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Bloqueo epidural cervical. R. Raw - Anestesia y medicina del dolor

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Libro 8. <strong>Anestesia</strong> Regional y Dolor Postoperatorio.<strong>Anestesia</strong> Epidural Cervical. El contenido es responsabilidad total de los autoresDr.Robert <strong>Raw</strong> M.D.INTRODUCCIÓNLos bloqueos "<strong>cervical</strong>es" <strong>epidural</strong>es se realizan en la región <strong>del</strong> cuello, entre C 5 -T 1 . En este tema es apropiado incluir discusión sobre bloqueos <strong>epidural</strong>es torácicosrealizados entre T 1 y T 3 , ya que las drogas inyectadas a este nivel fácilmentepueden difundir hacia la región <strong>cervical</strong>. En este capítulo me referiré a "<strong>epidural</strong><strong>cervical</strong>", pero ciertamente debería de ser <strong>epidural</strong> cervicotorácico.Los bloqueos <strong>cervical</strong>es <strong>epidural</strong>es se diferencian de los bloqueos <strong>epidural</strong>eslumbares bajos en dos aspectos mayores: 1) son hechos por arriba de laterminación de la médula espinal (L 1 - 2 ), al igual que los bloqueos torácicos y 2) elbloqueo abarca las raíces <strong>del</strong> nervio frénico (C 3,4,5,6 ).Estos dos aspectos son razones de peso para tener cuidado y consideración. Losbloqueos <strong>epidural</strong>es cervicotorácicos son técnicamente tan fáciles de realizar comolos bloqueos <strong>epidural</strong>es lumbares. Tradicionalmente, la técnica de bloqueo <strong>epidural</strong>la aprendemos en el noviciado de la especialidad, realizando bloqueos en la regiónL 3,4,5 para la cirugía de extremidades y obstetricia. Una vez que adquirimos lahabilidad para hacer estos bloqueos lumbares y tenemos confidencia en la técnica,progresamos cefálicamente a realizar bloqueos <strong>epidural</strong>es torácicos para cirugíaabdominal. Por último se aprenden los bloqueos <strong>epidural</strong>es mediotorácicosutilizando un abordaje mediotorácico para la cirugía <strong>del</strong> tórax. Los bloqueos<strong>epidural</strong>es <strong>cervical</strong>es son parte valiosa <strong>del</strong> aprendizaje.Un principio reconocido es utilizar la anestesia <strong>epidural</strong> segmentaria, realizando elbloqueo <strong>epidural</strong> en el medio de los dermatomas por anestesiar, limitando ladifusión proximal y distal de los anestésicos locales (AL) a los segmentos querequieren ser bloqueados. La anestesia <strong>epidural</strong> cervicotorácica es útil para elcuello, las extremidades superiores y las regiones superiores <strong>del</strong> tórax.En 1891 Quincke describió la anestesia <strong>epidural</strong>. Mas tarde, en 1931 Dogliottidescribió la anestesia segmentaria <strong>epidural</strong>, con el concepto de que el volumeninyectado determinaba lo extenso de los segmentos bloqueados y que el sitio deinyección, también era importante para determinar los dermatomas bloqueados.La anestesia <strong>epidural</strong> mantenida con catéteres fue descrita en 1942. Los bloqueos<strong>cervical</strong>es <strong>epidural</strong>es se revisaron en 1984 para su uso en cirugía de cabeza ycuello. 1ANATOMÍALa anatomía <strong>del</strong> espacio <strong>epidural</strong> <strong>cervical</strong> es, en general, muy similar a la <strong>del</strong>espacio <strong>epidural</strong> lumbar, con algunas diferencias importantes. La apófisis espinosadesde C 5 a T 3 son suficientemente horizontalizadas y angostas para proveer unpaso amplio entre ellas, lo cual permite un abordaje fácil en la línea media hasta elespacio extradural. Por arriba y debajo de estos niveles, las apófisis espinosas


