manejo integrado anntracnosis mango

MANEJO INTEGRADO DE LA ANTRACNOSIS Y
CAÍDA DE FRUTOS DE MANGO ATAULFO EN LAS
COSTAS DE GUERRERO
www.inifap.gob.mx
El INIFAP ha generado tecnologías de producción en
el cultivo de mango, lo cual ha permitido incrementar
los rendimientos y calidad del fruto, así como el
ingreso económico de los productores. En esta
ocasión, se presenta este documento con la finalidad
de poner a disposición de técnicos y productores,
herramientas para aplicar un manejo integrado de la
antracnosis y caída de frutos de mango Ataulfo. Esta
enfermedad es uno de los principales problemas
fitosanitarios que afecta este frutal en la región
Costera del estado de Guerrero, México.
David H. Noriega Cantú, Juan Pereyda Hernández, Eduardo R.
Garrido Ramírez, Régulo Jiménez Guillén y Rubén Cruzaley
Sarabia
ORGÁNICO DE TEMPORAL EN LA REGIÓN DE
TIERRA CALIENTE Y COSTA CHICA DEL ESTADO
DE GUERRERO
Centro de Investigación Regional Pacífico sur
Campo Experimental Iguala
Iguala de la Independencia, Gro., Diciembre 2014
Folleto Técnico Núm. 22
ISBN:

SECRETARÍA DE AGRICULTURA, GANADERÍA, DESARROLLO
RURAL, PESCA Y ALIMENTACIÓN
Lic. Enrique Martínez y Martínez
Secretario
Lic. Jesús Aguilar Padilla
Subsecretario de Agricultura
MANEJO INTEGRADO DE LA ANTRACNOSIS Y
CAIDA DE FRUTOS DE MANGO ATAULFO EN LAS
COSTAS DE GUERRERO.
Lic. Juan Manuel Verdugo Rosas
Subsecretario de Desarrollo Rural
Lic. Ricardo Aguilar Castillo
Subsecretario de Alimentación y Competitividad
Lic. Marcos Bucio Mújica
Oficial Mayor
Ing. Carlos A. Hernández Sánchez
Delegado de la SAGARPA en Guerrero
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRICOLAS Y
PECUARIAS
Dr. Luis Fernando Flores Lui
Director General
Dr. Manuel Rafael Villa Issa
Coordinador de Investigación, Innovación y Vinculación
Enc. Dra. Bertha P. Zamora Morales
Coordinación de Planeación y Desarrollo
Mtro. E. Francisco Berterame Barquín
Coordinador de Administración y Sistemas
David H. Noriega Cantú 1
Juan Pereyda Hernández 3
Eduardo R. Garrido Ramírez 2
Régulo Jiménez Guillén 1
Rubén Cruzaley Sarabia 4
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL DEL PACIFICO SUR
Dr. René Camacho Castro
Director Regional
Dr. Juan Francisco Castellanos Bolaños
Director de Investigación
Dr. Miguel Ángel Cano García
Director de Planeación y Desarrollo
M.A. Jaime A. Hernández Pimentel
Director de Administración
Dr. Mariano Morales Guerra
Director de Coordinación y Vinculación del INIFAP en Guerrero
1
Investigadores del Campo Experimental Iguala. INIFAP.
2 Investigador Campo Experimental Centro de Chiapas. INIFAP.
3
Investigador de la Universidad Autónoma de Guerrero.
4
Ex-investigador INIFAP.
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRÍCOLAS Y
PECUARIAS
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL PACÍFICO SUR
Campo Experimental Iguala
Iguala de la Independencia, Guerrero, México

MANEJO INTEGRADO DE LA ANTRACNOSIS Y
CAÍDA DE FRUTOS DE MANGO ATAULFO EN LAS
COSTAS DE GUERRERO
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES,
AGRÍCOLAS Y PECUARIAS
Progreso Núm. 5, Barrio de Santa Catarina
Delegación Coyoacán
C. P. 04010 México, D. F.
Tel: (55) 51 40 16 27; 51 40 16 46
http://www.inifap.gob.mx
ISBN:
PRESENTACIÓN
El objetivo principal de esta publicación es difundir información
técnica para los agentes de cambio, sobre el manejo práctico de la
antracnosis y la caída de frutos de mango en las costas de Guerrero,
las cuales concentran las áreas con el mayor potencial productivo.
La información contenida en este documento se deriva del desarrollo
y ejecución, por varios años, de proyectos de investigación y
validación de tecnología, lo que constituye una base confiable de las
sugerencias que se hacen sobre el manejo de la antracnosis y la
caída de frutos; el cual está basado en estudios epidemiológicos de
los patógenos.
Folleto Técnico Núm. 22 Diciembre de 2014.
Campo Experimental Iguala
Kilómetro 2.5 carretera Iguala-Tuxpan
Iguala de la Independencia, Guerrero, México
Teléfonos: (733) 332 10 56, 332 50 80
Cita correcta de esta publicación es:
En este folleto se dan a conocer una serie de consideraciones
técnicas para contribuir al incremento de los niveles de rendimiento
de mango en las costas del estado, donde se tienen las mejores
condiciones para la producción de esta fruta, pero también para la
alta incidencia de enfermedades. En este sentido, esta publicación
constituye una base de información técnica y de aplicación práctica
para los prestadores de servicios profesionales.
Noriega-Cantú D. H., Pereyda-Hernández J., Garrido-Ramírez E. R.,
Jiménez-Guillén R. y Cruzaley-Sarabia. R. 2014. Manejo integrado de la
antracnosis y caída de frutos de mango Ataulfo en las costas de Guerrero.
SAGARPA - INIFAP – CIRPAS. Campo Experimental Iguala. Folleto
Técnico Núm. 22. Iguala de la Independencia, Guerrero, México. 45 p.
Primera Edición 2014
Impreso en México

