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Documento_30127_20131204

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E<br />

inforMe especial<br />

consumo<br />

responsable<br />

MedioaMbiente<br />

Historia de un<br />

cuerpo moribundo<br />

iMpacto<br />

¿campesinos en<br />

vía de extinción?<br />

Los<br />

guardianes<br />

de Lo público<br />

este equipo de hombres ha<br />

puesto al sector minero<br />

del país bajo la lupa.<br />

aquí su radiografía.<br />

2 | 2011 | gestión sostenible |


R<br />

EL SABOR<br />

ES INFINITO,<br />

NUESTRO<br />

COMPROMISO<br />

CON EL PLANETA,<br />

TAMBIÉN.<br />

Invertimos más de 11 millones de dólares*<br />

en programas de sostenibilidad, aportando al<br />

desarrollo de las regiones donde operamos y<br />

mejorando la calidad de vida de nuestros 8.880<br />

colaboradores, sus familias y su comunidad.<br />

Además generamos progreso y bienestar con<br />

nuestro programa bandera Big Brother, con el<br />

cual asesoramos y compartimos todo nuestro<br />

conocimiento con algunas pequeñas y<br />

medianas empresas de la región, ayudándolas a<br />

fortalecer su perfil exportador y a mejorar la<br />

calidad de sus procesos.<br />

*Fuente: Informe de Sostenibilidad 2012,<br />

bajo Metodología GRI.


BANDERA<br />

ostenible<br />

Directora<br />

María López Castaño<br />

eDitora General<br />

Natalia Borrero Morales<br />

Jefe De reDacción<br />

Mauricio Sáenz<br />

coorDinaDora General<br />

María Margarita Fontecha<br />

coorDinaDora coMercial<br />

Ninfa Esperanza Sandoval<br />

eDitora MUltiPlataforMa<br />

Juanita Rico Ardila<br />

colUMnistas<br />

John Elkington, Simon<br />

Maxwell, Ken Cook, Manuel<br />

Rodríguez, Brigitte Baptiste<br />

Dirección De arte<br />

Carolina Gómez Andrade<br />

Diseño<br />

David Reina, Camilo Higuera,<br />

Karen Sofía Barrero, Diana Ortiz<br />

Martínez, Delvin Vera, Camilo<br />

Riaño, Camila Mejía<br />

eDitor De fotoGrafía<br />

Mario Inti García<br />

asistente De fotoGrafía<br />

Natalia Gómez<br />

fotoGrafía<br />

Equipo de fotografía Revista Semana<br />

AFP Archivo Semana<br />

Latinstock Colombia/ Corbis<br />

infoGrafías:<br />

Camilo Higuera<br />

Enny Johana Rodríguez<br />

ekon7studio<br />

ilUstraciones:<br />

Enny Johana Rodríguez<br />

corrección De estilo<br />

Carlos Correa, Ángela Delgado,<br />

Ana María Noguera, Felipe<br />

Miranda, Natalia Torres<br />

PerioDistas<br />

Mauricio Sojo, Ana Villalba, Janeth Acevedo,<br />

Nathan Jaccard, Juan David Montes, Silvia<br />

Camargo, Cristina Castro, Santiago Sánchez,<br />

María Paula Triviño, Nicolas Peña, Mónica<br />

Pardo, Mónica Diago, Camilo Jiménez<br />

PuBLICACIONES SEMANA<br />

Gerente General<br />

Elena Mesa Zuleta<br />

Gerente financiero y aDMinistrativo<br />

Felipe Albán Daza<br />

Gerente coMercial<br />

Isabel Cristina Calle Villa<br />

Gerente nUevos MeDios<br />

Sergio Quijano Llano<br />

Gerente De circUlación<br />

Iván Jaramillo Price<br />

Gerente De MercaDeo<br />

Truddy Harker<br />

Gerente coMercial revista seMana<br />

Mario Restrepo Quintero<br />

Director De ProDUcción<br />

Orlando González Galindo<br />

iMPresión: Printer coloMbiana sa<br />

Calle 93 B No 13-47<br />

Teléfonos: 646 8400<br />

Fax 646 8400 ext 1601<br />

4<br />

© Publicaciones Semana Ltda. Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción<br />

total o parcial sin autorización expresa de Publicaciones Semana Ltda.


semana sostenible<br />

Colaboradores<br />

Andrés Wiesner<br />

Periodista. Ganador del Premio Simón Bolívar y profesor de la<br />

Maestría en Periodismo de la Universidad de Los Andes.<br />

noHrA rAmírez<br />

Directora editorial<br />

de la revista P&M.<br />

eduArdo AriAs<br />

Periodista cultural,<br />

biólogo, libretista y músico.<br />

Columnista de Publimetro.<br />

JuAn CArlos<br />

FrAnCo<br />

Ingeniero y director<br />

de la Fundación Julio<br />

Mario Santo Domingo.<br />

JuAn GAllón<br />

Periodista de la<br />

revista Colors.<br />

sibyllA<br />

brodzinski<br />

Fotógrafa y<br />

periodista<br />

especializada<br />

en cubrir temas<br />

sobre derechos<br />

humanos y<br />

problemáticas<br />

sociales en<br />

América Latina.<br />

Corresponsal de<br />

The Guardian y<br />

The Economist<br />

en Colombia.<br />

CésAr ruíz AGudelo<br />

Biólogo. Magíster en matemáticas y estadística<br />

y PhD en ciencias ambientales. Coordinador de<br />

Conservación Internacional y profesor de la Facultad<br />

de Administración de la Universidad de Los Andes.<br />

Andrés urrAzA<br />

Exbanquero y<br />

psicólogo dedicado<br />

a recorrer el mundo<br />

y escribir historias.<br />

ConstAnzA Jerez<br />

Periodista y directora<br />

de Jerez y Sandoval.<br />

Felipe ArAnGo<br />

Socio fundador de<br />

BSD Consulting y<br />

CEO de la Fundación<br />

Biodiversa.<br />

5


66<br />

126<br />

16<br />

PORTADA<br />

n el octavo piso del papel están jugando la institucionalidad,<br />

la economía, el<br />

edificio de la Contraloría<br />

General medioambiente, las comunidades,<br />

el Estado y las empresas que<br />

de la República, en<br />

Bogotá, toman muy se encargan de la explotación de<br />

en serio la tarea de estos recursos no renovables.<br />

controlar y vigilar. Allí funciona<br />

la Contraloría Delegada pa-<br />

estas investigaciones ya se han<br />

Los primeros resultados de<br />

ra el Medioambiente, donde un materializado. En abril de este<br />

grupo de ocho investigadores año, el grupo de trabajo, liderado<br />

entre geólogos, economistas y por Luis Jorge Garay, presentó el<br />

abogados, se dieron a la tarea libro Minería en Colombia: Derechos,<br />

Políticas Públicas y Gober-<br />

el último año y medio de averiguar<br />

y analizar cómo está funcionando<br />

la actividad minero panorama de esta actividad en<br />

nanzas, que no solo presenta un<br />

energética en Colombia y qué el país, sino que además llama<br />

Fernando<br />

Rodrigo<br />

Luis Jorge<br />

Vargas<br />

Negrete<br />

Garay,<br />

Valencia,<br />

Montes,<br />

economista.<br />

abogado.<br />

abogado.<br />

INFORME ESPECIAL<br />

100<br />

114<br />

CUERPO<br />

Planifique<br />

Practique sexo<br />

A mayor cantidad de<br />

resPonsable y seguro<br />

1 humanos se necesita 2 Los humanos pueden ser<br />

más espacio y el consumo<br />

de recursos aumenta, enfermedades letales.<br />

agentes transmisores de<br />

así como el impacto<br />

Las ETS (Enfermedades de<br />

sobre los ecosistemas.<br />

Transmisión Sexual) y el<br />

Según United Nations<br />

Sida han estado en primera<br />

Department of Economic<br />

and Social Affairs,<br />

tres décadas. Usar condón<br />

plana durante las últimas<br />

el número de personas<br />

se ha convertido en la<br />

en el planeta pasó de<br />

forma más eficaz de evitar<br />

1.500 millones en 1900,<br />

transmitir o ser contagiado<br />

a 7.000 millones<br />

con una ETS o con el VIH.<br />

en la actualidad.<br />

impacto<br />

medioambiente<br />

CULTURA<br />

la atención sobre cómo se relacionan<br />

e interactúan todos los<br />

elementos y personajes que de<br />

una u otra manera están vinculados<br />

a esta actividad. Además,<br />

propone recomendaciones sobre<br />

los correctivos para que este importante<br />

sector productivo sea<br />

un buen negocio para todos los<br />

grupos de interés, no se convierta<br />

en un lastre del crecimiento<br />

económico y social y solo juegue<br />

en beneficio de unos pocos.<br />

Y es que la minería ha sido,<br />

en las últimas décadas, una actividad<br />

fundamental en el país.<br />

Guillermo<br />

Rudas,<br />

economista.<br />

INfogrAfíA:<br />

Enny rodríguez Peña<br />

Camilo Higuera Mozombite<br />

Las insuficientes políticas de desarrollo del campesinado y el abandono<br />

estatal hacen que las nuevas generaciones migren a las ciudades.<br />

comienzos de sionaba lo que estaba ocurriendo años en un país netamente urbano;<br />

por el contrario, y como<br />

2012, el entonces más allá de los centros urbanos:<br />

viceministro de “El campo se nos está envejeciendo<br />

y hay que apostarle a un relevo del informe especial sobre<br />

lo dice el director académico<br />

Agricultura, Ricardo<br />

Sánchez, generacional. Mientras en Vietnam<br />

los cultivadores de café no Programa de las Naciones Uni-<br />

campesinado que realizó el<br />

llamó la atención<br />

del país sobre lo que estaba pasando<br />

en el campo colombiano. en Colombia superan los 50”, dijo Absalón Machado, “somos más<br />

llegan en promedio a los 30 años, das para el Desarrollo (PNUD),<br />

No era que nadie se hubiera dado entonces el funcionario.<br />

rurales de lo que creíamos”. El<br />

cuenta de la situación, sino que Y no es que Colombia se estudio asegura que 32 por ciento<br />

de los municipios del país hasta ese momento nadie dimen- haya convertido en los últimos<br />

son<br />

Por Andrés Urraza Carrizosa<br />

n 1951 había cerca de Hace poco navegué un tramo sus crecientes índices de contaminación<br />

van exterminando la<br />

870.000 habitantes en del río Bogotá en compañía de<br />

Bogotá, y las aguas residuales<br />

de todas estas de la Fundación Al Verde Vivo, de sus 380 kilómetros de longitud.<br />

Luis Fernando Vásquez, director vida que se encuentra a lo largo<br />

personas iban a parar<br />

al torrente del río territorios hídricos degradados gotá se está ‘recuperando’ des-<br />

que se encarga de recuperar los Según Fernando, el río Bo-<br />

Bogotá. Hoy en día, la población por el hombre. Me contó la verdad<br />

de una realidad nefasta que misteriosamente sus aguas cade<br />

que él tiene memoria, pero<br />

alcanza las ocho millones de personas<br />

y aún pasa lo mismo. Este afecta las aguas de esta fuente da vez son menos aguas y más<br />

cuerpo de agua es la alcantarilla que desciende serpenteando por otra cosa. “Un río no se debe intervenir”,<br />

explica este abierta más grande de Colombia. el territorio colombiano, mientras<br />

activista<br />

Por Eduardo Arias Villa Sin embargo, lo primero que No sobra anotar que Colombia<br />

representa la periferia de esa<br />

pensé al enterarme del debate, instintivamente,<br />

fue: “Ahora sí puedo civilización occidental, al tener un<br />

n 2008 tuve la fortuna<br />

de viajar a Kenia. salir a la calle con la cobija masai. pie puesto en ella y otro en lo ancestral,<br />

lo que hace que vivamos<br />

En mi visita al Parque<br />

Nacional Masai No lo he hecho. Pero la sola en una constante contradicción.<br />

Cuento con el aval de Vuitton”.<br />

Mara compré una descripción de algo tan banal como<br />

lo que acabo de contar pinta Por un lado está el debate de las<br />

El tema es de nunca acabar.<br />

tela a cuadros roja y<br />

azul. Hace pocas semanas me enteré<br />

de que la marca Louis Vuitton o lo que llamamos la civilización mí, personalmente, me rebasa.<br />

de cuerpo entero cómo Occidente, patentes, un tema jurídico que a<br />

lanzó su colección de primaveraverano<br />

de 2012 basándose en el cultura del planeta y, por razovivencia<br />

misma de los saberes<br />

occidental, se ha adueñado de la Por otro lado está la super-<br />

diseño de esa tela (denominada nes de estética o simples leyes del ancestrales. Y en estos tiempos<br />

shuka) y que patentó el diseño, lo mercado, decide qué merece sobrevivir<br />

y cómo hacerlo.<br />

paradoja. Primero, su<br />

que corren, se plantea una gran<br />

que provocó una controversia.<br />

salvación<br />

sumario<br />

Sumario<br />

Editorial:<br />

Una verdad incómoda 07<br />

portada<br />

¡Que sigua el debate! 16<br />

En guardia 18<br />

“Colombia no está preparada para<br />

asumir el ‘boom’ minero” 20<br />

Las fallas verdes 22<br />

El desfile de la riqueza 24<br />

¿Restitución o minería? 27<br />

“La minería es inconstitucional” 28<br />

Lo que viene 32<br />

En la mira 34<br />

La fuerza de un pueblo 36<br />

El precio justo 40<br />

EspEcial consumo<br />

Consumo responsable:<br />

¿mito, realidad imposible<br />

o necesidad? 48<br />

¿De qué está hecha la<br />

cotidianidad? 60<br />

50 acciones para convertirse en<br />

un consumidor responsable 66<br />

Educación y género 71<br />

Un giro a favor del<br />

consumo responsable 82<br />

Más que voluntad 92<br />

Selva nevada 96<br />

impacto<br />

¿Campesinos en vía<br />

de extinción? 100<br />

No más casas en el aire 106<br />

mEdioambiEntE<br />

Invasores silenciosos 110<br />

Historia de un cuerpo<br />

moribundo 114<br />

La semilla de la<br />

discordia 118<br />

tEndEncias<br />

”No creemos tener lo suficiente<br />

para ser felices” 120<br />

El valor intangible 122<br />

Lo nuevo del GRI – G4 125<br />

cultura<br />

La gran paradoja de las<br />

culturas amenazadas 126<br />

“Los activistas no son educados<br />

y las personas educadas no<br />

quieren hacer activismo” 130<br />

columna<br />

La encrucijada de carbono 12<br />

Los dilemas ambientales<br />

de la minería 42<br />

Simplismo minero 58<br />

Recién nacidos<br />

contaminados 70<br />

Una realidad inaplazable 116<br />

FOTO PORTADA: Juan Carlos Sierra - Semana<br />

16<br />

FOTO: Archivo Semana - León Darío Peláez<br />

E<br />

FOTOS: Archivo Semana<br />

100<br />

50<br />

acciones<br />

para convertirse<br />

en un consumidor<br />

responsable<br />

¡Pare! No mire para otro lado y<br />

deje de pensar que la cosa no<br />

es con usted. El mundo puede<br />

tener otro destino y usted está en<br />

capacidad de ayudar a construirlo.<br />

Estos 50 verbos son un comienzo.<br />

A<br />

¡Que siga<br />

¿campesinos en<br />

vía de extinción?<br />

El paro agrario demostró que el campesinado existe y tiene<br />

la fuerza suficiente para poner al gobierno en Jaque. Sin<br />

embargo, ese poder se está volviendo viejo.<br />

Historia de un<br />

cuerpo moribundo<br />

FOTO: Archivo Semana - Alejandro Acosta<br />

“Miles de personas han<br />

sobrevivido sin amor, ninguna<br />

sin agua”, W. H. Auden.<br />

E<br />

114<br />

La gran paradoja de las<br />

culturas amenazadas<br />

Fusionar, mezclar o dejar intactas las culturas ancestrales<br />

son algunos de los dilemas que enfrentan los pueblos<br />

para lograr mantenerlas en el tiempo.<br />

E<br />

FOTO: María de Miguel<br />

66<br />

126<br />

FOTOS: AFP


editorial<br />

semana sostenible<br />

Una verdad<br />

incómoda<br />

Bienvenido a la era<br />

del antropoceno.<br />

Así es. Estamos sumergidos,<br />

sin vuelta<br />

atrás, en una<br />

época en la que el<br />

hombre domina la<br />

tierra y no de la mejor manera.<br />

En los setenta entendimos por<br />

primera vez que el mundo se<br />

encaminaba hacia un agotamiento<br />

irreversible de los recursos<br />

naturales. Sin embargo,<br />

la academia, los organismos<br />

multilaterales, la sociedad civil<br />

y los estados no lograron ponerse<br />

de acuerdo en cómo frenar lo<br />

que se avecinaba.<br />

El precio de no haber hecho<br />

nada es ahora más costoso que<br />

nunca. 40 años más tarde hemos<br />

deforestado un poco más del 60<br />

por ciento de los bosques del<br />

mundo, el agua se ha vuelto un<br />

lujo en un planeta que está compuesto<br />

en tres cuartas partes<br />

por ella y la pobreza supera los<br />

2 mil millones de personas que<br />

viven con menos de 2 dólares al<br />

día. Hoy la realidad es otra.<br />

¿Qué nos trajo hasta aquí?<br />

Una explicación sencilla sería decir<br />

que nunca le creímos a Galileo<br />

y seguimos convencidos de que el<br />

mundo gira a nuestro alrededor.<br />

Que el planeta es un comodity y<br />

que está para hacer con él lo que<br />

queramos, cómo queramos.<br />

La situación real es que<br />

si imaginamos al mundo como<br />

una pelota inflable –según<br />

lo propone el científico Johan<br />

Rockström–, y la presionamos<br />

con fuerza en cuatro lugares<br />

al mismo tiempo, esta explotaría.<br />

Ese es el riesgo al que<br />

se encuentra expuesto nuestro<br />

planeta con las cuatro ‘megapresiones’<br />

que enfrenta: el<br />

crecimiento demográfico, los<br />

cambios extremos del clima,<br />

el deterioro implacable de los<br />

ecosistemas y nuestra incapacidad<br />

como especie para<br />

enfrentar el colapso. Es decir,<br />

debemos estar preparados para<br />

ser sorprendidos de la peor<br />

manera posible.<br />

Sin embargo, nuestra suerte<br />

aún no está echada y existe<br />

una oportunidad extraordinaria<br />

para reinventarnos como civilización<br />

dentro de la crisis. Debemos<br />

asumir que estos temas no<br />

son ajenos y que se encuentran<br />

presentes en todas las decisiones<br />

de compra que tomamos.<br />

Esta revista quiere aportar<br />

a dicha transformación, razón<br />

por la cual el consumo responsable<br />

es el hilo conductor de la<br />

presente edición.<br />

Pocas veces reflexionamos<br />

sobre el impacto que nuestras<br />

acciones tienen en la naturaleza<br />

y en la sociedad. Es el caso de<br />

nuestro ‘nuevo mejor amigo’, el<br />

celular; el cual contiene minerales<br />

como el coltán, mercurio,<br />

plomo y estaño, entre otros, y requiere<br />

30 mil litros de agua para<br />

su fabricación. Esto sin contar a<br />

las miles de personas que participan<br />

en su cadena de producción,<br />

a veces en países en vía de<br />

desarrollo y en condiciones inhumanas.<br />

Como lo preguntó una<br />

vez Annie Leonard, autora de La<br />

historia de las cosas: “¿Estamos<br />

reconociendo y pagando el precio<br />

justo por lo que usamos?”.<br />

Decidimos dedicarle la portada<br />

a un grupo de investigadores<br />

que, tras bambalinas, hicieron<br />

el esfuerzo de entregarle al país<br />

un informe completo sobre el<br />

impacto de la minería en Colombia<br />

y sus implicaciones. Resulta<br />

sorprendente que el segundo<br />

país más biodiverso del planeta<br />

tenga tres de las exploraciones<br />

a cielo abierto más grandes del<br />

continente. Estamos llenando<br />

nuestro país de huecos y no sabemos<br />

a cambio de qué. El Grupo<br />

Garay, como se les conoce en<br />

los pasillos de la Contraloría,<br />

está intentando contestar esta<br />

pregunta. Acompañamos este<br />

informe especial con acciones<br />

que usted puede hacer para ser<br />

parte del cambio.<br />

Marina Silva, exministra<br />

de Medio Ambiente del gobierno<br />

de Lula Da Silva y tal vez la líder<br />

socioambiental más importante<br />

del mundo –estuvo en nuestro<br />

país hace unos días–, lo explicó<br />

en una frase. “Nosotros no dejamos<br />

la Tierra de herencia. La tomamos<br />

prestada y tenemos que<br />

devolverla y devolverla mejor”.<br />

María López<br />

Castaño,<br />

Directora<br />

de Semana<br />

Sostenible<br />

7


enfoque<br />

Malala Yousafzai<br />

Esta pakistaní es la niña<br />

más valiente del mundo.<br />

Defiende el derecho de<br />

las mujeres a educarse<br />

a pesar de las amenazas<br />

de los Talibanes.<br />

Papa Francisco<br />

Hizo un fuerte llamado<br />

a los tomadores<br />

de decisiones en el<br />

mundo para que sean<br />

“los guardianes del<br />

medioambiente”.<br />

Brigitte Baptiste<br />

La directora del<br />

Instituto Humboldt<br />

sigue luchando por el<br />

medioambiente, más<br />

allá de las amenazas de<br />

las que fue víctima.<br />

Vladimir Putin<br />

Arrestó a 30 activistas<br />

de Greenpeace que<br />

protestaron por la<br />

extracción de petróleo<br />

en el océano.<br />

El hombre<br />

Según la ONU es<br />

el responsable del<br />

calentamiento global.<br />

comisión Europea<br />

Le declaró la guerra a la<br />

industria de las bolsas<br />

plásticas, al controlar su<br />

uso y eliminarlas.<br />

Ilustraciones: Gabriel Peña<br />

EL MITO<br />

En 2014, Bogotá<br />

tendrá taxis y buses<br />

eléctricos: una tecnología<br />

con amplios beneficios<br />

ambientales. semana sostenible recuerda,<br />

sin embargo, algunos importantes reparos.<br />

La comida chatarra<br />

No solo afecta la salud<br />

física, sino también la<br />

mental al elevar<br />

el riesgo de depresión<br />

en niños y adultos.<br />

Publicidad<br />

sobre ruedas<br />

Pocas veces se ha<br />

visto una idea tan<br />

obtusa y contaminante.<br />

1. ¿QUé sE ViEnE?<br />

A partir de diciembre,<br />

200 buses híbridos,<br />

que trabajan con<br />

gasolina y electricidad,<br />

transitarán en Bogotá<br />

para reducir las<br />

emisiones de gas<br />

carbono. En 2014,<br />

casi 800 buses y 50<br />

taxis de baterías de<br />

litio circularán por las<br />

calles, y las nuevas<br />

líneas de Transmilenio<br />

serán eléctricas.<br />

2. OjO: Las<br />

BatErías taMBién<br />

cOntaMinan<br />

En vez de gasolina,<br />

un vehículo eléctrico<br />

usa baterías. Estas, sin<br />

embargo, no son tan<br />

limpias. Su producción<br />

requiere metales cuya<br />

extracción conlleva<br />

malas condiciones<br />

laborales, produce<br />

desechos tóxicos y usa<br />

fuentes contaminantes<br />

como el carbón.<br />

3. Un PrOBLEMa<br />

chinO<br />

El gigante asiático es el<br />

más grande productor<br />

de vehículos eléctricos<br />

del mundo, algunos de<br />

los cuales circulan en<br />

Colombia. A la vez, es<br />

el mayor consumidor<br />

de carbón y emisor de<br />

gas carbono, en gran<br />

medida, por la quema<br />

de combustibles fósiles<br />

que requiere fabricar<br />

automóviles.<br />

8


semana sostenible<br />

cIFraS<br />

4,8<br />

grados<br />

habrá subido la temperatura<br />

del planeta en 2100.<br />

ELÉCTRICO<br />

4. la voz dEl ExpErto<br />

Cinco preguntas a<br />

Guillaume Majeau-<br />

Bettez, experto de la<br />

Universidad de Noruega.<br />

¿Es verdad que un<br />

carro eléctrico produce<br />

cero emisiones?<br />

Nada produce cero<br />

emisiones. El único<br />

carro así es el que usted<br />

nunca compró ni usó.<br />

¿Es el transporte<br />

eléctrico un mito<br />

ambiental?<br />

Sí y no. Es equivocado<br />

asumir que no tienen<br />

efectos negativos.<br />

Producir, usar y<br />

desechar carros<br />

eléctricos tiene un<br />

impacto ambiental.<br />

¿Cuál?<br />

Fabricar metales,<br />

plásticos y otra<br />

materia prima produce<br />

emisiones. Lo mismo<br />

pasa con componentes<br />

como las baterías,<br />

los motores y la<br />

carrocería, así como<br />

con su uso y reciclaje.<br />

¿Usted compraría un<br />

carro eléctrico?<br />

Lo cierto es que<br />

contamina más producir<br />

uno eléctrico que uno<br />

convencional. En cuanto<br />

al uso, eso depende. Si<br />

la energía que consume<br />

para andar es limpia,<br />

por ejemplo hídrica, los<br />

beneficios son obvios.<br />

En Colombia, buena<br />

parte de la energía<br />

es limpia. ¿Qué más<br />

recomienda?<br />

Asegurar que la gente<br />

use los vehículos<br />

eléctricos por mucho<br />

tiempo y que se reciclen<br />

adecuadamente.<br />

5. ¿Y El trancón qué?<br />

La frase del director<br />

de Ford Motor<br />

Company, Bill Ford,<br />

ya es legendaria: “Un<br />

embotellamiento sin<br />

emisiones sigue siendo<br />

un embotellamiento”.<br />

Según la ONU, en 2050<br />

habrá 2.100 millones<br />

de carros. Es decir, las<br />

calles seguirán llenas de<br />

vehículos. Los expertos<br />

llaman al fenómeno<br />

‘congestión limpia’.<br />

6. El vErdE<br />

vErdadEro<br />

Cambiar el estilo<br />

de vida marca la<br />

diferencia. Hay que<br />

usar el transporte<br />

colectivo, compartir<br />

el carro con colegas<br />

o amigos y recordar<br />

que las bicicletas y las<br />

caminatas son viejos y<br />

eficientes inventos.<br />

26<br />

Entre<br />

y 82<br />

centímetros<br />

aumentará el nivel del mar como<br />

consecuencia de este calentamiento.<br />

500<br />

millones<br />

de personas podrían verse afectadas por<br />

la escasez de agua que causarán las altas<br />

temperaturas globales.<br />

50<br />

millones de barriles<br />

de petróleo consumen cada año<br />

la producción y la distribución<br />

de agua embotellada.<br />

Fuentes: Radiografía del Tabaquismo en<br />

Colombia, Earth Policy Institute, ONU, Potsdam-<br />

Institut für Klimafolgenforschung.<br />

MInIGloSarIo<br />

• aMEnazaS tóxIcaS:<br />

Son los lugares más contaminados del mundo.<br />

Según un ranking de 2013, se trata del vertedero<br />

de chatarra de Agbogbloshie, en Ghana; la<br />

ciudad de Chernóbil, en Ucrania; la cuenca<br />

del río Citarum y la región de Kalimantan, en<br />

Indonesia; las ciudades de Dzerzhinsk y Norilsk,<br />

en Rusia; el área industrial de Hazaribagh, en<br />

Bangladesh; la ciudad de Kabwe, en Zambia; el<br />

río Matanza-Riachuelo, en Argentina, y el delta<br />

del Níger, en Nigeria.<br />

• acIdIFIcacIón:<br />

Es el descenso del PH de los océanos por<br />

el exceso de dióxido de carbono. Este<br />

fenómeno pone en riesgo la vida marina y<br />

acelera el calentamiento global.<br />

• dESoxIGEnacIón:<br />

La falta de oxígeno en los océanos es también<br />

efecto de la acidificación. Según la ONU, por<br />

cuenta de estos dos fenómenos en 2050 el<br />

hielo ártico desaparecerá durante el verano.<br />

9


enfoque<br />

EL MITO ORGÁNICO<br />

Los alimentos<br />

biológicamente<br />

controlados<br />

están de moda<br />

en Colombia.<br />

La tendencia<br />

muestra un<br />

importante y<br />

positivo cambio<br />

de consciencia,<br />

pero implica<br />

riesgos, pues<br />

orgánico<br />

no significa<br />

necesariamente<br />

sostenible.<br />

1. ImportacIón<br />

Un sello verde<br />

no significa<br />

automáticamente que un<br />

producto es más ‘verde’<br />

que otros. Los bienes<br />

‘orgánicos’, a veces,<br />

deben ser importados,<br />

lo cual implica consumo<br />

de combustibles y, por<br />

ende, emisión de gases.<br />

2. productos<br />

locales<br />

¿Qué es mejor: los<br />

tomates orgánicos<br />

traídos de Italia o los<br />

tomates convencionales<br />

que venden en la<br />

plaza de mercado?<br />

La segunda opción<br />

puede ser la mejor. No<br />

solo porque excluye<br />

la importación, sino<br />

también porque apoya<br />

la producción local.<br />

3. la vaca felIz<br />

Producir carne, leche,<br />

verduras y frutos<br />

orgánicos exige más<br />

espacio, contamina más<br />

y puede así conllevar<br />

a la explotación de<br />

tierras no aptas para la<br />

ganadería. Así mismo,<br />

una res ‘feliz’ expide<br />

más gas metano,<br />

lo cual contribuye<br />

al calentamiento<br />

atmosférico.<br />

4. cada vez<br />

somos más<br />

Mientras más humanos<br />

vivan en la Tierra, habrá<br />

más consumidores<br />

de alimentos.<br />

El crecimiento<br />

demográfico se<br />

convierte, así, en un<br />

factor perjudicial para<br />

la sostenibilidad, que<br />

pone a lo orgánico en<br />

un segundo plano.<br />

5. ¿Qué hacer?<br />

La complejidad del<br />

asunto no permite una<br />

solución final. Pero<br />

hay recomendaciones:<br />

tomar decisiones<br />

informadas, priorizar<br />

los productos locales<br />

y reducir o, en el mejor<br />

de los casos, eliminar<br />

las carnes de la dieta.<br />

10


semana sostenible<br />

Los dispositivos<br />

inteligentes se<br />

han tomado el<br />

mundo. Cada vez<br />

más personas<br />

tienen celulares<br />

o tabletas que<br />

hacen lo que<br />

antaño era un<br />

milagro. Pero<br />

pocos saben<br />

cuántos problemas<br />

se ocultan detrás<br />

de los sofisticados<br />

aparatos.<br />

EL MITO<br />

MÓVIL<br />

1. LA SANGRE<br />

POR DENTRO<br />

Los metales necesarios<br />

para producir un celular<br />

son el eslabón más<br />

sucio de su fabricación.<br />

El estaño, el volframio,<br />

el cobalto, el tantalio,<br />

entre otros, son raros…<br />

y sangrientos. Catalizan<br />

el reclutamiento<br />

infantil, la violencia y la<br />

corrupción en África.<br />

2. MAL TRABAJO<br />

Los ejemplos abundan,<br />

pero el caso más<br />

espectacular es el de<br />

Foxconn, el fabricante<br />

chino de Apple y<br />

Sony, entre otros. Un<br />

escándalo en torno a<br />

la explotación laboral<br />

en sus sedes estalló<br />

cuando se supo, en<br />

2010, que 14 empleados<br />

se habían suicidado.<br />

3. MALA SENSACIÓN<br />

La vida de un celular<br />

es corta. En promedio,<br />

la gente cambia cada<br />

dos años de aparato.<br />

Reparar uno averiado<br />

es difícil y costoso. Y<br />

la publicidad le hace<br />

sentir al consumidor<br />

que es necesario<br />

poseer siempre el<br />

último modelo. Nada<br />

más equivocado.<br />

4. MÁS BASURA<br />

Al terminar 2013 habrá<br />

6.800 celulares en el<br />

mundo, de acuerdo<br />

a la ONU. La cifra es<br />

preocupante, pues las<br />

grandes compañías no<br />

han logrado desarrollar<br />

procesos que permitan<br />

reciclarlos. De las 80.000<br />

toneladas de teléfonos<br />

móviles viejos que hay<br />

cada año, solo un cinco<br />

por ciento se reutiliza.<br />

5. ¿QUÉ HACER?<br />

Lo mejor es apoyar<br />

a las empresas que<br />

producen celulares<br />

siguiendo estándares<br />

ambientales y sociales.<br />

La más famosa es<br />

Fairphone. Quien<br />

no quiere irse por lo<br />

alternativo, puede<br />

ayudar reduciendo<br />

su consumo: es<br />

mejor cambiar el<br />

celular solo cuando<br />

es estrictamente<br />

necesario.<br />

11


opinión<br />

La encrucijada<br />

del carbono<br />

Mientras volaba<br />

recientemente<br />

hacia Colombia,<br />

leí sobre<br />

la historia de<br />

la industria<br />

minera en este país. Las amenazas<br />

atacan al sector de distintas<br />

formas. Algunas son explosivas,<br />

como la que reportó la minera<br />

más grande de carbón de Colombia,<br />

Cerrejón (una empresa conjunta<br />

entre los gigantes mineros<br />

Anglo American, BHP Billiton y<br />

Xstrata). Una de sus carrileras<br />

había sido atacada con bombas,<br />

lo que ocasionó el descarrilamiento<br />

de uno de sus trenes, el<br />

cual iba lleno de carbón.<br />

Este atentado perpetrado<br />

por las FARC fue el último de<br />

una serie de ataques contra los<br />

gasoductos de petróleo y gas.<br />

Pero para el negocio mundial de<br />

los combustibles fósiles, esto no<br />

es más que un pellizco. Sin embargo,<br />

días atrás, en Londres,<br />

oí un discurso del economista<br />

y diplomático mexicano Ángel<br />

Gurría, secretario general de la<br />

Organización para la Cooperación<br />

y el Desarrollo Económico<br />

(OECD, por su sigla en inglés),<br />

en el que mostraba una amenaza<br />

esencial para la industria de<br />

los combustibles fósiles en general<br />

y para las carboneras en<br />

particular. Este fue su mensaje:<br />

“Necesitamos llegar al objetivo<br />

de ‘emisiones cero’ de dióxido<br />

de carbono, propuesto por la<br />

OECD para la segunda mitad de<br />

este siglo, y para eso la industria<br />

del carbón debe contribuir<br />

en gran medida”.<br />

Enfatizó que “sería difícil<br />

imaginar un tema más complejo<br />

para la gestión de riesgo<br />

que el que presenta el cambio<br />

climático” y subrayó el de los<br />

desastres relacionados con<br />

el clima. Una sola tormenta,<br />

Sandy, por ejemplo, costó alrededor<br />

de 75.000 millones<br />

de dólares o 0,5 por ciento del<br />

producto interno bruto de Estados<br />

Unidos en 2011. El costo<br />

estimado del daño causado en<br />

Filipinas por el tifón Haiyán<br />

tardará en ser calculado, pero<br />

la suma será considerable.<br />

Con el mundo dispuesto a<br />

ver en 2015 la siguiente gran<br />

cumbre sobre cambio climático<br />

de Naciones Unidas en París,<br />

los líderes políticos tienen<br />

una oportunidad cada vez más<br />

pequeña para entender por<br />

completo aquello que amenaza<br />

con ser la mayor crisis global<br />

que se ha visto.<br />

Entonces, ¿cómo vamos a<br />

enfrentar este reto? “Cualquier<br />

tipo de política que nos inventemos”,<br />

insiste Gurría, “debe<br />

estar enfocada a la eliminación<br />

absoluta de las emisiones debido<br />

al procesamiento de combustibles<br />

fósiles en la segunda<br />

mitad de este siglo”.<br />

Esto es una parte de la “encrucijada<br />

de carbono” que Gurría<br />

destacó como un obstáculo<br />

clave para el progreso político.<br />

Los gobiernos que hacen parte<br />

de la OECD, por ejemplo, reciben<br />

un estimado de 200.000 millones<br />

de dólares cada año gracias<br />

a las regalías e impuestos generados<br />

por este tipo de mercados.<br />

Por John<br />

Elkington*<br />

*Fundador de<br />

SustainAbility<br />

y director<br />

de Volans.<br />

Lo que esto muestra es que la<br />

tarea de solicitarles a los gobiernos<br />

que manejen bien este tipo<br />

de combustibles es como pedirle<br />

a un adicto que acabe con la industria<br />

de las drogas.<br />

Claramente, este es un reto y<br />

un problema que supera lo político.<br />

La OECD lo ve como un problema<br />

crucial para la economía<br />

en el futuro –y no solo para los<br />

países desarrollados–. Los progresos<br />

en el tema de las políticas<br />

públicas serán reales cuando los<br />

dirigentes puedan convencer a<br />

todos los sectores de la sociedad<br />

de que el camino que se ha trazado<br />

es creíble, sostenible y puede<br />

tener los resultados que todos<br />

queremos y necesitamos. Esta es<br />

una batalla que se dará en toda<br />

Latinoamérica, así países como<br />

Brasil y Colombia decidan tomar<br />

o no el liderazgo.<br />

FOTO: AFP<br />

12


agenda<br />

el capitalismo<br />

para el futuro<br />

John Elkington, conocido como el decano de<br />

la sostenibilidad, estuvo en Colombia para repensar<br />

el modelo económico actual.<br />

en el panel principal<br />

del foro ‘El capitalismo<br />

para el futuro’ –organizado<br />

por Semana<br />

Sostenible, BSD Consulting,<br />

el Instituto de Ciencia Política<br />

(IPC) y la Maestría en Gerencia<br />

Ambiental de la Universidad<br />

de los Andes–, John Elkington<br />

se refirió al cambio climático y<br />

la sobrepoblación, para mostrar<br />

que en la última década<br />

las personas han visto disminuir<br />

los recursos naturales, en<br />

gran parte por el uso que ellas<br />

mismas les dan. Así mismo, hizo<br />

énfasis en que las empresas,<br />

el Gobierno y la sociedad civil<br />

no han podido hacer nada para<br />

contrarrestar este declive.<br />

Frente a esta realidad<br />

Elkington propuso a los asistentes<br />

–entre quienes se encontraban<br />

Manuel Rodríguez,<br />

exministro de medioambiente,<br />

y Adriana Soto, exviceministra<br />

de la misma<br />

cartera– una salida: adoptar<br />

el capitalismo disruptivo, que<br />

busca repensar, cuestionar y<br />

reformular el sistema actual.<br />

Este nuevo modelo –subrayó–<br />

debe ir amarrado a un objetivo<br />

al que todas las compañías<br />

y países deben aspirar: llevar<br />

a cero las emisiones de dióxido<br />

de carbono y otros gases<br />

efecto invernadero.<br />

Para lograr esto hay que<br />

afianzar la noción de desarrollo<br />

y entender que “el<br />

progreso se logra a través<br />

de emprendimientos que<br />

se atrevan a tener objetivos<br />

ambiciosos y que, con el tiempo,<br />

logren cambiar el mercado<br />

y el sistema político dentro del<br />

que operan”, dijo.<br />

Hay que actuar ¡ya!<br />

Según el Banco Mundial,<br />

actualmente<br />

se necesita entre<br />

16.000 y 23.000 millones<br />

de dólares para financiar<br />

estrategias de adaptación<br />

en cambio climático en<br />

América Latina. Pero a este<br />

reto se suma el hecho de que<br />

se necesitan acciones innovadoras<br />

y reales que permitan<br />

mitigar sus efectos<br />

ahora. El Foro Pensamiento,<br />

Desarrollo y Clima: El rol de<br />

los centros de pensamiento,<br />

realizado por Semana Sostenible,<br />

CDKN (Climate Development<br />

Knowledge Network)<br />

y Uniandinos, puso<br />

sobre la mesa la necesidad<br />

de buscar y poner en marcha,<br />

en el menor tiempo posible,<br />

soluciones interdisciplinarias,<br />

reales y eficientes.<br />

Colombia es uno de los<br />

países que menos contamina<br />

en términos de emisiones de<br />

CO 2<br />

, pero al mismo tiempo es<br />

uno de los más vulnerables<br />

frente a esta realidad. El conferencista<br />

principal, Simon<br />

Maxwell, presidente de la<br />

junta directiva de la Alianza<br />

Clima y Desarrollo (CDKN) y<br />

director del centro de pensamiento<br />

más importante de<br />

Inglaterra, Overseas Development<br />

Institute (ODI), habló de<br />

la importancia de que Colombia<br />

deje de ser un observador<br />

y empiece a participar activamente<br />

en el debate mundial,<br />

que no es otra cosa que la supervivencia<br />

de la humanidad.<br />

Carlos Gustavo Cano,<br />

codirector de la Junta Directiva<br />

del Banco de la República, y<br />

Eduardo Posada, director del<br />

Centro Internacional de Física.<br />

El foro contó con la<br />

participación de Brigitte<br />

Baptiste, directora del Instituto<br />

Alexander von Humbolt;<br />

Carlos Gustavo Cano, codirector<br />

de la Junta Directiva<br />

del Banco de la República;<br />

Eduardo Posada, director<br />

del Centro Internacional de<br />

Física, y Andy Jarvis, director<br />

de Política del Centro Internacional<br />

de Agricultura<br />

Tropical, quienes evidenciaron<br />

que esta problemática<br />

debe motivar una política<br />

transversal del país.<br />

14


semana sostenible<br />

Yunus Negocios<br />

Sociales, la<br />

ANSPE y<br />

Revista Semana<br />

se unieron<br />

para invitar a<br />

Muhammad<br />

Yunus al país.<br />

Destruyendo<br />

arquetipos<br />

La Agencia Nacional<br />

para la Superación de<br />

la Pobreza Extrema<br />

(Anspe) es una institución<br />

que rompe barreras<br />

y que cree que la<br />

pobreza puede combatirse desde<br />

la innovación. Por eso Yunus<br />

Negocios Sociales Colombia junto<br />

con SEmANA, invitó al país a muhammad<br />

Yunus, Nobel de Paz y<br />

paradigma de liderazgo social en<br />

el mundo, cuyas ideas han revolucionado<br />

ese esfuerzo en el mundo.<br />

“Antes del premio, cuando<br />

gritaba nadie escuchaba. Ahora<br />

susurro y el mundo entero lo reproduce”,<br />

dijo Yunus al diario El<br />

País de España en 2010. Hoy, esta<br />

afirmación sigue siendo válida.<br />

Conocido por su sistema de microcréditos<br />

en Bangladesh y el resto<br />

del mundo a través del Banco Grameen,<br />

pocos hombres convocan y<br />

conmueven tanto como él.<br />

Con una visión más amplia<br />

de lo que puede y debe ser la sociedad,<br />

Yunus ha sobrepasado<br />

todos los obstáculos y su labor<br />

ha inspirado a quienes trabajan<br />

en el sector. Por esta razón, la<br />

Anspe, cuyo objetivo para 2014<br />

es que 350 mil familias superen<br />

la pobreza extrema, estableció<br />

una alianza con Yunus Negocios<br />

FOTO: AFP<br />

Muhammad<br />

Yunus, premio<br />

Nobel de Paz.<br />

Sociales Colombia para implementar<br />

dos iniciativas en Pueblo<br />

Viejo, magdalena: una en el<br />

sector textil y otra en productos<br />

derivados de la pesca.<br />

La Anspe, creada en 2011,<br />

es además el hogar del Centro de<br />

Innovación Social (CIS), primero<br />

de su tipo en Latinoamérica, que<br />

promueve y financia iniciativas<br />

innovadoras para erradicar la pobreza<br />

extrema mediante un modelo<br />

de negocio social, con el fin<br />

de que las soluciones a problemas<br />

fundamentales puedan llevarse a<br />

distintos lugares del país y, con el<br />

tiempo, superarse.<br />

Beatriz Linares, directora<br />

general de la Anspe, impulsa todas<br />

estas políticas innovadoras.<br />

Siguiendo esa línea estratégica,<br />

la visita de Yunus sirvió para que<br />

él expusiera por qué el modelo<br />

de los negocios sociales se puede<br />

impulsar desde la política pública,<br />

sin olvidar que las comunidades<br />

y el sector privado son claves<br />

para lograr cualquier avance.<br />

Esta política, según Ana maría<br />

Rojas, directora del CIS, “debe<br />

poder traducirse, con ayuda del<br />

sector privado y la academia, en<br />

un país con una historia y una realidad<br />

sostenible en el tiempo, en lo<br />

que significa sacar a alguien de la<br />

pobreza extrema”.<br />

Para Rojas, “los problemas<br />

suben por ascensor y las soluciones<br />

por escaleras, lo que deja<br />

claro que sin innovación social<br />

no alcanzaremos el ritmo al que<br />

crece la pobreza”. Por eso, Yunus<br />

mostró que con conocimientos<br />

académicos, técnicos y pensando<br />

en un mundo donde nada es<br />

inalcanzable, es posible dejar de<br />

hablar de las estrategias y comenzar<br />

a ponerlas en práctica.<br />

15


PORTADA<br />

¡Que siga<br />

En el octavo piso del<br />

edificio de la Contraloría<br />

General<br />

de la República, en<br />

Bogotá, toman muy<br />

en serio la tarea de<br />

controlar y vigilar. Allí funciona<br />

la Contraloría Delegada para<br />

el Medioambiente, donde un<br />

grupo de ocho investigadores<br />

entre geólogos, economistas y<br />

abogados, se dieron a la tarea<br />

el último año y medio de averiguar<br />

y analizar cómo está funcionando<br />

la actividad minero<br />

energética en Colombia y qué<br />

papel están jugando la institucionalidad,<br />

la economía, el<br />

medioambiente, las comunidades,<br />

el Estado y las empresas que<br />

se encargan de la explotación de<br />

estos recursos no renovables.<br />

Los primeros resultados de<br />

estas investigaciones ya se han<br />

materializado. En abril de este<br />

año, el grupo de trabajo, liderado<br />

por Luis Jorge Garay, presentó el<br />

libro Minería en Colombia: Derechos,<br />

Políticas Públicas y Gobernanzas,<br />

que no solo presenta un<br />

panorama de esta actividad en<br />

el país, sino que además llama<br />

la atención sobre cómo se relacionan<br />

e interactúan todos los<br />

elementos y personajes que de<br />

una u otra manera están vinculados<br />

a esta actividad. Además,<br />

propone recomendaciones sobre<br />

los correctivos para que este importante<br />

sector productivo sea<br />

un buen negocio para todos los<br />

grupos de interés, no se convierta<br />

en un lastre del crecimiento<br />

económico y social y solo juegue<br />

en beneficio de unos pocos.<br />

Y es que la minería ha sido,<br />

en las últimas décadas, una actividad<br />

fundamental en el país.<br />

Fernando<br />

Vargas<br />

Valencia,<br />

abogado.<br />

Rodrigo<br />

Negrete<br />

Montes,<br />

abogado.<br />

Luis Jorge<br />

Garay,<br />

economista.<br />

Guillermo<br />

Rudas,<br />

economista.<br />

FOTOS: Juan Carlos Sierra - Semana<br />

FOTO: María de Miguel<br />

16


minería<br />

semana sostenible<br />

el debate!<br />

Representa aproximadamente el<br />

2,5 por ciento en el Producto Interno<br />

Bruto (PIB) nacional, recibe<br />

el 20 por ciento del total de la Inversión<br />

extranjera Directa (IED),<br />

que llega cada año al territorio<br />

nacional y, en el tema del carbón,<br />

Colombia es el décimo productor<br />

de este mineral a nivel mundial.<br />

Por eso Semana Sostenible,<br />

en esta edición, vuelve a poner el<br />

tema sobre la mesa, que aunque<br />

hace meses dejó de ser parte de<br />

la agenda mediática nacional y<br />

de robarse portadas y titulares<br />

casi a diario, hoy está más vigente<br />

que nunca. El país sigue<br />

siendo escenario del boom minero<br />

y las negociaciones de paz<br />

que protagonizan las Farc y el<br />

Gobierno Nacional deben dedicar<br />

un capítulo especial a la<br />

explotación de estos recursos y<br />

a los territorios del país en los<br />

que esta actividad se desarrolla.<br />

Este es el grupo interdisciplinario<br />

de investigadores que realizó el<br />

libro de la Contraloría titulado<br />

Minería en Colombia: Derechos,<br />

Políticas Públicas y Gobernanza.<br />

El valor agregado de este especial<br />

es que, por primera vez, el<br />

lector encontrará en las siguientes<br />

páginas un completo informe periodístico<br />

sobre el tema de la minería<br />

en Colombia visto desde todos los<br />

ángulos: el Estado, las compañías<br />

mineras, los organismos de control,<br />

los trabajadores, las comunidades y<br />

los ambientalistas; en plata blanca,<br />

las versiones de la historia. Cada<br />

voz involucrada en la actividad revela<br />

cómo es el rompecabezas de la<br />

minería en Colombia.<br />

Vea el informe completo en<br />

sostenibilidad.semana.com<br />

Jorge<br />

Enrique<br />

Espitia,<br />

economista.<br />

Luis Álvaro<br />

Pardo,<br />

economista.<br />

Mauricio<br />

Cabrera,<br />

geólogo.<br />

Julio Fierro<br />

Morales,<br />

geólogo.


