Única Diario
Única Diario de Fotógrafas y Fotógrafos es un medio de comunicación visual fotográfico de exploración y experimentación. Un espacio donde nadie, será juez de nadie. Cada fotografx expresara a través de su mirada un punto y una perspectiva en la construcción de una imagen.
Única Diario de Fotógrafas y Fotógrafos es un medio de comunicación visual fotográfico de exploración y experimentación. Un espacio donde nadie, será juez de nadie. Cada fotografx expresara a través de su mirada un punto y una perspectiva en la construcción de una imagen.
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ÚNICA DIARIO DE FOTÓGRAFXS
AÑO I · NÚMERO 01 · AGO 2020
MAYRA MARTELL
PEDRO MEYER
RODRIGO ABD
INÉS ULANOVSKY
CORA GAMARNIK
CLAUDIA CONTERIS
MIGUEL BRAILLARD
MECHA FRÍAS
LUCILA VAIRO
LILIANA CONTRERA
CARLA
VILLALBA
Las influencers
Estela de Carlotto. Foto de Javier Moreno
EDITORIAL
DIRECTORXS Mirna Pucheta y Javier Moreno
COLABORADORA
REDACCIÓN ESPECIAL
Marcela Díaz
CORRECTOR
Aníbal Yuchak
STAFF DE FOTOGRAFXS
Mecha Frias
Carla Villalba
Gaspar Muiños
Nico Alvarez
REDES
Lucas Moreno
DISEÑÓ
Adrian Stecco para
Metanoia Comunicación
www.metanoia.info
COLABORAN
EN ESTE NUMERO
Dr Walter Giribuela
Cora Gamarnik
Miguel Braillard
Érica Aisa
Carolina Nikloson
Paola Olari
Lucila Vairo
Liliana Contrera
Claudia Conteris
Martin Codina
Natalia Cruz
Nazca, Perú. Caminantes de la Vida. JAVIER MORENO.
Bolívar 646
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
+54 9 11 5893.1740
www.unicafoto.com
diario@unicafoto.com
NACE ÚNICA DIARIO
Única Diario de Fotógrafas y Fotógrafos es un medio
de comunicación visual –por ahora sólo en formato
digital, la pandemia nos obligo a este recurso– para
que todas y todos podamos publicar fotos y textos
que hicimos con amor, con dolor o que simplemente
quedaron guardadas en un disco rígido, un pendrive o en
ese rollo sin revelar que tiene ganas de salir y mostrarse.
En Única Diario nadie será juez de nadie. Cada fotógrafa
o fotógrafo expresa a través de sus ojos, su mirada y su
perspectiva el punto de fuga que construye la imagen.
En Única Diario podrán apreciarse y leerse distintos tipos
de fotos y miradas, fotógrafas y fotógrafos consagradxs y
grandes maestras y maestros de la fotografía, ganadores
de premios internacionales como el Pulitzer o el World
Press Photo.
En este primer numero de Única Diario siento la enorme
satisfacción de tenerlxs aquí para que puedan disfrutarlas.
Pero como todo se construye desde abajo, en Única Diario
también tienen y tendrán un lugar asignado esos jóvenes
que se animan, adultxs que se sienten con vida al tener una
cámara, colegas y alumnxs que nunca ganaron premios...
Ésta será la primera vez que sus fotos vean la luz.
Quiero agradecer a todas las personas que enviaron sus
trabajos o sus escritos a Única Diario, que confiaron en mí,
en este proyecto que desde el número cero trae buenos
comentarios y mejores vibras, a lxs socixs y hermanxs de
nuestra cooperativa.
Única Cooperativa de Fotogrfxs Argentinxs Ltda, a mi
familia y a mi par, compañera, socia, esposa, Mirna Pucheta,
a quien amo desde siempre.
Sin amor no hay arte. Sin amor no existe la vida.
Javier Mendes Moreno
#01
EN ESTE NÚMERO
LAS INFLUENCERS
Mujeres que hacen historia en la
Universidad Nacional de Luján
SABER MIRAR
Libro Inés Ulanovsky
Libro Cora Gamarnik
TRAS LA IMAGEN
Cora Gamarnik. Natasha
Pisarenko sobre Ramona
ACTUALIDAD
Miguel Braillard
DISCO RÍGIDO
Desplazadas
Carolina Nikloson
POLAROID
Paola Olari
Nos pinta Luchar
UNICA EN SU MUNDO
Lucila Vairo desde el Perú.
GPS
De Río Grande a La Quiaca.
Dos jóvenes miradas
CÁMARA LÚCIDA
Liliana Contrera
Sexo
LANDSCAPE
Claudia Conteris
Mujeres de la India
GRAN ANGULAR
Rodrigo Abd
PORTFOLIO DESDE EL SUR
Jade Sívori
MAESTRIA FOTOGRAFICA
Pedro Mayer
PROFUNDIDAD DE CAMPO
Mayra Martell
NUDE
Carla Villalba
DIÁLOGO CON LA FOTOGRAFÍA
Érica Aisa
COOPERATIVAS ARGENTINAS
Leo Duva. Presidente de Gestara
INCUBADORA DE IMÁGENES
Mujeres de la tierra
UTT Colonia 20 de abril
IMAGEN DESNUDA
Mecha Frias
6
44
52
54
58
68
70
74
78
84
90
96
100
104
112
116
124
128
142
Mujeres que hacen historia
en la Universidad Nacional
Las influencers
de Luján.
Las Influencers es un ensayo fotográfico documental sobre las Mujeres de la Universidad
de Luján.
Cuando tomamos la iniciativa de convocar a estas mujeres, lo hicimos pensando en
homenajearlas a modo de agradecimiento por ser parte de un sistema público de
educación gratuita para la comunidad y porque forman parte de la la única Universidad
Nacional que la dictadura militar cerró por decreto.
Convocamos a docentes, Nodocentes, estudiantes, graduadas, autoridades, y a Estela
de Carlotto, Dra. Honoris Causa de la Universidad Nacional de Luján.
También se sumó al proyecto el Dr. Walter Giribuela, docente y escritor quien escribió
la nota principal.
El presente proyecto fue pensado para realizar una muestra de fotografías en el
marco del Día Internacional de la Mujer, y la presentación oficial sería en el anexo de
la Cámara de Diputados de la Nación en el departamento de Cultura, pero la pandemia
por el Covid 19 nos obligó a suspenderla.
Es por eso que Presentamos a estas mujeres que hacen historia y representan a
todas las mujeres, no solo de la Universidad, sino a muchas de nuestra querida
patria que luchan día a día, que soportan destrato y violencias, y educan a las generaciones
que vienen siendo hoy en día, Las Influencers.
ESTELA DE CARLOTTO. PRESIDENTA DE
ABUELAS DE PLAZA DE MAYO Y DRA.
HONORIS CAUSA DE LA UNIVERSIDAD
NACIONAL DE LUJÁN.
MIRNA PUCHETA
JAVIER MORENO
Influencers
POR EL DOCTOR WALTER GIRIBUELA
Hace 51 años, en agosto de 1969 se creó la Comisión Pro-Universidad Nacional de
Luján. Su misión era la de promover la formación universitaria en esa localidad de la
provincia de Buenos Aires, algo inédito en ese entonces ya que estaba fuertemente
instalado en la sociedad el precepto elitista que sostenía que esas actividades
eran potestad de las grandes urbes. De las veintiocho personas que integraban de
esa comisión, una sola era mujer: Ruth Monjardin. No eran épocas sencillas para
la sociedad argentina y, en un escenario turbulento y de sucesivas interrupciones
autoritarias a cualquier proyecto democrático, las mujeres ocupaban el papel
secundario que durante siglos fue tenazmente consolidándose, acorde con las
pautas que el heteropatriarcado imponía. Así, la subordinación del género femenino
al masculino gracias a absurdos criterios fabricados por el hombre con poder,
fueron consolidándose como naturales y normales. Este proceso de naturalización
encontró convencidos adeptos en las filas del poder y los discursos de inferioridad
femenina tomaron carácter de una verdad indiscutible, sobre la que se basó gran
parte de la construcción de la identidad nacional.
Pasada mucha agua bajo el puente, queda claro que el heteropatriarcado no cayó
y que la heteronormatividad goza de buena salud. Pero también queda claro que
algunas cosas se lograron modificar y que, a fuerza de numerosas luchas que se
jugaron en los más disimiles escenarios, las mujeres fueron ocupando lugares que
les habían sido arrebatados y negados desde el inicio de los tiempos. No es una
novedad que algo empezó a crujir, signo del desmoronamiento incipiente y que, más
temprano que tarde, va a caer.
EUGENIA PAVÓN. TRABAJADORA
NODOCENTE DE LA UNLU. INGRESÓ EL
4 DE SEPTIEMBRE DE 2006 EN EL ÁREA
DE SERVICIOS GENERALES. SU PADRE
TRABAJO EN LA UNLU DESDE EL INICIO.
NACIDA Y CRIADA EN LA CASA DE ALTOS
ESTUDIOS, VIVIÓ EN LA UNIVERSIDAD
DESDE EL AÑO DE VIDA, HASTA LOS 26
AÑOS, CUANDO SE CASO Y NACIÓ SU
HIJA.
〉
La vida universitaria no fue una isla. Aquellas mujeres que debían pedir permiso a
sus padres o maridos para inscribirse en alguna carrera universitaria hoy colman
los espacios de la academia. Desde aquella Ruth Monjardín, única entre todos
los demás miembros varones, hasta las actuales mujeres que hoy colman la
universidad, mucho camino feminista debió ser transitado. Mucha sororidad, algo
de deconstrucción masculina y mucho más de empatía sexo-genérica disidente con
quienes fueron injustamente relegadas a un lugar secundario que empezó a forjarse
desde el momento en que el mito de la aparición femenina en la faz de la tierra,
a partir de quitarle una costilla a un varón, comenzó a tomar carácter de verdad
irrefutable y de cambio de mirada indetenible. De semejante origen, nada podía
instalarse que no fuera la subsidiaridad de un sexo respecto de otro. Y la posibilidad
de pensar en términos de géneros, de constructos socioculturales alrededor de las
sexualidades era, directamente, un impensable.
La muestra Las influencers, Mujeres de la Universidad Nacional de Luján, realizada
bajo la provocadora idea de una increíble mujer, Mirna Pucheta, y materializada
por la sensible lente de Javier Moreno, viene a sintetizar el camino y la trayectoria
de las mujeres en la Universidad Pública. Trabajadoras docentes y nodocentes,
estudiantes, autoridades actuales y pasadas, graduadas, referentes académicas y
sociales que conforman la vida universitaria son retratadas para mostrar el camino
andado.
ANABELLA GEI. VICERRECTORA. INGRESÓ
CON 17 AÑOS COMO ESTUDIANTE. SE
GRADUÓ, ES DOCENTE, FUE DIRECTORA
DECANA. SE DENOMINA HIJA DE LA
REAPERTURA DE LA UNIVERSIDAD
NACIONAL DE LUJAN, YA QUE INGRESO
LUEGO DEL DECRETO PRESIDENCIAL DEL
DR. RAUL ALFONSÍN, QUE ORDENABA
REABRIRLA LUEGO DEL CIERRE POR LA
DICTADURA MILITAR.
〉
Los retratos de las veinte mujeres que organizan la muestra dan cuenta de una
historia institucional que se acerca al medio siglo de existencia. Como es de
esperar, no se trató ni se trata de un camino sin vaivenes: ya desde sus orígenes
esta universidad que se caracterizó por proponer una organización pedagógica
innovadora, debió enfrentarse a los pensamientos reaccionarios más radicalizados
y soportar el cierre de sus instalaciones y su desmantelamiento en manos de la
dictadura más sangrienta de la historia nacional. Si nada fue sencillo para nuestra
universidad, mucho menos lo fue para las mujeres que la habitaban y que debieron
desarrollar su vida cotidiana en un escenario político y discursivo que pretendía
asignarles el espacio doméstico como el lugar “natural” en donde desenvolverse.
Pero una vez más, ellas rompieron el mandato social y, con él, las erróneas
prenociones que buscan perpetuarlo: que a la mujer le corresponde a la casa –o
mejor, “el hogar”, que además debía estar encabezado por un varón proveedor –,
como si fuera posible pensar y hablar de ellas en un genérico singular, la mujer,
desconociendo las múltiples formas de ser mujer que se imponen como realidad
a simple vista. Esto también queda plasmado en la muestra: las mujeres que
componen esta representación de mujeres de la Universidad Nacional de Luján
son distintas, pertenecen a diferentes disciplinas, realizan diferentes actividades,
integran distintos claustros, ven el mundo con perspectivas ideológicas
radicalmente diferenciadas, sostienen pensamientos disímiles y encarnan valores
dispares. Todas ellas han congeniado de múltiples maneras las esferas pública y
privada de sus vidas. A muchas, quizás a la enorme mayoría de ellas, esto les resultó
significativamente más complejo que a los varones, para quienes erróneamente se
presupone que está predestinado el espacio público… una suerte de distribución
espacial misógina que a todas luces busca sostener el techo de cristal que ellas
lograron astillar para alcanzar lo que habían deseado.
KARINA LÓPEZ. DIRECTORA DE LA
DIRECCIÓN GENERAL DE PERSONAL. LA
PRIMERA MUJER NODOCENTE QUE SE
RECIBIÓ PRIMERO EN LA TECNICATURA
DE GESTIÓN UNIVERSITARIA Y LUEGO
EN LA LICENCIATURA DE GESTIÓN
UNIVERSITARIA.
INGRESO A LA UNIVERSIDAD EN EL AÑO
1992.
〉
Esta revista viene a cubrir un área de vacancia en la difusión del discurso fotográfico
y su aparición no puede ser más que motivo de alegría y celebración. Que el primer
número esté organizado en torno de esta muestra es algo que, como integrantes
de la comunidad universitaria de la UNLu, nos llena de orgullo y de satisfacción.
