, en<br />
condiciones normales) y se presurizó el sistema hasta 20 bares.<br />
Las medidas de actividad se realizaron en el rango de temperatura de 180-320ºC, con un<br />
tamaño de partícula para los catalizadores entre 0,25 y 0,4 mm.<br />
Tanto para los experimentos a presión atmosférica como a 20 bares de presión, se eligieron<br />
las condiciones de reacción de manera de minimizar los efectos físicos de la misma.<br />
2.2 Sistema de análisis<br />
Reactivos<br />
Cromatógrafo<br />
filtro Controlador de<br />
alta presión<br />
Horno<br />
Caja<br />
Caliente<br />
Los productos en ambos sistemas de reacción son analizados en línea por cromatografía de<br />
49
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
gases con inyección automática. Todas las líneas fueron calefactadas para evitar<br />
condensaciones.<br />
2.2.1 Análisis a presión atmosférica<br />
Los productos son dirigidos en línea a una válvula de muestreo de 0,25 cm 3 de un<br />
cromatógrafo Varian 3400, equipado con tres columnas de distintas fases: una Haye Sep D<br />
(HS) de 6 m en serie con un tamiz molecular de 5 Å (TM) y ambas en paralelo con una<br />
columna capilar (CC) DB1 de 60 m.<br />
Los productos a través de las primeras dos columnas (HS y TM) terminan en un detector de<br />
conductividad térmica (TCD) donde son analizadas las concentraciones de los productos<br />
separados por las columnas, en el siguiente orden: H2, O2, N2, CH4, CO (HS+TM) y CO2,<br />
C2H4, H2O, C2H6, C3 y C4s (HS).<br />
En la columna capilar (CC) son separados los demás productos, principalmente<br />
hidrocarburos líquidos que son analizados por un detector de ionización de llama (FID).<br />
2.2.2 Análisis a alta presión<br />
Se realizaron en un cromatógrafo de gases marca Hewlett Packard 5890 serie II, con una<br />
válvula dosificadora de inyección automática de 0,25 cm 3 . La separación cromatográfica se<br />
realizó con dos columnas semicapilares en serie, Poraplot Q y un tamiz molecular de 5 Å.<br />
La determinación de los productos se realizó con dos detectores en serie, uno de<br />
conductividad térmica (TCD) y otro de ionización de llama (FID). Este sistema permitió el<br />
análisis de todos los productos mencionados en el sistema anterior con el inconveniente de<br />
que los hidrocarburos con cadenas de carbono mayores que 10 no se separaban<br />
adecuadamente. Un nuevo avance en el análisis se consiguió en pruebas posteriores con el<br />
mismo equipo de reacción, utilizando para el análisis el cromatógrafo Varian 3400,<br />
mencionado anteriormente, con el que se alcanzaron a analizar productos con cadenas de<br />
carbono mayores o iguales que 20.<br />
En ambos equipos, el calibrado del sistema de análisis se realizó con mezclas patrones de<br />
calidad analítica.<br />
2.3 Cálculos de cantidades relacionadas con la actividad catalítica<br />
Del análisis de los productos realizados por cromatografía de gases, se obtienen señales en<br />
forma de picos para cada producto separado por las columnas a un determinado tiempo de<br />
50
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
retención (cromatograma). El área bajo la curva, para cada pico, es proporcional a la<br />
cantidad del producto detectado.<br />
Dietz 38 presenta tablas con el factor de proporcionalidad, entre el área de un pico en un<br />
cromatograma y la cantidad de producto, para los dos tipos de detectores utilizados en este<br />
trabajo (FID y TCD). Para el caso de hidrocarburos líquidos, lineales, medidos con un FID,<br />
el autor encuentra que el factor es aproximadamente 1.<br />
Para medidas obtenidas con el TCD, Rosie y Grob 39 encontraron que, para los<br />
hidrocarburos y algunos compuestos oxigenados, los valores de respuesta son<br />
independientes de la temperatura, gas de arrastre, relación de flujo y concentración.<br />
Teniendo en cuenta estas consideraciones, se obtuvieron los factores de proporcionalidad<br />
(factor de respuesta) y los tiempos de retención para los productos de la reacción,<br />
utilizando muestras patrones.<br />
Los resultados obtenidos en los análisis se transforman para los cálculos a relaciones<br />
molares, utilizando las siguientes relaciones :<br />
Para un producto dado i se tiene<br />
moles de i = Área x factor de respuesta II.24.<br />
El cociente entre los moles de producto y los moles de reactivo dan el valor del<br />
rendimiento molar a cada producto<br />
Rendimiento del producto i (%) x =<br />
i<br />
moles de i<br />
moles de reactivo II.25.<br />
La suma de todos los rendimientos molares da la conversión obtenida en la reacción.<br />
Conversion total = X Rendimiento del producto i<br />
T i<br />
II.26.<br />
El cociente entre el rendimiento a cada producto y la conversión total se define como<br />
selectividad molar a ese producto<br />
Rendimiento del producto i<br />
Selectividad a un producto i (%) = Si<br />
II.27.<br />
Conversion total<br />
Dado que los gases reactivos utilizados son H2 y CO, y que la detección del CO es más<br />
38 W.A.Dietz. Journal of Gas. Crom. (1967) 68-72.<br />
39 D.M.Rosie and Grob. Anal. Chem. 31 (19159) 230.<br />
51
Capítulo II Equipos y técnicas experimentales empleadas<br />
precisa por ser el He el gas de arrastre, se considera a éste como base en los cálculos. Por lo<br />
tanto la conversión está referida a porcentajes en moles de CO convertidos. Teniendo en<br />
cuenta el número de carbones de cada producto (Nº de C) en los rendimientos y<br />
selectividad, las ecuaciones anteriores para un producto i serán:<br />
moles<br />
i nº de C de i<br />
xi <br />
*100 II.28.<br />
( moles i nº de C de i) + moles<br />
CO no convertidos<br />
X x<br />
II.29.<br />
T<br />
Si x<br />
X<br />
i<br />
T<br />
i<br />
i<br />
*100 II.30.<br />
52
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
SELECCIÓN Y CARACTERIZACIÓN DEL MATERIAL DE PARTIDA<br />
Uno de los objetivos de este trabajo es sintetizar catalizadores a partir de materiales<br />
naturales (arcillas). Para ello se contactó con tres compañías mineras españolas: Minas de<br />
Gador S.A., TOLSA S.A. y ANCLA S.A. a quienes se les solicitó material arcilloso, con<br />
alto contenido de montmorillonita. A los materiales recibidos se los sometió a procesos de<br />
caracterización y purificación, seleccionando de entre ellos la denominada Serrata Blanca<br />
(SerBca), suministrada por Minas de Gador S.A. y perteneciente a un yacimiento ubicado<br />
en la Serrata de Níjar, Almería, España.<br />
1. Arcillas: Generalidades<br />
Souza Santos 1 , define una arcilla, en forma general, como un material terroso, de baja<br />
granulometría y que presenta plasticidad cuando es mezclado con cierta cantidad de agua.<br />
Las arcillas están constituidas por partículas cristalinas extremadamente pequeñas (
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Fig.III.1 Proyección de las capas tetraédricas y octaédricas sobre sus planos<br />
El Comité Internacional para Estudios de arcillas 2 (CIPEA, Mackenzie), recomienda las<br />
siguientes divisiones y subdivisiones para los minerales de arcillas cristalinas (o<br />
arcillominerales).<br />
a) Silicatos laminares: con empaquetamiento 1 :1 o dimórficos<br />
b) Silicatos fibrosos: sepiolita<br />
con empaquetamiento 2 :1 o trimórficos<br />
con empaquetamiento 2 :2 o tetramórficos<br />
paligorskita o atapulgita<br />
Los silicatos laminares (filosilicatos) se pueden clasificar de muchas maneras, siendo<br />
una de las mas extendida la realizada por Bailey et al 3 . Basándose en ésta, Mott 4 , hace una<br />
clasificación, incluyendo los silicatos laminares y fibrosos, en ocho grandes grupos, según<br />
el tipo de empaquetamiento (1 :1 o 2 :1), carga de la celda unidad y tipo de interlaminares.<br />
Cada uno de estos grupos da lugar a subgrupos según el tipo de “hoja” octaédrica y<br />
finalmente a especies bien por la composición química, bien por la geometría de la<br />
superposición de las capas individuales.<br />
Tetraedro SiO4<br />
Octaedro Al2(OH)6<br />
Oxígeno<br />
Silicio<br />
Oxígeno<br />
Hidroxilos<br />
Aluminio<br />
Magnesio<br />
Dentro de esta clasificación, los miembros del grupo de las esmectitas se distinguen por<br />
2 R.C. Mackenzie. Clays and Clay Minerals 6 (1965) 123.<br />
3 S.W.Bailey, G.W.Brindley, W.O.Johns, R.T.Martin and M.Ross. Clays and Clay Minerals 19 (1971) 129.<br />
4 C.J.B. Mott. Catalysis Today 2 (1988)199-208.<br />
55
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
su empaquetamiento del tipo 2 :1 y por tener una carga por celda unidad entre 0.6 y 1.2e<br />
según la carga de los cationes de las capas tetra y octaédrica dentro del “marco” de<br />
oxígenos.<br />
Si los sitios octaédricos están totalmente ocupados por cationes, la esmectita se<br />
denomina trioctaédrica, en cambio si solamente 2/3 de los sitios octaédricos son los<br />
ocupados, la esmectita se denomina dioctaédrica. En los huecos octaédricos generalmente<br />
se alojan Al 3+ o Mg 2+ . Si es Mg 2+ , todos los huecos pueden estar ocupados por él dando<br />
lugar a una configuración trioctaédrica, mientras que si fuese Al 3+ el que entra a ocupar los<br />
huecos, debido a su mayor carga, sólo podría ocupar 2/3 de los sitios disponibles, lo que<br />
corresponde a una configuración dioctaédrica.<br />
Las montmorillonitas forman el subgrupo de las esmectitas dioctaédricas. Sus especies<br />
se clasifican según la composición química de las capas siendo los dos extremos de la serie<br />
la beidelita, y la montmorillonita, propiamente dicha.<br />
Las arcillas empleadas en este trabajo pertenece a la familia de los filosilicatos, grupo<br />
de las esmectitas, subgrupo de las montmorillonitas y especie montmorillonita.<br />
La bentonita, es una roca compuesta fundamentalmente por arcillas y, en particular, por<br />
montmorillonita, por lo que se la suele denominar indistintamente en la literatura 5 como<br />
montmorillonita o bentonita, aunque esto sería incorrecto 6 .<br />
El término bentonita se utilizó por primera vez por Knight 7 para designar una arcilla<br />
encontrada en Fort Benton, Wyoming (USA) a finales del siglo pasado. Este material se ha<br />
formado como consecuencia de la descomposición de cenizas volcánicas depositadas<br />
principalmente en el fondo de los mares y en la corteza terrestre. El término bentonita se ha<br />
generalizado para designar materiales con las mismas características, independientemente<br />
del lugar de origen. Gutierrez Ríos se refiere a “bentonitas españolas” en su libro sobre este<br />
tipo de material encontrado en el Marruecos español 8 .<br />
En España se encuentra otro importante yacimiento en la región volcánica del SE,<br />
formada por una cadena de 200 km de longitud que comprende desde el Cabo de Gata<br />
hasta el Cabo de Palos al este de Cartagena, siguiendo toda la costa en dirección NE. La<br />
zona norte está formada principalmente por la Sierra de Gata y la Serrata de Níjar. Varios<br />
5 A. Schutz. Ph.D. Thesis, U.C.Louvain, Belgium (1985).<br />
6 T.J.Pinnavaia. Science V 220, N 4595 (1983) 365-371.<br />
7 W.C.Knight. Bentonita, Eng. Mining J. 66 (1898) 491.<br />
8 E.Gutierrez Ríos. “Bentonitas españolas”. Pat. de Investigación Científica, CSIC, Madrid (1949).<br />
56
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
autores, entre ellos Linares 9 , Martín Vivaldi 10 y otros 11 , han realizado estudios de las<br />
bentonitas de estas zonas, tanto de su origen como de su composición y propiedades. De<br />
estos materiales destacan principalmente su calidad y cantidad, constituyéndose en una<br />
fuente importante de materia prima para diversas aplicaciones.<br />
1.1 Montmorillonita<br />
Las partículas de montmorillonita son extremadamente pequeñas, de manera que su<br />
estructura puede ser solamente deducida a través de DRX. De acuerdo con Hendricks 12 , la<br />
estructura ideal de este filosilicato consta de una capa de alúmina octaédrica, entre dos de<br />
sílice tetraédrica. Los tetraedros comparten los vértices de sus bases situándolos en un<br />
mismo plano estando el vértice opuesto a la base dirigido hacia la capa octaédrica con la<br />
que comparte el O 2- , de modo que los cationes octaédricamente coordinados quedan<br />
rodeados de 4O 2- y 2OH - . En la otra parte de la capa octaédrica se encuentra otra capa de<br />
tetraedros, también con los vértices dirigidos hacia la capa octaédrica. Grimm 13 presenta un<br />
diagrama esquemático de la estructura de la montmorillonita (Fig.III.2).<br />
a<br />
c<br />
b<br />
OH<br />
Oxigeno Hidroxilo Aluminio, Magnesio<br />
Silicio, Aluminio<br />
Fig.III.2 Esquema de la estructura de la montmorillonita<br />
9 J.Linares. <strong>Tesis</strong> Doctoral, Universidad de Granada (1963).<br />
10 J.L.Martin-Vivaldi. Clays and Clay Minerals, 11 (1963) 327.<br />
11 Field-Trips Guide, International Clay Conference, Madrid 1-7 July 1972.<br />
12 S.B.Hendricks. J. Geol. 50 (1942) 276-290.<br />
13 R.E.Grim. “Clay Mineralogy”, Mc Graw-Hill Series in Geology, Mc Graw-Hill Books Co, Inc., N.Y. (1953) 11.<br />
OH<br />
OH<br />
Cationes de cambio<br />
OH<br />
57
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Estas capas teóricamente se extienden indefinidamente en dos dimensiones, ejes a y b. A<br />
lo largo del eje c, las capas se van superponiendo sucesivamente. Una partícula la<br />
constituyen entre 8 y 10 láminas elementales superpuestas.<br />
Las superficies superior e inferior de la láminas elementales son átomos de oxígeno, y el<br />
enlace entre ellas es débil. Como resultado de esto en la estructura de la montmorillonita<br />
pueden penetrar entre las láminas moléculas de agua y otras moléculas polares, dando lugar<br />
a la expansión de la estructura a lo largo del eje c. Esta variación del espaciado interlaminar<br />
puede ser en un amplio rango, desde un mínimo de 9,6 Å correspondiente al estado en que<br />
no existen moléculas polares entre las láminas (arcilla seca) hasta aproximadamente 21 Å,<br />
cuando sí las hay.<br />
La montmorillonita es susceptible de presentar sustituciones isomórficas. Las más<br />
frecuentes son las de Si 4+ por Al 3+ en posiciones tetraédricas y las de Al 3+ por Mg 2+ y otros<br />
cationes R 2+ o R 3+ en las octaédricas. De estas sustituciones resultan cargas negativas en las<br />
láminas del silicato. El exceso de carga negativa es compensado por cationes hidratados<br />
situados entre las láminas. Estos cationes son intercambiables, propiedad que se aprovecha<br />
para la síntesis de materiales pilareados.<br />
En una montmorillonita se puede considerar una celda unidad formada por 20 oxígenos<br />
y cuatro grupos OH, con 8 sitios tetraédricos y 6 octaédricos (Fig.III.3).<br />
eje c<br />
9,6- 21,2<br />
Å<br />
OH OH<br />
OH<br />
xH2O<br />
eje b<br />
Fig.III.3 Esquema de una proyección de la celda unidad<br />
La distribución de la carga teórica, sin sustituciones isomórficas (Fig. III.3) sería:<br />
OH<br />
6 O<br />
4 Si<br />
2 (OH) + 4 O<br />
4 Al<br />
2 (OH) + 4 O<br />
4 Si<br />
6 O<br />
58
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
6 O 2- 12 -<br />
H2O interlaminar<br />
6 O 2- 12 -<br />
4 Si 4+<br />
4 O 2- + 2 OH -<br />
4 Al 3+<br />
4 O 2- + 2 OH -<br />
16 +<br />
4 Si 4+ 16 +<br />
6 O 2- 12 -<br />
H2O interlaminar<br />
6 O 2- 12 -<br />
capa tetraédrica<br />
10 - iones comunes a ambas capas<br />
12 + capa octaédrica<br />
10 - iones comunes a ambas capas<br />
capa tetraédrica<br />
La fórmula estructural idealizada de la montmorillonita a partir de la sugerida por Ross<br />
y Hendricks y suponiendo la única sustitución en la capa octaédrica de Al 3+ por Mg 2+ será<br />
<br />
n<br />
M x/ n y H2O Al4 xMgx Si8 O20 OH 4<br />
III.1.<br />
donde entre corchetes se presenta el grupo en posición octaédrica estando el Si sólo en las<br />
posiciones tetraédricas. M representa los cationes de cambio presentes (generalmente Ca 2+<br />
y Na + ), n el estado de valencia del catión e y el número de moléculas de H2O presentes ya<br />
sea hidratando los cationes o simplemente como agua interlaminar.<br />
Usualmente la deficiencia de cargas positivas en las capas de las montmorillonitas está<br />
en el rango de 0.6 a 1.2 cargas por Si8O20 14 .<br />
Las cargas negativas, producto de sustituciones en los sitios octaédricos, están<br />
distribuidas sobre todos los oxígenos de la estructura. Éstos hacen que las esmectitas<br />
tiendan a ser “turbostráticas”, es decir que las láminas estén aleatoriamente apiladas con<br />
respecto al plano formado por los ejes a y b de láminas vecinas. En cambio, las cargas<br />
negativas de las láminas debido a sustituciones tetraédricas están más localizadas, lo que<br />
hace que estos materiales exhiban mejor orden tridimensional 15,16 .<br />
La montmorillonita tiene interesantes propiedades físico-químicas que le confieren un<br />
14 G.Benson, A.Mifsud, J.Mering. Clays and Clay Miner. 22 (1974) 379.<br />
15 H.Suqued, C. de la Calle, H.Pezerat. Clays and Clay Miner. 23 (1975) 1.<br />
16 G.W.Brindley. “Crystal Structures of Clay Minerals and their X-Ray Identification”. G.W.Brindley and G.Brown Ed.,<br />
Mineralogical Society, London, 1980.<br />
59<br />
Comentario [M1]:
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
gran número de aplicaciones en la industria, en la que se aprovechan fundamentalmente su<br />
gran capacidad adsorbente y sus propiedades ácidas 17 .<br />
Su utilización puede incrementarse y mejorarse modificando convenientemente su<br />
textura y los centros activos, por ejemplo con la formación de pilares.<br />
1.2. Purificación a fracción específica<br />
Los materiales, tal cual vienen de la mina, presentan aspectos variados en tonalidad,<br />
humedad, propiedades al tacto, resistencia a la fractura, pero en general predomina su<br />
textura terrosa, característica de las arcillas. La fracción interesante del mineral es la<br />
constituida por los “minerales de arcilla”, que tienen como peculiaridad su tamaño de<br />
partícula, menor que 2m, la que se aprovecha para separarlos de las demás “impurezas”.<br />
Para la separación se utiliza el método de sedimentación controlado, especialmente<br />
apto para partículas menores de 5m 18 , y fácilmente aplicable.<br />
1.2.1 Método de sedimentación de Stokes<br />
Involucra la determinación del tamaño de las partículas a partir de su velocidad de<br />
sedimentación en un campo gravitacional.<br />
La fuerza que actúa sobre una partícula esférica de diámetro d y densidad , en un<br />
medio de densidad 0, bajo la influencia de la aceleración de la gravedad g es<br />
en el sentido de g.<br />
F1 = 0 g<br />
4<br />
3 d 3<br />
<br />
III.2.<br />
8<br />
Por otro lado, una partícula esférica de diámetro d viajando a una velocidad v en un<br />
medio de viscosidad , experimenta una fuerza (fuerza de Stokes), dada por<br />
en el sentido contrario de v.<br />
F2 = 3vd III.3.<br />
Cuando F1+ F2 = 0, la partícula alcanza una velocidad terminal (constante), dada por la<br />
Ec.III.4 donde l es el camino recorrido por la partícula y t el tiempo empleado en recorrerlo.<br />
<br />
0<br />
v = d 2 <br />
18<br />
g<br />
= l<br />
t<br />
III.4.<br />
Utilizando como medio de separación el agua y suponiendo que las partículas tienen un<br />
17 J.Shabtai. Chem. Ind. 61 (1979) 734.<br />
60<br />
Comentario [M2]:
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
tamaño máximo transversal a la dirección de desplazamiento d, se puede calcular a través<br />
de III.4 cuál es la velocidad terminal máxima de dichas partículas. Las partículas más<br />
pequeñas tendrán una velocidad menor.<br />
Para el agua los datos necesarios son los siguientes :<br />
= 0,009 poisse (1 poisse= 1 g/s.cm) ; 0 = 0,997 g/cm 3<br />
Los de la montmorillonita (material a separar) son :<br />
= 2,71 g/cm 3 y d < 2m = 2 x 10 -4 cm<br />
Con estos datos, utilizando la ecuación III.4, encontramos que para partículas con<br />
d=2m la velocidad terminal es<br />
v = 1,49 cm/ h III.5.<br />
Por lo tanto en aproximadamente 14 horas las partículas menores de 2m se han<br />
desplazado unos 20 cm.<br />
Procedimiento<br />
Aplicando el método de sedimentación de Stokes, se hizo una suspensión de<br />
aproximadamente 40g de arcilla en probetas de 2 litros de agua desionizada. Se agitó<br />
vigorosamente y después de un mínimo de 16 horas se recogieron los primeros 20 cm.,<br />
asegurando obtener fracciones menores de 2m. Posteriormente se volvió a rellenar con<br />
agua y repetir el proceso hasta que la fracción a recoger estuviese lo suficientemente clara<br />
(o sea con poco material).<br />
El material recogido de las probetas fue concentrado en rotavapor y posteriormente<br />
puesto en estufa a 60ºC hasta sequedad total.<br />
2. Material de partida. Caracterización<br />
Se recibieron más de diez muestras de distintas zonas de España que fueron<br />
caracterizadas por DRX y Adsorción-Desorción de N2. De entre ellas se seleccionó, por su<br />
alto contenido en material montmorillonítico, una arcilla de la Serrata de Níjar, Almería,<br />
con denominación de origen Serrata Blanca, que será identificada de ahora en adelante<br />
como SerBca.<br />
Por la técnica de DRX se identificaron los distintos minerales presentes en la arcilla de<br />
partida para determinar su pureza en filosilicatos. En la Fig.III.4 se presenta el<br />
18 T.Allen. Particle Size measurement, J.C.Williams Ed., Chapman & Hall, London (1975) 265.<br />
61
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
difractograma de Rayos-X y en la tabla III.1 se dan los valores de los espaciados basales,<br />
las intensidades relativas de cada pico y las asignaciones mineralógicas de cada uno de<br />
ellos. En la tabla se incluyen también las dadas por Rosenquist 19 para el mismo tipo de<br />
materiales.<br />
Intensidad de R-X (u.a.)<br />
14.91<br />
4.48<br />
3.33<br />
3.02<br />
2.52<br />
2.24<br />
SerBca GADOR<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75<br />
2<br />
Fig.III.4 Difractograma de R-X de SerBca<br />
Tabla III.1 Datos de DRX correspondientes a SerBca y asignaciones de Rosenquist<br />
SerBca Rosenquist<br />
d(Å) Irelat Asignación d(Å) Irelat hkl<br />
a 14,91 100 M 14-15 mf 001<br />
b 4,48 35 M 4,5 mf 020<br />
c 4,23 17 Q - - -<br />
d 4 15 F - - -<br />
e 3,76 20 M 3,77 m 004<br />
f 3,33 32 Q - - -<br />
g 3,19 20 F - - -<br />
h 3,03 23 F - - -<br />
i 2,52 24 M 2,58 m 200<br />
j 2,25 11 M 2,26 d 040<br />
k 1,7 12 M 1,7 m 009<br />
l 1,51 15 M 1,5 m 060<br />
donde las notaciones de la tabla son:<br />
d = distancia interplanar M = Montmorillonita mf = muy fuerte<br />
19 Rosenquist. Norsk. Geol. Tisskr. 39 (1959) 350.<br />
1.70<br />
1.50<br />
62
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Irelat= Intensidad relativa Q = Cuarzo m = medio<br />
hkl = Indices de Miller F = Feldespato d = débil<br />
De las fichas publicadas por la “American Society for Testing Materials” (ASTM),<br />
encontramos asignaciones dadas a montmorillonitas con sustituciones octaédricas de Mg, y<br />
calcio como catión de cambio correspondiente a los picos a, b, e, f, h, i, j, k y l para la<br />
SerBca 20 o con sodio como catión de cambio a los picos b, f y g 21 . Shimoda 22 presenta una<br />
muestra con sustituciones tetraédricas por Al y con potasio como catión de cambio, donde<br />
algunos picos característicos también aparecen en el análisis de la SerBca (picos b, f, g e i).<br />
La banda de reflexión (060) a 1,5 Å señala que se trata de un silicato dioctaédrico 23 .<br />
El valor del espaciado interplanar para los planos 001 (espaciado basal d001), depende de<br />
la naturaleza y contenido de los cationes de cambio y del estado de hidratación de los<br />
mismos. Fripiat et al 24 señalaron la existencia de interestratificación de estructuras con una<br />
o dos moléculas de agua cuando el espaciado basal estaba entre 12 y 15 Å. Por lo tanto, en<br />
el caso de la SerBca, los cationes interlaminares hidratados con una o dos moléculas de<br />
agua nos definen el espaciado basal.<br />
La presencia de cuarzo es identificable por su pico característico a 3,32 Å y la de<br />
feldespato por su pico característico a 3,19 Å.<br />
En definitiva, se detectó una montmorillonita que presenta sustituciones octaédricas y<br />
tetraédricas y por lo menos Ca 2+ , Na + y K + como cationes de cambio y cantidades menores<br />
de cuarzo y feldespato.<br />
Basándose en la identificación y cuantificación de los picos característicos y teniendo en<br />
cuenta su poder de reflexión 25 , se puede obtener el contenido aproximado de cada mineral.<br />
El método se basa en la siguiente relación<br />
X i <br />
donde Xi = porcentaje en peso del componente i<br />
<br />
I<br />
i<br />
K i<br />
I<br />
Ii = intensidad relativa del componente i<br />
i<br />
i<br />
K<br />
i<br />
100<br />
III.6.<br />
20<br />
P.Bayliss. Powder Diffraction 4 (1989) 19.<br />
21<br />
K.Molloy, Am. Mineral 46 (1961) 583.<br />
22<br />
Shimoda, Clays and Clay Minerals, 18 (1970) 269.<br />
23<br />
G.W.Brindley and G.Brown Ed. “Crystal Structures of Clays Minerals and their X-Ray Identification” Cap.V (1980)<br />
323.<br />
24<br />
J.J. Fripiat, J.Chaussidon and R.Touillaux. J.Phys.Chem. 64 (1960) 1234.<br />
25<br />
C.Pesquera. <strong>Tesis</strong> Doctoral, Univ. de Cantabria, 1988.<br />
63
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Ki = poder de reflexión del componente i<br />
En la tabla III.2, presentamos los cálculos de esta ecuación utilizando los poderes de<br />
reflexión dados por Rosenquist.<br />
Tabla III.2. Cálculo aproximado de porcentajes en peso de cada mineral para SerBca<br />
Mineral Ki dcaract Ii Xi<br />
Montmorillonita 0,1 4,48 35 90,67<br />
Cuarzo 2 3,32 32 4,14<br />
Feldespato 1 3,2 20 5,19<br />
En la tabla se detecta el alto porcentaje en montmorillonita del material elegido<br />
(90,67%).<br />
El análisis de los datos correspondientes a la isoterma de Adsorción-Desorción de N2 a<br />
76 K por aplicación de la teoría B.E.T. conduce a los siguientes resultados<br />
cm 3 /g<br />
Volumen Adsorbido (cm 3/g)<br />
Area superficial BET (SBET) = 62 m 2 /g<br />
CBET = 390<br />
Volumen Adsorbido a Presión relativa 0,98 expresado en líquido (VT) = 0,098<br />
Diámetro medio de poro (4x10 4 V/SBET) = 63 Å<br />
90<br />
80<br />
70<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
Ser-Bca Gador<br />
0<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0<br />
P/Po<br />
Fig.III.5 Isoterma de adsorción desorción de N2 de la SerBca<br />
64
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
En la Fig.III.5, se muestra la isoterma obtenida, semejante a la dada por Barrer et al 26<br />
para materiales montmorilloníticos.<br />
La isoterma detecta la baja porosidad de la muestra tanto en la zona micro como en la<br />
mesoporosa, siendo esta última probablemente de naturaleza interparticular, dada su<br />
aparición a presiones relativas altas.<br />
El bucle de histéresis no presenta el trazado paralelo de la rama de adsorción-desorción,<br />
característico de los materiales laminares, lo que corrobora la presencia de impurezas que<br />
interfieren con el desarrollo de la histéresis.<br />
El material seleccionado fue purificado por el método de sedimentación descrito<br />
anteriormente y secado y almacenado a temperatura ambiente, denominándose de ahora en<br />
adelante SerBcaP.<br />
3. Material purificado<br />
La arcilla purificada SerBcaP fue caracterizada con las técnicas descritas en el capítulo<br />
anterior.<br />
3.1 Composición mineralógica. Celda unidad<br />
En la Fig.III.6 se da el difractograma correspondiente a la muestra SerBcaP.<br />
Intensidad de R-X (u.a.)<br />
SerBca Purificada<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75<br />
2<br />
Fig.III.6 Difractograma de R-X de SerBcaP<br />
26 R.M.Barrer and D.M.McLeod. Trans Faraday Soc. 50 (1954) 980.<br />
65
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Por comparación con el correspondiente a la SerBca (Fig.III.4) se puede apreciar que el<br />
método de purificación ha eliminado principalmente el cuarzo. Los picos característicos<br />
obtenidos se reflejan en la Tabla III.3. La disminución del espaciado basal es producida por<br />
el secado de la muestra posterior a la purificación, que hace perder parte del agua<br />
interlaminar.<br />
Tabla III.3. Datos por DRX de SerBcaP<br />
d Irelat. Asig Plano de reflexión (Rosenquist)<br />
12,6 100 M 001<br />
4,5 27 M 020<br />
3,15 26 F -<br />
2,6 13 M 200<br />
1,7 9 M 009<br />
1,5 11 M 060<br />
En este caso, la aplicación de la ecuación III.6 para el análisis cuantitativo de los<br />
minerales lleva a la composición:<br />
Montmorillonita: 91,2 %<br />
Feldespato: 8,8 %<br />
lo que indica un ligero aumento del contenido de montmorillonita. No obstante, los análisis<br />
de textura por adsorción de N2 muestran la eliminación del material interferente o, cuando<br />
menos, la reorganización de la estructura en capas paralelas tras el proceso de purificación.<br />
El feldespato, tiene características similares a la montmorillonita en cuanto a densidad y<br />
tamaño de partícula, por lo que se resiste a las técnicas de separación empleadas y<br />
permanece en la muestra dificultando su purificación.<br />
De los valores de los picos correspondientes a determinados índices de reflexión de los<br />
planos cristalográficos, se pueden obtener las dimensiones de la celda unidad de la<br />
montmorillonita 27 .<br />
Sabiendo que la montmorillonita cristaliza en el sistema monoclínico 28 , se emplea la<br />
siguiente ecuación<br />
1<br />
2 d<br />
hkl<br />
2 2 2 2 2<br />
= h a k b l c 2lhc<br />
a<br />
2 * * * * *cos * III.7.<br />
27 J. Bermúdez Polonio. “Métodos de difracción de Rayos X”, Ed. Pirámide, Madrid (1981).<br />
28 D.M. Mac Ewan. “X-Ray Identification and Structure” Ed.Brown, London (1961) 143-207.<br />
66
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
donde a*, b*, c* y * son las dimensiones recíprocas de la celda unidad y sus relaciones<br />
con las dimensiones reales son<br />
1 1 1<br />
a* ; * ;c* ; * 180 <br />
asen csen <br />
III.8.<br />
<br />
En la Fig.III.7 vemos un esquema para identificar las dimensiones de la celda unidad.<br />
Fig.III.7 Denominaciones de las dimensiones de la celda unidad<br />
Para la montmorillonita 90º ; a b c y 90º.<br />
De esta manera, y utilizando los espaciados obtenidos por DRX, a saber d001, d020 y d200,<br />
se obtienen los siguientes valores para las dimensiones de la celda unidad:<br />
a = 5,2 Å; b = 9 Å y c = 12,6 Å III.9.<br />
que se corresponden con las dadas en la literatura para materiales montmorilloníticos.<br />
3.2 Análisis elemental<br />
Disgregando las muestras por el método descrito en el capítulo II, se procedió a su<br />
análisis elemental por EAA.<br />
En la tabla III.4, se presentan los resultados obtenidos para la SerBcaP, dados en su<br />
forma habitual de óxido.<br />
<br />
<br />
<br />
a<br />
Tabla III.4 Composición química elemental de SerBcaP<br />
Componente % en peso en SerBcaP<br />
SiO2<br />
55,16<br />
Al2O3<br />
17,41<br />
MgO 3,52<br />
CaO 0,97<br />
Fe2O3<br />
3,49<br />
Na2O 2,26<br />
K2O 0,90<br />
MnO 0,018<br />
Pérdida por Calcinación 16,27<br />
TOTAL 100,00<br />
Resultados que caen dentro de los análisis publicados para las arcillas<br />
b<br />
c<br />
c<br />
c<br />
67
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
montmorilloníticas.<br />
3.3 Capacidad de intercambio catiónico<br />
Utilizando el método del acetato amónico descrito en el Capítulo II, y haciendo uso de la<br />
espectroscopía de absorción atómica (EAA) para el análisis de las soluciones extraídas, se<br />
midió la capacidad de intercambio catiónico (CEC).<br />
Los cationes analizados fueron: Ca, Mg, K, y Na, distribuidos como se muestra en la<br />
Tabla III.5. La capacidad total expresada en meq/100g de muestra es de 79,5.<br />
Tabla III.5 Capacidad de Intercambio Iónico de SerBcaP<br />
Catión CEC (meq/g) %CEC<br />
Ca 0,420 52,55<br />
Mg 0,290 37,10<br />
K 0,036 4,30<br />
Na 0,049 6,05<br />
TOTAL 0,795 100<br />
3.4 Fórmula estructural<br />
Para el cálculo de la fórmula estructural, hay varios métodos que toman como punto de<br />
partida el número de aniones de la estructura teórica de la montmorillonita, operando con el<br />
análisis elemental y la capacidad de cambio catiónico, para comparar con el número<br />
correspondiente de cationes.<br />
A pesar de que los valores obtenidos están de acuerdo, dentro de un término medio, con<br />
la composición química de las montmorillonitas presentadas en la literatura, se conoce que<br />
existen impurezas que deben tenerse en cuenta en el cálculo de la fórmula de la celda<br />
unidad de la montmorillonita. Por DRX se detectó la presencia de feldespato, que puede<br />
aparecer en arcillas en su forma potásica (K Al Si3 O8) o sódica (Na Al Si3 O8) siendo la<br />
primera la más común. Por otro lado, según las medidas de la CEC, no todo el Na y el K<br />
detectado en el análisis elemental lo está como catión de cambio, sino que parte de ellos<br />
están formando estructura o tomando parte de los minerales acompañantes..<br />
De lo anteriormente dicho, para el cálculo de la fórmula estructural, se hicieron los<br />
siguientes supuestos :<br />
- Todo el potasio que no forma parte de los cationes de cambio (0,73% del peso<br />
total de la muestra), forma feldespato potásico.<br />
- El sodio que no forma parte de los cationes de cambio (2,09% del peso total),<br />
forma, por un lado, feldespato sódico, hasta completar el feldespato detectado<br />
68
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
por DRX, y por otro (0,75 % del peso total), carbonato sódico que es habitual<br />
en arcillas, aunque no haya podido ser detectado por Rayos-X debido a su baja<br />
concentración (~1,3%).<br />
Con estos supuestos se han recalculado las cantidades de cada óxido que compone la<br />
