100 FICHAS SOBRE “ISABEL DE LA TRINIDAD” - CITeS

Rómulo Cuartas Londoño - Francisco Javier Sancho Fermín
100 FICHAS SOBRE
“ISABEL DE LA TRINIDAD”
Para aprender y enseñar

A todos los que han contribuido
a que el CITeS haya alcanzado sus 20 años,
especialmente a todos los profesores, alumnos y bienhechores.
También a cuantos están poniendo su empeño, oración y apoyo
en la construcción de la Universidad de la Mística.
Que esta obra sea un homenaje a Isabel de la Trinidad
en su centenario y al CITeS en su 20 aniversario..

P R E S E N T A C I Ó N
Con toda propiedad, y sin lugar a dudas, podemos afirmar que Isabel de la
Trinidad representa una nueva mentalidad en el campo inmenso de la espiritualidad y
una nueva conciencia cristiana. Efectivamente, sin ningún alarde, desde su infancia,
vive progresivamente consciente de que su vida se desarrolla en el ámbito del amor de
Dios y que es Dios el fondo, contenido y fundamento de toda su existencia. La de
Isabel es una vida manifiestamente trinitaria desde el comienzo, trinitaria en su
desarrollo y trinitaria en su plenitud. Y no precisamente porque su vida sea una
excepción en el concierto de la vida cristiana, sino porque la suya es un testimonio
extraordinario de lo que debe ser la ordinaria vida de un creyente que siempre tiene la
oportunidad de ser consciente de vivir y existir en Dios y de estar inhabitado por Aquel
que es el constitutivo esencial de todo cuanto existe.
Si los creyentes enfocáramos la comprensión de nuestra vida desde la plenitud
ya otorgada en Cristo, bien distinta sería nuestra forma de vivir y de relacionarnos con
nosotros mismos, con el cosmos, con los demás y con Dios:
• Desde esta mentalidad nueva dejaríamos de gastar nuestras mejores energías
en mirar nuestros fallos e incoherencias, para crecer en autoestima en el
desarrollo de un proyecto dotado con los recursos necesarios para caminar
seguros hacia una plenitud ya vislumbrada, pues la anhelamos y la buscamos.
No buscaríamos fuera lo que ya tenemos dentro, y nuestra seguridad no
descansaría en las apariencias, promesas, poder o riquezas exteriores, sino en
el gran tesoro y dinamismo de nuestra identidad más profunda.
• Desde esta nueva mentalidad y conciencia, ya no seríamos los siervos
temerosos de un Señor más o menos lejano y exigente, sino los hijos de un
Padre amoroso, cercano y comprometido con cada persona; cambiaríamos
nuestra mentalidad de esclavos sometidos, por la de hijos libres; dejaríamos de
comportarnos como víctimas de unas circunstancias más o menos
indescifrables, para tomar responsablemente una actitud de sujetos activos que
tienen suficientes recursos interiores para construir y conducir una historia que
no es fruto del azar sino que se construye en la dinámica del amor; ya no
seríamos los indigentes que nos saciamos con migajas y gastamos nuestra
vida en pedir lo que ya se nos ha dado, sino que seríamos los administradores
comprometidos de un patrimonio que no se agota, y que nos trasciende.
Tampoco seríamos los errantes que llevan un camino sin rumbo porque
sabríamos muy bien de dónde venimos y adónde vamos, ya que la luz y guía
que arde en nuestro interior es nuestro principio y nuestra meta.
• Esta mentalidad nueva regiría nuestras relaciones: No seríamos los señores
que explotan sin misericordia el cosmos, sino los constructores comprometidos
de una mundo digno de los hijos de Dios; ni veríamos a los demás como
enemigos, competidores, víctimas o sujetos de dominación, sino como a
hermanos con quienes construimos una historia común en la única familia de
Dios; y Dios dejaría de ser un extraño, un refugio al que acudir en coyunturas
extremas, para ser el Dios en nosotros; ya no seríamos los desterrados que no
saben qué caminos llevan, para reconocer que la Trinidad, que vive en nuestro
más profundo centro, es el hogar de donde nunca debemos salir.
Así lo comprendió y vivió Isabel Catez, y esto fue lo que se propuso al compartir
con sus íntimos una vida en la que fue plenamente feliz. No encontramos en ella ni