Y esto es así, en gran parte, porque tenemos la dicha de ser contemporáneos de
una época en donde la posibilidad de que, en términos sexo-genéricos, la tortilla
se vuelva, parece estar cada vez más cerca., En su libro Contra-pedagogías de
la crueldad, Rita Segato sostiene que “es un error circunscribir lo que nos pasa a
las mujeres al campo de la intimidad, como también creo que es equivocado que
ghetifiquemos el tema (…) pues tenemos que entenderlo como un termómetro de
los tiempos, como un índice para diagnosticar la fase histórica por la que estamos
pasando”. Esta muestra y esta publicación contribuyen a eso. Enhorabuena.
LILIANA CARRASCO. EL MISMO DÍA QUE
SE GRADUÓ, CONCURSÓ COMO DOCENTE,
Y SIGUIÓ SU CAMINO EN LA DOCENCIA
DE LA UNIVERSIDAD. TIENE A CARGO
UN SEMINARIO DE VIOLENCIA FAMILIAR
Y DICTA UN DOCTORADO EN VIOLENCIA,
FAMILIA, SALUD, VIOLENCIA DE GENERO
Y VIOLENCIA MASCULINA.
Las mujeres
y la lucha ganada
PORLA LICENDIADA LILIANA CARRASCO
TRABAJADORA SOCIAL. ESPECIALISTA EN VIOLENCIA FAMILIAR.
La lucha de las mujeres no es una. Es un conjunto de horizontes que se expresan
en acciones colectivas a las que denominamos las luchas feministas. Algunas de
manera organizada, turgente y completa de ideas sobre la capacidad de agencia
autónoma; otras más silenciosas en el ámbito de las paredes que cada día le
recuerdan la tarea de reproducción doméstica.
En ese enorme abanico de singularidades las luchas feministas se manifiestan
cada vez con más fuerza, porque si hay algo a lo que las mujeres podemos echar
mano es a la capacidad de mirarnos: de mirar a otras y reconocernos, cada vez con
menos prejuicio, cada vez con más sororidad. Tal vez este contenido sea la clave
fundamental para colectivizar una lucha emancipadora para todas.
AMALIA TESTA. FUE LA ÚNICA MUJER
RECTORA QUE TUVO LA UNIVERSIDAD.
FUE Y ES DIRECTORA DECANA DEL DTO.
DE CIENCIAS SOCIALES Y DOCENTE. ELLA
DICE: ‘FUNDAMENTALMENTE DOCENTE’.
〉
En el curso de la historia de la humanidad las mujeres hemos luchado por nuestros
derechos, siempre dando la vida en ello. Desde aquel lema de “libertad, igualdad y
fraternidad” de la Revolución Francesa, en donde ya se reconocía que las mujeres
cobraban sus salarios por la mitad del valor adquirido por los hombres -que luego
se fortalece al tomar entidad desde la Declaración de Derechos de la Mujer y de la
Ciudadana en 1791-, hasta el movimiento internacional #NiUnaMenos surgido en
Argentina en 2015, las mujeres no hemos dejado de proclamar y organizarnos para
lograr el acceso real a la igualdad de derechos con relación a los hombres.
ANA MARIA BELMONTE. ANY, FUE LA
ULTIMA EN JUBILARSE EN EL AÑO 2019.
SUS ÚLTIMOS PASOS POR LA UNLU COMO
TRABAJADORA NODOCENTE FUE EL DÍA
30 DE DICIEMBRE. SE DESEMPEÑABA
COMO JEFA DEL DEPARTAMENTO
ACADÉMICO DEL DTO. DE CIENCIAS
BÁSICAS.
〉
La inequidad basada en las diferencias por género ha sido objeto de lucha por parte
de movimientos potentes expresados como olas feministas que han visibilizado
la situación de las mujeres y promovido su emancipación. El Día Internacional de
la Mujer, que se conmemora cada 8 de marzo en el mundo, surge ante un nuevo
escenario de muerte en el contexto de lucha: 146 mujeres trabajadoras fueron
quemadas en una fábrica de Nueva York en marzo de 1911, en el contexto de sus
reclamos por mejores condiciones laborales y trato humano. La discriminación que
sufrían estaba basada en su condición de mujeres jóvenes y migrantes, motivo por
el cual no se dudó en iniciar un incendio dejándolas bajo llave.
GIMENA ILLIA. LICENCIADA EN CIENCIAS
BIOLÓGICAS CON ORIENTACIÓN EN
ECOLOGÍA. SE RECIBIÓ EN LA UNLU. ES
HIJA DE UN TRABAJADOR NODOCENTE
Y OBTUVO EL PREMIO DE EGRESADA
DE HONOR. ACTUALMENTE TIENE UNA
BECA CONICET, DONDE DESEMPEÑA SU
LABOR EN LA PROVINCIA DE MISIONES
ESTUDIANDO LOS MONOS CAÍ, COMO
DESARROLLAN SU HÁBITAT CON LA
DEFORESTACIÓN DE LA SELVA NATIVA.
〉
Las mujeres argentinas también hicieron historia oponiéndose a todas las formas
de discriminación, confluyendo con los movimientos sindicales en su capacidad de
organización. Desde la primera huelga docente en la Provincia de San Luis, en 1881
la actividad fue incesante. Fue Virginia Bolten quien puso en tensión la construcción
del patriarcado capitalista y eclesiástico, con su lema “Ni Dios, ni patrón, ni marido”.
El siglo XX encontró a las mujeres argentinas de pie y en pleno fortalecimiento de
sus horizontes: Eva Duarte y su acción desde el movimiento justicialista habilita un
espacio central de participación impulsando la Ley de sufragio femenino en 1947.
“No renuncio a la lucha, ni al trabajo, renuncio a los honores” decía declinando
a la candidatura como vicepresidenta de la nación, marcando la línea de una
construcción considerativa de lo colectivo.
PATRICIA BOS. DOCENTE DE NIVEL
INICIAL, SE ESPECIALIZÓ EN JARDÍN
MATERNAL, DONDE DESARROLLA SU
LABOR EN LA ESCUELA QUE POSEE LA
UNIVERSIDAD DESDE LA CREACIÓN DE
LA MISMA.
〉
Este brevísimo punteo sobre los momentos bisagra ante la situación de las
mujeres en Argentina no puede pasar por alto la lucha de las Madres de Plaza de
Mayo. La dictadura militar entre 1976 y 1983 desvastó una organización social,
política y económica, ejerciendo el mayor nivel de violencia por parte del Estado a
través de métodos de tortura y asesinato del pueblo, dejando un saldo de 30.000
desaparecidxs. Las mujeres como objeto de tortura sexual, la apropiación ilegal de
sus hijes fueron marcas imborrables e imperdonables en la historia Argentina. Las
madres de Plaza de Mayo fueron las primeras en ofrecer resistencia y generar un
movimiento organizado de búsqueda de personas y de restitución de Derechos,
que al día de hoy es ejemplo en el mundo.
CECILIA LAGUNAS. PROFESORA EMÉRITA,
DOCENTE DE HISTORIA. CREO EL ÁREA DE
LA MUJER Y DESARROLLÓ LA MAESTRÍA
EN EL ESTUDIO Y ESPECIALIZACIÓN DE
LA MUJER Y EL GÉNERO. DESARROLLÓ
ESTE ESTUDIO POR MAS DE 30 AÑOS.
〉
Ya en democracia, la lucha de las mujeres comenzó a visibilizar con mayor fuerza a
todas las formas de violencia, cuyo recorrido incluye la sanción de varias leyes en
torno a su protección en contextos de violencia doméstica.
En abril de 2009 se promulga la Ley 26.485, de protección integral de las mujeres,
promoviendo la prevención, sanción y erradicación de todas las formas de violencia
basadas en la desigualdad de género contra las mismas, incluyendo como una
de sus formas a la violencia doméstica, y reconociendo modalidades de violencia
institucional, laboral, obstétrica, mediática y contra la libertad reproductiva.
Desde allí, el Estado como responsable de disponer políticas públicas en torno a
los objetivos de la Ley, aún tiene mucho por hacer. La asignación de presupuesto
adecuada a la magnitud de las necesidades es todavía una deuda que urge resolver.
MARY LEGIZAMÓN. ES GRADUADA,
DOCENTE Y DIRECTORA DEL CENTRO
REGIONAL SAN MIGUEL DONDE TIENE A
CARGO MAS DE SEIS MIL ESTUDIANTES Y
SIETE CARRERAS DE GRADO.
〉
Los femicidios como expresión máxima de la violencia de género se mantienen en
altísimo nivel, con un promedio de 300 asesinatos por año. Sin embargo el daño
ocasionado por violencia de género afecta a la mayor parte de la población de
mujeres y disidencias con identidad feminizada. La violencia cotidiana, en todos sus
tipos, sigue siendo un motivo de lucha. Con ellas está mi lucha.
MATILDE LANZA. DOCENTE E
INVESTIGADORA, DOCTORA EN
ANTROPOLOGÍA Y ARQUEOLOGÍA. ES
LA SUB DIRECTORA DEL PROYECTO DE
ESTUDIO DE LA BATALLA DE LA VUELTA
DE OBLIGADO, DONDE ESTUDIA QUE
COMÍAN LOS SOLDADOS EN EL CAMPO
DE BATALLA A ORILLAS DEL RIO PARANÁ.
〉
Desde mi espacio de desempeño profesional observo y comprendo las situaciones
críticas que viven las mujeres en situación de violencia doméstica. Y cada día
toma más fuerza mi emoción ante esas transformaciones que logran cuando
pueden despegar de las historias colmadas de abusos y malos tratos. Hay que
ser muy poderosa para animarse a romper con estructuras de sometimiento e
invisibilización, recomponer su autoestima, reconstruir las energías agotadas por
el maltrato, decidir enfrentar el miedo al opresor, tolerar la incertidumbre por el
futuro de sus hijes en el contexto post separación, atravesar los muros judiciales
construidos con cimientos patriarcales, buscar incesantemente ayuda y muchas
veces no encontrar las formas más adecuadas, para recién luego de semejante
epopeya animarse a una vida con autonomía y sin violencia. La admiración por cada
paso hacia ese lugar asertivo es muy grande; pero cada paso no es individual, sino
la expresión singular de un movimiento más amplio que habilita e impulsa a las
mujeres a transitar tamaño trabajo.
SUSANA MURARO. SU TÍTULO DE GRADO
ES EL DE COMPUTADORA CIENTÍFICA.
FUE PROFESORA DE MATEMÁTICAS
HASTA EL DÍA DEL CIERRE EN EL AÑO 73.
VOLVIÓ LUEGO DE LA REAPERTURA Y SE
CONSOLIDÓ COMO PROFESORA TITULAR
Y JEFA DE TRABAJOS PRÁCTICOS. EN
EL 2005 FUE DECANA DEL DTO. DE
EDUCACIÓN HASTA EL AÑO 2009.
〉
Ellas llegan tratando de entender lo que las arrasa, a veces renegando de “los
feminismos” desde una posición de cuidado y respeto hacia lo androcéntrico, no
sea cosa que se confunda su malestar con el incumplimiento al mandato fielmente
aprehendido. Todavía vigente. Desde aquella expresión citada anteriormente, “Ni
Dios, ni patrón, ni marido” hasta la actualidad pasaron muchos años y ganancias
para las mujeres, pero continúa con fuerza el modelo cultural que jerarquiza a los
hombres y todo lo relacionado a la masculinidad hegemónica.
ROCIO AIME. GRADUADA EN LA UNLU.
COMO ESTUDIANTE FUE UNA DE LAS
MUJERES QUE PRESENTÓ EL PROTOCOLO
DE INTERVENCIÓN ANTE LA SITUACIÓN
DE DISCRIMINACIÓN Y VIOLENCIA DE
GÉNEROS.
〉
Algunas trabajan fuertemente para entender que la violencia que sufren tiene
relación con un contexto mucho más amplio que el doméstico; hasta que las otras,
también cansadas pero conectadas con la desobediencia al sistema, empiezan
a tejer un entramado lento y sólido, tan fuerte como para sostener todas las
contingencias que surjan en el camino en la reconstrucción de su derecho a vivir en
libertad.
Hoy el centro de la lucha es cultural y político, vamos por el núcleo duro del
patriarcado. Vamos por la autodeterminación del cuerpo de las mujeres, por la
interrupción voluntaria y despenalizada del aborto, por la sanción estricta de
los abusos. Vamos por terminar con la justificación de las violaciones, y que
definitivamente la sociedad considere inaceptable cualquier argumento que se
sostenga en la tolerancia y comprensión por parte de las mujeres.
Hoy ganamos en organización y en potencia, porque la lucha toma la fuerza de la
historia de las mujeres, de nosotras, de cada una y de todas juntas.
ADRIANA ROJAS. CURIOSAMENTE NO
TRABAJA EN LA UNLU, PERO PERTENECE
AL CORO POLIFÓNICO DE LA UNIVERSIDAD
NACIONAL DE LUJÁN DESDE EL INICIO EN
EL AÑO 1993.
Mujer Trabajadora
Nodocente
POR KARINA LÓPEZ
DIRECTORA DE LA DIRECCION GENERAL DE PERSONAL
DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE LUJÁN.
Buscando palabras que logren definirte, llegan sin permiso imágenes y voces del
pasado y del presente, que acaloran el corazón y nublan los ojos de emoción, de
orgullo, de amor...
Te veo en la cocina, con tu impecable guardapolvo celeste, custodiando la pava de
agua caliente para el café del “señor” y cuidando con el mismo celo los restos de
almuerzos para el compañero que no le alcanza para el suyo.
Te veo durante el tiempo de descanso en el cuarto de las escobas, baldes y
detergentes, compartiendo tu mate con la joven compañera administrativa que se
escapa de su oficina para estar con vos, porque ese mate es el más rico del trabajo,
porque tiene sabor a amor.
NANCY SCHETTINO. TRABAJADORA
NODOCENTE. PERTENECE AL DTO. DE
CULTURA. PROFESORA VOCAL DEL CORO
DE ADULTOS Y DIRECTORA DEL CORO DE
JÓVENES.
TAMBIÉN ES DIRECTORA DEL ELENCO
ESTABLE DEL TEATRO Y PROFESORA DEL
TALLER DE CANTO DE MÚSICA POPULAR.
〉
Te veo decidida y guerrera atravesando el hall “tomado” por una protesta, haciendo
el camino y abriendo el paso hacia el baño para tu compañera embarazada.