PORTADA<br />

En guardia<br />

Sandra Morelli, la mujer que vigila y controla el uso<br />

de los dineros del Estado, se ha convertido en una<br />

fuerte defensora del medioambiente.<br />

FOTO: Revista Dinero - Alejandro Acosta<br />

María Sandra<br />

Morelli<br />

Rico es una<br />

cazadora.<br />

Durante su<br />

vida no solo<br />

ha atrapado uno que otro animal.<br />

Desde que se asumió el<br />

cargo de la Contralora General<br />

de la República persigue otras<br />

especies, tal vez más salvajes<br />

y aterradoras que las que están<br />

en las paredes de su casa.<br />

No se considera ambientalista,<br />

pero se ha convertido en una<br />

aliada para quienes sí lo son.<br />

Morelli se ha dedicado durante<br />

sus tres años de administración<br />

a cumplir lo que dice en<br />

un “librito que se escribió en<br />

1991”, la Constitución.<br />

La han tildado de “mentirosa”,<br />

“imprudente” e incluso<br />

de “loca”, pero nunca de te-<br />

18


minería<br />

semana sostenible<br />

merosa. No ha dudado en enfrentar<br />

a grandes empresas,<br />

al Gobierno ni a funcionarios<br />

para recuperar el dinero que<br />

al Estado se le pierde a causa,<br />

principalmente de la corrupción<br />

y los malos manejos.<br />

Esta cruzada la ha llevado<br />

al lado ‘verde’ del patrimonio<br />

público y la ha enfrentado con<br />

problemas que sobrepasan lo<br />

ambiental. Es el caso de la bahía<br />

de Santa Marta, donde la<br />

contaminación obedece a una<br />

Para la Contralora,<br />

la corrupción no<br />

está en el ADN de<br />

los colombianos.<br />

Es un coctel de<br />

circunstancias que<br />

ha vivido el país.<br />

concurrencia de factores y las<br />

autoridades miran cada tema<br />

por separado, dice Morelli.<br />

Hace un año, la Contraloría<br />

comenzó un estudio sobre<br />

las actividades y agentes que<br />

impactaban la bahía: el relleno<br />

sanitario, la marina, la contaminación<br />

y ocupación ilegal de<br />

la cuenca y llanura aluvial del<br />

río Manzanares, el emisario<br />

submarino y el transporte de<br />

carbón a los puertos. Actualmente,<br />

la entidad revisa el material<br />

técnico recolectado en la<br />

fase de investigación.<br />

Otro de los casos en los que<br />

la Contraloría ha dado la pelea<br />

es la construcción de la represa<br />

de El Quimbo (Huila), uno de<br />

los proyectos hidroeléctricos<br />

más grandes de Colombia. Allí<br />

el ente de control intervino, ya<br />

que los censos realizados por la<br />

empresa encargada presentan<br />

irregularidades en el número<br />

de personas afectadas por la<br />

futura represa y se identificó<br />

que el terreno no es apropiado<br />

para el tipo de trabajo que se<br />

pretende llevar a cabo.<br />

Así mismo, encontró que<br />

Prodeco, propiedad de Glencore<br />

Xstrata International y<br />

cuya actividad está basada en<br />

el carbón, no pagaba efectivamente<br />

las regalías, y la suma,<br />

de acuerdo con el proceso que<br />

está en curso, asciende a cerca<br />

de 50 mil millones de pesos. “El<br />

tema es sorprendente, porque lo<br />

que hace la empresa es demandar<br />

al Estado por cobrar lo que<br />

aparentemente debió habérsele<br />

pagado. Y digo aparentemente<br />

porque hay un principio de<br />

prueba, pero esto se definirá<br />

procesalmente”, afirma Morelli.<br />

Para la funcionaria, la corrupción<br />

no está en el ADN de<br />

los colombianos. Es un coctel<br />

de circunstancias que ha vivido<br />

el país y es consciente<br />

de que a nadie le gusta que lo<br />

controlen, por eso no toma las<br />

controversias como algo personal.<br />

En su discurso de aceptación,<br />

luego de recibir la medalla<br />

al ‘Mérito notarial’, dijo:<br />

“No es que este país sea más<br />

corrupto que otros países. No<br />

es que nosotros seamos más<br />

propensos a la corrupción. No,<br />

eso no tiene ningún fundamento<br />

científico. Sencillamente, es<br />

un Estado debilitado”.<br />

Utiliza ese mismo argumento<br />

cuando habla del Ministerio<br />

de Ambiente. Para<br />

Morelli, a esa cartera le faltan<br />

dientes a la hora de enfrentarse<br />

con otros actores y es, de una u<br />

otra manera, vulnerable a la<br />

presión. “Hay una institucionalidad<br />

muy débil, a la que le<br />

hacen ¡bu! Y se asusta”, añade.<br />

Datos<br />

Durante sus<br />

maestrías en<br />

Europa, sus<br />

notas fueron<br />

70/70.<br />

Fue directora<br />

jurídica<br />

de la Federación<br />

Nacional de<br />

Cafeteros<br />

de Colombia<br />

desde el<br />

año 1999.<br />

En 2008 se<br />

le concedió<br />

la Orden al<br />

Mérito<br />

Cafetero.<br />

El amor de<br />

la Contralora<br />

por los<br />

animales se<br />

demuestra<br />

en el cuidado<br />

que<br />

les da a su<br />

gata y a sus<br />

perros.<br />

Pero, detrás de la figura de una<br />

mujer controversial e irreverente,<br />

está la aplicada y disciplinada<br />

estudiante de derecho, hija de un<br />

italiano que huyendo del servicio<br />

militar se quedó en Colombia. La<br />

mujer detrás de los titulares de<br />

prensa, acusaciones y recusaciones<br />

es conocida en el mundo<br />

académico como una ‘pila’, para<br />

quien la ley y el sentido común son<br />

su forma de vivir el día a día.<br />

Egresada de la Universidad<br />

Externado de Colombia y becaria<br />

de tres universidades europeas<br />

donde obtuvo las mejores<br />

calificaciones y sus tesis fueron<br />

laureadas, la Contralora ha sido<br />

conferencista y veedora en diferentes<br />

escenarios internacionales,<br />

además de miembro de<br />

academias de juristas.<br />

En medio del quehacer diario,<br />

a Morelli le toca ponerse una<br />

camiseta más: la de mamá de un<br />

niño de 10 años. Se trata de Gian<br />

Franco, quien lleva el mismo<br />

nombre de su abuelo y representa<br />

una de las frustraciones de la<br />

Contralora. En una entrevista con<br />

un diario colombiano, Morelli expresó<br />

“es difícil ser quién compra<br />

y está pendiente de las medicinas<br />

del niño, pero no quién se las da”.<br />

“El Ministerio de<br />

Ambiente tiene una<br />

institucionalidad<br />

muy débil, a la que<br />

le hacen ¡bu! Y se<br />

asusta”. Sandra<br />

Morelli.<br />

Aplicada, desafiante, lógica<br />

y un poco fuera de lo común, esa<br />

es la mujer que encabeza el grupo<br />

que desde la Contraloría está<br />

vigilando que el patrimonio natural<br />

de la nación no se pierda.<br />

19


PORTADA<br />

“Colombia<br />

no está preparada<br />

para asumir el<br />

‘boom’ minero”<br />

El economista Luis Jorge Garay<br />

ha comandado la investigación<br />

interdisciplinaria que, desde<br />

la Contraloría General de la<br />

República, revisa con lupa lo que<br />

pasa en el sector minero del país.<br />

Sibylla Brodzinsky habló con él.<br />

Luis Jorge Garay Salamanca<br />

Ingeniero Industrial de la Universidad de Los<br />

Andes, con maestría en Economía de esta<br />

misma institución. Doctor en Economía del<br />

Massachusetts Institute of Technology (MIT).<br />

Este investigador innato se ha movido entre<br />

la Academia y el sector público, siempre<br />

indagando y analizando la realidad nacional<br />

desde una óptica económica y social. Fue<br />

profesor de la Universidad Nacional y de Los<br />

Andes, así como asesor y jefe de algunas<br />

dependencias del Departamento.<br />

Sibylla Brodzinsky: ¿Por qué<br />

la Contraloría solicita esta investigación?<br />

Luis Jorge Garay: Los recursos<br />

naturales son propiedad del<br />

Estado, es decir, un patrimonio<br />

público. Velar por su conservación<br />

o exigir que se tomen medidas<br />

cuando ya hay detrimentos es<br />

responsabilidad de la Contraloría<br />

General de la República. Esta es<br />

su función más importante.<br />

S.B.: ¿La minería sostenible<br />

es una contradicción de<br />

términos?<br />

L.J.G.: En toda actividad<br />

minera hay una afectación del<br />

territorio de muy diversa índole:<br />

ambiental, geológica y, en muchos<br />

casos, social y cultural. Las<br />

preguntas son: ¿cuál es el grado<br />

de afectación y su perdurabilidad?<br />

¿Es este daño reversible o<br />

se vuelve definitivo? La minería<br />

de carbón a cielo abierto, por<br />

ejemplo, tiene impactos intergeneracionales<br />

irreversibles. Están<br />

comprobados sus impactos en el<br />

medioambiente y en la salud de<br />

las comunidades vecinas. En ese<br />

caso uno dice ‘esa minería no es<br />

sostenible’. Otros tipos de minería<br />

tienen una afectación en el territorio,<br />

en las comunidades y en<br />

el ambiente, pero se desarrollan<br />

de una forma tal que pueden tener<br />

una sostenibilidad temporal.<br />

S.B.: El libro señala que la<br />

minería a gran escala es ‘un<br />

factor subyacente’ del conflicto<br />

armado en Colombia.<br />

¿A qué se refiere?<br />

L.J.G.: Este ha sido uno de<br />

los elementos fuertes de discusión<br />

que se ha malinterpretado<br />

del estudio. No estamos diciendo<br />

que la minería a gran escala ha<br />

producido o está produciendo los<br />

conflictos de violencia, desplazamiento<br />

y despojo de tierras. Lo<br />

que se quiere destacar es que en<br />

las regiones en las cuales hay altas<br />

inversiones en minería se han<br />

observado episodios severos de<br />

este tipo. Con esto también llamamos<br />

la atención sobre el cuidado<br />

que deben tener las grandes<br />

mineras, de verse involucradas<br />

directa o indirectamente en violaciones<br />

de derechos humanos.<br />

S.B.: El estudio dice que para<br />

que la actividad minera<br />

sea un factor de desarrollo,<br />

FOTOS: Juan Carlos Sierra<br />

20


minería<br />

semana sostenible<br />

la otra<br />

Cara<br />

los proyectos deben cubrir<br />

todos los costos de producción.<br />

¿Cuáles son y cómo se<br />

calculan?<br />

L.J.G.: Ahí hay una serie<br />

de valoraciones muy complejas<br />

que llevan a posiciones extremas.<br />

Unos fundamentalistas<br />

dicen que eso no es evaluable,<br />

y que por eso no debe haber minería<br />

en territorios claves del<br />

país. Otra posición es que no se<br />

evalúe. Nuestra postura tiene<br />

que ver con llegar a una sana<br />

y sabia decisión para poder lograr<br />

compensaciones adecuadas<br />

cuando se producen daños<br />

al patrimonio público.<br />

En el libro evaluamos la<br />

renta minera en términos económicos,<br />

el ingreso tributario y<br />

regalías pagadas por las mineras<br />

sobre la<br />

llamada ‘puerta<br />

giratoria’,<br />

la Cámara<br />

Colombiana<br />

de Minería<br />

(CCM), gremio<br />

que agrupa<br />

a compañías<br />

del sector,<br />

se pronunció<br />

“por políticas<br />

internas, no<br />

nos referimos<br />

en ningún caso<br />

a empresas<br />

en particular,<br />

nuestro objetivo<br />

es promover y<br />

defender a la<br />

industria minera<br />

responsable.<br />

En esa línea<br />

estamos<br />

seguros de que<br />

las empresas<br />

afiliadas a<br />

la CCM se<br />

acogen a la<br />

normatividad”<br />

en favor del Estado. Mostramos<br />

que infortunadamente es insuficiente.<br />

Las proporciones de regalías<br />

y de impuestos no son tan<br />

elevadas como pudieran ser en<br />

comparación con otros países.<br />

S.B.: Colombia tiene problemas<br />

de orden público que no<br />

se ven en otros países de la<br />

región y ofreció, a las mineras,<br />

incentivos extraordinarios<br />

para la inversión. ¿El país<br />

ya pasó la etapa de tener que<br />

‘regalarlo’ todo?<br />

L.J.G.: En términos nominales,<br />

las empresas deberían<br />

pagar el 33 por ciento, pero la<br />

tasa efectiva en el caso de la minería<br />

en Colombia es del orden<br />

del 12 o 13 por ciento, y eso es<br />

por deducciones y tratamientos<br />

preferenciales. En cuanto a regalías,<br />

el esquema que se adoptó<br />

en el país no es el más adecuado.<br />

Cuando hay boom de precios internacionales,<br />

lo apropiado es<br />

que la tasa de regalías aumente<br />

en la medida que sube el precio,<br />

y que el Estado, que es el dueño<br />

de esos recursos naturales, se<br />

pueda beneficiar proporcionalmente;<br />

pero también reducir las<br />

tarifas cuando hay caídas para<br />

que las empresas no resulten<br />

afectadas. Hicimos ese cálculo<br />

y Colombia puede obtener regalías<br />

mayores a las que recibió<br />

sin afectar a las empresas. El<br />

ajuste en los dos últimos años ha<br />

incrementado la presión hacia<br />

una mayor tasa efectiva, lo que<br />

es saludable. Pero todavía hay<br />

mucho espacio.<br />

21


PORTADA<br />

1. Julio Fierro<br />

Morales<br />

Es geólogo de<br />

la Universidad<br />

Nacional de<br />

Colombia con<br />

un máster en<br />

Geotecnia<br />

de la misma<br />

universidad.<br />

Se ha<br />

desempeñado<br />

como director<br />

del Grupo de<br />

Investigación<br />

en Geología<br />

Ambiental<br />

Terrae, profesor<br />

universitario<br />

y consultor<br />

independiente.<br />

2. Mauricio<br />

Cabrera Leal<br />

Geólogo<br />

experto en<br />

instrumentos<br />

de gestión e<br />

información<br />

ambiental.<br />

Trabajó en<br />

la Dirección<br />

de Licencias<br />

Ambientales<br />

del Ministerio<br />

del Medio<br />

Ambiente, fue<br />

subdirector<br />

de Estudios<br />

Ambientales<br />

del Ideam y<br />

coordinador de<br />

los proyectos<br />

de adaptación<br />

al Cambio<br />

Climático INAP,<br />

con el Banco<br />

Mundial y el<br />

Programa<br />

conjunto con<br />

agencias de<br />

Naciones<br />

Unidas.<br />

Las fallas verdes<br />

Julio Fierro y Mauricio Cabrera llaman la atención por<br />

la falta de mano dura del Gobierno y dicen que esa<br />

incompetencia va en detrimento del medioambiente.<br />

Semana Sostenible: ¿Por qué es<br />

tan controvertido el tema de las<br />

licencias en minería?<br />

Julio Fierro: Porque las<br />

empresas interesadas hacen los<br />

estudios de impacto ambiental<br />

y no el Estado, como le compete.<br />

Este debe encargarse del tema y<br />

lo puede hacer, por ejemplo, bajo<br />

un modelo de fiducia.<br />

Semana Sostenible: ¿Están dispuestas<br />

las mineras a cumplir<br />

con lo ambiental y social?<br />

Mauricio Cabrera: Uno llega<br />

a una mina y espera encontrar<br />

grandes acciones. Sin embargo,<br />

la idea ambiental para las empresas<br />

es tener tres árboles revegetalizados,<br />

cinco canecas, una<br />

planta de tratamiento de agua, y<br />

una fundación que regala plata a<br />

los vecinos para que no ‘frieguen’.<br />

Semana Sostenible: ¿Le quedó<br />

grande al Estado y a las<br />

mineras el diálogo con las<br />

comunidades?<br />

J.F.: Hay una apuesta extractivista<br />

que choca con las<br />

comunidades. El plan de desarrollo<br />

del presidente Santos es<br />

contradictorio al incluir una locomotora<br />

minero-energética y<br />

una sostenible, más aún cuando<br />

considera como único problema<br />

la minería ilegal. Están negando<br />

lo que sucede en el Cesar, en<br />

Cerromatoso o en Santurbán.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué va a<br />

pasar con Santurbán?<br />

M.C.: Los resultados técnicos<br />

confirman los límites ambientales,<br />

pero siento que hay<br />

presión sobre el Ministerio y el<br />

Instituto Humboldt para que<br />

se pliegue a los intereses. Si el<br />

22


minería<br />

semana sostenible<br />

Ministerio diera un mensaje diferente,<br />

el país iría en contra del<br />

marco legal ambiental y cometería<br />

un grave error que le costaría<br />

mucho, porque todo sería<br />

demandable. Pero sé del lobby<br />

que están haciendo las empresas<br />

en el Ministerio de Minas, entre<br />

otras cosas, acaban de nombrar<br />

un Viceministro (César Díaz) que<br />

viene del sector, exrepresentante<br />

de la Cámara Colombiana de la<br />

Minería. Él era un lobista de profesión<br />

y ahora es el viceministro.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué tan<br />

real es la puerta giratoria<br />

por la que pasan funcionarios<br />

del sector privado al público<br />

y viceversa?<br />

J.F.: La hay. Por ejemplo, un<br />

abogado salió de la Autoridad Nacional<br />

de Licencias Ambientales<br />

(ANLA) a la Gerencia Ambiental<br />

de Cemex. Esto es peligroso porque<br />

si se arreglan los términos de<br />

referencia, ¿quién revisa? Personas<br />

pendientes de irse a trabajar<br />

a mineras o petroleras.<br />

M.C.: Un montón de funcionarios<br />

públicos que tenían alta<br />

responsabilidad en el manejo de<br />

la política pública ambiental han<br />

pasado a las empresas, incluso<br />

algunos burlando la normativa,<br />

escudándose en las ONG que trabajan<br />

para las empresas. Pero<br />

también está sucediendo lo contrario:<br />

funcionarios de compañías<br />

que llegan a manejar la política<br />

energética. Históricamente<br />

los sectores productivos se han<br />

opuesto a cualquier avance del<br />

tema ambiental. Hay que tener<br />

niveles de independencia.<br />

Semana Sostenible: ¿Cuáles<br />

son los proyectos mineros que<br />

generan mayores impactos<br />

ambientales?<br />

J.F.: La Drummond ha incumplido<br />

los compromisos<br />

pactados en el plan de manejo<br />

ambiental. Dijeron que iban a<br />

caracterizar las rocas y sus composiciones<br />

geoquímicas, pero<br />

nunca lo hicieron. La Contraloría<br />

ya tiene certeza de un desmejoramiento<br />

en el medioambiente<br />

y el deterioro de las aguas subterráneas<br />

en la zona que incluye<br />

a la Drummond, Carbones de la<br />

Jagua, El Hatillo y La Francia.<br />

También hay indicios de daños<br />

en la salud pública. La Corte<br />

Constitucional, en la sentencia<br />

T- 154 de 2013, le dice a la ANLA<br />

que a pesar de que certifiquen<br />

que la Drummond cumple con 80<br />

por ciento del manejo ambiental,<br />

hay un deterioro.<br />

Semana Sostenible: ¿Algún<br />

otro caso?<br />

J.F.: El del Cerrejón, que<br />

entregó los modelos hidrogeológicos<br />

a la autoridad ambiental<br />

después de años de explotación.<br />

La joya de la corona es<br />

pretender correr 26 kilómetros<br />

el único río que tiene esta zona<br />

para sacar 500 millones de<br />

toneladas de carbón. Hicieron<br />

además un proceso que llamaron<br />

de preconsulta, acompañado<br />

por el Ministerio del Interior.<br />

Semana Sostenible: ¿Y sobre<br />

Cerromatoso y Ecoro?<br />

J.F.: Cerromatoso ha dejado<br />

de pagar regalías por hierro al<br />

Estado, además, opera con una<br />

licencia de 1981 que ni siquiera<br />

se llama licencia ambiental y ha<br />

presionado para que el Estado<br />

firme el otro que le daría propiedad<br />

sobre el subsuelo. Por su<br />

parte, en el proceso de exploración<br />

en Santurbán, Ecoro está<br />

haciendo túneles y galerías que<br />

deberían estar prohibidos por<br />

su gran impacto. Las aguas que<br />

salen de estas no sirven para<br />

nada, ya que están contaminadas.<br />

También es importante<br />

mencionar a La Colosa, de AngloGold<br />

Ashanti, que va a dejar<br />

un hueco y una montaña de desechos<br />

gigante en la parte más<br />

alta del río Coello, afluente del<br />

Magdalena. Al sacar el oro también<br />

sale pirita, que hace parte<br />

de los desechos, es altamente<br />

contaminante y se va a drenar a<br />

aguas y suelos. Esto por no hablar<br />

del dique de colas que harían<br />

en un valle en el municipio<br />

de Piedras y que contendría una<br />

sopa de químicos que quedan<br />

luego de extraer el oro.<br />

según Drummond<br />

para hablar de afectación<br />

a la salud pública<br />

se debe contar con un<br />

estudio epidemiológico<br />

el cual no ha sido<br />

realizado en la zona<br />

minera del centro del<br />

Cesar. Solo se han<br />

hecho investigaciones<br />

preliminares de prevalencia<br />

de enfermedades<br />

respiratorias, que<br />

establecen relaciones<br />

causales entre las enfermedades<br />

y la fuente.<br />

Drummond cuenta<br />

con 30 tanqueros para<br />

controlar emisiones de<br />

partículas de carbón,<br />

11 estaciones de monitoreo<br />

de aire y 97 estaciones<br />

de monitoreo<br />

de aguas lluvias, ríos,<br />

agua superficial y estaciones<br />

meteorológicas.<br />

Cerrejón, acerca del<br />

proyecto de trasladar<br />

26 kilómetros el río<br />

Ranchería, señaló que<br />

fue suspendido el<br />

proceso de búsqueda<br />

de licencia ambiental<br />

por los bajos precios<br />

del carbón. Sobre la licencia<br />

social, la minera<br />

agrega que “hubo voces<br />

opositoras y otras<br />

que apoyaron el proyecto,<br />

aunque estas<br />

últimas tuvieron menos<br />

difusión”, se cumplió<br />

el proceso de consulta<br />

previa y se realizaron<br />

más de 600 reuniones<br />

con presencia de<br />

todos los órganos de<br />

control y dirigidas por<br />

el Ministerio<br />

del Interior.<br />

la otra Cara<br />

angloGold<br />

ashanti, al ser<br />

interrogado sobre<br />

los posibles daños<br />

en el río Coello<br />

con la explotación<br />

de oro en La<br />

Colosa, explicó<br />

que se evalúan<br />

tres alternativas.<br />

La primera es<br />

captar agua del río<br />

Magdalena, para<br />

no impactar el<br />

Coello. La segunda<br />

es usar pozos de<br />

agua subterránea,<br />

pero esta opción<br />

solo se podría<br />

evaluar luego de un<br />

estudio detallado,<br />

que estará listo en<br />

2017. La última<br />

alternativa es usar<br />

agua superficial del<br />

Coello, si esto es<br />

viable se requeriría<br />

un caudal de 0,5<br />

metros cúbicos por<br />

segundo. Si se tiene<br />

en cuenta que el<br />

río tiene un caudal<br />

promedio de 38,8<br />

metros cúbicos por<br />

segundo, el impacto<br />

del proyecto minero<br />

sería de 1,2 por<br />

ciento. Esto se<br />

podría compensar<br />

con “programas<br />

de reforestación,<br />

ahorro y uso<br />

eficiente de agua<br />

o con un embalse<br />

que capte el agua<br />

lluvia en época de<br />

invierno”, dice<br />

la empresa.<br />

23


PORTADA<br />

1. 2.<br />

El desfile de<br />

la riqueza<br />

En muchas poblaciones el desarrollo no se ve a pesar de que<br />

duermen sobre grandes reservas de oro, carbón o níquel. El modelo<br />

minero podría explicar la razón de esta paradoja. Luis Álvaro Pardo,<br />

Guillermo Rudas y Jorge Enrique Espitia analizan este tema.<br />

Por Janeth Acevedo Neira<br />

M<br />

ario Tangarife<br />

ha sido minero<br />

toda la<br />

vida. Empezó<br />

a trabajar en<br />

La Fen icia,<br />

un socavón propiedad de su padre,<br />

cuando tenía 11 años, en<br />

1980. Movía carga, molía y pica-<br />

ba la piedra en busca de alguna<br />

pepita de oro. Aunque sus herramientas<br />

eran más pequeñas<br />

–hechas a la medida–, arañaban<br />

bien las paredes de aquella mina<br />

ubicada a 30 metros de la antigua<br />

plaza de Marmato.<br />

El oro hace parte de su ADN<br />

y por eso dice que siempre será<br />

minero. Lo mismo piensan otros<br />

3.000 marmateños que se dedican<br />

a la explotación artesanal.<br />

En ese pueblo al noroccidente<br />

de Caldas no se sabe vivir de<br />

otra forma. El mineral se extrae<br />

desde antes de que llegaran los<br />

soldados del mariscal Jorge Robledo<br />

a fundarlo, en 1536.<br />

24


minería<br />

semana sostenible<br />

3.<br />

1. Guillermo Rudas Lleras<br />

Economista de la Universidad Externado<br />

de Colombia y magíster en Economía<br />

Ambiental y de Recursos Naturales<br />

del University College London. Se<br />

ha desempeñado como investigador<br />

y consultor en medioambiente, con<br />

énfasis en instrumentos económicos y<br />

financieros de la política ambiental.<br />

2. Jorge Enrique Espitia Zamora<br />

Economista de la Universidad<br />

Nacional e ingeniero electricista de<br />

la Escuela Colombiana de Ingeniería.<br />

Tiene una especialización en Teoría y<br />

Política Económica de la Universidad<br />

Nacional, una maestría en Políticas<br />

Públicas de la Universidad Pompeu<br />

Fabra y otra en Hacienda Pública de<br />

la Universidad de Barcelona. Desde<br />

hace 20 años trabaja en la Contraloría<br />

General de la República.<br />

3. Luis Álvaro Pardo Becerra<br />

Economista egresado de la Universidad<br />

Nacional con conocimientos en derecho<br />

minero y conflictos socio-ambientales.<br />

Ha trabajado como asesor externo<br />

de varias compañías mineras en<br />

Colombia, director técnico de minas<br />

en el Ministerio de Minas y Energía e<br />

investigador independiente.<br />

El oro y la plata siguen ahí.<br />

Dicen que el cerro del Burro aún<br />

resguarda grandes tesoros. No en<br />

vano la canadiense Gran Colombia<br />

Gold lleva años en la zona y los<br />

‘guacheros’ (como se conoce a los<br />

mineros artesanales) se resisten<br />

a dejar de internarse en las minas<br />

que consideran suyas por derecho<br />

propio, pues han trabajado en<br />

esas tierras hace décadas, como<br />

lo hicieron sus antepasados.<br />

Marmato es uno de los municipios<br />

que más producen oro y<br />

plata de Colombia: 1,3 toneladas<br />

y 2,5 toneladas al año, respectivamente.<br />

Según estas cifras es un<br />

pueblo de gran riqueza, pero sus<br />

calles y precaria infraestructura<br />

no muestran un lugar próspero.<br />

“El pueblo se dividió en dos debido<br />

a una avalancha. En la parte alta<br />

vive la mayoría de los mineros,<br />

pues los socavones están allá, y<br />

todavía queda la alcaldía. Abajo,<br />

en El Llano, está el comercio y un<br />

centro de salud. Vivimos encima<br />

de oro, pero no tenemos carrete-<br />

ras, ni servicios de salud decentes”,<br />

dice Mario. Y se pregunta:<br />

“¿Dónde están las regalías por el<br />

oro y la plata? ¿Cuál es la riqueza<br />

que trae la minería?”.<br />

A 800 kilómetros al norte<br />

de Marmato, Norman Arias se<br />

pregunta lo mismo y alborota<br />

a sus vecinos de la vereda Boquerón,<br />

municipio de La Jagua<br />

“Al Estado parece no<br />

preocuparle dejar de recibir<br />

dinero”, Guillermo Rudas.<br />

(Cesar). “La minería lo único<br />

que trae son maldiciones. Acá<br />

dormimos sobre carbón, uno de<br />

los mejores del mundo, pero no<br />

sirve de nada. Pasan los días y<br />

los años y somos cada vez más<br />

pobres”, afirma.<br />

Norman vive hace más de 30<br />

años en Boquerón, muy cerca de<br />

las minas Calenturitas, que pertenece<br />

a Prodeco; El Hatillo y La<br />

Francia, de CNR, y el Descanso<br />

Norte y Pribbenow, de Drummond.<br />

En otras palabras, su casa<br />

está justo en el lugar de donde se<br />

extrae 50 por ciento de la producción<br />

carbonífera de Colombia.<br />

Aunque no es minero, vive<br />

de esa industria. Se rebusca la vida<br />

transportando trabajadores y<br />

visitantes a las minas, y también<br />

hace las veces de mensajero. La<br />

camioneta que maneja no es de<br />

él y recorre una ruta pirata. “Así<br />

digan que hay grandes multinacionales<br />

no hay trabajo para todos.<br />

No soy desagradecido, pero<br />

es que cuando veo esos camiones<br />

sacando cantidades de carbón,<br />

pienso que ojalá parte de lo que<br />

pagan en otros países llegara<br />

a estos pueblos”.<br />

Mario Tangarife y Norman<br />

Arias presencian a diario el desfile<br />

de la riqueza. Pasa el oro y<br />

el carbón, pero dicen que poco<br />

queda en Marmato y Boquerón.<br />

En esto coinciden los expertos<br />

Guillermo Rudas Lleras, Jorge<br />

Enrique Espitia Zamora y Álvaro<br />

25


PORTADA<br />

tareas<br />

pendientes<br />

En su investigación, Guillermo<br />

Rudas, Jorge Espitia y Álvaro<br />

Pardo dejan claro que no están<br />

en contra de la minería, sino de<br />

la forma en que se está haciendo<br />

en detrimento del Estado y<br />

de las zonas de operación. Por<br />

ello, proponen hacer un alto en<br />

el camino y definir mejores condiciones.<br />

Aparte de un nuevo<br />

esquema de regalías y suspender<br />

toda clase de exenciones y<br />

deducciones al sector minero,<br />

plantean establecer, para las<br />

empresas y los proyectos que se<br />

encuentran en la fase exploratoria,<br />

condiciones de tributación<br />

diferentes de las que se aplican<br />

en etapa de explotación y en la<br />

renovación de contratos.<br />

Pardo, que analizaron este fenómeno<br />

y realizaron una investigación<br />

publicada por la Contraloría.<br />

Al tratar de responder las<br />

preguntas de Mario y Norman,<br />

los funcionarios señalan que la<br />

riqueza no se ve porque el modelo<br />

minero actual estimula el desorden<br />

institucional; supone que las<br />

regalías terminen malgastadas,<br />

frena el desarrollo de las poblaciones<br />

mineras y las hace perder<br />

sus recursos económicos.<br />

Frente al último punto concuerdan<br />

en que Colombia, junto<br />

con Chile y Perú, tiene los niveles<br />

más bajos de participación del Estado<br />

en las rentas del sector minero.<br />

En los últimos 20 años por<br />

cada dólar aportado al PIB por<br />

la minería y los hidrocarburos,<br />

el Estado solo percibió ingresos<br />

fiscales de menos de 16 centavos.<br />

A pesar de que el país tiene<br />

uno de los impuestos de renta<br />

más altos de América Latina (33<br />

por ciento), en la práctica las empresas<br />

mineras pagaron una tasa<br />

efectiva de 10 por ciento entre<br />

2007 y 2010. Y en 2011 fue de 15<br />

por ciento. Para Guillermo Rudas,<br />

“al Estado parece no preocuparle<br />

dejar de recibir dinero”. El investigador<br />

se refiere al hecho de que<br />

entre 2005 y 2010 las mineras<br />

cancelaron en promedio 878 mil<br />

millones de pesos anuales por<br />

impuesto a la renta, pero en ese<br />

mismo período recibieron deducciones<br />

y exenciones por 1,78 billones<br />

de pesos. Esto significa que<br />

por cada 100 pesos pagados se le<br />

descontaron más de 200.<br />

Para Espitia, esta no es una<br />

falla de las empresas, sino del<br />

mismo Gobierno al tomar decisiones<br />

de corto plazo y sin pensar<br />

en las comunidades donde<br />

se desarrolla la minería. Otro<br />

de los casos por donde el país<br />

está perdiendo recursos tiene<br />

que ver con la deducción de regalías<br />

en terrenos reconocidos<br />

a particulares. Desde 2001, varias<br />

empresas gozan de ese privilegio<br />

y pagan menos regalías<br />

(por debajo de 10 por ciento en<br />

carbón y 4 por ciento en oro y<br />

plata, establecidos en la Ley 141<br />

de 1994). La Corte Constitucional<br />

ha pedido en dos oportunidades,<br />

al Ministerio de Minas,<br />

imponer los mismos porcentajes<br />

y quitarles los descuentos.<br />

La Procuraduría también llamó<br />

la atención en ese sentido, al señalar<br />

que el hecho generador de<br />

la regalía no es la propiedad, sino<br />

la explotación. Según Álvaro<br />

Pardo, por este concepto el país<br />

ha dejado de recibir 12 billones<br />

de pesos y agrega: “Lo que están<br />

pagando las mineras en regalías<br />

se los devolvemos con ganancias<br />

en deducciones del impuesto de<br />

renta. Esto no pasa en ningún<br />

otro sector de la economía”.<br />

¿Y la bonanza?<br />

Entre 2000 y 2012 se marcaron<br />

récords en el precio de la onza<br />

de oro. En ese período las cotizaciones<br />

pasaron de 279 a 1.668<br />

dólares, principalmente, porque<br />

se volvió la inversión más segura<br />

luego de la crisis del sistema<br />

financiero en Estados Unidos en<br />

LA OTRA<br />

CARA<br />

Según el<br />

Ministerio<br />

de Minas,<br />

este gobierno<br />

no ha<br />

considerado<br />

reformar el<br />

régimen tributario<br />

para<br />

la actividad<br />

extractiva,<br />

pero sí ha<br />

dado dos<br />

pasos importantes.<br />

El<br />

primero es<br />

que adoptó<br />

la Guía de<br />

la Organización<br />

para la<br />

Cooperación<br />

y el Desarrollo<br />

Económico<br />

(OCDE),<br />

que fomenta<br />

la transparencia<br />

en las<br />

cadenas de<br />

suministro<br />

de minerales.<br />

El otro<br />

paso es la<br />

intención<br />

para que<br />

Colombia<br />

se adhiera a<br />

la Iniciativa<br />

de la Transparencia<br />

en<br />

la Industria<br />

Extractiva,<br />

cuyo objetivo<br />

es que<br />

las empresas<br />

divulguen<br />

cuánto<br />

pagan y a<br />

quién por<br />

todo concepto,<br />

y que<br />

el gobierno<br />

también dé<br />

cuenta de lo<br />

que recibe<br />

de las compañías.<br />

2008. Los guacheros de Marmato<br />

vivieron y disfrutaron de esta<br />

bonanza, pero como dice Mario<br />

Tangarife, fue ‘flor de un día’,<br />

pues a medida que recibían más<br />

dinero por el oro que sacaban,<br />

así mismo lo gastaban. “El minero<br />

artesanal no piensa en el futuro.<br />

Sabe que tiene la mina cerca<br />

y cuando le hace falta la plata<br />

va y se mete a buscar oro una o<br />

dos noches. Esa es la historia de<br />

siempre”, dice Mario.<br />

Pero si los guacheros le sacaron<br />

jugo a la bonanza de los<br />

últimos años, poco se vio en las<br />

arcas del Estado. Las regalías<br />

no aumentaron simplemente<br />

porque tienen tasas fijas y estas<br />

crecen a medida que aumenta la<br />

producción, no los precios. Por<br />

ello, los investigadores plantean<br />

establecer esquemas de tasas<br />

de regalías incrementales en<br />

proporción al crecimiento de las<br />

cotizaciones, permitiendo que<br />

las rentas extraordinarias en<br />

bonanza se distribuyan equitativamente<br />

entre el Estado y los<br />

operadores particulares, y no en<br />

proporciones tan bajas como las<br />

que rigen hoy en el país.<br />

Estos esquemas ya están<br />

inventados, pues se aplican con<br />

éxito en otras partes del mundo.<br />

En 2005, en Chile se estableció<br />

el royalty, una regalía que paga<br />

la minería en épocas de buenos<br />

precios. Bolivia también tiene<br />

un mecanismo similar. Sin embargo,<br />

Álvaro Pardo señala que<br />

Colombia va en contravía, ya que<br />

aplica cada vez más descuentos<br />

y exenciones, “por ejemplo, en<br />

2008 tumbó el impuesto a las<br />

remesas de utilidades. Mientras<br />

que en Chile, las empresas deben<br />

pagar 34 pesos por cada 100 que<br />

vayan a enviar a sus casas matriz,<br />

acá no se paga nada”.<br />

Mario Tangarife y Norman<br />

Arias ya entienden por qué en<br />

Marmato y Boquerón se ve poco<br />

la riqueza. Ahora se preguntan,<br />

¿hasta cuándo?<br />

26


minería<br />

semana sostenible<br />

¿Restitución o<br />

minería?<br />

La locomotora<br />

minera podría<br />

chocar con los<br />

derechos a la<br />

verdad, la justicia<br />

y la reparación de<br />

las víctimas.<br />

El investigador<br />

Fernando Vargas Valencia es abogado<br />

especialista en derechos humanos<br />

de la Universidad Externado de<br />

Colombia y magíster en Sociología<br />

Aplicada de la Universidad Autónoma<br />

de Barcelona. Combina sus escritos<br />

sobre minería y derechos humanos<br />

con la poesía, su lado más artístico, el<br />

cual acompaña con el sonido de los<br />

timbales que interpreta.<br />

la otra<br />

Cara<br />

Desde 1975, los Emberá<br />

Katío luchan<br />

por recuperar el<br />

área del resguardo<br />

indígena del<br />

río Andágueda<br />

en Dabeiba, una zona minera Antioquia.<br />

Los enfrentamientos por<br />

controlar el territorio han originado<br />

homicidios y desplazamientos.<br />

En 1990 las partes firmaron<br />

un acuerdo y el resguardo fue<br />

declarado zona minera indígena.<br />

A la fecha, esta declaración está<br />

vencida. Hasta octubre de 2012<br />

se otorgaron 13 títulos mineros a<br />

particulares, con una vigencia de<br />

30 años, que permitían explotar<br />

26,2 por ciento del resguardo.<br />

En un hecho sin precedentes,<br />

en abril de este año, esos títulos<br />

fueron suspendidos por el Juzgado<br />

Primero Civil de Restitución<br />

de Tierras de Quibdó. Se frenaron<br />

10 solicitudes de títulos que,<br />

sumados a los ya otorgados, representan<br />

80 por ciento del territorio.<br />

Fernando Vargas Valencia,<br />

uno de los abogados del grupo de<br />

investigación de la Contraloría,<br />

sostiene que “falta coordinación<br />

entre las agencias gubernamentales<br />

y las políticas públicas. No<br />

es posible que en el caso del Alto<br />

Andágueda, mientras el juez de<br />

restitución de tierras da una orden,<br />

la Agencia Nacional Minera<br />

presenta un recurso en contra”.<br />

Colombia pasa por un momento<br />

en el que la restitución<br />

de tierras a las víctimas es un<br />

tema crucial. Pero, como propone<br />

Vargas, ¿cómo va a hacer el<br />

Estado para devolver las tierras<br />

a quienes fueron despojados si<br />

en muchos casos estas han sido<br />

tituladas para minería? Solo 10<br />

departamentos del país tienen<br />

menos del 10 por ciento de su territorio<br />

titulado o solicitado por<br />

minas de oro y carbón.<br />

No se trata de criminalizar<br />

la minería, pero no en vano la<br />

Corte Constitucional se pronunció<br />

en los Autos 004 y 005 de<br />

2009 de seguimiento a la sentencia<br />

T-025 afirmando que la minería<br />

era un factor subyacente<br />

vinculado al conflicto. Para Vargas,<br />

se busca determinar hasta<br />

qué punto la minería se ha visto<br />

beneficiada indirectamente del<br />

actuar macrocriminal.<br />

ricardo<br />

sabogal,<br />

director de<br />

la Unidad de<br />

Restitución<br />

de Tierras,<br />

manifestó<br />

que el tema<br />

minero se<br />

incluyó en<br />

la Ley, con<br />

el principio<br />

de que la<br />

restitución es<br />

un derecho<br />

fundamental<br />

y está por<br />

encima de<br />

cualquier actividad<br />

económica.<br />

Es<br />

decir, se suspenderá<br />

toda<br />

titulación<br />

o solicitud en<br />

lugares que<br />

hayan sido<br />

seleccionados<br />

para ser<br />

restituidos.<br />

27


PORTADA<br />

La normatividad y reglamentación<br />

de la minería en Colombia<br />

son, tal vez, los aspectos<br />

más cuestionados de esta<br />

actividad. El abogado Rodrigo<br />

Negrete habló con Semana<br />

Sostenible acerca del tema.<br />

“La minería es<br />

inconstitucional”<br />

Semana Sostenible: ¿La forma<br />

en que se otorgan los títulos<br />

mineros en Colombia aumenta<br />

los impactos de esta actividad?<br />

Rodrigo Negrete: Debería<br />

existir un mecanismo de selección<br />

objetiva que permita otorgar<br />

títulos al mejor postor, como<br />

sucede en otros sectores a través<br />

de licitaciones públicas; se están<br />

concesionando los recursos de la<br />

Nación. Pero en minería lo que se<br />

tiene es el principio malsano de<br />

‘primero en el tiempo, primero en<br />

el derecho’. No hay una evaluación<br />

de las cualidades de a quién<br />

se le otorgan los títulos.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué está<br />

pasando con la consulta previa<br />

y la participación ciudadana?<br />

R.N.: Son derechos fundamentales.<br />

Con la primera se pretende<br />

garantizar los de las comunidades<br />

étnicas, pero en todos<br />

Rodrigo Negrete Montes<br />

Abogado de la Universidad de<br />

Cartagena, especialista en Derecho<br />

Administrativo de la Universidad Santo<br />

Tomás de Aquino. Estuvo vinculado<br />

al Ministerio de Ambiente durante<br />

15 años, lo que le dio la experticia y<br />

el conocimiento suficiente para que<br />

ahora sea consultor independiente en<br />

este tipo de temas.<br />

los procesos se está excluyendo a<br />

quienes habitan los territorios. La<br />

minería se impone sobre lo que<br />

quieren las comunidades, y esto<br />

supone que la actividad extractiva<br />

en este país sea abiertamente<br />

inconstitucional.<br />

Semana Sostenible: ¿Es ilógico<br />

que la licencias ambientales<br />

solo se otorguen para procesos<br />

de explotación?<br />

R.N.: Cuando se expidió la<br />

Ley 99 de 1993 toda actividad minera<br />

requería licencia ambiental.<br />

En 1995 se deslicenció la exploración;<br />

el Código de Minas de 2001<br />

la terminó de abolir. No se dan<br />

cuenta de que la minería debe<br />

concebirse como un solo proceso<br />

y licenciar todo.<br />

Semana Sostenible: ¿Esto quiere<br />

decir que vamos como los<br />

cangrejos en normatividad?<br />

R.N.: Sí, vamos para atrás. Somos<br />

más facilistas y tenemos menos<br />

rigor a la hora de otorgar las<br />

licencias. No hay normas que regulen<br />

los pasivos que quedan después<br />

de una explotación minera.<br />

Semana Sostenible: Los entes<br />

territoriales se quejan porque<br />

el Gobierno toma decisiones<br />

sobre la explotación de sus recursos,<br />

¿cómo ve esto?<br />

R. N.: Con el Decreto 934 de<br />

2013, el Gobierno desconoce la facultad<br />

de los municipios para ordenar<br />

su suelo. Por ello, esta norma<br />

tiene tres demandas: la del Distrito<br />

Capital, la de la Federación de<br />

Municipios y la de la Contraloría. Y<br />

no es que estemos satanizando la<br />

minería, es que todo tiene un punto<br />

de equilibrio. En este caso, se<br />

rompió a favor de las empresas y la<br />

minería, y en contra de los intereses<br />

locales y ambientales.<br />

LA OTRA<br />

CARA<br />

El Ministerio<br />

de Minas<br />

dice que “el<br />

ordenamiento<br />

jurídico<br />

garantiza<br />

que, previa<br />

a la explotación<br />

en<br />

territorio de<br />

comunidades<br />

indígenas<br />

o negras,<br />

se debe<br />

efectuar una<br />

consulta para<br />

analizar el<br />

impacto de<br />

la operación<br />

futura y analizar<br />

las medidas<br />

con el fin<br />

de proteger<br />

la integridad<br />

de dichas comunidades.<br />

El otorgamiento<br />

del<br />

título minero,<br />

por sí solo,<br />

es apenas<br />

una expectativa.<br />

Puede<br />

suceder,<br />

en algunas<br />

circunstancias,<br />

que la<br />

explotación<br />

no se lleve a<br />

cabo”.<br />

28


Semana Sostenible: ¿A qué le<br />

apunta el Grupo en 2014?<br />

S.F.: Primero a mantenernos.<br />

Al reconocimiento de DJSI<br />

se suma que mejoramos nuestra<br />

calificación en transparencia<br />

empresarial al subir de 86<br />

puntos en la medición de 2012 a<br />

94 en 2013, convirtiéndonos en<br />

referente a nivel nacional como<br />

una de las empresas líderes en<br />

transparencia. Estamos adheridos<br />

a la iniciativa de Empresas<br />

por la Paz, es decir que tenemos<br />

que impulsar los procesos de paz<br />

y tener una participación activa,<br />

y somos una de las 56 empresas<br />

del mundo –única colombiana–<br />

en el Compact LEAD, una<br />

plataforma mundial para promover<br />

acciones colectivas entre<br />

empresas, agencias de Naciones<br />

Unidas y otras organizaciones<br />

para apoyar la consecución de<br />

los grandes objetivos de desarro-<br />

semana sEmana sostEniBlE<br />

sostenible<br />

El secreto del Grupo EB<br />

para estar en la cima<br />

El Grupo Energía de Bogotá (EB), que genera, transmite,<br />

distribuye y comercializa energía y gas natural, se ha<br />

consolidado como uno de los grupos energéticos<br />

más sólidos de América Latina.<br />

Ese importante logro,<br />

dice con seguridad<br />

su presidenta, Sandra<br />

Fonseca, muestra<br />

que su política de<br />

responsabilidad global<br />

permite tener excelentes resultados<br />

económicos, precepto<br />

ratificado por el Índice de Sostenibilidad<br />

Dow Jones (DJSI), en la<br />

categoría Mercados Emergentes,<br />

que reconoció a la compañia por<br />

segunda vez consecutiva.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué es<br />

la política de responsabilidad<br />

global?<br />

Sandra Fonseca: Se basa<br />

en nuestra inclusión al Pacto<br />

Global de Naciones Unidas en<br />

donde asumimos cumplir con<br />

sus 10 principios, enfocados en<br />

temas de derechos humanos,<br />

estándares laborales, protección<br />

al medioambiente y lucha<br />

contra la corrupción. Buscando<br />

siempre que todas las actividades<br />

que desarrollemos generen<br />

valor económico al negocio y al<br />

entorno, trabajando de la mano<br />

con todos los grupos de interés,<br />

monitoreando los procesos y reportando<br />

bajo los referentes internacionales<br />

de sostenibilidad.<br />

Semana Sostenible: ¿Esta política<br />

sí genera mejores rendimientos<br />

para sus accionistas?<br />

S.F.: Sí, la Empresa de Energía<br />

de Bogotá (EEB), casa matriz<br />

del Grupo Energía de Bogotá<br />

es una empresa con alta participación<br />

del sector público, el<br />

cual destina la mayoría de las<br />

utilidades y dividendos para el<br />

desarrollo de Bogotá, por lo que<br />

debemos ser competitivos. Cumpliendo<br />

con los compromisos<br />

del Pacto hemos logrado buenos<br />

rendimientos, lo que se demuestra<br />

con el comportamiento de la<br />

acción en 2013, que ha estado<br />

creciendo constantemente con<br />

cerca del 19 por ciento.<br />

llo globales. Son grandes logros<br />

que debemos conservar.<br />

El segundo reto es lograr que<br />

otras compañías públicas y privadas<br />

tengan estrategias corporativas<br />

basadas en los lineamientos del<br />

Pacto Global. Difícil porque muchas<br />

ven la Responsabilidad Global como<br />

algo externo a sus negocios, que<br />

implica mucho esfuerzo y pocos<br />

resultados. Debemos demostrarles<br />

que si lo integran a<br />

las decisiones de su día a<br />

día tendrán un impacto<br />

positivo. Empezaremos<br />

en Guatemala donde<br />

buscaremos articular<br />

diferentes empresas<br />

para crear una red<br />

local de responsabilidad<br />

social y así hacer<br />

que el trabajo<br />

conjunto genere<br />

un mayor potencial.<br />

En Perú<br />

involucraremos<br />

a nuestras dos<br />

nuevas empresas<br />

–CONTUGAS y CÁ-<br />

LIDDA– en el cumplimiento<br />

de estos<br />

principios.<br />

Sandra Fonseca<br />

Arenas es la<br />

presidenta del<br />

Grupo EB desde<br />

febrero de 2013.<br />

29


INFORMACIÓN INstItuCIONAl<br />

Energía que transforma<br />

La Empresa de Energía de Bogotá ha vivido grandes<br />

transformaciones durante los últimos 117 años. Hoy,<br />

como casa matriz, tiene presencia en Colombia, Perú<br />

y Guatemala, un crecimiento económico sostenido<br />

y una mayor valoración de sus clientes y demás<br />

grupos de interés, condiciones importantes para<br />

hacer la transición de la responsabilidad corporativa<br />

a la responsabilidad global.<br />

Nuestros Compromisos<br />

Crear valor para<br />

los accionistas<br />

Políticas y prácticas operacionales mejoran<br />

nuestra competitividad y elevan las<br />

condiciones económicas y sociales en las<br />

comunidades donde operamos.<br />

Cuidar y respetar<br />

el medioambiente<br />

33.695 especies de importancia<br />

ecológica en mantenimiento,<br />

protección y conservación.<br />

Ser un excelente<br />

lugar de trabajo<br />

Atraer, retener y desarrollar el<br />

talento humano, ofreciendo óptimas<br />

condiciones laborales.<br />

1,3<br />

billoNes<br />

de pesos en<br />

dividendos para<br />

la ciudad de<br />

bogotá en los<br />

últimos 3 años.<br />

20<br />

seNderos<br />

ecológicos<br />

interpretativos<br />

en escuelas<br />

verdales.<br />

17<br />

iNiCiatiVas<br />

que buscan el<br />

logro del equilibrio<br />

entre la vida<br />

laboral, personal<br />

y familiar de los<br />

colaboradores.<br />

infografía: ekon7studio<br />

EEB en el Dow Jones Sustainability Index<br />

Fuimos ratificados en el Índice de sostenibilidad de<br />

dow Jones en la categoría mercados emergentes. este<br />

es un reconocimiento al compromiso y responsabilidad<br />

con nuestros grupos de interés. es una muestra de que<br />

somos una empresa sólida y en crecimiento y de que<br />

nos esforzamos por hacer las cosas bien.<br />

EEB en el Global<br />

Compact Lead<br />

somos la única empresa<br />

en Colombia, y una de<br />

las 54 en el mundo, que<br />

hace parte del Global<br />

Compact lead.<br />

30


semana sostenible<br />

“Solo somos responsables como empresa si nos<br />

esforzamos por hacerlo en el día a día. La responsabilidad<br />

global es un ciclo, nos comprometemos, asumimos<br />

la responsabilidad y actuamos. Es cíclico, siempre<br />

tendremos que asumir compromisos y cumplirlos como<br />

parte de nuestro crecimiento”, Sandra Stella Fonseca -<br />

Presidente del Grupo Energía de Bogotá.<br />

de respoNsabilidad Global<br />

Prestar un servicio<br />

con estándares de<br />

clase mundial<br />

Prestamos servicios de forma<br />

eficiente, confiable, oportuna, con<br />

calidad y seguridad.<br />

Mejorar la calidad de<br />

vida en las comunidades<br />

donde operamos<br />

Fortalecemos las relaciones con las<br />

comunidades de nuestra zona de influencia<br />

y apoyamos la creación de valor social,<br />

económico y ambiental en las mismas.<br />

Contar con<br />

una cadena de<br />

valor sostenible<br />

Queremos ser “El mejor negocio” para<br />

nuestros proveedores en los países<br />

donde tenemos presencia.<br />

disponibilidad de activos<br />

de transmisión del<br />

99,93%.<br />

durante el año 2012, el<br />

programa semilleros para<br />

la formación de pequeños<br />

científicos llegó a<br />

480 niños.<br />

el 100% de contratos incluye<br />

cláusulas ambientales, sociales<br />

(derechos laborales y salud<br />

ocupacional) y acatar<br />

los principios de pacto Global.<br />

una plataforma que reconoce<br />

nuestro liderazgo y traza una ruta<br />

para ser más sostenibles:<br />

• seguimos sus 50 medidas concretas<br />

para alcanzar la sostenibilidad.<br />

• entendemos nuestro papel en el<br />

marco de los desafíos mundiales.<br />

En la ruta hacia el Reporte Integrado<br />

en línea con nuestros valores corporativos, anualmente reportamos nuestra<br />

gestión en asuntos sociales, económicos y ambientales. para esto, usamos<br />

como base estándares internacionales como Gri, iirC y los lineamientos de<br />

pacto Global. más información en nuestro informe de Gestión sostenible 2012:<br />

http://www.eeb.com.co/responsabilidad-global/gestion-sostenible/informes-de-gestion-sostenible<br />

