EL CANTO ¿Queréis cantar alabanzas a Dios? Sed vosotros ... - d2n2

cerrar los ojos para ver,
dejarnos seducir Señor,
andar por tus huellas de paz.
Orar, hablándote de ti,
de tu silencio v de tu voz.
de tu presencia que es calor,
dejarnos seducir por Ti.
Orar también en sequedad,
las manos en tu hombro Señor,
mirarte con sinceridad,
aquí nos tienes, oh Señor.
111. EN SU MESA HAY AMOR
Sol Sim
EL SEÑOR NOS HA REUNIDO
JUNTO A ÉL,
Do-Dom
Sol Do
EL SEÑOR NOS HA INVITADO
A ESTAR CON ÉL.
Re
Mim Sim
EN SU MESA HAY AMOR
Mim Sol
LA PROMESA DEL PERDÓN
Lam Re7 Sol / 7
Y EN EL VINO Y PAN SU CORAZÓN.
Cuando Señor tu voz llega en silencio a mí
y mis hermanos me hablan de ti
sé que a mi lado estás
te sientas junto a mí,
acoges mi vida y mi oración.
112. EN TORNO AL PAN
Mim Do Sol
LAS FUERZAS SE REHACEN EN LA MESA,
Mim Do Re
SE OLVIDAN LOS SILENCIOS SIN RAZÓN.
Mim Do sim
SE ESCUCHA UNA NUEVA PALABRA,
Do Sol
CON LA MIRADA EN TORNO AL PAN, EN
TORNO A ÉL.
Re
mim Do mim Do
Una mesa que no tenga horarios, mesas amplias
con
Re Sol-Si7 mim La
mucho lugar. Platos llenos de gran confianza,
mim Do Si7
compartiendo el calor del hogar.
mim Do mim Do Re
Que la mesa reúna ilusiones y detalles de un
mismo
Sol-Si7 mim La mim
vivir. El sabor del encuentro y la fiesta crecerá
como
Do Si7
masa de pan.
LAS FUERZAS...
En la mesa vivimos sin prisa cada gesto de
hermano
y su fe; que la mesa serene las penas, fortalezca
los
cuerpos y el dar.
En la mesa busquemos descanso y un resquicio de
tiempo y un tú, de aquel tiempo gratuito que
empuja
a llevar a los hombres la paz.
LAS FUERZAS...
¡VIVIR EN TORNO A ÉL!
113. EN COMUNIDAD RESUCITAMOS
Mi- Si7
Cuando veo un mundo gris que se nos muere
La- Si7 Mi-
Y me duele con quien vivo la palabra
Mi- Si7
Si la paz tan alejada de este mundo
La- Si7 Mi-
Nos forzamos todos juntos en buscarla
Sol Re
Si entre todos escuchamos sin ser sordos,
La- Si7
el grito de dolor que el hombre lanza
Mi- Si7 La- Si7 Mi-
Si7 La- Si7 Mi-
Se abre la losa que encierra la humanidad. La
tierra, los hombres comienzan a resucitar.
Cuando vemos los trabajos que labramos
Y los pobres no reciben sus esfuerzos
Cuando en Dios su voluntad nos planteamos
Y los hombres no lo sienten en su adentro
Si aceptamos el fracaso siendo humildes