YO VENGO!

DEL SENOR JESÚS Y DIOS EL PADRE
Deja que estas palabras te aturdan. Deja que te aturdan hasta lo
más profundo. No te equivoques, YO no soy un DIOS con el que se
pueda jugar. No toleraré el rechazo de MI pueblo. Estás advertido.
El tiempo se está acabando para tí. Estoy dando mis advertencias
finales, súplicas finales. Estas son MIS advertencias. Si tú las
trivialices, no te puedo ayuda si esperas demasiado. Nunca podrás
decir que no se te advirtió.
Ten mucho cuidado con las elecciones que haces. La hora decisiva
está a la mano. Elige sabiamente. Mi mano está a punto de ser
quitada de esta tierra. ME llevaré a MI novia CONMIGO y dejaré a
la tierra a su suerte en medio del caos y la maldad reinante. No te
quedes atrás. Has sido advertido.
YO, JESÚS, he hablado”.
El SEÑOR me dijo que añadiera Salmos 81 a esta carta:
Salmos 81. “1 Cantad con gozo a Dios, fortaleza nuestra; Al Dios de
Jacob aclamad con júbilo. 2 Entonad canción, y tañed el pandero,
El arpa deliciosa y el salterio. 3 Tocad la trompeta en la nueva luna,
En el día señalado, en el día de nuestra fiesta solemne. 4 Porque
estatuto es de Israel, Ordenanza del Dios de Jacob. 5 Lo constituyó
como testimonio en José Cuando salió por la tierra de Egipto. Oí
lenguaje que no entendía; 6 Aparté su hombro de debajo de la
carga; Sus manos fueron descargadas de los cestos. 7 En la
calamidad clamaste, y yo te libré; Te respondí en lo secreto del
trueno; Te probé junto a las aguas de Meriba. Selah
8 Oye, pueblo mío, y te amonestaré. Israel, si me oyeres, 9 No
habrá en ti dios ajeno, Ni te inclinarás a dios extraño. 10 Yo soy
Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto; Abre tu
boca, y yo la llenaré. 11 Pero mi pueblo no oyó mi voz, E Israel no
me quiso a mí. 12 Los dejé, por tanto, a la dureza de su corazón;
Caminaron en sus propios consejos. 13 ¡Oh, si me hubiera oído mi
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