31


PORTADA<br />

Lo que viene<br />

El grupo de investigadores de la Contraloría General de la<br />

República tiene listo el segundo libro sobre el sector minero<br />

del país. Este es un breve resumen sobre uno de sus capítulos.<br />

Por Guillermo Rudas y<br />

Jorge Enrique Espitia<br />

La Locomotora<br />

minera: ¿motor<br />

deL desarroLLo<br />

regionaL?<br />

Durante casi dos décadas las<br />

regalías se canalizaron principalmente<br />

hacia los municipios<br />

y departamentos en donde<br />

tiene lugar explotación minera<br />

y de hidrocarburos. En estas<br />

regiones, el crecimiento de los<br />

ingresos por el boom de precios<br />

debería haberse reflejado en<br />

mejoras sustanciales de la calidad<br />

de vida de la población. Sin<br />

embargo, un reciente estudio<br />

sobre la minería en Colombia,<br />

que será publicado por la Contraloría<br />

General en un segundo<br />

volumen, arroja resultados muy<br />

paradójicos al respecto.<br />

La minería y los hidrocarburos<br />

han crecido rápidamente en<br />

los últimos años a nivel nacional,<br />

pasando de representar 6 por<br />

ciento del PIB en 2000 a 11 por<br />

ciento en 2012; así mismo, la industria<br />

cayó de 14 a 12 por ciento<br />

y el sector agropecuario de 8 a<br />

6 por ciento. Esta tendencia a la<br />

desindustrialización y a la contracción<br />

agropecuaria está muy<br />

marcada en varias regiones. En<br />

el Meta, por ejemplo, el petróleo<br />

pasó de representar 20 a 60 por<br />

ciento del producto regional en<br />

este período; en el Cesar la minería<br />

creció en casi 30 puntos,<br />

Chocó, una<br />

región rica<br />

en oro, vive<br />

sumida en la<br />

pobreza; y<br />

la calidad de<br />

vida de los<br />

habitantes no<br />

mejora.<br />

Foto: Archivo Semana - Luis Ángel Murcia<br />

32


Departamento del Meta<br />

MINERÍA<br />

alcanzando 48 por ciento del PIB<br />

regional; en La Guajira subió<br />

hasta 59 por ciento, y en Chocó<br />

pasó de 4 a alrededor de 40 por<br />

ciento. Sin embargo, este crecimiento<br />

no se ve reflejado en mejores<br />

condiciones de vida: ni en<br />

fortalecimiento de otras actividades<br />

productivas como ganadería<br />

o agricultura, ni en mejores servicios<br />

públicos para la población.<br />

En el Cesar, por ejemplo,<br />

los municipios en donde se explota<br />

carbón reportaron, en el<br />

último censo, que 76 por ciento<br />

de su población tiene necesidades<br />

básicas insatisfechas, en<br />

contraste con un 30 por ciento<br />

que, sin ser capitales, ha<br />

El crecimiento<br />

minero, así esté a<br />

cargo de empresas<br />

formales y de gran<br />

escala, no genera<br />

per se un desarrollo.<br />

80%<br />

69% 71%<br />

70%<br />

59%<br />

60%<br />

Departamento del Meta<br />

47% 47%<br />

50%<br />

80%<br />

40%<br />

69% 71%<br />

70%<br />

31%<br />

ParticiPación 34% de 33% minería<br />

30%<br />

26%<br />

59%<br />

21%<br />

60% e hidrocarburos 16% 18%<br />

20%<br />

17%<br />

en el Producto<br />

Departamento del Meta 47% 47%<br />

50% interno bruto dePartamental<br />

80% 10%<br />

40%<br />

(2000-2012)<br />

31%<br />

70%<br />

34% 33% 69% 71%<br />

30% 2000 2001 2002 2003 26% 2004 2005 2006 2007 2008 2009<br />

59% 2010 2011 2012<br />

21%<br />

60% 16% 18%<br />

20%<br />

17%<br />

47% 47%<br />

50%<br />

10%<br />

Departamento del Meta<br />

40%<br />

80%<br />

31% 34% 33%<br />

30% 2000 2001 2002 2003 26% 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 69% 2012 71%<br />

70% 21%<br />

16% 18%<br />

20%<br />

17% 59%<br />

60%<br />

10%<br />

47% 47%<br />

50%<br />

0% Departamento de la Guajira<br />

40% 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

31% 34% 70%<br />

33%<br />

30%<br />

26%<br />

62% 63%<br />

21% 61% 59%<br />

60% 54%<br />

50% 49% 50%<br />

52% 57% 57% 59%<br />

16% 18%<br />

54%<br />

20%<br />

17%<br />

50% 10% Departamento de la Guajira<br />

70% 40%<br />

2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 62% 2008 2009 2010 63% 2011 2012<br />

61% 59%<br />

60% 54%<br />

50% 49% 50%<br />

52% 57% 57% 59%<br />

30%<br />

54%<br />

50% 20%<br />

Departamento de la Guajira<br />

40% 10%<br />

70%<br />

62% 63%<br />

61%<br />

60% 30%<br />

59%<br />

54%<br />

50% 49% 50%<br />

52% 57% 57% 59%<br />

2000 2001 2002 2003 2004 2005 200654%<br />

2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

50% 20%<br />

40% 10%<br />

Departamento de la Guajira<br />

30%<br />

70%<br />

2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 62% 63%<br />

2009 61% 2010 2011 2012<br />

59%<br />

20%<br />

60% 54%<br />

50% 49% 50%<br />

52% 57% 57% 59%<br />

54%<br />

10%<br />

50%<br />

Departamento del Cesar<br />

40%<br />

0%<br />

80% 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

30%<br />

70%<br />

20%<br />

60%<br />

10%<br />

Departamento del Cesar<br />

49% 48%<br />

50%<br />

80%<br />

36%<br />

40%<br />

37% 41% 40% 40%<br />

0%<br />

34%<br />

2000 2001 2002<br />

70%<br />

30% 25% 26% 2003 31%<br />

28% 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

60% 18%<br />

20%<br />

Departamento del Cesar<br />

49% 48%<br />

50%<br />

36%<br />

40%<br />

37% 41% 40% 40%<br />

80% 10%<br />

34%<br />

31%<br />

70%<br />

30% 25% 26% 28% 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

60% 18%<br />

20%<br />

49% 48%<br />

50%<br />

10%<br />

Departamento del Cesar<br />

36%<br />

40%<br />

37% 41% 40% 40%<br />

34%<br />

31%<br />

80%<br />

30% 2000 2001 25% 2002 26% 2003 28% 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

70% 18%<br />

20%<br />

60%<br />

10%<br />

49%<br />

Departamento del Chocó<br />

48%<br />

50%<br />

80%<br />

36%<br />

40%<br />

37% 41% 40% 40%<br />

2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 34%<br />

31%<br />

2008 2009 2010 2011 2012<br />

70%<br />

30% 25% 26% 28%<br />

18%<br />

60%<br />

20%<br />

Departamento del Chocó<br />

50%<br />

80% 10%<br />

44%<br />

37% 37%<br />

40%<br />

70% 0% 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

30%<br />

23%<br />

60%<br />

20%<br />

Departamento 14% del 13% Chocó<br />

50%<br />

12%<br />

44%<br />

80% 10% 4% 4% 6% 9% 9% 9% 37% 37%<br />

40%<br />

70%<br />

30% 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

23%<br />

60%<br />

20%<br />

14% 13%<br />

50%<br />

12%<br />

10% Fuente: 4% 4% DanE. 6% 9% 9% 9% 44%<br />

Departamento Cuentas Departamentales, del Chocó 2000-2012.<br />

37% 37%<br />

40%<br />

80%<br />

30% 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012<br />

23%<br />

70%<br />

20%<br />

14%<br />

60%<br />

13% 12%<br />

10% 4% 4% 6% 9% 9% 9%<br />

SEMANA SOSTENIBlE<br />

INDUSTRIA<br />

MINERÍA E HIDROCARBUROS<br />

SECTOR AGROPECUARIO<br />

mostrado un mayor desarrollo<br />

independientemente de las<br />

regalías. Más aun, si se mide<br />

la pobreza con el nuevo índice<br />

multidimensional que está empleando<br />

el DNP, más de 90 por<br />

ciento de la población de estos<br />

territorios del Cesar estaría bajo<br />

esta condición –y 74 por ciento<br />

en el caso de La Guajira–, en<br />

contraste con 43 por ciento de<br />

los habitantes en los pueblos de<br />

Colombia en donde predominan<br />

otros sectores productivos.<br />

La población infantil es un<br />

grupo especialmente sensible<br />

a estas condiciones de pobreza<br />

y pobreza extrema. En los municipios<br />

productores de carbón<br />

del Cesar y La Guajira, por cada<br />

1.000 niños que nacen, 27<br />

no alcanzan su primer año de<br />

vida, muy por encima de la meta<br />

máxima de 10 defunciones<br />

establecida por las autoridades<br />

nacionales. Situación que resulta<br />

inexplicable, teniendo en<br />

cuenta que allí se reportan más<br />

afiliaciones al sistema de salud<br />

que en otros lugares del país en<br />

donde estas tasas de mortalidad<br />

son significativamente menores.<br />

Es decir, la mayor cobertura –<br />

aunque con cuestionada calidad–<br />

no se traduce en mejores<br />

servicios de salud para la población.<br />

En las zonas del Chocó en<br />

donde se extrae el oro la situación<br />

es muy similar: el crecimiento<br />

del producto per cápita<br />

no se refleja en las condiciones<br />

de vida de la población.<br />

Este drama, sumado a los<br />

inevitables impactos ambientales<br />

de la minería en prácticamente<br />

todas sus escalas,<br />

permite concluir que el crecimiento<br />

minero, así esté a cargo<br />

de empresas formales y de gran<br />

escala, no genera per se un desarrollo<br />

en las regiones, como si<br />

se contrasta con los municipios<br />

no mineros en el país. Si esto es<br />

evidente en los pueblos que recibieron<br />

grandes recursos de regalías<br />

durante casi dos décadas,<br />

es urgente dilucidar cuáles son<br />

las causas de este desastre, para<br />

evitar que se reproduzca en el<br />

nuevo sistema de distribución,<br />

que se está empezando a aplicar<br />

en todo el país. De lo contrario,<br />

más que generar oportunidades<br />

a quienes reciben regalías por<br />

primera vez, lo que se podría<br />

estar esparciendo es el riesgo de<br />

recibir la misma maldición ya<br />

vivida por la mayoría de zonas<br />

mineras del país.<br />

Vea en exclusiva más de lo que<br />

traerá el nuevo libro de la Contraloría<br />

en sostenibilidad.semana.com<br />

33


minería<br />

semana sostenible<br />

FOTO: cortesía Drummond<br />

3<br />

1. La Colosa, zona entregada a AngloGold Ashanti. 2. Montelíbano, Córdoba, lugar de operación de Cerro Matoso. 3. Mina de carbón de Drummond.<br />

Cerro Matoso S.A.<br />

Está ubicada en Montelíbano,<br />

Córdoba. En las últimas<br />

tres décadas se convirtió en la<br />

mina de níquel a cielo abierto<br />

más grande de América y la<br />

cuarta en el mundo, al producir<br />

910.000 toneladas de níquel y<br />

registrar ingresos brutos por<br />

20,9 billones de pesos.<br />

La empresa que la opera<br />

pertenece, desde 2005, a la minera<br />

más grande del mundo: la<br />

angloaustraliana BHP Billiton.<br />

Durante años, los indígenas<br />

zenú, vecinos de la mina, han<br />

visto cómo el paisaje se cubre de<br />

polvo rojo, que no es más que la<br />

tierra contaminada que se saca<br />

de la mina para extraer el níquel;<br />

las partículas del mineral se quedan<br />

en el aire que respiran.<br />

Tampoco pudieron volver a<br />

tomar agua de las quebradas que<br />

antes eran su única fuente del líquido.<br />

Allí la empresa, según los<br />

indígenas, ha vertido las aguas<br />

con las que lava el mineral y los<br />

residuos de la limpieza. Los pozos<br />

subterráneos también dejaron<br />

de ser una opción: la basura<br />

tóxica se filtra por el subsuelo.<br />

A las quejas de la comunidad<br />

también se suman las de los exempleados<br />

de la mina. Unos y otros<br />

aseguran que están enfermos<br />

por el níquel. Cáncer, dermatitis,<br />

malformaciones y enfermedades<br />

pulmonares son diagnósticos frecuentes<br />

en la región.<br />

Por su parte, la Procuraduría<br />

investiga supuestas irregularidades<br />

en la prórroga, por 15<br />

años, en la concesión que el Gobierno<br />

le otorgó a BHP Billiton.<br />

AngloGold Ashanti, Cerro<br />

Matoso y Drummond<br />

son solo tres ejemplos<br />

de prácticas mineras<br />

cuestionables en el país.<br />

Drummond<br />

Desde los años noventa, la<br />

compañía estadounidense explota<br />

las minas de La Loma y El<br />

Descanso –juntas representan<br />

la mina de carbón a cielo abierto<br />

más grande del mundo–, en<br />

Cesar. Desde allí saca carbón,<br />

a través del tren de Fenoco, y lo<br />

lleva al puerto marítimo de la<br />

compañía, ubicado cerca a la<br />

ciudad de Santa Marta, de donde<br />

se exportan casi 25 millones<br />

de toneladas.<br />

Los primeros reclamos vinieron<br />

de los vecinos de las vías del<br />

tren. El paso de los vagones cargados<br />

del mineral ha dejado por<br />

años millones de partículas de polvillo<br />

de carbón en el ambiente, que<br />

causan afecciones respiratorias<br />

y contaminan el aire y el océano.<br />

Solo en julio de 2013, la Corte<br />

Constitucional le dio la razón<br />

a uno de los pobladores que demandó<br />

a Drummond y le otorgó<br />

tres meses a la compañía para<br />

adquirir la tecnología de punta<br />

que reduzca la contaminación<br />

ambiental. Se obligó a la empresa<br />

a instalar lavadoras, cubiertas<br />

y recuperadores de carbón y<br />

de partículas, así como a mitigar<br />

el ruido y la dispersión.<br />

Las relaciones laborales<br />

tampoco son su fuerte. Durante<br />

su operación ha registrado varias<br />

huelgas de los empleados<br />

–la más reciente en septiembre<br />

pasado– quienes exigen mejores<br />

condiciones de contratación.<br />

35


PORTADA<br />

La fuerza<br />

de un pueblo<br />

Por Andrés Wiesner<br />

A<br />

las ocho de la noche<br />

del martes 5<br />

de noviembre de<br />

2013, las calles<br />

del corregimiento<br />

de Doima,<br />

municipio de Piedras, Tolima, se<br />

ven desoladas. La mayoría de sus<br />

2.034 habitantes se refugia en sus<br />

casas tras largas jornadas de cultivar<br />

arroz y criar ganado lechero.<br />

Esta noche, como casi todas, los<br />

doimunos se entretienen oyendo<br />

la radio y viendo televisión. Están<br />

atentos al canal que transmite la<br />

plenaria del Senado, donde se debate<br />

la legalidad de la licencia con<br />

la que la minera AngloGold Ashanti<br />

pretende, en 2019, desarrollar en<br />

Colombia uno de los tres proyectos<br />

de explotación de oro a cielo abierto<br />

más grandes del mundo.<br />

La poderosa multinacional<br />

ha puesto sus ojos en las reservas<br />

auríferas de La Colosa, en Cajamarca,<br />

Tolima, donde calcula podrá<br />

extraer 26 millones de onzas<br />

de oro, proyecto que, según Felipe<br />

Márquez, vicepresidente de la<br />

compañía, generará para el país<br />

unos 38 mil millones de dólares<br />

(el equivalente al 10 por ciento del<br />

PIB anual colombiano).<br />

Estas cifras, sin embargo, parecen<br />

importarle poco a un grupo<br />

de 7 personas que en Doima, a 100<br />

kilómetros de la Colosa, se encuentran<br />

reunidas en el jardín de una<br />

casa que más parece una improvisada<br />

vivienda comunal.<br />

FOTOS: Paulina Restrepo<br />

El lugar, dotado de una estufa<br />

de carbón, un sofá de tres puestos<br />

forrado de terciopelo rojo, 3 sillas<br />

rimax, una banca larga de madera<br />

y un televisor LG de 21 pulgadas es<br />

el segundo hogar de varios pobladores<br />

desde hace 114 días.<br />

Frente a aquel televisor celebraron<br />

en la mañana, cuando el<br />

senador Jorge Enrique Robledo<br />

rechazó la entrada de la minera,<br />

objetando daños ambientales a la<br />

región. A las 4.35 p.m., retumbaron<br />

los alaridos en el pueblo, como<br />

cuando anota un gol la Selección<br />

Colombia, por causa de la intervención<br />

de Luis Carlos Delgado, gobernador<br />

del Tolima, quien señaló que<br />

un proyecto ubicado cerca de Cajamarca<br />

y Piedras, municipios de<br />

riqueza agrícola, afectaría el ambiente<br />

y la economía de esta zona.<br />

Luego la emoción se desbordó<br />

con la intervención del senador<br />

Guillermo Santos: “Con este proyecto<br />

de AngloGold Ashanti, millones<br />

de colombianos quedarán<br />

en la pobreza extrema. Pobladores<br />

como los de Doima han tenido la<br />

fortaleza para intentar detenerlo”.<br />

La euforia no era para menos.<br />

Desde diciembre de 2012, cuando<br />

los doimunos se enteraron que el<br />

Valle de la Quebrada de Camao,<br />

que pertenece a su pueblo, estaba<br />

en la mira de AngloGold, –debido a<br />

su geografía llana y reservas acuíferas–,<br />

para construir un dique<br />

36


minería<br />

semana sostenible<br />

En un ejemplo de resistencia civil,<br />

los habitantes del corregimiento de<br />

Doima, Tolima, tienen frenado uno de<br />

los proyectos de explotación minera<br />

más ambiciosos del mundo.<br />

Algunos pobladores de Doima<br />

llevan 114 días custodiando la<br />

entrada del pueblo para impedir<br />

que la minera ingrese.<br />

donde separar el oro diseminado<br />

de la roca, algo les sonó mal. Investigaron<br />

y conocieron los riesgos<br />

que podían correr sus cultivos de<br />

arroz, fuente primaria de sus ingresos.<br />

Se asesoraron de expertos<br />

y escucharon asustados cómo se<br />

contaminarían sus aguas por causa<br />

de sustancias como el cianuro y<br />

el óxido de cinc, y la acidificación<br />

por oxidación de sulfuros necesarios<br />

para este proceso. Y a pesar<br />

de que nadie les dijo lo peligroso<br />

que era construir aquel dique justo<br />

encima de la falla de Ibagué, donde<br />

hay un riesgo sísmico inminente, y<br />

de que la banda ancha de Internet<br />

de su pueblo no les alcanzó para<br />

ver los numerosos ejemplos de diques<br />

desbordados y de las terribles<br />

tragedias que por ello se han ocasionado<br />

en otros lugares del mundo,<br />

su única conclusión fue que la<br />

entrada de la minera provocaría<br />

daños irreversibles en el medioambiente<br />

de su pueblo.<br />

Desde comienzos de este año,<br />

los doimunos cortaron toda la comunicación<br />

que intentaba realizar<br />

AngloGold con los habitantes para<br />

socializar el proyecto. Al ver que<br />

llegaban carros y maquinarias de<br />

la multinacional, fueron más allá y<br />

decidieron bloquear con escudos<br />

humanos el puente que cruza el<br />

río Opia, única entrada al pueblo.<br />

Este lugar se convirtió, prácticamente,<br />

en su nuevo hogar.<br />

Días después, una<br />

demanda interpuesta y fallada<br />

a favor de AngloGold<br />

permitió que el Esmad<br />

desalojara del puente a los<br />

dolientes del plantón, provocando<br />

incluso algunos heridos.<br />

“Vinieron a sacarnos por la fuerza<br />

y nosotros resistimos lo que más<br />

pudimos”, dice Amparo Guevara,<br />

una señora de cincuenta y pocos<br />

años, mientras levanta su pantalón<br />

y muestra las heridas. “Nosotros<br />

vivimos felices acá, tenemos todo<br />

lo que necesitamos y no nos interesa<br />

la ayuda de alguien que va a<br />

acabar con nuestra tranquilidad.<br />

La tranquilidad no vale el oro del<br />

mundo”. Ni Amparo ni muchos de<br />

sus paisanos estaban dispuestos a<br />

detener su proceso de resistencia.<br />

Por eso Melba Barrero, doimuna<br />

de 45 años, convenció a su padre<br />

para que les prestara el jardín de<br />

su casa, situado a unos metros<br />

del puente, para reubicarse y continuar<br />

el plantón. Una vez ahí, la<br />

fuerza pública no podía desalojarlos<br />

por estar en propiedad privada.<br />

Y entonces, con la consigna del<br />

pueblo unido, cada cual aportó lo<br />

“Vinieron a sacarnos por la<br />

fuerza y nosotros resistimos lo<br />

que más pudimos”:<br />

Amparo Guevara.<br />

que pudo: don Pepe donó el sofá<br />

de tres puestos de terciopelo rojo.<br />

Doña Gloria, las sillas rimax. Don<br />

Hernando, la ‘tele’ donde esta noche<br />

ven el debate y doña Marina,<br />

una estufa de dos puestos para calentar<br />

el café y cocinar la comida<br />

donada por los grandes arroceros<br />

de la región, quienes tampoco<br />

ven con buenos ojos la llegada<br />

de la minera, pues presienten la<br />

amenaza que ésta significa para<br />

37


PORTADA<br />

Los habitantes<br />

de Piedras<br />

y Doima, en<br />

un hecho sin<br />

precedentes,<br />

realizaron<br />

una consulta<br />

popular para<br />

prohibir la<br />

minería en<br />

su zona.<br />

su economía. Una vez armada la<br />

retaguardia, se pactaron turnos de<br />

6 horas para proteger la entrada al<br />

pueblo. Conscientes de que la vigilancia<br />

estaba conformada en su<br />

mayoría por personas de la tercera<br />

edad, instalaron una alarma que<br />

sonara en todos los rincones de<br />

Doima para que cuando “llegaran<br />

los de AngloGold”, la gente viniera<br />

a acompañar el bloqueo.<br />

La mayoría de los doimunos<br />

se fueron uniendo a la revolución.<br />

Tenían claro que esto no sería suficiente<br />

e hicieron un llamado a<br />

todo el municipio de Piedras para<br />

impulsar, en junio pasado, en un<br />

99,2 por ciento de los<br />

electores de Piedras le<br />

dijo NO a la minería.<br />

hecho sin precedentes en el país,<br />

una consulta popular que prohibiera<br />

el ingreso de AngloGold al<br />

pueblo. El 28 de julio de 2013, los<br />

habitantes de Piedras, un municipio<br />

donde hay 5.105 personas<br />

habilitadas para votar, acudieron<br />

a las urnas masivamente y en<br />

presencia de delegados de la Registraduría,<br />

un 99,2 por ciento de<br />

los electores dijo NO a la entrada<br />

de la minera AngloGold Ashanti.<br />

AngloGold vs. Doima<br />

AngloGold Ashanti ha desarrollado<br />

minas en Australia, Brasil,<br />

Chile, Estados Unidos, Sudáfrica<br />

y otros países del mundo. Fue en<br />

2012 el tercer productor mundial<br />

de oro con más de 4 millones de<br />

onzas. Está transada en las bolsas<br />

de valores de Nueva York y Londres.<br />

Son expertos en cabildeo<br />

político con los gobiernos. Desarrolla<br />

el proyecto de Gramalote en<br />

Antioquia donde ha formalizado a<br />

145 mineros, tiene una proyección<br />

de inversión de 1.400 millones de<br />

dólares y convenios con la Gobernación<br />

de este departamento.<br />

En la Colosa, proyecto<br />

descubierto en 2006,<br />

ha invertido más de 370<br />

mil millones de pesos, beneficia<br />

a 10 mil personas<br />

con proyectos sociales y<br />

ha generado más de 1.000 empleos<br />

directos. Además, compró<br />

la ambulancia del pueblo, puso el<br />

gas, el hospital, cualquier reinado<br />

de belleza cuenta con sus vallas y<br />

pendones y hasta hace poco, patrocinaba<br />

al equipo profesional<br />

de fútbol Deportes Tolima.<br />

Por otro lado, es un secreto a<br />

voces que la minería en Colombia<br />

es muy rentable para cualquier<br />

empresa extranjera y nuestro<br />

Cifras<br />

26<br />

Millones de<br />

onzas de oro<br />

se sacarían de<br />

La Colosa.<br />

Litros de agua<br />

se necesitan<br />

para extraer<br />

un gramo de<br />

oro, según Pax<br />

Christi.<br />

4<br />

Millones de<br />

onzas fue la<br />

producción<br />

mundial de<br />

AngloGold<br />

Ashanti<br />

en 2012.<br />

país se está convirtiendo casi en<br />

un paraíso fiscal para este sector.<br />

Mientras Chile, Venezuela, Perú<br />

y Bolivia han aumentado los impuestos<br />

a las mineras extranjeras,<br />

en Colombia, bajo el gobierno<br />

del expresidente Uribe, se abolió<br />

el impuesto por remesas de utilidades.<br />

Además, tan solo en su<br />

etapa de estudios en territorio colombiano,<br />

sin ni siquiera extraer<br />

minerales ni generar ingresos, las<br />

mineras ya están ganando dinero<br />

por los créditos fiscales que les<br />

paga el Estado cuando estas demuestran<br />

sus gastos en la declaración<br />

de renta. Y eso sin contar<br />

que en Colombia no hay un órgano<br />

de control adecuado que supervise<br />

lo que realmente se extrae y estas<br />

multinacionales siempre cuentan<br />

con el beneplácito estatal. Por<br />

eso, acostumbrados a solucionar<br />

pronto sus obstáculos, los directivos<br />

y abogados de AngloGold<br />

en Johannesburgo, Nueva York<br />

y Bogotá, no entienden cómo un<br />

pequeño pueblo escondido en el<br />

mapa les está haciendo perder<br />

millones de dólares a medida que<br />

pasan los minutos y frenar uno<br />

de sus más ambiciosos proyectos.<br />

“No entendemos el rechazo, dicen<br />

que vamos a afectar el agua pero<br />

la verdad es que en total solo se<br />

38


minería<br />

usará cerca de 0,5 metros cúbicos<br />

por segundo de agua, y hay previstas<br />

medidas de compensación,<br />

como construir un embalse para<br />

retornar a la cuenca como mínimo<br />

el agua usada, además de maximizar<br />

la recirculación”, afirma<br />

Felipe Márquez. “En Ibagué procesarían<br />

50 millones de toneladas<br />

por año de mineral en la planta de<br />

proceso metalúrgico. El material<br />

que no contiene oro pasa por un<br />

proceso de destrucción de cianuro,<br />

antes de ser transportado a la zona<br />

de almacenamiento en Doima”.<br />

Pero estas cuentas no son<br />

tan claras para expertos internacionales<br />

como los de la ONG<br />

holandesa Pax Christi, quienes<br />

en su estudio sobre La Colosa<br />

indican que en promedio se necesitan<br />

1.000 litros de agua para<br />

procesar una tonelada de roca en<br />

la extracción de un solo gramo<br />

de oro. Es decir, el doble de lo<br />

que reconoce AngloGold Ashanti.<br />

Cuando se analizan las cifras de<br />

la multinacional, 50 millones de<br />

toneladas al año, es decir, cerca<br />

de 137.000 toneladas de roca al<br />

día, se hace referencia al uso de<br />

aproximadamente 68.500 metros<br />

cúbicos que equivalen a 78 millones<br />

500 mil litros de agua en 24<br />

horas, más de 2’854.166 litros de<br />

agua por hora.<br />

Nadie duda de que las cantidades<br />

de agua que necesita este<br />

proyecto son gigantescas y generarán<br />

disputas por la disponibilidad<br />

“Los tolimenses<br />

tenemos que definir<br />

si queremos agua<br />

para consumo<br />

doméstico y<br />

agricultura o agua<br />

para minería”:<br />

Renzo García.<br />

hídrica. “Los tolimenses tenemos<br />

que definir si queremos agua para<br />

consumo doméstico y agricultura o<br />

agua para minería”, afirma Renzo<br />

García, miembro del Comité Ambiental<br />

en Defensa de la Vida del<br />

Tolima. “Las cifras demuestran<br />

que de llegarse a implementar este<br />

proyecto, necesariamente se presentarán<br />

conflictos por el acceso<br />

al agua o competencias entre la<br />

producción agrícola y la minera”.<br />

El último intento de Anglo-<br />

Gold Ashanti para persuadir<br />

a los doimunos fue una alianza<br />

con la caja de compensación<br />

Comfenalco para abrir escuelas de<br />

fútbol y talleres de peluquería donde<br />

los niños y jóvenes aprovechen<br />

su tiempo libre. “Esto es muy bueno<br />

porque tenemos cosas productivas<br />

en qué entretenernos”, dijo a<br />

Semana Sostenible una habitante<br />

de Doima que prefirió mantener<br />

su nombre en reserva. “Además<br />

con AngloGold pasamos de recibir<br />

jornales de 14 mil pesos a salarios<br />

de 800 mil pesos mensuales, con<br />

todas las prestaciones sociales”.<br />

El rechazo<br />

hacia la<br />

minería es<br />

evidente en<br />

cada calle<br />

de esta<br />

población.<br />

Ella es una de las 50 personas que<br />

han sido empleadas por Anglo-<br />

Gold en Doima. Para el concejal<br />

de Piedras Carlos Iván Olaya, el<br />

discurso de desarrollo que trae<br />

la minera es discutible. “Somos<br />

un pueblo pacífico, tenemos una<br />

tasa de desempleo por debajo del<br />

3 por ciento y nunca hemos tenido<br />

problemas sociales ni sufrido por<br />

pobreza. Somos felices con la vida<br />

que tenemos y la minera solo está<br />

creando polarización en la región”.<br />

Como era de esperarse, el<br />

camino no fue fácil para la nueva<br />

escuela de fútbol patrocinada por<br />

AngloGold, que lleva como slogan<br />

“Un gol a la pobreza”. El pasado<br />

2 de noviembre, cuando llegaron<br />

los buses a recoger a los niños,<br />

el ruido de la alarma se propagó<br />

por todo el pueblo. En un acto casi<br />

rutinario, calzaron sus zapatos,<br />

tomaron sus sombreros y caminaron<br />

hacia el puente donde poco a<br />

poco se agruparon. A pesar de la<br />

insistencia de los conductores, que<br />

reclamaban cumplir su trabajo, los<br />

buses con logos de Comfenalco dieron<br />

media vuelta y se alejaron por<br />

la polvorienta carretera que une a<br />

Doima con la autopista a Ibagué.<br />

39


PORTADA<br />

El precio<br />

FOTO: cortesía Oro Verde - Kike Arnal<br />

jusTO<br />

Hace una década se inició en el Chocó el programa Oro Verde, para<br />

extraer el metal con procedimientos ecológicos. Hoy está en riesgo<br />

y sus promotores no escatiman esfuerzos para mantenerlo vivo.<br />

Oro Verde enfrentó<br />

su primera<br />

prueba de<br />

fuego al nacer<br />

en 2003. Tenía<br />

que demostrar<br />

que su modelo funcionaba y que<br />

los metales se podían extraer con<br />

técnicas ancestrales, sin perjudicar<br />

el medioambiente, conservando<br />

la biodiversidad y generando<br />

bienestar a las comunidades de<br />

Condoto y Tadó en el Chocó.<br />

El esquema pasó el examen<br />

y se convirtió en una actividad<br />

económica viable para los<br />

mineros artesanales afrodescendientes.<br />

Sin embargo, hoy<br />

está en peligro. “El precio del<br />

oro entre 2009 y 2012 subió y<br />

aumentó la presión de las operaciones<br />

ilegales”, afirma Felipe<br />

Arango, CEO de la Fundación<br />

Biodiversa, encargada de la comercialización<br />

de Oro Verde.<br />

Entre 2003 y 2012 obtuvo<br />

1,29 millones de dólares en<br />

ventas y 200 mil dólares en<br />

ganancias para reinvertir en<br />

las comunidades. Así mismo,<br />

se beneficiaron 377 mineros de<br />

manera directa, 1.885 personas<br />

indirectamente y se protegieron<br />

4.500 hectáreas de bosque.<br />

Este oro es certificado bajo<br />

los estándares de Fair Trade (Comercio<br />

Justo) y Fair Mined (Minería<br />

Justa), y se vende en Reino<br />

Unido, Suiza, Estados Unidos, Japón,<br />

Italia y Alemania. Entre sus<br />

clientes, están las joyerías Cred,<br />

Toby Pomeroy, Giolleria Belloni,<br />

Hasuna Co. Ltd. y Chopard.<br />

“Los joyeros compran el<br />

metal, le agregan diseño y<br />

40


minería<br />

involucrar a otros mineros del<br />

mundo, replicando el esquema<br />

colombiano. “Estamos en Bolivia,<br />

Ecuador, Perú, Mongolia,<br />

Malí, Burkina Faso y Senegal,<br />

ampliando este movimiento”,<br />

señala Lina Villa, directora<br />

ejecutiva de ARM.<br />

Oro Verde hace parte de un<br />

esquema de certificación global,<br />

que reconoce los aportes al<br />

desarrollo local de la minería<br />

responsable a través de altos<br />

estándares ambientales, sociales,<br />

laborales y de gobernanza.<br />

venden la joya con una historia.<br />

La certificación le dice al<br />

consumidor ‘esto es producido<br />

con un metal que cumple con<br />

principios medioambientales<br />

y contribuye al mejoramiento<br />

de la calidad de vida de las comunidades<br />

que lo extraen”, explica<br />

Ingrid Lozada, directora<br />

ejecutiva de la Fundación Amigos<br />

del Chocó (Amichocó), una<br />

de las gestoras de Oro Verde.<br />

A partir de esta iniciativa,<br />

la Alianza por la Minería<br />

Responsable (ARM) empezó a<br />

Al borde del abismo<br />

Pese a los logros, la ausencia<br />

de institucionalidad, políticas<br />

públicas y control de la minería<br />

ilegal amenazan el programa.<br />

De los dos municipios donde<br />

empezó, solo está vigente en Tadó.<br />

“A Condoto, que tenía 70 por<br />

ciento de las unidades familiares<br />

productivas, se le suspendió<br />

la certificación porque una gran<br />

parte de los productores decidieron<br />

alquilar el terreno a retroexcavadoras”,<br />

relata Lozada.<br />

Según la directora de Amichocó,<br />

uno de los factores que<br />

hace mella en el programa es<br />

que los mineros ilegales de retroexcavadora<br />

presionan a la<br />

gente para que alquilen la tierra<br />

con una promesa de riqueza.<br />

En la mayoría de los casos,<br />

el poseedor del terreno recibe<br />

dinero, pero se queda sin la tierra<br />

donde cultivar y después sin<br />

la plata, por lo que casi todos<br />

terminan desplazados en los<br />

cascos urbanos.<br />

En 2009, el programa tenía<br />

114 unidades familiares<br />

productivas y hoy solo siete<br />

permanecen activas, con un<br />

total de 43 mineros directos.<br />

Para Lozada, “quienes siguen<br />

es porque tienen la convicción<br />

de que, aun cuando el rendimiento<br />

es bajo, contribuye a<br />

proteger la biodiversidad<br />

y además permite<br />

la utilización<br />

del territorio en<br />

beneficio propio”.<br />

Los mineros artesanales<br />

reciben una<br />

prima de 15 por ciento<br />

sobre el precio internacional<br />

del oro.<br />

Este dinero entra a<br />

un fondo colectivo<br />

De las manos<br />

de alguno de<br />

los mineros<br />

artesanales<br />

del Chocó<br />

salió el oro de<br />

las joyas que<br />

usó Livia Firth,<br />

esposa del<br />

reconocido<br />

actor inglés<br />

Colin Firth,<br />

durante la<br />

ceremonia de<br />

los premios<br />

Óscar en 2011.<br />

FOTO: AFP<br />

y en asamblea los productores<br />

deciden cómo distribuirlo. Una<br />

parte se asigna de manera proporcional<br />

a cada minero, según<br />

lo que haya extraído, y el resto es<br />

para acciones colectivas.<br />

En 2011, se logró la máxima<br />

producción: ocho kilos del metal.<br />

Actualmente se habla de tres<br />

kilogramos al año; en este contexto,<br />

la prima resulta irrisoria.<br />

Una salida<br />

Oro Verde diseñó una estrategia<br />

para sacar adelante la iniciativa.<br />

Se trata de una subasta que<br />

consiste en ofrecer un kilo de<br />

oro a través de Internet. Cuenta<br />

con el apoyo de Summer Rayne<br />

Oakes, la ecomodelo más importante<br />

de Estados Unidos. Está<br />

prevista para el primer semestre<br />

de 2014 y será la primera<br />

Fair Trade y Fair Mined. En otro<br />

esfuerzo por salvar el programa,<br />

a finales de octubre se lanzó<br />

una campaña para recaudar<br />

fondos a través de Crowdrise<br />

(www.crowdrise.com/Change-<br />

MineLife/fundraiser/oroverde).<br />

Los recursos se destinarán a<br />

apoyar la expansión del programa,<br />

para que más mineros<br />

se sumen y la protección de los<br />

bosques continúe.<br />

41


OPINIÓN<br />

Por Brigitte<br />

Baptiste,<br />

directora del<br />

Instituto de<br />

Investigación<br />

de Recursos<br />

Biológicos<br />

Alexander von<br />

Humboldt.<br />

FOTO: Claudia Camejo<br />

Los dilemas ambientales<br />

de la minería<br />

E<br />

n un país señalado<br />

por la inequidad o<br />

asimetría en la distribución<br />

de derechos<br />

de acceso a los<br />

recursos naturales,<br />

donde una gran parte de la<br />

población depende de la pesca<br />

artesanal o la agricultura para<br />

subsistir, no se requiere de<br />

un complejo estudio de impacto<br />

ambiental para saber que si se<br />

autoriza la explotación del cauce<br />

de un río con el fin de extraer<br />

materiales de construcción,<br />

habrá conflicto: una decisión<br />

de este tipo implica un cambio<br />

radical en la ecuación ‘quién<br />

gana–quién pierde’. A esta clase<br />

de circunstancias, tanto la<br />

economía como la ecología, la<br />

llaman un trade-off, una decisión<br />

que implica un sacrificio en<br />

una función productiva o servicio<br />

ecosistémico (la provisión de<br />

gravas y arenas o la provisión<br />

pesquera a largo plazo).<br />

Todas las decisiones de<br />

minería están saturadas de<br />

implicaciones en este sentido,<br />

donde la apropiación privada<br />

de un bien público, así sea por<br />

una o dos generaciones, no es<br />

aceptable a menos que haya un<br />

esquema de compensaciones<br />

satisfactorio. El seguimiento de<br />

todos y cada uno de los parámetros<br />

de la norma ambiental<br />

es, por tanto, indispensable, y<br />

el mejoramiento de la norma,<br />

con criterio de manejo adaptativo,<br />

también lo es. Pero donde sí<br />

se necesita una visión de largo<br />

plazo, es en la valoración de las<br />

pérdidas o efectos que la transformación<br />

ecológica traerá a las<br />

generaciones futuras, un asunto<br />

delicado por cuanto la práctica<br />

42


semana sostenible<br />

económica, a diferencia de la<br />

ecológica, favorece el corto plazo.<br />

Incluso se da el lujo de decir<br />

que a la larga “todos estaremos<br />

muertos”, una figura divertida,<br />

pero cínica e inexacta para referirse<br />

a nuestra descendencia:<br />

la incertidumbre del futuro es<br />

real, pero si operamos como si el<br />

mundo se acabara en el horizonte<br />

de descuento de las inversiones,<br />

somos una especie suicida.<br />

Regiones de larga tradición<br />

minera, como el occidente australiano,<br />

el País de Gales o Polonia,<br />

deben enfrentar ahora las<br />

consecuencias de decisiones que<br />

tomaron sus abuelos respecto<br />

a la explotación de carbón. En<br />

muchos casos, con buenas prácticas<br />

de manejo ambiental y con<br />

Debemos tomar distancia del<br />

oportunismo disfrazado de<br />

ambientalismo que chatajea el<br />

emprendimiento y corrompe<br />

las instituciones: también hay<br />

malos ‘políticos verdes’.<br />

cierta distribución de la riqueza<br />

que se generó. Pero muchos se<br />

preguntan hoy si pagaron demasiado<br />

por el precio de su bienestar;<br />

solastalgia le llaman a esa<br />

angustia de ver el paisaje natal<br />

destruido y que, a pesar de contar<br />

con un buen nivel de vida, les<br />

hace pensar constantemente en<br />

el sentido de sus decisiones.<br />

La minería responsable es<br />

costosa, lo saben bien los escasos<br />

empresarios y las comunidades<br />

que la practican. Requiere<br />

inversiones importantes para<br />

minimizar los riesgos e impactos<br />

ambientales y, en muchos<br />

casos al filo de la rentabilidad,<br />

cuando implica constituir fondos<br />

de compensación de largo pla-<br />

zo, por ejemplo para financiar<br />

el cierre de minas y la restauración<br />

o rehabilitación del territorio.<br />

Pero no es imposible y hay<br />

ejemplos, incluso, de empresas<br />

que asumen pasivos ambientales<br />

históricos al disponer de nuevas<br />

tecnologías y enfoques. La actividad<br />

petrolera está aprendiendo<br />

la lección (no todas las empresas,<br />

claro está) y sabe que hacer bien<br />

las cuentas ecológicas es indispensable<br />

para tener legitimidad,<br />

y que, aún en el distante futuro,<br />

serán auditadas. En el país de la<br />

biodiversidad, donde todo el desarrollo<br />

depende, de una u otra<br />

forma, de procesos ecológicos<br />

vivos, esto es aun más crítico y<br />

está menos interiorizado que en<br />

el resto del mundo. Es evidente<br />

que a las formas de economía<br />

especulativa no les interesa tanta<br />

carga, prefieren patrocinar<br />

libros de fotos de lujo con el argumento<br />

de que buscan sensibilizar<br />

a los personajes de alto<br />

nivel que toman las decisiones.<br />

Para los gremios responsables<br />

y las agencias estatales, es un<br />

deber ético y práctico hacer las<br />

cosas bien, como se atisba en<br />

iniciativas de extracción y producción<br />

del coque, en ciertas<br />

explotaciones auríferas y en algunas<br />

regiones. Pero aun las cementeras<br />

destruyen impávidas<br />

las cuevas y cavernas maravillosas<br />

del subsuelo colombiano,<br />

que son patrimoniales en casi<br />

todo el planeta; mientras las<br />

dragas de las empresas de construcción<br />

incrementan los riesgos<br />

de deterioro de los cauces y<br />

de turbidez del agua que luego<br />

hará inútiles las plantas de tratamiento<br />

o la modernización de<br />

la pesca. Y muchos prefieren<br />

no mirar: la locomotora de la<br />

vivienda necesita cemento, y<br />

la de la infraestructura piedra<br />

y cascajo. Y todo para ya. Eso<br />

sí, debemos tomar distancia<br />

del oportunismo disfrazado<br />

de ambientalismo que, simplemente,<br />

chantajea el emprendimiento<br />

y corrompe las<br />

instituciones: también hay malos<br />

‘políticos verdes’.<br />

Aun cuando la decisión de<br />

la sociedad se inclina hacia la<br />

extracción de un recurso que es<br />

poco renovable e indispensable<br />

para construir el país, persistirá<br />

la necesidad de saber qué<br />

estamos arriesgando o sacrificando<br />

de nuestra biodiversidad<br />

y, en particular, a cambio de<br />

qué. Es necesario garantizar<br />

el flujo de rentas ambientales a<br />

perpetuidad: de ellas depende<br />

el futuro, mucho más que del<br />

acero o el mármol. Rentas que,<br />

por otra parte, no son susceptibles<br />

de cálculo exacto, pues<br />

valorar los servicios ecosistémicos<br />

implica de por sí un<br />

delicado reduccionismo de la<br />

complejidad del funcionamiento<br />

ambiental, limitando las aspiraciones<br />

de poner precio a la<br />

naturaleza para equilibrar la<br />

balanza con estudios de costo/<br />

beneficio. Y esto se suma a las<br />

evidencias que muchos autores<br />

han señalado respecto al<br />

esquema de compensaciones<br />

financieras de la minería, que<br />

son las obvias gabelas: mínimos<br />

impuestos, regalías escuetas,<br />

subsidios escondidos<br />

y bajos estándares de calidad.<br />

Si a eso le sumamos los costos<br />

sociales de la contaminación<br />

de mercurio o cianuro, el riesgo<br />

a la salud en las minas de<br />

carbón y la transformación de<br />

las comunidades biológicas de<br />

las cuales depende –como se<br />

dijo arriba–, la productividad<br />

pesquera y agropecuaria del<br />

país; se entiende la desconfianza,<br />

exacerbada por los conflictos<br />

de gobernabilidad, esa que,<br />

por otra parte, muchos parecen<br />

no querer.<br />

43


INFORME ESPECIAL<br />

5<br />

FIN DE VIDA<br />

EMISIONES<br />

ATMOSFÉRICAS<br />

USO<br />

4<br />

AGUAS RESIDUALES<br />

3<br />

EMBALAJE<br />

CICL<br />

de vida<br />

2<br />

FABRICACIÓN Y<br />

MANUFACTURA<br />

1<br />

EXTRACCIÓN Y PROCESADO<br />

DE MATERIAS PRIMAS<br />

ENERGÍA<br />

46


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

Antes de Adquirir cuAlquier<br />

producto, pregúntese por<br />

su ciclo de vidA; es decir:<br />

1<br />

2<br />

¿Cuánta energía consume o cuánta<br />

fue utilizada para fabricarlo?<br />

¿Cuál es su origen? ¿en qué<br />

lugar del mundo fue hecho? ¿Las<br />

personas que intervinieron en el<br />

proceso tienen unas condiciones<br />

laborales adecuadas?<br />

3<br />

¿Cómo será desechado? una vez<br />

ya no sirva, ¿qué se puede hacer<br />

con él y qué impacto generará?<br />

de un<br />

producto<br />

up<br />

4<br />

¿de qué está hecho?<br />

¿Qué materias primas se<br />

usaron y de dónde salieron?<br />

rEcurSoS<br />

Cada decisión que el hombre toma<br />

influye en la economía, el medioambiente<br />

y la sociedad. Según un estudio<br />

hecho por la WWF, en 2012 la<br />

humanidad consume, en promedio,<br />

50 por ciento más de lo que se puede<br />

renovar, lo que significa que cada vez hay menos<br />

recursos. Las desproporciones son tan fuertes, que<br />

25 por ciento de la población demanda mucho más<br />

de lo que implican sus necesidades básicas.<br />

Esta tendencia a consumir y gastar es, además,<br />

inconsciente, pues en la mayoría de los casos<br />

se desconoce la forma como los productos fueron<br />

fabricados. Este informe especial llama la atención,<br />

justamente, sobre cada uno de esos procesos por los<br />

que sus zapatos, ropa y alimentos, entre otros enseres,<br />

pasan antes de llegar sus manos. Y por supuesto,<br />

lo que sucede después, cuando ya son obsoletos.<br />

El primer paso para ser un consumidor responsable<br />

es tener conciencia de que las preferencias de compra<br />

forman parte de un sistema más amplio en donde<br />

se reflejan las consecuencias de esas decisiones.<br />

Infografía:<br />

Camilo Higuera Mozombite<br />

enny rodríguez Peña<br />

¡ir más Allá!<br />

Si al analizar el ciclo de vida de un producto<br />

descubre alguna irregularidad, cuéntenosla a<br />

través de nuestra cuenta en Twitter @sosSemana<br />

47


informe espeCiAL<br />

Consumo<br />

responsable:<br />

¿Mito, realidad imposible<br />

o necesidad inmediata?<br />

La reciente crisis económica nos<br />

invita a contemplar profundos<br />

cambios en nuestra percepción<br />

de lo que es necesario. ¿Podremos<br />

entender y apropiarnos de<br />

las lecciones de la recesión?<br />

Por César Augusto Ruíz Agudelo*<br />

Desde la crisis financiera<br />

de 2008,<br />

nos hemos dado<br />

cuenta de las ineficiencias<br />

e inconvenientes<br />

del<br />

modelo de desarrollo económico.<br />

El ‘capitalismo salvaje’ y ‘perverso’,<br />

como muchos lo llaman, está<br />

acabando con lo natural. En esta<br />

nueva discusión apenas estamos<br />

comprendiendo un aspecto fundamental<br />

de este engranaje vicioso<br />

del consumismo en el que<br />

estamos montados. No se trata<br />

de volver a la era de las cavernas.<br />

La cuestión central está en analizar<br />

y cambiar nuestros hábitos.<br />

Una variedad de indicadores<br />

globales muestran que la Tierra<br />

ha sobrepasado su capacidad<br />

para suministrar los recursos<br />

necesarios para el desarrollo<br />

social y económico. Todos los<br />

análisis destacan que el crecimiento<br />

del consumo afecta el<br />

funcionamiento sano del planeta.<br />

Mientras el PIB per cápita ha<br />

aumentado considerablemente<br />

desde la década de los cincuenta,<br />

los niveles medios de bienestar<br />

se han mantenido intactos. Por<br />

su parte, los hábitos de consumo<br />

han crecido de 5 a 100 veces. Un<br />

planeta finito es incapaz de soportar<br />

tal tendencia.<br />

Los debates políticos frente a<br />

la crisis ambiental han cambiado<br />

en al menos tres aspectos significativos.<br />

En primer lugar, hay una<br />

cierta repolitización de lo ambiental<br />

–mayores normas y controles–,<br />

48


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

ILUSTRACIÓN:<br />

Enny Rodríguez Peña<br />

Camilo Higuera Mozombite<br />

gracias a algunos cuestionamientos<br />

sobre el cambio climático y las<br />

afirmaciones de que la inminente<br />

escasez de petróleo y gas crea la<br />

urgencia de reconstruir las bases<br />

del consumo energético. En<br />

segundo lugar, la crisis ecológica<br />

es múltiple, constituida por la<br />

interrelación de situaciones como<br />

la degradación de los medios<br />

de vida naturales, la pobreza, el<br />

hambre, el aumento de precios de<br />

la energía y su creciente escasez,<br />

El indicador de la<br />

huella ecológica<br />

muestra que se<br />

necesitan al menos<br />

1,5 planetas Tierra<br />

para mantener el<br />

estilo de vida y de<br />

consumo actuales.<br />

y fenómenos aparentemente no<br />

ecológicos como las crisis bancaria<br />

y financiera. Por último, más<br />

estudios muestran que cada vez<br />

hay un conocimiento mayor de las<br />

múltiples dimensiones locales, regionales<br />

y globales del problema<br />

ambiental. Estas consideraciones<br />

apenas han llevado a formular políticas<br />

públicas de largo alcance.<br />

49


informe espeCiAL<br />

A reevaluar<br />

Una encuesta del Pew Research<br />

Center, publicada en 2009, demostró<br />

que los estadounidenses<br />

–campeones en el consumo<br />

global de bienes y servicios– han<br />

cambiado su percepción en los<br />

últimos tres años de lo que es<br />

indispensable para su bienestar.<br />

Mientras que los vehículos y los<br />

teléfonos móviles son vistos como<br />

necesidades; las secadoras, acondicionadores<br />

de aire, entre otros,<br />

son catalogados como lujos no indispensables.<br />

Más estadounidenses<br />

están empezando<br />

a cambiar la forma en<br />

que consumen, haciendo<br />

sus propias<br />

reparaciones, recortando<br />

las compras<br />

de artículos de lujo e,<br />

incluso, sembrando<br />

sus alimentos.<br />

Otro aspecto interesante,<br />

de acuerdo<br />

con la encuesta de Rasmussen<br />

publicada ese mismo año, es<br />

que un tercio de los adultos menores<br />

de 30 años prefiere el socialismo<br />

sobre el capitalismo,<br />

mientras que otro 30 por ciento<br />

está indeciso sobre el éxito del<br />

actual modelo económico.<br />

La pregunta es: ¿será que<br />

esta situación tendrá un impacto<br />

duradero en la forma en que<br />

vivimos o vamos a volver a las<br />

costumbres consumistas tan<br />

pronto el mercado se recupere?<br />

Si les corresponde a políticos<br />

y empresarios, la respuesta<br />

puede ser “sí, esto fue solo un<br />

hipo en las economías globales”.<br />

Paralelo a estas posibles respuestas<br />

están las nuevas estrategias<br />

que se ponen a prueba para<br />

comercializar con eficacia ambiental<br />

y responsabilidad social.<br />

Especulando entre tantos<br />

estudios, la única ventaja de esta<br />

crisis es la oportunidad que tiene<br />

la humanidad de reflexionar sobre<br />

las consecuencias de esta forma<br />

de vida. Si aprovechamos este<br />

momento para cambiar el camino<br />

hacia un futuro más sostenible,<br />

podremos ser capaces de prosperar<br />

durante mucho tiempo más.<br />

Los 500 millones de<br />

magnates del planeta son<br />

responsables del 50 por<br />

ciento de las emisiones<br />

de dióxido de carbono<br />

(CO 2<br />

) del mundo.<br />

Insostenibilidad<br />

y patrones<br />

La evidencia científica concluye<br />

que gran parte de la humanidad<br />

en los últimos 100 años ha perturbado<br />

drásticamente los sistemas<br />

ecológicos de los que depende. El<br />

indicador de la huella ecológica<br />

muestra que se necesitan al menos<br />

1,5 planetas Tierra para mantener<br />

el consumo actual.<br />

Sin embargo, como lo refleja<br />

el indicador de huella ecológica<br />

del Global Footprint Network, el<br />

aumento de la población por sí<br />

solo no explica la crisis actual.<br />

La Tierra puede sostener un número<br />

variable de personas sin<br />

50


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

agotar la capacidad del planeta,<br />

dependiendo del consumo.<br />

Por ejemplo, si todos viviéramos<br />

como en los países de bajos<br />

ingresos (con un promedio<br />

de alrededor de 1.300 dólares<br />

per cápita), el mundo podría<br />

mantener más o menos a 13.600<br />

millones de personas. Si todos<br />

viviéramos como una nación<br />

de altos ingresos (ganando un<br />

promedio de 33.000 dólares por<br />

persona), la Tierra podía mantener<br />

a 2.100 millones de personas.<br />

Además, si viviéramos como<br />

estadounidenses, este número se<br />

reduciría a 1.400 millones.<br />

Estas cifras no nos deben sorprender,<br />

ya que son los magnates,<br />

quienes tienen un gran impacto<br />

en el medioambiente. Según un<br />

estudio realizado en 2007 por el<br />

ecólogo de la Universidad de Princeton<br />

Stephen Pacala, los 500 millones<br />

de seres humanos ricos del<br />

planeta (7 por ciento de la población<br />

mundial) son responsables<br />

de 50 por ciento de las emisiones<br />

de dióxido de carbono (CO 2<br />

) del<br />

mundo, mientras que los 3.000<br />

millones más pobres emiten solo<br />

6 por ciento. Además, esto no se<br />

aplica solo a aquellos que viven en<br />

los países ricos. El uno por ciento<br />

de los hindúes (10 millones de personas),<br />

que ganan más de 7.450<br />

dólares anuales, emiten 5 toneladas<br />

de CO 2<br />

al año, de acuerdo con<br />

Greenpeace India Society.<br />

Un problema de todos<br />

El consumismo, tal como el economista<br />

británico Paul Ekins lo<br />

explica, es un paradigma cultural<br />

para encontrar significado, satisfacción<br />

y aceptación. El consumo<br />

es parte natural del ser humano<br />

y sus niveles son impulsados por<br />

las normas culturales. El paradigma<br />

se ha extendido y mientras<br />

esta orientación se manifiesta de<br />

manera distinta en diferentes regiones<br />

del planeta, en realidad el<br />

resultado apunta a la disminución<br />

del bienestar social y ambiental.<br />

En la actualidad, el consumismo<br />

ha capturado muchos de<br />

los elementos de los sistemas culturales.<br />

Logos, marcas y spoke<br />

characters se han convertido en<br />

símbolos dominantes de las aspiraciones.<br />

Normas culturales<br />

como la dieta reflejan las influencias<br />

consumistas en el bienestar<br />

y la felicidad. Sin embargo, los alimentos<br />

altamente procesados (que<br />

causan la necesidad de las dietas)<br />

son regularmente promocionados<br />

como los más sabrosos, construyendo<br />

las contradicciones propias<br />

de la cultura del consumo: “¡¡¡Come<br />

más!!!, pero sé más delgado y<br />

atractivo a los ojos del mundo”.<br />

Algo común de la cultura<br />

de consumo es la promoción del<br />

mismo por parte de las empresas<br />

dominantes del mercado<br />

global. La responsabilidad de<br />

los diferentes tipos de negocio,<br />

de los medios de comunicación<br />

y de la educación, juega un papel<br />

importante en el proceso de<br />

la reorientación de la cultura<br />

actual. La herramienta más<br />

relevante para mantener las<br />

demandas consumistas es la<br />

publicidad, una industria de<br />

643.000 millones de dólares.<br />

Los hábitos de<br />

consumo han<br />

crecido de 5 a<br />

100<br />

veces.<br />

Si cada<br />

ser humano<br />

viviera con<br />

1.300<br />

dólares, el<br />

mundo podría<br />

mantener a<br />

13.600<br />

millones de<br />

personas.<br />

Lo anterior es solo una parte<br />

de los frentes a considerar<br />

en el porqué de las culturas de<br />

consumo. El crédito se facilitó<br />

y aumentó su uso 11 veces entre<br />

1945 y 1960. Los productos<br />

se diseñan para tener una vida<br />

útil corta o para migrar con las<br />

tendencias de moda.<br />

Con lo anterior no es de<br />

extrañar que las normas estén<br />

orientadas hacia el consumismo,<br />

los participantes de estas<br />

se han convertido en agentes<br />

activos de la perpetuación y difusión<br />

de esos patrones.<br />

El consumismo no es bienestar<br />

humano. En nuestras manos<br />

está buena parte de la solución.<br />

La invitación es a que reflexionemos<br />

sobre las normas, valores y<br />

tradiciones que hoy nos impulsan<br />

a consumir. Mientras las<br />

tendencias del consumo responsable,<br />

ambientalmente sano y<br />

socialmente incluyente avanzan<br />

en nuestra cultura colectiva, y<br />

mientas más seres humanos dirigen<br />

su energía hacia las prácticas<br />

que pueden ayudar a restaurar<br />

el bienestar planetario; tenemos<br />

que reflexionar sobre lo que realmente<br />

necesitamos y lo que nos<br />

hace felices. Así, la gran mayoría<br />

de la humanidad podría vivir una<br />

vida de alta calidad, a diferencia<br />

de hoy, donde 1.000 millones de<br />

personas están desnutridas.<br />

* Gerente Socioeconómico de<br />

Conservación Internacional<br />

Colombia. Profesor de Cátedra<br />

– Facultad de Administración,<br />

Universidad de Los Andes.<br />

51


informe espeCiAL<br />

Más barato<br />

por docena<br />

La tragedia del Rana Plaza en Bangladesh visibilizó una<br />

problemática que no es reciente ni mucho menos aislada.<br />

Dentro de la cadena de elaboración de miles de productos de<br />

consumo masivo se oculta el flagelo de la explotación laboral.<br />

FOTOS: AFP<br />

Los inmigrantes ilegales son víctimas de algunas de las peores condiciones de trabajo forzado en el mundo. Muchos de ellos,<br />

incluso, abandonaron sus países de orígen como víctimas de la trata de personas.<br />

