PROFUNDICEMOS LA DOCTRINA MILITAR BOLIVARIANA

¡Cuánto hizo la Fuerza Armada cuando el 27 de
febrero de 1999, a diez años de la masacre de El
Caracazo, nuestro Comandante Chávez sacó a la
Fuerza Armada en el Plan Bolívar 2000! ¡Cuánto
atacó la derecha al Plan Bolívar 2000! ¿Se acuerdan?
Retomemos el espíritu del Plan Bolívar 2000,
general en jefe.
Yo quiero un plan antes de que amanezca el
primero de enero, mucho antes, un plan para
revitalizar, reimpulsar al máximo nivel la unión
cívico-militar y la unión de la Fuerza Armada
Nacional Bolivariana con las comunas, con el
movimiento popular, y con el pueblo que ama a
su Fuerza Armada.
Son tareas que ameritarán hoy mismo que el
Estado Mayor Conjunto se reúna, vayamos trabajando
y celebrando la paz. Hagamos de estas Navidades
unas Navidades felices para nuestros niños
y nuestras niñas. Los que no han puesto su
nacimiento, pongan su nacimiento, bello, y esperemos
el nacimiento, la llegada de nuestro Niño
Jesús, de nuestro Niño Dios.
Pidámosle al Niño Dios que traiga sabiduría
para nuestra Patria; que nos llene de luz para los
años que están por venir; que nos llene del equilibrio
y la fuerza suficiente para llevar adelante la
poderosa contraofensiva victoriosa que debemos
desplegar como un gran despertar de nuevas
fuerzas; como un gran despertar y un gran renacimiento
de este ideal profundo que llegó para
quedarse, el de Bolívar, el de Chávez, y hay que
decirlo una y mil veces sí, el de Chávez, el de las
generaciones de hoy y el de las generaciones del
futuro con una raíz sólida, profunda, adentro de
la tierra nuestra, y con un corazón palpitando de
pasión diaria por esta Patria.
En estos días en una de estas reuniones, yo leí
parte de un escrito histórico de nuestro Libertador,
el Manifiesto de Cartagena, del 15 de diciembre,
en los próximos días, el propio 15 de diciem-
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