15.04.2019 Views

Juegen siempre adelante

Un libro de Cesar Villalta CESGC en el cual recoje enseñanzas y experiencias vividas en la jornada mundial de la juventud en Brasil.

Un libro de Cesar Villalta CESGC en el cual recoje enseñanzas y experiencias vividas en la jornada mundial de la juventud en Brasil.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Jueguen<br />

JUEGEN<br />

Adelante<br />

SIEMPRE Siempre<br />

ADELANTE<br />

“…hoy estamos aquí, juntos, unidos para compartir la fe<br />

y la alegría del encuentro con Cristo, de ser sus discípulos”.<br />

César Alberto Villalta Cornejo<br />

Ces’GC El Mensaj3ro<br />

JMJ Río 2013<br />

Derechos Reservados


Jueguen Siempre Adelante<br />

2


Jueguen Siempre Adelante<br />

Jueguen Siempre Adelante<br />

César Alberto Villalta Cornejo<br />

Ces’GC El Mensaj3ro<br />

Ministerio Católico URBANG3LIZANDO<br />

“Llevando a la calle el Evangelio”<br />

3


Jueguen Siempre Adelante<br />

“Que el encuentro con Cristo nos fascine y<br />

ese encuentro nos lleve a un verdadero compromiso con la<br />

Evangelización”.<br />

Monseñor José Elías Rauda.<br />

Obispo Diócesis de San Vicente,<br />

El Salvador.<br />

4


Jueguen Siempre Adelante<br />

ÍNDICE<br />

1. INTRODUCCIÓN<br />

2. Experiencia personal y testimonial de la Semana Misionária, preparación<br />

para vivir la JMJ Río 2013.<br />

2.1 Un Antes y un Después en mi vida: JMJ Río 2013.<br />

2.2 Experiencia personal con la comunidad en la<br />

“paróquia Imaculada Conceição Raiz da Serra”.<br />

2.3 Semana misionera.<br />

2.3.1 ¿Quién es mi prójimo?<br />

2.3.2 Cristo redentor nos abraza.<br />

2.3.3 Llamado de atención.<br />

2.3.4 Jesús nos invita a conocerle.<br />

2.3.5 Su carga es ligera.<br />

2.3.6 Nuestra confianza puesta en Dios.<br />

2.3.7 Dios se complace en sus hijos.<br />

3. “Millones de jóvenes de todo el mundo: Un mismo Espíritu” JMJ<br />

3.1 ENCUENTRO DEL SANTO PADRE FRANCISCO CON LOS<br />

PERIODISTAS DURANTE EL VUELO HACIA BRASIL<br />

3.1.1 Conformar un equipo ideal.<br />

3.2 CEREMONIA DE BIENVENIDA DISCURSO DEL SANTO PADRE<br />

FRANCISCO<br />

3.2.1 Jesús llama a nuestra puerta.<br />

3.2.2 VENERACIÓN DE LA IMAGEN DE LA VIRGEN EN LA SALA DE LOS<br />

12 APÓSTOLES DEL SANTUARIO DE NUESTRA SEÑORA DE LA<br />

CONCEPCIÓN DE APARECIDA<br />

3.3.1 Hágase en mí como tú lo has dicho.<br />

3.4 SANTA MISA EN LA BASÍLICA DEL SANTUARIO DE NUESTRA<br />

SEÑORA DE APARECIDA – HOMILÍA DEL SANTO PADRE<br />

FRANCISCO<br />

3.4.1 La virgen María nos enseña a ser verdaderos discípulos.<br />

5


Jueguen Siempre Adelante<br />

3.5 ORACIÓN QUE EL PAPA FRANCISCO PRONUNCIÓ AL FINAL DE<br />

LA MISA EN SANTUARIO DE APARECIDA<br />

3.6 VISITA AL HOSPITAL SAN FRANCISCO DE ASÍS DE LA<br />

PROVIDENCIA - V.O.T DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.6.1 Seguir jugando con entrega y determinación.<br />

3.7 VISITA A LA COMUNIDAD DE VARGINHA (MANGUINHOS)<br />

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.7.1 Luchar cada día por ser mejores y elegir hacer el bien.<br />

3.8 DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO EN ENCUENTRO CON<br />

JÓVENES ARGENTINOS EN CATEDRAL DE SAN SEBASTÍAN<br />

3.8.1 “Vamos, juntos hagamos lio”.<br />

3.9 FIESTA DE ACOGIDA DE LOS JÓVENES<br />

SALUDO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.9.1 “Unidos para compartir la fe y la alegría”.<br />

3.10 FIESTA DE ACOGIDA DE LOS JÓVENES<br />

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.10.1 “Juguemos en el equipo de Jesús”.<br />

3.11 DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO EN VÍA CRUCIS CON LOS<br />

JÓVENES EN EL PASEO MARÍTIMO DE COPACABANA,<br />

RÍO DE JANEIRO<br />

3.11.1 La Cruz, fuerza extra que nos impulsa.<br />

3.12 SANTA MISA CON LOS OBISPOS DE LA XXVIII JMJ Y<br />

CON LOS SACERDOTES, RELIGIOSOS Y SEMINARISTAS<br />

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.12.1 Pastores de la Iglesia, entrenadores en el campo.<br />

3.13 ENCUENTRO CON EL EPISCOPADO BRASILEÑO DISCURSO DEL<br />

SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.13.1 El entrenador merece un descanso.<br />

3.14 DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO EN VIGILIA DE ORACIÓN CON<br />

LOS JÓVENES<br />

6


Jueguen Siempre Adelante<br />

3.14.1 ¡Jueguen para <strong>adelante</strong>! ¡Juéguenla <strong>adelante</strong> <strong>siempre</strong>!<br />

3.15 SANTA MISA PARA LA XXVIII JORNADA MUNDIAL<br />

DE LA JUVENTUD HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

3.15.1 «Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos».<br />

3.16 REZO DEL ANGELUS DOMINI - ALOCUCIÓN DEL SANTO PADRE<br />

3.16.1 Trasmitamos nuestra alegría.<br />

3.17 ENCUENTRO CON EL COMITÉ DE COORDINACIÓN DEL CELAM<br />

EN EL CENTRO DE ESTUDIOS DE SUMARÉ – DISCURSO<br />

DEL SANTO PADRE<br />

3.17.1 Algunas tentaciones.<br />

3.18 ENCUENTRO CON LOS VOLUNTARIOS DE LA JMJ EN “RÍO CENTRO”<br />

3.18.1 Preparar el camino a Jesús.<br />

4. CONCLUSIONES<br />

4.1 Tácticas mentales de los jugadores.<br />

4.1.1 Actitud.<br />

4.1.2 Comunicación.<br />

4.1.3 Visión de campo.<br />

4.2 Tácticas generales de equipo.<br />

4.2.1 Fútbol de contraataque.<br />

4.2.2 Fútbol de posesión.<br />

4.2.3 Fútbol directo.<br />

4.3 Tácticas ofensivas en el juego.<br />

4.3.1 Pase y movimiento.<br />

4.3.2 Cambiar el juego.<br />

4.3.3 Agujero defensivo.<br />

4.3.4 Intercambio de bandas.<br />

4.3.5 Hombre clave.<br />

5. “TECNIQUEANDO” FRASES CLAVES<br />

6. Bibliografía y Créditos<br />

7


Jueguen Siempre Adelante<br />

Revisado por:<br />

Pbro. Víctor Manuel Martínez.<br />

Vicario de la Parroquia Catedral, San Vicente<br />

Contenido Doctrinal y Religioso.<br />

Kary Rojas<br />

Escritora, conferencista motivacional y maestra de educación pastoral.<br />

Cartagena, Colombia<br />

Licda. Luz Jazmine Jiménez.<br />

Catedrática UPAN<br />

Gramática y Ortografía.<br />

8


Jueguen Siempre Adelante<br />

INTRODUCCIÓN<br />

He tenido junto a otros jóvenes la enorme dicha y la maravillosa bendición de<br />

estar presente y vivir la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), Río 2013 realizada en<br />

Brasil, una incomparable experiencia sin lugar a duda. Siendo testigo de ello; eso no<br />

puede quedarse así, sólo como una experiencia individual, exclusivamente guardada<br />

en el “cajón de mis recuerdos”, y por esa misma razón me siento totalmente<br />

convencido y comprometido a querer compartirla con todos ustedes: “meus amigos”.<br />

Fuimos llamados a ser testigos, discípulos y apóstoles misioneros de nuestra Iglesia, la<br />

Iglesia de Cristo. Una Iglesia que cada día se renueva con la unción del Espíritu Santo,<br />

una Iglesia que cada día necesita de nuevos constructores que la levanten y llenen de<br />

vida. Esa es la Iglesia de Cristo.<br />

Como fruto de una semilla germinada de esa vivencia de fe, hoy pongo a su alcance y<br />

en sus manos: “¡Jueguen Siempre Adelante!” un escrito en el cual recogeré y trataré<br />

de traducir mi experiencia personal de la semana misionera previa a la JMJ para<br />

compartirla con todos ustedes mis amigos lectores; además, realizaré una exclusiva<br />

selección de textos relacionados al deporte para ampliar un poco esa idea de “jugar<br />

<strong>siempre</strong> <strong>adelante</strong>”, comentarios de su santidad Juan Pablo II dirigiéndose en algún<br />

momento a los deportistas, y a la luz de los mensajes del Papa Francisco voy a<br />

compartirles mi reflexión acerca de lo que significaron para mi esas palabras, esos<br />

mensajes y cómo los recibí en mi corazón en esa inigualable experiencia de fe. Por<br />

ello, quiero también hacerlos parte de ella y así también sean: “testigos, discípulos y<br />

apóstoles misioneros”.<br />

“Id y haced discípulos en todas las naciones”.<br />

San Mateo 28,19<br />

9


Jueguen Siempre Adelante<br />

Encontramos en el fútbol una diversidad de estrategias y tácticas que al<br />

implementarlas y ponerlas en práctica llegan a hacer de un equipo de futbol la mejor<br />

selección del mundo, un gran equipo, el mejor club del mundo o “más que un club”.<br />

Pero sobre todo es un deporte que traspasa fronteras y unifica a las naciones en el<br />

mundo entero, característica que retomaremos para hacer un llamado a la unidad de<br />

todos los pueblos.<br />

Estas estrategias y tácticas pueden ser aplicadas de forma eficaz en todas las áreas de<br />

nuestra vida, incluyendo nuestra vida espiritual y pueden sin duda generarnos<br />

excelentes resultados. Así, relacionándolas específicamente con nuestra vida cristiana;<br />

y si logramos aplicarlas a nuestra figura como personas y en el equipo de nuestra<br />

Iglesia, seguro llegaremos a ser el mejor equipo y con el mejor de los entrenadores:<br />

JESÚS.<br />

El Papa Francisco se dirigió a más de tres millones de peregrinos que llenaron la playa<br />

de Copacabana para participar en la Vigilia de la Jornada Mundial de la Juventud<br />

(JMJ), exhortándolos a “jugar <strong>siempre</strong> <strong>adelante</strong>”, siendo auténticos atletas de Cristo y<br />

piedras vivas de una Iglesia que acoja a toda la humanidad.<br />

Sala de Prensa del Vaticano.<br />

En varias ocasiones el Papa San Juan Pablo II se había referido también a los fieles<br />

invitándoles a prepararse en la vida espiritual, tal como lo hacen los deportistas para<br />

alcanzar sus metas.<br />

Y es justamente lo que con este escrito se pretende: motivarles a ustedes jóvenes a<br />

que también se preparen con coraje espiritualmente y vayan firmes a la meta de la<br />

Salvación.<br />

“En Cualquier competición los atletas se someten a una preparación muy rigurosa y<br />

todo para lograr una corona que se marchita, mientras que la nuestra no se marchita.”<br />

1 Corintios 9,25<br />

10


Jueguen Siempre Adelante<br />

El apóstol San Pablo con estas palabras nos quiere exhortar a que nos<br />

ejercitemos espiritualmente en todo lo necesario para obtener autodominio o<br />

autocontrol; que seamos constantes y firmes en los aspectos que se requiera para vivir<br />

la vida conforme al Evangelio que se nos ha predicado. Él nos ha propuesto algo<br />

común: el entrenamiento para alcanzar el pleno dominio de sí mismo y el autocontrol<br />

en todos los aspectos; la EGRATEIA (templanza).<br />

La expresión “Nosotros en cambio” ofrece una clave de interpretación que el Papa Juan<br />

Pablo II, (ahora santo) ha iniciado en sus comentarios a esta cita: “En las recientes<br />

Olimpíadas de Sydney hemos admirado las hazañas de grandes atletas, que, para<br />

alcanzar esos resultados, se sacrificaron durante años, día a día. Esta es la lógica del<br />

deporte, especialmente del deporte olímpico y es también la lógica de la vida: sin<br />

sacrificio no se obtienen resultados importantes, y tampoco auténticas satisfacciones.<br />

Nos lo ha recordado una vez más el apóstol San Pablo: "Los atletas se privan de todo;<br />

ellos para ganar una corona que se marchita; nosotros, en cambio, una que no se<br />

marchita". Todo cristiano está llamado a convertirse en un buen atleta de Cristo, es<br />

decir, en un testigo fiel y valiente de su Evangelio. Pero para lograrlo, es necesario que<br />

persevere en la oración, se entrene en la virtud y siga en todo al divino Maestro.<br />

En efecto, él es el verdadero atleta de Dios; Cristo es el hombre "más fuerte" (cf. San<br />

Marcos 1, 7), que por nosotros afrontó y venció al "adversario", (Satanás) con la fuerza del<br />

Espíritu Santo, inaugurando el reino de Dios. Él nos enseña que para entrar en la gloria<br />

es necesario pasar a través de la pasión (cf. San Lucas 24, 26 y 46), y nos precedió por este<br />

camino, para que sigamos sus pasos"¨<br />

(Juan Pablo II. Jubileo de los deportistas. Homilía de Juan Pablo II, Domingo 29 de octubre de 2000.)<br />

La posibilidad de un entrenamiento espiritual viene señalada por las enseñanzas del<br />

magisterio, cuando San Juan Pablo II, al comentar el texto que ahora nos ocupa<br />

recomienda que “La práctica del deporte en su sentido más noble y auténtico trae<br />

<strong>siempre</strong> a la memoria el ideal de virtudes humanas y cristianas que, no solamente<br />

11


Jueguen Siempre Adelante<br />

contribuyen a la formación física y psíquica, sino que también inician y estimulan a la<br />

fuerza y a la grandeza moral y espiritual. El deporte, vosotros lo sabéis bien, es escuela<br />

de lealtad, de coraje, de tolerancia, de ánimo, de solidaridad y espíritu de equipo.<br />

Todas estas virtudes naturales son, con frecuencia, como el soporte en que se asientan<br />

otras virtudes sobrenaturales.<br />

En vuestra vida como profesionales del ciclismo y en vuestros quehaceres familiares y<br />

sociales, no olvidéis de poner en práctica ese cúmulo de pequeñas o grandes acciones<br />

de autodominio, simplicidad, honestidad y respeto del otro, que se aprenden en la<br />

actividad deportiva. Evitad todo lo que sea deslealtad, ventajismo y juego sucio, pues<br />

ello degrada vuestra profesión y hace desmerecer a los ojos de Dios.<br />

Con San Pablo os digo: “Corred así para ganar” (1 Corintios 9, 24); pero, también con el<br />

Apóstol, os recuerdo que como creyentes habéis de ser deportistas que corren para<br />

ganar la corona que no se marchita (Cfr. Corintios 9, 25)<br />

(Discurso del Papa Juan Pablo II a los miembros del equipo ciclista español «ZOR». Lunes 10 de junio de 1985).<br />

Mas <strong>adelante</strong> enseña el Papa que “La tradición cristiana utilizó a menudo la metáfora<br />

de la competición atlética para describir el esfuerzo por alcanzar la virtud y la fidelidad a<br />

Cristo. San Pablo habla de su vida como una carrera en la que resulta vital alcanzar la<br />

meta final (cf. 1 Corintios 9,24-27)<br />

(Discurso de S.S. Juan Pablo II a los participantes en un torneo de esquí 14 de septiembre de 1991.)<br />

El deporte es una ayuda espiritual para el cristiano<br />

La corona incorruptible, constituye una meta espiritual del deportista cristiano, y<br />

la preparación física y espiritual del deportista puede ser asumida como un instrumento<br />

apropiado para el desarrollo espiritual del cristiano. En este sentido se orienta la<br />

interpretación que San Juan Pablo II hace de esta cita: “El deporte, a la vez que<br />

favorece el vigor físico y templa el carácter, no debe apartar jamás de los deberes<br />

espirituales a cuantos lo practican y aprecian. Según palabras de San Pablo, sería<br />

12


Jueguen Siempre Adelante<br />

como si uno corriera sólo "por una corona que se marchita", olvidando que los<br />

cristianos nunca pueden perder de vista "la que no se marchita" (cf. 1 Corintios 9, 25).<br />

La dimensión espiritual debe cultivarse y armonizarse con las diversas actividades de<br />

distracción, entre las cuales se incluye también el deporte.<br />

(Juan Pablo II. Jubileo de los deportistas, Discurso de Juan Pablo II a los participantes en el Congreso Internacional sobre el<br />

deporte. Roma, sábado 28 de octubre 2000.)<br />

“El Apóstol San Pablo proponía a los cristianos de Corinto la imagen del atleta para<br />

ilustrar la vida cristiana, como ejemplo de esfuerzo y de constancia (cf 1 Corintios 9,24-25). En<br />

efecto, la práctica correcta del deporte debe estar acompañada por la templanza y la<br />

educación a la renuncia; con mucha frecuencia requiere también un buen espíritu de<br />

equipo, actitudes de respecto, aprecio de las cualidades de los demás, honestidad en<br />

el juego y humildad para reconocer las propias limitaciones.<br />

El deporte, en fin, especialmente en sus formas menos competitivas, invita a una<br />

celebración festiva y a la convivencia amistosa.<br />

También el cristiano puede encontrar en el deporte una ayuda para desarrollar las<br />

virtudes cardinales – fortaleza, templanza, prudencia y justicia – en la carrera por la<br />

corona “que no se marchita”, como escribe San Pablo.<br />

(Juan Pablo II. Mensaje de Juan Pablo II para la XXV Jornada mundial del turismo. 27 de septiembre de 2004.)<br />

Fuente: Catholic.net: Educadores Católicos | sección Deporte y Vida Cristiana | categoría San Pablo y el Deporte |<br />

13


Jueguen Siempre Adelante<br />

14


Jueguen Siempre Adelante<br />

16


Jueguen Siempre Adelante<br />

Un Antes y un Después en mi vida: JMJ Río 2013.<br />

El viaje a alcanzar un sueño.<br />

Esta aventura concretamente inicia el sábado 13 de julio, cuando muy temprano<br />

algunos miembros de la delegación oficial en representación de la Iglesia Católica de<br />

nuestro país: la Comisión episcopal de la juventud de El Salvador, (CEJES), todos<br />

llegamos al Aeropuerto Internacional de Comalapa, (ahora: MONSEÑOR OSCAR<br />

ARNULFO ROMERO) nuestro vuelo salía a las 7:00 a.m. Haciendo escala en Panamá<br />

con una espera de cinco horas y luego un vuelo rumbo a Río de Janeiro Brasil, que nos<br />

mantendría en el aire siete horas aproximadamente.<br />

Preparación.<br />

Cabe mencionar, previo a este acontecimiento hubo una especial preparación<br />

para todos los “peregrinos” de nuestra delegación: organización, convivencia,<br />

coordinación, clases de portugués, preparación espiritual y todo lo relacionado a la<br />

misión de este viaje. Personalmente y como testimonio lo digo, tuve una semana de<br />

preparación personal espiritual con Eucaristía diaria; asistir a la JMJ, para mí era un<br />

sueño hecho realidad, algo que esperé durante años y en mi corazón existía la certeza<br />

que eso marcaria un antes y un después en mi vida, ya nada sería igual.<br />

Así comenzó todo, nuevos amigos, un objetivo en común, una misma ilusión, y un<br />

mismo llamado. “Cristo nos invita, vengan mis amigos…”<br />

17


Jueguen Siempre Adelante<br />

Experiencia personal con la comunidad en la “paróquia Imaculada<br />

Conceição Raiz da Serra”.<br />

Bienvenida.<br />

Con anticipación era de nuestro conocimiento el participar de una semana<br />

misionera antes de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), como preparación<br />

espiritual para la misma; siendo así, allá nos esperaba la comunidad de la paróquia<br />

Imaculada Conceição Raiz da Serra, ubicada en Magé un municipio de Río; después<br />

de la travesía del largo viaje y luego de esperarnos durante horas, con alegría, cantos,<br />

carteles y “samba”, nos recibieron todos los miembros de la comunidad a eso de las<br />

3:30 a.m. La madrugada del domingo 14 “Bem-vindos peregrinos”<br />

Desde ese momento aquellas personas hasta entonces desconocidas, se ganaron<br />

nuestros corazones, a través de las ventanas de los autobuses, se miraban llenos de<br />

alegría y muy ansiosos por recibirnos; en lo personal, me embargó una sensación no<br />

fácil de describir, me llenó y contagió de esa misma alegría. Era fácil notar que a mis<br />

compañeros les sucedía algo semejante.<br />

La Familia.<br />

A todas las familias que previamente lo habían requerido (con un año de<br />

anticipación), les fue asignada la cantidad de peregrinos, según su capacidad, que<br />

cada quién había solicitado hospedar. Y así, ya estando en la parroquia, y después de<br />

tan grata y cariñosa bienvenida fuimos entregados a nuestras familias adoptivas.<br />

Abrazos, sonrisas, fotos y mucha alegría. Mi familia estaba allí, anticipadamente nos<br />

habíamos comunicado y me expresaron: “estamos esperando su llegada, sabemos que<br />

será una experiencia única, irrepetible y de mucha bendición para nuestra familia”.<br />

Nunca fui un peregrino para ellos, fui un hijo más y su casa, su hogar, al igual que sus<br />

corazones, fue mi hogar a puertas abiertas… “minha familia…”<br />

18


Jueguen Siempre Adelante<br />

Semana misionera.<br />

Las horas pasaban. Sin duda mi vida y la de ellos estaba siendo marcada de<br />

igual manera: mi familia, mis compañeros, sus familias, los sacerdotes y toda la<br />

comunidad. Y lo mismo estaba sucediendo en muchas comunidades parroquiales en<br />

las distintas ciudades de aquel ordenado y progresivo país…<br />

“Estoy marcado desde <strong>siempre</strong> con el signo del Redentor”.<br />

La convivencia y la comunicación a pesar de hablar lenguas distintas, no fue para nada<br />

un obstáculo, el lenguaje para los cristianos es uno sólo: “El Amor de Cristo”. Eso nos<br />

fue más que suficiente para compartir y entregarnos en esa armonía.<br />

Ese mismo día por la noche tuvimos la oportunidad de vivir nuestra primera celebración<br />

de la Santa Eucaristía en portugués, una nueva experiencia muy particular.<br />

Primera Eucaristía.<br />

Ese día el santo Evangelio según San Lucas capitulo 10 versículos del 25 al 37,<br />

nos hacía la siguiente interrogante: ¿Quién es mi prójimo?<br />

25 Y entonces, un doctor de la Ley se levantó y le preguntó para ponerlo a prueba:<br />

«Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la Vida eterna?».<br />

26 Jesús le preguntó a su vez: «¿Qué está escrito en la Ley? ¿Qué lees en ella?».<br />

27 El le respondió: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu<br />

alma, con todas tus fuerzas y con todo tu espíritu, y a tu prójimo como a ti<br />

mismo».<br />

28 «Has respondido exactamente, le dijo Jesús; obra así y alcanzarás la vida».<br />

29 Pero el doctor de la Ley, para justificar su intervención, le hizo esta pregunta:<br />

« ¿Y quién es mi prójimo?».<br />

30 Jesús volvió a tomar la palabra y le respondió: «Un hombre bajaba de Jerusalén<br />

a Jericó y cayó en manos de unos ladrones, que lo despojaron de todo, lo<br />

hirieron y se fueron, dejándolo medio muerto.<br />

19


Jueguen Siempre Adelante<br />

31 Casualmente bajaba por el mismo camino un sacerdote: lo vio y siguió de largo.<br />

32 También pasó por allí un levita: lo vio y siguió su camino.<br />

33 Pero un samaritano que viajaba por allí, al pasar junto a él, lo vio y se conmovió.<br />

34 Entonces se acercó y vendó sus heridas, cubriéndolas con aceite y vino;<br />

después lo puso sobre su propia montura, lo condujo a un albergue y se encargó<br />

de cuidarlo.<br />

35 Al día siguiente, sacó dos denarios y se los dio al dueño del albergue,<br />

diciéndole: "Cuídalo, y lo que gastes de más, te lo pagaré al volver"<br />

36 ¿Cuál de los tres te parece que se portó como prójimo del hombre asaltado por<br />

los ladrones?».<br />

37 «El que tuvo compasión de él», le respondió el doctor. Y Jesús le dijo: «Ve, y<br />

procede tú de la misma manera».<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

Reflexión.<br />

¿Quién es mi prójimo?<br />

Con esta Palabra Dios hablaba a nuestro corazón y nos invitaba a<br />

cuestionarnos: ¿Quién es mi prójimo? y justamente cuando eres extranjero y estas en<br />

otro país, creo ésta interrogante tiene un agregado especial y mucho más cuando estas<br />

rodeado de esa gente que te trata con tanto amor, te acogen como buenos samaritanos<br />

y te dan todo su cariño. “Debemos aceptar que el amor a Dios y al prójimo es el<br />

mandamiento mayor y sólo cumpliéndolo, alcanzaremos en ese amor perfecto la<br />

santidad a la que estamos llamados como verdaderos hijos de Dios”.<br />

“Vayamos y hagamos nosotros lo mismo con nuestro prójimo”. Tal como lo<br />

manda Jesús.<br />

20


Jueguen Siempre Adelante<br />

Segunda-feira. (Lunes, 15 de julio de 2013)<br />

Al día siguiente, el lunes, (segunda-feira como los brasileiros le llaman) hubo<br />

tiempo libre para conocer y compartir con la familia, en mi caso personal conocí a casi<br />

toda la familia de mi mãe (madre) adoptiva. La pasamos de lo más bien mientras<br />

compartíamos siendo en Cristo: una verdadera familia.<br />

Familia que es un verdadero tesoro…<br />

Por la noche nuevamente a la Santa Eucaristía, aparte de ello, la alegría de reunirnos<br />

todos en la casa de Dios, saludarnos e intercambiar vivencias de cada acontecimiento;<br />

estábamos conociendo gente de otros países, nuevos amigos de Guatemala y Panamá<br />

quienes estaban en nuestra misma comunidad.<br />

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 10,34-42. 11,1<br />

Gloria ti Señor…<br />

34 No piensen que he venido a traer paz a la tierra; no he venido a traer paz, sino<br />

espada.<br />

35 Pues he venido a enfrentar al hombre contra su padre, a la hija contra su madre<br />

y a la nuera contra su suegra.<br />

36 Cada cual verá a sus familiares volverse enemigos.<br />

37 El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; y el que<br />

ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí.<br />

38 El que no carga con su cruz y viene detrás de mí, no es digno de mí.<br />

39 El que antepone a todo su propia vida, la perderá, y el que sacrifique su vida por<br />

mi causa, la hallará.<br />

40 El que los recibe a ustedes, a mí me recibe, y el que me recibe a mí, recibe a<br />

Aquel que me ha enviado. El que recibe a un profeta porque es profeta, recibirá<br />

recompensa digna de un profeta.<br />

21


Jueguen Siempre Adelante<br />

41 El que recibe a un hombre justo por ser justo, recibirá la recompensa que<br />

corresponde a un justo.<br />

42 Asimismo, el que dé un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños, porque<br />

es discípulo, no quedará sin recompensa: soy yo quien se lo digo.»<br />

11,01 Cuando Jesús terminó de dar estas instrucciones a sus doce discípulos, se fue<br />

de allí para predicar y enseñar en las ciudades judías.<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