dorsales están tan anguladas hacia abajo, que se sobreponen una sobre la otra,dificultando la punción a través de la línea media.La apófisis espinosa de C 7 está muy desarrollada, es casi horizontal cuando seflexiona el cuello. Esta apófisis protuye de tal manera, que C 7 es conocida como laVertebra prominens (apófisis espinosa prominente). La Vertebra prominenspermite una fácil identificación de los interespacios C 6-7 y C 7 - T 1 , localizadosinmediatamente por arriba y por debajo. Los espacios C 6-7 y C 7 - T 1 son losespacios recomendados para el bloqueo <strong>cervical</strong>. Los espacios C 5-6 , T 1-2 y aún T 2-3son razonablemente fáciles de utilizar, y en algunas ocasiones pudieran ser sitiosmás apropiados cuando se desea bloquear dermatomas más altos o más bajos.El ligamento flavum (amarillo) está menos desarrollado en la región <strong>cervical</strong> queen la región lumbar. Durante la punción <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong>, este ligamentousualmente se reconoce por la sensación táctil transmitida de un "pop" cuando laaguja de Touhy lo atraviesa. En un 5% de los casos, el espacio <strong>epidural</strong> <strong>cervical</strong> esdetectado con la técnica de pérdida de la resistencia, sin la percepción táctil <strong>del</strong>"pop" al atravesar la aguja el ligamento, debido al reducido espesor. El ligamentoflavum puede estar muy duro cerca de sus fijaciones óseas, por abajo y arriba, yesto ocasionalmente se percibe como resistencia a la introducción de la aguja, conel riesgo de una repentina arremetida con la aguja de Touhy, después de pasar elligamento.Pueda ser que exista una zona de tejido blando que ofrece mínima resistencia alpaso de la aguja de Touhy, la cual se localiza entre el ligamento supraespinoso y elligamento interespinoso. Este espacio ofrece una falsa sensación de pérdida de laresistencia a la inyección de solución salina, y se puede confundir con el espacio<strong>epidural</strong>. Se le reconoce debido a que está a menos de 3 cm por debajo de la piel.Una falsa pérdida de la resistencia también puede darse cuando la aguja de Touhyse desvía ligeramente de la línea media, saliéndose <strong>del</strong> angosto ligamentointerespinoso y penetrando el músculo. Ver más a<strong>del</strong>ante discusión de la técnica.El espacio <strong>epidural</strong> <strong>cervical</strong> es bastante profundo, a una distancia de 4 a 7 cm <strong>del</strong>a superficie cutánea. Aldrete 2 revisó las resonancias magnéticas de 100 pacientesy encontró que la distancia más larga de la piel al espacio <strong>epidural</strong> estaba en C6-7y C7-T1, con una media de 5.7 cm. En T1-2 esta distancia promedió 5.4 cm y enT 2-3 fue de 4.7 cm. Este mismo autor encontró que lo ancho <strong>del</strong> espacio <strong>epidural</strong>posterior, en la línea media, mide 3 mm en C 6-7 , 4 mm en C 7 -T 1 , 5 mm en T 1-2 y 4mm a la altura de T 2-3 . Las mediciones clínicas de Lin, 3 con el cuello flexionado(como en la posición durante el bloqueo <strong>cervical</strong>) mostraron una distancia piel -espacio <strong>epidural</strong> a nivel C 7 - T 1 de 4.8 cm. Otros investigadores han medido laanchura <strong>del</strong> espacio <strong>epidural</strong> con el cuello en posición neutra, y encontraron queen la región lumbar media fue de 5 a 6 mm, 2 mm entre C 3 - C 6 y de 3.2 mm enT 1-2 . Estos datos muestran que la anchura <strong>del</strong> espacio <strong>epidural</strong> <strong>cervical</strong> se duplicadurante la flexión <strong>del</strong> cuello, comparado con la posición neutra (la anchura <strong>del</strong>espacio <strong>epidural</strong> se refiere a la distancia que existe entre el ligamento amarillo y laduramadre. Nota <strong>del</strong> traductor).El plexo venoso <strong>epidural</strong> está muy bien desarrollado en las caras laterales y menosen la zona de la línea media posterior. Esta venas no tienen válvulas y conectanpor arriba directamente con los senos cerebrales, y hacia abajo con las venasparavertebrales con flujo central. Es posible que una dosis muy pequeña de AL


inyectado accidentalmente en las venas <strong>cervical</strong>es <strong>epidural</strong>es provoqueconvulsiones instantáneas, si ocurre flujo retrógrado hacia el cerebro. El autor (yel traductor) han tenido experiencia con estos casos (no publicadas).INDICACIONES Y USOSEl bloqueo <strong>epidural</strong> cervicotorácico puede ser usado como anestésico puro, puedeser también usado para analgesia postquirúrgica y para control <strong>del</strong> <strong>dolor</strong> crónico.Se puede considerar cualesquier necesidad de anestesia o analgesia en losdermatomas C 3 a T 6 , como podría ser cirugía de tiroides, disección linfática <strong>del</strong>cuello, cirugía ortopédica de los brazos y las mano, 4 reanastomosis de brazos,mastectomías, endarterectomía carotídea, 5 inyección de esteroides extradurales en<strong>dolor</strong> <strong>del</strong> cuello y radiculopatía <strong>cervical</strong>, 6 analgesia después de cirugía coronaría acorazón abierto, analgesia después de simpatectomía toracoscópica, tratamientode la artritis reumatoidea asociada con vasculitis, 7 cefalea de origen <strong>cervical</strong>, 8angina pectoris inestable, 9,10 como único anestésico para reparación toracoscópicade neumotórax, 11 cervicobraquialgia (50 casos), 12 control domiciliario en un niñocon <strong>dolor</strong> por cáncer, 13 <strong>dolor</strong> crónico de cabeza y cuello (141 bloqueos en 45pacientes), 14 para prevenir los reflejos bronco - carinales (pero no loslaringotraqueales). 15En cirugía de mano y brazo, el bloqueo <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> realizado correctamentecon AL sin o poco bloqueo motor, tiene la ventaja de que la extremidad se puedemover pasiva y activamente, sin <strong>dolor</strong> durante las maniobras de rehabilitación.CONTRAINDICACIONESLas contraindicaciones son las habituales para la anestesia <strong>epidural</strong>. En particular,las infecciones cercanas al sitio <strong>del</strong> bloqueo, coagulopatías, condiciones con gastocardiaco limitado, falta de experiencia en anestesia <strong>epidural</strong> lumbar (este bloqueono es para principiantes), y falta de habilidades de reanimación/anestesia general.COMPLICACIONESUna característica de las complicaciones <strong>del</strong> bloqueo <strong>cervical</strong> extradural es quepocas complicaciones, o secuelas serias han sido descritas en la literaturacientífica. Hay solo algunos casos informados.De manera infrecuente, en laliteratura se han registrado hematomas y abscesos <strong>cervical</strong>es espontáneos (sinrelación con alguna intervención). Sin embargo, estas complicaciones asociadascon el bloqueo <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> son extremadamente raras. Existe acuerdo en laimpresión de que las complicaciones en este tipo de bloqueos son muy raras,habiéndose especulado que esto podría ser debido, al menos en parte, al altoentrenamiento y habilidades de los anestesiólogos que realizan estosprocedimientos.A continuación se consideran cada una de las complicacionesteóricas:Dificultad respiratoriaEl bloqueo evidente de ambos nervios frénicos pudiera resultar en la incapacidad