El 25 de marzo de 1911,<br />

un incendio ocurrido<br />

en el Washington<br />

Place de la ciudad de<br />

Nueva York acabó con<br />

la vida de 146 empleados<br />

de la industria textil. Eran en<br />

su gran mayoría mujeres jóvenes<br />

que trabajaban para la Triangle<br />

Waist Company en los pisos altos<br />

del edificio. El hacinamiento y que<br />

las vías de escape hubiesen sido<br />

cerradas por los administradores<br />

para facilitar la vigilancia, elevaron<br />

el número de víctimas.<br />

La magnitud del desastre<br />

encendió las alarmas en la comunidad,<br />

que comenzó a luchar<br />

contra las inseguras condiciones<br />

de los trabajadores, especialmente<br />

en la industria textil. Sin<br />

embargo, lo del Rana Plaza, en<br />

abril de este año, demostró que<br />

las lecciones no se aprendieron,<br />

las reivindicaciones nunca llegaron<br />

y que, 102 años después, las<br />

prácticas injustas con los trabajadores<br />

permanecen intactas.<br />

Al colapsar el edificio de<br />

ocho pisos ubicado en la ciudad<br />

de Savar, Bangladesh, murieron<br />

1.129 personas. Morium Begum,<br />

de 24 años, relató lo sucedido:<br />

“La estructura mostraba grietas<br />

y estábamos preocupados de<br />

que pudiera derrumbarse, pero<br />

fuimos obligados a entrar a la<br />

fábrica ante las amenazas de<br />

que retendrían nuestros sueldos<br />

–por el mes entero– si no<br />

trabajábamos ese día. Tan solo<br />

una hora después, colapsó con<br />

un fuerte ruido”.<br />

Miles de trabajadores alrededor<br />

del mundo tienen empleos en<br />

52


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

este tipo de fábricas. El término<br />

que se ha acuñado en inglés para<br />

referirse a estas es sweatshops<br />

o sweat factories –algo así como<br />

tiendas o fábricas del sudor– que,<br />

sin duda, resume la explotación<br />

los pésimos salarios, turnos que<br />

exceden las 14 horas o que implican<br />

que el trabajador viva en<br />

la fábrica, maltrato físico y psicológico,<br />

ritmos acelerados de producción<br />

y metas inalcanzables,<br />

retención de sueldos, oficios con<br />

efectos nocivos para la salud y<br />

ausencia de beneficios laborales<br />

o mínimas condiciones legales.<br />

Oficios que matan<br />

Las condiciones que enfrentan<br />

los trabajadores en Bangladesh<br />

son las mismas de millones en el<br />

resto del continente, especialmente<br />

en Pakistán, India y China, así<br />

como en las naciones del sudeste<br />

asiático. Esta situación también<br />

se replica a nivel global y, aunque<br />

los países en vía de desarrollo, con<br />

sus tasas de pobreza y desempleo<br />

se convierten en los caldos de cultivo<br />

para el trabajo en condiciones<br />

injustas, las grandes potencias<br />

tampoco se salvan, especialmente<br />

por las condiciones que enfrentan<br />

los inmigrantes. (Ver infografía).<br />

Ante la ola de suicidios de<br />

obreros jóvenes en las plantas chinas<br />

de Foxconn Technology, una<br />

compañía que emplea 800.000<br />

personas para ensamblar productos<br />

y partes electrónicas para<br />

empresas como Apple, Dell y<br />

Hewlett-Packard, The New York<br />

Times afirmó en su momento que<br />

“los trabajadores chinos necesitan<br />

salarios más altos, mejores condiciones<br />

laborales y la posibilidad<br />

de formar uniones independientes.<br />

Ellos necesitan que China deje de<br />

ser la sweatshop del mundo”.<br />

El ascenso de ese país a potencia<br />

económica no ha representado<br />

condiciones justas para sus<br />

millones de trabajadores, incluso,<br />

parece sustentarse en prácticas<br />

como la explotación de quienes<br />

trabajan en sus ‘tiendas de sudor’,<br />

principalmente en las Zonas<br />

Económicas Especiales de la<br />

provincia de Guangdong.<br />

Una investigación conducida<br />

por la ONG China Labor Watch<br />

determinó que las condiciones de<br />

los trabajadores de esta empresa<br />

son lamentables. Por ejemplo, deben<br />

realizar tareas distintas cada<br />

siete segundos para cumplir con<br />

el ritmo impuesto. En un turno de<br />

10 horas, tienen que ensamblar<br />

4.000 computadores.<br />

La muerte de 14 trabajadores<br />

de Foxconn, todos menores<br />

de 25 años, llevó a Tim<br />

Cook, CEO de Apple, a hacer un<br />

llamado a su proveedor para<br />

Cuando se desplomó el edificio Rana Plaza, la peor<br />

tragedia de su tipo en la historia de Bangladesh,<br />

pero no la única, murieron 1.129 personas.<br />

cifras<br />

100.000 NIÑOS<br />

en las plantaciones<br />

de cacao de Costa<br />

de Marfil, país que<br />

produce el 40 por<br />

ciento de este fruto.<br />

20.000 PERSONAS<br />

son víctimas de<br />

trabajo forzado<br />

en campamentos<br />

madereros en la<br />

amazaonía.<br />

34 MINEROS<br />

murieron en 2012<br />

por la represión<br />

policial en Marikana,<br />

Sudáfrica, al exigir<br />

mejores salarios.<br />

44 NEPAlíES<br />

murieron al trabajar<br />

en la construcción<br />

de estadios para el<br />

Mundial de Fútbol<br />

Qatar 2018.<br />

53


informe espeCiAL<br />

mejorar las condiciones de sus<br />

empleados. No obstante, no se<br />

conocen medidas concretas para<br />

transformar esas prácticas<br />

que resultan tan rentables. Algo<br />

irónico porque, en comparación<br />

con otras fábricas, esta es reconocida<br />

en la región como una de<br />

las que mejor tratan a sus empleados.<br />

Tal vez en parte porque,<br />

como contaron algunos, todos<br />

los días los administradores preguntan<br />

cómo se encuentran, a<br />

lo que ellos estaban obligados a<br />

responder: “¡Bien! ¡muy bien!,<br />

¡muy muy bien!”.<br />

La separación entre las<br />

multinacionales y sus cientos<br />

de proveedores, alrededor<br />

del mundo, no son una excusa<br />

válida para que las primeras se<br />

sientan menos responsables.<br />

Cartas en el asunto<br />

Las compañías que deciden tomar<br />

acción tienen la posibilidad no solo<br />

de limpiar su nombre y garantizar<br />

a los consumidores que los productos<br />

no fueron elaborados en condiciones<br />

injustas, sino también de<br />

gestar cambios radicales en la vida<br />

de miles de empleados. Ha causado<br />

una gran polémica, por ejemplo,<br />

la decisión de Disney de dejar de<br />

producir elementos en Bangladesh,<br />

visto, en palabras de uno de<br />

sus altos ejecutivos, como “la manera<br />

más responsable de manejar<br />

los retos asociados con la cadena<br />

de abastecimiento”. Si bien es una<br />

forma de asegurar que detrás de su<br />

mercancía no se esconde la explotación,<br />

a miles de trabajadores les<br />

significó perder su único ingreso.<br />

Expertos como Michael Posner,<br />

exsecretario de democracia,<br />

derechos humanos y trabajo del<br />

Departamento de Estado de Estados<br />

Unidos, han afirmado que<br />

“la partida de Disney<br />

no hace nada<br />

para afrontar los<br />

verdaderos desafíos,<br />

que requieren<br />

el compromiso de<br />

grandes marcas<br />

globales de quedarse<br />

en lugares<br />

como Bangladesh<br />

y ser parte de un esfuerzo colectivo<br />

para proteger el bienestar<br />

de los trabajadores”.<br />

La separación entre las multinacionales<br />

y sus cientos de proveedores<br />

alrededor del mundo no<br />

es una excusa válida para que las<br />

primeras se sientan menos responsables.<br />

Sin embargo, en muchos<br />

casos, la falta de voluntad expresa<br />

Sweatshop es<br />

el término que<br />

se ha acuñado<br />

para referirse<br />

a talleres que<br />

someten a sus<br />

trabajadores<br />

a pésimas<br />

condiciones<br />

salariales y de<br />

seguridad.<br />

y, sobre todo, de acciones definitivas,<br />

sumadas a la ausencia de<br />

políticas estatales que defiendan<br />

a sus trabajadores, ha dejado en<br />

manos de organizaciones y de consumidores<br />

gran parte de la tarea<br />

de denunciar los abusos y abogar<br />

por los derechos laborales.<br />

Por citar uno, entre cientos de<br />

ejemplos, la organización International<br />

Labour Rights Forum ha incluido<br />

dentro de sus proyectos ‘La<br />

Campaña Wal-Mart’ contra el mayor<br />

empleador privado del mundo,<br />

con más de 60.000 proveedores.<br />

Lo hizo luego de estudiar sus fábricas<br />

en China, Bangladesh y Suazilandia,<br />

y denunció atropellos como<br />

jornadas de 16 a 18 horas diarias,<br />

violación de los salarios mínimos,<br />

negación de licencias de maternidad<br />

y ausencia de los mínimos<br />

requisitos de seguridad.<br />

Así mismo, la explotación<br />

laboral usualmente se encuentra<br />

emparentada con delitos como el<br />

tráfico de personas y el trabajo<br />

infantil. Muchas campañas han<br />

apuntado a los consumidores,<br />

como una manera para combatir<br />

estas formas de esclavitud moderna.<br />

Portales como Theslaveryfoodprint.org<br />

le dicen al público qué de<br />

lo que lleva puesto está ensuciado<br />

por la marca del trabajo forzoso.<br />

La ola de denuncias, posterior<br />

a lo de Bangladesh, ha creado consumidores<br />

más informados, que<br />

reconocen el papel que juegan<br />

dentro de la cadena de explotación.<br />

Como reconoce Green America,<br />

una organización de consumo responsable,<br />

en su Guía para acabar<br />

con las sweatshops, el primer paso<br />

es hacer preguntas sobre lo que se<br />

compra y exigir responsabilidad<br />

corporativa; el segundo, es cambiarse<br />

a marcas que garanticen la<br />

transparencia en toda la cadena<br />

detrás de sus productos.<br />

Los gobiernos también tienen<br />

un papel fundamental. Las crisis<br />

económicas, la falta de oportunidades,<br />

la pobreza y las múltiples<br />

desigualdades no pueden convertirse<br />

en escenarios que favorezcan<br />

la explotación laboral que, en el<br />

caso de muchos, se acepta como el<br />

único destino posible.<br />

54


INFORME tendencias ESPECIAL<br />

La explotación laboral, además<br />

de manifestarse en prácticas y<br />

contextos muy distintos, es un<br />

problema de magnitud global.<br />

Las soluciones requieren<br />

medidas y compromisos<br />

que traspasen fronteras.<br />

1<br />

2<br />

3 4<br />

Infografía:<br />

Enny rodríguez Peña<br />

Camilo Higuera Mozombite<br />

56<br />

Talleres hechos prisiones<br />

en inglés se les conoce como sweaTshops (Tiendas del<br />

sudor). suelen exisTir en países donde los cosTos de mano de<br />

obra son muy bajos, lo que impulsa a las firmas occidenTales<br />

a encargarles el ensamble final de sus producTos.<br />

Trabajan en el mundo en esTe Tipo de Talleres, en 160 países.<br />

-más de 23 millones de personasde<br />

los Trabajadores<br />

de esTos lugares<br />

85% son mujeres enTre<br />

942<br />

millones<br />

2<br />

de Trabajadores y<br />

sus familias viven<br />

con menos de<br />

dólares al día<br />

en el mundo.<br />

15 y 25<br />

años.<br />

EmplEados En<br />

el Término usado para referirse a<br />

esTas personas es working poor<br />

(algo así como Trabajadores pobres)<br />

porque, a pesar de Tener un empleo,<br />

el susTenTo que les brinda esTá por<br />

debajo de las líneas de pobreza.<br />

Por las buenas o Por las malas<br />

T rabajo forzoso<br />

la miseria<br />

al Trabajar en<br />

empleos que les<br />

fueron impuesTos<br />

por la coacción o<br />

el engaño y que no<br />

pueden abandonar.<br />

duplicar los<br />

salarios, solo<br />

aumenTaría el cosTo<br />

para el consumidor<br />

en<br />

1,8%.<br />

quienes Trabajan<br />

cosiendo jerseys de la<br />

nba ganan 24 cenTavos<br />

por cada una de las<br />

prendas que se vende<br />

en el mercado en<br />

140<br />

d ó l a r e s


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

1 Los ÁngeLes, estados Unidos<br />

En la ciudad, 98% de las fábricas<br />

textiles viola los mínimos estándares<br />

de salud y seguridad. Sus empleados,<br />

en su gran mayoría inmigrantes ilegales,<br />

ganan alrededor de 1/3 del<br />

mínimo necesario para subsistir.<br />

5 bangLadesH<br />

la industria textil representa 78% de<br />

las exportaciones del país. En 5.000<br />

talleres, 4 millones de trabajadores<br />

elaboran ropa para compañías<br />

europeas y norteamericanas.<br />

2<br />

méxiCo<br />

alrededor de 103.000 personas se encuentran<br />

en condiciones de esclavitud.<br />

Más de 5 millones de personas que<br />

ganan menos de dos salarios mínimos,<br />

trabajan más de 48 horas a la semana y<br />

no tienen prestaciones legales.<br />

3 san Pedro sULa, HondUras<br />

una empresa de estadounidenses y<br />

coreanos con unos 3.500 empleados<br />

fue denunciada por estos, quienes<br />

decían verse obligados a usar pañales<br />

pues, en turnos de cerca de nueve<br />

horas, solo podían ir una vez al baño.<br />

6<br />

7<br />

sHenzHen, CHina<br />

De los 5,5 millones de personas que<br />

trabajan en esta Zona Económica Especial,<br />

70% son mujeres. las llamadas dagongmei<br />

son jóvenes que llegan del campo y son<br />

abusadas de todas las formas posibles.<br />

indonesia<br />

Cerca de 688.000 menores de 18 años<br />

se desempeñan como trabajadores<br />

domésticos en el país. Muchos son<br />

víctimas de abusos físicos y psicológicos<br />

por parte de sus empleadores.<br />

OTRa CARA<br />

15<br />

mIllones de nIños, entre 5 y 14<br />

años, sufren de explotacIón<br />

laboral en el mundo. de ellos,<br />

7,4 mIllones, en su mayoría nIñas,<br />

se ven oblIgadas a trabajar<br />

en el servIcIo doméstIco.<br />

en rIesgo permanente<br />

cada 15 segundos un<br />

trabajador muere<br />

en el mundo por un<br />

accIdente o enfermedad<br />

relacIonado<br />

con su ofIcIo.<br />

LOS ESCLAVOS MODERNOS<br />

4<br />

CoLombia<br />

De acuerdo con el International<br />

labour rights Forum este es el peor<br />

país del mundo para ser sindicalista.<br />

En los últimos 20 años, alrededor de<br />

4.000 miembros de uniones de trabajadores<br />

han sido asesinados.<br />

5 6<br />

7<br />

el tráfIco de personas es una<br />

de las facetas más extremas<br />

de la explotacIón laboral.<br />

anualmente, las ganancIas que<br />

genera esta práctIca solo se<br />

comparan con las del tráfIco de<br />

armas y las drogas, combInadas.<br />

La brecha DE LOS SaLaRiOS MíNiMOS<br />

=$1<br />

60<br />

MIN 0,58<br />

0,57<br />

0,28<br />

0,03<br />

1 2<br />

3<br />

4<br />

1 Sierra Leona<br />

2 India<br />

3 Afganistán<br />

4 México<br />

16,88<br />

12,09<br />

11,18<br />

9,83<br />

a pesar de las fuertes leyes laborales, en estados<br />

unIdos 11.000 plantas vIolan el salarIo mínImo y el<br />

máxImo de horas trabajadas, y otras 16.000 hacen lo<br />

mIsmo con las polítIcas de salud y segurIdad.<br />

5<br />

6<br />

7<br />

8<br />

5 Reino Unido<br />

6 Nueva Zelanda<br />

7 Francia<br />

8 Australia<br />

1809<br />

- IrónIcamente -<br />

$ no solo la esclavItud persIste en nuevas $<br />

formas, sIno que, mIentras un esclavo en 1809<br />

costaba alrededor de 40.000 dólares, hoy su<br />

costo descIende a 90 dólares.<br />

LIMONADA<br />

(PrECIO ajuSTaDO a la aCTualIDaD)<br />

18<br />

2013<br />

40.000 90<br />

En IndIA,<br />

productos dIstIntos<br />

están dIrectamente<br />

relacIonados con<br />

el trabajo InfantIl.<br />

Fuentes: OIT (Organización<br />

Internacional del Trabajo), The<br />

Economist, Dosomething.org.<br />

The CNN Freedom Project y<br />

Productsofslavery.org<br />

57


Opinión<br />

Simplismo minero<br />

La forma extremadamente<br />

simplista en<br />

que la política minera<br />

considera el territorio<br />

colombiano es, quizá,<br />

la principal causa de<br />

los crecientes conflictos<br />

socioambientales que se están<br />

presentando en el país.<br />

Es tal el simplismo que el<br />

Código Minero establece que la<br />

industria en todas sus ramas y<br />

fases es de utilidad pública e interés<br />

social, lo que, en últimas,<br />

implica que la minería prima<br />

sobre la actividad agrícola, los<br />

derechos culturales y territoriales<br />

de las minorías étnicas y la<br />

protección ambiental.<br />

Además, en lo relativo al<br />

medioambiente, la arquitectura<br />

del Código es de tal naturaleza<br />

que una vez otorgado el título es<br />

muy improbable que se pueda negar<br />

la licencia ambiental. Es cierto<br />

que el Código excluye algunas<br />

áreas de la minería (los páramos,<br />

los parques nacionales y los humedales<br />

de la lista Ramsar), pero<br />

es absurdo que el otorgamiento de<br />

los títulos y concesiones en el resto<br />

del territorio nacional se haga sin<br />

un ordenamiento ambiental previo,<br />

en el cual se establezca en qué<br />

áreas la minería es dable, bajo qué<br />

condiciones y en cuáles no.<br />

El no hacerlo es suponer que<br />

el territorio colombiano es homogéneo<br />

y que declaradas las áreas<br />

mineras estratégicas, por el único<br />

anhelo de sus potenciales mineros,<br />

lo que queda por hacer es<br />

otorgar los títulos y concesiones<br />

a partir del principio de “quien es<br />

primero en el tiempo, es primero<br />

en el derecho”, una norma de<br />

indiscutible sabor decimonónico.<br />

Y es que antes que homogéneo,<br />

el territorio colombiano<br />

presenta una enorme complejidad<br />

desde las perspectivas<br />

geográfica, ecológica, climática<br />

y geológica. Basta con recordar<br />

que en él se encuentran representados<br />

cinco de los grandes<br />

ecosistemas de Suramérica: Caribe,<br />

Pacífico, Andino, Orinocense<br />

y Amazónico. Dada la altísima<br />

biodiversidad del territorio, al<br />

interior de cada una de estas<br />

regiones, se encuentra también<br />

una gran heterogeneidad.<br />

Así, para no pocos colombianos<br />

la Orinoquia es una llanura<br />

homogénea, que podría ser transformada<br />

sin mayores cortapisas,<br />

puesto que allí no existirían valores<br />

ecológicos de significación<br />

que proteger, como, en contraste,<br />

sí existen en la región amazónica.<br />

Pero por el contrario, cualquier<br />

proceso de transformación debe<br />

tomar en cuenta que la Orinoquia<br />

cuenta con 159 ecosistemas, 39<br />

tipos de sabana y una enorme riqueza<br />

en agua que, sin embargo,<br />

presenta una gran fragilidad, en<br />

virtud de su marcada estacionalidad,<br />

que se caracteriza por<br />

una larga estación lluviosa y una<br />

de fuerte sequía.<br />

Por Manuel<br />

Rodríguez<br />

Becerra<br />

*Exministro de<br />

Medio Ambiente<br />

Es absurdo que el otorgamiento<br />

de los títulos mineros se haga<br />

sin un previo ordenamiento<br />

ambiental del territorio.<br />

La región andina es, quizá,<br />

la que presenta una mayor<br />

complejidad para los potenciales<br />

proyectos mineros. En el ámbito<br />

global se cuenta muy poca experiencia<br />

de explotación minera en<br />

una región de tan alta biodiversidad<br />

y pluviosidad como esta.<br />

Además, son pocas las regiones<br />

montañosas del mundo que<br />

cuentan con una población tan<br />

alta como esta zona colombiana.<br />

Por eso no es extraño que las comunidades<br />

se preocupen por el<br />

futuro de sus aguas, ya sea porque<br />

la minería podría demandar<br />

un excesivo uso de este recurso<br />

frente a las irrenunciables necesidades<br />

para usos agrícolas<br />

y domésticos; por los riesgos de<br />

contaminación del agua originados<br />

en la extracción de los minerales,<br />

o por los drenajes ácidos<br />

que podrían generarse en las<br />

montañas andinas en virtud de<br />

la composición de los materiales<br />

rocosos de las mismas.<br />

En muchos casos, “el oro o el<br />

agua” no es un falso dilema, como<br />

lo afirman los defensores a ultranza<br />

de la minería, sino una certera<br />

representación de la realidad.<br />

FOTO: Archivo Semana - Juan Carlos Sierra<br />

58


infoRmación institucional<br />

semana sostenible<br />

Primera planta ‘verde’<br />

entre los palmicultores<br />

Con una inversión que supera los 3 millones de dólares,<br />

el proceso de extracción de aceite de palma en C.I.<br />

Tequendama S.A.S. no deja huella de carbono.<br />

C.I. Tequendama<br />

S.A.S. puede decirlo<br />

con orgullo:<br />

es la primera empresa<br />

palmicultora<br />

de Colombia que<br />

puso en práctica un proyecto de<br />

Mecanismo de Desarrollo Limpio<br />

(MDL). Eso significa un proyecto<br />

amigable con el planeta.<br />

En 1997, 38 países se suscribieron<br />

al Protocolo de Kioto en el que<br />

se comprometieron a adelantar acciones<br />

para disminuir su impacto en<br />

el medioambiente, concretamente<br />

para reducir las Emisiones de Gases<br />

de Efecto Invernadero (GEI), dentro<br />

de las cuales se encuentra MDL.<br />

Colombia es el cuarto país de Latinoamérica<br />

con el mayor número de<br />

proyectos MDL registrados ante la<br />

ONU y el número 12 del mundo.<br />

C.I. Tequendama, en jurisdicción<br />

del municipio de Aracataca,<br />

Magdalena, empresa del Grupo<br />

Daabon, contribuye a mantener<br />

este posicionamiento del país.<br />

Desde el 31 de mayo, el proceso<br />

industrial que se realiza allí para<br />

obtener 50.000 toneladas al año<br />

de aceites vegetales, convierte las<br />

aguas residuales en metano, catalogado<br />

como GEI, el cual, posteriormente,<br />

se transforma en<br />

energía; de esta manera, la empresa<br />

no tiene huella de carbono.<br />

La iniciativa del proyecto es liderada<br />

por la Federación Nacional<br />

de Palmicultores (Fedepalma).<br />

“Hemos logrado capturar más<br />

de 500.000 m 3 mensuales de biogás,<br />

lo que resulta ser un importante<br />

beneficio en términos de calidad<br />

del aire y de reducción de GEI.<br />

Además, hay una disminución de<br />

FOTO: cortesía Grupo Daabon<br />

Por los buenos<br />

resultados del<br />

proyecto, el<br />

Grupo Daabon<br />

planea una<br />

réplica de C.I.<br />

Tequendama<br />

en el complejo<br />

industrial San<br />

Francisco,<br />

ubicado en<br />

Santa Marta.<br />

60 millones de pesos mensuales en<br />

costos de energía, lo que representa,<br />

más allá de un beneficio económico,<br />

una oportunidad de reducir<br />

la dependencia de la red eléctrica<br />

nacional”, afirma Alfonso Dávila<br />

Abondano, vicepresidente agroindustrial<br />

del Grupo Daabon.<br />

El sistema desarrollado tiene<br />

una capacidad de generación<br />

eléctrica de 2,2 mw (Megawatts),<br />

60 por ciento más de la energía<br />

que requiere la planta extractora<br />

para su funcionamiento. Este<br />

excedente presentó una nueva<br />

oportunidad de negocio para la<br />

compañía, que está haciendo gestiones<br />

para su venta.<br />

Estos buenos resultados<br />

han llevado al Grupo Daabon a<br />

planear una réplica, a mediano<br />

plazo, en el complejo industrial<br />

San Francisco, ubicado en Santa<br />

Marta, que se dedica a la refinación<br />

del aceite de palma y a la<br />

producción de derivados. Su objetivo<br />

es convertirlo en el primer<br />

clúster autoabastecido de energía<br />

y vapor en América Latina.<br />

“La responsabilidad hace<br />

parte de un esquema productivo<br />

y un esquema social. Por eso<br />

nuestros procesos de agricultura<br />

orgánica y sostenible tienen unos<br />

avales internacionales, alrededor<br />

de 27 certificaciones que son<br />

auditadas todos los años. Todos<br />

los procesos y mejoras continuas<br />

que implementamos son monitoreadas<br />

rigurosamente”, asegura<br />

Felipe Guerrero, director de Sostenibilidad<br />

del Grupo Daabon.<br />

59


informe espeCiAL<br />

¿De qué está hecha la<br />

cotidianidad?<br />

Detrás de los accesorios, prendas de vestir y cualquier producto de<br />

consumo humano, hay una cadena que en ocasiones empieza con un<br />

minúsculo recurso natural y humano. Semana Sostenible puso seis<br />

objetos bajo la lupa para conocer su ciclo de vida.<br />

Jean<br />

Huella verde<br />

FUEnTE: Estudio de Moda<br />

Materia priMa<br />

y proceso<br />

▶ La tela del jean, denominada<br />

denim, proviene del<br />

algodón. Un jean contiene<br />

700 gramos de esa fibra.<br />

▶ Un jean consume 70 litros de<br />

agua en su proceso de elaboración.<br />

Actualmente, la tecnología<br />

wattwash permite conseguir los<br />

mismos acabados con un sistema<br />

de láser que gasta solo 2,5 litros.<br />

Ahorra 97 por ciento de agua.<br />

▶ Los jeans se transportan en bolsas<br />

plásticas. Los más finos van en<br />

bolsas de algodón.<br />

▶ Para elaborar un jean se necesita<br />

una libra de algodón<br />

que, a su vez, es producido<br />

con 1.500 galones de agua.<br />

▶ En Estados Unidos se<br />

venden 450 millones<br />

de jeans cada año.<br />

▶ En total, más de 50 personas<br />

intervienen en la elaboración<br />

de una prenda.<br />

▶ En países como Colombia no<br />

existe un método de disposición<br />

para tintes sintéticos,<br />

por lo que son vertidos a los<br />

ríos y lagunas. En Tehuacán,<br />

México, se han hecho pruebas<br />

al agua y se encontró<br />

que contiene plomo, mercurio,<br />

cadmio y selenio.<br />

▶ 60 por ciento del impacto ambiental<br />

que genera esta prenda<br />

se debe a los procesos de<br />

lavado. Este puede reducirse<br />

secando los jeans al aire libre.<br />

▶ Para darle el look viejo<br />

a los jeans, las compañías<br />

utilizan hasta 42 litros<br />

de agua y una técnica<br />

conocida como lavado<br />

en piedra, que implica<br />

usar sílice. Cuando<br />

los pantalones son<br />

restregados por los<br />

trabajadores, emanan<br />

polvo de sílice,<br />

lo que puede<br />

hacer que los pulmones<br />

se inflamen.<br />

▶ El color azul típico de un<br />

jean se logra sumergiendo el<br />

algodón 12 o más veces en enormes<br />

baldes de índigo sintético<br />

▶ Aproximadamente ocho personas<br />

se encargan de ensamblar<br />

las piezas de un jean.<br />

▶ Un jean puede tener 18<br />

operaciones entre lijado,<br />

lavado, teñido, ensuciado,<br />

secado, desteñido, etcétera.<br />

ventas<br />

En el mundo se fabrican<br />

2.000<br />

millones de jeans<br />

anualmente.<br />

▶ En Colombia, los precios<br />

oscilan entre los 40.000 y<br />

los 800.000 pesos. Estos<br />

últimos por lo general son<br />

importados y se venden<br />

alrededor de 1.000 prendas<br />

al año en el país.<br />

FOTO: Clara Moreno<br />

60


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

Paquete de PaPas<br />

Fuente: Pepsico<br />

FOtO: Clara Moreno<br />

Las papas de una<br />

multinacional con un<br />

mercado fuerte en<br />

el país provienen de<br />

las principales zonas<br />

productoras de Colombia,<br />

distribuidas así:<br />

60%<br />

de la Sabana de<br />

Bogotá (tenjo, Madrid,<br />

Subachoque, Funza,<br />

Mosquera, Cota, el<br />

Rosal y Facatativá).<br />

20%<br />

de Boyacá (toca,<br />

Oicata, Soracá y tuta).<br />

15%<br />

de nariño (Sapuyes<br />

e Ipiales).<br />

5%<br />

de Antioquia (San Pedro<br />

y Santa Rosa de Osos).<br />

▶ La variedad de<br />

tubérculo ideal para<br />

hacer papas fritas<br />

son las Diacol Capiro,<br />

que se compran a<br />

productores locales.<br />

Proceso<br />

▶ Las papas llegan<br />

crudas y a granel a los<br />

centros de acopio de<br />

las empresas. Allí, se<br />

seleccionan y cepillan.<br />

▶ Las escogidas se<br />

transportan a las fábricas<br />

en vehículos llamados<br />

bines que tienen forma<br />

de tolva y van protegidos<br />

por una carpa.<br />

▶ el primer paso es un<br />

análisis de control de<br />

calidad. Posteriormente<br />

son lavadas con agua<br />

y peladas con una<br />

máquina industrial.<br />

Postconsumo<br />

▶ Pepsico dona los<br />

empaques para hacer<br />

bolsos. una cartera emplea<br />

entre 300 y 700 empaques.<br />

distribución<br />

▶ Se distribuyen en cajas<br />

de cartón reutilizables.<br />

▶ una vez embalados,<br />

los productos llegan a<br />

distribuidores y clientes<br />

en todo el país.<br />

▶ Siguen por una banda<br />

transportadora en donde<br />

un grupo de operarias<br />

seleccionan y cortan.<br />

▶ Pasan a una cortadora<br />

industrial que las<br />

convierte en hojuelas.<br />

▶ entran a una máquina<br />

con aceite vegetal en<br />

donde son freídas por<br />

tres minutos. Luego<br />

se pasan por sal.<br />

▶ Cualquier papa defectuosa<br />

es desechada antes de<br />

pasar al siguiente paso.<br />

esto se hace con un<br />

seleccionador óptico<br />

programado con una<br />

foto del aspecto ideal.<br />

▶ Posteriormente son<br />

espolvoreadas con los<br />

diferentes sabores.<br />

▶ el empaque está<br />

compuesto por capas de<br />

polipropileno, aluminio,<br />

tinta y adhesivo.<br />

▶ una compañía como<br />

Pepsico produce 10.000<br />

toneladas de papas al año.<br />

▶ entre 450 y 500 empleados<br />

están involucrados<br />

en el proceso.<br />

Huella verde<br />

▶ Para producir un<br />

kilogramo de papa<br />

frita se usa entre<br />

8 y 13<br />

litros de agua.<br />

▶ PepsiCo Alimentos tiene<br />

una planta de tratamiento<br />

de aguas residuales<br />

que en 2012 alcanzó un<br />

nivel de reutilización<br />

de 71,9 por ciento.<br />

▶ Las plantas cuentan con<br />

paneles solares que<br />

generan luz en el interior<br />

de la fábrica. Las áreas<br />

internas cuentan con<br />

lámparas solar tube.<br />

61


informe espeCiAL<br />

boTElla dE agua<br />

Fuente: Agua del nacimiento<br />

▶ La botella plástica de agua<br />

se elabora con<br />

PET<br />

(polímero moldeado con<br />

calor o presión).<br />

▶ una embotelladora de este<br />

tipo usa 12 millones de litros<br />

de agua diarios y el trabajo de<br />

cinco personas.<br />

▶ una embotelladora de<br />

agua pequeña, como<br />

Agua del nacimiento,<br />

utiliza el líquido del pie de<br />

monte llanero. envasan sin<br />

tratamiento químico.<br />

▶ Máquinas automáticas<br />

se encargan de este<br />

proceso. una sola llena<br />

7.000<br />

botellas por hora, y<br />

trabaja ocho horas al día.<br />

▶ Hacen en Bogotá las<br />

botellas y las llevan a<br />

Villavicencio.<br />

▶ una botella Pet se demora<br />

10 segundos en estar lista y<br />

puede tardar<br />

100<br />

años en descomponerse.<br />

▶ Hoy no se usa tanto plástico<br />

como en el pasado. Hace cuatro<br />

años se empleaban 31 gramos en<br />

una botella, hoy solo se usan 25.<br />

▶ Las botellas de plástico solo<br />

sirven una vez. empresas como<br />

Ajover y Agua del nacimiento<br />

reciclan estos productos y los<br />

convierten en tejas y filamentos<br />

para escobas y cajas.<br />

FOtO: Clara Moreno<br />

▶ en la botella se pega<br />

una etiqueta plástica.<br />

Si la imprimieran<br />

directamente, no se<br />

podría reciclar después.<br />

▶ en el mundo, más de 460.000<br />

millones de botellas se<br />

fabrican al año.<br />

62


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

celular<br />

FUEntE: Huawei<br />

▶ Las empresas que fabrican<br />

celulares tienen centros<br />

de desarrollo en el ámbito<br />

mundial conformados por<br />

unidades de investigación,<br />

donde se conciben los diseños.<br />

ComposiCión<br />

▶ En el caso de Huawei, la casa<br />

60%<br />

matriz está en China.<br />

▶ El diseño de un nuevo<br />

prototipo de celular puede<br />

tardar hasta dos años.<br />

de aleación de aluminio<br />

(esqueleto del equipo).<br />

Generalidades<br />

▶ Los colores base de los teléfonos<br />

móviles son el negro y blanco.<br />

▶ Una compañía de celulares puede<br />

producir entre 150.000 y 200.000<br />

unidades diarias.<br />

40%<br />

representa las cubiertas, tapas,<br />

chips, plásticos, polímeros y<br />

componentes electrónicos.<br />

▶ El precio de un teléfono móvil va<br />

desde 30.000 hasta 1,8 millones<br />

de pesos.<br />

▶ En producción se pueden emplear<br />

2.500 personas para elaborar<br />

sus celulares.<br />

▶ Los polímeros se producen<br />

en Vietnam, Malasia y otros<br />

países asiáticos.<br />

▶ Los insumos metálicos<br />

(como el cobre) se importan<br />

generalmente de Chile.<br />

proCeso<br />

▶ Los componentes, en su mayoría,<br />

provienen de otras compañías.<br />

Algunas fabrican el procesador, es<br />

decir, el cerebro interno del equipo.<br />

FOtO: Clara Moreno<br />

▶ Los materiales pasan por control<br />

de calidad y se ensamblan: todo se<br />

hace de manera robotizada.<br />

▶ Manualmente se revisa equipo por<br />

equipo y se hace un chequeo visual<br />

y un control con energía eléctrica<br />

para corroborar el encendido del<br />

aparato y el sistema operativo.<br />

▶ Las cajas provienen por lo general<br />

de China, y son elaboradas en<br />

cartón. Su calidad puede variar<br />

según la categoría del celular<br />

(superficie satinada, cartón más<br />

rígido, entre otros atributos).<br />

transporte<br />

▶ El producto se despacha desde<br />

el puerto de Hong Kong, en<br />

China. Un envío vía marítima<br />

puede tardar entre 40 y 50<br />

días en llegar a su destino.<br />

▶ Cuando se hace vía aérea se<br />

tarda de 10 a 15 días en llegar<br />

a Colombia.<br />

Vida útil<br />

▶ Cada tres meses se lanza un<br />

nuevo equipo celular.<br />

▶ Un celular puede durar<br />

de tres a cuatro años. En<br />

Colombia, las renovaciones<br />

se hacen en un período de<br />

un año. Esto hace que el<br />

cambio sea constante.<br />

deseChos<br />

▶ Los celulares que se usan<br />

para muestras de mercadeo<br />

deben ser destruidos.<br />

▶ Por cada nuevo modelo que<br />

sale cada tres meses, se<br />

distribuyen entre 50 y 100<br />

muestras en el mundo que<br />

luego son recogidas.<br />

63


informe espeCiAL<br />

CARRO<br />

Fuente: Colmotores<br />

Proceso<br />

1. El primer paso para fabricar un<br />

automóvil es diseñar el producto.<br />

Por lo general los carros que se<br />

ensamblan en Colombia traen<br />

la concepción de los centros<br />

de diseño global, e integran un<br />

porcentaje variable de piezas<br />

producidas localmente.<br />

2. Después se cortan las láminas de<br />

acero y se procesan con prensas de<br />

gran tonelaje para darle la forma a<br />

la pieza. Se trata de una presión de<br />

2.500<br />

toneladas.<br />

Generalidades<br />

▶ El 35 por ciento de los insumos<br />

con los que se elabora un<br />

carro se compran en el país.<br />

Alambrados, vidrios, asientos,<br />

rines, amortiguadores, tapetes y<br />

suspensión. El motor es importado.<br />

▶ Un carro tarda 36 meses en<br />

salir al mercado desde que se<br />

toma la decisión de desarrollar<br />

un nuevo modelo.<br />

▶ Un vehículo tiene cerca de<br />

2.600 piezas y componentes.<br />

▶ Aproximadamente, 1.200 personas<br />

están involucradas en su fabricación.<br />

▶ En Colombia se ensamblan<br />

178 carros por día.<br />

▶ La vida útil de un carro en buenas<br />

condiciones es de 10 años.<br />

3. El siguiente paso es el grafado,<br />

que consiste en tomar dos piezas<br />

(interna y externa) y unirlas.<br />

4. Sigue el ensamblaje de las cabinas,<br />

que se unen con soldadura.<br />

5. Luego viene la pintura, en<br />

la que primero se aplica una<br />

capa con fosfato para evitar la<br />

oxidación y después una base<br />

anticorrosiva, el fijador, la pintura<br />

de color, el brillo y el secado.<br />

6. Se ensamblan los componentes<br />

mecánicos, los sistemas eléctricos<br />

y electrónicos. Después se realizan<br />

las pruebas funcionales, se<br />

enciende y se verifica que cumpla<br />

con los estándares de calidad.<br />

Huella verde<br />

FOTO: 123RF<br />

7. Pasa por 14 estaciones de verificación<br />

de cada uno de los componentes.<br />

8. Los automóviles recién terminados<br />

son transportados a todo el país<br />

en tractomulas de dos pisos<br />

conocidos como niñeras. Cada<br />

una puede cargar seis carros.<br />

▶ energía: para fabricar<br />

un vehículo se gasta<br />

0,35 megawatts<br />

hora por vehículo.<br />

▶ En agua se consumen<br />

2.210 litros por vehículo.<br />

Especialmente en<br />

pintura, porque se<br />

debe remover el hierro<br />

sobrante de la lámina<br />

para evitar que se oxide.<br />

▶ Construir un carro tarda<br />

entre 34 y 35 horas<br />

▶ Los residuos de<br />

la fabricación se<br />

convierten en chatarra<br />

metálica. Un carro<br />

genera varios tipos de<br />

gases: de combustión,<br />

dióxido de carbono,<br />

óxido de nitrógeno<br />

y monóxido de<br />

carbono. Todos se<br />

van a la atmósfera.