Reflexión.<br />

Cristo redentor nos abraza.<br />

Podríamos preguntarnos: ¿Cómo es posible qué Jesús este hablando que no<br />

vino a traer paz sino espada? Y aunque parezca quizá una contradicción el mensaje es<br />

claro, todos aquellos quienes optamos por el seguimiento de Cristo, todos aquellos que<br />

tomamos y abrazamos la cruz; sabemos que el enemigo nos persigue, el mundo,<br />

incluso a veces nuestra propia familia. Pero por abandonar nuestra vida por su causa<br />

es que la conservamos, por Él nos reciben donde quiera que vamos y nos reciben con<br />

amor, como lo recibimos de la gente en aquella comunidad.<br />

“Sobre el monte del Corcovado un Cristo redentor nos abrazaba, a través de los<br />

brazos de quienes nos recibieron…”<br />

Terça-feira. (Martes, 16 de julio de 2013)<br />

Tuvimos el segundo día libre para salir a pasear, seguir conociendo y<br />

compartiendo con nuestras familias, totalmente a sus disposiciones. Nos llevaron a<br />

conocer Petrópolis, otra ciudad de Brasil, en el Estado de Río de Janeiro, ya se las<br />

mencioné antes, conocida como la “ciudad imperial” de Brasil. Ubicada en las<br />

22


Jueguen Siempre Adelante<br />

montañas de la Serra dos Órgãos, Petrópolis es un destino popular de vacaciones<br />

brasileño.<br />

En horas de la tarde nos reunimos por primera vez todos los miembros de la<br />

delegación para algunas indicaciones y al llegar la noche, lo mejor de cada día: la<br />

Santa Eucaristía. Y el Evangelio según San Mateo capitulo 11, nos relata:<br />

20 Entonces Jesús comenzó a reprochar a las ciudades en que había realizado la<br />

mayor parte de sus milagros, porque no se habían arrepentido:<br />

21 « ¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y Sidón se hubiesen<br />

hecho los milagros que se han realizado en ustedes, seguramente se habrían<br />

arrepentido, poniéndose vestidos de penitencia y cubriéndose de ceniza.<br />

22 Yo se lo digo: Tiro y Sidón serán tratadas con menos rigor que ustedes en el día<br />

del juicio.<br />

23 Y tú, Cafarnaúm, ¿subirás hasta el cielo? No, bajarás donde los muertos.<br />

Porque si los milagros que se han realizado en ti, se hubieran hecho en<br />

Sodoma, todavía hoy existiría Sodoma.<br />

24 Por eso les digo que, en el día del Juicio, Sodoma será tratada con menos rigor<br />

que ustedes.»<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

Reflexión.<br />

Llamado de atención.<br />

Muchas veces nosotros al igual que los pobladores de aquellas ciudades,<br />

merecemos un llamado de atención, Dios nos muestra como con su amor de Padre<br />

<strong>siempre</strong> está pendiente de nosotros y de nuestras necesidades, nunca nos abandona,<br />

en muchas ocasiones somos testigos de sus milagros y a lo mejor recibimos muchos<br />

23


Jueguen Siempre Adelante<br />

de sus dones preciosos; pero aun así, dudamos de su bondad y misericordia, de su<br />

gracia santificadora en nosotros, de su plan de Salvación.<br />

Ofendemos a Dios con nuestra poca fe, con desmerecer su amor, le causamos tristeza<br />

cuando nos regala un don, una gracia, un milagro y en lugar de merecerlo, de creerle,<br />

de darle gracias, todo el tiempo estamos preguntándole, ¿Por qué yo? ¿Por qué a mí?<br />

¿Yo soy digno Señor? …Es la voluntad de Dios y Él nos hace dignos.<br />

Esforcémonos cada día por agradar a Dios con nuestro testimonio de vida, por tratar de<br />

hacer su santa voluntad y reconozcamos las grandezas que Él hace en nuestra vida,<br />

para gloria de su Santo Nombre.<br />

Quarta-feira. (Miércoles, 17 de julio de 2013)<br />

Al día siguiente, el miércoles o quarta-feira, la cita era muy temprano<br />

comenzaríamos con la Santa Eucaristía a diferencia de los días anteriores que todas<br />

habían sido por la noche, a las 7:00 a.m. en la parroquia San Sebastián, y ese día el<br />

Evangelio de San Mateo en el capítulo 11 versículos del 25 al 27 nos deja una nueva<br />

enseñanza.<br />

25 En aquella ocasión Jesús exclamó: «Yo te alabo, Padre, Señor del Cielo y de la<br />

tierra, porque has mantenido ocultas estas cosas a los sabios y entendidos y las<br />

has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, pues así fue de tu agrado.<br />

26 Mi Padre ha puesto todas las cosas en mis manos.<br />

27 Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y<br />

aquellos a quienes el Hijo se lo quiera dar a conocer.<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

24


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

Jesús nos invita a conocerle.<br />

Aclamamos en el Salmo 102: “…El Señor es compasivo y misericordioso…”,<br />

sin duda por esa misma compasión y misericordia, Jesús nos enseña a alabar su<br />

nombre, a darle gracias por mostrarnos cosas grandes, ocultas a los grandes y hoy<br />

reveladas a la gente sencilla; a los pequeños, a nosotros sus hijos, y luego agrega:<br />

“…nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquellos a<br />

quienes el Hijo se lo quiera dar a conocer…”.<br />

De esta forma Jesús nos está invitando a conocerle, se nos acerca permitiéndonos que<br />

le podamos conocer; y así, también, podamos conocer al Padre y su santa voluntad,<br />

qué mejor manera de conocer al Padre que a través de su Hijo y la mejor manera de<br />

conocer a Cristo es a través de su santa Palabra, en la oración, en los sacramentos, el<br />

perdón, la comunión y en el prójimo mismo. “Alabemos a Dios por sus grandezas en<br />

nuestra vida”.<br />

Recorrido cultural.<br />

Luego todos nos reunimos para participar en una ponencia de historia sobre el<br />

municipio de Magé.<br />

Magé es una ciudad y municipio ubicado en el estado brasileño de Río de Janeiro.<br />

Magepe-Mirim se estableció en 1566 por los colonistas portugueses. Es un lugar muy<br />

tranquilo, especialmente en comparación con el centro de Río.<br />

El jugador internacional de fútbol Garrincha nació en Magé.<br />

Magé está limitada al norte con Petrópolis, al oeste con Duque de Caxias, al este con el<br />

municipio de Guapimirim y al sur con la bahía.<br />

25


Jueguen Siempre Adelante<br />

Convivencia.<br />

Después de finalizar con un recorrido por algunos lugares históricos y la calle<br />

principal en tiempos de la colonia; y desde luego, muchas fotos, nos fuimos a una<br />

convivencia donde nos esperaba una calurosa recepción, almuerzo, música brasileira<br />

en vivo, baile, samba, clases de canto y más, tarde de deportes: fútbol, juegos y más<br />

samba.<br />

La noche llegó, pasamos por un refrigerio y luego finalizamos la jornada con la liturgia<br />

de las horas.<br />

Fiesta Junina (festa Junina).<br />

No todo se había terminado, definitivamente no, faltaba algo muy colorido, la<br />

comunidad nos había preparado una mini fiesta Junina que aunque se celebra en el<br />

mes de junio quisieron compartirla con nosotros para que conociéramos más de sus<br />

tradiciones y cultura.<br />

Las Fiestas Juninas ("Festas Juninas" en portugués) representan uno de los grandes<br />

eventos populares que suceden cada año en las calles de Brasil con la llegada de San<br />

Antonio, San Juan y San Pedro.<br />

Estas celebraciones se llevan a cabo en el mes de Junio, coincidentemente con el<br />

clásico “solcito de invierno” que es una especie de “veranillo” que sucede en esta<br />

época del invierno de Brasil.<br />

La historia de la Fiesta Junina tiene sus inicios cuando los colonizadores que llegaban<br />

desde Europa celebraban los primeros días de calor que anunciaban la llegada de la<br />

temporada de verano; al igual que sucede con la Navidad, en el hemisferio Sur se<br />

celebran a períodos del año cambiado.<br />

26


Jueguen Siempre Adelante<br />

Las famosas Fiestas Juninas comienzan el día 13 de junio con la fiesta de San Antonio,<br />

luego los festejos continúan con la fiesta de San Juan el 24 de junio y el último evento<br />

es la popular fiesta de San Pedro el día 29 de junio.<br />

Cada ciudad festeja la llegada de la Festa Junina a su modo, donde en cada zona del<br />

país se preparan diferentes espectáculos musicales, desfiles, bailes y todo tipo de<br />

expresiones culturales tradicionales del lugar.<br />

Nos vestimos como campesinos brasileiros y disfrutamos demasiado de tan bella<br />

celebración. Y así, finalizamos la noche.<br />

Quinta-feira. (Jueves, 18 de julio de 2013)<br />

Día jueves, jóvenes de: Panamá, Guatemala, Ecuador, Venezuela, Colombia,<br />

Perú, Canadá, Nicaragua, Filipinas, El Salvador y los locales (brasileños). Alrededor de<br />

5,000 jóvenes estábamos reunidos desde muy temprano en un gimnasio para celebrar<br />

junto a Jesús sacramentado.<br />

Una mañana que inició con una convivencia, luego un hermoso acto mariano en el cual<br />

se realizó un especial encuentro con Nuestra Señora de Aparecida, rodeada de flores y<br />

cargada por jóvenes representantes de cada país presente.<br />

Adoración al Santísimo.<br />

Al finalizar el acto mariano se dio paso a la adoración Eucarística, todos con un<br />

mismo corazón, con un mismo espíritu, sin distinción alguna, con un mismo ardor y una<br />

misma fe; alabando y adorando a nuestro Señor Jesús sacramentado, haciendo de<br />

aquel momento algo muy nuestro, una experiencia de fe sin igual, preparándonos<br />

espiritualmente para la gran semana de la Jornada Mundial de la Juventud casi a las<br />

puertas.<br />

27


Jueguen Siempre Adelante<br />

Seguramente también todos elevando una súplica, una petición por todos los jóvenes<br />

de nuestros países, por la Iglesia, por nuestros líderes espirituales, por nuestras<br />

familias, por cada uno de nosotros y por cada uno de nuestros proyectos en este<br />

caminar en Cristo. Una experiencia frente a Jesús que simplemente enamora.<br />

Santa Eucaristía.<br />

Luego llega el momento cumbre, participar de la Santa Eucaristía, esta sería<br />

presidida por el obispo Gregorio, de Río de Janeiro a quién conoceríamos ese día y a<br />

quien era evidente los fieles brasileiros le tienen muchísimo cariño, concelebrada por<br />

los obispos de los demás países ya antes mencionados; entre ellos, nuestro obispo<br />

monseñor José Elías Rauda, quien nos acompañaba en la delegación oficial de<br />

nuestro país.<br />

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 11,28-30.<br />

Gloria a ti Señor.<br />

28 Vengan a mí los que van cansados, llevando pesadas cargas, y yo los aliviaré.<br />

29 Carguen con mi yugo y aprendan de mí, que soy paciente y humilde de<br />

corazón, y sus almas encontrarán descanso.<br />

30 Pues mi yugo es suave y mi carga liviana.»<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

Reflexión.<br />

Su carga es ligera.<br />

Jóvenes, el Señor nos llama, nos invita a ir a Él si estamos cansados llevando<br />

cargas muy pesadas, cargas que a lo mejor son tan pesadas porque llevamos también<br />

28


Jueguen Siempre Adelante<br />

una cruz extra, la de nuestros hermanos, la de nuestra familia, cargamos con los<br />

problemas de los demás a veces, una carga que nos hace más difícil recorrer el camino<br />

del calvario, pero no sólo nos invita a ir a Él, nos ofrece aliviarnos, darnos descanso.<br />

El Señor quiere enseñarnos que aprendamos de Él, a ser pacientes, mansos y<br />

humildes de corazón, Él nos brinda su mano, su ayuda, nos brinda un refugio y nos<br />

espera con los brazos abiertos y nos recuerda que su carga es ligera.<br />

“El compromiso verdadero es profundizar en el Evangelio, propagar el compromiso con<br />

Cristo”.<br />

Obispo de Venezuela.<br />

“Que el encuentro con Cristo nos fascine y ese encuentro nos lleve a un verdadero<br />

compromiso con la Evangelización”.<br />

Monseñor Elías Rauda.<br />

Obispo de El Salvador.<br />

Concierto.<br />

Después de todas las actividades anteriormente descritas, alrededor de cinco mil<br />

jóvenes de varios países estábamos ahí, dispuestos a seguir compartiendo en<br />

comunidad, como Iglesia de Cristo todo en Él y para Él.<br />

Los encargados subieron al escenario y luego de animar un poco y medir los ánimos de<br />

todos los presentes, dan paso a “Frutos de Medjugorie” una banda católica brasileña<br />

ciertamente para muchos de los extranjeros desconocida totalmente; pero, la historia<br />

cambió después de dos horas de un buen concierto.<br />

Una banda con muchos talentos, “muchos frutos” sin duda, algo que se podía apreciar<br />

a simple vista; mucho carisma, excelentes músicos y sobre todo unos buenísimos<br />

facilitadores para llevar a las personas a la presencia de Dios; sin ser ellos los<br />

29


Jueguen Siempre Adelante<br />

protagonistas en el escenario, trasmiten a Dios, una comunión espiritual que se<br />

contagia, que se irradia, que refleja un buen testimonio de vida cristiana.<br />

Cantamos, reímos, danzamos, saltamos, gritamos hasta más no poder, disfrutamos de<br />

buena música y de esa conexión con Jesús a través de la oración; nos acompañaron:<br />

los obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, eso es ser Iglesia.<br />

“Desde el oriente hasta el poniente, nuestra casa no tiene puertas.<br />

Nuestra tierra no tiene cercas. Ni tiene límites nuestro amor…”<br />

Por último, nuestras familias llegaron por nosotros y nos llevaron a casa (cada quien)<br />

para realizarnos una fiesta de despedida en familia. Compartimos mucho, cena y<br />

música en vivo y mucho cariño… Así finalizamos la quinta-feira de nuestra semana<br />

misionera.<br />

Sexta-feira. (Viernes, 19 de julio de 2013)<br />

Los días pasaban, el tiempo en sí, y cada uno de ellos dejaba una huella<br />

imborrable en cada uno de nosotros, muchas experiencias vividas, muchas vivencias<br />

para contar, lo cual hoy pretendo hacer a través de estas páginas.<br />

Compartir.<br />

Día viernes: éste también fue un día de convivencia para compartir con nuestros<br />

amigos peregrinos de distintos países, cada vez que se podía intercambiábamos uno<br />

que otro recuerdo alusivo a nuestro país de origen, fotos por montones, pero lo más<br />

importante en todo momento era dar a Jesús, el intercambiar a Cristo y la experiencia<br />

de estar ahí, esas experiencias en el caminar de la fe y la razón que de alguna manera<br />

nos había llevado hasta esa experiencia mundial de la juventud.<br />

30


Jueguen Siempre Adelante<br />

Misión.<br />

Por la tarde, con los encargados: líderes, coordinadores y voluntarios, nos<br />

organizamos para llevar un Mensaje de Esperanza a los hogares de la comunidad, nos<br />

dividimos en grupos pequeños de cuatro o cinco peregrinos y nos dirigimos a anunciar<br />

el mensaje de la Buena Nueva, comenzamos a caminar como símbolo del camino que<br />

nos espera por delante en esta nueva misión, llamamos de puerta en puerta y aunque<br />

no todas se abrieron, muchas sí lo hicieron para recibirnos, nos recibieron con alegría;<br />

unas pocas palabras, el deseo de la paz de Dios para sus hogares y sus familias y una<br />

breve oración, nos ayudaron a darnos a esas personas que con tanto cariño nos<br />

acogieron, con los brazos abiertos.<br />

Después de nuestra pequeña misión evangelizadora, tuvimos un espacio de<br />

varias horas para descansar un poco antes de participar de la Santa Misa de ese día.<br />

En esta Santa Eucaristía compartimos el Evangelio de San Mateo 12,1-8:<br />

Gloria a ti Señor.<br />

01 En cierta ocasión pasaba Jesús por unos campos de trigo, y era un día sábado.<br />

Sus discípulos, que tenían hambre, comenzaron a desgranar espigas y a<br />

comerse el grano.<br />

02 Al advertirlo unos fariseos, dijeron a Jesús: «Tus discípulos están haciendo lo<br />

que está prohibido hacer en día sábado.»<br />

03 Pero él les respondió: « ¿No han leído lo que hizo David, cuando él y sus<br />

compañeros tuvieron hambre?<br />

04 Pues entró en la casa de Dios y comieron los panes presentados, que les<br />

estaban prohibidos tanto a él como a sus compañeros, pues están reservados a<br />

los sacerdotes.<br />

05 ¿No han leído en la Ley que los sacerdotes en el Templo no observan el<br />

descanso, y no hay culpa en eso?<br />

06 Yo se lo digo: ustedes tienen aquí algo más que el Templo.<br />

31


Jueguen Siempre Adelante<br />

07 Y si ustedes entendieran estas palabras: Quiero misericordia, no sacrificios,<br />

ustedes no condenarían a quienes están sin culpa.<br />

08 Además, el Hijo del Hombre es Señor del sábado.<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

Reflexión.<br />

Nuestra confianza puesta en Dios.<br />

“El Hijo del Hombre es Señor del sábado” entendamos en estas Palabras de<br />

Jesús algo que es muy simple, Él es dueño y Señor del tiempo, si nosotros logramos<br />

comprenderlo seguramente nuestra desesperanza cada día será menor, porque<br />

nuestra confianza estará puesta <strong>siempre</strong> en Dios y así sabremos que en su tiempo, en<br />

el momento más justo según su santa voluntad; entonces, es cuando Él nos<br />

responderá, cuando lo que pedimos vamos a recibirlo, en su tiempo y no en el nuestro.<br />

Muchos no sabemos esperar en el tiempo de Dios y creemos que para Él su tiempo es<br />

el mismo que el nuestro; sin embargo no es así, por tanto descubramos que lo más<br />

importante no es tener, recibir o que nos cumpla con algo de Él; sino, lo más importante<br />

es tenerlo a Él en nuestra vida, eso sí es lo importante, si tenemos conciencia de eso,<br />

sabremos que nada nos falta y tendremos todo conforme a su santa voluntad y<br />

nuestros sacrificios se reflejarán en obras concretas de misericordia para con nuestro<br />

prójimo.<br />

El Carnaval para los peregrinos a lo Río de Janeiro.<br />

Luego el programa para finalizar este día, contemplaba una noche de carnaval,<br />

una noche para elegir una “fantasía”, un disfraz de alguien quien te gustaría ser, una<br />

tradición brasileira muy popular conocida quizá en todo el mundo.<br />

32


Jueguen Siempre Adelante<br />

Todos los peregrinos, los voluntarios y la comunidad de Raíz de Serra, ya todos<br />

teníamos nuestros vestuarios listos, una noche muy colorida y de mucha fiesta en<br />

aquella celebración; música, una excelente recepción y una bienvenida especial<br />

esperaban por nosotros, disfraces, el compartir, la samba y el baile, una combinación<br />

de elementos que motivó mucho y deja muy buenos recuerdos. (Cabe mencionar y<br />

aclarar) aunque era un carnaval brasileiro todo fue una celebración muy sana, con<br />

mucha riqueza cultural que compartieron con nosotros los peregrinos y fuera de todo<br />

paganismo.<br />

Así terminó la noche entre muchas alegrías y con ello, una semana de actividades en<br />

una comunidad que tan bien nos acogió y se identificó con nosotros. Ahora sólo falta<br />

esperar nuestra despedida de esta comunidad, de toda esta hermosa y bondadosa<br />

gente de gran corazón.<br />

Emprender el camino (Sábado, 20 de julio de 2013)<br />

Suena la alarma en el reloj despertador de mi teléfono, 6:00 a.m. (en mi país, El<br />

Salvador son las 4:00 a.m.) este día tenemos Santa Eucaristía muy temprano, la última<br />

Misa en esta comunidad, nuestra celebración Eucarística de despedida, luego un<br />

compartir a la hora del desayuno y a emprender camino, tenemos que dejar Raíz da<br />

Serra, Magé y partir a Petrópolis, en donde nos reuniríamos con las delegaciones de<br />

otros países.<br />

En casa, nos despertamos sin mucho que decir, en silencio y no porque no hubiera de<br />

que hablar; al contrario, por tanto que se quiere decir, por tanto que se quiere expresar<br />

pero no se puede o no es fácil hacerlo. Mi familia acogedora: Simone, minha mae (mi<br />

mamá), Marco, meu pai (mi papá), Hugo, meu irmao (mi hermano) y yo, nos<br />

despertamos experimentando esa triste sensación de vacío, de nostalgia, esa tristeza<br />

del corazón y melancolía; por la despedida y la separación después de compartir una<br />

corta pero muy, muy significativa semana juntos siendo una familia; imagino que en las<br />

demás familias sucederá algo parecido.<br />

33


Jueguen Siempre Adelante<br />

Es el día menos esperado después de toda una especial semana, todos nos<br />

preparamos; ya listos, oramos antes de desayunar como todos los días y luego con<br />

maleta y todo, nos dirigimos a la parroquia para presenciar la Santa Eucaristía y la<br />

celebración de despedida.<br />

Santa Misa de despedida.<br />

Llegamos y encontramos una parroquia con mucho colorido, con mucho<br />

movimiento de aquella hermosa gente, quienes ya nos habían hecho parte de su<br />

comunidad, de sus familias, de sus vidas. Adornos por todos lados y un coro<br />

debidamente preparado para la celebración, como debe ser; un efusivo saludo entre<br />

palmas y gritos fue la bienvenida, dispuestos a vivir la Eucaristía escuchamos el<br />

Evangelio. (San Mateo 12, 14-21).<br />

Gloria a ti Señor…<br />

14 En seguida los fariseos salieron y se confabularon para buscar la forma de<br />

acabar con él.<br />

15 Jesús lo supo y se alejó de allí, pero muchas personas lo siguieron, y él sanó a<br />

cuantos estaban enfermos.<br />

16 Pero les pedía insistentemente que no hablaran de él.<br />

17 Así debían cumplirse las palabras del profeta Isaías:<br />

18 Viene mi siervo, mí elegido, el Amado, en quien me he complacido. Pondré mi<br />

Espíritu sobre él, para que anuncie mis juicios a las naciones.<br />

19 No discutirá, ni gritará, ni se oirá su voz en las plazas<br />

20 No quebrará la caña resquebrajada ni apagará la mecha que todavía humea,<br />

hasta que haga triunfar la justicia.<br />

21 Las naciones pondrán su esperanza en su Nombre.<br />

Palabra del Señor.<br />

Gloria y honor a ti Señor Jesús.<br />

34


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

Dios se complace en sus hijos.<br />

Los enemigos de Cristo que también son nuestros enemigos por ser sus<br />

discípulos, <strong>siempre</strong> van a estar en todo momento confabulándose, buscando las<br />

maneras para hacernos caer y sacarnos del camino. Al igual que Jesús, al darnos<br />

cuenta de ello, también podemos alejarnos de ese peligro y con toda prudencia; en<br />

nuestro caso, sabiendo cuáles son nuestras debilidades mejor no exponernos a las<br />

tentaciones que pueden llevarnos a caer en el pecado, siendo preferible alejarnos y<br />

apartarnos de ellas.<br />

Mientras Jesús sigue trabajando en nosotros y sanando nuestras enfermedades tanto<br />

físicas como espirituales.<br />

Sobre nosotros, aquellos que procuramos escuchar su Palabra y la aceptamos,<br />

tratando cada día de ponerla en práctica, también descansa el Espíritu de un Dios que<br />

se complace en sus hijos.<br />

En nosotros esta ahora la responsabilidad de anunciar la justicia que Cristo nos ha<br />

revelado, ahora es nuestra la misión de anunciarlo y darlo a conocer a todas las<br />

naciones para que en Él puedan poner toda su confianza y toda esperanza esté puesta<br />

en su Santo Nombre.<br />

Hasta luego Magé.<br />

Después de la Santa Eucaristía nos esperaba una convivencia muy especial en<br />

la cual compartimos los últimos momentos con toda la gente de la comunidad que<br />

también se ganaron nuestro corazón. Una sorpresa muy grande, fue un enorme pastel<br />

con motivo de la celebración del cumpleaños de nuestro “bispo” monseñor José Elías<br />

Rauda, quien nos acompañó en todo momento durante esta aventura, cantamos el<br />

cumpleaños feliz, compartimos, le felicitamos y la pasamos muy bien.<br />

35


Jueguen Siempre Adelante<br />

Luego llegó el momento de organizarnos para despedirnos de todos, especialmente de<br />

las familias que nos acogieron en sus casas, en sus hogares, nuestras familias, de los<br />

amigos de las delegaciones de los otros países: Guatemala, Panamá, Ecuador y<br />

Venezuela que también compartían con nosotros en esa misma comunidad y después<br />

a preparar nuestras maletas para partir en los buses que esperaban por nosotros para<br />

llevarnos a nuestro nuevo destino.<br />

Eso fue una despedida muy emotiva, tanto cariño, fue inevitable derramar lagrimas, los<br />

amigos brasileiros fueron muy dados, fue impresionante, en lo personal me quebrante<br />

ante eso y a todos nos quebranto por igual ver como esa gente corrían tras los buses<br />

cuando ya nos marchábamos, nos gritaban, ondeaban las banderas de nuestros<br />

países, nos “tiraban” besos, gesticulaban abrazos, lloraban, reían… “no hay palabras<br />

para describir todo eso”. Gracias Magé y que Dios y Nuestra Madre de Aparecida les<br />

guarden <strong>siempre</strong>.<br />

Terminamos esa tarde con un recorrido en un famoso museo después de una larga<br />

espera para entrar entre tantos peregrinos, luego nos trasladamos a un colegio; el cual<br />

sería nuestras instalaciones durante la semana de la JMJ. Después de venir de una<br />

casa, de un hogar, de una familia, el escenario era totalmente diferente, algo que se<br />

llego a extrañar sin duda en algún momento, pero ahí estábamos y el espíritu peregrino<br />

seguía latente sin desanimar ante nada.<br />

El día domingo, 21 de julio, asistimos a una convivencia durante la mañana y por la<br />

tarde a la Santa Eucaristía para luego finalizar con un grandioso concierto de clausura<br />

de la Semana Misionária.<br />

36


Jueguen Siempre Adelante<br />

“Millones de jóvenes de<br />

todo el mundo:<br />

Un mismo Espíritu”<br />

JMJ<br />

37


Jueguen Siempre Adelante<br />

38


Ahora queridos amigos, lo que quizá estaban esperando: los mensajes del<br />

Papa, sus palabras y el compartir de lo que significó y está significando esa experiencia<br />

en mi vida. Te invito a que juntos acompañemos al Santo Padre Francisco en su primer<br />

viaje entre continentes, su primer viaje al continente Americano, a ―su continente‖, ―al<br />

fin del mundo‖ como él lo dijo en algún momento.<br />

Abramos nuestro corazón a cada mensaje que lleno y bajo el poder del Espíritu Santo<br />

nos ha transmitido. Mensajes que no tienen caducidad y siguen tan vivos y actuales sin<br />

lugar a dudas y vivamos junto a él esta milagrosa experiencia. La cual marcó la historia<br />

y la vida de muchos jóvenes; ―porque justamente, fue un viaje para encontrarse con los<br />

jóvenes de todas partes del mundo, su primer viaje como Papa sucesor de Pedro y el<br />

cual encomendó a nuestra madre la virgen María‖.<br />

39


Jueguen Siempre Adelante<br />

ENCUENTRO DEL SANTO PADRE FRANCISCO CON LOS<br />

PERIODISTAS DURANTE EL VUELO HACIA BRASIL<br />

Lunes, 22 de julio de 2013<br />

Como es costumbre en cada viaje apostólico internacional, el Papa Francisco dialogó con los<br />

periodistas de diferentes medios de comunicación de todo el mundo, en la conferencia de<br />

prensa realizada durante su primer viaje apostólico desde Roma, Italia, a la ciudad de Río de<br />