una espiritualidad afectada ni una vida rara. Todo en ella marcha al ritmo de una
existencia humana que lo único que hace es vivir y disfrutar viviendo. Tuvo la fortuna
de abrirse y encontrar el centro estructurador de su existencia dentro de sí, desde
antes de cumplir diez años. Un centro que la dinamizó desde dentro para vivir a tope:
vivió su infancia con todas las características de una niña normal; no tuvo que añorar
nada en su manera de vivir la adolescencia y primera juventud; y su vida en el
Carmelo la vivió en plenitud, sin artificios ni mistificaciones. Todo lo que hizo fue vivir
centrada en una interioridad donde cada día descubría nuevas riquezas y motivos de
asombro, y que comunicaba en sus escritos, especialmente e sus cartas llenas de
realismo, jovialidad, cariño y profundidad. Sólo habla de lo que vive y de la manera
como lo ve todo desde el centro donde está anclada.
Por eso tiene espacio interior para asumir las realizaciones y conquistas
personales con tanta naturalidad como las incoherencias y dificultades de la vida,
incluyendo su enfermedad. Sus últimos días y postrera agonía no son ni un alarde de
heroísmo ni un lamento victimista. Simplemente son la transparencia de una vida que
se trasciende a sí misma y tiene la capacidad de ver la totalidad de la existencia sin
estancarse en los episodios de la misma. Para Isabel, quien vive en Dios y tiene la
certeza de tener a Dios dentro de sí, todas las cosas adquieren la amplitud de Dios. Y,
por lo tanto, la vida hay que contemplarla desde aquella elección amorosa en Cristo
antes de comenzar, hasta la plenitud en Cristo ya presente en nosotros al nacer. De
ahí que la vida tenga un principio, pero no tenga fin, aunque ciertamente no carece de
propósito: vivir es alabar y la alabanza existencial es la realidad del cielo en la tierra.
De tal manera que podemos tener añoranza de plenitud manifiesta, pero no añoranza
de cielo porque el cielo es Dios y él vive dentro de nosotros.
Al proponer este estudio sistematizado de Isabel de la Trinidad en cien fichas,
queremos que los lectores se den la oportunidad de reenfocar la vida desde su pasión
por vivir. Muchas veces queremos vivir y todo son obstáculos. Con Isabel vamos a
aprender que podemos vivir y todo son oportunidades.
Porque lo que necesitamos para llevar una vida plena está dentro de nosotros y
nada ni nadie nos lo puede quitar. Basta con que reorientemos nuestros caminos y
busquemos dentro, sin esfuerzo y en gratuidad, lo que con tantos esfuerzos,
frustraciones y a tan altos costos buscamos fuera. “Creer que un Ser que se llama
Amor habita en nosotros en todo momento del día y de la noche” es la clave eficaz
para una vida plenamente segura y feliz. Tal ha sido el secreto de Isabel: “Esta
intimidad con Él, en lo interior, ha sido el hermoso sol que ha iluminado mi vida
convirtiéndola en un cielo anticipado”. Más aún, según ella misma, su misión en el
cielo “consistirá en atraer a las almas, ayudándolas a salir de sí mismas para unirse
con Dios mediante un ejercicio sumamente simple y amoroso, y en mantenerlas en
ese gran silencio interior que le permite a Dios imprimirse en ellas y transformarlas en
Él”.
Ayudemos a Isabel a cumplir su misión. Estas fichas son para aprender y enseñar.
También son una invitación a vivir y disfrutar viviendo.
Los autores

Presentación
Siglas y abreviaturas
PARTE I: Contexto Histórico
INDICE GENERAL
FICHA 1: El tormentoso Siglo XIX en Francia
a. Panorama general
b. El Trasfondo de la Revolución (1793-1815)
c. Restauraciones y Revoluciones (1815-1879)
FICHA 2: Apogeo de Europa-Debilitamiento de la Iglesia-Movimiento obrero
a. Apogeo económico
b. Manipulación y debilitamiento de la Iglesia
c. El movimiento obrero entre el Anarquismo y el Marxismo
FICHA 3: Corrientes de pensamiento
a. El Romanticismo
b. Positivismo – Pragmatismo – Cientificismo
c. El viraje de fin de Siglo: Neorromanticismo o vitalismo
FICHA 4: Relaciones Estado-Iglesia en la III República francesa
a. Hacia la recuperación de los principios revolucionarios
b. Proceso de secularización y total ruptura
FICHA 5: Debilidad de una Iglesia poderosa
FICHA 6: La persecución: Libertad y vitalidad para la Iglesia
FICHA 7: Imagen de Dios y corrientes espirituales
a. El jansenismo y la imagen de Dios
b. El Romanticismo
c. El ultramontanismo
FICHA 8: Espiritualidad reparadora-Piedad popular-Devociones-Solidaridad
a. El Sagrado Corazón de Jesús
b. La Eucaristía
c. La Virgen María
d. El testimonio de la Caridad
FICHA 9: El Carmelo Descalzo Femenino en Francia
a. El proceso fundacional
b. Persecución y martirio
c. Restauración
FICHA 10: El Carmelo de Dijon
a. La ciudad
b. El monasterio primitivo hasta 1792
c. El convento de Sor Isabel