CONTENIDO
Pág.
ÍNDICE DE FIGURAS
Nº Pág.
1. INTRODUCCIÓN………………………………………….. 8
2. IMPORTANCIA DEL MANGO EN GUERRERO………. 10
3. ÁREA ESTUDIADA……………………………………….. 13
4. FASES DE CRECIMIENTO DEL MANGO…………….. 13
5. ANTRACNOSIS………………………………………....... 15
6. FALSA CENICILLA………………………………………. 18
7. PUDRICIÓN DEL PEDÚNCULO………………………… 20
8. FLUCTUACIÓN DE ESPORAS…………………………. 21
9. PRÁCTICAS DE MANEJO INTEGRADO………………
1. Control cultural………………………………
2. Control químico………………………………
27
28
31
10. RECOMENDACIONES Y SUGERENCIAS……………. 37
Figura 1. La antracnosis, enfermedad más importante del
cultivo de mango en el área productora de
Guerrero………………………………………………….. 9
Figura 2. Fases de crecimiento vegetativo, floración y
fructificación del mango Ataulfo en forma cronológica
para las costas de Guerrero………………………… 14
Figura 3. Síntomas de manchas foliares (a), síntomas en
panícula (b), panícula sana (c) y manchas en frutos
causados por Colletotrichum spp. en mango (d)……. 16
Figura 4. Panícula sana, con amarre de frutos (a), panícula
con crecimiento micelial y frutos necrosados (b)……. 20
Figura 5. Captura de esporas durante octubre 2011 a
diciembre 2012, en la huerta de mango Ataulfo en
San Jerónimo Mpio. Benito Juárez. Gro. 22
Méx…………..
Figura 6. Captura de esporas totales y su relación con la
humedad relativa, temperatura máxima y mínima,
así como la temperatura de punto de rocío, durante
octubre 2011 a diciembre 2012, en la huerta de
mango Ataulfo. San Jerónimo Mpio. Benito Juárez.
Gro. México……………………………………………… 24
Figura 7. Dispersión de esporas de Colletotrichum spp.,
Cladosporium sp., y Lasiodiplodia sp. y temperatura
de punto de rocío (P. Rocío), durante octubre 2011 a
diciembre 2012, en la huerta de mango Ataulfo. San
Jerónimo Mpio. Benito Juárez. Gro. México…………. 25
11. BIBLIOGRAFÍA CITADA…………………………………. 39

1. INTRODUCCIÓN
ÍNDICE DE CUADROS
Nº Pág.
Cuadro 1. Superficie, producción, rendimiento medio y valor
de la producción de mango en México
(2013)………………………………………………..... 11
Cuadro 2. Superficie, producción y valor de la producción de
mango en Guerrero (2013)………………………... 12
Cuadro 3. Coeficiente de correlación, nivel de significancia y
número de observaciones con el fin de relacionar
el número de esporas y factores meteorológicos,
aplicando la prueba de Pearson. Ciclo 2011-12.
San Jerónimo Mpio. Benito Juárez. Gro.,
México…………………………………………………. 27
Cuadro 4. Paquete técnico del manejo integrado del mango
para las costas de Guerrero, México. 2013-2014…
38
La presencia de enfermedades del mango, causadas por hongos
fitopatógenos y su impacto en la producción y calidad del fruto ha
sido ampliamente estudiada por varios autores (Ploetz, 2003; Acosta
et al., 2003; Guillén-Sánchez et al., 2007; Huerta-Palacios et al.,
2009; Noriega-Cantú et al., 1999). La antracnosis es considerada la
enfermedad más importante en la etapa de pre y postcosecha del
cultivo de mango (Litz, 2000), ya que es el principal problema
fitosanitario asociado con la producción de mango en las costas de
Guerrero. Allende et al., (2001), mencionan que no existen datos
estadísticos precisos sobre las pérdidas que ocasiona esta
enfermedad, no obstante se estiman pérdidas postcosecha por
antracnosis en mango, entre 30 y 60 % del total de la producción.
Por otro lado, Espinosa et al., (2004), evaluaron un esquema de
control químico, con 4 ó 6 aspersiones de fungicidas de contacto o
sistémicos, desde el inicio de la floración, hasta los primeros estadios
de desarrollo de frutos, esquema denominado “INIFAP”, comparado
con la estrategia del productor, con dos aspersiones menos, pero
iniciadas en los primeros estados de desarrollo de frutos; en dos
localidades contrastantes, la primera en un clima cálido seco (BS1) y
la otra de clima cálido subhúmedo (AW1), observando que en los
huertos con la estrategia del productor, el daño de la enfermedad en
floración alcanzó niveles de 53 y 68 %, respectivamente, en
comparación a sólo un 27 y 44 % en la estrategia de INIFAP, lo cual
estuvo muy relacionado con una mayor permanencia de frutos a
cosecha por panícula y en mayor rendimiento global de los huertos

