19.05.2013 Views

I “La fe es...” - Comunidad Cristiana Eben-Ezer

I “La fe es...” - Comunidad Cristiana Eben-Ezer

I “La fe es...” - Comunidad Cristiana Eben-Ezer

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

RETRATOS<br />

DE TU MUNDO<br />

INTERIOR…<br />

Y PROFECÍAS PARA LA IGLESIA REMANENTE<br />

Martha Kilpatrick<br />

John Enslow<br />

y otros…<br />

1


“RETRATOS DE TU MUNDO<br />

INTERIOR... Y OTROS.<strong>”</strong><br />

MARTHA BLANEY KILPATRICK<br />

JOHN ENSLOW<br />

...Y OTROS<br />

Editado por Círculo Santo<br />

2002<br />

Madrid, España<br />

Todas las citas extraídas de<br />

Reina Valera 1960<br />

3ª Edición abril 2008<br />

Advertencia: Este compendio de <strong>es</strong>critos tienen<br />

copyright parcialmente, y usted no tiene<br />

derecho a editar parte alguna para su ulterior<br />

venta. Los que así hagan deben pedir primero<br />

permiso a los autor<strong>es</strong> o al que detente los<br />

derechos del autor, quien<strong>es</strong> pueden ser<br />

contactados a través de las páginas en internet<br />

que aparecen a continuación.<br />

Este libro, Dios mediante, <strong>es</strong>tará sujeto a<br />

posterior<strong>es</strong> actualizacion<strong>es</strong> con traduccion<strong>es</strong> de<br />

otros pequeños <strong>es</strong>critos inmortal<strong>es</strong> que se vayan<br />

añadiendo.<br />

Material traducido y/o extraído libremente de:<br />

www.shulamite.com<br />

...y otras fuent<strong>es</strong> abiertas en la red.<br />

Algún material en <strong>es</strong>pañol sobre vida interior:<br />

www.igl<strong>es</strong>ia.net<br />

www.seedsowers.com (próximamante)<br />

3


I. “LA FE ES…<strong>”</strong> (pag 7)<br />

ÍNDICE<br />

II. LOS RELATOS DE LOS ASNOS (pag 73)<br />

III. CONSIDERAD LOS LIRIOS (pag 95)<br />

Iv. VOSOTROS QUE ESTÁIS SOLOS (pag 113)<br />

V. EL MISTERIO (pag 115)<br />

VI. “LO QUE ES…<strong>”</strong> (pag 119)<br />

VII. EL VALOR (pag 127)<br />

VIII. LA BONDAD ES MALDAD (pag 129)<br />

IX. “REVISTA ELECTRÓNICA<strong>”</strong>. EJEMPLAR Nº 1 (pag 139)<br />

5


I<br />

<strong>“La</strong> <strong>fe</strong> <strong>es</strong>...<strong>”</strong><br />

LA FE ES UNA LEY<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> una ley...<strong>es</strong>tablecida por Dios para nosotros.<br />

Es el don de un poder otorgado a la humanidad<br />

para que lo posea y cultive.<br />

Lo que cre<strong>es</strong> <strong>es</strong> lo que ocurre. Aparece.<br />

En todas las personas operan una serie de creencias.<br />

Sean verdad o falsas, todos creemos con sólida certeza<br />

en algunas cosas.<br />

El corazón tiene una doctrina confidencial tan arraigada que se<br />

ha convertido en rutina y no puede vislumbrarse.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> una ley. Las cosas que juzgamos ciertas se materializan<br />

con igual certeza.<br />

El gran enigma <strong>es</strong> d<strong>es</strong>cubrir en qué creo,<br />

porque <strong>es</strong>toy tan familiarizado y cómodo con mis creencias que<br />

nunca las he sacado del pensamiento para darl<strong>es</strong> forma de<br />

palabra.<br />

Son opinion<strong>es</strong> que se han convertido en principios.<br />

Ideas vanas que he convertido en dogma.<br />

Debo hallarlas y<br />

formularlas...<br />

si he de refutarlas.<br />

7


Mis creencias son como una gran r<strong>es</strong>aca oceánica que<br />

me arrastra hacia sí misma con<br />

una fuerza mayor que mis brazadas,<br />

un catalizador del que no puedo huir.<br />

Pero soy yo el creador de <strong>es</strong>a fuerza.<br />

La he alimentado y otorgado su poder en<br />

mis recónditas meditacion<strong>es</strong>.<br />

La gran batalla empieza cuando decido<br />

cambiar mis dogmas solidificados.<br />

No cambian fácilmente.<br />

P<strong>es</strong>an como el plomo.<br />

Sólo los d<strong>es</strong>truyo con golp<strong>es</strong> equiparados<br />

a la r<strong>es</strong>istencia de mis mentiras.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> una ley. Lo que cre<strong>es</strong>, <strong>es</strong>o experimentas.<br />

D<strong>es</strong>pués tu experiencia demu<strong>es</strong>tra lo que habías creído,<br />

pero <strong>es</strong> así porque creíste en lo que habría de suceder.<br />

No porque fu<strong>es</strong>e real.<br />

Lo que cre<strong>es</strong>, tiene poder...<br />

poder real para crear.<br />

Si tien<strong>es</strong> <strong>fe</strong> en el mal,<br />

el mal emergerá con la fuerza que tenga en tu mente.<br />

El mal probará la <strong>fe</strong> que tien<strong>es</strong> en él.<br />

Si tien<strong>es</strong> <strong>fe</strong> en el d<strong>es</strong>astre, el d<strong>es</strong>astre te perseguirá.<br />

Pero el d<strong>es</strong>astre no existirá como una fuerza exterior.<br />

Será el <strong>es</strong>trago que vive dentro de tu<br />

corazón a raíz de la <strong>fe</strong> en el miedo.<br />

Hay una “religión de rechazo<strong>”</strong> que cree <strong>fe</strong>rvientemente<br />

que <strong>es</strong>e rechazo será la tónica dominante en todo<br />

8


encuentro con otros. Y <strong>es</strong> así.<br />

Se vuelve así...cuando no era así.<br />

De todas nu<strong>es</strong>tras absurdas corrient<strong>es</strong> de <strong>fe</strong>,<br />

quizás sea ésta el sepulcro<br />

del cual surgen el r<strong>es</strong>to de podridas <strong>fe</strong>s...<br />

la que nos vuelve ciegos.<br />

Nos convierte en monstruos pervertidos,<br />

maníacos coronados de tiranía.<br />

Es la <strong>fe</strong> en nu<strong>es</strong>tro propio ‘yo.’ La confianza en nu<strong>es</strong>tra propia<br />

habilidad para hacer… y saber.<br />

No hay una sed para que Dios hable,<br />

porque el “Yo<strong>”</strong> ha hablado.<br />

Se <strong>es</strong>cucha en lo secreto a <strong>es</strong>te portentoso ‘yo’<br />

y se termina creyendo en la sinrazón.<br />

Somos necios, sí... pero necios peligrosos<br />

que nombran a Dios sin nec<strong>es</strong>itarlo.<br />

Que toman Su lugar<br />

voci<strong>fe</strong>rando que le conocen.<br />

¿Recib<strong>es</strong> lo que d<strong>es</strong>eas en <strong>es</strong>ta vida? Siempre.<br />

Tu d<strong>es</strong>eo yace en el puño de tu <strong>fe</strong>.<br />

Los d<strong>es</strong>eos nobl<strong>es</strong> mueren a manos de la incredulidad.<br />

La incredulidad <strong>es</strong> una <strong>fe</strong> en lo negativo. Una confianza en que<br />

la bendición no llegará.<br />

Una secreta convicción de que Dios no lo hará... no podrá...<br />

Soy expu<strong>es</strong>to y juzgado por lo que mi vida produce...<br />

y por lo que no produce. Porqué sólo produce lo que creo.<br />

No puede producir lo que no creo.<br />

9


¿Entiend<strong>es</strong> ya que <strong>es</strong>a <strong>fe</strong> <strong>es</strong> una ley?<br />

“Te sea concedido conforme a tu <strong>fe</strong>.<strong>”</strong><br />

Una afimación que dice que la mani<strong>fe</strong>stación de Dios<br />

no se basa en Su voluntad, en Su poder, en Su propósito,<br />

sino en mi <strong>fe</strong>.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> de algún modo un ente viviente, algo que late con fuerza<br />

para cumplir su propio propósito.<br />

Sea <strong>fe</strong> en Dios o no,<br />

la <strong>fe</strong> expone la imagen que tiene de Él.<br />

La Fe Auténtica vive porque emana de la<br />

Palabra Viviente, “de la boca de Dios.<strong>”</strong><br />

La Escritura, arropada por la pr<strong>es</strong>encia del Padre,<br />

<strong>es</strong> dónde la <strong>fe</strong> –por medio del amor– <strong>es</strong> concebida.<br />

La comunión con el Padre, oír Su Palabra personal, <strong>es</strong> recibir<br />

una semilla palpitante.<br />

Absorber la Escritura implanta la auténtica verdad en el abismo<br />

de mi intrincada mente, y diluye las necias conclusion<strong>es</strong><br />

acumuladas a lo largo de mi vida.<br />

Es imperativo que construya mi <strong>fe</strong> por accion<strong>es</strong> deliberadas,<br />

por el bombardeo de mi propia alma<br />

con la verdad Eterna de Dios<br />

frente a la arrogancia de mis valoracion<strong>es</strong>.<br />

Estar alrededor de los que tienen <strong>fe</strong> alimenta la <strong>fe</strong>.<br />

Camina con un <strong>es</strong>céptico y tu <strong>fe</strong> se encaminará hacia la<br />

hambruna de la incredulidad.<br />

10


No obstante... la obediencia y la muerte son las que en verdad<br />

forman y liberan la <strong>fe</strong>.<br />

Entregarse a Dios para hacer Su voluntad,<br />

y la aún más profunda sumisión de morir a la independencia...<br />

... <strong>es</strong>tas rendicion<strong>es</strong> provocan que Su Propia Confianza entre y<br />

venza al suspicaz corazón humano.<br />

Si sirvieras a Dios pero no muer<strong>es</strong> por Él,<br />

tu <strong>fe</strong> siempre empequeñecerá.<br />

Gál 2:20 Con Cristo <strong>es</strong>toy juntamente crucificado, y ya no vivo<br />

yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo<br />

vivo en la <strong>fe</strong> del Hijo de Dios.<br />

La muerte te introduce en la <strong>fe</strong> del propio Hijo de Dios,<br />

una <strong>fe</strong> sobrenatural emanada<br />

de Uno cuya <strong>fe</strong> lo conquistó TODO.<br />

La muerte de mí <strong>es</strong> la muerte de <strong>es</strong>te cimiento natural adámico<br />

mío que se tiende a la incredulidad...<br />

que vive en cinismo en cuanto a su Gran Creador,<br />

y que d<strong>es</strong>precia mi Propio Origen.<br />

¡La incredulidad <strong>es</strong> as<strong>es</strong>inada sólo cuando “yo<strong>”</strong> muere!<br />

Y la <strong>fe</strong> sólo nace en “Su<strong>”</strong> vida.<br />

Por <strong>es</strong>o… alimento mi <strong>fe</strong> con la Palabra de Dios según el Padre<br />

me la va leyendo personalmente,<br />

y mato mi incredulidad por la cruz personal<br />

de mi experiencia diaria.<br />

11


Sin embargo,… en medio de <strong>es</strong>ta Gran Solución<br />

a mi duda innata,<br />

tengo una llave en mi mano que no proviene de Dios.<br />

Un pivote que cierra o abre<br />

la Dinámica de la Fe.<br />

Esta llave eléctrica que sustenta<br />

la Fe y la Duda<br />

en la balanza <strong>es</strong><br />

mi simple elección.<br />

Puedo decidir qué creeré.<br />

Puedo <strong>es</strong>coger en contra de la evidencia,<br />

Puedo refutar el argumento.<br />

Puedo rechazar la lógica y<br />

puedo acallar al acusador.<br />

Es mi elección. Mi elección.<br />

Elijo en cuál confiaré. Escojo la verdad,<br />

o <strong>es</strong>cojo rechazar la verdad.<br />

La opción siempre <strong>es</strong>tá… conmigo.<br />

Puedo d<strong>es</strong>ear creer, pero<br />

a menos que <strong>es</strong>coja creer,<br />

mi d<strong>es</strong>eo perecerá en mi regazo.<br />

Sin <strong>fe</strong> mi d<strong>es</strong>eo<br />

nunca llegará a vivir.<br />

Y culparé a Dios de ello.<br />

La <strong>fe</strong> viene por el oír, y debo <strong>es</strong>coger <strong>es</strong>cuchar.<br />

La <strong>fe</strong> viene muriendo y debo decidir morir.<br />

12


Y la <strong>fe</strong> viene por mirar.<br />

Pu<strong>es</strong>tos los ojos en J<strong>es</strong>ús, el autor y consumador de nu<strong>es</strong>tra <strong>fe</strong>.<br />

Mirándole a Él, centrándome en Él,<br />

en una dependencia sin hipotecas.<br />

Él <strong>es</strong> lo Único Real en un abismo de ilusión.<br />

Tengo que d<strong>es</strong>viar mi mirada para poder ver...<br />

Tengo que dejar lo que parece sólido<br />

y acudir a lo que Es Real.<br />

La <strong>fe</strong> no <strong>es</strong> <strong>fe</strong> si se sustenta en el dogma.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> dinámica sólo en la medida en que r<strong>es</strong>ide en una<br />

Persona... Aquel para quien fue hecho el universo<br />

y sin El Cual el universo no tiene sentido.<br />

13


TU FE ESTÁ EN UN ÁRBOL<br />

Los Árbol<strong>es</strong> del Edén aún <strong>es</strong>tán en pie, siempre delante de<br />

nosotros, repr<strong>es</strong>entando una opción tan primaria que llegan a ser<br />

–tal y como su propio nombre indica– vida o muerte.<br />

El Árbol de Conocimiento <strong>es</strong> un árbol de pensamientos.<br />

Creemos que pensando podemos saber.<br />

“Cuando pienso, creo saber…<br />

y creo que lo que pienso <strong>es</strong> verdad.<strong>”</strong><br />

Tenemos en muy alta <strong>es</strong>tima nu<strong>es</strong>tras opinion<strong>es</strong>.<br />

SATANÁS provocó a Eva para que<br />

pensara... razonara y sacara conclusion<strong>es</strong>.<br />

Bajo la sombra de <strong>es</strong>e Árbol pensó con afán<br />

... y entonc<strong>es</strong> pecó.<br />

Perdió a Dios por la deducción.<br />

Sop<strong>es</strong>ó las cosas. Por su cuenta, sin Dios.<br />

El enemigo hace morada a través de los razonamientos,<br />

por lo cual, cuando ella “pensó<strong>”</strong>, se sentó con él.<br />

Dios no <strong>es</strong>taba en la conversación ni<br />

entraba en la ecuación.<br />

Eva fabricó su propia solución,<br />

sin <strong>es</strong>perar, sin <strong>es</strong>cuchar...<br />

meramente pensando.<br />

Vivir por pensamientos <strong>es</strong> morir.<br />

14


R<strong>es</strong>olver, saber, tomar conclusion<strong>es</strong> por medio de pensamientos,<br />

implica perder el contacto en la realidad, pero <strong>es</strong> aún peor...<br />

¡pu<strong>es</strong> vivir por pensamientos <strong>es</strong> dejar de existir!<br />

Sólo existimos en tanto hayamos conectado con Dios, y<br />

la conexión se <strong>es</strong>tablece por una conversación<br />

que se convierte en comunión de amor...<br />

Al preguntar, abrimos,<br />

y al <strong>es</strong>cuchar, entramos.<br />

La lujuria de saber se d<strong>es</strong>pertó en Eva y<br />

germinó en sus hijos,<br />

maníacos enfrentados a Dios.<br />

Los hijos de Eva ahora obtendrán r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas…<br />

aunque tengan que fabricarlas.<br />

El Pensamiento <strong>es</strong> un reino peligroso<br />

donde, con disfraz de quietud, Satanás<br />

va añadiendo sus ideas y d<strong>es</strong>pués te acusa con ellas.<br />

Sugerencias muy, muy elaboradas que contraen<br />

una conclusión in<strong>fe</strong>rnal.<br />

Cuando Pedro <strong>es</strong>cuchó, oyó del Padre del Cielo<br />

la identidad de J<strong>es</strong>ús, mientras los otros seguían confusos en<br />

cuanto a Aquel Hombre.<br />

Pero en Jerusalén, cuando Pedro encaró peligro por causa de<br />

J<strong>es</strong>ús, empezó a pensar –en vez de <strong>es</strong>cuchar– y de <strong>es</strong>te modo<br />

llegó a ser portavoz del enemigo.<br />

Pensar <strong>es</strong> el reino dónde Satanás tiene dominio y donde<br />

Dios no <strong>es</strong>tá implicado.<br />

15


No encontrarás a Dios allí.<br />

Él no entra a debatir con reflexion<strong>es</strong> humanas<br />

pervertidas por lo satánico.<br />

Dios mantiene silencio.<br />

La verdad <strong>es</strong>tá allí... pero sólo <strong>es</strong> una migaja<br />

de verdad encerrada en un ataúd de mentiras.<br />

En <strong>es</strong>a sombra tenebrosa las mentiras se convierten en la<br />

“verdad<strong>”</strong>, y la poquita verdad d<strong>es</strong>aparece.<br />

El Árbol de Vida <strong>es</strong> el lugar donde <strong>es</strong>cuchar.<br />

El lugar donde cada dilema<br />

<strong>es</strong> una pregunta para que Dios la aclare,<br />

una oportunidad emocionante para conocerle por Sus r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas.<br />

Donde el d<strong>es</strong>concierto encuentra su explicación<br />

y la confusión su orden...<br />

sólo al pr<strong>es</strong>tar atención a la Voz,<br />

a Uno que TODO lo sabe.<br />

Escuchando se le ofrece Su lugar<br />

al Único que sabe y que sabrá…<br />

... pu<strong>es</strong> Dios habla cuando <strong>es</strong>cuchamos, pero calla cuando pensamos.<br />

Pensar o <strong>es</strong>cuchar. Elije.<br />

Es un absoluto y <strong>es</strong> irrefutable que no pued<strong>es</strong> tener a ambos.<br />

Cada uno de nosotros vive en uno u otro árbol.<br />

Sab<strong>es</strong> bien qué árbol te cobija (alimenta)… lo sab<strong>es</strong><br />

Y si no lo sab<strong>es</strong>, prueba tu propio fruto y lo sabrás.<br />

16


Cada día pr<strong>es</strong>enta enigmas sin solucion<strong>es</strong>...<br />

d<strong>es</strong>afíos disfrazados de problemas.<br />

Las preguntas nacen de la nec<strong>es</strong>idad de saber.<br />

“¿Qué <strong>es</strong>tá pasando aquí?<strong>”</strong><br />

Los misterios golpean a nu<strong>es</strong>tra puerta, y llegan sin previa<br />

invitación.<br />

Lo que hac<strong>es</strong> <strong>es</strong> correr hacia un Árbol.<br />

Siempre hay un Árbol.<br />

Tien<strong>es</strong> uno favorito,<br />

uno en el que confías.<br />

En uno de los Árbol<strong>es</strong> <strong>es</strong>peras. Esperas con tranquilidad.<br />

Hac<strong>es</strong> las preguntas y sab<strong>es</strong><br />

que Sus r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas <strong>es</strong>tán más allá<br />

de cualquiera de tus insignificant<strong>es</strong> preguntas.<br />

Por mucho que tarde, <strong>es</strong>pera.<br />

No hay alternativa a Su voz, ni suplent<strong>es</strong>.<br />

Ninguna actividad produce Vida (lo sab<strong>es</strong>),<br />

así que la única salida que te queda <strong>es</strong>... <strong>es</strong>cuchar.<br />

El Gran Padre d<strong>es</strong>ea tener comunión<br />

a través del catalizador que <strong>es</strong><br />

nu<strong>es</strong>tro d<strong>es</strong>concierto natural ante la vida.<br />

El Padre quiere ser padre...<br />

El Árbol Que Escucha da a luz Vida,<br />

vitalidad para enfrentarla,<br />

y sabiduría para vivirla.<br />

17


En el otro Árbol, el Árbol del Pensamiento,<br />

examinas, observas lo que <strong>es</strong> obvio, interpretas las señal<strong>es</strong><br />

filtradas por una imaginación impura que<br />

lo único que conoce <strong>es</strong> su propio corazón corrompido.<br />

Lo que observas, consideras, y te elaboras una lista de<br />

explicacion<strong>es</strong>, y <strong>es</strong>cuchas las di<strong>es</strong>tras sugerencias del infierno.<br />

Tan di<strong>es</strong>tras, que convencen.<br />

Escog<strong>es</strong> tu propia verdad y la <strong>es</strong>culp<strong>es</strong> en el mármol de tu mente.<br />

Se convierte en una proclamación, en un absoluto<br />

ante el que no albergas ninguna duda.<br />

Incluso la denominas “verdad de Dios<strong>”</strong>,<br />

verdad a la que llegaste... sin Él.<br />

De<strong>fe</strong>nderás <strong>es</strong>a idea hasta la muerte...<br />

y así te será retribuida.<br />

18


LA FE ES UNA PERSONA<br />

La vida al completo <strong>es</strong> la búsqueda de una persona, una que<br />

conoce los detall<strong>es</strong> de mi turbado ser...<br />

de lo que tengo y he perdido,<br />

y que en <strong>es</strong>e laberinto d<strong>es</strong>nudo<br />

me ama con amor imprudente.<br />

Para hallarlo, construimos amistad<strong>es</strong> fatuas.<br />

Hacemos cabriolas con el dinero,<br />

disponemos de fríos objetos inanimados,<br />

devoramos a nu<strong>es</strong>tro prójimo,<br />

creemos en un perro.<br />

“¿Dónde <strong>es</strong>tá mi amigo? ¿Dónde <strong>es</strong>tá mi amigo?<strong>”</strong><br />

Búsqueda callada o búsqueda d<strong>es</strong>carada,<br />

buscamos sobre todo... relación.<br />

Un compañero. No sólo un amor mutuo,<br />

sino un amor que me ame cuando no puedo amar,<br />

ni soy atractivo de amar.<br />

Que mantenga mi más alto ego ante sus ojos.<br />

Un ser per<strong>fe</strong>cto de hechos per<strong>fe</strong>ctos...<br />

un dios, claro <strong>es</strong>tá.<br />

Ahí vive <strong>es</strong>e ideal imposible,<br />

implantado en el alma por creación innata.<br />

Una nec<strong>es</strong>idad ineludible que genera una búsqueda interminable...<br />

parent<strong>es</strong>co con otra alma.<br />

Un <strong>es</strong>labón de comprensión d<strong>es</strong>nuda<br />

con alguien que saque a florecer mi <strong>es</strong>encia.<br />

Uno que nunca falla, nunca traiciona...<br />

y nunca, nunca te abandona.<br />

19


El Dios en Tr<strong>es</strong>, el único que paga la factura.<br />

Y Él se encorva a nu<strong>es</strong>tra altura –Padre, Madre, Marido–<br />

para ser Compañero, intimo, per<strong>fe</strong>cto...<br />

el fin de la búsqueda.<br />

La <strong>fe</strong> surge de <strong>es</strong>a relación.<br />

La <strong>fe</strong> se eleva porque d<strong>es</strong>cansa únicamente<br />

sobre quién... no sobre qué.<br />

“Yo sé en quién he creído.<strong>”</strong><br />

Pablo creyó porque d<strong>es</strong>cansó en una Persona,<br />

enseñó doctrina sólo como una sólida verdad<br />

acerca del Único Per<strong>fe</strong>cto.<br />

Y <strong>es</strong>e Ser Conocible<br />

se convirtió en su única añoranza<br />

y único t<strong>es</strong>oro.<br />

Hay un requisito previo a la <strong>fe</strong>, sencillo... posible.<br />

Todo lo que tenemos que hacer <strong>es</strong> MIRAR.<br />

No a un libro, no a un principio,<br />

sino a una Persona, Divina por una Per<strong>fe</strong>cción Ideal.<br />

El que mantiene unido al universo<br />

y lo mantiene alejado de la locura absoluta...<br />

puede sostenerme,<br />

guardarme.<br />

J<strong>es</strong>ús, Sólo J<strong>es</strong>ús. Ningún otro, jamás.<br />

El Carpintero Santo pule lo que no <strong>es</strong> <strong>fe</strong>,<br />

quitando de la madera muerta la corteza viva.<br />

Escofina de nu<strong>es</strong>tra vida lo áspero,<br />

y lima hasta las últimas consecuencias<br />

lo que nosotros sólo débilmente comenzamos.<br />

20


Su labor <strong>es</strong> trabajar en nosotros.<br />

Él <strong>es</strong> el Art<strong>es</strong>ano de la <strong>fe</strong>, y nosotros Su materia prima.<br />

Sin embargo, mirar implica profundizar... y <strong>es</strong> una rareza.<br />

Para que un objeto sea el centro<br />

los demás tienen que apartarse a un lado del camino.<br />

“Apartarse de cuanto distrae<strong>”</strong><br />

<strong>es</strong> abandonar todas mis caprichosas manías,<br />

sobre todo <strong>es</strong>a obs<strong>es</strong>ión fundamental...<br />

hacia MÍ MISMO.<br />

Mirarse a uno mismo <strong>es</strong> una adoración propia.<br />

Debo abandonar la invertida observancia del ego<br />

por una Persona Mejor.<br />

Mirar al Consumador <strong>es</strong> tener la <strong>fe</strong>.<br />

Miras hacia tu origen,<br />

contemplas en el corazón interior a tu<br />

Única Esperanza.<br />

Es natural, innato.<br />

Ya <strong>es</strong>tás mirando.<br />

La pregunta... ¿hacia dónde miro?<br />

Y mirar <strong>es</strong> creer.<br />

Lo que contemplas con preocupación<br />

<strong>es</strong> lo que adoras.<br />

Siempre te anclarás a tu <strong>es</strong>peranza.<br />

“Poner los ojos en J<strong>es</strong>ús<strong>”</strong> <strong>es</strong> <strong>es</strong>to:<br />

Contemplación serena y conversación franca<br />

en flujo constante.<br />

La irr<strong>es</strong>istible nec<strong>es</strong>idad apunta hacia Él,<br />

excluyendo a todo y a todos,<br />

21


y <strong>es</strong> del todo privada.<br />

Fe ES d<strong>es</strong>cansar en un Poderoso Sustentador<br />

que <strong>es</strong> Dios Omnipotente, pero<br />

también Amor Personal...<br />

Alguien que con una cort<strong>es</strong>ía fuera de lo común,<br />

¡busca de nosotros <strong>es</strong>a relación<br />

que anhelamos en nu<strong>es</strong>tros sueños!<br />

22


La Fe <strong>es</strong> d<strong>es</strong>canso y paz.<br />

La <strong>fe</strong> sabe Quién <strong>es</strong> DIOS.<br />

“Yo sé en QUIÉN he creído<strong>”</strong>.<br />

LA FE EN EL MIEDO<br />

La <strong>fe</strong> tiene su reverso...<br />

La incredulidad <strong>es</strong> un <strong>es</strong>cepticismo velado del corazón,<br />

y el miedo <strong>es</strong> su mani<strong>fe</strong>stación.<br />

El miedo <strong>es</strong> el síntoma exterior<br />

de que la duda<br />

gobierna dentro...<br />

y no le conoce a ÉL.<br />

El miedo <strong>es</strong> la <strong>fe</strong> a la inversa.<br />

La confianza en que Él no vendrá...<br />

la creencia de que Él no <strong>es</strong>tá diciendo la verdad,<br />

al menos “no a mí.<strong>”</strong><br />

Y por <strong>es</strong>o reina el miedo.<br />

El miedo de Su fracaso...<br />

la certeza de Su indi<strong>fe</strong>rencia.<br />

Éstas son las <strong>fe</strong>s secretas<br />

que incuban el miedo.<br />

Las palabras bonitas excusan el miedo y nos hacen<br />

menos culpabl<strong>es</strong> de él como pecado atroz.<br />

En realidad no <strong>es</strong> miedo, sólo “preocupación<strong>”</strong>.<br />

“Se supone que debemos preocuparnos por lo que <strong>es</strong><br />

importante, ¿no?<strong>”</strong><br />

23


No, la ansiedad <strong>es</strong> mera incredulidad,<br />

y el <strong>es</strong>trés <strong>es</strong> una palabra inventada<br />

que oculta el terror<br />

y lo eleva a lo comprensible.<br />

A algo digno de lástima.<br />

El miedo <strong>es</strong> pecado. Debilidad humana, sí.<br />

Normal en nosotros, sí.<br />

Pero el miedo en Sus discípulos<br />

logró sacar un extraño enojo<br />

al sufrido J<strong>es</strong>ús.<br />

Él, que era infinitamente paciente,<br />

que soportó sus intrigas y plan<strong>es</strong> ambiciosos<br />

y se mostró amable con Su propio as<strong>es</strong>ino,<br />

no toleró su miedo.<br />

La temp<strong>es</strong>tad en el mar fue el proyector<br />

de sus dudas básicas.<br />

Una prueba de la vida real que evaluaba<br />

lo que comprendían de Él.<br />

“¿Por qué <strong>es</strong>táis así amedrentados?<br />

¿Aún no tenéis <strong>fe</strong>?<strong>”</strong><br />

Tememos a lo que <strong>es</strong>tá bajo<br />

el dominio de Su dedo pulgar,<br />

y no le tememos a Él, Aquel<br />

que se asienta como rey del universo entero<br />

y gobierna hasta la más pequeña gota de lluvia.<br />

24


Temer a la tormenta <strong>es</strong><br />

creer en el poder de la tormenta para matarme<br />

y negar Su fuerza para salvarme.<br />

Es traición.<br />

Es una cobardía ciega con la que<br />

Él no mu<strong>es</strong>tra ninguna paciencia.<br />

Ante el poder de J<strong>es</strong>ús sobre la tormenta,<br />

su miedo abandonó la ventisca y se posó sobre<br />

Aquel que tan fácilmente la gobernó,<br />

y su pavor natural<br />

se mudó en un d<strong>es</strong>carnado temor de Él.<br />

“¿Quién <strong>es</strong> éste?,<br />

¡aún el viento y el mar le obedecen!<strong>”</strong><br />

Y <strong>es</strong>e <strong>es</strong> el miedo correcto.<br />

El terror legítimo.<br />

El miedo a cualquier cosa, a alguien,<br />

expone, no sólo nu<strong>es</strong>tra falta de <strong>fe</strong> en Dios,<br />

sino el lugar en el que<br />

depositamos nu<strong>es</strong>tra confianza.<br />

Revela qué...<br />

y en quién creemos.<br />

Lo que tem<strong>es</strong> d<strong>es</strong>vela tu ídolo secreto...<br />

aquel cuyo poder exaltas.<br />

Nombra tu miedo y habrás<br />

nombrado a tu dios.<br />

A lo que tem<strong>es</strong>, sirv<strong>es</strong>.<br />

A lo que sirv<strong>es</strong>, muer<strong>es</strong> por ello.<br />

25


(Someter tu ‘yo’ <strong>es</strong> morir.<br />

Rendir tu libertad voluntariamente <strong>es</strong> morir.)<br />

A lo qué entregas tu vida... <strong>es</strong>e <strong>es</strong> tu dios.<br />

Lo qué tem<strong>es</strong> ES lo que cre<strong>es</strong>.<br />

Lo que cre<strong>es</strong> <strong>es</strong> lo que tiene poder sobre ti,<br />

y sobre <strong>es</strong>e lugar edificas<br />

un altar voluntario,<br />

una prisión de tu propia hechura.<br />

Por tanto el miedo <strong>es</strong> la base y el centro de adoración.<br />

Por <strong>es</strong>o no osamos temer<br />

siquiera al que puede matar el cuerpo.<br />

El temor se r<strong>es</strong>erva sólo para Aquel que<br />

“puede d<strong>es</strong>truir alma y cuerpo en el infierno.<strong>”</strong><br />