parte montmorillonítica, dados en la tabla III.6, y adicionalmente se establecen las<br />
correcciones que corresponden a la capacidad de cambio.<br />
Tabla III.6 Composición elemental de la fracción montmorillonítica SerBcaP<br />
Componente % en peso en SerBcaP<br />
SiO2<br />
53,89<br />
Al2O3<br />
17,23<br />
MgO 3,86<br />
CaO 1,29<br />
Fe2O3<br />
3,83<br />
Na2O 0,17<br />
K2O 0,19<br />
MnO 0,020<br />
Partiendo de la composición elemental de la montmorillonita en forma de óxidos, Ross<br />
y Hendricks (1945) 29 estudiaron numerosas muestras del grupo de las montmorillonitas y<br />
propusieron un método para el cálculo de la fórmula estructural, cuyos pasos son los<br />
siguientes:<br />
-La celda unidad teórica de una montmorillonita se puede escribir<br />
<br />
n<br />
M y H O Al Mg Si O (OH)<br />
x/n<br />
2 4-x x VI 8 IV 20 4<br />
III.10.<br />
donde solamente se ha considerado al Mg en sustituciones octaédricas y ninguna<br />
sustitución en las posiciones tetraédricas que sí pueden ocurrir. Los números romanos<br />
VI y IV indican los números de coordinación de los átomos en las posiciones<br />
octaédricas y tetraédricas respectivamente y M son los cationes de cambio.<br />
En vista del análisis elemental y suponiendo que pueda existir sustitución tetraédrica<br />
(según Ross y Hendricks) consideramos la siguiente distribución de iones:<br />
3<br />
3+ 2+<br />
3+<br />
Iones en posición octaédrica: Al a-y + Feb Mg c + Mn d <br />
3<br />
4<br />
Iones en posición tetraédrica: Al y Siz<br />
<br />
Aniones: O20OH 4<br />
2 2<br />
Cationes de cambio: Mg ; Na ; K ; Ca<br />
29 C.S.Ross y S.B.Hendricks. U.S. Geol. Survey 205-B (1945) 23.<br />
69
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
donde a, b, c, d, z son las denominadas “proporciones atómicas” del elemento del<br />
cual son subíndices. Estas se obtienen del cociente entre el porcentaje ponderal de un<br />
óxido (el porcentaje del óxido por átomo del elemento en cuestión) y su peso molecular<br />
(el del óxido). El valor de y se obtiene de la condición de que en posición tetraédrica<br />
tiene que haber ocho átomos.<br />
De esta manera se obtiene la siguiente fórmula centesimal:<br />
3<br />
3+ 2+<br />
3+ 3<br />
4<br />
a-y b c<br />
d y z <br />
Al + Fe Mg + Mn Al Si O OH M<br />
III.11.<br />
VI<br />
IV<br />
20 4 x<br />
sin considerar el agua y donde x es la proporción atómica por carga de los cationes<br />
monovalentes de cambio.<br />
A partir de las proporciones atómicas se puede obtener el número de cargas positivas<br />
correspondientes a cada catión por 100 g de peso. Para transformarlo en cargas por<br />
unidad estructural, hay que multiplicar por una constante k.<br />
El producto de la suma de todas las cargas positivas por la constante K, debe ser<br />
igual al número total de aniones: 44.<br />
K (a.3 + b.3 + c.2 + d.3 + z.4 + x) = 44 III.12.<br />
de donde se puede obtener el valor de K, ya que las demás variables son obtenidas del<br />
análisis.<br />
Sabiendo el valor de K, y haciendo las siguientes transformaciones:<br />
(z + y)K=8; Y=Ky; Z=Kz= 8-Y;<br />
A-Y=K(a-y); B=Kb; C=Kc; D=Kd; X=Kx<br />
se obtiene la fórmula estructural de la celda unidad<br />
<br />
Al A-Y + FeB Mg C + Mn D AlY Si Z O20 OH 4 M X III.13.<br />
VI<br />
IV<br />
Aplicando los pasos descritos a los datos del análisis, se llega a la siguiente fórmula<br />
estructural aproximada para el material montmorillonítico de la SerBcaP:<br />
<br />
Al 2,880 + Fe0,423 Mg 0,705 + Mn0,0026 Al0,097 Si 7,903 O20 OH 4 M0,77<br />
III.14.<br />
VI<br />
IV<br />
Para las esmectitas dioctaédricas la suma de los iones en posición octaédrica tiene que<br />
70
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
ser aproximadamente 4 y en las montmorillonitas la relación Si/Al es del orden de 2,5 30 .<br />
De la fórmula estructural se obtiene<br />
A-Y+B+C+D = 4,01<br />
Si/Al= 2,65<br />
lo que indica la presencia de una montmorillonita.<br />
3.5 Propiedades texturales<br />
3.5.1 Area superficial<br />
A partir de los primeros puntos de la isoterma, en el intervalo de P/P0 entre 0,005 y<br />
0,1405 se ha obtenido la SBET de la muestra, 72 m 2 /g, ligeramente superior a la de la<br />
muestra sin purificar. La constante BET sin embargo es bastante inferior señalando<br />
probablemente una mayor interacción del N2 con los materiales que impurificaban al<br />
material de partida, bien por su naturaleza, bien por la presencia en ellos de una cierta<br />
microporosidad.<br />
3.5.2 Porosidad<br />
El volumen de poro leído a la presión relativa de 0,98 es 0,080 cm 3 g -1 , inferior a la del<br />
material primitivo.<br />
La textura del material purificado no ha variado sustancialmente en la SerBcaP. En la<br />
Fig.III.8 vemos la isoterma de adsorción-desorción de N2 a 77ºK para dicha muestra.<br />
La isoterma, no muy diferente en la rama de adsorción a la correspondiente a la muestra<br />
sin purificar, muestra también la escasa incidencia de la porosidad. No obstante el<br />
paralelismo entre las ramas de adsorción/desorción del bucle de histéresis, señala un<br />
reordenamiento de la estructura como corresponde al depósito ordenado de las laminillas<br />
originales en el transcurso de la purificación, una vez liberadas de materiales de diferente<br />
morfología que contribuían a su desorden.<br />
Su forma corresponde a la del tipo IV de la clasificación BDDT (IUPAC, 1985) 31 y<br />
presenta un bucle de histéresis bien desarrollado, correspondiente al tipo H4 según la<br />
30 J.V. Souza y P.Souza Santos. Cerámica 11:38 (1964) 2.<br />
31 A.Ruiz Paniego, Versión española de datos de fisisorción en sistemas gas/sólido, IUPAC 1985. Anales de Química, 85<br />
(1989) 386-399.<br />
71
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
IUPAC, o del tipo B según De Boer 32 , característico de poros entre placas paralelas, en<br />
donde el llenado de los poros tiene lugar mediante formación de mono-multicapa y la<br />
desorción por evaporación capilar.<br />
La insaturación de la isoterma a altas presiones relativas, indicadora de la presencia de<br />
macroporos, y la microporosidad, no sufren fuertes variaciones con respecto a la muestra<br />
sin purificar.<br />
70<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
Microporosidad<br />
Volumen Adsorbido (cm 3 /g )<br />
SerBcaP<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4<br />
P/Po<br />
0,6 0,8 1,0<br />
Fig.III.8 Isoterma de adsorción-desorción de N2 de la SerBcaP<br />
El volumen de microporos por aplicación del método t, a los datos de la rama de<br />
adsorción de la isoterma, resulta en:<br />
que aporta un área de<br />
VHJ = 0,0087 cm 3 /g<br />
SHJ = 20,44 m 2 /g<br />
De estos datos y de la gráfica correspondiente se puede concluir que la muestra SerBcaP<br />
es escasamente microporosa, siendo los poros computados, intersticiales prácticamente en<br />
su totalidad. La contribución de los microporos al volumen total de poros escasamente<br />
supera el 12%.<br />
32 J.H.De Boer “The Structure and Properties of Porous Materials”, D.H. Everett and F.S.Stone Ed., Butterworth,<br />
London (1958).<br />
72
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Puesto que el radio de los poros es suma de dos términos: radio de Kelvin, rK (deducido<br />
de la ecuación de Kelvin correspondiente a condensación capilar) y espesor de la capa de<br />
adsorbato (t), el análisis de la porosidad vendrá determinado por la selección del espesor<br />
estadístico t de la capa adsorbida. Especialmente el valor de la microporosidad, que suele<br />
darse exclusivamente como suma de los volúmenes correspondientes a la capa adsorbida<br />
en la zona de presiones relativas inferior a 0,4.<br />
El valor de t para una presión relativa dada, viene marcado en una muestra no porosa<br />
por la relación entre el volumen adsorbido a esa presión y el correspondiente a la<br />
monocapa. Según se ha dicho en el capítulo II, en bibliografía se puede leer la existencia de<br />
varias curvas patrón de las que se pueden extraer los valores de t ; las más utilizadas son las<br />
estadísticas de Halsey y Harkins & Jura (descritas en el capítulo anterior) y las de de Boer<br />
(basadas en el concepto de curva común de Lippens y de Boer) que utilizan sustancias<br />
patrón no porosas como comparación entre curvas.<br />
Lecloux & Pirard, observando que la forma de las curvas en su primera parte estaba<br />
relacionada con la CBET y ésta, como es sabido, con la interacción adsorbente-adsorbato,<br />
concluyeron que es ésta interacción la que debería tenerse en cuenta a la hora de la elección<br />
de la curva patrón. Diseñaron hasta cinco curvas correspondiente a otros tantos intervalos<br />
de CBET, que podrían ser empleadas como curvas standard para materiales con valores<br />
similares de CBET. Los intervalos vigentes para cada curva de Lecloux & Pirard son:<br />
1, para C 300<br />
2, para 100 C 300<br />
3, para 40 C 100<br />
4, para 30 C 40<br />
5, para 20 C 30<br />
Los valores de t hasta P/P0=0,40, calculados para cada una de las curvas incluyendo las<br />
clásicas de Halsey y Harkins & Jura siguen la siguiente relación:<br />
tHalsey t t t t t t<br />
1 2<br />
HyJ<br />
3 4<br />
<br />
III.15.<br />
5<br />
Cuando el valor de t elegido es demasiado grande, la extrapolación de las curvas Vads vs<br />
t pueden dar valores negativos en la ordenada al origen, careciendo de sentido físico los<br />
resultados obtenidos. Así, la elección de la curva standard debe ser cuidadosa si se quiere<br />
que, tanto el análisis de la mesoporosidad como, y especialmente, el de la microporosidad<br />
73
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
tenga algún sentido.<br />
Para la elección de la isoterma standard, se deben tener en cuenta los siguientes<br />
criterios :<br />
a) Debido que a P/P0=0, la adsorción es 0 y la SBET se identifica aproximadamente con el<br />
producto de<br />
SBET=15,47 V1/t1 III.16.<br />
siendo V1 y t1 los valores del volumen y de la capa adsorbida respectivamente a (P/P0)1,<br />
habrá que elegir una curva standard tal que el valor de t a esa presión sea menor o igual<br />
que t1 (L&P parten de valores P/P0 de 0,02)<br />
b) La extrapolación de los valores correspondientes a bajas presiones debe dar líneas rectas<br />
pasando por el origen.<br />
La aplicación de ambos criterios a los datos correspondientes a la SerBcaP da, para<br />
valor de t máximo admisible a la presión de 0,02 ; t= 3,10<br />
En esas condiciones, ni la isoterma de Halsey (t=3,63) ni la 1 (t=3,44) de L&P parecen<br />
adecuadas; la 2 (2,85) o la de Harkins y Jura (2,84) sí cumplen esta condición (Fig.III.9),<br />
por lo que se puede hacer uso de cualquiera de ellas para el estudio de la porosidad. Se<br />
quiere hacer notar que en este caso la curva seleccionada (2 o HyJ) coincide con la que<br />
marcan los criterios de L&P, es decir con la que corresponde a una constante BET de 288<br />
(entre 300 y 100). No obstante, la sensibilidad de esta constante a los datos de la isoterma<br />
pendiente<br />
<br />
<br />
1; ec.II.12<br />
es muy grande y cualquier desviación en los datos de<br />
ordenada origen <br />
adsorción puede dar lugar a valores muy distintos para la ordenada en el origen y,<br />
consecuentemente, alterar el valor CBET obtenido. Por eso se recomienda, en caso de<br />
conflicto, recurrir a los criterios anteriores para la elección de la isoterma standard.<br />
También se quiere recalcar que, una vez seleccionada una curva, todo el análisis de la<br />
mesoporosidad deberá tener en cuenta los valores correspondientes de t para el cálculo de<br />
los radios de poro y las magnitudes derivadas.<br />
En la Fig.III.9 se muestran las curvas t obtenidas con la 1 y 2 de Lecloux y Pirard, la t<br />
de Harkins y Jura y la de Halsey y el ajuste lineal de la 2. La zona lineal de la curva<br />
aparece con la terminación del llenado de microporos y es de donde obtenemos<br />
información, tanto para el valor de la microporosidad, como para el de la superficie externa<br />
de la muestra.<br />
74
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Vads. (cc/g)<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
SerBcaP<br />
t H&J<br />
t Halsey<br />
n1 L&P<br />
n2 L&P<br />
0<br />
0 1 2 3 4 5 6 7 8<br />
t (Å)<br />
Fig.III.9 Curvas t para SerBcaP<br />
Puesto que la t de Halsey da lugar a valores negativos del Vads, es descartada. La t dada<br />
por Harkins y Jura coincide con la 2 de Lecloux y Pirard para t bajos. En la tabla III.7, se<br />
muestran los datos de microporosidad obtenidos con cada una de las t probadas.<br />
Tabla III.7 Distintas medidas de la microporosidad para SerBcaP<br />
Medida 2 H & J Halsey<br />
Vmicro (cm 3 /g) 0,0086 0,0087 -0,0087<br />
Amicro (m 2 /g) 20,022 20,439 -7,12<br />
Sext (m 2 /g) 51,978 51,139 78,70<br />
Todas las curvas t de la Fig.III.9 muestran una ligera desviación de la linearidad hacia<br />
abajo para valores altos de t. Esto es típico de materiales con poros entre placas paralelas y<br />
significa que ha terminado el “llenado del espacio intersticial” por el mecanismo mono-<br />
multicapa, quedando sólo el recubrimiento superficial, lo que se traduce en una<br />
disminución de la cantidad adsorbida.<br />
Mesoporosidad<br />
El estudio de la distribución de poros se realizó aplicando el método BJH a la rama de<br />
adsorción de la isoterma utilizándose los valores de t obtenidos de la relación de Harkins y<br />
75
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Jura. El análisis de los datos conduce a la distribución de poros mostrada en la Fig.III.10,<br />
con los valores para los parámetros más importantes de:<br />
dV/dlogD<br />
0,03<br />
0,02<br />
Macroporosidad<br />
Sacum= 30 m 2 /g Vacum= 0,073 cm 3 /g<br />
dBJH= 98 Å (diámetro medio de poros por BJH)<br />
0,04 SerBcaP<br />
10 100 1000<br />
Diámetro de poros (Å)<br />
Fig.III.10 Distribución BJH de poros por adsorción de N2<br />
Para completar el análisis de la porosidad, se utilizó la técnica de intrusión de Hg,<br />
especialmente adecuada para la evaluación de la zona macroporosa.<br />
Siguiendo el método indicado en el capítulo II, en las figuras III.11 y III.12 se representa<br />
la curva de intrusión de Hg y la distribución de poros de la SerBcaP respectivamente. De la<br />
intrusión destacamos dos aumentos pronunciados en el volumen acumulado (Vcum), uno,<br />
aproximadamente a 0,06 MPa, que corresponde a la zona de ultramacroporos (10-20 m),<br />
y el otro a presiones aproximadas de 40 MPa, que corresponde a una porosidad en el rango<br />
de los mesoporos (100-200 Å).<br />
En la Fig.III.12 se muestra la distribución de poros, dando evidencia de la cuantía de los<br />
poros dentro de los límites enunciados.<br />
Ambos tipos de poros podrían ser intersticiales entre partículas, bien primarias<br />
(señalando agregados de 10 a 20 láminas unitarias estructurales), o secundarias, a partir de<br />
la agregación de las primeras.<br />
76
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
V cum (cm 3/g)<br />
0,5<br />
0,4<br />
0,3<br />
0,2<br />
0,1<br />
SerBcaP<br />
0,0<br />
0,01 0,1 1 10 100<br />
P(MPa)<br />
Fig.III.11 Curva de intrusión de Hg para la SerBcaP<br />
Fig.III.12 Distribución de poros de SerBcaP, por porosimetría de Hg<br />
Para el cálculo del volumen de poros por gramo de muestra (VpHg), a partir de esta<br />
técnica, se ha considerado exclusivamente el intervalo correspondiente a poros superiores a<br />
77
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
50nm, es decir el comprendido entre 10 -2 y 25 MPa.<br />
La superficie que aportan los poros comprendidos en ese rango (SHg), se ha calculado<br />
mediante la integración de la curva PdV según:<br />
<br />
2 067x10 <br />
SHg<br />
<br />
<br />
<br />
m <br />
<br />
2<br />
,<br />
<br />
PdV<br />
III.17.<br />
donde SHg viene expresada en m 2 /g, m es el peso de la muestra en gramos, P la presión en<br />
MPa y V el volumen de poros en cm 3 /g. Finalmente, el radio medio de poros (rm) es<br />
calculado a partir de la expresión<br />
V Hg<br />
rm<br />
<br />
S Hg<br />
p <br />
2 <br />
<br />
<br />
<br />
<br />
que se obtiene asumiendo que son cilíndricos todos los poros presentes.<br />
III.18.<br />
Los resultados de porosimetría de Hg, en el intervalo considerado, para la SerBcaP son<br />
los siguientes:<br />
3<br />
2<br />
V = 0,412 cm / g ; S =13 m / g; r = 7,3 m<br />
pHg<br />
En definitiva, las propiedades texturales de la SerBcaP son:<br />
Hg<br />
m <br />
SBET = 72 m 2 /g VMp = 0,412 cm 3 /g<br />
radio medio de poro = 129 Å Vmp = 0,045 cm 3 /g<br />
VTp = 0,46 cm 3 /g Vp = 0,009 cm 3 /g<br />
3.6 Caracterización estructural<br />
3.6.1 Análisis térmicos<br />
Análisis termogravimétrico<br />
Por termogravimetría (ATG) se conoce la estabilidad térmica de las muestras en función<br />
de los cambios de peso experimentados por efecto de la temperatura. El signo de la energía<br />
involucrada en cada uno de los cambios (endo o exotérmico) es evaluado por análisis<br />
térmico diferencial (ATD), según se explicó en el apartado correspondiente del capítulo II.<br />
Varias propiedades de la muestra pueden ser significativamente afectadas por el efecto<br />
térmico. En el caso de estos minerales, pueden estar involucrados cambios tanto en la<br />
composición, incluyendo las reacciones de decarbonatación y deshidratación 33 , como en las<br />
fases presentes.<br />
33 D.L. Bish and C.J. Duffy. Termogravimetric Analysis of Minerals, CMS Workshop Lectures, V3, The Clay Minerals<br />
Society, 95-157.<br />
78
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Las características fundamentales de la estructura cristalina de la montmorillonita<br />
justifica la retención de cantidades importantes de agua. Hay tres zonas de pérdida: la<br />
primera, entre 100 y 250ºC, se debe al agua adsorbida bien entre las láminas y la superficie<br />
externa de los materiales, bien como agua de cristalización hidratando los cationes de<br />
cambio; depende de la presión parcial de vapor de agua en la atmósfera y de la naturaleza<br />
de los cationes de cambio. Entre 400 y 700ºC hay pérdida de agua por condensación de<br />
hidroxilos estructurales: si son ricas en Fe, las pérdidas empiezan hacia los 500ºC, si no,<br />
llegan a 600 y 700ºC. La estructura cristalina se conserva después de esta pérdida hasta los<br />
800ºC en el caso de las montmorillonitas dioctaédricas pero no en las trioctaédricas. Una<br />
última pérdida visible a ~800ºC, dependiendo del material, señala la pérdida definitiva de<br />
la estructura cristalina. Giese 34,35 examinó las orientaciones de los hidroxilos en varios<br />
filosilicatos del tipo 2:1 y, usando un modelo electrostático, encontró datos sobre la<br />
estabilidad de los grupos OH. Sin embargo, sus conclusiones fueron opuestas a lo que<br />
normalmente se observa en los filosilicatos, debido principalmente a que una distribución<br />
de carga uniforme alrededor de los OH (como en los filosilicatos trioctaédricos), puede<br />
apantallar la migración de hidrógenos y estabilizar esencialmente los grupos OH.<br />
Hay muchas referencias en bibliografía a análisis termogravimétricos por ATG. El-<br />
Akkad et al 36 y El-Barawy et al 37 examinaron específicamente el comportamiento de los<br />
cationes de cambio ante el tratamiento térmico. Demostraron que los cationes de cambio<br />
tienen un suave efecto sobre la temperatura de deshidratación. Merece especial mención el<br />
trabajo de E. Gutierrez Ríos (1949) sobre “Bentonitas españolas” que coincide con los<br />
anteriores en la importancia de los cationes de cambio no sólo en la retención de agua, sino<br />
también en la estabilidad de la estructura por su acción local sobre los -OH de su entorno<br />
en el material ya deshidratado.<br />
Todas las curvas reportadas en la literatura 38 presentan dos claros procesos de<br />
deshidratación donde la derivada correspondiente (DTG) detalla las temperaturas a las que<br />
los cambios son más significativos.<br />
En la Fig.III.13 se presenta un termograma correspondiente a la SerBcaP con dos<br />
escalones de pérdida, según era de esperar (Tabla III.8). A partir de los datos de las curvas,<br />
34 R.F. Giese. Science 172 (1971) 263-4.<br />
35 R.F. Giese. Clays and Clay Minerals 27 (1979) 213-223.<br />
36 T.M. El-Akkad, N.S. Flex, N.M. Guindy, S.R. El-Massry and S. Nashed. Thermochim. Acta 59 (1982) 9-17.<br />
37 K.A. El-Barawy, B.S. Girgis and N.S. Flex. Thermochim. Acta 98 (1986) 181-189.<br />
38 H. Van Olphen and J.J.Fripiat. Data Handbook for Clay Materials and other Non-Metallic Minerals, Pergamon Press,<br />
Oxford, U.K. (1979).<br />
79
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
se ha obtenido su derivada con la temperatura (DTG) y de ella los rangos de temperatura en<br />
los que se producen las pérdidas de peso. La experimentación se realizó en un flujo de<br />
100cc/min de aire y a una velocidad de calentamiento de 10ºC/min.<br />
Pérdida de peso (%)<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
SerBcaP<br />
TG<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.III.13 Análisis Termogravimétrico en aire de SerBca P<br />
derivada<br />
En el primer salto del termograma (hasta aproximadamente 200ºC) el mineral pierde<br />
agua adsorbida (5,45%), que depende de su superficie y las condiciones ambientales, y<br />
agua interlaminar coordinada a los cationes de cambio. La forma y extensión del salto están<br />
relacionadas con la naturaleza de los cationes de cambio y por lo tanto con la fuerza del<br />
enlace agua-catión en función del radio y de la carga iónica del mismo.<br />
El segundo salto (5,96%) está relacionado con la pérdida del agua reticular procedente<br />
de los OH - superficiales (deshidroxilación) y también determinado por los cationes de<br />
cambio. Finalmente, el tercer salto a temperaturas hasta 750ºC, está relacionado con la<br />
pérdida de OH - estructurales.<br />
En la tabla III.8, se presentan los resultados del análisis.<br />
Tabla III.8 Datos obtenidos para SerBcaP por ATG<br />
Asignación de pérdida T (ºC) % Pérdida Peso SerBcaP<br />
Agua fisisorbida 20-100 5,45<br />
Agua interlaminar 100-400 5,96<br />
Agua reticular >400 4,86<br />
TOTAL 16,27<br />
80
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
Estos porcentajes están dentro del rango de las pérdidas producidas cuando los cationes<br />
de cambio son principalmente Na, K, Mg y Ca, sin poder discernir cual de ellos es<br />
mayoritario, pero está de acuerdo con los análisis químicos presentados.<br />
De la derivada del termograma se puede obtener los valores de temperatura para los<br />
cuales los cambios son máximos. Éstos son aproximadamente 108ºC y 652ºC, que están<br />
dentro de los rangos obtenidos para muestras con los cationes antes mencionados.<br />
Análisis térmico diferencial<br />
Con el análisis térmico diferencial, se completó el estudio del comportamiento térmico<br />
de la SerBcaP. En bibliografía 39 se describe el comportamiento térmico de los minerales<br />
en relación con los distintos tipos de agua involucrados en el proceso de deshidratación.<br />
El agua líquida (que está llenando los capilares de la arcilla), presenta un pico<br />
endotérmico, agudo con un máximo a 110ºC. El agua adsorbida en la superficie externa de<br />
los minerales de arcilla presenta un pico endotérmico con un máximo cercano a los 160ºC.<br />
El agua coordinada a los cationes produce un pico endotérmico con un máximo<br />
aproximado a los 200ºC. El agua “zeolítica”, que es la que está formando canales en la<br />
estructura cristalina puede producir uno o varios picos entre 200 y 450ºC. El proceso de<br />
deshidroxilación, da bandas endotérmicas entre 400 y 700ºC.<br />
En esta zona pueden aparecer ciertos procesos exotérmicos causados principalmente por<br />
la pirólisis y combustión de materia orgánica y también por la descomposición de sales<br />
acompañantes, fundamentalmente carbonato. Suelen dar picos muy agudos.<br />
Para el caso de la montmorillonita, aparece un pico intenso de pérdida de agua adsorbida<br />
entre 100 y 250ºC, tanto para el agua intercalada entre las láminas como la coordinada con<br />
los cationes de cambio. La forma y posición del pico dependen de la naturaleza del catión<br />
presente, con un valor medio en la posición del pico de 150ºC. El sodio y el potasio dan un<br />
pico único, el magnesio y el calcio dan picos dobles o triples.<br />
La deshidroxilación antes mencionada, aparece entre los 400 y 700ºC, pudiendo ser<br />
picos dobles o triples dependiendo de la naturaleza de los cationes sustituyentes.<br />
Por encima de los 800ºC aparece un pico endo-exotérmico relacionado,<br />
respectivamente con la destrucción del retículo cristalino y la formación de otra estructura<br />
(cuarzo-mulita) y posterior destrucción 40 . Una fusión completa aparece entre los 1400 y<br />
39 S.B. Hendricks, R.A. Nelson and L.T. Alexander. J. Amer. Chem. Soc. 62:1 (1940) 457.<br />
40 R.E.Grim and R.A. Rowland. Amer. Mineral 27 (1942) 746.<br />
81
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
1500ºC 41 .<br />
En la Fig.III.14, se presenta el ATD correspondiente a la muestra SerBcaP.<br />
T (ºC)<br />
1,0<br />
0,5<br />
0,0<br />
-0,5<br />
-1,0<br />
-1,5<br />
-2,0<br />
-2,5<br />
-3,0<br />
50<br />
125<br />
170<br />
ATD de SerBcaP<br />
645<br />
855<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900<br />
T (ºC)<br />
Fig.III.14 Análisis Térmico Diferencial de SerBcaP<br />
Un pico ancho con un máximo a 125ºC y un pequeño hombro a 170ºC, acusan la<br />
presencia de cationes monovalentes y divalentes.<br />
El pico endotérmico de deshidroxilación a 645ºC nos revela la presencia de Fe, y la<br />
ausencia de la posterior destrucción (generalmente pico exotérmico) nos sugiere un<br />
material dioctaédrico.<br />
La presencia del pico endotérmico a 855ºC, corresponde a la destrucción del retículo<br />
cristalino y a la formación de la estructura intermedia y posterior transformación, no bien<br />
detectada por el límite de temperatura alcanzado en el análisis.<br />
En la Tabla III.9 se resumen los datos obtenidos del ATD.<br />
Tabla III.9 Datos del ATD para SerBcaP<br />
Temperatura (ºC)<br />
Muestra Endotérmicos Exotérmicos<br />
SerBcaP 50, 125, 170, 645, 855 ---<br />
41 R.E.Grim and G.Kulbicki. Amer. Mineral 46:1 (1961) 329.<br />
82
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
3.6.2 Grupos superficiales<br />
En la Fig.III.15, se muestra el espectro de IR de la SerBcaP. Las vibraciones de tensión<br />
(estiramiento o “stretching”) de los puentes de H entre el agua interlaminar y los oxígenos<br />
superficiales, dan lugar a una banda entre 3400-3700 cm -1 , que se solapa con las<br />
vibraciones de tensión de los hidroxilos en la capa octaédrica 42 . Esta banda presenta<br />
variaciones debido a las sustituciones isomórficas, que ocasionan desplazamientos<br />
pertenecientes a vibraciones Al-OH-Al hacia frecuencias más bajas. Algunos autores 43<br />
utilizan esta zona de absorción para conocer la cuantía de dicha sustitución. Así,<br />
montmorillonitas saturadas con Mg o Ca y deshidratadas presentan picos de absorción<br />
correspondientes a las vibraciones de tensión de los OH a aproximadamente 3500 cm -1 , de<br />
donde suponen que los cationes interlaminares han migrado al hueco hexagonal de los<br />
tetraedros para coordinarse directamente con los OH 44 .<br />
% Transmitancia<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
3630<br />
3560<br />
3484<br />
3420<br />
3225<br />
2025<br />
SerBcaP, en KBr<br />
1635<br />
1440<br />
1140<br />
0<br />
4000 3500 3000 2500 2000 1500 1000 500<br />
Número de Onda (cm -1)<br />
Fig.III.15 Infrarrojo de SerBcaP en pastilla de KBr<br />
1030<br />
912<br />
828<br />
630<br />
525 460<br />
La banda a 3630 cm -1 puede atribuirse a la vibración de tensión del OH unido a<br />
aluminios octaédricos (Al2OH) con su carga negativa exacerbada por la proximidad de una<br />
42 P. Fenoll Hach-alí, J.L.Martín Vivaldi. Anales Real Soc. Esp. Físico-Qca. LXVI, Nº2 (1970) 141.<br />
43 C.Cracium. Spectroscopy Letter 17:10 (1984) 579.<br />
44 J.D.Russell and V.C.Farmer. Clay Miner. Bull. 5 (1964) 443-464.<br />
83
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
sustitución de Al por Mg 45 . El pico a 3560 cm -1 se asocia con la vibración de tensión de los<br />
OH en presencia de Fe 3+ en sitios octaédricos. Las vibraciones de tensión y de deformación<br />
de los H-O-H, correspondiente al agua molecular adsorbida, presentan bandas a 3410 cm -1<br />
y 1635 cm -1 respectivamente. Este último pico suele presentar un sobretono a 3250 cm -1 ,<br />
que aparece en el espectro de la Fig.III.15.<br />
Las distorsiones de la red asociadas a sustituciones de Al 3+ en sitios tetraédricos,<br />
también ensanchan las frecuencias de absorción correspondientes a las vibraciones de<br />
tensión de los OH y además producen un efecto de identificación de dos o más bandas,<br />
como en la Fig.III.15.<br />
Las frecuencias de deformación de los OH, son menos sensibles al entorno, por lo que<br />
dan una indicación más clara de la composición de los sitios octaédricos.<br />
Para el Al2OH aparece una banda de deformación a 918 cm -1 y para el MgAlOH cercano<br />
a los 840 cm -1 , la pequeña banda a 795 cm -1 se puede deber a vibraciones de deformación<br />
de los OH en MgFe 3+ OH, encontrado en otros filosilicatos 2:1 46 .<br />
Vibraciones de tensión en el plano de los Si-O-Si de la capa tetraédrica, dan<br />
generalmente fuertes bandas de absorción entre 970-1070 cm -1 que para el caso de la<br />
SerBcaP aparece a 1030 cm -1 . En cambio, las vibraciones de deformación ocasionan<br />
bandas débiles entre 400-500 cm -1 , siendo la zona de 490-540 cm -1 particularmente<br />
sensible, donde su frecuencia varía inversamente con el radio iónico de los cationes<br />
octaédricos 47 .<br />
Para números de onda menores que 600 cm -1 , se ha encontrado en la literatura un<br />
solapamiento de distintas vibraciones, tanto de cationes octaédricos, tetraédricos como de<br />
los OH.<br />
Las vibraciones que involucran a los cationes de cambio, presentan bandas a números de<br />
onda menores que 200 cm -1 , por lo que, del análisis, no podemos sacar información al<br />
respecto. La pequeña deformación producida a 1440 cm -1 revela la escasa presencia de<br />
carbonatos, y el pico a 460 cm -1 corresponde a sílice amorfa.<br />
La observación y análisis del espectro IR de la muestra SerBcaP concuerdan bastante<br />
bien con los obtenidos por otros autores, para materiales montmorilloníticos. Además, está<br />
de acuerdo con los análisis presentados en este capítulo para dicha muestra, incluyendo<br />
impurezas.<br />
45 J.D.Russell and A.R.Fraser. Clays and Clay Miner. 19 (1971) 55-59.<br />
46 J.D.Russell, V.C.Farmer and B.Velde. Miner. Mag. 37 (1970) 869-879.<br />
84
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
3.6.3 Acidez<br />
La acidez es una de las características que hacen a las arcillas aptas para catálisis, por lo<br />
que su análisis es necesario para una completa caracterización de las mismas. La<br />
determinación de la acidez comporta el conocimiento del número de centros y de su fuerza,<br />
y la naturaleza de los mismos. Para la determinación de los primeros se emplea la<br />
adsorción-desorción de NH3 y para estudiar la naturaleza de los centros, la espectroscopía<br />
IR de especies adsorbidas y, en particular, piridina.<br />
Número total de centros ácidos<br />
Las isotermas de adsorción-desorción de amoniaco, en la forma en que se han obtenido,<br />
permiten distinguir los dos tipos de adsorción (fisi o quimisorción) y el número de centros<br />
ácidos totales (como el número de miliequivalentes de NH3 quimisorbido). La desorción a<br />
temperatura creciente de la cantidad adsorbida da idea de la fuerza ácida de los centros.<br />
En la Fig.III.16 se muestra la gráfica obtenida del tratamiento completo de la SerBcaP<br />
realizado en el equipo de análisis termogravimétrico, destacando las distintas etapas del<br />
proceso.<br />
Cambios de peso (%)<br />
102<br />
101<br />
100<br />
99<br />
Adsorción a T.A.<br />
1,6 %<br />
Desorción a T.A.<br />
0,76 %<br />
(100ºC)<br />
(150ºC)<br />
0 50 100 150 200 250<br />
Tiempo(minutos)<br />
SerBcaP NH 3<br />
0,3%<br />
0%<br />
Desorción<br />
Térmica<br />
Fig.III.16 Proceso de adsorción-desorción de NH3 sobre SerBcaP por ATG<br />
En la primera parte se recogen los datos de la cantidad de NH3 adsorbido a temperatura<br />
47 V.Stubican and R.Roy. Am. Miner. 46 (1961) 32-51.<br />
85
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
ambiente y en un flujo de NH3/N2 en una relación 50/50cm 3 /min, como un aumento en<br />
peso de la muestra, conformándose así una isoterma de adsorción.<br />
En la segunda parte manteniendo la temperatura, cerrando el flujo de amoníaco y<br />
completando a 100cm 3 /min con N2, se desorben las moléculas de NH3 más débilmente<br />
adsorbidas (fisisorbidas), siendo el porcentaje residual correspondiente a moléculas<br />
quimisorbidas.<br />
En la tercera y última etapa, conservando la atmósfera anterior, se somete al sistema a<br />
un programa de temperaturas crecientes a 10ºC/min hasta alcanzar los 600ºC. La cantidad<br />
de moléculas retenidas en función de la temperatura indica la fuerza ácida del sólido.<br />
Cabe destacar que en la última etapa se produce una disminución de peso con respecto a<br />
la muestra original, que en principio no parece razonable. Este hecho fue notado en<br />
procesos de adsorción de NH3 en silicatos por Fripiat et al 48 . Mendioroz 49 comprobó que la<br />
adsorción de NH3 estaba asociada con la aparición de grupos SiOH, a partir de los<br />
siloxanos Si-O-Si superficiales, aumentando la posibilidad de condensación intramolecular<br />