Te veo negociando con tu jefe para salir un ratito en tu tiempo de almuerzo a retirar
o llevar los pibes al colegio o al jardín; y pidiendo otro ratito para la reunión de
padres o el acto en que tu niñe toma parte de lavandera, de vendedor de velas, de
árbol o de flor.
Te veo repartida en mil pedazos para cuidar y llevar al médico a tus hijes, a tus
viejos, para que coman y tomen los remedios, porque nunca dejas de atenderlos,
aún desde el trabajo.
MARIA CRISTINA SERAFINI. SE
GRADUÓ EN LA UNLU, UN DÍA ANTES
DEL CIERRE EN EL AÑO 1973. VOLVIÓ
CON LA REAPERTURA COMO DOCENTE.
INICIO EN LOS AÑOS 80 EL TRABAJO
DE INVESTIGACIÓN Y ESTUDIO DEL
PLANETA A TRAVÉS DE SATÉLITES.
DIRIGIÓ UN PROYECTO FINANCIADO
POR LA NASA PARA EL DESARROLLO DE
INVESTIGACIONES EN TELEDETECCIÓN.
FUE VICE RECTORA, EN LA MISMA
UNIVERSIDAD CONOCIÓ A SU MARIDO, ES
PROFESORA EMÉRITA ACTUALMENTE.
〉
Te veo acosada por un violento, buscando a la compañera que el maltratador se
llevó, desalojando al golpeador, velando por la mujer que sufre; te veo la marca de
los golpes, del miedo, del dolor.
Te veo cansada cursando el pospuesto secundario o la soñada carrera universitaria,
repartiendo el tiempo libre entre tareas, grupo de estudio, exámenes y el deber de
cuidado de los “tuyos”, con el puñal de la culpa clavado por sentir que les robas “su”
tiempo.
Te veo estoica soportando los dolores del período, de la lactancia, de los quistes
ováricos o de mama, de los que dejan poner el cuerpo para sanar, para seguir
viviendo o traer al mundo la vida tan soñada.
VIVIANA ZENOBI. FUE DOCENTE EN LOS
AÑOS 1989 HASTA 2017 QUE SE JUBILÓ.
DIÓ CLASES EN TODAS LAS SEDES DE LA
UNIVERSIDAD. TRABAJO EN EL DTO. DE
CIENCIAS SOCIALES Y EN EDUCACIÓN.
GEOGRAFÍA, EDUCACIÓN AMBIENTAL Y
ANÁLISIS SOCIO ECONÓMICO FUERON
SUS CARRERAS Y CURSADAS QUE LA
TUVIERON COMO PROTAGONISTA.
〉
Te veo digna y de pie escondiendo tras una sonrisa amable el dolor desgarrador de
los fracasos, las decepciones y las pérdidas irreparables.
Te veo en tus ratos libres, con otras mujeres hablando mil temas a la vez, en una
maraña de consejos, recetas, ofertas, abrazos, lágrimas y risas.
Te veo a los codazos dando la batalla para conquistar los derechos que nos negaban
y los que aún nos arrebatan.
Te veo participando en la política institucional, concursando, conquistando espacios
de cogobierno y cargos de decisión.
Te veo ganando, fuerte, empoderada y sorora caminando firme y yendo por más.
Te veo Compañera, te veo Nodocente, pero por sobre todo, te veo Mujer, trabajadora!
BELÉN SUCCI. ESTUDIÓ EDUCACIÓN
FÍSICA EN LA SEDE DE SAN FERNANDO DE
LA UNLU. ACTUALMENTE ES ARQUERA
DEL LAS LEONAS, SELECCIONADO
ARGENTINO DE JOCKEY FEMENINO.
DICTA CLÍNICAS DE JOCKEY A NIÑAS Y
ADOLESCENTES.
Inés Ulanovsky
Inés Ulanovsky es fotógrafa, productora audiovisual y
guionista.
Publicó los libros Fotos tuyas y Algunas madres también
se mueren.
Estudió Diseño de Imagen y Sonido en la UBA y es
Magister en Escritura Creativa de la UNTREF.
Trabajó en medios gráficos, radio y televisión.
Ganó el “Premio Leamos” del concurso de crónica breve
Basado en Hechos Reales (2019) y recibió la Beca
Creación del Fondo Nacional de las Artes (2018)
·
SABER MIRAR
Prólogo de Las Fotos
En el año 2003 descubrí algo de características extraordinarias en mi archivo fotográfico personal. Diez años después
escribí una crónica de ese hallazgo y empecé a prestarle especial atención a las historias protagonizadas por fotos.
En Las fotos se narran hechos que efectivamente ocurrieron. Trabajé con archivos y material documental (grabaciones,
fotografías, publicaciones, cartas, diarios íntimos y mails). Al final de cada capítulo se encuentra la foto mencionada en
el texto. Las fotos no tienen el fin de ilustrar los textos y los tex- tos no están ahí para explicar las fotos. Me interesa
especial- mente lo que ocurre en el encuentro de esos dos lenguajes tan diferentes y opuestos pero, de algún modo,
complementarios.
En mis viejos cuadernos encontré algunas ideas sobre los archivos fotográficos. Trabajé en varios. En una libretita del
2013 escribí: “Los considero espacios caóticos y abruma- dores pero llenos de tesoros que esperan ser descubiertos”.
En otra de 2015, decía: “Me interesan los archivos fotográficos porque tienen la particularidad de atravesar al mismo
tiempo universos sociales, políticos, personales, íntimos, materiales, históricos, familiares y simbólicos”.
Trabajé con fotos que provienen de lugares completa- mente diferentes (desde álbumes familiares hasta prontuarios
policiales), pero que comparten una misma característica: la historia les otorgó un protagonismo inesperado. El azar entendido
como “una combinación de circunstancias o de causas imprevisibles no lineales, sin plan previo y sin propósito”
también podría ser uno de los temas de este libro.
En Las fotos se narran algunos hallazgos accidentales. Esos que no deberían ocurrir pero ocurren. Más allá de mi predilección
romántica por lo analógico en general, tengo un interés particular por las fotos de papel, los negativos y las
diapositivas. La devoción que siento por el objeto–foto es la materia prima con la que escribí este texto.
Las Fotos
de Inés Ulanovsky
Paisanita Editora
Cora Gamarnik
Nació en Buenos Aires, en 1967.
Es doctora en Ciencias Sociales y licenciada en
Comunicación por la Universidad de Buenos Aires.
Profesora titular de la materia Didáctica de la
Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la
UBA. Docente de postgrado en la maestría en Historia
Contemporánea de la Universidad Nacional de General
Sarmiento. Profesora asociada en la Universidad Nacional
de Moreno. Co-coordinadora del Área de Estudios sobre
Fotografía de la Facultad de Ciencias Sociales, UBA y
del programa de Actualización en Fotografía y Ciencias
Sociales FSOC-UBA.
Ha publicado numerosos artículos en libros y revistas
especializadas de Argentina y del exterior.
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SABER MIRAR
El FOTOPERIODISMO
EN ARGENTINA
DE SIETE DÍAS ILUSTRADOS (1965)
A LA AGENCIA SIGLA (1975)
El fotoperiodismo en la Argentina tiene como objetivo reconstruir la historia de esta profesión en Argentina en el período
que va desde el surgimiento de la revista Siete Días Ilustrados en 1965 hasta la creación en 1975 de la agencia
SIGLA, la primera agencia fotográfica de prensa del país. Se trata de una década en la que el fotoperiodismo adquirió una
importancia inédita en la historia política y mediática del país, se incorporaron nuevos reporteros a la profesión, se produjo
un recambio generacional que dio una pelea por la jerarquización profesional y surgieron medios que promovieron
una fotografía ‘militante’. El libro también analiza los antecedentes del oficio, recorriendo lo que sucedió con la fotografía
de prensa durante la primera mitad del siglo XX.
Movilizaciones populares, golpes de estado, guerras, avances científicos, hechos sencillos y espectaculares, historias
de hombres y mujeres a lo largo de Argentina y del mundo fueron fotografiados y llegaron a distintos públicos a través
de las miradas de decenas de fotógrafos –en su mayoría anónimos– y del uso que los medios les dieron a sus fotos.
No obstante, tanto el fotoperiodismo como oficio como las fotografías de prensa como producto del mismo han sido
escasamente abordados hasta hoy como objeto de estudio. Gamarnik se propone historizarlo, estudiar sus singularidades,
escuchar la voz de los fotógrafos y, al mismo tiempo, pensar en las implicancias históricas, culturales y políticas de
sus fotografías. Frente al uso habitual que utiliza las fotos como ilustraciones, este libro se pregunta por los modos de
producción de las mismas, por las imágenes paradigmáticas de distintos períodos de la historia argentina y por las miradas
que hubo sobre esas imágenes. Propone mirar a las fotografías, pero no de un modo aislado sino, por el contrario,
inscriptas en su tiempo histórico.
Sobre la colección
Pretéritos Imperfectos es una nueva colección de libros teóricos sobre fotografía argentina dirigida por Francisco Medail
e impulsada por ArtexArte, Fundación Alfonso y Luz Castillo. Desde una perspectiva transdiciplinaria, esta colección tiene
como objetivo contribuir al estudio de las imágenes y el análisis de nuestra historia reciente a través de la publicación
de trabajos de investigación surgidos tanto en el ambito acádemico como por investigadores independientes.
Ramona se viste elegante. Elige la remera roja que le deja descubiertos
los hombros y se recoge el pelo. Tal vez porque viene la fotógrafa, tal vez
todos los días se pone elegante. Siempre con zapatillas cómodas. Nada
de taco para todo lo que tiene que hacer. Ramona tiene 42 años es una
mujer joven. También es la coordinadora de Salud de la Casa de la Mujer
en la villa 31. Ese día coloca la mesita de azul plegable a la entrada para
entregar la comida a un metro de distancia. Se pone su barbijo y atiende
a la prensa. Tiene que decir con su garganta poderosa que no tienen
agua, que no pueden lavarse las manos como les dicen todos que hagan,
que pidieron hace días y días al gobierno de la ciudad que los relocalicen
porque están en riesgo y ponen en riesgo a otros. Así como hacen con
quienes vuelven en avión del exterior que quedan un tiempo aislados en
hoteles de la ciudad.
Pero nada.
Ramona conoce bien los canteros y las baldosas nuevas en las miles de
calles de la ciudad de Buenos Aires, cambiadas una y otra vez. Conoce
las rejas en las plazas, la calle Corrientes hecha mitad peatonal y el paseo
del Bajo. Sabe de los millones y millones invertidos en ‘infraestructura
urbana’. Pero al barrio no llega nada. Ni el agua llega. Ramona habla
pausado y explica claro. Quiere que la denuncia atraviese los límites del
barrio. Muestra la manguera sin agua en la puerta de su casa, un monoambiente
muy pequeño que alguna vez pudo pintar de rosa y verde
FOTO DE @NATACHAPISARENKO/ AP
para que quede más lindo.
TRAS LA IMAGEN
Cora Gamarnik
VILLA 31, CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, MAYO 2020.
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ACTUALIDAD
POR
MIGUEL BRAILLARD
El miedo como enemigo común
“Recuerdo un caso que me dejó paralizada, el de
María Angélica Andrada de José León Suárez. Tenía
apenas 19 años y la encontraron ahorcada. Su hermana,
embarazada de 7 meses, se presentó para
hacer la denuncia en la comisaría de su barrio y no
se la tomaron. Recibió como respuesta un ‘es adicta’,
como si eso, si hubiese sido verdad, resultara un
obstáculo. Esto pasa todo el tiempo y entonces las
víctimas muchas veces sienten temor ante la falsa
autoridad y la negligencia de los uniformados, y se
retiran humilladas pensando que no vale la pena
prestar testimonio. Ahí intervenimos nosotras para
evitar la impunidad de los agresores en complicidad
con ciertas autoridades”, describe conmovida Iris
Gallardo, militante feminista que forma parte de una
red de voluntarias de alcance nacional que asisten a
víctimas.
Iris es empleada municipal, pertenece al gremio de
ATE (Corriente Clasista y Combativa que lidera el
diputado Juan Carlos Alderete), y por su tarea humanitaria
no recibe ingresos: “La prioridad es salvar
vidas. Nuestra tarea no se ve, pero estuvimos y estamos
en la calle todo el tiempo, aún en plena pandemia,
somos muchas intentando superar escollos
burocráticos tanto en la justicia como en comisarías.
Acompañamos a aquellas que padecen violencia de
género, el delito que más aumentó durante el aislamiento.
Es muy importante que ahora contemos
con el Ministerio de la Mujer, que nos ayuda a resolver
casos, en la provincia de Buenos Aires es de gran
ayuda, ya que se creó la figura de Promotoras contra
la violencia de género y se materializó un sueño”.
Lara Domínguez es su hija y también desempeña de
forma excelente su rol en el partido de San Martín.
Es promotora territorial en violencia de género y
salud sexual y asiste especialmente a jóvenes que
padecen golpes, lesiones y violaciones: “El principal
inconveniente es la falta de información en nuestras
capacitaciones, en especial lo referente a abusos de
menores. Eso se agrega a que el presupuesto es
inexistente para acompañar a las víctimas, tenemos
que cargar la tarjeta SUBE de nuestro propio bolsillo,
los recursos no llegan y faltan recursos y más
participantes: la verdad es que somos ocho para
quinientos mil habitantes”, se sincera.
Según las estadísticas, en la Argentina una mujer
muere cada 26 horas por violencia de género. Y durante
la pandemia de Coronavirus los números fueron
en aumento. Para muchas el aislamiento obligatorio
significó nada menos que convivir todo el día
con su agresor, que en la mayoría de los casos es su
pareja, o también un familiar, como el caso que relata
Marisa Ricordi, una de las personas que también
se compromete ayudando a las víctimas: “Pocas veces
escuché un testimonio tan descarnado de una
mujer como el de Rosana: el hermano le introducía
la cabeza en un balde con agua para que se ahogara
y también le daba puntazos con una faca para
lastimarla. Alguien le dio mi teléfono y pude salvarle
la vida. Pero cuando empezamos el recorrido para
hacer la denuncia todo resulto hostil para la víctima
como sucede con frecuencia”.