para respirar. Lo que es notable es que los bloqueos <strong>epidural</strong>es intencionales en elcuello parecen no estar asociados con bloqueo sintomático <strong>del</strong> nervio frénico.Aparentemente el nervio frénico es más resistente a ser bloqueado en el espacio<strong>epidural</strong>, que cualquier otro nervio motor. Los bloqueos <strong>cervical</strong>es <strong>epidural</strong>es hansido realizados con lidocaína 2% (la cual usualmente bloquea fibras motoras deforma muy efectiva) y los pacientes mantienen ventilación adecuada. Existeabundante experiencia informando la seguridad y eficacia de bupivacaína enconcentraciones tan bajas como 0.375% o menores. Ropivacaína 0.4% a 0.5% omenos concentrada pudiera ser aún más idónea para el bloqueo <strong>cervical</strong>extradural. Algunos estudios que han encontrado que estos bloqueos producenpequeños cambios medibles, la mayoría insignificantes, sobre los parámetrosrespiratorios, utilizando virtualmente casi todos los AL disponibles, en un ampliorango de concentraciones. La única evidencia registrada de dificultad respiratoria,fueron casos reportados en inválidos pulmonares, en los cuales se usó bupivacaína0.5% y hubo alteraciones en las gasometrías arteriales, suficientes parapreocuparse, pero sin fatalidades. Otros proponentes 1 de la anestesia <strong>cervical</strong><strong>epidural</strong>, de hecho consideran que los pacientes con daño pulmonar soncandidatos para esta técnica.Capdevila y cols, 16 estudiaron 10 pacientes que fueron operados de la manoúnicamente con anestesia <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong>. Se realizaron pruebas espirométricas,gasometrías y evaluación ultrasonográfica de los movimientos <strong>del</strong> diafragma. Seestudiaron dosis de bupivacaína de 0.37% y 0.25%. Observaron cambiosestadísticos significativos pero irrelevantes en la gasometría arterial. La PaCO 2media aumentó de 35.2 a 39.3 mm Hg y la SpO 2 bajó a 98%. Los cambiosclínicamente significativos en la espirometría solo fueron vistos en maniobrasforzadas. Los cambios en la movilización diafragmática se vieron solamentedurante las respiraciones de capacidad vital. El bloqueo extradural <strong>cervical</strong>permitió excelente rehabilitación de las manos operadas, sin <strong>dolor</strong> durante losmovimientos voluntarios y no hubo complicaciones en la evolución. Sin embargo,la conclusión fue que esta técnica de bloqueo no era para ser recomendada. Hayque hacer notar que este estudio no comparó los cambios respiratorios quetambién se observan después de anestesia general y opioides. Este autorconsidera que esta conclusión pudiera haber sido diferente.Nystrom 17 estudió 16 pacientes que se operaron de reconstrucción mayor de losbrazos, bajo infusiones continuas <strong>cervical</strong>es <strong>epidural</strong>es durante 6 días y encontróresultados y evolución muy favorables.Stevens 18 inyectó lidocaína 2% en la región <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> en 15 enfermos conenfermedad pulmonar que fueron sometidos a endarterectomía carotídea oinyección de esteroides para <strong>dolor</strong> de cuello. Una dosis de 15 mL de lidocaína 2%fue administrada a nivel C 7 - T 1 . Los dermatomas bloqueados estuvieron entre C 2 aT 12 , con una media de C 3 - T 8 . El bloqueo se tardó de 20 a 40 min para alcanzarlas alteraciones máximas en la respiración. La CVF y el VEF 1 bajaron 12% a 16%.La presión máxima inspiratoria y la saturación arterial de O 2 no se modificaron.Solo un caso en esta serie se consideró que tuvo bloqueo clínico significativo <strong>del</strong>nervio frénico. No obstante los buenos resultados, Stevens no recomendó estatécnica y sugiere utilizar volúmenes más pequeños para preservar algo de lafunción de los músculos intercostales, y también recomendó utilizar AL yconcentraciones que eviten el bloqueo motor, para obtener aún más seguridad. Nohay necesidad de bloquear hasta T 12 mediante un bloqueo <strong>cervical</strong> extradural.


Es importante hacer notar que todos estos estudios no fueron comparativos conotras técnicas de anestesia regional como por ejemplo: el bloqueo <strong>cervical</strong>profundo, de plexo braquial, con y sin sedación, o aún con técnicas de anestesiageneral. Todas las técnicas regionales alternativas tienen la posibilidad de bloquearperiféricamente el nervio frénico o de alterar en algún grado la dinámicarespiratoria. Pudiera ser posible que el bloqueo <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> sea la técnicaregional más segura en esta área quirúrgica. También es interesante determinar sicualquier cambio estadístico significativo encontrado fue clínicamente importante.La razón por la cual no sucede falla respiratoria durante el bloqueo <strong>cervical</strong><strong>epidural</strong> necesita estudio, y sabemos que puede ser por numerosos factores:La mayoría de los bloqueos <strong>cervical</strong>es <strong>epidural</strong>es son segmentarios, limitándose alcuello y la parte más superior de los segmentos torácicos, preservando la mayorparte de la función de los músculos intercostales. Los pacientes normales amenudo pueden mantener respiraciones con volumen corriente adecuado sólo conla función muscular intercostal, a pesar de bloqueo aislado <strong>del</strong> nervio frénico, aúncuando este pudiera ser bilateral. Esta situación de respiración adecuada conbloqueo <strong>del</strong> frénico, pudiera no ser válida a situaciones asociadas conhorizontalización costal como en la hiperinflación pulmonar o en la obesidadmórbida. Claramente, la parálisis de ambos frénicos y de todos los nerviosintercostales resultará en paro respiratorio.Se ha sugerido que el nervio frénico es por si mismo más resistente al bloqueomotor que otros nervios motores. Esto hace poco probable que el nervio frénicosea apropiadamente bloqueado por vía periférica. Durante el bloqueo braquialinterescalénico, la mayoría de las veces también se bloquea el nervio frénico.Las raíces motoras se localizan muy anteriores y se ha sugerido que ya que elabordaje de los bloqueos <strong>cervical</strong>es extradurales es posterior, donde el espacio<strong>epidural</strong> es más grande, el AL se difunde selectivamente en las raíces posteriores,donde se encuentran las fibras sensoriales. Aún más, se ha dicho que el ligamentoen el espacio <strong>epidural</strong> en la posición lateral, también impide la difusión <strong>epidural</strong> demedicamentos hacia las raíces motoras. Esto parece plausible.Con la disponibilidad de AL que evitan el bloqueo motor, como la ropivacaína, labupivacaína y la l - bupivacaína (ver capítulo de anestésicos locales isoméricos), esconceptualmente inapropiado usar concentraciones de AL que dan bloqueo motoren la distribución de las raíces <strong>del</strong> nervio frénico. Esto añade un confort intelectuala la realización <strong>del</strong> procedimiento (ver dosis más a<strong>del</strong>ante). Bupivacaína 0.375% yropivacaína 0.4% han sido utilizadas satisfactoriamente por este autor,clínicamente con buena ventilación espontánea.Hematoma en el espacio <strong>epidural</strong>.El hematoma <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> iatrogénico se ha descrito muy raramente. El últimocaso informado en la literatura mundial fue hace 10 años. 19 Ha sido sugerido queeste riesgo es menor que en la región lumbar ya que la presión venosa en laposición de sentado, es menor en el cuello que en la región lumbar. Cualquier


