Cuento

Había una vez una jirafa
llamada Mandy que vivía
en la cima de una montaña

A Maddy le encanta
comer pasto y hojas

¿pero sabes que más
le encanta comer?
¡Pastel de manzana!
Y ella misma lo prepara

Un día Maddy se levantó
temprano para cocinar su
pastel de manzana como
siempre lo hacía y así fue...

Maddy muy contenta dijo:
— Qué rico pastel...
tengo mucha hambre...
¡Me lo comeré T ODO!

Y decidió comerse
T ODO el pastel...

Pasaron las horas y Maddy
comenzó a sentirse de una
manera extraña...

En su cabeza comenzó
a brotar una pequeña
hoja verde y sus manchas
cambiaron a color rosado
¡Había comenzado
el efecto manzana!

— ¡No puede ser!
¡Esto me pasa por
comer mucho pastel!
Maddie muy preocupada
se acercó a un espejo
y observó su nuevo aspecto
asustada dijo:

Corrió hacia un árbol y
comenzó a comer rápidamente
las hojas del árbol

Al paso de unos minutos
el efecto manzana fue
perdiendo su fuerza y
volvió a su estado natural

— De hoy en adelante solo comeré hojas y pasto,
dejaré de comer pastel durante todo el año
Bueno… lo comeré una vez al mes.

La noche llegó y la jirafa
Maddy después de un día
tan largo se durmió