La adoración proviene del miedo y el miedo <strong>es</strong> adoración.<br />

El núcleo de todo temor <strong>es</strong> <strong>es</strong>te:<br />

el frío pavor a la muerte.<br />

Esa lucha innata por la vida, la fiera motivación<br />

de la propia pr<strong>es</strong>ervación...<br />

ésta <strong>es</strong> la raíz oculta del miedo, su poder<br />

para oler el peligro y luchar a brazo partido<br />

para sobrevivir aun cuando signifique<br />

rendir la libertad del alma.<br />

Sobrevivir lo <strong>es</strong> todo.<br />

Tan poderoso <strong>es</strong> <strong>es</strong>e temor a la muerte<br />

en cualquiera de sus formas, a cualquier nivel,<br />

que concederemos, asentiremos,<br />

e incluso abandonaremos a DIOS...<br />

cualquier cosa para <strong>es</strong>tar a salvo.<br />

26


El hombre que enterró su talento<br />

usó el miedo cómo excusa para ser<br />

d<strong>es</strong>caradamente d<strong>es</strong>obediente.<br />

Tuvo la audacia de justificar su miedo<br />

acusando a Dios de ser el temor<br />

que lo había paralizado,<br />

¡asumiendo que por <strong>es</strong>o el Ma<strong>es</strong>tro<br />

habría de ser tan comprensivo y cond<strong>es</strong>cendiente que<br />

renunciaría a aplicar castigo alguno!<br />

Esto no <strong>es</strong> sólo una parábola,<br />

<strong>es</strong> un retrato de la naturaleza humana<br />

repr<strong>es</strong>entada con vivos color<strong>es</strong>,<br />

nu<strong>es</strong>tra creencia autocompasiva<br />

en nu<strong>es</strong>tros miedos infundados.<br />

Todos lo hemos hecho: de<strong>fe</strong>nder nu<strong>es</strong>tro miedo<br />

reprochando a Dios<br />

que la vida <strong>es</strong> dura.<br />

La réplica del Ma<strong>es</strong>tro asombra.<br />

Demu<strong>es</strong>tra que Él <strong>es</strong> duro.<br />

¡Por sólo un talento, un simple talento,<br />

condena a una forma de infierno!<br />

“En las tinieblas de afuera; allí será el lloro<br />

y el crujir de dient<strong>es</strong>.<strong>”</strong><br />

¡Sólo por un pequeño y comprensible temor!<br />

Ese miedo al que tenemos tanta simpatía.<br />

¡Ese miedo a la pérdida y el fracaso impu<strong>es</strong>tos<br />

por la injusticia de la vida!<br />

Ese miedo <strong>es</strong> llamado por su verdadero nombre,<br />

d<strong>es</strong>enmascarado por el Único<br />

27


que Lee los Corazon<strong>es</strong><br />

y que Conoce<br />

TODO pensamiento secreto.<br />

No se trata de miedo...<br />

sino de ser “malvado y perezoso<strong>”</strong>.<br />

Palabras duras para los pobr<strong>es</strong> humanos.<br />

¿Qué haremos?<br />

El miedo <strong>es</strong> malvado, no sólo ‘humano’.<br />

El Miedo <strong>es</strong> maligno porque en el fondo<br />

<strong>es</strong> una imputación a Dios,<br />

un mazazo a Su carácter.<br />

Un rechazo a Su bondad.<br />

Un insulto a Su poder.<br />

Cualquiera puede temer.<br />

Eso <strong>es</strong> fácil. Sólo hay que sentarse.<br />

Cualquiera puede edificar el terror<br />

y detenerse ahí...<br />

“¡Un león en el camino!<strong>”</strong><br />

Es trabajo, duro trabajo, armarse del valor<br />

de aventurarse para salir afuera y multiplicarse.<br />

Para sembrar tien<strong>es</strong> que creer en la siembra.<br />

Para arri<strong>es</strong>gar deb<strong>es</strong> cerciorarte de la seguridad.<br />

Y para creer, deb<strong>es</strong> luchar.<br />

Deb<strong>es</strong> trabajar.<br />

28


No <strong>es</strong> difícil creer.<br />

Difícil <strong>es</strong> refutar la duda<br />

ante las pruebas que acuden a tu memoria<br />

y que se acumulan en tu alma.<br />

El objetivo de la lucha <strong>es</strong> hallar Su visión de las cosas<br />

y mantener <strong>es</strong>a visión<br />

frente a tu propio razonamiento.<br />

Luchar contra el miedo <strong>es</strong> luchar con lo que parece<br />

tan sólido y obvio,<br />

refutar las opacas ideas<br />

de tu propia <strong>es</strong>tructura mental.<br />

El enemigo de tu alma utiliza el miedo para<br />

atraparte y retenerte.<br />

Sí te pueden atemorizar, serás un pr<strong>es</strong>o voluntario<br />

confinado en una celda sin barrot<strong>es</strong>.<br />

Y el poder de toda amenaza<br />

<strong>es</strong> simplemente <strong>es</strong>te: una mentira.<br />

Nada tiene poder sobre ti. Sólo Dios.<br />

¡Nada puede tocarte sin Su consentimiento!<br />

“...ni tengáis miedo.<br />

A Jehová de los ejércitos,<br />

a Él santificad;<br />

sea Él vu<strong>es</strong>tro temor,<br />

y Él sea vu<strong>es</strong>tro miedo.<strong>”</strong><br />

El r<strong>es</strong>to de miedos <strong>es</strong>tán<br />

prohibidos porque no son válidos.<br />

29


El temor sólo <strong>es</strong>tá r<strong>es</strong>ervado para Dios<br />

porque Él reina sobre la vida y la muerte...<br />

cielo... e infierno.<br />

Mat.10:28<br />

Mat.14;27-33<br />

Mar. 4:35-41<br />

Isa. 8:13<br />

Proverbios. 22:13<br />

30


LA FE ES PASADO<br />

La <strong>fe</strong> sólo <strong>es</strong> pasado. La <strong>fe</strong> nunca <strong>es</strong> futura.<br />

Se completó todo en <strong>es</strong>a gloriosa proclamación,<br />

el último aliento de Su tortura,<br />

la última palabra de Su acabada vida:<br />

“Consumado <strong>es</strong>.<strong>”</strong><br />

Y murió al momento...<br />

Su obra para salvarnos del infierno,<br />

Su labor para llevarnos a los cielos<br />

quedó fijada en una culminación final que<br />

nunca puede disminuir ni aumentar;<br />

fijada en la eternidad y alcanzable hoy<br />

en la práctica, la solución a todas mis crisis<br />

hasta la consecución de mi último d<strong>es</strong>tino.<br />

El carpintero ha terminado de tallar la<br />

madera de Su propia humanidad<br />

moldeando una figura según la voluntad de Su Padre.<br />

Una humanidad nueva... obediente, santa.<br />

Su trabajo acabado <strong>es</strong> mi trabajo acabado.<br />

Su obediencia torturada <strong>es</strong> mía...<br />

sin la tortura.<br />

Su victoria sobre la miserable humanidad<br />

<strong>es</strong> mía para disfrutarla y vivirla.<br />

Cuando Él acabó, yo también “acabé<strong>”</strong><br />

y cuanto experimento de Su poder<br />

<strong>es</strong> sólo lo que ya era<br />

y <strong>es</strong>peraba a que se abrieran mis ojos,<br />

31


acuciado por las nec<strong>es</strong>idad<strong>es</strong> de mi corazón.<br />

Es mirar voluntariamente por pura d<strong>es</strong><strong>es</strong>peración.<br />

Mi ceguera a Su trabajo consumado<br />

<strong>es</strong> el obstáculo que impide su disfrute.<br />

Mi única carencia <strong>es</strong> <strong>es</strong>ta: ver.<br />

¡No “conseguir<strong>”</strong>, no arrancar de Su mano dolorida<br />

algo aún por conseguir!<br />

Él no tiene nada más que dar, nada más que hacer.<br />

Él d<strong>es</strong>cansa en la satisfacción de las Ley<strong>es</strong> Santas del Padre.<br />

Él d<strong>es</strong>cansa de Su trabajo<br />

y yo... yo reposo de mis obras en <strong>es</strong>a obra vicaria,<br />

de mis propios <strong>es</strong>fuerzos tediosos para “ser<strong>”</strong>.<br />

Para “hacer<strong>”</strong>.<br />

Está hecho. ¿Lo v<strong>es</strong>?<br />

¿Qué <strong>es</strong>tá hecho? Mi d<strong>es</strong>tino.<br />

Tu d<strong>es</strong>tino.<br />

Nu<strong>es</strong>tro ser eterno.<br />

Estamos completos en Él.<br />

Ahora, en <strong>es</strong>te mismo instante.<br />

No se progr<strong>es</strong>a en ello por nu<strong>es</strong>tra valía.<br />

No se consigue por <strong>es</strong>fuerzo.<br />

Sólo por hechos consumados...<br />

Él <strong>es</strong> mi identidad.<br />

Él <strong>es</strong> mi pureza.<br />

Él <strong>es</strong> mi... nombra lo que quieras.<br />

32


¿Esforzándote por ser santo?<br />

Demasiado tarde, ya has sido hecho así.<br />

Procuras alcanzar lo que ya tien<strong>es</strong>.<br />

Un hombre rico en pos<strong>es</strong>ión de toda riqueza<br />

corriendo y jadeando persiguiendo<br />

el t<strong>es</strong>oro que cuelga a<strong>fe</strong>rrado de su mano.<br />

Necio <strong>es</strong>fuerzo, beneficio nulo.<br />

Perder las propias riquezas que se buscan en ciega ignorancia.<br />

Cualquier cosa que nec<strong>es</strong>ito ya <strong>es</strong>tá allí.<br />

Su Dádiva aguarda paciente<br />

para cubrir toda demanda que haga mi pobreza<br />

Porque ya <strong>es</strong>tá pasado y hecho,<br />

tan sólo recibo.<br />

Nada falta, nada se ha olvidado.<br />

“El Señor <strong>es</strong> mi pastor, nada me faltará.<strong>”</strong><br />

Y cuando vivo en <strong>es</strong>a certeza d<strong>es</strong>carada,<br />

poseo en vez de carecer, navego y no nec<strong>es</strong>ito arrastrarme.<br />

Nunca lo tendrás por quererlo.<br />

Nunca lo verás por <strong>es</strong>perarlo.<br />

Únicamente lo poseerás cuando sea tuyo,<br />

cuando ‘sea consumado’<br />

y sólo aguardas su aparición cierta.<br />

La <strong>fe</strong> no <strong>es</strong> lo que Él “hará<strong>”</strong><br />

con un premio futuro,<br />

ni lo que me he ganado<br />

por puntos de bondad.<br />

33


La <strong>fe</strong> no <strong>es</strong> “Él puede que lo haga<strong>”</strong> pero ahora no lo hará.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> <strong>es</strong>to: Él lo tiene. Es.<br />

Él reposa porque lo tiene.<br />

Y ahora puedo d<strong>es</strong>cansar<br />

<strong>es</strong>te día, cada día,<br />

porque Él ha consumado<br />

incluso el día de hoy.<br />

J<strong>es</strong>ús ha vencido a la humanidad, a Satanás.<br />

Hecho <strong>es</strong>tá.<br />

La eternidad <strong>es</strong>tá cumplida.<br />

La historia <strong>es</strong>tá completa.<br />

Hasta último detalle, hasta el<br />

último aspecto.<br />

¡TODO <strong>es</strong>tá consumado!<br />

¿Cuál <strong>es</strong> Su trabajo ahora?<br />

Sólo la Oración, la interc<strong>es</strong>ión constante<br />

de que nosotros, Sus tambaleant<strong>es</strong> ovejas, sencillamente...<br />

creamos en <strong>es</strong>as parcas palabras,<br />

“¡¡¡consumado <strong>es</strong>!!!<strong>”</strong><br />

y entonc<strong>es</strong>... ver <strong>es</strong>a Culminación Gloriosa<br />

en una experiencia... viva, personal.<br />

Hebreos 10:10,14<br />

Col.2:10<br />

34


LA FE EN LA MUERTE<br />

D<strong>es</strong>pués de abrazar lo que Él <strong>es</strong> en toda Su integridad<br />

he de recibir lo que yo soy<br />

en base a Su sorprendente d<strong>es</strong>cripción .<br />

Aquel que no puede mentir,<br />

Aquel que todo lo sabe,<br />

pasado y futuro por igual<br />

–Aquel que conoce lo Real, aquello más allá de lo Evidente–<br />

me d<strong>es</strong>cribe a mí... y a ti.<br />

Primero, reclama que no sólo <strong>es</strong>taba con Él,<br />

sino más cerca todavía, EN Él en la cruz.<br />

EN Él en la tumba.<br />

Cuando Él murió, morí con Él.<br />

Extrañas y ajenas, tal<strong>es</strong> ideas.<br />

Debo darlas por hecho.<br />

Nunca lo entenderé.<br />

Sólo como un niño, aceptando la<br />

sabiduría más alta e insondable del<br />

Último Padre, puedo hacerlo mío.<br />

Aunque parezca que vivo, aunque actúo como si viviera,<br />

<strong>es</strong>toy muerta.<br />

La evidencia <strong>es</strong> que vivo, en gran medida, vivo.<br />

Pero el Hecho Pr<strong>es</strong>ente <strong>es</strong> que morí.<br />

Cuando lo creo, <strong>es</strong> así,<br />

y me separo de <strong>es</strong>te reino visible de lo irreal<br />

para vivir en la <strong>es</strong><strong>fe</strong>ra invisible de<br />

la Verdad Atemporal.<br />

35


Y <strong>es</strong>toy libre de mí misma...<br />

del p<strong>es</strong>ar y del terror de <strong>es</strong>ta<br />

R<strong>es</strong>idencia Temporal.<br />

Alcanzando al código mismo de mis células,<br />

Él me liberó del Edén introduciendo en la médula de mi alma,<br />

la aniquilación de sus e<strong>fe</strong>ctos.<br />

La muerte y la tumba mi liberación, no mi final.<br />

Para creer una idea tan increíble<br />

tendré que creer que nec<strong>es</strong>ito una salida<br />

para mi ego impío y para <strong>es</strong>te<br />

Trágico Lugar llamado Tierra.<br />

Siempre y cuando prefiera “vivir y no morir<strong>”</strong><br />

permaneceré en vilo, atado a un d<strong>es</strong>tino en ciern<strong>es</strong><br />

con nudos de un dolor sin <strong>es</strong>peranza.<br />

Si me apego a “<strong>es</strong>ta vida<strong>”</strong> y creo<br />

que <strong>es</strong> mía, que <strong>es</strong> la mejor,<br />

rehuiré el ‘Regalo de la Muerte’y viviré,<br />

muerta a mi d<strong>es</strong>tino.<br />

La muerte <strong>es</strong> Su solución inteligente sin límit<strong>es</strong>.<br />

La muerte <strong>es</strong> final. La muerte <strong>es</strong> total.<br />

Así pu<strong>es</strong>, mediante mi muerte en Su muerte<br />

soy completamente libre.<br />

Intocable.<br />

Inconmovible.<br />

Por tanto, vivo como el que <strong>es</strong>tá muerto,<br />

d<strong>es</strong>pegada de mi antigua existencia,<br />

arrojando la cadena y el clavo que me anclaban<br />

al continuo e inevitable fracaso.<br />

36


Pero sólo como un niño puedo poseerlo.<br />

Si soy inteligente y seria,<br />

no permitiré que <strong>es</strong>a verdad me posea,<br />

exigiré que primero me convenzca y<br />

satisfaga mi famélica razón.<br />

Esperaré a que “suceda<strong>”</strong>, pero<br />

combatiré su dominio.<br />

No, nunca veré la prueba<br />

de mi muerte hasta que la crea por Su Afirmación.<br />

Por <strong>es</strong>a única razón.<br />

Lo dijo Él. En la medida en que creo en Él, veo que <strong>es</strong> cierto<br />

en mi experiencia viva de liberación<br />

de ‘mi’ y de ‘ti’...<br />

... de TODO.<br />

Muerte, <strong>es</strong>e horrible pavor <strong>es</strong> mi liberación.<br />

El amigo de mi <strong>es</strong>peranza,<br />

no el enemigo de mi supervivencia.<br />

Él dice que <strong>es</strong>toy muerta. Muerta pu<strong>es</strong>, <strong>es</strong>toy.<br />

¿Qué pasa con mi vivir?<br />

No importa, ignóralo.<br />

Estoy muerta.<br />

Lo dijo Él.<br />

37


NUEVO… TODO NUEVO<br />

No había <strong>es</strong>peranzas de reforma.<br />

Nada sobre lo que r<strong>es</strong>taurar.<br />

Este problema en torno a mi persona sólo podía<br />

r<strong>es</strong>olverse partiendo de cero... algo nuevo.<br />

Así que no me ponen un parche y me remiendan.<br />

La r<strong>es</strong>quebrajada y goteante vasija se<br />

tira a un lado... ¡<strong>es</strong> d<strong>es</strong>echada!<br />

Una nueva masa de arcilla sobre el torno<br />

y un ser —fr<strong>es</strong>co y nuevo— se hace girar<br />

y se moldea a Su Voluntad.<br />

Una creación con Su fulgor...<br />

sin mi limitación.<br />

Una sorpr<strong>es</strong>a, un deleite, una vida que me deleitaré en vivir.<br />

Una persona nueva, alguien que no conozco y que no reconocería<br />

pero que al tiempo me r<strong>es</strong>ulta familiar, un sueño perdido,<br />

una visión olvidada.<br />

Encajo en <strong>es</strong>ta creación y<br />

<strong>es</strong>te ser encaja en mí<br />

por una per<strong>fe</strong>cción de diseño,<br />

divino en su origen.<br />

Soy una ‘nueva’ creación.<br />

En hebreo ‘nuevo’ <strong>es</strong> una palabra que significa maravilla.<br />

Significa algo nuevo que jamás había existido.<br />

Pero mi <strong>fe</strong> puede <strong>es</strong>tar tan adherida al viejo andrajo<br />

que sólo creo en la “nueva persona<strong>”</strong> como<br />

un ideal imposible allá en la eternidad...<br />

“bueno, a lo mejor<strong>”</strong>.<br />

38


Pero mi Dios dice de mí que soy una nueva creación.<br />

Ahora.<br />

Así que <strong>es</strong>pero y observo maravillada que<br />

la libere a “ella<strong>”</strong> de mí, que<br />

oprimo y refreno a <strong>es</strong>a criatura extraña,<br />

<strong>es</strong>piritual en su <strong>es</strong>encia,<br />

verdadera ciudadana de una Cultura Di<strong>fe</strong>rente<br />

que <strong>es</strong> capaz de vivir en Otra Realidad<br />

mientras que aquí <strong>es</strong> normal.<br />

Esta ‘nueva’ persona no soy capaz de definir<br />

ni predecir... ni siquiera d<strong>es</strong>entrañar.<br />

El viejo Adán sólo conoce un surco<br />

de aburrida repetición.<br />

La nueva persona <strong>es</strong> un misterio que se d<strong>es</strong>pliega<br />

a través de un conocimiento de su Creador<br />

empapado en oración.<br />

Soy nueva. Ahora original cuando ant<strong>es</strong><br />

era igual que los otros:<br />

amadora de mí misma, autocomplaciente,<br />

adoradora de mí misma.<br />

Soy Su sueño delicioso, soñado<br />

ant<strong>es</strong> de que el mundo fu<strong>es</strong>e formado.<br />

Un sueño que ensucié pero que no pude malograr.<br />

Él fue quien sustentó Su idea de mí<br />

y nunca la dejó marchar.<br />

D<strong>es</strong>hechó al “viejo e in<strong>fe</strong>liz yo<strong>”</strong><br />

en la tumba purificadora que<br />

compartí con Él...<br />

39


“Con Cristo <strong>es</strong>toy juntamente crucificado,<br />

y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí...<br />

Y la vida que ahora vivo, la vivo en la <strong>fe</strong><br />

del Hijo de Dios, el cual me amó<br />

y se entregó a sí mismo por mí...<strong>”</strong><br />

Cristo se ha fundido con <strong>es</strong>ta<br />

vulgar cáscara, Su imagen original.<br />

Y por Su pr<strong>es</strong>encia EN mí y<br />

dominio SOBRE mí, alcanzo mi verdadero “yo<strong>”</strong>,<br />

una persona completa sólo a causa de Él<br />

porque d<strong>es</strong>aparece en Él.<br />

El misterio más grande, nunca asimilado por completo,<br />

únicamente se vive... por <strong>fe</strong>.<br />

Él dijo que soy nueva.<br />

Soy nueva.<br />

40


Hebreos 11:7,8,17<br />

FE ES OBEDIENCIA<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> obediencia. Es sencillo.<br />

No siempre <strong>es</strong> fácil pero <strong>es</strong> algo muy, muy sencillo.<br />

Noé oyó a Dios,<br />

“divinamente advertido de cosas nunca vistas ant<strong>es</strong><strong>”</strong>.<br />

Y empezó a moverse según lo que había oído.<br />

Nadie más lo oyó. Nadie confirmó nada.<br />

La <strong>fe</strong> se mueve según lo que oy<strong>es</strong>.<br />

Lo que <strong>es</strong> locura para otros,<br />

<strong>es</strong> del todo natural para ti...<br />

si cre<strong>es</strong> lo que has oído.<br />

Pero hasta que no te muev<strong>es</strong> en base a lo que has oído,<br />

no lo has creído.<br />

Abraham obedeció, ésa <strong>es</strong> su <strong>fe</strong><br />

tan ensalzada por la Biblia.<br />

Se le expone como ejemplo de <strong>fe</strong>.<br />

Todo cuanto hizo para obtener <strong>es</strong>e lugar fue <strong>es</strong>to:<br />

“Obedeció cuando le llamaron para salir...<strong>”</strong><br />

“Salió sin saber adonde iba.<strong>”</strong><br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> oír... sí…<br />

pero no has creído<br />

hasta que te has movido impulsado por lo que has oído.<br />

Para Dios no existe el “oír<strong>”</strong><br />

hasta que la acción de “ir<strong>”</strong> se ha iniciado.<br />

41


Josué creyó donde millon<strong>es</strong> no creyeron.<br />

Sencillamente aceptó lo que oyó<br />

y empezó a moverse...<br />

La voz de Dios para aquel que Él considera fiel <strong>es</strong> muy<br />

<strong>es</strong>pecífica. “Así tomarás Jericó.<strong>”</strong><br />

No era un plan de batalla ensayado ni conocido hasta entonc<strong>es</strong>.<br />

¿Dar vueltas a la ciudad siete vec<strong>es</strong> en silencio?<br />

¿Y d<strong>es</strong>pués gritar?<br />

Dios, Único Creador,<br />

<strong>es</strong> siempre original en Su <strong>es</strong>trategia.<br />

Y <strong>es</strong>a Originalidad <strong>es</strong> nu<strong>es</strong>tra dura prueba.<br />

Nunca ant<strong>es</strong> había llovido ni inundado...<br />

no había precedent<strong>es</strong> que sustentaran<br />

el mandato dado a Noé para construir.<br />

Fue el primer diluvio, el primer barco,<br />

la primera d<strong>es</strong>trucción de la tierra...<br />

y al final, el primer arco iris de prom<strong>es</strong>a.<br />

Noé se aventuró a una nueva dimensión<br />

del progr<strong>es</strong>o siempre fr<strong>es</strong>co de Dios.<br />

Con instruccion<strong>es</strong> explícitas,<br />

siguió fielmente cada detalle y<br />

“preparó un arca para salvar a su familia.<strong>”</strong><br />

Se movió.<br />

A p<strong>es</strong>ar de su lógica, ignorando a sus burlador<strong>es</strong>,<br />

se movió para construir, obedeciendo porque creyó<br />

lo que había oído.<br />

Noé obedeció para salvar la vida.<br />

42


¡Pero Abraham! Abraham obedeció para<br />

quitar la vida, la vida más preciosa... la de su hijo.<br />

El Dios que condenaba el sacrificio de niños<br />

contradijo Su propia vara de medir y<br />

exigió una obediencia –un d<strong>es</strong>vío muy extraño e inoportuno–<br />

que no tenía sentido ante las<br />

prom<strong>es</strong>as acerca de Isaac.<br />

La <strong>fe</strong>, la verdadera <strong>fe</strong>, obedece cuando Dios cambia<br />

Su rumbo y parece ir contra<br />

Su propósito anterior.<br />

Pero en la <strong>fe</strong> de su obediencia<br />

Abraham nunca abandonó la prom<strong>es</strong>a original<br />

ni siquiera al enfrentar la muerte de su cumplimiento:<br />

“concluyendo que Dios era poderoso para levantarlo,<br />

incluso de entre los muertos...<strong>”</strong><br />

¡Asombroso! Creía en el propósito original de Dios mientras<br />

blandía el cuchillo.<br />

Fe que se mueve, la <strong>fe</strong> real se mueve a la par del Dios<br />

que siempre <strong>es</strong>tá en movimiento.<br />

La <strong>fe</strong> vive por la Voz, por la Voz del Ahora<br />

y sólo por <strong>es</strong>a Inteligencia.<br />

La <strong>fe</strong> cree que Dios sabe mejor<br />

y que siempre hace lo correcto.<br />

En <strong>es</strong>a tierra –la tierra de la Naturaleza de Dios–<br />

la <strong>fe</strong> <strong>es</strong> acción...<br />

y no <strong>es</strong> Fe hasta que <strong>es</strong> acción.<br />

43


1) Todo versa sobre la <strong>fe</strong>.<br />

LA FE VIVE<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> el asunto <strong>es</strong>encial de la vida, el único negocio.<br />

Esta <strong>es</strong><strong>fe</strong>ra material <strong>es</strong>tá gobernada por <strong>fe</strong>, no por azar.<br />

No por la humanidad. No por el poder... sino por la <strong>fe</strong>.<br />

Fe en lo correcto o<br />

<strong>fe</strong> en lo incorrecto.<br />

De cualquiera de las formas, la <strong>fe</strong> perfila el mapa del futuro.<br />

Tu propia vida <strong>es</strong> un cuadro detallado<br />

de lo que cre<strong>es</strong>.<br />

Todas las cosas pasan atravi<strong>es</strong>an la puerta abierta por la <strong>fe</strong>.<br />

Es la única llave de la puerta de la provisión.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> todo cuanto hay... y todo cuanto nec<strong>es</strong>itas.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> la única crisis de la vida.<br />

La catástro<strong>fe</strong> no <strong>es</strong> la crisis. La crisis <strong>es</strong>,<br />

la pregunta <strong>es</strong>, ¿creo a Dios?<br />

Cuando Pedro <strong>es</strong>taba a poco de ser tentado para negar a su<br />

Señor, J<strong>es</strong>ús le dijo,<br />

“Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos<br />

como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu <strong>fe</strong> no falte.<strong>”</strong> 1<br />

J<strong>es</strong>ús no oró por fuerza, integridad, constancia.<br />

No oró por revelación, comprensión,<br />

sabiduría, ni siquiera por santidad.<br />

Oró simplemente... por <strong>fe</strong>. Sólo por <strong>fe</strong>.<br />

1 Lucas 22:31<br />

44


¿Me pregunto... será ésa la única oración que J<strong>es</strong>ús hace por<br />

nosotros porque <strong>es</strong> lo único que nec<strong>es</strong>itamos?<br />

Pedro negó a J<strong>es</strong>ús, tr<strong>es</strong> vec<strong>es</strong> y vehementemente,<br />

no porque no lo amase. Lo amaba.<br />

No porque no le siguiera.<br />

Siguió a J<strong>es</strong>ús... con radical abandono.<br />

Pedro cayó porque dejó de creer<br />

su propia revelación divina de<br />

que J<strong>es</strong>ús era el Hijo de Dios,<br />

Gobernante, Creador, Amo de todo.<br />

Y de que r<strong>es</strong>ucitaría de una muerte cruel<br />

a manos de una humanidad maligna.<br />

Pedro no falló. Su <strong>fe</strong> falló... así que Pedro falló.<br />

Vivirás por lo que cre<strong>es</strong>.<br />

Pued<strong>es</strong> ver lo que cre<strong>es</strong> por cómo viv<strong>es</strong>.<br />

Y vivirás y morirás dando vueltas en torno al<br />

radio de tus creencias.<br />

Er<strong>es</strong> prisionero de tus certezas...<br />

o er<strong>es</strong> liberado por ellas.<br />

Lo que consideras dentro de ti “cierto como la vida misma<strong>”</strong> se<br />

convierte en la frontera exterior de tu visión.<br />

Puede ser... cerca... o lejos.<br />

Enorme o minúsculo.<br />

Todo queda determinado por el dilema de la <strong>fe</strong>.<br />

El miedo <strong>es</strong> el relámpago cegador de tu incredulidad.<br />

Lo que tem<strong>es</strong> se convierte en el Trono de Poder<br />

sobre el que entronizas a tu dios.<br />

45


El miedo no <strong>es</strong> sólo miedo, humano y natural.<br />

El miedo <strong>es</strong> un naufragio de la <strong>fe</strong>.<br />

Los discípulos en mitad del mar temp<strong>es</strong>tuoso tuvieron miedo.<br />

J<strong>es</strong>ús no los reprendió por su pavor o por su cobardía,<br />

¡sino únicamente por tener muy poca <strong>fe</strong>!<br />

La crisis no era la temp<strong>es</strong>tad que se d<strong>es</strong>encadenó e inundó la<br />

barca.<br />

La crisis –y la prueba– r<strong>es</strong>idía en su<br />

<strong>fe</strong> de sí llegarían a alcanzar la otra orilla<br />

porque Aquel que era Dios lo había dicho así.<br />

“Pasemos al otro lado.<strong>”</strong><br />

2) Vivir por la <strong>fe</strong>.<br />

Habacuc vivió una crisis aterradora bajo la tiranía de los<br />

Caldeos.<br />

Pero ésa no era su verdadera crisis.<br />

Sus temblor<strong>es</strong> eran un interrogatorio al poder de su Dios.<br />

Su <strong>fe</strong> fue probada en el caldero de la miseria de la vida real.<br />

Cuando un Tirano de la Supremacía gobierna tu propia<br />

existencia... a cada paso que das, en tu calidad de vida,<br />

puede parecer que la cárcel en la que viv<strong>es</strong> <strong>es</strong> de acero macizo y<br />

que las llav<strong>es</strong> que te pueden liberar <strong>es</strong>tán en manos de uno que<br />

sólo d<strong>es</strong>ea tu mal<br />

y busca tu completa d<strong>es</strong>trucción<br />

<strong>es</strong>clavizándote.<br />

El problema aparente <strong>es</strong> la “persona<strong>”</strong> que gobierna,<br />

46


y la situación te hace perder los <strong>es</strong>tribos.<br />

Pero no, el apuro <strong>es</strong> un “Dios Bajo Juicio<strong>”</strong> encerrado en la sala<br />

del tribunal de tu recóndito corazón.<br />

DIOS <strong>es</strong> el acusado y tú el acusador.<br />

Er<strong>es</strong> el juez y er<strong>es</strong> el jurado.<br />

También er<strong>es</strong> el veredicto final.<br />

Cuando el Señor Dios r<strong>es</strong>pondió al temor de Habacuc...<br />

le dijo algo asombroso.<br />

“Mas el justo por su <strong>fe</strong> vivirá.<strong>”</strong><br />

Vivir por la <strong>fe</strong>. ¡VIVIR!<br />

¡Vivir <strong>es</strong> existir por el poder de la <strong>fe</strong>,<br />

obtener todas las cosas por la <strong>fe</strong>,<br />

cubrir todas las nec<strong>es</strong>idad<strong>es</strong> con la FE!<br />

¡La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> pu<strong>es</strong> el medio para alcanzarlo todo!<br />

¡Todo!<br />

Dios ha pu<strong>es</strong>to el reino de la humanidad bajo las<br />

limitacion<strong>es</strong> de la <strong>fe</strong> para que<br />

seamos limitados o liberados<br />

por lo que creemos acerca de Dios.<br />

Y Dios también se ha confinado a Sí Mismo<br />

a las fronteras de nu<strong>es</strong>tra <strong>fe</strong>.<br />

El principio que gobierna todo asunto de la vida <strong>es</strong> la <strong>fe</strong>.<br />

Y los justos funcionan en la vida...<br />

por una supervivencia práctica... por <strong>fe</strong> en Dios.<br />

¿Quién <strong>es</strong> justo? Nadie... El versículo dice “justo<strong>”</strong>, pero otra<br />

traducción <strong>es</strong> “recto<strong>”</strong>.<br />

Podría traducirse de <strong>es</strong>ta manera,<br />

47


<strong>“La</strong> persona moralmente recta vivirá por <strong>fe</strong><strong>”</strong>.<br />

Moralmente justa... no “divinamente santa, per<strong>fe</strong>cta.<strong>”</strong><br />

Moralmente justa <strong>es</strong> meramente <strong>es</strong>to:<br />

decirse la verdad al d<strong>es</strong>nudo a uno mismo y también a Dios.<br />

Esta <strong>es</strong> la rectitud que Habacuc poseyó.<br />

Sabía que <strong>es</strong>taba dudando de Dios en su mente.<br />

Y lo admitió.<br />

La <strong>fe</strong> de Habacuc en el poder del enemigo creció y<br />

su <strong>fe</strong> en la naturaleza de Dios disminuyó.<br />

Y fue lo bastante hon<strong>es</strong>to como para reconocer que<br />

había una acuciante nec<strong>es</strong>idad de oír a Dios<br />

poner las cosas en su sitio.<br />

Cuando Dios cont<strong>es</strong>tó a <strong>es</strong>te hombre, Habacuc transcendió a la<br />

crisis nacional,<br />

a la urgencia del momento,<br />

y se movió al reino de la Absoluta Confianza en<br />

el poder soberano de Dios y la justicia final.<br />

“Aunque la higuera no florezca,<br />

Ni en las vid<strong>es</strong> haya frutos...<br />

Con todo, yo me alegraré en Jehová.<strong>”</strong><br />

48


JESÚS VE NUESTRA FE<br />

J<strong>es</strong>ús no midió a las personas por su bondad,<br />

por su éxito, o por su nivel social.<br />

Sop<strong>es</strong>ó su <strong>fe</strong>. Sondeó la medida de <strong>fe</strong><br />

y sólo valoró <strong>es</strong>o.<br />

R<strong>es</strong>pondió, no a su conocimiento, ni a su pecado,<br />

sino a su <strong>fe</strong>.<br />

Alabó la gran <strong>fe</strong> y lamentó la poca <strong>fe</strong>.<br />

La madre Cananita 2 pareció oír un ‘no’<br />

de J<strong>es</strong>ús y se negó a que la ignorase.<br />

Él la provocó a <strong>fe</strong> y d<strong>es</strong>pués la ensalzó<br />

por su gran <strong>fe</strong>.<br />

Ella no cejó.<br />

Insistió, incluso exigió,<br />

y Él tomó aquello por <strong>fe</strong>, por gran <strong>fe</strong>.<br />

Se dice que “la <strong>fe</strong> <strong>es</strong> la moneda de cambio del reino<strong>”</strong>.<br />

