Caso Final

Carpeta de investigación. PY-0001/2012
INTRODUCCIÓN
La madrugada del día veinte de febrero del año dos mil doce, poco después de las
07:00 AM, se verificó el hallazgo de los cadáveres de los señores AMORCITO
ESCUDERO ALCANTARA y CAMILO FERNANDEZ DE LA PAZ, al parecer
producto de un homicidio por “degüello” ocurrido en el interior de la habitación
número 2504, que pertenece a la segunda planta del Hotel “LOS TUCANES”
ubicado en el tramo de la carretera federal
_________________________________, a la altura del Kilómetro 101+200 del
municipio de _________________________________, en que se encontraban
hospedados los difuntos. El descubrimiento lo hicieron tres personas que asistían
a la boda de la hija de los fallecidos, así como una camarera del hotel.
La estancia de los señores Amorcito Escudero Alcántara y Camilo Fernández de la
Paz, en el cuarto de hotel de referencia inicio desde el día diecisiete de febrero de
dos mil doce, con motivo de la ceremonia nupcial de su hija CLEOPATRA
FERNANDEZ ESCUDERO y MARCO ANTONIO ALTAMIRANO, a celebrarse en
un área exclusiva del hotel “Los Tucanes” el día diecinueve de febrero del año dos
mil doce.

AGENTE INVESTIGADOR DEL MINISTERIO
PUBLICO DEL FUERO COMÚN, ZONA NORTE.
P R E S E N T E
PROC. GRAL DE JUST. DEL
EDO.
POLICIA JUDICIAL DEL ESTADO
SECCION: INVESTIGACIONES
SECTOR: _________________
CARPETA DE INVESTIG. PY-
0001/2012
DELITO: HOMICIDIO
ASUNTO: SE RINDE INFORME DE INVESTIGACIÓN
En relación a los hechos de homicidio en contra de los occisos
AMORCITO ESCUDERO ALCANTARA y CAMILO FERNANDEZ DE LA PAZ, y
siguiendo la solicitud de investigación que me fue encargada sobre el suceso,
entreviste el día veinte de febrero de dos mil doce, en la escena del crimen a los
ciudadanos FERNANDO GARCIA LEAL, JOSÉ ALBERTO ROJAS
HERNÁNDEZ y JULIAN TOTO ORTIZ, destacando que éste último me refirió
que aquel sujeto sospechoso que horas antes de los hechos vio
vestido de negro en el hotel donde trabaja, era DOROTEO
MARTINEZ, pues así me lo reportó JOSÉ ALBERTO ROJAS HERNÁNDEZ,
a quien esa noche le había encomendado vigilar al sujeto sospechoso,
y el último de los mencionados me expresó que es personal de
seguridad privada del Hotel donde ocurrieron los asesinatos, y que el
día diecinueve de febrero de dos mil doce, al encontrarse de guardia
en el Hotel “Los Tucanes”, aproximadamente a las veintitrés horas se
percató que DOROTEO entró vistiendo un pantalón negro, sin que

