La Danza - Casino de Ortigosa
La Danza - Casino de Ortigosa
La Danza - Casino de Ortigosa
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros a 2 <strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 2008<br />
¡Buenas noches!, quisiera agra<strong>de</strong>ceros a todos la asistencia, en nombre<br />
<strong>de</strong> la Junta <strong>de</strong> la UNION TERTULIA ORTIGOSANA. Con vuestra presencia,<br />
brindáis un apoyo muy especial a este proyecto, que ni para los más optimistas<br />
habría llegado a alcanzar esta dimensión.<br />
Hoy es un día muy especial, nuestro querido “casino”, reinicia su<br />
andadura para proyectar, secundar y llevar a cabo, cuantas activida<strong>de</strong>s se nos<br />
ocurran. De esta manera, recobra su papel como plataforma cultural <strong>de</strong><br />
<strong>Ortigosa</strong>. Y ciertamente, no se me ocurre mejor manera <strong>de</strong> hacerlo que con<br />
nuestra danza como protagonista.<br />
Hoy son muchas las preguntas que nos po<strong>de</strong>mos hacer sobre su origen<br />
y significado. Un artículo anónimo sobre la danza coral ritual en la península<br />
ibérica, nos indica que se trata <strong>de</strong> una manifestación coreográfica ligada a<br />
celebraciones <strong>de</strong> carácter religioso, que se repiten cíclicamente en<br />
<strong>de</strong>terminadas solemnida<strong>de</strong>s, año tras año. Se lleva a cabo con el único objeto<br />
<strong>de</strong> rendir homenaje a la divinidad o a un santo, como signo <strong>de</strong> veneración y<br />
reverencia, imprimiendo un carácter religioso y solemne que exterioriza el sentir<br />
tradicional más ancestral <strong>de</strong> una colectividad, respecto <strong>de</strong>l objeto <strong>de</strong> culto en<br />
cuyo honor se realiza.<br />
Se trata, pues, <strong>de</strong> danzas ligadas a simbolismos religiosos cristianos,<br />
muchas <strong>de</strong> las cuales se cree que pudieron tener su origen más remoto, en la<br />
acomodación <strong>de</strong> antiguos rituales paganos existentes en nuestras tierras <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />
tiempos prehistóricos, <strong>de</strong> los que la arqueología ha dado muestras abundantes.<br />
Según diversas investigaciones <strong>de</strong> carácter histórico y etnográfico, está<br />
documentado que durante los siglos XVI y XVII creció en España la afición a<br />
las danzas, muchas <strong>de</strong> las cuales han perdurado hasta nuestros días, aunque<br />
en mayor o menor medida modificadas durante los siglos XVIII y XIX. Hay<br />
estudios monográficos que ponen <strong>de</strong> manifiesto, el curioso paralelismo<br />
existente entre las manifestaciones <strong>de</strong> este carácter que han perdurado hasta<br />
nuestros días en la geografía ibérica, en su gran mayoría sin aparentes<br />
conexiones históricas; un paralelismo que tiene que ver no sólo con la<br />
instrumentalización <strong>de</strong> las músicas que acompañan a las danzas, sino también<br />
con <strong>de</strong>terminadas coreografías e incluso con algunas vestimentas <strong>de</strong> los<br />
danzantes.<br />
A lo largo <strong>de</strong> la historia ha habido épocas en las que estas danzas<br />
rituales han sido prohibidas. <strong>La</strong> más significativa prohibición ocurrió durante el<br />
reinado <strong>de</strong> Carlos III; en 1777 se promulgó una Real Cédula sobre<br />
disciplinantes, empalados, cruces <strong>de</strong> mayo y bailes en el interior <strong>de</strong> las iglesias.<br />
En ella se prohibió <strong>de</strong> modo taxativo la ejecución <strong>de</strong> las danzas tradicionales<br />
<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> los templos, al igual que en otras épocas lo hicieran en diversas<br />
diócesis los prelados con el fin <strong>de</strong> zanjar los numerosos abusos que, al<br />
parecer, se sucedían en multitud <strong>de</strong> ocasiones. Pese a todo, las danzas se han<br />
