PeriodicoLosEquinos Edicion 07
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
27<br />
INVITADO<br />
PeriódicoLos<br />
EQUINOS<br />
PORQUE NO DEBEN MORIR LAS CABALGATAS<br />
Jairo Ortiz Tovar<br />
Presidente de la Asociación de Caballistas Laboyanos - ASOCALA<br />
Para entender muchos pasajes de la historia y la evolución del hombre debemos imaginarlo a<br />
lomos de un caballo. Las grandes conquistas, episodios bélicos que dieron origen a las naciones, las<br />
obras y el trasiego de la humanidad desde la antigüedad hasta nuestros días, están ligados a la<br />
andadura de un caballo.<br />
En Colombia y de acuerdo con los historiadores, los primeros caballos llegaron hacia el año 1.525<br />
traídos desde España por los conquistadores. Desde entonces, la evolución del país ha ido paralela<br />
a la de la raza equina y el tesón de los primeros tratantes de caballos, arrieros y negociantes, fueron<br />
dando forma a los ejemplares que hoy conocemos y que de acuerdo con su andar han sido<br />
clasificados como “paso fino colombiano”, “trote y galope colombiano”, “trocha colombiana” y<br />
“trocha y galope colombiano”.<br />
En mi caso personal, soy hijo y nieto de criadores de caballos y casi sin darme cuenta hoy soy padre<br />
y abuelo de caballistas. Si la razón fuera solo genética y puro ADN, la explicación sería más fácil.<br />
Pero resulta que soy de Pitalito – Huila, pueblo caballista por antonomasia, no en vano y en el<br />
ámbito nacional se nos reconoce por ser de la “cuna de montadores y caballos de paso”. José Hilario<br />
López, presidente de Colombia en dos ocasiones (1.849 – 1.853 y en 1.863), fue dueño de la<br />
“Hacienda de Laboyos” que comprendía vastas extensiones de lo que hoy es Pitalito y de quien nos<br />
cuentan los cronistas que dispuso para su hacienda de una extenso pie de cría, originando nuestro<br />
gusto por los equinos.<br />
mantiene limpia la morada, un montador que ejercita y entrena al ejemplar, agua de buena<br />
calidad y muchos cuidados que seguramente ninguna otra especie en Colombia podría<br />
disponer. Cuando hay una feria los preparativos además de costar dinero, son esmerados y ni<br />
que decir cuando alguno de nuestros caballos participan en una cabalgata. Para empezar, la<br />
movilización de un equino debe contar con una “Guía de Movilidad” expedida por el servicio<br />
veterinario del I.C.A. que certifica el buen estado de salud del animal. Por así decirlo, el<br />
calendario de cabalgatas es más reducido que el calendario del fútbol rentado colombiano y el<br />
“tour” de reinados de belleza. Este año y previo a las Fiestas del San Pedro en el Huila, se detectó<br />
un brote de fiebre porcina y que gracias al manejo profesional por parte de las autoridades<br />
departamentales, la dirección regional del I.C.A., las dos asociaciones del Huila y las autoridades<br />
de Policía, controlaron adecuadamente la contingencia y los opitas y visitantes disfrutamos<br />
tanto participando o como espectadores en unas muy organizadas y vistosas cabalgatas. Para<br />
gustos se hicieron los colores y una vez más las cabalgatas fueron el corazón de la fiesta opita.<br />
Pero el éxito, el disfrute y la vistosidad del evento también se debe a la “nuez” de mis apreciaciones:<br />
el consenso y la reglamentación. Recorridos más cortos, horarios con temperaturas más<br />
benévolas, más puestos intermedios de control durante el recorrido, servicio veterinario permanente,<br />
control de ingreso, puntos de hidratación con agua pura, control en el expendio de<br />
bebidas alcohólicas e intervención de la Policía para retirar de la cabalgata y apear de su caballo<br />
a quienes abusen del alcohol y provoquen desmanes.<br />
Al final insistir en lo mismo: reglamentar todos los aspectos para conseguir el mejor trato de los<br />
equinos, el mínimo entorpecimiento de las demás actividades y ofrecer a los espectadores una<br />