Dios te da lo que cre<strong>es</strong> que te da,<br />

no lo que Él da.<br />

Sólo lo que cre<strong>es</strong> que te da.<br />

Depende de ti. No de Dios.<br />

A la mujer que tocó el borde de Su túnica 3 ,<br />

J<strong>es</strong>ús le dijo, “Hija, ten ánimo,<br />

tu <strong>fe</strong> te ha salvado.<strong>”</strong><br />

2 Mat 15:24–26<br />

3 Mat 9:22<br />

49


Tu FE –no solo Su poder,<br />

ni Su buena voluntad–<br />

TU <strong>fe</strong> te ha salvado.<br />

“Lo siguieron dos ciegos, dando voc<strong>es</strong> y diciendo 4 :<br />

¡Ten misericordia de nosotros, Hijo de David! 5 <strong>”</strong><br />

J<strong>es</strong>ús preguntó precisamente por sus creencias.<br />

“¿Creéis que soy capaz de hacer <strong>es</strong>to?<strong>”</strong><br />

Ellos dijeron: “Sí, Señor.<strong>”</strong><br />

Entonc<strong>es</strong> l<strong>es</strong> tocó los ojos, diciendo:<br />

“Conforme a vu<strong>es</strong>tra <strong>fe</strong> os sea hecho.<strong>”</strong><br />

Llevar tu nec<strong>es</strong>idad a J<strong>es</strong>ús <strong>es</strong> la <strong>fe</strong>.<br />

Simplemente al tomar <strong>es</strong>a dirección <strong>es</strong>tás mostrando<br />

que cre<strong>es</strong> que Él <strong>es</strong> la fuente original.<br />

Clamar a Él sin avergonzarte como el Ciego Bartimeo<br />

<strong>es</strong> una <strong>fe</strong> maravillosa que obtiene r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta.<br />

Creer que Él <strong>es</strong> CAPAZ <strong>es</strong> la buena <strong>fe</strong>.<br />

Esto provocó la r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta de J<strong>es</strong>ús al leproso.<br />

Creer que Él DEBE... como la mujer Cananita,<br />

¡<strong>es</strong>ta <strong>fe</strong> no puede ser anulada!<br />

Creer que Él ciertamente lo HARÁ... como el Centurión,<br />

¡<strong>es</strong>ta <strong>fe</strong> <strong>es</strong>tremece a J<strong>es</strong>ús!<br />

4 Mat 9:27<br />

5 Marc 5:28–34<br />

50


JESÚS VIVIÓ POR FE<br />

Aunque J<strong>es</strong>ús vio cómo se acercaba la negación de Pedro,<br />

tuvo <strong>fe</strong> para su r<strong>es</strong>tauración definitiva.<br />

Había visto lo que iba a suceder por la confidencia de Su Padre y<br />

había orado por la “victoria<strong>”</strong> de Pedro<br />

para animar a sus hermanos<br />

a raíz de su propio fracaso en la <strong>fe</strong>.<br />

“... y tú, una vez vuelto a Mí,<br />

confirma a tus hermanos.<strong>”</strong> 6<br />

J<strong>es</strong>ús durmió durante la tormenta,<br />

cuando arreció la urgencia de sus discípulos.<br />

Le atacaron por su dejadez,<br />

por dejarl<strong>es</strong> perecer. Creyeron en la tormenta,<br />

en la muerte, en la indi<strong>fe</strong>rencia de J<strong>es</strong>ús.<br />

Así pu<strong>es</strong>... no creyeron al Hijo de Dios.<br />

Pero Su Padre le había encaminado al otro lado<br />

de Galilea y J<strong>es</strong>ús no tuvo ninguna duda<br />

en cuanto a su llegada.<br />

Ninguna tormenta, por fuerte que fuera, lo llevó a una crisis que<br />

pudiera ahogar la directiva de Su Padre.<br />

Lo que Su Padre le encargó,<br />

la <strong>fe</strong> de J<strong>es</strong>ús aceptó.<br />

“...El cual por el gozo pu<strong>es</strong>to delante de él sufrió la cruz,<br />

menospreciando el oprobio.<strong>”</strong> 7<br />

6 Lucas 22:31<br />

7 Heb 12:2<br />

51


J<strong>es</strong>ús vio el D<strong>es</strong>tino y<br />

pudo soportar el viaje.<br />

52


1) Fe y Amor<br />

HALLANDO LA FE<br />

En muchos pasaj<strong>es</strong> de la Biblia, el Espíritu Santo vincula la <strong>fe</strong> al<br />

amor.<br />

“Lo único que cuenta <strong>es</strong> la <strong>fe</strong><br />

expr<strong>es</strong>ada a través del Amor.<strong>”</strong><br />

Gál 5:6 (NIV)<br />

El Gran Mandato del Señor J<strong>es</strong>ús<br />

–el mandamiento único, r<strong>es</strong>umido y <strong>es</strong>encial–<br />

<strong>es</strong>... el Amor.<br />

La Ley del Antiguo T<strong>es</strong>tamento fue satis<strong>fe</strong>cha en J<strong>es</strong>ús.<br />

Pero Él nos dejó la Ley de la Corte Real,<br />

el Sencillo (pero imposible) Mandamiento de Amar.<br />

En <strong>es</strong>a obediencia la Fe crece. ¿D<strong>es</strong>eas incrementar tu <strong>fe</strong>?<br />

Pide Amor, no amor humano,<br />

sino Amor Divino que inunde tu corazón.<br />

Amor <strong>fe</strong>rviente.<br />

Amor incondicional.<br />

Sin el Amor de Dios, la <strong>fe</strong> –aún siendo grande– pierde su valor<br />

eterno.<br />

“Si tuvi<strong>es</strong>e toda la <strong>fe</strong>, de tal manera que trasladase los mont<strong>es</strong>, y<br />

no tengo amor, nada soy.<strong>”</strong> 1 Cor. 13:2b<br />

Nada soy...<br />

53


La Biblia vincula la <strong>fe</strong> al amor, pero<br />

nosotros aparcamos la <strong>fe</strong> por un lado<br />

y hacemos de ella la última meta.<br />

¿Por qué?<br />

Porque anhelamos poder.<br />

Vemos la <strong>fe</strong> como poder.<br />

La humanidad quiere “mover montañas<strong>”</strong>,<br />

y por medio de <strong>es</strong>o, ¡llegar a ser Alguien!<br />

Pero con la <strong>es</strong>pectacular <strong>fe</strong> “mueve-montañas<strong>”</strong>,<br />

ausente el Amor, en vez de “Alguien<strong>”</strong> soy “Nada<strong>”</strong>.<br />

.<br />

Nu<strong>es</strong>tro Dios de Amor Apasionado valora el Amor<br />

por encima del r<strong>es</strong>to de certezas <strong>es</strong>piritual<strong>es</strong>.<br />

Incluso sobre la <strong>fe</strong>.<br />

Nu<strong>es</strong>tra <strong>es</strong>cala de valor<strong>es</strong> ha de ser la misma.<br />

“Y ahora permanecen la <strong>fe</strong>, la <strong>es</strong>peranza y el amor, <strong>es</strong>tos tr<strong>es</strong>;<br />

pero el mayor de ellos <strong>es</strong> el amor.<strong>”</strong><br />

1 Cor. 13:13<br />

A causa de la exaltación de nu<strong>es</strong>tro ego,<br />

la <strong>fe</strong> no puede operar<br />

sin el Amor de Abba Padre.<br />

La Fe que agrada a Dios tiene al Amor como meta.<br />

El Amor genera Fe…<br />

y hace brotar la Humildad que conlleva su Significado.<br />

El Amor produce un Mayordomo de la <strong>fe</strong> en vez de<br />

un perito religioso.<br />

Fe sin Amor <strong>es</strong> <strong>es</strong>tímulo del Orgullo.<br />

Esa <strong>fe</strong> agrada al hombre.<br />

54


El amor agrada a Dios.<br />

Y el Amor conjuntamente con la Fe <strong>es</strong><br />

la satisfacción de Su Plenitud.<br />

La oración que pide Amor obtiene Fe.<br />

La <strong>es</strong>encia del Amor <strong>es</strong> creer<br />

en el Amor de Dios que Todo lo Cubre.<br />

“El conocimiento envanece, pero el amor edifica.<strong>”</strong><br />

1 Cor. 8:1<br />

2) La voz<br />

Lectura: Mateo 13; Lucas 8:11-18; Juan 15<br />

Así pu<strong>es</strong>, la <strong>fe</strong> <strong>es</strong> por el oír, y el oír por la palabra de Cristo.<br />

Romanos 10:17<br />

La FE viene por oír... la Voz personal de Dios.<br />

La humanidad debe vivir por “toda palabra que<br />

sale de la boca de Dios.<strong>”</strong> (Mat. 4:4)<br />

¡Vivir por <strong>fe</strong> <strong>es</strong> vivir oyendo!<br />

Amarrando a la Voz de Dios todo los sinsentidos de la vida<br />

sin otra solución aparte de Oír<br />

las palabras de Su boca.<br />

La <strong>fe</strong> no se obtiene por el mero <strong>es</strong>tudio de la Escritura,<br />

sino al <strong>es</strong>cuchar al Autor de la Escritura<br />

dirigirla hacia ti de un modo personal.<br />

La “Fe Auténtica<strong>”</strong> ha de <strong>es</strong>cuchar de la boca de Dios.<br />

Y <strong>es</strong>o requiere buscar Su rostro.<br />

55


J<strong>es</strong>ús vivió por la Voz de Dios, sólo por Su Voz<br />

sin otro consejo ni remedio para los mal<strong>es</strong>.<br />

¡Y por <strong>es</strong>a Voz <strong>es</strong>tuvo preparado para<br />

r<strong>es</strong>ponder a Su Mortal Enemigo<br />

e inutilizarle<br />

en la prueba del d<strong>es</strong>ierto!<br />

Cuando Eva dejó de <strong>es</strong>cuchar a su Creador,<br />

<strong>es</strong>cuchó a Su enemigo.<br />

Somos oyent<strong>es</strong>. Vivimos <strong>es</strong>cuchando.<br />

La pregunta no <strong>es</strong> “¿cómo <strong>es</strong>cuchar?<strong>”</strong><br />

Sabemos <strong>es</strong>cuchar.<br />

Todo sabemos hacerlo per<strong>fe</strong>ctamente.<br />

La pregunta <strong>es</strong>: ¿a quién <strong>es</strong>cuchas?<br />

Sólo hay tr<strong>es</strong> opcion<strong>es</strong>.<br />

La humanidad nunca deja de anhelar <strong>es</strong>cuchar de otro reino,<br />

<strong>es</strong>e reino del <strong>es</strong>píritu.<br />

La Voz del Mal habla como si fuera tu propio pensamiento,<br />

ora exalta ora condena... y ambos son mentira.<br />

El d<strong>es</strong>astre se proyecta d<strong>es</strong>de <strong>es</strong>e “habla interior<strong>”</strong><br />

En cambio Dios habla de cosas raras,<br />

ajenas a nu<strong>es</strong>tra familiar degradación.<br />

Él sencillamanete comparte la Más Absoluta Verdad…<br />

y el Bien Futuro.<br />

La Voz de Dios <strong>es</strong>tá viva. ¡Crea, forma lo que dice!<br />

Las Palabras transportan la Vida de Aquel que las pronuncia.<br />

56


Oír <strong>es</strong> vivir y ser “creado<strong>”</strong> según la idea misma de la Voz.<br />

Su Voz imparte la <strong>fe</strong> para Su propio cumplimiento.<br />

Así pu<strong>es</strong>... oír en lo profundo, ¡Oír <strong>es</strong> Creer!<br />

La Palabra de Dios <strong>es</strong> una semilla, no un pensamiento.<br />

No una idea, un principio o una noción. Estos <strong>es</strong>tán muertos.<br />

Son comida para cebar el cerebro,<br />

carecen de nutrient<strong>es</strong> para el ser interior.<br />

Sus palabras son de una naturaleza y origen por completo<br />

di<strong>fe</strong>rente al nu<strong>es</strong>tro. Son Verdad.<br />

Son Realidad, la Única Realidad. ¡La ÚNICA REALIDAD!<br />

Sus palabras son ciertas... absolutas... impenetrabl<strong>es</strong>.<br />

Nu<strong>es</strong>tras palabras son tenu<strong>es</strong>... pueden ser verdad, o pueden no<br />

ser verdad.<br />

Sus pensamientos son Retratos Vivient<strong>es</strong><br />

–no son imaginacion<strong>es</strong>–, y cuando se pronuncian o se ven,<br />

por el misterio de Su poder que mora en el interior de Sus<br />

Palabras, generan Vida reproductiva.<br />

La humanidad produce pensamientos muertos<br />

que se sustancian en necia charla.<br />

De todo el diluvio de palabras <strong>es</strong>cupidas por el <strong>fe</strong>bril “pensar<strong>”</strong><br />

que se derrama sobre la tierra cada día,<br />

sólo la voz de Dios lleva en sí Vida.<br />

La Semilla Divina de Sus Quietas Palabras <strong>es</strong> un diminuto grano<br />

que alberga una Explosión de Vida.<br />

Alimento para el corazón con Inconmensurabl<strong>es</strong> Indicios de<br />

Vida.<br />

57


Él habla al piadoso y al impío.<br />

Él proclama Sus Palabras en una<br />

ofrenda constante de Exquisitos Pensamientos.<br />

Sus Palabras son abundant<strong>es</strong> por la generosidad<br />

del Corazón de Su Padre.<br />

Es “Maravilloso Consejero<strong>”</strong>.<br />

No hay problemas con Dios. Él habla.<br />

Él <strong>es</strong> el Granjero que <strong>es</strong>parce Su Semilla preciosa.<br />

Mira una semilla y verás una mota insignificante.<br />

Pero comprender la maravilla de la semilla implica ver su<br />

fruto interminable.<br />

Una semilla que produce semillas para que salgan más<br />

semillas... para siempre.<br />

La semilla debe tener su ambiente.<br />

El potencial de la semilla<br />

depende de su hogar.<br />

Sobre el <strong>es</strong>tante, sin plantar, queda inactiva.<br />

En arcilla dura se muere por el sol,<br />

y repr<strong>es</strong>enta el corazón endurecido.<br />

Así, <strong>es</strong>a semilla <strong>es</strong> alimento para los pájaros del aire,<br />

símbolo de lo demoníaco.<br />

La posibilidad de la semilla depende totalmente del suelo.<br />

Vida y muerte se subordinan a la condición del suelo.<br />

58


Y <strong>es</strong> ASUNTO MÍO acondicionarlo.<br />

La piedra de mi naturaleza pecaminosa debe ser extraída.<br />

Las cizañas de mis pecados han de ser d<strong>es</strong>arraigadas.<br />

Tiene que haber hon<strong>es</strong>tidad para reconocer<br />

la verdad en lo secreto del corazón.<br />

Cuando la Escritura se vuelve Palabra en tu vida por Su Voz<br />

Personal, no apart<strong>es</strong> la vista.<br />

Deja que la Palabra te posea, te tome, entre en ti.<br />

Y cuando la Semilla de Su Voz se planta en tu <strong>es</strong>píritu,<br />

enseguida encuentra lugar apropiado en las tinieblas de tu<br />

recóndito corazón donde liberarse a sí misma y encaminarse<br />

hacia una vida<br />

del todo nueva.<br />

Dada la calidad de su Origen y Su Poder,<br />

el agua de la Escritura<br />

y la paciencia del granjero,<br />

una vez enterrada en oración<br />

<strong>es</strong>a “Palabra/Semilla<strong>”</strong> <strong>es</strong> liberada para<br />

poder d<strong>es</strong>cargar su Energía Creadora y<br />

“llevar fruto y producir, algunas al ciento por uno,<br />

otras al s<strong>es</strong>enta, otras al treinta<strong>”</strong>.<br />

¿Er<strong>es</strong> tierra fértil?<br />

¿Estás preñado de Su voz?<br />

¿Er<strong>es</strong> jardín plantado?<br />

¿Estás lleno de semillas de prom<strong>es</strong>a,<br />

nutrido por el riego diario de la Palabra?<br />

Entonc<strong>es</strong> la <strong>fe</strong> crecerá con tanta facilidad y tan milagrosamente<br />

como el fruto que sencillamente aparece en la vid sana.<br />

59


SEMILLAS DE MOSTAZA Y SICÓMOROS<br />

Cuando J<strong>es</strong>ús habló de la Fe, la semilla de mostaza<br />

fue Su símbolo, “la más pequeña de las semillas.<strong>”</strong><br />

Sus discípulos oyeron entonc<strong>es</strong> a J<strong>es</strong>ús decir que la voz de Dios<br />

<strong>es</strong> una semilla, <strong>es</strong>condida en el interior, poder de Vida y<br />

Reproducción, “algunas produjeron al treinta, al s<strong>es</strong>enta, y otras<br />

al ciento por uno.<strong>”</strong><br />

Mateo 13.<br />

La semilla de mostaza, símbolo de la Palabra Viva impartida en<br />

el corazón de aquel que <strong>es</strong>cucha,<br />

lleva en sí misma<br />

la <strong>fe</strong> de Dios Mismo,<br />

traspasando la incapacidad humana para creer.<br />

La Fe <strong>es</strong> una Semilla sembrada, una partícula de Vida Cel<strong>es</strong>tial<br />

preparada para echar raíc<strong>es</strong> y producir en la<br />

oscuridad del suelo de un corazón limpio.<br />

(Lucas 8)<br />

La Fe no <strong>es</strong> la exaltación de un hecho <strong>es</strong>cogido por lo humano<br />

que se lanza a Dios para retorcer Su brazo de acción.<br />

Esta Semilla proviene de una Es<strong>fe</strong>ra di<strong>fe</strong>rente,<br />

muy superior porque <strong>es</strong> Vida,<br />

no mero pensamiento.<br />

La Semilla de la Voz de Dios <strong>es</strong> derramada sobre nosotros cada<br />

día por la abundancia de Su generosidad.<br />

60


Dios se goza en hablar a Su creación, y por medio de<br />

Su voz impartir el Potencial Vivo<br />

de una partícula que lleva en su interior<br />

una dinámica, una explosión de fruto.<br />

Todo cuanto se requiere para tener <strong>fe</strong> <strong>es</strong><br />

un Oído Abierto mediante un Corazón Rendido,<br />

arado y rastrillado,<br />

no distraído por el d<strong>es</strong>eo lascivo de información mental.<br />

María Oyó<br />

La Fe <strong>es</strong> impartida por la Voz de Dios al<br />

creyente solitario.<br />

Oír <strong>es</strong> obtener a Dios.<br />

<strong>“La</strong> Fe viene por el oír y el oír por la Palabra (la voz) de Dios.<strong>”</strong><br />

Esa Palabra de la voz personal de Dios <strong>es</strong> única<br />

porque <strong>es</strong> “embriónica<strong>”</strong>, no meramente “informativa<strong>”</strong>.<br />

Es una semilla de reproducción Divina,<br />

capacitada para su propio cumplimiento.<br />

María <strong>es</strong>cuchó al ángel<br />

y sabiamente buscó entender<br />

aquellas Palabras Divinas.<br />

“Para Dios nada <strong>es</strong> imposible y<br />

ninguna palabra de Dios <strong>es</strong> sin poder o<br />

imposible de cumplir<strong>”</strong>.<br />

Lucas 2:37<br />

61


La Explicación Divina le dio<br />

un entendimiento sobrenatural.<br />

Su obediencia no se basó en deducción humana.<br />

Al conocer los propósitos de Dios, Su camino,<br />

se entregó a sí misma, d<strong>es</strong>tino y futuro,<br />

para ser vencida por la Semilla de Dios,<br />

la Palabra personal que Dios le dio.<br />

Entonc<strong>es</strong> Maria dijo, “He aquí la sierva del Señor. Hágase<br />

conmigo según tu palabra.<strong>”</strong><br />

Una profunda recepción de la Palabra...<br />

ofreciéndose a sí misma para<br />

quedarse encinta del Hijo de Dios.<br />

Así como el <strong>es</strong>perma lleva en sí la vida del padre,<br />

la “Semilla-Palabra<strong>”</strong> lleva interiormente<br />

la Vida Infinitésima del Padre Eterno.<br />

Cuando Él habla, Su vida <strong>es</strong>tá en Sus Palabras,<br />

Vida Reproductora. “Vida-Dios.<strong>”</strong><br />

Y para nacer, la semilla contiene,<br />

además de la Vida,<br />

la <strong>fe</strong> de Dios Mismo.<br />

62


Moviendo montañas y árbol<strong>es</strong><br />

Lucas 17:6 Si tuviérais <strong>fe</strong> como un grano de mostaza, podríais<br />

decir a <strong>es</strong>te sicómoro: D<strong>es</strong>arráigate y plántate en el mar; y os<br />

obedecería.<br />

Mateo 17:20 J<strong>es</strong>ús l<strong>es</strong> dijo: Por vu<strong>es</strong>tra poca <strong>fe</strong>; porque de<br />

cierto os digo, que si tuviéreis <strong>fe</strong> como un grano de mostaza,<br />

diréis a <strong>es</strong>te monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os<br />

será imposible.<br />

Si tuviéreis <strong>fe</strong> (que vive) como un grano de mostaza.<br />

(Énfasis mío)<br />

J<strong>es</strong>ús igualó la <strong>fe</strong> a una semilla de mostaza.<br />

La Fe debe ser una Semilla, no una opinión.<br />

La Fe <strong>es</strong> <strong>es</strong>tar preñado de la Semilla<br />

de la Voz Creativa de Dios.<br />

“Sea... y fue.<strong>”</strong><br />

La Fe ha de mover montañas y d<strong>es</strong>arraigar árbol<strong>es</strong>.<br />

Las “montañas<strong>”</strong> simbolizan aquí al<br />

hombre de polvo engrandeciéndose a lo sumo<br />

con toneladas de sucio ego.<br />

La montaña <strong>es</strong> orgullo, oscurece a Dios<br />

y toma Su lugar por pr<strong>es</strong>unción.<br />

Los sicómoros son un símbolo de la guerra<br />

contra los enemigos de Dios. (1 Crónicas 14:15.)<br />

Árbol<strong>es</strong> cuyas raíc<strong>es</strong> se enredan en nu<strong>es</strong>tra humanidad terrenal,<br />

obstáculos malignos que cortan el paso<br />

a la expansión de Dios.<br />

63


El propósito de La Fe <strong>es</strong> mover<br />

las montañas del orgullo humano y<br />

d<strong>es</strong>arraigar los árbol<strong>es</strong> de inter<strong>fe</strong>rencia maligna.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> como una semilla de mostaza,<br />

por la que Dios concede vida y poder.<br />

La Semilla de su Voz Creadora.<br />

Palabra en la que habitar<br />

Si permanecéis en mi y mis palabras permanecen<br />

en vosotros, pedid todo lo que queráis y os será hecho.<br />

Juan 15:7.<br />

La oración <strong>es</strong> cont<strong>es</strong>tada, el d<strong>es</strong>eo <strong>es</strong> cumplido,<br />

cuando la Palabra de la Voz de Dios,<br />

–<strong>es</strong>pecifica y secreta para aquel que <strong>es</strong>cucha en silencio–<br />

se alimenta y cuida<br />

como una maravilla preciosa.<br />

Bajo <strong>es</strong>ta evocación de <strong>fe</strong>,<br />

la Semilla At<strong>es</strong>orada puede germinar.<br />

Nada puede detenerla.<br />

64


Árbol<strong>es</strong> en los que anidar<br />

La Fe <strong>es</strong> una Impartición Divina<br />

para el engrandecimiento de Dios,<br />

no para la promoción del “yo<strong>”</strong>.<br />

J<strong>es</strong>ús fue tentado en el d<strong>es</strong>ierto<br />

para utilizar la Palabra y el Poder de Dios<br />

para el engrandecimiento de Su ego humano.<br />

“Enséñame tu magia<strong>”</strong>... convierte las piedras en pan<strong>es</strong>.<br />

“Controla a la humanidad<strong>”</strong>... gobierna reinos.<br />

“Fuerza a Dios para que obre<strong>”</strong>... salta del mirador.<br />

Control... de la materia, del hombre y del Hacedor,<br />

todo para tu propia preeminencia.<br />

Eso no <strong>es</strong> Fe<br />

sino perversión.<br />

Dios permite que existan las dos en Su reino.<br />

La Palabra de Dios habla y nos pr<strong>es</strong>enta<br />

una opción... y una prueba.<br />

En otras tr<strong>es</strong> ocasion<strong>es</strong>, J<strong>es</strong>ús mencionó<br />

la semilla de mostaza de la <strong>fe</strong><br />

con una aplicación completamente di<strong>fe</strong>rente.<br />

Mateo 13:31<br />

El reino de los cielos <strong>es</strong> como un grano de mostaza que un<br />

hombre sembró en su campo. Aunque <strong>es</strong> la más pequeña de<br />

todas las semillas, cuando crece <strong>es</strong> la más grande de las<br />

hortalizas y se convierte en árbol de modo que vienen las av<strong>es</strong> y<br />

anidan en sus ramas.<br />

65


Marcos 4:30<br />

¿Con qué vamos a comparar el reino de Dios?<br />

¿Qué parábola podemos usar para d<strong>es</strong>cribirlo?<br />

Es como un grano de mostaza: cuando se siembra en la tierra,<br />

<strong>es</strong> la semilla más pequeña que hay. Pero una vez sembrada<br />

crece hasta convertirse en la más grande de las hortalizas y<br />

echa ramas tan grand<strong>es</strong> que las av<strong>es</strong> pueden anidar bajo su<br />

sombra.<br />

Lucas 13:18<br />

¿A qué se parece el reino de Dios?<br />

¿Con qué voy a compararlo?<br />

Se parece a un grano de mostaza que un hombre sembró en su<br />

huerto. Creció hasta convertirse en un árbol, y las av<strong>es</strong><br />

anidaron en sus ramas.<br />

La Semilla Divina no <strong>es</strong>tá diseñada para ser plantada<br />

en la tierra con el fin de que eche raíc<strong>es</strong> que ensanchen el<br />

mundo.<br />

Su fin <strong>es</strong> cambiar la<br />

faz y la geografía de la humanidad,<br />

conquistar lo invadido por el enemigo.<br />

Su Palabra Hablada <strong>es</strong> para ser proclamada, no enterrada.<br />

Extendida para Él, no acaparada para nu<strong>es</strong>tro ego.<br />

“Habla a la montaña.<strong>”</strong><br />

“Habla al sicómoro.<strong>”</strong><br />

¿Pued<strong>es</strong> ver la di<strong>fe</strong>rencia entre<br />

sembrar en la tierra<br />

y mover la tierra?<br />

Su Palabra <strong>es</strong> para el engrandecimiento de Su reino,<br />

no el mío...<br />

66


Estas tr<strong>es</strong> semillas de mostaza fueron plantadas<br />

por ambición personal, usando<br />

a Dios para construir un reino humano,<br />

suntuoso y enraizado profundamente en la<br />

tierra de la vana ambición.<br />

Los árbol<strong>es</strong> de raíc<strong>es</strong> gigant<strong>es</strong>cas<br />

son “amor al mundo<strong>”</strong><br />

en vez de al cielo.<br />

Somos peregrinos, no r<strong>es</strong>ident<strong>es</strong>.<br />

Somos trigo que <strong>es</strong> segado continuamente,<br />

No árbol<strong>es</strong> perenn<strong>es</strong> de enorme altura,<br />

Sino trigo común, cortado y servido para<br />

saciar el hambre de Dios que tiene el mundo.<br />

J<strong>es</strong>ús nos habló de “las av<strong>es</strong><strong>”</strong>.<br />

Los pájaros son “el maligno<strong>”</strong>.<br />

(Mateo 13:19)<br />

A vec<strong>es</strong> la generosa Voz de Dios se convierte<br />

en promoción de lo propio, da abrigo<br />

al “maligno<strong>”</strong>, que anida<br />

doquiera que reina el ego.<br />

Esta <strong>es</strong> su maligna naturaleza: ambición.<br />

La Palabra que Dios nos habla tan libremente,<br />

puede ser usada en<br />

dos <strong>es</strong><strong>fe</strong>ras <strong>es</strong>piritual<strong>es</strong> opu<strong>es</strong>tas.<br />

Una <strong>es</strong> para remover las montañas y árbol<strong>es</strong><br />

que obstaculizan el camino de Dios.<br />

La otra construye monumentos que ensalzan al ego,<br />

árbol<strong>es</strong> d<strong>es</strong>comunal<strong>es</strong> para excluir al Señor<br />

67


y dar cabida al que le odia.<br />

En el árbol grande sembrado sobre tierra sucia,<br />

el maligno puede ocultarse en la oscuridad de<br />

su sombra y en las ramas de su religiosidad.<br />

Dios, por Su don de libertad,<br />

permite que hagas con Su Palabra<br />

lo que quieras.<br />

La Palabra que lleva fruto <strong>es</strong>tá diseñada para sembrarse en el<br />

corazón <strong>es</strong>piritual que <strong>es</strong> limpio y hon<strong>es</strong>to<br />

y luego lanzarse al aire proclamándola.<br />

La Palabra no <strong>es</strong>tá diseñada para ganar un<br />

impr<strong>es</strong>ionante trono para el yo<br />

enterrada bajo lo terrenal.<br />

La Abundancia no <strong>es</strong> en sí misma algo malo.<br />

Pero, ¿para quién <strong>es</strong> <strong>es</strong>a abundancia?<br />

¿Cuál <strong>es</strong> su propósito?<br />

¿Control o dominio Divino?<br />

¿Tú Ego o Dios?<br />

Dios permite que Su Preciosa Semilla sea entregada a todos.<br />

La crisis <strong>es</strong> qué hacemos con ella.<br />

Los árbol<strong>es</strong> y la madera repr<strong>es</strong>entan la humanidad común.<br />

Él fue clavado en un Madero, colgado para morir,<br />

empalado sobre nu<strong>es</strong>tra imparable decadencia.<br />

68


Cuando somos separados de las raíc<strong>es</strong> del mundo<br />

y somos muertos por haber sido cortados,<br />

entonc<strong>es</strong> podemos ser transformados en un arca<br />

de la Pr<strong>es</strong>encia de Su Tabernáculo.<br />

Él fue Carpintero, e hizo uso de madera muerta,<br />

vaciando y allanando<br />

una humanidad para ser cuna de Su Divinidad.<br />

Pero, por favor, no un árbol arraigado en tinieblas profundas,<br />

ocultamente a<strong>fe</strong>rrado a lo que <strong>es</strong> maldito.<br />

69


EL BENDITO POBRE<br />

Le doy mi nec<strong>es</strong>idad a cada flirteo del viento,<br />

pero sólo suple <strong>es</strong>te vacío con aire hueco.<br />

Le doy mi d<strong>es</strong><strong>es</strong>peración al<br />

charlatán o al vagabundo,<br />

y veo cómo manchan y pisotean Su nombre.<br />

Le doy mi nec<strong>es</strong>idad a mí ‘yo’<br />

y contorsiono mi alma<br />

para que se consuele a sí misma.<br />

Mi nec<strong>es</strong>idad <strong>es</strong> una vulgar meretriz.<br />

No hace di<strong>fe</strong>rencias.<br />

Estas nec<strong>es</strong>idad<strong>es</strong> mías que voy aireando...<br />

Comodidad, entregué mi nec<strong>es</strong>idad a una madre falsa.<br />

Conocimiento, lo entregué a un ideal atrofiado.<br />

Amor, lo entregué a un perro hambriento cualquiera.<br />

Nec<strong>es</strong>ito lo que no comprendo y no voy a admitir,<br />

así que arrojo mi pobreza<br />

sobre cualquier altar que me supla algo.<br />

La ambición, el camino que toma la nec<strong>es</strong>idad para justificarse.<br />

La codicia, el hambre de un alma cavernosa.<br />

El odio, el explosivo concentrado por un dolor de amor.<br />

La vergüenza de mi carencia tienta a mi orgullo a mentir.<br />

La d<strong>es</strong>nudez del d<strong>es</strong>amparo me hace<br />

rev<strong>es</strong>tir mis hu<strong>es</strong>os de palabras grandilocuent<strong>es</strong>.<br />

Yo soy la nec<strong>es</strong>idad. Todo en mí <strong>es</strong> nec<strong>es</strong>idad.<br />

Incluso mi generosidad <strong>es</strong> mi nec<strong>es</strong>idad... de dar.<br />