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

BOLSA DE MAQUiLLAJE<br />

Fuente: Cosméticos Ana María<br />

Bolsa<br />

Pestañina<br />

laBial<br />

Polvos<br />

comPactos<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

La mayoría se elabora en<br />

plástico (polímeros moldeados<br />

con calor). La cremallera se<br />

fabrica con cintas de nylon<br />

y dientes de bronce de<br />

baja fricción para que no se<br />

calienten. Las partes de los<br />

extremos se hacen con zinc.<br />

Por lo general, los estuches de<br />

los productos de belleza no se<br />

reciclan ni se vuelven a utilizar;<br />

están elaborados de materias<br />

primas rígidas y poco flexibles.<br />

Las muestras, devoluciones o<br />

productos defectuosos pasan<br />

por un proceso de división del<br />

material orgánico e inorgánico<br />

y el plástico se destruye. este<br />

proceso está en manos de<br />

empresas especializadas y<br />

por lo general no lo realizan<br />

las mismas compañías de<br />

cosméticos.<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

el proceso para elaborarla tiene<br />

dos fases: se calientan las partes<br />

acuosas y oleosas, hasta que<br />

consiguen la misma temperatura;<br />

luego se juntan y se agitan para<br />

formar la emulsión.<br />

Se deja enfriar la mezcla.<br />

este paso puede hacerse de<br />

dos maneras: dejándolo a<br />

temperatura ambiente o en baño<br />

María, con agua fría. Puede tardar<br />

de 3 a 4 horas.<br />

Se envasa en tarros delgados, se<br />

inserta el escurridor, se pegan los<br />

stickers y se guarda en una caja de<br />

cartón plegadizo.<br />

Los ingredientes incluyen cera,<br />

pigmentos, emulsificantes y<br />

materiales artificiales.<br />

De todos los lotes se conserva<br />

una muestra por 3 años que<br />

finalmente se destruye.<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

Los productos cosméticos se<br />

fabrican con las fórmulas de cada<br />

casa productora.<br />

Por lo general, un labial está<br />

conformado por ceras que<br />

proporcionan la firmeza, vitaminas,<br />

pigmentos, bases oleosas y<br />

antioxidantes para preservarlos.<br />

Las empresas de cosméticos<br />

colombianas importan la mayoría<br />

de estos insumos de estados<br />

unidos y Francia.<br />

una compañía colombiana puede<br />

producir 650 labiales en un ciclo.<br />

Los labiales se empacan en cajas<br />

corrugadas.<br />

Se transporta en camiones y<br />

se distribuye a todo el país vía<br />

terrestre.<br />

Al comprar un producto, según<br />

el tamaño, se utiliza una bolsa<br />

plástica o de papel.<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

▶<br />

Para elaborar este producto se<br />

utilizan, principalmente, extractos<br />

de productos naturales. el más<br />

común es el polvo de arroz,<br />

traido del tolima.<br />

Se emplean materiales como:<br />

talco, pigmentos, polvo de<br />

arroz, aglutinante, aceites,<br />

siliconas para compactar el<br />

polvo, filtro solar, preservantes,<br />

aloe vera y vitaminas.<br />

Los polvos se protegen con una<br />

lámina de acetato de 6 centímetros<br />

de longitud y se insertan en una<br />

caja de cartón plegable.<br />

un polvo compacto puede tener<br />

una vida útil de 3 años.<br />

De 100 kilos de materia prima se<br />

pueden extraer 6.600 unidades<br />

de polvos.<br />

un estuche de polvos compactos<br />

puede pesar 15 gramos.<br />

FOtO: Clara Moreno<br />

65


INFORME ESPECIAL<br />

50<br />

acciones<br />

para convertirse<br />

en un consumidor<br />

responsable<br />

¡Pare! No mire para otro lado y<br />

deje de pensar que la cosa no<br />

es con usted. El mundo puede<br />

tener otro destino y usted está en<br />

capacidad de ayudar a construirlo.<br />

Estos 50 verbos son un comienzo.<br />

INfogrAfíA:<br />

Enny rodríguez Peña<br />

Camilo Higuera Mozombite<br />

CUERPO<br />

Planifique<br />

A mayor cantidad de<br />

humanos se necesita<br />

más espacio y el consumo<br />

de recursos aumenta,<br />

así como el impacto<br />

sobre los ecosistemas.<br />

Según United Nations<br />

Department of Economic<br />

and Social Affairs,<br />

el número de personas<br />

en el planeta pasó de<br />

1.500 millones en 1900,<br />

a 7.000 millones<br />

en la actualidad.<br />

1 2<br />

Practique sexo<br />

resPonsable y seguro<br />

Los humanos pueden ser<br />

agentes transmisores de<br />

enfermedades letales.<br />

Las ETS (Enfermedades de<br />

Transmisión Sexual) y el<br />

Sida han estado en primera<br />

plana durante las últimas<br />

tres décadas. Usar condón<br />

se ha convertido en la<br />

forma más eficaz de evitar<br />

transmitir o ser contagiado<br />

con una ETS o con el VIH.<br />

66


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

Reduzca su huella<br />

ecológica<br />

Se refiere al impacto<br />

que se genera en el<br />

planeta a partir del uso<br />

de sus recursos. Para<br />

2007, la huella ecológica<br />

de la humanidad<br />

era de 1,5 planetas; hoy<br />

(2013) la cuenta es un<br />

poco más larga. Haga<br />

su propio cálculo en<br />

www.myfootprint.org<br />

infóRmese<br />

Conozca las acciones<br />

que puede llevar a<br />

cabo para conservar<br />

el entorno que habita.<br />

Aprenda cómo seleccionar<br />

los productos<br />

adecuados o qué tipo<br />

de sustancias son las<br />

más perjudiciales para<br />

el ambiente y la salud.<br />

Entienda los procesos<br />

sociales que se ponen<br />

de manifiesto al generar<br />

bienes y servicios.<br />

Reduzca el tamaño<br />

Menor espacio, menores<br />

cantidades, menor<br />

despilfarro y menos<br />

impacto. En inglés esta<br />

acción es conocida<br />

como downsizing, es<br />

decir, reducir el tamaño.<br />

Comprar una casa<br />

más pequeña, tener un<br />

carro menos aparatoso,<br />

no agrandar papas ni<br />

bebida a la hora de<br />

comer y tener menos<br />

ropa son algunas<br />

acciones importantes.<br />

3 4 5 6<br />

consuma<br />

medicamentos<br />

solo cuando<br />

sea necesaRio<br />

Además de traer<br />

grandes beneficios<br />

para su salud, abstenerse<br />

de utilizar<br />

medicamentos para<br />

dolores leves puede<br />

ayudar al medioambiente.<br />

La industria<br />

farmacéutica es una<br />

de las que más agua<br />

y energía requiere.<br />

CONSUMO DE BIENES<br />

7<br />

compRe los pRoductos<br />

sin empaques<br />

Solo en la Unión Europea<br />

cada persona produce<br />

entre 43 y 202 kilogramos<br />

de desechos de los empaques.<br />

Los estadounidenses<br />

superan ampliamente esa<br />

medida. Se dice que si un<br />

pueblo de 100.000 habitantes<br />

reciclara el 100 por<br />

ciento de los empaques<br />

que usa a diario, en un año<br />

recuperaría 780.000 toneladas<br />

de acero, 200 de<br />

aluminio, 470 de plástico y<br />

2.300 de papel. Sin embargo,<br />

alrededor del mundo<br />

solo el 1,8 por ciento de<br />

los empaques se recicla.<br />

8<br />

¿Realmente<br />

necesito esto?<br />

Es necesario poner las<br />

emociones a un lado y<br />

pensar antes de comprar<br />

en el verdadero<br />

valor útil de aquellas<br />

mercancías o bienes<br />

que se quieren adquirir.<br />

utilice RecuRsos autogeneRadoRes<br />

Esta acción es importante sobre<br />

todo a la hora de comprar una<br />

casa. Espacios que se ciñen a<br />

conceptos bioclimáticos, en los<br />

que las estructuras aprovechan<br />

mejor la luz solar y disminuyen el<br />

uso de energía eléctrica.<br />

10 11<br />

12<br />

9<br />

pRoduzca sus pRopios bienes<br />

y done lo que le sobRe<br />

Los habitantes asumen la responsabilidad<br />

de producir sus<br />

propios alimentos, consumir solo<br />

los necesarios para su sustento<br />

diario y crear huertas comunitarias<br />

de las cuales puede sacar<br />

provecho la comunidad.<br />

Reduzca el<br />

consumo de pilas<br />

La energía eléctrica que<br />

produce una pila común es<br />

450 veces más costosa. Su<br />

alto contenido de plomo,<br />

cadmio, mercurio y litio, las<br />

hacen altamente contaminantes,<br />

no biodegradables<br />

y no reutilizables.<br />

combata y<br />

evite la obsolescencia<br />

adquiRida<br />

Este concepto implica<br />

que muchos<br />

objetos, desde su<br />

construcción, se<br />

ensamblan con un<br />

tiempo de caducidad<br />

determinado<br />

usualmente corto,<br />

lo cual lleva a tener<br />

que comprar<br />

uno nuevo cuando<br />

se desgastan.<br />

Consumir bienes<br />

de alta calidad y<br />

duraderos ayuda<br />

a reducir dinero<br />

y desechos.<br />

13<br />

utilice electRodomésticos<br />

amigables con<br />

el medioambiente<br />

La tendencia a usar aparatos<br />

domésticos ecológicos<br />

hechos con materiales<br />

reciclados, que consumen<br />

menos energía, se toma<br />

los mercados.<br />

67


INFORME ESPECIAL<br />

CONSUMO EN EL HOGAR<br />

14<br />

15<br />

16<br />

17<br />

18<br />

19<br />

20<br />

Use bombillos<br />

de bajo consUmo<br />

Este tipo de reflectores puede<br />

durar hasta seis años, lo que<br />

genera un ahorro de 200 mil<br />

pesos al evitar tener que reponer<br />

los convencionales.<br />

adqUiera detergentes<br />

biodegradables<br />

Dos de sus componentes son<br />

el fosfato y los tensoactivos,<br />

que ayudan a que las prendas<br />

se limpien más rápido. Pero<br />

estas sustancias contaminan las<br />

fuentes hídricas y disminuyen<br />

el oxígeno en el agua, lo que<br />

mata a los peces.<br />

desconecte los<br />

aparatos electrónicos<br />

qUe no esté Usando<br />

Según la Agencia Internacional<br />

de la Energía, dejar los aparatos<br />

eléctricos conectados implica entre<br />

5 y 10 por ciento del consumo<br />

total de energía en un hogar.<br />

Utilice la lUz solar<br />

cUanto sea posible<br />

Según las estadísticas del Banco<br />

Mundial, 1.200 millones de personas<br />

en el mundo no tienen aún<br />

acceso a la electricidad. Apague<br />

las luces que no necesita.<br />

aprenda a hacer<br />

compostaje<br />

Es una técnica que permite convertir<br />

en abono natural los desechos<br />

orgánicos, como los que se producen<br />

en la cocina. Es una forma<br />

económica y sencilla de reutilizar<br />

ese 40 por ciento de desperdicios.<br />

redUzca el<br />

consUmo de agUa<br />

Tomar duchas más cortas y cerrar<br />

la llave mientras se enjabona el<br />

cuerpo o se cepilla los dientes son<br />

acciones que ayudan. 85 por ciento<br />

de la población mundial vive en<br />

las partes más secas del planeta.<br />

plante Un jardín<br />

Con esto crea hábitats para algunas<br />

especies de aves o insectos.<br />

Sin embargo, a la hora de hacerlo<br />

21<br />

22<br />

23<br />

24<br />

25<br />

26<br />

tenga en cuenta no ocupar mucho<br />

espacio, hacerlo productivo<br />

y utilizar especies que se adapten<br />

al ambiente de su hogar.<br />

lave la ropa con agUa fría<br />

Cerca de 85 por ciento del gasto<br />

energético de estos electrodomésticos<br />

en las casas se debe<br />

a la acción de calentar el agua<br />

para mejorar el lavado.<br />

recolecte y reUtilice<br />

el agUa llUvia<br />

Instale tanques en el tejado de<br />

su casa para capturar en los<br />

contenedores la mayor cantidad<br />

posible de agua. Puede usar ese<br />

líquido para regar el jardín, lavar<br />

el carro y utensilios caseros.<br />

cambie los inodoros<br />

Los inodoros de bajo consumo<br />

(low flow toilets) utilizan solo<br />

seis litros para evacuar el baño,<br />

a diferencia de los 13,2 que se<br />

necesitan en los antiguos.<br />

sUba por las escaleras<br />

Además de beneficiar la salud,<br />

también ahorra energía. Dos<br />

viajes diarios en un ascensor por<br />

persona durante un mes gastan<br />

5,8 kilovatios. No parece mucho,<br />

pero si se multiplica por el número<br />

de personas que viven en el<br />

edificio el resultado es aterrador.<br />

ALIMENTACIÓN<br />

no consUma alimentos<br />

qUe tengan pesticidas<br />

La fumigación en la agricultura<br />

industrial es una práctica altamente<br />

nociva. Los compuestos<br />

que se usan en 98 por ciento<br />

destruyen las fuentes de agua,<br />

contaminan el suelo, y envenenan<br />

a los animales y los humanos.<br />

compre bebidas en<br />

envases retornables<br />

Reduzca el uso de plástico. Los envases<br />

retornables, usualmente de<br />

vidrio, pasan por un nuevo ciclo de<br />

limpieza y vuelven al mercado.<br />

27<br />

28<br />

29<br />

30<br />

31<br />

32<br />

Use bolsas de tela<br />

En Estados Unidos, para producir<br />

100 mil millones de bolsas plásticas,<br />

se necesitan 12 millones de<br />

barriles de petróleo y solo entre<br />

1 y 2 por ciento de aquella cantidad<br />

termina reciclándose.<br />

preste atención a las etiqUetas<br />

de los prodUctos<br />

Compruebe que lo que compra<br />

no tenga químicos, así como si<br />

se trató y se pagó dignamente<br />

los trabajadores que los hicieron<br />

posibles. Algunos de estos<br />

sellos informan que fue cultivado<br />

orgánicamente o que no hay<br />

hormonas en el producto.<br />

apoye la pesca artesanal<br />

En Colombia, especies marinas<br />

como la piangua, el mero<br />

y el atún han disminuido y ya<br />

están en la lista de especies<br />

en vía de extinción. Esto se<br />

debe a la pesca industrial.<br />

no consUma agUa<br />

embotellada<br />

Beba agua directamente del<br />

grifo o compre filtros. Las<br />

botellas de plástico causan<br />

la muerte de hasta un millón<br />

de criaturas marinas cada<br />

año y su descomposición<br />

puede tomar siete siglos.<br />

consUma alimentos<br />

qUe estén más abajo en<br />

la cadena alimenticia<br />

Las dietas a base de carne<br />

requieren hasta 10 veces más<br />

terreno para alimentar a una<br />

persona que lo que necesitan<br />

las de vegetales.<br />

consUma<br />

prodUctos locales<br />

Comprar los productos originarios<br />

de su zona y evitar el<br />

transporte entre lugares distantes<br />

del planeta ahorra energía<br />

y evita la emisión de CO 2<br />

.<br />

68


CONSUMO RESPONSABLE<br />

33<br />

TRANSPORTE<br />

camine o monte<br />

en bicicleta<br />

Trate de que los recorridos entre su<br />

casa y su trabajo sean cortos. Estas<br />

acciones reducen la producción de<br />

CO 2<br />

, y mejoran la salud y el ánimo.<br />

36<br />

uSe fuenteS de<br />

energía alternativaS<br />

Según el Institute for Energy Research<br />

(Estados Unidos), cerca de 70<br />

por ciento del petróleo producido<br />

se usa para el transporte.<br />

34<br />

35<br />

comparta el carro<br />

Sea uno más de los ciudadanos<br />

que hace carpooling.<br />

utilice menSajeríaS<br />

SoStenibleS<br />

Utilice aplicaicones como canubring,<br />

una red social donde se les<br />

solicita a los viajeros que traigan<br />

encomiendas en sus maletas.<br />

37<br />

38<br />

SúbaSe al<br />

tranSporte público<br />

Genera menores emisiones,<br />

pues condensa en un solo<br />

vehículo a muchas personas.<br />

baje el ritmo<br />

Comprar y trabajar menos<br />

es la apuesta de cittaslow<br />

o ciudades lentas.<br />

39<br />

40<br />

MANEJO DE<br />

DESECHOS<br />

Separe laS baSuraS<br />

Basuras orgánicas: comida<br />

sobrante, madera, papel o<br />

cartón. Basura inorgánica,<br />

vidrios, plástico y metal, entre<br />

otros. Su correcta clasificación<br />

ahorra tiempo y energía.<br />

intercambie,<br />

comparta y repare<br />

Cada tanto reúna todo aquello<br />

que no le sirva, no use o no le<br />

guste; y dónelo. Hay muchos<br />

que pueden sacar provecho<br />

de eso. Haga intercambios con<br />

vecinos y amigos y renueve<br />

ciertos elementos de su casa.<br />

43<br />

44<br />

MODA<br />

no uSe productoS<br />

que impliquen la<br />

muerte de animaleS<br />

Según la organización People<br />

for the Ethical Treatment of<br />

Animals (PETA), en el mundo<br />

la industria del cuero elimina<br />

anualmente cerca de 1.000<br />

millones de animales para obtener<br />

su piel y transformarla<br />

en objetos para vestir.<br />

haga de lo<br />

vintage Su eStilo<br />

Reutilizar la ropa, usar lo<br />

que otros ya no quieren y<br />

TURISMO<br />

45<br />

donar aquello que ya no desea,<br />

es una alternativa para reducir<br />

los cerca de 11,8 millones de<br />

toneladas de ropa que es enviada<br />

a los basureros del mundo.<br />

evite comprar coSméticoS<br />

que experimentan<br />

con animaleS<br />

Fíjese que tenga la etiqueta<br />

de cosméticos sin crueldad.<br />

Su sello es usualmente el<br />

de un conejo corriendo.<br />

SOCIAL<br />

41<br />

42<br />

reutilice<br />

Llantas que se convierten en<br />

carteras, botellas de vidrio y<br />

plástico que se vuelven materiales<br />

para construir viviendas.<br />

La cultura del reúso reduce<br />

las emisiones de dióxido de<br />

carbono, disminuye el gasto<br />

energético y genera una menor<br />

cantidad de desperdicios.<br />

deSeche apropiadamente<br />

Su baSura electrónica<br />

Done los equipos que aún<br />

sirvan a fundaciones que los<br />

necesiten, regrese los celulares<br />

viejos a las compañías<br />

que los comercializan y<br />

fabrican, o deséchelos en<br />

los lugares establecidos<br />

por los gobiernos.<br />

haga turiSmo SoStenible<br />

Consiste en irse de vacaciones<br />

a hoteles o escoger operadores<br />

de tours que generan<br />

ganancias mientras conservan<br />

el medioambiente y benefician<br />

a la comunidad local.<br />

46 48<br />

47<br />

comparta recurSoS<br />

con otroS viajeroS<br />

Emprendimientos como<br />

couchsurfing –una red social<br />

para albergar viajeros en su<br />

sofá– o Airbnb –que le permite<br />

ser huésped en casa de personas<br />

del lugar o albergar viajeros<br />

en la suya– se han convertido<br />

en prácticas que, además<br />

de generar nuevos vínculos<br />

sociales, reducen el gasto<br />

de energía y agua.<br />

49<br />

50<br />

Sea un abogado<br />

del comercio juSto<br />

Busque la etiqueta del fairtrade, la<br />

cual asegura que al productor se<br />

le pagó lo justo y que la empresa<br />

tiene prácticas sostenibles.<br />

invierta en la banca ética<br />

Hay una serie de organizaciones<br />

financieras que se basan en la<br />

idea de transparencia, ética y<br />

confianza para llevar a cabo intercambios<br />

monetarios.<br />

conviértaSe en un<br />

reportero ciudadano<br />

Entérese de lo que pasa en<br />

su comunidad, divúlguelo,<br />

publíquelo y discútalo. Estar<br />

informado le permitirá tomar<br />

mejores decisiones.<br />

69


informe espeCiAL<br />

Recién nacidos<br />

contaminados<br />

En 1998, mientras<br />

pedaleaba en mi<br />

bicicleta por el río<br />

Potomac (Estados<br />

Unidos), se me ocurrió<br />

que mientras<br />

la contaminación<br />

industrial del aire, agua y tierra<br />

es un hecho claro y real hay otra<br />

pregunta esperando una respuesta:<br />

¿qué contaminantes tóxicos<br />

habitan nuestro cuerpo? Con el fin<br />

de aclarar esta duda mis colegas<br />

de The Environmental Working<br />

Group y yo nos embarcamos en<br />

una investigación de muchos años.<br />

De todos los estudios que hemos<br />

hecho, en los que hemos documentado<br />

cientos de contaminantes<br />

creados por el hombre presentes<br />

en la orina y la sangre, uno en particular<br />

cambió significativamente<br />

este debate en Estados Unidos.<br />

En el mes anterior a que un<br />

bebé nazca, el cordón umbilical<br />

emite pulsaciones de al menos<br />

300 cuartos de sangre cada día.<br />

Esa sangre va de la placenta al<br />

niño que se gesta en el saco de<br />

fluido amniótico. Este cordón es<br />

una línea de vida entre madre<br />

e hijo y transporta oxígeno y<br />

nutrientes que hacen posible el<br />

crecimiento y la vida.<br />

Hasta hace poco los científicos<br />

pensaban que la placenta<br />

actuaba como una barrera que<br />

protegía al niño de casi todos los<br />

posibles contaminantes, pero en<br />

2004 y 2005, cuando mi grupo<br />

y yo hicimos pruebas de sangre<br />

tomada de los cordones umbilicales<br />

de 10 bebés recién nacidos,<br />

descubrimos que todas contenían<br />

químicos industriales. Este fue el<br />

comienzo de la ‘carga del cuerpo<br />

humano’, la contaminación que<br />

llevamos dentro de nuestros cuerpos<br />

y que permea a toda la población,<br />

incluidos los no nacidos.<br />

Los exámenes revelaron un<br />

total de 287 químicos en esos 10<br />

cordones umbilicales que analizamos,<br />

y que fueron recolectados<br />

por la Cruz Roja después de haber<br />

sido removidos de los bebés.<br />

Encontramos pesticidas, productos<br />

de consumo diario y residuos<br />

de carbón, gasolina y basura.<br />

Había químicos perfluorados que<br />

se usan como repelentes en la comida<br />

rápida, en la ropa y en los<br />

textiles y retardantes de llama<br />

bromados, que son compuestos<br />

altamente neurotóxicos que se<br />

utilizan, por ejemplo, al fabricar<br />

algunas almohadas.<br />

De los químicos que pudimos<br />

identificar en las pruebas de<br />

sangre que le hicimos a cada cordón,<br />

180 pueden causar cáncer,<br />

217 son tóxicos para el cerebro y<br />

el sistema nervioso y 208 pueden<br />

generar anomalías de nacimiento<br />

y desarrollo tardío. Es bien sabido<br />

que la exposición a químicos<br />

cuando los niños todavía están<br />

dentro del vientre materno y durante<br />

la primera infancia pueden<br />

ser dramáticamente más dañinos<br />

que exposiciones más tardías,<br />

cuando el cuerpo y el cerebro se<br />

han formado en su totalidad.<br />

Los niños están llegando al<br />

mundo precontaminados por<br />

cientos de químicos industriales<br />

en su sangre y esto se debe, en<br />

Estados Unidos, a las fallas de<br />

la ley federal de 1976 que debe<br />

controlar las sustancias tóxicas.<br />

Por Ken Cook,<br />

presidente<br />

y cofundador<br />

de The<br />

Environmental<br />

Working Group.<br />

Nota del editor:<br />

Alex Formuzis,<br />

vicepresidente de<br />

comunicaciones<br />

de EWG y Elaine<br />

Shannon, editora<br />

jefe de EWG,<br />

colaboraron<br />

al escribir<br />

este artículo.<br />

Esta ley permitió, en esencia, que<br />

63.000 químicos fueran aprobados;<br />

cuando se hizo pública<br />

y entró en funcionamiento esta<br />

cantidad creció porque el gobierno<br />

tenía un plazo de 90 días<br />

para aprobar un nuevo químico<br />

después de que las compañías<br />

solicitaban esa aprobación. Lo<br />

anterior quiere decir que, por<br />

esa época, se aprobaron más o<br />

menos siete químicos por día.<br />

El gobierno norteamericano<br />

ha establecido un número<br />

de programas voluntarios para<br />

recoger más información<br />

sobre los químicos, pero estos<br />

esfuerzos han sido altamente<br />

ineficientes a la hora de reducir<br />

la exposición de los seres humanos<br />

a dichas sustancias, y no reemplazan<br />

la necesidad de crear<br />

un requerimiento estatutario<br />

claro que permita hacer estudios<br />

rigurosos sobre los viejos<br />

y nuevos químicos que existen.<br />

La EWG ha estado liderando<br />

estos esfuerzos para lograr que<br />

la ley federal sea reformada con<br />

el fin de asegurar que los niños<br />

sean protegidos de los químicos<br />

industriales y de otros contaminantes.<br />

Cuanto más pronto la<br />

sociedad actúe, más pronto podremos<br />

darle fin a la contaminación<br />

desde el vientre.<br />

FOTO: archivo personal<br />

70


semana sostenible<br />

FOTO: cortesía Intel<br />

ESPECIAL<br />

EDUCACIÓN<br />

Y<br />

GÉNERO<br />

Este artículo fue posible gracias a<br />

71


El vuelo de las niñas<br />

FOTOS: cortesía Intel<br />

Ni el terremoto impidió que Wadley, una niña de Haití, continuara estudiando.<br />

Miles de mujeres en edad escolar en el mundo tienen más<br />

obstáculos para educarse que los hombres. Esta diferencia<br />

también se da en el acceso a tecnologías como Internet.<br />

En la tarde del 10 de<br />

enero de 2010, mientras<br />

Wadley, una niña<br />

de escasos recursos de<br />

Puerto Príncipe, Haití,<br />

hacía sus tareas en el<br />

comedor de su casa, un temblor<br />

de 7 puntos en la escala de Richter<br />

sacudió al país y lo dejó en ruinas.<br />

La tragedia cambio su vida. Wadley,<br />

a quien nada le generaba más<br />

felicidad que estudiar, tuvo que<br />

abandonar el sueño de educarse.<br />

Volver al colegio parecía un<br />

sueño inalcanzable, pero una mañana<br />

se sentó junto a unos niños<br />

que recibían clase bajo un toldo<br />

improvisado. Al verla, la profesora<br />

le explicó que para estar allí<br />

debía pagar. Ella se fue pero al<br />

otro día regresó y una vez más<br />

la profesora le pidió que se fuera.<br />

Esta vez Wadley, con el ímpetu de<br />

los que están dispuestos a luchar<br />

por lo que quieren, le dijo que si<br />

la echaban regresaría irremediablemente<br />

todos los días. La profesora<br />

le permitió quedarse.<br />

Este relato hace parte de Girl<br />

Rising, la película dirigida por Richard<br />

Robbins, nominado al Óscar<br />

en 2007, en la que narra las<br />

conmovedoras historias de nueve<br />

niñas de diferentes países y su<br />

lucha por liberarse de los obstáculos<br />

que les impiden tener una<br />

educación. El filme es una iniciativa<br />

de Intel que busca crear<br />

conciencia sobre esta apremiante<br />

situación y promover que muchas<br />

de ellas, como lo sugiere su título,<br />

emprendan su propio vuelo.<br />

Tristemente, lo que detiene<br />

a muchas de ellas no es falta de<br />

interés. Entre los obstáculos “están<br />

la pobreza, los desastres naturales,<br />

los conflictos armados,<br />

la idea de que las mujeres están<br />

destinadas al trabajo doméstico,<br />

el embarazo a temprana edad<br />

o, como sucede en Afganistán,<br />

ideologías religiosas por las cuales<br />

se les niega ese derecho”, dice<br />

María del Rosario García, gerente<br />

de Responsabilidad Social de<br />

Intel Colombia. También existen<br />

problemas de orden estructural<br />

como la falta de transporte y de<br />

vías para llegar a la escuela desde<br />

lugares remotos. Se calcula que<br />

en el mundo hay 66 millones de<br />

niñas en edad escolar fuera de las<br />

aulas por una de estas razones.<br />

72


semana sostenible<br />

Cuando 10 por ciento más<br />

de niñas va al colegio el PIB<br />

del país sube 3 puntos.<br />

Héctor Abad Faciolince dio<br />

a conocer el drama de Jessica,<br />

de la vereda Santa Clara (Bolívar)<br />

en el diario El Espectador,<br />

con el artículo Los motivos de<br />

Jessica. La joven de 13 años terminó<br />

la primaria pero no continuó<br />

porque tenía que ir a otro<br />

colegio,que queda a dos horas de<br />

su casa y cuya vía de acceso está<br />

en malas condiciones. “Jessica<br />

es mujer y tiene miedo de hacer<br />

ese trayecto sola, que en todo<br />

caso sus padres nunca se lo dejan<br />

hacer si no va en compañía.<br />

Una niña sola sería presa fácil de<br />

cualquier maldad”, dice Abad.<br />

Lo peor, como lo señala<br />

Abad, es que esas condiciones solo<br />

las afectan a ellas, lo que quiere<br />

decir que si fueran hombres, tendrían<br />

más oportunidades de culminar<br />

sus estudios. En el mundo<br />

hay 33 millones menos de mujeres<br />

que de hombres en los salones<br />

de clase, según Naciones Unidas.<br />

Lo paradójico es que la educación<br />

femenina no solo tiene un<br />

impacto en su vida personal sino<br />

en su familia, su comunidad y su<br />

país. Una investigación del Council<br />

of Foreing Relations, publicada<br />

en 2004, concluyó que cuando 10<br />

por ciento más de niñas van al<br />

colegio el Producto Interno Bruto<br />

de un país puede crecer hasta<br />

tres puntos. Esto sucede porque<br />

cuando ellas se educan se previenen<br />

problemáticas sociales<br />

como el matrimonio temprano, el<br />

embarazo adolescente o el sida.<br />

“Sobre todo, se rompen círculos<br />

de pobreza intergeneracional<br />

pues una niña que estudia mejora<br />

las posibilidades de que sus<br />

hijos lo hagan también y de que<br />

sus hijas postergen el momento<br />

de procrear. Además, tendrá más<br />

opciones de emplearse. En este<br />

La meta es que<br />

600 millones<br />

de mujeres<br />

entren a ser<br />

usuarias de<br />

tecnología en<br />

los próximos<br />

tres años.<br />

punto el círculo se vuelve virtuoso,<br />

pues las mujeres invierten casi<br />

90 por ciento de sus ingresos en la<br />

salud, alimentación y educación<br />

de su familia”, dice García.<br />

Al estar alejadas de las aulas<br />

las muchachas también se alejan<br />

de Internet, una herramienta que<br />

ha transformado la vida de millones<br />

de personas a través del<br />

intercambio de ideas, recursos y<br />

soluciones a problemas locales.<br />

Según el informe Women and the<br />

Web, en el mundo hay en promedio<br />

25 por ciento menos mujeres<br />

con acceso a esta herramienta<br />

y en algunas regiones, como el<br />

África subsahariana, este índice<br />

puede llegar a 45 por ciento.<br />

Esta diferencia está relacionada<br />

con la brecha en educación<br />

pues en los países en vía de desarrollo<br />

cerca de 75 por ciento<br />

de las mujeres son alfabetas<br />

comparado con 86 por ciento de<br />

los hombres. Pero también hay<br />

barreras de género. Una de cada<br />

cinco mujeres en India y Egipto<br />

cree que Internet no es apropiado<br />

para ellas. “En Colombia mientras<br />

que 70 por ciento de los hombres<br />

puede utilizar el servicio, en<br />

el caso de las mujeres esa cifra<br />

disminuye a 56 por ciento”, dice<br />

David González, gerente general<br />

de Intel Cono Norte.<br />

El informe además señala<br />

estereotipos como por ejemplo,<br />

que no tienen habilidades para<br />

la tecnología.La falta de conocimiento<br />

sobre sus beneficios es<br />

otra razón por la cual siguen sin<br />

aprovechar el potencial de la red.<br />

El costo del acceso es otro factor.<br />

Si no se toman acciones en<br />

los próximos años ingresarán<br />

400 millones de mujeres a la red<br />

como consecuencia del aumento<br />

de usuarios. Pero si en lugar de<br />

esas 400 millones se logra que<br />

600 millones usen Internet se obtendrían<br />

grandes beneficios en<br />

su bienestar y sus familias.“Si se<br />

logra esta meta habría además<br />

un incremento entre 13.000 a<br />

18.000 millones de dólares en el<br />

PNB de 144 países en vía de desarrollo”,<br />

indica González.<br />

Intel trabaja en varios frentes:<br />

desde 1996 es el patrocinador<br />

titular del premio ISEF, la feria de<br />

ciencias más grande del mundo;<br />

ha hecho inversiones en mejorar<br />

la educación de las niñas en 50<br />

países, y cuenta con el programa<br />

She Will Connect, para reducir la<br />

brecha tecnológica de género.<br />

A lo anterior se deben añadir<br />

leyes y políticas de agricultura,<br />

vías e infraestructura de salud.<br />

Así mismo, se necesitan ejemplos<br />

como el de Wadley. Cuantas más<br />

niñas compartan ese mensaje habrá<br />

más conciencia de esta problemática,<br />

y muchas más podrán<br />

emprender su propio vuelo.<br />

73


La niña más valiente<br />

del planeta<br />

Luchar contra la exclusión educativa de las mujeres,<br />

ordenada por los talibanes, casi le cuesta la vida. Hoy,<br />

Malala Yousafzai abandera la cruzada por la educación<br />

como derecho fundamental en Pakistán.<br />

Desde 2007, parte<br />

del valle de Swat<br />

está ocupado por<br />

talibanes. El territorio,<br />

cercano<br />

a la capital pakistaní,<br />

era atractivo turístico pero<br />

hoy es una zona cercada por la<br />

violencia y las prohibiciones del<br />

fundamentalismo islámico.<br />

La región ha acaparado la<br />

atención de mundo gracias a<br />

Malala Yousafzai, una joven de 16<br />

años que es símbolo de la lucha<br />

por la equidad en la educación.<br />

El futuro de Malala y sus<br />

compañeras de estudio quedó<br />

en suspenso en diciembre de<br />

2008 con el anuncio del líder<br />

talibán Mullah Shah Dorande<br />

que prohibiría la asistencia de<br />

niñas a las escuelas de Swat.<br />

El gobierno de facto justificó<br />

la decisión.<br />

Malala decidió divulgar su<br />

situación en un blog de la BBC<br />

bajo el pseudónimo de ‘Gul<br />

Makai’ Hacia finales de 2009,<br />

su nombre dejó de ser un misterio<br />

pues reveló su verdadera<br />

identidad en Class Dismissed:<br />

Malala’s Story, un documental<br />

de The New York Times, donde<br />

se expone lo ocurrido ese año,<br />

desde la destrucción de escuelas<br />

femeninas hasta su desalojo por<br />

enfrentamientos militares.<br />

Inspirada por el ímpetu de<br />

su padre, aquella niña que soñaba<br />

estudiar medicina, contemplaba<br />

ahora la posibilidad de<br />

ejercer política para seguir con<br />

su cruzada a favor de la educación.<br />

Su esfuerzo fue reconocido<br />

en diciembre de 2011 por Yousaf<br />

Raza Gillani, entonces primer<br />

ministro de Pakistán, quien le<br />

otorgó el National Youth Peace<br />

Prize llamado en su honor como<br />

National Malala Peace Prize.<br />

Ante este despliegue, Malala<br />

no tardó en ser blanco de amenazas<br />

de muerte para silenciar<br />

sus denuncias. El 9 de octubre de<br />

2012, durante el trayecto entre la<br />

escuela y su casa, su bus escolar<br />

fue abordado por un talibán que le<br />

propinó un disparo en la cabeza.<br />

Fue transportada en helicóptero<br />

hacia un hospital en<br />

Peshawar y trasladada al Reino<br />

Unido, donde le hicieron varias<br />

cirugías. La noticia del atentado<br />

recorrió el mundo entero y así<br />

quien intentó asesinarla no solo<br />

falló sino que multiplicó la fama<br />

de la joven, cuyo caso se convirtió<br />

en símbolo de la igualdad de género<br />

en el acceso a la educación.<br />

Este año Malala se ha embarcado<br />

en un nuevo viaje: divulgar<br />

su historia y promover la<br />

equidad educativa. En marzo se<br />

publicó Yo soy Malala, libro en el<br />

FOTO: AFP<br />

Malala<br />

Yousafzai<br />

es, desde<br />

2009, el<br />

símbolo de<br />

la lucha por<br />

la equidad<br />

de género<br />

en cuanto al<br />

acceso a la<br />

educación.<br />

74


semana sostenible<br />

que relata a fondo su historia. Se<br />

espera el estreno del documental<br />

Malala: A Girl from Paradise.<br />

Haber sido nominada al<br />

premio Nobel de Paz acrecentó<br />

su popularidad y detalles de su<br />

cruzada. En una entrevista con<br />

Christiane Amanpour de CNN,<br />

reveló su interés de ser primera<br />

ministra y trabajar para que todas<br />

las niñas estudien.<br />

El 12 de julio, día de su cumpleaños<br />

número 16, pronunció<br />

un discurso en la ONU, ante el<br />

secretario general Ban Ki-moon<br />

y miembros de la Asamblea<br />

Mundial de la Juventud sobre la<br />

importancia de la educación coeDUCaCiÓn<br />

Y GÉneRo<br />

mo herramienta de progreso en<br />

países en vía de desarrollo.<br />

Gracias a Malala y a su coraje,<br />

hoy hay niñas en todo el<br />

mundo luchando contra la violencia<br />

y la opresión causada por<br />

culturas que no les permiten<br />

tener acceso a la educación ni<br />

desarrollarse como personas.<br />

FOTO: cortesía Intel<br />

Aulas sin niñas<br />

Según la Unesco, 31 millones de niñas<br />

en el mundo no tienen acceso al colegio.<br />

La situación de Malala se repite en<br />

otros escenarios aunque con obstáculos<br />

diferentes. Por ejemplo, en<br />

la república del Congo, Burkina<br />

Faso y Guinea-Bissau, se mezclan<br />

los problemas de infraestructura<br />

con los conflictos armados. Allí,<br />

los padres prefieren que las niñas<br />

no vayan a clase para que no se expongan<br />

a que los rebeldes abusen<br />

de ellas en el recorrido a la escuela.<br />

En Nigeria, Sierra Leona<br />

y Etiopía, la desnutrición impide<br />

que los niños completen<br />

sus estudios pues no hay cómo<br />

asegurar una alimentación<br />

adecuada, fundamental en el<br />

proceso de aprendizaje. En<br />

Malí, el obstáculo es la crisis<br />

alimentaria, la falta de agua<br />

potable, el clima extremo y las<br />

enfermedades como el cólera.<br />

Así mismo, los matrimonios y<br />

embarazos a temprana edad<br />

alejan a las niñas del colegio,<br />

mientras que en Ghana, Kenia,<br />

Uganda y Zimbabue, las mujeres<br />

pierden más de un mes<br />

de clases debido a su período<br />

menstrual pues no tienen cómo<br />

comprar toallas higiénicas.<br />

En Arabia Saudita, desde<br />

los siete años, las niñas van a<br />

escuelas diferentes a las de los<br />

niños. Sus instalaciones están<br />

en peor estado y el plan de estudios<br />

es limitado.<br />

En Bangladesh, los padres<br />

no le encuentran el beneficio de<br />

educar niñas que van a ser vendidas<br />

a las familias de sus esposos<br />

a partir de los 8 años.<br />

El machismo en Latinoamérica<br />

hace que muchas de ellas<br />

sean obligadas a realizar trabajos<br />

domésticos mientras sus hermanos<br />

estudian. En Colombia,<br />

según el DANE, el 34,4 por ciento<br />

de las niñas entre los 5 y 17 años<br />

trabaja para ayudar a sus padres<br />

con el sustento diario.<br />

Por eso, pese a que 49,5 por<br />

ciento de los estudiantes matriculados<br />

cada año son mujeres,<br />

el nivel de deserción escolar es<br />

mucho mayor en ellas que en los<br />

hombres. Otra de las razones<br />

es el abuso sexual pues 40 por<br />

ciento de los casos reportados<br />

corresponden a menores de 14<br />

años y dicho trauma se convierte<br />

en un obstáculo para el<br />

aprendizaje. Otro factor es el<br />

embarazo no deseado. Cada año<br />

se registran 7.000 nacimientos<br />

de madres entre los 10 y 14 años,<br />

la más alta de América Latina.<br />

Un informe de Profamilia<br />

reveló que el 29 por ciento<br />

de las que viven en ciudades<br />

tienen estudios de educación<br />

superior, mientras que en el<br />

campo tan solo el 7 por ciento<br />

cuenta con título universitario.<br />

La desigualdad social, la pobreza,<br />

el conflicto armado, el<br />

desplazamiento forzado y las<br />

precarias condiciones de vida<br />

alimentan esta realidad.<br />

Los obstáculos son muchos<br />

y parecen invencibles. Pero como<br />

lo ha demostrado Malala, los<br />

grandes cambios empiezan por<br />

pequeñas acciones y cada mujer<br />

que se empodera para luchar<br />

por el sueño de su educación ha<br />

dado un gran paso que marca la<br />

diferencia y, poco a poco, inspira<br />

a más niñas que aún no tienen la<br />

posibilidad de hacerlo.<br />

75


¿Por qué invertir<br />

en ellas?<br />

Muchas mujeres no tienen acceso a las aulas de clase por<br />

diferentes motivos. Esto sucede a pesar de que las cifras<br />

comprueban que en algunos países en vía de desarrollo el impacto<br />

es 20 veces mayor que invertir en los hombres. Un proverbio<br />

africano dice: “Si educas a un niño, se educa a un individuo pero<br />

si educas a una niña, se educa a una nación entera”. Las ganancias<br />

de dicha inversión, según múltiples estudios, son indiscutibles<br />

y tienen un impacto global. Apostarle a la formación de las<br />

niñas es una de las maneras más efectivas de generar progreso y,<br />

sobre todo, de romper círculos de pobreza intergeneracional.<br />

66 millones<br />

de niñas<br />

en el mundo en edad<br />

escolar no tienen<br />

acceso a la educación.<br />

29%<br />

de los<br />

de los<br />

investigadores<br />

universitarios<br />

son mujeres.<br />

1 de cada<br />

cinco mujeres<br />

no termina sus estudios.<br />

que se matricula en el colegio<br />

33 Hay<br />

millones<br />

de mujeres<br />

menos<br />

que hombres en escuela primaria.<br />

LA INEQUIDAD ENTRE<br />

NIÑAS Y NIÑOS<br />

1 de cada<br />

se casará antes de los 16<br />

siete mujeres<br />

se casará antes de los 16<br />

y quedará embarazada.<br />

68 países<br />

no han logrado la<br />

paridad de género<br />

en la educación.<br />

de 2% humanitaria<br />

la ayuda<br />

a nivel mundial se<br />

destina a la educación.<br />

De las niñas que no están<br />

matriculadas 41 millones<br />

en el colegio,<br />

provienen de grupos<br />

socialmente excluidos por la<br />

pobreza, la raza o la religión.<br />

INFOGRAFÍA: ekon7studio<br />

IMPACTO DE LA EDUCACIÓN DE<br />

LAS MUJERES EN LA SOCIEDAD<br />

SOCIALES ECONÓMICOS SALUD<br />

Cuando va al colegio un 10 por ciento<br />

Si en África sub-Sahariana y Asia Oriental,<br />

más de mujeres, el PIB de ese país<br />

Los hijos de las madres que han<br />

las niñas pudieran hacer secundaria, se<br />

aumenta 3 por ciento.<br />

completado su educación tienen<br />

reduciría en 59 por ciento el número de<br />

50 por ciento más probabilidad de<br />

embarazos en menores de 17 años.<br />

sobrevivir por encima de los 5 años.<br />

Según el programa de Alimentación<br />

Mundial, cuando las mujeres ganan un<br />

Las mujeres que completan siete o<br />

sueldo ellas reinvierten 90 por ciento del<br />

más años de educación tienden a<br />

dinero en las familia para comprar libros,<br />

La escolarización de las<br />

casarse cuatro años más tarde y a<br />

medicina y comida. Los hombres invierten<br />

mujeres reduce en 43 por ciento<br />

tener dos hijos menos.<br />

apenas entre 30 y 40 por ciento de su salario.<br />

la malnutrición de un país.<br />

76<br />

94


100 ideas semana sostenible<br />

Historias que inspiran<br />

Dos ejemplos de cómo la educación y la capacitación son un par de<br />

caminos usados por Intel para ayudar a mejorar la vida de las mujeres.<br />

Del basurero a Excel<br />

Ana Puentes trabajó durante 10 años en el basurero de Navarro,<br />

en Cali. Cada semana recibía más de tres millones de pesos<br />

como producto de la venta y compra de artículos de reciclaje.<br />

Pero su falta de formación le impidió aprovechar ese dinero. “Lo<br />

derrochábamos, lo gastábamos a manos llenas”, dice. Cuando<br />

el basurero se cerró, su vida cambió porque no recibía ingresos<br />

para sostener a sus tres hijos, su nieto y su esposo, quien trabaja<br />

como operario en Promoambientes. Un día, en una actividad de<br />

sensibilización con recicladores, se enteró de un curso de informática<br />

apoyado por la Fundación Carvajal, que utiliza la metodología<br />

Intel Aprender. Ella que ni sabía leer y escribir, no tenía<br />

ni idea de cómo manejar estos aparatos. Aún más, le asustaban<br />

y prefería no tocarlos. Pero su fuerza e interés por aprender la<br />

llevaron a derrotar sus propias dudas. No solo aprendío a manejar<br />

el computador, sino que gracias a esto también aprendió<br />

a leer y escribir, y con esta herramienta organizó, digitó y sistematizó<br />

todos los registros de Ecofuturo, la entidad de la cual<br />

hoy es directora y que es una organización que a empoderado a<br />

muchas mujeres como ella. Esto permitió la elaboración de los<br />

estados financieros del año 2011. “La tecnología me cambió la<br />

vida, ahora estoy segura de poder desarrollar cuadros, cartas y<br />

mucha información para mi organización”, dice. Gracias al uso<br />

de la tecnología, ella ha conseguido mayor estabilidad económica<br />

y ha aprendido valores como el respeto por ella misma y las<br />

personas que la rodean.<br />

Promesas de la ciencia<br />

En mayo de este año se llevó a cabo la feria Intel ISEF 2013,<br />

que busca promover el pensamiento científico en las aulas<br />

de clase mediante la creación de trabajos innovadores. Dos<br />

colombianas con discapacidad auditiva, Isamar Cartagena<br />

y Katherine Fernández, de Itagüí, Antioquia, ganaron entre<br />

más de 1.600 estudiantes de 70 países en la categoría de ingeniería<br />

eléctrica y mecánica. El trabajo que presentaron las<br />

jóvenes es un dispositivo que reconoce el pito de los carros<br />

y emite una señal luminosa de alerta a la población sorda<br />

cuando se acerca un vehículo.<br />

Desde el año 1996, Intel es el primer patrocinador de<br />

este evento científico.<br />

Isamar Cartagena (izquierda) y<br />

Katherine Fernández (derecha),<br />

ganadoras de Intel ISEF 2013.<br />

77


informe espeCiAL<br />

FOTO: 123RF<br />

La batalla contra los alimentos<br />

no saludables<br />

La mitad de los<br />

colombianos tiene<br />

problemas de peso.<br />

El riesgo de que<br />

aumente la cifra es<br />

alto, especialmente<br />

entre los niños.<br />

Por Ángela Constanza Jerez*<br />

Se avecina una polémica:<br />

la regulación del<br />

mercado de los productos<br />

no saludables,<br />

los llamados alimentos<br />

ultraprocesados.<br />

La razón es muy sencilla.<br />

Está comprobado que en<br />

países de ingreso bajo y medio,<br />

como Colombia, se está<br />

disparando su consumo, con<br />

las consecuencias que conlleva:<br />

población con sobrepeso u<br />

obesidad y, por consiguiente,<br />

más propensa a sufrir enfermedades<br />

como hipertensión,<br />

diabetes y problemas cardiovasculares,<br />

lo que significa millones<br />

de pesos en costos para<br />

el sistema de salud.<br />

Para los investigadores del<br />

tema, la industria que produce<br />

estos alimentos es la responsable<br />

de la situación. “Hay que<br />

cambiar el paradigma de culpar<br />

a las personas porque no<br />

comen bien, pues no estamos<br />

facilitando los contextos para<br />

adoptar patrones de hábitos<br />

saludables. Por ejemplo, cierto<br />

sector de la industria utiliza a<br />

los niños en sus estrategias de<br />

marketing, con incentivos que<br />

los seducen para que consuman<br />

en forma compulsiva”, explica el<br />

médico Luis Fernando Gómez,<br />

magíster en Salud Pública.<br />

Gómez ha presentado dos<br />

derechos de petición al Invima<br />

para que le explique por qué no<br />

78


informe espeCiAL<br />

ha creado la sala especializada<br />

que regule, vigile y controle<br />

la publicidad de los alimentos y<br />

bebidas, con el fin de proteger la<br />

salud de los usuarios, especialmente<br />

de los niños y adolescentes,<br />

como señala el artículo 12 de<br />

la Ley 1355 de 2009, que declaró<br />

la obesidad como una enfermedad<br />

crónica de salud pública.<br />

Los índices de sobrepeso y<br />

obesidad preocupan sobre todo en<br />

la población entre los 5 y 17 años.<br />

La prevalencia de sobrepeso es de<br />

17,2 por ciento, según la Encuesta<br />

Nacional de la Situación Nutricional<br />

2010. “Las actividades son especialmente<br />

agresivas en América<br />

Latina e involucran con frecuencia<br />

mensajes de la supuesta responsabilidad<br />

social empresarial. Por<br />

ejemplo, en pequeñas ciudades<br />

brasileras en condición de pobreza<br />

McDonald’s realiza eventos recreativos<br />

en las escuelas utilizando su<br />

México tiene el<br />

mayor porcentaje<br />

de población con<br />

obesidad del mundo.<br />

personaje de Roland McDonald<br />

para brindar una imagen de compromiso<br />

social, pero lo que hará es<br />

influenciar el patrón de consumo”,<br />

señala un grupo de investigadores<br />

colombianos en una plataforma<br />

especializada en temas de salud.<br />

A eso se suma que en los<br />

programas de la franja infantil<br />

los productos hipercalóricos, no<br />

sanos ocupan el mayor número de<br />

comerciales. En México, que con<br />

32,8 por ciento tiene el mayor porcentaje<br />

de la población del mundo<br />

con obesidad, la comida chatarra<br />

ocupa 94 por ciento de los anuncios<br />

televisivos en prime time.<br />

En Colombia se han realizado<br />

estudios piloto para determinar<br />

la cantidad de mensajes de<br />

este tipo, y se ha evidenciado un<br />

alto porcentaje. La Universidad<br />

de Antioquia está elaborando una<br />

investigación más robusta.<br />

Cifras<br />

Un problema<br />

gordo<br />

de cada<br />

seis niños y<br />

adolescentes<br />

presenta<br />

sobrepeso<br />

1u obesidad.<br />

Los niños y adolescentes<br />

con problemas de peso<br />

están en su mayoría en:<br />

sAn Andrés<br />

31,1%<br />

GuAviAre<br />

22,4%<br />

CAuCA<br />

21,7%<br />

La prevalencia de<br />

sobrepeso de adultos<br />

(entre 18 y 64 años) es de<br />

51,2%<br />

y la de obesidad es de<br />

16,5%<br />

Las cifras de exceso de<br />

peso aumentaron en los<br />

últimos cinco años en 5,3<br />

puntos porcentuales (2005:<br />

45,9% y 2010: 51,2%).<br />

Fuente: Encuesta Nacional<br />

de la Situación Nutricional en<br />

Colombia (Ensin 2010).<br />

Tan perjudicial como<br />

el alcohol y el cigarrillo<br />

En 2011 la ONU pidió acciones<br />

multisectoriales para controlar<br />

las empresas transnacionales<br />

de alimentos ultraprocesados<br />

porque “son los principales<br />

impulsores de la epidemia<br />

mundial de enfermedades no<br />

transmisibles”, como el sobrepeso<br />

y la obesidad.<br />

Por ello, junto con la Organización<br />

Mundial de la Salud,<br />

está solicitando que estas empresas<br />

tengan el mismo trato<br />

que las tabacaleras y los productores<br />

de bebidas alcohólicas. En<br />

Colombia, el ministro de Salud<br />

ya anunció que está pensando<br />

adoptar un Estatuto Tributario<br />

Territorial para generar un impuesto<br />

a las bebidas azucaradas.<br />

“Investigaciones en Canadá<br />

y Reino Unido han mostrado que<br />

en esos países más de 50 por ciento<br />

de los productos de la canasta<br />

familiar son ultraprocesados. En<br />

Colombia, por su parte, la cifra<br />

es cercana a 20 por ciento. Esto<br />

indica que aquí y en otros países<br />

latinoamericanos todavía existe la<br />

cultura de cocinar, que no se debe<br />

perder porque es más saludable<br />

que los productos listos para consumir,<br />

que son poco balanceados”,<br />

explica Diana Parra, Ph.D. de la<br />

Universidad de Washington.<br />

80


infomación institucional<br />

semana sostenible<br />

Construye Bienestar<br />

Dos programas de Cemex brindan a las comunidades de escasos<br />

recursos de Colombia herramientas para un mejor futuro. Uno<br />

es Construrama, que ayuda a transformar pequeñas ferreterías<br />

en negocios más competitivos e innovadores, y entran a formar<br />

parte de la primera gran cadena de almacenes de materiales para<br />

la construcción del país. Gracias a la capacitación de los ferreteros<br />

y al rediseño de sus espacios, algunas se han vuelto oficinas<br />

del segundo: Patrimonio Hoy, que ofrece servicios que<br />

facilitan la construcción o mejora de vivienda para las familias,<br />

mejorando su calidad de vida y generando autonomía.<br />

Tiendas Construrama<br />

Patrimonio Hoy<br />

102 municipios<br />

en 24 departamentos.<br />

122 tiendas<br />

abiertas al público y<br />

85 en transformación.<br />

15 millones<br />

de dólares invertidos desde<br />

su fundación en 2012.<br />

Cerca de<br />

45.000<br />

metros<br />

cuadrados<br />

construidos.<br />

Cuenta con<br />

9 oficinas<br />

para atender a<br />

16 municipios.<br />

15.000 familias<br />

beneficiadas de<br />

estratos 1, 2 y 3.<br />

10’797.000<br />

millones de pesos<br />

en ventas desde<br />

su inicio en<br />

2005.<br />

¿Qué gana el ferretero?<br />

¿Qué obtienen las familias?<br />

Ferretero<br />

Ingeniero<br />

Arquitecto<br />

Asesorías constructivas y de diseño<br />

INFOGRAFÍA: ekon7studio<br />

Profesionalización<br />

(en alianza<br />

con SENA).<br />

Optimiza relación<br />

con los clientes.<br />

Renueva<br />

su local.<br />

Organización.<br />

Control<br />

sobre sus<br />

procesos.<br />

Ventas<br />

rentables.<br />

Microcréditos (sin<br />

intereses. Precios fijos<br />

durante el proyecto).<br />

Compra anticipada<br />

(presta entre 50% y 70%<br />

de los materiales).<br />

Fácil<br />

afiliación.<br />

Línea Nacional Construrama: 01 8000 913 444<br />

Línea Patrimonio Hoy: 01 8000 913 444 opción #4<br />

CEMEX<br />

En Facebook: www.facebook.com/CemexColombia<br />

En Twitter: @CEMEX_Colombia<br />

81


informe espeCiAL<br />

FOTOS: cortesía Benetton<br />

Benetton fue la primera marca que revolucionó la publicidad con temas como el racismo.<br />