ejecutado y se ejecutan en espacios abiertos, don<strong>de</strong> marca la tradición, <strong>de</strong><br />
acuerdo con los recorridos establecidos en sus actuaciones, y también se baila<br />
en el interior <strong>de</strong> los templos parroquiales y en las ermitas y santuarios,<br />
igualmente en los momentos tradicionalmente señalados.<br />
1
Por regla general suelen ser varones los protagonistas <strong>de</strong> las danzas<br />
rituales, siendo casi nula la presencia <strong>de</strong> la mujer. Ello es <strong>de</strong>bido a las<br />
reiteradas prohibiciones <strong>de</strong> la Iglesia en este sentido, que impedían a las<br />
mujeres participar en este tipo <strong>de</strong> actos.<br />
Se acce<strong>de</strong> al oficio <strong>de</strong> danzante mediante subasta, con la condición <strong>de</strong><br />
ser natural <strong>de</strong>l pueblo o por promesa o <strong>de</strong>voción.<br />
El número <strong>de</strong> danzantes suele ser ocho, aunque hay veces que son<br />
doce, seis o cuatro. Cuando están en formación, los que ocupan los primeros<br />
puestos en las dos filas que se forman reciben el apelativo <strong>de</strong> guías.<br />
Habitualmente, el grupo lo completa un personaje que asume el papel <strong>de</strong><br />
director <strong>de</strong> la danza, con distintas <strong>de</strong>nominaciones, según los pueblos: alcal<strong>de</strong><br />
o maestro <strong>de</strong> la danza, zarragón, zurronero, zorramoscas, zurrimoscas,<br />
cachiberrio, cache, bobo, zurraguero, zarrón, zorra, porra, zángano, rector o<br />
botarga. Su misión no termina en el adiestramiento <strong>de</strong> los danzantes, sino que<br />
abarca también la dirección <strong>de</strong> la danza y el estar pendiente <strong>de</strong> que ésta se<br />
ejecute con la comodidad necesaria para los danzantes, impidiendo que la<br />
gente se les acerque <strong>de</strong>masiado y les interrumpa. Su indumentaria suele diferir<br />
<strong>de</strong> la <strong>de</strong> los danzantes, siendo por lo general estrafalaria, dado que al papel <strong>de</strong><br />
rector y supervisor <strong>de</strong> la danza, se le sumaba el <strong>de</strong> gastar bromas al público,<br />
golpeando con su vara a quienes se acercaban a los danzantes.<br />
Por lo que respecta a la indumentaria usada por los danzantes hay que<br />
<strong>de</strong>cir que fue y es muy similar en todos los sitios, aunque siempre con algún<br />
elemento diferenciador. En general se caracteriza por cubrirse la cabeza con<br />
gran<strong>de</strong>s gorros <strong>de</strong> flores o pañuelos atados a un lado y cayéndoles las puntas;<br />
camisa blanca con cintas o mantones <strong>de</strong> manila, a modo <strong>de</strong> banda sobre el<br />
pecho o atados a la cintura. Visten faldas cortas o fal<strong>de</strong>llines <strong>de</strong> color blanco o<br />
rojo, almidonados y adornados con tiras bordadas y cintas <strong>de</strong> colores. Debajo<br />
se cubren hasta la pantorrilla con pololos <strong>de</strong>l mismo color, así como las medias<br />
y zapatillas. En algunos sitios la falda corta se sustituye por unos calzones<br />
cortos ajustados hasta la rodilla.<br />
Hay danzas específicas para rendir homenaje a los santos o a la<br />
custodia en el instante en que efectúa la salida <strong>de</strong>l templo, junto a las puertas<br />
<strong>de</strong>l mismo. Hay también danzas sólo realizadas durante la procesión,<br />
discurriendo los danzantes por el trayecto que sigue la misma, generalmente<br />
dando la cara al trono o paso que porta al santo en cuyo honor se baila. Y, por<br />
último, hay danzas que se ejecutan en un espacio concreto, que habitualmente<br />
es una plaza o un lugar señalado en el recorrido procesional, aunque<br />
habitualmente se efectúan fuera <strong>de</strong>l contexto <strong>de</strong> las procesiones, teniendo un<br />