Marisa es consultora psicológica (Counselor) y desarrolla
ad honorem como lo exige la ley su rol de
Asistente protectora para prevenir y erradicar la
violencia contra las mujeres: “Como te conté, a Rosana
–se preservan más datos por seguridad-, su
hermano intentó matarla. A partir de allí comenzó lo
que bautizamos como ‘ruta crítica’ de quien se atreve
a denunciar. Fuimos al Juzgado de Familia Nº 1 de
San Isidro, donde le correspondía tramitar la exclusión
del hogar de su victimario y estaba cerrado por
ser el día del Santo Patrono, sin atención de guardia.
La Fiscalía de San Fernando tampoco trabajaba. En
la DDI de San Isidro nos atendieron bien, pero sin
poder resguardarla por falta de orden judicial. Pedimos
ayuda en la Comisaría de la Mujer de San Fernando,
pero aún no estaba funcionando. Ese fin de
semana ella quedó desprotegida, durmiendo en la
misma casa que su golpeador”.
Víctima y acompañante creyeron que 24 horas después
el problema se podría solucionar, se equivocaron:
“Permanecimos diez horas dando vueltas
–amplía Marisa-: Fiscalía de San Fernando, Juzgado
de Familia, Área de Género y Diversidad Sexual,
Hospital y policía. Un impedimento tras otro con
desestimaciones de relatos y la imposibilidad de entregarle
un botón antipánico y de asistirla psicológicamente.
A eso súmale que no le brindaban un lugar
para refugiarse hasta que se excluyera al victimario
de la vivienda. “¿No tenés un lugar adonde ir?”, nos
sugirieron como plan de solución para una persona
violentada que estaba sufriendo”.
〉
Revictimizar
Iris revive la situación de otra mujer que entró en
situación de pánico y hoy cree que sólo podrá defenderse
si consigue un arma: “A María su marido
la golpeaba, también a sus hijos –uno discapacitado-,
la amenazaba con un cuchillo para tener sexo
oral y hasta la violó el día después a que la operaran
de la vesícula. Él fue condenado, está preso, pero
ella supo que lo podrían liberar antes de cumplir la
condena. La acompañé al juzgado correspondiente
de San Martín, a la fiscalía, pero en todos lados la
sacaban sin respuestas. Me enteré que algún fiscal
repite cuando la escucha que el agresor fue condenado
y está tras las rejas. En muchos casos a estos
funcionarios sólo les interesa defender su sillón y
sus privilegios, carecen de empatía y les molestan
las víctimas como el del caso que conté. Lo concreto
es que las liberaciones de los penales o comisarías
sin avisarle a las agredidas suceden por más que
este señor diga lo contrario. Y María está a nada de
conseguir un revólver por si su ex se le aparece en
su casa ya que se aburrió de que la ignoraran y tiene
terror”.
Otro ejemplo que cita Iris: “A través de nuestro grupo
de voluntarias recibí un mensaje de una chica de
San Justo con marido narco, violento, armado, que la
amenazaba de muerte. Armamos red de contención,
la rescatamos, la ayudamos a conseguir vivienda y
salvó su vida. En la justicia le decían que descargara
en su teléfono la aplicación para víctimas. No saben
que las mujeres en los barrios populares no tienen
dinero para incorporar datos en sus aparatos, tampoco
para pagar abogados. Deberían conocer que
sus parejas cuando ejercen violencia, lo primero que
hacen es quitarles el celular para que no se comuniquen
para defenderse. Estas y otras realidades se
desconocen en comisarías, juzgados y fiscalías, y
entonces las víctimas se revictimizan”.
Marisa cuenta otra experiencia de horror: “El año pasado la joven
Carola H., madre de cuatro niñas solicitó ayuda porque el
marido las golpeaba. Vivían en CABA y debieron huir para Pilar.
El violento las buscó hasta ubicarlas. Nunca fue notificada en
la causa de las acciones que se tomaban con su victimario, y
de acuerdo con la Ley de Víctimas debe hacerse. Recuerdo que
llegábamos a la Fiscalía de Género de Pilar, o a Tribunales en
CABA, y nos decían con desgano que éste individuo había sido
citado el mismo día y a la misma hora. En muchas oportunidades
debimos salir corriendo junto a la mujer agredida para
resguardarnos. En la Dirección de Género, Niñez y Diversidad
Sexual de Pilar mis reclamos por ayuda social y psicológica
fueron repetidos sin lograr respuestas. Cosas así suceden en
varios distritos: en 2018 presenté una denuncia porque en un
refugio de CABA donde daba un taller de danza terapia, me
crucé con una persona con convulsiones, pedí que llamaran al
SAME y me ignoraron. El problema principal radica en que las
mujeres cuando empiezan a sufrir violencia en sus hogares y
se deciden a denunciar, continúan padeciendo violencia institucional:
es un círculo vicioso, un laberinto del que es muy difícil
salir con vida”
NO TODO ESTÁ PERDIDO
La tarea social y humanitaria que desde
hace años vienen desarrollando Iris Gallardo,
su hija Lara Domínguez y Marisa Ricordi
con víctimas de violencia de género no pasó
desapercibida para el reconocido abogado
penalista José María Nasra, quien al enterarse
del esfuerzo, dedicación y compromiso
de estas mujeres, decidió colaborar con
ellas asistiéndolas a nivel profesional en lo
que necesiten y también les propuso fundar
una asociación civil que ya tiene nombre,
será “Hermanadas” –que también tendrá
su radio online-, y está en pleno proceso de
creación, con el objetivo de darle un marco
legal a semejante labor que posibilite reunir
recursos económicos y donaciones de entes
estales, privados y público en general, que
se puedan destinar para socorrer a damnificadas.
Quienes deseen conocer más detalles o colaborar
con este anhelado proyecto, pueden
comunicarse por mail:
José María Nasra
nasra-estudionasra@fibertel.com.ar
Iris Gallardo
magal3030@live.com.ar
Marisa Ricordi
mariri04@hotmail.com
Carolina Niklison
Nací en Santa Fe, Argentina, el 14 de septiembre de 1980.
A los 17 años, comencé a estudiar fotografía.
Entre agosto de 2003 y abril de 2005, documenté la vida de los inundados que permanecían
evacuados en centros improvisados para tal fin, luego de la catástrofe
hídrica ocurrida en abril de 2003. En 2013, volví a retratar a esas mismas personas
para “Inundados, diez años después”, exposición de dípticos inaugurada en la Legislatura
Provincial, que recorrió diferentes espacios culturales y educativos de la
provincia, y cuenta con un catálogo impreso.
Me desempeñé como fotógrafa de la última producción cinematográfica de Fernando
Birri: “El Fausto Criollo”, que se estrenó en 2011. En 2018, el Ministerio de
Innovación y Cultura editó el libro homónimo de la película, con las fotografías de mi
autoría.
Los libros “Trombonanza”, “Santa Fe, Ciudad Set, realizadores audiovisuales y cinéfilos,
1985-2015”, “Fuertes, el último ídolo” y “40.000: Historia de una pasión inigualable”,
también cuentan con mis imágenes.
He sido curadora y jurado en propuestas de la Secretaría de Cultura de Santo Tomé,
del INADI -Delegación Santa Fe- y del Concejo Municipal de Santo Tomé.
Mis trabajos han sido premiados por el Ministerio de Innovación y Cultura, la Municipalidad
de Santa Fe, la Alianza Francesa de Santa Fe y el Colegio de Arquitectos de
la Provincia de Santa Fe, entre otros.
Soy integrante de la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina
(ARGRA) y del Fondo Iberoamericano de Fotografía.
Participo en exposiciones individuales y colectivas.
Como reportera gráfica, publico mis fotografías en medios de comunicación nacionales
y extranjeros. Desde 2015 imparto talleres de fotografía.
·
DISCO RÍGIDO
DESPLAZADAS
Por Carolina Niklison
María Ofelia
Luz Elena
Colombia es el país con más desplazados internos en el
mundo, con más de 7,5 millones de personas. Las mujeres,
expulsadas de sus hogares a consecuencia del conflicto
armado, representan más de la mitad del total de esos
desplazamientos.
El 60% proviene de zonas rurales, siendo Nariño, Cauca,
Chocó y Valle los departamentos con mayor número de
desalojos. Las mujeres desplazadas se encuentran entre
las personas más vulnerables en Colombia: el 48% ha sufrido
violencia de género y sólo un 32,7% tiene un empleo
de algún tipo. Viven en asentamientos informales urbanos
-donde cuentan con pocas relaciones estrechas o lazos
familiares- y son víctimas de explotación laboral y sexual.
Betza
Blanca Nelly
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POLAROID
La última vez que nos vimos las caras: 9M 2020.
Hasta que volvamos a encontrarnos nos queda la alegría en los ojos.
Somos muchas.
Somos distintas.
Somos marea.
Somos poder.
Somos fuerza.
Somos amores.
Somos apoyo.
Somos valentía.
Somos dulzura.
Somos coraje.
Somos pasión.
Somos resistencia.
Ya no nos quedamos en casa.
Paola Olari Ugrotte
Nací en Buenos Aires en 1979. Soy abogada y fotoperiodista. Integro la cooperativa Imago Agencia, el colectivo artístico
“Me Flipa” y el grupo de fotógrafas “Pandilla Feminista”. Expuse individualmente en el Congreso de la Nación y
colectivamente en la Biblioteca Nacional, Casa de la Cultura Villa 21, Centro Cultural Adán Buenos Ayres, Museo de los
Inmigrantes entre otros espacios. Publico en distintos medios gráficos y digitales. Realizo obras de pequeño formato
y proyectos documentales de largo aliento.
instagram: @paolaolariugrotte / web: www.paolaolariugrotte.com.ar
Lucila y el
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ÚNICA EN SU MUNDO
Universo de la
Pachamama
Soy Lucila Vairo, Fotógrafa, tarotista y mamá.
Vivo en los Andes del Perú hace dos años, rincón donde fui madre y
expandí mi espíritu de una manera única y nueva para mi.
Gran parte de este camino se lo debo a esta cultura, a la magia que se
encuentra en donde mires, a estas montañas que hablan y si escuchas
te brindan una creatividad maravillosa y abundante.
A la fuerza de la mujer andina que es digna de contemplar y tomar
como ejemplo.
Aquí la mujer representa Fuerza, Lucha y autonomía. La mujer andina
trabaja mucho, hasta el cansancio las ves durmiendo en los mercados
apoyadas en su costal de papas, que cosechan de su huerta, de
alguna casita en la montaña..
Cargando siempre a sus hijos en sus espaldas, junto a alguna planta
o alimento que lleva para la casa, donde seguramente hay mas niños.
La mujer andina es sabia, sabe muchísimo de plantas y medicinas
que, entre quechua y español trata de compartirte para que te prepares
si te duele la barriga o si tu bebe tiene el susto, como dicen acá.
La mujer andina te prepara una sopita con todo el sazón y amor de
mama, que te cobra muy barato y a veces regala. Las ves todas juntas
comiendo y riendo, con sus hijos siempre al lado y algún que otro
animalito por ahí.
Ellas tienen carácter fuerte, no las vas a querer contradecir o enseñar
algo “moderno”, sus abuelas y madres fueron las profesoras en sus
vidas. No hay lugar para mas (y menos alguien del extranjero).
Su cultura y hábitos son tan marcados que no existe otro mundo
además del propio. No hay mas territorio que las montañas y paisajes
donde viven, pero si hay mas dimensiones, niveles de conexión
con la tierra indescriptibles.
El universo las guía, la pachamama les ofrece y a cambio hay una retribución
y agradecimiento de parte de ellas que no he visto en otros
lados. Su conexión con la naturaleza es pura.
La Mujer de los Andes me enseño que no hay que tener mucho para
ser feliz, que si agradeces y pides siempre permiso la pachamama te
devuelve multiplicado, que hay plantas y medicinas naturales para
casi todo lo que imagines, que el trabajo es esfuerzo, pero si lo haces
con alegría lo disfrutas.
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GPS
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DESDE RÍO GRANDE
Anabel
Mi hermana, mi modelo
Algo de lo que siempre admire de mi hermana fue su sonrisa. Venir a casa medio cansado y ver que ella me saludara o
con un abrazo o con esa sonrisa me aportan un buen afecto a mi estado emocional. Desde que empecé con la fotografía,
ella fue uno de mis primeros modelos. Se prendía en todo en cualquier payasada que yo hacía, es por eso que desde
mis comienzos hasta hoy quería compensarlo y representar lo que es mi austral compartiéndolo con mi hermana. Es la
mayor, la que me cuido de chiquito, la que me enseñó lo que es el significado del respeto, valores y los principios de una
persona que tiene alguna discapacidad, es quien me hace recordar que todos somos iguales. Quien se preocupó junto
con mi madre de ponerme algún abrigo porque hacía frío o viento y quien me peleo alguna vez.
Martín Codina
Me llamo Martin Codina, tengo 19 años y actualmente vivo en Tierra del Fuego, Río
Grande. Conocí la fotografía en el 2018 y tuve la suerte de tener Fotografía como materia
en la secundaria.
A principio no le veía alguna razón de tener fotografía en mi último año, pero medida
que pasaba el tiempo me surgían dudas existenciales de qué hacer con mi vida. En mi
provincia no hay algún estudio con algún título o certificado que avale algún estudio
profesional de fotografía, entonces empecé a dedicarle a tiempo completo a los talleres
culturales de fotografía que dictaba mi profe.
Poco a poco voy entendiendo cosas, cambiando equipo fotográfico, acumulando experiencias
y entre otras cosas más.
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GPS
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A LA QUIACA
La fotografía siempre a sido esa forma tan particular de detener el tiempo y mantenerla
en una imagen para el recuerdo. Siempre eh creído en la magia que provoca
una fotografía en el momento y lugar adecuado es parte del alimento del alma de
las personas que amamos hacer fotografía.
Nada más gratificante que mostrar al mundo un poquito del legado ancestral de
mis abuelos.
Mis abuelos nos han inculcado la cultura de sus antepasados, el respeto y la fé
hacía los santos y la Pachamama.