hematoma que se observe en la región <strong>cervical</strong> es más probable que sea de origenespontáneo.Absceso <strong>epidural</strong>.El absceso <strong>epidural</strong> en la región <strong>cervical</strong> como complicación iatrogénica solo se hadescrito en una ocasión El riesgo debiera ser el mismo o menor que para otrasregiones <strong>del</strong> espacio extradural.Hipotensión arterial.Un bloqueo segmentario en esta región rara vez produce bradicardia que requieraterapia antimuscarínica. Cuando se requiere, habitualmente la atropina es muyefectiva. La hipotensión arterial se presenta aún menos con los bloqueos<strong>cervical</strong>es, que aquella que se observa con los bloqueos <strong>epidural</strong>es lumbaresextensos. Esto se debe a la conservación <strong>del</strong> tono simpático de las vísceras y laspiernas.Daño medular directo.La punción de la médula <strong>cervical</strong> con aguja de Touhy durante bloqueo <strong>cervical</strong><strong>epidural</strong> solo ha sido descrita en dos casos. Hodges 20 fue el primero en describirdos pacientes que posiblemente tuvieron daño medular después de la inyección deesteroides para <strong>dolor</strong> en el cuello. Dolor y cambios neurológicos se desarrollarondentro de las 24 hr posteriores. La opinión <strong>del</strong> autor fue de que la fluoroscopíautilizada falló en la prevención de la punción medular, pero que la sedaciónutilizada, pudo haber reducido la habilidad de los enfermos para describir síntomasque hubieran conducido a evitar esta inyección, después de que se había lesionadola médula (ver discusión más a<strong>del</strong>ante). Giebler 21 estudió 4,185 pacientes quetuvieron bloqueos extradurales torácicos altos. La incidencia total de punción duralfue de 0.7% (n = 30), <strong>dolor</strong> radicular postanestésico de 0.3%, que desapareció entodos al retirar el catéter <strong>epidural</strong>, y ningún caso de daño medular sintomático.Hubo una incidencia menor de complicaciones en los bloqueos altos (T 3-7 )comparado con los bloqueos bajos (T 8-12 ). La literatura radiológica informa casosen los que durante intentos de mielografía <strong>cervical</strong>, se perforó la médula sinsecuelas aparentes.Bromage informó un caso en el que se documentó una burbuja intramedulardespués de múltiples intentos de bloqueo <strong>epidural</strong> torácico bajo, seguido denumerosos períodos de hipotensión arterial severa y sostenida y el desarrolloposterior de parálisis y un síndrome de arteria espinal anterior. 22 El hizo una fuerteinterpretación de que la parálisis fue debida a la burbuja intramedular, la cual a suvez fue secundaria a la punción medular con la aguja de Touhy, y toda estacatástrofe la atribuyó a que el paciente una vez anestesiado no tenía posibilidad deinformar los síntomas de daño medular. Mencionó que la realización de bloqueos<strong>epidural</strong>es bajo sedación o anestesia era una práctica negligente. Posteriormentese mantuvo en la opinión de que las punciones <strong>epidural</strong>es realizadas por arriba <strong>del</strong>a terminación de la médula espinal eran un procedimiento de alto riesgo, solopermisible en situaciones con una poderosa indicación. Estos puntos de vista einterpretaciones de Bromage fueron muy disputados en una editorial firmada por16 anestesiólogos. 23 Se reportó que ambas, las meninges y la médula espinal, son