PARTE II: CONTEXTO FAMILIAR
FICHA 11: El matrimonio Catez
a. José Francisco Catez
b. María Emilia Rolland
FICHA 12: Nacimiento de Isabel y primeros años de vida
a. El milagro de la vida
b. La pequeña “Sabel”
c. Su hermana Margarita
FICHA 13: Cambio de orientación en su vida
a. La tragedia de la muerte
b. Su conversión
FICHA 14: Una niña con gran talento
a. Su formación cultural
b. Primera formación religiosa
c. Su formación musical
FICHA 15: “Casa de Dios”
a. La primera comunión
b. Descubrimiento del Carmelo y de su vocación personal
FICHA 16: Inmersa en mundo
a. Vida social
b. Viajes
c. Amor a la naturaleza
FICHA 17: Vocación al Carmelo
a. Madurando la vocación
b. La oposición de la madre
FICHA 18: Su formación religiosa y espiritual
a. Ejercicios espirituales
b. La gran misión
c. Leyendo a Teresa y Teresita
FICHA 19: Carmelita en el mundo
a. Amor esponsal a Jesús
b. En clave de oración: carmelita en el mundo
c. Objetivo apostólico: llevar la cruz y salvar almas
FICHA 20: Compañeros de camino
a. El canónigo Angles
b. Juan Bautista Sellenet
c. Alejo Golmard
d. El Padre Vellée
e. P. Edmond Vergne

PARTE III: EN EL CARMELO TERESIANO
FICHA 21: El umbral del Carmelo (1901)
a. Vocación probada en el sufrimiento
b. Luces y sombras de la espera
FICHA 22: Ingreso en el Carmelo de Dijon
a. “La paz inunda mi alma”
b. Postulantado
FICHA 23: Isabel de la Trinidad
a. Noviciado y noche oscura
b. La madre Germana de Jesús
FICHA24: La esposa de Jesús
a. Preparación para la profesión
b. El horario del Carmelo
FICHA 25: El espíritu de la Carmelita
a. Espíritu de obediencia, humildad y servicio
b. Fidelidad en las pequeñas cosas
c. El silencio como su ambiente natural
FICHA 26: Un corazón abierto
a. Amor creciente hacia los suyos
b. Espíritu sacerdotal y misionero
FICHA 27: Escondida con Cristo en la Trinidad
a. Experiencia de amor gratuito y transformante
b. Su experiencia de amor se personaliza en Jesucristo
c. Con Cristo entramos a participar en la vida intratrinitaria
FICHA 28: Una vocación singular: “Laudem Gloriae”
a. Un nuevo nombre
b. Una vocación para la eternidad
FICHA 29: Existencialmente unida al Crucificado
a. El proceso de la enfermedad
b. “Enfermedad de amor”
FICHA 30: Biografía póstuma: hacia la beatificación
a. Rápida difusión de su mensaje
b. Inicio de la causa de beatificación
c. Dificultades y ralentización
d. Hacia la beatificación

PARTE IV: ESCRITOS
FICHA 31: Isabel escritora: los primeros intentos
a. Escritora espiritual
b. Excursiones al Jura
FICHA 32: Diario espiritual
a. Contexto y género literario
b. Estructura y contenido
FICHA 33: El Cielo en la Fe
a. Fecha de composición y género literario
b. Estructura y contenido
FICHA 34: Últimos ejercicios
a. Preparación para la eternidad
b. Contenido
FICHA 35: La grandeza de nuestra vocación y Déjate amar
a. La grandeza de nuestra vocación
b. Déjate amar
FICHA 36: Epistolario (I)
a. Una gran comunicadora
b. Cartas conservadas
FICHA 37: Epistolario (II)
a. Destinatarios
b. Temas presentes en sus cartas
FICHA 38: Notas íntimas
FICHA 39: Poesías
a. Escritora de poesía
b. División y clasificación
FICHA 40: Notas y apuntes
a. San Pablo y sus cartas
b. Las obras de Juan de la Cruz
c. Ruysbroeck el admirable

