G s/é> s ttuc eScA^ettX^Ly yxÀAMsàrcÀ*XJxD ( i de- yClcMí,

ELEMENTOS
G
L E C T U R A .
a | R B p & ' s/é> s
ttuc eScA^ettX^Ly yxÀAMsàrcÀ*XJxD *
( -Z>—DE LA /
REPÚBLICA ORIENTAL DEL URIÏGUAI.
;0:Y' .
POREl*
í M
f r l 'fundador dei:'Instituto de. In s c c ió n pública., y Director
del Jim uasio nacional . |
{lira adoptada por elm ismo Instituto paTa la-enseñanza en las
1 es-cuálas de la República.. .
PARTE 1*
SILABARIO
jtUxmUMáeo
||Éli8A8 x\ i
l \ . B . E s ta .f l k i t i e s t l V j f l la p ro tectio n de lá Itíi.p o r p.1 m a c t ó iI p w u p m d M
iílt»^ia|¿a de- yClcMí,
X Ü Z l Á Í t

A , » V B I i T B 2 C © m
A
LOS
l i E S T R O S
El libríto que ofrezco á los niños, y á sus maestros,
es fruto de estudios detenidos, y de una larga
esperiencia en la enseñanza.
Consagrado á ella desde mi juventud, la he hecho
siempre con el interés que inspira la conciencia
de una alta misión.
Metodizar la enseñanza, para facilitarla ha sido
m | constante empeño, mi principal cuidado; porque
el método es la ciencia.
Las Matématicas, la Filosofía, algunos idiomas,
ocuparon mis primeras tareas. Cuando tuve ocasion
de fijarme en los estudios de la infancia, advertí
cuanto? obstáculos oponian á ese primer
aprendizage, los libros mismos destinados a facilitarlo.
Muestras Cartillas, Caf-p^es, Silabarios, h^n olvidado
las mas sencillas reg l^ {odo arte, te-

ia P^abra escrita. — Parecen ?iíw £t f descifreramente inútil voldesempeñado
de UQT o d o ,lus,ra(l° escritor ha
desear.
modo, que nada deja'que
| £'seanálisis, impreso en Chile 1ip„a 1 1 1
nos en 18*5. cuando tenia,^ y ^ a ^ •
•
m
trab
ism
ajo
o a u
y
tó
.habría
r.
deseado
*-ouocer
conocer
el
él
Silabario I I R I I dél É
No sé M la r e c o m e n d a c i ó n o i i p p I h , „ .
todo de lectura defSr; Bonífáz . 6 del mé-'
* 0 una indicación deque el Sr sil .omarsec4 Í ¡
basadoel suyo sohra Io“ n d l S “ 10 ^
aquel. Yo he seguido un camino L f ne'P,0S (JUC
Una de las pri meras, y mas ara v*«8!! r' fefent0,
que es preciso superar en la enseñar, ^ ,°U fades
ra. es la dé lijar en la; ‘memoria d« i
i
cer que distingan
R
o caracteres qué representan los di
as
Va II ojo y Eonifáz procuran “ „ r : rSOnid».s'
m
de
oría
u na
dé
cam
los
ínela
niños.
fácil de converZ?
WQrse
, P
en la
/
me-
10
No he ensayado sus métodos, y no sé.si será tan
fácil ¿los niños, hacer la descomposición délas
palabras, que forman la cantinela, para? encontrar
los elementos, ó las letras, como íes habra sido
conservar aquella en lá memoria.- n :: ,1 3
Recordando aun lo que sucedería en las aulas,
cuando se hacia.aprender el—Masculla surit mciribus
& como regla para distinguir el género de
los nombres; ó el— Barbara celar ent & para conocer
la ecsactitud de un razonamiento: observa,
ndó pot* pt^a parte que los niños en dos, ó tres
dias aprenden en las espue las á repetir los nombres
de todas las letras, y que suelen pasar nieges
antesque pueda decirseque las conocen, hecreido
que en.esta primera ensefianza^^omo en todas, era
preciso partir del conocimiento del modo con que
obra nuestra intelijencia, siempre que procura
formarse idea de un objeto, y conocerlo.
, Sabido, es que no puede abrazar muchos á la
vez; que no le es dado abarcar un conjunto;,sino
que necesita separarlos unos dé otros, aislarlos par
ra ecsaminárlos por cada una de sus faces. Viene
despues el epsámen de las relaciones , {para
apreciar bien las que los aprocsiman, ó las separan
; y solo entonces puede formarse la idea de la
reunión, ó del¡ compuesto. ;j
La aplicación de este principio ideológico, á la
enseñanza del alfabeto¡ me ha dado siempre el
resultado mas completo. Hice el primer ensayo,
en uo niño de tres á cuatro años. Sin h a ^ íe ,
sentir que pretendía enseñarle, le escribía diaria-

