BODAS DE PLATA DE JOSÉ Y JUANI 1990 / 2015

BODAS DE PLATA DE
JOSÉ Y JUANI
1990 / 2015
Parroquia San José Utrera 16-05-2015

Saludo del celebrante
MONICIÓN INICIAL
La prevista del Domingo y …
Nos hemos reunido esta tarde porque Juani y yo nos queremos. Y
nos unimos en matrimonio hace 25 años:
-25 años de lucha, de entrega generosa y de amor compartido;
-25 años de esfuerzos de compresión, de pequeños triunfos y
fracasos,
-25 años, por encima de todo, de saber amarnos y perdonarnos.
Y fruto de este amor, son estos tres hijos que hoy nos
acompañan...
Bienvenidos especialmente vosotros, queridos amigos y amigas.
Hace 25 años vinimos ante este altar. Hoy nos sentimos más
jóvenes que nunca por la alegría de esta celebración, y por la
madurez y plenitud de nuestro amor.
Y, no se me olvida lo más importante, con nosotros está Jesucristo.
Él fue el que sembró esta semilla de amor en nuestro corazón, el
que nos unió hace 25 años y el que seguirá siendo la fuerza para
que nos sigamos amando y caminemos por la vida cargados de
ilusión y esperanza.

PRIMERA LECTURA
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles (1,1-11):
En mi primer libro, querido Teófilo, escribí de todo lo que Jesús
fue haciendo y enseñando hasta el día en que dio instrucciones a
los apóstoles, que había escogido, movido por el Espíritu Santo, y
ascendió al cielo. Se les presentó después de su pasión, dándoles
numerosas pruebas de que estaba vivo, y, apareciéndoseles durante
cuarenta días, les habló del reino de Dios.
Una vez que comían juntos, les recomendó: «No os alejéis de
Jerusalén; aguardad que se cumpla la promesa de mi Padre, de la
que yo os he hablado. Juan bautizó con agua, dentro de pocos días
vosotros seréis bautizados con Espíritu Santo.»
Ellos lo rodearon preguntándole: «Señor, ¿es ahora cuando vas a
restaurar el reino de Israel?»
Jesús contestó: «No os toca a vosotros conocer los tiempos y las
fechas que el Padre ha establecido con su autoridad. Cuando el
Espíritu Santo descienda sobre vosotros, recibiréis fuerza para ser
mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los
confines del mundo.»
Dicho esto, lo vieron levantarse, hasta que una nube se lo quitó de
la vista. Mientras miraban fijos al cielo, viéndolo irse, se les
presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron:
«Galileos, ¿qué hacéis ahí plantados mirando al cielo? El mismo
Jesús que os ha dejado para subir al cielo volverá como le habéis
visto marcharse.»
Palabra de Dios

SALMO RESPONSORIAL:
Sal 46,2-3.6-7.8-9
R/. Dios asciende entre aclamaciones;
el Señor, al son de trompetas
Pueblos todos batid palmas,
aclamad a Dios con gritos de júbilo;
porque el Señor es sublime y terrible,
emperador de toda la tierra. R/.
Dios asciende entre aclamaciones;
el Señor, al son de trompetas;
tocad para Dios, tocad,
tocad para nuestro Rey, tocad. R/.
Porque Dios es el rey del mundo;
tocad con maestría.
Dios reina sobre las naciones,
Dios se sienta en su trono sagrado. R/.

2ª LECTURA
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (1,17-23):
Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os
dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo. Ilumine los
ojos de vuestro corazón, para que comprendáis cuál es la
esperanza a la que os llama, cuál la riqueza de gloria que da en
herencia a los santos, y cuál la extraordinaria grandeza de su poder
para nosotros, los que creemos, según la eficacia de su fuerza
poderosa, que desplegó en Cristo, resucitándolo de entre los
muertos y sentándolo a su derecha en el cielo, por encima de todo
principado, potestad, fuerza y dominación, y por encima de todo
nombre conocido, no sólo en este mundo, sino en el futuro. Y todo
lo puso bajo sus pies, y lo dio a la Iglesia como cabeza, sobre
todo. Ella es su cuerpo, plenitud del que lo acaba todo en todos.
Palabra de Dios
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN
MATEO.
Conclusión del santo evangelio según san Marcos (16,15-20):
En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: «ld al
mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que
crea y se bautice se salvará; el que se resista a creer será
condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos:
echarán demonios en m¡ nombre, hablarán lenguas nuevas,
cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no
les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán
sanos.»
Después de hablarles, el Señor Jesús subió al cielo y se sentó a la
derecha de Dios. Ellos se fueron a pregonar el Evangelio por todas
partes, y el Señor cooperaba confirmando la palabra con las
señales que los acompañaban.
Palabra del Señor

HOMILÍA
RENOVACIÓN DE LAS PROMESAS MATRIMONIALES:
Así, pues, ya que queréis renovar vuestras promesas
matrimoniales, unid vuestras manos y manifestad vuestra decisión
ante Dios y su Iglesia.
ESPOSO:
Bendito seas, Señor
porque ha sido un regalo tuyo
recibir a Juani, por mujer.
ESPOSA:
Bendito seas, Señor,
porque ha sido un regalo tuyo
recibir a José, por marido.
AMBOS:
Bendito seas, Señor,
porque nos has asistido amorosamente
en las alegrías y en las penas de nuestra vida.
Te pedimos que nos ayudes a guardar fielmente nuestro amor
mutuo
para que seamos fieles testigos
de la alianza que has establecido con los hombres.