Janeiro, Brasil, con ocasión de la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Río 2013 del<br />

23 al 28 de julio de 2013.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Este primer viaje es precisamente para encontrar a los jóvenes, pero para<br />

encontrarlos no aislados de su vida; quisiera encontrarlos precisamente en el tejido<br />

social, en sociedad. Porque cuando aislamos a los jóvenes, cometemos una injusticia;<br />

les quitamos su pertenencia. Los jóvenes tienen una pertenencia, una pertenencia a<br />

una familia, a una patria, a una cultura, a una fe… Tienen una pertenencia y nosotros<br />

no debemos aislarlos. Pero sobre todo, no aislarlos de toda la sociedad. Ellos,<br />

verdaderamente, son el futuro de un pueblo; esto es así. Pero no sólo ellos: ellos son el<br />

futuro porque tienen la fuerza, son jóvenes, irán <strong>adelante</strong>.<br />

Por eso digo que voy a encontrar a los jóvenes, pero en su tejido social, principalmente<br />

con los ancianos. Es verdad que la crisis mundial ha perjudicado a los jóvenes. La<br />

semana pasada leí el porcentaje de jóvenes sin trabajo. Piensen que corremos el<br />

riesgo de tener una generación que no ha tenido trabajo, y del trabajo viene la dignidad<br />

de la persona para ganarse el pan. Los jóvenes, en este momento, están en crisis. Un<br />

poco nosotros estamos habituados a esta cultura del descarte: con los ancianos se<br />

practica demasiado a menudo. Pero ahora también con este gran número de jóvenes<br />

sin trabajo, también ellos sufren la cultura del descarte. Hemos de acabar con esta<br />

costumbre de descartar. No. Cultura de la inclusión, cultura del encuentro, hacer un<br />

esfuerzo para incluir a todos en la sociedad. Éste es un poco el sentido que quiero dar<br />

a esta visita a los jóvenes, a los jóvenes en la sociedad.<br />

40


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

Conformar un equipo ideal.<br />

Todo entrenador de fútbol, todo cuerpo técnico, toda directiva de un club<br />

deportivo o toda federación de fútbol, tiene como firme objetivo conformar un equipo<br />

ideal, descubrir, formar, buscar y reunir jugadores los cuales puedan llegar a encajar en<br />

una filosofía futbolística.<br />

El primer punto de gran importancia y relacionándolo con estas primeras palabras del<br />

papa Francisco es elegir a esos jugadores “sin excluir a ninguno de ellos” “sin<br />

descartarlos” en este caso, como Iglesia, como pueblo de Dios, no podemos excluir ni<br />

descartar a nadie: ni a los mayores y ancianos; y menos, a los jóvenes. El equipo de<br />

Jesús, la Iglesia necesita de todos sus jugadores porque para este entrenador, para Él,<br />

todos somos buenos, todos somos indispensables y necesarios en su misión de<br />

anunciar el mensaje del Evangelio, su Evangelio.<br />

Él nos llama y nos convoca a todos, para que todos juguemos y demos la cara por su<br />

equipo, son necesarios jugadores “viejos” con experiencia que puedan marcar las<br />

pautas en un partido, que tienen el carácter, la sabiduría, la visión y manejo de su<br />

equipo, como también son importantes los jugadores jóvenes, llenos de valentía, de<br />

fuerzas, llenos de energía, con ganas y deseos de ir <strong>siempre</strong> al frente, de ir en busca<br />

de un resultado positivo y salen a ganar; pero a veces, les falta la experiencia para<br />

concretar y definir.<br />

Como ha dicho el Papa: “Hemos de acabar con esta costumbre de descartar”. Si<br />

como Iglesia, si como cristianos, hijos de Dios descartamos a los ancianos podemos<br />

estar descartando a aquellos que con su sabiduría pueden guiar y dirigir en la Iglesia,<br />

en las familias y en todo tipo de enseñanza. Y si como Iglesia, como fieles,<br />

comunidades y grupos juveniles excluimos a los jóvenes, los dejamos fuera, estamos<br />

41


Jueguen Siempre Adelante<br />

negándole la oportunidad a los nuevos talentos que con su juventud llena de gozo y<br />

ganas de vivir, de experimentar, de ir <strong>siempre</strong> al frente, nos puedan resolver el partido.<br />

A lo largo de la historia de salvación, Dios no ha descartado ni a los ancianos, ni a los<br />

jóvenes; profetas, reyes, apóstoles, discípulos, todos fueron y somos convocados. Y<br />

aunque en un equipo de fútbol se pueda descartar y excluir a más de un jugador por las<br />

limitantes o preferencias que sean, no hagamos nosotros como Iglesia lo mismo, ese<br />

equipo, esa selección que descarta y excluye a esos jugadores, podría no alcanzar su<br />

mejor nivel y no obtener buenos resultados, pero en el equipo de Cristo no hay<br />

limitantes, no hay preferencias.<br />

“Que todos seamos protagonistas en esta historia de salvación, ancianos y jóvenes, en<br />

el entorno donde cada uno se desenvuelve cada día”<br />

“A todo aquel que le reciba Él le concede el privilegio de ser hijo de Dios”.<br />

Sustituciones.<br />

Pero también hay otro aspecto importante en las “tácticas de sustituciones”; que<br />

no es igual a descartar o excluir, que pueden ayudar y servir a un mejor desempeño en<br />

un equipo de fútbol. Está permitido durante un juego realizar algunas sustituciones que<br />

pueden ser entre tres y siete, dependiendo de la seriedad del encuentro. (Competición<br />

o amistosos) Cuando se dan estas sustituciones, es normal generalmente sustituir a los<br />

jugadores más cansados, <strong>siempre</strong> y cuando los suplentes sean adecuados para<br />

realizar el mismo rol o que la figura del equipo no se cambie por completo. Y de ser<br />

posible se evitan estas sustituciones, se puede reemplazar a uno o los atacantes que<br />

no logran definir o a los centrocampistas que por su labor han realizado un gran<br />

recorrido y normalmente se cansan más que los demás jugadores.<br />

42


Jueguen Siempre Adelante<br />

Si se está perdiendo, un goleador fresco puede ser efectivo, si se está ganando, un<br />

refuerzo en la media cancha o en la línea defensiva sería lo más idóneo; en el peor de<br />

los casos, se puede sustituir un jugador por una lesión, algo que se debe prever<br />

<strong>siempre</strong> y es indispensable el saber descifrar cuando se requiere de una sustitución<br />

táctica, o por cansancio o por lesión. Como también en qué momento es oportuno<br />

realizar un cambio, a pesar de que tal decisión no pueda ser del todo agradable para el<br />

jugador que sale del terreno de juego.<br />

(Fuente: Editor GFDL, v.o., Granfutbol.com, 2007.)<br />

En definitiva, la relación y reflexión de este apartado sobre las sustituciones es: como<br />

Iglesia, líderes y miembros de una comunidad o movimiento juvenil, es preciso saber<br />

cuándo se puede o es necesario realizar una sustitución para un mejor desempeño<br />

como equipo y alcanzar los resultados esperados en la evangelización. El mejor y más<br />

claro ejemplo lo mostró su santidad el papa Benedicto XVI al discernir movido por el<br />

Espíritu Santo, el momento oportuno para un cambio en este equipo de nuestra Iglesia.<br />

Los cambios en los movimientos pueden ser la apertura a nuevas propuestas y mejores<br />

resultados, cambios de líderes, de coordinadores, cambios de esquemas, de<br />

estructuras; pero sobre todo, dejemos sea Dios quien haga a través del encuentro con<br />

su hijo Jesucristo un verdadero cambio en nuestra vida, en nuestro corazón.<br />

“Cultura de la inclusión, cultura del encuentro, hacer un esfuerzo para incluir a<br />

todos en la sociedad. Éste es un poco el sentido que quiero dar a esta visita a los<br />

jóvenes, a los jóvenes en la sociedad”. Papa Francisco<br />

43


Jueguen Siempre Adelante<br />

CEREMONIA DE BIENVENIDA<br />

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Jardines del Palacio Guanabara de Río de Janeiro<br />

Lunes 22 de julio de 2013<br />

El Papa Francisco llegó a Rio de Janeiro el lunes 22 de julio a las 15:43 (hora local). Fue<br />

recibido por la presidenta de Brasil Dilma Rousseff, autoridades civiles y eclesiales. En el<br />

Palacio de Guanabara se celebró la ceremonia oficial de bienvenida.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

He aprendido que, para tener acceso al pueblo brasileño, hay que entrar por el<br />

portal de su inmenso corazón; permítanme, pues, que llame suavemente a esa puerta.<br />

Pido permiso para entrar y pasar esta semana con ustedes. No tengo oro ni plata, pero<br />

traigo conmigo lo más valioso que se me ha dado: Jesucristo. Vengo en su nombre<br />

para alimentar la llama de amor fraterno que arde en todo corazón; y deseo que llegue<br />

a todos y a cada uno mi saludo: «La paz de Cristo esté con ustedes».<br />

Como es sabido, el principal motivo de mi presencia en Brasil va más allá de sus<br />

fronteras. En efecto, he venido para la Jornada Mundial de la Juventud. Para<br />

encontrarme con jóvenes venidos de todas las partes del mundo, atraídos por los<br />

brazos abiertos de Cristo Redentor.<br />

Quieren encontrar un refugio en su abrazo, justo cerca de su corazón, volver a<br />

escuchar su llamada clara y potente: «Vayan y hagan discípulos a todas las naciones».<br />

Estos jóvenes provienen de diversos continentes, hablan idiomas diferentes,<br />

pertenecen a distintas culturas y, sin embargo, encuentran en Cristo las respuestas a<br />

sus más altas y comunes aspiraciones, y pueden saciar el hambre de una verdad clara<br />

y de un genuino amor que los una por encima de cualquier diferencia.<br />

44


Jueguen Siempre Adelante<br />

Cristo les ofrece espacio, sabiendo que no puede haber energía más poderosa que esa<br />

que brota del corazón de los jóvenes cuando son seducidos por la experiencia de la<br />

amistad con él. Cristo tiene confianza en los jóvenes y les confía el futuro de su propia<br />

misión: «Vayan y hagan discípulos»; vayan más allá de las fronteras de lo<br />

humanamente posible, y creen un mundo de hermanos y hermanas. Pero también los<br />

jóvenes tienen confianza en Cristo: no tienen miedo de arriesgar con él la única vida<br />

que tienen, porque saben que no serán defraudados.<br />

Al comenzar mi visita a Brasil, soy muy consciente de que, dirigiéndome a los jóvenes,<br />

hablo también a sus familias, sus comunidades eclesiales y nacionales de origen, a las<br />

sociedades en las que viven, a los hombres y mujeres de los que depende en gran<br />

medida el futuro de estas nuevas generaciones.<br />

Es común entre ustedes oír decir a los padres: «Los hijos son la pupila de nuestros<br />

ojos». ¡Qué hermosa es esta expresión de la sabiduría brasileña, que aplica a los<br />

jóvenes la imagen de la pupila de los ojos, la abertura por la que entra la luz en<br />

nosotros, regalándonos el milagro de la vista! ¿Qué sería de nosotros si no cuidáramos<br />

nuestros ojos? ¿Cómo podríamos avanzar? Mi esperanza es que, en esta semana,<br />

cada uno de nosotros se deje interpelar por esta pregunta provocadora.<br />

La juventud es el ventanal por el que entra el futuro en el mundo y, por tanto, nos<br />

impone grandes retos. Nuestra generación se mostrará a la altura de la promesa que<br />

hay en cada joven cuando sepa ofrecerle espacio; tutelar las condiciones materiales y<br />

espirituales para su pleno desarrollo; darle una base sólida sobre la que pueda<br />

construir su vida; garantizarle seguridad y educación para que llegue a ser lo que<br />

puede ser; transmitirle valores duraderos por los que valga la pena vivir; asegurarle un<br />

horizonte trascendente para su sed de auténtica felicidad y su creatividad en el bien;<br />

dejarle en herencia un mundo que corresponda a la medida de la vida humana;<br />

despertar en él las mejores potencialidades para ser protagonista de su propio porvenir,<br />

y corresponsable del destino de todos.<br />

45


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

Jesús llama a nuestra puerta.<br />

El papa Francisco llego a Brasil con una actitud de humildad, presentando sus<br />

manos vacías y llamando a la puerta del corazón de los brasileiros, “tal como Jesús<br />

llama a nuestra puerta, a tu puerta, a la mía”, un pueblo que lo acogió gozosamente,<br />

¿puedo yo hacer lo mismo con Jesús, con mi prójimo qué llama a la puerta? o ¿puedo<br />

yo tener la humildad para llamar a la puerta de Jesús reconociendo mi necesidad de<br />

Él? ¿Tengo yo la valentía como discípulo de Cristo para llamar a la puerta del corazón<br />

de mi prójimo y ofrecerle lo más valioso que tengo que es DIOS? También estoy<br />

llamado a ir y en su nombre llevar su amor, su mensaje de esperanza y su paz a todo<br />

aquel que la necesite y más, a los cercanos a mí.<br />

El papa llegó para reunirse con todos los jóvenes del mundo “atraídos por los brazos<br />

abiertos de Cristo”, esos brazos abiertos de Cristo también me han acogido a mí, pero<br />

también hoy sé que mis brazos son los que deben estar <strong>siempre</strong> abiertos y dispuestos<br />

a acoger a todos aquellos que lo requieran. Que así como he encontrado refugio en su<br />

abrazo y cerca de su corazón al escuchar su Palabra y nuevamente el llamado de “id y<br />

haced discípulos” también debo de darme para que en un abrazo puedan encontrar a<br />

ese Cristo que abraza y deja escuchar sus latidos con los cuales sigue llamando a sus<br />

discípulos.<br />

Estando en medio de millones de jóvenes venidos de muchas partes del mundo y con<br />

múltiples diferencias de cualquier tipo, llegué en algún momento a comprender algo<br />

para mi increíble: no importa de dónde somos o vinimos, ni las diferencias que el<br />

mundo nos presenta, si tenemos a Cristo como objetivo en común y si su Espíritu<br />

Santo nos mueve, nos dirige y nos conduce en nuestra vida. Comprender eso fue para<br />

mí algo que marcó mi vida y al ser testigo de ello, sé que ese mismo Espíritu también<br />

46


Jueguen Siempre Adelante<br />

es quien alimenta a todos esos corazones de los jóvenes que no asistieron o no<br />

pueden asistir a una JMJ.<br />

En Cristo encontramos <strong>siempre</strong> un espacio aunque el mundo nos lo niegue y nos quite<br />

el derecho a tenerlo, pero tener una amistad con Jesús es más importante, Él nos da<br />

un amor que supera todas nuestras diferencias y sigue teniendo la confianza en<br />

nosotros para que sigamos anunciando su Evangelio y en las palabras del Papa nos ha<br />

recordado que no existen las fronteras para hacerlo, que luchemos por unificar a los<br />

hermanos en la fe sin tener miedo a arriesgar incluso nuestra propia vida por Él, porque<br />

Él no nos defrauda.<br />

Ya Jesús nos lo ha dicho antes: “sean la luz del mundo”, una luz que ilumine, una luz<br />

que guía a los demás en medio de las tinieblas, estamos llamados a no descansar en<br />

la lucha constante por alcanzar una felicidad autentica y darle vida a nuestra<br />

creatividad en busca del bien, siendo protagonistas de nuestro propio presente y<br />

nuestro futuro.<br />

47


Jueguen Siempre Adelante<br />

VENERACIÓN DE LA IMAGEN DE LA VIRGEN EN LA SALA DE<br />

LOS 12 APÓSTOLES DEL SANTUARIO DE NUESTRA SEÑORA<br />

DE LA CONCEPCIÓN DE APARECIDA<br />

Miércoles 24 de julio de 2013<br />

Antes de celebrar la Santa Misa en el Santuario de Nuestra Señora de Aparecida en Brasil, el<br />

Papa Francisco veneró la imagen original de la Patrona de Brasil en la Capilla de los doce<br />

Apóstoles, ubicada dentro del Santuario.<br />

Madre Aparecida, tal como vos un día,<br />

así hoy me siento yo delante de ti y de mi Dios,<br />

que nos propone para la vida una misión cuyos contornos y límites desconocemos,<br />

cuyas exigencias apenas vislumbramos.<br />

Pero en nuestra fe de que para Dios nada es imposible, tú, Madre, no dudaste y yo<br />

tampoco puedo dudar.<br />

'He aquí la sierva del Señor, hágase en mí según tu palabra’,<br />

de igual manera Madre, como tú, yo abrazo mi misión,<br />

coloco mi vida en vuestras manos, para que vayamos tú, Madre y tu Hijo,<br />

a caminar juntos, creer juntos, luchar juntos, vencer como <strong>siempre</strong> juntos;<br />

caminantes, tú y tu Hijo.<br />

‘Mujer he aquí a tu hijo, hijo he aquí a tu Madre’.<br />

Madre Aparecida, un día llevaste a tu Hijo al templo para consagrarlo al Padre,<br />

para que fuese completamente disponible para la misión,<br />

llévame al mismo Padre, conságrame a Él con todo lo que soy<br />

y con todo lo que tengo, aquí estoy, envíame.<br />

Madre de Aparecida, pongo en vuestras manos,<br />

para que la eleves ante el Padre, a nuestra juventud,<br />

vuestra juventud, la Jornada Mundial de la Juventud,<br />

cuánta fuerza, cuánta vida, cuánto dinamismo que brota y explota<br />

y que puede estar al servicio de la vida de la humanidad.<br />

Padre, acoge y santifica a tu juventud.<br />

48


Jueguen Siempre Adelante<br />

Finalmente Madre, te pedimos permanecer aquí <strong>siempre</strong>,<br />

acogiendo a vuestros hijos y a vuestras hijas peregrinos,<br />

pero también ven con nosotros, estate <strong>siempre</strong> a nuestro lado y acompaña nuestra<br />

misión,<br />

a la familia grande de los devotos, principalmente cuanto más nos pesa la cruz<br />

sustenta nuestra esperanza y nuestra fe,<br />

sé fiel hasta la muerte y te daré la corona de la vida. Amén".<br />

Reflexión.<br />

Hágase en mí como tú lo has dicho.<br />

El papa Francisco hace lo que todo cristiano católico debe hacer en todo<br />

momento; ponerse delante de la presencia de la santísima virgen María, ponerse<br />

delante de la elegida por el Padre para ser la Madre de su Hijo amado encarnado por<br />

obra y gracia del Espíritu Santo. Confiarnos a la intercesión de nuestra Madre del cielo.<br />

Disponernos a la santa voluntad de Dios para con nosotros tal como ella lo hizo,<br />

totalmente entregados y abandonados en su amor, aunque no sepamos con claridad y<br />

certeza a dónde Dios nos quiere llevar o sin que comprendamos qué quiere Dios de<br />

nuestra vida en realidad, lo importante es decir si firmemente como ella lo hizo.<br />

No tengamos miedo, no debemos dudar y confiemos plenamente en la gracia de<br />

nuestro Dios, “hágase en mi como tú lo has dicho” que esas sean nuestras palabras,<br />

María es también nuestra madre, y como Madre su amor no nos abandona nunca a<br />

pesar de nuestra indiferencia, de nuestras debilidades, de nuestras apetencias y<br />

nuestras faltas; ella nos acoge y nos abraza con amor infinito <strong>siempre</strong>.<br />

Ella nos acompaña en nuestro caminar, en este peregrinar en la fe como hijos de Dios<br />

y como Iglesia de Cristo, ella <strong>siempre</strong> va con nosotros acompañando nuestros pasos,<br />

49


Ella nos acompaña en nuestro caminar, en este peregrinar en la fe como hijos de Dios<br />

y como Iglesia de Cristo, ella <strong>siempre</strong> va con nosotros acompañando nuestros pasos,<br />

pendiente de que no nos falte el vino, que hagamos lo que su Hijo nos pide, que<br />

guardemos en nuestro corazón cada experiencia junto a Él, que lo acompañemos<br />

también; hasta el final, tal como ella lo hizo al pie de la cruz y nos invita a vivir una vida<br />

nueva junto a Él.<br />

De igual forma, como lo ha hecho su santidad, pongámonos en las manos de nuestra<br />

madre del cielo la virgen María y confiados como hijos de ella entreguémosle nuestra<br />

juventud, nuestra fuerza, nuestra vida misma, y todo nuestro dinamismo para darle<br />

mayor vida a esta Iglesia de Cristo.<br />

50


Jueguen Siempre Adelante<br />

SANTA MISA EN LA BASÍLICA DEL SANTUARIO<br />

DE NUESTRA SEÑORA DE APARECIDA<br />

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Miércoles 24 de julio de 2013<br />

En el tercer día de su visita a Brasil, el Papa Francisco celebró una Misa en el Santuario de<br />

Nuestra Señora de Aparecida, donde asistieron obispos, cientos de sacerdotes y fieles, el Santo<br />

Padre recordó que en Aparecida, hace seis años, la Iglesia en América Latina y el Caribe<br />

trabajó sobre el discipulado y la misión.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Hoy he querido venir aquí para pedir a María, nuestra Madre, el éxito de la<br />

Jornada Mundial de la Juventud.<br />

La Iglesia, cuando busca a Cristo, llama <strong>siempre</strong> a la casa de la Madre y le pide:<br />

«Muéstranos a Jesús». De ella se aprende el verdadero discipulado. He aquí por qué la<br />

Iglesia va en misión siguiendo <strong>siempre</strong> la estela de María.<br />

Hoy, en vista de la Jornada Mundial de la Juventud que me ha traído a Brasil, también<br />

yo vengo a llamar a la puerta de la casa de María —que amó a Jesús y lo educó— para<br />

que nos ayude a todos nosotros, Pastores del Pueblo de Dios, padres y educadores, a<br />

transmitir a nuestros jóvenes los valores que los hagan artífices de una nación y de un<br />

mundo más justo, solidario y fraterno. Para ello, quisiera señalar tres sencillas<br />

actitudes: mantener la esperanza, dejarse sorprender por Dios y vivir con alegría.<br />

1. Mantener la esperanza.<br />

Cuántas dificultades hay en la vida de cada uno, en nuestra gente, nuestras<br />

comunidades. Pero, por más grandes que parezcan, Dios nunca deja que nos<br />

hundamos.<br />

51


Jueguen Siempre Adelante<br />

Ante el desaliento que podría haber en la vida, en quien trabaja en la evangelización o<br />

en aquellos que se esfuerzan por vivir la fe, quisiera decirles con fuerza: Tengan<br />

<strong>siempre</strong> en el corazón esta certeza: Dios camina a su lado, en ningún momento los<br />

abandona. Nunca perdamos la esperanza. Jamás la apaguemos en nuestro corazón.<br />

Dios es nuestra esperanza.<br />

Nuestros jóvenes, sienten la sugestión de tantos ídolos que se ponen en el lugar de<br />

Dios y parecen dar esperanza: el dinero, el éxito, el poder, el placer. Con frecuencia se<br />

abre camino en el corazón de muchos una sensación de soledad y vacío, y lleva a la<br />

búsqueda de compensaciones, de estos ídolos pasajeros.<br />

Queridos hermanos y hermanas, seamos luces de esperanza. Tengamos una visión<br />

positiva de la realidad. Demos aliento a la generosidad que caracteriza a los jóvenes,<br />

ayudémoslos a ser protagonistas de la construcción de un mundo mejor: son un motor<br />

poderoso para la Iglesia y para la sociedad. Ellos no sólo necesitan cosas.<br />

Necesitan sobre todo que se les propongan esos valores inmateriales que son el<br />

corazón espiritual de un pueblo, la memoria de un pueblo: espiritualidad, generosidad,<br />

solidaridad, perseverancia, fraternidad, alegría; son valores que encuentran sus raíces<br />

más profundas en la fe cristiana.<br />

2. La segunda actitud: dejarse sorprender por Dios. Quien es hombre, mujer de<br />

esperanza —la gran esperanza que nos da la fe— sabe que Dios actúa y nos<br />

sorprende también en medio de las dificultades.<br />

Dios nunca deja de sorprender, como con el vino nuevo del Evangelio que acabamos<br />

de escuchar. Dios guarda lo mejor para nosotros. Pero pide que nos dejemos<br />

sorprender por su amor, que acojamos sus sorpresas. Confiemos en Dios. Alejados de<br />

él, el vino de la alegría, el vino de la esperanza, se agota. Si nos acercamos a él, si<br />

52


Jueguen Siempre Adelante<br />

permanecemos con él, lo que parece agua fría, lo que es dificultad, lo que es pecado,<br />

se transforma en vino nuevo de amistad con él.<br />

3. La tercera actitud: vivir con alegría. Queridos amigos, si caminamos en la esperanza,<br />

dejándonos sorprender por el vino nuevo que nos ofrece Jesús, ya hay alegría en<br />

nuestro corazón y no podemos dejar de ser testigos de esta alegría. El cristiano es<br />

alegre, nunca triste. Dios nos acompaña. Tenemos una Madre que intercede <strong>siempre</strong><br />

por la vida de sus hijos, por nosotros.<br />

Jesús nos ha mostrado que el rostro de Dios es el de un Padre que nos ama. El<br />

pecado y la muerte han sido vencidos. El cristiano no puede ser pesimista. No tiene el<br />

aspecto de quien parece estar de luto perpetuo.<br />

Si estamos verdaderamente enamorados de Cristo y sentimos cuánto nos ama, nuestro<br />

corazón se «inflamará» de tanta alegría que contagiará a cuantos viven a nuestro<br />

alrededor. Como decía Benedicto XVI: «El discípulo sabe que sin Cristo no hay luz, no<br />

hay esperanza, no hay amor, no hay futuro» (Discurso Inaugural de la V Conferencia<br />

general del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, Aparecida, 13 de mayo 2007:<br />

Insegnamenti III/1 [2007], p. 861).<br />

Queridos amigos, hemos venido a llamar a la puerta de la casa de María. Ella nos ha<br />

abierto, nos ha hecho entrar y nos muestra a su Hijo. Ahora ella nos pide: «Hagan todo<br />

lo que él les diga» (Jn 2,5). Sí, Madre nuestra, nos comprometemos a hacer lo que<br />