En la casa de mí abuela doña Flora Quispe se realizan una serie de eventos religiosos
y ancestrales en honor a los santos y vírgenes que tiene en su pequeña capilla
ubicada en el fondo de su casa. En vísperas del 24 de Junio se realiza Tradicional
luminaria en honor al santo San Juan Bautista, se reúnen los familiares más cercanos
y se disponen a celebrar al santo, de está manera el fuego representa la luz
que nos ilumina y nos guía después de muertos en busca del descanso eterno.
Natalia Cruz
Mi nombre es Natalia Alina Cruz, jujeña nacida en la ciudad de san salvador de Jujuy
el 21 de julio de 1997, hija de doña Visitaciona Cruz oriunda del paraje “La Aguada”
perteneciente al distrito de Cerrillos departamento de Yavi. Hija de crianza de don Fabián
Calpanchay actual pareja de mí madre, oriundo del departamento de Susques
provincia de Jujuy.
Soy la penúltima hija de seis hermanos/as, 3 hombres y 2 mujeres.
Tengo un hijo de 5 años de edad llamado Lucio, un pedacito de mí corazón hecho persona.
Desde hace 15 años resido en la Ciudad de La Quiaca, actualmente tengo 22 años,
finalice mis estudios primarios en la escuela batalla de quera número 440, y los estudios
secundarios en la escuela de educación técnica número 1 egresando con el
título de Técnico Electromecánico, ubicados en la La Quiaca. Actualmente estudio en
la Facultad de Ingeniería, la carrera de APU (analista programador universitario) sede
la Quiaca.
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CÁMARA LÚCIDA
SEXO
Cuando Liliana me pide que escriba algo sobre ellas me sorprendo
Después comienzo a recordar algunas imágenes y sobre todo el contexto y la tensión que dicha producción de fotos
generaban en quienes estábamos compartiendo un espacio de creación.
Siempre fueron fotos difíciles de ver;
Había que conectarse con lo áspero de lo sexual y la sexualidad es un universo y también un misterio.
Estas fotos son huellas y búsquedas,
Vuelvo a verlas, Recuerdo muchas de maneras increíblemente fiel, iguales a sí misma y otras son descubiertas.
Han pasado 11 años desde entonces y sin embargo parecen atemporales.
La densidad se sostiene.
El movimiento, la violencia el encuadre crudo y la complicidad del grano siguen estando ahí.
Son fotos explicitas y oscuras a la vez.
Esto nos obliga a ver demasiado o a tener que esforzarnos para ver un doble movimiento.
Una virtud del trabajo.
Me detengo en una imagen, el cuerpo recostado en un colchón, colchón que parece el empedrado de una calle oscura.
Pienso en la sexualidad a la interperie.
La fotografía es exposición
Y con este trabajo, Liliana parece exponerse a las sombras.
Mariano Salomón
Nació el mayo de 1972 en Misiones y vive
y trabaja en Buenos Aires. Se ha formado
en la Escuela de Arte Fotográfico de Avellaneda,
estudió fotoperiodismo en la UBA
en 1996 y Antropología Visual y Técnicas
de Investigación, es discípula de Carlos
Bosch y Adriana Lestido.
Desde el año 1997 hasta la fecha se desempeña
como docente en talleres de fotografía
analógica y en talleres de ensayo
fotográfico y con un enfoque particular en
revisión de trabajo y seguimiento. Entre
el 2012 al julio de 2015 se desempeñó
como Editar Artística de Revista Pecado.
Ha participado de las exposiciones “30
Años estética de la memoria” (Centro Cultural
Recoleta), Estudio Abierto – San Telmo,
Porfolios en la vidriera en el Instituto
Superior Octubre, Buenos Aires. En “Mirada
Latinoamericana”, Universidad Autónoma
de Cataluña; Curo la muestra colectiva
Pasado/Presente donde su trabajo
sobre centros clandestinos de detención
de la última dictadura militar en argentina
fue expuesto en C. Séller & Galerie Markt
21 en Weimar, Alemania y en la Biblioteca
Del Comune de San Giovanni A Teducio de
Napoli, Italia, y en varios puntos de la argentina.
Invitada por el consulado argentino
en Porto Alegre a participar del festival
de fotografía de dicha ciudad, y de exponer
en el Festival de fotografía de Roma.
Su trabajo Papa y Mama recientemente
fue expuesto en la muestra Colectiva “Familia,
modela para desarmar” Aquí fue,
aborda, otro aspecto de su trabajo sobre
la temática de la última dictadura militar
en la Argentina, fue expuesto en la muestra
colectiva argentino /chilena “Diálogos
sobre el territorio” en el CC Matta, de la
embajada de Chile, y en la bienal de fotografía
documental de Tucumán.
Liliana Contrera
Crea en el año 2014 la primera feria de
venta de material analógico,
En la actualidad se desenvuelve como docente
de laboratorio fotográfico blanco y
negro, tarea que desarrolla también para
otros fotógrafos.
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LANDSCAPE
Mujeres de la India
Claudia Conteris
Fui a India de puro curiosa. No era una búsqueda religiosa ni espiritual, no iba a ningún ashram de yoga ni meditación, ni
pretensiones de conocer ningún gurú. Tampoco de voluntaria en Calcuta.
Era por sobre todo conocer el otro lado del planeta, llegar a Oriente, saber si de verdad aquello “ es otro mundo” y la India
es, tal vez, el mejor portal para ese descubrimiento. Deslumbrante, sorprendente, no siempre bella, dolorosa, y un lugar
que te obliga a reaprender otro modo de actuar, otro funcionamiento.
Dentro de una sociedad tan desigual como es ésta, con tanta miseria y marginación, las mujeres también la llevan muy
difícil. No es legal pero sucede, elegir si el embarazo llega o no a término según sea varón o niña, y así es como nacen
mucho menos niñas. Crecen y no son libres de enamorarse y casarse con quien quieran porque los matrimonios suelen
estar arreglados, además de condicionados por la casta a la cual pertenezcan. Subsiste la tradición de la dote que la familia
de la novia le debe pagar al futuro marido, ya que él debe mantenerla a partir del matrimonio. Abusos, violaciones,
violencia de género, discriminación y explotación laboral son socialmente bastante tolerados. Siendo que la mayoría de
ellas no trabaja fuera del hogar, la calle es un espacio dominado por los hombres y la problemática habitacional es tan
grande, cada hogar es como una pequeña comunidad de mujeres que se cuidan, se quieren, se atienden. De ahí ha de
nacer ese sentimiento de hermandad entre mujeres, que cuando conectas con ellas, por muy desconocida que seas,
muestran una afectuosidad y un interés tan directo y sincero por tu persona que te conmueve. No oponen distancia,
llegan con un gesto y un abrazo que te hace sentir parte. Aquí lo llamamos sororidad, término vinculado a nuestra lucha
feminista por los derechos y la igualdad. Allá surgirá, probablemente, de la misma necesidad de convivir, protegiéndose
y cuidándose. Es común verlas en grupo al frente de la casa, en el mercado y sobre todo en sus rituales. Son una fiesta,
de color, de luz, seres hermosxs y brillantes. Esta publicación es en B/N, así que intentá bañar las escenas con todo el
espectro posible del arcoris y el dorado del sol para poder representarte, un poco, el espectáculo que ofrecen.
GRAN ANGULAR
Rodrigo Abd
En esta foto del 16 de junio de 2013, Eudicia Urbano Quispe, de 70 años, llora durante el entierro de su esposo Marcial Escalante, en Ayacucho, Perú.
El 8 de enero de 1988, militantes de Sendero Luminoso asesinaron a 17 aldeanos en Chaca por ser acusados de colaborar con el Ejército peruano. (Foto AP / Rodrigo Abd)
Mujeres asisten a una procesión en San Pedro Sacatepequez, Guatemala, martes 29 de junio de 2010.
Los guatemaltecos celebran hoy el Día de San Pedro. (Foto AP / Rodrigo Abd)
Ojo, Corazón y Alma
Rodrigo Abd es tan argentino como Maradona,
nació en Banfield en el sur del Conurbano Bonaerense.
Trabaja como Reportero Grafico para la Agencia AP, y vive en la Hermosa ciudad de Lima.
Cuando le mencionamos del proyecto, no dudo un segundo en colaborar con fotos de
mujeres, asi es Rodrigo, es ojo, es corazón y es alma.
Y estas son sus fotos.
En esta foto del 13 de
junio de 2013, Aquilina
Cárdenas Velazque,
derecha, y su hermana
Luciana Cárdenas Velazque
miran el cráneo
de su padre mientras
reciben sus restos por
parte de antropólogos
forenses para un entierro
adecuado en Ayacucho,
Perú. El 8 de enero
de 1988, militantes de
Sendero Luminoso asesinaron
a 17 aldeanos
en Chaca por ser acusados
de colaborar con el
Ejército peruano. (Foto
AP / Rodrigo Abd)
Jade Sívori nació en El Bolsón en 1992. Se recibió de fotoperiodista en A.R.G.R.A. Estudió fotografía en Andy Goldstein
y Proyecto Imaginario.
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PORTFOLIO DESDE EL SUR
Entre el 2012 y 2016 creó, junto a la artista Alejandra Piovano, la galería de arte “Chez Nana” en La Pedrera, Uruguay.
Participó en exposiciones colectivas en el Hipódromo de San Isidro, Centro Cultural Kirchner y en la Fotogalería FOLA.
Entre 2017 y 2018 trabajo como editora de fotografía en la Revista Ohlalá del diario La Nación.
Ha colaborado con medios como W Magazine, Diario La Nación, Planeta Urbano, Revista Ohlalá, Revista Lugares, entre
otras.
Jade Sivori
MAESTRÍA FOTOGRÁFICA
NO FUE FÁCIL EL CAMINO
DE LA MUJER EN LA FOTOGRAFÍA
–Señor Pedro Meyer, buenas noches. Como el tema
central en nuestro Número Uno es La Mujer, le preguntamos:
¿Existen diferencias entre una fotografía
tomada por una mujer con otra captada por un hombre,
ya sea en la fotografía artística como en el fotoperiodismo?
–En una prueba ciega, en donde no se sabe quién
hizo cuál foto, me atrevo a decir que el atinarle a
quién hizo la foto –un hombre o una mujer– no sería
muy diferente el resultado del azar involucrado en
contestar a esta pregunta. Eso no quiere decir que
no exista una sensibilidad estrictamente femenina o
masculina, sólo que no la podremos detectar por el
solo hecho de ver una foto. Dicho en otras palabras,
la dicotomía no está resuelta por su evidencia visual.
Son muchos más los ingredientes que forman parte
de este tema.
–¿La mujer ha tomado protagonismo en estos últimos
años, o la fotografía no ha hecho diferencias de
género desde los inicios?
–Está de más decir que las barreras que la sociedad
le imponía a la mujer en general no fueran a afectar
el devenir fotográfico de una chica. ¡Claro que hubo
muchos problemas para el ingreso de la mujer en la
fotografía! Si yo como hombre viví muchos contratiempos,
con mi propia familia, una mujer me imagino
que no lo viviría mejor. Y de ahí en adelante... El camino
no fue muy fácil.
–¿Nos podría nombrar a tres mujeres fotógrafas
destacadas en el actual México?
–Graciela Iturbide, Yolanda Andrade y Gabriela Olmedo.
–¿Y de las históricas?
–Lola Álvarez Bravo, Tina Modotti y Mariana Yampolsky.
–¿Qué cámara tiene en uso en este momento?
–Me muevo entre cámaras Leica y Sony. Y entre éstas,
diversos modelos. Todo depende de qué voy a
fotografiar.
–¿Un lugar en el mundo que lo conecta con la fotografía?
–Yo diría que toda la superficie de nuestro planeta.
–¿Qué programa usa para editar fotos?
–Tengo programas que corren en la computadora de
escritorio y en la portátil, y otros en mi celular. En total
son como cincuenta diferentes programas, bien
distintos entre sí.
PEDRO MEYER
–En estos tiempos de pandemia, en que las/os fotógrafas/os
–como seres callejeras/os que son– se
encuentran encerradas/os, ¿qué les recomendaría
usted para no dejar de hacer fotos o seguir con proyectos
a pesar del obligado aislamiento social?
–El aislamiento social no es para siempre, y tampoco
soy afecto a declararnos víctimas de las circunstancias.
Es, eso sí, un cambio radical en la rutina de todo
el mundo. Así que este tiempo se puede aprovechar
para actualizar los conocimientos técnicos en muchas
áreas de la fotografía, sobre las que después se quejan
de que no tienen suficiente tiempo para aprender.
ENTREVISTA · JAVIER MORENO
FOTOS · PEDRO MEYER.
Una reflexión de Pedro Meyer
Nadie sabe a estas alturas cómo será el mundo dentro de seis meses. Nadie sabe cómo será la fotografía dentro de cinco
años. Estamos rodeados de incertidumbres por todos lados. Desde nuestra propia existencia hasta las herramientas
de trabajo, o para quién se puede trabajar. Todo el mundo tiene opiniones, pero no son hechos duros y puntuales. Habrá
que aprender a navegar en estas aguas turbulentas, y sin mucho sentido. La única cosa cierta que les puedo asegurar
es que nuestra especie, homo sapiens, necesita para su sobrevivencia el contar historias. Y como fotógrafos que somos
tenemos un pie en la puerta para poder ser quienes contemos esas historias y con ello asegurarnos un lugar a la mesa.
Meyer y la pandemia
El contemplar el fin del mundo como lo conocíamos desde mi jardín es todo un espectáculo. Se desmoronan economías,
cientos de miles de muertos, se desmantelan sistemas políticos, quiebra de empresas, millones de desempleados más
millones de desplazados. La tan deseada cooperación entre pueblos se ve amenazada por todas las vías posibles. No
hay manera de morir más solo y desamparado que con Covid-19. Y hubo quienes me dijeron que no fuera paranoico a
mediados de enero de este año... Sin embargo, también esto se va a poder superar. Aprenderemos muchas cosas nuevas
de cómo disfrutar a nuestros semejantes de otra manera, más llena de humanidad y solidaridad.
Pedro Meyer (www.pedromeyer.com) es uno de los pioneros y más reconocidos representantes de la fotografía contemporánea.