carácter <strong>de</strong> muestra. En tales casos, los bailes no suelen realizarse en<br />
presencia <strong>de</strong> la imagen <strong>de</strong>l santo en cuyo honor se realizan.<br />
El hecho <strong>de</strong> tener documentada una danza <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace siglos no implica<br />
que la música al son <strong>de</strong> la que se ejecuta comparta la misma antigüedad. Al<br />
igual que las coreografías, la instrumentación <strong>de</strong> sus melodías ha sufrido<br />
continuos cambios, siendo objeto <strong>de</strong> reiteradas readaptaciones y recreaciones<br />
que no siempre han respetado escrupulosamente las raíces musicales <strong>de</strong> los<br />
ritmos que acompañan y dan soporte a las mismas. Los estudios al respecto<br />
2
han constatado el hecho <strong>de</strong> que coreografías nuevas se han montado a partir<br />
<strong>de</strong> soportes musicales antiguos y viceversa.<br />
<strong>La</strong> música que acompaña a las danzas se ejecuta actualmente con<br />
tambor y dulzaina, al margen <strong>de</strong> que en algunas coreografías los propios<br />
danzantes con sus castañuelas o paloteas acompasan el ritmo <strong>de</strong> la música.<br />
En ciertos pueblos la música corre a cargo <strong>de</strong> un solo instrumentista, que<br />
habitualmente hace sonar la flauta y el tamboril a cuyo ritmo tienen lugar las<br />
danzas.<br />
<strong>La</strong>s paloteas son palos cilíndricos <strong>de</strong> unos 30 cm. <strong>de</strong> largo, perforados<br />
en uno <strong>de</strong> sus extremos para acoplar en él una cinta que asegura la sujeción<br />
<strong>de</strong>l mismo a la muñeca <strong>de</strong>l danzante. <strong>La</strong> cinta se adorna con borlas <strong>de</strong> lana<br />
roja o azul. El palo suele ser <strong>de</strong> ma<strong>de</strong>ra <strong>de</strong> espino seca, torneada.<br />
Termina el artículo enumerando diversas poblaciones <strong>de</strong> la geografía<br />
española, coinci<strong>de</strong>ntes en la indumentaria y/o puesta en escena y tan<br />
equidistantes entre si:<br />
Graus. Aragón.<br />
Alagón. Aragón.<br />
Méntrida. Toledo<br />
Val<strong>de</strong>ve. Isla <strong>de</strong>l Hierro.<br />
Belinchón. Guadalajara.<br />
Villacañas. Toledo.<br />
Frías.Valladolid.<br />
Arcones. Valladolid.<br />
Ampudia <strong>de</strong> Campos. León.<br />
<strong>La</strong>guna <strong>de</strong> Negrillos. León.<br />
Vilanova <strong>de</strong>l Infantes. Pontevedra.<br />
<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros. <strong>La</strong> Rioja.<br />
Alcudia. Valencia.<br />
Oñate. País Vasco.<br />
Majaelrayo. Guadalajara.<br />
Valver<strong>de</strong> <strong>de</strong> los arroyos. Guadalajara.<br />
Un estudio realizado por los Srs. Javier Asensio, Fernando Jalón y Helena Ortiz<br />
sobre LAS DANZAS PROCESIONALES DE CAMEROS Y EL NORTE DE<br />
SORIA<br />
<strong>de</strong> forma resumida, nos dice:<br />
Una línea que no coinci<strong>de</strong> siempre con las cumbres <strong>de</strong>l sistema Ibérico –<br />
divisorias <strong>de</strong>l Duero y <strong>de</strong>l Ebro– separa las provincias <strong>de</strong> Soria y <strong>La</strong> Rioja.<br />
El límite se mete en tierras <strong>de</strong>l Ebro sin un criterio coherente. En realidad se<br />
trata <strong>de</strong> un territorio montañoso con una gran homogeneidad histórica y<br />
cultural.<br />
Antes <strong>de</strong> que se crearan las actuales provincias, la mayor parte <strong>de</strong>l territorio<br />
camerano –hoy en la provincia <strong>de</strong> <strong>La</strong> Rioja– pertenecía a la entonces<br />
extensísima provincia <strong>de</strong> Soria. Esta amplia serranía ibérica fue cabeza o<br />
puerto <strong>de</strong> las cañadas soriana oriental y occi<strong>de</strong>ntal. Los ganados sorianos ya<br />
3