mente una.de las letras en una tarjeta v se h
Ai°m° ^ uete’ diciéndole ;al mismo
5 ; " 0amrbre3 14 l6tr9‘ Esta 'eccion mo-
“ ¿ repe ,da P°r m Pa^es; por cuan-
¡
r>rJ%
K
S aprendizage
í í COn
de
é,)
las
hac¡endo
letras. Nunca
siempre
fué
fepetir una misma dos dias; y jamás le
d“r u»r su Sufo?ma rorma rcon L l la ^de m,bre las otras. de nÍD8» ó confun-
Las mismas tárjeles me sirvieron para empezar
? e S e S í las ^ B 8 8 B B B p w B
«s*** 1 s sonidos que representan. Este
n n° había superado en un mes las principales
dificultades de la lectura; había aprendido lo que
Iy T
muchos
* ?
disgustos.
6 H edad, cuesta muchos meses,
, 9
En un segundo ensayo añadí á cada tarjeta un
pequeño dibujó que representaba un objeto cuyo
nombre empezando por la misma letra oue
rae proponía enseñarJ sirviese á recordarla mas
fácilmente Esta idéa adoptada liof por muchos
silabanos -Ingleses,' Franceses, y aún Españoles
impresos en el extranjero, me sirvió para dar á
mis tiernos discípulos, algunas nociones sobre la
Geografía, e hice del estudio de las letras una
especie de introducción al de aquella ciencia -
Atención* de otro jénero, y siempre urieñtes
b ° me dejaban tiempo para dedicarme á ' hacer
UC,aQ^. clon sistemada de mis leeeiones. En 1844
y 18Í5 emprendí esta tarea, con ocasión dé ensenar
algunos niños, y me era indispensable escribirlas
según la necesidad de aquellos/ reemplazando
los libros mi propia escritura. Esta necesidad
me obligó á combinar la ensenanza de la
lectura con la de la escritura haciéndolas marchar
simultáneamente*
En la escritura era preciso empezar por aquellos
caracteres en cuya formación, domina el elemento
mas simple—la linea recta,—para pasar
despues á aquellas letras, que ofrecen mas dificultad-,
porque son formadas de la curva, ó de la
curva y de la recta.
Pero esa marcha retardaba la de la lectura.
No pudiendo hacer uso mas que de dos vocales—i,
^ —upara las combinaciones con las diversas consonantes
que guardan analogía con ellas en su formación,
era preciso tener mucho tiempo al niño
en la lectura árida de sil ibas sin signifi cado.;
mientras que haciéndole conocer desde el principio
todas las vocales podia, en muy pocas lecciones
, escribir y leer algunas palabras » algunas
pequeñas frases , que les hiciese agradables sus
tareas.
Gomo por otra parte no encontré gran dificultad
en hacer escribir á los niños las tres vocales—
6, á, ¿»—porque manifiestan siempre una inclinación
marcada al dibujo, cómo á todo lo que es
imitación, no trepidé*en hacer la inversión que
se nota en mi silabario del orden común de las vocales,
porque esa inversión facilitaba la enseñanza
de la lectura.
En efecto* por este método conseguí que dé seiá

