Comisión de Antigüedades de la Real Academia de la Historia ...

Comisión de Antigüedades. Comunidad Valenciana
En nuestra opinión, el interés de la Academia de la Historia por poseer el plomo de
Castellón tiene dos causas fundamentales: en primer lugar por ser un objeto de gran relevancia
arqueológica que se integra en el proyecto general de la Academia sobre Epigrafía, ya
mencionado; en segundo lugar, porque se enmarca en la rivalidad entre la Academia y otras
sociedades científicas, incluidas algunas Comisiones de Monumentos y los museos arqueológicos,
a consecuencia de la lucha por las competencias sobre arqueología que se desatan en
la segunda mitad del siglo XIX 19 . De hecho, a partir de 1867 entra también en la liza el Museo
Arqueológico Nacional, que reclama para sus fondos la pieza (donde será finalmente depositada,
con el número de inventario 16.743). En este contexto resulta revelador el documento
CACS/3(4) redactado por la Comisión de Antigüedades de la Academia de la Historia presidida
por Cánovas del Castillo, que expone la reivindicación de los derechos de esta institución
sobre todas las antigüedades españolas.
VALENCIA
Es la provincia con más documentación, que gira sobre todo en torno a la conservación
de los monumentos de Sagunto (expediente CAV/12), con cerca de 200 documentos sólo entre
1850 y 1870. También en esta provincia se encuentran los documentos más antiguos de toda
la serie: cinco documentos entre 1747 y 1800 relativos al mosaico de Baco aparecido en la villa
de Murviedro en 1745 [CAV/1] 20 , además de la petición de la Academia al Conde de Lumiares
para que envíe todo lo referente a las inscripciones del Reino de Valencia, según la circular
enviada por la Academia a todos los correspondientes en 1802 [CAV/3].
Los principales monumentos saguntinos son conocidos en la bibliografía histórica desde
época medieval y descritos (sobre todo el teatro) por cronistas, historiadores y viajeros desde
el siglo XVI 21 . El flamenco Anton van den Wyngaerde (conocido también como Antonio de
las Viñas) dibujó estas ruinas en el marco de un proyecto real: en efecto, entre 1562 y 1570
realiza por encargo de Felipe II una serie de vistas de las ciudades más importantes de la Corona;
de muchas de ellas (Mérida, Itálica, Tarragona, Murviedro) dibuja además ruinas y antigüedades
22 . En 1702 Manuel Martí, deán de Alicante, excavó y dibujó el teatro, hasta entonces
denominado «anfiteatro», escribiendo la disertación titulada De theatro Saguntino que
fue publicada por el benedictino Bernard de Montfaucon en su monumental obra L’Antiquité
expliquée et representée en figures (París, 1719) 23 ; se trata del primer estudio monográfico hecho
en España sobre un monumento de la Antigüedad. Casi un siglo después, Enrique Palos y
Navarro, abogado de los Reales Consejos, correspondiente de la Real Academia de la Historia
y alcalde de Murviedro, limpió y restauró los monumentos romanos de la villa y reunió en
el Ayuntamiento diversos objetos y epígrafes ibéricos y romanos, lo que le valió ser nombrado
por Carlos IV Conservador de las Antigüedades de Murviedro. Como resultado de sus
trabajos publicó una Disertación sobre el teatro y circo de Sagunto (Valencia, 1793; reimpresa
en 1807), que mereció la airada crítica de otro estudioso del teatro saguntino, José Ortiz y Sanz,
vol. 1, Arqueologia Peninsular. História, teoria e prática, Porto, 2000, pp. 267 s. Sobre la figura de su fundador,
últimamente A. C. LAVÍN BERDONCES, «Basilio Sebastián Castellanos de Losada», Revista de Arqueología
189, 1997, pp. 50-55, con bibliografía anterior.
19 Cf. TORTOSA y MORA, cit. (n. 3), p. 202 s.
20 Véase al respecto M. OLCINA DOMENECH, «El descubrimiento del mosaico de Baco en Sagunto», en I Congreso
Internacional de Historiografía de la Arqueología y la Historia Antigua en España (siglos XVIII-XX), Madrid,
1991, pp. 49-55.
21 Para una historiografía de los monumentos saguntinos, cf. E. HERNÁNDEZ HERVÁS, El teatro romano de
Sagunto, Valencia, 1988, pp. 11 ss.; S. LARA ORTEGA, El Teatro Romano de Sagunto. Génesis y construcción,
Valencia, 1991, pp. 23 ss. En general, MORA, cit. (n. 1), pp. 95 ss.
22 Los dibujos se conservan en el Victoria & Albert Museum de Londres y en el Ashmolean Museum de Oxford:
cf. R. L. KAGAN (ed.), Ciudades del Siglo de Oro. Las Vistas Españolas de Anton Van den Wyngaerde, Madrid,
1986.
23 En el vol. III, parte 2. a , p. 237.
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