en la desorción térmica y produciendo una pérdida adicional de agua. Este proceso se<br />
puede esquematizar, suponiendo la adsorción y posterior desorción de amoníaco en un<br />
determinado entorno, como en la Fig.III.17.<br />
OH<br />
Si<br />
Si<br />
O<br />
Desorción<br />
Térmica<br />
OH<br />
Si Si<br />
Fig.III.17 Esquema de la aparición de grupos SiO con la adsorción de NH3<br />
Suponiendo que la reacción de neutralización se produce molécula a molécula,<br />
independientemente del tipo de centro ácido, se puede calcular el número de centros ácidos<br />
por gramo como el número de moléculas de NH3 quimisorbidas por gramo de muestra<br />
(Tabla III.10). A partir de este dato y del área superficial obtenida por adsorción de N2<br />
OH<br />
+ NH3 Si<br />
48 J.J.Fripiat, M.C. Gastuche and C. Brichard. J. Phys. Chem. 66 (1962) 805.<br />
49 S. Mendioroz, <strong>Tesis</strong> Doctoral. Universidad de Madrid, 1974.<br />
Si<br />
O<br />
Si Si<br />
O<br />
Si<br />
OH<br />
Si<br />
+ NH3 + H2O<br />
NH2<br />
Si<br />
OH<br />
Si<br />
86
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
(SBET), se obtiene el número de centros ácidos por m 2 de muestra.<br />
En la Tabla III.10 se presenta los medidas cuantitativas obtenidas del análisis<br />
termogravimétrico.<br />
Tabla III.10 Datos por ATG de adsorción-desorción de NH3 sobre SerBcaP<br />
Muestra Adsorción Fisisorción Quimisorción Centros<br />
ácidos por g<br />
Centros ácidos<br />
por m 2<br />
SerBcaP 0,941 meq/g 0,494 meq/g 0,447 meq/g 2,69x 10 20 3,74x 10 18<br />
De la última etapa del proceso de análisis se obtiene información de la fuerza de enlace<br />
de la molécula básica con los centros ácidos del sólido. En la Fig.III.18. se representa la<br />
desorción del NH3 quimisorbido con la temperatura, de donde se puede concluir que los<br />
centros ácidos en la SerBcaP son “débiles”, ya que aproximadamente a 80ºC el número de<br />
moléculas quimisorbidas ha disminuido a la mitad y a 140ºC la desorción ha sido total.<br />
NH 3 quimisorbido (%)<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
0<br />
Desorción Térmica<br />
de NH 3 SerBcaP<br />
40 60 80 100 120 140<br />
Temperatura(ºC)<br />
Fig.III.18 Desorción Térmica del NH3 quimisorbido en la SerBcaP<br />
Naturaleza de los centros ácidos<br />
Para el estudio de la naturaleza de los centros ácidos Brönsted y Lewis (ByL), se suele<br />
emplear la espectroscopía IR-TF de la piridina adsorbida, siguiendo el protocolo señalado<br />
en el capítulo II.<br />
87
Capítulo III Selección y caracterización del material de partida<br />
En la Fig.III.19 se presenta la curva de IR de la SerBcaP desgasificada a 500ºC por 3 h y<br />
posteriormente puesta en contacto con piridina a temperatura ambiente y posteriormente<br />
desgasificada durante una hora a 200ºC.<br />
Ward 50 , estudiando la acidez de las zeolitas, hizo las siguientes asignaciones a las<br />
vibraciones asociadas a la piridina en este tipo de materiales.<br />
Centros Lewis: 1440, 1570 y 1617 cm -1<br />
Centros Brönsted: 1540 y 1638 cm -1<br />
Centros Lewis y Brönsted: 1485 cm -1<br />
Todas ellas están presentes en la muestra en estudio, siendo atribuibles los centros<br />
Brönsted a la protonización de -OH superficiales por presencia de grupos electronegativos<br />
en su entorno, o bien del agua interlaminar cercana a cationes de cambio, y los Lewis a<br />
imperfecciones superficiales o elementos octaédricos insuficientemente coordinados.<br />
Transmitancia (u.a.)<br />
1570<br />
1638<br />
1615<br />
SerBcaP<br />
1540<br />
1485 1440<br />
SerBcaP Py<br />
desg. 200ºC<br />
1800 1700 1600 1500 1400 1300 1200<br />
Nº de Onda (cm -1)<br />
Fig.III.19 Infrarrojo de SerBcaP autosoportada, desgasificada 500ºC y con piridina.<br />
50 J.W. Ward. J. Colloid. Interf. Sci. 28 (1968) 269-277.<br />
88
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
MATERIALES PILAREADOS<br />
En la presente memoria se pretende utilizar las arcillas pilareadas como soporte de<br />
catalizadores, a fin de constituir un material alternativo para las zeolitas, de las que<br />
diferirían en tamaño de poro y en la reactividad en ciertos entornos confinados. Lo que se<br />
pretende en este capítulo es, en primer lugar, introducir estos nuevos materiales, su punto<br />
de partida y métodos de síntesis y, en segundo, estudiar su viabilidad como soporte, dando<br />
una visión de sus propiedades texturales y estructurales y de la variación de las mismas<br />
ante medios agresivos, temperatura, acidez y basicidad que todo catalizador puede<br />
experimentar en alguno de los pasos de su preparación o utilización.<br />
1. Síntesis<br />
1.1. Introducción<br />
Las esmectitas, por su pequeño tamaño de partícula y sus propiedades de intercalación,<br />
presentan una apreciable área superficial para la adsorción de moléculas orgánicas y<br />
catálisis. Su probable rol catalítico ha sido ampliamente reconocido en la literatura 1 . Hace<br />
más de sesenta años, Eugene Houdry encontró que esmectitas modificadas ácidamente<br />
producían gasolinas con alto rendimiento cuando se usaban como catalizadores de craqueo<br />
de petróleo 2 . Estos catalizadores fueron extensamente utilizados en forma comercial, hasta<br />
que la irrupción de otros materiales más puros químicamente, más estables y selectivos<br />
(zeolitas, faujasitas), les hicieron pasar a un segundo plano.<br />
Los filosilicatos como la montmorillonita, poseen la propiedad de que los cationes<br />
interlaminares que compensan la deficiencia de carga de las láminas pueden ser<br />
intercambiados por casi cualquier especie catiónica. Estos cationes se hidratan fácilmente,<br />
produciendo un hinchamiento de la estructura, con la consecuente apertura de las láminas,<br />
y posibilitando el intercambio con cationes voluminosos. Así, cuando estos cationes de<br />
cambio son sustituidos por cationes grandes y de forma adecuada, las láminas se separan y<br />
la estructura se mantiene abierta. Los materiales así producidos, presentan un área<br />
superficial y un volumen de poros más desarrollados que la arcilla de partida,<br />
constituyendo lo que en la literatura se denomina arcillas intercaladas 3 .<br />
La existencia de arcillas naturales o sintéticas intercaladas, se conoce desde hace más de<br />
1 N. Lahav, D.White and S.Chang. Science 201 (1978) 67.<br />
2 L.B.Ryland, M.W.Tanale and J.N.Wilson. “Catalysis”, P.H.Emmett Ed., N.Y. 7:1 (1960).<br />
3 T.J.Pinnavia. Science, 220 N4595 (1983).<br />
90
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
cuarenta años 4,5 . La idea original de emplear las esmectitas como tamices moleculares fue<br />
introducida por Barrer 6 , con sus investigaciones acerca de la intercalación de<br />
tetraalquilamonio entre las láminas del silicato. Sin embargo, los estudios realizados tanto<br />
sobre estos materiales como sobre otros silicatos, utilizando como agentes intercalantes<br />
alquilamonio 7 , complejos organometálicos 8 e incluso, grandes moléculas enzimáticas 9 ,<br />
mostraron que se descomponían a temperaturas bajas (por debajo de 300ºC) lo que limitaba<br />
su aplicabilidad a los grandes procesos catalíticos. Así, se dirigió la investigación a la<br />
búsqueda de nuevas especies catiónicas capaces de desarrollar una estructura estable a altas<br />
temperaturas, permitiendo su empleo como material de intercalación.<br />
Los avances realizados en la química de la intercalación y en los procesos de hidrólisis<br />
de sales metálicas, condujeron a la utilización de cationes polihidroximetálicos. Trabajos<br />
pioneros en esta técnica fueron divulgados por Brindley 10 , Lahav 11 , Yamanaka 12 y<br />
Vaughan 13 entre otros.<br />
Los cationes comúnmente utilizados son polihidróxidos provenientes de iones metálicos<br />
que presentan en disolución unas características favorables para la hidrólisis. Una vez<br />
intercalados entre las láminas, se transforman por calcinación en óxidos que actúan como<br />
soportes moleculares (pilares), que impiden que las láminas se derrumben después de la<br />
deshidratación o calcinación (Fig.IV.1). Estos nuevos materiales se denominaron arcillas<br />
pilareadas o PILC (Pillared Interlayer Clays).<br />
Los “pilares” así obtenidos, no sólo proporcionan un mayor tamaño de poro (6-40 Å),<br />
sino que también son térmicamente más estables que las arcillas intercaladas originales. De<br />
esta manera, se presentan aptos para muchos procesos en catálisis heterogénea 14,15,16 .<br />
Los PILCs tienen cuando menos el 50% de su área superficial formada por poros<br />
menores de 30 Å. El resto está constituido por poros de mayor tamaño, provenientes de<br />
desagregaciones de las capas iniciales y/o por agregaciones al azar de las especies<br />
4 R.M.Barrer and N.Mackenzie. J.Phys. Chem. 58 (1954)560.<br />
5 A.Preisinger. Clays and Clay Minerals 6 (1957) 61.<br />
6 R.M.Barrer and D.L.MacLeod. Trans. Faraday Soc. 51 (1955) 1290.<br />
7 M.M.Mortland and D.M.Clementz. Clays and Clay Minerals 22 (1974) 223.<br />
8 M.F. Traylor, M.M.Mortland and T.J.Pinnavaia. Clays and Clay Minerals 26 (1978) 318.<br />
9 T.Kijima, J.Tanaka y M.Goto. Nature 45 (1984) 310.<br />
10 G.W.Brindley and R.E.Sempels. Clay Minerals 12 (1977) 229.<br />
11 N.Lahav, V.Shani and J.Shabtai. Clays and Clay Minerals 26 (1978) 107.<br />
12 S.Yamanaka and G.W. Brindley. Clays and Clay Minerals 26 (1978) 21.<br />
13 D.E.W.Vaughan, R.J.Lussier and J.S.Magee. U.S.Patent 4,176,090 (1979).<br />
14 K.Kikuchi, T.Matsuda, H.Fujiki and Y.Morita. Appl. Catal. 11 (1984) 331-346.<br />
15 M.L.Ocelli. J. Mol. Catal. 33:3 (1985) 371.<br />
16 R.Burch and C.J.Warburton. J.Catal. 97 (1986) 503.<br />
91
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
poliméricas 17 . Sus características porosas les dan categoría de tamiz molecular, sin<br />
embargo, a diferencia de las zeolitas, la porosidad tiene un carácter bi-dimensional,<br />
formando galerías 18 .<br />
capa 2:1<br />
+ + + +<br />
+ + + +<br />
Fig.IV.1. Esquema de las etapas de formación de un PILC<br />
El tamaño de poro de las arcillas pilareadas, depende del tamaño y del número de<br />
cationes pilareantes y puede ser controlado variando el método y las condiciones de<br />
preparación. Entre los factores que influyen en las propiedades físico-químicas (porosidad,<br />
estabilidad térmica, acidez residual) del material pilareado están : el tipo de hidroxicatión<br />
utilizado, la concentración del mismo, el pH del medio de reacción, la relación<br />
oligocatión/arcilla y los tratamientos térmicos del mismo 19,20,21 . En cualquier caso tienen la<br />
limitación impuesta por la capacidad de cambio catiónico de la arcilla.<br />
Como agentes pilareantes se han empleado principalmente iones metálicos provenientes<br />
de sales solubles en agua, siendo el Al y el Zr los más ampliamente estudiados 22 .<br />
Para este trabajo se realizó un estudio previo de pilaramiento con cationes de Al y Fe, y<br />
mezclas entre ellos, obteniendo mayor éxito con el primero, que es el empleado.<br />
En este capítulo se presenta la síntesis y caracterización de arcillas pilareadas con Al, así<br />
como su estabilidad frente a distintos tratamientos (térmicos, hidrotérmicos, ácidos y<br />
básicos) con el objeto de ser utilizados en catálisis.<br />
1.2 Preparación de la especie pilareante<br />
capa 2:1<br />
+ +<br />
Intercalación + +<br />
<br />
-nH2O<br />
capa 2:1<br />
La naturaleza de las especies de aluminio (III) en solución depende del método usado<br />
17<br />
E.E.W.Vaughan. Catalysis Today 2 (1988) 187.<br />
18<br />
G.M.Murali Dhar, M.Vittal and T.G.Narendra Bahe. “New Development in Zeolites Science and Technology”. Ed.<br />
Y.Murakami, A.Lijima and J.W.Ward, Tokyo. 28 (1986) 145.<br />
19<br />
K.Kikuchi, T.Matsuda, H.Fuyiki and Y.Morita. Appl. Catal. 11 (1984) 331-346.<br />
20<br />
S.L.Jones. Catalysis Today 2 (1988) 209.<br />
21<br />
G.J.J.Bartley. Catalysis Today 2 (1988) 233.<br />
22<br />
R.T.Yang and M.S.A.Baksh. Aiche Journal 37:5 (1991) 679-686.<br />
+<br />
+<br />
+<br />
+<br />
Hidroxicatión Pilar Poro<br />
92
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
para preparar dicha solución, de la relación OH/Al (es decir de la basicidad de la solución)<br />
y del envejecimiento posterior de la solución obtenida. La relación OH/Al determina el<br />
estado de hidrólisis. En términos generales el término de hidrólisis se refiere a las<br />
reacciones por las cuales soluciones acuosas de sales son convertidas en nuevas especies<br />
iónicas o precipitados, según la reacción simplificada 23 :<br />
z<br />
( xzy) <br />
xAl yOH Alx ( OH)<br />
y<br />
A menudo las especies obtenidas son polinucleares y existen en un rango limitado de<br />
pH, en el que pueden producirse.<br />
Aunque se ha publicado abundante bibliografía sobre la química del aluminio (III), sus<br />
conclusiones no son totalmente exactas, ya que existe una fuerte dependencia de los<br />
parámetros de preparación.<br />
Usualmente las soluciones de aluminio (III), por hidrólisis, son preparadas en una de las<br />
siguientes formas 24 :<br />
a) Adición de Na2CO3 a una solución de AlCl3.<br />
b) Adición de NaOH a una solución de AlCl3.<br />
c) Disolución de Al metálico con HCl.<br />
d) Electrólisis de una solución de AlCl3.<br />
El método (c) es la base de un proceso comercial para la síntesis de una sal de cloruro de<br />
aluminio denominado en la bibliografía como clorhidrato de aluminio (ACH, aluminium<br />
chlorohydrate) y comercialmente como Chlorohydrol o como Locrón , dependiendo de la<br />
empresa que lo comercializa.<br />
El método (b) es el más utilizado en la preparación de solución pilareante para la<br />
formación de PILCs de Al.<br />
En este trabajo utilizamos soluciones preparadas por el método (b) y con el producto<br />
comercial Locrón .<br />
Trabajos realizados por distintos autores 25 reconocieron la existencia de cationes<br />
polinucleares en dichas soluciones y propusieron una serie de diferentes especies<br />
polinucleares, sin precisiones exactas, de las sales básicas de Al obtenidas.<br />
Johanson 26 , por investigaciones de difracción de rayos X, identificó dos cationes en tales<br />
sales: (Al2(OH)2(H2O)8) 4+ y (Al13O4(OH)24(H2O)12) 7+ . La estructura de este último catión<br />
23 F.C. Baes and R.C. Mesmer. The Hydrolisis of Cations. John Wiley and Sons, N.Y. (1976).<br />
24 S.L. Jones. Catalysis Today 2 (1988) 209-217.<br />
25 J. Sterte. Catalysis Today 2 (1988) 219-231.<br />
93
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
es simétrica y formada por un Al coordinado tretaédricamente rodeado por 12 Al en<br />
coordinación octaédrica (Fig.IV.2), este tipo de estructura se denomina catión Keggin. Este<br />
catión ha sido propuesto por varios autores como el principal precursor pilareante en las<br />
soluciones usadas para la preparación de esmectitas pilareadas con Al. El tamaño de este<br />
catión es compatible con la distancia interlaminar de 0,8-1,0 nm usualmente observada en<br />
los productos pilareados. La existencia de estos cationes en solución fue comprobada por<br />
resonancia magnética nuclear (RMN) de 27 Al por Akitt et al 27 y ratificado por distintas<br />
técnicas por otros autores 28,29 .<br />
Fig.IV.2. Esquemas de la estructura del catión Keggin: (Al13O4(OH)24(H2O)12) 7+<br />
Investigaciones más recientes de la hidrólisis del Al 3+ por los grupos de Akitt 30 ,<br />
Bottero 31 , Schönherr 32 y Hsu 33 ayudaron a formar una idea relativamente clara de la<br />
constitución de las sales básicas de aluminio. En soluciones con basicidades (OH/Al)<br />
menores o iguales que 1,5 los cationes monoméricos son especies más abundantes<br />
disminuyendo su presencia con el aumento de la basicidad. El contenido de especies<br />
diméricas en soluciones de Al, depende fuertemente del método de preparación de las<br />
soluciones. En el caso de la hidrólisis de AlCl3 por adición de hidróxido de sodio o<br />
partiendo del clorhidrato de Al, el contenido de dímeros es muy bajo. El catión Al13 es<br />
encontrado en todas las soluciones de aluminio (III) independientemente del método de<br />
preparación, pero su cantidad relativa depende del método de preparación de las mismas.<br />
26 G. Johanson. Acta Chem. Scand. 16 (1962) 403.<br />
27 J.W. Akitt, N.N. Greenwood and G.D. Lester. Chem Commun. (1969) 988.<br />
28 W.V. Rausch and H.D. Ball. J. Chem. Phys. 40 (1964) 3391.<br />
29 R.E. Mesmer and C.F. Baes. Inorg. Chem 10 (1971) 2290.<br />
30 J.W. Akitt and J.M. Elders. J. Chem. Soc., Faraday Trans. (1985)1923.<br />
31 J.Y. Bottero, J.E. Poirier and F. Fiessinger. Prog. WAT. Tech. 12 (1980) 601.<br />
32 S. Schönherr and H.P. Frey. Z. Anorg. Allg. Chem. 452 (1979)167.<br />
H2O<br />
OH<br />
O<br />
Al<br />
94
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
En las Figuras IV.3 y IV.4 se muestran los resultados obtenidos por Schönherr para la<br />
distribución de Al en las diferentes especies en función de la basicidad, para soluciones<br />
preparadas por el método c (disolución de Al metálico con HCl, ACH) y por el método b<br />
(hidrólisis del Al3Cl por una base, BHAC) respectivamente.<br />
Los cationes poliméricos (Alpoli) representados en la figuras IV.3 y IV.4, son especies con<br />
pesos moleculares muchos más grande que el Al13. El mecanismo de formación de los Alpoli<br />
no está del todo claro, pero investigaciones hechas al respecto indican que en su formación<br />
aparecen, al menos parcialmente, especies de Al13 34 .<br />
% Al<br />
80<br />
70<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
Al 13<br />
Al mono<br />
Al poli<br />
0<br />
0,5 1,0 1,5 2,0 2,5<br />
OH/Al<br />
Fig.IV.3. Distribución de Al en función de la basicidad en solución ACH a temperatura ambiente<br />
La distribución de Al entre diferentes especies en tales soluciones es fuertemente<br />
dependiente de la temperatura de preparación y de los posteriores tratamientos<br />
hidrotérmicos. En la Fig.IV.5, del mismo trabajo de Schöenherr, se muestra esta<br />
distribución como función de la temperatura de preparación para soluciones de ACH para<br />
OH/Al=2,15. La formación de Al13 es favorecida por temperaturas de reacción<br />
relativamente bajas, mientras que las especies poliméricas son formadas a temperaturas<br />
elevadas.<br />
33 D.Z. Denney and Pa Ho Hsu. Clays and Clay Minerals 31 (1983) 22.<br />
34 J.W. Akitt and A. Farthing. J. Magn. Res. 32 (1978) 345.<br />
95
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
% Al<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al 13<br />
Al mono<br />
Al poli<br />
0<br />
0.0 0.5 1.0 1.5 2.0 2.5 3.0<br />
OH/Al<br />
Fig.IV.4. Distribución de Al en función de la basicidad en solución BHAC a temperatura ambiente<br />
% Al<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
Al mono<br />
Al poli<br />
Al 13<br />
0<br />
40 50 60 70 80 90 100<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.5. Distribución de Al en función de la temperatura para una solución ACH con OH/Al=2,15<br />
Bottero et al 35 y Bertsch et al 36 estudiaron las especies de Al 3+ formadas como resultado<br />
de la adición de una solución de NaOH a la solución de AlCl3. Sus trabajos enfatizan la<br />
35 J.Y. Bottero, J.M. Cases, F.Fiessinger and J.E. Poirer. J. Phys. Chem. 84 (1980) 2933.<br />
36 P.M. Bertsch, G.W. Thomas and R.I. Barnhisel. Soil. Sci. Soc. Am. J. 50 (1986) 825.<br />
96
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
sensibilidad de la distribución a las condiciones de preparación y en particular a la<br />
velocidad de incorporación de la base, que tiene que ser lenta y constante para evitar<br />
precipitados y maximizar la formación de Al13.<br />
Pero además, dada la importancia de la especie de aluminio formada en el paso de<br />
hidrólisis, en la estabilidad del material resultante, se han probado distintos métodos tanto<br />
para la formación del oligocatión, como para su posterior envejecimiento, a fin de mejorar<br />
la estabilidad del material resultante (PILC) sin que se haya llegado a ningún resultado<br />
concluyente.<br />
Vaughan y Lussier 37 establecieron como una de las condiciones importantes en los<br />
preparativos de una esmectita pilareada estable, que la temperatura de envejecimiento del<br />
oligocatión sea del orden de 60ºC. Pero en trabajos posteriores 38 , encontraron que un<br />
envejecimiento con reflujo, en soluciones de ACH, mejoraban la estabilidad del PILC.<br />
Tokarz y Shabtai 39 , utilizando soluciones BHAC, llegaron a conclusiones similares<br />
utilizando el reflujo como envejecimiento.<br />
Por otro lado, la capacidad de hinchamiento de las montmorillonitas depende<br />
fuertemente de la naturaleza de los cationes interlaminares. En el caso de las arcillas<br />
sódicas, en suspensiones acuosas muy diluidas (2% en peso) se<br />
produce un fenómeno de “gelificación” 40 .<br />
Se ha informado que el uso de soluciones muy diluidas de arcillas, antes de la<br />
incorporación del oligocatión, genera PILCs con grandes áreas superficiales. Pero, por otro<br />
lado se mostró que la agregación de pequeñas partículas de arcillas con estructura tactoide<br />
en suspensión es un prerequisito para la formación de especies pilareadas no regulares 41<br />
(estructura turbostrática, Fig.IV.6). Por lo que la concentración de la suspensión juega un<br />
papel importante.<br />
Además, dado que la introducción del oligocatión en la arcilla se produce por<br />
intercambio iónico, es preciso que la solución pilareante tenga una cantidad de equivalentes<br />
por gramo de arcilla superior a la capacidad de intercambio catiónico de la misma a fin de<br />
37 D.E.W. Vaughan and R.J. Lussier. Preprints 5 th Intern Conf. on Zeolites, Napoles, Italy (1980).<br />
38 D.E.W. Vaughan, R.J. Lussier and J.S. Magee. U.S. Patent 4,248,739 (1981).<br />
39 M. Tokarz and J. Shabtai. Clays and Clay Minerals, 33 (1985) 89.<br />
40 H. van Olphen, An Introduction to Clay Colloid Chemistry. Wiley, New York, 2 nd ed. 1977.<br />
41 J.J. Fripiat, J.M. Cases, M. François and M. Letellier. J.Coll. Interf.Sci., 89 (1982) 378.<br />
97
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
desplazar a la derecha el equilibrio de la reacción.<br />
Una vez introducido el catión pilareante y producida la floculación del material, se debe<br />
eliminar el sobrenadante y el exceso de sales para tener el correspondiente precursor en<br />
forma de barro. Ese barro debe ser secado previamente a su tratamiento.<br />
Varios trabajos se han presentado con respecto al posterior secado: Pinnavaia et al 42<br />
concluyeron que un secado en frío (liofilización), mantiene la estructura del material<br />
floculado (desagregados con poros>10Å), mientras que un secado en estufa, facilita el<br />
agregado “cara a cara”, por lo tanto mas ordenado y con menor tamaño de poro (6-9Å),<br />
pero más estable frente a tratamientos térmicos. En la Fig.IV.6 se presenta un esquema de<br />
las posibles orientaciones extremas de los materiales laminares, una ordenada, con<br />
agregados cara a cara y otra desordenada o delaminada con orientaciones cara a cara, cara a<br />
arista y arista a arista. Este esquema presentado por Ocelli 43 explica, además, la formación<br />
de los distintos tipos de poros, encontrados en los materiales pilareados.<br />
Fig.IV.6. Esquemas de las orientaciones de los materiales laminares.<br />
Dado que para conseguir el anclaje real de los pilares a las láminas de las arcillas es<br />
preciso una condensación adicional de los hidroxilos de ambos componentes a agua, es<br />
necesario someter los precursores al tratamiento térmico marcado por la naturaleza del<br />
material.<br />
De entre los métodos empleados para la síntesis de materiales pilareados se han<br />
seleccionado dos: el primero, convencional (apartado 1.2.1) pasa por la homoionización<br />
previa del material purificado para conseguir una superficie homogénea con centros de<br />
42 T.J. Pinnavaia, M.S.Tzou, S.D.Landau and R.H. Raythatha.<br />
43 M.L. Ocelli. Catalysis Today 2 (1988) 339.<br />
98
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
anclaje equivalentes ; el segundo, rápido (apartado 1.2.2), prescinde de la purificación e<br />
intercambio y, partiendo de concentraciones mucho más elevadas de la arcilla, incorpora<br />
como agente pilareante un catión tipo Keggin, (establecido en el comercio como<br />
Chlorhydrol o Locron). El método rápido es especialmente válido para muestras de arcilla<br />
de gran pureza, tal como la que nos ocupa.<br />
1.2.1 Procedimiento convencional<br />
Partiendo del material previamente purificado, según se señaló en el capítulo anterior, se<br />
siguen los pasos que a continuación se detallan:<br />
a) Homoionización: La montmorillonita seleccionada (SerBcaP) posee como cationes<br />
de cambio Na, Ca, K y Mg, en distintas posiciones entre las láminas. Para crear posiciones<br />
equivalentes para una homogeneidad en el cambio, se realiza un homoionización del<br />
material con un catión apropiado. Este nuevo catión tiene que tener una buena capacidad de<br />
hidratación, permitiendo la apertura de las láminas y la difusión al espacio interlaminar de<br />
la solución pilareante 44 .<br />
La elección del catión de homoionización no es único, por ejemplo Shabtai et al 45<br />
utilizaron La 3+ y Ce 3+ y Tennakoon et al 46 utilizaron Li + , Na + , Cs + <br />
y NH 4 . Sin embargo, la<br />
mayoría de los trabajos presentados en la literatura utilizan el sodio para homoionizar la<br />
arcilla y es el utilizado en este trabajo.<br />
La facilidad de cambio de los cationes intercambiables, en las arcillas, está dada por el<br />
siguiente orden 47<br />
Li + > Na + > K + > Rb + > Cs + > Mg 2+ > Ca 2+ = Sr 2+ = Ba 2+ > H3O +<br />
en el que queda claro que el Na + presenta una gran facilidad de cambio con respecto a otras<br />
especies catiónicas y, consecuentemente, con respecto a los cationes K, Ca y Mg presentes<br />
en la arcilla.<br />
El proceso de homoionización utilizado fue el siguiente: a la arcilla purificada<br />
(SerBcaP), se le añade una disolución 1M de NaCl en una relación 50 cc/g de muestra,<br />
agitando vigorosamente 15 min y dejando reposar 24 h. La solución sobrenadante es<br />
eliminada por succión y reemplazada por un volumen igual de solución 1M de NaCl. Esta<br />
44<br />
D.E.W. Vaughan. Catalysis Today 2 (1988) 187.<br />
45<br />
J.Shabtai, M.Rosell and M.Tokarz. Clays and Clay Minerals 32:2 (1984) 99.<br />
46<br />
D.T.B.Tennakoon, R.Schloge, T.Rayment, J.Klinowski, W.Jones and J.M.Thomas. Clays and Clay Minerals 18 (1983)<br />
357.<br />
47<br />
E.Gutierrez Ríos. “Bentonitas españolas”, CSIC, Madrid, (1949).<br />
99
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
operación se repite hasta lograr un intercambio total (4-5 veces), seguido por EAA de la<br />
solución extraída en cada uno de los pasos. El sólido obtenido se deja 24 h con agua<br />
desionizada, para mejorar el lavado. El sobrenadante se elimina y la suspensión restante se<br />
coloca en membranas de diálisis, sumergidas en agua de lavado que son cambiadas cada 24<br />
horas hasta que su conductividad sea cercana a la del agua desionizada (eliminación<br />
completa de cloruros). Como paso final la muestra se seca en estufa a 60ºC y<br />
posteriormente se pulveriza. De ahora en adelante se denominará SerBcaNa.<br />
b) Preparación de catión pilareante: En este caso se ha utilizado como agente<br />
pilareante un oligocatión tipo BHAC, a partir de una solución 0,2M de AlCl36H2O tratada<br />
con una solución 0,5 M de NaOH según descripción de varios autores 48,49 . Siguiendo<br />
investigaciones al respecto, se eligió una relación de basicidad de 2, siendo la sosa<br />
incorporada a la solución de AlCl3 gota a gota, para evitar la formación de precipitados,<br />
manteniendo esta última a una temperatura de 60ºC. Posteriormente se envejeció en<br />
condiciones de reflujo (95-100ºC) durante 48h. El pH de la solución obtenida es 4,1.<br />
c) Suspensión de la arcilla: Pruebas realizadas en el laboratorio nos llevaron a<br />
comprobar que un buen pilareado de las muestras homoiónicas se produce siguiendo los<br />
siguientes pasos: Se prepara una suspensión de 2,5% en peso de SerBcaNa en agua<br />
desionizada, dejándola en agitación durante aproximadamente 4 horas, hasta obtener una<br />
dispersión homogénea. Posteriormente se agrega agua desionizada hasta completar un<br />
volumen tal que el volumen del oligocatión a agregar sea la tercera parte del volumen total<br />
a obtener 50 (solución de arcilla mas solución pilareante). Esta suspensión se mantiene en<br />
agitación durante 15 minutos, hasta homogeneidad. De esta manera se evita la gelificación<br />
de la arcilla y la dispersión total en estructuras tactoides.<br />
d) Incorporación del oligocatión a la arcilla: Se eligió una relación Al/g de arcilla<br />
igual a 20meq/g de arcilla, que cumple con el requisito de ser superior a la capacidad de<br />
intercambio catiónico de la arcilla sea cual fuere el catión de Al que se introduzca.<br />
La incorporación del oligocatión se realizó gota a gota, en forma lenta y constante, sobre<br />
la suspensión de arcilla en agitación vigorosa. Al finalizar se dejó 15 minutos más en<br />
agitación y después en reposo por 16 horas. En este período se produce una floculación del<br />
material y por succión se elimina el sobrenadante y se coloca en membranas de diálisis<br />
lavando sucesivas veces hasta la eliminación total de los cloruros. La muestra resultante se<br />
48 J.Sterte and J.Shabtai. Clays and Clay Minerals 35:6 (1987) 429.<br />
49 C.Pesquera, F.González, I.Benito, S.Mendioroz and J.Pajares. J.Applied Catalysis 69 (1991) 97.<br />
100
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
seca en estufa a 60ºC en atmósfera de aire estático, denominándose Al s/c.<br />
1.2.2 Método rápido<br />
Debido en parte a los grandes volúmenes que se utilizan en la preparación de los PILCs,<br />
se ha considerado como un proceso poco económico, con respecto al número de pasos<br />
involucrados en la síntesis y al tiempo empleado. Pensando en aplicaciones industriales es<br />
preciso abaratar los costos, así que se está realizando un esfuerzo en mejorar el proceso de<br />
síntesis para la obtención de productos en cantidad y calidad. Vaughan 51 , comunicó en<br />
1988 que había obtenido PILCs utilizando suspensiones de arcillas con un 40% en peso,<br />
pero no dio mayores detalles. En notas posteriores, Schoonheydt y Leeman 52 presentaron la<br />
preparación de arcillas pilareadas a partir de concentraciones del 10% en peso de arcilla,<br />
Molina et al 53 utilizaron suspensiones del 40% de montmorillonita y Molinard et al 54<br />
describen el pilareamiento de una montmorillonita sódica mediante la adición suave y<br />
cuidadosa de la arcilla en polvo a la solución pilareante de Al. Recientemente, Storaro et<br />
al 55 basados en la renuencia de las montmorillonitas cálcicas a formar geles, prepararon<br />
PILCs a partir de suspensiones concentradas ( 50% en peso) de arcilla ricas en Ca en<br />
soluciones acuosas y de acetona.<br />
Con el fin de incursionar en las tendencias actuales de minimizar el tiempo de<br />
preparación y a modo de comparación con la muestra Al500, se ha puesto a punto un<br />
método de preparación de arcillas pilareadas con Al siguiendo un “método rápido”, que<br />
consta de los pasos siguientes:<br />
La arcilla natural (SerBca), previa pulverización gruesa, se tamizó con una malla de 0,4<br />
mm de luz, dejando de lado el material más duro. Debido a que se trata, en gran parte, de<br />
una montmorillonita rica en Ca, se utilizó en su forma natural. Con este material de partida<br />
se preparó una suspensión concentrada (50% en peso) de arcilla con acetona al 5% de H2O.<br />
La solución pilareante, siempre con la idea de minimizar el tiempo, se preparó a partir<br />
del producto Locron P comercializado por Hoechst, con una concentración en agua del<br />
40% en peso (pH=3.98) y una relación Al/g de arcilla de 20 meq/g de arcilla.<br />
Las características químicas del producto Locron P suministradas por Hoechst, son las<br />
50 M.R. Sun Kou. <strong>Tesis</strong> Doctoral, Universidad Complutense de Madrid (1994).<br />
51 D.E.W. Vaughan. Catal. Today 2 (1988).<br />
52 R.A. Schoonheydt and H. Leeman. Clay Miner. 27 (1992) 249.<br />
53 R. Molina, A. Viera-Coelho and G. Poncelet. Clays and Clay Min. 40 (1992) 480.<br />
54 A. Molinard, N. Maes, K.K. Peeters and E.F. Vansant. Separation Technology, Elsevier, Amsterdam (1994).<br />
55 L. Storaro, M. Lenarda, R. Ganzerla and A. Rinaldi. Microporous Materials 6 (1996) 55-63.<br />
101
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
siguientes :<br />
Fórmula química: Al2(OH)5Cl . 2-3 H2O<br />
Oxido de Aluminio: 47 1%<br />
Cloro: 16,3 0,5%<br />
Concentración máxima<br />
soluble en H2O: 57% en peso<br />
La solución pilareante, una vez preparada, fue incorporada a la suspensión de arcilla en<br />
agitación gota a gota, en forma lenta y constante. Terminada la incorporación, se dejó el<br />
preparado en reposo 24 horas, se eliminó el sobrenadante por succión, se lavó 4 veces por<br />
centrifugado y se colocó en membranas de diálisis para la eliminación de cloruros. La<br />
muestra se secó en estufa a 60ºC en atmósfera de aire estático y se denominó Loc s/c.<br />
1.2.3 Anclaje de las especies pilareantes<br />
Una vez realizado el intercambio iónico, en el que se produce la substitución total o<br />
parcial de los cationes de cambio por la especie pilareante, el material es estabilizado por<br />
calentamiento para producir en entrelazado con los -OH - de la arcilla. Normalmente se<br />
afirma que la calcinación de los pilares conduce a la formación de Al2O3. Es difícil<br />