Fue fundador y presidente del Consejo Mexicano de Fotografía y organizador de los primeros tres Coloquios
Latinoamericanos de Fotografía. Además de su trabajo artístico y fotográfico, ha sido maestro en varias instituciones
de prestigio, así como curador, editor, fundador y director del portal web ZoneZero, que presenta el trabajo de
más de mil fotógrafos de todo el mundo. Fundador del Museo Cuatro Caminos.
Lo entrevistamos telefónicamente desde Buenos Aires a mediados de junio.
PROFUNDIDAD DE CAMPO
Para mí la imagen
es una terapia
Entrevista a Mayra Martell
MAYRA MARTELL
¿Cómo se retrata la violencia? ¿Cómo se retratan las desapariciones?
¿Con qué cámaras? Pero sobre todo ¿con
qué miradas? Estas preguntas laten en la conversación
con la fotógrafa mexicana Mayra Martell, reconocida internacionalmente
por sus trabajos documentales sobre
desapariciones forzadas en América Latina, entre los que
se destacan Petare (Venezuela, 2007), Falso Positivo
(Colombia, 2008), El triple borde. Argentina, Brasil y Paraguay
(2012), Ensayo de identidad (México, 2015). Además
este año fue seleccionada junto a otras fotógrafas
influyentes del mundo para la muestra Throgh Her Lens:
Women Photografhers en la galería de arte The Wittliff
Colecction en la ciudad de Austin, Estados Unidos.
Mayra Martell nació y vivió en Ciudad Juárez, en el estado
de Chihuahua, al norte de México, fronteriza con
la Ciudad El Paso, Texas en Estados Unidos. A los 19
años se fue a ciudad de México a estudiar y regresó
en 2005 para fotografiar la desaparición de niñas y
mujeres. El proyecto se extendió durante 10 años y
nació el trabajo Ensayo de Identidad.
De ese lugar que mediáticamente se conoce por su
violencia extrema, Mayra, con una mirada poco extrañada,
dice: “allí siempre sientes peligro, hasta por
respirar” y agrega: “en Juárez, de niña ya sabes que
corres peligro, la vulnerabilidad da mucho pie. Incluso
había páginas de asesinos seriales que recomendaban
a Ciudad Juárez como un buen sitio turístico a
donde ir, entonces era un lugar al que se le tenía que
tener miedo. Hay historias muy fuertes de compañeras
que fueron violadas por compañeros de la escuela,
hay una degradación muy grande. En la ciudad
siempre hay mucha gente, las fronteras son lugares
muy vibrados por las personas. La gente que llega es
porque quiere cruzar a Estados Unidos, puedes verlas
con sus bolsitas de plástico y sabes que vienen
de Guatemala, El Salvador y que están esperando la
noche para poder cruzar. Eso le da a la ciudad un ambiente
muy sombrío, medio decadente y hay mucho
miedo. A parte, geográficamente el clima es feo, es
desierto, aunque a mí me gusta”.
Ese fue el punto de partida y desde entonces todos
sus trabajos están relacionados con desapariciones
forzadas en Latinoamérica, lo que ella reconoce como
la “diversificación de la desaparición”.
Mientras repasa los detalles y particularidades de
cada pueblo, sus palabras trazan un mapa de la violencia
en nuestra región: “En Ciudad Juárez básicamente
todos corren peligro, las mujeres, los niños y
los hombres también; es muy siniestro, raptan, violan,
secuestran a una persona, la torturan por días.
Así de peligroso es, con esa vibra que dices, ¡aquí pasa
algo! En Guatemala y en Ciudad del Este también se
me hizo parecida esa vibra. En Honduras estaba muy
pesado; en Venezuela también, aunque es diferente
la violencia, allí hay balas por todas partes. En Perú
〉
trabajé con una ONG sobre las desapariciones en dictadura
y en Colombia con las desapariciones sobre
falsos positivos, que eran desapariciones que hacia el
presidente Uribe, quien les decía a los soldados que
por cada guerrillero que entregaran recibirían incentivos
en dinero y días libres”.
En Argentina también desarrolló dos proyectos: en
2012 realizó un trabajo documental, en blanco y negro,
sobre la triple frontera: Argentina, Brasil y Paraguay
y un trabajo con la Fundación María de los
Ángeles en Tucumán sobre la trata de personas. Por
otra parte en 2014 expuso en la ciudad de Buenos
Aires su trabajo Ensayo de la identidad y desde entonces
dice que tiene un gran cariño por nuestro país,
con amigos queridos y donde su trabajo tuvo mucho
reconocimiento, incluso más que en su propio país,
reconoce.
¿Cómo definís tus proyectos y cómo te vinculás con
tu editor en ese trabajo?
Básicamente todo lo que hago son libros de fotografías,
todos mis trabajos se van a maquetas, porque es
mi manera de entender el material y lo documentales
que hago. Mi editor es Alfonso Morales, uno de los
editores más importantes de México y me va guiando
en ese trabajo, me dice si funciona. En cierta manera
es tierra para el material, porque al final tienes que
pensar también en el espectador, no puedes hacer
fotos y visualmente no estar comunicando, creo que
tiene que estar ese vínculo con el editor, el espectador
y contigo mismo en decidir el discurso que quieras
dar.
¿Preferís trabajar en blanco y negro?
No, trabajo la estética según el proyecto. Por ejemplo
en un trabajo que acabo de terminar en Sinaloa
(México) donde retrato a las mujeres de los narcos, lo
realicé todo con celular, en color y con fotos en muy
baja resolución.
Amo mi cuarto oscuro, me encanta trabajar en el laboratorio,
me gusta mucho el ritmo y el tiempo del
blanco y negro, del negativo, porque finalmente todo
depende del tiempo, en el momento del clic estás
dependiendo del tiempo, el momento del revelado
dependes del tiempo, la manera de imprimir tiene
que ver con el tiempo. Pero en un trabajo como el de
Sinaloa no lo podía manejar así porque no me daba
el efecto que necesitaba visualmente, ¿entiendes? Al
final lo que yo estaba haciendo era una reproducción
de como ellas se retratan a sí mismas y la imagen que
quieren dar. Allí todo era color, tenían que salir muy
guapas y yo tenía que captar esa estética. Batallé el
doble porque no estaba acostumbrada a trabajar así,
ni con el celular, tuve que re aprender a fotografiar. No
eran ellas las que se tenían que adaptar a mí, sino yo
que me tenía que adaptar a eso.
-Sacando a la pandemia que es algo extraordinario
¿Cómo visualizás la fotografía contemporánea?
¿Hubo cambios en estos últimos años con nuevos
fotógrafos y nuevas miradas?
Creo que se democratizó demasiado la imagen, antes
tenías que tener una cámara, dinero para los rollos,
un lugar para revelar; ahora encuentro cosas positivas
también en el hecho de que la denuncia se da de
una mejor manera. Cualquier persona que vea algo,
saca una foto y está haciendo documental y eso te
sirve para denunciar muchas situaciones que están
pasando.
Pero ¿también que pasa? Que nos saturamos de
imágenes. Entonces todos están haciendo las mismas
cosas. A veces me mareo pero trato de ser consciente
de que hay una necesidad de expresión ¿no?
Y también entiendo que en esta situación estamos
haciendo fotos para otros, me pasa que veo a fotógrafos
de prensa que tienen que hacer fotos para el
editor o para el tipo de periódico que hacen o las fotos
que se suben en Instagram, de cierta manera estamos
condicionados a hacer fotografías para los otros,
para que nos digan, ¡ay que buena foto! Y creo que estamos
sacrificando mucho nuestra autoría, o nuestro
sentir en el hecho de encontrarnos en la imagen. Esa
es la escuela que yo tengo, realmente para mí la imagen
y la gente que ha tomado cursos conmigo sabe,
que la imagen es una terapia, que es como leer cartas
en el tarot. Podemos ver las sucesiones, podemos
ver que está sucediendo realmente, emocionalmente
en el entorno, políticamente, hay miles de lecturas.
Creo que la fotografía contemporánea simplemente
tiene que ver con nuevas maneras de hacer fotos,
pero también siento que es más difícil encontrar un
trabajo auténtico. Es muy fuerte porque estamos
trabajando en algo y a veces no tenemos decisión
de hacer lo que queremos y creo que la imagen o la
fotografía es eso, es permitirte hacer, o decir, o conectarte
con tu exterior desde lo que estás sintiendo,
si no aprovechamos eso y empezamos a hacer fotografías
donde toda la gente nos dice que son buenas,
entonces empezamos a copiar ese tipo de fotos, esto
se convierte en un abismo de un ego terrible, donde
nosotros nos ahogamos a nosotros mismos.
Muchos fotógrafos publican fotos en sus redes sociales
que son distintas a la de sus proyectos documentales
y la gente se interesa más por lo que
muestran de su vida personal. Tengo esa percepción
¿la compartís?
Al final creo que siempre estamos buscando una
identificación con el otro ¿no? Por ahí les resulta más
conocido tu hijo corriendo, les estás compartiendo
un momento de tu vida. Yo tengo claro que mis redes
sociales no son mi herramienta de trabajo. Tengo
una página con una carrera y con mi trabajo que nada
tiene que ver con mi vida personal. Mucha gente dice
que su vida personal es un reflejo de lo que trabaja, la
mía no, mi vida es muy superficial, muy chévere, me
gusta mi vida, me gusta mucho bailar, pero mi trabajo
es completamente diferente.
Me ha pasado que mucha gente ha visto libros míos,
ha estado en exposiciones y vio el trabajo de Ciudad
Juárez, cuando me conocen en persona se desilusionan,
¿tú eres? Porque también soy fotógrafa, o la
artista, hay una recreación del artista que tiene que
ser muy estoico, ser misterioso. Muchos amigos incluso
no saben lo que hago, mi trabajo es parte mía,
de mis preocupaciones, de mis obsesiones, pero sé
bien dónde van las cosas, no me importa mucho que
piensen de mí, incluso me gusta pasar con este perfil
medio de tonta, porque realmente, por los temas
que manejo eso me da más seguridad. Que crean que
no haga nada, que me la paso en la playa y a la par
tengo mucho trabajo, muy pesado y en cierta manera
de mucho riesgo, es una manera de protegerme de
ciertas cosas.
¿Las redes sociales te sirvieron para conducir tu trabajo?
Si, en Sinaloa tuve que rehacer mi Instagram, empecé
a usar fotos en bikinis, cosas superficiales, mostrar
que estoy comiendo, en la playa, porque las novias
de los narcos y muchos de los narcos también me
revisaban el Instagram antes de darme entrevistas,
entonces decían: solo es una chava que quiere hacer
fotos. Esa es la lectura que hay de mí a partir del
Instagram.
Cuando terminé con ese trabajo, en octubre del año
pasado, hubo fotógrafos que me vieron en bikini y
me escribieron para preguntarme por qué hacía eso
y me decían quiérete más, y yo no decía nada, hacía
fotos para lo que estaba trabajando. Realmente no
me interesa mucho lo que piensen en redes, más que
la gente que quiero fotografiar.
¿Te importa la técnica en tu trabajo profesional?
¿Cómo seleccionás las cámaras y los lentes que usás?
Desde el principio tuve mucho conflicto para relacionarme
con las máquinas, utilizo 3 o 4 cámaras, a veces
se me olvidan las funciones y tengo que volver a
leer, siempre he sido muy suelta en eso.
Siempre traigo una cámara chiquita, una olympus de
negativo que no más le das clic y ya. Cuando tengo
que trabajar con exposímetro lo hago, pero la técnica
realmente no me interesa mucho; estéticamente si, la
técnica cuando se vincula con lo estético me importa,
pero en general creo que la gente puede hacer fotos
con cajas de cartón y salen cosas increíbles. Tuve una
escuela con gente que manejaba muy bien la técnica,
de una autoría muy definida, pero que nada tenía que
ver con lo que usaban, sino en cómo se relacionaban
ellos con el exterior.
¿Sigue vigente el “no es la cámara, es el ojo”?
Cuando voy a provincia a dar talleres de edición, veo
que editan y que dejan muchas fotos afuera que están
increíbles, dejan cosas que para ellos están bien
por las redes; cuando veo las fotos que dejan fuera
me doy cuenta que hay cosas llenas de emoción, tan
fuertes y que comunican tanto, pero entonces ellos
dicen ah pero está fuera de foco o está movida, pero
eso no importa. Al final es que estás queriendo comunicar
y si lo haces.
Mis fotos de dos documentales están llenas de accidentes
y me gusta lo que sucedió, porque por algo
sucedió, al final toda esa energía y creo que la cámara
tiene esa capacidad de que en la luz se muestran
diferentes tipos de energías y lo que hay. En las de
Juárez han pasado muchas cosas, yo lo sé, porque
al final estoy vinculándome con gente muerta y eso
también se nota en las imágenes, están vibradas por
así decirlo.
Toda esa energía que es muy fuerte, que me imagino
se vuelve a experimentar cuando editás y ves las fotos
¿cómo lo vivís?
Todo es muy fuerte: las entrevistas con presuntos homicidas,
cuando las madres me piden que las acompañe
a la morgue porque encontraron un cuerpo y
parece que es el de su hija, cuando he perdido gente
que he querido, o se han muerto las madres de estas
niñas, cuando han asesinado a seres cercanos, todo
eso es muy fuerte, pero yo no soy triste. Las mamás
pobrecitas ya tienen demasiado drama, entonces
trato de hablar con ellas, hacer cosas, ver una película,
cocinar y trato de subirles la energía. Claro que me
duele, tengo períodos de tristeza muy grandes, pero
también disfruto, porque tiene que haber un equilibrio,
de cierta manera el grado de tristeza que tengas,
es también el grado de alegría que tengas.
INFORME ENTREVISTA Y REDACCION
ERICA AISA Y JAVIER MORENO.
NUDE CARLA VILLABA
CUERPO VIVO
Un día te diste cuenta que para estar vivo, había que
estar abierto. Había que darse espacio a sentir, a creer, a
confiar. Comunicarnos con nuestro ser.
Hago catarsis como puedo, como me sale. Saco fotos,
a veces escribo, muestro mis miserias y mis aciertos,
canalizo mis miedos.
Utilizo el miedo como motor de transformación.
Abrazo mi sensibilidad, que es la que me permite vivir lo
real.
Sentir es imprescindible.
El proceso se inicia en el propio cuerpo.