Jesús nos diga. Y lo haremos con esperanza, confiados en las sorpresas de Dios y<br />

llenos de alegría. Que así sea.<br />

53


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

La virgen María nos enseña a ser verdaderos discípulos.<br />

La virgen María <strong>siempre</strong> fiel intercesora, ella es quien puede llevarnos hasta su<br />

Hijo, y “mostrarnos a Jesús”, acercarnos a Él para poder conocerle mejor, ella nos<br />

enseña a ser verdaderos discípulos de su Hijo y a vivir de lleno la misión<br />

evangelizadora de nuestra Iglesia. María puede enseñarnos tanto y podemos aprender<br />

mucho de ella, pero el papa Francisco ha tomado tres como él dice “actitudes sencillas”<br />

que sin duda son un buen referente a considerar.<br />

1. Mantener la esperanza<br />

Dios nunca nos deja solos, nunca nos abandona y <strong>siempre</strong> está a nuestro lado<br />

en todo momento, en las dificultades, en el desaliento, Él <strong>siempre</strong> va caminando con<br />

nosotros y avivando nuestra esperanza.<br />

A veces los momentos de soledad y vacío existencial nos hacen creer que cualquier<br />

cosa puede llenar ese espacio y apartamos a Dios del centro de nuestra vida,<br />

apartamos nuestra mirada de Él.<br />

Jesús nos llama “luz de este mundo” estamos llamados a ser esa luz de esperanza nos<br />

ha dicho el Papa, nos invita a ser positivos ante la realidad de la vida, generosos, a dar<br />

lo mejor de nosotros mismos, a ser protagonistas y constructores de una Iglesia joven y<br />

llena de vida.<br />

Nos invita a fundamentar las raíces de nuestros valores en una fe cristiana que madure<br />

en Cristo, teniéndolo a Él como roca firme y sostén de nuestros principios, de nuestra<br />

identidad y razón de ser.<br />

2. Dejarse sorprender por Dios.<br />

Cuando mantenemos nuestra esperanza puesta en Dios, sabemos que Él actúa<br />

en nuestra vida, que en cualquier momento puede sorprendernos a pesar de las<br />

dificultades Él <strong>siempre</strong> “guarda lo mejor para nosotros”, debemos saber esperar en Él,<br />

54


en la fidelidad de su amor, ―si ustedes permanecen unidos a mí, darán mucho fruto‖<br />

nos dice Jesús, si permanecemos unidos a Él, lo transforma y renueva todo, ―Él hace<br />

nuevas todas las cosas‖.<br />

3. Vivir con alegría.<br />

Nuestra esperanza puesta en Jesús que nos sorprende constantemente con su<br />

misericordia, nos lleva a vivir en completa alegría, ―alégrense en el Señor‖ y seamos<br />

testigos firmes de esa alegría, María intercede por nuestra vida y como cristianos no<br />

podemos ser pesimistas.<br />

Enamorémonos verdaderamente de Cristo, reconozcamos su amor y llenemos nuestro<br />

corazón de su alegría que contagie a todos, María nos lleva hasta Él, ―hagamos con<br />

ella, lo que Él nos diga‖ con esperanza, dejándonos sorprender cuando Él quiera y con<br />

mucha alegría en nuestra vida.<br />

55


Jueguen Siempre Adelante<br />

ORACIÓN QUE EL PAPA FRANCISCO PRONUNCIÓ AL FINAL DE LA<br />

MISA EN SANTUARIO DE APARECIDA<br />

Miércoles 24 de julio 2013<br />

Antes de culminar la Misa en el Santuario de Nuestra Señora de Aparecida, el Papa Francisco<br />

elevó una oración frente a la imagen mariana, Patrona de Brasil, para consagrar su<br />

pontificado a la protección de la Madre de Dios.<br />

“Oh María Santísima<br />

De los méritos de nuestro Señor Jesucristo en tu querida imagen de Aparecida,<br />

alcanza numerosos beneficios sobre todo a Brasil.<br />

Yo, aunque indigno de pertenecer al número de tus hijos e hijas, pero lleno de deseo<br />

de participar de los beneficios de tu misericordia, postrado a tus pies consagro mi<br />

entendimiento para que <strong>siempre</strong> pienses en el amor que mereces.<br />

Te consagro mi lengua para que <strong>siempre</strong> te alabe y propague tu devoción.<br />

Te consagro mi corazón para que, después de Dios, te ame sobre todas las cosas.<br />

Recíbeme, Oh Reina incomparable.<br />

Tú, que en Cristo crucificado eres nuestra Madre en el dichoso número de tus hijos e<br />

hijas,<br />

recíbeme bajo tu protección.<br />

Socórreme en todas mis necesidades espirituales y temporales, sobre todo en la hora<br />

de mi muerte. Bendíceme oh celestial cooperadora; y con tu poderosa intercesión,<br />

fortaléceme en mi flaqueza a fin de que te sirva fielmente en esta vida y después pueda<br />

alabarte, amarte y darte gracias en el cielo por toda la eternidad”.<br />

56


Jueguen Siempre Adelante<br />

VISITA AL HOSPITAL SAN FRANCISCO DE ASÍS DE LA<br />

PROVIDENCIA - V.O.T<br />

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Río de Janeiro<br />

Miércoles 24 de julio de 2013<br />

El Papa Francisco visitó el Hospital San Francisco de Asís de la Providencia en Río de<br />

Janeiro, donde se recuperan jóvenes adictos a las drogas.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

El joven Francisco abandona las riquezas y comodidades del mundo para<br />

hacerse pobre entre los pobres; se da cuenta de que la verdadera riqueza y lo que da<br />

la auténtica alegría no son las cosas, el tener, los ídolos del mundo, sino el seguir a<br />

Cristo y servir a los demás; pero quizás es menos conocido el momento en que todo<br />

esto se hizo concreto en su vida: fue cuando abrazó a un leproso.<br />

Aquel hermano que sufría, marginado, era «mediador de la luz para san Francisco de<br />

Asís» (cf. Carta enc. Lumen fidei, 57), porque en cada hermano y hermana en dificultad<br />

abrazamos la carne de Cristo que sufre. Hoy, en este lugar de lucha contra la<br />

dependencia química, quisiera abrazar a cada uno y cada una de ustedes que son la<br />

carne de Cristo, y pedir que Dios colme de sentido y firme esperanza su camino, y<br />

también el mío.<br />

Abrazar. Todos hemos de aprender a abrazar a los necesitados, como San Francisco.<br />

Hay muchas situaciones en Brasil, en el mundo, que necesitan atención, cuidado,<br />

amor, como la lucha contra la dependencia química. Sin embargo, lo que prevalece con<br />

frecuencia en nuestra sociedad es el egoísmo.<br />

Es preciso afrontar los problemas que están a la base de su uso, promoviendo una<br />

mayor justicia, educando a los jóvenes en los valores que construyen la vida común,<br />

57


Jueguen Siempre Adelante<br />

acompañando a los necesitados y dando esperanza en el futuro. Todos tenemos<br />

necesidad de mirar al otro con los ojos de amor de Cristo, aprender a abrazar a<br />

aquellos que están en necesidad, para expresar cercanía, afecto, amor.<br />

Pero abrazar no es suficiente. Tendamos la mano a quien se encuentra en dificultad, al<br />

que ha caído en el abismo de la dependencia, tal vez sin saber cómo, y decirle:<br />

«Puedes levantarte, puedes remontar; te costará, pero puedes conseguirlo si de verdad<br />

lo quieres».<br />

Queridos amigos, yo diría a cada uno de ustedes, pero especialmente a tantos otros<br />

que no han tenido el valor de emprender el mismo camino: «Tú eres el protagonista de<br />

la subida, ésta es la condición indispensable. Encontrarás la mano tendida de quien te<br />

quiere ayudar, pero nadie puede subir por ti». Pero nunca están solos. La Iglesia y<br />

muchas personas están con ustedes.<br />

Miren con confianza hacia delante, su travesía es larga y fatigosa, pero miren <strong>adelante</strong>,<br />

hay «un futuro cierto, que se sitúa en una perspectiva diversa de las propuestas<br />

ilusorias de los ídolos del mundo, pero que da un impulso y una fuerza nueva para vivir<br />

cada día» (Carta enc. Lumen fidei, 57). Quisiera repetirles a todos ustedes: No se dejen<br />

robar la esperanza. Pero también quiero decir: No robemos la esperanza, más aún,<br />

hagámonos todos portadores de esperanza.<br />

Su servicio es valioso, háganlo <strong>siempre</strong> con amor; es un servicio que se hace a Cristo,<br />

presente en el prójimo: «Cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis<br />

hermanos, lo hicieron conmigo» (Mt 25,40), nos dice Jesús.<br />

Y quisiera repetir a todos los que luchan contra la dependencia química, a los familiares<br />

que tienen un cometido no <strong>siempre</strong> fácil: la Iglesia no es ajena a sus fatigas, sino que<br />

los acompaña con afecto.<br />

58


Jueguen Siempre Adelante<br />

El Señor está cerca de ustedes y los toma de la mano. Vuelvan los ojos a él en los<br />

momentos más duros y les dará consuelo y esperanza. Y confíen también en el amor<br />

materno de María, su Madre.<br />

Donde hay una cruz que llevar, allí está <strong>siempre</strong> ella, nuestra Madre, a nuestro lado.<br />

Los dejo en sus manos.<br />

Reflexión.<br />

Seguir jugando con entrega y determinación.<br />

Nuestra “verdadera riqueza y autentica alegría debemos encontrarla siguiendo a<br />

Cristo y sirviendo a los demás”, todos nuestros hermanos son la carne de Cristo y<br />

debemos ayudarles a encontrar en Él, el sentido y la esperanza para sus vidas, y para<br />

la nuestra.<br />

Aprendamos a abrazar con amor al necesitado y dejemos de lado el egoísmo, seamos<br />

justos con los demás, miremos con los ojos de amor de Jesús y brindándole nuestra<br />

mano para levantarse en las dificultades, recordémosle que “todo lo puede en Cristo<br />

quien nos fortalece”.<br />

A veces los partidos se comienzan perdiendo y mas difícil aun desde el principio, el<br />

primer minuto, como “balde de agua fría” el equipo no se ha repuesto del primer gol<br />

cuando cae el segundo y en el peor de los casos hasta un tercero, a veces con un<br />

hombre menos a causa de una expulsión, todo parece muy difícil y perdido; aun así,<br />

sino se bajan los brazos, si no se pierde la calma, el control, y si se sigue jugando con<br />

entrega y determinación, con pasión, es posible la “remontada”, se puede ganar<br />

cuando todo decía que no.<br />

59


Jueguen Siempre Adelante<br />

VISITA A LA COMUNIDAD DE VARGINHA (MANGUINHOS)<br />

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Río de Janeiro<br />

Jueves 25 de julio de 2013<br />

El Papa Francisco visitó la comunidad de Varginha, una favela pacificada de Rio de Janeiro,<br />

donde vivió momentos de gran cercanía con los fieles. Recorrió a pie algunas calles e incluso<br />

ingresó por unos minutos a una vivienda. En el sencillo acto, escuchó el testimonio de un<br />

matrimonio y ofreció un mensaje de esperanza a los más pobres.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Queridos hermanos y hermanas<br />

Es bello estar aquí con ustedes. Ya desde el principio, al programar la visita a Brasil, mi<br />

deseo era poder visitar todos los barrios de esta nación. Habría querido llamar a cada<br />

puerta, decir «buenos días», pedir un vaso de agua fresca, tomar un «cafezinho»,<br />

hablar como amigo de casa, escuchar el corazón de cada uno, de los padres, los hijos,<br />

los abuelos... Pero Brasil, ¡es tan grande! Y no se puede llamar a todas las puertas.<br />

¡Qué hermoso es ser recibidos con amor, con generosidad, con alegría!<br />

Muchas gracias a todos por la calurosa bienvenida.<br />

1. Desde el primer momento en que he tocado el suelo brasileño, y también aquí, entre<br />

vosotros, me siento acogido. Y es importante saber acoger.<br />

cuando somos generosos en acoger a una persona y compartimos algo con ella —algo<br />

de comer, un lugar en nuestra casa, nuestro tiempo— no nos hacemos más pobres,<br />

sino que nos enriquecemos.<br />

Y lo hacen con amor, mostrando que la verdadera riqueza no está en las cosas, sino en<br />

el corazón.<br />

60


Jueguen Siempre Adelante<br />

Me gustaría hacer un llamamiento a quienes tienen más recursos, a los poderes<br />

públicos y a todos los hombres de buena voluntad comprometidos en la justicia social:<br />

que no se cansen de trabajar por un mundo más justo y más solidario. Nadie puede<br />

permanecer indiferente ante las desigualdades que aún existen en el mundo. Que cada<br />

uno, según sus posibilidades y responsabilidades, ofrezca su contribución para poner<br />

fin a tantas injusticias sociales. No es la cultura del egoísmo, del individualismo, que<br />

muchas veces regula nuestra sociedad, la que construye y lleva a un mundo más<br />

habitable, sino la cultura de la solidaridad; no ver en el otro un competidor o un número,<br />

sino un hermano.<br />

Cuando se ignoran los pilares fundamentales que sostienen una nación, sus bienes<br />

inmateriales: la vida, que es un don de Dios, un valor que <strong>siempre</strong> se ha de tutelar y<br />

promover; la familia, fundamento de la convivencia y remedio contra la desintegración<br />

social; la educación integral, que no se reduce a una simple transmisión de información<br />

con el objetivo de producir ganancias; la salud, que debe buscar el bienestar integral de<br />

la persona, incluyendo la dimensión espiritual, esencial para el equilibrio humano y una<br />

sana convivencia; la seguridad, en la convicción de que la violencia sólo se puede<br />

vencer partiendo del cambio del corazón humano.<br />

Queridos jóvenes, ustedes tienen una especial sensibilidad ante la injusticia, pero a<br />

menudo se sienten defraudados por los casos de corrupción, por las personas que, en<br />

lugar de buscar el bien común, persiguen su propio interés. A ustedes y a todos les<br />

repito: nunca se desanimen, no pierdan la confianza, no dejen que la esperanza se<br />

apague. La realidad puede cambiar, el hombre puede cambiar. Sean los primeros en<br />

tratar de hacer el bien, de no habituarse al mal, sino a vencerlo.<br />

La Iglesia los acompaña ofreciéndoles el don precioso de la fe, de Jesucristo, que ha<br />

«venido para que tengan vida y la tengan abundante» (Jn 10,10).<br />

Hoy digo a todos ustedes: No están solos, la Iglesia está con ustedes, el Papa está con<br />

ustedes. Llevo a cada uno de ustedes en mi corazón y hago mías las intenciones que<br />

61


Jueguen Siempre Adelante<br />

albergan en lo más íntimo: la gratitud por las alegrías, las peticiones de ayuda en las<br />

dificultades, el deseo de consuelo en los momentos de dolor y sufrimiento. Todo lo<br />

encomiendo a la intercesión de Nuestra Señora de Aparecida, la Madre de todos los<br />

pobres del Brasil, y con gran afecto les imparto mi Bendición.<br />

Reflexión.<br />

Luchar cada día por ser mejores y elegir hacer el bien.<br />

Muchas veces la sociedad, los sistemas, la gente misma nos excluye, nos<br />

margina, nos hace y nos deja a un lado; pero Dios, el Todopoderoso viene a nuestra<br />

casa, “Jesús llama a la puerta” y al igual que como lo hizo con Zaqueo nos visita, se<br />

sienta a nuestra mesa, comparte con nosotros y nos trae un Mensaje de esperanza y<br />

nos da la Salvación.<br />

De esa misma forma lo hace el santo padre Francisco como representante de Cristo,<br />

“es bueno que nos sintamos acogidos por Dios pero también es necesario que<br />

aprendamos a acoger a los demás”. La generosidad, el compartir lo que es nuestro con<br />

los otros debe ser parte de nuestro estilo de vida, así se medirá la riqueza de nuestro<br />

corazón.<br />

No podemos cansarnos de luchar por la verdadera justicia, debemos ser más solidarios<br />

y menos indiferentes ante las necesidades de los demás, “no veamos en ellos a un<br />

rival” dejemos a un lado el egoísmo y el individualismo, “todos somos un cuerpo, el<br />

cuerpo de Cristo”.<br />

“El equilibrio de las personas se conforma por un bienestar integral: salud,<br />

espiritualidad, sana convivencia, seguridad y un verdadero cambio en el corazón”.<br />

62


Es fácil desanimarse, pero no hay que desanimarse, es normal perder la confianza<br />

pero no hay que perderla y dejar de confiar, es un riesgo que la esperanza se apague<br />

pero debemos asumirlo y velar por mantenerla <strong>siempre</strong> encendida.<br />

En nuestras manos esta luchar cada día por ser mejores, por ser ―artesanos de la paz‖,<br />

elegir hacer el bien ante una corriente de maldad, por ser diferentes.<br />

―No estamos solos en esta carrera y el premio de la salvación nos espera‖, sigamos<br />

jugando cada minuto entregándolo todo, el partido no termina hasta el pitazo final, aun<br />

se puede cambiar el resultado y ser los vencedores con Cristo Jesús.<br />

63


Jueguen Siempre Adelante<br />

DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO EN ENCUENTRO CON<br />

JÓVENES ARGENTINOS EN CATEDRAL DE SAN SEBASTÍAN<br />

EN RÍO DE JANEIRO<br />

Jueves 25 de julio 2013<br />

Este es el discurso que improvisó el Papa Francisco en la Catedral de San Sebastián, frente a<br />

decenas de miles de jóvenes argentinos que llegaron a Río de Janeiro por la JMJ Río 2013.<br />

Esta reunión fue organizada por pedido personal del Santo Padre.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Gracias, gracias, por estar hoy aquí, por haber venido. Gracias a los que están<br />

adentro<br />

y muchas gracias a los que están afuera.<br />

Gracias por el gesto de acercarse, gracias por haber venido a la Jornada de la<br />

Juventud.<br />

Quisiera decir una cosa. ¿Qué es lo que espero como consecuencia de la Jornada de<br />

la Juventud? Espero lío. Que acá dentro va a haber lío va a haber, que acá en Río va a<br />

haber lío va a haber, pero quiero lío en las diócesis, quiero que se salga afuera, quiero<br />

que la Iglesia salga a la calle, quiero que nos defendamos de todo lo que sea<br />

mundanidad, de lo que sea instalación, de lo que sea comodidad, de lo que sea<br />

clericalismo, de lo que sea estar encerrados en nosotros mismos, las parroquias, los<br />

colegios, las instituciones son para salir, sino salen se convierten en una ONG ¡y la<br />

Iglesia no puede ser una ONG!<br />

Estamos presenciando una filosofía y una praxis de exclusión de los dos polos de la<br />

vida que son las promesas de los pueblos.<br />

Exclusión de los ancianos, por supuesto, porque uno podría pensar que podría haber<br />

una especie de eutanasia escondida es decir, no se cuida a los ancianos pero también<br />

64


Jueguen Siempre Adelante<br />

está una eutanasia cultural. No se los deja hablar, no se los deja actuar. Exclusión de<br />

los jóvenes, el porcentaje que hay de jóvenes sin trabajo y sin empleo es muy alto y es<br />

una generación que no tiene la experiencia de la dignidad ganada por el trabajo, o sea<br />

esta civilización nos ha llevado a excluir dos puntas que son el futuro nuestro.<br />

Entonces los jóvenes tienen que salir, tienen que hacerse valer, los jóvenes tienen que<br />

salir a luchar por los valores, a luchar por esos valores, y los viejos abran la boca, los<br />

ancianos abran la boca y enséñennos, transmítannos la sabiduría de los pueblos.<br />

En el pueblo argentino, yo se los pido de corazón a los ancianos, no claudiquen de ser<br />

la reserva cultural de nuestro pueblo que transmite la justicia, que transmite la historia,<br />

que trasmite los valores, que transmite la memoria de pueblo. Y ustedes, por favor, no<br />

se metan contra los viejos, déjenlos hablar, escúchenlos y lleven <strong>adelante</strong>. Pero sepan,<br />

sepan que en este momento ustedes los jóvenes y los ancianos están condenados al<br />

mismo destino: exclusión. No se dejen excluir, ¿está claro? Por eso creo que tienen<br />

que trabajar.<br />

Y la fe en Jesucristo no es broma, es algo muy serio. Es un escándalo que Dios haya<br />

venido a hacerse uno de nosotros, es un escándalo, y que haya muerto en la cruz, es<br />

un escándalo, el escándalo de la cruz. La cruz sigue siendo escándalo pero es el único<br />

camino seguro, el de la cruz, el de Jesús, la encarnación de Jesús.<br />

Por favor, ¡no licúen la fe en Jesucristo!, hay licuado de naranja, hay licuado de<br />

manzana, hay licuado de banana pero, por favor, ¡no tomen licuado de fe!<br />

¡La fe es entera, no se licúa, es la fe en Jesús!, es la fe en el hijo de Dios hecho<br />

hombre que me amó y murió por mí.<br />

65


Jueguen Siempre Adelante<br />

Entonces hagan lío, cuiden los extremos del pueblo que son los ancianos y los jóvenes,<br />

no se dejen excluir y que no excluyan a los ancianos, segundo, y no licúen la fe en<br />

Jesucristo.<br />

Las bienaventuranzas. ¿Qué tenemos que hacer padre?, Mira lee las bienaventuranzas<br />

que te van a venir bien y si querés saber qué cosa práctica tienes que hacer, lee Mateo<br />

25 que es el protocolo con el cual nos van juzgar. Con esas dos cosas tienen el<br />

programa de acción: las bienaventuranzas y Mateo 25 no necesitan leer otra cosa, se<br />

los pido de corazón.<br />

Bueno, les agradezco ya esta cercanía. Me da pena que estén enjaulados. Pero les<br />

digo una cosa, yo por momentos siento qué feo que es estar enjaulado, se los confieso<br />

de corazón.<br />

Pero no se olviden: hagan lío, cuiden los dos extremos de la vida, los dos extremos de<br />

la historia de los pueblos que son los ancianos y los jóvenes, y no licúen la fe".<br />

Reflexión.<br />

“Vamos, juntos hagamos lio”.<br />

“Dios <strong>siempre</strong> nos agradece nuestra confianza puesta en Él, por buscarle, por ir<br />

hasta Él, por caminar en su presencia y en su compañía, por estar dentro de su<br />

misericordia”.<br />

Estas no son palabras sólo para un grupo de personas, para una nación o un pueblo;<br />

pero si, para todos los hijos de Dios “a todos aquellos que le reciben” especialmente a<br />

ustedes jóvenes constructores de la Iglesia de Cristo.<br />

“Vamos, juntos hagamos lio” hay que dejar la comodidad nos ha dicho el Santo Padre,<br />

hay que defendernos de la mundanidad, hay que abandonar las cuatro paredes y salir<br />

66


Jueguen Siempre Adelante<br />

a la calle, hay que salir de nosotros mismos, ponernos al servicio activo de la Iglesia,<br />

poner a producir nuestros talentos, no enterrarlos, procurar dar frutos buenos y frutos<br />

en abundancia. Pero sin ser insensatos y ponernos a guardar todo “para disfrutar los<br />

logros” “hay que perseverar hasta el final”.<br />

Nosotros los jóvenes debemos hablar, debemos actuar, pero sin excluir a nadie,<br />

“tenemos que salir, hacernos valer y luchar por los valores. También debemos dejar<br />

hablar a los mayores, saber escucharlos y tenerlos como ejemplo a seguir”.<br />

“La fe en Jesucristo no es broma, es algo muy serio”. “La cruz sigue siendo escándalo<br />

pero es el único camino seguro, el de la cruz, el de Jesús, la encarnación de Jesús”.<br />

“¡no licúen la fe en Jesucristo!”. Esas palabras siguen haciendo eco en mi interior, en<br />

mi vida, en mi lucha diaria por llevar mi cruz de cada día, la cual acepto con amor y<br />

también te invito a abrazarla, “abrazar con amor la cruz que nos corresponde llevar es<br />

amar a Jesús”.<br />

Luchemos por ser parte de los bienaventurados y recordemos: “todo lo que hagamos a<br />

uno de los pequeños, también se lo hacemos a Cristo”.<br />

¿Estás haciendo lio…?<br />

“Hagamos lio…” “…pero también hay que ordenar el lio”<br />

67


Jueguen Siempre Adelante<br />

FIESTA DE ACOGIDA DE LOS JÓVENES<br />

SALUDO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Paseo marítimo de Copacabana, Río de Janeiro<br />

Jueves 25 de julio de 2013<br />

Más de un millón de personas llegaron a Copacabana. El Papa Francisco exhortó a los jóvenes<br />

de todo el mundo a acoger a Cristo en sus vidas y alimentarse de su fe.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Queridos jóvenes<br />

Veo en ustedes la belleza del rostro joven de Cristo, y mi corazón se llena de alegría.<br />

Recuerdo la primera Jornada Mundial de la Juventud a nivel internacional. Se celebró<br />

en 1987 en Argentina, en mi ciudad de Buenos Aires. Guardo vivas en la memoria<br />

estas palabras de Juan Pablo II a los jóvenes: "¡Tengo tanta esperanza en vosotros!<br />

Espero sobre todo que renovéis vuestra fidelidad a Jesucristo y a su cruz redentora"<br />

(Discurso a los Jóvenes, 11 de abril 1987: insegnamenti, X/1 [1987], p. 1261).<br />

Este año, la Jornada vuelve, por segunda vez, a América Latina. Y ustedes, jóvenes,<br />

han respondido en gran número a la invitación de Benedicto XVI, que les ha convocado<br />

para celebrarla. Se lo agradecemos de todo corazón. Mi mirada se extiende sobre esta<br />

gran muchedumbre: ¡Son ustedes tantos! Llegados de todos los continentes. Distantes,<br />

a veces no sólo geográficamente, sino también desde el punto de vista existencial,<br />

cultural, social, humano. Pero hoy están aquí, o más bien, hoy estamos aquí, juntos,<br />

unidos para compartir la fe y la alegría del encuentro con Cristo, de ser sus discípulos.<br />

Esta semana, Río se convierte en el centro de la Iglesia, en su corazón vivo y joven,<br />

porque ustedes han respondido con generosidad y entusiasmo a la invitación que<br />

Jesús les ha hecho a estar con él, a ser sus amigos.<br />

68


Jueguen Siempre Adelante<br />

El tren de esta Jornada Mundial de la Juventud ha venido de lejos y ha atravesado la<br />

Nación brasileña siguiendo las etapas del proyecto "Bota fe - Pon fe". Hoy ha llegado a<br />

Río de Janeiro. Desde el Corcovado, el Cristo Redentor nos abraza y nos bendice.<br />

Viendo este mar, la playa y a todos ustedes, me viene a la mente el momento en que<br />

Jesús llamó a sus primeros discípulos a orillas del lago de Tiberíades. Hoy Jesús nos<br />

sigue preguntando: ¿Quieres ser mi discípulo? ¿Quieres ser mi amigo? ¿Quieres ser<br />

testigo del Evangelio?<br />

En el corazón del Año de la fe, estas preguntas nos invitan a renovar nuestro<br />

compromiso cristiano. Sus familias y comunidades locales les han transmitido el gran<br />

don de la fe.<br />

Cristo ha crecido en ustedes. Hoy he venido a confirmarles en esta fe, la fe en Cristo<br />

vivo que habita en ustedes, pero he venido también para ser confirmado por el<br />

entusiasmo de su fe.<br />

Les saludo a todos con gran afecto. A ustedes aquí presentes, venidos de los cinco<br />

continentes y, a través de ustedes, a todos los jóvenes del mundo, en particular a<br />

aquellos que no han podido venir a Río de Janeiro, pero que nos siguen por medio de<br />

la radio, la televisión e internet, a todos les digo: ¡Bienvenidos a esta gran fiesta de la<br />

fe!<br />

En diversas partes del mundo, muchos jóvenes están reunidos ahora para vivir juntos<br />

este momento: sintámonos unidos unos a otros en la alegría, en la amistad, en la fe. Y<br />

tengan la certeza de que mi corazón de Pastor les abraza a todos con afecto universal.<br />