No puedo saber, no puedo producir.<br />

No puedo amar, ni durar, ni ser.<br />

70


Pero ésas son revelacion<strong>es</strong> antiguas.<br />

Ya no me asusto... son hechos familiar<strong>es</strong><br />

de una insuficiencia adquirida al nacer.<br />

No hay nada que yo NO nec<strong>es</strong>ite.<br />

Nombra cualquier cosa y habrás nombrado mi nec<strong>es</strong>idad.<br />

Arrostrar la cara <strong>es</strong>pantosa de la nec<strong>es</strong>idad<br />

<strong>es</strong> dar muerte al orgullo,<br />

<strong>es</strong>e monstruo autodidacta.<br />

Y aquellos que rechazan la nec<strong>es</strong>idad, no la tendrán.<br />

La nec<strong>es</strong>idad abyecta <strong>es</strong> una forma de vivir,<br />

no un lugar para visitar alguna vez.<br />

La pobreza que d<strong>es</strong>precio <strong>es</strong> el t<strong>es</strong>oro<br />

con el que puedo comerciar.<br />

¡La insuficiencia <strong>es</strong> gloria! ¡Gozo!<br />

El regalo divino de la oportunidad.<br />

Mi pobreza <strong>es</strong> mi brillante perla.<br />

Nec<strong>es</strong>idad, la <strong>es</strong>calera directa a Dios.<br />

El evangelio sólo viene para el pobre... como yo.<br />

Mi nec<strong>es</strong>idad <strong>es</strong> la energía que me mueve...<br />

la motivación de buscar,<br />

la fuerza de la acción,<br />

¡la fuente de la creatividad!<br />

Tendrás tanto como <strong>es</strong>tés dispu<strong>es</strong>to a nec<strong>es</strong>itar.<br />

Le <strong>es</strong>peras a Él en la medida en que no tien<strong>es</strong> otra fuente.<br />

Y cuando <strong>es</strong>peras... Él viene.<br />

¡Oh, gloria! Él cont<strong>es</strong>ta a la nec<strong>es</strong>idad.<br />

Él visita a la pobreza. Sólo a ella... a nadie más.<br />

71


J<strong>es</strong>ús, el nombre de los ricos cumplimientos,<br />

Él mismo, el banquete de abundante provisión.<br />

Él, el que brinda la vida mejor,<br />

El Per<strong>fe</strong>cto Proveedor de la insuficiencia humana.<br />

J<strong>es</strong>ús, J<strong>es</strong>ús. Sólo Él.<br />

Mi nec<strong>es</strong>idad –cruda y abierta médula–<br />

le pertenece a Él... no a mí,<br />

no a ti,<br />

sino a Él... exclusivamente.<br />

Donde son satis<strong>fe</strong>chas mis vorac<strong>es</strong> nec<strong>es</strong>idad<strong>es</strong>,<br />

allí situaré una <strong>fe</strong> por siempre leal.<br />

La <strong>fe</strong> no <strong>es</strong> algo que adquier<strong>es</strong> como una ganancia.<br />

Es a lo que er<strong>es</strong> reducido.<br />

La <strong>fe</strong> d<strong>es</strong>nuda en Dios Padre <strong>es</strong> una humillación,<br />

la última cosa que consentirás, y<br />

sólo cuando<br />

todas las rocas se hayan d<strong>es</strong>menuzado...<br />

como el polvo.<br />

Reúno las nec<strong>es</strong>idad<strong>es</strong> incon<strong>fe</strong>sabl<strong>es</strong><br />

que he sembrado, ya sin raíc<strong>es</strong>, en<br />

tierra extraña,<br />

y las llevo a Tu trono.<br />

No las pongo a Tus Pi<strong>es</strong>,<br />

Ni las pongo en Tus Manos.<br />

Las planto en Tu Expléndido Corazón<br />

para que arraiguen allí, donde sobreabunda riqueza<br />

para cada uno de mis proceder<strong>es</strong>.<br />

Copyright © 1999 Martha Blaney Kilpatrick<br />

72


II<br />

LOS RELATOS<br />

DE LOS ASNOS<br />

La Ley de Dios para los Asnos<br />

D<strong>es</strong>de el momento en que el Señor Dios le entregó a Moisés los<br />

Diez Mandamientos, también <strong>es</strong>tableció ley<strong>es</strong> <strong>es</strong>pecíficas para<br />

que Israel las siguiera, y pronunció una extraña ordenanza sobre<br />

los asnos:<br />

Ex 13:13 Mas todo primogénito de asno redimirás con un<br />

cordero; y si no lo redimier<strong>es</strong>, quebrarás su cerviz.<br />

El asno <strong>es</strong>taba en una categoría ditinta al r<strong>es</strong>to de animal<strong>es</strong>. Tenía<br />

que ser redimido con sangre, ¡y sangre de cordero! Para tener un<br />

asno tenías que sacrificar un cordero. Esta era la <strong>es</strong>pecífica ley de<br />

Dios.<br />

No había ningún otro animal que tuviera que ser así redimido con<br />

sangre.<br />

Era la ley de Dios.<br />

Num. 18:17 Mas el primogénito de vaca, el primogénito de<br />

oveja y el primogénito de cabra, no redimirás; santificados<br />

son; la sangre de ellos rociarás sobre el altar, y quemarás la<br />

grosura de ellos, ofrenda encendida en olor grato a Jehová.<br />

Ovejas y cabras se usaban en sacrificios para Dios y por tanto se<br />

apartaban para Su servicio. Apartado significaba “santo<strong>”</strong>.<br />

Sólo el asno tenía que ser “redimido<strong>”</strong>... “extraído de<strong>”</strong>.<br />

Su libertad tenía que asegurarse bajo un precio,<br />

73


<strong>es</strong>e precio fijado por Dios en sangre,<br />

sangre de cordero.<br />

Valerte de un asno en Israel tenía un precio...<br />

el precio de otra vida preciosa.<br />

El asno evidencia la peor de las características de la humanidad:<br />

Obstinación.<br />

“Asno<strong>”</strong> <strong>es</strong> r<strong>es</strong>istencia... terquedad de propósito.<br />

Obstinación <strong>es</strong> cuando una persona no obedece, no <strong>es</strong>cucha… y<br />

no lo hará.<br />

Cuando la voluntad se fija en un “no<strong>”</strong> inapelable,<br />

<strong>es</strong>o <strong>es</strong> “asno<strong>”</strong>.<br />

Nacimos tercos. Es lo que somos y <strong>es</strong>a obstinación sin freno será<br />

nu<strong>es</strong>tra caída. La pérdida de todo... d<strong>es</strong>tino, propósito... ¡Dios!<br />

Cristo Jamás un Asno<br />

J<strong>es</strong>ús se repr<strong>es</strong>enta como un buey<br />

–siervo y cordero– el manso.<br />

Pero nunca se le identifica con la naturaleza del asno.<br />

Buey<strong>es</strong> y ovejas son santos. No se requiere redención sanguínea.<br />

Se utilizaban en sacrificios de sangre, pero el asno, siendo de<br />

ningún uso, debe nacer<br />

con una inmediata redención por sangre de cordero.<br />

La rebelión proviene de la obstinación y sucumbe<br />

bajo el inmenso perdón de Cristo.<br />

La sangre del Cordero que cubre<br />

nu<strong>es</strong>tra elemental identidad de pecado… la de un asno.<br />

74


Somos ovejas. Las ovejas son vulnerabl<strong>es</strong> y <strong>es</strong>túpidas.<br />

Las ovejas evidencian humanidad.<br />

Cristo Mismo se hizo oveja como nosotros...<br />

Al igual que la humanidad<br />

las ovejas sólo son débil<strong>es</strong>,<br />

pero el asno <strong>es</strong> nu<strong>es</strong>tra naturaleza de pecado<br />

cuya raíz secreta <strong>es</strong> un corazón obstinado<br />

que no cede.<br />

Las ovejas son tontas. Las ovejas son los creyent<strong>es</strong>. Las cabras<br />

son necias. Las cabras son los incrédulos, pero ambos se usaban<br />

para el sacrificio del altar. Jamás se usó un asno para una<br />

ofrenda.<br />

La Historia de la Familia Asno<br />

Mi padre era huérfano, criado por una familia franc<strong>es</strong>a que le<br />

adoraba. Para que jugara le daban su propio asno y un carro. Un<br />

día él y un amiguito <strong>es</strong>taban jugando con el asno, intentando que<br />

se moviera y tirara del carro. El asno se afianzó en sus traseros y<br />

no se le pudo obligar a moverse ni un metro. Empujaron,<br />

rogaron. Le pusieron una zanahoria delante de la nariz.<br />

El asno no se movía.<br />

El asno ganó.<br />

Ah, tuvieron una idea per<strong>fe</strong>cta. Encenderían un fuego debajo de<br />

la panza del asno, entonc<strong>es</strong> tendría que moverse. Así que<br />

levantaron una pequeña pila de palitos y de paja bajo el asno y<br />

prendieron el fuego. Te lo aseguro, el asno se movió. Se movió<br />

lo justo para situar el carro sobre el fuego. Los muchachet<strong>es</strong><br />

75


observaron d<strong>es</strong>peranzados cómo el carro se empapaba de fuego<br />

y se quemaba de arriba abajo.<br />

El asno seguía sin moverse.<br />

El asno ganó.<br />

La obstinación gana. Siempre.<br />

Se sale con la suya.<br />

Un <strong>es</strong>píritu cerril <strong>es</strong> incurable.<br />

El único remedio <strong>es</strong> la sangre del cordero.<br />

O la muerte...<br />

Si no había sacrificio de sangre de cordero, la ley de Dios<br />

requería entonc<strong>es</strong> que el cuello del asno había de ser roto, y <strong>es</strong>o<br />

significaba... muerte.<br />

Y si no lo redimier<strong>es</strong>,<br />

quebrarás su cerviz.<br />

El cuello enquilosado siempre habla de obstinación,<br />

una actitud de sentar tus cuartos y rehusar a moverte un sólo<br />

milímetro, sin importar la pr<strong>es</strong>ión ejercida.<br />

Salirte con la tuya, aunque te cu<strong>es</strong>te... todo.<br />

76


Ismael el Asno<br />

El angel del Señor (una apariencia de Cristo en el Antiguo<br />

T<strong>es</strong>tamento) dijo a Hagar en el d<strong>es</strong>ierto en cuanto a su hijo,<br />

Ismael,<br />

Gén 16:12 Y él será hombre fiero; su mano será contra todos, y<br />

la mano de todos contra él, y delante de todos sus hermanos<br />

(ante el rostro, o en d<strong>es</strong>afío) habitará.<br />

Este <strong>es</strong> el retrato por excelencia del asno.<br />

Ismael nació <strong>es</strong>clavo de la mentalidad del burro, heredero de la<br />

deliberada insistencia de Abraham de ejecutar la prom<strong>es</strong>a de<br />

Dios aparte de la voluntad de Dios y sin el poder de Dios.<br />

Aun su persistencia de hacerlo posible para Dios<br />

era de hecho un d<strong>es</strong>afío.<br />

Ese hijo de independencia no podría ser otra cosa más que un<br />

asno salvaje, y hasta el día de hoy Ismael todavía vive en una<br />

insana hostilidad hacia su hermano, Isaac.<br />

Un salvaje asno de hombre, sin ningún<br />

sacrificio de sangre de Cordero, <strong>es</strong> un ser peligroso.<br />

Incontrolable.<br />

A un asno salvaje no se le retiene.<br />

Satanás envía cadenas de <strong>es</strong>clavitud,<br />

pero Dios envía cuerdas de amor.<br />

Tenemos que ser ser<strong>es</strong> en lazo,<br />

pero la “gente-asno<strong>”</strong> no será retenida.<br />

No renunciarán a su “preciosa<strong>”</strong> independencia,<br />

77


ilusa rebelión de libertad.<br />

Prov. 26:3 El látigo para el caballo, el cab<strong>es</strong>tro para el asno...<br />

Un caballo puede conducirse con un látigo,<br />

pero un asno ha de ser embridado.<br />

Un asno sigue su pensar obstinado y egoísta,<br />

por lo que su cabeza ha de ser enjaezada,<br />

ha de ser obligada a girar.<br />

La Nación Hebrea<br />

Israel fue derrotado en el d<strong>es</strong>ierto...<br />

d<strong>es</strong>de dentro, por su propia obstinación.<br />

No por los numerosos enemigos<br />

que l<strong>es</strong> plantaron batalla.<br />

No. Se adentraron en los d<strong>es</strong>érticos sepulcros<br />

para no entrar en la tierra, debido sencillamente a<br />

la terca naturaleza interior a la que se ensillaron.<br />

Israel fue d<strong>es</strong>truido en Canaan –d<strong>es</strong>de dentro–<br />

por su propia obstinación que terminó en idolatría.<br />

El juicio de Dios requirió ser capturados a manos<br />

de Babilonia.<br />

El asno será embridado.<br />

D<strong>es</strong>de dentro o d<strong>es</strong>de fuera.<br />

“Israel en el d<strong>es</strong>ierto<strong>”</strong> <strong>es</strong>taba insatis<strong>fe</strong>cho pero<br />

“Israel en Canaan<strong>”</strong> d<strong>es</strong>plazó y sustituyó a Israel por un ídolo.<br />

El Señor le habló a Moisés acerca de la nación Hebrea:<br />

Ex 32:9 Dijo más Jehová a Moisés: Yo he visto a <strong>es</strong>te pueblo,<br />

que por cierto <strong>es</strong> pueblo de dura cerviz.<br />

78


Toda la nación –excepto dos hombr<strong>es</strong>– perecieron en el d<strong>es</strong>ierto,<br />

sus cervic<strong>es</strong><br />

al fin quebradas pero sólo por el sepulcro.<br />

El Señor habló a Jeremías... acerca de Israel:<br />

Jer 17:23 Pero ellos no oyeron, ni inclinaron su oído, sino<br />

endurecieron su cerviz para no oír, ni recibir corrección.<br />

Israel fue llevado a Babilonia <strong>es</strong>clavo.<br />

Pero su tierra y su santo templo fueron d<strong>es</strong>truidos por el fuego,<br />

el juicio de Dios sobre su obstinada y agarrotada naturaleza.<br />

Una naturaleza que no <strong>es</strong>cuchará ni tomará corrección.<br />

Muerte en el d<strong>es</strong>ierto...<br />

sin haber alcanzado hogar jamás.<br />

Esclavitud en una tierra cruel... la pérdida del hogar que habías<br />

obtenido.<br />

Tal <strong>es</strong> el fruto de la obstinación.<br />

Y al final, <strong>es</strong>a intratable obstinación<br />

te ciega a la pr<strong>es</strong>encia del Cordero en tu propio medio,<br />

el Cordero cuya sangre <strong>es</strong> el antiguo remedio<br />

para la obstinación...<br />

Abraham Montó un Asno<br />

Al r<strong>es</strong>ponder a la llamada de Dios,<br />

Abraham montó a un asno e hizo viaje al Monte de Moriah<br />

para el más costoso sacrificio...<br />

la deliberada ofrenda de un único niño amado.<br />

Muchacho de Prom<strong>es</strong>a.<br />

79


Abraham oyó <strong>es</strong>te mandato...<br />

en absoluta oposición a la naturaleza de Dios<br />

y a Su juramento.<br />

Un Mandato Divino, no obstante..<br />

Viaje de tr<strong>es</strong> días sobre el lomo de un asno que fue el proc<strong>es</strong>o de<br />

quebrar su voluntad hasta la muerte de sus sueños e incluso de la<br />

prom<strong>es</strong>a misma de Dios.<br />

Montando el asno, Abraham embridó <strong>es</strong>a r<strong>es</strong>uelta naturaleza de<br />

la humanidad, el poder para dirigir la rienda de la extraña<br />

voluntad de Dios.<br />

La obstinación de r<strong>es</strong>istir a Dios,<br />

la convirtió en un poder<br />

de inflexible obediencia.<br />

Abandonó al asno conquistado en la base de la montaña y <strong>es</strong>caló<br />

como un hombre totalmente rendido, libre de toda r<strong>es</strong>istencia<br />

(dada la <strong>fe</strong>) para subir a “adorar<strong>”</strong>, alguien que podía dejar la<br />

prom<strong>es</strong>a por entero en el seno de Dios sin oposición alguna a Su<br />

voluntad.<br />

Y Abraham obedeció con determinación.<br />

Se impuso a su innata obstinación contra Dios,<br />

la cual embridó para servir<br />

al Mortí<strong>fe</strong>ro Propósito del Padre.<br />

80


José Usó el Asno<br />

José ocultó su copa de plata en el zurrón del asno.<br />

¿Por qué ahí?<br />

Porque sus hermanos eran tercos.<br />

Eran asnos. Su padre, Jacob, llamó a Isacar un asno.<br />

Gen<strong>es</strong>is 49:14 Isacar, asno fuerte que se recu<strong>es</strong>ta entre los<br />

apriscos.<br />

Se habían r<strong>es</strong>istido a la unción de Dios de José.<br />

Tenían que ser quebrados de su burrez ant<strong>es</strong> de que José pudiera<br />

bendecirl<strong>es</strong> con el fruto de su propia rendición.<br />

En el Egipto de la <strong>es</strong>clavitud, José había sido aniquilado y se<br />

había quebrado su inherente r<strong>es</strong>istencia a Dios.<br />

Había trabajado en secreto para romper su d<strong>es</strong>afío natural<br />

al plan de Dios, hasta que pudiera saber<br />

en todo su apaleado corazón que,<br />

“Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a<br />

bien.<strong>”</strong><br />

Esa <strong>es</strong> la d<strong>es</strong>trucción de la obstinación.<br />

81


Saul y los Caminos del Asno<br />

El rey Saul <strong>es</strong> un impactante<br />

retrato de obstinación... y de su fin.<br />

Saul no quería la voluntad de Dios.<br />

Quería que Dios aprobara su propia voluntad...<br />

y cualquier cosa que Saul d<strong>es</strong>eara, creía que era la voluntad de<br />

Dios.<br />

Esto <strong>es</strong>... obstinación.<br />

Leyendo: 1 Samuel 13:15<br />

Cuando mil<strong>es</strong> de Filisteos <strong>es</strong>taban acampados contra Israel,<br />

Samuel bajaba d<strong>es</strong>de Gilgal para ofrecer sacrificios al Señor.<br />

Saul y la muchedumbre atemorizada se juntó allí en <strong>es</strong>pera.<br />

Como Samuel no todavía había llegado en el día séptimo, Saul<br />

mismo hizo el sacrificio, aunque no era sacerdote.<br />

Saul fabricó una explicación que le satisfizo.<br />

Una que justificaba per<strong>fe</strong>ctamente su pr<strong>es</strong>unción.<br />

¿Cómo no habría podía Samuel –y Dios–entender la razón?<br />

Vi que el pueblo se me <strong>es</strong>taba <strong>es</strong>parciendo, y que tú no venías<br />

en los días señalados, y que los Filisteos se <strong>es</strong>taban<br />

agrupando... Así que me obligué y ofrecí un holocausto.<br />

Una excusa en tr<strong>es</strong> part<strong>es</strong>,<br />

echando la culpa a todo<br />

–al pueblo, Samuel y los Filisteos–<br />

todo excepto a sí mismo,<br />

a quien atribuyó la hazaña de la d<strong>es</strong>obediencia<br />

como un acto noble y de sacrificio personal.<br />

82


Por no <strong>es</strong>perar 3 horas más, Saul perdió su reino.<br />

Según cómo Dios ve los asuntos terrenal<strong>es</strong>,<br />

la d<strong>es</strong>obediencia <strong>es</strong> más mortí<strong>fe</strong>ra<br />

que mil<strong>es</strong> de guerreros Filisteos.<br />

Un Señor Soberano los podía haber encauzado facilmente con<br />

un terremoto (1 Sam 14:15)<br />

pero no se tragaría un hábil pretexto para la<br />

violación de Su santo sacerdocio.<br />

Samuel dijo “Mas ahora tu reino no será duradero. Jehová se<br />

ha buscado un varón conforme a su corazón, al cual Jehová<br />

ha d<strong>es</strong>ignado para que sea príncipe sobre su pueblo, por<br />

cuanto tú no has guardado lo que Jehová te mandó.<strong>”</strong><br />

(1 Sam 13:14)<br />

Ni en Saul ni en sus caminos hubo ningún cambio.<br />

La pérdida de su lugar y de su trono no<br />

le d<strong>es</strong>gajó de su curso.<br />

Los asnos tienen cráneos muy duros<br />

y aunque sean golpeados<br />

en la cabeza con un mazo,<br />

a duras penas lo sienten.<br />

Samuel trajo sobre Saul el vetusto orden de Dios (Deut 25:17–<br />

19).<br />

Por la crueldad que mostró con Israel en el pasado, cuando<br />

cruzaban el d<strong>es</strong>ierto, Dios había pedido la completa d<strong>es</strong>trucción<br />

de Amalec,<br />

Ve, pu<strong>es</strong>, y hiere a Amalec, y d<strong>es</strong>truye todo lo que tiene, y no te<br />

apiad<strong>es</strong> de él; mata a hombr<strong>es</strong>, mujer<strong>es</strong>, niños, y aun los de<br />

pecho, vacas, ovejas, camellos y asnos.<br />

(1 Sam 15:3)<br />

83


Saul, que creía que sus propias ideas eran mejor<strong>es</strong> que las de<br />

Dios, absolvió al rey y a lo mejor de los animal<strong>es</strong>.<br />

Tan agradado <strong>es</strong>taba Saul con su forma independiente de<br />

manejar a Amalec, que ant<strong>es</strong> de que Samuel llegara había<br />

“Levantado un monumento para sí mismo.<strong>”</strong><br />

Y en la confianza de un d<strong>es</strong>caro fuera de lo común,<br />

se atrevió a encontrarse con Samuel de <strong>es</strong>te talante:<br />

¡Bendito er<strong>es</strong> del Señor!<br />

He cumplido el mandato del Señor.<br />

Una vez más acusó al pueblo. De nuevo le dio un giro noble.<br />

Una razón religiosa para justificar una d<strong>es</strong>obediencia directa,<br />

disfrazando su agenda de negocios como un beneficio para Dios.<br />

Lo mejor de las ovejas y de las vacas, para sacrificarlas a<br />

Jehová tu Dios.<br />

(1 Sam 15:15)<br />

El hombre nec<strong>es</strong>itaba aprender modal<strong>es</strong> con Dios y Samuel se<br />

los dio:<br />

El obedecer <strong>es</strong> mejor que los sacrificios,<br />

y el pr<strong>es</strong>tar atención que la grosura de los carneros.<br />

Porque como pecado de adivinación <strong>es</strong> la rebelión,<br />

y como ídolos e idolatría la obstinación.<br />

(1 Sam 15:22)<br />

Rebelión <strong>es</strong> pr<strong>es</strong>umir una acción que Dios no ha originado.<br />

(Servir como sacerdote cuando no lo er<strong>es</strong>.)<br />

Pero la obstinación <strong>es</strong> seguir por la ti<strong>es</strong>a senda de tu tenacidad...<br />

incluso d<strong>es</strong>pués de ser corregido... ¡por DIOS!<br />

84


Saul perdió el trono cuando saqueó el lugar de Samuel,<br />

pero cuando fue más sabio que Dios perdió a Dios.<br />

(1 Sam 16:14) El Espíritu de Jehová se apartó de Saúl, y le<br />

atormentaba un <strong>es</strong>píritu malo de parte de Jehová.<br />

Balaam y el Asno<br />

El hombre que no deja que Dios le gobierne <strong>es</strong> pu<strong>es</strong>to bajo el<br />

asno que sí lo hace.<br />

Dios <strong>es</strong> tan Dios que no hay persona que le pueda frustrar...<br />

nadie le toma el pelo y<br />

nadie puede utilizarle.<br />

Balaam <strong>es</strong> un nombre que repr<strong>es</strong>enta codicia... y <strong>es</strong>o<br />

repr<strong>es</strong>entará por las eras de la eternidad.<br />

La vergonzosa corrupción de un llamado puro.<br />

El rey de los Moabitas quería pagar a Balaam para maldecir a un<br />

Israel protegido. Y pagaría bien para asegurar <strong>es</strong>a maldición.<br />

Como pro<strong>fe</strong>ta válido que era, Balaam preguntó a Dios.<br />

La r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta fue “no<strong>”</strong>, clara e inequívoca.<br />

Así pu<strong>es</strong> el rey elevó el precio. Balaam preguntó de nuevo y la<br />

r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta parecía haber cambiado a un “sí<strong>”</strong>.<br />

Cuando le pid<strong>es</strong> a Dios una segunda vez significa que quier<strong>es</strong><br />

algo que no <strong>es</strong> Su voluntad.<br />

Y a menudo el Señor Soberano<br />

te d<strong>es</strong>embridará.<br />

Y tendrás que caminarlo por ti mismo.<br />

Es un asunto que anida en tu corazón,<br />

así que tien<strong>es</strong> que ver su triste d<strong>es</strong>enlace.<br />

“Si no <strong>es</strong> Su voluntad, que al menos sea con Su permiso.<strong>”</strong><br />

No obstante, no yerr<strong>es</strong>:<br />

85


Su voluntad prevalecerá... contigo o sin ti.<br />

Así pu<strong>es</strong>, el asno de Balaam le corrigió.<br />

La lujuria de Balaam de seguir adelante era tal que no se percató<br />

de que su orgullo acababa de ser insultado mediante el uso del<br />

más <strong>es</strong>túpido y simplón de los animal<strong>es</strong>.<br />

Balaam anhelaba una <strong>es</strong>pada para matar al animal<br />

que se atrevía a detener su próspera aventura.<br />

Leyendo: Números 22<br />

¡La burrez de Balaam era mayor que la del asno que tenía<br />

suficiente sentido común como para atemorizarse de un Ser<br />

Divino con una gran <strong>es</strong>pada!<br />

El Ángel del Señor hostigó a la asna hasta que<br />

no hubo lugar para <strong>es</strong>capar y<br />

ésta se d<strong>es</strong>plomó bajo su ma<strong>es</strong>tro.<br />

Cuando Dios usa a un asno para hablarte<br />

significa que tú<br />

er<strong>es</strong> menos dócil que él.<br />

Cuando a Balaam se le permitió ver al Oponente Cel<strong>es</strong>tial “que<br />

<strong>es</strong>taba en el camino, y tenía su <strong>es</strong>pada d<strong>es</strong>nuda en su mano,<br />

Balaam hizo reverencia, y se inclinó sobre su rostro.<strong>”</strong><br />

Al fin.<br />

Y el Ángel de Jehová le dijo: ¿Por qué has azotado tu asna<br />

<strong>es</strong>tas tr<strong>es</strong> vec<strong>es</strong>? He aquí yo he salido para r<strong>es</strong>istirte, porque tu<br />

camino <strong>es</strong> perverso delante de mí.<br />

Este “Ángel de Jehová<strong>”</strong> probablemente fuera una aparición de<br />

Cristo.<br />

86


Nu<strong>es</strong>tro Dios <strong>es</strong> más fuerte que nu<strong>es</strong>tras más provocadoras<br />

fuerzas, más r<strong>es</strong>uelto que la más obstinada de nu<strong>es</strong>tras<br />

voluntad<strong>es</strong>.<br />

Y... al final, cualquier disputa Él la ganará.<br />

Un Rey sobre un Asno<br />

Alégrate mucho, hija de Sion;<br />

da voc<strong>es</strong> de júbilo, hija de Jerusalén;<br />

he aquí tu rey vendrá a ti,<br />

justo (sin acepción de persona) y salvador (triunfante y<br />

victorioso),<br />

humilde, y cabalgando sobre un asno,<br />

sobre un pollino hijo de asna.<br />

Zacarías 9:9<br />

Su marcha sobre Jersusalén<br />

tenía que ver con Su identidad,<br />

al fin revelada a todos.<br />

J<strong>es</strong>ús l<strong>es</strong> había pedido a los discípulos que le dijeran quién<br />

creían que Él era.<br />

Primero r<strong>es</strong>pondieron con las ideas de la época, “Elías<strong>”</strong>,<br />

“Juan<strong>”</strong>...<br />

pero J<strong>es</strong>ús insistió en su r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta personal.<br />

¿Quién decís VOSOTROS que soy?<br />

Pedro fue el valiente que habló.<br />

Pedro sabía la identidad de J<strong>es</strong>ús, no una conjetura,<br />

sino un per<strong>fe</strong>cto d<strong>es</strong>velar de <strong>es</strong>te Hombre Único<br />

–di<strong>fe</strong>rente del r<strong>es</strong>to de los hombr<strong>es</strong>–<br />

al haber revelado el Padre a Su Hijo al corazón de<br />

87


un hombre común, y hasta Él mismo quedó asombrado.<br />

“Er<strong>es</strong> el Cristo, el Hijo del Dios Viviente.<strong>”</strong><br />

D<strong>es</strong>de <strong>es</strong>te momento, d<strong>es</strong>de <strong>es</strong>ta revelación J<strong>es</strong>ús empezó a<br />

preparar a Sus discípulos para Su muerte, y se volvió hacia<br />

Jerusalén a Su d<strong>es</strong>tino final. Había uno que sabía y que lo<br />

declaró. J<strong>es</strong>ús fue conocido como M<strong>es</strong>ías, y así ahora podía<br />

morir como Dios.<br />

(Mateo 16:21)<br />

Mediante parábola, mediante milagro, J<strong>es</strong>ús transitó Su senda<br />

hacia lo inevitable... Se detuvo a las afueras de Jerusalén<br />

allegándose a Betfagé y Betania en el Monte de los Olivos.<br />

Permaneció aquí en el pueblecito de Betania con Lázaro y sus<br />

hermanas. Fue entonc<strong>es</strong> que Cristo fue ungido con el costoso<br />

perfume de María, justo el día ant<strong>es</strong> de Su Entrada Triunfal en<br />

Jerusalén...<br />

Allí envió a dos discípulos a la villa de Betfagé.<br />

Id a la aldea que <strong>es</strong>tá enfrente de vosotros, y luego hallaréis<br />

una asna atada, y un pollino con ella; d<strong>es</strong>atadla, y traédmelos.<br />

Y si alguien os dijere algo, decid: El Señor los nec<strong>es</strong>ita; y<br />

luego los enviará.<br />

Aquí Mateo (21:4,5) menciona la pro<strong>fe</strong>cía de Zacarías.<br />

Todo <strong>es</strong>to aconteció para que se cumpli<strong>es</strong>e lo dicho por el<br />

pro<strong>fe</strong>ta, cuando dijo:<br />

“Decid a la hija de Sion: He aquí, tu Rey viene a ti, Manso, y<br />

sentado sobre una asna, Sobre un pollino, hijo de animal de<br />

carga.<strong>”</strong><br />

Cuatrocientos años ant<strong>es</strong> del tiempo de Cristo, Zacarías<br />

contempló la <strong>es</strong>cena. El Rey, M<strong>es</strong>ías y Salvador, en una<br />

88


mansedumbre d<strong>es</strong>conocida para los rey<strong>es</strong> humanos, sentado<br />

sobre una simple y vulgar b<strong>es</strong>tia de carga.<br />

Este Zacarías vio... y comprendió<br />

la humildad que ya insinuaba.<br />

No era el carro <strong>es</strong>pléndido del típico conquistador.<br />

No era el camello enjaezado con adornos colgant<strong>es</strong>.<br />

No era el semental de encabriolado vigor.<br />

Este rey, <strong>es</strong>te Eterno Monarca, se unió a Sí Mismo al<br />

más común de los hombr<strong>es</strong>, a la más humilde de las<br />

humanidad<strong>es</strong>.<br />

Su elección del asno hablaba de muchas cosas.<br />

Por la humilde quietud de Su pr<strong>es</strong>encia comandante,<br />

J<strong>es</strong>ús dom<strong>es</strong>ticó a un pollino salvaje nunca ant<strong>es</strong> montado.<br />

Un pollino sin domar, que no era puro, sino obstinado en su<br />

origen anárquico.<br />

No era pequeña proeza.<br />

De hecho un milagro, oscuro, pero cargado de significado.<br />

Los discípulos fueron, e hicieron como J<strong>es</strong>ús l<strong>es</strong> mandó; y<br />

trajeron el asna y el pollino, y pusieron sobre ellos sus mantos;<br />

y él se sentó encima. Y la multitud, que era muy numerosa,<br />

tendía sus mantos en el camino; y otros cortaban ramas de los<br />

árbol<strong>es</strong>, y las tendían en el camino.<br />

(Mateo 21:7, 8)<br />

Los tr<strong>es</strong> años de Sus impactant<strong>es</strong> palabras y hechos habían traído<br />

una fama que convencía a la multitud de que Él era... un Rey.<br />

Como REY entró J<strong>es</strong>ús en Jerusalén.<br />

Y la bienvenida que recibió era la de<br />

un Rey Conquistador.<br />

89


Los ropaj<strong>es</strong>, las cubiertas de nu<strong>es</strong>tra vergüenza ante Dios,<br />

disimulaban nu<strong>es</strong>tras carencias. No eran éstas nec<strong>es</strong>arias en la<br />

pr<strong>es</strong>encia de un Rey Humilde, hombre y Dios en uno.<br />

Así que la humanidad se d<strong>es</strong>pojó de sus fachadas, llevadas<br />

pu<strong>es</strong>tas d<strong>es</strong>de los días de la d<strong>es</strong>gracia del Edén, y las arrojó a los<br />

pi<strong>es</strong> del Rey que acogía.<br />

Aún las ramas de la naturaleza se inclinaban ante Él, hacían una<br />

alfombra en Su honor.<br />

La humanidad inclinada en reverencia, el asno inclinado en<br />

reverencia, la naturaleza inclinada en reverencia.<br />

El Rey de Gloria <strong>es</strong>taba d<strong>es</strong>filando, ¡entrando!<br />