Un giro a favor del<br />

consumo responsable<br />

Por Nohra Ramírez Herrera*<br />

Como instrumento<br />

válido para informar<br />

sobre la calidad de<br />

los productos, la<br />

publicidad hoy debe<br />

orientar a las personas<br />

para que consuman<br />

responsablemente.<br />

Dos de las campañas<br />

más premiadas<br />

en la versión<br />

2013 del Festival<br />

de Cannes fueron<br />

Real Beauty Sketches,<br />

de Dove, y Dumb Ways to<br />

die para el Metro de Melbourne.<br />

La primera obtuvo el Titanium,<br />

un premio reservado para las<br />

ideas de mayor impacto en la vida<br />

de los consumidores. La segunda,<br />

de carácter social, obtuvo<br />

el Grand Prix o máximo galardón<br />

de la publicidad mundial. El común<br />

denominador de las dos es<br />

su decidida intención de lograr<br />

transformaciones hacia un mundo<br />

mejor, más sostenible y eso en<br />

publicidad corresponde a que su<br />

público objetivo asocie las marcas<br />

a comportamientos deseables<br />

para la sociedad.<br />

Este mes de noviembre<br />

fue noticia en el Reino Unido la<br />

prohibición de unos comerciales<br />

de varias marcas de cigarrillos<br />

electrónicos, vetados por<br />

la Autoridad de Estándares de<br />

Publicidad (ASA, por su sigla en<br />

82


CONSUMO RESPONSABLE SOStENi<br />

FOTO: cortesía Dove<br />

La versión 2013<br />

del Festival de<br />

Cannes otorgó<br />

un Titanium<br />

a la campaña<br />

de Dove<br />

Real Beauty<br />

Sketches,<br />

un premio<br />

reservado a las<br />

ideas de mayor<br />

impacto en<br />

la vida de los<br />

consumidores.<br />

Para el Metro<br />

de Melboume<br />

se creó la<br />

campaña<br />

Dumb Ways to<br />

Die, premiada<br />

con el Grand<br />

Prix o máximo<br />

galardón de<br />

la publicidad<br />

mundial.<br />

FOTO: cortesía Dumb<br />

inglés), ya que el mensaje no era<br />

transparente. Según el dictamen<br />

el producto que se estaba promocionando<br />

no era claro y la confusión<br />

podría remitir a publicidad<br />

genérica de tabaco, que es ilegal<br />

en ese país desde hace 50 años.<br />

Este hecho pone de relieve que la<br />

autorregulación en la publicidad<br />

podría ser el mecanismo adecuado<br />

para definir qué conviene y<br />

qué no a la sociedad.<br />

Alguna vez leí que en la India<br />

se prohibió la pauta publicitaria<br />

de Maggi, marca de sopas<br />

de Nestlé, pues exponer suculentos<br />

bodegones en televisión era<br />

una ofensa a la ciudadanía, en<br />

un país que en ese momento registraba<br />

los mayores índices de<br />

pobreza. Posteriormente, en una<br />

entrevista a Gilles Lipovetsky,<br />

publicada en las Lecturas Dominicales<br />

de El Tiempo, hace años,<br />

el autor francés afirmaba que<br />

se daba mucha importancia a la<br />

publicidad, cuando esta, en realidad,<br />

pone al individuo a elegir<br />

entre opciones intrascendentes<br />

de la vida, como puede ser entre<br />

tomar Coca-Cola o Pepsi-Cola.<br />

De los muchos estudios que no<br />

pretenden ser científicos –porque<br />

la publicidad no lo es–, pero<br />

que escudriñan más al consumidor<br />

en cualquier cultura del<br />

planeta, se afirma que estamos<br />

frente a un nuevo consumidor:<br />

un individuo con conciencia social<br />

para quien la vinculación<br />

con las marcas significa más<br />

que comprar bienes o servicios;<br />

significa ser parte activa de una<br />

sociedad en la que se elaboren<br />

los productos sin utilizar mano<br />

de obra infantil, con condiciones<br />

de contratación justas, salarios<br />

dignos y sin que peligre la<br />

seguridad, el puesto de trabajo<br />

o el medioambiente. En esto se<br />

centra el debate actual sobre la<br />

sostenibilidad de las marcas, y<br />

su reputación como actores en<br />

la cotidianidad de las personas.<br />

Sostenibilidad<br />

de las marcas<br />

Hoy es mayor el nivel de consciencia<br />

del consumidor respecto<br />

a temas como el uso de las<br />

tecnologías limpias, el calentamiento<br />

global y, por supuesto,<br />

la publicidad debe responder a<br />

ese nivel. La sostenibilidad de<br />

las marcas tiene que ver con el<br />

doble juego de la comunicación<br />

entre fabricantes y clientes ya<br />

que promover un consumo responsable<br />

no es tarea exclusiva<br />

de ninguna de las dos partes; se<br />

trata de introducir valores agregados<br />

desde la fabricación, pues<br />

así se facilitará comunicar las<br />

bondades del producto. En nuestro<br />

país, el ejemplo más reciente<br />

de la incorporación de beneficios<br />

sociales desde el desarrollo de<br />

producto es el agua Oasis, cuyo<br />

lanzamiento fue un caso de éxito<br />

premiado por los Effie Awards<br />

Colombia, en 2010. Sin embargo,<br />

en 2013, algunos de los recientes<br />

hallazgos del Meaningful<br />

Brands predicen que a la gente<br />

realmente no le importaría si 73<br />

por ciento de las marcas desapareciera<br />

mañana, mientras que<br />

solamente 20 por ciento de las<br />

marcas globales tienen un significado<br />

positivo en el bienestar de<br />

la gente. Este estudio, adelantado<br />

por Havas Media en el mundo,<br />

83


informe espeCiAL<br />

mide los beneficios de las marcas<br />

de acuerdo con el bienestar que<br />

proporcionan al individuo. Es un<br />

estudio de más de 700 marcas,<br />

según la opinión de 134.000 consumidores<br />

en 23 países. No es<br />

un panorama halagador desde<br />

la perspectiva del negocio, pero<br />

alerta sobre su sostenibilidad:<br />

¿cuál es la oferta de valor de las<br />

marcas a sus consumidores,<br />

aquella que les otorgue bienestar<br />

individual y colectivo y vele<br />

por la preservación del planeta?<br />

El consumidor racional del siglo<br />

XXI es un ciudadano que valora<br />

cómo la marca transforma positivamente<br />

la sociedad o por lo<br />

menos asume un compromiso<br />

real como parte de la solución de<br />

los problemas sociales y económicos<br />

que aquejan a los países.<br />

Se trata también de hacer<br />

eco a iniciativas ecológicas y sociales<br />

que lleven a la reflexión. Es<br />

oportuno recordar que el gran<br />

golpe de opinión de la publicidad<br />

en la década de los ochenta fue<br />

protagonizado por la primera<br />

marca global: Benetton, que no<br />

solo impuso una forma de vestir<br />

más colorida que la de los años<br />

precedentes, sino que catapultó<br />

a la esfera pública temas como la<br />

diversidad, el multiculturalismo<br />

y, posteriormente, posiciones aún<br />

La sostenibilidad<br />

de las marcas<br />

tiene que ver con<br />

el doble juego de<br />

la comunicación<br />

entre fabricantes y<br />

consumidores.<br />

más controvertidas en la sociedad,<br />

como la pena de muerte, el<br />

sida, el trabajo y la prostitución<br />

infantil, entre otros. Y mientras<br />

Benetton continuó animando la<br />

discusión pública sobre los temas<br />

hasta entonces confinados a la<br />

esfera privada, al finalizar la década<br />

de los noventa, la periodista<br />

canadiense Naomi Klein, en su li-<br />

bro No Logo, acusa a Nike y otras<br />

marcas deportivas de consumo<br />

mundial de explotación indebida<br />

y de esclavitud con los trabajadores<br />

asiáticos. La crítica de la autora<br />

hace referencia, sin embargo,<br />

más a los modos de producir que<br />

a la comunicación que las marcas<br />

presentan a sus consumidores.<br />

Lo importante es que la crítica<br />

social a la publicidad sufre<br />

de generalizaciones que opacan<br />

en ocasiones la fuerza de su comunicación.<br />

Recordemos aquí<br />

el célebre comercial de Arroz<br />

Diana que obtuvo el Gran Premio<br />

Nova, cuya escena memorable<br />

retrataba la bofetada que el<br />

hombre le propinaba a la mujer.<br />

Esta micronarrativa popular<br />

mediática, cuya intención era<br />

vender un producto o aumentar<br />

la recordación de la marca, pudo<br />

tener su cuota de contribución<br />

para abordar el tema del maltrato<br />

a la mujer en nuestro país.<br />

Oliverio Toscani, el famoso<br />

fotógrafo de Benetton, dijo en<br />

una entrevista cuando le preguntaron<br />

sobre la crudeza de la<br />

realidad presentada en una de<br />

las campañas de la firma italiana:<br />

“La publicidad es la más rica<br />

y poderosa forma de comunicación<br />

en el mundo. Necesitamos<br />

tener imágenes que le hagan a la<br />

gente pensar y discutir”.<br />

Consumo responsable<br />

A pesar de la crisis europea, en<br />

muchos países crecen las cifras<br />

de consumo de productos amigables<br />

con el ambiente, las inversiones<br />

en compra de artículos<br />

de comercio justo, así como la<br />

elaboración de productos no depredadores<br />

de la naturaleza.Y es<br />

aquí precisamente en donde la<br />

publicidad entra a jugar un papel<br />

de suma importancia, puesto que<br />

proporciona la información necesaria<br />

para que ese consumidor,<br />

como último eslabón de la cadena,<br />

asuma la responsabilidad de<br />

un consumo acorde con su vida<br />

y con las exigencias del planeta.<br />

Si se acusa a la publicidad de<br />

favorecer el consumismo, porque<br />

En el libro No<br />

Logo, marcas<br />

deportivas<br />

mundialmente<br />

reconocidas<br />

son acusadas<br />

de explotación<br />

indebida y de<br />

esclavitud.<br />

* Directora<br />

Editorial<br />

Revista P&M<br />

presenciamos el devenir de generaciones<br />

embarcadas en comprar,<br />

usar y desechar por el bombardeo<br />

publicitario, hay que admitir que<br />

los tiempos de la publicidad vertical,<br />

aquella que pretendía dar<br />

significados únicos a las marcas<br />

se han ido. Como lo anotó Antonio<br />

Caro “la publicidad que construía<br />

marcas, que las diferenciaba en<br />

términos imaginarios de la competencia,<br />

choca de manera creciente<br />

con un neoconsumidor<br />

advertido que es capaz de distinguir<br />

la verdad del producto”.<br />

Caro, uno de los exponentes de<br />

renombre de la publicidad española,<br />

investigador y profesor de<br />

la Universidad Complutense de<br />

Madrid, afirmó que “la publicidad<br />

será capaz de reorientarse<br />

en aquella nueva dirección en la<br />

medida que sea capaz de conectar<br />

con este nuevo prosumidor y de<br />

establecer un diálogo con él”. Y<br />

concluyó que en la actualidad hay<br />

que darle un giro a la publicidad<br />

a favor del consumo responsable<br />

y este supone una nueva sensibilidad<br />

de los publicistas a lo que está<br />

sucediendo con su entorno.<br />

84


El índice de sostenibilidad<br />

de la bolsa de NY: un nuevo<br />

tema en la agenda<br />

de los empresarios<br />

Hace 14 años, se creó un indicador<br />

en la Gran Manzana que da cuenta a<br />

los inversionistas sobre las empresas<br />

que son sostenibles, conocido como<br />

el DJSI. ¿Qué aporta a las compañías<br />

el índice de sostenibilidad más<br />

reconocido en el mundo? ¿Cómo<br />

obtenerlo y quiénes están en él?<br />

Empresarios con trayectoria en este<br />

campo responden a estas preguntas.<br />

Cada año, las empresas<br />

interesadas<br />

en la sostenibilidad<br />

esperan con<br />

ansias la noticia.<br />

El Índice de Sostenibilidad<br />

Dow Jones (DJSI por su<br />

sigla en inglés) anuncia quiénes<br />

se mantienen en él, quiénes salen<br />

y quiénes ingresan.<br />

Desde 1999, la Bolsa de Valores<br />

de Nueva York cuenta con<br />

este indicador para que analistas,<br />

inversionistas institucionales,<br />

entidades especializadas<br />

por sectores e inversionistas de<br />

portafolio tengan más elementos<br />

“Con el ingreso al Dow Jones<br />

Sustainability Index North America<br />

reiteramos que nuestro trabajo<br />

es un eslabón indispensable para<br />

alcanzar un desarrollo sostenible<br />

en el país”, José Francisco Arata,<br />

presidente de Pacific Rubiales.<br />

86


semana sostenible<br />

FOTO: Archivo Semana - Alejandro Acosta<br />

Estar en el índice da a las<br />

empresas un importante<br />

reconocimiento público,<br />

porque las destaca como el<br />

estándar número uno en la<br />

industria cuando se trata de la<br />

sostenibilidad corporativa.<br />

a la hora de tomar decisiones de<br />

inversión. Cada vez es más importante<br />

para ellos saber cómo<br />

gestionan los riesgos las empresas<br />

en las que es posible invertir<br />

y qué hacen para transformar<br />

los entornos en los que están;<br />

eso les da un valor a largo plazo,<br />

las hace sostenibles.<br />

Hoy, el DJSI es uno de los<br />

índices más destacados en este<br />

campo. Reconoce a las empresas<br />

con mejores estándares de sostenibilidad<br />

a nivel global, que cumplen<br />

entre 80 y 120 requisitos, de<br />

los cuales 57 por ciento son específicos<br />

de cada industria.<br />

La firma sueca RobecoSAM<br />

es la encargada de hacer la evaluación<br />

anual con un cuestionario<br />

conocido como Evaluación<br />

de la Sostenibilidad Corporativa<br />

(CSA), el cual incluye preguntas<br />

relacionadas con las<br />

acciones sociales, ambientales<br />

y económicas de las empresas,<br />

así como del funcionamiento de<br />

su gobierno corporativo.<br />

“Un componente integral<br />

de CSA es el seguimiento permanente<br />

de la información que<br />

aparece en los medios de comunicación<br />

sobre las empresas, los<br />

comentarios de sus grupos de<br />

interés y la información pública<br />

disponible de las organizaciones<br />

de consumidores, organizaciones<br />

no gubernamentales,<br />

gobiernos u organizaciones internacionales.<br />

Esto con el fin de<br />

identificar la participación y la<br />

respuesta frente a situaciones<br />

de crisis ambientales, económicas<br />

y sociales, que pueden<br />

tener en las empresas un efecto<br />

perjudicial sobre su reputación<br />

y su negocio principal”, explica<br />

Guido Giese, director de índices<br />

de RobecoSAM.<br />

Este es un riguroso proceso<br />

que tan solo un selecto grupo de<br />

empresas del mundo puede pasar.<br />

En 2013, 2.500 compañías,<br />

de 59 sectores organizados en<br />

24 grupos industriales, fueron<br />

invitadas a participar en él, pero<br />

solo 333 lograron superar el<br />

examen e ingresar al DJSI. Una<br />

de ellas fue Pacific Rubiales,<br />

la principal compañía independiente<br />

de Petróleo y Gas en<br />

Colombia, que se evaluó frente<br />

a los indicadores del DJSI por<br />

primera vez y fue seleccionada.<br />

“Con el ingreso al Dow Jones<br />

Sustainability Index North<br />

America reiteramos que nuestro<br />

trabajo es un eslabón indispensable<br />

para alcanzar un<br />

desarrollo sostenible en el país.<br />

En Pacific no vemos la sostenibilidad<br />

exclusivamente como<br />

un compromiso altruista que<br />

viene de nuestra buena convicción,<br />

sino como un paso inevitable<br />

hacia la competitividad y<br />

la vigencia de nuestro negocio”,<br />

señala José Francisco Arata,<br />

presidente de la compañía.<br />

Para Federico Restrepo, VP<br />

de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad<br />

de la petrolera, los<br />

índices van más allá de un elemento<br />

de construcción de reputación<br />

y algunos de ellos, como<br />

el Dow Jones, pueden ayudar a<br />

darle tracción a nuevos temas<br />

en el país, a renovar conversaciones<br />

en torno al progreso y<br />

a cuestionar las formas tradicionales<br />

de generar desarrollo.<br />

Se gana en liderazgo<br />

El impacto social en las comunidades,<br />

el compromiso con sus<br />

grupos de interés, su gobierno<br />

corporativo y buenas prácticas<br />

a favor de la biodiversidad fueron<br />

algunas de las áreas en las<br />

que Pacific obtuvo los resultados<br />

más altos para entrar al grupo<br />

de las empresas con mejor desempeño<br />

en sostenibilidad.<br />

Pacific Rubiales Energy, la<br />

primera empresa petrolera privada<br />

de Latinoamérica en términos<br />

de reservas, producción y<br />

generación de valor, comparte el<br />

privilegio de estar en el DJSI con<br />

Chevron Corp, ConocoPhillips y<br />

ExxonMobil Corp, algunas de<br />

las empresas de su sector. “Para<br />

nosotros más que una buena<br />

noticia es un gran reto en aras<br />

de seguir promoviendo la sostenibilidad<br />

en toda nuestra cadena<br />

de valor, y fortaleciendo, día<br />

a día, nuestro compromiso de<br />

contribuir a un entorno sostenible”,<br />

agrega Restrepo.<br />

Como señala Giese, estar en<br />

el índice da a las empresas un<br />

importante reconocimiento público,<br />

porque las destaca como<br />

el estándar número uno en la<br />

industria cuando se trata de la<br />

sostenibilidad corporativa. “Esto<br />

significa que esa compañía es<br />

10 por ciento superior en relación<br />

con sus pares en materia de<br />

sostenibilidad”, dice.<br />

Además de esta ganancia en<br />

reputación, la CSA proporciona<br />

a las empresas datos esenciales<br />

sobre su desempeño en sostenibilidad.<br />

Les permite compararse<br />

con otras compañías y les ayuda<br />

a ser más conscientes frente a<br />

los temas claves de sostenibilidad<br />

que deben considerar en su<br />

agenda corporativa.<br />

Precisamente para hablar<br />

sobre estos aspectos, expertos<br />

conocedores de la metodología<br />

e impacto del DJSI, así como<br />

representantes de empresas<br />

incluidas en el Índice, participaron<br />

en un encuentro organizado<br />

por Pacific Rubiales<br />

hace unos días. Allí dieron a<br />

conocer cómo la sostenibilidad<br />

es una variable que cuenta al<br />

momento de invertir y cómo el<br />

manejo responsable de la economía,<br />

la sana relación con el<br />

medioambiente y las buenas<br />

prácticas sociales y laborales<br />

tienen un peso real en el valor<br />

de la compañía.<br />

Varios de estos expertos y<br />

representantes dieron a Semana<br />

Sostenible sus argumentos<br />

sobre los beneficios que les ha<br />

traído el DJSI y la importancia<br />

que tiene para sus compañías.<br />

Este artículo fue posible gracias a<br />

87


RobecoSAM,<br />

el que da el sí<br />

Detrás del Índice de Sostenibilidad<br />

Dow Jones,<br />

uno de los más importantes<br />

y prestigiosos del<br />

mercado de capitales del mundo,<br />

se encuentra la firma sueca RobecoSAM.<br />

Desde 1999 esta compañía,<br />

especializada en inversiones<br />

enfocadas en sostenibilidad, selecciona<br />

a las empresas que cotizan<br />

en la bolsa de Nueva York con<br />

mayor valor a largo plazo para los<br />

accionistas; a partir de la generación<br />

de oportunidades y gestión<br />

de los riesgos derivados del desarrollo<br />

de sus iniciativas económicas,<br />

sociales, ambientales y de<br />

gobierno corporativo. Todas las<br />

empresas invitadas aspiran a un<br />

puntaje cercano al 100, el máximo<br />

otorgado. Guido Giese, director de<br />

índices de RobecoSAM, explica el<br />

proceso para obtenerlo.<br />

Semana Sostenible: ¿Cómo se<br />

realiza el DJSI?<br />

Guido Giese: A través de<br />

la Evaluación de Sostenibilidad<br />

Corporativa (CSA, por su sigla<br />

en inglés), un riguroso análisis<br />

y medición de desempeño de las<br />

compañías mediante indicadores<br />

económicos, sociales, ambientales<br />

y de gobierno corporativo<br />

que determinen la creación de<br />

valor a largo plazo. Además, hacemos<br />

un continuo monitoreo a<br />

medios, información pública y<br />

percepciones de los grupos de<br />

interés de las compañías para<br />

conocer su relación con el entorno<br />

y su capacidad de respuesta<br />

a crisis que puedan afectar su<br />

reputación y el cumplimiento de<br />

sus objetivos estratégicos.<br />

Semana Sostenible: ¿Por qué<br />

pensaron en crearlo?<br />

G.G.: La escasez de recursos,<br />

el cambio climático o el<br />

envejecimiento de la población<br />

remodelan continuamente el<br />

entorno competitivo de una<br />

empresa. Siempre hemos creído<br />

que el análisis financiero es<br />

incompleto si no se tienen en<br />

cuenta este tipo de factores.<br />

Estamos convencidos de que<br />

las compañías que están mejor<br />

equipadas para reconocer y<br />

responder a este tipo de retos y<br />

superarlos a través de la innovación,<br />

la calidad y la productividad<br />

aumentan su capacidad<br />

de generar valor para los accionistas<br />

a largo plazo.<br />

Semana Sostenible: ¿Todos<br />

los años se pregunta lo mismo<br />

a las empresas?<br />

G.G.: El CSA es un cuestionario<br />

que plantea aproximadamente<br />

entre 80 y 120<br />

preguntas (dependiendo de la<br />

industria). La metodología se<br />

revisa anualmente y cambiamos<br />

cerca de 20 por ciento de<br />

las preguntas para reflejar los<br />

desarrollos más recientes en<br />

materia de sostenibilidad.<br />

Guido<br />

Giese,<br />

director de<br />

Índices de<br />

RobecoSAM,<br />

compañía<br />

que en<br />

conjunto<br />

con S&P<br />

Dow Jones<br />

Índices<br />

elabora el<br />

DJSI.<br />

Semana Sostenible: ¿En qué<br />

aspecto han encontrado dificultades<br />

para realizar este<br />

procedimiento?<br />

G.G.: Un obstáculo ha sido<br />

contactar a la persona indicada<br />

dentro de cada organización.<br />

Si no hemos tenido contacto<br />

previo con la empresa, optamos<br />

por buscar al Jefe de Relaciones<br />

con Inversores, pero no siempre<br />

es el contacto correcto para<br />

obtener información actualizada.<br />

Es por eso que también<br />

se publica la lista de empresas<br />

invitadas, para que sean quienes<br />

se pongan en contacto con<br />

nosotros y nos digan quién es la<br />

cabeza responsable.<br />

Semana Sostenible: ¿En qué<br />

sectores han encontrado dificultad<br />

para que una empresa<br />

ingrese?<br />

G.G.: Hay sectores en los<br />

que existe un mayor nivel de<br />

competencia y les es complicado<br />

ingresar a ese 10 por<br />

ciento de empresas superiores<br />

en sostenibilidad. Es el caso<br />

particular de los fabricantes<br />

de automóviles, productos<br />

farmacéuticos, líneas aéreas,<br />

telecomunicaciones, papel y<br />

productos forestales.<br />

FOTO: cortesía RobecoSAM<br />

88


semana sostenible<br />

“A veces las empresas tienen<br />

las prácticas pero no saben<br />

cómo ponerlas en valor”<br />

KPMG asesora a las empresas<br />

para que mitiguen<br />

sus riesgos y<br />

aprovechen las oportunidades.<br />

En ese sentido las<br />

ayuda a prepararse para presentarse<br />

en el Índice de Sostenibilidad<br />

Dow Jones (DJSI). Por<br />

su trabajo, esta organización<br />

tiene un amplio conocimiento<br />

sobre qué están haciendo las<br />

corporaciones colombianas en<br />

este campo y qué les falta. “El<br />

tema no es girar solo en tor-<br />

Con 18<br />

años de<br />

experiencia,<br />

María Teresa<br />

Agudelo es<br />

la directora<br />

de Cambio<br />

Climático<br />

y Sostenibilidad<br />

de<br />

KPMG.<br />

no al índice, sino en trabajar<br />

por sí mismas en las prácticas<br />

de gestión; esto porque deben<br />

tener muy claros los riesgos”,<br />

asegura María Teresa Agudelo,<br />

directora del área de sostenibilidad<br />

de KPMG.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué acciones<br />

toman las empresas que<br />

se destacan en sostenibilidad?<br />

María Teresa Agudelo:<br />

Estas compañías están enfocadas<br />

en entender y responder a<br />

los desafíos, riesgos y oportunidades<br />

propias del sector y de las<br />

regiones en las que operan. El Índice<br />

de Sostenibilidad Dow Jones<br />

hace una valoración alrededor<br />

de tres dimensiones: ambiental,<br />

social y económica, y evalúa<br />

cuáles son las acciones que están<br />

tomando las organizaciones en<br />

cada una de ellas.<br />

Semana Sostenible: ¿En qué<br />

acciones se sigue fallando?<br />

M.T.A.: Creo que todavía no<br />

se ha entendido la connotación<br />

en lo relacionado con el cambio<br />

climático. No están claros los<br />

riesgos que estamos asumiendo.<br />

El 27 de septiembre salió<br />

un informe de la IPCC (Panel<br />

Intergubernamental de Cambio<br />

Climático), donde se cuestionan<br />

muy seriamente las acciones, los<br />

impactos, los riesgos y hasta las<br />

investigaciones sobre el tema.<br />

Afirma que deberíamos estar<br />

dando pasos mucho más fuertes.<br />

Semana Sostenible: ¿Para qué<br />

le sirve el DJSI a una empresa?<br />

M.T.A.: Para mejorar la reputación,<br />

porque se entiende<br />

que la empresa está gestionando<br />

unos riesgos y eso es bien<br />

valorado por el mercado de<br />

capitales, más a nivel internacional<br />

que nacional. Además,<br />

eleva su valor en el mercado.<br />

RobecoSAM tiene estudios<br />

donde, precisamente, analiza<br />

el comportamiento del valor<br />

del mercado y la rentabilidad<br />

sobre el patrimonio de las empresas<br />

y sí hay una correlación.<br />

Semana Sostenible: Aquellas<br />

compañías no elegibles<br />

para el índice DJSI pueden<br />

obtener la calificación gracias<br />

a los servicios de KPMG<br />

y RobecoSAM. ¿Cuál es la finalidad<br />

de esto? ¿No podría<br />

verse como un negocio?<br />

M.T.A.: Estas empresas<br />

quieren comparar sus prácticas<br />

frente a estándares internacionales<br />

para conocer la brecha<br />

que tienen. Encuentran un gran<br />

valor a través de la evaluación<br />

que hace RobecoSAM. KPMG no<br />

toma esto como un negocio sino<br />

que ofrece un servicio para que<br />

las compañías obtengan una<br />

valoración cuantitativa que les<br />

aclara el panorama.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué tipo<br />

de acciones realiza KPMG<br />

para que las empresas puedan<br />

tener la calificación?<br />

M.T.A.: Muchas veces las<br />

empresas tienen las prácticas,<br />

pero no saben cómo ponerlas<br />

en valor o viceversa. Ayudamos<br />

a la organización a entender si<br />

las acciones que están aplicando<br />

son las apropiadas y cómo<br />

las deben explicar a los analistas.<br />

Concienciamos a las empresas<br />

para que entiendan por<br />

qué deben tomarlas. Que no<br />

se trata tan solo de responder<br />

un cuestionario o de entrar a<br />

un índice, sino de comprender<br />

cómo se ven los temas a nivel<br />

internacional.<br />

FOTO: Archivo Semana - Daniel Reina<br />

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89


Ser ético<br />

sí paga<br />

Katarina<br />

Steinwachs,<br />

gerente regional<br />

de Comunicación<br />

Corporativa<br />

y Sostenibilidad<br />

para<br />

Suramérica<br />

de la multinacional<br />

alemana<br />

Siemens.<br />

FOTO: Juan Carlos Sierra<br />

Hace siete años, Siemens<br />

estuvo en la cuerda floja.<br />

Los escándalos de<br />

corrupción marcaron a<br />

esta empresa alemana, con presencia<br />

en 190 países. Gracias a<br />

una restructuración en principios<br />

éticos y transparencia en los<br />

negocios, logró dar un giro a la<br />

situación. Katarina Steinwachs,<br />

Gerente Regional de Comunicación<br />

Corporativa y Sostenibilidad<br />

de la empresa en Colombia, sostiene<br />

que tras superar ese hecho,<br />

la organización se levantó fortalecida<br />

y hoy es ejemplo mundial del<br />

cumplimiento de altos estándares<br />

legales y éticos. Eso le generó<br />

valor y le ha permitido fortalecer<br />

la confianza de inversionistas y<br />

clientes. Su desempeño actual es<br />

tan sobresaliente que, por cuarta<br />

vez consecutiva, es la compañía<br />

de bienes de capital más sostenible<br />

en el Índice de Sostenibilidad<br />

Dow Jones (DJSI).<br />

Semana Sostenible: ¿Cuál fue<br />

el factor más importante para<br />

llegar a ser el número uno<br />

en sostenibilidad?<br />

Katarina Steinwachs: Hacer<br />

de la sostenibilidad parte<br />

de la estrategia corporativa y<br />

entender que esta garantiza la<br />

supervivencia de la empresa.<br />

Para ello nos hemos basado en<br />

varios pilares, pero el más importante<br />

es la ética en los negocios.<br />

En 2006 pasamos por<br />

una situación de corrupción<br />

que nos puso al borde de<br />

la desaparición, pero hay<br />

que aprender de los errores.<br />

Cambiamos el equipo<br />

que lideraba la compañía,<br />

implementamos un nuevo<br />

sistema de cumplimiento<br />

que regula el comportamiento<br />

ético y legal de cada empleado<br />

y comenzamos a trabajar con el<br />

Pacto Global Transparencia Internacional,<br />

así como con nuestros<br />

proveedores y accionistas<br />

para asegurar la igualdad en<br />

la obediencia de las normas.<br />

Durante los últimos 3 años,<br />

Siemens ha obtenido el puntaje<br />

máximo de 100 en la categoría<br />

de Compliance o Cumplimiento.<br />

Semana Sostenible: ¿Para qué<br />

les ha servido estar en el índice?<br />

K.S.: Ha sido clave en Colombia<br />

donde la corrupción en<br />

el sector privado y público no es<br />

desconocida. Fortaleció nuestra<br />

posición como proveedor preferido,<br />

lo que hace de nuestro negocio<br />

sostenible en el tiempo; nos<br />

valida frente a los inversionistas.<br />

Además, los clientes no quieren<br />

ser corresponsables de malas<br />

prácticas, entonces esperan buenos<br />

resultados de nosotros.<br />

Semana Sostenible: En lo ambiental,<br />

¿qué aportó a sus puntajes<br />

en el DJSI?<br />

K.S.: Ser sostenibles es un<br />

fuerte argumento de venta. En<br />

2011, más de 40 por ciento de<br />

las ventas de Siemens fueron<br />

del portafolio medioambiental.<br />

Nuestras fábricas son ecoeficientes;<br />

la de Colombia, por ejemplo,<br />

fue construida bajo el estándar<br />

LEED (Leadership in Energy and<br />

Environmental Design) que mide<br />

la sostenibilidad de una construcción.<br />

Somos pioneros en el continente<br />

en la producción de motores<br />

de alta eficiencia, con mayor vida<br />

útil y menor consumo km/h. Con<br />

esto logramos fortalecer nuestro<br />

portafolio verde y potenciamos la<br />

productividad y reducción de costos<br />

de las industrias.<br />

Semana Sostenible: ¿Y en la<br />

parte social?<br />

K.S.: Nos fue bien en la<br />

atracción de talentos y en los<br />

programas de responsabilidad<br />

social. Tenemos 88 puntos<br />

de 100 y el promedio es de 42.<br />

Procuramos ser atractivos para<br />

gente talentosa, especialmente<br />

en la nueva generación que busca<br />

trabajar en una compañía<br />

que dé oportunidades de desarrollo<br />

y que se comporte como<br />

un buen ciudadano. El buen gobierno<br />

y las actividades de nuestra<br />

fundación en educación e<br />

inversión social también suman.<br />

90


semana sostenible<br />

El DJSI,<br />

importante a la<br />

hora de invertir<br />

FOTO: cortesía Bolsa de Valores de Colombia<br />

El Índice de Sostenibilidad<br />

Dow Jones (DJSI) atrae la<br />

inversión hacia las empresas<br />

que conocen sus<br />

riesgos y trabajan en ellos; así lo<br />

afirma Javier Díaz Fajardo, vicepresidente<br />

comercial de la Bolsa<br />

de Valores de Colombia (BVC).<br />

Semana Sostenible: La Bolsa de<br />

Valores de Colombia, que tiene<br />

a cargo la administración de<br />

los mercados de capitales en el<br />

país, ¿puede contarnos si los<br />

inversionistas se interesan más<br />

en las empresas nacionales que<br />

cotizan en bolsa y están en el<br />

Índice de Sostenibilidad Dow<br />

Jones (DJSI)?<br />

Javier Díaz Fajardo: Colombia<br />

es privilegiado, pues cuenta<br />

con siete emisores de su mercado<br />

inscritos en los índices de sostenibilidad<br />

de Dow Jones. Son empresas<br />

como Ecopetrol, Grupo<br />

Sura, Bancolombia, Pacific Rubiales,<br />

Cementos Argos, Nutresa<br />

y Grupo Argos. Según Dow Jones<br />

y RobecoSAM, estas se destacan<br />

entre unas 2.500 compañías que<br />

buscan entrar en el indicador, lo<br />

que le ha valido al mercado ser el<br />

único de Latinoamérica –además<br />

de Brasil– en tener participación<br />

en el DJSI. El índice genera confianza<br />

entre los inversionistas<br />

porque hace fácil reconocer a las<br />

empresas comprometidas en las<br />

buenas prácticas.<br />

Semana Sostenible: ¿Este índice<br />

tiene más relevancia en unos<br />

sectores que en otros? ¿Cuáles?<br />

J.D.F.: Hay diferencias marcadas<br />

entre un índice y otro. Esto<br />

está supeditado a si el indicador<br />

es de Norteamérica, Europa o el<br />

resto del mundo. Por ejemplo, en<br />

el caso del DJSI North America,<br />

que sigue el comportamiento de<br />

las empresas de Canadá y Estados<br />

Unidos –en este se encuentra<br />

la petrolera Pacific Rubiales– el<br />

sector más representativo es el de<br />

Petróleo y Gas, con 16,98 por ciento.<br />

Para el caso del DJSI World, en<br />

el que están las demás empresas<br />

colombianas, el más relevante es<br />

el financiero, con 21,92 por ciento;<br />

seguido del de bienes de consumo,<br />

con 13,59 por ciento y del de<br />

industriales, con 12,69 por ciento.<br />

Javier Díaz<br />

Fajardo es el<br />

vicepresidente<br />

Comercial<br />

y de Comisiones<br />

de la Bolsa<br />

de Valores<br />

de Colombia,<br />

entidad a la<br />

que se vinculó<br />

en febrero<br />

de este año.<br />

Semana Sostenible: ¿Qué implicaciones<br />

tiene para una<br />

empresa no estar en el DJSI?<br />

J.D.F.: No es que haya alguna<br />

implicación negativa, pero pertenecer<br />

a alguno aporta mucho en<br />

visibilidad a la hora de atraer inversionistas<br />

y buscar mayor liquidez<br />

para los mercados en los que<br />

tienen presencia. El DJSI también<br />

mejora la reputación corporativa<br />

de los emisores, pues con él se<br />

reafirma un compromiso con los<br />

mejores estándares de responsabilidad<br />

social empresarial.<br />

Semana Sostenible: ¿Es suficiente<br />

que las empresas<br />

cuenten con programas de responsabilidad<br />

social o es necesario<br />

aplicar estándares como<br />

los que exige el DJSI?<br />

J.D.F.: Las empresas colombianas<br />

son cada vez más activas<br />

en sus programas de responsabilidad<br />

social, por eso confiamos en<br />

que más compañías nacionales<br />

llegarán a estar incluidas en DJSI.<br />

En ese sentido, la BVC ha buscado<br />

promover la transparencia y la<br />

adopción de buenas prácticas de<br />

gobierno corporativo por lo que,<br />

desde agosto, lanzamos el Reconocimiento<br />

IR, una iniciativa<br />

para destacar a los emisores con<br />

mejores prácticas en atención a<br />

inversionistas y con el cual logramos<br />

vincular a 29 emisores del<br />

mercado colombiano.<br />

Este artículo fue posible gracias a<br />

91


informe espeCiAL<br />

Más que voluntad<br />

Algunas marcas trabajan para crear productos e iniciativas que<br />

contribuyan a lograr un planeta más sano, mientras fomentan un<br />

consumo responsable. Así hacen la diferencia.<br />

Por la salud humana<br />

y ambiental<br />

Convencidos de que pueden<br />

ser un poderoso instrumento<br />

para el cambio, los<br />

responsables de la empresa<br />

estadounidense Seventh<br />

Generation trabajan por<br />

ofrecer productos de aseo<br />

para el cuidado personal y<br />

del hogar totalmente reciclables<br />

o biodegradables,<br />

elaborados a partir de materias<br />

de origen vegetal o<br />

reciclado. Gracias a sus esfuerzos<br />

obtuvieron para 74<br />

productos la USDA BioPreferred,<br />

una certificación que<br />

garantiza que los artículos<br />

contienen ingredientes de<br />

origen biológico. Además, la<br />

firma, certificada como empresa<br />

B, lidera la campaña<br />

‘Por una generación libre de<br />

toxinas’, que busca cambiar<br />

la forma en que los productos<br />

químicos son regulados<br />

en Estados Unidos.<br />

FOTOS: cortesía Seventh Generation, Innocents, Eataly, Slowers, Patagonia y Wok<br />