¡El Cristo Redentor, desde la cima del monte Corvado, les acoge en esta bellísima<br />

ciudad de Río!<br />

Gracias a los Hermanos Obispos, a los sacerdotes, a los seminaristas, a las personas<br />

consagradas y a los fieles laicos que acompañan a los jóvenes, desde diversas partes<br />

de nuestro planeta, en su peregrinación hacia Jesús. A todos y a cada uno, mi abrazo<br />

afectuoso en el Señor.<br />

69


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

“Unidos para compartir la fe y la alegría”.<br />

“Que todos los corazones se llenen de alegría cuando vean en nosotros la<br />

belleza del rostro joven de Jesús”. “Sigamos siendo la esperanza viva de su Iglesia”.<br />

Podemos ser de cualquier rincón del mundo, separados, divididos por fronteras y largas<br />

distancias, de lugares diferentes donde quizá nunca ni soñemos llegar un día; es cierto.<br />

El papa Francisco dijo unas palabras muy acertadas; yo no estuve ahí personalmente<br />

en ese momento, pero hoy que las conozco me llenan de mucho gozo:<br />

“…hoy estamos aquí, juntos, unidos para compartir la fe y la alegría del<br />

encuentro con Cristo, de ser sus discípulos”.<br />

Porque sin saberlo, sin haber escuchado estas palabras, en algún momento durante la<br />

jornada, pude darme cuenta de ello y ser testigo de su inmenso significado. “Mi<br />

experiencia más grande fue exactamente esa, estar ahí, en un país lejano donde nunca<br />

soñé estar, en medio de millones de jóvenes de todas partes del mundo donde nunca<br />

podre llegar, todos de diferentes culturas, con idiomas distintos, con dificultades para<br />

entendernos pero no para comunicarnos; pero una sola fe, un mismo sentir, un sólo<br />

objetivo, una misma alegría, todos, millones, movidos a ese encuentro con Dios por<br />

medio de Cristo a través de una sola fuerza, la gracia del Espíritu Santo”.<br />

Sin duda darme cuenta de ello es lo que más ha marcado mi vida en la fe, pero más<br />

me llenaba de alegría el saber que muchos millones más en todo el mundo también sin<br />

estar presentes físicamente, estaban unidos en ese encuentro con Jesús y en ese<br />

mismo Espíritu, todos como un sólo cuerpo, por eso a quienes sueñan con presenciar<br />

una JMJ les digo que no pierdan la esperanza, yo espere once años, y si no logran<br />

hacerlo sepan que no necesitan ir a un país lejano a darse cuenta de eso. Lo que<br />

quiero decir es: “somos la Iglesia de Cristo y su Santo Espíritu es quien nos mueve, nos<br />

70


Jueguen Siempre Adelante<br />

conduce y nos guía en un mismo sentir como sus discípulos, sin importar las<br />

distancias.<br />

Respondamos generosamente y con entusiasmo cada día a ese llamado, Jesús quiere<br />

que estemos con Él y seamos sus amigos, por eso ya no nos llama “siervos sino<br />

amigos”. Pongamos toda nuestra fe en Él, toda nuestra confianza, Él espera para<br />

abrazarnos y bendecirnos <strong>siempre</strong>.<br />

“Hoy Jesús nos sigue preguntando: ¿Quieres ser mi discípulo? ¿Quieres ser mi amigo?<br />

¿Quieres ser testigo del Evangelio?” Estas preguntas nos invitan a renovar nuestro<br />

compromiso cristiano.<br />

“Cristo ha crecido y sigue creciendo en nosotros, esa es la fe que profesamos en un<br />

Cristo vivo que habita en nosotros, en nuestros corazones, en nuestra y su Iglesia”.<br />

71


Jueguen Siempre Adelante<br />

FIESTA DE ACOGIDA DE LOS JÓVENES<br />

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Paseo marítimo de Copacabana, Río de Janeiro<br />

Jueves 25 de julio de 2013<br />

La fiesta de la juventud católica comenzó oficialmente con un desborde de fe y alegría. Se<br />

calcula que un millón de peregrinos llegaron hasta la playa de Copacabana.<br />

Queridos jóvenes:<br />

"Qué bien se está aquí", exclamó Pedro, después de haber visto al Señor Jesús<br />

transfigurado, revestido de gloria. ¿Podríamos repetir también nosotros esas palabras?<br />

Pienso que sí, porque para todos nosotros, hoy, es bueno estar aquí reunidos en torno<br />

a Jesús. Él es quien nos acoge y se hace presente en medio de nosotros, aquí en Río.<br />

Pero en el Evangelio también hemos escuchado las palabras del Padre: "Éste es mi<br />

Hijo, el escogido, escuchadle" (Lc 9,35).<br />

Por tanto, si por una parte es Jesús el que nos acoge; por otra, también nosotros<br />

hemos de acogerlo, ponernos a la escucha de su palabra, porque precisamente<br />

acogiendo a Jesucristo, Palabra encarnada, es como el Espíritu nos transforma, ilumina<br />

el camino del futuro, y hace crecer en nosotros las alas de la esperanza para caminar<br />

con alegría (cf. Carta enc. Lumen fidei, 7).<br />

Pero, ¿qué podemos hacer? "Bota fé – Pon fe". La cruz de la Jornada Mundial de la<br />

Juventud ha gritado estas palabras a lo largo de su peregrinación por Brasil. ¿Qué<br />

significa "Pon fe"? Cuando se prepara un buen plato y ves que falta la sal, "pones" sal;<br />

si falta el aceite, "pones" aceite… "Poner", es decir, añadir, echar.<br />

Lo mismo pasa en nuestra vida, queridos jóvenes: si queremos que tenga realmente<br />

sentido y sea plena, como ustedes desean y merecen, les digo a cada uno y a cada<br />

una de ustedes: "pon fe" y tu vida tendrá un sabor nuevo, tendrá una brújula que te<br />

72


Jueguen Siempre Adelante<br />

indicará la dirección; "pon esperanza" y cada día de tu vida estará iluminado y tu<br />

horizonte no será ya oscuro, sino luminoso; "pon amor" y tu existencia será como una<br />

casa construida sobre la roca, tu camino será gozoso, porque encontrarás tantos<br />

amigos que caminan contigo. ¡Pon fe, pon esperanza, pon amor!<br />

Pero, ¿quién puede darnos esto? En el Evangelio hemos escuchado la respuesta:<br />

Cristo.<br />

"Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle". Jesús es quien nos trae a Dios y nos lleva a<br />

Dios, con él toda nuestra vida se transforma, se renueva y nosotros podemos ver la<br />

realidad con ojos nuevos, desde el punto de vista de Jesús, con sus mismos ojos (cf.<br />

Carta enc. Lumen fidei, 18).<br />

Por eso hoy les digo con fuerza: "Pon a Cristo" en tu vida y encontrarás un amigo del<br />

que fiarte <strong>siempre</strong>; "pon a Cristo" y verás crecer las alas de la esperanza para recorrer<br />

con alegría el camino del futuro; "pon a Cristo" y tu vida estará llena de su amor, será<br />

una vida fecunda.<br />

Hoy me gustaría que todos nos preguntásemos sinceramente: ¿en quién ponemos<br />

nuestra fe? ¿En nosotros mismos, en las cosas, o en Jesús? Tenemos la tentación de<br />

ponernos en el centro, de creer que nosotros solos construimos nuestra vida, o que es<br />

el tener, el dinero, el poder lo que da la felicidad. Pero no es así.<br />

El tener, el dinero, el poder pueden ofrecer un momento de embriaguez, la ilusión de<br />

ser felices, pero, al final, nos dominan y nos llevan a querer tener cada vez más, a no<br />

estar nunca satisfechos, y terminamos empachados, pero no alimentados y es muy<br />

triste ver una juventud empachada, pero débil. La juventud tiene que ser fuerte,<br />

alimentarse de su fe y no empacharse de otras cosas”.<br />

¡"Pon a Cristo" en tu vida, pon tu confianza en él y no quedarás defraudado! Miren,<br />

queridos amigos, la fe lleva a cabo en nuestra vida una revolución que podríamos<br />

73


Jueguen Siempre Adelante<br />

llamar copernicana, porque nos quita del centro y pone en él a Dios; la fe nos inunda de<br />

su amor que nos da seguridad, fuerza, esperanza. Aparentemente no cambia nada,<br />

pero, en lo más profundo de nosotros mismos, todo cambia.<br />

En nuestro corazón habita la paz, la dulzura, la ternura, el entusiasmo, la serenidad y la<br />

alegría, que son frutos del Espíritu Santo (cf. Ga 5,22) y nuestra existencia se<br />

transforma, nuestro modo de pensar y de obrar se renueva, se convierte en el modo de<br />

pensar y de obrar de Jesús, de Dios. En el Año de la Fe, esta Jornada Mundial de la<br />

Juventud es precisamente un don que se nos da para acercarnos todavía más al<br />

Señor, para ser sus discípulos y sus misioneros, para dejar que él renueve nuestra<br />

vida.<br />

Querido joven, querida joven: "Pon a Cristo" en tu vida. En estos días, Él te espera en<br />

su Palabra; escúchalo con atención y su presencia enardecerá tu corazón. "Pon a<br />

Cristo": Él te acoge en el Sacramento del perdón, para curar, con su misericordia, las<br />

heridas del pecado. No tengas miedo de pedir perdón. Él no se cansa nunca de<br />

perdonarnos, como un padre que nos ama.<br />

¡Dios es pura misericordia! "Pon a Cristo": Él te espera en el encuentro con su Carne<br />

en la Eucaristía, Sacramento de su presencia, de su sacrificio de amor, y en la<br />

humanidad de tantos jóvenes que te enriquecerán con su amistad, te animarán con su<br />

testimonio de fe, te enseñarán el lenguaje de la caridad, de la bondad, del servicio.<br />

También tú, querido joven, querida joven, puedes ser un testigo gozoso de su amor, un<br />

testigo entusiasta de su Evangelio para llevar un poco de luz a este mundo nuestro.<br />

"Qué bien se está aquí", poniendo a Cristo, la fe, la esperanza, el amor que él nos da,<br />

en nuestra vida. Queridos amigos, en esta celebración hemos acogido la imagen de<br />

Nuestra Señora de Aparecida. Con María, queremos ser discípulos y misioneros. Como<br />

ella, queremos decir "sí" a Dios. Pidamos a su Corazón de Madre que interceda por<br />

74


Jueguen Siempre Adelante<br />

nosotros, para que nuestros corazones estén dispuestos a amar a Jesús y a hacerlo<br />

amar. ¡Él nos espera y cuenta con nosotros! Amén.<br />

Reflexión.<br />

“Juguemos en el equipo de Jesús”.<br />

Este fue ya el primer encuentro que tuvimos con el papa Francisco el jueves por<br />

la tarde noche, esperamos horas bajo la lluvia pero con grande ilusión en nuestro<br />

corazón; el primer encuentro en el que estuve presente y del cual fui testigo, “hacía frío”<br />

estábamos mojados pero con el fuego del Espíritu Santo que ardía en nuestro ser y<br />

abrigaba nuestro cuerpo.<br />

Esperábamos la llegada del Papa y la espera terminó, una vez en el templete y su<br />

imagen en las pantallas, “todos gritamos eufóricos” y los aplausos se hicieron presente,<br />

algunas lágrimas y gritos. Aun me conmueve recordar y volver a vivir ese momento.<br />

"Qué bien se está aquí" fueron sus primeras palabras después de saludarnos,<br />

citando a Pedro en aquel momento de la transfiguración en el monte, y recalcando: “es<br />

bueno estar aquí reunidos en torno a Jesús. Él es quien nos acoge y se hace presente<br />

en medio de nosotros”.<br />

Continuo diciendo: “también hemos escuchado las palabras del Padre: "Éste es mi Hijo,<br />

el escogido, escuchadle”, todos expectantes y escucharle decir: “si por una parte es<br />

Jesús el que nos acoge; por otra, también nosotros hemos de acogerlo, ponernos a la<br />

escucha de su Palabra, porque precisamente acogiendo a Jesucristo, Palabra<br />

encarnada, es como el Espíritu nos transforma, ilumina el camino del futuro, y hace<br />

crecer en nosotros las alas de la esperanza para caminar con alegría”. Eso fue para mí,<br />

como escuchar las palabras de un padre que te dice: “hijo tú eres lo mejor que tengo, lo<br />

mejor que me ha sucedido y yo creo en ti, y sé que puedes alcanzar y lograr todo lo<br />

que te propongas, que puedes “volar” y llegar lejos si luchas por conseguirlo pero sobre<br />

todo poniendo tu confianza en Dios”.<br />

75


Jueguen Siempre Adelante<br />

Era una sensación profunda, de esas que te hinchan el corazón cuando parece que se<br />

reduce el espacio en tu pecho, los ojos “vidriosos” y una leve sonrisa en el rostro reflejo<br />

de una fe que se aviva, y precisamente nos invitó a eso, “a poner nuestra fe en<br />

Jesucristo” como ponerle a nuestra vida algo que le hace falta, agregarle, echarle y<br />

darle sentido en la fe en Jesús para que así nuestra vida tenga un nuevo sabor.<br />

“¡Pon fe, pon esperanza, pon amor!”<br />

Jesús es quien nos da todo, Él es quien nos lleva y acerca a Dios, en Él es que somos<br />

nuevas personas y Él es quien nos permite cambiar nuestra manera de pensar, nuestro<br />

estilo de vida y tener una visión diferente de todo.<br />

Poner a Cristo como el centro de nuestra vida es tener a un amigo fiel, es tener<br />

esperanza, es tener el amor pleno, “no caigamos en la tentación de ser el centro de<br />

nuestra propia vida y menos ser el centro de la vida de los demás”, dejemos de lado lo<br />

material y “alimentémonos de fe” para que todo en nosotros comience a renovarse<br />

desde adentro y seamos verdaderos discípulos y misioneros, que llevamos la luz a este<br />

mundo, que nuestra madre nos acompañe, interceda por nosotros y al igual que ella<br />

digamos un sí firme, para <strong>siempre</strong> estar dispuestos.<br />

“Juguemos en el equipo de Jesús”.<br />

76


Jueguen Siempre Adelante<br />

DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO EN VÍA CRUCIS CON LOS<br />

JÓVENES EN EL PASEO MARÍTIMO DE COPACABANA, RÍO DE<br />

JANEIRO<br />

Río de Janeiro<br />

Viernes 26 de Julio de 2013<br />

El Papa Francisco presidió en la playa de Copacabana (Brasil), el recorrido del Vía Crucis<br />

junto a más de un millón de jóvenes, a quienes recordó que en la Cruz “está todo el amor de<br />

Dios” y los exhortó a tener la valentía de ir contra la corriente.<br />

Queridísimos jóvenes<br />

Hemos venido hoy aquí para acompañar a Jesús a lo largo de su camino de dolor y de<br />

amor, el camino de la Cruz, que es uno de los momentos fuertes de la Jornada Mundial<br />

de la Juventud.<br />

Al concluir el Año Santo de la Redención, el beato Juan Pablo II quiso confiarles a<br />

ustedes, jóvenes, la Cruz diciéndoles: “Llévenla por el mundo como signo del amor de<br />

Jesús a la humanidad, y anuncien a todos que sólo en Cristo muerto y resucitado hay<br />

salvación y redención” (Palabras al entregar la cruz del Año Santo a los jóvenes, 22 de<br />

abril de 1984: Insegnamenti VII, 1 (1984), 1105).<br />

Desde entonces, la Cruz ha recorrido todos los continentes y ha atravesado los más<br />

variados mundos de la existencia humana, quedando como impregnada de las<br />

situaciones vitales de tantos jóvenes que la han visto y la han llevado.<br />

Nadie puede tocar la Cruz de Jesús sin dejar en ella algo de sí mismo y sin llevar<br />

consigo algo de la cruz de Jesús a la propia vida.<br />

Esta tarde, acompañando al Señor, me gustaría que resonasen en sus corazones tres<br />

77


Jueguen Siempre Adelante<br />

preguntas: ¿Qué han dejado ustedes en la Cruz, queridos jóvenes de Brasil, en estos<br />

dos años en los que ha recorrido su inmenso país? Y ¿qué ha dejado la Cruz en cada<br />

uno de ustedes? Y, finalmente, ¿qué nos enseña para nuestra vida esta Cruz?<br />

1. Una antigua tradición de la Iglesia de Roma cuenta que el apóstol Pedro, saliendo de<br />

la ciudad para huir de la persecución de Nerón, vio que Jesús caminaba en dirección<br />

contraria y enseguida le preguntó: “Señor, ¿adónde vas?”. La respuesta de Jesús fue:<br />

“Voy a Roma para ser crucificado de nuevo”.<br />

En aquel momento, Pedro comprendió que tenía que seguir al Señor con valentía,<br />

hasta el final, pero entendió sobre todo que nunca estaba solo en el camino; con él<br />

estaba <strong>siempre</strong> aquel Jesús que lo había amado hasta morir en la Cruz.<br />

Miren, Jesús con su Cruz recorre nuestras calles para cargar con nuestros miedos,<br />

nuestros problemas, nuestros sufrimientos, también los más profundos.<br />

Con la Cruz, Jesús se une al silencio de las víctimas de la violencia, que no pueden ya<br />

gritar, sobre todo los inocentes y los indefensos; con ella, Jesús se une a las familias<br />

que se encuentran en dificultad, que lloran la trágica pérdida de sus hijos, como en el<br />

caso de los 242 jóvenes víctimas en el incendio de la ciudad de Santa María en el<br />

incendio de este año recemos por ellos.<br />

O que sufren al verlos víctimas de paraísos artificiales como la droga; con ella, Jesús<br />

se une a todas las personas que sufren hambre en un mundo que cada día tira<br />

toneladas de alimentos; con ella, Jesús se une a quien es perseguido por su religión,<br />

por sus ideas, o simplemente por el color de su piel; en ella, Jesús se une a tantos<br />

jóvenes que han perdido su confianza en las instituciones políticas porque ven el<br />

egoísmo y la corrupción, o que han perdido su fe en la Iglesia, e incluso en Dios, por la<br />

incoherencia de los cristianos y de los ministros del Evangelio.<br />

78


Jueguen Siempre Adelante<br />

En la Cruz de Cristo está el sufrimiento, el pecado del hombre, también el nuestro, y Él<br />

acoge todo con los brazos abiertos, carga sobre su espalda nuestras cruces y nos dice:<br />

¡Ánimo! No la llevas tú solo. Yo la llevo contigo y yo he vencido a la muerte y he venido<br />

a darte esperanza, a darte vida (cf. Jn 3,16).<br />

2. Y así podemos responder a la segunda pregunta: ¿Qué ha dejado la Cruz en los que<br />

la han visto, en los que la han tocado? ¿Qué deja en cada uno de nosotros? Deja un<br />

bien que nadie más nos puede dar: la certeza del amor indefectible de Dios por<br />

nosotros. Un amor tan grande que entra en nuestro pecado y lo perdona, entra en<br />

nuestro sufrimiento y nos da fuerza para sobrellevarlo, entra también en la muerte para<br />

vencerla y salvarnos.<br />

En la Cruz de Cristo está todo el amor de Dios, su inmensa misericordia. Y es un amor<br />

del que podemos fiarnos, en el que podemos creer.<br />

Queridos jóvenes, fiémonos de Jesús, confiemos totalmente en Él (cf. Lumen fidei, 16).<br />

porque Él nunca defrauda a nadie.<br />

Sólo en Cristo muerto y resucitado encontramos salvación y redención. Con Él, el mal,<br />

el sufrimiento y la muerte no tienen la última palabra, porque Él nos da esperanza y<br />

vida: ha transformado la Cruz de ser instrumento de odio, de derrota, de muerte, en un<br />

signo de amor, de victoria y de vida.<br />

El primer nombre de Brasil fue precisamente “Terra de Santa Cruz”. La Cruz de Cristo<br />

fue plantada no sólo en la playa hace más de cinco siglos, sino también en la historia,<br />

en el corazón y en la vida del pueblo brasileño, y en muchos otros. A Cristo que sufre lo<br />

sentimos cercano, uno de nosotros que comparte nuestro camino hasta el final. No hay<br />

en nuestra vida cruz, pequeña o grande, que el Señor no comparta con nosotros.<br />

79


Jueguen Siempre Adelante<br />

3. Pero la Cruz nos invita también a dejarnos contagiar por este amor, nos enseña así a<br />

mirar <strong>siempre</strong> al otro con misericordia y amor, sobre todo a quien sufre, a quien tiene<br />

necesidad de ayuda, a quien espera una palabra, un gesto, y a salir de nosotros<br />

mismos para ir a su encuentro y tenderles la mano.<br />

Muchos rostros han acompañado a Jesús en su camino al Calvario: Pilato, el Cireneo,<br />

María, las mujeres… También nosotros podemos ser para los demás como Pilato, que<br />

no tiene la valentía de ir contracorriente para salvar la vida de Jesús y se lava las<br />

manos.<br />

Queridos amigos, la Cruz de Cristo nos enseña a ser como el Cireneo, que ayuda a<br />

Jesús a llevar aquel madero pesado, como María y las otras mujeres, que no tienen<br />

miedo de acompañar a Jesús hasta el final, con amor, con ternura. Y tú, ¿Cómo quien<br />

eres? ¿Cómo Pilato, cómo el Cireneo, cómo María? Jesús te está mirando ahora y te<br />

dice ¿Me quieres ayudar a llevar la cruz?<br />

Queridos jóvenes, llevemos nuestras alegrías, nuestros sufrimientos, nuestros fracasos<br />

a la Cruz de Cristo; encontraremos un Corazón abierto que nos comprende, nos<br />

perdona, nos ama y nos pide llevar este mismo amor a nuestra vida, amar a cada<br />

hermano o hermana nuestra con ese mismo amor. Que así sea.<br />

Reflexión.<br />

La Cruz, fuerza extra que nos impulsa.<br />

“Hemos venido hoy aquí para acompañar a Jesús a lo largo de su camino de<br />

dolor y de amor, el camino de la Cruz”. Acompañar a Jesús, eso tiene un significado<br />

profundo, no es sólo estar cerca de Él, es estar en Él, no es sólo caminar tras Él, es<br />

caminar junto a Él, seguir sus pasos, es dejarlo todo, acompañarlo hasta el último<br />

momento, hasta el último aliento, es abrazar la Cruz con amor, es negarse a uno<br />

80


Jueguen Siempre Adelante<br />

mismo, sufrir, morir y resucitar con Él; es reconocerle y pedirle que se quede con<br />

nosotros, es amar como Él nos ha amado.<br />

Debemos de dejar algo por amor a la Cruz, quedarnos con algo de ella y aprender algo<br />

para nuestra vida y que podamos enseñarlo a los demás. Nunca estamos solos, Jesús<br />

nos acompaña y ayuda con nuestra carga haciéndola más ligera, nos ama, “carga con<br />

nuestros miedos, nuestros problemas, nuestros sufrimientos, también los más<br />

profundos” esos que a veces no sabemos cómo demostrar.<br />

Que la Cruz sea un alto en contra de la violencia, esperanza para los inocentes que<br />

sufren por su causa, el consuelo de las familias, la salida para aquellos que se sienten<br />

o están acorralados de alguna manera; el signo que borre cualquier diferencia entre los<br />

pueblos, y sobre todo sea el estandarte de los cristianos que vivimos cargándola cada<br />

día tratando de ser coherentes con el Evangelio que se nos ha transmitido.<br />

La Cruz nos da “Un amor tan grande que entra en nuestro pecado y lo perdona, entra<br />

en nuestro sufrimiento y nos da fuerza para sobrellevarlo, entra también en la muerte<br />

para vencerla y salvarnos”. “Es la expresión máxima del Amor y misericordia de Dios”.<br />

La Cruz debe ser la fuerza extra que nos impulse a perdonar y amar a nuestro prójimo,<br />

tal como nos perdona y nos ama Dios, que nos ayude a ser incondicionales, una mano<br />

amiga, sincera, que <strong>siempre</strong> diga vamos <strong>adelante</strong>, a pesar de las adversidades,<br />

ayudemos a los demás con sus cargas, acompañemos a Jesús como su Madre lo hizo,<br />

como Jesús mismo nos ayuda a nosotros.<br />

Que la Cruz sea nuestro refugio y nuestra fuente de amor.<br />

81


Jueguen Siempre Adelante<br />

SANTA MISA CON LOS OBISPOS DE LA XXVIII JMJ Y CON LOS<br />

SACERDOTES, RELIGIOSOS Y SEMINARISTAS<br />

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Catedral de San Sebastián, Río de Janeiro<br />

Sábado 27 de julio de 2013<br />

El Papa Francisco alentó a los obispos, sacerdotes, religiosos y seminaristas presentes en la<br />

Misa a ayudar a los jóvenes a redescubrir la alegría de la fe y promuevan con valentía la<br />

cultura del encuentro.<br />

Queridos hermanos en Cristo,<br />

Al ver esta catedral llena de obispos, sacerdotes, seminaristas, religiosos y religiosas<br />

de todo el mundo, pienso en las palabras del Salmo de la misa de hoy: «Oh Dios, que<br />

te alaben los pueblos» (Sal 66). Sí, estamos aquí para alabar al Señor, y lo hacemos<br />

reafirmando nuestra voluntad de ser instrumentos suyos, para que alaben a Dios no<br />

sólo algunos pueblos, sino todos.<br />

Con la misma parresia de Pablo y Bernabé, anunciamos el Evangelio a nuestros<br />

jóvenes para que encuentren a Cristo, luz para el camino, y se conviertan en<br />

constructores de un mundo más fraterno.<br />

En este sentido, quisiera reflexionar con vosotros sobre tres aspectos de nuestra<br />

vocación: llamados por Dios, llamados a anunciar el Evangelio, llamados a promover la<br />

cultura del encuentro.<br />

1. Llamados por Dios. Es importante reavivar en nosotros este hecho, que a menudo<br />

damos por descontado entre tantos compromisos cotidianos: «No son ustedes los que<br />

me eligieron a mí, sino yo el que los elegí a ustedes», dice Jesús (Jn 15,16). Es un<br />

caminar de nuevo hasta la fuente de nuestra llamada.<br />

82


Jueguen Siempre Adelante<br />

Al comienzo de nuestro camino vocacional hay una elección divina. Hemos sido<br />

llamados por Dios y llamados para permanecer con Jesús (cf. Mc 3,14), unidos a él de<br />

una manera tan profunda como para poder decir con san Pablo: «Ya no vivo yo, sino<br />

que Cristo vive en mí» (Ga 2,20). En realidad, este vivir en Cristo marca todo lo que<br />

somos y lo que hacemos.<br />

Y esta «vida en Cristo» es precisamente lo que garantiza nuestra eficacia apostólica y<br />

la fecundidad de nuestro servicio: «Soy yo el que los elegí a ustedes, y los destiné para<br />

que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero» (Jn 15,16).<br />

No es la creatividad pastoral, no son los encuentros o las planificaciones lo que<br />

aseguran los frutos, sino el ser fieles a Jesús, que nos dice con insistencia:<br />

