478 - Secretaría de Relaciones Exteriores
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MANUEL DOBLADO PARTIDA<br />
con Juárez. Dicha estrategia provocó que el norteño hiciera el siguiente<br />
comentario: “Pero, señor Doblado, ¿es usted tan candoroso para proponerme<br />
la ruina <strong>de</strong> los dos? Mi mujer, que no es tan diplomática como usted,<br />
pero que tiene la pru<strong>de</strong>ncia natural, me dice que esto es absurdo, porque<br />
si me fusila el presi<strong>de</strong>nte y los míos lo fusilan a usted, Juárez saldrá<br />
ganando, pues se libra <strong>de</strong> los dos”. 34<br />
Para fortuna <strong>de</strong> ambos, los pensamientos <strong>de</strong> la esposa <strong>de</strong> Vidaurri no<br />
fueron ciertos y Doblado pudo regresar junto con el gobierno a la ciudad<br />
<strong>de</strong> Saltillo, pues en Monterrey era insostenible. El 17 <strong>de</strong> mayo <strong>de</strong> 1864<br />
sería <strong>de</strong>rrotado por las fuerzas <strong>de</strong> Mejía y el coronel francés Aymard en las<br />
inmediaciones <strong>de</strong> Matehuala, y en esta acción perdió todo su Ejército y<br />
buena parte <strong>de</strong> su fe en el triunfo <strong>de</strong> las armas liberales. Tiempo <strong>de</strong>spués<br />
saldría rumbo a Estados Unidos para trabajar, como lo <strong>de</strong>muestran varios<br />
documentos, a favor <strong>de</strong> la causa republicana hasta su muerte acaecida el<br />
19 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1865.<br />
Para finalizar reproducimos parte <strong>de</strong> un documento que nos habla <strong>de</strong> su<br />
po<strong>de</strong>r interpretativo en torno a la invasión que estaba enfrentando:<br />
Yo no abandono la ban<strong>de</strong>ra que he abrazado y la sostendré hasta el fin...<br />
Primero, porque la intervención francesa por sí sola carece <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r suficiente<br />
para establecer y sostener un or<strong>de</strong>n cualquiera <strong>de</strong> cosas en este país.<br />
Segundo, porque al traer al archiduque vienen incurriendo en los mismos errores<br />
que a nosotros nos han impedido constituimos; puesto que protege las exageraciones<br />
<strong>de</strong>l partido ultraconservador y proscribe a los republicanos que<br />
forman las siete octavas partes <strong>de</strong> los habitantes <strong>de</strong>l país.<br />
Tercero, porque sin el consentimiento expreso <strong>de</strong> las potencias que firmaron la<br />
Convención <strong>de</strong> Londres, ningún gobierno tendrá estabilidad.<br />
Cuarto, porque el día en que concluya la guerra <strong>de</strong> los Estados Unidos, vendrá<br />
abajo todo lo que los franceses hayan edificado por falta <strong>de</strong> soli<strong>de</strong>z en su cimiento.<br />
Quinto, porque la pacificación <strong>de</strong>l país no es ni será completa mientras seamos<br />
satélites <strong>de</strong> la Francia, cuya posición es <strong>de</strong>masiado movediza y versátil.<br />
Sexto, porque la adhesión a la intervención sería para mí el suicidio político y<br />
la adquisición <strong>de</strong> la fea nota <strong>de</strong> traidor que no quiero <strong>de</strong>jar a mi familia. 35<br />
34 Justo Sierra. Op. cit. p. 421.<br />
35 Carta <strong>de</strong> Manuel Doblado a J. Pardo, 17-111-1864. Villela R. Othón. Op. cit. p. 163.<br />
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