17.11.2014 Views

1hKOvaC

1hKOvaC

1hKOvaC

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

EVANGELIO Y VIDA 7<br />

LUZ, MÁS LUZ • MUÑECOS IMPOSIBLES<br />

Cuando el humano se enfrenta a la realidad de Dios, a veces se rinde y<br />

cae preso de un lazo de amor del que solo con gran esfuerzo puede liberarse.<br />

Pero a menudo cierra los ojos y los oídos a tan patente realidad,<br />

alegando que no es tangible, que no sabe, no huele, no tiene forma,<br />

no emite música celestial. No importa; Dios quiere ser amado libremente,<br />

quiere ser correspondido por humanos libres, ávidos de trascendencia.<br />

No meterá a la fuerza una idea de sumisión o conversión,<br />

porque sus amados no somos muñecos dirigidos. Derribó del caballo a<br />

Pablo, pero esperó a que él le llamase: ¿Quién eres, Señor? (Hch 9, 5).<br />

Él nos empujará, pero no caeremos en sus brazos si no queremos.<br />

LIBROS •<br />

EL PAPA JUAN XXIII<br />

Prisca y Áquila.<br />

Con la versión original del “Discurso a la luna”<br />

Agasso, Domenico sr. Agasso, Domenico jr. P.V.P. 15,50 €<br />

Fallecido hace medio siglo, Juan XXIII sigue siendo uno de<br />

los papas más queridos. Con su sencillez y su sabiduría supo<br />

llegar al corazón de creyentes y no creyentes. Sus enseñanzas,<br />

sus gestos y sus palabras siguen vivas para los que lo<br />

conocieron, pero merecen ser recordadas a las nuevas generaciones.<br />

Es lo que se propone esta biografía, que demuestra<br />

un profundo conocimiento del Pontífice y de su tiempo, y<br />

que recopila los momentos más significativos de su vida. Un<br />

libro ameno y sencillo que nos ofrece una nueva perspectiva<br />

del Papa Bueno. El libro incluye la transcripción íntegra<br />

de uno de los mensajes más emotivos del Pontífice, el "Discurso a la luna", que<br />

Juan XXIII pronunció sin papeles desde la ventana del Palacio apostólico vaticano<br />

en la tarde del 11 de octubre de 1962, día de la solemne apertura del<br />

Concilio Vaticano II. Una buena lectura antes de su canonización el domingo<br />

que viene.<br />

APUNTES<br />

PARA EL DÍA A DÍA<br />

(375)<br />

Resucitó.<br />

Alegraos (Mt 28,9)<br />

Ocurrió en el silencio de Dios.<br />

“Dios ha resucitado a Jesús” (Hch<br />

2,24.32; 3,26).<br />

De Galilea a Jerusalén fue el grito<br />

unánime y gozoso de los Apóstoles.<br />

En el origen de la fe en la muerte y<br />

resurrección de Jesucristo, los testimonios<br />

del sepulcro vacío y de las<br />

apariciones del Resucitado se iluminan<br />

mutuamente. Todo adquiere<br />

nuevo sentido y nueva luz. No porque<br />

haya resucitado un muerto, sino<br />

porque quien ha resucitado es el<br />

mismo Cristo que fue crucificado.<br />

Por eso la resurrección de Jesús es<br />

palabra de gozo y bienaventuranza,<br />

que invita a la alegría desbordante<br />

(Mt 28,8s;Lc 24,41.52).<br />

Todos los relatos y textos de la resurrección<br />

de Jesús, en su diversidad<br />

de formas coinciden: la resurrección<br />

es algo que le ha sucedido a Jesús,<br />

algo que se ha producido en el Crucificado<br />

y no en la conciencia de sus<br />

discípulos. Dios ha resucitado a Jesús,<br />

el Nazareno. Ni el sepulcro ni el<br />

infierno han podido con Él.<br />

La resurrección de Jesús es un hecho<br />

anterior a todo lo que sus seguidores<br />

han podido vivir después. Es el<br />

acontecimiento que los ha arrancado<br />

de su frustración y desconcierto después<br />

de la muerte de Jesús. Con la<br />

resurrección de Jesús se transforma la<br />

adhesión de sus discípulos a Él.<br />

El encuentro con el Resucitado<br />

sana la dureza de corazón de sus<br />

discípulos y transforma todo su temor<br />

en gozo (cf Mc 16,8-14; Lc<br />

24,13-53; Jn 20, 19-31). La muerte<br />

ya no tiene poder sobre Él. “Ha sido<br />

vencida” (1 Cor 14,54-55). El Resucitado<br />

no vive despojado de su corporalidad.<br />

El Nazareno vive ahora una<br />

existencia transfigurada. En ella contemplamos<br />

nuestra bienaventuranza<br />

y nuestro destino. Su corporeidad resucitada<br />

es el signo y el comienzo de<br />

nuestra existencia futura y del futuro<br />

del universo (1Cor 15,20.23).<br />

ÚLTIMAS PLAZAS<br />

Arzobispo Emérito de Zaragoza

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!