eran nombrados en tiempos <strong>de</strong>l Arcipreste <strong>de</strong> Hita –"rehalas <strong>de</strong> Castilla con<br />
pastores <strong>de</strong> Soria" reza el Libro <strong>de</strong>l buen amor–. Los inmensos rebaños <strong>de</strong><br />
estas sierras bajaron durante siglos hasta Extremadura, <strong>La</strong> Mancha y<br />
Andalucía en un continuo viaje anual <strong>de</strong> ida y vuelta. Aún quedan restos<br />
<strong>de</strong> esta secular trashumancia.<br />
A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> estos largos viajes <strong>de</strong> norte a sur <strong>de</strong> España también se<br />
daban otras relaciones <strong>de</strong> más corto alcance. <strong>La</strong>s cumbres y la<strong>de</strong>ras <strong>de</strong>l puerto<br />
<strong>de</strong> Santa Inés, <strong>de</strong>l Piqueras, <strong>de</strong>l Cerro Castillo, <strong>de</strong> Canto Hincado o <strong>de</strong>l<br />
Nocedillo no fueron obstáculo para la comunicación <strong>de</strong> los pueblos <strong>de</strong> las<br />
tierras altas <strong>de</strong> Soria con las <strong>de</strong>l Camero Nuevo o Viejo. Muchas razones<br />
históricas, económicas y <strong>de</strong>mográficas han potenciado los vínculos entre los<br />
habitantes <strong>de</strong> ambas la<strong>de</strong>ras.<br />
<strong>La</strong> dinastía <strong>de</strong> los Ramírez <strong>de</strong> Arellano, que durante siglos ejerció el<br />
señorío <strong>de</strong> Cameros, mantuvo su resi<strong>de</strong>ncia habitual <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el siglo XV en la<br />
localidad soriana <strong>de</strong> Yangüas, villa que fue la capital <strong>de</strong>l citado señorío.<br />
Sobre el mencionado estudio, nos centramos exclusivamente en los<br />
Cameros y continúa diciendo:<br />
Camero Nuevo. <strong>La</strong> mayor parte <strong>de</strong> los pueblos <strong>de</strong> esta extensa comarca<br />
tuvieron danzas procesionales durante el siglo XX. Los danzadores llevaban –y<br />
aún llevan en las pocas localida<strong>de</strong>s don<strong>de</strong> pervive– sayas almidonadas <strong>de</strong><br />
color blanco. Ejecutan un amplio repertorio <strong>de</strong> paloteados o troqueaos, como<br />
suelen llamarse en <strong>La</strong> Rioja. Montenegro <strong>de</strong> Cameros, en la provincia <strong>de</strong> Soria,<br />
tuvo una danza encasillable <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> esta comarca con su zurronero, el<br />
pasacalles a ritmo <strong>de</strong> agudo, un troqueao llamado Los Carlistas y<br />
los danzadores con sus sayuelas blancas.<br />
Camero Viejo. También fue esplendoroso el arte <strong>de</strong> la danza en esta comarca<br />
surcada por el río Leza, hasta la primera mitad <strong>de</strong>l siglo XX. Mantienen<br />
similitu<strong>de</strong>s con las danzas <strong>de</strong>l Camero Nuevo pero también algunos rasgos<br />
distintivos: los danzadores no llevan sayas, visten pantalón y camisa blanca<br />
con cintas cruzadas. <strong>La</strong> danza <strong>de</strong> Santa Cruz <strong>de</strong> Yangüas (Soria) era<br />
típicamente camerana, con su zurraguero y los danzadores vistiendo<br />
pantalones blancos. Se trata <strong>de</strong> un islote en la tierra <strong>de</strong> Yangüas: Santa Cruz,<br />
limítrofe con los pueblos <strong>de</strong>l Camero Viejo, fue la única localidad <strong>de</strong> la comarca<br />
<strong>de</strong> Yangüas que tuvo danza en el siglo XX.<br />
.<br />
<strong>La</strong>s melodías se han trasmitido con una letrilla o, lo que es lo mismo,<br />
una canción sustentaba la danza, una canción que marcaba el ritmo <strong>de</strong> los<br />
pasos <strong>de</strong> los danzantes. Y he aquí cómo, igual que las melodías son<br />
conservadoras y por lo tanto nos traen estilos musicales antiguos, las letras<br />