en ambas localidades. Adicionalmente, se reporta un daño por
necrosis en flores, pedicelos y frutos pequeños, así como, la
pudrición del pedúnculo provocando un menor amarre de frutos por
inflorescencia, lo cual redunda en un menor rendimiento global de los
huertos a lo largo de las costas de Guerrero.
condiciones meteorológicas que promueven la infección y desarrollo
de hongos, la susceptibilidad del cultivar, el conocimiento del área de
producción y el mercado final para utilizar los agroquímicos
autorizados. Con base a lo anterior, el objetivo del presente folleto es
dar a conocer los aspectos más importantes en el manejo integrado
de la antracnosis y otros patógenos asociados con la caída de frutos
de mango ataulfo en el estado de Guerrero. Se incluye información
sobre la importancia económica, sus agentes causales,
epidemiología, fungicidas y su grupo químico, modo de acción y un
programa de manejo integrado de las enfermedades.
2. IMPORTANCIA DEL MANGO EN GUERRERO
Figura 1. Antracnosis, enfermedad más importante del cultivo de
mango en el área productora de Guerrero.
La producción comercial de mango se ve reducida de un 30 % a un
60 % (Allende et al., 2001), cuando no se cuenta con un programa
de manejo de las enfermedades, basado en información sobre las
En México, durante 2013 se cultivaron 186,964 hectáreas de mango
y se produjeron más de 1.603 millones de toneladas de fruta, con un
valor de la producción superior a los 4.62 mil millones de pesos
mexicanos (SIAP, 2014) (Cuadro 1). El estado de Guerrero aporta el
22 % de la producción nacional, lo que lo ubica como primer
productor de mango, seguido de Nayarit, Sinaloa, Oaxaca, Chiapas y
Michoacán (SIAP, 2014). La destacada aportación en la producción
nacional, implica que el cultivo del mango tenga una gran
importancia socioeconómica para Guerrero, ya que de esta actividad
dependen directamente alrededor de 7,000 productores rurales e
indirectamente, proveedores, contratistas y jornaleros (RDS, 2003).

Los Distritos de Desarrollo Rural, 02-Atoyac y 05-Las Vigas, reportan
una superficie de 15,305.7 ha y 6,930.9 ha, respectivamente, con
rendimientos de 15.4 t/ha y 13.4 t/ha (Cuadro 2). Las regiones Costa
Grande (DDR-Atoyac) y Costa Chica (DDR-Las Vigas) del estado de
Guerrero son las de mayor producción y superficie sembrada con
En ambas regiones el cv. Ataulfo es altamente rentable y con mayor
potencial en un futuro inmediato debido a su mercado en expansión,
tanto de exportación como nacional; sin embargo, se tienen otras
variedades como Manila, Haden, Tommy Atkins y Kent, que también
tienen su propios nichos de mercado.
22,236.6 ha; el 33.1 % de la superficie está cubierta con la variedad
Manila, seguida por Ataulfo, Haden, Criollo y Tommy Atkins, entre
otros, con 30.3, 16.0, 14.5 y 4.9 %, respectivamente (SIAP, 2014).
Cuadro 1. Superficie, producción, rendimiento medio y valor de la
producción de mango en México (2013).
Estado
Superficie
(Ha)
Producción
(t)
Rendimiento
(t/Ha)
Valor de la
producción
(miles de $)
Sinaloa 30,096 235,772 8.2 374,313
Chiapas 27,691 143,304 5.5 504,892
Nayarit 25,222 266,875 11.0 556,134
Guerrero 24,952 352,806 14.2 1,552,320
Michoacán 22,927 135,486 6.6 462,246
Veracruz 19,473 108,768 5.6 281,544
Oaxaca 18,063 165,053 9.7 334,239
Jalisco 8,153 72,842 9.8 229,328
Colima 3,487 45,029 13.9 133,089
Campeche 2,544 38,310 15.4 57,007
Otros 4,357 39,565 136,464
186,964 1,603,810 9.9 4,621,577
Fuente: Servicio de información Agrícola y Pesquera. SAGARPA. México (2014).
Cuadro 2. Superficie, producción y valor de la producción de mango
en Guerrero, 2013.
Distrito
Superficie
Sembrada
(Ha)
Producción
(t)
Rendimiento
(t/Ha)
Valor
Producción
(Miles de $)
Altamirano 1,732 20,237 11.8 54,998
Atoyac 15,306 235,243 15.4 1,197,703
Chilpancingo 72 510 7.1 1,893
Iguala 823 4,389 5.4 20,849
Las Vigas 6,931 91,394 13.4 273,345
Tlapa 88 1,035 12.6 3,531
24,952 352,806 14.2 1,552,320
Fuente: Servicio de información Agrícola y Pesquera. SAGARPA. México (2014).
En las costas se tienen los mayores rendimientos por unidad de
superficie a nivel estatal, no obstante, su productividad es
relativamente baja, ya que estos datos de producción promedio de
las huertas, reflejan un deficiente manejo del cultivo. Ante esta
situación los productores demandan el establecimiento de un
programa para el manejo de la antracnosis y caída de frutos, que
permita incrementar su productividad, bajar la cantidad de insumos

que se utilizan y disminuir el daño ecológico que se produce al
utilizar agroquímicos.
3. ÁREA ESTUDIADA
La producción de mango en la Costa Grande y Costa Chica de
Guerrero, se presenta desde 04 a 150 metros sobre el nivel de mar;
el tipo de clima que predomina es el cálido subhúmedo con lluvias en
verano, a excepción de pequeñas áreas en el norte y oriente de las
costas donde se presenta un clima templado subhúmedo con lluvias
en verano. La temperatura en las costas oscila entre los 22 °C y
28°C, siendo el litoral, la zona que experimenta temperaturas más
cálidas. La zona norte de las costas, que posee un relieve con mayor
altitud, presenta una temperatura media anual de 22 a 26 °C, y una
precipitación media anual con mucha variación. En la zona
septentrional de la región la precipitación anual promedio es de
2,000 mm, mientras que en la porción central es de 1,500 mm. El
litoral de la costa y alrededores es el que registra menor ocurrencia
de lluvia con una precipitación de 1,200 mm (García, 1988).
por las variaciones en la disponibilidad de agua en el suelo. En
general, en cada ciclo anual del cultivo se presentan varias etapas
de crecimiento vegetativo y sólo uno de crecimiento reproductivo. La
época de floración está influenciada por la temperatura,
precipitación, variedad, manejo que reciba la planta y por la madurez
de las hojas y de las yemas previas a la diferenciación (Schaffer et
al., 1994; Galán, 1999;
Monselise y Goldschmisdt, 1982). La
fenología del mango se caracteriza por presentar fases bien
marcadas en climas subtropicales, en cambio en el trópico se
presenta sobreposición de las fases fenológicas (Galán, 1999).
Fructificación y
cosecha
Flujos vegetativos
Caída de
frutos
Desarrollo de
yemas flores
Fructificación y cosecha
Caída de frutos
4. FASES DE CRECIMIENTO DEL MANGO
El árbol de mango presenta un menor crecimiento en condiciones
subtropicales, comparado con el trópico. En las regiones
subtropicales el crecimiento se rige principalmente por los cambios
en la temperatura, mientras que en el trópico es regido básicamente
May Jun Jul Ago Sep Oct Nov Dic Ene Feb Mar Abr
Figura 2. Fases de crecimiento vegetativo, floración y fructificación
del mango Ataulfo en forma cronológica para las costas de
Guerrero.