Montó sobre una alfombra de homenaje de rey, tendida por<br />

multitud<strong>es</strong> de súbditos dispu<strong>es</strong>tos, borrachos con la excitación<br />

del reconocimiento de sus almas al Rey-Salvador.<br />

Y la gente que iba delante y la que iba detrás aclamaba,<br />

diciendo: ¡Hosanna (oh, sé propicio, sé en gracia favorable) al<br />

Hijo de David (el M<strong>es</strong>ías)! ¡Bendito el que viene en el nombre<br />

del Señor! ¡Hosanna (Oh, sé a nu<strong>es</strong>tro favor) en las alturas!<br />

(Mateo 21:9)<br />

Muchedumbr<strong>es</strong> de gent<strong>es</strong> le acogieron como Rey,<br />

lo vislumbraron como M<strong>es</strong>ías, prometido y <strong>es</strong>perado,<br />

llegando aquí a lomos del hijo de un asno, justo como Zacarías<br />

lo había visionado y como Él había dejado <strong>es</strong>crito en textos con<br />

los que <strong>es</strong>taban familiarizados...<br />

Al fin J<strong>es</strong>ús expuso Su identidad.<br />

Su <strong>es</strong>conderse había acabado.<br />

Sus ruegos por el secretismo llegaban a un fin.<br />

Su declaración pública había sido hecha y el pueblo, como una<br />

ciudad con una sola voz, entendió que Él era M<strong>es</strong>ías y Rey.<br />

90


Le trataron como a tal con una alfombra real de su hechura, en<br />

actitud de sacrificio.<br />

Clamaron a gran voz engrandeciendo ovación a Su nombre y<br />

“toda la ciudad se conmovió.<strong>”</strong><br />

El Dios Rey de Todos los Rey<strong>es</strong> <strong>es</strong>taba marchando hacia la<br />

ciudad de Su martirio.<br />

Y dado que el pueblo reconoció Su Realeza<br />

y le ofreció homenaje, honor y aclamado vítore,<br />

tr<strong>es</strong> días d<strong>es</strong>pués, horriblemente y sin excusa…<br />

exigió Su muerte.<br />

B<strong>es</strong>tia de Carga<br />

El asno, vetusta b<strong>es</strong>tia de carga.<br />

Vulgar animal de bultos,<br />

a cu<strong>es</strong>tas con las mercaderías del hombre.<br />

Asnos nos hemos hecho a nosotros mismos,<br />

soportando cargas de p<strong>es</strong>ado pecado,<br />

nu<strong>es</strong>tro propio cargamento añadido a las pilas dispu<strong>es</strong>tas sobre<br />

nosotros por aquellos que no llevan la suya.<br />

Con “asno-obstinación<strong>”</strong>, llegamos a de<strong>fe</strong>nder aún la carga para<br />

enmendar la carga.<br />

Cargados de pecado, pagaremos por el pecado y así mismo<br />

soportaremos el daño.<br />

Pecado de arrogancia propia añadida al pecado de la ruina<br />

propia.<br />

Costal<strong>es</strong> de doble saca. P<strong>es</strong>ados por ambos lados.<br />

Los asnos se las apañan. Pueden sobrevivir en cualquier<br />

d<strong>es</strong>ierto.<br />

Creemos que somos asnos, r<strong>es</strong>istent<strong>es</strong>, fuert<strong>es</strong>, independient<strong>es</strong>.<br />

Admiramos nu<strong>es</strong>tra burrez y la llamamos fuerza.<br />

91


Pero nu<strong>es</strong>tro creador, quien nos soñó, nos llama ovejas.<br />

Los débil<strong>es</strong> son ovejas, sin fuerza para soportar tension<strong>es</strong> y<br />

p<strong>es</strong>os.<br />

Las ovejas se hundirían bajo las cargas.<br />

No se las pueden embridar para tirar,<br />

no pueden soportar un cargamento de mercancías,<br />

ni una silla de montar para el hombre.<br />

¿Quier<strong>es</strong> ser libre de dobl<strong>es</strong> cargas?<br />

¿De pecado y Esfuerzo?<br />

Entonc<strong>es</strong> sé oveja. Er<strong>es</strong> oveja.<br />

Sé lo que er<strong>es</strong>.<br />

Er<strong>es</strong> incapaz de llevarte a ti mismo ni a nadie más.<br />

Somos una idea de la Imaginación Divina y<br />

Él, quien nos hizo oveja, nos hizo débil<strong>es</strong>...<br />

para nec<strong>es</strong>itarle.<br />

Él, el Brillante Conquistador, domó<br />

al asno salvaje de nu<strong>es</strong>tra independencia<br />

y Él Mismo suplantó la carga a nu<strong>es</strong>tro lomo.<br />

Se rebajó a Sí Mismo al nivel de nu<strong>es</strong>tra humanidad abyecta,<br />

una humildad, una humillación que no podemos imaginar.<br />

Nu<strong>es</strong>tro orgullo primario sencillamente no puede comprender la<br />

misericordiosa cond<strong>es</strong>cendencia del Dios de Todo...<br />

Él, que pertenece a lo Alto, se encorva a lo profundamente Bajo<br />

para dejarnos ser el vehículo de Su Vida Sagrada, el transporte<br />

de Su Propio Ser.<br />

La burrez de nu<strong>es</strong>tra rebuzna rebelión ha sido<br />

domada por el Amor.<br />

Y somos libr<strong>es</strong> para ser “ovejas-exentas-de-carga<strong>”</strong>, cuyo<br />

cargamento se tiende sobre Aquel que lo llevó al Madero.<br />

Ambas cargas, la del pecado y la del <strong>es</strong>fuerzo.<br />

92


Y en el gozo de una Vida Triunfante, le llevamos a Él como<br />

rebeld<strong>es</strong> conquistados, llevando con gozo Su yugo fácil de una<br />

carga ligera a todo un mundo de asnos.<br />

Y CIERTAMENTE nos regocijamos<br />

como Hijas de Sión.<br />

Nu<strong>es</strong>tro Rey ha llegado,<br />

humilde montado sobre un asno,<br />

el hijo de una b<strong>es</strong>tia de carga.<br />

Soy un asno... ¿lo entiend<strong>es</strong>?<br />

¡¡Yo soy el asno!! conquistado, domado, obediente...<br />

transformado en <strong>es</strong>e otro tipo de<br />

ser, la oveja que soy.<br />

¡Parte de la Triunfante Proc<strong>es</strong>ión del Rey de Rey<strong>es</strong>!<br />

El asno le llevo a Él –sólo a Él– no al pecado,<br />

no al <strong>es</strong>fuerzo.<br />

Le llevo <strong>es</strong>te Asno Mundo,<br />

reconociéndole como Rey y Conquistador.<br />

MI Rey y MI Conquistador.<br />

Más tarde montará Él sobre el Llameante semental blanco de<br />

Terrible Poder y entonc<strong>es</strong> le veréis.<br />

Por ahora Su única vasija de entrada<br />

<strong>es</strong> por medio de un asno hecho oveja.<br />

¿Te ha mandado llamar para que seas d<strong>es</strong>atado y así pueda Él<br />

cabalgar sobre ti en el mundo?<br />

¿Ha domado Él tu obstinación salvaje?<br />

Pued<strong>es</strong> pertenecer a otros, pero basta con <strong>es</strong>cuchar:<br />

93


“El Señor tiene nec<strong>es</strong>idad de ti.<strong>”</strong><br />

Copyright © 2000 Martha Blaney Kilpatrick<br />

94


Feb. 24, l993<br />

III<br />

CONSIDERAD<br />

LOS LIRIOS<br />

Dijo Dios, “considerad los lirios<strong>”</strong><br />

Mt 6:28 Y por el v<strong>es</strong>tido, ¿por qué os afanáis? Considerad los<br />

lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os<br />

digo, que ni aun Salomón con toda su gloria (excelencia,<br />

dignidad y gracia) se vistió así como uno de ellos.<br />

“No trabajan ni hilan.<strong>”</strong><br />

Estaba muy inquieta. Una nueva verdad, una nueva aventura.<br />

Estaba contenta de obedecerle. Así que traté muy<br />

conscientemente de no hilar ni trabajar. Intentaba d<strong>es</strong>cansar con<br />

ahínco (¿lo captas?). Intentas d<strong>es</strong><strong>es</strong>peradamente <strong>es</strong>tar tranquila y<br />

aún sigu<strong>es</strong> d<strong>es</strong><strong>es</strong>perada. Es una contradicción entre dos términos.<br />

Así que dijo el Señor, “No te llamé a ser un lirio. Te llamé a<br />

‘considerar el lirio’<strong>”</strong>.<br />

“Ah<strong>”</strong>, dije yo, “ahora lo entiendo<strong>”</strong>.<br />

Por lo tanto saqué mis libros para <strong>es</strong>tudiar el lirio.<br />

Entender el lirio, <strong>es</strong>a era mi asignatura.<br />

Conquistaré <strong>es</strong>e lirio. ¡Sí, Señor!<br />

Así que <strong>es</strong>cudriñé, ‘lirio’ en la Palabra.<br />

Le eché un vistazo a los lirios de Tierra Santa;<br />

hice una lista de sus atributos.<br />

95


Estaba progr<strong>es</strong>ando.<br />

Tenía que hallar el secreto del LIRIO.<br />

Colocar en la m<strong>es</strong>a mis d<strong>es</strong>cubrimientos y ponerlos en orden.<br />

Ah... era capaz de hacerlo en base a un <strong>es</strong>tudio diligente.<br />

Pero ahí no había nada.<br />

‘Amontoné mucho pero tenía poco.’<br />

Pero el Señor dijo,<br />

“No te llamé a <strong>es</strong>tudiar el lirio.<br />

Te llamé a que consideras<strong>es</strong> el lirio.<strong>”</strong><br />

Mis creencias quedaban al d<strong>es</strong>cubierto.<br />

El primer credo<br />

La realidad (creía yo) provenía de la ‘mímica’.<br />

La obediencia <strong>es</strong>: miras a J<strong>es</strong>ús y hac<strong>es</strong> lo mismo.<br />

Calco y fotocopia.<br />

El problema <strong>es</strong> que no pued<strong>es</strong> copiar lo que no er<strong>es</strong>.<br />

Es como v<strong>es</strong>tirse con traje de león y per<strong>fe</strong>ccionar tu rugido.<br />

Pued<strong>es</strong> parecerte a un león, puede que incluso suen<strong>es</strong> como un<br />

león,<br />

pero TODO EL MUNDO sabe que NO ERES un león y que<br />

<strong>es</strong>tás haciendo un ridículo <strong>es</strong>pantoso.<br />

Tu intento se ha convertido en una pretensión necia.<br />

Lo saben.<br />

Si cre<strong>es</strong> que pued<strong>es</strong> ser un león por mucho ensayarlo, te tendrán<br />

por un necio digno de lástima.<br />

Creer que pued<strong>es</strong> ser lo que Dios te exige ser a base de fotocopia<br />

<strong>es</strong> como poco fantasía, a lo sumo <strong>es</strong>quizofrenia.<br />

El segundo credo.<br />

Si lo entiend<strong>es</strong>, ya lo controlas.<br />

Lo has conseguido. Eso <strong>es</strong> tan sólo otra forma de fingir.<br />

96


Puedo explicar el león. Ostenta <strong>es</strong>te o aquel rasgo.<br />

Como puedo explicar al león, soy un león.<br />

Esto <strong>es</strong> aún más necio que ponerse un disfraz.<br />

El carácter de Dios que mora en lo interior no se gana por<br />

control,<br />

sino por una rendición que proviene de tu propia miseria.<br />

No sabía lo que era el lirio.<br />

No sabía nada del lirio.<br />

Y Dios me avergonzaba obligándome a admitirlo.<br />

Así que puse en mi corazón al lirio ante mí<br />

–con sencillez y quietud–<br />

para mirarlo y <strong>es</strong>cucharlo.<br />

Me rendí al lirio.<br />

No iba a controlarlo ni a plagiarlo.<br />

“Cuéntame tus secretos. Yo te <strong>es</strong>pero...<strong>”</strong><br />

Dios nunca te da explicacion<strong>es</strong>.<br />

Te da vida. Y en el remolino de la vida,<br />

fuerza las preguntas que Él d<strong>es</strong>ea cont<strong>es</strong>tar.<br />

Cuando Él sopla vida en la Escritura<br />

ésta se convierte en Palabra<br />

y en algo vivo.<br />

No pued<strong>es</strong> controlar la Palabra.<br />

La Palabra de Dios tiene que tomar control de ti.<br />

Dice,<strong>“La</strong> Palabra de Dios probó a José.<strong>”</strong><br />

La Palabra de Dios empezó a ‘probarme’ a mí.<br />

Y el lirio entró en mi vida.<br />

No era tanto que memoricé lo que la Escritura<br />

decía del lirio, aunque lo hice.<br />

Era que la Palabra entró en mi conciencia y<br />

se convirtió en algo que <strong>es</strong>taba vivo.<br />

El Lirio <strong>es</strong>taba allí.<br />

97


De alguna forma todas las cosas <strong>es</strong>taban bajo la inspección del<br />

Lirio y<br />

se situaban frente al Lirio para ser sop<strong>es</strong>adas.<br />

Aquello que fuera el Lirio, el principio que repr<strong>es</strong>entaba,<br />

había llegado a mi percepción.<br />

El Lirio <strong>es</strong>taba allí...<br />

y el Lirio era inmenso y magnífico...<br />

y el Lirio no se doblegaba.<br />

A medida que los m<strong>es</strong><strong>es</strong> pasaban era como si la más sencilla, la<br />

más exquisita pr<strong>es</strong>encia de belleza y de paz <strong>es</strong>tuviera delante de mí,<br />

siempre ahí, pero siempre muda.<br />

Y siempre fuera de mí.<br />

Una pequeña paz había sido mía, una medida de d<strong>es</strong>canso donde<br />

había <strong>es</strong>tado contenta. Ahora el Lirio me mostraba una paz<br />

absoluta, el poder de una quietud verdadera. Y pensé que el<br />

Lirio me impartiría <strong>es</strong>ta paz, <strong>es</strong>ta gran paz.<br />

Pero en vez de <strong>es</strong>o, el Lirio me angustió donde había <strong>es</strong>tado<br />

contenta.<br />

Se burló de mí con un mundo de tranquilidad al que no podía<br />

acceder, y no me ofrecía una salida, ni pista alguna de cómo<br />

entrar. Mi pequeña paz se convirtió en un andrajo, algo<br />

miserable.<br />

Ya no era suficiente.<br />

El Lirio me había hecho ver... pero al ver todo lo demás, en vez<br />

de mayor quietud, menor d<strong>es</strong>canso disfrutaba.<br />

La pr<strong>es</strong>encia del Lirio era un <strong>es</strong>pejo en el que<br />

98


era expu<strong>es</strong>ta torpe, y mi vida, un caos.<br />

Pero el Lirio no me consoló,<br />

ni el Lirio me instruyó.<br />

Mi vida empezó a d<strong>es</strong>garrarse por un d<strong>es</strong>nudo contraste<br />

ante la quieta calma del Lirio, y poco a poco me hice eco de la<br />

preocupación y de la confusión,<br />

de la complejidad de mi vida<br />

y mi visión de ella.<br />

Era <strong>fe</strong>liz ant<strong>es</strong> del lirio.<br />

La vida era dura y <strong>es</strong>o lo había aceptado.<br />

Estaba en paz ant<strong>es</strong> de que llegara el Lirio.<br />

Ahora, al mirar fijamente el rostro mismo de la Paz, mi falta de<br />

paz quedó expu<strong>es</strong>ta.<br />

No a otros. Esto era interior, todo era privado.<br />

No me preocupaba la marcha de <strong>es</strong>te asunto en los demás.<br />

Yo fui expu<strong>es</strong>ta ante Dios y ante mí misma.<br />

No <strong>es</strong>taba donde podía <strong>es</strong>tar.<br />

Y no podía ir donde debía ir.<br />

Esta era otra <strong>es</strong><strong>fe</strong>ra de Dios<br />

–una que me era d<strong>es</strong>conocida–<br />

y que ciertamente no había yo tocado.<br />

Y mi vida, con la que había <strong>es</strong>tado bastante contenta por haber<br />

visto mucho de Dios,<br />

se hizo algo –no sólo inaceptable– sino insoportable.<br />

Poco a poco me puse al día en cuanto a la identidad del Lirio.<br />

El Lirio repr<strong>es</strong>entaba la tranquilidad, el d<strong>es</strong>canso.<br />

D<strong>es</strong>canso en Dios. Eso lo sabía.<br />

Pero <strong>es</strong>taba fuera de mí, y aunque podía empezar a intuirlo, no<br />

podía hacer que entrara en mis entrañas.<br />

99


Esperaba que <strong>es</strong>a gran paz me fuera impartida.<br />

No lo fue.<br />

Como segunda <strong>es</strong>peranza había asumido que me sería dado el<br />

secreto para obtener <strong>es</strong>a paz.<br />

No me fue dado.<br />

Empecé a mirar con malos ojos al Lirio.<br />

“Simple<strong>”</strong>, clamaba, “¡tiene que ser algo simple!<strong>”</strong><br />

De alguna manera tenía que poseer la paz del Lirio.<br />

Permanecía ante mí, pero no se iba a rendir a mí.<br />

Lo veía, pero no podía alcanzarle ni entenderle.<br />

Y no me decía nada.<br />

Sólo me hacía VER.<br />

Parecía observar mi golpear, mis manos retorcidas, y tan sólo<br />

<strong>es</strong>peraba...<br />

Midió mi rendimiento bajo todas las tension<strong>es</strong> disponibl<strong>es</strong> y me<br />

halló deficiente.<br />

Me juzgó con una condenación pertinaz.<br />

Era una <strong>es</strong>pina clavada en mi normalidad.<br />

Nunca podría agradarle ni alcanzarle.<br />

Esa terrible tranquilidad constante. Me atormentaba.<br />

Empecé a odiar al lirio.<br />

Como me había recreado en el <strong>es</strong>tudio del lirio,<br />

los amigos preguntaban,<br />

“¿Qué <strong>es</strong>tás aprendiendo del lirio?<strong>”</strong><br />

“¡A mí no me habléis del lirio!<strong>”</strong>,<br />

cont<strong>es</strong>taba con brusquedad.<br />

Había dado por sentado que el Lirio vendría a apoyarme.<br />

Y <strong>es</strong>taba errada.<br />

100


El Lirio no era amigo para mi inquietud, ni socorro para mi<br />

demencia.<br />

Con el tiempo la visión del lirio se d<strong>es</strong>vanecía.<br />

Transcurrieron varios años.<br />

Grand<strong>es</strong> tormentas llenaron mi vida, como dijo Pablo,<br />

“De fuera, conflictos; de dentro, temor<strong>es</strong>.<strong>”</strong><br />

Rechazo, palabras atormentadoras, calumnias, malentendidos,<br />

maldad...<br />

todo <strong>es</strong>to era una gran ventisca en mi contra.<br />

Mi caos interno bullía con culpa, fracaso, inutilidad,<br />

amargura, acusación a Dios...<br />

Me hubiera encantado tener tan sólo <strong>es</strong>a pequeña medida de paz<br />

otra vez,<br />

pero aún ella me rehuía.<br />

Al fin dejé de orar pidiendo solucion<strong>es</strong>.<br />

“Sólo paz, Señor. Sólo quiero paz.<strong>”</strong><br />

Ya hacía tiempo que había d<strong>es</strong><strong>es</strong>timado el lirio.<br />

Me había cansado de su mol<strong>es</strong>ta pr<strong>es</strong>encia.<br />

No tenía posibilidad<strong>es</strong>. No podía hacerlo.<br />

Lo dejé por imposible.<br />

Pero en <strong>es</strong>e mismo lugar al fin palpé al Lirio.<br />

El Lirio, en secreto, me había obligado a entrar... en el secreto.<br />

Al renunciar pude ser controlada.<br />

Al dejar de intentarlo pude ser r<strong>es</strong>catada,<br />

y al no poseer nada pude recibir.<br />

Con el paso del tiempo, había aprendido que...<br />

101


No puedo salvar<br />

No sé<br />

No tengo<br />

No puedo ser<br />

No puedo hacer<br />

No puedo conseguir<br />

No puedo <strong>es</strong>perar<br />

No puedo solucionar<br />

No puedo entender<br />

Ni siquiera puedo creer.<br />

Ahora sabía por qué el Lirio había <strong>es</strong>tado fuera de mi alcance.<br />

Quería añadirle al Lirio los t<strong>es</strong>oros de mi <strong>fe</strong>.<br />

De mi conocimiento.<br />

De los don<strong>es</strong> del Espíritu.<br />

De mis fuerzas.<br />

Pero el Lirio no quería saber nada.<br />

Él habría de ser el ÚNICO principio o no habría de ser nada de<br />

nada.<br />

Por <strong>es</strong>o el Lirio no crece en lugar<strong>es</strong> concurridos.<br />

Crece en tierra santa en d<strong>es</strong>iertos remotos, <strong>es</strong>téril<strong>es</strong>,<br />

d<strong>es</strong>conocidos por casi todos.<br />

Le gusta el lugar de la pobreza.<br />

Y el Lirio me rechazó porque poseía demasiado.<br />

Tenía que perder mucho para hacer <strong>es</strong>pacio<br />

a la simplicidad que <strong>es</strong> el Lirio.<br />

“El Lirio ni trabaja...<strong>”</strong><br />

La maldición del jardín sobre Adán recaía en su trabajo.<br />

Dios <strong>es</strong> el trabajador, Cristo <strong>es</strong> el trabajador.<br />

Salmos 127: Si el Señor no construy<strong>es</strong>e la casa...<br />

102


No puedo hacer el trabajo, pero creo que sí puedo.<br />

O al menos creo que debería hacerlo.<br />

Tengo que fracasar para conocer al Lirio.<br />

Fracasar por completo.<br />

Tengo que aceptar <strong>es</strong>e fracaso para ser poseído por la paz del Lirio.<br />

Muchos fracasan pero no aceptan <strong>es</strong>e fracaso.<br />

Se rinden y se marchan.<br />

<strong>“La</strong> vida cristiana no funciona.<strong>”</strong><br />

O se d<strong>es</strong><strong>es</strong>peran y se sientan r<strong>es</strong>pirando el polvo del camino.<br />

El Lirio no lo intenta.<br />

Es.<br />

Es y permanece donde <strong>es</strong>tá.<br />

Si llueve, se moja.<br />

Si el sol brilla <strong>es</strong>tá tibio.<br />

Es lo que <strong>es</strong>.<br />

Es él mismo doquiera que <strong>es</strong>té.<br />

Existe... con los adornos que Dios le da.<br />

No hay más adorno.<br />

Sin pretension<strong>es</strong>, sin <strong>es</strong>fuerzos, tan sólo <strong>es</strong>.<br />

A lo mejor piensas que <strong>es</strong> <strong>es</strong>túpido y necio.<br />

Pero <strong>es</strong> muy difícil hallar a alguien que <strong>es</strong>.<br />

Que sea lo suficientemente hon<strong>es</strong>to, lo suficientemente libre<br />

para tan sólo ser.<br />

Es la cosa más difícil del mundo ser tan simple.<br />

Es devastador para el ego, muerte para la ambición.<br />

Tien<strong>es</strong> que naufragar ant<strong>es</strong> de ser, y saber que <strong>es</strong>o basta.<br />

Basta con ser.<br />

Solamente ser lo que Dios quiere que hoy seas.<br />

El lirio de <strong>es</strong>te pasaje <strong>es</strong> una flor pequeña y común que crece en<br />

las áreas d<strong>es</strong>iertas de la Tierra Santa. No <strong>es</strong> la flor r<strong>es</strong>baladiza y<br />

cérea que conocemos en América.<br />

Una flor corriente.<br />

103


Bonita, rara... pero una flor cualquiera.<br />

Siempre nec<strong>es</strong>itamos ser algo –algo <strong>es</strong>pecial–<br />

algo “mejor que<strong>”</strong>.<br />

¿Es que no podemos ser corrient<strong>es</strong>?<br />

¿Es que no podemos ser lo que somos... y dejar que su<br />

magnificencia brille sobre nosotros?<br />

“Tenemos <strong>es</strong>te t<strong>es</strong>oro en vasos de barro.<strong>”</strong><br />

El lirio <strong>es</strong> una simple vasija terrenal.<br />

Es Dios quien le otorga <strong>es</strong>plendor.<br />

También el lirio <strong>es</strong>tá supeditado.<br />

Dios le tiene que dar todo<br />

para mantener al lirio con vida.<br />

Porque el lirio no puede alimentarse a sí mismo.<br />

El lirio, pu<strong>es</strong> vive al recibir de Dios,<br />

sólo se viste como Dios le viste.<br />

Tan glorioso como Salomón, el rey más <strong>es</strong>pléndido que jamás<br />

existió en la historia.<br />

En su simplicidad, en su oscuridad (pu<strong>es</strong> pocos le valoran) se le<br />

provee de un talante digno de realeza.<br />

Lo que gane para mí misma puede que sea muy bueno;<br />

aquello por lo que trabajo puede que sea magnífico;<br />

pero lo que Dios me da sin mi propia contribución<br />

<strong>es</strong> de un <strong>es</strong>plendor real sin parangón.<br />

Muy lejos de mi alcance.<br />

De lo cual no he de ser digno.<br />

Una belleza otorgada. Un regalo entregado.<br />

La paz os dejo.<br />

“Mi paz os dejo. No como el mundo la da, yo os la entrego.<strong>”</strong><br />

Nu<strong>es</strong>tro problema no <strong>es</strong> que no tengamos paz.<br />

Es que no podemos aceptar la paz como un simple regalo.<br />

104


Tengo que ser empobrecido lo suficiente como para ser humilde.<br />

Tengo que ser hecho lo bastante humilde como para pedir<br />

limosna.<br />

“Dios, dame paz.<strong>”</strong><br />

No puedo ‘hallarla’ ni puedo ‘hacerla’, ni puedo ‘ganármela’.<br />

Únicamente puedo recibirla.<br />

Heb 4:9 Queda un reposo para el pueblo de Dios.<br />

Porque el que ha entrado en su reposo,<br />

también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.<br />

Procuremos, pu<strong>es</strong>, entrar en aquel reposo...<br />

Yo tenía muchas opinion<strong>es</strong><br />

en cuanto al significado del Lirio<br />

pero al final sé que el d<strong>es</strong>canso proviene de la <strong>fe</strong>.<br />

Por tanto el Lirio repr<strong>es</strong>enta la <strong>fe</strong>, y no tanto el d<strong>es</strong>canso.<br />

El d<strong>es</strong>canso <strong>es</strong> un r<strong>es</strong>ultado.<br />

La quietud <strong>es</strong> la evidencia...<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> el porqué.<br />

La <strong>fe</strong> <strong>es</strong> el principio.<br />

Fe de que Dios <strong>es</strong> el YO SOY.<br />

Como joven aprendiz de la <strong>fe</strong> sab<strong>es</strong><br />

Que Dios lo hará... si yo lo hago<br />

Que Dios lo hace... sólo si yo puedo.<br />

Que Dios podría... sólo si yo lo hago.<br />

Los griton<strong>es</strong> de la <strong>fe</strong> y los porfiador<strong>es</strong> dicen, “Dios lo hará...<br />

como yo digo.<strong>”</strong><br />

Los evangélicos dicen acerca de la <strong>fe</strong>:<br />

<strong>“La</strong> Palabra de Dios lo dice, pero no te puedo explicar por qué<br />

no funciona.<strong>”</strong><br />

Yo he <strong>es</strong>tado en ambos campamentos.<br />

La verdadera <strong>fe</strong> <strong>es</strong> <strong>es</strong>ta:<br />

105


Dios lo hizo. Consumado <strong>es</strong>.<br />

El trabajo <strong>es</strong>tá hecho.<br />

Mi parte <strong>es</strong> averigüar qué trabajo ha sido realizado y recibirlo.<br />

La parte que le toca a Dios <strong>es</strong> reducirme hasta poder llegar ahí.<br />

Prot<strong>es</strong>taré que <strong>es</strong> injusto que d<strong>es</strong>truya mi <strong>fe</strong> en el hombre.<br />

Rechinaré y le acusaré si tan siquiera pone un dedo sobre la <strong>fe</strong><br />

que tengo en mí mismo.<br />

Mi <strong>fe</strong> en todo lo demás ha de ser cruelmente as<strong>es</strong>inada.<br />

El Lirio no había venido en mi auxilio.<br />

El Lirio había venido para d<strong>es</strong>truir todo lo que no era ‘Lirio’ en<br />

mi interior.<br />

El Lirio trajo consigo vergüenza y naufragio, d<strong>es</strong>trucción a mis<br />

seguridad<strong>es</strong>.<br />

Roy H<strong>es</strong>sion dice,<br />

“El avivamiento no vuela la tapa por los air<strong>es</strong>. Es el d<strong>es</strong>agüe lo<br />

que se d<strong>es</strong>tapa.<strong>”</strong><br />

El tapón del d<strong>es</strong>agüe se d<strong>es</strong>prende bajo tus pi<strong>es</strong> y todo lo que<br />

creías que era dura roca sólo se d<strong>es</strong>vela como un peligro mortal<br />

de arena.<br />

Y no te van a sacar de ella.<br />

Te vas a hundir más y más hasta que seas d<strong>es</strong>truido, d<strong>es</strong>truido<br />

totalmente.<br />

El Lirio pertenece a la orilla de la r<strong>es</strong>urrección de las dos playas<br />

de la vida.<br />

El Lirio llega d<strong>es</strong>pués de la muerte.<br />

No <strong>es</strong> una casualidad que en Semana Santa se vean lirios<br />

blancos.<br />

Salmo 149: 4,5,6<br />

Porque Jehová tiene contentamiento en su pueblo;<br />

106


Hermoseará a los humild<strong>es</strong> con la salvación.<br />

Regocíjense los santos por su gloria (que Dios l<strong>es</strong> confiere)<br />

Y canten aun sobre sus camas.<br />

Exalten a Dios con sus gargantas,<br />

Y <strong>es</strong>padas de dos filos en sus manos...<br />

Creo que el único dolor válido <strong>es</strong> el dolor de morir a uno mismo.<br />

Renunciar a la vida de tu alma, morir a tus derechos y d<strong>es</strong>eos.<br />

Este <strong>es</strong> un dolor insoportable. Es la agonía del Getsemaní y para<br />

ello existe el ministerio de los ángel<strong>es</strong> ascendiendo y<br />

d<strong>es</strong>cendiendo.<br />

Cualquier otro dolor tiene poca o ninguna validez.<br />

Alguien me dijo “He sufrido tanto dolor en mi vida que nadie<br />

reconoce...<strong>”</strong><br />

Y dije, “Lo entiendo. Yo también lo he sufrido;<br />

Pero en mi vida me <strong>es</strong> vergonzoso admitir que la vasta mayoría<br />

de mi dolor era el dolor de la rebelión o de los derechos, el dolor<br />

del pecado que no gana simpatías para con Dios.<strong>”</strong><br />

Debemos ser vaciados para poder recibir.<br />

Debemos ser empobrecidos para poder tener riqueza.<br />

Debemos ser d<strong>es</strong>nudados para poder ser v<strong>es</strong>tidos.<br />

Y debemos ser reducidos ant<strong>es</strong> de poder ser expandidos.<br />

Mateo 6:30<br />

Y si la hierba del campo que hoy <strong>es</strong>, y mañana se echa en el<br />

horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros,<br />

hombr<strong>es</strong> de poca <strong>fe</strong>? No os afanéis, pu<strong>es</strong>, diciendo: ¿Qué<br />

comeremos, o qué beberemos, o qué v<strong>es</strong>tiremos?<br />

Porque los gentil<strong>es</strong> (paganos) buscan todas <strong>es</strong>tas cosas; pero<br />

vu<strong>es</strong>tro Padre cel<strong>es</strong>tial sabe que tenéis nec<strong>es</strong>idad de todas <strong>es</strong>tas<br />

cosas.<br />

107


Mas buscad (encaminaros a y luchar por) primeramente el reino<br />

de Dios y su justicia, (su forma de hacer las cosas y de ser justo)<br />

y todas <strong>es</strong>tas cosas os serán añadidas.<br />

Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de<br />

mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.<br />

Que nos vistan. Nec<strong>es</strong>itamos la ropa... pero <strong>es</strong> mucho más que<br />

v<strong>es</strong>tiduras.<br />

Es la cubierta de la vergüenza de nu<strong>es</strong>tro pecado, la provisión de<br />

la vida misma de Cristo para cubrir nu<strong>es</strong>tra inepta humanidad.<br />

“Ser rev<strong>es</strong>tidos de Cristo<strong>”</strong>, no intentar ser COMO Él...<br />