manifestación alegre, en paz y organizada. Y al hablar de los posibles colapsos de movilidad por<br />
las cabalgatas, cabría suponer que igual o peor puede pasar por ejemplo en el desfile de silleteros,<br />
el desfile de automóviles antiguos o el desfile de “chivas” durante la misma Feria de las<br />
Flores, sin embargo, precisamente la feria tiene actos y eventos para todos los gustos que para<br />
quien quiera disfrutar de la misma lo único que tiene que poner son ganas y tiempo para no<br />
perderse nada y ya no digamos todas las competencias de ciclismo, caminatas, maratones,<br />
ciclovías, conciertos y cuanta expresión deportiva y cultural se nos ocurra para disfrute y goce<br />
de los ciudadanos, siendo las cabalgatas las menos frecuentes.<br />
Quiero compartir con los lectores unas cuantas reflexiones al hilo de las recientes suspensiones de<br />
las cabalgatas en ferias tan importantes como la de Cali, la feria de las Flores de Medellín, Armenia<br />
y la de la feria de Bucaramanga. De entrada y antes de cualquier consideración, absolutamente<br />
todas las manifestaciones culturales, folclóricas, deportivas y artísticas, tienen sus adeptos, sus<br />
defensores y sus detractores. Tenemos una tremenda capacidad para pasar del éxtasis al dolor,<br />
hace tan solo tres meses mientras nuestra selección ganaba en Brasil, en Bogotá morían de<br />
“celebración” nueve personas. Pero el abolir por principio y prohibir por sistema, solo consigue la<br />
extinción de la expresión popular y va en contravía a la supervivencia de las tradiciones. Consensuar,<br />
pactar y reglamentar parece ser la salida legítima y civilizada para facilitar la convivencia y la<br />
manifestación tanto de las mayorías como de las minorías y mejor no citar ejemplos en época de<br />
negociaciones tan importantes para el país.<br />
Su Finura hace la diferencia<br />
Aún está fresco el pronunciamiento de la Corte Constitucional que avala la realización de espectáculos<br />
taurinos en Bogotá. Sobran las connotaciones políticas ahora, nos gusten o no, la Corte<br />
propone que se “…adopten mecanismos contractuales y otros administrativos que garanticen la<br />
continuidad de la expresión artística de la tauromaquia y su difusión...” (El Tiempo, septiembre 2 de<br />
2014). Es la protección de varios derechos a una minoría, otra cosa será el cumplimiento y la<br />
adopción de los mecanismos de que habla la Corte.<br />
Criar caballos que se escribe fácil pero que en la práctica no lo es tanto, es actividad que en nuestra<br />
convulsa Colombia estuvo estigmatizada y demonizada. Desde la Federación de Asociaciones<br />
Equinas de Colombia – FEDEQUINAS -, que reúne 24 asociaciones establecidas en todo el territorio<br />
nacional y que fue fundada y reglamentada en 1.984 como respuesta institucional para que una<br />
entidad propendiera por el fomento equino, expidiera e implementara el registro genealógico de<br />
los ejemplares y llevara la organización de todos los eventos a nivel nacional. Años de trabajo, de<br />
evolución, de compromiso, de organización, de divulgación cultural, de mejoras constantes en las<br />
condiciones y manejo de los equinos, nos permiten aseverar que los caballos tienen dolientes y<br />
que el gremio está vivo. Resulta relativamente fácil desde algunas agrupaciones animalistas, no<br />
suficientemente informadas, despotricar sobre “las cabalgatas”, los caballos y los dirigentes de<br />
FEDEQUINAS. Comentarios carentes de veracidad, rigor, aseveraciones inicuas y sesgadas, que<br />
repito, por mala información suponiéndoles buena fe, hacen un caldo propicio para que muchas<br />
personas se vengan lanza en ristre contra una expresión cultural autóctona como son las cabalgatas.<br />
Vaya por delante que desde las propias asociaciones equinas hemos emprendido campañas y<br />
