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Nuestros Difuntos
P. CÁNDIDO DOMÍNGUEZ FRANCO
(20 de septiembre de 1935 - 28 de julio
de 2009)
EL P. Cándido nace el 20 de septiembre de
1935 en Cacabelos, población situada en la
comarca leonesa del Bierzo. Son tiempos de
estrecheces económicas y sinsabores, con la
Guerra Civil española a punto de estallar y la
Segunda Guerra Mundial a dos pasos de
distancia. Qué duda cabe que estos
acontecimientos dejaron huella especialmente en
los niños y jóvenes de entonces.
A los 14 años recién cumplidos ingresa en el
Seminario Agustiniano de Valencia de don Juan,
donde inicia su larga andadura agustiniana.
Cuatro años, desde 1949 hasta 1953, dedicados
al aprendizaje del latín y estudios secundarios;
mientras que en el aspecto formativo va
bosquejando su futuro como agustino. En el año
1953 cambia de domicilio con sus compañeros de
curso, y se traslada a Becerril de Campos para
continuar la carrera sacerdotal con los estudios
filosóficos y adquirir en el aspecto formativo los
conocimientos necesarios para ingresar en el
Noviciado.
Son años muy importantes en su vida, ya que al
culminar el estudio de la filosofía debe optar por
abandonar definitivamente el proyecto religioso o
pedir el ingreso al Noviciado en Valladolid. Opta
por la vida religiosa y emite la primera profesión
el 28 de septiembre de 1957. Seguidamente
realiza los estudios teológicos (años 1957-1961),
y antes de concluirlos da el paso definitivo
emitiendo los votos solemnes el 28 de septiembre
de 1960. Al año siguiente, el 9 de julio de 1961,
es ordenado de presbítero. Después es enviado a
Salamanca durante unos meses para prepararse
pastoralmente para la misión.
Concluida esta etapa de su vida, su primer destino
en el año 1962 es Colombia, y dentro de Colombia
el Liceo de Cervantes de Bogotá, en la sección de
Primaria. Allí comienza el P. Cándido su andadura
docente y educativa en los Colegios, labor que
desarrollará a lo largo de casi cinco décadas.
Cuatro años más tarde es enviado a la ciudad de
Barranquilla para reforzar la Comunidad que, un
año antes, había puesto en marcha el Liceo de
Cervantes de la ciudad costera. En 1970 vuelve a
JULIO
SEPTIEMBRE
Bogotá, donde es
nombrado vicerrector del
Liceo de Cervantes y
cooperador en la Emisora
Mariana de los PP.
Agustinos en Colombia.
Hasta aquí su periplo
americano de 12 años.
En Colombia quedan su dedicación a la educación,
su labor pastoral, su fidelidad a lo que se le
encomendaba.
En 1974 es destinado al Colegio P. Andrés de
Urdaneta en Loiu, que había sido recientemente
inaugurado. Como en Colombia, sigue
entregándose con generosidad a la docencia, a
las actividades pastorales y, en esta etapa,
especialmente a las deportivas, ya que durante
doce años es el Coordinador de las mismas. En el
ámbito comunitario ejerce el cargo de Ecónomo
de la Comunidad y Administrador del Colegio de
1978 a 1982.
El P. Cándido, detrás de esa máscara de hombre
serio, de trato algo áspero, de conversación
entrecortada y de mirada de soslayo, ocultaba
una sensibilidad muy grande que, por
circunstancias de la vida, siempre le costó
manifestar ante sus hermanos de Comunidad o
los alumnos. Los que vivíamos a diario con él
sabíamos de esa gran riqueza que atesoraba en
su corazón y a la que sólo algunos lograban
acceder. Una muestra de ello era la reacción
rápida y firme que tenía cuando veía en el
Colegio que un chico mayor tenía una actitud
prepotente con otro más pequeño, manifestando
así ese gran amor y preocupación que tenía por
los débiles, pequeños e indefensos.
No es de extrañar, por lo tanto, que el órgano
físico que al final le fallara fuera el corazón. La
muerte le sobrevino con los deberes hechos.
Había concluido las evaluaciones de los alumnos
y entregado las calificaciones. Era la mañana del
21 de junio cuando se sintió mal y fallece en la
tarde del 28 de julio. Tenía 73 años de edad y 51
de vida religiosa.
Hoy descansa en la Paz del Señor a quién al
llegar, seguro, le dio un fuerte apretón de manos.
P. Eustaquio Arrausi López