admitirlo a partir de cationes Al13, a no ser que hubiera movilidad de los mismos en los<br />
primeros pasos del calentamiento. Probablemente habrá una mezcla de óxidos que<br />
mantienen aproximadamente la estructura del catión de partida. El hecho es que el paso<br />
final en la síntesis de los materiales pilareados requiere el tratamiento térmico de los<br />
precursores intercambiados.<br />
Para conocer la temperatura a la que se produce el entrelazado con la red de la arcilla, se<br />
ha aplicado el análisis térmico gravimétrico y diferencial a los precursores intercambiados:<br />
Al s/c, Loc s/c y al material homoiónico, con el fin de estudiar los cambios.<br />
Análisis termogravimétrico (ATG)<br />
En la Fig.IV.7 se muestra el termograma correspondiente a la muestra SerBcaNa, que<br />
presenta características similares a la del material purificado SerBcaP (Fig.III.13). Presenta<br />
claramente dos saltos, el primero correspondiente a la pérdida del agua de hidratación<br />
(agua fisisorbida e interlaminar) y el segundo debido a la deshidroxilación de la estructura<br />
del silicato. Esto se evidencia en la derivada de la curva.<br />
102
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Pérdida de peso (%)<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
SerBcaNa<br />
derivada<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.7. Termograma en aire de SerBcaNa<br />
Se observa un ligero desplazamiento de la temperatura de estabilización del primer salto<br />
(~150ºC) con respecto a la muestra purificada (~200ºC), lo cual es atribuido a la sustitución<br />
por Na + de los cationes de cambio. Como es sabido, la capacidad de hidratación de un<br />
catión determinado, depende de sus dimensiones y de su carga eléctrica, relacionadas entre<br />
sí por el potencial iónico Ze/r 2 . De este modo el sodio, debido a su menor carga y al radio<br />
iónico relativamente grande que posee, enlaza más débilmente al agua de hidratación,<br />
resultando las pérdidas a temperatura más baja.<br />
En la tabla IV.1 se reúnen los datos extraídos del termograma correspondiente a la<br />
SerBcaNa en los mismos rangos escogidos para la SerBcaP (Tabla III.5).<br />
Tabla IV.1 SerBcaNa: pérdida de peso con la temperatura<br />
Asignación de pérdida T(ºC) % Pérdida Peso<br />
Agua fisisorbida 20-100 3,12<br />
Agua interlaminar 100-400 5,19<br />
Agua reticular >400 4,41<br />
Total 12,72<br />
En las Fig.IV.8 y IV.9 se incluyen los termogramas de los materiales Al s/c y Loc s/c<br />
respectivamente.<br />
103
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Pérdida de peso (%)<br />
Pérdida de Peso (%)<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
80<br />
75<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
80<br />
Als/c<br />
derivada<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.8. TG y DTG correspondientes a la muestra Al s/c<br />
Loc s/c<br />
derivada<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.9. TG y DTG correspondientes a la muestra Loc s/c<br />
Con respecto al termograma correspondiente a la SerBcaNa, es de destacar en ambas<br />
muestras una pérdida continua del agua de composición, lo que denota una distribución<br />
también continua de las energías de enlace desde la superficie externa hasta el agua de<br />
104
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
constitución pasando por el microespacio generado por el pilareado.<br />
Las pérdidas de ambos materiales hasta ~100ºC (Fig.IV.10), correspondientes al agua<br />
fisisorbida, son iguales. A partir de allí disminuye la pérdida en la Loc s/c frente a la Al<br />
s/c, probablemente debido a un menor contenido de agua interlaminar, como consecuencia<br />
del método de síntesis. A partir de los 250ºC las pendientes de los termogramas divergen<br />
ligeramente hasta ~750ºC denotando una mayor incorporación de Al en la Al s/c o quizá la<br />
presencia de oligocationes diferentes del catión Keggin propuesto.<br />
Pérdida de Peso (%)<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
80<br />
Al s/c<br />
Loc s/c<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.10. Comparación de los termogramas de Al s/c y Loc s/c<br />
En cualquier caso, las pérdidas corresponden a la deshidratación del catión a partir,<br />
primero, de los -OH constitucionales 56 y después de su condensación con los -OH de la<br />
arcilla contribuyendo al anclaje y estabilización del pilar. En ambas muestras es de destacar<br />
la desaparición del escalón visible en la SerBcaNa, alrededor de 600ºC, atribuido a la<br />
pérdida de -OH estructurales. Ello está relacionado con el proceso de anclaje del<br />
oligocatión a la arcilla antes mencionado, pero también con la degradación de esta última,<br />
ya que la deshidratación de los oligocationes conduce a la producción de protones según:<br />
13 4 24 2 12<br />
+ +<br />
7<br />
(7-x) <br />
Al O (OH) (H O) Al O (OH) (H O) xH IV.1<br />
13 4 24+x 2 12-x<br />
56 D.E.Vaughan and R.J.Lussier. “Preparation of Molecular Series Based on Pillared Interlayer Clays”, Proc. 5 th Int.<br />
105
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
que pueden atacar a la capa octaédrica, disminuyendo la fuerza de los enlaces. Esta<br />
reacción se produce en los primeros momentos del tratamiento térmico 57 por efecto de los<br />
grupos estructurales de la arcilla, que actúan como base Brönsted para dirigir la reacción a<br />
la derecha, especialmente en las arcillas dioctaédricas 58 , como es el caso.<br />
En la tabla IV.2, se resumen las pérdidas de peso asociadas a los distintos tipos de agua<br />
presentes.<br />
Tabla IV.2 Efecto de la temperatura en las muestras Al s/c y Loc s/c<br />
Asignación de pérdidas Rango de T (ºC) % Pérdida de peso<br />
Al s/c Loc s/c<br />
Agua fisisorbida 20 - 100 3,68 3,68<br />
Agua interlaminar + 100 - 250<br />
9,82<br />
7,19<br />
agua asociada de pilar 250 - 500<br />
3,92<br />
3,84<br />
Agua reticular > 500 3,97 3,84<br />
Total 20 - 1000 21,39 18,51<br />
Según Ocelli y Tindwa 59 los pilares empiezan a descomponerse por encima de 540ºC.<br />
Los resultados obtenidos por termogravimetría han sido confirmados por ATD. En la<br />
Fig.IV.11 se presentan las curvas obtenidas por ATD para las muestras SerBcaNa, Als/c y<br />
Locs/c.<br />
La curva correspondiente a la SerBcaNa aparece muy similar a la SerBcaP con la<br />
diferencia que no presenta el ligero hombro a 170ºC. Esto podría deberse a que los cationes<br />
de cambio mayoritarios después de la homoionización son monovalentes y éstos presentan<br />
un pico único entre 50 y 200ºC.<br />
Por efecto del pilareado, el pico endotérmico correspondiente a la pérdida de agua<br />
fisisorbida es más ancho que en la SerBcaNa, indicando la fuerte solvatación de los<br />
hidroxicationes pilareantes, además de la presencia de cationes polivalentes.<br />
La deshidroxilación que aparece en la SerBcaNa y SerBcaP a 645ºC correspondiente a<br />
la pérdida de hidroxilos de composición, ha disminuido en los materiales intercalados,<br />
apareciendo, por el contrario, otros dos picos a temperaturas más bajas, correspondiente el<br />
primero de ellos a la deshidratación del oligocatión, y el segundo a la pérdida de agua de<br />
Conf. Zeolites, V.C.Rees, Heyden, Naples, London (1980) 24.<br />
57 J.F.Lambert y G.Poncelet. Topics in Catalysis 4 (1997) 43-56.<br />
58 D.T.B.Tennakon, W.Jones and J.M.Thomas. J. Chem. Soc. Faraday Trans. 182 (1986) 3081.<br />
59 M.L.Ocelli and R.M.Tindwa. Clays and Clay Min. 31:1 (1983) 22.<br />
106
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
composición de la arcilla alrededor de las posiciones octaédricas ocupadas por los cationes<br />
sustituyentes que determinan la posición del oligocatión en la red. Según se deduce de las<br />
curvas, los pilares de Al, estarían totalmente “anclados” entre los 300-400ºC.<br />
La forma del pico endo-exotérmico, después de los 850ºC aparece más pronunciado en<br />
los materiales intercalados, que según Ocelli 60 es debido a la formación de cristobalita,<br />
cuarzo y albita.<br />
T (u.a.)<br />
135<br />
375<br />
475<br />
645<br />
625<br />
855<br />
895<br />
885<br />
925<br />
915<br />
SerBcaNa<br />
Loc s/c<br />
Als/c<br />
500 1000 1500<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.11. ATD de SerBcaNa, Al s/c y Loc s/c<br />
En la tabla IV.3 se resumen los datos más notorios del análisis térmico diferencial.<br />
Tabla IV.3 Naturaleza y posición de los picos térmicos de SerBcaNa, Al s/c y Loc s/c<br />
Muestra Temperaturas (ºC)<br />
Endotérmicos Exotérmicos<br />
SerBcaNa 130, 250, 645, 855 ~<br />
Al s/c 135, 375, 475, 625, 895 925<br />
60 M.L.Ocelli. Journal of Mol. Catal. 35 (1986) 377.<br />
107
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Loc s/c 135, 375, 475, 625, 885 915<br />
Como consecuencia de los análisis térmicos realizados para el anclaje de los “pilares”,<br />
las muestras se calcinaron a 500ºC durante 2 h en mufla con atmósfera de aire estático. El<br />
PILC resultante de la Al s/c se denominó Al500 y el correspondiente a la Loc s/c, Loc500.<br />
Los contenidos de aluminio en forma de Al2O3 por EAA son: 26,9% para Al500 y 29,4%<br />
para Loc500, dando indicios de pilares distintos.<br />
2. Caracterización<br />
2.1 Propiedades estructurales<br />
En la Figura IV.12, se presentan los difractogramas obtenidos para las muestras en los<br />
distintos estadios de preparación, SerBcaP, SerBcaNa, precursor sin calcinar, Al s/c y, el<br />
material pilareado, Al500.<br />
Intensidad de R-X (u.a.)<br />
SerBcaP<br />
SerBcaNa<br />
Als/c<br />
Al500<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
Fig.IV.12. Difractogramas de R-X de la serie de muestras hasta Al500<br />
De las dos primeras curvas se deduce que el proceso de homoionización, no ha afectado<br />
a las características estructurales del material de partida, si bien, aunque apenas perceptible,<br />
se puede observar una mejor definición del espaciado basal en la SerBcaNa (pico más<br />
agudo), objetivo de la homoionización.<br />
La incorporación del oligocatión de aluminio (Al s/c) conduce a un aumento de la<br />
distancia entre los planos d001, si bien con poca intensidad, pero una vez aplicado el<br />
2<br />
108
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
tratamiento térmico a 500ºC, aparece un espaciado basal definido con un gran aumento de<br />
la intensidad con respecto a la difracción de los otros planos (Tabla IV.4). El resto de la<br />
estructura no queda fuertemente afectada, aunque al aumentar la dimensión del espaciado<br />
basal de la montmorillonita, la intensidad relativa del feldespato disminuye.<br />
En la Tabla IV.4, se muestran las distancias d001 y la relación entre las intensidades de<br />
difracción de los planos 001 y 020 (correspondiente al segundo pico mejor identificado de<br />
la Fig.IV.12) obtenidas de los difractogramas.<br />
Tabla IV.4 Variación del espaciado basal de la muestras intermedias al PILC<br />
Muestras SerBcaNa Al s/c Al500<br />
d001 (Å) 12.4 19 18.8<br />
I001/I020 1.75 1.38 4.5<br />
En la Fig.IV.13, se presenta el difractograma del PILC obtenido a partir de la muestra<br />
sin purificar y con Locrón (Loc500), comparado con el de la Al500.<br />
Intensidad de Rayos-X (u.a.)<br />
<br />
18.8 Å<br />
19 Å<br />
Al500<br />
Loc500<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Fig.IV.13. DRX de AL500 y Loc500<br />
De dicha figura se distingue un aumento del espaciado d001 en la Loc500 con respecto a<br />
la muestra de partida (en este caso, SerBca), lo que demuestra que se ha obtenido un<br />
material pilareado.<br />
De la comparación con la muestra Al500, se destaca que el proceso de purificación da<br />
como resultado un material como mayor intensidad en el espaciado basal, lo que<br />
corresponde a una mayor población de arcilla pilareada en la Al500 con respecto a la<br />
109
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Loc500. Esto se puede deber a que las impurezas presentes (cuarzo principalmente),<br />
disminuyan la capacidad de intercambio de la arcilla, además, el catión de cambio natural<br />
de la arcilla es el Ca ++ , que es menos fácilmente cambiable que el Na + .<br />
2.2 Propiedades Texturales<br />
El estudio de la textura se realizó por adsorción-desorción de N2, dándonos información<br />
sobre las variaciones de la porosidad producida por el proceso de pilareado.<br />
En la Fig.IV.14 están representadas las isotermas obtenidas para la SerBcaNa y la<br />
Al500, y su comparación con el material de partida, SerBcaP.<br />
Volumen Adsorbido (cc / g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
2.2.1 Área superficial<br />
Al 500<br />
SerBca Na<br />
SerBcaP<br />
0<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0 1,1<br />
P/Po<br />
Fig.IV.14. Isotermas de adsorción-desorción de N2 de SerBcaP, SerBcaNa y Al500<br />
Como se observa en las isotermas respectivas, por el método de homoionización y<br />
posterior pilareado, lo que principalmente se obtiene es un aumento en el área superficial,<br />
que en principio podría deberse a la generación de microporos. Además, el paralelismo de<br />
las ramas de adsorción-desorción, destaca que el material pilareado mantiene la estructura<br />
laminar del material de partida sin que se hayan producido interferencias con el material<br />
pilareante.<br />
110
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
En la Fig.IV.15 se presenta la isoterma de la muestra Loc500 y su comparación con la<br />
Al500. De ella se deduce que el área superficial de la Loc500 es del mismo orden que la de<br />
la Al500 y que la contribución al volumen total de poros debe ser mayor en la Al500,<br />
donde aparecen mesoporos mayores (ciclo de histéresis).<br />
Volumen Adsorbido (cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al 500<br />
Loc500<br />
0<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0 1,1<br />
P/Po<br />
Fig.IV.15. Isotermas de Adsorción-Desorción de N2 de Loc500 en comparación con Al500<br />
En la Tabla IV.5 se presentan los resultados obtenidos por esta técnica, que confirman lo<br />
observado cualitativamente en las isotermas.<br />
Tabla IV.5 Propiedades texturales de las muestras. SBET<br />
Muestra SBET (m 2 /g) CBET Vp (P/Po=0.98) (cc/g)<br />
SerBcaP 72 289 0.080<br />
SerBcaNa 120 491 0.099<br />
Al500 336 818 0.199<br />
Loc500 343 785 0.177<br />
2.2.2 Porosidad<br />
a) Microporosidad: Para el análisis de la distribución de poros se ha tenido en cuenta,<br />
en primer lugar, los criterios planteados en el capítulo III para la zona de microporos.<br />
El estudio de la microporosidad comporta la definición del espesor de la capa t<br />
adsorbida y ello, la selección de t. En el caso de la SerBcaNa, el valor de t dado por<br />
Harkins y Jura a P/Po=0,02 (tH&J=2,85) se presenta adecuado puesto que cumple el criterio<br />
primero de dar un valor inferior a la relación 15,47 veces el cociente entre el volumen<br />
111
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
adsorbido al primer punto considerado (P/Po=0,02) y la superficie BET (t1=3,2) de la<br />
muestra homoiónica. Se quiere destacar que dicho valor corresponde a la curva 2 y no a la<br />
1 que fuera de esperar siguiendo los criterios de Lecloux y Pirard y el valor de la CBET.<br />
Para la muestra SerBcaP, como se vio en el capítulo anterior, el valor adecuado de t<br />
también está dado por Harkins y Jura, o por la curva 2 de Lecloux y Pirard.<br />
Para las muestras pilareadas con Al, los valores iniciales del espesor t, según los<br />
criterios tienen que ser:<br />
obtenidos para P/P0 = 0,02.<br />
t1(Al500) 3,49Å<br />
t1(Loc500) 3,38Å<br />
En la tabla IV.6 se dan los valores para la misma presión relativa con las distintas curvas<br />
standard propuestas en bibliografía.<br />
Tabla IV.6: Valores t según distintos autores para P/P0 = 0,02<br />
1(L&P) 2(L&P) 3(L&P) 4(L&P) 5(L&P) H&J Halsey<br />
t(Å) 3,44 2,85 2,1 1,77 1,43 2,84 3,63<br />
De la tabla IV.6 y los valores t1 de los PILCs, según los criterios, obtenemos que las<br />
curvas más adecuadas para el análisis de la microporosidad son la 1 para la Al500 y la 2<br />
para la Loc500.<br />
En la Fig.IV.16 se muestra la curvas t para la SerBcaNa y Al500 y en la Fig.IV.17 las<br />
correspondientes a la Loc500, donde sólo se representan las correspondientes a L&P: 1,<br />
2 y 3, verificando que se cumple que la extrapolación a t=0 es Vads=0.<br />
112
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Vads (cc/g)<br />
Vads (cc/g)<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
0<br />
110<br />
100<br />
90<br />
80<br />
70<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
0<br />
Al500<br />
SerBcaNa<br />
n1 L&P<br />
n2 L&P<br />
n3 L&P<br />
0 1 2 3 4 5 6 7<br />
t (Å)<br />
Fig.IV.16.Curvas t a partir de 1, 2 y 3 de L&P para SerBcaNa y Al500<br />
Loc500<br />
n1 L&P<br />
n2 L&P<br />
n3 L&P<br />
0 1 2 3 4 5 6 7<br />
t (Å)<br />
Fig.IV.17. Curvas t a partir de 1, 2 y 3 de L&P para Loc500<br />
En resumen , las curvas standard utilizadas en cada caso para analizar la<br />
microporosidad son:<br />
Para SerBcaP (capítulo III) y SerBcaNa = curva t de H&J o 2 de L&P<br />
113
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Para Al500 = curva 1 de Lecloux y Pirard<br />
Para Loc500 = curva t de H&J o 2 de L&P<br />
En las Fig.IV.18 y IV.19 se muestran las curvas t elegidas para cada caso, con el ajuste<br />
lineal correspondiente, para el cálculo de datos de microporosidad.<br />
Vads (cc/g)<br />
Vads. (cc/g)<br />
130<br />
120<br />
110<br />
100<br />
90<br />
80<br />
70<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
120<br />
110<br />
100<br />
90<br />
80<br />
70<br />
60<br />
50<br />
0<br />
Y=59,04594+7,31729 X<br />
Y =9,8225+5,6268 X<br />
Al500<br />
SeBcaNa<br />
n1 L&P<br />
n2 L&P<br />
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
t (Å)<br />
Fig.IV.18. SerBcaNa y Al500: curvas t<br />
Y =61.92292+6.54765 X<br />
Loc500<br />
t H&J=n2<br />
0 1 2 3 4 5 6 7 8<br />
t (Å)<br />
Fig. IV.19. Loc500: curva t<br />
114
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Las variaciones de las distintas curvas standard para la obtención del valor de t, se<br />
presentan hasta valores en la presión relativa cercanos a 0,4. A partir de allí las curvas<br />
coinciden aproximadamente.<br />
En la tabla IV.7 se presentan los valores obtenidos del volumen de microporos (Vp), la<br />
superficie externa (St) y, como consecuencia, el área de microporos (Ap= SBET - St) de las<br />
muestras analizadas, incluyendo la SerBcaP como comparación.<br />
Tabla IV.7 Datos de microporosidad a partir de las curvas t<br />
Muestra Vp(cm 3 /g) Ap(m 2 /g) St(m 2 /g)<br />
SerBcaP 0.009 20 52<br />
SerBcaNa 0.015 33 87<br />
Al500 0,091 223 113<br />
Loc500 0,096 243 101<br />
b) Mesoporosidad: Por la técnica de adsorción de nitrógeno se obtiene la distribución de<br />
poros de la Fig.IV.20, utilizando el método BJH y el valor de t dado por H&J. En ella se<br />
observa cómo afecta a la distribución de poros el proceso de homoionización, produciendo<br />
un reordenamiento de los mismos hacia poros de menor tamaño. Esto se puede deber a que<br />
la homogeneidad de los cationes de cambio haya permitido un ordenamiento “cara a cara”<br />
de la muestra después de secada (Fig.IV.6).<br />
dV/dlogD<br />
0,20<br />
0,15<br />
0,10<br />
0,05<br />
0,00<br />
SerBcaNa<br />
SerBcaP<br />
10 100 1000<br />
Diámetro de poros (Å)<br />
Fig.IV.20. Distribución de meso y microporos. Comparación de SerBcaNa y SerBcaP<br />
115
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Los diámetros medios obtenidos de dicha distribución son:<br />
dBJH(SerBcaP) = 97 Å<br />
dBJH(SerBcaNa) = 57 Å<br />
En la Fig.IV.21, se muestra la distribución de poros obtenida de la rama de adsorción de<br />
N2 para todos los materiales pilareados. En dicha figura, se aprecia el efecto de emplear dos<br />
t diferentes en el estudio de la distribución de poros, donde se representa la modificación<br />
producida a la Al500 en la zona correspondiente a presiones relativas menores que 0,4.<br />
De la figura se observa que hay una distribución continua de tamaños de poro con un<br />
predominio de microporos, mientras que en la Al500 hay una zona importante de<br />
mesoporos que eleva fuertemente el tamaño medio de los mismos.<br />
dV/dlogD<br />
0.15<br />
0.10<br />
0.05<br />
0.00<br />
10 100 1000<br />
Diámetro(Å)<br />
Al500 H&J<br />
Al500 L&P<br />
Loc500 H&J<br />
Fig.IV.21. Distribución de meso y microporos. Comparación de muestras PILC<br />
Los diámetros medios de poros por el método BJH son:<br />
dBJH(Al500) = 63Å<br />
dBJH(Loc500) = 46Å<br />
c) Macroporosidad: Mediante la técnica de intrusión de mercurio se evaluó la zona de<br />
macroporos. En la Fig.IV.22 se presentan las curvas de intrusión de Hg para las muestras<br />
Al500 y Loc500. En ambas curvas se puede apreciar un aumento importante en el volumen<br />
acumulado, ya a bajas presiones. Para la Al500 la pendiente, que comienza a<br />
aproximadamente 0,06 MPa, correspondiente a ultramacroporos del orden de 10-30m, es<br />
116
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
menos pronunciada que en la Loc500. La muestra Loc500 presenta un aumento de volumen<br />
muy importante a presiones del orden de 0,1 MPa, correspondiente a poros entre 8-10 m.<br />
V cum (cc/g)<br />
dV/dlogD<br />
0,8<br />
0,6<br />
0,4<br />
0,2<br />
Loc500<br />
Al500<br />
0,0<br />
0,01 0,1 1 10 100<br />
0,8<br />
0,7<br />
0,6<br />
0,5<br />
0,4<br />
0,3<br />
0,2<br />
0,1<br />
0,0<br />
Presión (MPa)<br />
Fig.IV.22. Curvas de intrusión de Hg para Al500 y Loc500<br />
Loc500<br />
Al500<br />
100 1000 10000 100000 1000000<br />
Diámetro de Poros (Å)<br />
Fig.IV.23. Distribución de poros por intrusión de Hg para Al500 y Loc500<br />
117
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
En la Fig.IV.23, se muestra la distribución de poros en función de sus diámetros.<br />
Aparentemente por debajo de 3000Å hay muy poca diferencia, mientras que por encima<br />
hay una zona entre 0,4 y 20m mucho más desarrollada en la Loc500 que quizá podría<br />
relacionarse con el tamaño de partícula y con una formación de agregados mayores en la<br />
Al500. En esta última, las partículas iniciales eran menores de 2m y en la Loc500, las<br />
correspondientes al tamaño de malla utilizado (400 m).<br />
Los poros observados por esta técnica parecen ser intersticiales entre partículas<br />
primarias (mesoporos) o secundarias (macroporos).<br />
Los resultados obtenidos para todo el rango de poros que cubre la técnica son:<br />
VPHg(cc/g) SHg(m 2 /g) rmHg(m)<br />
Al500 0,393 8,7 5,7<br />
Loc500 0,65 7,1 4,1<br />
En definitiva, las propiedades texturales de los materiales pilareados en todo el rango de<br />
porosidad son (tabla IV.8):<br />
Tabla IV.8. Resumen de datos de textura para los materiales pilareados<br />
SBET(m 2 /g) VMp (cc/g) Vmp (cc/g) Vp (cc/g) VTp (cc/g) dmp(Å)<br />
Al500 336 0,367 0,067 0,091 0,525 63<br />
Loc500 344 0,632 0,050 0,096 0,778 90<br />
Se quiere destacar que con relación a la SerBcaP de partida, el proceso de pilareado ha<br />
multiplicado cerca de 5 veces el área superficial y hasta 10 veces el volumen de<br />
microporos. No se han apreciado grandes cambios en la mesoporosidad, si bien ambas han<br />
aumentado, más la Al500. La macroporosidad, sin embargo, ha experimentado un gran<br />
cambio, especialmente la Loc500 lo que, correspondientemente, ha aumentado el tamaño<br />
medio de poro.<br />
2.3 Grupos superficiales<br />
En la Fig.IV.24, se presentan los espectros de IR obtenidos para la SerBcaNa, Al500 y<br />
Loc500 por la técnica del KBr.<br />
La curva obtenida para la SerBcaNa es prácticamente la misma que la obtenida para la<br />
SerBcaP (Fig.III.15), como era de esperar, ya que la única variación con respecto a ella es<br />
la homoionización y las vibraciones correspondientes a los cationes en red (
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
son detectadas en el rango de análisis.<br />
% Transmitancia<br />
3630<br />
3410<br />
SerBcaNa<br />
Al500<br />
Loc500<br />
1635<br />
1140<br />
4000 3500 3000 2500 2000 1500 1000 500<br />
Nº de onda(cm -1)<br />
Fig.IV.24. Espectros IR de SerBcaNa, Al500 y Loc500<br />
Los materiales pilareados presentan espectros similares entre sí y con algunas<br />
diferencias con respecto a la SerBcaNa. Debe recordarse que las muestras pilareadas han<br />
sido calcinadas a 500ºC antes de su análisis, por lo que se ha debido producir una pérdida<br />
importante de agua y oxhidrilos superficiales y, por lo tanto, de sus vibraciones respectivas.<br />
En los PILCs, las bandas correspondientes a las vibraciones de tensión de los -OH, tanto<br />
del agua interlaminar como de las sustituciones isomórficas de la capa octaédrica (3400-<br />
3700 cm -1 ) aparecen solapadas, identificándose sólo dos. Una de ellas, la de 3630 cm -1 , es<br />
atribuida a vibraciones Al-OH-Al, denotando la presencia de los pilares de Al en la<br />
muestra; la otra a 3410 cm -1 , corresponde a vibraciones de tensión de los H-O-H del agua<br />
molecular adsorbida con la correspondiente vibración de deformación a 1635 y su<br />
sobretono, aunque débil, a 3250 cm -1 .<br />
La banda correspondiente a las vibraciones de tensión en el plano Si-O-Si de la capa<br />
tetraédrica a 1030 cm -1 se vuelve más estrecha y hay una reducción de la intensidad del<br />
pico a 525 cm -1 correspondiente a la banda de deformación. Un comportamiento similar<br />
fue encontrado por Calvet y Prost 61 y por Tennakoon et al 62 , al calcinar arcillas<br />
directamente intercambiadas con Li<br />
<br />
61 R.Calvet and R.Prost. Clays and Clay Minerals 19 (1971) 175.<br />
795<br />
1030<br />
840<br />
918<br />
525<br />
, NH y Al . 3+<br />
4 Este proceso puede ser trasladado al<br />
119
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
caso de las arcillas pilareadas, donde al producirse la deshidratación de los cationes<br />
poliméricos de Al interlaminares, éstos se convierten en óxidos con la consecuente<br />
liberación de protones por balance de cargas (Ec.IV.1). Los protones liberados se difunden<br />
por activación térmica dentro de la estructura de la arcilla, probablemente vía las cavidades<br />
hexagonales de la capa tetraédrica, a los sitios donde hay una carga desbalanceada<br />
resultante de sustituciones isomórficas. Al situarse en estas posiciones, dificultan las<br />
vibraciones de tensión y de deformación de los OH - de la red.<br />
La banda a 1140 cm -1 no ha sido identificada, aunque normalmente aparece en los<br />
filosilicatos dioctaédricos. Una posibilidad es que repulsiones oxígeno-oxígeno o<br />
interacciones dipolo-dipolo resalten esta vibración en la capa tetraédrica, dando una<br />
medida del desorden de las láminas 63 . Por lo tanto, en las muestras calcinadas, la migración<br />
de los protones producto de la deshidratación de los oligómeros de Al podrían disminuir<br />
este efecto, por lo que disminuye la banda a 1140 cm -1 .<br />
2.4. Acidez<br />
Las características de la acidez son tres: número, fortaleza y naturaleza de los centros<br />
ácidos. Las dos primeras han sido medidas, según se ha indicado en el capítulo<br />
correspondiente, por adsorción-desorción de amoniaco, y la segunda por espectroscopía<br />
IRTF de piridina adsorbida.<br />
2.4.1 Número total de centros<br />
En la Fig.IV.25 se recogen los resultados correspondientes a las muestras consecutivas<br />
para llegar a la Al500: SerBcaP, SerBcaNa y la muestra Al500.<br />
Las condiciones de análisis son las mismas que las expuestas en el capítulo anterior, es<br />
decir, adsorción en un flujo 50/50cm 3 /min de NH3/N2 a temperatura ambiente seguida de<br />
desorción de la fracción fisisorbida, a la misma temperatura, en un flujo de N2 de<br />
100cm3/min y por último, manteniendo el flujo anterior, desorción de la fracción<br />
quimisorbida a temperatura creciente a 10ºC/min hasta los 600ºC. La cantidad retenida a<br />
cada temperatura se traduce en meq/g de muestra.<br />
La acidez de la muestra homoiónica es prácticamente la misma que la de la muestra<br />
62 D.T.B.Tenakoon, W.Jones, J.M.Thomas, J.H.Ballantine and J.H.Purnell. Solid State Ionic 24 (1987) 205.<br />
63 V.C.Farmer and J.D.Russel. Spectrochim. Acta 20 (1964) 1149-1117.<br />
120
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
purificada; no así la de la Al500 que es mayor en un factor 5,5. Sun Kou et al 64 utilizando<br />
esta técnica, pero adsorbiendo piridina en lugar de NH3, concluyeron que este aumento<br />
debe estar relacionado no sólo con la acidez propia del catión de aluminio incorporado,<br />
fundamentalmente de tipo Lewis, sino también con el aumento de la superficie interlaminar<br />
expuesta por el pilareado.<br />
Cambios de peso (%)<br />
107<br />
106<br />
105<br />
104<br />
103<br />
102<br />
101<br />
100<br />
99<br />
98<br />
97<br />
96<br />
SerBcaP<br />
Adsorción a T.A.<br />
SerBcaNa<br />
Al500<br />
Desorción a T.A.<br />
4,2 %<br />
0,76 %<br />
Desorción<br />
Térmica<br />
95<br />
0 50 100 150 200 250 300<br />
Tiempo(minutos)<br />
Fig.IV.25. Adsorción-desorción de NH3 para SerBcaP, SerBcaNa y Al500<br />
En la Fig.IV.26, se comparan las curvas obtenidas para las muestras pilareadas Al500 y<br />
Loc500. A pesar que ambas tienen una área superficial y espaciado basal semejantes, lo<br />
que garantizaría una fisisorción similar, como así es, la acidez es bastante mayor en la<br />
Al500 lo que es difícil de interpretar si se tiene en cuenta que el aumento de superficie es el<br />
mismo y, supuestamente, igual el catión pilareante. Dos razones se puede aducir al<br />
respecto: primera, que la superficie de la arcilla de partida, en el caso de la Al500 haya<br />
quedado afectada por los sucesivos tratamientos previos a la síntesis y, segunda, que el<br />
catión incorporado sea diferente, dando lugar a diferente número de aluminios expuestos<br />
(ácidos Lewis potenciales) tras el tratamiento térmico. De hecho hay una serie de especies<br />
de aluminio diferentes según las condiciones de preparación, con diferente relación de<br />
cargas por átomo de aluminio (de 3 a 0,5) lo que puede dar origen a distinto número de<br />
64 M.R.Sun Kou, S.Mendioroz, J.L.García Fierro, I.Rodriguez-Ramos, J.M.Palacios, A.Guerrero Ruiz and A.M.de<br />
Andres. Clays and Clay Minerals 40:2 (1992) 167.<br />
121
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
centros potenciales de adsorción.<br />
Cambios de Peso (%)<br />
107<br />
106<br />
105<br />
104<br />
103<br />
102<br />
101<br />
100<br />
99<br />
6,1 %<br />
Loc500 4,72 %<br />
Al500<br />
4,2 %<br />
2,6 %<br />
98<br />
0 50 100 150 200 250<br />
Tiempo (minutos)<br />
Fig.IV.26. Análisis termogravimétricos con NH3 para Al500 y Loc500<br />
En la tabla IV.9 se resumen las medidas cuantitativas obtenidas del análisis<br />
termogravimétrico.<br />
Tabla IV.9 Datos de adsorción-desorción de NH3 para SerBcaNa, Al500 y Loc500<br />
Muestra Fisisorción Quimisorción Centros ácidos Centros ácidos<br />
(meq/g) (meq/g) por g por m 2<br />
SerBcaNa 0,553 0,447 2,69x10 20 2,24x10 18<br />
Al500 1,12 2,47 1,49x10 21 4,43x10 18<br />
Loc500 1,25 1,53 9,22x10 20 2,68x10 18<br />
donde se ha supuesto que la neutralización con NH3 de los centros ácidos se produce<br />
molécula a molécula.<br />
En la Fig.IV.27 se da la variación relativa del número de centros con la temperatura, lo<br />
que indica que la muestra Al500 no solamente tiene mayor número de centros ácidos, sino<br />
que además son más fuertes. Esto parece señalar, una vez más, la presencia de distintas<br />
especies de Al en ambas muestras, siendo más polimerizada la correspondiente a la Al500.<br />
122
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
NH 3 quim. (% peso)<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
0<br />
Al500<br />
Loc500<br />
50 100 150 200 250 300 350 400 450 500<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.IV.27. Número de centros ácidos residuales en función de T para los PILCs<br />
2.4.2 Naturaleza de los centros<br />
En las figuras IV.28 y IV.29 se recogen los espectros IR correspondientes a las muestras<br />
Al500 y Loc500 respectivamente, antes y después de la adsorción de piridina, tras<br />
desgasificación a vacío de 5x10 -4 mm de Hg, durante 3 h, a 500ºC.<br />
En la Fig.IV.28 se incluye, además, la variación experimentada por los espectros por<br />
efecto térmico a temperaturas crecientes y vacío durante 1 hora.<br />
Las asignaciones de las vibraciones de la piridina a los distintos tipos de centros son las<br />
siguientes:<br />
Centros Lewis : 1440, 1570 y 1617cm -1<br />
Centros Brönsted : 1540 y 1638 cm -1<br />
Centros Lewis y Brönsted : 1485cm -1<br />
En comparación con el espectro obtenido para la muestra purificada (Fig.III.19), el<br />
material pilareado desarrolla mayoritariamente centros Lewis. Ocelli y Tindwa 65 indicaron<br />
este fenómeno, destacando que son los pilares los que suministran acidez Lewis.<br />
65 M.L.Ocelli and R.M.Tindwa. Clays and Clay Min. 31:1 (1983) 22.<br />
123
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Transmitancia (u.a.)<br />
Al500 desg. 500ºC<br />
Py ads. a 30ºC<br />
Py des. 100ºC<br />
200ºC<br />
300ºC<br />
400ºC<br />
500 ºC<br />
1638<br />
1570<br />
1617<br />
1540<br />
1485<br />
1440<br />
2000 1900 1800 1700 1600 1500 1400<br />
Número de Onda (cm -1)<br />
Fig.IV.28. Al500: Adsorción de piridina a temperaturas crecientes<br />
En cuanto a la localización de los centros ácidos en los materiales pilareados, por<br />
estudios realizados por varios investigadores 66,67,68 se conoce las posibles posiciones que<br />
serían:<br />
a) Posiciones de iones intercambiables no ocupados por los pilares dan origen a los<br />
dos tipos de acidez, Brönsted (de HO - superficiales) y Lewis (de sustituciones en<br />