z r i r s r ^ » " « v n „ r ; r ,
hay siempre en las clill^n! fürencia W® la que
circunstancias individuales A g S ' '*' 1 demas
S n Z SÍ mÍSm°< S6rVÍa ^ m ^deío dTescrffura
liaban recip o c a m e ^ S '0 '°S d°S eStUd¡0S Se ausi~
P
nm«pOl®C0U>neS
g esivo, pero
estan
son al
coml>inadas
mismo tiempo
en
una
un
conti
orden
M a repetición de las anteriores:~con!licion in"
dupénsableen la enseñanza.—Sin salirde las com-
Í r)0Cá°lTS|pefd° S h laíbaS’ 86 Vá ac° s' “mbrando ai
nV rensraamdi L to!,abraS aÍS'aJaS' qUe n ° esPresa"
® f de,?Ue,el.DÍño CODOGe dos letras, es preciso
acostumbrarlo a que pronuncie el sonido que resulta
de la combmacion, sin cuidarse dei nombre
aislado decada una de ellas. Este cuidado debe
ser mayor desde que empieza á combinar una con
sonante con una vocal: es preciso enseñar á leer silabando,
y proscribir enteramente el deletréo.
Me ha parecido tan embarazoso como inútii insistir
en una enseñanza minuciosa de todas las silabas
à que se presta la indole de nuestro idioma
Tampoco he querido forzar á los niños al estudie
de palabras de difícil pronunciación. Cuando
por medio do un cierto número de ejemplos ella
Vil
han llegado á conocer la marcha que sigue ía formación
de las’ palabras, su instinto de analogía,
su propensión á generalizar, los guia sin dificultad
en la lectura de las que'generalmente se ofrecen.
El curso de la enseñanza irá presentando la
ocasión de instruir al discípulo, en esos casos difiiiles,
que pueden llamarse, excepcionales en la
lectura cíe nuestro idioma.
Mi silabario, como se yé, está calculado para
empezar la enseñanza por los caracteres cursivos,
ó letra bastardilla, reservando para la segunda
parte, dar conocimiento ál niño, de los demas
caracteres empleados en la escritura. Por eso he
colocado el alfabeto ó cuadro general de todos los
que están en uso, como introducción á la segunda
parte. La esperiencia me ha asegurado sobre
la facilidad con que los niños hacen la transición
de la lectura en letra cursiva, á la de imprenta,
ó romana.
Pero si qü iere empezar por eél a r a co m o d á n d o -
se á los libros quesuelen emplearse, es preciso cuidar
siempre de ofrecer á los dicipulosen los modelos
de escritura lo mismo que leen en el libro,
y hacerles también leer su propia escritura. Asi*
se evitará un defecto harto común :—que niños
que imitan con bastante perfección los modelos de
escritura, no son capaces de leer, lo que ellos mismos
han escrito.
La enseñanza de las mayúsculas y de los demas
signos empleados epja escritura debe seguir una
marcha análoga. En la primera parte de la ense-

j ^ proporcion de que aqueIlas ocurren en
t » S í ? Pa 6’ S® les muestra junto conel equivalen
te que ya conocen, y as¡ las aprenden toda
gradualmente, y sin trabajo.
n w ° n ! f r ial»de ios maestros debe ser no dejar
£»rns
garos
H
de que
a
los
. gan-a
mnos
Sin
comprenden
esP,icarla»y
lo
sin
que
estar
signile­
Los pequeños grávados servirán para darles las
primeras nociones de Historia natural.
En todo el curso de enseñanza primaria debe
dominar la instrucción moral y religiosa, que ha
debido empezar en la Madre, en la familia, y continuarse
sin interrupción en cuanto el niño aprenda
en su primera edad. Por eso he procurado
elejir para las lecciones de la segunda parte, con
preferencia, todo lo que puede concurrirá ese objeto.
Un libro de este género, es un libro esencialmente
popular; debe estar en manos de todos, y
debe ser el libro de cuantos no pueden tener
otros. Por consiguiente todos deben encontrar
reunido en él, lo que nadie debe ignorar.
/Ojala en la ejecución haya podido aprocsimarm
e ai menos á mis deseos / ] Ojala este pequeño
trabajo sea de alguna utilidad al Pueblo Oriental/
Luis J. de la Peña.
Montevideoy Julio 14 de 1847.
m
E l,E M E N T O S
i C
f l
esr) 'tüuV
| | Jj ■’ *'
UEPÍlBLíCÁ ORIENTAL DEL URUGUAI.
.__^ ■ ■. POf§ EL ‘
miembro fundador deVlnstituto-‘de InstruCion publica, y Director
¡j del Jimnas'iVnaciQnal
Obrk adoptada por e,l mismo InsMulo p ara 1 a enstvñ¡¡¡jza en las
B l I S S l l l á e la ’-ftepública: '
PARTE - SILABARIO
o .
JÍílxmtebibe
1848
Ip il
sta.fljn’it i ® i l r a . j o la proU ciáoíliie,lH .k i1{)0r&1 derecho iif, B ropr)etl¿
ittujxafut Oc, Jíl¿^e- ,

