Listín Diario 28-09-2022
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10 cm<br />
5 cm<br />
SANTO DOMINGO, RD. MIÉRCOLES, <strong>28</strong> DE SEPTIEMBRE DE <strong>2022</strong><br />
11<br />
Opinión<br />
4 cm<br />
3,5 cm<br />
QUO VADIS<br />
OYE PAÍS<br />
Publica los miércoles<br />
3 cm<br />
MIGUEL REYES SÁNCHEZ<br />
RUDDY L. GONZÁLEZ<br />
A<br />
comienzos<br />
d e 1 5 8 6 ,<br />
Santo Domingo<br />
suf<br />
r i ó e l<br />
más devastador ataque<br />
de piratería de su<br />
historia, cuando Francis<br />
Drake atacó la ciud<br />
a d c o n u n a f l o t a d e<br />
23 navíos y unos 1800<br />
hombres.<br />
En Europa existía la<br />
idea de que Santo Domingo<br />
era una de las más<br />
ricas metrópolis del Nuevo<br />
Mundo, por lo que<br />
Drake esperaba encontrar<br />
en la misma grandes<br />
riquezas. Pero, esta ciudad<br />
para entonces era un<br />
puesto de avanzada pobre<br />
y escasamente poblado.<br />
E l 1 1 d e e n e r o d e<br />
1586, los piratas ingleses<br />
llegaron de sorpresa por<br />
Haina y desembarcaron<br />
con un primer contingente<br />
de 600 a 700 hombres<br />
Cuando se confirmó la<br />
noticia se produjo un pánico<br />
en la población, y<br />
para alertar a los residentes,<br />
los oidores de la Real<br />
Audiencia hicieron repiquetear<br />
las campanas de<br />
la Catedral.<br />
El saqueo de Santo<br />
Domingo<br />
Esto ocasionó que huyeran<br />
despavoridos, llevándose<br />
sus joyas y metales<br />
preciosos, hacia el norte<br />
del país. Hasta las máximas<br />
autoridades emprendieron<br />
la huida: el gobernador<br />
Cristóbal de Ovalle<br />
y Juan Melgarejo, alguacil<br />
mayor, fueron de los<br />
primeros en abandonar<br />
la ciudad. Incluso, Ovalle<br />
dejó hasta a su esposa,<br />
la cual fue capturada por<br />
los ingleses y se convirtió<br />
en el principal rehén de<br />
Drake.<br />
Además de las evidentes<br />
muestras de incapacidad<br />
y cobardía de las<br />
autoridades, debemos<br />
convenir que la situación<br />
en el plano militar era<br />
crítica. Las milicias acantonadas<br />
en Santo Domingo<br />
estaban formadas por<br />
unos 800 hombres a pie y<br />
otros 100 a caballo, apenas<br />
armados de picas y<br />
lanzas, escasos arcabuces<br />
con pocas municiones<br />
y pólvora.<br />
El ataque sobre Santo<br />
Domingo se inició el<br />
12 de enero en la Sabana<br />
del Rey, al oeste de la<br />
ciudad, donde se organizaron<br />
las tropas inglesas<br />
en dos columnas.<br />
En media hora, ya habían<br />
alcanzado las murallas<br />
de la urbe. Con muy<br />
poco esfuerzo pudieron<br />
ocupar la ciudad. En la<br />
tarde, ya habían capturado<br />
la mayor parte de<br />
la localidad, con excepción<br />
de la Fortaleza Ozama,<br />
que resistió hasta la<br />
noche.<br />
Drake no tenía la intención<br />
de ocupar la isla,<br />
lo que sin dudas hubiera<br />
sido desaprobado por<br />
su reina, pues Inglaterra<br />
aún no estaba en guerra<br />
con España. Lo único que<br />
quería era conseguir un<br />
buen rescate y el saqueo<br />
de la ciudad.<br />
Un mes completo pasaron<br />
los ingleses en Santo<br />
Domingo hospedados<br />
en la Catedral, saqueando<br />
todo lo que pudieron,<br />
quemando y destruyendo<br />
edificios, iglesias y<br />
conventos.<br />
Los pocos residentes<br />
que quedaron en Santo<br />
Domingo fueron presos<br />