En la Figura 2, se muestra el crecimiento del mango Ataulfo, donde
se observan cinco fases de crecimiento vegetativo durante el ciclo
anual, en verano se presentan de dos a tres flujos vegetativos; a
finales de otoño se presenta otro flujo y a finales del invierno el
siguiente flujo vegetativo. Bajo las condiciones de las costas del
Guerrero, se presentan dos épocas de floración, la más abundante e
importante se presenta en otoño-invierno, de noviembre a febrero y
la segunda época de floración que se presenta a finales de la
primavera e inicio de verano, la cual coincide con la época de lluvias
en la región de mayo a septiembre.
caída de las hojas durante un período seco. En las panículas, los
primeros síntomas son pequeñas manchas negras o marrón oscuro,
que se pueden extender y unir hasta causar la necrosis de las flores
antes del amarre de frutos, y cuya consecuencia final es la reducción
del rendimiento (Figura 3 b).
a
5. ANTRACNOSIS
La antracnosis es causada por dos especies de hongos
relacionados; Colletotrichum gloeosporioides (Penz.) Penz and Sacc.
(teleomorfo: Glomerella cingulata (Stoneman) Spauld. and H.
Schrenk), con mayores registros de afectación (Dodd et al., 1997;
Rojas-Martínez et al., 2008) y C. acutatum J.H. Simmonds
(teleomorfo: G. acutata) reportado sólo para algunas localidades
(Fitzell, 1979; Ploetz y Prakash, 1997; Tarnowski y Ploetz, 2008).
Los síntomas de antracnosis en el mango se presentan en hojas,
ramas, pecíolos, inflorescencias (panículas) y frutas (Figura 3 a, b, c,
d). En las hojas, las lesiones inician con una pequeña mancha
angular de color grisáceo a negruzco, que se puede ampliar a
extensas áreas muertas; las lesiones extendidas pueden provocar la
Figura 3. Síntomas de manchas foliares (a), síntomas en panícula
(b), panícula sana (c) y manchas en frutos causados por
Colletotrichum spp. en mango (d).
La antracnosis en las frutas maduras desarrolla prominentes
manchas negras hundidas (Figura 3 d), que pueden causar su caída
prematura de los árboles. Las manchas de los frutos pueden unirse y
d

eventualmente penetrar profundamente en la fruta, resultando en
una extensa área de fruto en descomposición. La mayoría de las
infecciones en la fruta verde permanecen latentes y en gran parte
invisibles hasta la maduración. Por lo tanto, frutos que aparentan
estar sanos durante la cosecha, pueden desarrollar síntomas de
antracnosis rápidamente durante el periodo de postcosecha.
El género Colletotrichum posee dos tipos de estrategias de infección,
la intracelular hemibiotrófica y la subcuticular-intramural necrotrófica;
y puede incluso establecer un periodo de latencia con la finalidad de
hacer frente a los mecanismos de defensa del hospedante,
generación de compuestos tóxicos preformados y fitoalexinas,
disminución de nutrientes del tejido para que su disponibilidad no
cubra las necesidades energéticas del patógeno. Generalmente las
especies de Colletotrichum invernan como micelio y/o apresorios en
distintas partes del hospedante. El hongo C. gloeosporioides por
ejemplo, se disemina a través de una película de agua originada por
el rocío y por las lluvias frecuentes de baja intensidad; cuando los
conidios afectan a las inflorescencias se impide la formación de los
frutos. La infección está relacionada con la temperatura y con la
duración de los períodos húmedos (Wharton y Diéguez-Uribeondo,
2004).
Fitzell y Peak (1984), determinaron que los conidios son la fuente de
inóculo más importante en Australia, los cuales son producidos sobre
ramas terminales, inflorescencias momificadas, brácteas florales y
hojas; bajo condiciones de laboratorio los conidios se producen en
un amplio rango de temperatura (10-30 °C) y con humedad relativa
de 95 a 97 %.
Huerta-Palacios et al., (2009), al estudiar la epidemiología de C.
gloeosporioides en mango Ataulfo, determinaron la presencia de la
enfermedad durante todo el año; observaron que una temperatura
mínima de punto de rocío (21 a 24 °C durante la noche) y una
humedad relativa > 80 % propició la condensación de agua en el
follaje, a tal grado que se presentan escurrimiento y salpique,
promoviendo la dispersión de conidios del hongo en follaje, flores y
frutos en desarrollo.
6. FALSA CENICILLA
Los productores de mango de las costas de Guerrero reportan un
daño extensivo en árboles de mango, causados por un abundante
crecimiento micelial grisáceo, que cubre las inflorescencias y frutos
pequeños de los diferentes genotipos (Figura 4 b), con un efecto
similar a la enfermedad comúnmente denominada Cenilla (Oidium
mangiferae Berthet) la cual produce un micelio algodonoso blanco y
que por esta semejanza se ha denominado Falsa Cenicilla.
Síntomas similares son reportados por Guillén-Sánchez et al.,
(2007), quienes determinaron como agente causal a Cladosporium
tenuissimum Cooke; al inocular panículas de mango cv. Haden se