«Permanezcan en mí, como yo permanezco en ustedes» (Jn 15,4).<br />

Y sabemos muy bien lo que eso significa: contemplarlo, adorarlo y abrazarlo,<br />

especialmente a través de nuestra fidelidad a la vida de oración, en nuestro encuentro<br />

cotidiano con él en la Eucaristía y en las personas más necesitadas.<br />

El «permanecer» con Cristo no es aislarse, sino un permanecer para ir al encuentro de<br />

los otros. Recuerdo algunas palabras de la beata Madre Teresa de Calcuta: «Debemos<br />

estar muy orgullosos de nuestra vocación, que nos da la oportunidad de servir a Cristo<br />

en los pobres. Es en las «favelas»", en los «cantegriles», en las «villas miseria» donde<br />

hay que ir a buscar y servir a Cristo.<br />

Debemos ir a ellos como el sacerdote se acerca al altar: con alegría» (Mother<br />

Instructions, I, p. 80). Jesús, el Buen Pastor, es nuestro verdadero tesoro, tratemos de<br />

fijar cada vez más nuestro corazón en él (cf. Lc 12,34).<br />

2. Llamados a anunciar el Evangelio. Queridos Obispos y sacerdotes, muchos de<br />

ustedes, si no todos, han venido para acompañar a los jóvenes a la Jornada Mundial de<br />

83


Jueguen Siempre Adelante<br />

la Juventud. También ellos han escuchado las palabras del mandato de Jesús: «Vayan,<br />

y hagan discípulos a todas las naciones » (cf.Mt 28,19).<br />

Nuestro compromiso es ayudarles a que arda en su corazón el deseo de ser discípulos<br />

misioneros de Jesús. Ciertamente, muchos podrían sentirse un poco asustados ante<br />

esta invitación, pensando que ser misioneros significa necesariamente abandonar el<br />

país, la familia y los amigos.<br />

Me acuerdo de mi sueño cuando era joven: ir de misionero al lejano Japón. Pero Dios<br />

me mostró que mi tierra de misión estaba mucho más cerca: mi patria. Ayudemos a los<br />

jóvenes a darse cuenta de que ser discípulos misioneros es una consecuencia de ser<br />

bautizados, es parte esencial del ser cristiano, y que el primer lugar donde se ha de<br />

evangelizar es la propia casa, el ambiente de estudio o de trabajo, la familia y los<br />

amigos.<br />

No escatimemos esfuerzos en la formación de los jóvenes. San Pablo, dirigiéndose a<br />

sus cristianos, utiliza una bella expresión, que él hizo realidad en su vida: «Hijos míos,<br />

por quienes estoy sufriendo nuevamente los dolores del parto hasta que Cristo sea<br />

formado en ustedes» (Ga 4,19).<br />

Que también nosotros la hagamos realidad en nuestro ministerio. Ayudemos a nuestros<br />

jóvenes a redescubrir el valor y la alegría de la fe, la alegría de ser amados<br />

personalmente por Dios, que ha dado a su Hijo Jesús por nuestra salvación.<br />

Eduquémoslos a la misión, a salir, a ponerse en marcha. Así ha hecho Jesús con sus<br />

discípulos: no los mantuvo pegados a él como una gallina con sus polluelos; los envió.<br />

No podemos quedarnos enclaustrados en la parroquia, en nuestra comunidad, cuando<br />

tantas personas están esperando el Evangelio. No es un simple abrir la puerta para<br />

acoger, sino salir por ella para buscar y encontrar. Pensemos con decisión en la<br />

84


Jueguen Siempre Adelante<br />

pastoral desde la periferia, comenzando por los que están más alejados, los que no<br />

suelen frecuentar la parroquia. También ellos están invitados a la mesa del Señor.<br />

3. Llamados a promover la cultura del encuentro. En muchos ambientes se ha abierto<br />

paso lamentablemente una cultura de la exclusión, una «cultura del descarte». No hay<br />

lugar para el anciano ni para el hijo no deseado; no hay tiempo para detenerse con<br />

aquel pobre a la vera del camino. A veces parece que, para algunos, las relaciones<br />

humanas estén reguladas por dos «dogmas»: la eficiencia y el pragmatismo.<br />

Queridos obispos, sacerdotes, religiosos y también ustedes, seminaristas que se<br />

preparan para el ministerio, tengan el valor de ir contracorriente. No renunciemos a<br />

este don de Dios: la única familia de sus hijos. El encuentro y la acogida de todos, la<br />

solidaridad y la fraternidad, son los elementos que hacen nuestra civilización<br />

verdaderamente humana.<br />

Ser servidores de la comunión y de la cultura del encuentro. Permítanme decir que<br />

debemos estar casi obsesionados en este sentido. No queremos ser presuntuosos<br />

imponiendo «nuestra verdad». Lo que nos guía es la certeza humilde y feliz de quien<br />

ha sido encontrado, alcanzado y transformado por la Verdad que es Cristo, y no puede<br />

dejar de proclamarla (cf. Lc 24,13-35).<br />

Queridos hermanos y hermanas, estamos llamados por Dios, llamados a anunciar el<br />

Evangelio y a promover con valentía la cultura del encuentro. Que la Virgen María sea<br />

nuestro modelo. En su vida ha dado el «ejemplo de aquel amor de madre que debe<br />

animar a todos los que colaboran en la misión apostólica de la Iglesia para engendrar a<br />

los hombres a una vida nueva» (Conc. Ecum. Vat. II, Const. dogm. Lumen gentium,<br />

65). Que ella sea la Estrella que guía con seguridad nuestros pasos al encuentro del<br />

Señor. Amén.<br />

85


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

Pastores de la Iglesia, entrenadores en el campo.<br />

Corresponde a todos los líderes de la Iglesia reafirmar constantemente su<br />

voluntad de ser instrumentos del Espíritu Santo, para que cada quien desde donde le<br />

concierne con su ministerio recibido, alaben a Dios; ellos y nos ayuden a que todos, “no<br />

sólo algunos pueblos, sino todos” también alabemos al Señor.<br />

Que su tarea sin descanso en el anuncio del Evangelio nos guie a todos los jóvenes a<br />

no desmayar y a seguir su testimonio, que así como sea luz para nosotros también<br />

podamos traducirlo en luz para quienes están a nuestro alrededor. Hay que entender<br />

que los pastores son quienes de alguna manera nos enseñan a acercarnos a Cristo,<br />

que ellos también están caminando con nosotros, y a los que no caminan a nuestro<br />

lado en la misión de evangelizar “les suplicamos que a ejemplo de Cristo y los<br />

apóstoles, también nos acompañen en esta carrera”.<br />

1. Llamados por Dios. Es Dios quien por medio de Jesús y por gracia del Espíritu Santo<br />

nos ha elegido y debemos caminar en su dirección. Descubrir lo profundo y esencial de<br />

ese llamado a modo de vivir para Él, “un vivir en Cristo que marque todo lo que somos<br />

y todo lo que hacemos”.<br />

Ya en el campo de juego lo que nos asegura el resultado positivo y obtener buenos<br />

frutos es: “ser fieles a Jesús” “permanecer unidos a Él, como Él está <strong>siempre</strong> con<br />

nosotros”.<br />

El papa Francisco nos ha invitado por medio de los representantes de nuestra Iglesia a<br />

abrazar a Cristo, a contemplarlo y adorarlo en verdad, a ser fieles a Él a través de “una<br />

vida de oración, en nuestro encuentro cotidiano con Él en la Eucaristía y en las<br />

86


Jueguen Siempre Adelante<br />

personas más necesitadas”. Nos ha invitado a permanecer en Cristo, yendo al<br />

encuentro de los demás.<br />

2. Llamados a anunciar el Evangelio. Todos estamos llamados a anunciar la Buena<br />

Nueva pero nosotros los jóvenes debemos hacerlo con la ayuda y la dirección de los<br />

mayores, respetando la jerarquía de nuestra Iglesia, obispos, sacerdotes, religiosos y<br />

religiosas, el llamado es a que nos acompañen a cumplir con la parte de nuestra misión<br />

de anunciar un Cristo que vive en nosotros. Que nos ayuden a avivar el fuego de ese<br />

amor en nuestros corazones para ser verdaderos discípulos y misioneros.<br />

Jóvenes, no pensemos en ir lejos a otros países a evangelizar, podríamos estar<br />

descuidando nuestra verdadera y propia misión: “evangelizar en la propia casa, el<br />

ambiente de estudio o de trabajo, la familia y los amigos. Los mas cercanos”.<br />

3. Llamados a promover la cultura del encuentro. “No excluir a los jóvenes” pastores de<br />

la Iglesia si ustedes “tienen el valor de ir contra corriente”, seguro nosotros los jóvenes<br />

también iremos con ustedes, acompañándoles. Enséñennos a ser humildes, a vivir con<br />

alegría el servicio del Evangelio, a acoger a los demás jóvenes como ustedes nos<br />

acogen a nosotros para que en Cristo todos encontremos nuestra felicidad plena.<br />

87


Jueguen Siempre Adelante<br />

ENCUENTRO CON EL EPISCOPADO BRASILEÑO<br />

DISCURSO DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Arzobispado de Río de Janeiro<br />

Sábado 27 de julio de 2013<br />

El Papa Francisco almorzó en un clima fraternal con el episcopado brasileño, uno de los más<br />

numerosos del mundo, a quien dirigió en su integridad un amplio discurso que reflexiona sobre<br />

la misión pastoral de los obispos en el presente y futuro del Brasil.<br />

(Fragmento del discurso)<br />

En las calles de Río, jóvenes de todo el mundo y muchas otras multitudes nos<br />

esperan, necesitados de ser alcanzados por la mirada misericordiosa de Cristo, el Buen<br />

Pastor, al que estamos llamados a hacer presente. Gustemos, pues, este momento de<br />

descanso, de compartir, de verdadera fraternidad.<br />

Reflexión.<br />

El entrenador merece un descanso.<br />

También nuestros pastores se cansan en algún momento y tienen el merecido<br />

derecho a descansar, a la recreación, a compartir con sus seres queridos. Nosotros<br />

jóvenes oremos por ellos, para que cada día el Espíritu Santo renueve sus fuerzas y la<br />

alegría de servir en sus ministerios, para que ellos no descuiden ni olviden en ningún<br />

momento su misión de pastorearnos y guiarnos al Buen Pastor para que todos juntos<br />

sepamos escuchar su voz, pidamos al Señor también que nos ayude y nos de la<br />

paciencia para comprender su humanidad y que a nosotros no se nos olvide que ellos<br />

también necesitan nuestras fuerzas para continuar con la misión de anunciar el<br />

Evangelio. “Todos somos Iglesia, la Iglesia de Cristo”<br />

88


Jueguen Siempre Adelante<br />

DISCURSO DEL PAPA FRANCISCO EN<br />

VIGILIA DE ORACIÓN CON LOS JÓVENES<br />

Paseo Marítimo de Copacabana, Río de Janeiro<br />

Sábado 27 de julio 2013<br />

El Papa Francisco se dirigió a más de tres millones de peregrinos que llenaron la playa<br />

de Copacabana para participar en la Vigilia de la Jornada Mundial de la Juventud<br />

(JMJ), exhortándolos a “jugar <strong>siempre</strong> <strong>adelante</strong>”, siendo auténticos atletas de Cristo y<br />

piedras vivas de una Iglesia que acoja a toda la humanidad.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Queridos jóvenes,<br />

Mirándolos a ustedes en este momento, me hace recordar a la historia de San<br />

Francisco de Asís, que mirando al crucifijo escucha la voz que le dice: “Francisco,<br />

repara mi casa”. Y el joven Francisco responde con prontitud y generosidad a esta<br />

llamada del Señor: “repara mi casa”. Pero, ¿qué casa? Poco a poco se da cuenta de<br />

que no se trataba de hacer de albañil y reparar un edificio de piedra, sino de dar su<br />

contribución a la vida de la Iglesia; se trataba de ponerse al servicio de la Iglesia,<br />

amándola y trabajando para que en ella se reflejara cada vez más el rostro de Cristo.<br />

También hoy el Señor sigue necesitando a los jóvenes para su Iglesia. Queridos<br />

jóvenes, el Señor los necesita. También hoy, llama a cada uno de ustedes a seguirlo en<br />

su Iglesia y a ser misioneros. ¿Cómo? ¿De qué manera? …como tuvimos que cancelar<br />

por el mal tiempo la realización de esta vigilia en el Campo Fidei en Guaratiba, ¿no<br />

estaría el Señor queriendo decirnos que el verdadero campo de la fe, el verdadero<br />

Campo Fidei no es un lugar geográfico, sino que somos nosotros? Sí, es verdad, cada<br />

uno de nosotros, cada uno de ustedes, yo, todos. Y ser discípulo misionero significa<br />

saber que somos el campo de la fe de Dios. Por eso, a partir de la imagen del Campo<br />

de la Fe, pensé en tres imágenes que nos pueden ayudar a entender mejor lo que<br />

significa ser un discípulo misionero: la primera, el campo como lugar donde se siembra;<br />

89


Jueguen Siempre Adelante<br />

la segunda, el campo como lugar de entrenamiento; y la tercera, el campo como obra<br />

en construcción.<br />

1. El campo como lugar donde se siembra. Todos conocemos la parábola de Jesús que<br />

habla de un sembrador que salió a sembrar en un campo; algunas simientes cayeron al<br />

borde del camino, entre piedras o en medio de espinas, y no llegaron a desarrollarse;<br />

pero otras cayeron en tierra buena y dieron mucho fruto (cf. Mt 13,1-9). Jesús mismo<br />

explicó el significado de la parábola: La simiente es la Palabra de Dios sembrada en<br />

nuestro corazón (cf. Mt 13,18-23). Hoy, todos los días, pero hoy de manera especial,<br />

Jesús siembra. Cuando aceptamos la Palabra de Dios, entonces somos el Campo de la<br />

Fe. Por favor, dejen que Dios y su Palabra, entren en su vida. Dejen entrar la simiente<br />

de la Palabra de Dios. Dejen que germine, dejen que crezca. ¡Dios hace todo, pero<br />

ustedes déjenlo hacer! Dejen que Él trabaje en ese crecimiento.<br />

Jesús nos dice que las simientes que cayeron al borde del camino, o entre las piedras y<br />

en medio de espinas, no dieron fruto. Creo que con honestidad podemos hacernos la<br />

pregunta ¿Qué clase de terreno somos, qué clase de terreno queremos ser? Quizás<br />

somos a veces como el camino: escuchamos al Señor, pero no cambia nada en la vida,<br />

porque nos dejamos atontar por tantos reclamos superficiales que escuchamos. Yo les<br />

pregunto, pero no contesten ahora, contesten en su corazón ¿Yo soy un joven, una<br />

joven atontado? O somos como el terreno pedregoso: acogemos a Jesús con<br />

entusiasmo, pero somos inconstantes ante las dificultades, no tenemos el valor de ir<br />

contracorriente. Cada uno contestamos en nuestro corazón, ¿tengo valor o soy<br />

cobarde?; o somos como el terreno espinoso: las cosas, las pasiones negativas<br />

sofocan en nosotros las palabras del Señor (cf. Mt 13,18-22). ¿Tengo en mi corazón la<br />

costumbre de jugar a dos puntas? ¿Quedar bien con Dios y quedar bien con el diablo?<br />

¿Querer recibir la semilla de Jesús y a la vez regar las espinas y los yuyos que nacen<br />

en mi corazón? Cada uno en silencio se contesta. Hoy, sin embargo, estoy seguro de<br />

que la simiente puede caer en buena tierra. Escuchamos estos testimonios, ¡cómo la<br />

simiente cayó en buena tierra! “No Padre, yo no soy buena tierra, soy una calamidad,<br />

90


Jueguen Siempre Adelante<br />

lleno de piedras, de espinas y de todo”. Sí, puede que eso haya arriba, pero hacé un<br />

pedacito, hacé un cachito de buena tierra, y dejá que caiga ahí ¡y vas a ver cómo<br />

germina! Yo sé que ustedes quieren ser buena tierra. Cristianos en serio, no cristianos<br />

a medio tiempo, no cristianos almidonados con la nariz así, que parecen cristianos y en<br />

el fondo no hacen nada. No cristianos de fachada. Esos cristianos que son pura facha,<br />

sino cristianos auténticos. Sé que ustedes no quieren vivir en la ilusión de una libertad<br />

“chirle” (aguado, inconsistente) que se deja arrastrar por la moda y las conveniencias<br />

del momento. Sé que ustedes apuntan a lo alto, a decisiones definitivas que den pleno<br />

sentido. ¿Es así o me equivoco? Bueno, si es así, hagamos una cosa, todos en<br />

silencio, mirémonos al corazón y cada uno dígale a Jesús que quiere recibir la semilla,<br />

dígale a Jesús ‘mirá Jesús las piedras que hay, mirá las espinas, mirá los yuyos, pero<br />

mirá este cachito de tierra que te ofrezco para que entre la semilla. En silencio dejamos<br />

entrar la semilla de Jesús. Acuérdense de este momento. Cada uno sabe el nombre de<br />

la semilla que entró.<br />

Déjenla crecer y Dios la va a cuidar.<br />

2. El campo, además de ser lugar de siembre, es lugar de entrenamiento. Jesús nos<br />

pide que le sigamos toda la vida, nos pide que seamos sus discípulos, que «juguemos<br />

en su equipo». A la mayoría de ustedes les gusta el deporte. Aquí, en Brasil, como en<br />

otros países, el fútbol es una pasión nacional ¿Sí o no? Pues bien, ¿qué hace un<br />

jugador cuando se le llama para formar parte de un equipo? Tiene que entrenarse y<br />

entrenarse mucho. Así es nuestra vida de discípulos del Señor. San Pablo nos dice:<br />

«Los atletas se privan de todo, y lo hacen para obtener una corona que se marchita;<br />

nosotros, en cambio, por una corona incorruptible» (1 Co 9,25). ¡Jesús nos ofrece algo<br />

más grande que la Copa del Mundo! Nos ofrece la posibilidad de una vida fecunda, una<br />

vida feliz, y también un futuro con él que no tendrá fin, allá en la vida eterna. Pero nos<br />

pide que paguemos la entrada. La entrada es que nos entrenemos para «estar en<br />

forma», para afrontar sin miedo todas las situaciones de la vida, dando testimonio de<br />

nuestra fe. A través del diálogo con él: la oración. ‘Padre, ahora no nos va a hacer rezar<br />

a todos, ¿no?’ Les pregunto, pero contestan en su corazón en silencio ‘¿yo rezo?’ cada<br />

91


Jueguen Siempre Adelante<br />

uno se contesta. ¿Yo hablo con Jesús? ¿O le tengo miedo al silencio? ¿Dejo que el<br />

Espíritu Santo hable en mi corazón? Yo le pregunto a Jesús ¿qué querés que haga?<br />

¿Qué querés de mi vida?<br />

Esto es entrenarse. Pregúntenle a Jesús, hablen con Jesús. Y si cometen un error en la<br />

vida, si se pegan un resbalón, si hacen algo que está mal. No tengan miedo. ‘Jesús,<br />

mirá lo que hice ¿qué tengo que hacer ahora?’ Pero <strong>siempre</strong> hablen con Jesús. ¡En las<br />

buenas y en las malas! ¡Cuando hacen una cosa buena y cuando hacen una cosa<br />

mala! ¡No le tengan miedo, eso es la oración! Y con eso se van entrenando en el<br />

diálogo con Jesús en este discipulado misionero. Y también a través de los<br />

sacramentos, que hacen crecer en nosotros su presencia. A través del amor fraterno,<br />

del saber escuchar, comprender, perdonar, acoger, ayudar a los otros, a todos, sin<br />

excluir y sin marginar. Estos son los entrenamientos para seguir a Jesús: La oración,<br />

los sacramentos y la ayuda a los demás. El servicio a los demás.<br />

3. El campo como obra en construcción. Acá estamos viendo cómo se ha construido<br />

esto aquí (la iglesia de madera levantada por los jóvenes) Se empezaron a mover los<br />

muchachos, las chicas, movieron y construyeron una iglesia. Cuando nuestro corazón<br />

es una tierra buena que recibe la Palabra de Dios, cuando «se suda la camiseta»,<br />

tratando de vivir como cristianos, experimentamos algo grande: nunca estamos solos,<br />

formamos parte de una familia de hermanos que recorren el mismo camino: somos<br />

parte de la Iglesia; Los muchachos, estas chicas, no están solos. En conjunto hicieron<br />

un camino y construyeron la iglesia. En conjunto hicieron lo de San Francisco:<br />

construir, reparar la iglesia. Les pregunto ¿quieren construir la Iglesia? ¿Se animan?<br />

¿Y mañana se van a olvidar de este ‘sí’ que dijeron?<br />

Somos parte de la Iglesia. Más aún, nos convertimos en constructores de la Iglesia y<br />

protagonistas de la historia. Chicos y chicas, por favor, no se metan en la cola de la<br />

historia, ¡sean protagonistas! ¡Jueguen para <strong>adelante</strong>! ¡Pateen <strong>adelante</strong>! ¡Construyan<br />

un mundo mejor! ¡Un mundo de hermanos, un mundo de justicia, de amor, de paz, de<br />

fraternidad, de solidaridad! ¡Juéguenla <strong>adelante</strong> <strong>siempre</strong>! San Pedro nos dice que<br />

somos piedras vivas que forman una casa espiritual (cf. 1 P 2,5). Y mirando este palco,<br />

92


Jueguen Siempre Adelante<br />

vemos que tiene la forma de una iglesia construida con piedras, con ladrillos. En la<br />

Iglesia de Jesús, las piedras vivas somos nosotros, y Jesús nos pide que edifiquemos<br />

su Iglesia.<br />

Cada uno de nosotros es una piedra viva, es un pedacito de la construcción, y si falta<br />

ese pedacito cuando viene la lluvia entra la gotera y se mete el agua dentro de la casa.<br />

Cada pedacito vivo tiene que cuidar la unidad y la seguridad de la Iglesia. Y no<br />

construir una pequeña capilla donde sólo cabe un grupito de personas. Jesús nos pide<br />

que su Iglesia sea tan grande que pueda alojar a toda la humanidad, que sea la casa<br />

de todos. Jesús me dice a mí, a vos, a cada uno: «Vayan, y hagan discípulos a todas<br />

las naciones». Esta tarde, respondámosle: Sí, Señor, también yo quiero ser una piedra<br />

viva; juntos queremos construir la Iglesia de Jesús. Quiero ir y ser constructor de la<br />

Iglesia de Cristo.<br />

Tu corazón joven quiere construir un mundo mejor. Sigo las noticias del mundo y veo<br />

que en tantos jóvenes, en muchas partes del mundo han salido por las calles para<br />

expresar el deseo de una civilización más justa y fraterna. Los jóvenes en la calle. Son<br />

jóvenes que quieren ser protagonistas del cambio. Por favor, no dejen que otros sean<br />

los protagonistas, los cambios. ¡Ustedes son los que tienen el futuro! Por ustedes entra<br />

el futuro en el mundo. A ustedes también les pido que sean protagonistas de este<br />

cambio. Sigan superando la apatía y ofreciendo una respuesta cristiana a las<br />

inquietudes sociales y políticas que se van planteando en diversas partes del mundo.<br />

Les pido que sean constructores del futuro. Que se metan en el trabajo por un mundo<br />

mejor. Queridos jóvenes, por favor ¡no balconeen en la vida! ¡Métanse en ella! ¡Jesús<br />

no se quedó en el balcón, se metió! ¡No balconeen la vida, métanse en ella como hizo<br />

Jesús! Sin embargo, queda una pregunta: ¿Por dónde empezamos? ¿A quién le<br />

pedimos que empiece esto?<br />

Una vez le preguntaron a la Madre Teresa qué era lo que debía cambiar en la Iglesia, y<br />

para empezar, ¿por qué pared de la Iglesia empezamos? ¿Por dónde hay que<br />

empezar?: ‘Por vos y por mí’, contestó ella. Tenía garra esta mujer. Sabía por dónde<br />

había que empezar. Yo también, hoy, le robo la palabra a la Madre Teresa, y te digo<br />

93


Jueguen Siempre Adelante<br />

¿empezamos?, ¿por dónde? Por vos y por mí. Cada uno en silencio, otra vez,<br />

pregúntese si ¿tengo que empezar por mí? ¿Por dónde empiezo? Cada uno abra su<br />

corazón para que Jesús le diga por dónde empiezo.<br />

Queridos amigos, no se olviden: ustedes son el campo de la fe. Ustedes son los atletas<br />

de Cristo. Ustedes son los constructores de una Iglesia más hermosa y de un mundo<br />

mejor. Levantemos nuestros ojos hacia la Virgen. Ella nos ayuda a seguir a Jesús, nos<br />

da ejemplo con su «sí» a Dios: «Aquí está la esclava del Señor, que se cumpla en mí lo<br />

que has dicho» (Lc 1,38). Se lo digamos también nosotros a Dios, junto con María:<br />

Hágase en mí según tu palabra. Que así sea.<br />

Reflexión.<br />

¡Jueguen para <strong>adelante</strong>! ¡Juéguenla <strong>adelante</strong> <strong>siempre</strong>!<br />

En la noche de la vigilia de la JMJ, la más hermosa vivida en mi experiencia<br />

espiritual personal hasta el día de hoy, el papa Francisco nos ponía de ejemplo y<br />

modelo a seguir a San Francisco de Asís, quien recibió con amor el llamado de Cristo y<br />

al igual que los discípulos, lo dejo todo para seguirle y reparar su casa, su Iglesia, lo<br />

que significa: “ponerse al servicio de la Iglesia, amándola y trabajando para que en ella<br />

se refleje cada vez más el rostro de Cristo”.<br />

Cuando el Papa dijo con fuerza y autoridad estas palabras: “También hoy el Señor<br />

sigue necesitando a los jóvenes para su Iglesia. Queridos jóvenes, el Señor los<br />

necesita. También hoy, llama a cada uno de ustedes a seguirlo en su Iglesia y a ser<br />

misioneros”. Sin duda sentí en mi interior un fuerte llamado, hice mías esas palabras y<br />

estoy luchando cada día por traducirlas en obras contundentes y coherentes con el<br />

mensaje del Evangelio, “no es fácil” pero con la fortaleza de Cristo, pidiendo su<br />

sabiduría y con su amor, es posible.<br />

94


Jueguen Siempre Adelante<br />

También esas palabras, ese llamado a renovar tu compromiso con Jesús, también son<br />

para ti.<br />

Nuestra fe no debe de depender de un lugar, de las circunstancias, del tiempo o de las<br />

personas a nuestro alrededor, nuestra fe es y debe ser convicción, confianza sin límites<br />

puesta en Cristo y esa certeza nos hace verdaderos discípulos y misioneros de su<br />

enseñanza.<br />

1. El campo como lugar donde se siembra.<br />

“Jesús siembra, cuando aceptamos la Palabra de Dios, entonces somos el<br />

Campo de la Fe. Por favor, dejen que Dios y su Palabra entren en su vida. Dejen entrar<br />

la simiente de la Palabra de Dios; dejen que germine, dejen que crezca. ¡Dios hace<br />

todo, pero ustedes déjenlo hacer! Dejen que Él trabaje en ese crecimiento”.<br />

