CUBA

REPORTARSE
“DALE UN CHANCE”
MODELO DE EMPODERAMIENTO E INCLUSIÓN
JUL-AGO 2016
38
Gustavo Ariza, vicepresidente Ejecutivo de Asociación Popular de Ahorros y Préstamos, se dirige a los presentes.
El fortalecimiento de las capacidades
humanas es la vía más certera de
reducir los indicadores de pobreza y
desigualdad social. A partir de programas
como “Dale un chance”, jóvenes bachilleres
de excelencia académica egresados de escuelas
públicas tienen la oportunidad de romper
las barreras de la exclusión mejorando considerablemente
su calidad de vida y visión de
superación.
Considerado como uno de los programas
de inversión social más relevantes de la
Asociación Popular de Ahorros y Préstamos
(APAP), “Dale un chance” promueve la movilidad
social a través de la educación superior.
Su capacidad transformadora lo convierte en
modelo de empoderamiento e inclusión.
Como parte del principio de responsabilidad
social contemplado en su gobierno corporativo,
y teniendo a la educación como eje
estratégico de su inversión social, APAP inició
en 2011 “Dale un chance”, un programa
innovador de pasantías laborales que facilita el
acceso de bachilleres de escuelas públicas a la
educación superior al retribuir con becas técnicas
y de grado cubiertas al 100% a los pasantes
de mayor desempeño.
A estos fines, APAP creó un Fondo de Becas
que supera los 30 millones de pesos y asegura
las carreras de los pasantes en las universidades
INTEC, PUCMM y UNAPEC.
EL PRIMER CHANCE
En un proceso riguroso de selección de los
pasantes, el equipo de Gestión de Inversión
Social APAP identifica los centros educativos
aliados. Los candidatos que califiquen deben
cumplir con los requisitos definidos por esta
entidad: estudiantes meritorios, cuyo promedio
del bachillerato sea igual o mayor a 90
puntos; interesados en estudiar carreras afines
al sector financiero; autorización de sus padres
o tutores, y aprobación de las evaluaciones de
nuevo ingreso que les realiza APAP.
Los bachilleres seleccionados se integran
durante 12 semanas a las operaciones diarias
de la entidad en calidad de pasantes, y cuentan
con el apoyo de guías y mentores, funciones
asumidas por ejecutivos voluntarios de la
institución, quienes transfieren a estos jóvenes
meritorios sus habilidades y experiencias
a través de un espacio en el cual canalizan
su intención de colaborar en programas de
desarrollo social, desde su lugar de trabajo y
en horas laborales.
Sobre estos voluntarios, denominados
“Talentos solidarios APAP”, reposa el 50%
de evaluación de los pasantes que rotan por
sus departamentos, en función de los niveles
de responsabilidad, aprendizaje, interés, cumplimiento
de las normas y reglas del programa
de pasantías, trabajo en equipo y actitud
positiva hacia el trabajo, entre otros. Para esto,
disponen de un documento formal que deben
completar y entregar al área de Inversión
Social. Más de 50 voluntarios se unen a “Dale
un chance” cada año. Esto contribuye al crecimiento
y fortalecimiento del voluntariado
corporativo.
Para completar el 50% restante de la evaluación,
un 30% es asignado a la admisión
universitaria, un 10% a la entrega del proyecto
sobre las mejoras de APAP que deben presentar
los pasantes al vicepresidente Ejecutivo de
la entidad, y un 10% le corresponde al equipo
de gestión del programa.
A la fecha, 68 jóvenes bachilleres han sido
incorporados a las pasantías de APAP, de los
cuales 48 cursan sus carreras universitarias
en áreas afines a la industria financiera. La
pasantía incluye compensación salarial, dieta y
transporte y un subsidio cuatrimestral durante
la vida universitaria.
El proceso de pasantía contempla actividad
de inauguración y clausura, rotación por 14
distintos departamentos, talleres de educación
complementaria (educación financiera, manejo
de conflicto, cómputo, oratoria, robótica,
presentaciones efectivas, autoestima, liderazgo
en valores, entre otros); expedición educativa
al Pico Duarte “Líderes del cambio: mi meta
es la cima”; visita a campus de las universi-