produce necrosis en las flores, pedicelos y frutos pequeños,
observando que este patógeno está presente a lo largo de la costa
de los estados de Guerrero y Michoacán, México. En campo, el
síntoma característico en panículas infectadas es el crecimiento
micelial del hongo, el cual es de color gris. El micelio cubre
completamente las flores individuales, los pedicelos y los frutos
pequeños. Inicialmente, los síntomas se observan cuando las
inflorescencias alcanzan la fase de antesis y la máxima colonización
(crecimiento micelial y esporulación), ocurre al inicio del amarre de
los frutos. Los órganos infectados se tornan oscuros y caen del árbol
como síntomas del progreso de la enfermedad.
El género, Cladosporium produce colonias efusas y ocasionalmente
punctiformes, a menudo de color verde oliva y también café o marrón
oscuro, de textura aterciopelada, vellosa y con micelio inmerso o
superficial; los conidióforos pueden ser rectos o flexuosos,
generalmente ramificados; los conidios que se producen en cadena o
por separado, son subesféricos en forma elipsoidal y fusiformes, de
color café oliva oscuro, con una distinguible y protuberante cicatriz
en cada extremo o justo en la base (Bensch et al., 2012). C.
tenuissimum Cooke por ejemplo, tiene conidios de un tamaño medio
de 5.85 x 2.93 µm con variaciones de 3.2-23 µm x 1.98-5.47 µm
(Guillén-Sánchez et al., 2007).
a
b
Figura 4. Panícula sana, con amarre de frutos (a), panícula con
crecimiento micelial y frutos necrosados (b).

No. Esporas/Semana
7. PUDRICIÓN DEL PEDÚNCULO
El agente causal de la pudrición basal de la fruta de mango en Costa
Rica es Lasiodiplodia theobromae Pat., y se considera como la
segunda enfermedad más importante después de la antracnosis.
Este hongo logra colonizar endofitícamente el tejido de ramas antes
del establecimiento de las inflorescencias y semanas después de la
floración llegan a alcanzar el pedicelo del fruto; no obstante, estas
infecciones permanecen latentes hasta que la fruta madura e inician
los síntomas de la enfermedad (Johnson, 1994). Acosta-Ramos et
al., (2003), reportan a L. theobromae como el patógeno que causa la
pudrición del pedicelo, una de las principales enfermedades de los
frutos de mango en postcosecha en Guerrero, México. Así también
es considerado como el agente causal de la declinación o muerte
descendente de las ramas, que se acompañan de abundante
exudación de goma rojiza en tallos y ramas, con un bronceado de los
tejidos vasculares (Khanzada et al., 2004).
8. FLUCTUACIÓN DE ESPORAS
Las condiciones que favorecen la presencia de la antracnosis y su
subsecuente desarrollo, están positivamente correlacionadas con la
temperatura y la duración del periodo que permanece el agua sobre
la superficie de las hojas, después de alguna lluvia (Fitzell y Peak,
1984). En un estudio realizado en Chiapas por Huerta –Palacios et
al., (2009), indican que esta enfermedad, causada por C.
gloeosporioides, crece durante todo el año, afectando hojas jóvenes
y maduras, con un patrón de distribución al azar en la copa de los
árboles, el mayor incremento lo observaron de diciembre a abril;
también mencionan que valores de temperatura mínima de punto de
rocío entre 21 a 24 °C durante diciembre y abril, propiciaron la
condensación de agua sobre hojas, flores y frutos, favoreciendo la
infección y dispersión por arrastre de conidios (síntoma de lagrimeo)
y salpique.
1800
1600
1400
1200
1000
800
600
400
200
0
Floración
Amarre y
crecimiento del
fruto
Cosecha
Crecimiento vegetativo
Oct Nov Dic Ene Mar Abr May Jun Jul Ago Sep Oct Dic
2011 2012
Figura 5. Captura de esporas totales durante octubre 2011 a
diciembre 2012, en la huerta de mango Ataulfo en San
Jerónimo Mpio. Benito Juárez. Gro. Méx.

En el estado de Guerrero en un estudio sobre la dispersión de
esporas de distintos hongos (Colletotrichum spp., Cladosporium sp. y
Lasiodiplodia sp.) capturadas en una trampa volumétrica (Gadoury
and MacHardy, 1983), a nivel de dosel vegetal y su relación con la
antracnosis y el poco amarre de frutos, se constató la presencia de
esporas totales durante todo el ciclo, en la floración, cosecha y
crecimiento vegetativo (Figura 5). No obstante, se presenta una clara
variación mensual. En la etapa de floración y crecimiento de frutos, la
mayor captura se tuvo en la tercera semana de abril con 1,139
esporas, seguida por la tercera y segunda semana de enero y
noviembre con 648 y 531 esporas, respectivamente. Al final de la
etapa de crecimiento vegetativo y sobre todo en prefloración, es
cuando se observa la más alta población, con 1,844 esporas durante
septiembre y octubre. Las más bajas poblaciones ocurren en mayo,
junio, julio y agosto, cuando se presenta el crecimiento vegetativo.
Figura 6. Captura de esporas totales y su relación con la humedad
relativa, temperatura máxima y mínima, así como la
temperatura de punto de rocío, durante octubre 2011 a
diciembre 2012, en la huerta de mango Ataulfo. San
Jerónimo Mpio. Benito Juárez. Gro. México.
En la Figura 6, se muestra la concentración de esporas totales bajo
la copa de los árboles, las cuales tuvieron un patrón similar a los
incrementos semanales en la variable climática de humedades
relativas observados durante el periodo evaluado. El incremento de
la concentración de esporas de septiembre, octubre, noviembre,
enero y abril, coincidió con valores arriba del 75 % de humedad
relativa y con temperaturas del aire a punto de rocío, desde 18.2 a
24°C para los mismos meses, respectivamente. Estas variables
climatológicas tuvieron una relación con los niveles de esporas
totales, las cuales fueron favorecidas por las temperaturas del aire