También, tratando de alguna manera de hacer conciencia en nosotros nos retaba<br />

invitándonos a hacernos algunas interrogantes que hoy quiero retomar para que como<br />

Él nos dijo: “las medites y las contestes en su corazón”.<br />

¿Yo soy un joven atontado, una joven atontada?<br />

¿Tengo valor o soy cobarde?<br />

¿Tengo en mi corazón la costumbre de jugar a dos puntas? ¿Quedar bien con Dios y<br />

quedar bien con el diablo? ¿Querer recibir la semilla de Jesús y a la vez regar las<br />

espinas y los yuyos que nacen en mi corazón?<br />

Luego añadió: “Cada uno en silencio se contesta.” como aquellas palabras de Jesús,<br />

“Entra en tu cuarto, en tu corazón, en tu interior y tu Padre que ve en lo secreto sabrá<br />

lo que necesitas” es bueno que meditemos de vez en cuando que clase de fruto estoy<br />

dando, que frutos estamos dando. En casa, con los amigos, en el colegio, en la<br />

universidad, en el trabajo, en tu relación de noviazgo, en tu matrimonio.<br />

De alguna manera ante este cuestionamiento bien profundo sentí que a pesar de mi<br />

esfuerzo por servirle al Señor, “no tenía nada que ofrecer”, quizá también te sientas así<br />

95


Jueguen Siempre Adelante<br />

en este momento, pero luego el Papa nos invitaba a hacer un lugar, pequeño, un<br />

espacio en nuestro corazón por mínimo que fuera para dejar que Dios siembre y<br />

trabaje en nosotros, esas palabras fueron confortantes y a la vez de mucha motivación<br />

para seguir en esta lucha que es de todos los días.<br />

Una lucha constante a ser cristianos auténticos, verdaderos.<br />

2. El campo, como lugar de entrenamiento.<br />

Esta es la parte que inspiró la idea de este libro, quizá porque en la profundidad<br />

ya del mensaje, esa semilla entró verdaderamente en mi corazón y me imaginé siendo<br />

parte del equipo de Jesús, jugando a su lado y siguiendo su dirección; imaginar ese<br />

cuadro fue para mí algo muy profundo “Jesús jugando al fútbol o dirigiendo un equipo<br />

como entrenador” o simplemente porque me gusta mucho fue más fácil asimilarlo. El<br />

papa Francisco nos dijo: “Jesús nos pide que le sigamos toda la vida, nos pide que<br />

seamos sus discípulos, que «juguemos en su equipo”. Les aseguro, todos los que<br />

estuvimos ahí y todos los que lo vieron por los medios de comunicación, fuimos y son<br />

testigos que eso fue una locura total, una euforia sin precedentes, algo que todos creo<br />

asimilamos perfectamente, y él lo sabía: “A la mayoría de ustedes les gusta el deporte.<br />

Aquí en Brasil, como en otros países, el fútbol es una pasión nacional” agregó. Bueno<br />

ya para todos es del conocimiento que el papa también es un “hincha” del fútbol como<br />

todo argentino.<br />

Pero toda la alegría de ese momento se desbordó, rodaron lágrimas, aumentaron los<br />

gritos, silbidos, mostraron sonrisas, abrazos entre los peregrinos y palmas con toda<br />

entrega cuando continuó diciendo: “¡Jesús nos ofrece algo más grande que la Copa del<br />

Mundo! Nos ofrece la posibilidad de una vida fecunda, una vida feliz, y también un<br />

futuro con Él que no tendrá fin, allá en la vida eterna.”<br />

96


Jueguen Siempre Adelante<br />

Mis lágrimas también rodaron, como también no podía contener el gozo que sentía en<br />

mi pecho, y reflejaba en mi sonrisa, al recordarlo hoy escribiéndolo también tengo<br />

lagrimas en mis ojos porque el gozo de esas palabras es el mismo, jugar en el equipo<br />

de Jesús es lo mejor sin duda alguna, con Él “jugamos <strong>siempre</strong> <strong>adelante</strong>”.<br />

Pero para jugar en su equipo hay que prepararse en todo momento y el Papa nos<br />

invitaba a hacernos otras interrogantes que nos ayuden en ese entrenamiento: “‘¿Yo<br />

rezo?’ cada uno se contesta. ¿Yo hablo con Jesús? ¿o le tengo miedo al silencio?<br />

¿dejo que el Espíritu Santo hable en mi corazón? Yo le pregunto a Jesús ¿qué querés<br />

que haga? ¿Qué querés de mi vida?”<br />

“Estos son los entrenamientos para seguir a Jesús: La oración, los sacramentos y la<br />

ayuda a los demás.<br />

El servicio a los demás.” (Papa Francisco)<br />

3. El campo como obra en construcción.<br />

“Somos parte de la Iglesia. Más aún, nos convertimos en constructores de la<br />

Iglesia y protagonistas de la historia.<br />

Chicos y chicas, por favor, no se metan en la cola de la historia,<br />

¡sean protagonistas!<br />

¡Jueguen para <strong>adelante</strong>!<br />

¡Pateen <strong>adelante</strong>!<br />

¡Construyan un mundo mejor!<br />

¡Un mundo de hermanos, un mundo de justicia, de amor, de paz, de fraternidad, de<br />

solidaridad!<br />

¡Juéguenla <strong>adelante</strong> <strong>siempre</strong>!”<br />

(Papa Francisco)<br />

97


Jueguen Siempre Adelante<br />

Estas palabras me llenan y animan a seguir construyendo una Iglesia viva, un cuerpo<br />

de Cristo bien fundado sobre roca firme, una Iglesia que se renueva cada día con la<br />

gracia del Espíritu Santo, me invitan a luchar cada día por ser su discípulo.<br />

Todos construimos y somos parte de esta Iglesia, todos somos el cuerpo de Cristo, y Él<br />

no quiere que ninguno de sus hijos se pierda. “Comencemos a construirla empezando<br />

por nosotros mismos”.<br />

“Queridos amigos, no se olviden: ustedes son el campo de la fe. Ustedes son los<br />

atletas de Cristo. Ustedes son los constructores de una Iglesia más hermosa y de un<br />

mundo mejor.” (Papa Francisco)<br />

Como ya dije antes, ésta ha sido la mejor vigilia de toda mi experiencia espiritual, no<br />

existen palabras para traducir toda esa hermosa, maravillosa y extraordinaria<br />

experiencia de fe, creo que los millones de jóvenes que estuvimos ahí y en todas las<br />

jornadas mundiales de la juventud podríamos escribir cada quien un libro y ni aun así,<br />

lograríamos plasmar todo su significado, el reto es continuar luchando, aun en nuestra<br />

debilidad para seguir <strong>siempre</strong> <strong>adelante</strong>.<br />

98


Jueguen Siempre Adelante<br />

SANTA MISA PARA LA<br />

XXVIII JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD<br />

HOMILÍA DEL SANTO PADRE FRANCISCO<br />

Paseo marítimo de Copacabana, Río de Janeiro<br />

Domingo 28 de julio de 2013<br />

Ante un mar humano de casi cuatro millones de jóvenes que colmaban la playa de Copacabana,<br />

el Papa Francisco cerró la Jornada Mundial de la Juventud 2013 con un llamado a llevar el<br />

Evangelio “a todos”, sin límites ni fronteras.<br />

«Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». Con estas palabras, Jesús se<br />

dirige a cada uno de ustedes diciendo: «Qué bonito ha sido participar en la Jornada<br />

Mundial de la Juventud, vivir la fe junto a jóvenes venidos de los cuatro ángulos de la<br />

tierra, pero ahora tú debes ir y transmitir esta experiencia a los demás». Jesús te llama<br />

a ser discípulo en misión. A la luz de la palabra de Dios que hemos escuchado, ¿qué<br />

nos dice hoy el Señor? Tres palabras: Vayan, sin miedo, para servir.<br />

1. Vayan. En estos días aquí en Río, han podido experimentar la belleza de encontrar a<br />

Jesús y de encontrarlo juntos, han sentido la alegría de la fe. Pero la experiencia de<br />

este encuentro no puede quedar encerrada en su vida o en el pequeño grupo de la<br />

parroquia, del movimiento o de su comunidad. Sería como quitarle el oxígeno a una<br />

llama que arde. La fe es una llama que se hace más viva cuanto más se comparte, se<br />

transmite, para que todos conozcan, amen y profesen a Jesucristo, que es el Señor de<br />

la vida y de la historia (cf. Rm 10,9).<br />

Pero ¡cuidado! Jesús no ha dicho: si quieren, si tienen tiempo, sino: «Vayan y hagan<br />

discípulos a todos los pueblos». Compartir la experiencia de la fe, dar testimonio de la<br />

fe, anunciar el evangelio es el mandato que el Señor confía a toda la Iglesia, también a<br />

ti; es un mandato que no nace de la voluntad de dominio o de poder, sino de la fuerza<br />

del amor, del hecho que Jesús ha venido antes a nosotros y nos ha dado, no algo de<br />

sí, sino todo él, ha dado su vida para salvarnos y mostrarnos el amor y la misericordia<br />

99


Jueguen Siempre Adelante<br />

de Dios. Jesús no nos trata como a esclavos, sino como a hombres libres, amigos,<br />

hermanos; y no sólo nos envía, sino que nos acompaña, está <strong>siempre</strong> a nuestro lado<br />

en esta misión de amor.<br />

¿Adónde nos envía Jesús? No hay fronteras, no hay límites: nos envía a todos. El<br />

Evangelio no es para algunos sino para todos. No es sólo para los que nos parecen<br />

más cercanos, más receptivos, más acogedores. Es para todos. No tengan miedo de ir<br />

y llevar a Cristo a cualquier ambiente, hasta las periferias existenciales, también a<br />

quien parece más lejano, más indiferente. El Señor busca a todos, quiere que todos<br />

sientan el calor de su misericordia y de su amor.<br />

En particular, quisiera que este mandato de Cristo: «Vayan», resonara en ustedes<br />

jóvenes de la Iglesia en América Latina, comprometidos en la misión continental<br />

promovida por los obispos. Brasil, América Latina, el mundo tiene necesidad de Cristo.<br />

San Pablo dice: «¡Ay de mí si no anuncio el evangelio!» (1 Co 9,16). Este continente ha<br />

recibido el anuncio del evangelio, que ha marcado su camino y ha dado mucho fruto.<br />

Ahora este anuncio se os ha confiado también a ustedes, para que resuene con<br />

renovada fuerza. La Iglesia necesita de ustedes, del entusiasmo, la creatividad y la<br />

alegría que les caracteriza. Un gran apóstol de Brasil, el beato José de Anchieta, se<br />

marchó a misionar cuando tenía sólo diecinueve años. ¿Saben cuál es el mejor medio<br />

para evangelizar a los jóvenes? Otro joven. Éste es el camino que hay que recorrer.<br />

2. Sin miedo. Puede que alguno piense: «No tengo ninguna preparación especial,<br />

¿cómo puedo ir y anunciar el evangelio?». Querido amigo, tu miedo no se diferencia<br />

mucho del de Jeremías, un joven como ustedes, cuando fue llamado por Dios para ser<br />

profeta. Recién hemos escuchado sus palabras: «¡Ay, Señor, Dios mío! Mira que no sé<br />

hablar, que sólo soy un niño». También Dios dice a ustedes lo que dijo a Jeremías: «No<br />

les tengas miedo, que yo estoy contigo para librarte» (Jr 1,6.8). Él está con nosotros.<br />

100


Jueguen Siempre Adelante<br />

«No tengan miedo». Cuando vamos a anunciar a Cristo, es él mismo el que va por<br />

delante y nos guía. Al enviar a sus discípulos en misión, ha prometido: «Yo estoy con<br />

ustedes todos los días» (Mt 28,20). Y esto es verdad también para nosotros. Jesús no<br />

nos deja solos, nunca les deja solos. Les acompaña <strong>siempre</strong>.<br />

Además Jesús no ha dicho: «Ve», sino «Vayan»: somos enviados juntos. Queridos<br />

jóvenes, sientan la compañía de toda la Iglesia, y también la comunión de los santos,<br />

en esta misión. Cuando juntos hacemos frente a los desafíos, entonces somos fuertes,<br />

descubrimos recursos que pensábamos que no teníamos. Jesús no ha llamado a los<br />

apóstoles a vivir aislados, los ha llamado a formar un grupo, una comunidad. Quisiera<br />

dirigirme también a ustedes, queridos sacerdotes que concelebran conmigo en esta<br />

eucaristía: han venido para acompañar a sus jóvenes, y es bonito compartir esta<br />

experiencia de fe. Pero es una etapa en el camino. Sigan acompañándolos con<br />

generosidad y alegría, ayúdenlos a comprometerse activamente en la Iglesia; que<br />

nunca se sientan solos.<br />

3. La última palabra: para servir. Al comienzo del salmo que hemos proclamado están<br />

estas palabras: «Canten al Señor un cántico nuevo» (95,1). ¿Cuál es este cántico<br />

nuevo? No son palabras, no es una melodía, sino que es el canto de su vida, es dejar<br />

que nuestra vida se identifique con la de Jesús, es tener sus sentimientos, sus<br />

pensamientos, sus acciones. Y la vida de Jesús es una vida para los demás. Es una<br />

vida de servicio.<br />

San Pablo, en la lectura que hemos escuchado hace poco, decía: «Me he hecho<br />

esclavo de todos para ganar a los más posibles» (1 Co 9,19). Para anunciar a Jesús,<br />

Pablo se ha hecho «esclavo de todos». Evangelizar es dar testimonio en primera<br />

persona del amor de Dios, es superar nuestros egoísmos, es servir inclinándose a lavar<br />

los pies de nuestros hermanos como hizo Jesús.<br />

Vayan, sin miedo, para servir. Siguiendo estas tres palabras experimentarán que quien<br />

101


Jueguen Siempre Adelante<br />

evangeliza es evangelizado, quien transmite la alegría de la fe, recibe alegría. Queridos<br />

jóvenes, cuando vuelvan a sus casas, no tengan miedo de ser generosos con Cristo,<br />

de dar testimonio del evangelio. En la primera lectura, cuando Dios envía al profeta<br />

Jeremías, le da el poder para «arrancar y arrasar, para destruir y demoler, para<br />

reedificar y plantar» (Jr 1,10). También es así para ustedes. Llevar el evangelio es<br />

llevar la fuerza de Dios para arrancar y arrasar el mal y la violencia; para destruir y<br />

demoler las barreras del egoísmo, la intolerancia y el odio; para edificar un mundo<br />

nuevo. Jesucristo cuenta con ustedes. La Iglesia cuenta con ustedes. El Papa cuenta<br />

con ustedes. Que María, Madre de Jesús y Madre nuestra, les acompañe <strong>siempre</strong> con<br />

su ternura: «Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». Amén.<br />

Reflexión.<br />

«Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos».<br />

«Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». “Ahora tú debes ir y transmitir<br />

esta experiencia a los demás. Jesús te llama a ser discípulo en misión. A la luz de la<br />

Palabra de Dios que hemos escuchado”.<br />

Estas fueron las primeras palabras de su santidad el papa Francisco en la Misa de<br />

clausura de la Jornada Mundial de la Juventud, un llamado a reconocer y<br />

comprometernos con la necesidad de la misión de nuestra Iglesia, de anunciar el<br />

mensaje del Evangelio a todas las personas. “Vayan, sin miedo, para servir”.<br />

1. Vayan.<br />

Llenos de la presencia y la fuerza del Espíritu Santo, llenos de su alegría por<br />

encontrarse y estar junto a Jesús, el siguiente paso al igual que aquel día en<br />

Pentecostés, es tomar valor y salir, ir y anunciar las grandes cosas que Dios hace,<br />

romper barreras, vencernos a nosotros mismos, negarnos y no dejar que los demás se<br />

pierdan de ese encuentro con Cristo, es nuestro deber como cristianos anunciarles el<br />

amor de Dios, compartirlo y vivirlo con ellos, no es si queremos, es un mandato a<br />

102


Jueguen Siempre Adelante<br />

compartir una fe viva en Jesús, una misión en la que Él <strong>siempre</strong> nos acompaña: “yo<br />

estaré con ustedes hasta el fin de los tiempos”.<br />

Tenemos que salir de nosotros mismos, de nuestro grupo, de nuestra parroquia, no<br />

tener fronteras ni limitantes se nos ha encomendado, el Evangelio es para todos, hay<br />

que “urbangelizar” llevar el Evangelio a todos los ambientes, en todos nuestros<br />

entornos donde convivimos cada día, ahí hay que poner a Cristo porque su amor es<br />

para todos “Jóvenes evangelizando jóvenes”.<br />

2. Sin miedo.<br />

“Él está con nosotros. «No tengan miedo». Cuando vamos a anunciar a Cristo,<br />

es Él mismo el que va por delante y nos guía”. Sin duda estas palabras nos llenan de<br />

confianza, Cristo nos acompaña, la Iglesia nos acompaña y el llamado también ha sido<br />

para todos sus representantes para que “nunca nos dejen solos en esta misión”.<br />

3. Para servir.<br />

Debemos procurar que nuestra vida, nuestro testimonio, nuestras obras “se<br />

identifiquen con Jesús”, pensar como Él, actuar como Él y amar como Él. “Servir a los<br />

demás como Él nos enseñó”. Reflejando el amor de Dios por encima de sí mismo y<br />

abandonándose a su santa voluntad.<br />

“Por nuestros frutos nos conocerán” y lo que sembremos será lo que cosecharemos,<br />

anunciar el Evangelio es un compromiso de vida cristiana que sólo se refleja en un<br />

verdadero testimonio, como muestra del poder y la fuerza que viene de la gracia de<br />

Dios.<br />

«Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». Amén.<br />

103


Jueguen Siempre Adelante<br />

REZO DEL ANGELUS DOMINI<br />

ALOCUCIÓN DEL SANTO PADRE<br />

Paseo marítimo de Copacabana, Río de Janeiro<br />

Domingo 28 de julio de 2013<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

Les agradezco también a ustedes, queridos jóvenes, todas las alegrías que me<br />

han dado en estos días. Llevo a cada uno de ustedes en mi corazón. Ahora dirigimos<br />

nuestra mirada a la Madre del cielo, la Virgen María. En estos días, Jesús les ha<br />

repetido con insistencia la invitación a ser sus discípulos misioneros; han escuchado la<br />

voz del Buen Pastor que les ha llamado por su nombre y han reconocido la voz que les<br />

llamaba (cf. Jn 10,4). ¿No es verdad que, en esta voz que ha resonado en sus<br />

corazones, han sentido la ternura del amor de Dios? ¿Han percibido la belleza de<br />

seguir a Cristo, juntos, en la Iglesia? ¿Han comprendido mejor que el evangelio es la<br />

respuesta al deseo de una vida todavía más plena? (cf. Jn 10,10).<br />

La Virgen Inmaculada intercede por nosotros en el Cielo como una buena madre que<br />

cuida de sus hijos. Que María nos enseñe con su vida qué significa ser discípulo<br />

misionero.<br />

Cuando el ángel Gabriel anunció a María que iba a ser la Madre de Jesús, del<br />

Salvador, ella, aun sin comprender del todo el significado de aquella llamada, se fió de<br />

Dios y respondió: «He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra» (Lc<br />

1,38).<br />

Después de recibir la gracia de ser la Madre del Verbo encarnado, no se quedó con<br />

aquel don; marchó, salió de su casa y se fue rápidamente a ayudar a su pariente<br />

Isabel, que tenía necesidad de ayuda (cf. Lc 1,38-39); realizó un gesto de amor, de<br />

caridad, de servicio concreto, llevando a Jesús en su seno. Y este gesto lo hizo<br />

diligentemente.<br />

104


Jueguen Siempre Adelante<br />

Queridos amigos, éste es nuestro modelo. La que ha recibido el don más precioso de<br />

parte de Dios, como primer gesto de respuesta se pone en camino para servir y llevar a<br />

Jesús. Pidamos a la Virgen que nos ayude también a nosotros a llevar la alegría de<br />

Cristo a nuestros familiares, compañeros, amigos, a todos. No tengan nunca miedo de<br />

ser generosos con Cristo. ¡Vale la pena! Salgan y vayan con valentía y generosidad,<br />

para que todos los hombres y mujeres encuentren al Señor.<br />

Queridos jóvenes, tenemos una cita en la próxima Jornada Mundial de la Juventud, en<br />

2016, en Cracovia, Polonia. Pidamos, por la intercesión materna de María, la luz del<br />

Espíritu Santo para el camino que nos llevará a esta nueva etapa de gozosa<br />

celebración de la fe y del amor de Cristo.<br />

Reflexión.<br />

Trasmitamos nuestra alegría.<br />

Los jóvenes podemos vivir nuestra vida en Cristo con alegría, una alegría que no<br />

se termina con el pasar de los años, pero lo más importante es que podemos trasmitir y<br />

contagiar, compartir esa alegría con los demás, con todos, ya que “el Evangelio es la<br />

respuesta al deseo de una vida todavía más plena”.<br />

El mejor modelo que tenemos los hijos de Dios para ser verdaderos discípulos<br />

misioneros de Jesús es a la virgen María, que ella sea nuestro referente a seguir en<br />

este caminar en la fe. “Abandono, obediencia, disposición, amor, servicio” todo por<br />

hacer la voluntad de Dios: «He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu<br />

Palabra».<br />

La virgen María también nos acompaña, “ven con nosotros a caminar…”<br />

105


Jueguen Siempre Adelante<br />

ENCUENTRO CON EL COMITÉ DE COORDINACIÓN DEL<br />

CELAM EN EL CENTRO DE ESTUDIOS DE SUMARÉ<br />

DISCURSO DEL SANTO PADRE<br />

Río de Janeiro<br />

Domingo 28 de julio 2013<br />

El Papa Francisco exhortó al Comité Coordinador del Consejo Episcopal Latinoamericano y<br />

del Caribe (CELAM), a trabajar en una pastoral de la misericordia sin caer en la tentación de<br />

la ideologización del Evangelio.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

4. Algunas tentaciones contra el discipulado misionero<br />

La opción por la misionariedad del discípulo será tentada. No existe un seguimiento de<br />

Jesucristo sin tentaciones. Desde el obispo para abajo, todos van a ser tentados. De<br />

eso no se salva nadie, es parte de la vida cristiana porque eso te lleva a la conversión,<br />

a ver dónde está el Espíritu de Dios, dónde el espíritu del mundo, el demonio. Es así.<br />

Es importante saber por dónde va el mal espíritu para ayudarnos en el discernimiento.<br />

No se trata de salir a cazar demonios, sino simplemente de lucidez y astucia<br />

evangélica.<br />

Reflexión.<br />

Algunas tentaciones.<br />

Seguir, servir y anunciar a Cristo no es tarea fácil, como toda misión tiene sus<br />

riesgos, “el que se decide a servirle al Señor debe estar preparado para la prueba”, por<br />

eso el mismo Jesús recomendó a sus discípulos: “oren en todo momento para que no<br />

caigan en tentación” y San Pablo nos advierte a estar preparados “porque el enemigo<br />

anda como león rugiente buscando a quien devorar” nos invita a revestirnos con la<br />

armadura de Cristo para no ser víctimas de las tentaciones que puedan asecharnos.<br />

106


Jueguen Siempre Adelante<br />

Eso mismo dijo el papa Francisco a todos los obispos de nuestra Iglesia, haciéndoles<br />

conciencia: “No existe un seguimiento de Jesucristo sin tentaciones”. Que todo eso es<br />

parte de la vida cristiana y de un legítimo proceso de conversión en el cual debemos<br />

ver la mano de Dios y dejarnos guiar por la gracia de su Espíritu Santo.<br />

Que Él nos de su fortaleza, su sabiduría, su amor y su astucia para hacer su voluntad.<br />

107


Jueguen Siempre Adelante<br />

ENCUENTRO CON LOS VOLUNTARIOS DE LA JMJ<br />

EN “RÍO CENTRO”<br />

Domingo 28 de julio 2013<br />

El Santo Padre sostuvo un breve encuentro con miles de jóvenes voluntarios de la JMJ en el<br />

Pabellón 5 de Río Centro, Río de Janeiro. El Pontífice agradeció su disponibilidad de servicio<br />

durante la jornada, además los alentó a responder a la propia vocación que Dios llama de<br />

manera personal a cada uno para ser felices.<br />

(Fragmentos del discurso)<br />

El servicio que han prestado en estos días me ha recordado la misión de san<br />

Juan Bautista, que preparó el camino a Jesús. Cada uno de ustedes, a su manera, ha<br />

sido un medio que ha facilitado a miles de jóvenes tener "preparado el camino" para<br />

encontrar a Jesús. Y éste es el servicio más bonito que podemos realizar como<br />

discípulos misioneros: Preparar el camino para que todos puedan conocer, encontrar y<br />

amar al Señor. A ustedes, que en este período han respondido con tanta diligencia y<br />

solicitud a la llamada para ser voluntarios de la Jornada Mundial de la Juventud, les<br />

quisiera decir: Sean <strong>siempre</strong> generosos con Dios y con los otros. No se pierde nada, y<br />

en cambio, es grande la riqueza de vida que se recibe.<br />

Dios llama a opciones definitivas, tiene un proyecto para cada uno: descubrirlo,<br />

responder a la propia vocación, es caminar hacia la realización feliz de uno mismo.<br />

Dios nos llama a todos a la santidad, a vivir su vida, pero tiene un camino para cada<br />

uno. Algunos son llamados a santificarse construyendo una familia mediante el<br />

sacramento del matrimonio.<br />

Hay quien dice que hoy el matrimonio está "pasado de moda"; ¿Está fuera de moda?,<br />

en la cultura de lo provisional, de lo relativo, muchos predican que lo importante es<br />

"disfrutar" el momento, que no vale la pena comprometerse para toda la vida, hacer<br />

opciones definitivas, "para <strong>siempre</strong>", porque no se sabe lo que pasará mañana. Yo, en<br />

cambio, les pido que sean revolucionarios, que vayan contracorriente; sí, en esto les<br />

pido que se rebelen contra esta cultura de lo provisional, que, en el fondo, cree que<br />

108


Jueguen Siempre Adelante<br />

ustedes no son capaces de asumir responsabilidades, que no son capaces de amar<br />

verdaderamente. Yo tengo confianza en ustedes, jóvenes, y pido por ustedes.<br />

