Periódico ABRIL 2019 | AMGP Delegación México

PERIÓDICO MENSUAL
2018-2020
Por Rogelio Ramos Aracén, tomado de “El 20 Congreso Internacional de Geología México” por Luis Felipe Mazadiego
Martínez y Octavio Puche Riart ABRIL 2019
El estado de la geología y las contribuciones del IGC.
Vulcanología.
La primera sección científica se dedicó al estudio de la
volcanología del Cenozoico y fue coordinada por el ingeniero
mexicano, Federico Mooser. México se encuentra en una
zona de concurrencia de varias placas tectónicas y, por
consiguiente, es un área de gran actividad volcánica. La
península de California se está separando del resto del
continente a través de la interacción de las fallas de
transformación, debido al deslizamiento hacia los lados de la
placa norteamericana con respecto a la placa del Pacífico
oriental. México está situado en la zona del Pacífico Oriental,
donde los cambios laterales adquieren gran importancia. En
el otro lado, en la costa del Océano Pacífico, desde el cabo
Corrientes hacia el sur, la Placa de Cocos se subduce debajo
del territorio mexicano, formando un zócalo como la Fosa de
Acapulco. Las rocas de magmatita que tienen sus orígenes
en la subducción de la Placa del Coco dieron lugar al
Cinturón Volcánico Transméxico, que cruza el país desde el
Pacífico hasta el Golfo de México. De manera similar, en el
lado caribeño, hay un cambio producido por el
desplazamiento de la placa norteamericana hacia el oeste y
la del caribe hacia el este.
La actividad volcánica estaba en su máximo
en el oligoceno medio (conocido en México
como la orogenia del cenozoico medio). Por
esta razón, el estudio del volcanismo se
centró en el Cenozoico, aunque existe una
importante actividad volcánica en el
Mesozoico y en el Cuaternario. Durante la
sesión, se presentaron estudios de volcanes
de diferentes períodos.
Un evento que conmocionó al mundo fue la
erupción del Volcán Parícutin (el destino de la
Excursión A-15). Estuvo activo desde 1943 hasta
1952. Un enorme cono, ahora de 224 m de altura,
surgió de las tierras de cultivo. Lava fluyó durante
10 km, enterrando las localidades de Parícutin y
San Juan Viejo en Parangaricutiro. Se emitió un
sello conmemorativo de la erupción y del Congreso.