donde se alcanza su saturación de agua, provocando formación de
rocío en las superficies de la planta y/o neblina.
En la Figura 7, se observa que las mayores poblaciones de esporas
de los tres hongos, se relacionan también con las temperatura más
bajas de punto de rocío de 23.7, 23.7, 20.1, 18.2 y 23.1 °C,
correspondientes a septiembre, octubre, enero, abril y junio, en
donde el vapor de agua existente comienza a condensarse para la
formación de rocío o niebla; condiciones excelentes para la
formación y liberación de esporas.
Las mayores poblaciones de esporas fueron del género
Cladosporium sp. con 1,533 esporas/semana en octubre, lo cual
coincidió en el mismo periodo con Colletotrichum spp. con 160
esporas/semana. Para Lasiodiplodia sp. su mayor concentración se
presentó en septiembre con 92 esporas/semana. En estas fechas, el
estado fenológico del mango corresponde al final del periodo de
crecimiento vegetativo y en prefloración.
Figura 7. Dispersión de esporas de Colletotrichum spp., Cladosporium
sp., y Lasiodiplodia sp. y temperatura de punto de rocío (P.
Rocío), durante octubre 2011 a diciembre 2012, en la huerta de
mango Ataulfo. San Jerónimo Mpio. Benito Juárez. Gro. Méx.
Mediante un análisis de correlación, que tomó en cuenta la
cuantificación de esporas de Colletotrichum spp., Cladosporium sp.,
Lasiodiplodia sp., esporas totales y los parámetros climatológicos
reportados sobre ese mismo periodo de evaluación, se determinó
que el coeficiente de correlación fue significativo en tres variables
climatológicas (Cuadro 3). Las variables de clima que mejor explican
la fluctuación de esporas fueron la humedad relativa, el punto de
rocío y la tasa de lluvia presente durante las semanas de muestreo
de las esporas. El parámetro climatológico con más alta correlación
fue la humedad relativa, para el hongo Colletotrichum spp. (α

seguido por Lasiodiplodia sp. (α

Control cultural. La poda es una excelente medida preventiva para
la antracnosis y otras enfermedades de flor y fruto. La poda tiene
como objetivos:
Facilitar las labores agrícolas (aspersiones y cosecha)
Inducir un balance entre el crecimiento vegetativo y
productivo, para producir frutas de mejor calidad
Promover la entrada de luz y aire, para mejorar la producción
de fruta y reducir las condiciones favorables para el desarrollo
de plagas y enfermedades, disminuyendo los niveles de
inóculo de patógenos.
Poda de formación.- Se realiza durante los primeros tres años de
desarrollo de la planta, para proporcionarle una estructura adecuada
de ramas, con una inserción equidistante entre ellas y evitar el
desgarramiento de las ramas por el peso de los frutos (Avilán et al.,
2003, Vázquez et al., 2010).
Poda de saneamiento.- La poda sanitaria consiste en eliminar las
ramas secas y enfermas, así como los restos de la cosecha anterior
(pedúnculos y frutos enfermos adheridos), que constituyen la más
importante fuente de infección de la antracnosis en la siguiente
cosecha. Dentro de este tipo de poda se incluye la eliminación de
ramas bajas que dificultan las labores de cultivo como fertilización,
control de malezas y encalado de troncos.
Poda de producción.- Tiene la finalidad de regularizar y mejorar la
eficiencia productiva, a través del mantenimiento del equilibrio
fisiológico de la planta y se lleva a cabo cuando el árbol ha
alcanzado su madurez o está en el período de plena producción
(Avilán et al., 2003). La eficiencia productiva se determina por la
relación de kilos de fruta por volumen de copa. Esta poda comprende
varias acciones que pueden ser ejecutadas en forma simultánea o
única, dependiendo de cada árbol en particular y del sistema de
plantación utilizado:
Eliminación de la yema apical y remoción de ramas cruzadas
en el centro de la copa para permitir una adecuada aireación
e iluminación solar. Localmente se conoce como “Ventaneo”,
la cual evita microclimas (condiciones de humedad y
temperaturas, específicas) que favorecen el desarrollo de
enfermedades.
La eliminación conjunta del fruto y el remanente del eje floral
y terminal del brote que ha fructificado durante la operación
de cosecha o inmediatamente después. Es una práctica
tradicional en la India y su remoción brinda a las yemas
laterales la posibilidad de florecer (Avilán, 2003). Esta
práctica elimina una buena cantidad de inóculo de patógenos.
Control de la altura entre 4 m y 5 m, una vez que sus
dimensiones dificultan la iluminación de las partes bajas de la
copa del árbol y de las adyacentes; así como de la aplicación