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Inglesas.
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Romanas.
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H 7/ •
■^Æ-.
WÊÊ............ Y

LE CION 3^
t§ Ê Ï .
Combinaciones.
LE CION 2 |
Combinaciones .
É É X I . I l l
LEfelÒN 4>
I P ;
Oonribinaeiones ,
1 % ^

Combinaciones
—¿ a ,;
L E G IO N 6 ^

LEGION 9£
.9
S íla b a s .
8 ¡||¡Í ¡ l É S
P a la b ra s.

LE CION IO .
Sílabas .
LECrON 11.
y r ^ <
P a la b ra s .
•Palabras..
/ ? \ ( S anido suave entre vocales) Palabras.

1 4
L E C IO N H
y o)
Silabas .
Palalwas .
m
— --------—------ 15
LECION 15
Silabas.
y J U y m / y f ^ } . - n € h , ^ ¿ ^ :
Palabras.
¡
I

LECION 18 .
S ila b a s .
P alabras.
LECION 18. bis.
Sonido suave
S ila b a s .'
P a la b ra s.
m m B M m
19
' ¿ Z /

L E CION 19
sC fZ
oilal) a s .
Palabras
L.ECION 2 0 .
21
R ^ S H ---- I

LECION 22
28
Sílabas .
T a la d r a s .
yU^n^
/rzt'^
W ÊÊÊÊmm

LECION %$.
W È (2)
filabas
aladras
^M-e/¿&s¿¿¿-/??¿er¿/.

LEGION 2 6 bis.
27

LEOION 27
—
Sílabas
29

LEOION í l d .
y
s / t :
Silabas .
Equivalentes.
P alabns
lea,so
W M P A ® .
(1) Advierta el m aestro al niño, que esta letra nó
modifica en manera alguna el sonido de la vocal con
auien so junta: del mismo modo se ¡g ¡ %que ni, ó que
ah\, ó ha. Hsta letra puede considerarse como uno de
los signos ortográficos.
(2) Esta letra reemplaza en la ortografía moderna el
sonido lurte de la g en las silabas yij ge: lo que debe
hacer notar el maestro cuando el niño estuviere en estado
de léer. libros, Ó manuscritos, en que se hace uso
de la g en su sonido fuerte,
(3) Esta letra tiene ya poco uso en la ortografía moderna.
Los sonidos que representaba lo son p or la j o
por es, g$. Por consiguiente los maestros solo deberán
dar idea de ella para poder entender la escritura antigua:
estudio que puede dejarse para cuando los niños,
estén mas adelantados.
i Esta observación debe tenerse también presente respecto
de la k que solo se usa en algunos nombres propios,
ó en palabras estrangeras al idioma español.
MONTEVIDEO.
Se halla á venía en la Librería de Hernández.

E L E M E N T O S d e l e c t u r a *
LECCIONES Y A.RIAD A. S\.
Monosílabas.
Lección 1* ^
Dios. (*)
Dios nos dió el ser.
Dios es quien nos guia al bien.
Ved el sol; su luz es de Dios.
(IV El maestro debe mostrar al niño esta ftal
lado de la d que ya conoce, y e s p l i c a r l e que los dos caracteres
espresaii un mismo sonido. Estoa
be seguir respecto de las demas mayúsculas queempie
zan á emplearse en esta segunda parte. Con es
jeto se ba puesto el alfabeto, ó cuadro general
caracteres empleados en la escritura.