acciones refrescantes<br />

Innocents, productor inglés<br />

de bebidas naturales<br />

y batidos de frutas, es una<br />

prueba del compromiso<br />

empresarial en la lucha<br />

contra el cambio climático.<br />

La compañía fue fundada<br />

en 1998 teniendo en<br />

cuenta tres principios: el<br />

sabor, la salud y la sostenibilidad.<br />

Es pionera en<br />

usar botellas de plástico<br />

100 por ciento recicladas<br />

y solo utiliza ingredientes<br />

de proveedores certificados<br />

por Rainforest Alliance,<br />

un sello que asegura<br />

que los productos y servicios<br />

son fabricados de<br />

manera social, económica<br />

y ambientalmente sostenible.<br />

De igual forma, todas<br />

sus medidas están enfocadas<br />

en reducir su huella de<br />

carbono y en educar a los<br />

consumidores para que<br />

también lo hagan. Para<br />

ello les brinda información<br />

sobre lo que deben tener<br />

en cuenta a la hora de<br />

comprar y tomar otras decisiones<br />

de consumo. Además,<br />

en su página web,<br />

explican las alternativas<br />

para ayudar a distribuir la<br />

huella de carbono.<br />

92


CONSUMO RESPONSABLE<br />

Mercado con<br />

CONCiENCiA<br />

Eataly ofrece productos artesanales<br />

de alta calidad, restaurantes<br />

especializados y una escuela<br />

gastronómica.La firma compra y<br />

vende artículos orgánicos certificados,<br />

carne y aves de corral, sin<br />

hormonas ni antibióticos. Además,<br />

recicla y toma decisiones<br />

informadas a la hora de comprar<br />

para evitar desperdicios.<br />

Desde 2010 y hasta octubre<br />

de 2012, Eataly ha donado alrededor<br />

de 184 mil kilogramos de<br />

alimentos para las personas necesitadas<br />

de Nueva York.<br />

A PASO lento<br />

Slowers, una marca española<br />

que aplica su estrategia<br />

de sostenibilidad a<br />

todos sus procesos, fabrica<br />

alpargatas ecológicas<br />

hechas a mano por talleres<br />

familiares.<br />

El proyecto busca valorizar<br />

los productos artesanales<br />

y la vida en el medio<br />

rural, y defender la producción<br />

local. Usa en una<br />

parte de sus colecciones<br />

tejido de algodón orgánico<br />

que, aunque no se hace en<br />

el país europeo, está certificado<br />

por el sello GOTS.<br />

Este es el estándar líder en<br />

el procesamiento de textiles<br />

de fibras orgánicas e<br />

incluye criterios ecológicos<br />

y sociales. Así mismo, el estampado<br />

sobre los tejidos<br />

es digital, es decir, no utiliza<br />

agua, no se pierde tinta,<br />

no se desperdicia tejido con<br />

pruebas y no se requieren<br />

tratamientos previos.<br />

Pensando en EL MAñANA<br />

La marca de ropa deportiva Patagonia<br />

desarrolla su negocio<br />

bajo la premisa de “actuar con<br />

responsabilidad, vivir dentro de<br />

nuestras posibilidades y dejar<br />

atrás no solo un planeta habitable,<br />

sino una tierra cuya belleza<br />

y biodiversidad está protegida<br />

para los que vengan después<br />

de nosotros”. Luego de que un<br />

estudio contratado por la firma<br />

determinó que el algodón convencional<br />

es cultivado con pesticidas,<br />

por lo que es una de las<br />

plantaciones más destructivas,<br />

decidieron empezar a utilizar<br />

algodón orgánico. Este fue el<br />

primer paso. Después, midieron<br />

su impacto ambiental en<br />

la cadena de suministro. Tras<br />

esto, aprendieron a fabricar<br />

chaquetas que mezclan la lana<br />

con materiales sintéticos provenientes<br />

de botellas de plástico<br />

recicladas, las cuales, luego de<br />

un arduo proceso de recuperación,<br />

convierten en poliéster.<br />

Así mismo, recolectan prendas<br />

viejas, rescatan parte de la lana<br />

y fabrican nuevos artículos.<br />

93


informe espeCiAL<br />

Responsabilidad a la mesa<br />

Desde hace 15 años, la cadena<br />

de restaurantes Wok lleva<br />

a la mesa comida del sudeste<br />

asiático elaborada con ingredientes<br />

que provienen de<br />

buenas prácticas agrícolas y<br />

pesqueras en Colombia. Pero<br />

sus acciones por el desarrollo<br />

sostenible no se detienen allí.<br />

Las personas que conforman<br />

el equipo de trabajo se capacitan<br />

sobre temas ambientales<br />

y ecológicos por medio de<br />

charlas, salidas de campo y<br />

experiencias participativas.<br />

Wok también le apuesta a iniciativas<br />

para crear y aplicar<br />

criterios de pesca responsable<br />

con la Red de Frío, una comunidad<br />

de pescadores de Bahía<br />

Solano, en alianza con la Fundación<br />

Mar Viva; todo ello financiado<br />

por el Fondo Acción<br />

y Conservación Internacional.<br />

Dentro de este programa, el<br />

restaurante pone en marcha<br />

una estrategia de comunicación<br />

para promover la pesca y<br />

consumo responsable, e informar<br />

a sus comensales sobre los<br />

aspectos claves para conservar<br />

los recursos pesqueros.<br />

eneRgía más limpia<br />

La sostenibilidad es uno<br />

de los principales ejes estratégicos<br />

de la empresa<br />

de productos lácteos Alpina.<br />

Para cumplir sus<br />

objetivos y generar valor<br />

social, ambiental y económico,<br />

se ha propuesto siete<br />

desafíos, algunos de los<br />

cuales están relacionados<br />

con la gestión eficiente de<br />

los recursos, los materiales<br />

y los residuos que genera<br />

su operación. Todas<br />

sus seis plantas usan combustibles<br />

amigables con el<br />

medioambiente, bien sea<br />

gas natural o gas propano.<br />

Además, cada una<br />

tiene una planta de tratamiento<br />

de aguas residuales<br />

(PTAR) que producen<br />

biogás el cual, a su vez, es<br />

aprovechado como fuente<br />

de energía para la planta<br />

industrial. Esto logra disminuir<br />

en 7,9 por ciento la<br />

huella de carbono estimada<br />

para la planta de Sopó<br />

(Cundinamarca) y en 4 por<br />

ciento la huella de carbono<br />

proyectada para Alpina en<br />

toda Colombia. Otra de sus<br />

iniciativas es el concepto<br />

de negocio social, para<br />

lo cual creó el programa<br />

ConSentido con el fin de<br />

combatir la desnutrición.<br />

FOTO: Juan Carlos Sierra<br />

Diseños ecológicos<br />

FOTO: Claudia Camejo<br />

Nixa Sierra decidió darle un<br />

enfoque diferente a su ejercicio<br />

como diseñadora industrial<br />

y, desde 2004, ha<br />

trabajado en el sector marroquinero<br />

ecológico. En una de<br />

sus líneas aparecen bolsos,<br />

carteras y piezas de pequeña<br />

marroquinería, con materiales<br />

reutilizados y biodegradables<br />

como carátulas de discos,<br />

revistas viejas, acetatos de<br />

LP, lana virgen tinturada vegetalmente,<br />

mimbre, cartón<br />

reutilizado, pegantes e hilos<br />

biodegradables, entre otros.<br />

Además, cuenta con una línea<br />

de papelería: cuadernos y libretas<br />

recargables de revistas<br />

antiguas y papel ecológico.<br />

Los productos se distribuyen<br />

en Colombia, Costa Rica y Alemania,<br />

y son elaborados por<br />

madres cabeza de familia. Así<br />

mismo, en la compañía, 95<br />

por ciento son mujeres.<br />

94


informe espeCiAL<br />

Selva Nevada<br />

Sano para el cuerpo, el medioambiente y la sociedad. Esta es la<br />

filosofía de Selva Nevada, una empresa que promueve el desarrollo<br />

sostenible al transformar frutas exóticas de los bosques nativos<br />

colombianos en pulpas y helados artesanales.<br />

ILUSTRACIONES: Jim M. Goldstein y Matthew Meier<br />

Por Andrés Urraza Carrizosa<br />

Alejandro Álvarez<br />

es un economista<br />

de 38 años que<br />

trabajó durante<br />

mucho tiempo en<br />

el mundo institucional<br />

en busca de alternativas<br />

ambientales y productivas para<br />

pequeñas comunidades. Al ver<br />

que los proyectos no daban los<br />

resultados esperados, decidió<br />

independizarse y crear Selva<br />

Nevada, una empresa que se ha<br />

convertido en un ejemplo para<br />

Colombia y el mundo en la preservación<br />

de los bosques naturales<br />

y en el trabajo conjunto<br />

con las comunidades.<br />

Selva Nevada empezó vendiendo<br />

pulpas de frutas exóticas<br />

y hoy hace helados. Pero el producto<br />

final es tan solo la punta<br />

del iceberg de un trabajo inmenso<br />

cuyo fin es explotar los frutos de<br />

manera natural, sostenible y sin<br />

alterar el medioambiente.<br />

FOTO: Alejandro Álvarez<br />

Arazá, copoasú, camu camu,<br />

asaí y galupa son algunas de las<br />

especies más exóticas que crecen<br />

en medio de los bosques naturales<br />

de Colombia y que son<br />

desconocidas para la mayoría de<br />

las personas. Alejandro las llama<br />

“frutas superpoderosas” debido a<br />

las propiedades extraordinarias<br />

que se les atribuyen. Un ejemplo<br />

es el asaí, que según estudios es<br />

la fruta con más antioxidantes<br />

en el mundo. O el<br />

camu camu, que concentra<br />

la cantidad más<br />

grande de vitamina C.<br />

Esta última es una planta<br />

acuática que no se deja<br />

domesticar; cuando lo han<br />

tratado de hacer, en un acto<br />

de defensa propia, disminuye<br />

los niveles<br />

de vitamina.<br />

Un grupo<br />

de 23 dedicadas<br />

mujeres de Tarapacá<br />

(Amazonas),<br />

se encarga, junto<br />

con otras personas, de lograr<br />

que las propiedades de estos<br />

frutos no se alteren. Así mismo,<br />

son un claro ejemplo de desarrollo<br />

sostenible, ya que además<br />

de ser dueñas de su propia empresa,<br />

compran el camu camu a<br />

las comunidades indígenas de<br />

la zona, y con las semillas que<br />

quedan tras despulpar la fruta,<br />

reforestan las áreas aledañas.<br />

Las palmas del bosque también<br />

brindan posibilidades comerciales.<br />

Colombia es el país<br />

con mayor diversidad de palmas<br />

en el mundo y los frutos de muchas<br />

de estas tienen un valor<br />

incalculable para la industria cosmética<br />

gracias a los aceites que<br />

contienen. Selva Nevada también<br />

trabaja fuertemente en un proyecto<br />

para sembrar vainillas.<br />

Alejandro cree firmemente en<br />

el potencial del país gracias a su<br />

biodiversidad. Basó su empresa<br />

en los siguientes tres pilares, que<br />

han sido la columna vertebral y el<br />

fundamento de esta. Sano para el<br />

96


consumo responsable<br />

cuerpo es el primero. Todos los<br />

árboles frutales y palmas crecen<br />

naturalmente sin productos<br />

químicos que la contaminen. El<br />

segundo, sano para el medioambiente,<br />

tiene que ver con el origen<br />

de las frutas con las que se<br />

fomenta la reforestación de los<br />

bosques. Finalmente, sano para<br />

la sociedad, pues trabaja conjuntamente<br />

con las comunidades que<br />

forman parte del proceso desde el<br />

principio. Selva Nevada incentiva a<br />

las personas para que formen sus<br />

propias empresas en aras de trabajar<br />

de la mano con ellos.<br />

Este último punto ha sido<br />

muy importante: involucrar a las<br />

comunidades y generarles valor es<br />

garantizar que sigan cuidando el<br />

hábitat donde se encuentran.<br />

A pesar de que los resultados<br />

saltan a la vista, algunas comunidades<br />

todavía se resisten al<br />

cambio. Por ejemplo, varias de<br />

las áreas de donde se sacan los<br />

frutos estaban sembradas, hasta<br />

hace poco, con cultivos ilícitos, y<br />

los campesinos se acostumbraron<br />

a ganar dinero fácil, rápido<br />

y sin trabajar demasiado. Reforestar<br />

un área requiere de varios<br />

años y esto puede no ser muy<br />

atractivo para quienes quieren<br />

ver resultados de inmediato.<br />

Así mismo, los ganaderos<br />

también suelen oponerse; ellos<br />

deforestan grandes extensiones<br />

de sabana para mantener sus animales.<br />

De este modo, la tierra no<br />

solo pierde nutrientes sino que,<br />

bajo el concepto de ganadería extensiva,<br />

usan dos y tres hectáreas<br />

de tierra para levantar un par de<br />

reses. Eso resulta absurdo si se<br />

piensa en la productividad que<br />

podría generar esa misma extensión<br />

con bosque natural. Lo peor<br />

es que, según el mercado, el precio<br />

de un terreno con pasto cuesta<br />

más que uno lleno de bosque.<br />

Alejandro también hace presencia<br />

a través de Selva Nevada en<br />

El camu camu es la fruta<br />

con mayor cantidad de<br />

vitamina C.<br />

San José del Guaviare. Allí trabaja<br />

con organizaciones aliadas para<br />

el desarrollo sostenible de este<br />

proyecto. Una de ellas es el Instituto<br />

Amazónico de Investigaciones<br />

Científicas (SINCHI), que cuenta<br />

con terrenos en medio de la selva<br />

y un laboratorio especializado en<br />

el casco urbano que analiza los<br />

frutos del bosque para determinar<br />

sus usos y valores para la sociedad.<br />

También trabaja con la Asociación<br />

de Productores Agropecuarios por<br />

el cambio económico del Guaviare<br />

(Asoprocegua), un grupo formado<br />

por los propios campesinos productores<br />

y dueños de las tierras,<br />

que busca concienciar a las comunidades<br />

sobre el potencial de estos<br />

y la importancia de conservarlos.<br />

Selva nevada, además de<br />

asesorar y acompañar durante<br />

el proceso de reforestación y<br />

concientización, compra los productos<br />

y los comercializa en las<br />

grandes plataformas para transformarlos<br />

en deliciosas pulpas y<br />

helados artesanales de frutas.<br />

El verdadero potencial de los<br />

bosques naturales en Colombia<br />

es todavía un misterio. El trabajo<br />

“Si un palo me da de comer,<br />

¿para qué lo corto? Trabajemos<br />

juntos con el propósito de<br />

cuidar ese recurso y maximizar<br />

su potencial”: Alejandro Álvarez.<br />

de investigación es determinante<br />

no solo para aprovechar más este<br />

recurso, sino también para incentivar<br />

a las comunidades a que los<br />

conserven y encuentren en ellos<br />

su sustento. Desafortunadamente,<br />

el alto costo de las investigaciones<br />

hace que muchos proyectos terminen<br />

olvidados en el fondo de un<br />

archivador de alguna universidad<br />

o centro de investigación. Costear<br />

exploraciones de este calibre es<br />

casi imposible para las pequeñas y<br />

medianas empresas que, desesperadas,<br />

aguardan a que el brazo del<br />

Gobierno o la comunidad internacional<br />

las apalanque.<br />

FOTOS: cortesía OliverSiegenthaler<br />

97


informe espeCiAL<br />

Apuesta<br />

por el valor<br />

compartido<br />

Las empresas deben ir más allá de la<br />

Responsabilidad Social con nuevas<br />

oportunidades de negocio que<br />

mejoren las condiciones económicas<br />

y sociales de sus grupos de interés.<br />

La Responsabilidad Social<br />

(RSE) se puso de<br />

moda en las últimas<br />

dos décadas y se ha<br />

usado para referirse a<br />

los planes sociales que<br />

desarrollan las empresas con el<br />

fin de mitigar el impacto de sus<br />

transformaciones en el entorno<br />

en el que operan. Sin embargo,<br />

muchas compañías se han quedado<br />

simplemente en esos proyectos,<br />

ignorando oportunidades<br />

de crecimiento de su negocio que,<br />

al mismo tiempo, favorecen a los<br />

clientes, los proveedores y las comunidades<br />

vecinas.<br />

El pasado octubre, la multinacional<br />

de alimentos Nestlé, junto<br />

con el Banco Interamericano de<br />

Desarrollo (BID), realizó en Cartagena<br />

el Foro Mundial Creación de<br />

Valor Compartido (VC) 2013, que se<br />

centró en cómo las empresas, sin<br />

importar si son grandes, medianas<br />

o pequeñas, pueden incrementar<br />

su competitividad con negocios innovadores<br />

que además mejoren las<br />

condiciones económicas y sociales<br />

de sus grupos de interés. Es decir,<br />

que desarrollen planes de trabajo<br />

y estrategias de innovación de VC.<br />

Para Michael Porter, profesor<br />

de la Escuela de Negocios de Harvard,<br />

especialista en esta materia<br />

y uno de los principales expositores<br />

del evento, “las compañías<br />

deben hacer uso de su infraestructura,<br />

sus insumos, sus conocimientos<br />

y su recurso humano<br />

para aumentar sus utilidades y<br />

rendimiento; y al mismo tiempo<br />

impulsar la optimización de las<br />

condiciones sociales, económicas<br />

El Plan de<br />

Fomento<br />

Agropecuario<br />

impulsa la<br />

producción<br />

del sector<br />

lechero.<br />

y ambientales de su entorno”. Según<br />

el experto, el VC se crea en<br />

varios niveles: en el producto –se<br />

le entrega al cliente lo que satisface<br />

sus necesidades–; en la cadena<br />

de valor productivo –donde<br />

se pueden bajar costos y ahorrar<br />

recursos con un uso más eficiente–;<br />

en la creación de cluster locales,<br />

y en el ambiente en el que la<br />

empresa se mueve, de donde inevitablemente<br />

toma los recursos.<br />

El caso<br />

Nestlé<br />

Esta compañía ha demostrado que<br />

la inversión en planes sostenibles<br />

genera retornos incalculables.<br />

La multinacional es una de las<br />

compañías pioneras en la creación<br />

de Valor Compartido. Trabaja<br />

sobre tres pilares: el uso de estrategias<br />

y operaciones para crear<br />

valor a sus accionistas; ofrecer<br />

a los consumidores productos<br />

nutritivos y mejorar las condiciones<br />

económicas y sociales de<br />

las comunidades que participan<br />

en toda la cadena de valor.<br />

En Colombia trabaja estos<br />

objetivos en tres áreas: agua,<br />

desarrollo rural y nutrición.<br />

Michael Porter fue uno de<br />

los invitados al Foro de Valor<br />

Compartido en octubre.<br />

FOTO: cortesía Nestle<br />

98


CONSUMO RESPONSABLE<br />

SEMANA SOStENiBLE<br />

En la primera de ellas, se<br />

enfocan en preservar y manejar<br />

responsablemente los<br />

recursos hídricos y en desarrollar<br />

procesos productivos<br />

innovadores que permitan<br />

usar cada vez menos agua.<br />

También creó El Plan Nescafé<br />

para apoyar el crecimiento<br />

de cientos de productores del<br />

grano que son proveedores de<br />

la compañía y estrategias para<br />

fomentar una mejor nutrición<br />

en la población mundial.<br />

Por eso es necesario pensar<br />

más allá de las necesidades básicas<br />

del cliente e innovar en los<br />

empaques, en la distribución y en<br />

los procesos de aprendizaje, por<br />

nombrar algunos, pero sobre todo<br />

se debe dejar de pensar que<br />

con la RSE ya todo está hecho,<br />

pues “la RSE –agrega Porter– es<br />

lo que todo el mundo debe hacer.<br />

En cambio, el VC se construye<br />

por encima de eso; crea soluciones<br />

y debe meternos en el mundo<br />

capitalista, pues ese sistema<br />

permite la escalabilidad de los<br />

procesos. La RSE puede ser vista<br />

por inversionistas y<br />

empresarios como<br />

filantropía, pero el<br />

VC siempre será entendido<br />

como una<br />

oportunidad de crecimiento<br />

con un retorno<br />

de inversión;<br />

un gana – gana para<br />

ambas partes”.<br />

Y en eso coincide el presidente<br />

del BID, Luis Alberto Moreno,<br />

quien considera que el VC es un<br />

componente clave para combatir la<br />

pobreza y promover el desarrollo<br />

económico sustentable. La relación<br />

gana-gana: es completamente sostenible<br />

porque no solo son proyectos<br />

beneficiosos para comunidades<br />

específicas, sino que también se<br />

convierten en buenos negocios<br />

para las empresas: “Se deben resolver<br />

los problemas públicos y no<br />

FOTO: Archivo Semana - Vanessa Pérez<br />

simplemente los empresariales,<br />

pues las problemáticas afectan a<br />

todos en general. El poder de las<br />

alianzas entre el sector privado, el<br />

público y las comunidades ayuda a<br />

resolver los retos económicos, sociales<br />

y ambientales de una región<br />

específica”, explica Moreno.<br />

El BID se ha involucrado en<br />

esto. Solo en 2012, 100 aliados<br />

privados y públicos contribuyeron<br />

con 300 millones de dólares a<br />

proyectos de alto impacto social y<br />

ambiental. En otras palabras, por<br />

cada dólar que el BID puso, llegaron<br />

otros 3 dólares que no son<br />

donaciones; son inversiones del<br />

sector privado para hacer crecer<br />

los negocios de la mano de los grupos<br />

sociales que toca.<br />

Las compañías de América<br />

Latina ya comienzan a creer<br />

en los beneficios del VC. De<br />

acuerdo con Hans Schulz, vicepresidente<br />

interino del Sector<br />

Privado y Operaciones sin<br />

Garantía Soberana del BID, 85<br />

por ciento de los empresarios<br />

encuestados por este organismo<br />

multilateral cree que se puede<br />

aumentar el valor económico de<br />

la empresa, mediante las propuestas<br />

que integran la solución<br />

de necesidades de un negocio y<br />

que generan al mismo tiempo<br />

beneficio a las comunidades.<br />

“Porter nos invita a entender<br />

que existen oportunidades<br />

al pensar ampliamente en el<br />

beneficio de la sociedad”.<br />

Schulz explica que “hoy lo que<br />

tenemos que hacer en nuestra región<br />

es combinar conocimientos<br />

y recursos, porque hay déficit de<br />

mano de obra en América Latina y<br />

el tema de la educación aún tiene<br />

evidentes rezagos, si se compara<br />

con otras zonas del mundo. Además,<br />

la migración a las ciudades<br />

hace que disminuya la cantidad de<br />

trabajadores en los centros rurales<br />

y que en las áreas urbanas abunde<br />

la informalidad y el desempleo.<br />

99


impacto<br />

¿Campesinos en<br />

vía de extinción?<br />

FOTO: Archivo Semana - León Darío Peláez<br />

Las insuficientes políticas de desarrollo del campesinado y el abandono<br />

estatal hacen que las nuevas generaciones migren a las ciudades.<br />

El paro agrario demostró que el campesinado existe y tiene<br />

la fuerza suficiente para poner al gobierno en Jaque. Sin<br />

embargo, ese poder se está volviendo viejo.<br />

A<br />

comienzos de<br />

2012, el entonces<br />

viceministro de<br />

Agricultura, Ricardo<br />

Sánchez,<br />

llamó la atención<br />

del país sobre lo que estaba pasando<br />

en el campo colombiano.<br />

No era que nadie se hubiera dado<br />

cuenta de la situación, sino que<br />

hasta ese momento nadie dimen-<br />

sionaba lo que estaba ocurriendo<br />

más allá de los centros urbanos:<br />

“El campo se nos está envejeciendo<br />

y hay que apostarle a un relevo<br />

generacional. Mientras en Vietnam<br />

los cultivadores de café no<br />

llegan en promedio a los 30 años,<br />

en Colombia superan los 50”, dijo<br />

entonces el funcionario.<br />

Y no es que Colombia se<br />

haya convertido en los últimos<br />

años en un país netamente urbano;<br />

por el contrario, y como<br />

lo dice el director académico<br />

del informe especial sobre<br />

campesinado que realizó el<br />

Programa de las Naciones Unidas<br />

para el Desarrollo (PNUD),<br />

Absalón Machado, “somos más<br />

rurales de lo que creíamos”. El<br />

estudio asegura que 32 por ciento<br />

de los municipios del país son<br />

100


semana sostenible<br />

rurales y, según estimaciones<br />

poblacionales del Departamento<br />

Nacional de Estadística (DANE),<br />

11’251.843 colombianos no viven<br />

en una cabecera municipal.<br />

Que solo los viejos se estén<br />

quedando en el campo es una<br />

noticia nefasta para un país<br />

que apuesta por encontrar las<br />

primeras soluciones al conflicto<br />

armado. Un mal sabor de boca<br />

cuando se busca apalancar el<br />

desarrollo económico y la seguridad<br />

alimentaria de una nación<br />

en los proyectos agropecuarios<br />

–con productos con los que el<br />

país pueda fortalecer su aparato<br />

productivo y con los que realmente<br />

pueda conquistar mercados<br />

internacionales–. Que los<br />

niños y jóvenes que allí nacen no<br />

vean al campo como parte de su<br />

proyecto de vida, deja al sector<br />

rural en cuidados intensivos.<br />

Las estadísticas son las primeras<br />

en confirmarlo. Las proyecciones<br />

del DANE muestran<br />

que la población entre los 15 y<br />

24 años que vivía en áreas rurales<br />

para 1985 era de 2’099.578<br />

personas. Una década después,<br />

la cifra era de 2’038.977 y en<br />

2005, de 1’979.793.<br />

Claro está que los cálculos<br />

no son exactos pues, como lo<br />

señala Machado, resulta difícil<br />

establecer el número de campesinos<br />

en Colombia, ya que el término<br />

ni siquiera hace parte de<br />

los registros censales del DANE,<br />

pues la entidad incluye a esta<br />

población en una categoría denominada<br />

‘resto’. No obstante,<br />

el estudio del PNUD estima que<br />

para 2011, había 7,1 millones de<br />

trabajadores rurales.<br />

papel importante en el progreso<br />

de una nación.<br />

Según investigaciones<br />

de Cepsiger, hoy la población<br />

económicamente activa es casi<br />

60 por ciento y la población<br />

mayor de 60 años llega apenas<br />

a 10 por ciento. Pero el desempleo<br />

y el bajo acceso a educación<br />

superior están dejando<br />

pasar varias generaciones que<br />

terminan engrosando los cinturones<br />

de miseria y que le restan<br />

competitividad al país. En<br />

otras palabras, Colombia está<br />

desperdiciando el bono demográfico<br />

que tiene, pues ignora<br />

los avances de la medicina y la<br />

evolución de condiciones sanitarias,<br />

que permitirían una<br />

mayor calidad de vida a los habitantes<br />

de mayor edad.<br />

Y esa problemática es más<br />

evidente en las zonas rurales,<br />

donde el acceso a salud y educación<br />

es menor, lo que obliga<br />

a la migración a los centros urbanos.<br />

“El que haya más gente<br />

viviendo en las ciudades y<br />

menos en el campo no es malo<br />

ni bueno. Lo que es malo o bueno<br />

es qué tantas condiciones<br />

favorables hay en una u otra<br />

parte”, explica Dulcey.<br />

Un estudio de la Universidad<br />

del Valle de 1998, que tenía<br />

datos<br />

32 %<br />

de los municipios<br />

de<br />

Colombia<br />

son rurales.<br />

50 %<br />

del campesinado<br />

es<br />

pobre.<br />

2<br />

millones de<br />

personas<br />

entre 15 y 24<br />

años vivían en<br />

áreas rurales<br />

para 1985.<br />

Una década<br />

después, la<br />

cifra se redujo.<br />

como objetivo caracterizar al<br />

campesino viejo del Eje Cafetero,<br />

encontró que 94,2 por ciento<br />

de los mayores de 60 años<br />

cursó menos de 5 años de educación<br />

primaria. Hoy, 15 años<br />

después, esas cifras son vistas<br />

como el antecedente de una dura<br />

realidad: el analfabetismo<br />

en el campo (21 por ciento) es<br />

casi cuatro veces más alto que<br />

en las zonas urbanas (6 por<br />

ciento), según Cepsiger.<br />

A la brecha en la educación<br />

se suman las pocas e ineficientes<br />

políticas sociales. Pese a los<br />

avances de este Gobierno en<br />

cobertura en salud y pensiones<br />

para la población campesina, el<br />

panorama es poco alentador.<br />

De acuerdo con Soraya Montoya,<br />

directora de la Fundación<br />

Saldarriaga Concha (FSC), solo<br />

1 por ciento de los campesinos<br />

mayores de 60 años recibe pensión<br />

y según un informe de la<br />

Cepal de 2010, de los 7,7 millones<br />

de personas con acceso al<br />

sistema de seguridad social de<br />

pensiones, solo 4 por ciento son<br />

del sector rural.<br />

La mayoría de adultos mayores<br />

que vive en el campo son parte<br />

fundamental de la economía del<br />

hogar, a lo que se suma tener<br />

que cuidar a los nietos.<br />

Generaciones perdidas<br />

De poco le ha servido a Colombia<br />

que la expectativa de vida de sus<br />

habitantes haya aumentado en<br />

los últimos años y que hoy sea<br />

de aproximadamente 73 años de<br />

edad. Como lo dice Elisa Dulcey,<br />

directora de la Fundación Cepsiger<br />

para el Desarrollo Humano,<br />

el Estado y el sector privado aún<br />

no entienden que las personas<br />

mayores de 70 años juegan un<br />

FOTO: Archivo Semana - Daniel Reina<br />

101


impacto<br />

Según cifras de<br />

la Fundación<br />

Saldarriaga Concha,<br />

solo 1 por ciento<br />

de los campesinos<br />

mayores de 60 años<br />

recibe pensión.<br />

Así las cosas, no sorprende<br />

que cerca de 50 por ciento del<br />

campesinado se ha considerado<br />

como pobre. El estudio ‘¿Quiénes<br />

son los campesinos colombianos<br />

de hoy?’, que publicó la Universidad<br />

del Rosario en agosto pasado,<br />

dice que la población rural<br />

tiene una economía totalmente<br />

de subsistencia, originada en<br />

la concentración de la tierra, la<br />

falta de crédito y ausencia del<br />

Estado, por lo que sus necesidades<br />

básicas siguen insatisfechas<br />

y su nivel de vida experimenta<br />

un constante deterioro.<br />

Según cifras de la FSC, los<br />

campesinos en 75 por ciento de<br />

los casos son agricultores, pero<br />

realizan otro tipo de actividades<br />

como fabricación de artesanías,<br />

montaje de tiendas o se dedican<br />

al jornal –trabajan en fincas de<br />

otras personas por días a cambio<br />

de una remuneración–.<br />

La institucionalidad también<br />

brilla por su ausencia desde<br />

mediados de los años noventa.<br />

Entidades como la Caja Agraria,<br />

el Idema o el Incora desaparecieron<br />

y si bien en 2003 el gobierno<br />

de ese momento quiso impulsar<br />

el sector con el Incoder, como lo<br />

explica Machado, la entidad “se<br />

dedicó al tema de los baldíos. No<br />

hay una política de desarrollo<br />

rural desde el Estado”.<br />

Mil ideas, poca sincronía<br />

El último gran avance en el sector<br />

agro nacional ocurrió en el<br />

gobierno de Alfonso López Michelsen.<br />

Igualó el salario mínimo<br />

rural con el urbano y llevó<br />

un mayor porcentaje de la economía<br />

rural al mercado abierto,<br />

a través del Programa de Desarrollo<br />

Rural Integrado (DRI).<br />

De ahí en adelante, las iniciativas<br />

gubernamentales no<br />

han dado la talla. En el cuaderno<br />

‘Campesinado reconocimiento<br />

para construir país’<br />

del PNUD, el panorama es claro:<br />

“En los planes de gobierno<br />

se detecta la limitación de no<br />

definir sujetos sino paquetes<br />

de programas; no se habla del<br />

campesinado como un actor<br />

social, es como si se tratara de<br />

‘seres imaginarios”.<br />

Desde la década de los<br />

ochenta, de acuerdo al PNUD,<br />

los planes de Belisario Betancur<br />

y Virgilio Barco parten de que<br />

el campesinado es un grupo de<br />

personas incapaces de movilizar<br />

sus productos hacia los mercados<br />

y por tal motivo resultan pobres.<br />

Luego, el gobierno de César<br />

FOTO: Archivo Semana - Juan Pablo Gutiérrez<br />

Gaviria se refiere a la población<br />

rural y a zonas rurales y solo se<br />

habla de los beneficios que esta<br />

población tendría con los programas<br />

de riego.<br />

En el programa de Ernesto<br />

Samper, el campesino sigue<br />

sin ser un actor social, pero hay<br />

mayor interés por abarcar políticas<br />

que mejoren su calidad de<br />

vida, como las acciones sobre la<br />

pequeña propiedad, la economía<br />

solidaria y el plan de desarrollo<br />

rural campesino.<br />

En el gobierno de Andrés<br />

Pastrana se propuso un plan<br />

de cadenas productivas, con la<br />

idea de mejor la capacidad de<br />

negociación de los campesinos.<br />

Y en los dos períodos de Álvaro<br />

Uribe en vez de hablar de campesinado,<br />

se habla de cultivadores,<br />

pequeños productores,<br />

empresarios y guardabosques,<br />

y de la necesidad de “crear una<br />

relación fraterna y cristiana entre<br />

los trabajadores del campo”.<br />

“El campo se nos<br />

está envejeciendo.<br />

Mientras en Vietnam<br />

los cultivadores de<br />

café no llegan en<br />

promedio a los 30<br />

años, en Colombia<br />

superan los 50”,<br />

Ricardo Sánchez,<br />

exviceministro de<br />

Agricultura.<br />

Por último, el gobierno<br />

Santos, si bien en el discurso<br />

recupera la política de desarrollo<br />

rural, la realidad evidencia<br />

que perdió la oportunidad de<br />

hacer un cambio estructural.<br />

Así que mientras los gobiernos<br />

debaten sobre cómo identi-<br />

102


impacto<br />

ficar a esta población, el propio<br />

campesino, según el estudio de<br />

la Universidad del Rosario, se<br />

ve como un trabajador hasta la<br />

muerte, honrado, berraco y que<br />

a pesar de las diferentes formas<br />

de asociatividad, es capaz<br />

de detener a todo un país por<br />

una causa, como lo demostraron<br />

entre julio y septiembre pasado<br />

con el paro agrario.<br />

Volver a la tierra<br />

El punto de quiebre del campo<br />

colombiano parece haberse<br />

registrado entre finales de los<br />

años ochenta y principios de<br />

los noventas. En ese momento,<br />

la violencia espantó hacia<br />

las capitales y ciudades intermedias<br />

a miles de campesinos.<br />

Quienes se quedaron en el<br />

campo fueron los abuelos; los<br />

de las raíces más fuertes y que<br />

tenían claro que sus oportunidades<br />

en los centros urbanos<br />

eran casi nulas.<br />

La urbe sedujo a las nuevas<br />

generaciones con un futuro<br />

prometedor. Muchos jóvenes<br />

prefieren irse a la ciudad a ser<br />

celadores o meseros, porque<br />

al menos tienen un contrato,<br />

seguridad social y el acceso a<br />

todos los servicios públicos.<br />

El campo quiere de regreso<br />

a sus hijos; los necesita.<br />

Entidades públicas y privadas<br />

desarrollan iniciativas para<br />

conseguirlo. La Federación Nacional<br />

de Cafeteros, por ejemplo,<br />

tiene un programa para<br />

que los jóvenes tengan sus propias<br />

fincas sostenibles.<br />

La iniciativa funciona en 6<br />

departamentos con 103 jóvenes,<br />

que ahora tienen parcelas<br />

de 5 hectáreas de café renovado.<br />

La meta es que los créditos<br />

utilizados para comprar los<br />

predios se paguen con las ganancias<br />

de los cafetales.<br />

Si bien la iniciativa da a<br />

los caficultores un proyecto<br />

productivo, como explica Luis<br />

Felipe Acero, gerente administrativo<br />

del proyecto, “el precio<br />

del café fluctúa mucho” y ese<br />

es el mayor reto para mantenerlo<br />

vigente.<br />

Otra apuesta para que los<br />

jóvenes se queden en el campo<br />

es la del Icetex, que financia<br />

hasta 75 por ciento de carreras<br />

enfocadas en el campo y si el<br />

estudiante finaliza el programa,<br />

el Estado le condona la totalidad<br />

de los costos.<br />

Pero aún queda mucho por<br />

hacer. De 200 mil estudiantes<br />

que se graduaron en Colombia<br />

en 2011, solo 2.000 lo hicieron<br />

en ciencias agrícolas, según el<br />

Ministerio de Educación. Es<br />

decir, solo 1 por ciento de los<br />

nuevos profesionales ve en el<br />

agro una nueva opción de vida.<br />

Hay esperanza<br />

Hoy está claro que el relevo generacional<br />

del campo colombiano no<br />

da espera y que solo se logra con<br />

políticas estructurales que lo hagan<br />

sostenible. Ricardo Sánchez,<br />

hoy director de seguridad alimentaria<br />

para la región Latinoamérica<br />

de The Nature Conservancy, explica<br />

que lo que se necesita para<br />

lograrlo es juntar en la misma<br />

balanza educación, tecnología e<br />

incentivos para adoptar prácticas<br />

sostenibles en el agro.<br />

Lo primero, dice Sánchez, es<br />

replantear el modelo educativo.<br />

Un niño que nace en el campo no<br />

puede ser educado igual que uno<br />

de la ciudad. Al primero hay que<br />

enseñarle a cuidar la tierra y ver<br />

en ella un proyecto.<br />

Además, como lo señala el<br />

PNUD, “lo esencial es el reconocimiento<br />

social y político de los<br />

campesinos como ciudadanos con<br />

plenos derechos, con capacidad<br />

de representarse políticamente<br />

y de participar en los proyectos<br />

nacionales de desarrollo”.<br />

La población<br />

rural tiene<br />

una economía<br />

totalmente de<br />

subsistencia,<br />

originada en la<br />

concentración<br />

de la tierra.<br />

FOTO: Archivo Semana - Juan Pablo Gutiérrez<br />

cifras<br />

trabajo<br />

A 2011, en el territorio<br />

colombiano<br />

había 7,1 millones<br />

de personas laborando<br />

en el campo.<br />

educación<br />

De 200 mil estudiantes<br />

que se graduaron en<br />

Colombia en 2011, solo<br />

2.000 lo hicieron en<br />

ciencias agrícolas.<br />

pensiones<br />

De 7,7 millones de<br />

personas con acceso<br />

al sistema de seguridad<br />

social, 4 por ciento<br />

son del sector rural.<br />

acceso<br />

El analfabetismo en<br />

el campo (21 por<br />

ciento) es casi cuatro<br />

veces más alto que<br />

en las zonas urbanas.<br />

104


información institucional<br />

semana sostenible<br />

servientrega con<br />

conciencia verde<br />

Haciendo eco a la estrategia ‘Dejando huella verde’,<br />

esta organización capacita a sus colaboradores en<br />

temas referentes al cuidado del medioambiente.<br />

Desde agosto pasado,<br />

los colaboradores<br />

de Servientrega de<br />

las oficinas regionales<br />

y de Bogotá<br />

están estudiando<br />

con dedicación temas relacionados<br />

con el medioambiente. Por<br />

grupos, en salas con computadores,<br />

un instructor les enseña<br />

cómo determinar el impacto<br />

que su estilo de vida le causa al<br />

planeta, así como qué hacer para<br />

mitigarlo y por qué es importante<br />

pensar en temas ‘verdes’.<br />

Esta organización tiene una<br />

estrategia de ‘sustentabilidad’,<br />

que incluye los tres ejes de este<br />

concepto: crecimiento económico,<br />

equidad social y equilibrio<br />

ambiental. Este último lo está<br />

incorporando en el ADN de sus<br />

colaboradores con una cultura<br />

del cuidado y la protección del<br />

medioambiente, tarea en la que<br />

le ayuda ConTREEbute con su<br />

herramienta virtual. Se trata<br />

de una aplicación en Internet<br />

que mide los conocimientos del<br />

usuario en esta materia, lo ayuda<br />

a elevarlos y a ponerlos en<br />

práctica en su día a día.<br />

Cada asistente recibe una<br />

tarjeta. En ella se lee “Ayúdanos<br />

a curar el planeta”, la dirección<br />

en Internet del sitio donde está<br />

la herramienta y el número<br />

de matrícula; la capacitación<br />

emula la inscripción a una universidad.<br />

Lo primero que hace<br />

cada colaborador es responder<br />

una evaluación para medir el<br />

conocimiento que tiene sobre<br />

cultura sostenible. Después,<br />

FOTO: Jaime Ariza<br />

Un total de<br />

456 personas<br />

ya han<br />

evidenciado,<br />

calculado<br />

y evaluado<br />

su huella<br />

ambiental.<br />

mediante videos, interacción y<br />

recursos gráficos, aprende cómo<br />

evidenciar y disminuir su<br />

huella en el planeta. Además,<br />

tiene la posibilidad de cuantificarla<br />

y determinar cuántos<br />

árboles debe sembrar para compensarla.<br />

De igual forma, la herramienta<br />

lo concientiza sobre<br />

la importancia de comunicar<br />

sus aprendizajes a los demás.<br />

“Nos ayuda y motiva a cambiar<br />

hábitos negativos en cuanto<br />

al cuidado del medioambiente,<br />

como por ejemplo el hecho de<br />

realizar una buena separación<br />

de los residuos sólidos y la disposición<br />

adecuada de elementos<br />

eléctricos y contaminantes”,<br />

asegura Fredy Alexander Blandón<br />

Henao, analista Talento Humano,<br />

Regional Antioquia.<br />

Tras completar todos los pasos,<br />

cada estudiante presenta una<br />

evaluación para determinar cuánto<br />

avanzó. Así identifica qué tanta<br />

conciencia y conocimientos adquirió<br />

no solo en lo que se relaciona<br />

con su entorno sino también en<br />

cuanto a lo que Servientrega hace<br />

por el medioambiente y cómo este<br />

programa es un complemento<br />

a los programas de gestión PARE<br />

(Programa Ambiental de Gestión<br />

de Residuos) y RAE (Reducción del<br />

Consumo de Agua y Energía).<br />

La empresa espera que cada<br />

uno de los colaboradores,<br />

12.000 en total, se convierta en<br />

un multiplicador de los conocimientos<br />

adquiridos en esta particular<br />

‘Universidad Verde’, para<br />

que así el impacto de su programa<br />

sea aún mayor.<br />

105


impacto<br />

No más<br />

casas<br />

en el aire<br />

Una política integral de<br />

vivienda va más allá de<br />

construirla. El objetivo es<br />

cimentar comunidades con<br />

una infraestructura social que<br />

promueva su desarrollo.<br />

Por Juan Carlos Franco*<br />

Las casas del Gobierno están dotadas con conexión a Internet y cada<br />

familia recibe un subsidio de 300.000 pesos para comprar un computador.<br />

La transformación de<br />

hábitos y comportamientos<br />

del ser humano<br />

sedentario dio<br />

paso al desarrollo y<br />

evolución de las comunidades<br />

que hoy se conocen.<br />

La agricultura, la vivienda, el<br />

arraigo, los hábitos alimenticios,<br />

el saneamiento básico y la identidad<br />

territorial, por mencionar<br />

solo algunos, surgieron para<br />

mejorar sus condiciones de vida<br />

y oportunidades de desarrollo.<br />

En particular, la vivienda y la<br />

tierra motivaron un sentido de<br />

propiedad que ha sido motor de<br />

la convivencia, la innovación, la<br />

producción y el comercio. De ahí<br />

la relevancia de la debida planeación<br />

y ejecución de los programas<br />

de expansión urbana,<br />

producción de vivienda y construcción<br />

de comunidades en los<br />

modelos de desarrollo de las naciones<br />

que progresan.<br />

Hoy, factores como la tasa<br />

de crecimiento de la población,<br />

el encarecimiento del suelo, el<br />

difícil acceso a créditos hipotecarios<br />

para familias que derivan<br />

sus ingresos de la informalidad,<br />

“Si en lugar de casas, lo<br />

que se busca es construir<br />

comunidades sostenibles,<br />

¿son realmente suficientes 41<br />

millones de pesos?”.<br />

así como la insuficiencia de recursos<br />

públicos y privados necesarios<br />

para atender la creciente<br />

demanda que resulta de la formación<br />

anual de hogares, han<br />

llevado a los países más pobres<br />

a enfrentar déficits en materia<br />

de vivienda que se cuentan en el<br />

orden de los millones de unidades.<br />

Esta situación, que causa un<br />

incremento en los niveles de hacinamiento,<br />

de violencia intrafamiliar<br />

y de abuso infantil, entre<br />

otras, nutre también la construcción<br />

informal, la ilegalidad de la<br />

propiedad y los riesgos de estabilidad<br />

y calidad de las obras.<br />

Casos como los de México,<br />

Brasil y Francia han permitido<br />

aprender de los éxitos y fracasos<br />

de diferentes políticas de vivienda,<br />

demostrando que más allá de<br />

la solución habitacional, el mercado<br />

demanda la construcción<br />

de comunidades y de hábitats<br />

debidamente articulados a las redes<br />

de empleo, comercio, transporte,<br />

servicios públicos, salud,<br />

educación, seguridad, recreación<br />

y cultura. Actualmente, México<br />

cuenta con más de tres millones<br />

de viviendas de interés social que<br />

fueron construidas, recibidas por<br />

sus compradores de bajos ingresos<br />

y, posteriormente, abandonadas,<br />

porque eran insuficientes<br />

para atender sus necesidades básicas.<br />

Una vez más es necesario<br />

comprender que los grandes problemas<br />

de la sociedad requieren<br />

del adecuado diseño, planeación,<br />

articulación e implementación de<br />

grandes soluciones.<br />

Al requerirse la construcción<br />

de proyectos a gran escala<br />

para atender el déficit creciente<br />

y acumulado de vivienda, se hace<br />

entonces necesario complementar<br />

dicha producción con<br />

colegios, puestos de salud, unidades<br />

de policía, centros para la<br />

atención a la primera infancia,<br />

iglesias, escenarios deportivos<br />

y bibliotecas. Sería deseable<br />

pensar que la inversión en la<br />

106


semana sostenible<br />

producción de viviendas acompañada<br />

de infraestructura social<br />

es suficiente, pero el reto no<br />

termina aquí. La construcción<br />

de una comunidad sostenible<br />

requiere del desarrollo de capacidades<br />

que le permitan producir<br />

bienes y servicios transables<br />

con otras comunidades para, de<br />

esta forma, obtener de sus vecinos<br />

aquellos que no se producen<br />

localmente.<br />

FOTOS: Archivo Semana - Guillermo Torres<br />

Los mecanismos para la habilitación<br />

del suelo, las políticas<br />

de vivienda poco agresivas del pasado,<br />

la tasa anual de formación<br />

de hogares tanto formales como<br />

informales, el limitado acceso al<br />

crédito y la falta de controles a la<br />

construcción informal en Colombia,<br />

son factores que han nutrido<br />

un déficit de vivienda, estimado<br />

en cerca de tres millones de unidades.<br />

Esto significa que hay alrededor<br />

de tres millones de familias<br />

colombianas que no tienen acceso<br />

a una casa propia, o que habitan<br />

en lugares que por sus condiciones<br />

de infraestructura no pueden considerarse<br />

como viviendas dignas.<br />

A esta cifra hay que sumarle entre<br />

20.000 y 30.000 unidades que<br />

cada año resultan de la demanda<br />

adicional insatisfecha, que no se<br />

logra suplir con la producción formal<br />

y que, a su vez, motiva el desarrollo<br />

informal. Este es, sin duda,<br />

un asunto al que se debe prestar<br />

la mayor prioridad y atención, y<br />

que como eje fundamental del desarrollo<br />

ha motivado programas<br />

masivos de vivienda como es el<br />

caso de los Macroproyectos de Interés<br />

Social Nacional, el programa<br />

de vivienda gratuita (Ley 1537 de<br />

2012) y el nuevo programa de Vivienda<br />

de Interés Prioritario para<br />

Ahorradores (VIPA).<br />

Hay alrededor de tres millones<br />

de familias colombianas<br />

que no tienen acceso a<br />

una vivienda propia.<br />

El municipio<br />

de Pradera fue<br />

elegido para<br />

dar inicio, en<br />

febrero de<br />

este año, a la<br />

entrega de<br />

las 100.000<br />

viviendas.<br />

Las experiencias recientes<br />

de programas de vivienda en<br />

Colombia, lideradas por el Ministerio<br />

de Vivienda, Ciudad y<br />

Territorio, han mostrado importantes<br />

avances y dejado valiosas<br />

enseñanzas. Hemos sido actores<br />

y espectadores del comienzo en el<br />

proceso de transformación de las<br />

políticas públicas que permitirán<br />

fortalecer la producción masiva<br />

de viviendas de interés social en<br />

el país. También hemos sido testigos<br />

de cómo a estas políticas se<br />

han venido uniendo importantes<br />

esfuerzos públicos y privados<br />

para articular a la vivienda, la<br />

construcción de infraestructura<br />

social y el acompañamiento<br />

al desarrollo de las familias más<br />

vulnerables del país.<br />

Entre los mayores avances<br />

logrados en tiempos recientes<br />

se observan el impulso que han<br />

tomado los procesos de habilitación<br />

de suelo para vivienda social,<br />

el cambio en las tendencias<br />

de producción de vivienda de interés<br />

prioritario para atender las<br />

necesidades de los más pobres,<br />

el desarrollo arquitectónico, la<br />

innovación en productos financieros<br />

que rompan las barreras<br />

de acceso al crédito, el mayor<br />

dinamismo del sector y sus impactos<br />

en la economía, la generación<br />

de empleo y el compromiso<br />

de los gobiernos nacional y local<br />

para buscar cerrar la brecha que<br />

el país atraviesa en materia de<br />

vivienda y de construcción de comunidades<br />

sostenibles.<br />

Son muchos y muy importantes<br />

los avances, así como también<br />

lo son los retos que plantea el<br />

desarrollo de las condiciones necesarias<br />

para mejorar la calidad<br />

de vida de las comunidades más<br />

vulnerables. El futuro plantea<br />

interrogantes que hay que abordar<br />

desde lo público y lo privado,<br />

107


impacto<br />

FOTO: Archivo Semana<br />

FOTO: Archivo Semana - Guillermo Torres<br />

y desde los ámbitos local, regional<br />

y nacional. Por ejemplo, si los<br />

nuevos desarrollos de vivienda de<br />

interés prioritario deben ser de<br />

gran tamaño y el costo del suelo<br />

en los centros urbanos es alto,<br />

¿significa entonces que los proyectos<br />

deban ser construidos en<br />

zonas de expansión urbana? ¿Qué<br />

tan distantes estarán de las redes<br />

Los grandes problemas<br />

de la sociedad requieren<br />

diseñar, planear, articular<br />

e implementar grandes<br />

soluciones.<br />

de servicios públicos como transporte,<br />

educación, salud, seguridad<br />

y cultura? ¿Cuál será el costo<br />

para diseñar, poner en marcha y<br />

fortalecer estas redes? ¿Quiénes y<br />

cómo se deben asumir?<br />

Es lógico pensar que las familias<br />

más vulnerables de la sociedad<br />

se ubiquen en zonas donde<br />

las redes de soporte sean más robustas<br />

para mejorar sus oportunidades<br />

de desarrollo. Pero este<br />

planteamiento genera el interrogante<br />

de si es lógico construir las<br />

unidades en zonas de expansión<br />

o distantes de centros urbanos,<br />

donde las redes de soporte comunitario<br />

y de infraestructura<br />

social son aún débiles o simplemente<br />

no se han desarrollado.<br />

¿Cómo lograr, además, que estos<br />

nuevos proyectos sean habitados<br />

por poblaciones<br />

heterogéneas en<br />

materia de ingreso,<br />

con capacidades y<br />

fortalezas que se<br />

complementen<br />

para garantizar<br />

la prosperidad de<br />

sus familias?<br />

Una vivienda<br />

digna de interés prioritario, de<br />

entre 36 y 45 metros cuadrados,<br />

se construye bajo el tope de precio<br />

establecido en 70 salarios mínimos.<br />

Si en lugar de casas, lo que<br />

se busca es construir comunidades<br />

sostenibles, ¿son realmente<br />

suficientes 41 millones de pesos?<br />

Si bien el papel de los gobiernos<br />

de orden nacional y local es<br />

importante, el de las comunidades<br />

y líderes es, sin duda, fundamental.<br />

Una sociedad activa, participativa<br />

y organizada, que convoca<br />

a las autoridades a trabajar en la<br />

formulación de un Plan de Desarrollo<br />

Local y que se compromete<br />

con su implementación, es el factor<br />

elemental para la construcción<br />

de condiciones para su progreso.<br />

Desde la Fundación Mario<br />

Santo Domingo se viene trabajando<br />

en la estructuración y puesta<br />

en marcha de un modelo para el<br />

Desarrollo Integral de Comunidades<br />

Sostenibles (DINCS). Está<br />

centrado en la comunidad, en su<br />

participación y empoderamiento,<br />

que permita la articulación de<br />

esfuerzos y compromisos de los<br />

gobiernos locales y nacional, de la<br />

academia, del sector privado y de<br />

la cooperación internacional, a fin<br />

de promover el desarrollo de sociedades<br />

más prósperas y justas.<br />

Construir un país viable<br />

requiere del fortalecimiento del<br />

comercio, de la industria, de la<br />

educación, de la innovación, de la<br />

salud y de la infraestructura, sin<br />

dejar de lado a la familia y a la<br />

comunidad en su entorno habitacional<br />

como ejes fundamentales<br />

para la creación de bienestar.<br />

El proyecto<br />

bandera en<br />

vivienda del<br />

Gobierno<br />

pretende<br />

reducir el<br />

déficit de<br />

vivienda<br />

que hoy es<br />

cercano a los<br />

tres millones.<br />

*Director<br />

general de<br />

la Fundación<br />

Mario Santo<br />

Domingo.<br />

108


medioambiente<br />

FOTO: Latinstock Colombia / Corbis<br />

Invasores<br />

silenciosos<br />

La plaga del pez león, una especie<br />

foránea, puede desequilibrar la frágil<br />

estabilidad del Caribe colombiano.<br />

La solución que se está aplicando es<br />

pescarlo para incluirlo en la dieta de los<br />

colombianos. Sin embargo, no es la única<br />

especie invasora en el país.<br />

Amediados de este<br />

año se difundió<br />

una noticia<br />

alentadora para<br />

l a prot e c c ión<br />

del ecosistema<br />

marino del Caribe colombiano:<br />

el Ministerio de Ambiente y Desarrollo<br />

Sostenible levantó la<br />

restricción para la pesca del pez<br />

león, como una de las acciones<br />

encaminadas a contener el avance<br />

de esta especie. Meses antes,<br />

el propio presidente, Juan Manuel<br />

Santos, anunció que el Gobierno<br />

pagaría una recompensa<br />

−sin especificar− a quienes pescaran<br />

este depredador natural.<br />

¿Por qué merece tanta atención<br />

un hermoso pez de arrecife?<br />

Es una peligrosa especie invasora<br />

originaria de los mares del sudes-<br />

110


debate<br />

semana sostenible<br />

te asiático, donde su población se<br />

mantiene bajo control gracias a<br />

que otros animales cumplen con<br />

la ardua labor de devorarlos y<br />

mantener el equilibrio del ecosistema<br />

marino. Llegó al Caribe en<br />

circunstancias que los científicos<br />

no han podido determinar con<br />

exactitud. La teoría más aceptada<br />

sugiere que varios de estos<br />

peces se escaparon de sus acuarios<br />

en Florida tras el paso del<br />

huracán Mitch, en 1992, y desde<br />

allí comenzaron a reproducirse,<br />

aprovechando las condiciones<br />

afortunadas y la ausencia de depredadores.<br />

Así, conquistaron de<br />

Oeste a Este las aguas del Caribe.<br />

A Colombia llegó hace algunos<br />

años y desde entonces su<br />

población ha crecido aceleradamente,<br />

convirtiéndose en un<br />

peligro para la estabilidad del<br />

ecosistema del arrecife caribeño,<br />

pues se alimenta de los juveniles<br />

de otras especies y lo hace con<br />

una voracidad incontenible.<br />

Varias voces se han alzado<br />

para llamar la atención sobre<br />

este problema. El chef Jorge<br />

Rausch, en colaboración con la<br />

Fundación Palmarito y la Fundación<br />

Clinton, comenzó hace<br />

un par de años a promover los<br />

usos culinarios del pez león y lo<br />

El pez león se<br />

alimenta de los<br />

ejemplares juveniles<br />

de otras especies<br />

con una voracidad<br />

incontenible.<br />

incluyó en el menú de sus restaurantes.<br />

Así mismo, ha motivado<br />

a sus colegas para que lo<br />

ofrezcan y trabaja con los pescadores<br />

artesanales para regularizar<br />

sus métodos de extracción,<br />

alistamiento y comercialización.<br />

Hoy, Jorge vende unos 40 kilos<br />

semanales de filete de pez león y<br />

otros restaurantes como Harry<br />

Sasson, La Fragata y Carmen<br />

(Medellín) lo están ofreciendo.<br />

Si bien la problemática de<br />

ese particular animal ha tenido<br />

una gran difusión, no es la<br />

única relacionada con especies<br />

foráneas. Según estima el Instituto<br />

de Investigación de Recursos<br />

Biológicos Alexander von Humboldt,<br />

en Colombia existen 581<br />

especies invasoras, que incluyen<br />

peces, anfibios y plantas. Gran<br />

parte de ellas significan una<br />

amenaza para la estabilidad de<br />

los ecosistemas locales y para la<br />

supervivencia de las especies endémicas.<br />

Por ejemplo, los científicos<br />

sugieren que la trucha arco<br />

iris, una especie invasora, puede<br />

ser la culpable de la extinción del<br />

pez capitán de la sabana.<br />

Otro caso dramático es el de<br />

la rana toro. Durante los años<br />

ochenta fue introducida al país<br />

para aprovechar comercialmente<br />

su carne, pero luego se convirtió<br />

en una especie señalada de<br />

transmitir enfermedades, depredar<br />

otros anfibios y alterar<br />

los ecosistemas. Incluso, fue catalogada<br />

por el Global Invasive<br />

Species Database como una de<br />

las 100 peores invasoras.<br />