Erica Aisa
Desde Evita hasta hoy
Nací en 1979 y viví hasta los 18 años en
Pirovano, un pueblito de la provincia de
Buenos Aires. Cuando terminé el secundario
llegué a la ciudad de La Plata para
estudiar periodismo. Viví en pensiones,
con amigas, trabajé mientras estudiaba
y me recibí en la universidad pública. Hoy
soy comunicadora social y trabajo como
secretaria editorial en la Revista de Comunicación
Question/Cuestión (UNLP).
Soy docente del taller de escritura en Argra
Escuela y dicto talleres sobre lectura,
escritura y su vínculo con la fotografía en
distintos espacios.
Un tiempo narrado con fotos: entre lo público y lo privado
·
DIÁLOGO CON LA FOTOGRAFÍA
¿Hay modos de conocer a las personas a través
de las fotografías? ¿Saber quiénes fueron, cómo
fueron antes de pasar/estar en nuestras vidas?
Estas preguntas han sido un modo de leer algunas
fotos familiares que llegaron a mis manos,
después de varias mudanzas. En ese recorte de
historia familiar encontré muchas fotos que conocía
y otras que no, pero que podía reconocer
por el relato oral que fui escuchando a lo largo de
los años y que hacen de alguna manera a mi trama
de familia.
Las preguntas iniciales que aquí presento aluden
a fotos que nunca había visto y de las que tenía
muy pocos datos de contexto para otorgarles
sentidos. Se trata de fotos de mi abuela materna,
cuando era soltera, vivía en la ciudad de Tres Arroyos
y militaba en el Partido Peronista Femenino.
Hasta el momento de encuentro con estas fotos
yo sabía de su amor por el peronismo, de actos
en Buenos Aires donde conoció a mi abuelo y que
había trabajado en la Fundación Eva Perón, eso
era todo. Después de eso mi abuela Vivian era la
señora dulce que vivía con nosotros, en un pueblo
chico de la provincia de Buenos Aires, abocada a
la maternidad y las labores domésticas.
Me encuentro con estas fotos y entonces mi
abuela íntima y cotidiana, que preparaba las
mejores comidas del mundo, había sido en otro
tiempo muy previo a mi existencia, una mujer joven,
muy elegante que hablaba en público, daba
discursos y participaba de reuniones políticas.
La historiadora Mirta Lobato dice que “las fotografías
cobran sentido cuando pueden ser colocadas
dentro de una red de significados, donde el
presente y el pasado aparecen nuevamente conectados”.
Hoy miro las fotos y leo el testimonio de su existencia
en ese tiempo, pero no solo eso, porque
mi mirada en el lugar de espectadora permite la
construcción de una nueva temporalidad, donde
también entra en juego el futuro y este presente.
Cuando esas fotografías fueron tomadas, en algún
momento comprendido entre 1949 y 1955,
tiempo en que existió el Partido Peronista Femenino,
el año 2020 era puro futuro. Sabemos que
en los discursos se habla del mañana que se año-
Cuando miro las fotos, la escucho, sus palabras
que hablan del futuro llegan hasta mí, hasta este
presente y resuenan en mi boca.
ra y por el que se está trabajando en el presente,
así que seguramente mi abuela, en su discurso
para otras mujeres, habló del futuro.
El escritor John Berger se refiere al tiempo narrado
cuando habla de ubicar a las fotografías en
contexto: “vuelve a situar a esa fotografía en el
tiempo, no en su propio tiempo original, pues eso
es imposible, sino en el tiempo narrado”.
La memoria familiar se sigue escribiendo hoy,
cuando miro estas fotos y ubico a mi abuela en
los grandes acontecimientos históricos, como fue
la conformación del Partido Peronista Femenino,
con Eva Duarte de Perón a la cabeza.
En el discurso inicial, cuando presentaba el partido,
Evita decía: “Así como los obreros sólo pudieron
salvarse por sí mismos y así como siempre
he dicho, repitiéndolo a Perón, que ‘solamente los
humildes salvarán a los humildes’, también pienso
que únicamente las mujeres serán la salvación
de las mujeres”.
En ese mismo discurso hablaba de mujeres “infatigables,
fervientes fanáticas, intrépidas dispuestas
a trabajar día y noche”.
Mi abuela fue todo eso, no tengo ninguna duda,
pero para mí lo era en el ámbito doméstico, en lo
privado del hogar. En cambio, cuando miro estas
fotos, la veo afuera, en el ámbito público, haciendo
historia, seguramente sin saberlo. Ella parada
frente a otras, dando un discurso, narrando el futuro.
¿Y por qué no me contó de esos discursos en
las largas tardes tomando mates en la mesa de
nuestro comedor? ¿Por qué estas fotos se vuelven
novedosas ante mis ojos?
Entre lo público y lo privado se escriben muchas
historias y estas fotos fueron las dos cosas: tomadas
por fotógrafos profesionales de la época
en el ámbito público, se compraron y pasaron a
formar parte de un álbum fotográfico familiar, íntimo
y privado.
Y ahora, que las descubrí, que las recorre mi mirada,
que escribo estas palabras junto a ellas, que
puedo leerlas en contexto político, las saco de la
caja donde alguien las guardó y las vuelvo al espacio
público, las inserto en una trama social, cultural
y política más amplia.
Entonces, puedo ver a mi abuela en ese escenario
en algún lugar de Tres Arroyos, hablando, leyendo
en público, la puedo ver inaugurando la biblioteca
en la unidad básica.
Cooperativas Argentinas
Leo Duva. Presidente de Gestara
“Con mucho esfuerzo y militancia, el
cooperativismo se va adoptar como
un modelo económico y social para el
desarrollo humano”
Leonardo Duva es –actualmente-
presidente de Gestara(Grupo de
Empresas Sociales y Trabajadores
Autogestionados de la República Argentina)
en esta charla exclusiva con
UNICA analiza la situación del cooperativismo
en nuestro país, brinda precisiones
en torno a la labor que lleva
adelante la Asociación que preside.
Asimismo reflexiona sobre el impacto
económico que afecto al sector
-agravado por el contexto actual- y
comparte sus expectativas en cuanto
a las enseñanzas que el presente escenario
sociopolítico podrá dejar post
pandemia.
“Somos una organización gremial de
trabajadores y trabajadoras de la economía
social y la actividad autogestionada.
Nos iniciamos ante la propia
necesidad cuando -en los 90- muchos
nos quedamos sin trabajo. Las
fábricas cerraban y así se perdieron
muchos oficios y saberes. En ese momento
empezamos con la construcción
de cooperativas que generaron
desarrollo”
“Integramos una asociación civil con
formato de cámara-gremio. Entendemos
que el órgano superior para
juntar a los trabajadores es la cooperativa.
Hay personas que se autogestionan
y no ven la cosa colectiva, no
está mal porque se nos formatea con
aquello de: si te levantas temprano va
a ir bien”
“Cuando uno se organiza y observa la
particularidad que tiene esto de autogestionarse
que depende de tu esfuerzo
para lograr todo objetivo, se da
cuenta que no nos han formado con
los conceptos de cooperación, solidaridad
y compañerismo Claramente
se intentan fogonear otros principios
tales como la meritocracia o el individualismo”
“Esto no se enseña en las escuelas ni
en la universidad porque hay un formato
de educación pensado para reproducir
lo que el sistema necesita,
hay que trabajarlo -primero- desde
la comunidad organizada. La militancia
no tiene que ser partidaria, desde
donde -cada uno- elija debemos
participar para aportar a un proyecto
colectivo asociativo que tenga estos
valores. Desde allí, la lucha será por
lograr que el cooperativismo como
practica sea incorporado al ámbito
académico”
“La visión de otro formato de generar
trabajo y asimismo otra economía
empiezan a cobrar mayor fuerza,
fundamentalmente por la crisis que el
propio sistema capitalista genera al
expulsar trabajadores. Esto se observó
mucho en los últimos años -porque
tenías un ejército de reserva,como
se decía- pese a flexibilizarse las
condiciones laborales siempre había
alguien que quería tomar ese puesto
de trabajo y aceptaba”
“Reconocemos a la cooperativa como
un formato de empresa social de distribución
de riqueza que tiene como
eje central al trabajo. Ahora –también-
debemos pensar en este sector
de trabajadores -que desde sus casas
y talleres- conforman el famoso mercado
interno que -para nosotros- es
la economía social porque nadie la
concentra. En torno al consumo se
van generando esos puestos de trabajo
que no están regidos por el sistema
laboral formal”
“La principal herramienta que tenemos
para pelearle a este modelo concentrador
económico y capitalista -si
todos nos ponemos de acuerdo- es
nuestro rol como consumidores, allí
tenemos la fuerza que nos puede
permitir encarar otros modelos de
producción”
“Nosotros -como Gestara- venimos
peleando y generando distintas alternativas
para que los trabajadores
puedan consumir en otro lado. Porque
no accedemos a los medios masivos
que cuentan con la publicidad. Tenemos
que generar que el sector de la
economía social se visibilice, que se
conozcan los productos y servicios
que –desde allí -se ofrecen y que estos
estén al alcancen de todos Es el
tejido de red que venimos haciendo”.
“Podemos dar el ejemplo de eso quienes
hemos sostenido en los peores
momentos las fabricas abiertas y las
hemos recuperado generando trabajo
donde ya nadie quería hacerlo. A la
larga con mucho esfuerzo y militancia
se va a adoptar -esto ya no por la
crisis ni por necesidad sino- como un
modelo económico y social para el desarrollo
humano”
〉
Leo Duva.
Presidente de Gestara
Cooperativas Argentinas
“Es necesario visibilizar y potenciar lo
que venimos haciendo, Sabemos que
este modelo ya está en crisis, está
vencido y nunca termina de explotar.
Que haremos con la humanidad si las
maquinas van a reemplazar el trabajo
y –a la vez- lo que se produce con
ellas lo concentran 60 familias en el
mundo”
“El crecimiento político, social y económico
que se dio en la Argentina
entre el 2013 y el 2015 permitió el
crecimiento y la consolidación de las
cooperativas como unidades productivas
que pudieron dar un salto
superior, en el marco de una lógica
no individual sino colectiva. Así nació
GESTARA y así nos fuimos vinculando
entendiendo que –organizados-debíamos
mostrarnos como sectores
productivos que generaban trabajo,
porque eso nos potenciaba a todos”
cuidarse, que no hay margen si no hay
solidaridad y un compromiso colectivo.
Ojalá -más allá de la situación económica
que va empeorar- que esto
nos permita crecer como sociedad,
que en la Argentina podamos entender
que nadie se salva solo y que
ello nos involucra. Porque estamos de
paso. Cuando logremos comprenderlo
viviremos en forma en forma más
solidaria. Nos llevara tiempo pero uno
dejará plantada esa semilla para que
otros vengan a cuidar ese árbol. Hay
que ponerle amor esfuerzo y compromiso”
“No nos han formado con los conceptos
de cooperación, solidaridad y
compañerismo, claramente se intentan
fogonear otros principios tales
como la meritocracia o el individualismo”
Leo Duva.
“Argentina tiene una tradición de la
cultura del trabajo- que no ha tenido
otros países de la región- que viene
del peronismo que generó derecho
muy fuertes, a los cuales los trabajadores
adhieren y se aferran, tales
como vacaciones pagas, aguinaldo o
cobertura de salud. Al empezar a desarrollarse
en el mundo del trabajo,
cada persona toma esto adquirido.
Luego la academia te termina formando
con esta idea que podes ser
un empleador o un buen servil de un
empleador lo cual no creo que este
mal tampoco desde una óptica porque
creo que es parte del sistema de
las relaciones laborales”
“Nuestro país es enorme, tiene mucho
potencial de desarrollo, poca población,
mucha extensión geográfica
y riqueza natural. Ojalá que el Estado
- que en esta etapa -empuje como
desarrollador entendiendo que este
sector, nunca verá al dinero como una
como meta sino como el medio para
poder lograr los objetivos”
“Hoy el sistema mundial giro hacia
lo financiero, ya no importa lo productivo.
Hay que dar discusión a
este modelo que excluye y concentra
mostrando que el modelo que –cada
día- intentamos militar distribuye e
incluye. Debemos mirarlo con atención
estudiarlo y generar esa otra idea
que es posible un modelo económico
donde la plata no es el fino sino el
medio que nos permite generar proyectos
de vida distintos que incluyen
ascenso social y una mejor calidad de
vida”
“Es un buen momento para la economía
social -más allá del contexto-
para discutir a fondo - en el marco
de un sistema que muchos sentimos
que llego a su límite-quienes somos,
quienes producimos la riqueza y quienes
la concentran. Queremos plantar
bandera para mostrar que hay otro
modelo de vida económico y de relaciones
“Esta pandemia muestra que cuidarse
es cuidar al otro y cuidar al otro es
TEXTO/EDICIÓN · MARCELA DIAZ.
·
INCUBADORA DE IMÁGENES
MUJERES DE LA TIERRA
UTT Colonia 20 de Abril
El presente ensayo fotográfico fue realizado en el colectivo de
fotógrafos dirigido por Javier Moreno, en la ciudad de Luján,
se realizó en el predio Colonia 20 de Abril Darío Santillán. UTT,
Unión de Trabajadores de la Tierra.
FOTOGRAFXS
Maria Carosio, Maria Angelica Bolla, Enrique Diamante,
Fabrizio Chiaramonte, Marisa Miranda, Bea Grafia, Patricia
Chimino, Carmen Fredes, Monica Goldzstaud, Ana Ramos,
Nico Zarate, Gaspar Muiños y Nico Alvarez
Colectora Barrio Loreto. Un cartel indica la entrada a la
Colonia 20 de Abril. Un camino angosto a la izquierda, de
unos quinientos metros, me espera...
Voy al ex Instituto Ramayón López Valdivieso, que conocí
hace muchos años: un espacio para la atención de mujeres
con los más diversos problemas. Muy duro. Me es inevitable
recordar esa primera vez que visité el lugar con
intenciones de dar un taller de arte para las jóvenes que se
encontraban allí, que finalmente no se concretó.