¿Veis el pez en el rio, y en el mar?—-Dio? 1 I
crio. uí 10
¿Veis la flor ?—Dios le dá miel.
La vid,y la mies, son don de él.
di" ° hay mas 1ua~0ÍQs que nos dé el pan del
Ten pues fó en Dios: sé fiel ásu ley, que es su
voz; y sin la Cual no hay paz.
'Jueessu
Haz, Dios mió, que mi voz te loe sin fin; que ta
el bfen ^ Un l)riosin P**’ en la « “el lid por
Disílabas.
L e c c ió n 2 . «*
| DIOS.
Di-os ha cria-do to-das las cosas, y es el Da-dre
co-mun de los horn-bres. ,y P® “ e
íiof "ma pUes 4 so^-br« todo éuan-to ptíe-
E ¡m or: rl«mna4Di0S’
pa-dre.
san-ta lejí °S8° mU?S" tra en cum-plir su
Los Padres.
A-ma á tus pa-dres, como á los medios de que
Dios se sirvió pa-ra dar-te la vida; ellos te cuidan*
y te buscan siempre el bien.
El amor á los Padres nace del amor á Dios, y
nos lo man-da su san-ta ley.
«Hon-ra á tu pa dre, y á tu madre, nos dice
«Dios pa-ra que vivas lar-go tiempo so-brfi la
« tier-ra.»
Un hijo de-be asas padres la vida, que es el m a­
yor de los bie-nes.
Esta deu-da so-lo se pue-de pa-gar con a-mor;
y en es-te a-mor mu-tu® ha puesto Dios una
fuen-te de pla-cer.
Los pa-dres gui-an siem-pre al ni-ño há-cia su
dicha: por e-so de-be el ni-ño ha-cer con gus-to
cuan-to le manden sus pa-dres, por que es pa-ra
su pro-pio bien.
L e c c ió n 4 . es-
ío-no^ íTen 1L 1hl0y. de ni-fio
nao-do de np dir! que él nos m an-da, el
La Patria
cua-les ^ioT la (íá.
y los Por los
El niño de-be orar toctos losó“diás.
A-ma á tu Patria, que es una nue-va wa-dre
para tí,

t W a-mor á la pa tria nos lleva á de-mar s e l
Y pa-ra ser útil á la Pa-tria de-be el ni-ño sahor*
De-be cumplir la ley santa de Dios. 6f
De-be guar-dar las le-yes que la mis-ma Pa-tria
dic-ta para el bien de todos:
De-be serbue-no.
L e c c ió n 5 . w
Los Hombres.
To-dos los hom-bres dé cual-quier país que
sean; cual-quier edad que tengan son hijos da
c m Í i T Z " ? ¡ ! £ * " » * " * > ü ‘ »"»■
El nos lo man-dá en su santa ley.
Es un deber á quená-die pue-de fal-tár sin ám
jar de cumplir la ley de Dios
nlas
Haz
te
á
ha-gan
los otros
a ti.
lo que tú deseas, que los de­
No ha-gas $ ná-die lo mif» tá ífik •
te ha- gan á ti. q no 9«ie-res que
Haz bién á todos.
No ha-gas mal á nadie:
Esta es la ley del Señor.
é
Lección 6 . 68
E l buen niño.
Un buen ni-ño de*ja la ca-ma al sa-lir el sol.
Se la-va, y se vis-te.
Ora, y dá gra-cias á Dios.
Bé-sa á su pá-dre y á su ma-dre.
Jue-ga has-ta que lle-gue la ho-ra de ir al au-la.
Si juerga con otros de-be cui-dar de no to-m ar
lasco-sas de ellos, sin que se las dén, ó se las presten,
. .
De-be no rom -per por pu-ro gus-to lo que le
banda-do pa-ra ju-gar.
De-be pe-dir con buen mo-do lo que de-sea.
Si se lo dán, vuel ve gra-cias por ello.
Si le nie-gán al-go , por no ser pro-pio pa-ra
sus ¡ue-gos, ca-lla.
En la ca-lle no jué-ga, ni se dís-trae, con otros
ni-ños, ni con na-da de lo que vé,
En su cía -se se dá la lección cuan-do le Ua-man
y ha-ce cuan-to el maes* tro le man-da, para que
se-pa mas cada-dia.
Al tiem -po de co-m er lo ha-ce sin m anchar la
ro-pa, ni el m antel:
Se limpia la bo-ca pa-ra be-ber.
Des-pues dé ce-nar, se la-va, y be-sa ksus padres
an-tes de ir á dor-mir.
Ora, pa-rra dar gracias á Dios, por los bie-nes
que le ha he-cho en aquel día.