insensibles, y que el paciente no hubiera tenido una sensación <strong>dolor</strong>osa de aviso.Además, la distribución <strong>del</strong> daño neurológico no correlacionaba con la burbujaintramedular y sí con isquemia en territorio de la arteria de Adamkiewicz,explicándose esto por los periodos de hipotensión arterial sostenida. Losnumerosos autores atestiguaron posteriormente, sobre la práctica tan común decolocar catéteres <strong>epidural</strong>es en niños bajo anestesia general sin consecuenciasatribuibles al procedimiento. Esta editorial también menciona sobre la prácticasegura y bien establecida de insertar catéteres <strong>epidural</strong>es por arriba de laterminación de la médula espinal. La interpretación de Bromage sobre este casono tuvo ningún comentario escrito a su favor.Con respecto a la posibilidad de lesión medular, y a la luz de toda la informaciónanterior, es verdad que clínicamente es aceptable realizar bloqueos <strong>epidural</strong>es enla región <strong>cervical</strong>. También es cierto que la punción de la médula espinal, a pesarde ser muy desagradable, automáticamente no resulta en daño permanente.Aparentemente los casos informados de lesión medular usualmente se asociaroncon la inyección a través de la aguja, de drogas potencialmente dañinas (como losesteroides). Parece razonable que solo debamos inyectar a través <strong>del</strong> catéter quefue fácilmente introducido 3 a 5 cm más allá de la punta de la aguja <strong>epidural</strong>. Estosugiere que la punta <strong>del</strong> catéter está en un espacio libre (<strong>epidural</strong> osubaracnoideo). No debe de haber sangre o líquido al aspirar el catéter <strong>epidural</strong>.Esválido dejar claramente asentado: nunca inyectar a través de la aguja de Touhy,solamente a través <strong>del</strong> catéter que pasó fácilmente 3 a 5 cm más allá de la puntade la aguja, y siempre después de una prueba de aspiración negativa.Efectos cardiovasculares <strong>del</strong> bloqueo <strong>epidural</strong> de T 1-4El entendimiento de estos efectos es complejo y ha aumentado en años recientes,y dependiente de otros efectos de otros segmentos que han sido bloqueadossimultáneamente. El resultado neto es variable. Este párrafo debe compendiar unpárrafo <strong>del</strong> libro "Neural blockade" de M. Cousins. 24 La inervación simpática <strong>del</strong>corazón se origina en T 1-4 y estimula la cronotropía y la inotropía. La enseñanza hasido siempre de que el bloqueo de T 1-4 produce bradicardia severa. Parece ser queel bloqueo T 1-4 solamente reduce un 80% el efecto simpático. Los efectos netos <strong>del</strong>bloqueo <strong>epidural</strong> de T 1-4 dependen de 1) de si las fibras simpáticas esplácnicasestán bloqueadas T 6 -L 1 , las cuales dan el control nervioso de la glándula adrenal ylas fibras vasoconstrictoras esplácnicas (el lecho esplácnico tiene una enormecapacidad vascular); 2) de si las fibras vasoconstrictoras de los miembrosinferiores (T 11 - 12 a L 4 ) están bloqueadas; 3) de si el volumen intravascularprebloqueo está depletado; 4) de si la absorción sistémica de AL ha sido suficientepara deprimir la función miocárdica. (Los mismos niveles sanguíneos que producen20 mL de bupivacaína 0.5% administrados en el espacio <strong>epidural</strong> lumbar, reducenla contractilidad miocárdica en un 15% en mo<strong>del</strong>os animales); 5) de si existehiperactividad parasimpática al mismo tiempo. El control parasimpático se hace através <strong>del</strong> nervio vago, el cual no es bloqueado por la vía extradural.Rotundamente, una dosis pequeña en los segmentos cervicotorácicos <strong>epidural</strong>es seva a comportar muy diferente de una dosis mayor inyectada en la región lumbarextradural y que se extiende hasta la zona <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong>.Los bloqueos<strong>epidural</strong>es lumbar que se extienden tan arriba como T 4 se asocian con un 20% decaída de la presión arterial.


Los bloqueos segmentarios cervicotorácicos cursan sin cambios en la presiónarterial, o menos de 10% de descenso. También se ha encontrado que con estosbloqueos cervicotorácicos la PVC se aumenta en algunos casos, aunque tiende adisminuir cuando el bloqueo se extiende a C 5 - T 5 . En resumen, los efectoscardiovasculares de los bloqueos <strong>epidural</strong>es segmentarios cervicotorácicos sonnotablemente benignos. Biboulet 25 específicamente evaluó estos aspectos ydescribió los cambios como insignificantes.Sture Blomberg demostró que los bloqueos <strong>epidural</strong>es torácicos altos sonbenéficos en la presencia de angina inestable. Las evidencias electrocardiográficas,ecocardiográficas, angiográficas y clínicas de isquemia se mejoran con bloqueonervioso <strong>epidural</strong> de T 1-4 .Es muy importante, y siempre permanecerá siendo válido, que el anestesiólogotenga asegurado un acceso vascular, que se reponga el déficit intravascular, quese cuente con equipo para manejo de la vía aérea, así como la facilidad paraadministrar atropina y vasoconstrictores antes de iniciar un bloqueocervicotorácico <strong>epidural</strong> (esto es válido para todos los bloqueos extradurales).Técnica de inserciónLa técnica es muy similar a la utilizada en la inserción de catéteres <strong>epidural</strong>es en laregión lumbar baja, con solo algunas diferenciasPosición <strong>del</strong> paciente. El bloqueo <strong>cervical</strong> extradural se realiza fácilmentecon el paciente sentado en una silla, con los brazos descansados hacia elfrente, en la mesa de operaciones, a la altura de sus hombros (figura 1). Laespalda debe de estar en una posición recta, tipo militar. El cuelloflexionado al máximo, descansando al frente sobre los brazos, o sobre uncojinete. Esta posición estabiliza al enfermo contra la posibilidad debambolearse durante la presión que se ejerce al introducir la aguja<strong>epidural</strong>. La aguja de Touhy se mantiene sobre la línea media y orientadahorizontal, o ligeramente angulada hacia arriba o abajo, dependiendo <strong>del</strong>enfermo. El paciente se acomoda mejor al sentarlo en una silla normal opequeña, mientras que el anestesiólogo debe de estar sentado en un bancoalto o bien estar parado detrás <strong>del</strong> paciente. Cualquier bamboleo en laposición de sentado es una distracción. Otros autores y a menudo esteautor usamos la posición lateral, debido a que el bloqueo es tan fácil, aúnpara esta posición lateral, y el paciente puede estar más inmóvil. Utilizoesta posición cuando el paciente está dormitando durante el procedimiento.


