Promociones Alumni - Asociacion Antiguos Alumnos Colegio Peñalba

Comenzó tan señalado evento con
la celebración de la Santa Misa en
el oratorio del Colegio oficiada por
don Carlos García, capellán actual,
quién en una sentida homilía, nos
recordó algunas de las ideas fundamentales
que aprendimos en los
años de estancia en las aulas, y que
tanto nos han servido en el devenir
posterior de nuestras vidas. Acabamos
con el rezo de la Salve Regina,
rememorando aquellos inolvidables
tardes de los viernes, donde todos a
una en el patio, incluidos profesores,
entonábamos primero con agudas
voces infantiles y, más tarde,
con voces ya roncas de adolescentes,
el canto por excelencia
de nuestra Madre.
A continuación, visitamos las
instalaciones del Colegio no
muy cambiado después de tantos
años para sorpresa de algunos,
aunque sí mejorado. Luego
estuvimos en la biblioteca, que
nos gustó de manera especial, en
el comedor y en el resto
de dependencias.
Finalizamos
esta
ACTIVIDADES
También los de la Promoción “ibérica”
celebraron sus 20 primeros años
LuiS CeSTeRoS
en eSPeRA de CuMPLiR LAS BodAS de PLATA deSde nueSTRA YA LejAnA SALidA deL CoLeGio, Y GRACiAS A
LA LABoR nunCA Bien VALoRAdA deL CoMiTÉ oRGAniZAdoR CoMPueSTo en eSTA oCASiÓn PoR dAVid
de LA FuenTe, FeRnAndo GARCÍA, ALFonSo jiMÉneZ Y PABLo deL ViLLAR, noS ReuniMoS unA VeZ MÁS
PARA CeLeBRAR –CoMo PASo PReVio A LoS VeinTiCinCo–, LoS VeinTe AÑoS deSde Que TeRMinAMoS
nueSTRoS eSTudioS eSCoLAReS.
primera parte del encuentro, con
un aperitivo en el patio donde, por
cortesía de Pablo del Villar y Alfonso
jiménez, disfrutamos
del
excelente vino
Oro de Castilla,
verdejo de
Rueda, y de los
productos Cascajares.
Terminada la
visita del que
durante tantos
23
años fue nuestro colegio, acudimos
a comer a un lugar próximo llamado
El Caserío de Simancas, en la misma
Carretera Pesquerue-
la. Tras la comida,
o lo que
fuere, llegó el
momento de las
suertes taurinas.
juan García,
con renovada
juventud, david
de la Fuente,
josé María Varela
convertido
en estrella del
toreo por un día, y otros cuantos,
destacaron como cortadores, mostrando
sus habilidades frente a los
astados previamente afeitados para
la faena. Alguno, poco consciente de
sus capacidades pero lleno de arrojo,
se llevó algún revolcón que otro,
y es que no conviene olvidar que
los años, nos pese o no, no pasan en
balde. esperemos que su esposa no
le recrimine demasiado su osadía y
le deje volver para los veinticinco.