<strong>es</strong>e <strong>es</strong> el Lirio.<br />

No voy a “intentar ser.<strong>”</strong><br />

Dejaré que Él sea lo que Él quiera ser dentro de mí.<br />

Yo no me moveré, dejaré que Él se levante dentro.<br />

No pensaré.<br />

Él será mi mente.<br />

No exprimiré el amor para que salga.<br />

Él salpicará el amor a través de mí.<br />

“Yo no... Él sí.<strong>”</strong><br />

Escribí en mi Biblia en 1986<br />

“Yo no puedo hacerlo, Él puede.<strong>”</strong><br />

Creía que <strong>es</strong>a era la intuición más alta posible.<br />

Pero en 1987 <strong>es</strong>cribí, “Yo no puedo hacerlo, Él podrá<strong>”</strong>,<br />

queriendo decir que en algún tiempo futuro, Él podrá.<br />

Otra vez más tarde <strong>es</strong>cribí, “Yo no puedo hacerlo, Él lo hace<strong>”</strong>,<br />

quería decir pr<strong>es</strong>ente,<br />

Él lo <strong>es</strong>tá haciendo.<br />

108


Pero en 1988 <strong>es</strong>cribí, “No puedo serlo, Él ya lo <strong>es</strong><strong>”</strong>,<br />

queriendo decir que <strong>es</strong> consumado.<br />

No ha de ser.<br />

Ya ha sido hecho.<br />

¡Doy un paso adelante y me introduzco en lo que <strong>es</strong>tá preparado<br />

para mí y <strong>es</strong>pero que mi <strong>fe</strong> y mi d<strong>es</strong>canso permitan que las<br />

prom<strong>es</strong>as vivan por dentro, y por fuera, y a través de mí!<br />

Aquí hay algunos de los <strong>es</strong>critos de Watchman NEE,<br />

alguien que no sólo conoció al Lirio, sino que se convirtió en<br />

uno de ellos.<br />

“Dios quiere demostrarnos que no podemos hacer nada en<br />

absoluto, y hasta que <strong>es</strong>o sea reconocido por completo nu<strong>es</strong>tra<br />

d<strong>es</strong><strong>es</strong>peración y d<strong>es</strong>ilusión nunca c<strong>es</strong>arán.<br />

Todos tenemos que llegar al punto en que digamos, ‘Señor, soy<br />

incapaz de hacer nada para Ti, mas confío en que Tú lo harás<br />

todo en mí.’<br />

... <strong>es</strong> Cristo el que obra en mí lo que agrada a Dios.<br />

Cuanto ant<strong>es</strong> renunciemos a intentarlo, tanto mejor, pu<strong>es</strong> si<br />

monopolizamos la tarea, no hay ya <strong>es</strong>pacio para el Espíritu<br />

Santo. Pero si decimos, ‘No lo voy a hacer; confiaré en que Tú<br />

lo hagas por mí’, <strong>es</strong> que entonc<strong>es</strong> hallaremos que un Poder más<br />

fuerte que nosotros mismos nos <strong>es</strong>tá llevando adelante.<strong>”</strong><br />

“Hemos hablado de intentarlo y de confiar, y de la di<strong>fe</strong>rencia<br />

entre ambos. Creedme, <strong>es</strong> la di<strong>fe</strong>rencia entre el cielo y el<br />

infierno. No <strong>es</strong> algo de lo que uno charla como si de un<br />

pensamiento bonito se tratase; <strong>es</strong> la cruda realidad.<br />

‘Señor, yo no puedo: así que voy a quitar mis manos; d<strong>es</strong>de<br />

ahora confiaré en ti para <strong>es</strong>o’.<br />

Nos negamos a actuar; dependemos de Él para hacerlo, y luego<br />

entramos plenamente y con gozo en la acción que Él inicia. No<br />

<strong>es</strong> pasividad, <strong>es</strong> la vida más activa que existe, el confiar en el<br />

109


Señor de <strong>es</strong>a forma; extrayendo la vida de Él, tomándole para<br />

que sea nu<strong>es</strong>tra vida misma; permitiéndole vivir Su vida en<br />

nosotros según avanzamos en Su nombre.<strong>”</strong><br />

Ester se convirtió en un lirio.<br />

D<strong>es</strong>cansó en el consejo de sus superior<strong>es</strong>.<br />

No buscó adornos <strong>es</strong>pecial<strong>es</strong>, ni adornos colgant<strong>es</strong><br />

cuando acudió a su rey por primera vez.<br />

Sin pretension<strong>es</strong>, pero también sin r<strong>es</strong>istencia.<br />

Y el rey la amó.<br />

Pero sobre todo <strong>es</strong>o, salvó a su pueblo.<br />

La simplicidad ha dejado de atraernos.<br />

Pero <strong>es</strong> de su propia rareza de donde proviene su gran valor.<br />

José se convirtió en un lirio en su injusta prisión.<br />

Renunció a intentarlo.<br />

Tenía las llav<strong>es</strong> de la celda.<br />

Podía haber <strong>es</strong>capado.<br />

Pero d<strong>es</strong>cansó.<br />

Esperó y Dios le concedió belleza y poder.<br />

Le adornó de <strong>es</strong>plendor.<br />

David aprendió a d<strong>es</strong>cansar en la época en que se <strong>es</strong>condía y huía de<br />

la ira de Saúl.<br />

Al tratar de salvar su pellejo aprendió de su gran R<strong>es</strong>catador,<br />

y tuvo paz como un lirio.<br />

Daniel vio de niño cómo su familia fue as<strong>es</strong>inada y su casa ardía.<br />

D<strong>es</strong>pojado de su hombría, llevado lejos, hecho <strong>es</strong>clavo... d<strong>es</strong>cansó.<br />

Dios le adornó de sabiduría, secretos de los sueños, poder, autoridad,<br />

influencia y vision<strong>es</strong>.<br />

Daniel fue un gran lirio.<br />

110


Pablo fue un lirio en la prisión de Roma, con cadenas, con carencias.<br />

Se regocijó y <strong>es</strong>cribió... sin quejarse, sin <strong>es</strong>fuerzo para cambiar o<br />

<strong>es</strong>capar.<br />

Dios lo adornó a través de los siglos con un lugar <strong>es</strong>pecial como<br />

<strong>es</strong>critor mismo de la Palabra de Dios.<br />

¿Qué hubiera pasado si se hubiera amargado y hubiera rehusado<br />

<strong>es</strong>cribir a su rebaño?<br />

Cuán bendecidos hemos sido por haber sido él un lirio.<br />

¿Entiend<strong>es</strong> a lo que tien<strong>es</strong> que renunciar para ser un lirio?<br />

Piensa en <strong>es</strong>tas cosas...<br />

Control<br />

Entendimiento<br />

Eleccion<strong>es</strong><br />

Derechos<br />

Logros<br />

Buen nombre<br />

Derechos de propiedad<br />

Orgullo...<br />

...el propio “Yo<strong>”</strong>.<br />

Copyright © Martha Kilpatrick l997<br />

111


112


IV<br />

Vosotros<br />

Que Estáis Solos<br />

Los hijos vagabundos de Dios siempre se encuentran en un<br />

fuego perpetuo de soledad, luchando ante el rostro<br />

de un continuo d<strong>es</strong>engaño en la Igl<strong>es</strong>ia, en la familia, en los<br />

amigos.<br />

Algunos se han amargado.<br />

Algunos se han acomodado a vivir en una d<strong>es</strong><strong>es</strong>peración incierta.<br />

Algunos aún lo intentan, buscando, <strong>es</strong>cudriñando.<br />

Mas unos pocos han visto la Luz del propósito de J<strong>es</strong>ús<br />

y han aceptado el d<strong>es</strong>amparo que <strong>es</strong> nu<strong>es</strong>tra íntima realidad<br />

y la tragedia de la condición humana.<br />

La doncella Sulamita sufrió <strong>es</strong>a soledad...<br />

malentendidos de sus compañeros y abusos de<br />

las autoridad<strong>es</strong>. En la <strong>fe</strong>rviente persecución de su rey,<br />

soportó <strong>es</strong>carnio y prueba.<br />

Pero su soledad sólo podía ser satis<strong>fe</strong>cha por su Amante.<br />

Había adquirido la sabiduría de sólo buscarle a Él,<br />

sin sustitutos.<br />

Creo que se acerca el tiempo en el que el Señor recompensará a<br />

aquellos que han abrazado la soledad como Su voluntad y<br />

han consentido a la d<strong>es</strong>trucción<br />

de los altar<strong>es</strong> erigidos para los camaradas idolatrados del<br />

interior.<br />

La recompensa habrá de ser como lo fue para Abraham:<br />

113


YO SOY tu inconmensurable galardón.<br />

Será el placer de J<strong>es</strong>ús llenar la profunda<br />

soledad del alma consigo Mismo.<br />

Él ha visto nu<strong>es</strong>tra <strong>es</strong>pera.<br />

Él ha probado el corazón que sólo le quiere a Él.<br />

Tu Compañero se levanta, oh Sulamita,<br />

y Él se dejará encontrar por ti.<br />

Copyright © 1999 Martha Blaney Kilpatrick<br />

114


V<br />

El misterio<br />

El viento sopla de donde quiere y oy<strong>es</strong> su sonido;<br />

mas ni sab<strong>es</strong> de dónde viene, ni a dónde va;<br />

así <strong>es</strong> todo aquel que <strong>es</strong> nacido del Espíritu.<br />

Juan 3:8<br />

Eva no viviría con la incertidumbre del misterio.<br />

Fue engañada por la oscuridad del conocimiento;<br />

dejó de nec<strong>es</strong>itar a Dios como Luz.<br />

Cometió suicidio <strong>es</strong>piritual bebiendo el<br />

veneno de una miserable información.<br />

No toleraría su ignorancia<br />

y su vulnerabilidad.<br />

No soportó un Dios Insondable<br />

que le exigió que viviera en un <strong>es</strong>tado constante de<br />

d<strong>es</strong>concertante silencio.<br />

Cuando no consentimos los misterios<br />

y d<strong>es</strong>eamos r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas tanto que<br />

“cualquier r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta valdrá aunque tengamos que fabricarla,<strong>”</strong><br />

<strong>es</strong>tamos preparados para ingerir<br />

las mentiras de la pulida inteligencia.<br />

Y hemos dejado a Dios por Su enemigo. Igual que Eva.<br />

Este Dios Inteligente te obliga a hacer equilibrios<br />

en el aire bailando sobre el fino cable<br />

de lo d<strong>es</strong>conocido e in<strong>es</strong>crutable.<br />

Sólo si te propon<strong>es</strong> conocerle a Él pued<strong>es</strong> sobrevivir.<br />

115


Él sabe.<br />

El pr<strong>es</strong>ente <strong>es</strong> una incógnita, el pasado un enigma,<br />

el futuro <strong>es</strong> imprevisible y<br />

el único que lo conoce <strong>es</strong> Dios. . .<br />

¡y Él lo sabe!<br />

Si tengo que vivir con toda <strong>es</strong>a incertidumbre quedo,<br />

no sólo a Su merced,<br />

sino a merced. . . de cada cosa y cada persona.<br />

Pero la incertidumbre se siente como inseguridad. . .<br />

hasta que Él sea el ancla sinfín<br />

de mi zarandeada Vida.<br />

No nec<strong>es</strong>ito conocimiento para <strong>es</strong>tar seguro.<br />

Nec<strong>es</strong>ito conocerle a Él, a mi J<strong>es</strong>ús como la Única Roca,<br />

la sólida Fortaleza inamovible en medio del mar rugiente.<br />

La religión cree que si sab<strong>es</strong><br />

los hechos y conoc<strong>es</strong> las ley<strong>es</strong><br />

conoc<strong>es</strong> a Dios.<br />

La “nec<strong>es</strong>idad de saber<strong>”</strong><br />

<strong>es</strong> de hecho el comezón insidioso de controlar,<br />

de contener. . . ¡a Dios!<br />

Pero Nu<strong>es</strong>tro Dios <strong>es</strong> salvaje: ¡indomable, incontrolable!<br />

Lo más que pued<strong>es</strong> digerir <strong>es</strong> una mota de Su verdad.<br />

Él nos dice mucho pero como un Padre Sabio<br />

detiene lo que no podemos sobrellevar.<br />

“Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora<br />

no las podéis sobrellevar.<strong>”</strong><br />

116


Dios no puede ser conocido<br />

salvo por una revelación final, absoluta y abierta,<br />

un troquelado continuo.<br />

Además. . .<br />

no nos conocemos los unos a los otros, y –aún más asombroso–<br />

no nos conocemos a nosotros mismos.<br />

No puedo etiquetarte por tus actos de hoy<br />

con pequeñas etiquetas talladas en piedra.<br />

Y no me encasill<strong>es</strong> por mis singularidad<strong>es</strong>,<br />

no me apriet<strong>es</strong> en rígidas cajas de embalar<br />

para poder predecirme.<br />

Aún nos queda por saber quién<strong>es</strong> somos,<br />

Y más aún lo que hemos sido.<br />

Y ante todo d<strong>es</strong>conocemos... lo qué en verdad conocemos.<br />

Nu<strong>es</strong>tra ignorancia sólo <strong>es</strong> sobrepasada por nu<strong>es</strong>tra necedad de<br />

pensar que sabemos.<br />

Deja que tus preguntas no tengan ninguna r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta<br />

hasta que Él cont<strong>es</strong>te.<br />

Vive con el Misterio.<br />

Acepta la perplejidad.<br />

Espera. . .<br />

Envía tu “nec<strong>es</strong>idad-de-saber<strong>”</strong> a Su corazón.<br />

D<strong>es</strong>cansa en Aquel que lo conoce Todo<br />

Porque Él <strong>es</strong> el origen de Todo<br />

¡y gobierna lo que Él originó!<br />

117


Entonc<strong>es</strong> Sus Secretos compartidos serán Maravilla,<br />

y como un niño inocente vivirás en Constante Reverencia.<br />

Copyright © 2000 Martha Blaney Kilpatrick<br />

118


VI<br />

“Lo que <strong>es</strong>...<strong>”</strong><br />

El perdón <strong>es</strong>...<br />

El perdón <strong>es</strong>. . . aceptar el uso soberano de Dios<br />

de las personas y situacion<strong>es</strong><br />

para d<strong>es</strong>pojarte de tu importancia,<br />

y humillar tu amor propio.<br />

El perdón <strong>es</strong>. . . <strong>fe</strong> en el control y beneplácito de Dios<br />

y en Su Bondad que todo lo sabe<br />

que se derrama sobre un enanito como tú.<br />

El perdón <strong>es</strong>. . . <strong>es</strong>perar que<br />

la Misericordia Divina <strong>es</strong> cuanto nec<strong>es</strong>itas.<br />

El perdón <strong>es</strong>. . . amar al Gran Redentor<br />

y obedecerle en sencillez por causa de Él.<br />

El perdón <strong>es</strong> dejar las cosas. . . a Dios.<br />

entregándole todos tus sueños para que Él los cumpla,<br />

y. . . a ti mismo bajo Su sola protección.<br />

¡Perdonar <strong>es</strong> dejar a Dios ser Dios!<br />

y hacer lo que a Él le agrada. . .<br />

o no hacerlo.<br />

El perdón no <strong>es</strong>. . .<br />

una pusilánime tolerancia del mal.<br />

119


El perdón no <strong>es</strong>. . . .<br />

ser “bueno<strong>”</strong> porque <strong>es</strong>a <strong>es</strong> la órden recibida.<br />

El perdón no <strong>es</strong>. . .<br />

excusar el mal por lástima.<br />

Las o<strong>fe</strong>nsas son pecados. Punto y final.<br />

El pecado no <strong>es</strong> un “¡UPS!, no quise decir <strong>es</strong>o.<strong>”</strong><br />

El pecado <strong>es</strong> deliberado,<br />

siempre una opción muy calculada,<br />

aunque <strong>es</strong>té allá en lo profundo.<br />

El perdón no <strong>es</strong>. . . explicar por qué.<br />

No hay ningún “por qué<strong>”</strong> para ninguno de nosotros.<br />

Todos <strong>es</strong>tamos “sin excusas.<strong>”</strong><br />

El perdón no <strong>es</strong>. . . tragarse el dolor y<br />

engañarse a uno mismo sobre su existencia.<br />

Ese “perdón falso<strong>”</strong> sigue dejándonos ciegos de rencor...<br />

enterrado y agriado en profunda<br />

y en<strong>fe</strong>rma inconsciencia del alma .<br />

Ese perdón <strong>es</strong> intensamente peligroso porque<br />

llega a convertirse en en<strong>fe</strong>rmedad contagiosa<br />

oculta bajo las mantas de la autocomplaciencia,<br />

un mal que nunca deja de extenderse por medio<br />

de palabras y hechos que lo encubren y entierran.<br />

Falta de perdón: indetectada, incon<strong>fe</strong>sada,<br />

mortal para ti<br />

y extraordinariamente peligrosa para los demás.<br />

120


La amargura <strong>es</strong>...<br />

Mirad bien, no sea que alguno deje de<br />

alcanzar la gracia de Dios;<br />

que brotando alguna raíz de amargura, os <strong>es</strong>torbe, y por ella<br />

muchos sean contaminados;<br />

Hebreos 12:15<br />

La amargura <strong>es</strong> una herida lamida tras la pu<strong>es</strong>ta del sol y se<br />

convierte en el nido que el diablo socava<br />

en tu alma<br />

para in<strong>fe</strong>ctar todo tu ser<br />

con la rabia misma que Satanás <strong>es</strong>cupe hacia Dios.<br />

No se ponga el sol sobre vu<strong>es</strong>tro enojo,<br />

ni deis lugar al diablo.<br />

E<strong>fe</strong>. 4:26-27<br />

La amargura <strong>es</strong> dolor retorcido en malicia,<br />

injusticia vuelta legalismo,<br />

pecado convertido en mal.<br />

La amargura echa raíc<strong>es</strong> cuando cre<strong>es</strong> <strong>es</strong>tar<br />

“por encima del Dios Altísimo<strong>”</strong><br />

más “justo<strong>”</strong> que Dios, más “bueno<strong>”</strong> que J<strong>es</strong>ús,<br />

y más “hábil<strong>”</strong> que el Espíritu.<br />

La amargura brota y crece en la tierra del orgullo.<br />

La arrogancia de “yo nunca haría lo que usted hizo<strong>”</strong><br />

y el egotismo que d<strong>es</strong>deña como indigno al o<strong>fe</strong>nsor.<br />

La amargura <strong>es</strong> falta de perdón que introduce una raíz en tu<br />

corazón de la cual crece un mal <strong>es</strong>pontáneo<br />

y se convierte en un fruto corrosivo de tu vida. Seguidamente,<br />

todo tu mundo lo ingiere y digiere.<br />

121


La amargura <strong>es</strong> un <strong>es</strong>tado en el que el diablo<br />

puede ensayar las <strong>es</strong>cenas de su injusticia y tú pued<strong>es</strong> sentarte<br />

entre el público, repasando las <strong>es</strong>cenas y las palabras,<br />

recordando,<br />

recordando. . .<br />

una y otra vez, y otra vez, y. . .<br />

La amargura <strong>es</strong> una en<strong>fe</strong>rmedad del alma<br />

que se convierte en puro veneno e<br />

in<strong>fe</strong>cta a tu propio cuerpo<br />

de en<strong>fe</strong>rmedad y. . . al Cuerpo de Cristo.<br />

Cuando fracasas en perdonar al o<strong>fe</strong>nsor,<br />

tú mismo te conviert<strong>es</strong> en el o<strong>fe</strong>nsor.<br />

Tú, ahora culpable en sustituto del otro.<br />

Y tu opr<strong>es</strong>or <strong>es</strong> ahora la víctima,<br />

cuya o<strong>fe</strong>nsa contra ti<br />

era la misma que tú tenías contra él. . .<br />

Quizás más.<br />

122


El orgullo <strong>es</strong>...<br />

Casi toda herida proviene del dolor del orgullo,<br />

para la cual no existe ningún consuelo.<br />

Muy pocas heridas provienen de “sufrir por Cristo.<strong>”</strong><br />

El orgullo <strong>es</strong>... ser más importante que J<strong>es</strong>ús.<br />

El orgullo <strong>es</strong>... <strong>es</strong>tar enamorado del ego<br />

más que de Dios.<br />

El orgullo <strong>es</strong>... querer “sentirse bien<strong>”</strong> más que<br />

d<strong>es</strong>ear la voluntad de Dios.<br />

El orgullo <strong>es</strong>... cuidar más de las cosas temporal<strong>es</strong><br />

que de las eternas.<br />

Ser malentendido <strong>es</strong> insoportable, pero sólo<br />

para la dignidad.<br />

Ser difamado <strong>es</strong> intolerable, pero sólo para el<br />

culto al “yo<strong>”</strong>.<br />

Que te nieguen la <strong>es</strong>tima que tiend<strong>es</strong> <strong>es</strong> un trauma, pero sólo para<br />

la ambición.<br />

La persecución sólo incapacita a los rebeld<strong>es</strong>.<br />

El enojo sólo <strong>es</strong> tentación para el egoísta.<br />

La amargura sólo <strong>es</strong> abonada por el vano.<br />

La venganza sólo <strong>es</strong> calculada por el rebelde.<br />

El odio sólo lo consiente el malvado.<br />

El orgullo jamás, jamás... jamás perdonará<br />

123


La humildad <strong>es</strong><br />

La humildad <strong>es</strong>... el lecho rocoso de las aguas del perdón.<br />

Sin una profunda humildad, el verdadero perdón <strong>es</strong> imposible...<br />

y nunca tendrá lugar.<br />

La HUMILDAD <strong>es</strong>...<br />

saber que tú mismo nec<strong>es</strong>itas d<strong>es</strong><strong>es</strong>peradamente<br />

el perdón como la mayor de las nec<strong>es</strong>idad<strong>es</strong>.<br />

La humildad <strong>es</strong>... ser pequeño, ser NADA.<br />

No tener nada que de<strong>fe</strong>nder, explicar, lograr,<br />

por no nec<strong>es</strong>itar nada.<br />

Ningún lugar, ningún aplauso, ninguna vindicación, ninguna<br />

alabanza, ninguna atención, nada... de nada.<br />

Cuando er<strong>es</strong> nada, no nec<strong>es</strong>itas nada.<br />

La humildad <strong>es</strong> ser libre del ego que tú controlas.<br />

Envuelto en la aceptación de Cristo y perdido en Su amor,<br />

no nec<strong>es</strong>itas nada más de <strong>es</strong>ta tierra, de <strong>es</strong>te mundo.<br />

La humildad <strong>es</strong> amar la recompensa del cielo más<br />

que el aplauso de la tierra,<br />

vivir tan sólo para la de<strong>fe</strong>nsa de Dios<br />

y la inevitable justicia del Último Día.<br />

No obstante...<br />

La humildad sabe lo que de verdad te merec<strong>es</strong>,<br />

y de <strong>es</strong>e percatarse continuo<br />

libertas a todos los demás, que se merecen lo mismo que tú.<br />

124


Humildad... humildad <strong>es</strong> el Cordero.<br />

La humildad de Cristo como Dios que<br />

se confinó a si mismo en una humanidad...<br />

ésa <strong>es</strong> una humillación incomprensible para<br />

alguien empachado de altiva ceguera.<br />

Haya, pu<strong>es</strong>, en vosotros <strong>es</strong>te sentir que hubo también en Cristo<br />

J<strong>es</strong>ús, el cual, siendo en forma de Dios, no <strong>es</strong>timó el ser igual a<br />

Dios como cosa a que a<strong>fe</strong>rrarse, sino que se d<strong>es</strong>pojó a sí<br />

mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los<br />

hombr<strong>es</strong>; y <strong>es</strong>tando en la condición de hombre, se humilló a sí<br />

mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de<br />

cruz.<br />

Filipens<strong>es</strong> 2<br />

La rendición del Cordero... en Getsemaní.<br />

La mansedumbre del Cordero... <strong>es</strong>cogió el d<strong>es</strong>amparo.<br />

La vulnerabilidad del Cordero... a la violencia.<br />

El silencio del Cordero... ante las acusacion<strong>es</strong>.<br />

El perdón del cordero... hacia Sus propios as<strong>es</strong>inos.<br />

Sólo la actitud de un Cordero podía quitar los pecados del mundo.<br />

Sólo la humildad de Cristo prevaleció sobre la horrible<br />

naturaleza del pecado.<br />

Su humildad vive en mí<br />

y mi humildad <strong>es</strong> rendición a Él<br />

para que así Su naturaleza tome lo que <strong>es</strong><br />

imposible para mi naturaleza,<br />

125


y ésta <strong>es</strong> la humildad que <strong>es</strong> capaz de perdonar<br />

montañas de heridas y agravios.<br />

Su humildad <strong>es</strong> la única humildad.<br />

El Cordero de Dios<br />

que quita el pecado del mundo.<br />

Copyright © 1999 Martha Blaney Kilpatrick<br />

126


El Valor que Dios demanda<br />

no <strong>es</strong> el impetuoso río<br />

en el cual el mundo se mece.<br />

No <strong>es</strong> la pasajera emoción<br />

que salva la vida del amigo,<br />

ni surca los siete mar<strong>es</strong><br />

con el látigo de la pasión.<br />

¿Qué <strong>es</strong> Valor?<br />

Es dejarse perforar<br />

por el Reino<br />

hasta que cada poro<br />

de tu cuerpo<br />

d<strong>es</strong>tile la cobardía<br />

que encierra tu “gallardía<strong>”</strong>...<br />

y luego vivir<br />

la Violenta Realidad<br />

del celo santo...<br />

del Hijo Amado.<br />

VII<br />

El valor<br />

Es exponerte ante tu creador<br />

absolutamente d<strong>es</strong>nudo y dejarte v<strong>es</strong>tir<br />

por aquello que pertenece al Reino.<br />

Es una conquista…<br />

conquistar la región<br />

que le r<strong>es</strong>ta conquistar<br />

127


al amor Paternal.<br />

Es acudir a la Colina<br />

y asirte al palo vertical<br />

donde muere lo mortal,<br />

y lo mortal se viste de inmortal.<br />

No <strong>es</strong> "acudir a la llamada".<br />

Es "rendirse a la llamada."<br />

Es vivir<br />

por un Valor que<br />

enfrenta y vence al mundo...<br />

el tuyo.<br />

Ver los mont<strong>es</strong> y collados<br />

de tu bravata valentía<br />

huir d<strong>es</strong>pavoridos<br />

ante la Violencia del Reino,<br />

a causa de aquello<br />

Que lo violenta…<br />

Sólo el Valor<br />

hereda el Reino del Padre,<br />

pu<strong>es</strong> Valor no <strong>es</strong> osadía,<br />

sino la fr<strong>es</strong>cura de la Cruz.<br />

He ahí el Valor...<br />

Que borra la mancha<br />

de tu mundo.<br />

2002<br />

-Anónimo-<br />

128


VIII<br />

LA BONDAD ES<br />

MALDAD<br />

(1)<br />

Noviembre de 2001<br />

En el transcurso de un viaje, a lo largo de varios días tuve<br />

que <strong>es</strong>tar con un hombre muy religioso que era erudito de la<br />

Biblia. Me rebajó a base de insultos, y en <strong>es</strong>e mismo insulto se<br />

ensalzó a sí mismo.<br />

Mira qué pequeño er<strong>es</strong> tú y qué grande soy yo.<br />

Me asaltó verbalmente con sutil<strong>es</strong> indirectas que negaban<br />

por completo mi trabajo, mi vida, mi virilidad, mi senda con<br />

Dios. Aunque el ataque fue sutil, los e<strong>fe</strong>ctos fueron patent<strong>es</strong>. Me<br />

sentí menos que humano, devaluado ante mis propios ojos,<br />

pensando que Dios sentía lo mismo. Empecé a preguntarme mi<br />

validez en cada área de mi vida. Estuve tentado a volverme en<br />

contra mía, en contra de un ser que Dios había creado y salvado.<br />

Odiar a mi propio ser también era volverme contra Él.<br />

¿Por qué?<br />

Porque Satanás le había cuchicheado a mi oído por medio<br />

de <strong>es</strong>te hombre que se creía bueno. Era una intimidación de<br />

Satanás. Los buenos creen que son más altos que el Altísimo. De<br />

hecho, se encuentran en el campamento del enemigo y asumen<br />

que pueden decir y pensar lo que quieran en aras de su<br />

superioridad.<br />

129


En <strong>es</strong>e entonc<strong>es</strong> salí a hacer unos recados y un<br />

dependiente me o<strong>fe</strong>ndió. Reaccioné exageradamente a su<br />

afrenta. Yo llevaba razón, pero al dejar la tienda me di cuenta de<br />

que se trataba de una cu<strong>es</strong>tión <strong>es</strong>piritual.<br />

El hombre bueno me había in<strong>fe</strong>ctado con su hostil<br />

en<strong>fe</strong>rmedad y me había acatarrado. Yo, que transportaba el<br />

agente in<strong>fe</strong>ccioso, extendí la agr<strong>es</strong>ión al mundo para d<strong>es</strong>truirlo<br />

con su propia amargura incon<strong>fe</strong>sa. ¡Pillé el catarro! Prendí la<br />

violencia reprimida que me había <strong>es</strong>cupido encima, aquella de la<br />

que no podía de<strong>fe</strong>nderme ni podía echar de nuevo sobre él. Su<br />

tarea consistía en d<strong>es</strong>truir la creación misma de Dios. Sal ahí<br />

fuera, sé violento y recibe violencia. Los que me rodeaban<br />

reaccionaron ante la violencia y me la devolvieron. Había sido<br />

marcado por el “perro<strong>”</strong> y el hedor repulsivo airaba a la gente<br />

contra mí y a mí contra ellos. Era la argucia de Satán nacida de<br />

lo bueno.<br />

Yo había demostrado su teoría de que era <strong>es</strong>piritualmente<br />

in<strong>fe</strong>rior a él.<br />

En su superioridad la bondad golpea a cada persona con la<br />

condenación. El bueno tiene pensamientos d<strong>es</strong>pectivos secretos<br />

que atacan. Aunque se mantienen ocultos, no pueden mantenerse<br />

callados: chillan fuerte y se <strong>es</strong>cuchan.<br />

El hombre bueno te d<strong>es</strong>afiará a que tú también tom<strong>es</strong> la<br />

bondad. Se convierte en un duelo y el retador mide tu bondad<br />

por una regla de tr<strong>es</strong> cuyo cálculo se ejecuta tan sólo con su<br />

opinión. A ti nunca te dejará ser bueno. La vara de medir<br />

siempre se alza más y más de modo que el retador siempre <strong>es</strong><br />

más bueno que tú.<br />

130


Ahora tengo que probar mi propia bondad y medir mi<br />

valía en un duelo.<br />

Sólo el orgullo aceptará el d<strong>es</strong>afío de un duelo. ¿Cuál de<br />

nosotros <strong>es</strong> mejor, cuál <strong>es</strong> más bueno?<br />

Con latigazos de condenación, el que blande su propia<br />

bondad me denostará y me derribará al suelo con superioridad, y<br />

me tentará a apartar mi rostro de mi Buen Dios para situar mi <strong>fe</strong><br />

en la ilusión de la bondad del hombre... y la de mi propia<br />

bondad.<br />

Las opcion<strong>es</strong> obvias son (1) de<strong>fe</strong>nder mi bondad, atacar e<br />

intentar superar su bondad, o bien (2) perder mi ser en la<br />

cobardía del silencio que <strong>es</strong> lo que verdaderamente él <strong>es</strong>tá<br />

exigiendo. Cualquiera de las r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas <strong>es</strong> orgullo. Si arremeto<br />

<strong>es</strong> orgullo y si me inclino ante su apreciación, <strong>es</strong>o también <strong>es</strong><br />

orgullo. Una <strong>es</strong> el orgullo de la superioridad. La otra <strong>es</strong> el<br />

orgullo de la in<strong>fe</strong>rioridad.<br />

De cualquiera de las formas él gana.<br />

Es un duelo que NO PUEDES ganar. El oponente no te lo<br />

permitirá. Te deja como un cadáver ensangrentado al que miras<br />

y dic<strong>es</strong>, mira tú, acaban de masacrarme y ni siquiera vi el<br />

instrumento que me golpeó.<br />

Se me acerca por un lateral sin que lo vea y deja mi alma<br />

hecha jiron<strong>es</strong>. Como la fachada era bondad nunca le vi<br />

acercarse. De repente te encuentras con que tien<strong>es</strong> que recoger<br />

del suelo todos los trozos y que has perdido tu ser. Has sido<br />

incinerado por la superioridad.<br />

131


La bondad <strong>es</strong> un cruel capataz. Sólo er<strong>es</strong> bueno o válido si<br />

hac<strong>es</strong> como digo.<br />

A base de martillo obliga al yo a <strong>es</strong>tar bajo el yo, y la<br />

bondad en ti acuchilla y azota a todos alrededor. Tu alma se<br />

encuentra en el expositor de subastas. El precio a pagar <strong>es</strong><br />

trabajar, demostrar tu bondad. Pierd<strong>es</strong> tu alma al enfrentarte a tu<br />

propia creación. Dios no te creó para que fueras bueno sino para<br />

ser una vasija, vacía y receptiva. No hay bondad en la vasija. Así<br />

que, ¿cómo pued<strong>es</strong> de<strong>fe</strong>nder algo que no existe?<br />