la red o de deshidratación de los ácidos Brönsted correspondientes).<br />
b) Una segunda opción podría ser del propio enlace de condensación entre el óxido<br />
pilareante y las láminas de la arcilla.<br />
c) La aparición de un tercer tipo de centros, procede del material pilareante,<br />
fundamentalmente en forma de óxido y por tanto de tipo Lewis, tanto mayor<br />
66 J.C.Ravidtz. J.Catalysis 43 (1976) 260.<br />
67 M.L.Ocelli, S.D.Landau and T.J.Pinnavaia. J.Catalysis 104 (1987) 331.<br />
68 H.Anes and H.Hofmann. Applied Catalysis A: General 97 (1993) 23.<br />
124
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
cuanto mayor es el contenido de metal. Recientemente, se ha evidenciado la<br />
presencia de Al penta-coordinado (procedente del Al hexa-coordinado de los<br />
cationes pilareantes por simple pérdida del agua terminal) 69,70 por 27 Al RMN. Al<br />
aumentar la temperatura, por deshidratación de los cationes poliméricos<br />
interlaminares se puede originar la transformación de los centros Brönsted, que<br />
desaparecen, en centros Lewis.<br />
Así, los pilares son una fuente importante de acidez Lewis mientras que la acidez<br />
Brönsted, tanto para las muestras con como para las sin pilar, proviene de los grupos -OH<br />
estructurales de las capas 2:1.<br />
Transmitancia (%)<br />
desg. a 500ºC<br />
1638<br />
1570<br />
Py des. a 100 ºC<br />
1617<br />
1540<br />
1485<br />
1440<br />
Loc500<br />
1800 1700 1600 1500 1400 1300 1200<br />
Número de Onda (cm -1)<br />
Fig.IV.29. Loc500: Adsorción de piridina a 30ºC y desgasificada a 100ºC por 1 h<br />
3. Estabilidad térmica y química de los materiales pilareados<br />
69 L.Bergaoni, J.F.Lambert, R.Franck, H.Suquet and J.L.Robert. J.Chem. Soc. Faraday Trans. 91 (1995) 2229.<br />
125
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
A fin de conocer las posibilidades de utilización de los materiales pilareados como<br />
soporte de catalizadores, se ha realizado un estudio de las variaciones texturales y<br />
estructurales básicas frente a tratamientos térmicos, hidrotérmicos, ácidos y básicos.<br />
3.1 Estabilidad térmica<br />
Las muestras Al500 y Loc500, fueron sometidas a tratamientos térmicos en mufla hasta<br />
los 800ºC por dos horas en atmósfera de aire estático. Una arcilla cuando es sometida a un<br />
calentamiento progresivo, experimenta sucesivos cambios en su estructura, provenientes,<br />
fundamentalmente, de la pérdida de agua por el efecto térmico. Estos cambios se traducen<br />
en alteraciones correspondientes tanto de la estructura como de la textura y de los grupos<br />
superficiales, y tanto más cuando se trata de materiales pilareados, en los que la<br />
inestabilidad puede provenir, además, del oligocatión pilareante o del propio enlace<br />
químico pilar/arcilla.<br />
A continuación se muestran las alteraciones experimentadas por las muestras Al500 y<br />
Loc500 ante los sucesivos tratamientos térmicos.<br />
3.1.1 Variaciones en el espaciado basal<br />
En las Fig.IV.30 y IV.31 se muestran los difractogramas obtenidos para los materiales<br />
pilareados tratados a distintas temperaturas (indicada por el número en la notación, en<br />
grados centígrados).<br />
Como se puede apreciar las muestras son estables hasta temperaturas de ~700ºC, si bien<br />
las Al700 muestran una cierta heterogeneidad en los pilares, probablemente por<br />
degradación y correspondiente segregación de Al2O3 como corresponde a las especies<br />
polinucleares antes señaladas. El efecto es ligeramente menor en la Loc500 que mantiene<br />
un único pico, si bien menos intenso, hasta su degradación final. Se quiere destacar que, a<br />
pesar de que las arcillas en sí se deshidratan alrededor de los 600ºC (635ºC en la<br />
SerBcaNa) y que la presencia de los pilares facilita esa deshidratación, disminuyendo la<br />
temperatura de pérdida, no se han observado grandes pérdidas en la muestra hasta los<br />
700ºC, lo cual puede dar una idea de la estabilidad térmica del material. De las figuras,<br />
observamos que ninguna de las muestras soporta la estructura pilareada a T>750ºC.<br />
70 D.Coster, A.L.Blumenfield and J.J.Fripiat. J. Phys. Chem. 98 (1994) 6201.<br />
126
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Intensidad de Rayos-X (u.a.)<br />
<br />
18.8 Å<br />
18.1 Å<br />
18 Å<br />
Al500<br />
Al550<br />
Al600<br />
Al700<br />
Al750<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
Fig.IV.30. Difractogramas de Al500 a distintas T en aire estático durante 2 horas<br />
Intensidad de Rayos-X (u.a.)<br />
18.2<br />
17.8<br />
17.5<br />
17.3<br />
17.2<br />
2<br />
Loc550<br />
Loc600<br />
Loc650<br />
Loc700<br />
Loc750<br />
Loc800<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75 80<br />
2<br />
Fig.IV.31. Difractogramas de Al500 tratado térmicamente en aire estático<br />
127
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
3.1.2 Variaciones en la textura<br />
En las figuras IV.32 y IV.33 se presentan las isotermas de las muestras tratadas.<br />
Vads (cc/g)<br />
Vads (cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al700<br />
Al500<br />
Al600<br />
Al750<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
Fig.IV.32. Isotermas de adsorción-desorción de N2 para Al500 a distintas temperaturas<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Loc500<br />
Loc600<br />
Loc800<br />
Loc700<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
Fig.IV.33. Isotermas de adsorción-desorción de N2 para Loc500 a distintas temperaturas<br />
En ambas muestras se destacan las variaciones con la temperatura de las adsorciones a<br />
presiones relativas bajas (rango de microporos) siendo mayor para la Al500. A presiones<br />
128
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
relativas en el rango de mesoporos y principio de macroporos, no se notan fuertes<br />
variaciones con la temperatura.<br />
Por lo tanto, el tratamiento térmico hasta los 750-800ºC afecta solamente a los pilares, a<br />
partir de allí, aparece una destrucción del resto de la estructura.<br />
En la tabla IV.10, se presentan los datos obtenidos de las isotermas correspondientes.<br />
Tabla IV.10 Datos de adsorción de N2 para los PILCs tratados térmicamente<br />
Muestra SBET Vp(cm 3 /g) Vmp(cm 3 /g) VT(cm 3 /g)<br />
Al600 205 0,055 0,063 0,130<br />
Al650 189 0,050 0,069 0,151<br />
Al700 147 0,037 0,066 0,123<br />
Al750 98 0,021 0,064 0,101<br />
Loc600 230 0,066 0,048 0,13<br />
Loc650 214 0,064 0,036 0,116<br />
Loc700 200 0,059 0,037 0,112<br />
Loc750 177 0,049 0,047 0,106<br />
Loc800 89 0,017 0,042 0,076<br />
3.2 Estabilidad hidrotérmica<br />
Para realizar este estudio, se preparó un dispositivo en el que un flujo de 100cm 3 /min de<br />
aire pasa por una trampa con agua desionizada y de allí a un horno en el que se encuentra la<br />
muestra a una temperatura fija. Dependiendo de la temperatura del agua, será la presión de<br />
vapor de la misma, por lo que a 45ºC se obtiene aproximadamente un 10% de H2O en el<br />
flujo total. El tratamiento se realizó por dos horas, para aproximadamente dos gramos de<br />
muestra. En la Fig.IV.34 se muestra un esquema del dispositivo utilizado.<br />
aire<br />
rotámetro<br />
Horno<br />
Fig.IV.34. Esquema del dispositivo montado para el tratamiento hidrotérmico<br />
129
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
3.2.1 Variaciones en el espaciado basal<br />
En las Fig.IV.35 y IV.36 se muestran los difractogramas de las muestras Al500 y<br />
Loc500 respectivamente, tratadas a distintas temperaturas en un flujo de 100cc/min de aire<br />
con el 10% de H2O durante dos horas.<br />
Intensidad de Rayos-X (u.a.)<br />
Intensidad de R-X (u.a.)<br />
18.8<br />
18.3<br />
17.8<br />
AL500<br />
AlHT600<br />
AlHT750<br />
AlHT500<br />
AlHT700<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Fig.IV.35. Difractogramas de las muestras Al500 bajo tratamiento hidrotérmico<br />
18<br />
17.8<br />
17<br />
LoHT500<br />
LoHT600<br />
LoHT700<br />
LoHT750<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Fig.IV.36. Difractogramas de las muestras Loc500 bajo tratamiento hidrotérmico<br />
130
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
De los difractogramas se observa que, así como la temperatura afectaba más a la<br />
muestra Al500, la presencia de H2O adicional afecta más a la Loc500, aunque la diferencia<br />
es pequeña. Ambas soportan el tratamiento hasta los 700ºC aproximadamente con un<br />
espaciado basal del orden de los 17,5Å.<br />
En ambas muestras se observa que la presencia de H2O afecta más a la homogeneidad<br />
de los pilares en los tratamientos térmicos, apareciendo picos anchos para el espaciado<br />
basal.<br />
3.2.2 Variaciones en la textura<br />
Por adsorción-desorción de N2 se construyeron las isotermas de las muestras tratadas<br />
bajo condiciones hidrotérmicas que se presentan en las Fig.IV.37 y IV.38.<br />
Vads (cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al500<br />
AlHT500<br />
AlHT600<br />
AlHT750<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
Fig.IV.37. Isotermas de Adsorción-Desorción de N2 de la Al500 en condiciones hidrotérmicas<br />
De las figuras se observa la disminución de los volúmenes adsorbidos a baja presión<br />
relativa, con el aumento de la temperatura de tratamiento.<br />
La zona del bucle de histéresis, correspondiente a los mesoporos, está más afectada en la<br />
muestra Loc500, probablemente por la mayor desagregación de las partículas por efecto del<br />
agua a temperaturas crecientes, lo que favorecería el alojamiento y condensación del N2 en<br />
131
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
ellas a presiones elevadas de la isoterma. En la tabla IV.11 se presentan los datos obtenidos<br />
de las isotermas.<br />
Vads. (cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Loc500<br />
LoHT500<br />
LoHT600<br />
LoHT750<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
Fig.IV.38. Isotermas de Adsorción-Desorción de N2 de la Loc500 en condiciones hidrotérmicas<br />
Tabla IV.11 Datos de adsorción de N2 para los PILCs tratados hidrotérmicamente<br />
Muestra SBET Vp(cm 3 /g) Vmp(cm 3 /g) VTp(cm 3 /g)<br />
(aP/P00,98)<br />
AlHT500 220 0,059 0,075 0,157<br />
AlHT600 198 0,051 0,080 0,149<br />
AlHT700 193 0,046 0,092 0,162<br />
AlHT750 94 0,019 0,064 0,101<br />
LoHT500 243 0,070 0,052 0,134<br />
LoHT600 155 0,044 0,045 0,104<br />
LoHT700 132 0,036 0,048 0,100<br />
LoHT750 96 0,047 0,047 0,089<br />
3.3 Estabilidad química<br />
La forma de preparación habitual de los catalizadores soportados es la impregnación del<br />
substrato con una solución de la fase activa que, dependiendo de su naturaleza, dará lugar a<br />
132
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
una variación del pH de la solución. Entonces, para poder controlar en toda su extensión el<br />
proceso de impregnación, es preciso conocer la estabilidad del substrato ante las<br />
variaciones del pH.<br />
Los PILCs han sido ampliamente estudiados en condiciones ácido-básicas en un rango<br />
de pH de 3-10. Aunque interacciones con soluciones de pH mayores o menores pueden ser<br />
necesarias, estos rangos han sido poco estudiados 71 . El tema tiene gran importancia en este<br />
tipo de materiales, ya que los cationes pilareantes, y en especial el Al, suelen proceder de la<br />
hidrólisis de cationes y son muy sensibles al entorno. Será preciso pues, conocer la<br />
estabilidad ante los cambios del entorno. El estudio se realizó solamente con la muestra<br />
Al500, la cual se expuso a soluciones acuosas de ácido clorhídrico e hidróxido de sodio de<br />
varias concentraciones. El sólido residual y las soluciones fueron luego analizados para<br />
estimar las variaciones producidas por el tratamiento en la muestra original.<br />
Metodología empleada: Se mezcla 1 g. de Al500 en 100 cm 3 de solución de HCl o de<br />
NaOH en concentraciones de 0,005, 0,01 y 0,05N, agitando la suspensión ocasionalmente<br />
durante 48 horas a temperatura ambiente. Se separa el sólido por filtración y se lava varias<br />
veces con H2O desionizada hasta que las aguas de lavado sean neutras. En la solución de<br />
filtrado se analiza por EAA la cantidad de Al solubilizado. El residuo sólido se seca a 60ºC<br />
y se estudian sus variaciones por adsorción-desorción de N2 y difracción de R-X.<br />
3.3.1 Efecto del pH en el espaciado basal<br />
En la Fig.IV.39 y IV.40 se presentan los difractogramas de las muestras tratadas con<br />
soluciones ácidas y básicas respectivamente, siguiendo la siguiente notación:<br />
Solución de tratamiento Concentración Nombre de la muestra<br />
0,005 HCl1<br />
HCl 0,01 HCl2<br />
0,05 HCl3<br />
0,005 NaOH1<br />
NaOH 0,01 NaOH2<br />
0,05 NaOH3<br />
De los difractogramas se observa que ambos tipos de tratamiento producen una<br />
71 A.Molinard. Ph.D. Thesis, University of Antwerp, Belgium (1994).<br />
133
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
disminución tanto en el espaciado basal como en la intensidad del pico correspondiente. En<br />
las muestras tratadas con ácido esta reducción es débil siendo algo más importante en las<br />
tratadas en medio básico. En ninguno de los casos la muestra colapsa.<br />
Intensidad de Rx (u.a.)<br />
d 001 =18.8 I r =1<br />
d 001 =18.2 I r =0.9<br />
d 001 =18.0 I r =0.8<br />
d 001 =17.6 I r =0.7<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Al500<br />
HCl1<br />
HCl2<br />
HCl3<br />
Fig.IV.39. Difractogramas de la muestra Al500 tratada con distintas concentraciones de HCl<br />
Intensidad de Rx (u.a.)<br />
d 001 = 18.8 I r =1<br />
d 001 = 17.8 I r =0.75<br />
d 001 = 16.7 I r =0.72<br />
d 001 = 15 I r =0.65<br />
Al500<br />
NaOH1<br />
NaOH2<br />
NaOH3<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Fig.IV.40. Difractogramas de la muestra Al500 tratada con distintas concentraciones de NaOH<br />
134
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
3.3.2 Efecto del pH en la textura<br />
En las Fig.IV.41 y IV.42 se presentan las isotermas obtenidas para las muestras tras los<br />
tratamientos ácidos y básicos respectivamente.<br />
Volumen Adsorbido (cc / g)<br />
160<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al500<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
HCl1<br />
HCl2<br />
HCl3<br />
Fig.IV.41. Isotermas de Adsorción-Desorción de N2 para muestras Al500 tratadas con HCl<br />
Volumen Adsorbido (cc/g)<br />
160<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al500<br />
NaOH1<br />
NaOH2<br />
NaOH3<br />
0<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
135
Capítulo IV Materiales pilareados<br />
Fig.IV.42. Isotermas de Adsorción-Desorción de N2 para muestras Al500 tratadas con NaOH<br />
Las isotermas obtenidas en la Fig.IV.41, reflejan una ligera pérdida del área superficial<br />
respecto al material sin tratar y no se ven afectadas por la concentración del ácido en el<br />
tratamiento. A la concentración máxima utilizada aparece una mayor variación en las<br />
presiones relativas altas, dando cuenta de un aumento en el tamaño de los poros en la zona<br />
de meso-macroporos, probablemente debido a una delaminación adicional de las muestras.<br />
Tras el tratamiento básico (Fig.IV.42), el área superficial disminuye respecto a la<br />
muestra original con la concentración de la base y en forma paralela lo hace el volumen de<br />
microporos. La presencia de mesoporos grandes (quizá macroporos) identificada por la<br />
zona de condensación a presiones relativas altas se acentúa con la concentración.<br />
En la tabla IV.12 se resumen los datos obtenidos por estas dos técnicas, dando además<br />
los pH de las concentraciones utilizadas y la cantidad de Al solubilizado medido en<br />
solución de lavado.<br />
Tabla IV.12 Resumen de datos de los tratamientos ácidos y básicos<br />
Muestra Al 3+ (ppm) pH SBET(m 2 /g) Vp(H&J) VTP/Po>0,98 d001(Å)<br />
Al500 --- --- 336 0,091 0,2 18,8<br />
HCl1 32 2,35 293 0,082 0,2 18,2<br />
HCl2 71 2,01 296 0,080 0,21 18<br />
HCl3 282 1,44 293 0,070 0,23 17,6<br />
NaOH1 78 11,7 217 0,060 0,15 17,8<br />
NaOH2 144 12 181 0,048 0,14 16,7<br />
NaOH3 257 12,7 128 0,025 0,14 15<br />
De los datos dados en la tabla IV.12, se puede apreciar que las cantidades solubilizadas<br />
de Al aumentan fuertemente con la concentración tanto en medio ácido como básico.<br />
Debido a que las dos fuentes de Al del material pilareado la constituyen la estructura de<br />
la arcilla y los pilares, es claro que los tratamientos ácidos y básicos atacan principalmente<br />
a los segundos pero no tanto como para producir el colapso de la estructura.<br />
El Al introducido en la arcilla puede estar formando pilares estables entre dos láminas o<br />
depositado en la superficie interna o externa de la arcilla. El tratamiento ácido atacaría a<br />
estos dos centros de Al, debilitando los pilares pero no destruyéndolos completamente, en<br />
cambio, el tratamiento básico afectaría además los pilares, destruyéndolos, lo que<br />
explicaría la disminución del área superficial y, especialmente, el contenido de microporos.<br />
Por lo tanto, podemos asegurar la estabilidad del Pilc Al500 en tratamientos ácidos y<br />
básicos en el rango de pH 1,5-11,5.<br />
136
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
CATALIZADORES PARA LA REACCIÓN DE FISCHER-TROPSCH<br />
1. Introducción<br />
Un catalizador, en su definición ampliamente aceptada, es una sustancia que actúa sobre<br />
la velocidad con que una reacción química se aproxima al equilibrio, sin ser consumido en<br />
el proceso 1 .<br />
Los catalizadores están compuestos, normalmente, de dos o más componentes que<br />
actúan en un determinado rol: fase activa, promotor o soporte.<br />
La fase activa, es la principal responsable de la actividad catalítica.<br />
El término promotor es aplicado a sustancias que no son catalíticamente activas, pero<br />
que llevan a la fase activa a funcionar con mayor capacidad. Su forma de actuar no es<br />
siempre clara, pero existen tres posibles funciones bien identificadas: a) textural,<br />
inhibiendo el crecimiento de las pequeñas partículas de la fase activa ; b) electrónica o<br />
estructural, disolviéndose en la fase activa, alterando su carácter electrónico ; c)<br />
modificadora de la resistencia al envenenamiento, protegiendo la fase activa de impurezas<br />
de los reactantes o generadas por reacciones secundarias. Cuando se habla de<br />
“catalizadores promovidos”, contienen 75% o más de la fase activa en el conjunto fase<br />
activa-promotor.<br />
El soporte es el vehículo de la fase activa y los promotores presentes, con varias<br />
funciones siendo una de las más importantes la de maximizar el área superficial de la fase<br />
activa, proporcionando una superficie extensa donde ésta se pueda dispersar constituyendo<br />
pequeños cristalitos. La fase activa constituye normalmente entre 0,1 y 20% en peso del<br />
catalizador total. Usualmente, el soporte se supone catalíticamente inactivo por sí mismo,<br />
pero en unión con la fase activa puede participar de una forma importante en la reacción.<br />
En la preparación de catalizadores metálicos soportados se pueden distinguir cuatro<br />
etapas generales: i) formación del precursor de la fase activa (metal), comúnmente en un<br />
medio acuoso ; ii) secado ; iii) calcinación (no siempre necesaria) ; iv) reducción.<br />
La incorporación de la fase activa se puede realizar de diferentes maneras y con<br />
diferentes consecuencias. Las incorporaciones más conocidas y utilizadas son:<br />
a) impregnación ; b) adsorción ; c) intercambio iónico ; d) coprecipitación.<br />
El método de impregnación, utilizado en este trabajo, consiste en poner en suspensión el<br />
soporte con la solución del precursor (sal metálica), que contiene el metal en forma de<br />
138
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
iones. Si el soporte es poroso, estos iones penetran en los poros del soporte y el exceso de<br />
solvente es eliminado por evaporación. Pequeños cristales de la sal metálica, que después<br />
de la reducción se convierten en partículas metálicas aisladas, permanecen en las paredes<br />
de los poros del soporte. El tamaño de las partículas de metal depende, entre otros factores,<br />
de la concentración utilizada, mientras que la posición de las mismas depende de las<br />
condiciones de secado. Un secado lento permite la migración de la sal hacia el exterior del<br />
poro, mientras que un secado rápido permite una mejor distribución del metal en el soporte.<br />
La reacción de hidrogenación de CO da lugar a una gran variedad de productos<br />
(parafinas, olefinas, alcoholes, aldehídos) cuya distribución depende, fundamentalmente,<br />
del catalizador utilizado y de las condiciones del proceso 2 . Los catalizadores más utilizados<br />
contienen metales del grupo VIII como centros activos 3 , generalmente soportados.<br />
El cobalto es el que tiene mayor tendencia a formar hidrocarburos con más de un átomo<br />
de carbón por molécula 4 . El Fe es menos activo que el Co, dando una distribución amplia<br />
de productos 5 . Catalizadores basados en Ni tienen una alta selectividad a metano,<br />
especialmente a altas temperaturas 6 . La selectividad de los catalizadores basados en Rh 7 ,<br />
depende fuertemente del soporte: para soportes básicos (ZnO, MgO) el principal producto<br />
es metanol; sobre soportes con acidez débil (La2O3, ZrO2, TiO2) la tendencia es hacia<br />
metanol y oxigenados C2 y, si el soporte es un óxido acídico (silica gel, -Al2O3) se<br />
obtiene metano e hidrocarburos superiores. Los catalizadores de Ru son más activos que<br />
los de Fe y Co, produciendo hidrocarburos pesados, aunque son menos utilizados por su<br />
coste 8 . Los otros metales del grupo VIII (Pd, Ir, Pt, Os) son menos activos para la reacción<br />
de Fischer-Tropsch.<br />
Los promotores más habituales y con mejores resultados en la hidrogenación de CO son<br />
los metales alcalinos 9 . Su misión fundamental es la de evitar la sinterización y el paso a<br />
óxido de los cristalitos metálicos.<br />
En este trabajo se prepararon, por impregnación, catalizadores de Co, Fe y Rh,<br />
soportados sobre el material pilareado Al500 y de Co y Fe sobre Loc500. Los soportes de<br />
1 G.C.Bond, “Heterogeneous Catalysis: Principles and Applicationes, Clarendon Press, Oxford (1987).<br />
2 P.Biloen and W.M.Sachtler, Advances in Catalysis, Vol 30, Academic Press, N.Y. (1981) 165.<br />
3 S.C.Chuang, Y.H.Tian, J.G.Goodwin and I.Wender, J.of Catalysis 96 (1985) 396-407.<br />
4 H.Pines “The Chemistry of Catalytic Hidrocarbon Conversions. Academic Pres (1981).<br />
5 P.B.Bukeer, L.Nowicki, X.Lang, Catalysis Today 24 (1995) 111-119.<br />
6 G.A.Mills, F.W.Steffgen, Catalysis Rev. 8 (1974) 159.<br />
7 K.P.de Jong, J.H. Glezer, H.P.Kuipers, A.Knoester and C.A.Emens, J. of Catalysis 124 (1990) 520-529.<br />
8 I.Boudart and M.A.McDonald, J.Phys. Chem. 88 (1984) 2185-2195.<br />
9 T.Bastein, Ph.D.Thesis, Leiden University, Netherlands.<br />
139
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
por sí contienen metales alcalinos, por lo que no se utilizaron promotores adicionales.<br />
2. Preparación de catalizadores<br />
Para los catalizadores de Co, se utilizó como sal precursora nitrato de cobalto, para los<br />
de Rh, cloruro de rodio y para el Fe, trinuclear acetato nitrato de Fe, preparado siguiendo el<br />
método de Yamanaka et al 10 para la síntesis de PILCs de Fe. Las soluciones de Fe<br />
preparadas a partir de cloruro y nitrato de Fe resultaron muy ácidas (pH
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
metales en forma de óxido.<br />
Para conocer la temperatura de descomposición se recurrió al análisis térmico, tanto<br />
gravimétrico como diferencial.<br />
2.1.1 Serie Co/PILC<br />
a) ATG<br />
En la Fig.V.1 se muestran los termogramas de los precursores metálicos sobre Al500,.<br />
En ellos se destacan las pérdidas de las primeras fases del calentamiento, proporcionales a<br />
los contenidos metálicos, hasta aproximadamente 370ºC. A partir de esta temperatura, las<br />
pérdidas de peso son similares en todas las muestras y menores conforme aumenta el<br />
contenido metálico en las mismas. Las derivadas de los termogramas (DTG, Fig.V.2) dan<br />
información fundamentalmente de la temperatura de terminación del proceso de<br />
descomposición, pero también, y cualitativamente, de los pasos del mismo. DTG de la sal<br />
precursora de Co (Fig. V.2), dio picos a 199, 215, 224, 252 y 280ºC, ligeramente diferentes<br />
de los mostrados por la sal soportada, como si la posición de ésta en el interior de la red,<br />
ralentizara el proceso de descomposición. Las pequeñas desviaciones en el máximo de los<br />
picos, con contenidos crecientes de sal, se deben relacionar con la diferente dispersión de la<br />
misma por efecto de la concentración.<br />
Pérdida de Peso(%)<br />
100<br />
90<br />
80<br />
70<br />
60<br />
370ºC<br />
82,4%<br />
74,7%<br />
63,8%<br />
Co5Al s/c<br />
Co10Al s/c<br />
Co20Al s/c<br />
78,2%<br />
70,7%<br />
60,6%<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura(ºC)<br />
Fig.V.1 Termogramas en aire de la serie Co/Al500<br />
141
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Derivada (u.a.)<br />
130ºC<br />
150ºC<br />
225ºC<br />
260ºC<br />
340ºC<br />
N it Co<br />
Co5Al s/c<br />
Co10Al s/c<br />
Co20Al s/c<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.2 DTG correspondiente a la Fig.V.1 y a la sal precursora<br />
Igualmente, en la Fig.V.3, se dan los termogramas de los precursores de la serie<br />
Co/Loc500 que presentan características ligeramente diferentes de la serie anterior,<br />
especialmente a las temperaturas más bajas.<br />
Pérdida de peso (%)<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
80<br />
75<br />
70<br />
65<br />
60<br />
370ºC<br />
78,1%<br />
77,1%<br />
64,3%<br />
Co5Loc s/c<br />
Co10Loc s/c<br />
Co20Loc s/c<br />
74,5%<br />
73,5%<br />
61,4%<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.3 Termogramas de las muestras de Co soportadas sobre Loc500<br />
142
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
En la Fig.V.4, se representan las derivadas correspondientes. En general, las pérdidas<br />
son las correspondientes a la cantidad de sal incorporada, cambiando ligeramente la forma<br />
y posición de los picos respecto a la serie anterior, lo que denota una influencia adicional<br />
del soporte adscribible al diferente procedimiento de preparación.<br />
a) ATD<br />
Derivada de TG (u.a.)<br />
135<br />
178<br />
215 270<br />
330<br />
N it Co<br />
Co5Loc<br />
Co10Loc<br />
Co20Loc<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.4 DTG correspondiente a la Fig.V.5 y a la sal precursora<br />
En la Fig.V.5, se muestra el análisis térmico diferencial de los precursores de la serie<br />
Co/PILC con mayores contenidos de metal, en donde se ha incorporado el termograma de<br />
la sal precursora.<br />
El análisis térmico diferencial de la sal de Co, revela picos endotérmicos a 66, 81, 172,<br />
211, 255, 282 y 308ºC, asimilables a los aparecidos en DTG.<br />
Para el Co20Al s/c, se mantiene la misma estructura que la sal precursora con la<br />
desaparición de alguno de los picos por estabilización en el soporte.<br />
El ATD correspondiente al precursor Co20Loc s/c en su comparación con el Co20Al s/c<br />
apenas se diferencia de éste. En ambos, el proceso de descomposición de la sal<br />
impregnante se puede dar por terminado a temperaturas inferiores a los 400ºC.<br />
143
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
T(u.a.)<br />
66<br />
81<br />
67<br />
96<br />
67<br />
98<br />
2.1.2 Serie Fe/PILC<br />
a) ATG<br />
148<br />
152<br />
172<br />
211<br />
215<br />
224<br />
255<br />
251<br />
282<br />
315<br />
Nit de Co<br />
Co20Loc s/c<br />
Co20Al s/c<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.5 ATD de precursores de Co20Al y Co20Loc y del compuesto Nit de Co<br />
El precursor de Fe utilizado (TNAcFe) presenta picos de descomposición a 185, 310 y<br />
315ºC, en las curvas DTG (Fig. V.7), siendo el último acompañado de un pequeño<br />
aumento en peso (pendiente positiva) por oxidación adicional del óxido de Fe generado en<br />
la descomposición..<br />
En la Fig.V.6 se muestran los termogramas de los precursores de la serie Fe/Al500. En<br />
todas las curvas aparece una fuerte pérdida de peso hasta temperaturas entre 300 y 350ºC,<br />
dependiendo de la cantidad de precursor presente. Claramente se aprecian tres cambios en<br />
la pendiente antes de los 350ºC, destacando que las temperaturas de comienzo disminuyen<br />
con el aumento de precursor. Esto nos indica que en la incorporación de la fase activa hay<br />
una interacción con el soporte que aumenta la temperatura de descomposición. Conforme<br />
va aumentando la cantidad de sal presente, predominan los efectos de la descomposición de<br />
la sal masiva, igualándose las temperaturas de descomposición con las del precursor. Esto<br />
nos indica que es la interacción con el soporte lo que aumenta la temperatura de<br />
descomposición.<br />
144
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Pérdida de Peso (%)<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
80<br />
75<br />
70<br />
89,3%<br />
79,2%<br />
73,7%<br />
Fe5Al s/c<br />
Fe10Al s/c<br />
Fe20Al s/c<br />
84,3%<br />
75,4%<br />
70,2%<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.6 Termogramas de la serie Fe/Al500 y al precursor TNAcFe<br />
En la Fig.V.7 se muestran las derivadas de los termogramas dados en la Fig.V.6. En<br />
ellas se identifican claramente las temperaturas de los distintos estadios de los<br />
termogramas. Las variación observadas corresponden a las de la sal precursora.<br />
Derivada TG (u.a.)<br />
165<br />
310<br />
T N A cFe<br />
Fe5Al s/c<br />
Fe10Al s/c<br />
Fe20Al s/c<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.7 DTG correspondientes a la Fig.V.6<br />
145
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Los termogramas correspondientes a la serie Fe/Loc500 y sus derivadas se muestran en<br />
las Fig.V.8 y V.9, donde en esta última se ha incorporado el DTG del precursor de Fe.<br />
Pérdida de Peso (%)<br />
110<br />
105<br />
100<br />
95<br />
90<br />
85<br />
80<br />
75<br />
70<br />
65<br />
60<br />
88%<br />
80%<br />
68,5%<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fe5Loc s/c<br />
Fe10Loc s/c<br />
Fe20Loc s/c<br />
Fig.V.8 Termogramas correspondientes a los precursores de la serie Fe/Loc500<br />
Derivada (u.a.)<br />
94<br />
160<br />
165<br />
300<br />
315<br />
T N A cFe<br />
Fe5Loc s/c<br />
Fe10Loc s/c<br />
Fe20Loc s/c<br />
83,5%<br />
77,4%<br />
66%<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.9 DTG correspondiente a la Fig.V.8<br />
En todos los casos se observa que las temperaturas de descomposición son menores que<br />
146
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
en la serie Fe/Al500 indicando, al igual que con el Co, menor interacción con el soporte.<br />
b) ATD<br />
El ATD realizado a las muestras precursoras de Fe20Al y Fe20Loc, se muestra en la<br />
Fig.V.10, juntamente con el del precursor de Fe, trinuclear-acetato-nitrato de Fe (TNAc de<br />
Fe).<br />
En todos los casos se observa la presencia de un pico endotérmico y dos exotérmicos,<br />
atribuidos, estos últimos, a la combustión del ion acetato a CO2 (puestos que están hechos<br />
en aire) dejando el correspondiente óxido Fe2O3. En el caso de los precursores de los<br />
catalizadores, estos picos muestran ligeros desplazamientos con respecto a la sal de partida,<br />
demostrando una leve interacción con el soporte.<br />
T (u.a.)<br />
155<br />
155<br />
165<br />
263<br />
263<br />
259<br />
318<br />
318<br />
328<br />
Fe20Al s/c<br />
Fe20Loc s/c<br />
TNAc de Fe<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.10 ATD de los precursores de Fe20Al y Fe20Loc y del compuesto TNAc de Fe<br />
A temperaturas cercanas a los 350ºC los procesos de descomposición han concluido.<br />
2.1.3 Serie Rh/PILC<br />
a) ATG<br />
147
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
El análisis termogravimétrico, realizado a las muestras preparadas con cloruro de rodio<br />
soportadas sobre Al500 y sus derivadas, se muestra en las Fig.V.11 y V.12<br />
respectivamente.<br />
Pérdida de Peso (%)<br />
102<br />
100<br />
98<br />
96<br />
94<br />
92<br />
90<br />
88<br />
86<br />
Rh1.5Al s/c<br />
Rh0.5Al s/c<br />
Rh1Al s/c<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.11 Termogramas correspondientes a los precursores de la serie Rh/Al500<br />
Derivada de TG(u.a.)<br />
125<br />
Rh0.5Al s/c<br />
Rh1Al s/c<br />
Rh1.5Al s/c<br />
665<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.12 DTG correspondiente a la Fig.V.12<br />
Los termogramas presentan características similares a las observadas sobre el soporte<br />
148
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
solo (Al500), en cuanto a temperaturas, pero con mayores pérdidas, lo que indica una<br />
mayor hidratación por la presencia del precursor de Rh.<br />
Se quiere destacar que si bien las pérdidas a las temperaturas por debajo de 250ºC, son<br />
proporcionales a la cantidad de Rh incorporado (Fig.V.11), las pérdidas del agua de<br />
composición a alrededor de 690ºC en la arcilla (Fig.V.12), no sólo se producen a<br />
temperaturas inferiores sino que además aumentan con el contenido de Rh, lo que deberá<br />
atribuirse a una degradación adicional de la arcilla por efecto de la protonización de los<br />
pilares.<br />
b) ATD<br />
Para el precursor de la muestra Rh1,5Al se realizó el ATD cuya gráfica se presenta en la<br />
Fig.V.13, conjuntamente con su soporte Al500. Se observa que, dada la pequeña cantidad<br />
de Rh presente, los picos que se ven en el precursor del catalizador de Rh son básicamente<br />