Figura 1. Haga doble clic sobre la figurapara agrandar la imagenIdentificación <strong>del</strong> espacio <strong>epidural</strong>. El espacio <strong>epidural</strong> se encuentra por unacombinación de:• La percepción <strong>del</strong> "pop" al atravesar el ligamento flavum (habitualmente sesiente).• La pérdida de la resistencia a la inyección de salina (recomendada por esteautor).La técnica de la gota suspendida de Gutiérrez es muy segura en estaposición alta, comparada con la región lumbar en la posición de sentado. Eldiagnóstico diferencial cuando la gota se aspira dentro de la aguja es con lacolocación intravenosa de la misma. La presión de las venas <strong>epidural</strong>es<strong>cervical</strong>es en la posición de sentado es negativa, comparada con el aireatmosférico. Algunos expertos recomiendan enfáticamente la técnica de lagota suspendida.La aspiración debe de ser negativa para sangre y líquidocefalorraquídeo. Utilice una jeringa de 2 mL y retraiga el émbolo de lajeringa tan solo 0.5 mL, esperando 60 segundos. El tratar de acortar esteperiodo de observación, y usar un exceso de aspiración puede producir unafalsa negativa.Una dosis de prueba para excluir la colocación venosa o subaracnoidea.Este autor omite esta dosis de prueba y solo se basa en las otras pruebasdescritas).Me opongo al uso de aire en la técnica de pérdida de la resistencia para identificarel espacio <strong>epidural</strong>, debido a que finalmente el suero salino es más positivo einequívoco, y el aire en espacio subaracnoideo puede causar <strong>dolor</strong> intenso si migraa los ventrículos y produce pneumoencéfalo. El aire en la médula espinal se puedeexpandir a varias veces si el paciente se expone al óxido nitroso, y las burbujas deaire pueden ser motivo de bloqueos en "tablero de ajedrez" o "parchados" debidoa que dificultan una difusión adecuada de los AL. El líquido cefalorraquídeo (LCR),es fácil de identificar ya que se pueden aspirar grandes volúmenes, mientras queel salino <strong>epidural</strong> solo permite que se aspiren unas cuantas gotas antes determinar su salida.Reconociendo el "Espacio <strong>epidural</strong> falso".


Este espacio se observa en la región lumbar en el 1% al 2% de los casos, pero enla región <strong>cervical</strong> parece ocurrir hasta en un 10% de los pacientes (experienciapropia).Se siente más frecuentemente superficial (entre 2 y 3 cm por debajo de la piel) yse debe a la falta de continuidad entre los ligamentos supraespinoso einterespinoso. Un espacio <strong>epidural</strong> falso también se puede encontrar debido a ladesviación de la aguja de Touhy, que se aparta de la línea media y se sale de lafirmeza <strong>del</strong> tejido <strong>del</strong> ligamento interespinoso y penetra la región paravertebral;músculos antes de que se encuentre el ligamento amarillo. El ligamentointerespinoso <strong>cervical</strong> es mas angosto y está menos desarrollado que en la regiónlumbar. Se sugiere reconocer este "falso espacio <strong>epidural</strong>" por un número dehechos:1) no se siente el "pop" al atravesar el ligamento amarillo; 2) el espacio<strong>epidural</strong> parecer estar más cerca de la piel de lo que se espera; 3) el catéter<strong>epidural</strong> no entrará más de 1-2 cm dentro de este "espacio <strong>epidural</strong>": 4) no seaspira LCR. La aspiración de LCR identifica el espacio subaracnoideo; 5) el salinoinyectado en el "espacio <strong>epidural</strong>" ofrece una resistencia muy ligera que hace alexperimentado sospechar el error, y la sensación es ligeramente "saltona"(bouncy). La pérdida de la resistencia en el verdadero espacio <strong>epidural</strong> es máscategórica y 6) tres o más gotas de solución salina se regresan de la aguja(usualmente menos con el espacio <strong>epidural</strong> verdadero).Si la mayoría de los puntos anteriores están presentes, entonces proceda comosigue. Aplique una tracción muy gentil sobre el catéter y si se puede retirarFACILMENTE, de nuevo avance la aguja de Touhy 1 cm. En cada tiempo, probandola pérdida de la resistencia en cada paso. Si el catéter ofrece resistencia al tratarde retirarlo, entonces sustraiga la aguja y el catéter juntos y empiece de nuevo.Revalore la posición considerando que está en la línea media. Habitualmente sesiente una resistencia suave (de ligamento) de 1 - 2 mm que resiste al paso de laaguja y de la inyección. Esto es confiable. Proceda hasta que identifica elverdadero espacio <strong>epidural</strong>. Si se alcanza una profundidad de más de 2 cm de laprofundidad esperada -como la descrita en la sección de anatomía-, sin que sedesarrolle pérdida de la resistencia, entonces retire la aguja y el catéter y empiecede nuevo. Si fallan 2 intentos en el mismo espacio, mejor trate un espacio arriba oabajo. Si ocurre falla en dos espacios, es mejor terminar el procedimiento,considerar alternativas y buscar consejo y ayuda de un colega experto.La dosis de prueba.Una dosis de prueba se puede administrar para descartar la posibilidad decolocación intravenosa <strong>del</strong> catéter <strong>epidural</strong> utilizando 15 m g de adrenalina en lasolución de prueba. Sin embargo, esta dosis de prueba es notoriamente falible ypuede ser omitida. En la región lumbar, la dosis de prueba usualmente incluye unAL potente (por ejemplo 1 a 2 mL de lidocaína 2%) para probar colocaciónsubaracnoidea <strong>del</strong> catéter. Una dosis de prueba con lidocaína 2%, si se va a usaren el bloqueo <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong>, deberá de ser con un volumen muy pequeño (nomás de 1 mL) ya que puede influenciar la dosis <strong>epidural</strong> principal, la cual estambién de un volumen muy pequeño (4 a 8 mL).