también son conservadoras y nos traen hasta este siglo XXI, canciones <strong>de</strong> la<br />
antigua lírica hispana, <strong>de</strong>l Barroco, <strong>de</strong>l Renacimiento y, quizás, <strong>de</strong> la Edad<br />
Media.<br />
4
El sentido <strong>de</strong> la mayoría <strong>de</strong> estas letras no tiene ninguna relación con la<br />
danza. Hay muy pocas excepciones a esta regla. En general, no hay nada en<br />
las letras que nos indique la ejecución <strong>de</strong> la danza: No hay nada ver<strong>de</strong> en la<br />
danza <strong>de</strong>l Ver<strong>de</strong>, no hay una naranjuela en <strong>La</strong> naranjuela, ni los danzadores<br />
forman una coreografía que se parezca a una hoja <strong>de</strong>l pino cuando ejecutan<br />
esta danza.<br />
<strong>La</strong> intrascen<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>l significado favorece ciertos “acci<strong>de</strong>ntes” en la<br />
transmisión oral. El principio conservador procura que la canción se mantenga<br />
como una entidad inconfundible, pero el rodar <strong>de</strong> boca en boca durante siglos,<br />
sin un soporte escrito, provoca que algunas letras se <strong>de</strong>speñen en el absurdo.<br />
En las danzas hay movimientos <strong>de</strong> rotación y traslación: los danzadores<br />
van y vienen, cambian <strong>de</strong> sitio y regresan al punto <strong>de</strong> partida. Los movimientos<br />
en paralelo <strong>de</strong> los danzadores están sutilmente sugeridos en los paralelismos<br />
<strong>de</strong> las letras. Como po<strong>de</strong>mos comprobar se dan muchas repeticiones:<br />
“Ver<strong>de</strong>, ver<strong>de</strong> está la hoja <strong>de</strong> la noguera,<br />
ver<strong>de</strong>, ver<strong>de</strong> está y el aire la llevará”.<br />
Tantas idas y venidas, esos vaivenes léxicos y procesionales alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong>l<br />
santo patrón o la Virgen <strong>de</strong>l lugar, transmiten la sensación festiva, religiosa y<br />
profundamente humana <strong>de</strong> que la vida es un don <strong>de</strong> Dios.<br />
Algunas letras nos dicen claramente la época en que fueron<br />
compuestas. En la primera mitad <strong>de</strong>l siglo XIX, la valentía autoproclamada <strong>de</strong><br />
los soldados <strong>de</strong>l bando liberal durante las guerras carlistas se quedó<br />
enquistada en los versos <strong>de</strong> la danza Los carlistas. El lenguaje poético <strong>de</strong> la<br />
mayoría restante lleva la impronta <strong>de</strong> la lírica <strong>de</strong> los siglos XVI al XVIII y no es<br />
<strong>de</strong>scabellado pensar que alguna copla se cantase entre el pueblo llano <strong>de</strong>l<br />
medievo.<br />
El tema central <strong>de</strong> cada pieza es muy variopinto. Ocupándonos tan sólo <strong>de</strong><br />
nuestro repertorio, las letras hablan <strong>de</strong>:<br />
1.- Amores y galanteos:<br />
<strong>La</strong> red<br />
“Tién<strong>de</strong>me la red<br />
morena morenita<br />
tién<strong>de</strong>me la red<br />
morena y morená.<br />
Soy soltera, soy Osera<br />
vivo en Aguilar<br />
soy zaran<strong>de</strong>ra<br />
y me quiero zaran<strong>de</strong>ar”.<br />
(Cabezón, <strong>Ortigosa</strong>, Pinillos <strong>de</strong> Cameros, LR).<br />
VARIANTES en <strong>La</strong>guna, Soto <strong>de</strong> Cameros, Muro y Torre <strong>de</strong> Cameros<br />
5
2.- Resonancias bélicas:<br />
Los carlistas<br />
“Los carlistas han jurado<br />
que a Madrid han <strong>de</strong> venir<br />
y han dicho los soldados<br />
que primero han <strong>de</strong> morir”.<br />
(<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros, LR).<br />
VARIANTES en Almarza <strong>de</strong> Cameros, Pinillos, Torre <strong>de</strong> Cameros, <strong>La</strong>guna,<br />
Cabezón y Muro <strong>de</strong> Cameros<br />
3.- Árboles y plantas:<br />
<strong>La</strong> naranjuela<br />