¡Ser bueno <strong>es</strong> rebelión!<br />

¿Cómo pued<strong>es</strong> ser algo para lo que Dios no te ha creado,<br />

y que Su propio Hijo viviente <strong>es</strong>tando en el mismo cuerpo carnal<br />

no se atribuía a su propio ser?<br />

De hecho, la bondad <strong>es</strong> maldad, <strong>es</strong> demoníaca, y <strong>es</strong>tá<br />

r<strong>es</strong>paldada por el reino satánico. La bondad humana <strong>es</strong> una<br />

creación de tu propia hechura, un montaje, y al <strong>es</strong>tar en falsedad<br />

er<strong>es</strong> r<strong>es</strong>paldado por el padre de las mentiras, cuyas hordas<br />

demoníacas te otorgan poder y habilidad para ser lo que has<br />

creado, que en realidad <strong>es</strong> lo que él ha creado. Estás en la <strong>es</strong><strong>fe</strong>ra<br />

de Satanás. Estás intimando con demonios en vez de con la<br />

verdad. No pued<strong>es</strong> quedarte en el campamento de Satanás y<br />

ganar.<br />

Tú pierd<strong>es</strong>. Tú pierd<strong>es</strong>. Tú pierd<strong>es</strong>.<br />

Irónico que cuando vas de bueno abandonas a Dios.<br />

Truecas tu lealtad por un capataz demoníaco. Él te dará lo que<br />

exig<strong>es</strong>: un catálogo de normas en vez de una relación.<br />

132


Queremos un repertorio de normas y tenemos la seguridad<br />

de que podemos acatarlas. Hemos adorado las normas d<strong>es</strong>de el<br />

jardín pero tan sólo eran una señal que indicaba el camino hacia<br />

nu<strong>es</strong>tra nec<strong>es</strong>idad, nec<strong>es</strong>idad que no tendremos, que<br />

REHUSAMOS tener. La letra mata. La ley mata. Tien<strong>es</strong> que<br />

usar la maldad para ser bueno.<br />

Por orgullo, inclinaré mi rodilla ante el capataz, “bondad<strong>”</strong>,<br />

para poder así ser bueno. Luego se burla de mí, como Satanás en<br />

el árbol del bien y del mal. Pongo a mi Dios en entredicho. Mi<br />

alma <strong>es</strong> violada b<strong>es</strong>tialmente. Me visto del mismo orgullo de la<br />

bondad y digo no, ¡yo soy mejor que tú!<br />

Mi carencia de Bondad señala mi d<strong>es</strong>nudez, y si arranco<br />

una hoja de higuera ya <strong>es</strong>toy muerto. Pero si permanezco<br />

d<strong>es</strong>nudo ante mi Dios en mi tosca y d<strong>es</strong>nuda humanidad Él me<br />

v<strong>es</strong>tirá con gloria y llevaré pu<strong>es</strong>ta Su Bondad.<br />

La bondad mueve su dedo apuntando hacia Dios y dice,<br />

“me avergüenzas, fracasado. Yo sé más, soy mejor que el Padre<br />

y el Creador de toda vida.<strong>”</strong> El hombre exaltándose por encima<br />

del Dios Altísimo.<br />

Puedo crear una imagen mejor que la Suya.<br />

Es la misma superioridad que <strong>es</strong>taba en Luci<strong>fe</strong>r ant<strong>es</strong> de<br />

su caída.<br />

Si le hubiera sido fiel a Dios, hubiera visto algo incorrecto<br />

y sus opinion<strong>es</strong> no me hubieran a<strong>fe</strong>ctado. No me hubiera movido<br />

de mi lugar de valor en Dios. Pero dejé que me etiquetara, y<br />

luego acepté su etiqueta, salí afuera y la viví.<br />

Pero, ¿cómo he de reaccionar?<br />

133


Si yo r<strong>es</strong>pondo de cualquier forma, voy a caer en el<br />

pecado de la carne obrando la voluntad de Dios, ¡la bondad!<br />

Sólo el Espíritu de Dios puede manejar la maldad religiosa.<br />

Cristo mismo no tenía una metodología al tratar con los<br />

religiosos de Su época. A vec<strong>es</strong> permanecía callado. Otras vec<strong>es</strong><br />

zahería.<br />

En cada situación, J<strong>es</strong>ús dejaba que su r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta<br />

proviniera de Dios. La única forma de ganar <strong>es</strong> someterse a Dios<br />

porque lo que <strong>es</strong>tás combatiendo en la bondad <strong>es</strong> en realidad una<br />

rebelión satánica.<br />

Un hombre llamó a J<strong>es</strong>ús, Buen Ma<strong>es</strong>tro.<br />

Y J<strong>es</strong>ús le dijo, “¿por qué me llamas bueno? Ninguno hay<br />

bueno, sino sólo Dios.<br />

Marcos 10:18; Lucas 18:19<br />

Si el Hijo de Dios no se atribuyó a Sí Mismo bondad,<br />

¿cómo podremos nosotros? J<strong>es</strong>ús vivió por la bondad de Su<br />

Padre.<br />

(2)<br />

La Religión de la Bondad<br />

De hecho, ser bueno <strong>es</strong> religión. Es un intento de ser<br />

bueno sin Dios. Es una creencia, una “<strong>fe</strong><strong>”</strong> de que er<strong>es</strong>, pued<strong>es</strong> y<br />

deb<strong>es</strong> ser bueno por tus propios medios.<br />

134


Bondad <strong>es</strong> una religión que suplanta al cristianismo y a<br />

Cristo mismo.<br />

La persona buena sustituye a Dios a cambio de sí mismo.<br />

La bondad dice “soy mejor que el Creador y puedo crear<br />

una imagen mejor que la Suya.<strong>”</strong> La bondad mueve su dedo<br />

apuntando hacia Dios y dice, “me avergüenzas, fracasado.<strong>”</strong> Lo<br />

bueno tiene más “o<strong>”</strong> que Dios. La bondad <strong>es</strong> más que Dios, más<br />

grande que Dios, mejor que Dios. La bondad le llama mentiroso<br />

a Él, que dice que no hay bien alguno en nosotros.<br />

No tien<strong>es</strong> relación con Dios cuando <strong>es</strong>tás en la bondad. Es<br />

una relación con tu Yo, con tu propia persona de bondad.<br />

Para permanecer en la bondad te casas con el <strong>es</strong>píritu<br />

maligno de la bondad: te un<strong>es</strong> a ELLO, intentas satisfacerlo, lo<br />

alimentas, lo <strong>es</strong>cuchas. Es una involucración total con el<br />

demonio de la bondad. Todos tus pensamientos, motivos y<br />

rumbos provienen de AHÍ. Er<strong>es</strong> guiado totalmente por ELLO. El<br />

<strong>es</strong>píritu maligno de la bondad se convierte en tu ma<strong>es</strong>tro, tiende<br />

un lazo alrededor de tu cuello y te lleva donde quiera llevarte. Te<br />

conviert<strong>es</strong> en la personificación de la maldad de Satanás, el<br />

consumado mentiroso. Todo se construye sobre la mentira de<br />

que er<strong>es</strong> bueno. Por <strong>es</strong>o <strong>es</strong> demoníaco.<br />

Has <strong>es</strong>cogido creer la mentira de que er<strong>es</strong> bueno, <strong>es</strong>tás<br />

totalmente ciego a la argucia de Satanás. Tanto has vuelto tu<br />

<strong>es</strong>palda a la verdad acerca de ti que te conviert<strong>es</strong> en una pr<strong>es</strong>a<br />

fácil para que Satanás te alimente.<br />

La bondad hace de ti un cascarón de persona porque has<br />

<strong>es</strong>cupido con rabia sobre la verdad. Satanás llena tu cavidad,<br />

vacía de Dios, con interminabl<strong>es</strong> nocion<strong>es</strong> que apoyan tu<br />

135


ondad, que son de hecho ejércitos demoníacos que tienen la<br />

misión de sacar de ti d<strong>es</strong>trucción, muerte y as<strong>es</strong>inato... y tú,<br />

engañado, no tien<strong>es</strong> remordimientos.<br />

Todo el mundo piensa, “será posible, ¿cómo podría la<br />

bondad hacer <strong>es</strong>o? Estás siendo bueno, como Dios quiere que<br />

seas.<strong>”</strong> “Vaya, que chico tan bueno que <strong>es</strong>, <strong>es</strong> tan bueno.<strong>”</strong><br />

Si no <strong>es</strong> Dios, <strong>es</strong> pecado. Si no <strong>es</strong>tá todo arraigado y<br />

plantado en la rectitud de Dios, creciendo a partir de los<br />

pensamientos y de la iniciativa de Dios, entonc<strong>es</strong> <strong>es</strong> la simiente<br />

de Satanás. La bondad no <strong>es</strong> emprendida por el Padre así que <strong>es</strong><br />

emprendida por el padre de mentiras.<br />

La bondad busca agradar al hombre en vez de a Dios, y<br />

por <strong>es</strong>ta razón er<strong>es</strong> validado en tu maldad. Como emana de un<br />

motivo del yo y del placer del hombre, (la carne) nunca puede<br />

agradar a Dios. Puede que tengas todos los “bien hecho<strong>”</strong>, los<br />

“hip, hip, hurra<strong>”</strong> y “porque <strong>es</strong> un muchacho excelente.<strong>”</strong> Pued<strong>es</strong><br />

tener todos los elogios de la humanidad, pero a Dios no le<br />

impr<strong>es</strong>iona.<br />

Tu encanto y tu fraude no le engañan. Él ve a través de la<br />

fachada y lo condena d<strong>es</strong>de el trono. Su juicio mismo d<strong>es</strong>cansa<br />

sobre tu dios de bondad. Tú y tu ‘padre’ <strong>es</strong>táis en pie ante el<br />

trono de Dios, de<strong>fe</strong>ndiendo <strong>es</strong>te caso tuyo de que tu pequeño<br />

trono <strong>es</strong> más alto que Dios. De aquí proviene el hervor de la<br />

bondad, de lo íntimo de Satanás que dice que mi trono será<br />

exaltado por encima del Altísimo. Por <strong>es</strong>o <strong>es</strong> que <strong>es</strong> tan maligno,<br />

porque <strong>es</strong>tá en lo íntimo de Satanás, la razón misma por la que<br />

fue expulsado del cielo. La falsedad que encierra engañó a un<br />

tercio de los ejércitos cel<strong>es</strong>tial<strong>es</strong>. El hombre de carne no tiene<br />

razon<strong>es</strong> de p<strong>es</strong>o para sostenerse contra la falacia. Si los propios<br />

ejércitos cel<strong>es</strong>tial<strong>es</strong> pudieron ser engañados ante la mismísima<br />

136


pr<strong>es</strong>encia de Dios, ¿cómo puede el hombre que no <strong>es</strong>tá en la<br />

verdad d<strong>es</strong>enmarascar la mentira?<br />

El cristianismo <strong>es</strong> una relación íntima con Dios vivida<br />

sobre una tosca realidad acerca de ti mismo y de quién <strong>es</strong> Dios.<br />

Para tener una relación con el Creador has de ser la creación que<br />

Él diseñó: una vasija de Santidad y por tanto completamente<br />

dependiente de Él.<br />

La bondad <strong>es</strong> la imitación de la santidad, y si te apuntas a<br />

<strong>es</strong>e “ideal<strong>”</strong> el hostigamiento que recib<strong>es</strong> será a tu favor. La<br />

santidad se reúne en torno al Creador. La bondad se dispersa de<br />

Dios.<br />

“El que no <strong>es</strong> conmigo, contra mí <strong>es</strong>; y el que conmigo<br />

no recoge, d<strong>es</strong>parrama.<strong>”</strong><br />

Mateo 12:30<br />

La bondad <strong>es</strong>cucha a su propio mantra y defiende su<br />

mundo para mantener <strong>es</strong>e altar. El bueno obliga a otros a<br />

<strong>es</strong>cuchar para evitar que nadie hable en su contra, luego captura<br />

tu mente y hace de ti un prisionero ofuscado con la idea de<br />

d<strong>es</strong>afiarl<strong>es</strong>. Exigen la adoración de los demás EN VEZ de la de<br />

Dios y le ponen grillet<strong>es</strong> a tu alma.<br />

Viven en un mundo de ilusión. Tiene sus propias ley<strong>es</strong> y<br />

principios, su propio sistema de p<strong>es</strong>os, medidas y juicios donde<br />

las cifras y la balanza se inclinan siempre de su lado. Es un<br />

universo de su propia cosecha. Entras a él como ciudadano o<br />

como extranjero. Si <strong>es</strong> como extranjero er<strong>es</strong> un enemigo para el<br />

campamento. Los extranjeros traen consigo pensamientos<br />

contrarios que sacuden los pilar<strong>es</strong> sobre los que <strong>es</strong>e raquítico<br />

universo se asienta. Tienen que intimidarte para que te hagas su<br />

ciudadano y l<strong>es</strong> ador<strong>es</strong> como a tu dios o te matarán. Este<br />

137


universo <strong>es</strong>tá construido de vapor<strong>es</strong> hediondos, v<strong>es</strong>tigios de<br />

pensamientos contrarios a la verdad. Ser cómplice de traer la<br />

Verdad a <strong>es</strong>te artificio amenaza su misma existencia.<br />

Son los creador<strong>es</strong> de un universo propio que engloba su<br />

verdad en todas las cosas. La Verdad sacude sus fábulas<br />

caprichosas, pu<strong>es</strong> han sido exiliados y ahuyentados de la<br />

realidad. Ora tienen que obligarte a postrarte y adorarl<strong>es</strong>, ora su<br />

universo al completo, todo lo que crearon y que tienen en tanta<br />

<strong>es</strong>tima, ¡d<strong>es</strong>aparece! Como aquellos que se basan en la bondad<br />

lo depositan todo sobre <strong>es</strong>ta mentira, viven en aterrados de la<br />

posibilidad de d<strong>es</strong>cubrir la Verdad, no sea que mu<strong>es</strong>tre que<br />

ELLOS mismos son la mentira. Creen en otra mentira básica:<br />

DEBEN ser buenos.<br />

Si no son buenos no serán amados.<br />

¿A quién hablaré y amon<strong>es</strong>taré, para que oigan? He<br />

aquí que sus oídos son incircuncisos, y no pueden<br />

<strong>es</strong>cuchar; he aquí que la palabra de Jehová l<strong>es</strong> <strong>es</strong> cosa<br />

vergonzosa, no la aman.<br />

Jeremías 6:10<br />

Y se acordaban de que Dios era su refugio,<br />

Y el Dios Altísimo su redentor.<br />

Pero le lisonjeaban con su boca,<br />

Y con su lengua le mentían;<br />

Salmos 78:35–36<br />

Copyright © 2001 John Enslow<br />

138


IX<br />

“REVISTA<br />

ELECTRÓNICA<strong>”</strong><br />

(PUBLICACIÓN ESPORÁDICA EN<br />

INTERNET)<br />

EJEMPLAR Nº1<br />

-AÑO 2007-<br />

Versión en <strong>es</strong>pañol<br />

(Spanish version)<br />

139


140


J<strong>es</strong>ús Divino Enigma<br />

Por Martha Kilpatrick<br />

J<strong>es</strong>ús, el Misterio.<br />

J<strong>es</strong>ús se salía completamente de lo normal.<br />

Era opu<strong>es</strong>to a la naturaleza humana.<br />

y era un elemento extraño para toda alma viviente que jamás hubi<strong>es</strong>e<br />

r<strong>es</strong>pirado.<br />

El J<strong>es</strong>ús de Dios <strong>es</strong> Di<strong>fe</strong>rente a todos nosotros.<br />

Nunca le entenderemos.<br />

J<strong>es</strong>ús <strong>es</strong> el más fascinante y chocante<br />

de todos los misterios vivient<strong>es</strong>;<br />

la más incomprensible de todas las figuras históricas<br />

cuyo impacto no ha tenido parangón.<br />

No obstante… vivió la más humilde de las vidas.<br />

El mundo entero conoce Su nombre pero<br />

sólo un extraño remanente le sigue de verdad.<br />

“Pocos son los que la hallan...<strong>”</strong><br />

Sin embargo…<br />

Quiere ser conocido y busca darse a entender.<br />

D<strong>es</strong>ea compañeros a quien<strong>es</strong> pueda<br />

contar todos Sus secretos, ¡y entregar todas Sus riquezas!<br />

No obstante…<br />

Al tiempo que la humanidad codicia a alguien a quien seguir,<br />

J<strong>es</strong>ús se d<strong>es</strong>hacía de los que imploraban unirse a Él.<br />

A los que de forma directa no rechazaba, o<strong>fe</strong>ndía,<br />

y éstos se marchaban por propia voluntad.<br />

141


Se contentaba con un puñado de hombr<strong>es</strong> sencillos,<br />

de manos sucias, toscos, no religiosos.<br />

Y...<br />

El Hijo del Amor era d<strong>es</strong>cortés,<br />

no <strong>es</strong>taba ligado a costumbr<strong>es</strong>,<br />

ni se amoldaba a norma alguna de comportamiento.<br />

Parecía cruel en sus palabras y<br />

lanzaba al aire insultos, que caían precisamente<br />

sobre los más r<strong>es</strong>petados por el pueblo.<br />

J<strong>es</strong>ús era un alienígena ante la normalidad humana.<br />

Era una paradoja viviente.<br />

Acusó a los “justos<strong>”</strong> de abyecta maldad.<br />

Llamaba por su verdadero nombre a los líder<strong>es</strong> religiosos.<br />

Fue violento físicamente con las pertenencias de otros.<br />

Y no se disculpaba.<br />

¡Y d<strong>es</strong>pués lo volvía a hacer!<br />

Fue donde dijo que no iría.<br />

En cuanto a…<br />

Su enseñanza, J<strong>es</strong>ús no explicaba.<br />

Confundía.<br />

No aclaraba las cosas,<br />

las emborronaba.<br />

A tus preguntas r<strong>es</strong>pondía con las suyas.<br />

Si acudías a Él con un dilema,<br />

era propenso a dejarte aún más confuso.<br />

Ofrecía austeras conclusion<strong>es</strong>, y con frecuencia<br />

parecía d<strong>es</strong>ear que buscaras, en vez de que supieras.<br />

142


Hacía Sus enseñanzas opacas y<br />

<strong>es</strong>condía su significado de modo que a las multitud<strong>es</strong><br />

dejaba en suspense, y aún<br />

Sus disípulos eran incapac<strong>es</strong> de comprender Sus intencion<strong>es</strong>.<br />

Y…<br />

Este Hijo del hombre era un fastidio para los que dudaban de Él.<br />

Siempre probando el bando al que pertenecían, las eleccion<strong>es</strong> de su<br />

corazón.<br />

Parecía provocar deliberadamente <strong>es</strong>e conflicto<br />

que sacaba a relucir la verdaderas prioridad<strong>es</strong><br />

con la clara intención de que las personas se acusaran a sí mismas.<br />

Sin embargo...<br />

Algunas de Sus leccion<strong>es</strong> eran diáfanas como cristal,<br />

sorprendent<strong>es</strong> por su claridad, brillant<strong>es</strong> por lo conciso de ellas.<br />

Hablaba con el mínimo posible de palabras<br />

que exigían de cualquiera toda una vida comprender.<br />

Y a vec<strong>es</strong> se negaba en rotundo a r<strong>es</strong>ponder o<br />

enseñar aún a los que preguntaban.<br />

En la sinagoga era sobr<strong>es</strong>aliente y lacerante...<br />

a tal punto que provocaba la envidia de los fariseos.<br />

No hablaba bajo demanda de nadie,<br />

no atendía a órden<strong>es</strong> de servicio,<br />

ni se amoldaba a horario alguno.<br />

No atendía a invitacion<strong>es</strong>,<br />

ni seguía directriz de nadie.<br />

Paseaba por los campos, se sentaba d<strong>es</strong>pués<br />

y sencillamente empezar a hablar.<br />

Tenías que seguirle constantemente para tenerle cerca<br />

en el momento en que era lleno de palabra.<br />

143


Por tanto...<br />

Ciudad<strong>es</strong> enteras pr<strong>es</strong>enciaron Sus milagros<br />

y aún así le rechazaron.<br />

Algunos que le conocían de oídas<br />

recorrieron kilómetros a pie con tal de verle.<br />

Los demonios le conocían como el Hijo de la Gloria.<br />

La humanidad no tenía idea alguna de quién era,<br />

le llamaron de todas las maneras que se l<strong>es</strong> pasaba por la mente.<br />

Sus propios discípulos sufrieron para poder identificarle.<br />

Y...<br />

J<strong>es</strong>ús no corría a utilizar Su divinidad<br />

para ganar seguidor<strong>es</strong>.<br />

Jamás llamaba a ninguna puerta ni procuraba invitacion<strong>es</strong> <strong>es</strong>pecial<strong>es</strong>.<br />

Se ocultaba una y otra vez,<br />

y a la primera de cambio le d<strong>es</strong>velaba a algún pecador pagano Quién<br />

era Él.<br />

No obstante...<br />

¡Se reveló a los ap<strong>es</strong>tados de la sinagoga y se negó a demostrar Su<br />

identidad a aquellos que le <strong>es</strong>taban <strong>es</strong>perando!<br />

Exponía Su identidad cuando más peligroso r<strong>es</strong>ultaba<br />

y cuando había de suponer una muerte segura.<br />

J<strong>es</strong>ús era más listo que los que hacían por timarle.<br />

Se <strong>es</strong>cabullía de multitud<strong>es</strong> que hoy le coronaban y mañana le<br />

apedreaban.<br />

No podía ser apr<strong>es</strong>ado, etiquetado ni cercado.<br />

Era libre de toda persona e institución.<br />

Forzaba a salir a tus amor<strong>es</strong>, lealtad<strong>es</strong> y motivacion<strong>es</strong>.<br />

Escuchaba mientras mentías,<br />

y a continuación planteaba tus verdaderas creencias<br />

y exponía tu carácter... ¡ante tus propias naric<strong>es</strong>!.<br />

144


Se sentaba cuando debería haberse movido.<br />

Acudía allí donde de seguro moriría.<br />

Nadie podía d<strong>es</strong>viar su atención y nadie podía dirigirle.<br />

Estaba solo en Sus propios consejos y<br />

mantenía Su soledad en sagrado r<strong>es</strong>guardo.<br />

J<strong>es</strong>ús abandonó a su familia,<br />

no pr<strong>es</strong>tó audiencia a su inter<strong>fe</strong>rencia<br />

ni obedeció a ninguna de sus ambicion<strong>es</strong> en relación con Él.<br />

No obstante...<br />

Perdonó lo imperdonable.<br />

Se juntaba con los d<strong>es</strong>hauciados.<br />

Tocó leprosos, sanó a pecador<strong>es</strong> de las más ruin<strong>es</strong> en<strong>fe</strong>rmedad<strong>es</strong>.<br />

Liberó a los dement<strong>es</strong>, levantó a los muertos y<br />

elogió a un gentil por tener <strong>fe</strong> superior a la de Israel.<br />

En nada le preocupaba su reputación,<br />

que a menudo pisoteaba cuando se disparaba Su popularidad.<br />

Podía <strong>es</strong>crutar en cada corazón el reino donde habitabas<br />

y trataba contigo en función de tus más secretos motivos,<br />

no en base a tus reivindicacion<strong>es</strong> o apariencia.<br />

R<strong>es</strong>pondía a tu corazón, no a tu charla,<br />

y a menudo... no daba r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta alguna.<br />

D<strong>es</strong>inflaba adulacion<strong>es</strong>, d<strong>es</strong>viaba alabanzas.<br />

D<strong>es</strong>deñaba a seguidor<strong>es</strong> en potencia.<br />

D<strong>es</strong>pidió a muchos e ignoró a algunos de Sus mayor<strong>es</strong> entusiastas.<br />

Se movía en contradicción,<br />

se deleitaba en la paradoja,<br />

e hizo de Sus demandas un imposible.<br />

Verdaderamente, J<strong>es</strong>ús <strong>es</strong> Di<strong>fe</strong>rente...<br />

145


Los Discípulos que le Conocían.<br />

En aquel entonc<strong>es</strong>...<br />

Cuando los discípulos pensaban que le conocían,<br />

J<strong>es</strong>ús se d<strong>es</strong>viaba a una ruta<br />

no transitada con anterioridad,<br />

exponiendo misterios que nunca habían imaginado<br />

ni hubieran podido d<strong>es</strong>entrañar.<br />

Y Él <strong>es</strong>peraba de ellos un entendimiento<br />

del que siempre parecían incapac<strong>es</strong>.<br />

“¿Aún no entendéis <strong>es</strong>tas cosas?<strong>”</strong><br />

J<strong>es</strong>ús no podía ser etiquetado, encuadrado ni anticipado.<br />

Era al extremo impredecible.<br />

Su única consistencia era ser una perpetua sorpr<strong>es</strong>a.<br />

A día de hoy...<br />

Si sigu<strong>es</strong> a Cristo como discípulo, Él sigue siendo el mismo;<br />

en la intimidad conocido, enigmático por definición.<br />

Pued<strong>es</strong> conocerle en <strong>es</strong>te momento dado, pero se guarda<br />

Su mañana en el secreto de Su propio propósito.<br />

Y si admiras junto a Él la historia y<br />

buscas Su compañía en los lugar<strong>es</strong> donde fija Su mirar, te hará entrar<br />

en los consejos del Altísimo y compartirá secretos eternos<br />

que podrás dar a luz.<br />

Sin embargo...<br />

J<strong>es</strong>ús habla en misterios y deja misterios en Su d<strong>es</strong>pertar.<br />

146


J<strong>es</strong>ús <strong>es</strong>peraba que Nicodemo supiera de lo que nadie había oído.<br />

Exigía que <strong>es</strong>te Fariseo (un gobernador de los Judíos)<br />

entendiera lo incomprensible en tanto entregaba a aquel hombre<br />

el secreto del Nuevo Pacto. “Deb<strong>es</strong> nacer de nuevo<strong>”</strong>.<br />

Y cuando <strong>es</strong>e hombre tuvo una pregunta, J<strong>es</strong>ús le interrogó<br />

con injuria velada r<strong>es</strong>pecto a su <strong>es</strong>piritualidad y liderazgo.<br />

“¿Er<strong>es</strong> ma<strong>es</strong>tro de Israel y no entiend<strong>es</strong> <strong>es</strong>tas cosas?<strong>”</strong><br />

Juan 3:10<br />

¡Seguramente un buscador de semejante calibre <strong>es</strong>taba preparado para<br />

recibir r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>tas! Pero J<strong>es</strong>ús no explicó. Tan sólo expuso el asunto.<br />

Luego derramó renuevos de Verdad sobre Nicodemo<br />

y dejó al hombre preguntándose el cómo y el por qué.<br />

J<strong>es</strong>ús trató con cierta indignación la petición de Su madre<br />

para solventar la <strong>es</strong>casez de vino en la boda.<br />

La llamó ‘mujer’, no ‘madre’, y con ello<br />

la situó junto al r<strong>es</strong>to de la humanidad, sin permitirle<br />

que le dictara en razón a derechos familiar<strong>es</strong>.<br />

Y enseguida se volvió y<br />

convirtió simple agua en vino extraordinario.<br />

Quizás preguntó a Su Padre acerca de la ‘mujer’ para obtener<br />

la única autorización que le inter<strong>es</strong>aba.<br />

Pued<strong>es</strong> implorar a J<strong>es</strong>ús, pero no manejarle a tu antojo.<br />

No obstante...<br />

Aun Sus sendas de Amor eran extrañas.<br />

Amaba a quien no era digno de amor.<br />

Amaba con <strong>es</strong>a extraña severidad de<br />

negarse a actuar, mediante palabras fulminant<strong>es</strong>.<br />

Le importaban poco la posición, ideas y engaños<br />

de las autoridad<strong>es</strong>. Lanzaba palabras mordac<strong>es</strong> y<br />

usaba lenguaje violento con los que supu<strong>es</strong>tamente conocían a Dios<br />

pero que con su vida lo blas<strong>fe</strong>maban.<br />

147


Y <strong>es</strong>a era la razón por la que l<strong>es</strong> habló<br />

d<strong>es</strong>de el más duro y terrible Amor, ascuas de celo...<br />

pasión hacia el Padre por encima de cualquier persona de la tierra.<br />

En la furia de una tormenta, y de tal manera que perturbó aun<br />

a p<strong>es</strong>cador<strong>es</strong> curtidos, Él ¡dormía!<br />

En el lugar mismo del terror más natural,<br />

Él condenó su comprensible miedo como algo...<br />

inexcusable.<br />

A un cínico Natanael ofreció los cielos.<br />

A una madre exasperada negó una sanidad,<br />

para dársela al instante en que volvió a exigir lo mismo.<br />

A María y Marta, cuya casa frecuentaba,<br />

mostró indi<strong>fe</strong>rencia ante sus crisis.<br />

Mientras su querido amigo Lázaro yacía moribundo,<br />

Él correteaba de aquí para allá durante días de aparente inercia.<br />

¡D<strong>es</strong>pués acudió a la tumba y le llamó a la vida!<br />

J<strong>es</strong>ús no se movía por súplicas, no se inclinaba ante las demandas y<br />

se a<strong>fe</strong>rraba a Su propio calendario, inmune al<br />

bullicio de los plan<strong>es</strong> que los humanos tenían para Él.<br />

J<strong>es</strong>ús era o<strong>fe</strong>nsivo, y no era sólo <strong>es</strong>o porque... ¡lo era deliberadamente!<br />

Para los discípulos era un fastidio andante,<br />

y a menudo pensaban que ignoraba Su e<strong>fe</strong>cto devastador sobre aquellos<br />

a quien<strong>es</strong> “tenía que convencer<strong>”</strong>.<br />

Cada vez más sorprendidos, de vez en cuando los discípulos tenían<br />

que decirle,<br />

“¿te has dado cuenta de que has o<strong>fe</strong>ndido?<strong>”</strong><br />

Y Su r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta incrementaba la o<strong>fe</strong>nsa.<br />

148


J<strong>es</strong>ús sólo se preocupaba de no o<strong>fe</strong>nder a Uno, a Su Padre.<br />

Así pu<strong>es</strong>...<br />

Es como Él <strong>es</strong>, no como lo definimos.<br />

Es un completo milagro, un Ser incomprensible.<br />

Su senda <strong>es</strong> un trayecto impredecible y Su propósito<br />

<strong>es</strong> un secreto tan tierno en Su vulnerable corazón,<br />

que pued<strong>es</strong> tropezar y pasar por encima<br />

sin darte cuenta siquiera de que lo has pasado por alto.<br />

Nu<strong>es</strong>tra condición de maravillarnos con Él tiene como finalidad<br />

d<strong>es</strong>nudar<br />

a <strong>es</strong>tas briznas terrenal<strong>es</strong> de su pomposidad, de permitirnos<br />

contemplar al Hijo en Su <strong>es</strong>plendor,<br />

de seguir al Pastor por Su superioridad,<br />

de adorar a <strong>es</strong>te Cristo en Su incomparable Gloria.<br />

Y...<br />

He aquí lo más impr<strong>es</strong>ionante de todo...<br />

¡Aquel que posee el Único Trono del universo<br />

d<strong>es</strong>ea compartirlo con <strong>es</strong>a humanidad<br />

que echó a perder Su propia creación!<br />

149


En Cuanto a Mí<br />

Así pu<strong>es</strong>...<br />

Me amoldo a lo que Él jamás se sometía.<br />

Me preocupo de lo que Él vilipendiaba.<br />

Aceptó lo que Él rechazaba.<br />

Derramo lágrimas por lo que Él d<strong>es</strong>preciaba.<br />

No puedo amar lo que Él ama.<br />

Nunca odio lo que Él odia.<br />

No puedo ver lo que Él ve.<br />

No le conozco.<br />

Y Él no me posee.<br />

Le conoceré sólo en la medida en que le<br />

entregue mi cuerpo sin r<strong>es</strong>ervas<br />

a Su pos<strong>es</strong>ión interior,<br />

y rinda mi mente por entero<br />

a Su ética misteriosa.<br />

Le conozco sólo en la medida en que le lleve “pu<strong>es</strong>to<strong>”</strong>.<br />

Le entiendo sólo en la medida en que Su mente sea la mía.<br />

Y...<br />

Debo abandonar el mundo por completo y<br />

su d<strong>es</strong>quiciada visión de la decencia y el orden.<br />

He de abandonar la integridad tal<br />

y como la he conocido y me ha sido enseñada.<br />

La integridad únicamente <strong>es</strong> la voluntad de Dios. Sólo <strong>es</strong>o <strong>es</strong><br />

decencia.<br />

Y aunque Su voluntad y palabra parecen crear el caos,<br />

en realidad son tribuna contra el d<strong>es</strong>orden,<br />

para llevar a la tierra HACIA Su orden divino.<br />

150


Abandonaré las normas del protocolo y de la propiedad y<br />

andaré los extraños caminos del Amor radical<br />

y el Enfoque apasionado.<br />

He de aprender en Su reino como ignorante extranjero<br />

lo que <strong>es</strong> correcto y <strong>es</strong> incorrecto.<br />

D<strong>es</strong>conozco a ambos.<br />

D<strong>es</strong>pués...<br />

Él debe amar a través de mí lo que Él ama.<br />

Debe odiar a través de mí lo que Él odia.<br />

Él debe ser lo que yo no puedo ser y lo que quizá jamás<br />

pueda imitar ni entender.<br />

No puedo anticiparme a Él ni apr<strong>es</strong>arle.<br />

Sólo puede sobrecojerme hasta que me disuelva en Su Ser.<br />

Y...<br />

“En <strong>es</strong>to se ha per<strong>fe</strong>ccionado el amor en nosotros,<br />

para que tengamos confianza en el día del juicio;<br />

pu<strong>es</strong> como él <strong>es</strong>, así somos nosotros en <strong>es</strong>te mundo.<strong>”</strong><br />