Atrévanse a "ir contracorriente". También tenga la valentía a ser felices.<br />

El Señor llama a algunos al sacerdocio, a entregarse totalmente a Él, para amar a<br />

todos con el corazón del Buen Pastor. A otros los llama a servir a los demás en la vida<br />

religiosa: en los monasterios, dedicándose a la oración por el bien del mundo, en los<br />

diversos sectores del apostolado, gastándose por todos, especialmente por los más<br />

necesitados. Nunca olvidaré aquel 21 de septiembre –tenía 17 años- cuando, después<br />

de haber entrado en la iglesia de San José de Flores para confesarme, sentí por<br />

primera vez que Dios me llamaba. ¡No tengan miedo a lo que Dios pide! Vale la pena<br />

decir "sí" a Dios. ¡En Él está la alegría!<br />

Queridos jóvenes, quizá alguno no tiene todavía claro qué hará con su vida. Pídanselo<br />

al Señor; Él les hará ver el camino. Como hizo el joven Samuel, que escuchó dentro de<br />

sí la voz insistente del Señor que lo llamaba pero no entendía, no sabía qué decir y,<br />

con la ayuda del sacerdote Elí, al final respondió a aquella voz: Habla, Señor, que yo te<br />

escucho (cf. 1 S 3,1-10). Pidan también al Señor: ¿Qué quieres que haga? ¿Qué<br />

camino he de seguir?<br />

Queridos amigos, de nuevo les doy las gracias por lo que han hecho en estos días. Les<br />

agradezco a la pastoral, a los nuevas pastorales que pusieron a sus miembros al<br />

servicio de esta jornada. No olviden lo que han vivido aquí. Cuenten <strong>siempre</strong> con mis<br />

oraciones y estoy seguro de que yo puedo contar con las de ustedes.<br />

Recemos con amor y confianza a la santa Madre de Dios.<br />

¡Una última cosa, recen por mí!<br />

109


Jueguen Siempre Adelante<br />

Reflexión.<br />

Preparar el camino a Jesús.<br />

Todos estamos llamados a preparar el camino para un encuentro con Jesús,<br />

desde donde podamos hacerlo, a nuestra manera, con nuestro estilo, con nuestra<br />

propia forma de ser, si ya “encontramos” a Cristo, cada día esforcémonos para<br />

preparar el camino para que otros también puedan encontrarse con Él y puedan amarlo<br />

y sentir su amor.<br />

Sólo en Jesús somos criaturas nuevas, Él renueva y cambia nuestra manera de pensar<br />

y nuestra vida completamente, todo lo que damos en beneficio de Él y los demás, Él lo<br />

multiplica en abundancia, al ciento por uno, Él lo da todo. “No se pierde nada”.<br />

Dios tiene un proyecto de vida, un propósito positivo para cada uno, nos llama a la<br />

santidad recordándonos aquellas palabras de Jesús: “Sean santos como vuestro Padre<br />

es Santo”. El papa Francisco nos invita a construir con firmeza, sobre la roca, a ser<br />

determinantes ante la cultura de lo provisional, de lo pasajero, de lo incierto, que<br />

demostremos que sí podemos ser responsables, confiables en todos los sentidos.<br />

Nos invita a revolucionar nuestro espacio, a amar verdaderamente, a remar<br />

contracorriente y sobre todo a no tener miedo de ser felices. Para llegar a la santidad<br />

debemos descubrir nuestra vocación para que ésta sea el camino hasta ella:<br />

matrimonio, sacerdocio, vida religiosa, laico comprometido, misionero. Y como ya lo<br />

dijo él: “Queridos jóvenes, quizá alguno no tiene todavía claro qué hará con su vida.<br />

Pídanselo al Señor; Él les hará ver el camino”. “Pidan también al Señor: ¿Qué quieres<br />

que haga? ¿Qué camino he de seguir?”.<br />

No olviden lo que han vivido aquí. Lo que han vivido con Cristo.<br />

110


Jueguen Siempre Adelante<br />

Recemos con amor y confianza a la santa Madre de Dios.<br />

¡Una última cosa, recen también por mí!<br />

111


Jueguen Siempre Adelante<br />

CONCLUSIONES<br />

Jesús nos pide que le sigamos toda la vida, nos pide que seamos sus discípulos,<br />

que «juguemos en su equipo».<br />

¡Jesús nos ofrece algo más grande que la Copa del Mundo! Nos ofrece la posibilidad<br />

de una vida fecunda, una vida feliz, y también un futuro con Él que no tendrá fin, allá en<br />

la Vida Eterna.<br />

Estos son los entrenamientos para seguir a Jesús: La oración, los sacramentos y la<br />

ayuda a los demás. El servicio a los demás.<br />

¡Sean protagonistas! ¡Jueguen para <strong>adelante</strong>! ¡Pateen <strong>adelante</strong>!<br />

¡Juéguenla <strong>adelante</strong> <strong>siempre</strong>!”<br />

Papa Francisco.<br />

También para el pasado mundial de fútbol Brasil 2014, “el papa se reunió con<br />

miles de jóvenes deportistas italianos en la famosa plaza de San Pedro y les invito a<br />

“no jugar a la defensiva sino al ataque” para promover el Evangelio”.<br />

“He oído decir que me han nombrado su capitán”. “Como capitán les pido que no se<br />

encierren en la defensa sino a atacar, a jugar juntos nuestro partido, que es el del<br />

Evangelio”.<br />

“Les invito, no solamente a jugar sino a implicarse en la vida como en el deporte”.<br />

“Les invito a sentir el sabor, la belleza del juego de equipo, no al individualismo”<br />

recalcó Francisco.<br />

“Les animo a mostrar su compromiso jugando con los jóvenes de la periferia: al<br />

llevarles balones, les dan razones de esperanza y confianza”, dijo.<br />

(AFP Ciudad del Vaticano)<br />

Es así de esta forma que su santidad el papa Francisco nos pide jugar al frente,<br />

tener valor para encarar al adversario, para encarar los retos que se nos presenten en<br />

la vida, en la Iglesia, en este caminar en la fe al encuentro definitivo con Cristo.<br />

112


Jueguen Siempre Adelante<br />

“Juguemos <strong>siempre</strong> <strong>adelante</strong>”; pero, para ello también debemos prepararnos física y<br />

mentalmente, tener estrategias como equipo, refiriéndonos como equipo a: tu familia,<br />

tus amigos, tu comunidad, tu grupo juvenil, la Iglesia en sí.<br />

De esa forma conseguiremos los resultados positivos en este campo de la<br />

evangelización que con la ayuda del Espíritu Santo debemos alcanzar. Consideremos<br />

entonces algunas de esas tácticas especiales y tratemos de ponerlas en práctica en<br />

nuestra vida cotidiana, en todo lo que hacemos como personas y como Iglesia.<br />

Tácticas mentales de los jugadores.<br />

Actitud.<br />

Un jugador debe mantener una actitud de auto-confianza durante todo el partido<br />

y esforzarse hasta el límite de sus posibilidades para lograr la victoria. No hay que<br />

dejarse influir por el público o perder la confianza si el partido no transcurre como se<br />

tenía planeado.1<br />

Todo jugador en el equipo de Cristo no debe rendirse nunca, “hay que perseverar hasta<br />

el final, hasta llegar a la meta”, tenerse confianza en sí mismo pero sobre todo confiar<br />

en Dios, depositar en Él, en su voluntad toda la confianza. Dar lo mejor de sí <strong>siempre</strong>,<br />

no dejarse influenciar por lo negativo que la gente dentro y fuera de la Iglesia pueda<br />

decir. No se debe perder de vista el objetivo.<br />

Comunicación.<br />

Una buena comunicación entre todos los miembros del equipo es esencial. Los<br />

jugadores de equipos experimentados hablan constantemente entre sí. El portero suele<br />

gritar a la defensa para advertirle de que va a coger el balón y evitar así malos<br />

entendidos; también puede indicarles que se <strong>adelante</strong>n para dejar a los atacantes<br />

contrarios en fuera de juego, ya que tiene una mejor visión del campo. 2<br />

113


Jueguen Siempre Adelante<br />

La comunicación es indispensable en todo, nunca debe faltar la comunicación y hay<br />

que hacer de ella una herramienta eficaz; así, la buena comunicación entre los<br />

jugadores de nuestro equipo nos beneficiará <strong>siempre</strong>, tendremos mejores propuestas<br />

en la evangelización, podremos evitarnos de muchos malos entendidos por falta de<br />

comunicación, y además, podremos neutralizar a nuestros oponentes o desafíos a<br />

enfrentar en nuestra misión de anunciar el Evangelio y es bueno aceptar opiniones<br />

positivas de gente que pueda tener una mejor apreciación de nuestro servicio y trabajo.<br />

Visión de campo.<br />

La capacidad para ver el espacio en el que se está desarrollando el juego es<br />

muy importante. Moverse a los espacios, avanzar con balón controlado, enviar pases a<br />

los espacios abiertos, moverse sin balón a estos espacios. 3<br />

Es importante conocer perfectamente el campo donde estamos jugando, el sector<br />

donde queremos llevar el mensaje del Evangelio, desarrollar esa habilidad de encontrar<br />

los espacios más idóneos para desarrollar nuestros planes para evangelizar. Eso es<br />

algo de mucha importancia, hay que saber moverse, crear alternativas, ser propositivos<br />

<strong>siempre</strong>.<br />

Tácticas generales de equipo.<br />

Fútbol de contraataque.<br />

El fútbol de contraataque tiene como objetivo sorprender desprevenido al<br />

oponente. No sólo participan los delanteros, sino que también los defensas y<br />

centrocampistas pueden participar intentando ir hacia delante en superioridad numérica<br />

y moviendo el balón de forma rápida e inteligente. La velocidad es un factor muy<br />

importante para este estilo de juego, tanto para quien lo utiliza como para quien quiere<br />

114


Jueguen Siempre Adelante<br />

contrarrestarlo. Los equipos que juegan bien al contraataque suelen presionar de forma<br />

contundente para que los centrocampistas pierdan el balón. 4<br />

Es importante que a la hora de contraatacar; es decir, ya relacionándolo a la<br />

evangelización como lo hemos venido haciendo, preparar un plan de acción a seguir o<br />

ejecutar, identificar a dónde queremos llegar, a quiénes queremos evangelizar y qué<br />

mensaje queremos trasmitirles, y a la hora de ponerlo en marcha, todos los miembros<br />

del equipo de servidores, todos los miembros del grupo pueden aportar, no sólo los que<br />

están al frente, también los que están atrás, las “ovejas” también pueden ser clave a la<br />

hora de evangelizar a otros jóvenes, se puede sacar provecho a la cantidad numérica y<br />

sobre todo nos puede dar mayor rapidez para desarrollar nuestra misión que eso es<br />

muy importante, hacerlo cuanto antes sin dejar pasar mucho tiempo.<br />

Fútbol de posesión.<br />

Este estilo de juego se caracteriza por retener el control del balón el mayor<br />

tiempo posible, arriesgando poco en el pase (casi <strong>siempre</strong> en corto) y creando la<br />

jugada poco a poco hasta que se tiene una oportunidad clara. Para utilizar este estilo<br />

es necesario tener en el equipo jugadores habilidosos en el control del balón y precisos<br />

en el pase. Si se mantiene bien la posesión, los jugadores contrarios se irán cansando<br />

ya que tendrán que correr y esforzarse más para robar balones. 5<br />

“Retener el control del balón”, algo a considerar sin duda a diferencia de la táctica<br />

anterior es, si aun no tenemos definido un plan de acción para nuestra misión de<br />

evangelización, podemos no arriesgar nuestros recursos, no gastar nuestras ideas, ser<br />

prudentes y no actuar deliberadamente, por impulsos o momentos de emotividad, no<br />

arriesgarse, es necesario mantener el control de nuestro grupo, de la gente que<br />

dirigimos y el control del plan que queremos ejecutar en beneficio de la gente a quien<br />

queremos evangelizar, así también procuremos en la manera de lo posible, mantener el<br />

control sobre nosotros mismos.<br />

115


Jueguen Siempre Adelante<br />

Fútbol directo.<br />

El estilo directo consiste en mantener poco tiempo el balón en los pies antes de<br />

pasar o tirar a puerta. También suele llamársele "fútbol al primer toque". Requiere,<br />

sobre todo, tener en el equipo a jugadores con precisión en el pase en corto y<br />

delanteros efectivos capaces de materializar las oportunidades. 6<br />

“Jueguen <strong>adelante</strong>” “pateen al frente” “vayan al ataque” nos ha dicho el papa Francisco,<br />

“vayan, no tengan miedo” “vayan contracorriente”; a veces nos cuesta tanto ir de frente<br />

ante las adversidades, ante las dificultades que el servicio implica, eso nos distrae y no<br />

vamos de frente en busca de los jóvenes que necesitan tener ese encuentro con Cristo,<br />

por eso su santidad nos dice, “salgan a la calle” si queremos evangelizar, si queremos<br />

compartir a Cristo no debemos quedarnos sólo en la parroquia, sólo en el grupo juvenil<br />

y mucho menos en casa, tenemos que presentar una actitud ofensiva, crear<br />

alternativas de ataque, ir y anunciar el Evangelio de forma directa, con nuestro<br />

testimonio, con nuestro estilo de vida.<br />

Tácticas ofensivas en juego.<br />

En fútbol, atacar es en cierto modo hacer lo inesperado. Las tácticas de fútbol<br />

ofensivo tienen como objetivo llevar el balón cerca de la portería contraria y lograr el<br />

mejor ángulo posible para marcar. 7<br />

“Atacar es en cierto modo hacer lo inesperado”, debemos sorprender con nuestras<br />

ideas y propuestas en la evangelización, persuadir, llamar la atención, “fascinar” a los<br />

jóvenes que están dentro y fuera de la Iglesia, para que ellos también descubran y se<br />

encuentren con Cristo, acercarlos a Él, lo más que podamos, llevar su Mensaje hasta<br />

ellos, lo más cerca posible hasta que podamos anotar en sus corazones<br />

compartiéndoles ese amor de Dios.<br />

116


Jueguen Siempre Adelante<br />

Pase y movimiento.<br />

Es la táctica de equipo más básica. En cuanto el jugador tiene la posesión del<br />

balón, debe ser rápido para decidir si debe pasar o no; tanto si pasan inmediatamente<br />

como si no, necesitan moverse siguiendo el movimiento del balón. Una vez que el<br />

jugador ha pasado la pelota, no debe permanecer estático sino moverse a una posición<br />

donde pueda recibir un pase de vuelta y así dar más opciones al jugador que tiene la<br />

posesión del balón. 8<br />

En la manera en que hagamos más efectiva la distribución del trabajo para desarrollarlo<br />

como equipo será menos difícil realizarlo, una adecuada rotación de todas las<br />

actividades puede ayudar mucho a la hora de realizar cada una de ellas; así como<br />

también, la adecuada asignación de estas a los miembros indicados para ejecutarlas.<br />

Cada quien debe realizar dentro del grupo la función que mejor se le facilite según sus,<br />

talentos y cualidades para brindar un mejor servicio. Además de estar dispuestos a<br />

ayudarles a los demás cuando ya hemos realizado nuestras tareas.<br />

Cambiar el juego.<br />

Dar pases de lado a lado del campo a un jugador con espacio libre es una forma<br />

muy efectiva de aliviar la presión y construir un nuevo ataque. 9<br />

A veces queremos realizar o hacer todo nosotros mismos, pero buscar la ayuda o el<br />

complemento de alguien u otros más, podría dar mejores resultados, es bueno pensar<br />

<strong>siempre</strong> en el beneficio de todo el grupo, si no podemos salir con todo, cambiemos la<br />

estrategia y con menos presión podríamos ser más productivos.<br />

117


Jueguen Siempre Adelante<br />

Agujero defensivo.<br />

Pasar el balón al espacio entre los centrocampistas y los defensas contrarios.<br />

Normalmente, un delantero de espaldas a la portería recibirá el balón e intentará<br />

girarse con el balón o distribuirlo a jugadores que estén encarando la portería. 10<br />

La evangelización requiere de astucia, a veces no encontramos la manera de llegarle<br />

efectivamente a los jóvenes, no encontramos de qué forma hacerlos sentirse parte de<br />

la comunidad, del grupo y que se involucren o se sientan identificados. Es nuestra tarea<br />

buscar esos espacios por donde saber llegarles, por más defensivos que se muestren,<br />

con la ayuda y la dirección del Espíritu Santo, es posible encontrar esos agujeros que<br />

podemos llenar con el amor de Dios.<br />

Intercambio de bandas.<br />

Cuando un equipo tiene dos jugadores de banda flexibles, pueden intercambiar<br />

sus posiciones durante el partido. 11<br />

Cuando tenemos jugadores o servidores que no están dando lo mejor de sí, y su<br />

servicio no refleja resultados positivos, es necesario hacer un cambio, puede ser de<br />

ministerio, de cargo, o alguna que otra tarea en la cual él pueda desempeñarse mejor.<br />

Igual si a veces el trato que estamos dando a los miembros de nuestro grupo no es el<br />

mejor, también podemos cambiar de banda, cambiar la estrategia y sobre todo seguir<br />

<strong>adelante</strong>.<br />

118


Jueguen Siempre Adelante<br />

Hombre clave.<br />

Cuando un equipo tiene un goleador de gran calidad con capacidad de atraer a<br />

dos defensas, esto crea espacios que pueden ser aprovechados por otros jugadores. 12<br />

Un hombre clave en el equipo, creo que es obvio pero no está de más decirlo, tenemos<br />

el mejor hombre clave en nuestro equipo, Jesús y “todo lo podemos con Cristo” Él es<br />

capaz de hacer cosas inimaginables, cosas imposibles, cosas nuevas, “Él es el camino,<br />

la verdad y la vida”, “Él nos da vida y vida en abundancia”. “Cristo nos ofrece la vida<br />

eterna”. ¡Ánimo!, “carguemos con nuestra cruz de cada día”, “muramos con Él, para<br />

resucitar con Él”, que sea Él quien viva en nosotros y compartamos la alegría de su<br />

amor, la alegría de vivir para Él… “Juguemos Siempre Adelante”, “juguemos en el<br />

equipo de Jesús”.<br />

Citas: 1, 2, 3, 4,5,… 12. Fuente: Editor: GFDL, v.o., Granfutbol.com, 2007.<br />

119


Jueguen Siempre Adelante<br />

“TECNIQUEANDO” FRASES CLAVES<br />

“Cuando aislamos a los jóvenes, cometemos una injusticia”<br />

“Ellos, verdaderamente, son el futuro de un pueblo”<br />

“Ellos son el futuro porque tienen la fuerza, son jóvenes, irán <strong>adelante</strong>”<br />

“Cristo tiene confianza en los jóvenes”<br />

“Pero también los jóvenes tienen confianza en Cristo”<br />

“Quieren encontrar un refugio en su abrazo, justo cerca de su corazón”<br />

“La juventud es el ventanal por el que entra el futuro en el mundo”<br />

“Sean protagonista de su propio porvenir”<br />

“Dios nunca deja que nos hundamos”<br />

“Dios camina a su lado, en ningún momento los abandona”<br />

“Jamás la apaguemos en nuestro corazón. Dios es nuestra esperanza”<br />

“Dios actúa y nos sorprende también en medio de las dificultades”<br />

“Dios guarda lo mejor para nosotros”<br />

“El cristiano es alegre, nunca triste. Dios nos acompaña”<br />

“El cristiano no puede ser pesimista”<br />

“Si estamos verdaderamente enamorados de Cristo y sentimos cuánto nos ama,<br />

nuestro corazón se «inflamará» de tanta alegría que contagiará a cuantos viven a<br />

nuestro alrededor”<br />

“Todos hemos de aprender a abrazar a los necesitados”<br />

“Todos tenemos necesidad de mirar al otro con los ojos de amor de Cristo”<br />

«Puedes levantarte, puedes remontar; te costará, pero puedes conseguirlo si de<br />

verdad lo quieres»<br />

«Tú eres el protagonista de la subida, ésta es la condición indispensable.<br />

Encontrarás la mano tendida de quien te quiere ayudar, pero nadie puede subir<br />

por ti».<br />

“Y es importante saber acoger”<br />

“No se cansen de trabajar por un mundo más justo y más solidario”<br />

“No ver en el otro un competidor o un número, sino un hermano”<br />

120


Jueguen Siempre Adelante<br />

“La violencia sólo se puede vencer partiendo del cambio del corazón humano”<br />

“Nunca se desanimen, no pierdan la confianza, no dejen que la esperanza se<br />

apague”<br />

“No están solos, la Iglesia está con ustedes, el Papa está con ustedes”<br />

“Quiero lío en las diócesis, quiero que se salga afuera, quiero que la Iglesia salga<br />

a la calle”<br />

“Los jóvenes tienen que salir, tienen que hacerse valer, los jóvenes tienen que<br />

salir a luchar por los valores”<br />

“La fe en Jesucristo no es broma, es algo muy serio”<br />

“La cruz sigue siendo escándalo pero es el único camino seguro, el de la cruz, el<br />

de Jesús, la encarnación de Jesús”<br />

¡No licúen la fe en Jesucristo!<br />

“Veo en ustedes la belleza del rostro joven de Cristo, y mi corazón se llena de<br />

alegría”<br />

“Ustedes han respondido con generosidad y entusiasmo a la invitación que<br />

Jesús les ha hecho a estar con él, a ser sus amigos”<br />

Hoy Jesús nos sigue preguntando: ¿Quieres ser mi discípulo?<br />

¿Quieres ser mi amigo? ¿Quieres ser testigo del Evangelio?<br />

“Cristo ha crecido en ustedes”<br />

"Qué bien se está aquí"<br />

“Hoy, es bueno estar aquí reunidos en torno a Jesús. Él es quien nos acoge y se<br />

hace presente en medio de nosotros”<br />

"Bota fé – Pon fe”<br />

"Pon fe" y tu vida tendrá un sabor nuevo<br />

"pon esperanza" y cada día de tu vida estará iluminado y tu horizonte no será ya<br />

oscuro, sino luminoso; "pon amor" y tu existencia será como una casa<br />

construida sobre la roca, tu camino será gozoso, porque encontrarás tantos<br />

amigos que caminan contigo. ¡Pon fe, pon esperanza, pon amor!<br />

¡"Pon a Cristo" en tu vida, pon tu confianza en él y no quedarás defraudado!<br />

121


Jueguen Siempre Adelante<br />

“Hemos venido hoy aquí para acompañar a Jesús a lo largo de su camino de<br />

dolor y de amor, el camino de la Cruz”<br />

“Nadie puede tocar la Cruz de Jesús sin dejar en ella algo de sí mismo y sin llevar<br />

consigo algo de la cruz de Jesús a la propia vida”<br />

“Sólo en Cristo muerto y resucitado encontramos salvación y redención”<br />

“Estamos aquí para alabar al Señor, y lo hacemos reafirmando nuestra voluntad<br />

de ser instrumentos suyos”<br />

“Lo que aseguran los frutos, es ser fieles a Jesús”<br />

“Fidelidad a la vida de oración, en nuestro encuentro cotidiano con él en la<br />

Eucaristía y en las personas más necesitadas”<br />

“El «permanecer» con Cristo no es aislarse, sino un permanecer para ir al<br />

encuentro de los otros”<br />

“Que arda en su corazón el deseo de ser discípulos misioneros de Jesús”<br />

“El primer lugar donde se ha de evangelizar es la propia casa, el ambiente de<br />

estudio o de trabajo, la familia y los amigos”<br />

“No escatimemos esfuerzos en la formación de los jóvenes”<br />

“A veces parece que, para algunos, las relaciones humanas estén reguladas por<br />

dos «dogmas»: la eficiencia y el pragmatismo”<br />

“Queridos jóvenes, el Señor los necesita”<br />

“Jesús nos pide que le sigamos toda la vida, nos pide que seamos sus<br />

discípulos, que «juguemos en su equipo»”<br />

¡Jesús nos ofrece algo más grande que la Copa del Mundo! Nos ofrece la<br />

posibilidad de una vida fecunda, una vida feliz, y también un futuro con él que no<br />

tendrá fin, allá en la vida eterna<br />

“Cada uno de nosotros es una piedra viva, es un pedacito de la construcción, y si<br />

falta ese pedacito cuando viene la lluvia entra la gotera y se mete el agua dentro<br />

de la casa”<br />

“Los jóvenes en la calle. Son jóvenes que quieren ser protagonistas del cambio”<br />

“Queridos jóvenes, por favor ¡no balconeen en la vida! ¡Métanse en ella!”<br />

«Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos»<br />

122


Jueguen Siempre Adelante<br />

“Ahora tú debes ir y transmitir esta experiencia a los demás<br />

Jesús te llama a ser discípulo en misión”<br />

“Vayan, sin miedo, para servir”<br />

“La fe es una llama que se hace más viva cuanto más se comparte, se transmite”<br />

“No tengan miedo de ir y llevar a Cristo a cualquier ambiente”<br />

“La Iglesia necesita de ustedes, del entusiasmo, la creatividad y la alegría que les<br />

caracteriza”<br />

“Jesús no ha llamado a los apóstoles a vivir aislados, los ha llamado a formar un<br />

grupo, una comunidad”<br />

“Dejar que nuestra vida se identifique con la de Jesús”<br />

“No tengan miedo de ser generosos con Cristo, de dar testimonio del evangelio”<br />

“Llevar el evangelio es llevar la fuerza de Dios”<br />

“Jesucristo cuenta con ustedes. La Iglesia cuenta con ustedes. El Papa cuenta<br />

con ustedes”<br />

“El evangelio es la respuesta al deseo de una vida todavía más plena”<br />

“Que María nos enseñe con su vida qué significa ser discípulo misionero”<br />

“Pidamos a la Virgen que nos ayude también a nosotros a llevar la alegría de<br />

Cristo a nuestros familiares, compañeros, amigos, a todos”<br />

“No existe un seguimiento de Jesucristo sin tentaciones”<br />

“Sean <strong>siempre</strong> generosos con Dios y con los otros. No se pierde nada, y en<br />

cambio, es grande la riqueza de vida que se recibe”<br />

“Dios llama a opciones definitivas, tiene un proyecto para cada uno”<br />

“Dios nos llama a todos a la santidad, a vivir su vida, pero tiene un camino para<br />

cada uno”<br />

“Les pido que sean revolucionarios, que vayan contracorriente; sí, en esto les<br />

pido que se rebelen contra esta cultura de lo provisional”<br />

“Ustedes son capaces de asumir responsabilidades, son capaces de amar<br />

verdaderamente”<br />

“Yo tengo confianza en ustedes, jóvenes, y pido por ustedes. Atrévanse a "ir<br />

contracorriente". También tenga la valentía a ser felices”<br />

Papa Francisco.<br />

123


Jueguen Siempre Adelante<br />

Bibliografía<br />

Sagradas Escrituras: La Santa Biblia Católica.<br />

Documento oficial:<br />

Francisco en Brasil<br />

TODOS LOS DISCURSOS, HOMILÍAS, MENSAJES Y ORACIONES QUE PRONUNCIÓ<br />

S.S. FRANCISCO EN SU VIAJE APOSTÓLICO A RÍO DE JANEIRO<br />

CON OCASIÓN DE LA XXVIII JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD JULIO 2013.<br />

Los textos recopilados por ACI Prensa en este documento han sido proporcionados<br />

por la Sala de Prensa del Vaticano, incluyendo las palabras improvisadas por el<br />

Papa Francisco.<br />

OTROS TEXTOS RELACIONADOS:<br />

MENSAJES DE SAN JUAN PABLO II en diferentes encuentros y<br />

documentos durante su pontificado.<br />

Fuentes: Catholic.net y documentos de la Iglesia Católica en Internet.<br />

Citas del documento: Tácticas del Fútbol Editor: GFDL, v.o., Granfutbol.com, 2007.<br />

CRÉDITOS<br />

Producción ejecutiva: César A. Villalta.<br />

Una publicación de: PidArte Producciones<br />

Obra de: Ministerio Católico URBANGELIZANDO<br />

“Llevando a la calle el Evangelio”<br />

EDICIÓN I, Dic. 2015<br />

Dirección de publicación: William Antonio López<br />

Diagramación y edición: Karla Peña<br />

Diseño de Portada: José Manuel López<br />

Contactos y Pedidos:<br />

E-mail: cesgcrap@yahoo.es<br />

urbangelizando@gmail.com<br />

Facebook: CesGC El Mensajero<br />

Ministerio Católico Urbangelizando<br />

Twitter: @CesGC / @Urbangelizando<br />

Whatsapp y Tel.: (503) 7884-4390 / (503) 2393-5825<br />

124

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!