Según María Piedad Baptiste,<br />

experta del programa de<br />

Biología de la Conservación y<br />

Uso de la Biodiversidad del<br />

Instituto Humboldt, 109 de las<br />

especies invasoras que existen<br />

en Colombia son de alto riesgo,<br />

como el caracol de tierra,<br />

la hormiga loca, la perca americana,<br />

el buchón de agua o el<br />

pasto kikuyo, traído desde las<br />

sabanas africanas.<br />

Las facilidades de transporte<br />

entre regiones y las interacciones<br />

generadas por<br />

la globalización favorecen la<br />

entrada de nuevas especies<br />

invasoras, que desplazan las<br />

locales, ocasionan pérdida de la<br />

biodiversidad y propagan enfermedades,<br />

entre otros impactos.<br />

Los esfuerzos por contralar a<br />

los invasores son fundamentales<br />

para mantener el equilibrio<br />

natural del país.<br />

Las<br />

intrusas<br />

A través de las resoluciones 848 de 2008, 207 de<br />

2010 y 654 de 2011, el Ministerio de Ambiente<br />

y Desarrollo Sostenible emite el listado para Colombia<br />

de aquellas especies que está prohibido<br />

introducir a país por considerarse invasoras y<br />

peligrosas para los ecosistemas.<br />

Inverterbrados<br />

• Caracol de tierra<br />

• Mejillón<br />

• Hormiga loca<br />

• Caracol gigante<br />

africano<br />

• Jaiba azul<br />

• Jaiba<br />

• Camarón del<br />

indopacífico<br />

Peces<br />

• Pez león<br />

• Trucha común o<br />

trucha europea<br />

• Trucha arco iris<br />

• Tilapia nilótica<br />

• Carpa común<br />

• Perca americana<br />

• Tilapia negra<br />

• Gurami, piel de culebra<br />

anfIbIos<br />

• Rana Coqui<br />

• Rana toro<br />

flora<br />

• Buchón<br />

• Alga marina<br />

• Retamo espinoso<br />

• Retamo liso<br />

• Canutillo, yaragua<br />

111


medioambiente<br />

Historia de un<br />

cuerpo moribundo<br />

“Miles de personas han<br />

sobrevivido sin amor, ninguna<br />

sin agua”, W. H. Auden.<br />

FOTO: Archivo Semana - Alejandro Acosta<br />

En 1951 había cerca de<br />

870.000 habitantes en<br />

Bogotá, y las aguas residuales<br />

de todas estas<br />

personas iban a parar<br />

al torrente del río<br />

Bogotá. Hoy en día, la población<br />

alcanza las ocho millones de personas<br />

y aún pasa lo mismo. Este<br />

cuerpo de agua es la alcantarilla<br />

abierta más grande de Colombia.<br />

Por Andrés Urraza Carrizosa<br />

Hace poco navegué un tramo<br />

del río Bogotá en compañía de<br />

Luis Fernando Vásquez, director<br />

de la Fundación Al Verde Vivo,<br />

que se encarga de recuperar los<br />

territorios hídricos degradados<br />

por el hombre. Me contó la verdad<br />

de una realidad nefasta que<br />

afecta las aguas de esta fuente<br />

que desciende serpenteando por<br />

el territorio colombiano, mientras<br />

sus crecientes índices de contaminación<br />

van exterminando la<br />

vida que se encuentra a lo largo<br />

de sus 380 kilómetros de longitud.<br />

Según Fernando, el río Bogotá<br />

se está ‘recuperando’ desde<br />

que él tiene memoria, pero<br />

misteriosamente sus aguas cada<br />

vez son menos aguas y más<br />

otra cosa. “Un río no se debe intervenir”,<br />

explica este activista<br />

114


crónica<br />

semana sostenible<br />

con más de 20 años de experiencia<br />

encima. “Se debe dejar<br />

correr naturalmente, controlando<br />

las vertientes que sobre<br />

él vienen a parar”, agrega.<br />

Según estudios de<br />

la Fundación, la<br />

metamorfosis del río<br />

Bogotá se cataloga<br />

en cuatro etapas:<br />

• La primera comienza con el<br />

nacimiento de un río puro y<br />

cristalino a unos 97 kilómetros<br />

al norte de Bogotá en medio<br />

del páramo de Guacheneque.<br />

A una altura aproximada de<br />

3.250 metros sobre el nivel del<br />

mar, la vida de peces de aguas<br />

claras como la trucha y el capitán<br />

prospera sin contratiempos<br />

sobre su curso. Guacheneque<br />

es una reserva natural protegida<br />

por el Gobierno, así que la<br />

naturaleza se encuentra casi<br />

inalterada por el hombre.<br />

• La segunda etapa empieza en<br />

Villapinzón, un pueblo ubicado<br />

en el departamento de Cundinamarca,<br />

con cerca de 18.000<br />

habitantes, y famoso por sus<br />

curtiembres artesanales. En<br />

este lugar, las aguas negras<br />

y vertimientos industriales<br />

que emergen de sus adentros<br />

empiezan a colorear de un<br />

amarillo quemado el cuerpo<br />

transparente del hermoso río.<br />

Aunque la trucha desaparece,<br />

aún hay vida de cangrejos y<br />

otros peces como la carpa.Un<br />

poco más abajo de Villapinzón,<br />

en Suesca, nos embarcamos<br />

para navegar parte del río<br />

y entrar en contacto directo<br />

con la realidad de sus aguas.<br />

El caudal ya venía sucio desde<br />

arriba, pero a nadie parecía<br />

importarle. Remábamos con<br />

calma entre las imponentes<br />

montañas suescanas. El entorno<br />

era increíblemente hermoso.<br />

Pastos frondosos y árboles<br />

abundantes delineaban el perímetro<br />

del cauce.El río llevaba<br />

poca agua como consecuencia<br />

del verano, pero esto no fue suficiente<br />

para frenar el poderoso<br />

caudal de algunos rápidos<br />

que se atravesaron frente a<br />

nosotros, sumándole un poco<br />

de aventura a nuestra visita.<br />

Las violentas corrientes del río<br />

volcaron sus entrañas sobre<br />

la embarcación, amenazando<br />

con hundirla, pero la pericia<br />

de nuestro monitor hizo que el<br />

bote neumático se acomodara<br />

nuevamente. Remamos durante<br />

algunas horas más disfrutando<br />

del paisaje, hasta que fue<br />

hora de desembarcar y descubrir<br />

lo que sucedía aguas abajo<br />

hasta su desembocadura.<br />

• La tercera etapa se extiende<br />

desde la desembocadura de los<br />

ríos Juan Amarillo, Suba y Tocaima.<br />

Aquí la vida de animales<br />

macroinvertebrados y de<br />

peces desaparece por completo<br />

y deja como únicos huéspedes<br />

de las aguas pestilentes a<br />

organismos especializados en<br />

la degradación de materia orgánica,<br />

como hongos y bacterias.<br />

El río Bogotá se convierte<br />

“El río Bogotá se<br />

está ‘recuperando’<br />

desde que<br />

tengo memoria”:<br />

Fernando Vásquez.<br />

en una auténtica alcantarilla<br />

abierta cuyo principal alimento<br />

son las aguas residuales domésticas<br />

e industriales.<br />

Cuando todo parece estar<br />

sentenciado, pues el futuro de<br />

esta fuente es tan oscuro como<br />

sus aguas, aparece sobre<br />

su cauce el imponente Salto del<br />

Tequendama. Esta hermosa<br />

cascada deja caer las inmundas<br />

aguas desde una altura<br />

aproximada de 157 metros,<br />

dándole una segunda oportunidad<br />

para llenarse de oxígeno.<br />

Las gotas se aventuran desde<br />

las alturas estrellándose contra<br />

las rocas del fondo y forman<br />

una especie de bruma que nu-<br />

Cifras<br />

380<br />

kilómetros<br />

es la longitud<br />

del cuerpo<br />

de agua.<br />

800.000<br />

millones de<br />

pesos se han<br />

invertido<br />

durante las<br />

últimas dos<br />

décadas en la<br />

recuperación<br />

del río Bogotá.<br />

42<br />

municipios<br />

de Cundinamarca<br />

son<br />

tocados por<br />

las aguas<br />

del río.<br />

bla algunas partes, dándole un<br />

toque de misterio al panorama.<br />

Recuerdo ahora que, cuando<br />

pequeño, mi familia y yo parábamos<br />

a observar este paisaje<br />

desde el mirador del Hotel del<br />

Salto. Quedaba hipnotizado<br />

por su rara belleza. Por un momento<br />

olvidé la triste realidad<br />

escondida tras los humos distractores<br />

de la espesa niebla.<br />

Una vez abajo, el cauce del<br />

río se inclina y deja correr las<br />

aguas con mayor velocidad y<br />

airea, aun más, su torrente. Los<br />

tubos de carga y las turbinas de<br />

la hidroeléctrica también ponen<br />

su granito de arena para<br />

impulsar las aguas y enviarlas<br />

con mayor rapidez cuesta<br />

abajo en busca de la libertad.<br />

Pero cuando todo parece mejorar,<br />

viene una nueva etapa que<br />

trunca la vida de este cuerpo<br />

hídrico y enluta su existencia.<br />

• En su última etapa, posterior<br />

a la población de Tocaima, el<br />

cauce del río pierde algunos<br />

grados en su inclinación y las<br />

aguas desaceleran considerablemente;<br />

devuelven a los<br />

vientos parte del oxígeno recuperado<br />

durante el efímero<br />

frenesí purificador de la tercera<br />

etapa. El lento transitar de<br />

las corrientes cansadas que<br />

se quedan ya sin fuerzas para<br />

respirar, son rematadas por las<br />

vertientes de más aguas negras<br />

provenientes de otros pueblos.<br />

Así pues, termina el recorrido<br />

del agonizante río Bogotá que,<br />

llegando a la ciudad de Girardot,<br />

con una herida de muerte,<br />

vomita sus restos sobre<br />

el cuerpo del Río Magdalena.<br />

El ‘progreso’ avasallador de<br />

la ciudad olvidó planificar<br />

con miras hacia el futuro.<br />

Las personas siguen ubicándose<br />

a lo largo de la cuenca,<br />

sin comprender la realidad<br />

aterradora que hiere mortalmente<br />

este cuerpo hídrico,<br />

que nace virgen en las alturas<br />

y va muriendo lentamente<br />

asfixiado por la ignorancia<br />

impune de un pueblo.<br />

115


Opinión<br />

Una realidad<br />

inaplazable<br />

*Presidente<br />

de la Junta<br />

Directiva de la<br />

Alianza Clima<br />

y Desarrollo<br />

(CDKN) y<br />

director del<br />

centro de<br />

pensamiento<br />

más importante<br />

de Inglaterra,<br />

Overseas<br />

Development<br />

Institute (ODI).<br />

No hay argumentos<br />

que puedan<br />

contrarrestar<br />

los de la ciencia.<br />

Nosotros,<br />

como raza humana,<br />

estamos<br />

emitiendo carbono a un ritmo que<br />

va a causar que el nivel del mar<br />

aumente, que la temperatura siga<br />

subiendo y que el clima muestre<br />

eventos más extremos que los que<br />

ya hemos visto, como huracanes,<br />

inundaciones y tifones.<br />

A pesar de que se habla de<br />

tomar acciones inmediatas, las<br />

emisiones siguen subiendo: este<br />

año las cifras se dispararon y se<br />

registraron récords nuevos sobre<br />

la cantidad de contaminación tóxica<br />

en la atmósfera.<br />

Los países en desarrollo no<br />

son los grandes culpables. Si<br />

partimos de una base per cápita,<br />

hay que señalar a los países<br />

más ricos, menos China debido<br />

al tamaño de su población, como<br />

los que deben cargar con el<br />

peso de la culpa.<br />

¿Esto quiere decir que los<br />

países en desarrollo, como Colombia,<br />

pueden sentarse y jugar<br />

el papel de observadores? Definitivamente<br />

no, por tres razones.<br />

Primero, nadie será inmune si el<br />

clima cambia. Las defensas marítimas<br />

tendrán que fortalecerse<br />

en ciudades como Cartagena.<br />

La agricultura se verá afectada<br />

por las altas temperaturas y los<br />

cambios en la lluvia. En Colombia,<br />

por ejemplo, se estima que<br />

las condiciones óptimas para el<br />

café serán, en un futuro, a 400<br />

metros más de altitud, lo que<br />

causará que la gran mayoría de<br />

las áreas actuales de producción<br />

sean inviables.<br />

Segundo, los países en desarrollo<br />

quieren seguir creciendo y<br />

deben hacerlo si encuentran los<br />

recursos para combatir la pobreza<br />

y mejorar las condiciones de<br />

vida de sus poblaciones. Colombia<br />

es un caso insignia con una<br />

economía que está creciendo un 4<br />

por ciento cada año. Crecer a este<br />

ritmo implica que la economía<br />

será cuatro veces mayor en 2050.<br />

En este momento, el país emite<br />

1,6 toneladas de CO2 cada año.<br />

Es decir, ya se acerca a las 2 que<br />

esperaba emitir en 2050. Entonces,<br />

será un gran reto mantener<br />

el crecimiento sin aumentar las<br />

emisiones de carbono.<br />

Tercero, el mismo cambio<br />

climático y las medidas que asumamos<br />

para manejarlo tendrán,<br />

inevitablemente, un efecto en las<br />

condiciones del mercado. Las<br />

economías competitivas tendrán<br />

que hacer una inversión significativa<br />

en la eficiencia energética,<br />

en tecnología y productos<br />

nuevos. China, por ejemplo, exporta<br />

aproximadamente 3.000<br />

millones de dólares en paneles<br />

solares a Europa cada año. ¿Qué<br />

industrias en Colombia, me pregunto,<br />

se enfrentarán a retos<br />

nuevos? ¿Y cuáles prosperarán?<br />

Hay, entonces, tres tareas<br />

a las que se enfrentan todos<br />

los países: adaptación al cambio<br />

climático, mitigación de las<br />

emisiones y transformación en<br />

respuesta a los riesgos y oportunidades<br />

económicas. Las acciones<br />

que se tomen frente al<br />

Por Simon<br />

Maxwell*<br />

cambio climático no pueden volverse<br />

enemigas del desarrollo.<br />

Los países más progresistas<br />

en el mundo están repensando<br />

su estrategia futura y<br />

remodelando sus economías.<br />

En Latinoamérica, el desarrollo<br />

compatible con el clima también<br />

se ha vuelto el nuevo punto de<br />

partida. Colombia ha sido un<br />

líder en temas de negociación<br />

internacional y ha introducido<br />

muchos programas innovadores:<br />

el sistema de transporte rápido<br />

en Bogotá, TransMilenio, es<br />

un ejemplo admirado y copiado<br />

en otros lugares del mundo.<br />

Nadie debería pensar, sin<br />

embargo, que las tareas de<br />

adaptación, mitigación y transformación<br />

son fáciles. Habrá<br />

perdedores y ganadores. Los<br />

costos serán altos. Todo tipo de<br />

intereses tendrán que reconciliarse.<br />

Las políticas deberán<br />

asegurarse en el largo plazo. El<br />

liderazgo será clave no solo para<br />

enfatizar que este es un tema<br />

urgente, sino para asegurarse<br />

de que el cambio suceda.<br />

FOTO: ©Photographic Techniques<br />

116


mundo<br />

La semilla<br />

de la discordia<br />

¿cómo sE ProducEn los transGénicos?<br />

En laboratorios se aíslan genes de plantas, bacterias,<br />

hongos o virus resistentes a plagas, sequías, herbicidas, que<br />

retardan la maduración o aceleran su crecimiento.<br />

El ADN de este gen es proyectado sobre células<br />

vegetales, que son los gérmenes de organismos<br />

genéticamente modificados (OGM).<br />

La mayoría de las semillas transgénicas son<br />

estériles. Cada vez que el campesino siembra, tiene que<br />

volver a comprar semillas. Les prohíben venderlas o canjearlas.<br />

Aunque cada año los<br />

transgénicos conquistan<br />

nuevas tierras, aún no<br />

se ha zanjado el debate<br />

sobre los peligros<br />

de los organismos<br />

genéticamente<br />

modificados son el futuro<br />

de la alimentación,<br />

prodigio de la ciencia<br />

y milagro ecológico<br />

para unos, o demonio<br />

para otros. Colombia,<br />

donde la biotecnología<br />

se instala de manera<br />

lenta pero segura, está<br />

en mora de dar una<br />

discusión profunda<br />

sobre este modelo.<br />

INFOGRAFÍA: ekon7studio<br />

Canadá**<br />

11,6 millones<br />

México<br />

160. 000<br />

méxico<br />

Costa Rica<br />

900<br />

Perú<br />

Honduras<br />

27.000<br />

Ecuador<br />

Bolivia<br />

1 millón<br />

Chile<br />

62.000<br />

* Cifras en hectáreas.<br />

** Países que más hectáreas tienen cultivadas<br />

Países con restricciones del<br />

consumo, la siembra o la<br />

importación de transgénicos<br />

GiGantEs dE la<br />

biotEcnoloGía<br />

los transGénicos En El mundo*<br />

Francia<br />

Estados Unidos**<br />

69,5 millones<br />

Colombia<br />

40.000<br />

irlanda<br />

España<br />

116.000<br />

Portugal<br />

9.000<br />

Cuba<br />

3.000 Egipto<br />

1.000<br />

Brasil**<br />

36,6 millones<br />

Paraguay<br />

3,4 millones<br />

Uruguay<br />

1,4 millones<br />

Argentina**<br />

23,9 millones<br />

austria<br />

alemania<br />

luxemburgo<br />

suiza<br />

italia<br />

Venezuela<br />

Burkina Faso<br />

300.000<br />

benín<br />

Rep. Checa<br />

3.000<br />

Eslovaquia<br />

200<br />

Rumania<br />

200<br />

Grecia<br />

Polonia<br />

Hungría<br />

serbia<br />

Sudán<br />

20.000<br />

Kenia<br />

Zambia<br />

Sudáfrica<br />

2,9 millones<br />

bulgaria<br />

India**<br />

10,8 millones<br />

Pakistán<br />

2.8 millones<br />

En 2012,<br />

170 millones<br />

de hectáreas<br />

fueron plantadas por<br />

cerca de 17 millones<br />

de agricultores<br />

en el mundo.<br />

Myanmar<br />

300.000<br />

Japón<br />

China<br />

4 millones<br />

Filipinas<br />

800.000<br />

Australia<br />

700.000<br />

En 2012,<br />

el mercado de<br />

transgénicos movió<br />

15.000<br />

millones de<br />

dólares.<br />

118


transgénicos<br />

Canola<br />

los Cultivos<br />

semana sostenible<br />

Soya<br />

Alfalfa<br />

Remolacha<br />

Tolerantes a los insecticidas.<br />

Maíz<br />

Algodón<br />

Tolerantes a los insecticidas y resisten a ciertos insectos.<br />

Calabaza<br />

Pa pa y a<br />

Frijol<br />

Resisten a algunos virus.<br />

To mate Pimentón Berenjena<br />

Resisten a ciertos insectos y tienen una maduración más<br />

lenta, para evitar que se pudran después de la cosecha.<br />

Menos insecticida: con la adopción de especies que<br />

resisten a los insectos y al glifosato, se necesitan menos<br />

químicos para proteger las plantas.<br />

Más productividad: al reducirse el impacto de las<br />

plagas, el campesino obtiene un mayor rendimiento.<br />

Eso podría prevenir el hambre en el mundo y<br />

preservar tierras libres de explotación agrícola.<br />

Matas todoterreno: suelos áridos o con alta salinidad,<br />

que tradicionalmente no se podían explotar, podrían ser<br />

sembradas con variedades modificadas.<br />

Amable con el planeta: con menos plaguicidas y menos<br />

maquinaria, se emite menos CO 2<br />

y se disminuye la erosión.<br />

Maíz<br />

“la seguridad alimentaria está en<br />

la semilla. la semilla es la fuente<br />

de plantas futuras, es el primer<br />

eslabón de la cadena alimentaria, el<br />

intercambio de semillas ha sido la<br />

base para mantener la biodiversidad<br />

y la seguridad alimentaria”.<br />

lo bueno<br />

en Colombia ogm autorizados<br />

Soya<br />

Remolacha<br />

a zu care ra<br />

Arroz<br />

Algodón<br />

Trigo<br />

Rosas<br />

Lino<br />

Clavel<br />

Vandana Shiva<br />

Activista india<br />

Tolima, Meta<br />

y Córdoba son<br />

los departamentos<br />

con más<br />

plantaciones.<br />

En 2013 se<br />

sembraron<br />

40.790<br />

hectáreas,<br />

76 por ciento de<br />

maíz.<br />

En 2011, Monsanto fue condenada por el ICA a pagar<br />

515 millones de pesos por publicidad engañosa.<br />

En Colombia los productos con transgénicos tienen que<br />

aclararlo en sus etiquetas a menos que estos no alteren la<br />

calidad nutricional. Para Semillas, grupo que se opone a los<br />

OGM, “la resolución es tan débil y tan poco fuerte al exigir el<br />

etiquetado, que finalmente no opera”.<br />

lo malo<br />

Monopolio de la vida: la producción de alimentos depende<br />

de un puñado de multinacionales que amenaza la autonomía de<br />

los granjeros y pone en riesgo la seguridad alimentaria.<br />

Biodiversidad en la mira: en México hay hasta 60 especies<br />

distintas de maíz. Al enfocarse en pocas variedades, se corre el<br />

peligro de perder ese patrimonio. Además, si bien los insectos<br />

y la maleza son considerados como una plaga, cumplen<br />

funciones para mantener el equilibrio de los ecositemas.<br />

Agroindustria y compañía: se estimula un modelo que impulsa el<br />

monocultivo, a la especulación sobre los precios de las materias primas, a un<br />

consumo de agua irresponsable y a enfermedades como la vaca loca.<br />

¿Y de salud?: aunque falte un estudio definitivo que<br />

convenza, se teme que los transgénicos provoquen alergias<br />

o vuelvan el ser humano inmune a los antibióticos.<br />

¿Plantas mutantes?: se teme que las plagas se vuelvan ultraresistentes y ya<br />

no se puedan controlar. Además, a pesar de que las semillas transgénicas son<br />

estériles, algunas se han diseminado en la naturaleza, lo que impide el control y<br />

el seguimiento y puede crear especies híbridas.<br />

CóCteles bioteCnológiCos<br />

To mate<br />

Cabra<br />

Repollo<br />

pez<br />

araña<br />

escorpión<br />

Cerdo ratón E.coli<br />

Se extrajo un gen con propiedades<br />

anticongelantes de un pez<br />

y lo introdujeron en el ADN de<br />

un tomate para que aguantara<br />

bajas temperaturas.<br />

Copiaron los genes que producen<br />

la tela de araña en el ADN<br />

de cabras, para que crean leche<br />

con seda con el fin de fabricar<br />

un material ultrarresistente.<br />

Se inoculó el gen que contiene<br />

el veneno de los escorpiones<br />

para matar las orugas que<br />

comen la verdura. La toxina fue<br />

modificada para no afectar la<br />

salud humana.<br />

Ecocerdo: llamados Enviropigs,<br />

le introdujeron genes que permiten<br />

que su sistema digestivo<br />

degrade hasta 70 por ciento de<br />

los fosfatos de su alimento, lo<br />

que reduce la contaminación de<br />

sus desechos.<br />

Fuentes: Isaaa, Agrobio, Greenpeace, FAO, WHO, Nature, Semillas.org.co<br />

119


tendencias<br />

“No creemos<br />

tener lo suficiente<br />

Peter Senge, uno de los estrategas de negocios más importantes<br />

del último siglo y autoridad mundial del ‘management’, estuvo en<br />

Colombia y habló en exclusiva con Semana Sostenible.<br />

Semana Sostenible: El mundo<br />

empezó a replantearse el modelo<br />

de desarrollo económico<br />

hace 20 años, pero las cifras<br />

muestran que está peor que<br />

en ese entonces. ¿Cuál es su<br />

percepción al respecto?<br />

Peter Senge: No creo que alguien<br />

tenga la respuesta, pero ha<br />

habido ideas bastante interesantes.<br />

Paul Gilding, expresidente<br />

de Greenpeace, considera que en<br />

los próximos tres o cuatro años<br />

los gobiernos van a llegar a un<br />

acuerdo porque el cambio climático<br />

está afectando la economía<br />

mundial. Hay muchos costos que<br />

nadie ha ido sumando y que en<br />

los años venideros nos van a pasar<br />

cuenta de cobro.<br />

Los países en desarrollo tienen<br />

una gran ventaja, porque<br />

todavía están en proceso de industrialización,<br />

entonces cuentan<br />

con más opciones. Pensamos que<br />

Europa y Estados Unidos tienen<br />

el poder, pero eso corresponde al<br />

pasado. En realidad, la influencia<br />

en los siguientes 20 años vendrá<br />

de los países en desarrollo.<br />

FOTO: Claudia Camejo<br />

Semana Sostenible: Las cifras<br />

sobre los problemas ambientales,<br />

sociales y espirituales<br />

nos llenan de miedo. ¿Qué podemos<br />

hacer para no caer en<br />

el fatalismo?<br />

P.S.: Primero tenemos que<br />

involucrarnos, trabajar, hacer<br />

cosas grandes y pequeñas.<br />

Gradualmente vamos a establecer<br />

procesos colaborativos<br />

120


semana sostenible<br />

para ser felices”<br />

“Solo desde el deseo<br />

profundo de reconciliación se<br />

pueden sentar las bases de<br />

una nueva realidad”.<br />

que tengan impacto a mayor<br />

escala. Cuando podamos decir<br />

que estamos reciclando a nivel<br />

nacional para reducir los desechos,<br />

podremos afirmar “es<br />

difícil, pero se puede hacer”.<br />

Semana Sostenible: Muchas<br />

iniciativas en sostenibilidad<br />

mueren por la indiferencia<br />

de la sociedad civil. Sabemos<br />

que es importante, pero no<br />

hacemos nada al respecto.<br />

¿Cómo dar el paso hacia el<br />

compromiso?<br />

P.S.: Hay una práctica importante:<br />

no tratar de convencer<br />

a las personas, porque si<br />

les insistimos, nos pondremos<br />

en lugares opuestos. No perdamos<br />

el tiempo en catequizar a<br />

la gente, más bien contémosles<br />

lo que estamos haciendo y así<br />

crecerá la conciencia colectiva<br />

frente a la situación.<br />

Semana Sostenible: Ha mencionado<br />

que debemos trabajar<br />

en tres aspectos: ambientales,<br />

sociales y espirituales. Es<br />

poco común incluir los problemas<br />

emocionales como la<br />

depresión, el suicidio y la violencia<br />

intrafamiliar, dentro<br />

de las discusiones de futuro.<br />

¿Por qué y cómo trabajar para<br />

integrarlos?<br />

P.S.: Ese es el problema fundamental.<br />

Tenemos que pensar<br />

primero en cómo vivimos y por<br />

qué lo hacemos de esa manera.<br />

De esta forma llegaremos a una<br />

reflexión espiritual fuerte. Humberto<br />

Maturana dice “la historia<br />

sigue el camino de los deseos”,<br />

entonces debemos examinar<br />

nuestros deseos. El consumismo<br />

funciona debido al deseo de sentirnos<br />

cómodos, por eso siempre<br />

queremos más. Nunca pensamos<br />

que tenemos lo suficiente<br />

para ser felices y vivimos prisioneros<br />

de lo que tenemos. La<br />

clave para salir de la cárcel de<br />

lo material es luchar por ser mejores<br />

seres humanos. Podemos<br />

dar ideas innovadoras, compartir<br />

nuestro dinero y tiempo, pero<br />

lo más necesario es poder dar<br />

amor y trabajar por el bienestar.<br />

Semana Sostenible: Además<br />

del trabajo como investigador<br />

y docente, ¿cuál es su propia<br />

revolución? ¿qué otras actividades<br />

personales y familiares<br />

hace en su día a día?<br />

P.S.: Mi papel es contar las<br />

historias de lo que está pasando<br />

y lo que se está haciendo para<br />

traspasar fronteras, ver otras<br />

realidades y aportar en conversaciones<br />

que puedan dar un nuevo<br />

contexto. Muchos años atrás<br />

entendí que lo que quería hacer<br />

era trabajar en los colegios. Entonces<br />

ahora dedico gran parte<br />

de mi tiempo en la formación de<br />

las futuras generaciones.<br />

Semana Sostenible: ¿Cuál ha<br />

sido el hábito más difícil de<br />

eliminar o transformar?<br />

P.S.: Conozco los números,<br />

entiendo qué tan profundas son<br />

las dificultades. Es muy fácil<br />

sentir ansiedad, negatividad y<br />

un fatalismo muy sutil. Entonces<br />

debo trabajar en controlar<br />

mis pensamientos. por medio<br />

de acciones que me lleven al silencio<br />

y me den paz, para poder<br />

volver a las opciones.<br />

Semana Sostenible: Colombia<br />

está en el proceso de firmar<br />

un acuerdo de paz. ¿Qué recomendaciones<br />

haría para<br />

enfrentar el postconflicto?<br />

P.S.: Tuve la oportunidad<br />

de participar en el proceso de<br />

reconciliación en Sudáfrica.<br />

Entendiendo las diferencias<br />

con Colombia, sí creo que el<br />

camino se apalanca en la verdad<br />

y el perdón. Es, además,<br />

determinante iniciar un proceso<br />

de reflexión frente a la Colombia<br />

del futuro, que incluya<br />

a todas las partes. El día en<br />

que Sudáfrica cantó su nuevo<br />

himno nacional, Mandela subió<br />

al pódium a sus dos carceleros<br />

blancos como acto de<br />

amor y perdón. Solo desde el<br />

deseo profundo de reconciliación<br />

se pueden sentar las bases<br />

de una nueva realidad.<br />

Semana Sostenible: ¿En qué está<br />

inspirado el título de su libro<br />

La revolución necesaria?<br />

P. S.: Viene del deseo de iniciar<br />

un renacimiento que posibilite<br />

cambios profundos en la<br />

forma como nos relacionamos.<br />

No está inspirado en temas netamente<br />

políticos, industriales o<br />

sociales. Creo que la fuerza de la<br />

revolución está en la posibilidad<br />

de interconectar todos los aspectos.<br />

La falta de agua afectará<br />

lo social, lo emocional y lo económico.<br />

La verdadera revolución<br />

consiste en dejar de abordar los<br />

problemas de forma aislada para<br />

responsabilizarnos por el todo,<br />

equilibrando las acciones de<br />

corto, mediano y largo plazo.<br />

121


tendencias<br />

el valor<br />

de lo intangible<br />

FOTO: Archivo Semana - Daniel Reina<br />

Pensar en la comunicación estratégica es cada vez más<br />

necesario en términos de sostenibilidad. El sector privado<br />

tiene el reto de entenderla como un elemento estructural y no<br />

como una simple herramienta para fortalecer su reputación.<br />

La gente del puerto de<br />

Buenaventura pasa<br />

sus días en medio de<br />

la escasez. Según el<br />

DANE, 80 por ciento<br />

de los bonaverenses<br />

vive en condición de pobreza, 40<br />

por ciento en estado de indigencia<br />

y 13 por ciento en miseria.<br />

Esta ciudad del Pacífico, donde<br />

escasea el agua, la educación, la<br />

comida y, sobre todo, la esperanza,<br />

fue nombrada a mediados de<br />

este año por el presidente Santos,<br />

capital de la Alianza Pacífico,<br />

un bloque creado entre Chile,<br />

Perú, México y Colombia con el<br />

objetivo de fortalecer el comercio<br />

marítimo regional.<br />

Si bien el anuncio y las enormes<br />

inversiones en infraestructura<br />

que se han llevado a cabo<br />

comienzan a dibujar un nuevo panorama<br />

para la ciudad-puerto, la<br />

visión globalizadora de desarrollo<br />

económico planteada por la Alianza<br />

se encuentra muy lejos de lo que<br />

el contexto local entiende como<br />

progreso. Ese choque de posturas<br />

se debe, según Esperanza Solís −<br />

bonaverense experta en desarrollo<br />

social y exconsultora del Banco<br />

Interamericano de Desarrollo−, a<br />

una falta de diálogo alrededor del<br />

tema entre los inversionistas privados<br />

y el sector social local. “No<br />

hay un interlocutor fuerte en Buenaventura<br />

para este tema”, afirma.<br />

Sin embargo, un nuevo actor<br />

en la zona es la Alianza DPS-Fundación<br />

Carvajal, pues comenzó<br />

un proceso que, según Roberto<br />

Pizarro, director ejecutivo de<br />

la Fundación, “Vamos a implementar<br />

el modelo del Salado en<br />

Buenaventura: llegamos a un territorio<br />

e iniciamos una fase de<br />

consulta en la que indagamos<br />

acerca de sus necesidades y posibilidades<br />

de implementación.<br />

Luego vendrá la inversión”.<br />

Esta unión hace parte del<br />

modelo zonas para la equidad y<br />

la prosperidad –ZEP–. Con su presencia,<br />

busca generar tejido social<br />

y crear institucionalidad en esta<br />

ciudad, que produce más de 4 mil<br />

122


semana sostenible<br />

Tener en cuenta<br />

de forma activa a<br />

las comunidades<br />

es el primer<br />

paso para lograr<br />

un verdadero<br />

desarrollo a<br />

partir de la<br />

comunicación.<br />

millones de pesos anuales en actividades<br />

portuarias y recibe de<br />

vuelta 3,8 por ciento de esa suma;<br />

es decir, 176 mil millones.<br />

Este ejemplo muestra que<br />

Solís tiene razón al decir que<br />

“hablar de desarrollo económico<br />

sostenible sin acordar objetivos<br />

con la población, es un imposible”.<br />

Este escenario refleja lo que<br />

comienza a ser evidente en varios<br />

sectores: la comunicación<br />

ha pasado de tener un papel meramente<br />

instrumental a uno estructural<br />

en la gestión de cambio.<br />

De la alternativa<br />

a la estrategia<br />

Para Javier Espitia, consultor en<br />

comunicación y cambio social de<br />

la FAO, este procedimiento no es<br />

exclusivo, se relaciona con otras<br />

áreas de la profesión. “Lo que antes<br />

era alternativo ha evolucionado<br />

hasta descubrir campos de<br />

trabajo que ni el periodismo ni lo<br />

organizacional niegan”.<br />

Ese proceso, dice Espitia,<br />

comenzó hace pocos años en<br />

América Latina a partir del reconocimiento<br />

de la capacidad<br />

participativa de los públicos de<br />

interés. Lejos de lo que planteaban<br />

las escuelas de comunicación<br />

de Europa y Norteamérica,<br />

los estudios de audiencias demostraron<br />

una autonomía existente<br />

en el receptor del mensaje;<br />

la percepción adquirió mayor<br />

relevancia y tuvo lugar un auge<br />

del concepto de reputación.<br />

En ese punto, la comunicación<br />

alternativa comienza a tener<br />

todo que ver con la organizacional,<br />

puesto que hay que entender<br />

las necesidades y perspectivas<br />

de la gente desde las empresas y<br />

abordarlas estratégicamente. El<br />

boom de la responsabilidad social<br />

empresarial (RSE) es, en gran medida,<br />

un resultado de esto.<br />

Si bien la comunicación gesta<br />

el fenómeno, se ha limitado a<br />

una función instrumental en las<br />

estrategias de RSE, al papel de visibilizar<br />

la gestión real o aparente<br />

de las compañías. “Hay empresas<br />

con un discurso de RSE que, más<br />

que otra cosa, es una oficina de<br />

imagen. Otras entendieron que<br />

el asunto era cambiar desde el<br />

comienzo del proceso con tecnologías<br />

sostenibles, apostarle la<br />

generación de estilos de vida, promover<br />

el consumo responsable,<br />

etc. La gran ruptura entre ambas<br />

es la genuinidad de sus apuestas”.<br />

Cambiar el paradigma<br />

Según Claudia Nieto, experta<br />

en cambio social y actual coordinadora<br />

general de la Healthy<br />

Living Initiative del Instituto de<br />

Enfermedades Tropicales, la<br />

RSE demanda un componente<br />

comunicacional importante para<br />

ser un ejercicio real; permite<br />

dinámicas de participación y<br />

concertación de objetivos.<br />

“Da lugar a la transferencia<br />

de conocimiento, al diálogo con<br />

comunidades, a la rendición de<br />

cuentas, la visibilidad y la apropiación;<br />

conceptos aplicables a<br />

cualquier estrategia de RSE”.<br />

Consultores entrevistados<br />

coinciden con esto y enfatizan<br />

que es fundamental integrar la<br />

comunicación a la estructura<br />

de los procesos. En palabras<br />

de María Esteve, directora<br />

general de Llorente & Cuenca<br />

Colombia, “No basta con tener<br />

una estrategia de RSE sólida,<br />

también se requiere una de comunicación<br />

que asegure una<br />

interacción constante con los<br />

públicos interesados”.<br />

Andrés Gómez, General<br />

Manager de FTI Consulting Bogotá,<br />

considera que el principal<br />

tropiezo para lograr lo anterior<br />

es la percepción del fenómeno<br />

de RSE como un tema exclusivamente<br />

relacionado con la<br />

imagen. “Lo importante reside<br />

en qué están haciendo de fondo.<br />

Una vez se tenga claro esto, la<br />

visibilidad es un paso lógico”.<br />

La respuesta para Miguel<br />

Herrera, gerente general de<br />

Burson-Marsteller Colombia,<br />

está en apostarle a la comunicación<br />

como un componente<br />

estructural, ejercicio que desde<br />

Estudios como el Reputation<br />

Institute señalan que hasta<br />

45 por ciento de los factores<br />

que forman la reputación<br />

corporativa están relacionados<br />

con la responsabilidad social.<br />

su perspectiva es incipiente: “Lo<br />

interesante es discutir cuántas<br />

empresas requieren asesoría<br />

para tener una estrategia consistente<br />

en el tiempo”.<br />

En su libro Hacia una teoría<br />

general de la estrategia, Rafael<br />

Pérez y Sandra Massoni sustentan:<br />

“La comunicación es la madre<br />

de todos los intangibles”. Sin<br />

duda, este recurso impalpable<br />

permite explorar alternativas<br />

para evaluar y solucionar las diversas<br />

problemáticas que agobian<br />

nuestro país desde el sector<br />

privado. Esto último es un adeudo<br />

inevitable con Colombia.<br />

123


tendencias<br />

Lo nuevo<br />

del GRI - G4<br />

La guía para elaborar los informes de<br />

sostenibilidad se renovó con el fin de estar más<br />

cerca de los líderes y organizaciones. Mayor<br />

foco en los aspectos relevantes, importancia<br />

en la cadena de valor y mejores formas de<br />

comunicar son algunos de los puntos cruciales.<br />

Por Felipe Arango*<br />

FOTOS: 123RF<br />

Los informes financieros<br />

han sido fundamentales<br />

para el<br />

desarrollo del modelo<br />

económico-financiero<br />

actual. Permiten valorar<br />

las organizaciones, comparar<br />

su desempeño año a año y<br />

son un elemento indispensable<br />

para la toma de decisiones de<br />

gerentes, inversionistas y agencias<br />

públicas. Sin embargo,<br />

existen dos problemas; el primero<br />

es que el sistema actual no<br />

es sostenible ni para la biosfera<br />

y las generaciones futuras, ni<br />

para los millones de personas<br />

que viven excluidos en sociedades<br />

cada vez más desiguales.<br />

El segundo tiene que ver con<br />

que los informes financieros que<br />

dan una visión muy limitada de<br />

los impactos de las actividades de<br />

las organizaciones. La información<br />

que ofrecen no es suficiente<br />

para tomar las decisiones para<br />

cambiar el rumbo de la sociedad.<br />

No toman en cuenta, por ejemplo,<br />

los recursos naturales que consumen<br />

las organizaciones, los criterios<br />

éticos que guían su toma de<br />

decisiones, las emisiones de gases<br />

de efecto invernadero, los impactos<br />

sociales de sus productos y<br />

servicios, o las condiciones de sus<br />

empleados y proveedores.<br />

Con esto en mente, a comienzos<br />

del milenio se creó la primera<br />

versión de la guía GRI (Global Reporting<br />

Initiative) para informes<br />

de sostenibilidad. Hoy es el marco<br />

más adoptado por múltiples<br />

empresas, agencias públicas y<br />

organizaciones de la sociedad<br />

civil que comparten información<br />

alrededor de su desempeño ambiental,<br />

social y económico. La<br />

idea, que por lo obvia no deja de<br />

ser poderosa, es proporcionarle<br />

de manera transparente a la<br />

sociedad información relevante<br />

que le permita tomar decisiones<br />

acertadas en relación a las<br />

organizaciones que la afectan.<br />

Decisiones como trabajar o no<br />

para una organización, comprar<br />

sus productos, invertir en<br />

sus acciones, iniciar campañas<br />

de activismo en su contra,<br />

convertirse en su aliado o recomendarla<br />

a un amigo, deberían<br />

basarse en la información<br />

sobre el valor real que genera la<br />

organización para la sociedad<br />

y los impactos que tiene en las<br />

personas y los ecosistemas.<br />

El componente<br />

ambiental es<br />

solo uno de<br />

los puntos<br />

que se tienen<br />

en cuenta a la<br />

hora de hacer<br />

un informe de<br />

sostenibilidad.<br />

124


semana sostenible<br />

No se puede continuar viviendo<br />

bajo la sombra de un sistema<br />

financiero, un paradigma<br />

empresarial y una masa de consumidores<br />

que consideran como<br />

asuntos ‘externos’ temas como<br />

la pérdida de la biodiversidad,<br />

las violaciones a los derechos<br />

humanos, la salud humana, el<br />

agua, la corrupción, la equidad,<br />

el bienestar o el cambio climático.<br />

Es urgente, también, que<br />

los líderes de organizaciones en<br />

todos los sectores comprendan<br />

que se está forjando un nuevo<br />

‘contrato social’, en el que es vital<br />

tomar estos asuntos en serio.<br />

La cuarta generación del<br />

GRI, el G4, se lanzó a mediados<br />

de este año. Es más accesible,<br />

mejor estructurada y de navegación<br />

más sencilla que la anterior<br />

–en especial para organizaciones<br />

que informan por primera vez–.<br />

Pero, sobre todo, trae novedades<br />

positivas e importantes para líderes<br />

y organizaciones.<br />

La importancia que se le<br />

da a la cadena de valor<br />

es otro avance del G4.<br />

Mayor foco en lo relevante<br />

El G4 refuerza el énfasis en el<br />

análisis del proceso a través del<br />

cual se priorizan los asuntos<br />

más relevantes sobre los que<br />

debe informar la organización.<br />

Las expectativas de los grupos<br />

de interés, el contexto social y<br />

ambiental de la aldea global, y<br />

las prioridades estratégicas de<br />

la entidad deben ser tomados en<br />

cuenta para definir en una lista<br />

de asuntos ‘materiales’. En esta<br />

nueva versión, se pide que la organización<br />

describa el proceso<br />

por medio del cual los altos directivos<br />

discutieron y priorizaron los<br />

asuntos, así como su evaluación<br />

sobre la efectividad de los sistemas<br />

y estrategias implementados<br />

para cumplir los objetivos establecidos.<br />

La idea es que surjan<br />

transformaciones profundas en<br />

los modelos de negocio y per-<br />

El G4,<br />

la nueva<br />

generación<br />

del GRI,<br />

se lanzó a<br />

mediados<br />

de este año.<br />

cepción de riesgos en las más<br />

altas esferas del gobierno organizacional<br />

como resultado<br />

de estas discusiones. Informes<br />

más enfocados y concisos, con<br />

un análisis objetivo sobre el<br />

desempeño obtenido y metas<br />

claras hacia adelante, soportarán<br />

este proceso.<br />

El valor de la cadena<br />

Otro avance en el G4 es la importancia<br />

que se le da a la cadena<br />

de valor, pues es precisamente<br />

ahí donde ocurren algunos de<br />

los principales impactos. Esto es<br />

cierto tanto ‘río arriba’ como ‘río<br />

abajo’. Una empresa como Apple<br />

reconoce, por ejemplo, que la<br />

huella energética de sus productos<br />

ocurre cuando los usuarios los<br />

encienden y que estos deben jugar<br />

un papel en el reciclaje efectivo<br />

de los mismos. Otras, como<br />

Unilever, reconocen que<br />

su impacto inicia con los<br />

proveedores agrícolas<br />

de materias primas, y<br />

que se extiende hasta<br />

los hábitos de comportamiento<br />

de sus<br />

consumidores. Ya<br />

no es suficiente<br />

responder a la<br />

pregunta ¿qué<br />

es importante?,<br />

sino también ¿dónde<br />

lo es? Se espera que<br />

se presente con transparencia<br />

la estructura<br />

de las cadenas de valor y<br />

los mecanismos utilizados<br />

para trabajar con proveedores,<br />

distribuidores y consumidores en<br />

la reducción de impactos negativos,<br />

así como el trabajo conjunto<br />

para generar innovaciones ambientales<br />

y sociales.<br />

Más allá del informe<br />

Por último, pero no menos importante,<br />

se ha eliminado en el G4<br />

el sistema de calificación A, B, C<br />

que utilizaba el G3, y se ha remplazado<br />

por uno más sencillo de<br />

alineamiento ‘alto’ y ‘básico’. Es<br />

relevante que la atención no se<br />

centre en la calificación obtenida<br />

en el informe, sino en el nivel de<br />

conocimiento de los impactos generados,<br />

los compromisos adquiridos<br />

y las estrategias diseñadas<br />

para alcanzarlos. El proceso de<br />

informar es solo un escalón necesario<br />

en el camino; el principal<br />

paso es el que sigue: transformaciones<br />

en modelos de negocios,<br />

metas más ambiciosas, alianzas<br />

innovadoras y cambios en la destinación<br />

de los recursos.<br />

* Socio fundador de BSD de<br />

Consulting and tripplus.<br />

125


CULTURA<br />

La gran paradoja de las<br />

culturas amenazadas<br />

Fusionar, mezclar o dejar intactas las culturas ancestrales<br />

son algunos de los dilemas que enfrentan los pueblos<br />

para lograr mantenerlas en el tiempo.<br />

FOTOS: AFP<br />

Por Eduardo Arias Villa<br />

En 2008 tuve la fortuna<br />

de viajar a Kenia.<br />

En mi visita al Parque<br />

Nacional Masai<br />

Mara compré una<br />

tela a cuadros roja y<br />

azul. Hace pocas semanas me enteré<br />

de que la marca Louis Vuitton<br />

lanzó su colección de primaveraverano<br />

de 2012 basándose en el<br />

diseño de esa tela (denominada<br />

shuka) y que patentó el diseño, lo<br />

que provocó una controversia.<br />

Sin embargo, lo primero que<br />

pensé al enterarme del debate, instintivamente,<br />

fue: “Ahora sí puedo<br />

salir a la calle con la cobija masai.<br />

Cuento con el aval de Vuitton”.<br />

No lo he hecho. Pero la sola<br />

descripción de algo tan banal como<br />

lo que acabo de contar pinta<br />

de cuerpo entero cómo Occidente,<br />

o lo que llamamos la civilización<br />

occidental, se ha adueñado de la<br />

cultura del planeta y, por razones<br />

de estética o simples leyes del<br />

mercado, decide qué merece sobrevivir<br />

y cómo hacerlo.<br />

No sobra anotar que Colombia<br />

representa la periferia de esa<br />

civilización occidental, al tener un<br />

pie puesto en ella y otro en lo ancestral,<br />

lo que hace que vivamos<br />

en una constante contradicción.<br />

El tema es de nunca acabar.<br />

Por un lado está el debate de las<br />

patentes, un tema jurídico que a<br />

mí, personalmente, me rebasa.<br />

Por otro lado está la supervivencia<br />

misma de los saberes<br />

ancestrales. Y en estos tiempos<br />

que corren, se plantea una gran<br />

paradoja. Primero, su salvación<br />

126


semana sostenible<br />

depende de la supervivencia<br />

misma de las culturas. Cada vez<br />

se hace más difícil que estas se<br />

mantengan al margen de la llamada<br />

civilización occidental, o<br />

que al entrar en contacto con ella<br />

logren mantenerse incólumes.<br />

Culturas muy poderosas como<br />

las de India, Japón o China han<br />

terminado adaptándose a modelos<br />

económicos y sociales occidentales.<br />

Una hibridación en la<br />

que conviven las geishas con las<br />

autopistas y la gran Muralla China<br />

con los rascacielos de acero y<br />

cristal de Shanghái.<br />

Entonces esas culturas, para<br />

sobrevivir, apelan al mecanismo<br />

de hacerse visibles en Occidente.<br />

Y existen varias maneras de<br />

lograrlo. Una de ellas es convertir<br />

ese exotismo en destino<br />

FOTO: Archivo Semana - Juan Carlos Sierra<br />

FOTO: Archivo Semana - Héctor Mora<br />

Telas, joyas y algunas materias primas propias de culturas tradicionales se han convertido en inspiración de grandes diseñadores. En la música ha<br />

pasado lo mismo. En Colombia, agrupaciones como Bomba Estéreo (foto) han utilizado ritmos ancestrales para hacer sus propias creaciones.<br />

turístico, con los riesgos de caricaturización<br />

que ello conlleva.<br />

Otro, lograr que esos objetos tradicionales<br />

se puedan vender en<br />

almacenes de la Quinta Avenida<br />

de Nueva York. O si no, unir artesanía<br />

con diseño, crear objetos<br />

contemporáneos a partir del uso<br />

de tradiciones de cestería, cerámica<br />

o tejido. Esta es una tarea<br />

que Artesanías de Colombia ha<br />

impulsado desde hace más de 20<br />

años, y ha logrado que los artesanos<br />

mejoren sus ingresos al incorporar<br />

sus técnicas en objetos que<br />

se venden a buen precio, mientras<br />

aprenden a mejorar la manufactura<br />

misma de sus objetos tradicionales.<br />

Y surge la pregunta<br />

inevitable: ¿es eso bueno o malo?<br />

¿Gracias al diseño, las tradiciones<br />

folclóricas amenazadas logran<br />

una segunda oportunidad? ¿Pero<br />

acaso no es una manera de matar<br />

a pedacitos una tradición?<br />

En términos de música resulta<br />

evidente que las llamadas<br />

fusiones o mezclas amenazan la<br />

esencia misma de una tradición.<br />

Sin embargo, gracias a estas, que<br />

pueden ser vistas como una apropiación<br />

de lo tradicional y tribal<br />

por parte de Occidente, muchos<br />

ritmos y manifestaciones que parecían<br />

condenadas al olvido o a<br />

la llamada invisibilidad, comienzan<br />

a tener protagonismo.<br />

Un clásico ejemplo, anterior<br />

a la fiebre de las mezclas y las fusiones,<br />

se dio en los primeros años<br />

sesenta, durante la llamada ‘invasión<br />

británica’, cuando, detrás<br />

de los Beatles, llegaron a Estados<br />

Unidos (y de allí al mundo entero)<br />

agrupaciones como los Rolling Stones<br />

y los Animals que cantaban temas<br />

de autores como Willie Dixon<br />

y Muddy Waters. El público norteamericano<br />

preguntaba acerca de<br />

esas canciones, mientras los músicos<br />

británicos no podían creer que<br />

en Estados Unidos el público promedio<br />

no supiera que se trataba<br />

de intérpretes de rhythm and blues<br />

de Chicago, que no pasaban en las<br />

emisoras blancas de radio.<br />

Casos similares se han visto<br />

en Colombia. Hace pocos años<br />

ChocQuibTown y Bomba Estéreo<br />

solo se conocían en nichos muy<br />

determinados. Hoy, los medios<br />

masivos que les habían dado la espalda<br />

los promueven. Pero eso no<br />

es todo. Músicos de fusión se han<br />

encargado de investigar las raíces<br />

del folclor y terminan grabando a<br />

veteranos que, de no haber sido<br />

por los esfuerzos de sus discípulos<br />

citadinos, habrían muerto sin<br />

dejar ni un solo compás grabado.<br />

Entonces, ¿qué es preferible?<br />

¿Que los guepardos se extingan<br />

definitivamente cuando desaparezcan<br />

sus hábitats naturales, o<br />

salvarlos al convertirlos en animales<br />

domésticos y, por lo tanto, que<br />

dejen de ser guepardos? Las mismas<br />

preguntas pueden hacerse a<br />

las culturas ancestrales. Y no parece<br />

haber respuestas a la vista.<br />

127


CIUDADES SOSTENIBLES<br />

Plazas<br />

al aire libre<br />

Desde hace nueve años el campo invadió<br />

a Bogotá con frutas, verduras y hortalizas<br />

cosechadas en las veredas cercanas a la<br />

capital. Para los consumidores, los mercados<br />

campesinos se convirtieron en una opción<br />

de acceder a productos de excelente calidad<br />

y contribuir con un comercio justo.<br />

¿Cuándo y dónde?<br />

Los mercados se realizan cada 15 días en 14 parques de la capital.<br />

El concepto<br />

INFOGRAFÍA: ekon7studio<br />

Los mercados campesinos son una iniciativa del<br />

Gobierno Distrital para visibilizar las propuestas<br />

de producción de las comunidades campesinas,<br />

indígenas y afrodescendientes sobre la soberanía<br />

y autonomía alimentaria de la región centro<br />

del país. Representa, además, la posibilidad de<br />

acercar dos visiones: la rural y la urbana, en un<br />

espacio que devuelve en el tiempo a la población,<br />

al recordar los días de mercado de hace décadas.<br />

128


semana sostenible<br />

La oferta<br />

Los campesinos ofrecen las mejores verduras, frutas, legumbres, hortalizas<br />

y comidas típicas. Entre los que sobresalen: lechuga, ahuyama, papa,<br />

plátano, banano, cítricos y yuca; además de productos de la población<br />

afrocolombiana como chontaduro y coco. Los pueblos indígenas<br />

también tienen su espacio con algunas artesanías.<br />

Las organizaciones campesinas que participan en estos mercados están representadas por el Comité de<br />

Interlocución Campesina y Comunal –CICC–, y la Alianza Campesina y Comunal –Alcampo–.<br />

Los participantes<br />

En total,<br />

son casi<br />

1.000<br />

campesinos<br />

de<br />

70<br />

municipios<br />

de los departamentos de Cundinamarca,<br />

Boyacá, Tolima, Meta y la Bogotá rural,<br />

los que hacen presencia en los mercados.<br />

Así mismo, la Administración Distrital los apoya logísticamente a través de los sectores de Desarrollo<br />

Económico, Seguridad y Convivencia, Salud, Integración Social, Ambiente, Cultura, Recreación y Deporte.<br />

En cifras<br />

14<br />

mercados<br />

campesinos<br />

se han llevado a cabo<br />

en la Plaza de Bolívar<br />

de 2004 a 2013.<br />

735 6 22<br />

se han realizado en<br />

por un valor<br />

parques de Bogotá, con<br />

cercano<br />

ventas de alrededor de millones a los millones<br />

mercados<br />

campesinos<br />

de toneladas<br />

de alimentos<br />

de pesos.<br />

Con el convenio entre la Secretaría Distrital<br />

de Desarrollo Económico y la Federación<br />

Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria<br />

(Fensuagro) para la realización de los<br />

mercados, se han beneficiado<br />

1.644<br />

familias campesinas.<br />

¡Participe!<br />

Cuéntenos, a través<br />

de nuestra cuenta<br />

en Twitter, si en su<br />

ciudad se realiza<br />

esta actividad.<br />

Recuerde incluir<br />

fechas y lugares.<br />

Fuente: Secretaría Distrital de Desarrollo Económico –SDDE–.<br />

129


ENTREVISTA<br />

FOTO: AFP<br />

“Los activistas no son<br />

educados y las personas<br />

educadas no quieren<br />

hacer activismo”<br />

Pavan Sukhdev, reconocido como<br />

uno de los principales abanderados<br />

de la economía verde, estuvo en<br />

Colombia presentando su último<br />

libro, Corporación 20/20. Semana<br />

Sostenible habló con él.<br />

Semana Sostenible: Usted ha<br />

hablado en varias ocasiones sobre<br />

la invisibilidad económica<br />

de la naturaleza y la importancia<br />

de darle un valor monetario.<br />

¿Cómo se logra eso?<br />

Pavan Sukhdev: Primero<br />

quiero aclarar que hay una diferencia<br />

entre precio y valor. El<br />

primero es algo por lo que se<br />

paga mientras que el segundo<br />

es algo que se recibe. En el caso<br />

de la naturaleza, el problema<br />

no es el precio sino el valor. La<br />

gente piensa, casi psicológicamente,<br />

que no tiene valor por<br />

el simple hecho de que siempre<br />

ha estado ahí y eso hace que sea<br />

‘gratuita’. Este tipo de pensamiento<br />

es una victoria del capitalismo<br />

que nos ha enseñado<br />

que todo lo público es gratuito y<br />

que solo lo privado cuesta.<br />

Una corporación 20/20 genera<br />

capital humano y social.<br />

Este dilema es el mismo de<br />

los minerales: ¿a quién le pertenecen?<br />

¿Cómo los valoramos?<br />

Para el capitalismo esto se volvió<br />

la gallinita de los huevos de oro,<br />

exactamente porque nadie ha<br />

respondido esas preguntas.<br />

Semana Sostenible: En su libro<br />

Corporación 20/20, usted<br />

dice que las consecuencias del<br />

abuso de los recursos naturales<br />

va a impactar primero a los<br />

pobres. ¿Por qué?<br />

P.V.: Por una razón muy sencilla<br />

los pobres están sujetos a<br />

lo público. Eso quiere decir que<br />

dependen más de la naturaleza<br />

y lo que ofrece. Entonces, si los<br />

recursos se acaban, los hogares<br />

pobres no tendrán acceso a bienes<br />

y servicios públicos que les<br />

permitan vivir con dignidad.<br />

Semana Sostenible: ¿Cuál es<br />

el rol de la educación en este<br />

problema? ¿Cree que el sistema<br />

debe cambiar e incluir conceptos<br />

nuevos que enseñen a<br />

valorar los recursos?<br />

P.V.: Este es uno de los grandes<br />

problemas porque, cuando<br />

hablamos de medioambiente y<br />

sostenibilidad, muchas veces se<br />

asocia con activismo y, por lo general,<br />

los activistas no son educados y<br />

las personas educadas no quieren<br />

hacer activismo. Es nuestro deber<br />

brindarle educación a todo el mundo<br />

porque el conocimiento es, sin<br />

duda, un modelo de responsabilidad.<br />

Necesitamos líderes formados<br />

que no conduzcan el planeta como<br />

si fuera un simple juego de dados.<br />

Semana Sostenible: Usted habla<br />

de nuevas corporaciones,<br />

las 20/20, versus las viejas,<br />

las 19/20. ¿Qué diferencia<br />

unas de otras?<br />

P.V.: Una corporación 19/20<br />

cumple con cuatro puntos: busca<br />

siempre su crecimiento, hace un<br />

lobby activo, tiene un apalancamiento<br />

financiero ilimitado y hace<br />

publicidad sin ética. Una corporación<br />

20/20 transgrede esos cuatro<br />

puntos que terminan siendo estos:<br />

tiene un propósito social, es una<br />

fábrica de capital, es decir, muestran<br />

sus externalidades; genera<br />

capital humano y capital social.<br />

Semana Sostenible: Para terminar,<br />

quisiera que explicara,<br />

para una corporación, ¿cuál es<br />

la diferencia entre crecimiento<br />

y desarrollo?<br />

P.V.: Cuando una corporación<br />

crece, hablamos solo de su tamaño<br />

en términos de sus instalaciones,<br />

la cantidad de empleados o de<br />

equipos que tiene. Cuando se desarrolla,<br />

hablamos de algo transversal.<br />

De una transformación<br />

que se da al interior de la empresa<br />

y que cambia su organización, la<br />

manera en que los jefes se relacionan<br />

con los empleados y cómo<br />

se trabaja. Es un lugar equitativo,<br />

horizontal y transparente.<br />

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