j
P ien sa sobre las faMas en que ha-ya cai-do
y pi-

las co-sas, en que fué ins-trul-do des-de la n i
ñez por las sa-gra-das le-tras*— “ que te pueha~cer
s&-bio pa-ra la sa-lud, por la fóque e
Je-su-Cris-to.
L e c c ió n 8.
CANCION DE LOS NIÑOS.
4 ( D. F, M. de la Rosa. )
A Dios piadoso
Debí el nacer:
El me dió padres
Para mi bien:
Medá alimento
Templa mi sed...
Coro—Buenos seamos
Que Dios nos vé
(*)/ Se canta diariamente
nació.
2 ’.
Dios hizo el Cielo
Con su poder:
Hizo la tierra
Y el mar también:
El Sol y estrellas
Brillan por él... .
Coro etc.
por los alumnos deíJi^'B
3 . «
Si el desvalido
Pide merced
Si al triste aflije
Suerte cruel;
Ese que llora
Tu hermano és. SI.
Coro ect..
4. **
No al malo envidies
Áuque tal vez
Impune ostente
Gloria, y poder
Que allá en el Cielo
Hay otro juez. ...
Coro ect.
s>. r
Dios el camino
Muestra del bien
Y un ángel guia
Mi débil pié;
El es mi escudo,
El mi sostén... .
(Joro ect.
6.68
Al sueño nunca
Me entregaré
Nunca á la aurora
Veré nacer:
Sin bendecirte
Dios de Isrrael. ...
Goro.—Buenos seamos
Que Dios’nos vé.
L e c c ió n 9 . 88
De la imitación de Cristo,
n 1.
Quien me sigue no anda en tinieblas, dice el
Señor. Estas palabras son de Cristo, con las cuales
nos ecsórta á imitar su vida y costumbre^...

Sea pues nuestro estudio pensar en la vida de
Jesús.
9 ca
Pregunta de buena voluntad, y oye callando las
palabras de los viejos, porque no los dán sin
causa.
3. w
Haz lo que puedas, que Dios proteje la buena
voluntad.
No confíes en tu ciencia, ni en la astucia de ningún
viviente, sinó en la gracia de Dios,que ayuda
á los humildes, y abate á los soberbios.
Continua paz tiene el humilde, mas en el corazon
del soberbio hai saña frecuente:
4. ®
Pon los ojos en ti mismo, y guardate de juzgar
las obras ajenas. En juzgar á otro se ocupa uno
en vano, yerra muchas veces, y peca con frecuencia;
mas juzgando de si mismo se emplea siempre
con fruto.
Mucho hace el que todo lo hace bien.
Bien hace el que sirve mas al bien común que
ásu voluntad propia.
. ;■: / 6 . «
Queremos que los otros sean castigados con rigor,
y nosotros no queremos sercorrejidos.
1 P ^
gUAsl parece claro cuan pocas veces amamos al
prójimo como á nosotros mismos.
A l a
Aizemos
las palmas
las almas
la voz;
Sin ira
ni encono
al trono
de Dios.
De timbres
Oriente
fuljente
se vé:
€ 4 I f l € t |
i**- R e p u b l íc a O r i e n t a l
— M iniatura Poética—
(Par I I de FígUeroa)
Vencieron
Diosmio,
su brío,
su fé.
Lidiando
zañudo
su escudo
sois vos:
Y libre
se ufana,
¡hosanna
gran Dios l

Del fiero
j*í?ante
triunfante
David.
Con gloria
divina
termina
ia lid.
Sangriento,
y ecsaüsto.
con fausto
valor;
Vindica
su a/renta
sustenta
su honor.
pe pompa
ceñido
lucido
jardín;
Brotaba
por flores
horrores
sin fin.
Mas firme
y osado
al hado
venció;
Y
de gloria
la historia
lauro
le dió.
Empero
su ira
se mira
templar;
El cielo
Je advierte
su suerte
fijar.
Los odios
ajusta
augusta
razón.
Al eco
sentido
de olvido
y uoion.
De orgullo
rebosa
la hermosa
Ciudad;
Brillando
mas viva
su altiva
beldad.
No ciñe
celada
espada,
ni arnés;
No embraza
de acero
guerrero
pavés.
O joya
de Oriente
luciente
rubí.
Aprenda
Numancía
constancia
de ti.
Por sendas
caminas
de espinas
y horror:
Y
y aclama
la fama
tu honor.
vences
Los bravos
al verla
cual perla
del^Sud :
Heroica
la llaman
y esclaman
¡ salud!
Las ninfas
donosas
cual rosas
brillar.
Se miran;
o en coro
sonoro
danzar.
Sus galas
resaltan
que esmaltan
de azul;
Cual bellos
querubes
en nubes
de tul.
Gozosa
La tierra'
Sin guerra
Tenaz
Levanta
Festiva
La oliva
De paz.
El bando
Que iluso
Le opuso
D esden;’
Al signo
Que brilla
Se humilla
También.
Ni triunfo
Ni m uerte!

