MUERTA FÚTBOL NIGERIA - Voces del Periodista

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SE HA DESATENDIDO LA educación de los
adolescentes en México, a tal grado que esta
lacra constituye un problema nacional, máxime con
nuestras economía y cultura devastadas.
Añádase el crecimiento de la población juvenil
que ya rebasa los 34 millones, de los cuales más
de 17 millones no estudian; la tercera parte no tiene
empleo y cientos de miles están
subempleados, a lo cual se agrega
la escalada delincuencial, consumo
de alcohol y drogas, más angustia y
depresión .
Según el gran educador
mexicano Ezequiel A. Chávez, a los
adolescentes hay que darles una
atención personal, según lo describe
en su “Ensayo de Psicología de la
Adolescencia”.
De él es el siguiente texto: “Los
adolescentes no se dejan reducir a
descripciones genéricas dentro de las
que todos ellos quepan, ni fórmulas
estereotipadas; que cada una es él mismo, y que a sí
propio, como se deriva igualmente de las enseñanzas
de Bergson, debe descubrirse, y ser el educador
de sí mismo, para formar el céntrico núcleo de su
personalidad y de su carácter”.
Ezequiel A. Chávez observa que no hay rasgo
característico de la adolescencia que no constituya un
peligro para su vida material, mental y moral, porque
todos tienden a ser excesivos, “ hasta la locura quizás,
hasta el crimen, hasta la muerte”.
Tanto la familia como los educadores deben tener
mucho tacto para tratar a los adolescentes, con el
objeto de guiarlos positivamente en la utilización de
sus energías y evitar que sus tendencias los desvíen
DE VENTA EN SANBORN’ S,
LIBRERIAS Y LA TORRE DE PAPEL
México al abismo
Justo Sierra.
POR ALFREDO PADILLA PENILLA
(Exclusivo para Voces del Periodista)
y se perviertan, alejándose de una vida
sana, individual y social.
En el adolescente se desbordan
las energías y la mejor medicina es
comprenderlo y darle amor en esta
etapa en que se despiertan tanto
sus necesidades psíquicas como
biológicas. Su alma y su
cuerpo buscan nuevos
horizontes para ser
útiles a sí mismos y a la
sociedad.
En esta etapa crucial, el
adolescente deja la niñez para
perfi larse como adulto. Anhela ser
un sujeto libre. Sin embargo, el
adolescente aislado de sus padres,
de sus maestros y de la sociedad, lo
mismo que de buenos compañeros,
“no puede llegar a tener una correcta
noción de la libertad”. La libertad,
según Ezequiel A. Chávez, “es
un concepto dinámico no estático;
resulta de la vida social no de la vida
aislada. Florece cuando aquella se
intensifi ca, se debilita y muere en la
vida totalmente solitaria, ya que, como
lo dijo Hazlitt, hace más de dos siglos,
el amor a la libertad es el amor a los
demás”. Sin una formación de nuestros
adolescentes, ¿cuál será el futuro de
México?.
Espíritu educativo, ideal
de una nación
“El espíritu de una nación se proyecta nítidamente
DE VENTA EN SANBORN’ S,
LIBRERIAS Y LA TORRE DE PAPEL
Samuel Ramos.
José Vasconcelos.
en su ideal educativo. Este es, en
cierta forma, el mensajero de los
propósitos sustanciales de un pueblo.
Puede defi nirse a un país, según
sea el ideario que guía su acción
pedagógica”.
Este pensamiento trasciende a
través de las páginas del libro: “Los
grandes Educadores Mexicanos
del siglo XX”, elaborado por Alberto
Morales Jiménez y Vicente Fuentes
Díaz. Fue publicado por Editorial del Magisterio
Benito Juárez, rendición social de millones de
mexicanos.
En el texto se afi rma que el programa educacional
de México es prioritario y debe ser un acicate moral
y social para impulsar el desarrollo nacional (tan
olvidado por los gobiernos neoliberales de las últimas
décadas.)
Tanto Miguel de la Madrid, como Carlos
Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Y Vicente Fox,
se han caracterizado por empolvar el sistema
educativo mexicano, en lugar de
vigorizarlo. Parten de la premisa de
la concentración económica en unas
cuantas manos, descuidando a las
mayorías. Olvidan que, sin una cultura
y educación nacionalista y progresista,
México va al abismo, tal como
acontece en nuestros días.
En total, el libro citado presenta
una biografía sintética de 41 maestros
del siglo pasado, en los que destacan
José Vasconcelos, Antonio Caso,
Justo Sierra, Enrique C. Rébsamen,
Samuel Ramos, Gregorio Torres Quintero, Ezequiel
A. Chávez, Lauro Aguirre, Luis Enrique Erro. Mario
Aguilera Dorantes y Daniel Delgadillo.
De este semillero de ilustres educadores se
desprende la necesidad de reforzar la instrucción
cívica y el patriotismo, ideal del profesor Delgadillo,
quien precisa: La patria se siente, “es la comunidad
de territorio, la comunidad de lengua, la comunidad
de intereses, de usos y de costumbres, la comunidad
de razas, la comunidad de leyes, la comunidad de
recuerdos, un mismo pasado histórico y la armonía de
sentimiento y voluntades”.
Agrega el maestro: “Los deberes para con la
Patria, como con Dios, se reducen a uno solamente:
amarla sobre todas las cosas. Y este santo y grande
amor, este sentimiento irresistible que nos impulsa
a honrarla, a procurar su desarrollo a llevarla hasta
la perfección, que es el ideal a defender por todos
los medios posibles, aun a costa de nuestra vida,
se llama Patriotismo ”. A nuestros presidentitos
tecnódemocratas ya mencionados habría que meterlos
en cintura y al aula para que absorban lo que es el
sentimiento patrio, sin el cual es imposible gobernar a
un pueblo. Más bien estos gobernantes han traicionado
a la Nación. La Patria los condena. VP
V O C E S D E L P E R I O D I S T A No. 136 1 AL 15 DE MAYO DE 2006