no de ahora, para buscar el mejor trato de los caballos destinados a trabajos tanto en las ciudades<br />
como en el campo.<br />
Por supuesto que nosotros mismos nos hemos enfrentado al abuso que se comete con los<br />
tristemente célebres “caballos zorreros” y con aquellos que son cargados hasta esconder su figura<br />
bajo enormes bultos de cualquier producto agrícola o material de construcción. No deja de ser una<br />
ironía que a lomos de muchos caballos y mulas nuestros próceres nos concedieron la libertad y<br />
solo 200 años después esta gracia les llegue a muchos caballos.<br />
En Colombia cabemos todos, los amigos de los animales y los protectores de los mismos<br />
siempre y cuando existan reglas y comportamientos adecuados. Las expresiones culturales que<br />
nos identifican deben pervivir como muestra de la esencia de ser colombianos, el Carnaval de<br />
Barranquilla, la Feria de Manizales, las cabalgatas, las carreras ciclísticas, los clásicos del fútbol…<br />
todo en una Colombia en paz, respetuosa de las minorías y la diversidad.<br />
Como Presidente de la Asociación de Caballistas Laboyanos y de común acuerdo con la Junta<br />
Directiva de ASOCALA, mantenemos por principio la destinación del dinero recaudado en la<br />
cabalgata más importante de Pitalito que abre nuestra Feria Grado A, para que sea donado al<br />
Hogar del Adulto Mayor “San José” como una más de las labores sociales que nos comprometen<br />
con nuestros conciudadanos. Por último, nuestros agradecimientos a las autoridades del<br />
departamento por el apoyo y la vinculación con ASOCALA y AHCABALLO, por velar por nuestro<br />
patrimonio cultural y recordarles que estaremos prestos para apoyar a las demás asociaciones<br />
en beneficio de la actividad y el fomento equino.<br />
www.equiora.co<br />
Un c aballo c on dientes s anos vive mas<br />
y en definitiva aumenta s u vida útil.<br />
- Balance posterior (limado de<br />
puntas.<br />
- Balance anterior.<br />
- Reducción de caninos.<br />
- Extracción de diente de lobo.<br />
- Extracción de dientes deciduos<br />
(casquetes de incisivos,<br />
premolares).<br />
- Extracción de diente fracturado.<br />
- Extracción de diente definitivos.<br />
- Corrección de traumas tejidos<br />
duros (caries, tto de conducto,<br />
coronas.)<br />
- Corrección de trauma tejido<br />
blando.<br />
- Tratamiendo de ortopedia<br />
maxilar y mandibular (picudos –<br />
belfos).<br />
Hemos escuchado tantas falacias que dan hasta para reír. Por ejemplo que los caballos que van a<br />
una cabalgata viajan con todos sus aperos puestos, que la herradura trasmite calor al casco y<br />
provoca enfermedades, que se evita la hidratación de los caballos durante el viaje a una<br />
cabalgata… nada de eso es cierto y muchos otros argumentos tan peregrinos que no merece la<br />
pena ni escribirlos. Pero más increíble resulta el argumento del exhibicionismo de las amazonas y<br />
los jinetes, que raya en la mojigatería porque en el calendario televisivo con mayor frecuencia que<br />
cabalgatas tenemos certámenes de belleza en donde las participantes nos enseñan mucho más y<br />
sin embargo nos quedamos con la belleza y no con el tamaño del bikini. Aquí la moral se mide con<br />
otro rasero.<br />
De entrada les diré en este punto que nadie quiere mejor a sus caballos que un caballista. Tener<br />
unos cuantos caballos o un criadero obliga a destinar un presupuesto considerable porque<br />
nuestros animales tienen su pesebrera o su pedazo de potrero. Pasto tierno, concentrado de<br />
calidad, atención veterinaria y medicamentos si fuere el caso, una cama mullida, un palafrenero que<br />
equipo electrico<br />
Mejor Potranca en Proceso<br />
Sogamoso 2013<br />
brete portatil<br />
comodidad y seguridad<br />
Diego Fdo. Posso Castaño<br />
Cel 310 503 3808<br />
www.equioral.co<br />
equioralvalle@hotmail.com