Revista Digital (JB)

Contexto Histórico: origen,
desarrollo del patrimonio cultural
Un proceso para volverse
realidad debe pasar por varias
etapas, iniciando en la
imaginación, pasando a la
motivación y después se
transforma en realidad; esta
obra inició en marzo de 1979,
sin embargo la idea nació años
atrás, inspirada en un joven
seminarista en ese entonces,
pues diariamente contemplaba
una imagen de Cristo Rey y
pedía a Dios poder llegar a
cumplir su anhelo de ser
sacerdote.
El Monumento a Cristo Rey está
ubicado en Tenancingo, Estado
de México y se encuentra en la
cúspide del Cerro de Coyutla o
de las Tres Marías; la escultura
cuenta con un total de 30 metros
de altura, los cuales están
repartidos en 9 metros de base y
21 metros de la escultura en sí,
ésta obra arquitectónica está
catalogada como la segunda
más alta del mundo dedicada a
Cristo Rey, sólo detrás de la del
Cerro del Corcovado en Río de
Janeiro, Brasil.
Su construcción inició con la
apertura del camino que
permitiría el acceso hasta la
cima de la montaña para así
poder hacer llegar todo el
material necesario, en 1979.
La participación de gran parte de
la población Tenancinguense en
faenas que se realizaban cada
domingo, permitió avanzar de
manera rápida en la edificación,
sin importar obstáculos.
Apertura del camino hacia el Monumento a Cristo
Rey
En el momento de dar inicio
los trabajos para la
construcción de dicho
monumento, no se contaba
con ningún recurso
económico, por lo que
únicamente el entusiasmo de
la gente motivada por el
Pbro. Jesús Hernández
Espinoza (Q.E.P.D) permitió
desarrollar paulatinamente
éste proyecto, apoyado
ampliamente por autoridades
civiles.
Una vez concluido el camino,
se colocó la primera piedra
de la imagen monumental el
3 de mayo de 1985, cuya
celebración estuvo oficiada
por el Monseñor Carlos
González Anaya (Q.E.P.D),
el proyecto del diseño de la
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