Harry_Potter_y_la_Piedra_Filosofal_01
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Directora adjunta<br />
Las preguntas estal<strong>la</strong>ban en <strong>la</strong> cabeza de <strong>Harry</strong> como fuegos artificiales, y<br />
no sabía cuál era <strong>la</strong> primera. Después de unos minutos, tartamudeó:<br />
—¿Qué quiere decir eso de que esperan mi lechuza?<br />
—Gorgonas galopantes, ahora me acuerdo —dijo Hagrid, golpeándose <strong>la</strong><br />
frente con tanta fuerza como para derribar un caballo. De otro bolsillo sacó una<br />
lechuza (una lechuza de verdad, viva y con <strong>la</strong>s plumas algo erizadas), una gran<br />
pluma y un rollo de pergamino. Con <strong>la</strong> lengua entre los dientes, escribió una<br />
nota que <strong>Harry</strong> pudo leer al revés.<br />
Querido señor Dumbledore:<br />
Entregué a <strong>Harry</strong> su carta. Lo llevo mañana a comprar sus cosas.<br />
El tiempo es horrible. Espero que usted esté bien.<br />
Hagrid<br />
Hagrid enrolló <strong>la</strong> nota y se <strong>la</strong> dio a <strong>la</strong> lechuza, que <strong>la</strong> cogió con el pico.<br />
Después fue hasta <strong>la</strong> puerta y <strong>la</strong>nzó a <strong>la</strong> lechuza en <strong>la</strong> tormenta. Entonces<br />
volvió y se sentó, como si aquello fuera tan normal como hab<strong>la</strong>r por teléfono.<br />
<strong>Harry</strong> se dio cuenta de que tenía <strong>la</strong> boca abierta y <strong>la</strong> cerró rápidamente.<br />
—¿Por dónde iba? —dijo Hagrid. Pero en aquel momento tío Vernon,<br />
todavía con el rostro color ceniza, pero muy enfadado, se acercó a <strong>la</strong><br />
chimenea.<br />
—Él no irá —dijo.<br />
Hagrid gruñó.<br />
—Me gustaría ver a un gran muggle como usted deteniéndolo a él —dijo.<br />
—¿Un qué? —preguntó interesado <strong>Harry</strong><br />
—Un muggle —respondió Hagrid—. Es como l<strong>la</strong>mamos a <strong>la</strong> gente «nomágica»<br />
como ellos. Y tuviste <strong>la</strong> ma<strong>la</strong> suerte de crecer en una familia de los<br />
más grandes muggles que haya visto.<br />
—Cuando lo adoptamos, juramos que íbamos a detener toda esa<br />
porquería —dijo tío Vernon—. ¡Juramos que <strong>la</strong> íbamos a sacar de él! ¡Un<br />
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