Pero sí quedó el registro en mi memoria: un edificio imponente,
de estilo europeo como todos. Contaba y cuenta
con un gran cuerpo, varios pisos, techos altos... Ingresando
por la puerta principal se pasa al hall y se cruza un amplio
patio. Luego una capilla. ¿Dios estaba ahí? No estoy tan
segura. El lugar no coincidía, según mi percepción, con los
requerimientos basados en el amor y el buen trato para la
recuperación de quienes allí vivían. Reinaban la soledad, el
abandono, la falta de posibilidades de tener una vida digna.
Mientras proceso mis recuerdos no puedo dejar de comparar
a estas mujeres con aquellas que conocí habitando
este lugar, obligadas y/o castigadas por su conducta, sin
un trato que les permitiera reinsertarse en la sociedad.
Todos estos recuerdos se corren… Aparece un cartel casi
improvisado, de tela, que dice “Colonia 20 de Abril Darío
Santillán. UTT. Unión de Trabajadores de la Tierra”.
Hoy recorro este lugar y lo veo imbuido de un nuevo espíritu:
el espacio y el campo que lo rodea están en manos
de familias de agricultores agroecológicos y productores
lácteos, criadores de aves... Es un hecho fundamental para
la alimentación, la salud, la vida.
En 20 de Abril encontré familias, mujeres, hombres, niñas
y niños que habitan en casas del lugar y están en plena
actividad.
Los hombres preparan la tierra, acomodan la cosecha,
cargan cajones en carros, arreglan, transportan. Las mujeres
–muy jóvenes y no tanto–, que además de atender
su hogar, los niños, la comida, están en la siembra y en la
cosecha, con su cuerpo doblado plantando en la tierra o
bien recolectando, haciendo una labor de mucho esfuerzo.
Al finalizar la jornada diaria se reúnen alrededor de un
fuego y disfrutan del alimento. Les niñes juegan y algunes
ayudan alcanzando cosas. Todes valoran esos momentos
de activo trabajo comunitario.
Estoy muy atenta, recorriendo el campo cámara en mano.
Más allá de una buena foto, paisajes, productos que lucen
exuberantes y naturales –escena que en mi vida cotidiana
no vivo– ahí están ellas, las mujeres, la mayoría con sus
rostros curtidos por el intenso sol.
¿Acaso este modo de producción tenga que ser una labor
tan dura, para alimentar a una sociedad que los últimos
años ha venido intoxicándose con pesticidas?
Trabajan en silencio o hablan en voz baja, levantan la cabeza
si les hablo. En general trabajan sin verme. Interrumpo:
“¿Te puedo tomar una foto?”. Sonríen o me miran seriamente.
No todes aceptan. Quizás sientan que no pertenecemos
y nos ven como invasores. Tenemos culturas
distintas, pero deseamos la comunión... La sonrisa aparece
levemente. Es más amplia cuando sostienen en sus
manos endurecidas, resecas, curtidas, el fruto de la tierra.
Tomo una y otra fotografía documentando este encuentro
registrando a través de la luz el contraste, el colorido, el
detalle, el entorno, a ellas y sus cuerpos, sus manos y sus
rostros cansados.
Ha sucedido algo muy significativo en estos años: la creación
de la escuela primaria y secundaria, producto del reconocimiento
de la necesidad de educación para todes.
Podrán envejecer sin dolor, seguramente identificades con
la naturaleza y con el trabajo más justo, más valorades y
respetades.
Quizás sea necesario este proceso para el final de la injusticia
y el patriarcado.
Pasaron muchas horas. Debo regresar.
BEA GRAFIA
·
IMAGEN DESNUDA
Mercedes significa
libertadora
la que libera
Las personas
con este nombre suelen
ser bastante
independientes por
lo que tienen un
carácter autónomo
Mecha Frías
AGITAR EL AVISPERO
〉
24 DE JUNIO DE 2018
BUENOS AIRES – ARGENTINA
Tenía 19 años, estaba en pedo bailando en un boliche
bastante horrible de la calle Sarmiento que se llamaba
La France, supongo porque todas ahí chapamos a
lo francesa por primera vez o más de una vez.
Yo tenía novio hace ya dos años, ese novio de la secundaria
que perdura mientras uno va creciendo hasta
que de golpe los sueños de uno, crecen más que
los del otro y la diferencia si queres era brutal, dice
la letra de “Dos Romeos”. Tenía ese novio, que no le
gustaba ir a bailar, aunque eso no significaba ni siquiera
menear. Le gustaba jugar al truco con amigos,
tomar whisky y fumar habanos, creyendo armar su
propia revolución. Ese novio, cuyo nombre proviene
del último, del pequeño, pongámosle de sobrenombre
“El Menor”.
El grupo de amigos de El Menor era tan grande como
el mío de amigas, y nuestras amistades a veces se
mezclaban con lenguas, porros y algunas borracheras
juveniles en algunas juntadas, cumpleaños, o en
boliches de vasos de plástico. Boliches como ese,
de la calle Sarmiento. Ese boliche donde había tantos
desfiles misóginos, que yo renegada con la idea
lograba subirme a la pasarela esquivando patovas y
machitos encendidos con sus cámaras pockets o revolucionarios
celulares nokia. Subía y desfilaba agitada
por aplausos de mis amigas y risas de los amigos
de mi novio, y entre modelos en bombacha y medias
red, modelos con las tetas del tamaño de mi cara me
recibían con sonrisas incómodas mientras yo casi corría
por la tarima con mis jeans de Bachino y mi remera
de Fujimoda. Hasta que algún patova me agarraba
al final del túnel de la patética fama bolichera y me
bajaba ovacionada por un público de mujeres y un
“flaca ya que te dije que si volvías a hacerlo no entrabas
más” del supuesto dueño del lugar. Bueno bueno,
no te calentés, te entretuve a todo el boliche mucho
más que con éste desfile pedorro, era mi respuesta
y mis amigas se encargaban de decirle que no iba a
suceder mas mientras me sacaban de la vista de éste
señor pedófilo.
Tenía 19 años, y volvíamos a bailar en la parte de arriba
que ya estaba meada como territorio nuestro. Mochilas
y abrigos apilados en el medio del piso que generaban
una especie de fogón entre amigos que iban
apareciendo mostrando tragos de diversos colores
fluorescentes en el trascurso de la noche. Cada tanto
alguna de las chicas se iba con alguno de los amigos
de mi novio a chapar fuerte al costado de esas escaleras
oscuras.
Esa noche apareció este ser humano, no muy amigo
de ninguno, esos que cada tanto aparecen y se creen
íntimos de todos. Esos que le quieren instalar la idea
a los chicos de que probar drogas fuertes es de piola,
esos que creen que insistirte en bailar pegados
aunque no quieras es gracioso, esos que nunca viste
sobrios o sin consumir nada, esos que se ríen si te
tocan el culo delante de todos. Llegó ese, su nombre
proviene del muy fuerte, del poderoso, de “El Rey”, y
una amiga tan en otra y sin conocerlo no tuvo la mejor
idea que ir y chaparse al Rey durante largo rato en
esas escaleras. Yo, indignada. ¿Cómo se pudo haberse
ido con ese tarado?, me acuerdo de comentar.
Pero la noche siguió. Hasta que hacia el final del meneo
bajé a comprarme el último trago, pero no me
alcanzaba con mi sueldo de $300 por mes de cadeta,
entonces me quedé charlando con el barman tratando
de conseguir algún refresco gratis de despedida. A
mis espaldas escuché al Rey, totalmente dado vuelta
pero sin mi amiga, diciendo que él me invitaba, le dije
que no, insistió, le dije que no, insistió y me agarro
fuerte. El barman desapareció, el “amigo” de mi novio
me apretó contra una pared y empezó a tratar
de darme un beso, me lamía la cara, traté de sacarlo,
me maree, no tenía fuerzas, tenía 19 años, estaba en
pedo bailando en un boliche bastante horrible. Mis
amigas no estaban, no recuerdo como logré zafarme,
pero ya estaba llorando, subí, agarré mis cosas
y salí corriendo. Los amigos de El Menor me vieron y
salieron atrás mío junto a otras amigas. En la puerta
me agarró el mejor amigo de mi novio, cuyo nombre
el significado es Gemelo. El gemelo del Menor me
repetía que le diga que pasó, qué me habían hecho,
que iba y lo mataba. No dije nada, solo lloré mientras
unas amigas me subían a un taxi, yo no pude emitir
palabra, no contaba nada, me sentía más ebria que
antes. Tenía ganas de vomitar y una culpa empezó a
invadirme. Todo era mi culpa, pensé.
No recuerdo como llegué o entré a mi casa, pero sí
recuerdo como mi padre me retó por el estado en que
había aparecido. Me quedé en cama todo el día, recibiendo
llamadas de mis amigas. Tenía que contárselo
a El Menor me repetían, lo iba a matar, me aconsejaban
ellas, mientras les contaba lo poco que me
acordaba. Pasaba el día y la escena se me hacía cada
vez más difusa, nunca entendí si era por el grado de
alcohol en cuerpo o si era por el mal gusto que quería
borrar de mi alma y mente. Vomité todo el día.
El domingo fui a lo de mi novio. Me dijo que el Gemelo,
le había dicho que me fui llorando de La France. Le
conté todo, temblando entre lágrimas y vergüenza.
Nunca me creyó. Algo había hecho yo según él, no lo
había frenado como correspondía. Me contó que El
rey le había dicho al Gemelo que habíamos chapado
toda la noche. Le dije que eso había sido con mi amiga.
Nunca me creyó. El Menor me echó de su casa.
Me dejó.
Me dejó llorando y avergonzada. Volví a mi casa, mi
hermana me recibió con abrazos y le conté todo. Me
dijo que había que hacer algo. Que ese hijodeputa
de El Rey siempre le mandaba cosas perversas por
MSN y siempre la invitaba a salir. “Si El Menor no hace
nada, vamos a hacerlo nosotras” dijo ella, cuyo origen
griego de su nombre significa “Trabajadora como la
abeja”. Por un momento volví a sonreír. “Pero hay que
hacerlo ya, no quiero perder a El Menor por esto”. Le
dije, ( ja!) Me sentía la Juana de arco de la relación.
Al día siguiente citamos a todas mis amigas, hasta la
más bella, según el latín, aquella que si se había chapado
a El Rey y estaba más furiosa que ninguna. Éramos
7 contando a mi hermana, la pequeña abeja. El
plan empezó, y la abejita le escribió a El Rey para citarlo
a tomar cerveza esa semana o cuando él pudiera.
El rey entró cual Monarca que va a ser asesinado
por su pueblo. Quedaron para el jueves. Planeamos el
horario, medianoche, una calle de encuentro, aquella
con poca gente, aquella sin salida, bien oscura, aquella
en el barrio de recoleta, ese recoleta bien cheto
y desértico, onda Posadas y Quintana. Planeamos
que compren unas latitas de birra, planeamos donde
la abejita le tenía que decir que se sentaran a tomar
esa birra, planeamos cómo nos separaríamos cada
grupo, y por dónde íbamos a aparecer cada patota.
Planeamos que decir cada una. Planeamos, y entre
brindis y risas maléficas esperamos al jueves.
El rey fue puntual y se encontró con la abejita en una
esquina, caminaron hacia un kiosco, y compraron
cervezas. Había mensajes de textos donde el panal
iba confirmando con nuestra abejita líder las coordenadas.
Yo temblaba entre abrazos. Se sentaron en la
vereda pactada. No esperamos ni a que terminen la
primera lata, cuando a diestra y siniestra apareció la
colmena, que rodeó en un semicírculo a la presa sentada
en el piso.
“Yo a éstas las conozco” dijo el Rey riéndose nerviosamente.
“Si claro, y de mi no te olvidas mas” le dije
saliendo de entre el avispero. La abejita se levantó
rápidamente uniéndose al círculo y disparó su aguijón
de trompada gritando: A MI HERMANA NO LA TO-
CAS MAS HIJO DE PUTA. Un aluvión de trompadas y
patadas rodearon al Rey que se tapaba la cabeza e
intentaba salir por algún agujero del panal.
Corrió. Y corrimos. Y volamos. Volamos como nunca
habíamos volado, vociferando por todo el barrio
de recoleta que el Rey había delinquido. Vecinos noctámbulos
que paseaban a sus perros y hasta un policía
nos dejaron pasar mientras él pedía ayuda.
El Rey al fin se rindió, la bella le pegó con sus llaves,
la abejita lo escupió, la colmena insultó y yo lloré. Lloré,
lloré tanto que un llanto desesperado lo llamé al
Menor, le pasé el teléfono al Rey mientras el ejército
rayado lo sostenía y le dije:“Decile, decile la verdad”.
No pasó nada, le dijo él, “acá me tienen las amigas de
tu novia que me cagaron a palos, yo no hice nada”. El
menor cortó. El rey salió corriendo agarrándose una
herida. Yo me derrumbé en la calle más concheta del
país. Y seis abejas transpiradas me abrazaron con todas
sus alas.
Seguí llorando durante casi un mes, escribí una de
mis cartas más sinceras que escondí y entregué entre
objetos que tuve devolverle al Menor. Al poco tiempo
nos juntamos en un bar y volvimos a estar juntos. Mi
relación con él fue una de las mas lindas que tuve a
pesar de éste horrible episodio, fue mi relación hacia
el crecimiento, duró dos años más, pero ya no era lo
mismo. Algo en mi había madurado, cambiado, ¿crecido?
Algo había quedado herido y pegado con miel.
Pero miel de mujer.
“Mercedes" significa "libertadora", "la que libera" .Las
personas con este nombre suelen ser bastante independientes
por lo que tienen un carácter autónomo.
Luchan por sus derechos y por los de los demás. Suelen
tener un buen humor y siempre miran al futuro
con optimismo. Su carácter vehemente, también le
puede jugar malas pasadas. Son personas muy inquietas
por lo que siempre tienen en mente nuevos
objetivos y proyectos. Son muy comunicativas y les
gusta mucho hablar y socializarse. Es muy observadora
gracias a esta habilidad puede averiguar muchos
datos de las personas en un solo vistazo. Les gusta
aprender mucho por ello lee y estudia mucho. Son
muy buenas amigas de sus amigos ya que son muy
sinceras y de confianza.”
NACIMOS
EMILIA
FOTOGRAFÍA
Mecha Frías
#01
MUJERES