los del soporte, la única diferencia, es el ensanchamiento del pico endotérmico a bajas<br />
temperaturas, que estaría relacionado con la descomposición del precursor correspondiente.<br />
Conclusión<br />
T (u.a.)<br />
120<br />
Rh1,5Al s/c<br />
Al500<br />
640<br />
880<br />
915<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.13 ATD del precursor de Rh1,5Al y del soporte Al500<br />
149
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
De los análisis térmicos expuestos hasta el momento se puede obtener información de la<br />
temperatura de calcinación de las muestras para la formación del catalizador. Debido a que<br />
los soportes fueron calcinados a 500ºC, se eligió a ésta como la temperatura de calcinación,<br />
asegurando la total transformación en óxidos de los precursores de compuestos metálicos.<br />
3. Caracterización de los catalizadores<br />
Los precursores de los catalizadores, una vez calcinados, se someten a estudio para<br />
caracterizarlos, utilizando las técnicas descritas en el capítulo II.<br />
3.1 Espaciado basal<br />
Por difracción de Rayos-X, se estudió la variación de las distancias interplanares,<br />
estudiando los cambios producidos por la incorporación de las fases activas, en los<br />
materiales pilareados.<br />
3.1.1 Serie Co/PILC<br />
Los difractogramas de las muestras de Co soportadas sobre Al500 y Loc500 se<br />
presentan en la Fig.V.14 y V.15, en comparación con los soportes.<br />
Intensidad de Rx (u.a.)<br />
18.8 Å<br />
18.2 Å<br />
17.9 Å<br />
2.85 2.43<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Al500<br />
2<br />
Co10Al<br />
Fig.V.14 Difractogramas de la serie Co/Al500<br />
Co20Al<br />
Co5Al<br />
La incorporación del Co, comporta una leve disminución en el espaciado basal del soporte,<br />
1.6<br />
1.43<br />
150
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
acompañado de una disminución de la intensidad del primer pico, tanto más notoria cuanto<br />
mayor es la cantidad metal incorporado. Lo mismo sucede en los catalizadores soportados<br />
sobre Loc500 donde la incorporación afecta más a la muestra (Fig.V.15). En ambos tipos<br />
de catalizadores aparecen débiles señales de óxido de cobalto (Co3O4) (Ficha ASTM 42-<br />
1467-JCPDS-ICDD) con espaciados a 2,85 ; 2,43 ; 2 ; 1,6 y 1,43Å, que aumentan con el<br />
contenido de la fase activa.<br />
18 Å<br />
19 Å<br />
18.2 Å<br />
17.5 Å<br />
3.1.2 Serie Fe/PILC<br />
Intensidad de Rayos X (u.a.)<br />
2.85<br />
2.43<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75<br />
2<br />
2<br />
Loc500<br />
Co5Loc<br />
Co10Loc<br />
Co20Loc<br />
Fig.V.15 Difractogramas de la serie Co/Loc500<br />
En la Fig.V.16 se muestran los difractogramas de las muestras soportadas sobre Al500.<br />
Se destaca una fuerte disminución del espaciado basal (d001) con el aumento del Fe<br />
incorporado. Para las muestras Fe10Al y Fe20Al se pierde definición en la distancia entre<br />
los planos 020 (d020 2,6Å) y aparecen nuevos picos. Estas nuevas líneas de difracción a<br />
2,7; 2,07 y 1,69Å son atribuidos al Fe2O3 (ficha ASTM 33-664, JCPDS-ICDD (1991)),<br />
quien además presenta un pico característico a 2,5Å, que en este caso está solapado con el<br />
correspondiente a la arcilla. La pérdida de regularidad de d020 de la muestra con el aumento<br />
de Fe fue observado por Chen et al 11 en la preparación de arcillas pilareadas con Fe.<br />
En la Fig.V.17 se muestran los difractogramas de los catalizadores de Fe soportados<br />
sobre Loc500. En este caso la incorporación de Fe afecta más al espaciado d001 que en la<br />
11 J.P.Chen, M.C.Hausladen and R.T.Yang, Journal of Catalysis 151 (1995) 135-146.<br />
1.6<br />
1.43<br />
151
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Al500, tanto en intensidad como en definición. En la muestra Fe20Loc aparecen casi todos<br />
los picos característicos, aunque algunos débiles, para el Fe2O3.<br />
3.1.3 Serie Rh/PILC<br />
Intensidad de R-X (u.a.)<br />
Intensidad de Rayos (u.a.)<br />
d 020<br />
2.7<br />
2.5<br />
0 5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Al500<br />
2<br />
Fe5Al<br />
Fe10Al<br />
Fe20Al<br />
Fig.V.16. Difractogramas de la serie Fe/Al500<br />
3.67<br />
2.5<br />
2.7<br />
Loc500<br />
Fe5Loc<br />
Fe10Loc<br />
Fe20Loc<br />
1.8 1.7<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70 75<br />
1.7<br />
2<br />
Fig.V.17 Difractogramas de la serie Fe/Loc500<br />
La incorporación de Rh sobre Al500 afecta solamente a la intensidad del pico<br />
152
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
correspondiente al espaciado basal y no a su distancia interplanar. El resto de la estructura<br />
no queda afectada, lo que era de esperar dada la poca cantidad de Rh incorporado. En la<br />
Fig.V.18 se muestran sus difractogramas.<br />
Intensidad de Rayos X (u.a.)<br />
3.2 Características texturales<br />
Al500<br />
Rh0.5Al<br />
Rh1.0Al<br />
Rh1.5Al<br />
5 10 15 20 25 30 35 40 45 50 55 60 65 70<br />
2<br />
Fig.V.18 Difractogramas de la serie Rh/Al500<br />
Por adsorción-desorción de N2 a 76K, se obtuvieron las isotermas correspondientes a los<br />
catalizadores.<br />
3.2.1 Serie Co/PILC<br />
a) Área superficial<br />
En la Fig.V.19 se presentan las isotermas de adsorción-desorción de N2 obtenidas para<br />
los catalizadores de la serie Co/Al500.<br />
La incorporación de la fase activa supone una ligera alteración de la textura del material<br />
de partida, prácticamente la misma para las tres muestras.<br />
En todos los casos se observa una disminución de la adsorción en la zona<br />
correspondiente a microporos, con respecto al soporte.<br />
En esta figura (Fig.V.19) se observa que la muestra con el 5 % de Co experimenta<br />
alteraciones levemente superiores a las de la Co10Al. Quizá esto se pueda explicar<br />
153
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
teniendo en cuenta que en la fase de impregnación, la posibilidad de difusión de la fase<br />
activa a los microporos será tanto mayor, cuanto mayor sea la concentración de la sal en la<br />
disolución, mientras que en la fase de secado, la Co5Al tendrá mayores posibilidades de<br />
migración, obstruyendo la boca de los poros y cerrándolos a la adsorción.<br />
El sistema mesoporoso apenas es afectado por el Co en esta serie, dado el paralelismo<br />
de las ramas de adsorción de las isotermas; sin embargo sí que se observa una disminución<br />
de la amplitud del lazo de histéresis, probablemente por estar el exceso de Co actuando<br />
como unión entre láminas afectando a las propiedades de las mismas.<br />
Vads. (cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al500<br />
Co5Al<br />
Co10Al<br />
Co20Al<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0 1,1<br />
P/Po<br />
Fig.V.19 Isotermas de adsorción-desorción de N2 para la serie Co/Al500<br />
En la Fig.V.20 se reúnen las isotermas correspondientes a la serie Co/Loc500. El efecto<br />
de la incorporación de la fase activa en la textura es muy superior que en la serie Co/Al500,<br />
a pesar de que las concentraciones son las mismas, produciéndose disminuciones del área<br />
superficial de hasta el 73% en la Co5Loc, y lo mismo de la porosidad global.<br />
La zona mesoporosa queda también afectada disminuyendo la adsorción.<br />
Aparentemente, y a diferencia de la serie Co/Al500, la interacción es en toda la muestra, no<br />
habiendo zonas preferenciales (microporos) de variación.<br />
154
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Vads (cc/g)<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Loc500<br />
Co10Loc<br />
Co20Loc<br />
Co5Loc<br />
0<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0 1,1<br />
P/Po<br />
Fig.V.20 Isotermas de adsorción-desorción de N2 para la serie Co/Loc500<br />
Los datos obtenidos de dichas isotermas se presentan en la tabla V.2. Se quiere hacer<br />
notar la menor interacción adsorbente/adsorbato en la serie Co/Loc500 señalando<br />
diferencias en la estructura de la misma con respecto a la Co/Al500.<br />
Tabla V.2. Datos obtenidos por adsorción de N2 para la serie Co/PILC<br />
b) Porosidad<br />
Muestra CBET SBET(m 2 /g) Vads (P/P0 0,98) cm 3 /g<br />
Al 500 818 336 0.199<br />
Co5Al 707 258 0.159<br />
Co10Al 748 265 0.155<br />
Co20Al 712 238 0.139<br />
Loc500 785 344 0.177<br />
Co5Loc 323 92 0.087<br />
Co10Loc 572 152 0.116<br />
Co20Loc 484 121 0.081<br />
155
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Microporosidad<br />
A partir de la rama de adsorción de la isoterma y siguiendo los criterios de elección de la<br />
curva t, se calculan los valores de t a P/P0=0,02 que pueden dirigir la elección de la<br />
isoterma standard. Éstos son:<br />
Co5Al Co10Al Co20Al Co5Loc Co10Loc Co20Loc<br />
t1(Å) 3,37 3,39 3,37 3,14 3,33 3,28<br />
En todos los casos, la curva que cumple con la condición de que su valor inicial de t sea<br />
menor o igual que t1, es la de Harkins y Jura o la 2 de Lecloux y Pirard.<br />
De ellos, y de su parte lineal, se construye la tabla V.3, en la que, a título de<br />
comparación, se han introducido también los valores correspondientes a los soportes.<br />
Tabla V.3 Datos obtenidos de la curva t de Harkins y Jura<br />
Muestra Vp(cm 3 /g) Ap(m 2 /g) St(m 2 /g)<br />
Al 500 0.091 223 113<br />
Co5Al 0.070 175 83<br />
Co10Al 0.071 178 87<br />
Co20Al 0.061 152 86<br />
Loc500 0.096 243 101<br />
Co5Loc 0.019 47 44<br />
Co10Loc 0.038 95 57<br />
Co20Loc 0.030 77 44<br />
De la tabla se observa que la presencia de Co en la Al500 disminuye en casi un 20% su<br />
microporosidad, variando más suavemente con la concentración de metal. En cambio en las<br />
muestras soportadas sobre Loc500 la disminución en la microporosidad es de casi un 60%.<br />
Esta mayor incidencia en los materiales sobre Loc500 se reflejan en el área superficial de<br />
las muestras. Dado que las concentraciones de Co y las condiciones de preparación son las<br />
mismas, esto podría indicar una especie diferente de los cationes pilareantes en ambos<br />
materiales, menores y más próximos cuando se emplea el catión Keggin del Locron.<br />
Mesoporosidad<br />
156
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Teniendo en cuenta el valor de t obtenido por Harkins y Jura y utilizando el método BJH<br />
se obtuvieron las distribuciones de poros de los datos de adsorción de N2. Las Fig.V.21 y<br />
V.22 muestran las correspondientes a los catalizadores de Co sobre Al500 y Loc500 .<br />
dV/dlog(D)<br />
0,20<br />
0,15<br />
0,10<br />
0,05<br />
0,00<br />
Co5Al<br />
Co10Al<br />
Co20Al<br />
10 100 1000<br />
D (Å)<br />
Fig.V.21 Distribución de poros para la serie Co/Al500<br />
Fig.V.22 Distribución de poros, para la serie Co/Loc500<br />
En la tabla V.4 se resumen los datos de mesoporosidad y del diámetro medio de poros<br />
157
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
de la distribución correspondiente.<br />
Tabla V.4. Datos obtenidos de la distribución de poros<br />
Al500 Co5Al Co10Al Co20Al Loc500 Co5Loc Co10Loc Co20Loc<br />
Vmp(cm 3 /g) 0.067 0.049 0.046 0.045 0.050 0.042 0.044 0.030<br />
dp(Å) 24 25 23 23 21 38 30 27<br />
3.2.2 Serie Fe/PILC<br />
a) Área superficial<br />
Las isotermas de adsorción-desorción de los catalizadores de Fe soportados sobre Al500<br />
se muestran en la Fig.V.23. Con el aumento de la fase activa disminuye el área superficial y<br />
se produce un aumento en la condensación a presiones relativas altas, indicando la<br />
presencia de poros de mayor tamaño. En el caso de la más alta concentración de Fe, la<br />
pérdida del paralelismo en el bucle de histéresis puede estar relacionada con la aparición de<br />
una cierta textura del óxido de Fe, no ocupando los espacios interlaminares.<br />
Vads (cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
Al500<br />
Fe5Al<br />
Fe10Al<br />
Fe20Al<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0 1,1<br />
P/Po<br />
Fig.V.23 Isotermas de adsorción-desorción de N2 para catalizadores de la serie Fe/Al500<br />
En la Fig.V.24 se muestran las isotermas correspondientes a los catalizadores de Fe<br />
soportados sobre Loc500: aparecen los mismos fenómenos que en el caso de la Al500<br />
como soporte, pero más acentuados, siendo mayores las variaciones en el área superficial<br />
158
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
por la incorporación de Fe. Las muestras Fe5Loc y Fe10Loc presentan características<br />
similares, mientras que la Fe20Loc acusa una pronunciada variación en el bucle de<br />
histéresis como en la Fe20Al.<br />
Vads (cc/g)<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
20<br />
0<br />
Loc500<br />
Fe5Loc<br />
Fe10Loc<br />
Fe20Loc<br />
0,0 0,1 0,2 0,3 0,4 0,5 0,6 0,7 0,8 0,9 1,0 1,1<br />
P/Po<br />
Fig.V.24 Isotermas de adsorción-desorción de N2 para catalizadores de la serie Fe/Loc500<br />
En la tabla V.5 se resumen los datos del área superficial obtenidos por el método BET,<br />
así como la constante de adsorción CBET. Igualmente se incluyen los datos correspondientes<br />
al volumen de poros a P/P0=0,98.<br />
Tabla V.5. Datos obtenidos por adsorción de N2 para catalizadores de Fe<br />
Muestra CBET SBET(m 2 /g) Vads (P/P0 0,98) (cm 3 /g)<br />
Al500 818 336 0.199<br />
Fe5Al 790 275 0.184<br />
Fe10Al 770 245 0.187<br />
Fe20Al 737 225 0.204<br />
Loc500 785 344 0.177<br />
Fe5Loc 636 167 0.143<br />
Fe10Loc 611 158 0.147<br />
Fe20Loc 571 131 0.148<br />
También aquí la incorporación de fase activa afecta más a la estructura del sólido en la<br />
159
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
serie Fe/Loc500 como se deduce de los valores de la constante CBET.<br />
Cabe notar, principalmente en el caso de los catalizadores soportados sobre Loc500, que<br />
ha habido un reordenamiento de poros, ya que el volumen total adsorbido (asimilable en<br />
forma líquida) a P/P0=0,98 da valores similares.<br />
b) Porosidad<br />
Microporosidad<br />
El análisis de las curvas t a partir de los datos de la rama de adsorción de la isoterma, se<br />
realizó imponiendo los criterios descritos en el capítulo anterior.<br />
Los valores iniciales del espesor de la capa adsorbida para cada catalizador a presión<br />
relativa de 0,02 son:<br />
Fe5Al Fe10Al Fe20Al Fe5Loc Fe10Loc Fe20Loc<br />
t1(Å) 3.41 3.39 3.39 3.34 3.34 3.33<br />
El valor de t dado por H & J a la misma presión es de 2,85 que cumple con la condición<br />
tHyJ t1, por lo que se eligió esta curva para el cálculo de la microporosidad. Aunque no se<br />
presenten las curvas, siempre se comprueba que exista una extrapolación posible a t=0 con<br />
Vads=0.<br />
Comparando siempre con los soportes se construyó la tabla V.6.<br />
Tabla V.6 Datos de microporosidad para catalizadores de Fe soportados sobre PILCs<br />
Muestra Vp(cm 3 /g) Ap(m 2 /g) St(m 2 /g)<br />
Al 500 0.091 223 113<br />
Fe5Al 0.068 169 106<br />
Fe10Al 0.060 149 96<br />
Fe20Al 0.054 135 90<br />
Loc500 0.096 243 101<br />
Fe5Loc 0.040 100 67<br />
Fe10Loc 0.038 94 64<br />
Fe20Loc 0.030 74 57<br />
En ambos casos se nota la sensibilidad de la microporosidad del soporte a la primera<br />
incorporación del metal, variando más levemente con la concentración del mismo.<br />
Mesoporosidad<br />
La distribución de poro de todas las muestras se obtuvo por aplicación del método BJH<br />
160
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
a los datos de adsorción de N2, utilizando el valor de t dado por Harkins y Jura. Las mismas<br />
se presentan en las Fig.V.25 y V.26 para los catalizadores soportados sobre Al500 y<br />
Loc500 respectivamente.<br />
dV/dlog(D)<br />
dV/dlog(D)<br />
0,4 Fe5Al<br />
Fe10Al<br />
Fe20Al<br />
0,2<br />
0,0<br />
0,2<br />
0,1<br />
0,0<br />
10 100 1000<br />
D(Å)<br />
Fig.V.25 Distribución de poros para la serie Fe/Al500<br />
Fe5Loc<br />
Fe10Loc<br />
Fe20Loc<br />
10 100 1000<br />
D(Å)<br />
Fig.V.26 Distribución de poros para la serie Fe/Loc500<br />
En la tabla V.7 se reúnen los datos del volumen de mesoporos y del diámetro medio de<br />
poros para estos catalizadores.<br />
161
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Tabla V.7 Serie Fe: Datos obtenidos de la distribución de poros<br />
Al500 Fe5Al Fe10Al Fe20Al Loc500 Fe5Loc Fe10Loc Fe20Loc<br />
Vmp(cm 3 /g) 0.067 0.081 0.098 0.109 0.050 0.068 0.069 0.070<br />
dp(Å) 24 27 30 36 21 34 37 45<br />
Al incorporar la fase activa aumenta el volumen de mesoporos y el tamaño medio de<br />
poros, debido tanto a la aparición de mesoporos de mayor tamaño como a la desaparición<br />
de microporos.<br />
3.2.3 Serie Rh/PILC<br />
a) Área superficial<br />
Por adsorción-desorción de N2 se obtuvieron las isotermas de los catalizadores de Rh<br />
soportados sobre Al500 de la Fig.V.27 Para concentraciones de 0,5 y 1% en Rh, las<br />
variaciones en el área superficial son muy leves, aumentando cuando la incorporación llega<br />
al 1,5% en Rh. Siempre se produce una disminución, en la adsorción a bajas presiones, con<br />
la incorporación de la fase activa.<br />
Vads(cc/g)<br />
140<br />
120<br />
100<br />
80<br />
60<br />
40<br />
Al500<br />
Rh0.5Al<br />
Rh1Al<br />
Rh15Al<br />
20<br />
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0<br />
P/Po<br />
Fig.IV.27 Isotermas de adsorción-desorción de N2 Serie Rh/Al500<br />
En la tabla V.8 se presentan los datos obtenidos de la isoterma comparados con los del<br />
soporte.<br />
162
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Tabla V.8 Valores de textura obtenidos por adsorción de N2 para catalizadores de Rh<br />
Muestra CBET SBET (m 2 /g) Vads (P/P0 0,98) cm 3 /g<br />
Al500 818 336 0.199<br />
Rh0,5Al 782 275 0.165<br />
Rh1Al 934 281 0.172<br />
Rh1,5Al 651 237 0.143<br />
b) Porosidad<br />
Microporosidad<br />
Los valores de espesor inicial de la capa adsorbida a una presión relativa de 0,02 son:<br />
Rh0,5Al = 3,4 Å<br />
Rh1Al = 3,41 Å<br />
Rh1,5Al = 3,39 Å<br />
siendo la curva adecuada para el análisis de la microporosidad, la de Harkins y Jura, o la 2<br />
de Lecloux y Pirard con t = 2,85Å.<br />
Los datos de microporosidad obtenidos por aplicación de la isoterma standard de<br />
Harkins y Jura se dan en la Tabla V.9.<br />
Tabla V.9. Datos de microporosidad para catalizadores de Rh sobre Al500<br />
Muestra Vp(cm 3 /g) Ap(m 2 /g) St(m 2 /g)<br />
Al500 0.091 223 113<br />
Rh0,5Al 0.075 190 85<br />
Rh1Al 0.079 201 80<br />
Rh1,5Al 0.067 137 64<br />
Mesoporosidad<br />
En la Fig.V.28 se muestran las distribuciones de poros de los catalizadores de Rh<br />
soportados sobre Al500. De la misma se observa que la distribución no es afectada<br />
notoriamente por la incorporación de Rh con una leve tendencia a disminuir la zona de<br />
microporos al aumentar la cantidad de Rh incorporada.<br />
163
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
dV/dlog(D)<br />
0,15<br />
0,10<br />
0,05<br />
0,00<br />
Rh0.5Al<br />
Rh1.5Al<br />
Rh1Al<br />
10 100 1000<br />
D (Å)<br />
Fig.V.28 Distribución de poros para la serie Rh/Al500<br />
En la tabla V.10 se dan los valores del volumen de mesoporos y el diámetro medio, los<br />
cuales confirman lo observado en las gráficas, respecto a la leve variación en la<br />
distribución de poros.<br />
Tabla V.10 Datos obtenidos de la distribución de poros para catalizadores de Rh<br />
Al500 Rh0,5Al Rh1Al Rh1,5Al<br />
Vmp(cm 3 /g) 0.067 0.051 0.053 0.059<br />
dp(Å) 23.4 24 24.5 24<br />
3.3 Características estructurales<br />
3.3.1 Grupos superficiales. Espectroscopía FTIR<br />
Por medio de esta técnica y con pastillas preparadas con KBr, se estudiaron los<br />
precursores calcinados a 500ºC, intentando identificar sus centros superficiales.<br />
3.3.1.1 Serie Co/PILC<br />
Antes de comenzar la identificación de grupos superficiales de la serie Co/PILC, se<br />
prepararon pastillas de KBr con Co(NO3)2 calcinado a 500ºC. El espectro presenta unas<br />
fuertes bandas de absorción a 575 y 665 cm -1 y bandas pequeñas a 1390 y 1620 cm -1 , que<br />
sirven como referencia.<br />
En la Fig.V.29, se presentan los espectros obtenidos para los catalizadores de Co<br />
164
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
soportados sobre Al500 incluyendo el correspondiente a Co(NO3)2·6H2O. En los espectros<br />
se acusa la presencia de Co superficial desde la muestra con el 5% en Co. Para el<br />
catalizador Co20Al, las bandas son significativas dando cuenta de la cantidad presente con<br />
respecto a las demás.<br />
Transmitancia (%)<br />
Al500<br />
Co5Al<br />
Co10Al<br />
Co20Al<br />
1390<br />
Nit Co<br />
665<br />
575<br />
2000 1800 1600 1400 1200 1000 800 600 400<br />
Nº de onda (cm -1)<br />
Fig.V.29 Espectros IR con pastillas de KBr para la serie Co/Al500<br />
Transmitancia (%)<br />
Co5Loc<br />
Co10Loc<br />
Co20Loc<br />
1390<br />
NitCo<br />
665<br />
570<br />
2000 1800 1600 1400 1200 1000 800 600 400<br />
Nº de onda (cm -1)<br />
Fig.V.30 Espectros IR con pastillas de KBr para la serie de Co/Loc500<br />
En la Fig.V.30 se presentan los espectros de los catalizadores de Co soportados sobre<br />
Loc500.Nuevamente se aprecia la presencia de Co superficial. Por esta técnica<br />
confirmamos la presencia de Co superficial ya revelado por DRX.<br />
165
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
3.3.1.2 Serie Fe/PILC<br />
Para comparar con los catalizadores de Fe, se calcinó el precursor TNAc de Fe y se<br />
analizó por IR con una pastilla de KBr, dando picos a 460, 535, 644 y 1380 cm -1 .<br />
Transmitancia (%)<br />
Al500<br />
Fe5Al<br />
Fe10Al<br />
Fe20Al<br />
TNac de Fe<br />
1380<br />
644<br />
460<br />
535<br />
2000 1800 1600 1400 1200 1000 800 600 400<br />
Nº de Onda (cm -1)<br />
Fig.V.31 Espectros Ir con KBr para catalizadores de Fe sobre Al500<br />
Transmitancia(%)<br />
Fe5Loc<br />
Fe10Loc<br />
Fe20Loc<br />
1380<br />
640<br />
535 460<br />
2000 1800 1600 1400 1200 1000 800 600 400<br />
Nº de onda (cm -1)<br />
Fig.V.32 Espectros IR de los catalizadores de Fe soportados sobre Loc500<br />
En el caso de estos catalizadores, la presencia del Fe no es tan evidente, aunque se nota una<br />
166
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
pequeña variación en la zona de bajos números de onda, mayor cuando el soporte es Al500.<br />
3.3.1.3 Serie Rh/PILC<br />
En el caso de los catalizadores de Rh soportados sobre Al500, no hay evidencia de la<br />
fase metálica. Generalmente las vibraciones asignadas a este metal aparecen en la zona de<br />
ultravioleta (UV).<br />
En la Fig.V.33 se muestran los espectros, verificando lo anteriormente señalado.<br />
Transmitancia (%)<br />
Al500<br />
Rh0.5Al<br />
Rh1Al<br />
Rh1.5Al<br />
2000 1800 1600 1400 1200 1000 800 600 400<br />
Nº de Onda (cm -1)<br />
Fig.V.33 Catalizadores de Rh soportados sobre Al500<br />
Para los catalizadores de Fe y Rh, esta técnica por IR no nos da evidencia de los metales<br />
superficiales, sin poder sacar conclusión al respecto.<br />
3.3.2 Acidez<br />
Completando la caracterización de los catalizadores preparados, se estudió la presencia<br />
de centros superficiales ácidos, por la técnica de adsorción de amoníaco y su seguimiento<br />
por ATG.<br />
3.3.2.1 Serie Co/PILC<br />
167
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
En la Fig.V.34, se muestran las curvas obtenidas para los catalizadores de Co soportados<br />
sobre Al500, con las mismas condiciones de análisis expuestas en los capítulos anteriores.<br />
Es de observar que la acidez depende fuertemente de la concentración del metal<br />
incorporado, pero no siempre de forma proporcional a ella. De esta figura y de la<br />
correspondiente a la Al500, se obtiene la siguiente relación en acidez para las muestras:<br />
Al500 > Co10Al > Co20Al > Co5Al<br />
En el capítulo IV, habíamos concluido que la acidez en los materiales pilareados con Al,<br />
está relacionada fundamentalmente con las imperfecciones superficiales, con los cationes y,<br />
en particular, con el Al de la capa octaédrica incompletamente coordinado y con el Al de<br />
los oligocationes pilareantes, sin contar, naturalmente, con la protonización de las<br />
moléculas hidratantes, ácidos Brönsted, por suponer que a la temperatura de tratamiento<br />
habrán desaparecido. Las dos primeras, para una misma arcilla dependerán de la superficie<br />
externa e interna asequible a la amina; la tercera, del número de pilares.<br />
Al incorporar un catión, la acidez puede sufrir una variación positiva, dependiendo de la<br />
naturaleza del catión, o negativa, dependiendo del punto de enlace. En definitiva, la acidez<br />
debe estar afectada por la nueva textura de la muestra y por la naturaleza y posición del<br />
catión incorporado. Como se ha visto en el apartado correspondiente a la textura, la<br />
muestra Co10Al, es la que conserva mayor microporosidad, mientras que la Co20Al<br />
presenta, relativamente, muy poca. Si la microporosidad significa accesibilidad al N2 los<br />
poros no accesibles a él no lo serán tampoco al NH3, entonces las aparentes anormalidades<br />
en la acidez deberán relacionarse primero, con la posición del catión; segundo, con el<br />
bloqueo de microporos, y por lo tanto con la inaccesibilidad tanto a los pilares, como a la<br />
superficie interna de las muestras; tercero, con la cuantía de óxido incorporado. Así,<br />
quedará como más ácida la muestra Co10Al y la menos ácida la Co5Al que, además de<br />
bloquear los ácidos del oligocatión, presenta un bajo contenido de óxido metálico<br />
potencialmente activo para la adsorción de amoniaco. La Co20Al también ocupará los<br />
centros del oligocatión, bloqueando además, el acceso a la superficie interna del sólido; no<br />
obstante, el elevado contenido de Co, le hace ocupar una posición intermedia.<br />
168
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Variación en Peso(%)<br />
105<br />
104<br />
103<br />
102<br />
101<br />
100<br />
99<br />
4.4<br />
3.6<br />
Co20Al<br />
Co5Al<br />
Co10Al<br />
98<br />
0 25 50 75 100 125 150 175 200 225 250<br />
4.8<br />
Tiempo(minutos)<br />
Fig.V.34 Adsorción-desorción de NH3 para la serie Co/Al500<br />
En la Fig.V.35 se muestran los resultados de la adsorción-desorción de NH3 para la serie<br />
Co/Loc500. De ella se puede destacar: 1º La menor adsorción de amoniaco, tanto física<br />
como química, con respecto a la serie Al500, relacionada casi exclusivamente con la acidez<br />
del material de partida; 2º Para una misma cantidad de Co incorporado existe una relación<br />
casi constante entre las pérdidas de centros ácidos (evaluados por fisi y quimisorción), en<br />
ambas series, siendo las mayores en las de bajos contenidos, lo que podría relacionarse,<br />
fundamentalmente, con la ocupación de los centros correspondientes de los oligocationes<br />
pilareantes. La presencia de mayor proporción de Co aumenta paralelamente el número de<br />
centros, si bien para grandes contenidos el efecto de bloqueo limita la accesibilidad del<br />
amoniaco a los centros de adsorción y, por tanto, el número total de centros.<br />
En general, la introducción de Co en los PILCs afecta la porosidad en todo su rango<br />
pero en el caso de la Co20Loc, como se observa en las isotermas de la Fig.V.20, estas<br />
variaciones no se cumplen de la misma forma. De ella se deduce que la zona microporosa<br />
es la más fuertemente intervenida, en consecuencia también su acidez.<br />
2.5<br />
1.5<br />
2.8<br />
169
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
NH3.<br />
Variación en peso (%)<br />
103<br />
102<br />
101<br />
100<br />
2.05<br />
2.98<br />
2.13<br />
Co10Loc<br />
Co5Loc<br />
Co20Loc<br />
99<br />
0 25 50 75 100 125 150 175 200 225 250<br />
Tiempo (minutos)<br />
Fig.V.35 Adsorción-desorción de NH3 para la serie Co/Loc500<br />
En la tabla V.11 se dan los valores obtenidos de las curvas de adsorción-desorción de<br />
Tabla V.11 Datos obtenidos por adsorción-desorción de NH3 para catalizadores de Co<br />
Muestra Fisisorción Quimisorción Centros ácidos Centros ácidos<br />
(meq/g) (meq/g) por g por m 2<br />
Co5Al 2,12 0,88 5,31 x 10 20 2,06 x 10 18<br />
Co10Al 2,82 1,65 9,92 x 10 20 3,75 x 10 18<br />
Co20Al 2,59 1,47 8,86 x 10 20 3,72 x 10 18<br />
Co5Loc 1,25 0,65 3,9 x 10 20 4,24 x 10 18<br />
Co10Loc 1,75 1,06 6,38 x 10 20 4,20 x 10 18<br />
Co20Loc 1,21 0,59 3,54 x 10 20 2,93 x 10 18<br />
3.3.2.2 Serie Fe/PILC<br />
1<br />
1.8<br />
1.1<br />
170
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
En la Fig.V.36 se muestran las curvas de adsorción-desorción de NH3 para los<br />
catalizadores de Fe soportados sobre Al500 y en la Fig.V.37, sobre la Loc500. Según los<br />
análisis de textura la variación de la porosidad es proporcional a la concentración de Fe,<br />
por lo que se supone que la difusión de las especies es mejor que en el caso del Co,<br />
empeorando con la concentración.<br />
En el caso de Fe5Al se aprecia, en la isoterma de la Fig.V.23, que la incorporación de Fe<br />
afecta levemente la región de presiones relativas elevadas, dando mayor evidencia de su<br />
incorporación, en la zona de microporos, afectando, en consecuencia, la acidez. Con el<br />
aumento de la concentración, parte del Fe no llega a la zona microporosa, quedando parte<br />
fuera. Para el Fe20Al, la concentración es lo suficientemente grande como para que, el<br />
efecto del óxido influya en el número total de microporos.<br />
La acidez nuevamente será consecuencia de dos efectos : pérdida de accesibilidad del<br />
material y contenido en fase activa. El contenido intermedio de Fe compensa la pérdida de<br />
la primera con el aumento de la segunda, produciéndose en las otras dos dominios<br />
contrapuestos.<br />
Variación en peso (%)<br />
105<br />
104<br />
103<br />
102<br />
101<br />
100<br />
3.3<br />
99<br />
0 50 100 150 200 250<br />
4.8<br />
4.2<br />
Tiempo (minutos)<br />
Fe10Al<br />
Fe5Al<br />
Fe20Al<br />
Fig.V.36 Adsorción-desorción de NH3 para la serie Fe/Al500<br />
En la Fig.V.37 se muestra la evolución del contenido de NH3 sobre la serie Loc500.<br />
En términos generales las muestras con Fe son ligeramente más ácidas que las muestras<br />
2.9<br />
2.3<br />
1.7<br />
171
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
con Co, salvo el caso de la Fe20Al donde la pérdida de accesibilidad es mayor.<br />
Variación en peso(%)<br />
104<br />
103<br />
102<br />
101<br />
100<br />
Fe20Loc<br />
2.95<br />
0 25 50 75 100 125 150 175 200 225 250<br />
3.5<br />
2.3<br />
Tiempo (minutos)<br />
Fe5Loc<br />
Fe10Loc<br />
Fig.V.37 Adsorción-desorción de NH3 para la serie Fe/Loc500<br />
En la Tabla V.12 se presentan, por esta técnica, los datos relativos a la acidez para los<br />
catalizadores de Fe.<br />
Tabla V.12 Datos de acidez para catalizadores de Fe/PILC<br />
Muestra Fisisorción Quimisorción Centros ácidos Centros ácidos<br />
(meq/g) (meq/g) por g por m 2<br />
Fe5Al 2,47 1,35 8,15 x 10 20 2,96 x 10 18<br />
Fe10Al 2,82 1,71 1,03 x 10 21 4,19 x 10 18<br />
Fe20Al 1,99 1 6,02 x 10 20 2,68 x 10 18<br />
Fe5Loc 2,06 1,35 8,15 x 10 20 5 x 10 18<br />
Fe10Loc 1,74 0,94 5,67 x 10 20 3,59 x 10 18<br />
Fe20Loc 1,35 1,35 4,96 x 10 20 3,79 x 10 18<br />
3.3.2.3 Serie Rh/PILC<br />
En la Fig.V.38 se muestran las curvas de adsorción-desorción de NH3 para la serie<br />
2.3<br />
1.6<br />
1.4<br />
172
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Rh/Al500.<br />
Variación en Peso (%)<br />
106<br />
104<br />
102<br />
100<br />
98<br />
Rh1.5Al<br />
Rh0.5Al<br />
Rh1Al<br />
5.7<br />
Rh1Al<br />
0 25 50 75 100 125 150 175 200 225 250<br />
5.4<br />
4.7<br />
Tiempo (minutos)<br />
Fig.V.38 Adsorción-desorción de NH3 para la serie Rh/Al500<br />
La ligera variación de la acidez con respecto al soporte, está justificada por las bajas<br />
concentraciones de metal incorporadas. El fenómeno se interpreta como una disminución<br />
de la acidez por la introducción de Rh, tapando centros ácidos. En el caso del Rh1Al, la<br />
mayor acidez encontrada está de acuerdo con la caracterización textural y la interpretación<br />
dada para los otros catalizadores.<br />
En la tabla V.13 se presentan los valores de acidez obtenidos de las curvas de adsorción-<br />
desorción de NH3.<br />
Tabla V.13 Datos de acidez para catalizadores de Rh/Al500<br />
Muestra Fisisorción Quimisorción Centros ácidos Centros ácidos<br />
(meq/g) (meq/g) por g por m 2<br />
Rh0,5Al 3,35 1,94 1,17 x 10 21 4,25 x 10 18<br />
Rh1Al 3,18 2,06 1,24 x 10 21 4,41 x 10 18<br />
Rh1,5Al 2,76 1,47 8,86 x 10 20 3,74 x 10 18<br />
3.4 Activación de precursores<br />
Puesto que la fase activa en la reacción de F-T, debe estar en forma metálica, la última<br />
3.3<br />
2.5<br />
3.5<br />
173
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
etapa de la preparación de los catalizadores debe ser la reducción de los óxidos a su estado<br />
metálico (activación).<br />
En la obtención de la fase metálica es preciso tener en cuenta que un parámetro<br />
importante de actividad es su grado de dispersión sobre el soporte, que debe ser lo más<br />
elevado posible, es decir, el tamaño de partícula de los cristalitos obtenidos, debe de ser lo<br />
más pequeño posible, compatible con su estabilidad. Puesto que la reducción necesita una<br />
energía mínima para producirse, trabajando a la temperatura correspondiente, se conseguirá<br />
tener una dispersión máxima. Ahora bien, la cinética de reducción en esas condiciones es<br />
muy lenta y será preciso aumentar la temperatura con el consiguiente efecto en la<br />
sinterización de la muestra y, por consiguiente, en el tamaño de los cristalitos metálicos. En<br />
la experimentación debe encontrarse el término medio para ambos efectos contrapuestos.<br />
El estudio de la reducibilidad de los precursores, se realizó por reducción térmica<br />
programada (RTP) mediante la cual se evaluaron las temperaturas necesarias para la<br />
obtención de la fase metálica.<br />
Los experimentos se realizaron a temperatura programada en una mezcla al 10% de H2<br />