hasta las siete de la mañana del día veinte en que fue relevado, se
percatará si DOROTEO salió del Hotel; en parecidos términos se
verificó la entrevista realizada también a Anastasio Rufino Aguilar.
Continuando con las investigaciones también me entreviste con las ciudadanas
ELVIA ZAPATA LOPEZ y MARGARA ACUÑA PEREZ, ambas originarias de
Chiapas, estado civil solteras, de ocupación camaristas del Hotel “Los Tucanes”,
así como de la ciudadana ELEASID LÓPEZ RODRIGUEZ, también trabajadora del
referido Hotel quien refirió que el día veinte de febrero de dos mil doce, una pareja
de huéspedes le pidió si podía abrir la puerta de la habitación 2504, ya que los
huéspedes de ese cuarto no habrían la puerta y tenían rato de estar tocando, y
que estaban preocupados por que inclusive le señalaron unas huellas de sangre
que había en el piso de tal lugar saliendo de la habitación con dirección a la playa,
las cuales terminaban en el jardín que está en medio del pasillo, por lo que ella
accedió y al abrir la puerta se percataron con sorpresa de que en la entrada se
hallaba el cuerpo sin vida de una mujer postrada en el piso, en un charco de
sangre, por lo que de inmediato cerró la puerta solicitando auxilio a su supervisora
para verificar la situación, ésta quien a su vez habló a seguridad, llegando en el
momento el guarda vidas de nombre MANUEL quien al ver la situación acordonó
el área solicitando al doctor, quien llegó de inmediato y ambos se introdujeron a la
habitación, y al verificar el estado de los cuerpos dijeron que ya nada se podía
hacer, lugar al que también llegaron los guardias de seguridad y el gerente, así
como varias personas, agregando la declarante que ella empezó a limpiar las
huellas de sangre que había en el piso e inclusive alguien, no recordando quien, le
dijo que había más huellas delante del pasillo para que las limpiara, pero nadie le
ordenó que lo hiciera ya que ella no lo hizo con mala intención ya que es su
trabajo.
Finalmente, también se informa sobre las diligencias realizadas el día 21 de
febrero de dos mil doce, en la casa 54 ubicada en el lote 15, calle 35, entre calle
12 y calle 14 de esta ciudad de _________________________________, donde
trabajadores del Hotel “Los Tucanes” me indicaron que rentaba un cuarto Doroteo
Martínez Cinta, sospechoso en el homicidio, trasladándome para el rastreo de
posibles indicios que lo vinculen al hecho mortal, por lo que al llegar al lugar, en
compañía del Licenciado Ruperto González Hernández, agente del Ministerio
Público, ingresamos a dicha habitación con autorización de la Sra. Roció Ramírez,
donde se pudo observar un ropero, un televisor y una hamaca, sin que después de
realizar una inspección detallada de tal habitación, y terminar mi intervención

aproximadamente a las 11:00 am, haya localizado algún indicio u objeto vinculado
al homicidio materia de mi intervención. Cabe destacar que inmediatamente
después de ello la dueña de la casa, Roció Ramírez, en compañía de un niño que
era su sobrino, se acercó al suscrito y al Sr. Ministerio Público, comentándonos
que instantes antes dicho menor se encontraba jugando en el lote baldío número
16, que se encuentra a un costado de la casa 54, materia de la diligencia, donde
vio entre la maleza lo que al parecer era una navaja o cuchillo manchado de
sangre, por lo que procedimos a constituirnos a tal lugar, donde efectivamente
pude verificar donde me señalaba el menor, la presencia de un objeto punzo
cortante con empuñadura color negro de metal con cubierta plástica dura, con hoja
de metal plana filosa, con la grabación STAINLESS, y terminación en punta, la que
al observar detenidamente advertí se encontraba ensuciada al parecer de sangre,
por lo que bajo las instrucciones del Ministerio Público, el suscrito procedió a
levantar dicha arma, iniciando de inmediato el embalaje correspondiente a efecto
de remitirla a servicios periciales para los estudios que se consideren necesarios a
la investigación.
Anexo al presente, adjunto las entrevistas realizadas a las personas de referencia.
C. MARIO CORTEZ HERNÁNDEZ
Policía Judicial del Estado

Entrevista a JOSÉ ALBERTO ROJAS HERNÁNDEZ vertida el día veinte de
febrero de dos mil doce, quien refirió:
Después de las veintidós horas con cuarenta minutos, del día
diecinueve de febrero de dos mil doce, al estar efectuando un
recorrido de seguridad en dirección al “cantabar”, “Música de los
dioses” del Hotel “Los Tucanes”, mi supervisor de seguridad JULIAN
TOTO ORTIZ (a quien estaba apoyando esa noche), me solicitó que
vigilara a una persona sospechosa que vestía todo de color negro, por
lo que al ubicarlo observe que efectivamente el sujeto andaba con una
camisa de manga larga, pantalón, gorra y lentes, todos de color negro,
dándome cuenta en ese momento que era mi compañero DOROTEO
MARTINEZ CINTA, a quien reconocí por que había platicado en varias
ocasiones con él, sobre todo al observar que traía en su muñeca el
reloj que distintas veces le había visto puesto, siendo que además
pude ver que era DOROTEO porque me sonrió al verme, situación que
de inmediato le comente a mí supervisor quien me instruyó para que lo
siguiera, lo que hice de inmediato pero finalmente se me perdió de
vista por las áreas verdes que colindan con el consultorio médico,
pues DOROTEO comenzó a caminar muy rápido. Llegado el día
siguiente no supe qué pasó con DOROTEO, y mucho menos mi
supervisor me comentó si se lo dijo a mis demás compañeros de
guardia para que no lo perdieran de vista, y para que si lo veían lo
sacaran del Hotel y se le aplicará una sanción económica
administrativa; al respecto quiero aclarar que DOROTEO no estaba
autorizado a ingresar por los “retenes” en ese día y a esas áreas, ya
que ese era su día de descanso y andaba de civil.
C. JOSÉ ALBERTO ROJAS HERNÁNDEZ

