Los mexicanos, ante la crisis económica. una nueva Revolución?

¿De verdad alguien piensa enuna nueva Revolución?Edilberto Soto AngliSon indicadores preocupantes paraalgunos, esperanza para otros, motivode consideración para los estratospolíticos y de alerta para los llamadoscuerpos de seguridad: hay peligro de unbrote de violencia social.Apenas el 11 de septiembre, ahorasímbolo internacional de la destruccióny el miedo, los medios reportaban que secontabilizaron 5 mil 18 ejecutados a raízde la guerra contra el narcotráfico, conlo que en el gobierno de Felipe Calderónsumaron 13 mil 599 homicidios en esecampo de batalla.En un balance más reciente, El Universalapuntaba que a 86 días de que termineel año, la cifra de muertos vinculadosa la delincuencia organizada es superiora la registrada en todo 2008, que es de5 mil 630, Según las cifras, hay 20.18asesinatos diarios en promedio.Por esas fechas el columnista FranciscoGarfias anunciaba que integrantesde diversos frentes radicales han tenidomedia docena de reuniones, con el objetivode integrar un movimiento armadoque se haga presente en el 2010, añodel bicentenario de la Independencia ydel centenario de la Revolución.A raíz de esas juntas han proliferadolas “pintas” en bardas, mantas, pancartaso cualquier espacio que sirva de pizarrón:“Nos vemos en el 2010”.Las autoridades se mantienen encalma, sobre todo porque no se ve porninguna parte el rastro de organizaciónalguna que pudiera conformar un movimientoserio.Las acciones del Ejército PopularRevolucionario (EPR) les representan unmotivo de inquietud, porque ya demostraronque son capaces de acciones degran alcance como en su momento fueel atentado contra ductos de PetróleosMexicanos.Además están el Ejército Revolucionariodel Pueblo Insurgente (ERPI) y lasFuerzas Armadas Revolucionarias delPueblo (FARP), además de los anarquistasde la Alianza Subversiva por la Liberaciónde la Tierra, Animal y Humana.En los últimos días, en el Estado deGuerrero, el ERPI denunció el asesinatodel “Comandante Ramiro”, uno de susmás destacados dirigentes, quien habríasido victimado por sicarios a sueldo deganaderos y empresarios.La operación gubernamental, a pesarde los hechos señalados en diferentesregiones, parece hasta el momentocentrada en evitar a toda costa unarevuelta estudiantil, que en la historiaha sido la base y el inicio de grandesmovilizaciones.La violenciaParece haber en el escenario unaintención manifiesta de desatar la violenciacontra los intentos de organización:además de la denuncia del ERPI, enNueva York una serie de documentosdesclasificados recientemente han reveladoque existió un apoyo directo delEjército Mexicano a grupos paramilitares(contratados por terratenientes y gruposde poder) en Chiapas, desde mediados de1994 que se dio a la luz la existencia delEjército Zapatista de Liberación Nacional(EZLN), con autorización del entoncesPresidente Carlos Salinas, en movilizacionesque incluyeron la matanza de 45campesinos en Acteal, ya con ErnestoZedillo en el poder.Pero la violencia tiene diversas caras,como lo señala el ataque con bombasMolotov contra una agencia de autosel 26 de septiembre en Guadalajara, ladetonación de tanques de gas en la DelegaciónMilpa Alta del D.F. en la mismafecha, el asesinato de Margarito Montes,secretario general de la Unión GeneralObrero Campesino y Popular (UGOCP),Margarito Montes Parra, ejecutado con14 personas que lo acompañaban enCajeme, Sonora, el hallazgo del cuerposin vida del diputado local tabasqueñopor el Partido Revolucionario Institucional,José Francisco Fuentes Esperón,muerto junto con su esposa, la muertea tiros,uno en el abdomen y otro en lacabeza del presidente de la Comisión deGobierno del Congreso de Guerrero ycoordinador de la bancada local del Partidode la Revolución Democrática (PRD),Armando Chavarría Barrera…Y la lista puede ser interminable: enCiudad Juárez, a principios de septiembreal menos 17 personas fueron asesinadaspor un comando armado en un centrode rehabilitación de adictos de CiudadJuárez, la plaza considerada como la másviolenta de México, por lo que la columnaBajo Reserva escribía en esas fechas: “Unapregunta inocente: ¿Cómo pudo un cártelconsolidarse en estos últimos meses enCiudad Juárez (hacer listas de enemigos,comprar alianzas, armar comandos y ejecutarmasivamente de puerta en puerta),justo en el periodo en el que se suponeque el gobierno federal aplica todo elpoder del Estado?”Y sin ir más lejos, habrá que contarel atentado a dirigente de El BarzónMaximiano Barbosa Llamas, y su hijoMaximiano Barbosa Robles en Guadalajara,del que salieron con vida, la violacióna la casa del ex dirigente nacional delPAN, Manuel Espino, en Ciudad Juárezy, en un acercamiento delicado a nuestrastierras, el hecho de que hayan baleadoen Tabasco la camioneta del SenadorSebastián Calderón Centeno, de esenciacarmelita, mientras en Zacatecas sehacía público un ataque a vehículos enlos que presumiblemente se trasladabala gobernadora Amalia García.Los medios de comunicación no hanestado a salvo de la ola de violencia:en septiembre cinco sicarios dieronmuerte al periodista Norberto MirandaHop’ Ki’n • 3