en Ar, como se explicó en el capítulo II. De la evaluación del hidrógeno consumido a las<br />
diferentes temperaturas, se encontró la temperatura adecuada para la reducción total.<br />
3.4.1 Serie Co/PILC<br />
En la Fig.V.39 se muestran las curvas de RTP obtenidas para la serie Co/Al500 y en la<br />
Fig.V.40 para la Co/Loc500.<br />
En general, en la literatura se encuentra que la reducción del óxido de Co (Co2O3)<br />
presenta dos picos de TPR en el consumo de hidrógeno, correspondientes a las etapas de<br />
reducción estequiométrica (Co 3+ Co 2+ Co 0 ), a 352 y 384ºC. Pero también pueden<br />
aparecer los picos y no estar resueltas las etapas de reducción, es decir, que el segundo pico<br />
no consuma el doble de hidrógeno que el primero 12 . Para el caso de catalizadores de<br />
Co/Al2O3 se ha encontrado que estas etapas no han sido resueltas probablemente debido a<br />
la presencia de distintos tipos de óxido 13 , de hecho por DRX se ha encontrado como<br />
predominante el Co3O4, suma de CoO y Co2O3. En estos catalizadores la presencia de un<br />
ancho pico que se extiende desde los 500ºC hasta los 800ºC, se ha asignado a la reducción<br />
de fases superficiales amorfas altamente dispersas 14 . Espinelas del tipo CoAl2O4, formadas<br />
12 D.Shanke, S.Vado, E.Z.Bleklan, A.M.Hilmen, A.Hoff and A.Holmen, J. Catal. 155 (1995).<br />
13 P.Arnoldy and J.A.Moulyn, J.Catal. 93 (1985) 38.<br />
14 A.M.Hilmen, D.Xhanke and A.Holmen, Catalysis Letters 38 (1996) 143-147.<br />
174
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
por difusión de iones de Co en la red de la alúmina durante la calcinación se reducen a<br />
temperaturas del orden de los 950ºC 15 .<br />
De lo anteriormente dicho se puede concluir que, a la vista del TPR de la Fig.V.39, el<br />
Co de la serie Co/Al500, está formando una mezcla de óxidos, estando el menos oxidado<br />
en posiciones energéticamente diferentes extra e intrared, correspondientes a los picos a<br />
280ºC y 320ºC. Adicionalmente podría hablarse de fases dispersas que podrían adscribirse<br />
a Co incorporado a los pilares de Al, bien superficialmente, bien formando la consiguiente<br />
espinela y que vienen dadas por el ancho pico a partir de los 600ºC. Estas fases amorfas<br />
permanecen constante con la concentración de Co, no así la distribución de los óxidos, lo<br />
que se observa en la variación del área relativa de los picos.<br />
H 2 consumido (u.a.)<br />
280ºC<br />
320ºC<br />
Co20Al<br />
Co10Al<br />
Co5Al<br />
690ºC<br />
810ºC<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.39 TPR de la serie Co/Al500<br />
A una temperatura de aproximadamente 600ºC la mayor parte del óxido de Co se<br />
encuentra en estado reducido.<br />
Los TPR de las muestras de Co soportadas sobre Loc500 (Fig.V.40) son diferentes.<br />
En este caso, y de acuerdo con la hipótesis anterior, sólo una fracción del Co estaría<br />
depositado extralaminarmente como Co2O3 ; el resto lo estaría intralaminarmente,<br />
15 R.L.Chin and D.M.Hercules, J.Phys.Chem. 86 (1982) 360.<br />
175
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
formando CoO, menos oxidado por problemas difusionales, incorporándose en la<br />
reducción final al óxido superficial. Sólo una pequeñísima fracción estaría incorporada al<br />
pilar, formando compuestos con él y reduciéndose a temperatura más elevada. A 600ºC<br />
aseguramos una casi completa reducción de la muestra.<br />
H 2 consumido (u.a.)<br />
3.4.2 Serie Fe/Pilc<br />
300ºC<br />
335ºC<br />
Co20Loc<br />
Co10Loc<br />
Co5Loc<br />
850ºC<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.40 TPR de catalizadores de Co soportados sobre Loc500<br />
En la Fig.V.41, se muestra el TPR de los catalizadores de Fe soportados sobre Al500.<br />
Presenta dos picos de consumo de hidrógeno que varían relativamente entre sí con la<br />
concentración del metal.<br />
Para mezclas físicas de Fe2O3/Al2O3 se ha encontrado que la reducción comienza<br />
alrededor de 400ºC hasta los 700ºC en cambio, para catalizadores de Fe2O3/SiO2 los picos<br />
de reducción encontrados aparecen a 300ºC y a 450ºC 16 .<br />
En el caso que nos atañe, los picos se presentan a 340 y 500ºC, lo que está de acuerdo<br />
con la literatura, ya que nuestro soporte es un aluminosilicato. Los picos a 700ºC podrían<br />
16 N.Hurst, S.J.Gentry and A.Jones, Catal. Rev.-Sci. Eng. 24:2 (1982 233-309.<br />
176
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
deberse, al igual que en el caso del Co, al Fe incorporado al Al de los pilares, o a presencia<br />
de aluminatos o silicato metálico 17 .<br />
H 2 consumido (u.a.)<br />
340ºC<br />
Fe5Al<br />
500ºC<br />
Fe20Al<br />
Fe10aAl<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.41 TPR de catalizadores de Fe soportados sobre Al500<br />
Los perfiles de reducción de los catalizadores soportados sobre Loc500 se muestran en<br />
la Fig.V.42 En este caso, como ocurrió con el Co, la presencia del pico a mayores<br />
temperaturas, está notablemente disminuida y la relación entre los dos primeros picos se<br />
mantiene con la concentración de Fe, lo que bien podría atribuirse a la reducción en dos<br />
pasos antes mencionada, estando todo el óxido, tanto intra como extralaminar, como<br />
Fe2O3.<br />
Podemos concluir que en ambos casos existe una mezcla de óxidos, o por lo menos se<br />
comportan como diferentes tipos de óxidos, por efecto del soporte, ante la reducción.<br />
17 V.C.Holen and A.Clark, J.Catal. 11 (1968) 305.<br />
177
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
H 2 consumido (u.a.)<br />
345ºC<br />
Fe5Loc<br />
500ºC<br />
Fe20Loc<br />
Fe10Loc<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.42 TPR de catalizadores de Fe sobre Loc500<br />
Para una temperatura de aproximadamente 600ºC en presencia de hidrógeno, tendríamos<br />
reducido gran parte de los óxidos para los catalizadores soportados sobre los PILCs. Es<br />
decir, el Co y el Fe pueden incorporarse extra e intralaminarmente; cuando el pilar procede<br />
de la hidrólisis del Cl3Al, una fracción importante, incorporada al espacio interlaminar, lo<br />
está como MeO ; el resto, extralaminarmente, lo está como Me2O3. Cuando el pilareado se<br />
hace por el método rápido, con incorporación de Locron, el Co penetra preferentemente en<br />
la interlámina, siendo su oxidación incompleta (CoO), mientras que el Fe, tanto extra como<br />
interlaminar lo está como Fe2O3.<br />
3.4.3 Serie Rh/PILC<br />
En la Fig.V.43 se muestran los perfiles de reducción de la serie Rh/Al500.<br />
La temperatura de reducción del Rh, como es sabido, es baja, presentando un pico a<br />
120ºC. Las variaciones observadas a temperaturas mayores de 200ºC pueden corresponder<br />
a variaciones de la línea base del equipo, ya que las cantidades de Rh de las muestras es<br />
bajo (hasta 1,5%), si bien no puede descartarse la incorporación al pilar de Al, según las<br />
suposiciones anteriores.<br />
178
Capítulo V Catalizadores para la reacción de Fischer-Tropsch<br />
H 2 consumido (u.a.)<br />
120ºC<br />
Rh1.5Al<br />
Rh1Al<br />
Rh0.5Al<br />
100 200 300 400 500 600 700 800 900 1000<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.V.43 TPR de catalizadores de Rh soportados sobre Al500<br />
Con temperaturas de alrededor de 250ºC, en atmósfera con H2, las muestras de Rh<br />
quedan totalmente reducidas.<br />
179
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
APLICACIÓN A LA REACCIÓN DE FISCHER-TROPSCH<br />
El último de los objetivos planteados en este trabajo es estudiar el comportamiento<br />
catalítico de los catalizadores sintetizados en la reacción de Fischer-Tropsch (FT).<br />
1. Introducción<br />
Generalmente, el mecanismo de FT es una simple polimerización que sigue una<br />
determinada distribución de productos denominada distribución de Anderson-Schulz-Flory<br />
(ASF). Esta distribución es una relación lineal del logaritmo del rendimiento de los<br />
productos (en moles) frente al número de carbones 1 . La pendiente de esta recta se relaciona<br />
con el parámetro “”, que determina la probabilidad de crecimiento de las cadenas y que<br />
depende principalmente del centro activo.<br />
La distribución de productos obtenida, se sitúa en un amplio rango de tamaño en<br />
cadenas de carbonos. En la síntesis industrial de gasolinas, los hidrocarburos gaseosos se<br />
separan fácilmente, en cambio las ceras obtenidas necesitan un procedimiento adicional,<br />
craqueo, hidrocraqueo catalítico, según se ha dicho antes, para obtener hidrocarburos<br />
líquidos, lo que encarece el proceso. Por lo tanto la mejora del proceso pasa por poder<br />
aumentar su selectividad a productos de cadenas no superiores a 10-12 átomos de carbono.<br />
Las reacciones encontradas en la síntesis de F-T son muy variadas y su cuantía depende<br />
tanto del catalizador como de las condiciones de reacción. Las principales reacciones<br />
conocidas son 2 :<br />
Reacciones de formación de productos:<br />
Reacciones secundarias:<br />
1- Olefinas<br />
2nH2 + nCO CnH2n + nH2O<br />
2- Parafinas<br />
(2n+1)H2 + nCO CnH2n+2 + nH2O<br />
3- Alcoholes<br />
2nH2 + nCO CnH2n+2O + (n-1)H2O<br />
1 R.B. Anderson, The Fischer-Tropsch Synthesis, Academic Press, Orlando, 1984.<br />
2 R.D.Srivastava, S.Rao, G.Conquegrane and G.J.Sitiegel, Hydrocarbon Proccesing, February (1990) 59-68.<br />
180
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
4- Formación de gas de agua<br />
H2O + CO CO2 + H2<br />
5- Material carbonoso superficial (precursor de coque)<br />
(x + (y/2))H2 + xCO CxHy + xH2O<br />
6- Reacción de Boudouard o de desproporción<br />
CO + CO CO2 + C<br />
7. Oxidación-reducción del catalizador<br />
a) yH2O + xM MxOy + yH2<br />
b) yCO2 + xM MxOy + yCO<br />
8. Formación de carburos metálicos<br />
yC + xM MxCy<br />
Las condiciones de reacción no están preestablecidas, sino que dependen tanto del<br />
catalizador como del equipo de reacción, aunque se sigue algunas líneas generales.<br />
Para la formación de gasolinas sintéticas, existe una preferencia lógica en la<br />
composición del gas reactivo, que es la relación estequiométrica H2/CO=2, aunque se han<br />
estudiado otras 3 . La temperatura y presión de reacción, generalmente están en el rango de<br />
200-300ºC y 1-20 bares respectivamente, prefiriéndose presiones elevadas 4 . Los tipos de<br />
reactores utilizados también son muy variados, siendo especialmente utilizados los<br />
standard de lecho fijo y de lecho fluidizado con modificaciones para mejorar el proceso 5 .<br />
En este trabajo se realizaron los test catalíticos en reactores standard de lecho fijo, en los<br />
equipos reseñados en el Cap.II, con relaciones H2/CO, 2 y 0,55 a presiones atmosférica y<br />
de 20 bares, con el fin de analizar el comportamiento de los catalizadores preparados (Co,<br />
Fe y Rh soportados sobre PILC) en cuanto a conversión y selectividad. Si bien, como se<br />
vio en los capítulos anteriores, se ha llegado a preparar hasta 15 catalizadores, no todos<br />
fueron probados. La información recibida en el análisis de resultados, se fue<br />
retroalimentando al ensayo, seleccionando en consecuencia los pasos a seguir.<br />
2. Condiciones de reacción<br />
3 M.A.Vannice, Catalysis Rev.-Sci.Eng., 14 :2 (1976) 153-191.<br />
4 E.Iglesia, S.Reyes, R.Madon and S.Soled, Advances in Catalysis, V.39.<br />
5 M.E.Dry, Applied Industrial Catalysis, V.2 (1983).<br />
181
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
2.1 Efecto de la presión<br />
Se ha trabajado a presión ambiental y a 20 bares de presión, analizando en cada caso los<br />
productos, buscando las condiciones adecuadas para obtener la mayor información posible<br />
del proceso con los catalizadores preparados.<br />
2.1.1 Ensayo a presión atmosférica<br />
La experimentación se ha realizado sobre catalizadores de Fe/Al500 con contenidos de<br />
5, 10 y 20% de Fe. La mezcla reactiva se utilizó con una relación H2/CO=2 y con una<br />
velocidad espacial GHSV=7000 h -1 . Se cargó 0,5 g de catalizador con un tamaño de tamiz<br />
0,25-0,4 mm, a fin de minimizar las etapas físicas de la reacción. Debido a que el reactor<br />
utilizado es de vidrio, las muestras fueron reducidas in situ a 500ºC en un flujo de H2/He al<br />
10% durante 6 horas, previo a la reacción, y no a 600ºC como correspondería según lo<br />
extraído del Cap.V.<br />
Dada la escasa actividad de los catalizadores en esta condición, hubo que trabajar a<br />
temperaturas elevadas (hasta 500ºC) para obtener conversiones apreciables, lo que llevó a<br />
una rápida desactivación de los catalizadores y a una selectividad a productos no deseados.<br />
El análisis de los productos se realizó en el equipo descrito en el capítulo II. Sólo se ha<br />
detectado productos gaseosos, como se observa en la Fig.VI.1, donde se muestra el efecto<br />
de la temperatura en la selectividad a los productos obtenidos para cada uno de los<br />
catalizadores de la serie.<br />
Como se puede apreciar, la selectividad a hidrocarburos va disminuyendo, aunque<br />
ligeramente, conforme aumenta la temperatura y el contenido de fase activa. Este último<br />
efecto fue apreciado por Barrault et al 6 trabajando en esta reacción a presión atmosférica y<br />
450ºC con laponitas pilareadas con Al/Fe. Atribuyeron esto a que el Fe es transformado vía<br />
redox con CO en distintas formas de óxidos y carburos de Fe. Estas reacciones modifican<br />
la actividad, y esto aumenta con la cantidad de Fe presente. Se ha comprobado 7 que ciertas<br />
especies de carburos inhiben la actividad, hasta llegar a ser totalmente inactivas en FT,<br />
generando CO2 en su formación 8 .<br />
6 J. Barrault, L. Gatineau, N. Hassoun and F. Bergaya. Energy and Fuels, 6, (1992) 760-763.<br />
7 O.V. Krylov, O.S. Morozova and T.I. Khomenko. Kinetics and Catalysis, v.35, n 6 (1994) 741-755.<br />
8 M.D. Lee, J.F. Lee, C.S. Cheng and T.Y. Dong. Appl. Catal. v 72 n 2 (1992) L67.<br />
182
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Selectividad (%)<br />
100<br />
90<br />
80<br />
70<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
0<br />
Etano<br />
Metano CO 2<br />
Fe5Al<br />
Etileno<br />
350 400 450 500<br />
Etano<br />
Fe10Al<br />
Etileno<br />
Metano CO 2<br />
350 400 450 500<br />
Temperatura ( ºC )<br />
Etano<br />
Fe20Al<br />
Etileno<br />
Metano CO 2<br />
350 400 450 500<br />
Fig.VI.1 Selectividad de productos en función de T para la serie Fe/Al500<br />
En la Fig.VI.2 se muestra el efecto de la temperatura en la conversión de CO, siendo<br />
solo apreciable a partir de 450ºC, donde el CO2 es el producto principal de la reacción<br />
(Fig.VI.1). La baja actividad en estos catalizadores podría explicarse, teniendo en cuenta<br />
los resultados del capitulo V, y la temperatura a la que se hizo la reducción, por la probable<br />
presencia de fases de óxidos de Fe. Se ha probado 9 que la presencia de las fases -Fe2O3 y<br />
-Fe2O3 producen metano y pequeñas cantidades de olefinas con baja conversión, siendo<br />
mucho menos activo que el Fe 0 . En estas condiciones, además del CO2 proveniente de la<br />
formación de carburos, como se ha señalado antes, aparece el producido por la reacción de<br />
desproporción del CO, favorecida 10 sobre superficies de Fe a 400-600ºC.<br />
La desactivación de los catalizadores es muy rápida (10 horas) observándose la<br />
presencia de coque después de la reacción, confirmando los procesos anteriormente<br />
descritos.<br />
9 D.P. Shashkin, Yu.V. Maksimov, P.A. Shiryaev and V.V. Matveev. Kinet. Katal. v 32 n5 (1991) 1200.<br />
10 Kirk-Othmer. Encyclopedia of Chemical Technology. Wiley Interscience.N.Y. (1980).<br />
183
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Conversión ( % )<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
Fe5Al<br />
Fe10Al<br />
Fe20Al<br />
250 300 350 400 450 500<br />
Temperatura ( ºC )<br />
Fig.VI.2 Conversión de CO en función de la temperatura para catalizadores de Fe/Al500<br />
Puesto que la formación de hidrocarburos de mayores cadenas de C es prácticamente<br />
inexistente no parece que se ponga en juego ninguna de las características específicas del<br />
soporte (tamaño de poro, reactividad en entornos confinados) y el catalizador actúa como<br />
sobre cualquier soporte convencional.<br />
2.1.2 Ensayo a presión elevada<br />
A fin de analizar la incidencia de la presión de reacción en el proceso, se probó el<br />
catalizador con mayor contenido de fase activa de la serie Fe/Al500, Fe20Al, a 20bares.<br />
La experimentación se realizó en el equipo de alta presión detallado en el Capítulo II<br />
bajo las siguientes condiciones de reacción:<br />
Flujo total de reactivos: 50 ml/min<br />
Relación de reactivos H2/CO: 2<br />
Presión de trabajo: 20 bares<br />
Rango de temperatura: 180 -320ºC<br />
Peso catalizador: 0,35 g<br />
Tamaño catalizador: 0,25 -0,40 mm<br />
184
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
En estas condiciones, la velocidad espacial es 7000 h -1 y el W/F 2,6x10 -3 g h/mmol.<br />
Los catalizadores, previo a su utilización fueron reducidos in situ a 600ºC durante 1 hora<br />
y luego dejados enfriar en He hasta temperatura ambiente. Posteriormente se subió la<br />
presión hasta 20 bares, se introdujo la mezcla reaccionante y se llevó a la temperatura<br />
inicial de reacción. Una vez estabilizada la reacción (20 h) se comenzó el análisis.<br />
El análisis cromatográfico de los productos de reacción se llevó a cabo con el equipo<br />
descrito en el Cap.II que permitía identificar los productos hasta un determinado Cn, en este<br />
caso C10, quedando una fracción indeterminada de ceras. La conversión se obtiene a partir<br />
del sumatorio de los productos analizados, con lo que siempre da un valor inferior al real.<br />
Se quiere destacar aquí, siendo válido para el resto de las operaciones, la dificultad del<br />
análisis, de acuerdo con lo indicado en la literatura 11 al respecto.<br />
El efecto de la temperatura en la conversión para el Fe20Al se da en la Fig.VI.3, que<br />
correspondería a una zona casi lineal de la exponencial creciente característica de estas<br />
representaciones.<br />
Conversion de CO (%)<br />
18<br />
17<br />
16<br />
15<br />
14<br />
13<br />
12<br />
11<br />
10<br />
9<br />
8<br />
7<br />
6<br />
5<br />
4<br />
3<br />
2<br />
1<br />
Fe20Al<br />
0<br />
230 240 250 260 270 280<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.3 Conversión en función de la temperatura para el catalizador Fe20Al a 20 bares<br />
11 M.E. Dry. Catalysis Science and Technology. J.R.Andersson and M. Boudart ed. Springer-Verlag (1981) Chapter 4<br />
“The Fischer-Tropsch Synthesis”.<br />
185
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
La distribución de productos en función de la temperatura se da en la Fig.VI.4. Para<br />
facilitar la interpretación de los resultados obtenidos, se agruparon los productos en<br />
hidrocarburos gaseosos, líquidos y alcoholes, separando por interés, el metano y el CO2.<br />
Selectividad(%)<br />
55<br />
50<br />
45<br />
40<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
Fe20Al<br />
C 2 -C 5<br />
CH 4<br />
C 6 -C 10<br />
CO 2<br />
C-OHs<br />
240 250 260 270 280 290<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.4 Selectividad en función de la temperatura para Fe20Al<br />
De la comparación de ambos resultados se puede concluir que el aumento de la presión<br />
ha supuesto un aumento notable de la conversión, empezando los primeros resultados a<br />
240ºC y apareciendo ya hidrocarburos superiores (C6-C10) que aumentan ligeramente con la<br />
temperatura. También aparece una fracción importante de metano e hidrocarburos gaseosos<br />
y CO2 que aumenta con la temperatura alcanzando a 280ºC una selectividad casi del 20%.<br />
Es de destacar la aparición de alcoholes que a la temperatura más baja, 240ºC, alcanzan<br />
hasta un 15% en selectividad. Todos estos resultados son similares a los de los<br />
catalizadores convencionales, con la ventaja de que no tienen estabilizadores (K o Cu) y<br />
que han mantenido al menos durante siete días una actividad constante.<br />
Visto que los resultados a esta presión se presentan interesantes, los ensayos que se<br />
presentan de ahora en adelante fueron realizados con las mismas condiciones de reacción,<br />
en cuanto a presión, flujo total de reactivos, peso y tamaño del catalizador y rango de<br />
temperaturas.<br />
186
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
2.2 Efecto de la temperatura<br />
El efecto de la temperatura se ha estudiado en cada una de las reacciones y con cada uno<br />
de los catalizadores reseñados en este estudio, por lo que será discutido en cada punto. En<br />
términos generales, la conversión así como el tamaño de las cadenas sobre catalizadores de<br />
Co y Rh y la producción de CO2 en los de Fe, aumentan con la temperatura.<br />
2.3 Efecto de la relación H2/CO<br />
La reacción de FT es altamente exotérmica, principalmente para relaciones H2/CO altas,<br />
donde la formación de agua y ceras es considerable. Mucho esfuerzo 12 se ha realizado en<br />
este campo intentando controlar la temperatura de reacción, principalmente en el sistema<br />
de reacción. Para bajas relaciones de H2/CO la reacción se controla mejor, por lo que es<br />
interesante trabajar en esas condiciones 13 . No obstante las distintas relaciones afectan a la<br />
distribución de productos. Para una relación H2/CO de 2 la reacción tiende a formar<br />
hidrocarburos de cadenas largas y alcoholes y para 0,5 es favorecida la formación de<br />
hidrocarburos más cortos, de CO2 y de coque, por lo que la desactivación es más rápida 14 .<br />
Para comprobar el efecto de la relación de los reactantes se ha trabajado sobre el<br />
catalizador Co20AL a dos relaciones de H2/CO; 2 y 0,55 manteniéndose constantes el resto<br />
de los parámetros y haciendo el análisis hasta C20.<br />
Los resultados para la selectividad global se dan en la Fig.VI.5, para las dos relaciones.<br />
Para la relación mayor se aprecia una alta selectividad para los hidrocarburos C1-C5 , con<br />
un aumento en la producción relativa de metano con la temperatura. La selectividad a<br />
hidrocarburos líquidos es mayor para la relación 0,55 aumentando con la temperatura. La<br />
producción de hidrocarburos pesados, en cambio, disminuye con la temperatura con ambas<br />
relaciones. Los alcoholes y el CO2 se mantiene relativamente bajos en ambos casos, siendo<br />
un poco mas elevada, para la mezcla H2/CO=0,55. La diferencia más destacada en las<br />
selectividades está dada por el metano, mayor para la relación 2, y por los hidrocarburos<br />
más pesados (C11-C20), con mayor selectividad para la relación 0,55. Este último hecho,<br />
contrario a lo esperado, es destacado por Dry 15 , quien lo asocia a problemas difusionales de<br />
los productos, debido a las altas energías de activación encontradas cuando la relación de<br />
reactivos es baja utilizando catalizadores de Fe.<br />
12 M.E. Dry. Applied Industrial Catalysis 2. B.E. Leach ed. Academic Press (1983)<br />
13 R.D. Srivastava, V.U. Rao, G. Cinquegrane and G.J. Stiegel. Hydrocarbon Processing (1990) 59-68<br />
14 M.A. Mc Donald and M.F. Zarochak. Proc 8 th Indirect Liquefaction Contractor`s Review Meeting. Pittsburg (1987).<br />
15 M.E.Dry. Catalysis Science and Technology. The Fischer-Tropsch Synthesis. Chap. 4 (1981).<br />
187
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Fig.VI.5 Selectividad en función de la temperatura para Co20Al y H2/CO: 2 y 0,55<br />
La conversión viene dada en la Fig.VI.6, siendo mucho más elevada para el caso de la<br />
relación 2, lo que sugiere, teniendo en cuenta las selectividades, que esta relación es más<br />
adecuada a fin de conseguir mayores rendimientos en la producción de gasolinas.<br />
Conversión de CO (%)<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
Co20Al (0,55)<br />
Co20Al (2)<br />
0<br />
220 240 260 280 300<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.6 Conversión en función de la temperatura para el catalizador Co20Al con H2/CO: 2; 0,55<br />
188
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
La distribución de hidrocarburos, en función del número de carbonos, está reseñada en<br />
la Fig.VI.7, donde se mantiene prácticamente constante al variar la relación de reactivos,<br />
aumentando las de los ligeros hasta C7, para la mayor relación. En ninguno de los casos<br />
aparecen productos mayores que C18.<br />
Es de destacar la menor presencia de olefinas para la relación 2, siendo<br />
aproximadamente del 20% frente a casi 40% para la relación 0,55.<br />
Selectividad (%)<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Al, H 2 /CO=2<br />
P=20 bares<br />
230°C<br />
250°C<br />
270°C<br />
12<br />
10<br />
0<br />
0<br />
0 4 8 12 16 20 0 4 8 12 16 20<br />
Nº de Carbones<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Al, H 2 /CO=0.55<br />
P=20 bares<br />
230°C<br />
250°C<br />
270°C<br />
Fig.VI.7 Selectividad de hidrocarburos C2-C20 frente al número de C para Co20Al<br />
Trabajos realizados con relaciones similares 16 a 7atm de presión con catalizadores de Co<br />
promovidos, coinciden con estos resultados, revelando una mayor presencia de olefinas<br />
(70%) en las gasolinas para la relación de 0,5 que para la relación H2/CO=2 (20% de<br />
olefinas).<br />
3. Efecto de los catalizadores<br />
3.1 Naturaleza del catalizador<br />
Para estudiar el efecto de la naturaleza de fase activa, se realizaron ensayos con los<br />
catalizadores con mayor fase activa de la serie soportados sobre Al500, con H2/CO=2.<br />
En la Fig.VI.8 se muestra la conversión en función de la temperatura sobre los<br />
catalizadores Co20Al, Fe20Al y Rh1,5Al, con el análisis hasta C10.<br />
16 H.Pines. The Chemistry of Catalytic Hidrocarbon Conversions. Academis Press (1981). Chap.8.<br />
189
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Conversion de CO (%)<br />
18<br />
17<br />
16<br />
15<br />
14<br />
13<br />
12<br />
11<br />
10<br />
9<br />
8<br />
7<br />
6<br />
5<br />
4<br />
3<br />
2<br />
1<br />
0<br />
Co20Al<br />
Fe20Al<br />
Rh1.5Al<br />
220 230 240 250 260 270 280<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.8 Conversión en función de la temperatura para los catalizadores Co20Al, Fe20Al y Rh1,5Al<br />
Las conversiones obtenidas muestran la buena actividad de los catalizadores en<br />
comparación con los datos de la literatura. Cabe notar que los ensayos se prolongaron<br />
aproximadamente por 7 días para cada catalizador, sin notar desactivación.<br />
En las figuras VI.9, VI.10 y VI.11, se muestra la variación de la selectividad de los<br />
productos en función de la temperatura para los catalizadores en cuestión.<br />
Selectividad(%)<br />
55<br />
50<br />
45<br />
40<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
Co20Al<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
CH 4<br />
C-OH<br />
CO 2<br />
220 230 240 250 260 270 280<br />
Temperatura(ºC)<br />
Fig.VI.9 Selectividad en función de la temperatura para Co20Al<br />
190
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Selectividad(%)<br />
Selectividad(%)<br />
55<br />
50<br />
45<br />
40<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
55<br />
50<br />
45<br />
40<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
Fe20Al<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
CH 4<br />
C-OHs<br />
CO 2<br />
240 250 260 270 280 290<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.10 Selectividad en función de la temperatura para Fe20Al<br />
Rh1,5Al<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
CH 4<br />
C-OHs<br />
CO 2<br />
240 250 260 270 280 290<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.11 Selectividad en función de la temperatura para Rh1,5Al<br />
191
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Los tres catalizadores presentan características interesantes. En todos la mayor<br />
selectividad es hacia hidrocarburos ligeros C2 -C5, seguidos de metano.<br />
El catalizador de Rh es el que más selectividad presenta a alcoholes, pero también a<br />
CO2, y la más baja producción de gasolinas.<br />
El de Fe es el más selectivo a C2-C5 y presenta entre sus productos tanto alcoholes como<br />
hidrocarburos C6-C10, además se destaca el aumento a CO2 con la temperatura, observado<br />
en los test a presión atmosférica.<br />
El catalizador de Co muestra la mayor selectividad a hidrocarburos líquidos y baja<br />
producción relativa de CO2 y alcoholes. La producción de hidrocarburos líquidos aumenta<br />
levemente con la temperatura, en detrimento del CH4, efecto más acusado a temperaturas<br />
superiores.<br />
En general, las características encontradas en las selectividad en función de la fase<br />
activa, se corresponden con las tendencias que aparecen en bibliografía.<br />
Para observar la variación en conjunto de la selectividad a hidrocarburos en función del<br />
número de carbones para las distintas temperaturas, se construyeron las representaciones de<br />
las figuras VI.12, VI.13 y VI.14 para los catalizadores de Co, Fe y Rh respectivamente.<br />
Selectividad (%)<br />
16<br />
15<br />
14<br />
13<br />
12<br />
11<br />
10<br />
9<br />
8<br />
7<br />
6<br />
5<br />
4<br />
3<br />
2<br />
1<br />
0<br />
Co20Al<br />
220 ºC<br />
230 ºC<br />
240 ºC<br />
250 ºC<br />
260 ºC<br />
270 ºC<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
n (nº de C)<br />
Fig.VI.12 Selectividad en función del número de C, a distintas temperaturas con el catalizador Co20Al<br />
192
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Selectividad (%)<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Fe20Al<br />
240ºC<br />
250ºC<br />
260ºC<br />
270ºC<br />
280ºC<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
Nº de carbones<br />
Fig.VI.13 Selectividad en función del número de C, a distintas temperaturas con el catalizador Fe20Al<br />
Selectividad (%)<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
Rh1.5Al<br />
240ºC<br />
250ºC<br />
260ºC<br />
270ºC<br />
280ºC<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
Nº de carbones<br />
Fig.VI.14 Selectividad en función del número de C, a distintas temperaturas con el catalizador Rh1,5Al<br />
En estas figuras se observa claramente la distribución de los productos C2-C10,<br />
confirmando la mayor producción relativa de gasolinas en el catalizador Co20Al en el que<br />
los C4 son los más abundantemente formados. El catalizador Fe20Al presenta el máximo<br />
193
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
de selectividad para los C3 y una fuerte disminución de las selectividades para moléculas<br />
hasta C10, menor con la temperatura, conforme aumenta el tamaño de las cadenas. Tanto<br />
para el Co20Al, como para el Fe20Al, las distribuciones no son fuertemente afectadas por<br />
la temperatura, si bien en el Co20Al aparece un aumento importante hacia hidrocarburos<br />
líquidos con el aumento de la misma. La distribución de productos sobre el Rh1,5Al es<br />
bastante errática, debido probablemente a la falta de exactitud en los análisis, ante las bajas<br />
conversiones obtenidas. No obstante, se aprecia un continuo en la distribución de<br />
productos, con aumento de hidrocarburos líquidos con la temperatura.<br />
En la Fig.VI.15 se dan las representaciones de Arrhenius para los tres catalizadores y de<br />
ellas la energía aparente de activación en kJmol -1 .<br />
Ln r<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
110 kJ mol -1 Co 20 Al<br />
Fe 20 Al<br />
Rh 1.5 Al<br />
130kJ mol -1<br />
0.0017 0.0018 0.0019 0.0020 0.0021 0.0022<br />
1/T K -1<br />
Fig.VI.15 Energía de activación para los catalizadores Co20Al, Fe20Al y Rh1,5Al<br />
De la figura se observan las actividades similares que presentan los catalizadores de Fe y<br />
Co, y superiores al de Rh, siendo el factor temperatura ligeramente más importante en este<br />
último. Vannice 17,18 , estudiando la actividad de metales del Grupo VIII en condiciones de<br />
baja producción de ceras, encontró energías de activación similares a las señaladas en la<br />
Fig.VI.15, por lo que se confirman los resultados obtenidos.<br />
3.2 Contenido en fase activa<br />
17 M.A. Vannice, Catal. Rev. 14, 2, (1973) 153.<br />
18 M.A. Vannice, J. catal. 50, 228 (1977).<br />
194
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
A fin de comparar la incidencia del contenido en fase activa en el proceso, se escogió la<br />
serie Co/Al500, que ha demostrado los mayores rendimientos a gasolinas, objetivo<br />
propuesto. Se realizaron ensayos con los catalizadores Co20Al, Co10Al y Co5Al, con<br />
contenidos respectivos de 20, 10 y 5% de Co, en las mismas condiciones de reacción,<br />
analizando hasta C20.<br />
En la Fig.VI.16, se presentan las conversiones en función de la temperatura,<br />
apreciándose la importancia del contenido en fase activa en la reacción.<br />
Conversión de CO (%)<br />
60<br />
55<br />
50<br />
45<br />
40<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
H 2 /CO =2; P=20bares Co5Al<br />
Co10Al<br />
Co20Al<br />
230 240 250 260 270 280 290<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.16 Conversión en función de la temperatura para los catalizadores de Co<br />
En la Fig.VI.17 se muestra las selectividades de los catalizadores Co/Al500 en función<br />
de la temperatura.<br />
La distribución de productos para el Co5Al y el Co10Al son similares, salvo a bajas<br />
temperaturas donde la selectividad a C2-C5 es máxima para el primero. El catalizador<br />
Co20Al, produce más hidrocarburos líquidos y pesados, debido al mayor contenido de<br />
metal, disminuyendo los últimos en favor de los primeros con el aumento de la<br />
temperatura. Este último efecto no es notado en bibliografía para catalizadores de Co.<br />
En la Fig.VI.18 se muestran la distribución de hidrocarburos agrupados por el número<br />