Entrevista a JULIAN TOTO ORTIZ vertida el día veinte de febrero de dos mil doce,
quien refirió:
El diecinueve de febrero del año dos mil doce, me encontraba
desempeñando mis labores como supervisor de seguridad del Hotel
“Los tucanes”. Aproximadamente como a las veinte horas fui en
compañía del señor “CORTEZ” al comedor fase dos, pasada más de
media hora seguí con mis labores en la fase dos para verificar que los
guardias estuvieran resguardando los dos “lobys” de dicha sección,
después como a las veintiún horas con veinte minutos acudí al teatro
"los amates” donde estuve en compañía de dos elementos de
seguridad hasta las veintidós horas con cuarenta y cinco minutos,
hasta que terminó el show, dirigiéndome después a la disco “Música
de los Dioses”, cuando de pronto, aproximadamente a los tres minutos
de partir del referido teatro, puede ver que al final de la avenida que
conduce a dicha disco se encontraba una persona con vestimenta
negra a quién no pude observar bien pues el sospechoso se inclinó
para amarrase las agujetas del zapato, por lo que le comenté al oficial
“JOSÉ” que vigilará a dicha persona, reportándome éste pasado unos
quince minutos que la persona que andaba de oscuro era al parecer
“DOROTEO” y que se le había escabullido por la zona del gimnasio y
el bloque cinco; quiero aclarar que posteriormente al enterarme de los
homicidios ocurridos me dirigí al cuarto que tengo asignado en el
poblado de apoyo (edificio B) que compartía con ANASTACIO y
precisamente con DOROTEO MARTINEZ CINTA, pero al llegar a
dicha habitación me doy cuenta que ninguno de éstos dos
compañeros se encontraban en el lugar, y de la misma manera al
siguiente día al llegar de trabajar tampoco los volví a hallar en el

cuarto, siendo que es hasta el día veinticuatro siguiente que me enteró
que el referido “DOROTEO” ya había dejado de trabajar para la
empresa hotelera “Los Tucanes”. Quiero aclarar que Doroteo Martínez
Cinta, cuando no se quedaba en el cuarto que teníamos asignado en
el Hotel, en ocasiones también se quedaba en un cuarto que rentaba
en la casa 54 ubicada en el lote 15, creo que en la calle 35, entre 12 y 14 de esta
ciudad de _________________________________.
C. JULIAN TOTO ORTIZ
Entrevista de ANASTASIO RUFINO AGUILAR vertida el día veinte de febrero de
dos mil doce, quien refirió:
Que el día veinte de febrero de dos mil doce en que se ejecutó el doble
homicidio, al haber terminado mis labores nocturnas como guardia de
seguridad en el Hotel “Los Tucanes”, me dirigí al cuarto que tengo
asignado en el pueblo de apoyo del mismo hotel “Los Tucanes”, el
cual compartía con JULIAN TOTO ORTIZ y DOROTEO MARTINEZ
CINTA, y que al llegar al referido paradero después de desayunar,
observe que ninguno de éstos se encontraba, extrañándome que
Doroteo no estuviera, puesto que escuché que le había comentado al
supervisor el propio domingo diecinueve que un médico le había
recomendado reposo, ya que tenía inflamada sus anginas, siendo el
caso que me acosté a dormir y al despertar me di cuenta que ya no se
encontraban los zapatos, el cepillo, ni la pasta de dientes de “Doroteo”,
y menos aún su maleta, por lo que pensé que se había ido a su cuarto
situado en la ciudad de _________________________________, que
también compartía conmigo, pero el veintidós fui a tal cuarto y me di
cuenta que Doroteo tampoco se había aparecido por ahí, ya que sólo
se encontraban algunas pertenencias de él, extrañándome que se
haya marchado sin despedirse.