“Quién te cortó naranjuela<br />
quién te cortó <strong>de</strong> la rama.<br />
Quien te cortó mal le venga<br />
mal le venga, mal le vaya<br />
quién te cortó <strong>de</strong> la rama”.<br />
(Val<strong>de</strong>avellano, Rollamienta, SO).<br />
VARIANTES en Muro, Torre, <strong>La</strong>guna, Almarza y <strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros<br />
Quién te cortó naranjuela / quién te cortó <strong>de</strong> la rama / quien te venga, quien te<br />
vaya / quién te venga <strong>de</strong> la rama (<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros, LR).<br />
El ver<strong>de</strong><br />
“Ver<strong>de</strong>, ver<strong>de</strong> está<br />
la hoja <strong>de</strong> la noguera<br />
ver<strong>de</strong>, ver<strong>de</strong> está<br />
el aire se la llevará.<br />
Seca, seca está<br />
la hoja <strong>de</strong>l pino<br />
seca, seca está<br />
el santo la recogerá”.<br />
(Islallana, LR).<br />
VARIANTES en <strong>La</strong>guna, Cabezón, Muro, Almarza, Pinillos y <strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong><br />
Cameros: Qué ver<strong>de</strong>s que son / la hojas <strong>de</strong> mi noguera / Qué ver<strong>de</strong>s que son /<br />
las hojas <strong>de</strong> mi cocón (<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros, LR). Ver<strong>de</strong>, ver<strong>de</strong> está /<br />
la hoja <strong>de</strong> la noguera / ver<strong>de</strong>, ver<strong>de</strong> está / y el aire la secará (<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong><br />
Cameros).<br />
4.- Animales:<br />
Que se van las cabras<br />
“Tris tris tris<br />
que se van las cabras<br />
tris tris tris<br />
por aquellas majadas.<br />
6
Tris tris tris<br />
que se van los chivos<br />
tris tris tris<br />
por aquellos trigos”.<br />
Muro <strong>de</strong> Cameros, LR).<br />
VARIANTES: Tris tris tris / que se van las cabras / tris tris tris / por aquellas<br />
majadas. /Tris tris tris / que se van los chivos / tris tris tris / por aquellos trigos. /<br />
Tris tris tris / que se van los chivos / tris tris tris / que los hay Cirilo (<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong><br />
Cameros, LR).<br />
<strong>La</strong>s tres maravillas<br />
“Tres, tres, tres<br />
maravillas tres<br />
conejitos son<br />
que se vuelvan seis”.<br />
(<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros, LR).<br />
VARIANTES en Almarza y Muro <strong>de</strong> Cameros<br />
5.- Lugares y parajes:<br />
Trigo menudito<br />
“Trigo menudito<br />
me lo habéis <strong>de</strong> dar<br />
pa po<strong>de</strong>r entrar en Roma<br />
más menudito<br />
me lo habéis <strong>de</strong> dar<br />
para en Roma entrar”.<br />
(Ventrosa <strong>de</strong> la Sierra. LR)<br />
VARIANTES en Islallana, Muro y <strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros: Trigo menudito / tú me<br />
lo has <strong>de</strong> dar /trigo menudito / para entrar en Roma / para en Roma entrar<br />
(<strong>Ortigosa</strong> <strong>de</strong> Cameros, LR).<br />
Tras este recorrido por los orígenes y significado <strong>de</strong> la danza, que a<br />
modo <strong>de</strong> curiosidad nos ha servido <strong>de</strong> preámbulo, damos paso al acto central<br />
<strong>de</strong> este homenaje. Preten<strong>de</strong>mos hacer un agra<strong>de</strong>cimiento público a la labor <strong>de</strong><br />
tantas y tantas personas que durante estos sesenta y dos años, han hecho<br />
posible que la danza llegue hasta nuestros días.<br />
Este evento se focaliza en dos personas, nuestros queridos “tío Mesio”<br />
y “Mo<strong>de</strong>sto”. Pero sería injusto no nombrar a Miguel, “Miguelín” para todos<br />
nosotros, ni al “tío Maisi” , quienes con su acor<strong>de</strong>ón y tambor, marcaron en<br />
tantas ocasiones el ritmo <strong>de</strong> la danza. Querríamos hacer una mención<br />