Es fuerte
Mirar.
inulta
su agravio
y el labio
sellar!
Al pecho
llagado
no es dado
Jenafr:
Ni ofensas
y N°*.
sin fruto<
plañir:
Un Anjel
del Cielo
el velo
rasgó:
Y el Iris
dealianza
la lanza
cubrió
El odio
fraterno
no eterno
será:
Qué amarga
memoria
por gloria
nos dá/
Be sangre
ya basta/
nefasta
• cruel:
La guerra
se lleve
su aleve
laurel.
Agite
su tea
quien sea
ruin
Ynombre
reclame
de infame •
Cain.
Silencio
rencores!
furores
calm ad!
Las tumbas
profana
insana
crueldad.
Fiereza
seria
impía
querer,
A estragos
penurias
y furias
volver.
O madre?
ó esposas
los fosos
cubrid;
Con flores
y ai canto
sin llanto
venid.
El mártir
valiente
no aliente
rencor:
Endulce
«u pena
la escena
de amor
No miré
su herida,
ni pida
la miel,
Al cáliz
que brota
la gota
de hiel
Su ansia
devore
quien llora
su amor;
Velando
la pira
que iospira
dolor.
La Patria
que hiciera
la esfera
temblar;
Rompiendo
su lanza
afianza
su altar.
Grandiosa
se eleva
renueva
su ser;
Perdona
y olvida
su herida
de ayer.
Su rayo
reprime
sublime
sin par:
Y oculta
mas penas
que arenas
el mar!
Postrada,
de hinojos
sus ojos
sin luz;
Resiente
su flecha

y estrecha
la Cruz.
Miradla
cual llora 1
deplora
la lid;
Patriotas
al templo!
Su ejemplo
seguid.
Lecciones sobre polisílabos ,
La insignia del Cristiano.
Por D. Francisco A. Figueroa.
jO h s ig n o
SAGRADO,
CERC AD O
DE LUZ 1
EN L A SANGRE DE UN D I O S SALPICADO,
HOY MI PECHO CONTRITO, ANGU S T IA D O
BUSCA ANSIOSO UN A M PARO EN LA CRUZ,
SUPLICIO
PROPICIO,
DEL ALMA
CORDIAL ,*
CONSUELO
DEL CIELO
AL DERIL
MORTAL
TESO R O
DO ADORO
AL DULCE
JESUS,
MI CULPA
DECLARO,
Y PIDO T U AMPARO
SANTISIMA C R U Z .

M A O BIM A B-
POR
D. Francisco M. déla ‘Rosa.
Quién pobló el Cielo de estrellas,
Hizo la tierra que huellas.
La flor mas pequeña mira
Y el poder de Dios admira.
Dios al brávo mar enfrena
Con muro leve.de arena.
No hay nada que á Dios resista
Ni que se esconda á su vista.
Amaá Dios, y ama á tu hermano,
Esta es la ley del Cristiano.
La virtud con su ejercicio
Destierra el ocio, y el vicio.
Quién cierra al pobre la puerta,
La de! Cielo no halla abierta.
De tus hijos solo esperes
Lo que con tu padre hicieres.
La conciencia es h la vez
Testigo fiscal, y juez.
Quién un bien siembra en el suelo.
Ciento recojo en el Cielo.
La envidia lleva consigo.
Su torcedor y castigo.
Siempre que puedas haz bien,
Y no repares á quien.
Una imprudente pálabrá
Nuestra ruina á ve^es labra.
Al mirar la luz del día,
Bendice á Dios que la envía.
Solo inecsorable sea
El que sin culpa se crea.
Al juzgar un hecho ageno,
Mete la mano en tu seno.
Sin virfud la ciencia humana
Es caña frajil, y vana.
Ese mendigo que vés
De tu Dios imájen és.
Dios se rtmestra compasivo
Con quien redime ál cautivo.