1 Juan 4:17<br />

Esto quiere decir,<br />

Llego a ti, Señor J<strong>es</strong>ús.<br />

Tomo Tu yugo sobre mí<br />

para aprender de Ti.<br />

151


Como J<strong>es</strong>ús, Igual que J<strong>es</strong>ús<br />

Por lo tanto...<br />

D<strong>es</strong>de el día de Pentecostés<br />

los discípulos –<strong>es</strong>os inconscient<strong>es</strong> y temblorosos hombr<strong>es</strong>–<br />

se convirtieron en ser<strong>es</strong> extraños e impredecibl<strong>es</strong>,<br />

justo igual que su J<strong>es</strong>ús.<br />

Con nuevos ojos abiertos por el Espíritu,<br />

los discípulos empezaron a ver a J<strong>es</strong>ús como el “YO SOY<strong>”</strong>,<br />

morando en ellos para habitar Él Mismo la tierra,<br />

y los discípulos se hicieron como J<strong>es</strong>ús, IGUAL QUE J<strong>es</strong>ús.<br />

Los discípulos le entregaron su libertad personal para que<br />

Él fuera el Ser in<strong>es</strong>crutable,<br />

un extraño para la naturaleza humana,<br />

pero pr<strong>es</strong>ente frente a la nec<strong>es</strong>idad d<strong>es</strong>carnada que de Él tenían.<br />

Y...<br />

Por el nombre de J<strong>es</strong>ús ordenaron a un cojo que saltara.<br />

Golpeados, se regocijaron. En prision<strong>es</strong>, las cadenas cayeron.<br />

El que servía m<strong>es</strong>as murió apedreado,<br />

pero vio los cielos abiertos y<br />

al Salvador en pie para recibirle en gloria.<br />

Felipe fue tomado a otro lugar en el Espíritu.<br />

Una amada mujer fue levantada de los muertos.<br />

Un malvado fue cegado. Fuerzas demoníacas abandonaron a una<br />

muchacha.<br />

Los discípulos eran pobr<strong>es</strong> y lo aceptaron con gozo.<br />

Perseguidos, abrazaron la persecución.<br />

152


Lo que Él hizo, ellos hicieron.<br />

Poseían la valentía que Él d<strong>es</strong>plegaba.<br />

Vivieron ajenos a la <strong>es</strong><strong>fe</strong>ra de la normalidad humana<br />

porque fueron engullidos por Él y porque...<br />

J<strong>es</strong>ús, el Misterio Viviente... ¡vivía de nuevo!<br />

Copyright © 2001 Martha Kilpatrick<br />

153


El Dueño de los Bien<strong>es</strong><br />

Por John Enslow<br />

Hay un refrán que dice, “el que tiene los bien<strong>es</strong>, tiene todo el poder<strong>”</strong>.<br />

Si algo nec<strong>es</strong>itas o d<strong>es</strong>eas, yo ostento el poder. Cristo tuvo todos los<br />

bien<strong>es</strong>. Él tiene lo que nec<strong>es</strong>itamos y queremos, y <strong>es</strong> Él quién<br />

determina su valor.<br />

En Juan 1:38 J<strong>es</strong>ús dijo a discípulos potencial<strong>es</strong>, “¿qué buscáis?<strong>”</strong>.<br />

Con <strong>es</strong>ta declaración d<strong>es</strong>veló el valor e incrementó el nivel de d<strong>es</strong>eo<br />

de los bien<strong>es</strong> que retenía.<br />

Cristo lo tenía todo en Su mano y mantuvo el derecho y autoridad<br />

sobre ello.<br />

No se lanzaba calle abajo sobre las personas. No llamaba a las<br />

puertas. No, conservaba el valor e integridad de lo que poseía<br />

mediante un acc<strong>es</strong>o limitado.<br />

No se entregaba al hombre, pu<strong>es</strong> sabía lo que había en el hombre.<br />

Ver Juan 2:24, 25.<br />

Los fariseos sabían que no era un vendedor ambulante.<br />

Ma<strong>es</strong>tro, sabemos que er<strong>es</strong> hombre veraz, y que no te cuidas de<br />

nadie; porque no miras la apariencia de los hombr<strong>es</strong>, sino que con<br />

verdad enseñas el camino de Dios.<br />

Marcos 12:14<br />

El poder que creían ostentar era el de su aprobación o rechazo, y J<strong>es</strong>ús<br />

no buscaba <strong>es</strong>o. Si Cristo buscaba en los ojos de los transeúnt<strong>es</strong> el<br />

guiño de aceptación, Su Evangelio habría sido inutilizado, devaluado<br />

y anulado.<br />

154


Si busco la aprobación del hombre, disminuyo el valor de las Buenas<br />

Nuevas. En vez de embajador me vuelvo embarrador. Si soy salvo y<br />

llevo en mis hu<strong>es</strong>os las Buenas Nuevas de Dios, tengo que permitir<br />

que la dignidad de Cristo se mantenga a través de mí. Las Buenas<br />

Nuevas del Reino se predicaban por las call<strong>es</strong>, no se subastaban. Esto<br />

no significa que yergo la cabeza con orgullo, ¡NO! Pero tampoco miro<br />

a través del ojo de mi in<strong>fe</strong>rioridad personal para ganar su aprobación.<br />

J<strong>es</strong>ús o<strong>fe</strong>ndió, hizo d<strong>es</strong>istir y de algún modo ahuyentó a discípulos<br />

potencial<strong>es</strong>. El Evangelio no se amoldaba a nadie. No consintió<br />

catálogos de gustos personal<strong>es</strong> ni un evangelio a la carta.<br />

¿Y por qué? ¿Por qué era tan brusco? ¿Por qué d<strong>es</strong>pedía a los que<br />

precisamente le seguían? ¿Por qué, J<strong>es</strong>ús, por qué?<br />

Por <strong>es</strong>to:<br />

No buscaba filósofos que adoptaran un ideal.<br />

No buscaba mercenarios para una cruzada.<br />

No buscaba científicos que elaboraran una teoría.<br />

No buscaba ma<strong>es</strong>tros que impartieran doctrina.<br />

No buscaba religiosos que enseñaran teología.<br />

No buscaba g<strong>es</strong>tor<strong>es</strong> que supervisaran un plan.<br />

No buscaba plañideras que consolaran y animaran.<br />

No buscaba expositor<strong>es</strong> que argumentaran un caso.<br />

No buscaba filantrópicos que sufragaran un ideal.<br />

Ni siquiera buscaba seguidor<strong>es</strong> que le acompañaran por los caminos.<br />

No, lo que buscaba <strong>es</strong>te Hombre misterioso, el que tenía todo el<br />

poder, era AMANTES.<br />

Aquellos que le siguieran, sí, pero no como quien sigue a un Rabí<br />

asintiendo a enseñanzas y mandamientos con un amén. No, Él<br />

d<strong>es</strong>eaba encontrar quien le abrazara, aquellos que le valoraban tanto<br />

que sólo se pudiera comparar al valor que Él daba al Padre. Anhelaba<br />

amant<strong>es</strong>, en<strong>fe</strong>rmos de d<strong>es</strong>eo, atrapados por la intriga.<br />

155


No perseguía porque los amant<strong>es</strong> buscan. No corría detrás de nadie<br />

porque los amant<strong>es</strong> no se marchan.<br />

Elevó la apu<strong>es</strong>ta ante la perspectiva del amor:<br />

No <strong>es</strong> una emoción, aunque <strong>es</strong>tá plagado de emocion<strong>es</strong>.<br />

No <strong>es</strong> conseguirlo, sino ser conseguido.<br />

El amor <strong>es</strong> algo que <strong>es</strong>tá fuera de uno mismo, pero no ajeno a uno<br />

mismo. Se dirige hacia afuera, a abrazar, a mirar detenidamente lo que<br />

no puede tenerse ni poseerse, aunque <strong>es</strong>tá en completa unión.<br />

Buscaba aquellos raptados, poseídos por Él, aquellos que lo dejarían<br />

todo por una mirada seductora.<br />

Los ideal<strong>es</strong> pueden hacer mártir<strong>es</strong>. El poder del odio puede retenerte<br />

en el fuego. Pero sólo el amor provocará que abandon<strong>es</strong> por completo<br />

a tu yo. Hasta el fin de tus derechos, opinion<strong>es</strong>, pos<strong>es</strong>ion<strong>es</strong> y<br />

relacion<strong>es</strong> personal<strong>es</strong>. Sólo el amor puede d<strong>es</strong>hacer ataduras invisibl<strong>es</strong><br />

a padr<strong>es</strong>, hermanos, familia y amigos.<br />

El que ama a padre o madre más que a mí, no <strong>es</strong> digno de mí; el que<br />

ama a hijo o hija más que a mí, no <strong>es</strong> digno de mí.<br />

Mateo 10::37<br />

El amor <strong>es</strong> la r<strong>es</strong>pu<strong>es</strong>ta y amant<strong>es</strong> <strong>es</strong> lo que Él d<strong>es</strong>ea.<br />

¡Padre, incrementa nu<strong>es</strong>tro AMOR!, para que podamos ser<br />

embajador<strong>es</strong>, no embarrador<strong>es</strong>.<br />

¡Padre, incrementa nu<strong>es</strong>tro AMOR!, que podamos valorar <strong>es</strong>te<br />

Precioso T<strong>es</strong>oro que Tú no permit<strong>es</strong> que nadie pisotee al imponer un<br />

“acc<strong>es</strong>o controlado<strong>”</strong>.<br />

156


La Idea de J<strong>es</strong>ús<br />

Por W. A. Belle<br />

Hemos reducido a J<strong>es</strong>ús a un jóven caballero con sandalias, dulce y<br />

amable. Y no sólo nos lo hemos perdido mientras pasaba por delante<br />

nu<strong>es</strong>tro, sino que hemos perdido el ilimitado alcance de Su<br />

Inexplicable Ser. Hemos rehecho a J<strong>es</strong>ús conforme a nu<strong>es</strong>tras ideas<br />

acerca de Él; y las <strong>es</strong>crituras han dejado de impactarnos y Sus<br />

caminos y palabras de sorprendernos.<br />

Embutimos nu<strong>es</strong>tras ideas de J<strong>es</strong>ús entre las páginas de la Biblia y<br />

pasamos por alto las palabras que narran Su singularidad.<br />

Dios no deja de llamar al Hijo Su Misterio, y nosotros empeñados en<br />

quitarnos de encima lo que nos confunde de Él, de evitar el d<strong>es</strong>afío de<br />

ir tras <strong>es</strong>te J<strong>es</strong>ús. En realidad lo que queremos <strong>es</strong> <strong>es</strong>tar cómodos con<br />

J<strong>es</strong>ús o en su de<strong>fe</strong>cto hacer que sea simpático con nosotros.<br />

No <strong>es</strong> simpático. Así que nos quedamos con una muñeca de papel en<br />

vez de con el verdaderamente peligroso Hijo de Dios. Está tan en<br />

contra de nu<strong>es</strong>tro dogma religioso en cuanto a Él como lo <strong>es</strong>tuvo con<br />

los fariseos.<br />

Creedme, nu<strong>es</strong>tro J<strong>es</strong>ús no se ajustará a <strong>es</strong>a “idea<strong>”</strong> sentimental de Él<br />

que no <strong>es</strong> digna de Su maj<strong>es</strong>tad y de Su naturaleza iconoclasta. Él <strong>es</strong><br />

el que vuela por los air<strong>es</strong> los límit<strong>es</strong> y el que d<strong>es</strong>truye las vanas<br />

ilusion<strong>es</strong>. Hará de tu vida un misterio aunque ignor<strong>es</strong> las cu<strong>es</strong>tion<strong>es</strong> y<br />

<strong>es</strong>quiv<strong>es</strong> el dilema.<br />

Él era un hombre de preguntas. ¿Te has dado cuenta de <strong>es</strong>o? Siempre<br />

te <strong>es</strong>tá preguntando. Y tú lo sab<strong>es</strong>. Pued<strong>es</strong> intentar pasarlo por alto,<br />

pero por dentro sab<strong>es</strong> que la Trinidad te examina y pregunta. Y la<br />

pregunta más frecuente <strong>es</strong>: ¿qué vas a hacer con lo que SABES de<br />

J<strong>es</strong>ucristo? ¿Y qué más <strong>es</strong>tás dispu<strong>es</strong>to a saber de Él?<br />

157


J<strong>es</strong>ús <strong>es</strong> la Norma<br />

Estos son algunos pensamientos de mi corr<strong>es</strong>pondencia con un<br />

hermano acerca de lo “di<strong>fe</strong>rente<strong>”</strong> del Señor. Le pedí permiso para<br />

compartirlo con vosotros, pu<strong>es</strong> <strong>es</strong>ta visión me ha impactado<br />

grandemente.<br />

-Martha Kilpatrick.<br />

Llego al pensamiento de que el Señor no <strong>es</strong> radical. El Señor <strong>es</strong> el<br />

Señor, y <strong>es</strong> TAN opu<strong>es</strong>to a todo cuanto tiene que ver con el “mundo<strong>”</strong>,<br />

<strong>es</strong> tan “a-mundano<strong>”</strong>, que todo cuanto toca se hace “radical<strong>”</strong> para el<br />

mundo. Él <strong>es</strong> NORMAL, y cuando Él toca cualquier cosa, <strong>es</strong>o se<br />

convierte en algo RADICALMENTE OPUESTO a los caminos de la<br />

humanidad, Satanás y el mundo. Es <strong>es</strong>a “otra cosa<strong>”</strong> tan peculiar que<br />

mencionaste.<br />

Así que tien<strong>es</strong> la “etiqueta<strong>”</strong> mundana de ser “radical<strong>”</strong>, pero no <strong>es</strong><br />

verdad. No te <strong>es</strong>tás haciendo radical, sino NORMAL PARA EL<br />

SEÑOR. Oh, Marta, nos <strong>es</strong>tamos convirtiendo en ciudadanos de los<br />

Cielos donde la Verdad y lo Real moran... pued<strong>es</strong> llamarlo ahora<br />

“radical<strong>”</strong>, pero en el futuro donde Él <strong>es</strong>tá no se conoce así.<br />

158


J<strong>es</strong>ús, el Misterio de Dios<br />

(Extraído de <strong>“La</strong> Centralidad de J<strong>es</strong>ucristo<strong>”</strong>)<br />

Por T. Austin Sparks:<br />

“... el primer capítulo de la carta a los colosens<strong>es</strong> nos lleva de vuelta a<br />

la mente y corazón de Dios ant<strong>es</strong> de que el mundo fuera, y se nos<br />

mu<strong>es</strong>tra lo que sucedía en la mente y corazón del Padre en cuanto al<br />

Hijo. Se llama “el misterio<strong>”</strong>, conformando el secreto Divino. Es<br />

impr<strong>es</strong>ionante ver que ant<strong>es</strong> de que comenzara ninguna actividad<br />

creadora, Dios abrigaba un secreto en Su corazón, el Padre tenía un<br />

secreto, algo que no había mostrado a nadie, no había contado a nadie,<br />

un secreto <strong>es</strong>condido; tenía que ver con el Hijo. A raíz del secreto de<br />

Su corazón se mantuvo ocupado en muchas actividad<strong>es</strong> a lo largo de<br />

las edad<strong>es</strong>, de muchas formas y maneras, trabajando con Su secreto,<br />

consagró Su secreto en todas aquellas actividad<strong>es</strong>, en todas aquellas<br />

formas y expr<strong>es</strong>ion<strong>es</strong> de Su propia expr<strong>es</strong>ión, nunca d<strong>es</strong>velando qué<br />

era el secreto, nunca proclamando lo que había en Su corazón a p<strong>es</strong>ar<br />

de la multitud de palabras, sino ocultándolo, <strong>es</strong>condiéndolo en<br />

símbolos y sombras y muchas cosas; todas ellas consagraban un<br />

secreto, “el misterio<strong>”</strong>.<br />

Finalmente, en la plenitud de los tiempos, al final de <strong>es</strong>tos tiempos,<br />

envió a Su Hijo, el Hijo de Su amor; d<strong>es</strong>pués por revelación del<br />

Espíritu Santo se agradó en dar a conocer el misterio, se agradó en<br />

d<strong>es</strong>velar el secreto, y el primer capítulo de la carta a los colosens<strong>es</strong> <strong>es</strong><br />

el incomparable d<strong>es</strong>velar del secreto del corazón de Dios en cuanto al<br />

Hijo de su amor, el d<strong>es</strong>cubrimiento de <strong>es</strong>e secreto. Vuélvelo a leer,<br />

cada fragmento, cuál era el misterio de Dios. Todo se r<strong>es</strong>ume, cada<br />

parte de ello, en <strong>es</strong>to: “Que en todas las cosas Él tenga la<br />

preeminencia.<strong>”</strong> “En TODAS las cosas<strong>”</strong>; y d<strong>es</strong>pués todo <strong>es</strong>o –y a mí<br />

<strong>es</strong>to me parece lo más increíble del asunto, algo que <strong>es</strong>tá tan lejos de<br />

nu<strong>es</strong>tra comprensión–, el secreto eterno del corazón de Dios en su<br />

poderoso significado y obrar, habría de comenzar su andadura en el<br />

corazón individual de un creyente. En lo que tiene que ver con la<br />

ejecución práctica del misterio, del secreto de Dios, su comienzo se<br />

identifica en el corazón de los creyent<strong>es</strong> individual<strong>es</strong>. Este misterio<br />

159


<strong>es</strong>: “Cristo en vosotros, la <strong>es</strong>peranza de gloria.<strong>”</strong> Este secreto de Dios<br />

que Dios había dispu<strong>es</strong>to en Su corazón d<strong>es</strong>de la eternidad <strong>es</strong>: “Cristo<br />

en ti.<strong>”</strong><br />

Aquello que <strong>es</strong>taba en la mente de Dios d<strong>es</strong>de ant<strong>es</strong> de la fundación<br />

del mundo, da comienzo en el recibir por <strong>fe</strong> a Cristo en el corazón por<br />

parte del creyente, el creyente individual. Eso no <strong>es</strong> el final, <strong>es</strong>o <strong>es</strong> el<br />

principio. Lo que seguirá será la Igl<strong>es</strong>ia la cual <strong>es</strong> Su Cuerpo. Esto ha<br />

sido ya visto y completado en el pensamiento eterno, pero viene tras<br />

la recepción de Cristo por parte del creyente individual. La Igl<strong>es</strong>ia que<br />

<strong>es</strong> Su Cuerpo no <strong>es</strong> el final. Será el centro de otra <strong>es</strong><strong>fe</strong>ra, los reinos de<br />

<strong>es</strong>te mundo, las nacion<strong>es</strong> caminarán en la luz que emita. Y luego una<br />

vez más, <strong>es</strong>o no será el fin, se expandirá hacia el universo. No sólo la<br />

humanidad glorificada sino las fuerzas y ejércitos cel<strong>es</strong>tial<strong>es</strong> <strong>es</strong>tarán<br />

bajo <strong>es</strong>a luz.<strong>”</strong><br />

160


Pensamientos Sobre la Sangre<br />

Por T. Austin Sparks<br />

Tiranía Satánica Mediante la Fijación en uno Mismo,<br />

Quebrantada por la Adecuada Asimilación de la Sangre<br />

Hay tantos de entre el pueblo de Dios hoy en quien<strong>es</strong> Satanás se <strong>es</strong>tá<br />

enseñoreando; enseñoreado a través de la línea de la acusación,<br />

trayéndol<strong>es</strong> bajo un sentimiento de condenación y juicio, privándol<strong>es</strong><br />

de su paz, de sus garantías, d<strong>es</strong>canso y <strong>es</strong>peranza; y verás que <strong>es</strong>tas<br />

personas no paran de hablar de sus propios de<strong>fe</strong>ctos, su<br />

pecaminosidad; no dejan nunca de girar en torno a sí mismos, todo lo<br />

que son y que no llegan a ser, todo lo que no son que debieran ser.<br />

Su liberación de Satanás <strong>es</strong> que debieran tener una asimilación fr<strong>es</strong>ca<br />

de la absoluta satisfacción del Padre con Su Hijo en provecho de<br />

ellos, y que hallen su posición de permanencia ante el Padre con<br />

aceptación.<br />

Esa <strong>es</strong> la senda de la liberación, el modo en que el Enemigo <strong>es</strong> echado<br />

fuera. Esta <strong>es</strong> la senda para vencerle como el Acusador. Sí, el terreno<br />

de la Sangre <strong>es</strong> suficiente para vivir <strong>es</strong>ta victoria autosuficiente de<br />

múltipl<strong>es</strong> perfil<strong>es</strong> y que todo lo abarca. “Y le vencieron por la sangre<br />

del Cordero<strong>”</strong>, y en todas <strong>es</strong>tas facetas el factor primordial y supremo<br />

de la virtud de <strong>es</strong>a Sangre <strong>es</strong> su intachable pureza, la naturaleza del<br />

Señor J<strong>es</strong>ús.<br />

Jamás ha habido otro igual a Él. Oh, me gozo de que fuera Dios quien<br />

era en Cristo, DIOS era en Cristo. Era Dios en Cristo, el absoluto y<br />

colmado Santo en quien no había pecado en que vino en forma<br />

encarnada; y en la virtud de <strong>es</strong>a naturaleza Divina en su per<strong>fe</strong>cción,<br />

Satanás en su autoridad <strong>es</strong> derrotado… en <strong>es</strong>e terreno. ¡Sea Dios<br />

bendito! Recibimos por la <strong>fe</strong> la virtud de <strong>es</strong>a preciosa Sangre; <strong>es</strong>to <strong>es</strong>,<br />

la per<strong>fe</strong>cción del Señor J<strong>es</strong>ús se pone a favor nu<strong>es</strong>tro. Eso <strong>es</strong> gracia…<br />

la maravilla del Evangelio. Si hubiéramos de empezar a analizarnos y<br />

tomar cuenta de nosotros mismos, qué ruinoso negocio, que aciago<br />

negocio, y no tendría fin… pensad en ello, amados, con todo cuanto<br />

161


sabemos acerca de nosotros mismos, con todo lo que Dios sabe de<br />

nosotros mismos… “El corazón <strong>es</strong> engañoso por sobre todas las<br />

cosas, y d<strong>es</strong><strong>es</strong>peradamente malvado<strong>”</strong>…<br />

Aunque todo <strong>es</strong>o sea un hecho, tú y yo podemos hoy permanecer en<br />

pr<strong>es</strong>encia de Dios en per<strong>fe</strong>cción sin pecado, no por nosotros mismos,<br />

sino en Cristo, y teniendo a nu<strong>es</strong>tro favor por mano de Dios una<br />

per<strong>fe</strong>cción por completo ausente de pecado. Entended que no <strong>es</strong>toy<br />

confundiendo las cosas, no <strong>es</strong>toy diciendo que alguno de nosotros se<br />

haga sobre <strong>es</strong>ta tierra completamente per<strong>fe</strong>cto en sí mismo, sino que<br />

<strong>es</strong>as per<strong>fe</strong>ccion<strong>es</strong> del Señor J<strong>es</strong>ús son pu<strong>es</strong>tas a nu<strong>es</strong>tro favor ante<br />

Dios para satisfacer Sus requerimientos, para proveer el terreno sobre<br />

el que Satanás ya no tiene autoridad.<br />

La derrota de Satanás y la victoria de los santos no lo <strong>es</strong> por su<br />

<strong>es</strong>fuerzo, sus luchas, sus gemidos, ni por ninguna otra cosa que<br />

puedan hacer; <strong>es</strong> la medida en que, por medio de su <strong>fe</strong>, se apropian de<br />

la per<strong>fe</strong>cción absoluta de Cristo como algo vivo y dinámico de parte<br />

de Dios para con ellos.<br />

La Sangre Repr<strong>es</strong>enta una Total Separación para con Dios.<br />

Creo que habrá muchos que perderán aquello que Dios tiene en mente<br />

como una vocación <strong>es</strong>pecial en Su reino cel<strong>es</strong>tial, porque hoy no se<br />

han consagrado a Dios. No creo que seamos llevados a <strong>es</strong>o “sí o sí<strong>”</strong>.<br />

Si quier<strong>es</strong> el mundo, aun como creyente, si quier<strong>es</strong> una pequeña<br />

porción de él… bien, pued<strong>es</strong> tenerlo a <strong>es</strong>te coste, la pérdida de aquello<br />

a lo que Dios te ha llamado con preeminencia, el reino cel<strong>es</strong>tial en una<br />

vocación de maravilla, <strong>es</strong>o <strong>es</strong> lo que perderás. Pablo lo perseguía.<br />

Pablo tensaba cada nervio, <strong>es</strong>piritualmente, por <strong>es</strong>a causa; dejó las<br />

cosas que <strong>es</strong>taban atrás por <strong>es</strong>a causa, para ser pr<strong>es</strong>ervado para Su<br />

reino cel<strong>es</strong>tial. Hay muchos cristianos que perderán <strong>es</strong>o porque no<br />

recorren todo el camino con el Señor; no pierden su salvación, sino<br />

<strong>es</strong>a <strong>es</strong>pecífica vocación en gloria y honor; la perderán porque no<br />

fueron capac<strong>es</strong> de reconocer la plena virtud de la Sangre en la<br />

plenitud de su consagración y abandono al Señor. Sí, en <strong>es</strong>e sentido<br />

serán dejados atrás.<br />

162


Pero los que lo viven, los que vencen bajo la prueba, vencen a causa<br />

de la Sangre del Cordero entendida como en <strong>es</strong>ta segunda acepción,<br />

como el abandono absoluto del Señor J<strong>es</strong>ús a la voluntad de Su Padre<br />

siquiera hasta la muerte; aquellos que permanecen en la virtud de Su<br />

consagración y los que hacen de su consagración, mediante Su gracia,<br />

algo tan profundo como lo fue la Suya. Nunca tendremos que<br />

renunciar a lo que Él renunció en Su obediencia a la voluntad de Dios.<br />

No tenemos que d<strong>es</strong>hacernos de <strong>es</strong>as cosas, pero lo que el Señor<br />

busca, amados, <strong>es</strong> un pueblo que <strong>es</strong>tén completamente con Él con un<br />

corazón sin division<strong>es</strong>, y <strong>es</strong>e <strong>es</strong> el terreno de nu<strong>es</strong>tra victoria y de la<br />

derrota de Satanás.<br />

***<br />

La consagración de J<strong>es</strong>ús fue el derramar de Su propia Sangre. Si<br />

permanecemos en la Sangre permanecemos en la naturaleza del<br />

Cordero.<br />

Comentario: La sangre no puede separarse de la NATURALEZA de<br />

Cristo, el Cordero.<br />

La Sangre como “cosa<strong>”</strong> o como “asunto<strong>”</strong> no <strong>es</strong> eficaz contra Satanás.<br />

UNE MI CORAZÓN PARA TEMER TU NOMBRE<br />

***<br />

Ay, que pueda verse que la Sangre del Cordero en su absoluta<br />

per<strong>fe</strong>cción de santidad y pureza en repr<strong>es</strong>entación de Su ser, Su<br />

substancia, Su <strong>es</strong>encia, Su naturaleza y Su completa rendición, Su<br />

capitulación a la voluntad del Padre, <strong>es</strong> el terreno sobre el cual<br />

permanecer; algo de lo que hay que apropiarse por la <strong>fe</strong> y a lo que hay<br />

que a<strong>fe</strong>rrarse. Más aún, <strong>es</strong> algo a ser tomado como arma contra el<br />

enemigo.<br />

La Sangre <strong>es</strong> un Arma para ser Blandida<br />

EL DRAGÓN <strong>es</strong> el adversario. NOSOTROS nos enfrentamos al<br />

Devorador. Todas las personas verdaderamente <strong>es</strong>piritual<strong>es</strong> saben hoy<br />

<strong>es</strong>o; algunos más que otros, quizás. Si pudiera engullirnos, lo haría.<br />

Yo creo que nos daría muerte si pudiera, golpearía nu<strong>es</strong>tros cuerpos<br />

con muerte, golpearía nu<strong>es</strong>tras almas con muerte. permitidme decir<br />

163


<strong>es</strong>ta palabra a aquellos que más íntimamente <strong>es</strong>tán asociados con las<br />

cosas, que cuanto más permanezcamos en relación con el Señor en<br />

relación con el reino cel<strong>es</strong>tial y <strong>es</strong>e ministerio sacerdotal en el reino<br />

cel<strong>es</strong>tial relacionado con el trono, tanto más <strong>es</strong>taremos al tanto de la<br />

inmediata proximidad del Dragón, del que procuraría golpear con<br />

muerte, golpear nu<strong>es</strong>tras ment<strong>es</strong> con muerte, golpear <strong>es</strong>tos cuerpos<br />

con muerte. Eso explicará muchas cosas para algunos. Cuanto más<br />

nos aproximamos a la vocación del hijo-varón, cuanto más nos<br />

aproximemos al Dragón, tanto más seremos conscient<strong>es</strong> del amplio<br />

abrazo y largo brazo de la muerte, y clamaremos para salir de ahí, y<br />

decir, <strong>es</strong>to no <strong>es</strong> vida, ¡<strong>es</strong> muerte! ¿Vamos a aceptarla? Es muerte;<br />

¿pero dónde <strong>es</strong>tá la virtud de la Sangre? ¿La rechazamos en el terreno<br />

de <strong>es</strong>a poderosa Sangre derramada? “Vencieron por la sangre…<strong>”</strong> Y<br />

no vamos a aceptar la muerte, a causa de <strong>es</strong>a Sangre.<br />

Quizás haya algunos que lo malinterpreten. No <strong>es</strong>tamos diciendo que<br />

no vamos a alcanzar la tumba si el Señor se demora; pero <strong>es</strong>o no <strong>es</strong><br />

aceptar la muerte. Podemos morir e ir a la tumba en el sentido físico,<br />

pero <strong>es</strong>o puede ser una victoria; no derrota, ¡sino triunfo! No<br />

aceptamos la muerte. Puede que lo sepas <strong>es</strong>piritualmente, lo sepas<br />

mentalmente, que sepas cómo <strong>es</strong> algo a tu alrededor que juega contigo<br />

cuando empiec<strong>es</strong> a tocar íntimamente <strong>es</strong>e fin último de Dios en el<br />

t<strong>es</strong>timonio de J<strong>es</strong>ucristo.<br />

Id en pos de <strong>es</strong>a explicación; a<strong>fe</strong>rráos a ella. Es algo que llama,<br />

amados, a levantarse contra el adversario, contra el que sorbe, el que<br />

absorbe. Bendito sea Dios, habrá una absorción mayor que la suya. La<br />

Muerte será sorbida. Hay uno que absorbe todo cuanto puede. Contra<br />

el Dragón, contra el Adversario, contra el Acusador, contra el<br />

Mentiroso, la Sangre <strong>es</strong> adecuada, suficiente; pero ha de haber una<br />

apropiación positiva, activa, del pleno poder y significado de <strong>es</strong>a<br />

Sangre y una actitud de <strong>es</strong>tar sobre ella; de tomarla como un<br />

instrumento activo. ¡Oh! captar una compañía como <strong>es</strong>a aquí y ahora<br />

que conozca y se apropie del poder de <strong>es</strong>a Sangre; no en la fuerza de<br />

la carne, sino vacíos de sí mismos, y en toda humildad, vaciedad,<br />

debilidad, en Su virtud y el poder de Su Sangre, y ponerse en pie y<br />

usar <strong>es</strong>a poderosa arma en contra de la actuación de la muerte<br />

164


pr<strong>es</strong>ente, para alcanzar <strong>es</strong>e fin que Dios tiene en mente. Eso <strong>es</strong> lo que<br />

hoy se nec<strong>es</strong>ita, a personas así.<br />

Quiera el Señor que <strong>es</strong>to haga habitación en nu<strong>es</strong>tros corazon<strong>es</strong>, para<br />

que <strong>es</strong>to no haya de ser un discurso sino un llamamiento, un urgir del<br />

Espíritu de Cristo… llevándonos hacia <strong>es</strong>o de un modo activo<br />

mediante la oración. Recordad vu<strong>es</strong>tro terreno, recordad vu<strong>es</strong>tra arma,<br />

recordad que todo vaciar de uno mismo, la debilidad, nu<strong>es</strong>tro<br />

derrocamiento, la disciplina, la corrección, existen para llevarte a un<br />

lugar eficiente. El orgullo no tiene aquí lugar; la autosuficiencia no<br />

tiene aquí lugar; la fuerza de uno mismo no llega hasta aquí; nada<br />

excepto la Sangre preciosa.<br />

La debilidad no <strong>es</strong> impotencia. Nu<strong>es</strong>tra impotencia no <strong>es</strong> d<strong>es</strong>epero.<br />

No, sino que <strong>es</strong> el camino abierto para que la eficacia poderosa de la<br />

Sangre entre en acción.<br />

165

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!