de pesticidas y cosecha de los frutos. Esta práctica se conoce
como "callejones" en los lados laterales y reducción de la
altura de la copa.
En los sistemas de plantación de alta densidad poblacional (>
200 árboles/ha), la poda de los brotes es una práctica que
debe contemplarse anualmente, antes del inicio de cada ciclo
de producción, cuya intensidad y frecuencia dependerá del
manejo previamente establecido para la población. Es
importante destacar que en este sistema de manejo, se
contempla el empleo de otras técnicas complementarias,
como uso de reguladores de crecimiento, en especial el uso
de inductores de floración como el nitrato de potasio a través
de aspersiones foliares.
Las podas deben realizarse inmediatamente después de la cosecha,
para permitir que los brotes jóvenes tengan cuando menos de 4 a 4.5
meses de edad para el desarrollo de floración en el siguiente ciclo de
producción.
Después de la poda se recomienda asperjar cobre pentahidratado y
azufre humectable para el sellado de las heridas y evitar
diseminación de enfermedades.
Control químico. En la actualidad no es posible una explotación del
mango con altos rendimientos y precios competitivos sin la utilización
de medidas de protección, entre las cuales, los plaguicidas químicos
siguen teniendo una participación considerable. Dodd et al., (1997),
indican que en situaciones extremas, donde el cultivo de mango se
desarrolla bajo condiciones completamente favorables para la
enfermedad, hasta 25 aspersiones de fungicidas de contacto y
sistémicos son necesarios para una buena producción.
De esta manera, el uso de los plaguicidas debe ser enmarcado
dentro de un manejo integrado del cultivo (Cuadro 4), donde un
componente es el control químico de plagas y enfermedades, lo que
obliga a conocer las propiedades de estos compuestos, su
residualidad en el medio ambiente y en los cultivos para el momento
de la cosecha del fruto, así como sus aspectos toxicológicos.
Así también se debe conocer el hospedero, el patógeno y clima; es
decir, las fases de crecimiento del mango, los estudios
epidemiológicos del patógeno e información climatológica, así como
la susceptibilidad del cultivar, lo cual indica que la aplicación de
productos de contacto con carácter preventivo tiene mucho sentido
para disminuir inóculo de los patógenos, para posteriormente aplicar
fungicidas sistémicos, con carácter curativo cuando la infección de
los yemas florales comienza a manifestarse y posteriormente utilizar
nuevamente fungicidas de contacto para el crecimiento de la fruta, lo
que conduciría a un mejor control de las enfermedades que afectan
la floración y amarre de frutos a nivel de campo, además de que se

podría reducir la necesidad de los tratamientos químicos de los frutos
en postcosecha.
Las regulaciones del uso de fungicidas en mango cambian
dependiendo del país productor, no obstante, sujetándose al destino
de la fruta se utilizan diferentes directrices, por ejemplo la Unión
Europea usa la guía de la FAO/WHO Codex Alimentarius, diferente
al de la Agencia de Protección del Medio Ambiente, EPA por sus
siglas en inglés.
Los fungicidas de contacto más comunes son: Captan, sulfato de
cobre pentahidratado y tribásico, oxicloruro de cobre, maneb,
clorotalonil, ferbam.
El cobre es un fungicida-bactericida clásico, de acción preventiva, de
contacto y es ampliamente utilizado en la producción de mango, no
obstante, algunos autores indican una menor eficacia respecto a
otros fungicidas (Arauz, 2000; Jiménez et al., 1989). Se debe evitar
aplicar durante la etapa de floración debido a que puede causar
fitotoxicidad (Dodd et al., 1997; Arauz, 2000). El cobre se puede
encontrar en presentaciones de sulfato de cobre pentahidratado,
sulfato de cobre tribásico, oxicloruro de cobre. Las mezclas con
azufre y cal aumentan su eficacia para ser utilizado en producciones
orgánicas y sustentables.
Los ditiocarbonatos como el mancozeb o maneb no tienen registro
en USA, a pesar de que se ha establecido tolerancia de residuos
para uno de esos productos (Ploetz, 2008). Estos fungicidas son
altamente eficaces para el control de la antracnosis y con una
toxicidad aguda muy baja; sin embargo, uno de sus metabolitos, el
etileno-tiourea (ETU) es posiblemente carcinogénico en humanos,
mientras que en animales la carcinogenicidad está comprobada; el
tiempo entre la última aplicación y la cosecha, es muy importante
para evitar altos niveles de residuos en los alimentos (Campos,
1992). Una alternativa es ferbam que no produce ETU y tiene
registro en USA.
El clorotalonil es un fungicida de amplio espectro, con acción de
contacto y preventiva, se considera como un inhibidor multisitio
afectando el crecimiento del micelio y la germinación de las esporas.
Se informa que es fitotóxico en frutos de tamaño mayor a una pelota
de golf, por lo que su uso debe limitarse a los inicios de la floración y
fructificación (Ploetz, 2008).
El captan es un fungicida de amplio espectro, con acción de
contacto y preventiva, también se considera como un inhibidor
multisitio afectando la respiración celular en los hongos, inhibiendo la
germinación de las esporas y crecimiento miceliar.
Los fungicidas sistémicos más usados son: Benomilo, carbendazim y
tiabendazol,