Virtud que el vicio remeda,
Es como falsa moneda.
Dios al humilde levanta,
Y al fuerte humilla y quebranta.
Sed induljentes con otros,
Y lo serán con vosotros.
No desprecieis los consejos
De los sábios y los viejos.
Poned en Dios la esperanza;
Queá todos su diestra alcanza.
Veis la virtud abatida;*
Ma§ también hai otra vida.
A hombre hablador é indiscreto
No confies tu secreto.
Quien se acostumbra al engaño
El mismo labra su daño.
La verdad amargar suele,
Mas el mal que evita, duele.
Quién te adula, y lisonjea,
Su bien y tu mal desea.
Si un ciego lleva á otro ciego,
En el abismo dan luego.
Quien su bien usurpa al dueño,
No espere tranquilo sueño.
La calumnia, y la mentira
De Dios provocan la ira.
Cuando estés dentro del templo,
A todos (lá buen ejemplo.
Mal amigo tanto daña,
Como á la mies la sizaña.
Quien cuida al a.ve en el nido,
No abandona al desvalido.
Nunca en vano jure el hombre
De Dios por el santo nombre. :
Quien en su cólera enfrena,
Lleva en la culpa la pena.
Si anhelas la paz del alma
Ten tus pasiones en calma.
Si juicio, y templanza tienes
No has menester muchos bienes.
Dá de comer al hambriento
YDios te dará sustento.
Templa al sediento la sed
Y en Dios hallaras merced.

Quién alberga al peregrino
Del Cielo encuentra el camino.
Da apoyo y esliendo la mano
Al enfermo y al anciano.
No hallaras un avariento
Que no esté tranquilo, y contento¿
mQuien no aprende, con los años.
Sufre amargos desengaños.
Nunca trates con desprecio
Ni aún al que tengas por necio,
La razón aunque severa
Es amiga verdadera.
La virtud es un tesoro,
Mas duradero que el oro.
Propio es del justo y del sábío
El perdonar un agravio.
(Ama á tu patria... .. )
Y se obediente á la !ei./
Al sueño nunca te entregues
Sin que por tus padres ruegues.
Tus méritos nunca abultes,
Ni al que es inferior insultes.
No te pida el pobre en vano;
Que al fin es hombre y tu hermano.
Venera á los rectos jueces
Que de Dios hacen las veces.
Si el ocio te causa tedio,
El trabajo es buen remedio.
El que á otro ofende en la honra,
Asi propio sé deshonra. ,
Si de Dios perdón deseas;
Nunca vengativo seas.
En caso de duda abstente,
Eso hace el hombre prudente.
La modestia mas resalta
En quien confiesa su falta.
Nfr hagas de tu fuerza alarde
Y pide á Dios que te guarde.
Al maestro reverencia,
Y aprovecha su esperiencia.
Pobres ó ricos, iguales
Son ¿inte Dios los mortales.
Si vas á obrar mal, advierte
Que caminas a la muerte.

Si es bueno, y dócil un niño
De todos gana el cariño.
£1 niño curioso y nécio
Causa fastidio, y desprecio.
El ingrato á un beneficio
No bailará al Cielo propicio*
En boca del mentiroso.
I¡o cierto se hace dudoso*
No uses de palabras soeces¿
Que á ti propio te envileces.
Quien maltrata un animal,
No muestra buen natural.
El que tus faltas reprende,
A tu bien futuro atiende.
El aseo en la persona
Muchos bienes proporciona.
La envidia al hombre atormenta
Mas la emulación le alienta.
Dio^ con su bondad asiste
A quien al desnudo viste.
Da al aflijido consuelo;
Y lo hallarás en el $ elo .
Quien te envanece y te engríe,
De tu necedad se rie.
Buen porte, y nobles modales
Abren puertas principales»
La gloria que el malo ostenta
No es corona sinó afrenta.
Los delitos aborrece;
Y al culpable compadece.
Sigue á la sana razón
Mas que á la vana opinion.
Quien un mal hábito adquiere
Esclavo de él vive y muere.