El sacerdote dice al matrimonio:
El Señor confirme con su bondad esta decisión vuestra que habéis
manifestado ante la Iglesia y os otorgue su copiosa bendición. Lo
que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.
ENTREGA DE LAS ALIANZAS.
+ Bendice y santifica, Señor, el amor de tus servidores y, ya que
estos anillos representan para ellos un signo de su fidelidad, haz
que también les recuerden su amor recíproco y la gracia del
sacramento.
El esposo a la esposa:
Juani, recibe esta alianza, en señal de mi amor y fidelidad a ti. En
el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.
La esposa al esposo:
José, recibe esta alianza, en señal de mi amor y fidelidad a ti. En
el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.

ORACIÓN DE LOS FIELES
Por la Iglesia, extendida por todo el mundo, para que Dios, Padre
universal, la haga constructora de paz y fraternidad entre todos los
hombres. Roguemos al Señor.
1. Por nuestros gobernantes, para que busquen soluciones a los
graves problemas que nos afectan: el paro, la delincuencia, el
terrorismo y todos colaboremos para poderlos remediar.
Roguemos al Señor.
2. Por los matrimonios, y especialmente por JOSE y JUANI que
renuevan hoy sus promesas matrimoniales, después de 25
años, por sus hijos: Ana de las Montañas, Antonio y Manolo;
para que se mantengan unidos en el amor y la fidelidad.
Roguemos al Señor.
3. Por las familias, por las relaciones entre todos sus miembros
para que no falte el diálogo y la comprensión, y juntos sepan
mantener la célula principal de nuestra sociedad. Roguemos
al Señor.
4. Por los niños y los jóvenes, esperanza de nuestra sociedad e
Iglesia para que crezcan en un ambiente sano, sembrando en
ellos los valores humanos y cristianos que los hagan hombres
y mujeres comprometidos. Roguemos al Señor.
6. Por todas las personas que sufren en la enfermedad, los que
están más solos, aquellos que están marginados, por los
ancianos, para que encuentren ayuda solidaria y comprensión
de las personas que les rodean. Roguemos al Señor.

7. Por los difuntos de nuestras familias, que convivieron con
nosotros en esta tierra, para que estén gozando ahora en la
casa del Padre. Roguemos al Señor.
8. Por las Asambleas Familiares, para que a imitación de Maria
estén siempre atentas a la Palabra de Dios y la hagan realidad
en sus propias vidas. Roguemos al Señor.
OFRENDAS
ACCIÓN DE GRACIAS DE LOS HIJOS.
Vuestros hijos no pueden quedarse callados, aunque ahora no
tengan palabras para expresar todo lo que ellos sienten y vosotros
les habéis dado: vida, calor, educación, alegrías y penas
mezclados; amor, mucho amor, sacrificio y entrega hasta el
máximo, preocupación, respeto a los demás, un hogar cristiano,
creer en Dios, amor a la Virgen, honradez y trabajo; sencillez y
sinceridad en la vida y saber amarse como hermanos.
Ahora lo van a expresar, pero ya de antemano os digo que son
más, muchas cosas más, las que ellos quieren manifestaros.
1) Yo, en nombre de mis hermanos aquí reunidos,
quiero daros las gracias y pediros perdón
por las veces que os hemos hecho sufrir.
Gracias, porque siempre nos habéis dado
lo mejor que hay en vosotros: vuestro amor y cariño.
Gracias por vuestra paciencia en educarnos
y también por vuestros regaños y algún castigo,
todo nos ha servido para crecer

2) Gracias, Señor, por nuestra madre, que tantas cosas nos ha
tapado a todos para que vivamos más unidos.
Gracias, Señor, por nuestro padre que han trabajado duro por
nosotros y nos han enseñado a caminar por la vida.
Gracias por su amor, que es un reflejo de tu amor, Señor.
Queridos padres: queremos daros las gracias por el bien que
habéis sembrado en nuestros corazones. La vida nos ha enseñado a
saber apreciar vuestra preocupación y vuestro cariño constante
hacia nosotros.
3) Gracias, papá y mamá, por vuestro trabajo y sacrifico en
alimentarnos; en las duras jornadas de trabajo y en las tareas
monótonas de casa.
Gracias por la educación que nos habéis dado. Ahora
comprendemos vuestras caras serias y regaños, cuando no
hacíamos las cosas bien.
Gracias por vuestra forma de ser, que no es perfecta, pero a
nosotros nos parece maravillosa y nos ha enseñado a aceptar
nuestras propias limitaciones.

ACCIÓN DE GRACIAS DE LOS ESPOSOS
Queridos hijos, familiares y amigos:
Nos alegramos de que estéis compartiendo este momento con
todos nosotros, y os damos las gracias por vuestra participación.
Ante vosotros, hijos, queremos hoy confesar nuestra fe. Esa fe que
nos ha ayudado a mantener vivos el amor y la esperanza en medio
de dificultades. Esa fe que consideramos un don inmerecido e
inmenso que hemos querido también transmitiros.
Es posible que no siempre lo hayamos hecho bien, por lo que os
pedimos perdón. Pero sabed que os hemos querido dar aquello que
para nosotros es lo más grande y sin lo cual nuestro matrimonio
habría carecido de su pleno sentido. Teniendo, pues, en cuenta que
esta gracia de la fe viene de Dios, al igual que el amor y la
esperanza, os rogamos que pidáis por nosotros y nos ayudéis a
seguir cumpliendo nuestra misión.
BENDICIÓN

Virgen de las Montañas, tu que estuvistes
presente en nuestra boda hace 25 años,
guárdanos muchos años más