C. ANASTASIO RUFINO AGUILAR
Entrevista de ELVIA ZAPATA LOPEZ vertida el día veinte de febrero de dos mil
doce, quien refirió:
Que el día de hoy, siendo aproximadamente las ocho horas toque la puerta de la
habitación 2513, con la finalidad de realizar la limpieza, abriendo una persona del
sexo femenino, de aproximadamente un metro con setenta centímetros, huésped
que sólo me dijo que no, por lo que entendí que no deseaba en ese momento que
hiciera la limpieza, seguidamente me dirigí a otras habitaciones, regresando
después a la misma habitación 2513, siendo aproximadamente las 12:30 hrs.
toque la puerta pero como nadie me contestó y en mi reporte de aseo estaba
marcado como desocupado esa habitación, utilice la tarjeta y abrí, no viendo nada
extraño en el interior, sólo la cama estaba desarreglada como que alguien la había
ocupado, localizando una camisa que encontré en el lugar la cual deposite en una
bolsa de plástico que me sirve para poner papelería, quiero aclarar que esta
habitación era ocupada por dos mujeres, lo que sé porque llevaba un registro de
limpieza; igualmente deseo manifestar que al mismo tiempo que tocaba la puerta
del cuarto 2513, escuche una “bulla” que provenía de unos señores y una
muchacha, pero no vi quienes eran porque me encontraba en el piso de arriba,
enterándome poco después de que se traba de un homicidio de una pareja en una
habitación de abajo, siendo que como a la cuatro de la tarde abrieron el pasillo

que habían cerrado, escuchando que mis demás compañeros camaristas dicen
que ordenaron lavar el pasillo a lo cual yo les apoyé lavando el pasillo de la planta
baja junto con otras tres compañeras camaristas, pero al estar aproximadamente a
tres metros de la habitación 2504, un huésped nos dijo a todas que no laváramos
porque se borrarían la huella, sin que yo me diera cuenta de la huella a que se
refería, pero la compañera camarista de nombre “Bety” le dijo al huésped que
aunque enjuagáramos el pasillo quedaba la huella, pero en ese momento dejamos
de lavar ahí, sin saber si más tarde se haya limpiado, con la aclaración de que
terminamos de lavar el pasillo como a las seis de la tarde.
C. ELVIA ZAPATA LOPEZ
Entrevista de MARGARA ACUÑA PEREZ, emitida el día veinte de febrero de dos
mil doce, quien declaró:
Desde el día quince de septiembre del año dos mil uno, empecé a laborar como
camarista en el hotel “Los Tucanes”, y posteriormente ascendí al puesto de ama
de llaves, siendo que el día lunes veinte de febrero del año en curso, al momento
de presentarme a laborar en mi turno matutino que inicia a las siete de la mañana
y concluye a las cinco de la tarde, y cuando ya eran como las siete y media de la
mañana, mientras me encontraba supervisando el segundo piso, exactamente
enfrente de la habitación 2531, escuche unos gritos en el primer piso, por lo que
me asomé desde el segundo piso para ver qué estaba sucediendo, y al asomarme
pude ver que una persona del sexo femenino, de aproximadamente más de
cuarenta años, de tez clara y cabello redondo, estaba llorando y gritando que la
ayudaran, ya que vio unas huellas de sangre enfrente de la habitación de sus
familiares, señalando la habitación número 2504, ante esto lo que yo hice fue
inmediatamente llamar al personal de seguridad, reportándole al señor RUFINO
CALETA MORTERO jefe de seguridad del turno matutino, que se acercaran
urgentemente a la habitación 2504, ya que al parecer había un accidente,
haciendo la aclaración que yo en ningún momento me acerque a la habitación
número 2504, ya que padezco de la presión y me afectaría demasiado una
impresión fuerte, por lo que al llegar los ciudadanos JORDAN MARCIAL PEREZ,
supervisor de seguridad, y RUFINO CALETA MORTERO, jefe de seguridad, lo