de carbonos. En ella se aprecia una menor selectividad para los ligeros a bajas temperaturas<br />
conforme aumenta el contenido de Co, así como una mayor producción de líquidos y un<br />
aumento en la longitud de las cadenas, como se observó anteriormente.<br />
195
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Selectividad (%)<br />
70<br />
65<br />
60<br />
55<br />
50<br />
45<br />
40<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
Co5Al<br />
H 2 /CO=2; P=20bares<br />
CH 4<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
C 11 -C 20<br />
CO 2<br />
R-COH<br />
240 270 300<br />
Co10Al<br />
H 2 /CO=2; P=20bares<br />
240 270 300<br />
Temperatura (ºC)<br />
CH 4<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
C 11 -C 20<br />
CO 2<br />
R-COH<br />
Co20Al<br />
H 2 /CO=2; P=20bares<br />
240 270 300<br />
Fig.VI.17 Distribución de productos agrupados en función de la temperatura para catalizadores de la<br />
serie Co/Al500<br />
Selectividad (%)<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
Co5Al<br />
H 2 /CO=2; P=20bares<br />
250ºC<br />
270ºC<br />
3 6 9 12 15 18<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
Co10Al<br />
H 2 /CO=2; P=20bares<br />
3 6 9 12 15 18<br />
Nº de Carbones<br />
250ºC<br />
270ºC<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
CH 4<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
C 11 -C 20<br />
CO 2<br />
R-COH<br />
Co20Al<br />
H 2 /CO=2; P=20 bares<br />
250ºC<br />
270ºC<br />
3 6 9 12 15 18<br />
Fig.VI.18 Selectividad de hidrocarburos frente al número de carbones para catalizadores de la serie<br />
Co/Al500<br />
3.3. Efecto del soporte<br />
196
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Puesto que, del análisis realizado anteriormente se confirma que los catalizadores de Co<br />
son los más selectivos para la formación de hidrocarburos líquidos y siendo éste uno de los<br />
objetivos del trabajo, se pretende estudiar el efecto que sobre ellos ejerce el soporte.<br />
Así, después de haber trabajado con el Co20Al en el apartado 3.1, se probó el Co20Loc,<br />
con el mismo contenido en fase activa pero con distintas características físico-químicas del<br />
soporte, a fin de estudiar los efectos de éste en cuanto a selectividad y actividad frente al<br />
Co20Al. Se utilizaron las mismas condiciones de reacción y análisis que en dicho apartado.<br />
En la Fig.VI.19, se muestra la conversión en función de la temperatura para ambos<br />
catalizadores, mientras que en la Fig.VI.20 se presenta la distribución global de productos,<br />
en función de la temperatura, obtenida sobre el catalizador Co20Loc.<br />
Del estudio de ambas curvas y de la comparación con la Fig.VI.9, correspondiente al<br />
Co20Al, se puede apreciar: primero, la mayor actividad del catalizador soportado sobre<br />
Al500 y segundo, las diferencias en la selectividad global a los productos formados.<br />
Conversión de CO (%)<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
Co20Al<br />
Co20Loc<br />
220 230 240 250 260 270 280<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.19 Conversión en función de la temperatura para los catalizadores Co20Al y Co20Loc<br />
Como se puede observar, la distribución de productos en Co20Loc tiene mayores<br />
variaciones con la temperatura que en el Co20Al, lo que podría deberse a la dificultad del<br />
análisis, dadas las bajas conversiones a temperaturas bajas. A partir de 250ºC se aprecia la<br />
197
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
disminución de hidrocarburos, más los ligeros, y el aumento del CO2; efecto contrario al<br />
observado sobre el Co20Al. La producción de alcoholes sigue la misma tendencia en<br />
ambos catalizadores.<br />
Selectividad (%)<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
0<br />
Co20Loc<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
CH 4<br />
CO 2<br />
C-OHs<br />
220 230 240 250 260 270 280 290 300 310 320<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.20 Selectividad de productos en función de la temperatura para Co20Loc<br />
En la Fig.VI.21 se representa la selectividad a los distintos hidrocarburos, encontrándose<br />
una tendencia, a diferencia que en el Co20Al, a la formación de hidrocarburos pesados<br />
frente a los líquidos.<br />
Según se vio en el capítulo anterior, en el catalizador soportado sobre Loc500 la fase<br />
activa estaba incorporada principalmente en la zona de microporos, bloqueándolos y<br />
especialmente en los macroporos lo que supone que el Co superficial es el principal<br />
responsable de la actividad. En este caso, no existen limitaciones en el crecimiento de las<br />
cadenas y podrían crecer en el interior de los macroporos del mismo. Por otro lado, el<br />
catalizador Co20Al, ha mostrado bastante más acidez que el Co20Loc, por lo que tampoco<br />
se puede descartar un efecto adicional del cracking catalítico de la moléculas superiores<br />
generadas en aquel frente a éste.<br />
Por lo tanto, las diferencias encontradas en estos catalizadores se pueden aducir a: 1º, la<br />
peor dispersión del Co en el soporte Loc500, por la menor área superficial de este, lo que<br />
se traduciría en una menor actividad; 2º, la mayor basicidad del Co20Loc, lo que podría<br />
198
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
dirigir la formación a CO2 , ya que se sabe que un medio básico favorece la reacción de gas<br />
de agua; 3º, la distinta distribución porosa del soporte.<br />
Selectividad (%)<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Loc<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
Temperatura (ºC)<br />
230 ºC<br />
240 ºC<br />
250 ºC<br />
260 ºC<br />
270 ºC<br />
Fig.VI.21 Selectividad frente al número de carbones para Co20Loc<br />
Si las diferencias en la conversión y selectividad pueden explicarse por la menor<br />
dispersión, porosidad y acidez de la muestra Co20Loc frente a Co20Al, sería conveniente<br />
comparar los resultados con los de un catalizador standard en las mismas condiciones. Así,<br />
se preparó un catalizador standard de Co, por precipitación, con el 30% de Co como fase<br />
activa y utilizándose promotores de Th y Mg y kieselguhr como soporte. En la preparación<br />
se siguió el procedimiento descrito por Richardson 19 . Este catalizador se denominará FTStd<br />
de ahora en adelante. Sus características texturales por adsorción-desorción de N2 son:<br />
SBET<br />
87m 2 /g<br />
Vads (P/Po=0.98)<br />
0.27 cc/g<br />
diámetro medio de poros<br />
126Å<br />
En la Fig.VI.22, se muestra la distribución de productos agrupados para el catalizador<br />
standard, en ella se observa la gran producción relativa de hidrocarburos líquidos a baja<br />
temperatura, mientras que va disminuyendo por encima de 240ºC. El metano disminuye en<br />
19 J.T.Richardson, Principles of Catalyst Development, Plenum Press, N.Y. (1989).<br />
199
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
forma pronunciada con la temperatura hasta estabilizarse, mientras que el CO2 comienza<br />
estable y aumenta fuertemente su producción por encima de los 240ºC. La producción de<br />
alcoholes sobre el FTStd, al igual que en los anteriores es muy baja. En términos generales<br />
la selectividad de este catalizador es similar a la del anterior (Co20Loc), especialmente por<br />
encima de los 240ºC, si bien la conversión es muy superior en función del contenido en<br />
fase activa.<br />
Selectividad(%)<br />
60<br />
50<br />
40<br />
30<br />
20<br />
10<br />
0<br />
FTStd<br />
C 2 -C 5<br />
C 6 -C 10<br />
200 220 240 260 280 300<br />
Temperatura (ºC)<br />
CH 4<br />
CO 2<br />
C-OHs<br />
Fig.VI.22 Distribución de productos agrupados en función de la temperatura para FTStd<br />
En la Fig.VI.23 se muestra la distribución de productos C2 -C10 en función del número<br />
de carbones para el FTStd, comparado con el Co20Al, para el mismo intervalo de<br />
temperatura.<br />
De estos resultados y de los obtenidos sobre el Co20Loc se observa que el catalizador<br />
Co20Al tiende a producir un corte en el tamaño de las cadenas por encima de C10 además<br />
de presentar un pequeño hombro en el rango C6-C8 no presente en los otros casos.<br />
Para corroborar que es el proceso de pilareado (tamaño de poro, acidez residual) el que<br />
juega un papel en la selectividad del Co20Al, y no la arcilla o la dispersión metálica, se<br />
prepararon dos catalizadores más, soportados directamente sobre la arcilla SerBcaNa<br />
sometida a un tratamiento similar al que ha recibido en el proceso de pilareado (pH,<br />
secado, calcinado), pero sin incluir el oligocatión de Al. Se prepararon catalizadores con<br />
200
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
dos concentraciones de Co diferentes: uno, para tener el mismo contenido de Co por<br />
unidad de masa que el Co20Al, al que se denominó Co20SP y el otro con igual relación<br />
Co/m 2 de superficie a fin de tener la misma dispersión de la fase metálica que el Co20Al,<br />
que se denominó Co5SP. Ambos, fueron probados en reacción, en las mismas condiciones<br />
que los anteriores.<br />
Selectividad (%)<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Al<br />
230 ºC<br />
240 ºC<br />
250 ºC<br />
260 ºC<br />
270 ºC<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
n (nº de C)<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
FT-Std<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
n (nº de C)<br />
230 ºC<br />
240 ºC<br />
250 ºC<br />
260 ºC<br />
270 ºC<br />
Fig.VI.23 Comparación de selectividades en función del número de C para Co20Al y FTStd<br />
En la Fig.VI.24 se presentan las selectividades en función del número de C obtenidas<br />
para ambas muestras.<br />
Con respecto a la distribución de hidrocarburos, con el Co20SP no se observa el corte en<br />
el crecimiento de los productos detectados, siendo mucho más parecida a la encontrada con<br />
el Co20Loc. Dada la baja conversión del Co5Sp, es difícil cuantificar la distribución de<br />
productos, sin embargo, sigue la tendencia de los anteriores.<br />
La diferencia de selectividad encontrada para el Co20Al y el Co20SP y entre el Co20Al<br />
y el Co5SP, señalan que es el soporte pilareado el que la produce, y no el contenido de fase<br />
activa, ni su dispersión.<br />
201
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
Selectividad (%)<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
Co20SP<br />
240 ºC<br />
250 ºC<br />
270 ºC<br />
280 ºC<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
n (nº de C)<br />
Co5SP 250 ºC<br />
260 ºC<br />
270 ºC<br />
280 ºC<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
Fig.VI.24 Selectividad frente al número de carbones para Co20SP y Co5SP<br />
En la Fig.VI.25, se muestra la conversión en función de la temperatura para todos los<br />
catalizadores de Co presentados en este apartado.<br />
Conversión de CO (%)<br />
24<br />
22<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
FT-STD<br />
Co20Al<br />
Co20SP<br />
Co20Loc<br />
Co5SP<br />
220 230 240 250 260 270 280<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.25 Conversión en función de la temperatura para los catalizadores de Co<br />
202
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
El catalizador standard presenta una conversión más elevada comparado con el Co20Al,<br />
probablemente por el mayor contenido de fase activa (30 frente a 20%), siendo este último<br />
más activo que los demás.<br />
La conversión obtenida con la muestra Co20SP es similar a la de la Co20Loc,<br />
especialmente a bajas temperaturas, apartándose, y siendo superior, a partir de 250ºC.<br />
baja.<br />
En el caso de la Co5SP, no se advierte conversión por debajo de 240ºC, y es siempre<br />
3.3.1 Discusión de resultados<br />
De los resultados obtenidos se destaca no sólo la actividad del catalizador Co20Al, sino<br />
también la diferente distribución de productos obtenida con respecto al catalizador standard<br />
de FT. Un aspecto importante para hacer notar, es la baja selectividad hacia CO2 sobre el<br />
catalizador Co20Al, lo que es una gran ventaja frente al FTStd.<br />
En la Fig.VI.26, se incluyen para cada temperatura y a aproximadamente la misma<br />
conversión, los resultados para ambos catalizadores.<br />
Selectividad en moles (%)<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Al<br />
(1.33%)<br />
Co20Al<br />
(3.86%)<br />
FT-Std<br />
(0.9%)<br />
FT-Std<br />
(3.53%)<br />
210 ºC<br />
220 ºC<br />
230 ºC<br />
240 ºC<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
Nº de Carbones<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Al<br />
(2.12%)<br />
FT-Std<br />
(1.76%)<br />
220 ºC<br />
230 ºC<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
20<br />
18<br />
16<br />
14<br />
12<br />
10<br />
8<br />
6<br />
4<br />
2<br />
Co20Al<br />
(10.89%)<br />
0<br />
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11<br />
Fig.VI.26 Comparación de selectividades en función del número de C para Co20Al y FTStd<br />
Conforme va aumentando la conversión, la distribución de productos de ambos<br />
catalizadores se van acercando entre sí, por disminución en el FTStd de los hidrocarburos<br />
FT-Std<br />
(9.91%)<br />
250 ºC<br />
260 ºC<br />
203
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
más ligeros y el aumento de los más pesados con la temperatura. Pero, a bajas<br />
conversiones, la formación de hidrocarburos líquidos es muy superior, y prácticamente<br />
constante con la temperatura, en el Co20Al.<br />
Intentando dilucidar si existe realmente el corte en las cadenas que se anuncia en el<br />
Co20Al y tratando de sacar conclusiones más acabadas, se realizó la reacción en las<br />
mismas condiciones pero cambiando el sistema de análisis a fin de detectar moléculas con<br />
tamaño del orden de 20 átomos de C. En la Fig.VI.27, se muestran las distribuciones de<br />
hidrocarburos en función del número de C, para los catalizadores Co20Al y FTStd, a una<br />
única temperatura, 230ºC.<br />
Selectividad (%)<br />
13<br />
12<br />
11<br />
10<br />
9<br />
8<br />
7<br />
6<br />
5<br />
4<br />
3<br />
2<br />
1<br />
H 2 /CO =2<br />
P=20 bares<br />
230ºC FTstd<br />
230ºC Co20al<br />
0<br />
0 5 10 15 20<br />
Nº de Carbones<br />
Fig.VI.27 Distribución de productos C2-C20 en función del Nº de C, para Co20Al y FTStd<br />
En la Fig.VI.27 se pone de manifiesto que la selectividad antes mostrada se mantiene,<br />
incluso el hombro a C6-C8, lo que demuestra que no es una artefacto del análisis sino una<br />
selectividad real.<br />
Aplicando la representación ASF a los productos obtenidos para el Co20Al y el FTStd ,<br />
suponiendo el mecanismo de formación de los mismos anteriormente expuesto (Cap.I), se<br />
obtiene la Fig.VI.28, en la que se manifiesta la distinta probabilidad de formación de<br />
204
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
productos, especialmente por encima de C8, de ambos catalizadores, siendo menor la<br />
correspondiente al Co20Al, y confirmando la selectividad de tamaño antes señalada.<br />
Selectividad/N<br />
10<br />
1<br />
0.1<br />
0.01<br />
H 2 /Co=2; P=20bar<br />
230ºC Co20Al<br />
230ºC FTStd<br />
0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20 22 24<br />
Nº de C<br />
Fig.VI.28 Representación ASF de los catalizadores Co20Al y FTStd para 230ºC<br />
La diferencia en el tamaño medio de poros en ambos catalizadores, y quizá su acidez,<br />
puede justificar la presencia de selectividades distintas en cuanto a tamaño de cadena de los<br />
productos obtenidos.<br />
Con respecto a la acidez : se ha apuntado que una mayor acidez del soporte, puede<br />
contribuir al craqueo de las cadenas largas a favor de las más pequeñas. En efecto, como<br />
vimos en el capítulo anterior, es en los pilares donde se concentra el mayor número de<br />
centros ácidos, por lo que, para que haya “cracking” las moléculas tendrán que llegar a los<br />
pilares en la zona microporosa del sólido. Dadas las dimensiones de esa zona, las<br />
moléculas que lleguen no podrán tener más de 10 átomos de C, y sus fracciones no más que<br />
5 o 6, justificando la presencia del hombro en la selectividad en esa zona. La presencia de<br />
centros activos en esta confinada región posibilitaría además una selectividad de forma.<br />
Como se vio anteriormente, el Co20Al es más ácido que el Co20Loc. De medidas<br />
realizadas con el catalizador standard, se encontró que posee casi la mitad de centros ácidos<br />
por gramo que el Co20Al, aunque casi el doble por m 2 , por lo que “a priori” no se podría<br />
decir cual posee mayores propiedades de cracking. Sin embargo, estudiando la distribución<br />
de hidrocarburos en los tres catalizadores (Fig.VI.29) no se nota la disminución en los<br />
205
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
pesados que debería notarse en los primeros momentos de la reacción, si hubiera craqueo,<br />
ni el aumento correspondiente de los ligeros.<br />
Selectividad(%)<br />
20<br />
16<br />
12<br />
8<br />
4<br />
0<br />
0 2 4 6 8 10 12 14 16 18 20<br />
20<br />
16<br />
12<br />
8<br />
4<br />
0<br />
20<br />
16<br />
12<br />
8<br />
4<br />
Co20AL C 2<br />
C 3<br />
C 4<br />
C 5<br />
C 6<br />
C 7<br />
C 8<br />
C 9<br />
C 10<br />
Co20Loc<br />
0 2 4 6 8 10 12<br />
FTStd<br />
C2<br />
C3<br />
C4<br />
C5<br />
C6<br />
C7<br />
C8<br />
C9<br />
C10<br />
C2<br />
C3<br />
C4<br />
C5<br />
C6<br />
C7<br />
C8<br />
C9<br />
C10<br />
0<br />
0 5 10 15<br />
Conversión(%)<br />
20 25 30<br />
Fig.VI.29 Selectividad frente a conversión para Co20Al, Co20Loc y FTStd<br />
Por si hubiera un efecto adicional debido a la interacción metal/soporte, se ha graficado<br />
en la Fig.VI.30, la velocidad de conversión de CO, por unidad de masa de fase activa en<br />
función de la temperatura.<br />
De esta figura, la conclusión más importante a que podemos llegar, es que el catalizador<br />
Co20Al presenta mayor actividad por unidad de masa que el propio catalizador standard,<br />
incluso en ausencia de promotores. Se debe señalar que hay que ser precavidos al sacar<br />
conclusiones definitivas de este análisis debido principalmente al rango, en tamaño de<br />
cadenas de C, del mismo. Las conversiones son obtenidas como rendimiento a productos,<br />
por lo que los productos no analizados no contribuyen a la misma. Lo que sí, es evidente<br />
206
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
que ambos catalizadores presentan más actividad que el resto, siendo el Co20Loc el menos<br />
activo de todos. Está claro que las diferencias encontradas entre el Co20SP y el Co5SP, son<br />
debidas exclusivamente a la cantidad de Co incorporado; no hay por tanto un efecto<br />
adicional de la interacción fase activa/soporte en la distribución de productos.<br />
Queda pues, como único responsable de la selectividad, la textura del sólido como se ha<br />
venido apuntando a lo largo del trabajo y así, la menor actividad del Co20Loc, podría<br />
justificarse por poseer, según los estudios anteriores, gran parte de la fase activa en la zona<br />
microporosa, obstruyéndola, lo que por un lado limita las posibilidades de difusión de los<br />
reactantes; pero por otro lado inactiva por inaccesibles una gran parte de la fase activa.<br />
r (mmol CO conv./h. kg de Co)<br />
120000<br />
100000<br />
80000<br />
60000<br />
40000<br />
20000<br />
Co20Al<br />
FT-STD<br />
Co20SP<br />
Co5SP<br />
Co20Loc<br />
0<br />
190 200 210 220 230 240 250 260 270 280 290<br />
Temperatura (ºC)<br />
Fig.VI.30 Rapidez de conversión por centro activo para los catalizadores de Co<br />
Un análisis de la distribución de porosidad de las muestras soportadas sobre Al500 y<br />
Loc500 (Fig.V.21, V.22, V.25, V.26 y V.28) muestra que, efectivamente, después de la<br />
incorporación de la fase activa, las correspondientes a la serie Co/Al500 mantienen una<br />
estructura porosa entre poros de 10 y 50Å, lo que no ocurre en las Co/Loc500 ni en las<br />
Fe/PILC. Sí se mantiene en la Rh/Al500. Para explicar las diferencias en la textura, se<br />
puede recurrir a varias razones: 1º-La fuerte acidez superficial del soporte Al500 puede<br />
dirigir la incorporación de la fase activa, tanto más cuanto mayor sea la basicidad relativa<br />
de la solución impregnante, Co>Fe>Rh, preservando la estructura primitiva. El Loc500,<br />
207
Capítulo VI Aplicación a la reacción de Fischer-Tropsch<br />
tiene mucho menos acidez superficial y, por tanto, su efecto sobre las soluciones<br />
impregnantes ligeramente ácidas será menor. 2º-El efecto del tamaño relativo de los<br />
microporos. En el soporte Al500, el oligocatión pilareante, supuestamente, es un derivado<br />
polinuclear de Al con carga relativa q/Al > 0,54, mientras que el del Loc500, es el catión<br />
Keggin de morfología cuasi-esférica de 9 Å de diámetro y q/Al = 0,54; esto significa que el<br />
espacio interpilares es mayor en el primero, por ser mayor el número de cargas que se<br />
neutralizan con cada pilar, como lo demuestra las isotermas correspondientes, y que<br />
además, la acidez del pilar incorporado es bastante superior. Ambos efectos justifican los<br />
resultados encontrados con el Co soportado.<br />
3º- En el caso del Fe, a los dos efectos anteriores por parte del soporte, hay que añadir el<br />
del tamaño del catión de fase activa incorporado, el TNAcFe (Cap.V), que probablemente<br />
llegue a obstruir los microporos del soporte, dificultando así la selectividad de formación<br />
de líquidos. En el caso del Rh, como la cantidad de fase activa es entre 15 y 20 veces<br />
menor, el efecto sobre la microporosidad del soporte es mínimo, y manteniéndose<br />
prácticamente inalterada, dirigiendo, si bien en menor cuantía, la selectividad a la<br />
producción de hidrocarburos líquidos.<br />
En definitiva, la selectividad mostrada por el Co20Al, respecto al tamaño de las cadenas<br />
de los hidrocarburos, se debe exclusivamente a la microtextura y estructura del soporte.<br />
208
Capítulo VII Resumen y conclusiones<br />
RESUMEN Y CONCLUSIONES<br />
Con este trabajo se ha pretendido contribuir a la mejora del proceso de Fischer-Tropsch,<br />
para la producción de hidrocarburos líquidos, por introducción de catalizadores de<br />
porosidad controlada que limiten el crecimiento de las cadenas a la fracción deseada. Los<br />
catalizadores deberían poder restringir asimismo, la producción de olefinas y aumentar la<br />
de alcanos ramificados y productos oxigenados, a fin de poder mantener elevado el índice<br />
de octano de los combustibles preparados.<br />
La novedad de los catalizadores, y es el aporte que se hace con esta tesis, reside en la<br />
utilización de arcillas pilareadas (PILC) como soporte de las fases activas convencionales.<br />
Estos soportes son sintetizados a partir de arcillas naturales, españolas, por inclusión de<br />
oligocationes de aluminio vía intercambio catiónico entre las láminas constituyentes.<br />
Dependiendo de la naturaleza y de la relación q/Al de los oligocationes incorporados, se<br />
puede actuar sobre el tamaño de poro y sobre la reactividad superficial de los materiales<br />
sintetizados. En el resultado final interviene también la naturaleza de la arcilla y su<br />
capacidad de cambio catiónico.<br />
En esta Memoria, después de una revisión previa de la arcilla de entre las existentes en<br />
el mercado, se ha seleccionado una bentonita de la Serrata de Níjar, suministrada por<br />
Minas de Gador S.A., rica en montmorillonita (90,6%) con pequeñas cantidades de cuarzo<br />
y feldespato como minerales secundarios.<br />
La fórmula estructural de la montmorillonita purificada es<br />
(Al2.88, Fe0,42, Mg0,71, Mn0,003)VI (Al0,097, Si7,903)IV O20 (OH)4 Meo,77<br />
correspondiente a una esmectita dioctaédrica del subgrupo de las montmorillonitas y<br />
especie montmorillonita, con una capacidad de cambio de 79 meq/100g y cationes<br />
cambiables de Ca, K, Mg y Na. Su área superficial es 72 m 2 /g y su volumen total de poros<br />
0,466 cm 3 /g. Tiene 2,69x10 20 centros ácidos (Brönsted y Lewis) por unidad de masa, lo<br />
que equivale a 3,74 centros/nm 2 .<br />
A partir de este material, se han preparado las correspondientes arcillas pilareadas por<br />
dos vías: la primera, siguiendo un método convencional de preparación, pasando por<br />
purificación y homoionización de la arcilla, y síntesis y envejecimiento del catión,<br />
incorporándolo en concentraciones de arcilla muy diluidas. La segunda, es una<br />
7 incorporación directa del catión Keggin comercial Al13 a suspensiones muy concentradas,<br />
de hasta el 50%, de la arcilla natural. La diferencia entre ambos métodos radica: 1º en el<br />
212
Capítulo VII Resumen y conclusiones<br />
tratamiento previo de la arcilla; 2º en la concentración de las suspensiones y 3º y<br />
fundamental, en la naturaleza del catión pilareante: en el primer caso, por las condiciones<br />
de preparación, relación OH/Al=2, temperatura y tiempo de envejecimiento, un catión<br />
polinuclear con relación q/Al superior a 0,54, en el segundo, el catión Keggin de relación<br />
carga/metal igual a 0,54.<br />
Los materiales a que dieron origen, después de calcinados a 500ºC para fijación de los<br />
pilares, se diferencian entre sí, fundamentalmente, en la distribución del tamaño de poros y<br />
en la acidez superficial.<br />
SBET<br />
(m 2 /g)<br />
VMp<br />
(cc/g)<br />
Vmp<br />
(cc/g)<br />
Vp<br />
(cc/g)<br />
VTp<br />
(cc/g)<br />
dmp<br />
(Å)<br />
centros<br />
ácidos/nm 2<br />
Al500 336 0,367 0,067 0,091 0,525 63 4,43<br />
Loc500 344 0,632 0,050 0,096 0,778 90 2,68<br />
Una aportación muy interesante en esta parte del estudio es la utilización de las curvas t<br />
para el estudio de la microporosidad y distribución de mesoporos. A partir del desarrollo de<br />
Lecloux y Pirard, de utilizar curvas patrón diferentes en función de la interacción<br />
adsorbato-adsorbente, se han extraído unos criterios de utilización que permiten la<br />
asignación adecuada del valor de t y, por tanto, del estudio de la porosidad.<br />
Existen también diferencias en la estabilidad térmica e hidrotérmica de los soportes,<br />
relacionados con la estabilidad de los oligocationes incorporados. No obstante, ambos<br />
resisten, cuando menos, hasta 700ºC en un ambiente de 10% de agua. El medio básico<br />
afecta más profundamente a la estabilidad de las muestras que el ácido, siendo el intervalo<br />
fiable de pH de 1,5 a 11,5.<br />
Sobre esos materiales, en el Cap.V, se han depositado por impregnación las<br />
correspondientes sales de Co, Fe y Rh, obteniéndose siguientes catalizadores<br />
Muestra Contenido<br />
nominal<br />
SBET<br />
(m 2 /g)<br />
Vp<br />
(cm 3 /g)<br />
Acidez<br />
(Nº centros por nm 2 )<br />
Co20Al 20% 238 0,139 3.72<br />
Co10Al 10% 265 0,155 3.75<br />
Co5Al 5% 258 0,159 2.06<br />
Co20Loc 20% 121 0,081 2.93<br />
Co10Loc 10% 152 0,116 4.2<br />
213
Capítulo VII Resumen y conclusiones<br />
Co5Loc 5% 92 0.087 4.24<br />
Fe20Al 20% 225 0.204 2.68<br />
Fe10Al 10% 245 0.187 4.19<br />
Fe5Al 5% 275 0.184 2.96<br />
Fe20Loc 20% 131 0.148 3.79<br />
Fe10Loc 10% 158 0.147 3.59<br />
Fe5Loc 5% 167 0.143 5<br />
Rh1,5Al 1,5% 237 0.143 3.74<br />
Rh1Al 1% 281 0.172 4.41<br />
Rh0,5Al 0,5% 275 0.16522 4.25<br />
La incorporación de los cationes ha afectado a las características físico-químicas de los<br />
materiales pilareados, siendo de destacar la porosidad y, especialmente, su distribución que<br />
varía de forma diferente por el depósito de fase activa en función del pH de las soluciones<br />
de las sales de partida.<br />
Los catalizadores preparados, previa su reducción a fase metálica, han sido probados en<br />
la reacción de hidrogenación de CO. En el Capítulo VI se describe el efecto de los<br />
parámetros del proceso, presión, temperatura y relación H2:CO, en la distribución de<br />
productos conseguida. Asimismo se describe el efecto de las distintas variables del<br />
catalizador, naturaleza (Co, Fe y Rh), concentración (5, 10 y 20% de fase activa) y<br />
naturaleza del soporte (Al500 frente a Loc500) en la selectividad, entre sí y comparando<br />
con un catalizador convencional de FT basado en Co con promotores de Th y Mg.<br />
De todo el estudio realizado, se pueden extraer las siguientes conclusiones :<br />
Respecto al método de síntesis del soporte :<br />
1º Para el caso convencional, el procedimiento de envejecimiento de los oligocationes<br />
de aluminio, da lugar a compuestos polinucleares de carga alta, que determinan<br />
fundamentalmente la presencia de supermicroporos, por encima de 2 nm, y de<br />
mesoporos. La acidez de la arcilla de partida ha sido notoriamente aumentada. La<br />
estabilidad térmica e hidrotérmica y química de los materiales conseguidos es<br />
superior a la establecida en bibliografía.<br />
2º El procedimiento rápido de preparación, usando elevadas concentraciones y<br />
oligocationes convencionales de aluminio, da lugar igualmente a materiales estables,<br />
214
Capítulo VII Resumen y conclusiones<br />
ligeramente inferiores a los anteriores, con una microporosidad más importante y<br />
especialmente con un estructura desordenada con elevada cantidad de macroporos.<br />
La acidez es muy inferior por lo que podrían ser útiles en reacciones en que no se<br />
requiriera el carácter dual de los catalizadores.<br />
Respecto a la utilidad de los materiales generados como soporte de catalizadores :<br />
1º Ambos soportes cumplen los requerimientos exigidos de estabilidad térmica y<br />
química frente a procesos de impregnación y reducción.<br />
2º La distinta acidez de los materiales redunda en la incorporación de fase activa,<br />
siendo crítico el pH de las soluciones de la misma: así los soportes Al500<br />
preservan su microporosidad ante soluciones con pH por encima de 4 (solución<br />
del Co). Por debajo, y todos los basados en Loc500, la pierden, generando en su<br />
lugar mesoporosidad tanto más importante cuanto mayor sea la fase activa<br />
incorporada.<br />
3º La rapidez y economía del proceso denominado ”método rápido”, merece un<br />
estudio más profundo, ya que con pequeñas modificaciones podría substituir al<br />
mucho más tedioso y prolongado método convencional.<br />
Con respecto a la reacción:<br />
1º Los catalizadores preparados son perfectamente útiles para la reacción FT.<br />
2º Las energías de activación aparentes son similares en todos los catalizadores<br />
estudiados, estando todas en el intervalo 110-150 kJ/mol.<br />
3º El comportamiento de cada uno de los metales es el normal, leído en la literatura,<br />
es decir el Co produce fundamentalmente hidrocarburos, el Fe es ligeramente<br />
menos activo, produciendo también hidrocarburos, más los ligeros. El Rh es<br />
bastante menos activo en las proporciones estudiadas y su selectividad va hacia la<br />
producción de oxigenados y CO2. No obstante, su rapidez de conversión, teniendo<br />
en cuenta su cantidad de masa activa, no difiere mucho de la de las anteriores.<br />
Se quiere destacar, no obstante, que en la distribución de hidrocarburos sobre el<br />
Co, la fracción de olefinas obtenidas es inferior a la de los catalizadores<br />
convencionales, lo que favorece la reformulación de gasolinas. Igualmente, con<br />
los catalizadores de Fe, se obtiene a bajas temperaturas una fracción de<br />
oxigenados de hasta el 15%, lo que evidentemente también contribuye a la mejora<br />
215
Capítulo VII Resumen y conclusiones<br />
de los productos.<br />
4º La actividad está relacionada con el contenido en fase activa, más que con la<br />
dispersión de la misma, aumentando con el contenido.<br />
5º Las bajas presiones de reacción se manifiestan en una necesidad de aumentar la<br />
temperatura del proceso para que haya actividad medible, lo que dirige la reacción<br />
a la formación de coque.<br />
6º La temperatura aumenta siempre la conversión y siempre hacia la formación de<br />
los productos principales.<br />
7º La relación H2:CO actúa también en el sentido de producir más hidrocarburos<br />
frente al resto y más alcanos frente a alquenos.<br />
Finalmente, con relación a la utilidad de los soportes para orientar la reacción:<br />
1º El soporte de los catalizadores de la serie Me/Loc500 actúa como un soporte<br />
convencional, sin mostrar ningún efecto adicional de su textura. Ello se debe a que<br />
una gran fracción de fase activa está depositada en la superficie externa del sólido,<br />
generando, a su vez, estructura propia del óxido, mientras que otra está<br />
obstruyendo los microporos que no pueden mostrar su acción como entorno<br />
confinado.<br />
2º Los catalizadores soportados sobre arcillas pilareadas por el método convencional<br />
Al500 sí presentan selectividad de tamaño. La textura del soporte, que ha sido<br />
preservada en la incorporación de fase activa, dirige la reacción, en todos los casos<br />
a la formación de hidrocarburos líquidos.<br />
3º Las arcillas pilareadas son aptas como soporte de catalizadores, con interesantes<br />
características interesantes frente a soportes convencionales. En el caso de la<br />
síntesis de Fischer-Tropsch, dirigen la selectividad de los productos en el mejor de<br />
los casos, y se comportan como un soporte convencional en el peor.<br />
4º Por último, destacar al catalizador Co20Al, que supera ampliamente el objetivo<br />
propuesto; por su actividad, con conversión comparable a la de un catalizador<br />
standard y por su mayor selectividad a hidrocarburos líquidos, limpios, por efecto<br />
de la textura del soporte, frente al standard. Adicionalmente, su baja selectividad a<br />
un producto no deseado como el CO2, posible desactivador del catalizador, como<br />
la baja producción de ceras, realza sus cualidades.<br />
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