especial para “Serafín”, más conocido entre nosotros como el gaitero <strong>de</strong><br />
Albelda, quien ha fallecido recientemente, habiendo sido una pieza vital con su<br />
dulzaina, en las procesiones <strong>de</strong> los últimos años.<br />
<strong>La</strong> continuidad está garantizada, pues tenemos gente joven implicada y<br />
a los que llegará su momento, también para homenajear.<br />
7
No tenemos un registro <strong>de</strong> danzadores, por lo que nos abstenemos <strong>de</strong><br />
nombrar a ninguno <strong>de</strong> los que han pasado a lo largo <strong>de</strong> estos 62 años, pues<br />
con toda seguridad cometeríamos una injusticia con el olvido <strong>de</strong> muchos. Es<br />
muy difícil acertar en el nº <strong>de</strong> ortigosanos que hemos danzado ante nuestra<br />
Virgen <strong>de</strong>l Carmen, pero con un cálculo sencillo y aproximado y contando que<br />
el relevo se diese a cada lustro, la cifra se aproximaría a los cien.<br />
Des<strong>de</strong> aquí lanzamos una propuesta, a fin <strong>de</strong> que todas las familias en<br />
las que haya habido danzadores, nos faciliten sus nombres y años<br />
aproximados <strong>de</strong> danza. Como quiera que estamos hablando <strong>de</strong> nuestro pasado<br />
reciente, no tiene que ser excesivamente difícil, la creación <strong>de</strong>l mencionado<br />
registro.<br />
El año que viene nos gustaría hacer una exposición monográfica sobre<br />
la danza <strong>de</strong> <strong>Ortigosa</strong> y en este mismo escenario. Para ello os pedimos que nos<br />
facilitéis cuanta documentación obre en vuestro po<strong>de</strong>r: vi<strong>de</strong>os, fotografías,<br />
diapositivas, etc<br />
Y como homenaje a esta larga lista anónima <strong>de</strong> danzadores y poniendo<br />
fin a esta exposición, vayan estos “recuerdos <strong>de</strong> un danzador”:<br />
Un año más ha llegado el día gran<strong>de</strong>.<br />
Es 16 <strong>de</strong> julio.<br />
Inva<strong>de</strong> mi cuerpo una mezcla entre nerviosismo y emoción.<br />
Comienzo a vestirme, es un ritual que se da año tras año. Un pensamiento me<br />
<strong>de</strong>tiene un instante, me pregunto: ¿Cuántos danzadores se abran puesto este<br />
traje antes? ¿Cuántas abuelas, madres o hermanas habrán almidonado las<br />
enaguas?<br />
Voy caminando hacia S. Martín, mientras mi mente reproduce las notas <strong>de</strong> la<br />
danza una y otra vez.<br />
Cada año es diferente; no es uno más, siempre el propósito <strong>de</strong> superación.<br />
Esperamos en dos filas la salida <strong>de</strong> la patrona, ante la mirada cómplice <strong>de</strong><br />
cuantos antecesores lo hicieron años atrás.<br />
Los nervios están a flor <strong>de</strong> piel.<br />
Tres sonidos marcan el inicio y la aparición <strong>de</strong> la Virgen <strong>de</strong>l Carmen por el<br />
pórtico. Los tres se confun<strong>de</strong>n entre si: las campanas redoblan, han dado las<br />
doce; los cohetes irrumpen en el cielo azul <strong>de</strong> julio y los primeros compases<br />
dan paso a la procesión. En este mismo momento se acaban los nervios y<br />
mirando a la imagen <strong>de</strong> la Virgen, piensas: “va por ti virgencita”<br />
MUSICA DE LA DANZA<br />
HOMENAJE: entrega <strong>de</strong> placas.<br />
Terminó el acto con unas jotas interpretadas por nuestro amigo “el<br />
navarro” y compuestas por Santiago García, que reproducimos a continuación:<br />
JOTA 1ª:<br />
“En la Unión se <strong>de</strong>cidió<br />
un homenaje al tio Mesio,<br />
para que más homenaje<br />
que tenerle en el recuerdo”<br />
8
JOTA 2ª:<br />
“Cuando el tio Mesio sintió<br />
que le llegaba el relevo,<br />
se fue tranquilo pensando<br />
que nos <strong>de</strong>jaba a Mo<strong>de</strong>sto”.<br />
JOTA 3ª:<br />
“Los danzadores son flores<br />
que a la Virgen van bailando,<br />
cuando una flor se marchita<br />
un capullo está brotando”.<br />
9