Durante el bloqueo <strong>cervical</strong> extradural no utilizo de rutina la dosis de prueba, ensu lugar mantenemos siempre un alto nivel de vigilancia para manejar cualquiercomplicación que pudiera presentarse. Sin embargo, es muy importante siempreaspirar a través <strong>del</strong> catéter, en búsqueda de sangre o LCR.La dosis principal recomendada (ropivacaína, bupivacaína o l - bupivacaína), en lasdiluciones recomendadas no debería de producir una densa parálisis nerviosa si esinyectada en el espacio subaracnoideo, y es tan pequeña que tampoco producirátoxicidad sistémica de ser inyectada intravascularmente. La inyección intravenosaresultará en una falla completa <strong>del</strong> bloqueo nervioso. Si el AL fluye distalmente, nohabrá efectos sistémicos, pero si el AL fluye retrogrado hacia en cerebro, entoncesse presentarán de inmediato las crisis convulsivas de corta duración y con buenpronóstico (experiencia personal de un caso). Si el AL es inyectado en el espaciosubaracnoideo, el bloqueo será extenso y con hipotensión arterial no esperada. Laventilación deberá de ser adecuada. Si existe sospecha, vuelva a aspirar a través<strong>del</strong> catéter en búsqueda de LCR o sangre. Cuando se realice el bloqueo en unpaciente despierto, compruebe la extensión cefálica y caudal <strong>del</strong> bloqueo con uncubo de hielo, para determinar la extensión sensorial.El catéter <strong>epidural</strong>.El catéter debe de ser introducido 3 a 4 cm dentro <strong>del</strong> espacio <strong>epidural</strong>. Serecomienda un catéter con punta blanda (por ejemplo de las marcas comercialesArrow o B. Braun).Deteniendo la aguja de Touhy.Se debe de usar una técnica que permita que la aguja <strong>epidural</strong> avance, utilizandouna presión intensa, pero en la que la aguja esté tan bien sujetada que cualquierpérdida súbita de la resistencia solamente resulte en introducción de la aguja de 1o 2 mm. La técnica clásica de Bromage, con el dorso de la mano izquierdaapoyado sobre la espalda <strong>del</strong> paciente es insuficiente, por lo que prefiero asegurarla aguja de Touhy firmemente entre los dos dedos medios levantados contra lapiel, y con los pulgares y los índices sujetar las alas de la aguja <strong>epidural</strong>. Estoevitará perforar la médula espinal por un movimiento brusco e inadecuado de laaguja. Cualquier técnica que provea un buen control sobre la introducción de laaguja, es una buena técnica (figura 2).Figura 2. Haga doble clic sobre la figurapara agrandar la imagen


Pérdida de la resistencia a solución salina.Es recomendada por este autor debido a que es más obvia al compararla con eluso de aire, y además evita la posibilidad de pneumoencéfalo, el cual es muy<strong>dolor</strong>oso. Algunos anestesiólogos que practican frecuentemente este tipo debloqueo favorecen el uso de la gota suspendida. Esta última técnica funciona muybien en la posición de sentado, pero cuando se utiliza la posición con el pacienteen decúbito lateral se recomienda más la pérdida de la resistencia con salina.COMENTARIOS GENERALES.Es común desencadenar ciertas molestias menores que se irradian hacia uno <strong>del</strong>os brazos, las cuales pueden ser ignoradas cuando no son intensas. El <strong>dolor</strong>severo obliga a retirar el catéter. Se sospecha la punción de la médula espinalcuando se percibe una molestia vaga en la espalda, en zonas por debajo de losdermatomas <strong>cervical</strong>es Esto requiere inmediato retiro de la aguja y/o el catéter. Sila molestia en la espalda es moderada y sucede en el momento de la pérdida de laresistencia, intente pasar el catéter. Si el paso <strong>del</strong> catéter a través de la aguja deTouhy es fácil y al aspirar no se obtiene LCR, el catéter puede ser utilizado conmucha cautela. Si se aspira LCR el diagnóstico es obvio y se debe de abandonar elprocedimiento. Si el catéter <strong>epidural</strong> no puede ser avanzado fácilmente entre 3 a 5cm, recoloque la aguja. En resumen, una molestia moderada en los brazos esaceptable, pero cualquier molestia por debajo <strong>del</strong> cuello debe de ser manejada congran sospecha. Nunca inyecte dosis única a través de la aguja, sólo inyecte através <strong>del</strong> catéter que fue satisfactorio en todos sus aspectos. En términosgenerales, este es un bloqueo <strong>epidural</strong> fácil de realizar.DOSISSe ha usado una gran variedad de AL. La bupivacaína 0.5% ha sido usada paradisecciones <strong>cervical</strong>es en bloque, cirugía torácica superior, cirugía mamaria.También se ha usado la mepivacaína 1% 26 pero la lidocaína al 2% ha sidoestudiada más ampliamente. El volumen es muy importante, al igual que la dosis yconcentración <strong>del</strong> AL. Una regla aceptada es que las drogas <strong>epidural</strong>es difunden1.5 mL por segmento en la región lumbar, 1 mL por segmento en la regióntorácica y 0.5 mL por segmento en la región <strong>cervical</strong> (bupivacaína 0.5%).Visser 27 realizó un estudio administrando 3 mL de lidocaína 2%. El bloqueo seextendió en promedio 1.8 segmentos por mL en C 7 - T 1 , 1 segmento por mL en T 3-5, y 2.3 segmentos por mL en T 7-9 . Las inyecciones <strong>epidural</strong>es altas, en particular,demostraron una difusión desproporcionada; más difusión caudal que rostral. Estoenfatiza el punto de que la punta <strong>del</strong> catéter <strong>epidural</strong> debe colocarse en la porciónsuperior de los dermatomas que requieren ser bloqueados, especialmente en lasregiones torácicas altas. Mayumi 28 demostró que la absorción de AL desde elespacio <strong>epidural</strong> es la misma cuando se inyectan 10 mL de lidocaína al 2% en la