PARTE V: LAS FUENTES QUE INSPIRAN A ISABEL
FICHA 41: Su experiencia de Dios
a. Hitos de un proceso
b. Profundizando en el misterio
FICHA 42: Devociones
a. Las devociones de la época
b. Las devociones de Isabel
FICHA 43: La predicación de la época
a. Los predicadores
b. Influjo en Isabel
FICHA 44: La Sagrada Escritura
a. Acceso a los textos de la Escritura
b. Jesús, el Verbo del Padre
c. Uso que hace Isabel de la Escritura
FICHA 45: Los evangelios
a. Los evangelios sinópticos
b. Juan, el evangelista del amor
c. El Apocalipsis
FICHA 46: Las cartas de San Pablo
a. Progresivo encuentro con San Pablo
b. Principales temas paulinos asimilados por Isabel
FICHA 47: San Juan de la Cruz
a. Dios es el centro del alma
b. El fuego del amor
c. La vocación del Carmelo
FICHA 48: Teresa de Jesús y Teresa de Lisieux
a. Teresa de Jesús
b. Teresa de Lisieux
FICHA 49: Juan Ruysbroeck
a. El amor, clave de la santidad
b. La Trinidad
c. Laudem Gloriae
FICHA 50: La Liturgia
a. Ser alabanza en el rezo del oficio
b. Al compás de la vida de Cristo: el año litúrgico
c. La Eucaristía

PARTE VI: LA TRINIDAD
FICHA 51: Inhabitación de la Trinidad
a. Realidad de la inhabitación
b. Inhabitación por Cristo y en Cristo
FICHA 52: La inhabitación: obra del amor de Dios manifestado en Cristo
a. Inhabitación: don de Dios progresivamente desvelado y asumido
b. La inhabitación se vive en el amor entregado
FICHA 53: Contenido de la experiencia de la inhabitación en Sor Isabel
a. Biografía trinitaria de Isabel Catez
b. Trinidad inmanente-Trinidad económica
FICHA 54: Experiencia y relación transformante con el Padre
a. Dios Padre nos crea y elige para ser alabanza de su gloria
b. Hijos del padre en su Hijo Jesucristo
FICHA 55: El Padre se complace en nosotros como en Cristo
a. La adoración nos hace participar en la santidad del Padre
b. Glorificación recíproca: “igualdad de amor”
c. La gloria del Padre está en que nosotros seamos santos
FICHA 56: Experiencia y relación transformante con el Verbo Hijo de Dios
a. El Cristo de Isabel de la Trinidad
b. Cristología trinitaria
c. Permaneciendo en Cristo vivimos en comunión con la Trinidad
FICHA 57: Cristo es mi vida
a. Cristo: Camino, Maestro, Modelo y Meta
b. Ser para Él una humanidad suplementaria
FICHA 58: Experiencia y relación transformante con el Espíritu Santo
a. Fuego que consume y transforma
b. Dejarse conducir por el Espíritu Santo
FICHA 59: Devoción y comunión con el Espíritu Santo
a. El Espíritu Santo: Aquél a quien «ni un día dejo de invocar»
b. La devoción: comunión con el Espíritu y docilidad a sus mociones
FICHA 60: La Trinidad: fuente, camino y plenitud de la vida cristiana
a. Una existencia bautismal, pascual y trinitaria
b. Elevación a la Santísima Trinidad

PARTE VII: ALABANZA DE GLORIA
FICHA 61: Un camino existencial
a. Sentido de la alabanza
b. Todo un programa de santificación
FICHA 62: Descubriendo nuestro ser auténtico: imagen del Dios Trinidad
a. Creados desde la eternidad
b. A imagen y semejanza de Dios
c. Llamados a la unión: exigencia de nuestra naturaleza
d. Imagen de Dios: santidad, perfección
FICHA 63: Predestinados en el Hijo: filiación y santificación
a. A imagen del Verbo
b. Predestinados a ser hijos de Dios
c. Predestinados a ser santos
FICHA 64: Seres habitados: Dios en el centro del alma
a. Dios habita en el centro del alma
b. El cielo en nuestra alma
c. Morar en Dios
FICHA 65: Identificación con Cristo: la voluntad del Padre
a. Conformarnos con la imagen del Hijo
b. “Mi alimento es hacer la voluntad de mi Padre”
FICHA 66: Amor que se olvida de sí
a. Vivir de amor
b. Olvidarse de sí
FICHA 67: En silencio y soledad hacia la unidad interior
a. El silencio
b. Soledad
c. Unidad interior
FICHA 68: con la mirada de fe en Dios
a. Conocimiento oscuro
b. Firme en Dios
c. Reconocimiento del amor de Dios
FICHA 69: sencillez de intención – mirada contemplativa
a. Sencillez (simplicidad) de intención
b. Mirada contemplativa
FICHA 70: En acción de gracias
a. Reconocimiento de Dios
b. Actitud de vida
c. Vivir en continua acción de gracias