que hice fue aventarles mi llave maestra, para que entraran a la habitación, sin
saber que persona la recogió, pero la camarista de nombre CAMELIA, al
entregarme mi llave me comentó que ella fue quien abrió la puerta al personal de
seguridad, para verificar que había pasado, pero al momento en que esto sucedía,
yo me retire de donde me encontraba y me traslade a mi oficina, para comunicarle
vía telefónica a mi jefa respecto a los hechos que había escuchado, y mientras me
encontraba hablando por teléfono, CAMELIA también me dijo “ hay doña
Margarita, hay mucha sangre en la habitación, está muy feo”, ante esto yo le dije
que no continuara hablando ya que podría alterarme debido al problema de mi
presión, contestándome que no me preocupara, ya que no iba a decir más nada,
pero para esto ya estaban amontonadas las camaristas en mi oficina, preguntando
qué había sucedido, contestándoles que tampoco sabía nada y que mejor se
fueran a trabajar, y dejáramos todo en manos del personal de seguridad, y
posteriormente nos enteraríamos de lo que había sucedido; después de esto y
como dos agentes de la policía judicial del estado, quienes después de haber visto
los hechos, me entrevistaron, tanto a mí como a la camarista de nombre Eliasid
sin recordad si sus apellidos son López Rodríguez, Rodríguez López,
manifestándole a dichos agentes, todo lo que ya he declarado; así mismo quiero
manifestar que después de haber tenido tirado mi llave maestra a los elementos
de seguridad, y cuando estaba entrando a mi oficina, me percate de dos bultos
que se encontraban afuera de la habitación número 2513, o sea en el pasillo, y al
ponerles un poco mas de atención, me di cuenta que eran dos mujeres, logrando
identificar a una de ellas como la huésped de nombre “ROMINA”, la cual tenía
puesto unos lentes, y de quien se nombre pues al hospedarse el día 13 de febrero
de este año, a mi me correspondió llevarla a su habitación 2513, y en ese
momento me refirió llamarse de esa manera, mismas mujeres que se encontraban
detrás de la pared de la habitación número 2511, con la mirada fija hacía la
habitación número 2504, pero de esto me di cuenta, porque dicha persona que
logre identificar como “Romina”, me volteó a ver y al darse cuenta de que yo la
estaba viendo también, inmediatamente giro nuevamente su cara evitando
mirarme de frente, volviendo su vista con dirección a la habitación número 2504,
escuchando en ese momento que su compañera le comentó “mejor vámonos
puede ser peligroso”. Seguidamente de esto yo me metí a mi oficina y ya no supe
más, toda vez que me dedique a mi trabajo saliendo a la hora de costumbre para
irme a mi domicilio en _________________________________; llegado el día
martes veintiuno me doy cuenta que en el pasillo abajo estaba cerrado con unas
cintas de color amarillo de peligro y unos topes de piso de color amarillo y estaban
guardias de seguridad que decían que no había paso en ese tramo del pasillo, que
es de la habitación número 2504 a la 2513, en ese día mi compañera camarista
Eliasid me dijo que a lo mejor la persona que vio botada a la entrada de la
habitación 2504 si estaba muerta porque cuando la vio rápido la señora no se

movía, y había mucha sangre, desde ese día solo me doy cuenta que unas
personas sacaron sus sillas de sus habitaciones y estaban sentados en el pasillo
llorando, eso lo vi de lejos ya que yo evitaba pasar por ese lugar, ya que cuando
veo gente llorando me impresiono y eso me afecta.
C. MARGARA ACUÑA PEREZ
Información a tomar en consideración:
1. Los acusados. DOROTEO MARTINEZ CINTA y ROMINA DUARTE RAMIREZ
fueron detenidos, el primero, la mañana del 29 de febrero de 2012, en la ciudad de
________________, y la segunda, en la ciudad de _______________, a las 2:00
pm, momentos antes de abordar el vuelo 1520 con destino a la ciudad de Buenos
Aires.