Benomilo y carbendazim son bencimidazoles sistémicos de
absorción radical y foliar, con traslocación principalmente acrópetalo
y actividad fungicida por contacto preventivo y curativo; es decir, con
actividad después de la infección para la antracnosis del mango. Su
ingrediente activo actúa interfiriendo la síntesis del ADN, la mitosis y
el mecanismo de transmisión de mensajes genéticos del ADN al
ARN. Es importante considerar a benomilo bajo un calendario de
aplicaciones y generalmente en una mezcla con fungicidas de
contacto para retrasar la acumulación de resistencia en la población
de patógenos (Arauz, 2000). La resistencia de C. gloreosporioides a
fungicidas con benzimidazol se ha publicado y registrado en varias
áreas productoras (Arauz, 2000).
Tiabendazol es un bencimidazol sistémico con actividad fungicida
preventivo y curativo por contacto, de amplio espectro de acción. Se
absorbe por raíces y hojas impidiendo la mitosis, por lo que se altera
el crecimiento del hongo. Este fungicida es tan efectivo como
benomil y tiene tolerancia de residuos postcosecha en Estados
Unidos (Ploetz, 2008).
La utilización de fungicidas sistémicos con mecanismos de acción
monositio, representa un peligro para la explotación del mango en el
estado, debido a que induce resistencia en los patógenos, por lo que
se debe considerar su uso bajo un programa de aplicaciones con
fungicidas multisitios.
Los fungicidas traslaminares comunes son: Procloraz, azoxystrobin,
trifloxystrobin.
Procloraz es un imidazol con actividad fungicida preventivo, curativo
y erradicante, no es propiamente un fungicida sistémico pero
muestra cierta acción traslaminar. Su modo de acción es impidiendo
la síntesis del ergosterol, componente esencial de la membrana
celular del patógeno, con un mecanismo monositio. Arauz, (2000), en
Costa Rica, indica que procloraz es el único fungicida que puede
utilizarse para tratamientos de postcosecha en el mango, sugiriendo
que no se use a nivel de campo para evitar el desarrollo de la
resistencia, la cual, no ha sido reportada para C. gloeosporioides a
procloraz, hasta la fecha. Sin embargo, este producto no tiene
registro para el mercado de USA (Ploetz, 2008).
Azoxystrobin y trifloxystrobin, pertenecen al grupo químico de las
estrobilurinas con actividad fungicida sistémico-traslaminar, con
efecto preventivo, curativo y con traslocación acrópetala, de amplio
espectro de acción. Es un fuerte inhibidor de la germinación de
esporas y actúa a nivel mitocondrial. Azoxystrobin y trifloxystrobin
son fungicidas que tienen un excelente control de la antracnosis y
stem-end rot (=pudrición del pedúnculo) (Ploetz, 1999). Este mismo
autor indica que para evitar problemas de resistencia con estos
fungicidas, un grupo técnico de la Federación Mundial de Protección
de los Cultivos (Global Crop Protection Federation), ha hecho varias

ecomendaciones con respecto a su uso. Cuando más de tres
aplicaciones de estos compuestos se realizan en un cultivo durante
una temporada, deberán:
1. No constituir más del 30 al 50 % del número total de
aplicaciones (los números deben estar comprendidos hacia el
límite inferior cuando se realizan más de ocho aplicaciones);
2. Ser usados en bloques de uno a tres aplicaciones
consecutivas; y
3. Estar separados por un mínimo de dos aplicaciones de un
fungicida de diferente grupo, cuando se utilizan bloques de
dos a tres estrobilurinas.
Cuadro 4. Paquete técnico del manejo integrado del mango para la
Costa de Guerrero, México. 2014.
cti i a c a ci icacion o i
brir calle ones, ramas secas,
oda de saneamiento y pre
bril-Mayo enfermas o cruzadas y la rama
paraci n de aretas
central
y fertilizaci n foliar
Me oradores del suelo
bril-Mayo
bril-Mayo
osfonitrato (33-0 -00)
osfato monoamonico ( M )
- -
ltrasol (13-0 - 0)
ulfato rib sico de cobre
zufre umectable
oliquel multi ( e, n, , Mn, u,
Mo)
Mayo aclobutrazol ( )
ctubre
Materia org nica
olomita (cada tercer a o)
l
litros de agua
g de bo ino rbol
iofertilizante (
10. RECOMENDACIONES Y SUGERENCIAS
Para el manejo de la antracnosis, la falsa cenicilla y la pudrición
basal del fruto, es necesario proponer un programa de aplicaciones
de fungicidas sistémicos y de contacto, tomando en cuenta la
fenología del cultivo, el manejo del productor y los estudios
epidemiológicos de los patógenos. Este programa debe contemplar
un número reducido de aplicaciones, de bajo costo y amigable con el
medio ambiente, actividades que deben estar insertadas dentro de
a
de enfermedades
er
y aplicaciones cada 15 d as
iego
ctubreo
iembre
iciembre
nero
nero
ebrero
iciembre- bril
cido b rico
osfonitrato de 3 a
cada 8 d as
ulfato trib sico de cobre y
zufre umectable
lorotalonil
enomil Mancozeb
lorotalonil
Mancozeb
osfonitrato (33-0 -00)
M (1 - 1-00)
ltrasol (13-0 - 0)
xicluro de cobre (fruto)
aplicaciones
or textura arenosa m s riegos
menos tiempo
ales pot sicas de cidos grasos
por semana
un manejo integrado del cultivo.
ontrol de plagas
iciembreebrero
xtracto de canela
zufre umectable
Malat i n 1000 al 8
Fertilización*. La dosis recomendada se fracciona en dos (cada 15 días) por lo arenoso de los suelos.
**Se elige de acuerdo a la plaga.
Las aplicaciones deben cubrir por completo el árbol y preferentemente, en las mañanas o tardes, cuando no
haya periodos de insolación alta y/o vientos.

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AGRADECIMIENTOS
Se agradece a la Fundación Produce de Guerrero, A.C., por el
financiamiento para la realización del proyecto “Validación
tecnológica del manejo de la antracnosis en mango en las regiones
potenciales del estado de Guerrero” que permitieron generar la
información para la elaboración de ésta publicación
Grupo Colegiado Científico Técnico del CEIGUA
Presidente
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Secretario
Dr. Mariano Morales Guerra
Vocales
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Dr. Noel O. Gómez Montiel
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MC. Leonardo Hernández Aragón
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