22.07.2013 Views

hombre según el antiguo testamento - Revista Biblica

hombre según el antiguo testamento - Revista Biblica

hombre según el antiguo testamento - Revista Biblica

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

[203]<br />

En cambio, Dios es eterno e inmutable (cfr Sal 103,17s) ; y <strong>el</strong> <strong>hombre</strong> que es nada se<br />

refugia en Dios, su creador:<br />

“Hazme saber, Yavé, mi fin,<br />

y cuál es la medida de mis días,<br />

para que sepa yo cuán frágil soy.<br />

Y ahora, Señor, ¿qué puedo yo esperar?<br />

En ti está mi esperanza” (Sal 39,5.8; cf. Sal 89,48).<br />

En última instancia, la diferencia entre Dios y <strong>el</strong> <strong>hombre</strong> está en <strong>el</strong> hecho de que Dios<br />

es <strong>el</strong> creador y <strong>el</strong> <strong>hombre</strong> la criatura. Dios, sin embargo, se acuerda que los <strong>hombre</strong>s<br />

son “carne”, y se compadece de <strong>el</strong>los:<br />

“Cual la ternura de un padre para con sus hijos,<br />

así de tierno es Yavé para quienes le temen;<br />

que él sabe de qué estamos plasmados,<br />

se acuerda de que somos polvo” (Sal 103,13s; cf Sal 78,38ss y Si 18; 11-<br />

13).<br />

***<br />

El r<strong>el</strong>ato sacerdotal de la creación considera al <strong>hombre</strong> bajo otro aspecto, como la<br />

“imagen de Dios:<br />

“Hagamos <strong>el</strong> <strong>hombre</strong> a imagen nuestra, <strong>según</strong> nuestra semejanza...<br />

Y creó Dios <strong>el</strong> <strong>hombre</strong> a imagen suya:<br />

a imagen de Dios le creó;<br />

macho y hembra los creó”. (Gn 1,26s).<br />

Que <strong>el</strong> <strong>hombre</strong> ocupa una posición especial en <strong>el</strong> orden creado resulta también de<br />

otros <strong>el</strong>ementos d<strong>el</strong> r<strong>el</strong>ato: Dios habla directamente al <strong>hombre</strong> (vv. 28s), y le confiere<br />

<strong>el</strong> “dominium terrae” (v. 28b), ya mencionado en la segunda parte d<strong>el</strong> v. 26. Además,<br />

la creación d<strong>el</strong> <strong>hombre</strong> es precedida por una palabra, en forma de plural de d<strong>el</strong>iberación,<br />

con la cual Dios anuncia su obra: “Hagamos <strong>el</strong> <strong>hombre</strong>...”. 31<br />

El nombre hebreo adam, en <strong>el</strong> r<strong>el</strong>ato sacerdotal, es un colectivo. “<strong>hombre</strong>s”, como<br />

se ve, por ejemplo, d<strong>el</strong> v. 26b, y por lo tanto incluye también a las mujeres. 32 La<br />

aclaración al final d<strong>el</strong> v. 27 (“macho y hembra los creó”), en realidad, es innecesaria.<br />

Se manifiesta en <strong>el</strong>la <strong>el</strong> espíritu de la tradición sacerdotal, preocupada por clasificar a<br />

los <strong>hombre</strong>s <strong>según</strong> su diferenciación sexual, así como antes ha clasificado las plantas y<br />

los animales “<strong>según</strong> su especie” (1,11s.21,24s). No hemos de buscar en <strong>el</strong>la, pues, una<br />

indicación de que la “imagen de Dios sea<br />

31 Véase F. Horst “Der Mensch als Ebenbild Gottes”, en: Gottes Recht, Theologische Bücherei<br />

Band 12, München 1961 pág. 222 y, sobre todo: Werner H. Schmidt Die Schöpfungsgeschichte der<br />

Priesterschrift 1964, págs. 127ss.<br />

32 Cf homo, en latín, o Mensch, en alemán.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!