egión <strong>cervical</strong>, mediotorácica o lumbar. La ropivacaína parece ser la mejorelección para la inyección <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> debido a su propiedad de preservar lafunción motora.Para anestesia quirúrgica utilizo 0.357% a 0.4% de bupivacaína o ropivacaína0.4% a 0.5%. Para obtener analgesia recomiendo 0.2% a 0.25% de bupivacaína oropivacaína al 0.25%. Un volumen de 5 a 7 mL es usualmente satisfactorio. Miexperiencia clínica con estas dosis es que no se producen problemas ventilatorios,solo existe algo de debilidad en ambas manos y se obtiene anestesia/analgesiaseguras. Soluciones más diluidas resultan en analgesia incompleta ocasional. Lasinfusiones se pueden hacer con 4 a 8 mL/hr de las diluciones mencionadas. Si unamano está más débil/insensible que la otra, y esto le molesta al paciente, elproblema se puede solucionar retirando un poco el catéter <strong>epidural</strong> (probableposición lateral).Nunca utilizo opioides debido a la proximidad con el tallo cerebral y probablementeun mayor potencial de efectos colaterales centrales, debidos a una mayor difusióncefálica a través <strong>del</strong> LCR. Un estudio con morfina <strong>epidural</strong> en la región T 3-4 paraanalgesia postoperatoria la consideró satisfactoria y pudo documentar prurito ynáusea colaterales. 29 Creo que la incidencia de prurito y náusea son inaceptables yprefiero evitar el uso de opioides, basando la técnica en los AL.CONCLUSIONESDespués de haber asistido a numerosas reuniones internacionales sobre bloqueo<strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> he podido observar que pocos anestesiólogos practican estatécnica en todo el mundo. La mayoría de nuestros colegas parecen tener pocaconfianza o habilidad con los bloqueos <strong>epidural</strong>es como para subir por arriba de losniveles L 3-4-5 . El bloqueo cervicotorácico es una experiencia muy satisfactoria derealizar, tanto para el anestesiólogo como para el paciente. La paciente sonrientede la figura 3 no tiene <strong>dolor</strong> después de 60 min de anestesia general pararesección de una costilla <strong>cervical</strong>. Su única analgesia fueron 6 mL de bupivacaína0.25% inyectados en el espacio extradural <strong>cervical</strong> y mantenida con 6 mL/hr <strong>del</strong>mismo AL.Figura 3. Haga doble clic sobre la figura para agrandar la imagenLos que practicamos la anestesia <strong>epidural</strong> <strong>cervical</strong>, estamos unánimemente deacuerdo en que la técnica es fácil, y que las complicaciones serias sonhabitualmente desconocidas para cada uno de nosotros. Las aplicaciones clínicas


potenciales son variadas. Los anestesiólogos que utilizan este procedimientohabitualmente se encuentran en centros hospitalarios muy orientados a laanestesia regional.La anestesia <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> es mucho más fácil que, por ejemplo, la colocaciónde un catéter interescalénico o por vía axilar para bloquear el plexo braquial. Laanestesia <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> es fácil de mantener con infusión, es predecible ysegura. Sus aplicaciones potenciales son muchas y el adquirir suficiente habilidad yconfianza en la técnica es muy valioso. La muy baja incidencia de complicacionesreportadas probablemente refleje, en parte, el hecho de que solo los más expertos"<strong>epidural</strong>istas" se recrean con esta práctica.Sin embargo, - mas allá de cualquierduda – el procedimiento es una técnica especializada que solo debe ser intentadapor anestesiólogos que sean muy competentes en la anestesia extradural lumbar.Referencias1. Wittich DJ, et al. Cervical <strong>epidural</strong> for head and neck surgery. Laryngoscope1984;94:615.2. Aldrete JA. Skin to <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> space distances. J Clin Anesth1998;10:309-313.3. Lin CH. Distance from the skin to the <strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> space. Acta Anaesthesiol.Scand 1995;33:161-164.4. Biboulet P. Haemodynamic effects of 0.375% versus 0.25% Bupivacaine during<strong>cervical</strong> <strong>epidural</strong> anesthesia for hand surgery. Reg Anest and Pain 1995;20:33-40.5. Kainuma M. Cervical <strong>epidural</strong> anaesthesia in carotid artery surgery. Anaesthesia1986;41:1020-1023.6. Rowlingson JC. Epidural analgesic techniques in the management of <strong>cervical</strong>pain. Anesth Analg 1986;65:938-942.7. Green CR. Cervical <strong>epidural</strong> analgesia for management of pain associated withdigital vasculitis secondary to rheumatoid arthritis. Reg Anesth 1997; 22:188-191.8. Martelletti P. Epidural corticosteroid blockade in cervico-genic headache. EurRev Med Pharmacol Sci 1998;2:131-136.9. Dahm P. High thoracic/low <strong>cervical</strong>, long term intrathecal infusion ofbupivacaine alleviates "refractory" pain in patients with unstable angina. ActaAnaesthesiol Scand 1998;42:1010-1017.10. Gramling B. Treatment of medically and surgically refractory angina pectoriswith high thoracic <strong>epidural</strong> analgesia: initial clinical experience. Am Heart J1997;133:648-55.


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