PARTE VIII: SER UNA HUMANIDAD SUPLEMENTARIA
FICHA 71: En la escuela del sufrimiento
a. El marco de su vida espiritual
b. Una vida probada en el sufrimiento
FICHA 72: Sufrir para mostrar amor a Dios
a. Una ofrenda a Dios
b. El sentido de la mortificación
c. Lo verdaderamente importante es amar
FICHA 73: Voluntad de Dios y crecimiento en el amor
a. Configurarse con la voluntad de Dios
b. Crecer en el amor
c. Don del amor de Dios
FICHA 74: Sufrimiento y purificación. Valor pedagógico
a. El sufrimiento nos hace libres
b. Lo único necesario
FICHA 75: Imagen de Crucificado
a. Ser imagen de Cristo
b. En comunión con Cristo
FICHA 76: Cruz, redención y expiación
a. El misterio de la Cruz
b. Redención y expiación
FICHA 77: Los frutos del sufrimiento
a. Abandono
b. Pregonar la gloria de Dios
c. Intercesión
d. Co-redentora
FICHA 78: Sufrimiento y Eucaristía
a. Ser hostia de alabanza
b. Carácter eucarístico
FICHA 79: El gozo de la Cruz
a. La felicidad de salir de sí misma
b. La felicidad de saberse amada por Dios
c. La felicidad de caminar con Cristo hacia la plenitud
FICHA 80: Ser humanidad suplementaria: esponsalidad y entrega
a. Ser humanidad suplementaria en clave esponsal
b. Ser humanidad suplementaria en clave de entrega

PARTE IXª: DISCÍPULA Y MAESTRA EN LA ESCUELA DEL CARMELO
TERESIANO
FICHA 81: La Carmelita
a. Sintonía con la espiritualidad del Carmelo
b. Maduración y perfil de la Carmelita en la experiencia de Isabel
FICHA 82: El abandono
a. Actitud de abandono confiado
b. “Que el fruto del amor sea el abandono”
FICHA 83: Mística de la esponsalidad
a. “Soy tuya, te pertenezco, haz de mí lo que te plazca”
b. Esposa de la Trinidad
FICHA 84: Vida teologal – La fe
a. Fe y comunión con Dios
b. en la fe vivimos ya el cielo en la tierra
FICHA 85: Vida teologal - La Esperanza
a. Cristo, centro y fundamento de la esperanza
b. En el amor “espero el cara a cara en la luz”
FICHA 86: Vida teologal - La Caridad
a. Vivir de amor
b. Morir de amor
Ficha 87. La Virgen María (1): devoción y vida
a. Su devoción a la Virgen
b. Su relación con María
Ficha 88. La Virgen María (2): misterio y contemplación
a. El Fiat de María
b. La Virgen de la Encarnación y de la Trinidad
Ficha 89: La Virgen María (3): mujer contemplativa
a. Modelo de contemplativa
b. Contemplativa en acción
Ficha 90. Maria Magdalena y/o María de Betania
a. María Magdalena
b. María de Betania

Parte X: Profeta del sexto continente: la interioridad
FICHA 91. El secreto de Isabel: el descubrimiento de su mundo interior
a. Enraizada en su interior
b. Isabel maestra de la interioridad
Ficha 92. La mística de Isabel
a. Mística esencial
b. Mística del amor
Ficha 93. El hombre: un ser habitado por Dios
a. Aprender a vivir desde esa verdad de fe
b. Aventurarse en esa búsqueda
Ficha 94. Oración: diálogo ininterrumpido de amor
Ficha 95. Objetivo: centrar la vida en Dios
a. El Reino de Dios está en vosotros
b. Dios es el centro de la persona
c. Santidad: vivir centrado en Dios
Ficha 96. El camino de la interioridad
a. El abismo interior
b. Silencio y soledad
c. Actitudes para interiorizarse y tratar con Dios
Ficha 97. Vivir en la presencia del Dios Trinidad
a. Misterio de la Presencia
b. Vivir en Su compañía
c. Efectos de la Presencia
Ficha 98. -En el interior está la felicidad
a. La felicidad está dentro
b. Vivir unificado
c. En el interior acontece la salvación
Ficha 99. -El cielo en mi alma
a. El cielo es Dios
b. La certeza de estar en el cielo
c. En el cielo nos encontramos
Ficha 100. Isabel de la Trinidad paradigma profético para el hombre de hoy
a. El ser humano no se conoce a sí mismo
b. Un hombre esclavo
c. Isabel profeta de una felicidad posible y real
Bibliografía
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