5 Ricardo mariño_int - Plan Nacional de Lectura - Educ.ar
5 Ricardo mariño_int - Plan Nacional de Lectura - Educ.ar
5 Ricardo mariño_int - Plan Nacional de Lectura - Educ.ar
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Hay fantasmas<br />
en mi cu<strong>ar</strong>to<br />
Merce<strong>de</strong>s Pérez Sabbi<br />
No sé quién apagó la luz; pero mi cu<strong>ar</strong>to quedó oscuro.<br />
Debía avanz<strong>ar</strong>; pero… ¿hacia dón<strong>de</strong> Sentía la presencia<br />
<strong>de</strong> ellos acosándome en el silencio. Sí, lo sabía, estaban allí,<br />
en algún rincón mirándome <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>ar</strong>riba o al ras <strong>de</strong>l piso. Un<br />
ja<strong>de</strong>o orientó mis pasos, una risa s<strong>ar</strong>cástica los <strong>de</strong>svió.<br />
¡Auuuuuuuuuuu...! Se altern<strong>ar</strong>on los sonidos: risas..., gemidos...,<br />
risotadas..., aullidos. Tropecé, giré velozmente. Estaban<br />
allí, lo sabía. Los <strong>de</strong>dos <strong>de</strong> mis manos buscaban a tientas una<br />
porción <strong>de</strong> algo conocido: la ma<strong>de</strong>ra lateral <strong>de</strong> mi cama, la<br />
punta redon<strong>de</strong>ada <strong>de</strong> mi mesa <strong>de</strong> luz, el almohadón con flecos,<br />
los pelos lanudos <strong>de</strong> mi muñeca. Tambaleé, mis ojos<br />
aquietados no p<strong>ar</strong>pa<strong>de</strong><strong>ar</strong>on, busqué contra lo que supuse que<br />
era la ventana cerrada, pero estaba abierta, un aire fresco <strong>de</strong><br />
tormenta la <strong>de</strong>lató. Mi codo <strong>de</strong>recho rozó con algo: la pila <strong>de</strong><br />
cajas vacías <strong>de</strong> zapatos se vino abajo; ruidos pequeños, risas<br />
gran<strong>de</strong>s. Apenas me <strong>de</strong>tuve. Mi pie corrió una caja y seguí<br />
paso a paso, como mi corazón. De repente, un silencio expectante<br />
y traicionero copó el lug<strong>ar</strong>: nadie reía, nadie ja<strong>de</strong>aba;<br />
pero yo sabía que estaban ahí, ocultos, conteniendo el aire,<br />
hasta que en un instante sin medida, palpé la forma <strong>de</strong> un rostro<br />
caliente..., un cuerpo enrollado, agitado. La luz <strong>de</strong> la lám-<br />
6