y tuvieron por cárcel dos<br />
de las capillas de la catedral,<br />
cuyos tesoros fueron<br />
desvalijados y los archivos<br />
destruidos, siendo<br />
los documentos más antiguos<br />
que se conservan<br />
en nuestra patria a partir<br />
de 1590.<br />
Francis Drake exigía<br />
un rescate de 200,000<br />
ducados, pero las autoridades<br />
de la colonia le<br />
ofrecieron 25,000 ducados,<br />
que era a lo que alcanzaban<br />
las joyas, la<br />
plata y el oro sacado por<br />
el presidente y los vecinos,<br />
monto considerado<br />
por el corsario como<br />
“pírrica suma”. Luego de<br />
largas negociaciones accedió<br />
y desalojó la plaza<br />
el 10 de febrero de 1586,<br />
llevándose las campanas<br />
de las iglesias, la artillería,<br />
cueros y alimentos.<br />
El saldo fue negativo<br />
para todos: los inversionistas<br />
ingleses perdieron<br />
dinero, aunque Inglaterra<br />
tuvo un triunfo político,<br />
pero fue el germen de<br />
la guerra anglo-española.<br />
Para España fue peor,<br />
ya que sus colonias fueron<br />
devastadas y sus habitantes<br />
sumidos en la<br />
miseria. Mientras, Santo<br />
Domingo quedó postrada.<br />
Sólo Drake se<br />
alzó con el santo y la limosna.<br />
“Parquéate bien”<br />
La frase es atractiva, se oye bonita,<br />
y ojalá, hago votos, fuera el inicio<br />
verdadero, real, de soluciones a<br />
largo plazo de uno de los principales<br />
problemas que acusa la ciudad:<br />
la circulación vial. Pero, confieso, tengo<br />
mis dudas.<br />
Es una situación que debemos verla en muchas<br />
vertientes, comenzando porque ha sido<br />
propiciada y auspiciada, diría yo, por las propias<br />
autoridades que a lo largo del tiempo, hasta<br />
hoy, han permitido la práctica y fomentado<br />
construcciones e instalación de todo tipo de<br />
negocios sin establecer zonas ni reglas de parqueos,<br />
lo que completa la falta de educación de<br />
unos y el ‘jefeo’ de otros.<br />
El denominado ‘polígono central’ de la Capital<br />
es el más vivo ejemplo de ello. Donde había<br />
una casa familiar se ha instalado un comercio –<br />
desde una cafetería, una tienda, un restaurante,<br />
oficinas públicas y privadas, hasta una plaza- sin<br />
que cuente con los parqueos mínimos para los<br />
visitantes y/o clientes. Los comercios lo ‘resuelven’<br />
con valet-parkings, que toman el vehículo<br />
al cliente y lo estacionan donde les da la gana,<br />
en calles aledañas. A la ‘autoridad’ –Policías, Digessets,<br />
Cobas, incluidos- no les importa, porque<br />
ellos ‘no están para eso’ –así dicen-, aunque<br />
sí se les ve ‘pasar el sombrero’. Los taxistas, ‘deliverys’<br />
y ‘jefes’ todopoderosos y sus choferes, a<br />
quienes ‘nadie puede’ imponerles reglas, hacen<br />
lo que les viene la gana en las calles.<br />
Concluyo: poniendo multas, llevándose vehículos<br />
y tomándose fotos y videos para fines de<br />
propaganda mediática, burda y populista, no se<br />
resuelve un problema tan serio. !Qué por algo<br />
hay que comenzar!, Sí. Pero no para ‘recaudar’,<br />
que temo, es lo que realmente importa.<br />
HEDDEL CORDERO<br />
Penurias de<br />
escritores<br />
Si tomamos en<br />
cuenta que vivimos<br />
en una<br />
era donde se<br />
escriben más<br />
libros; existen más recursos<br />
para mercadearlos;<br />
un universo mayor de<br />
personas con capacidad<br />
para comprarlos; más facilidad<br />
para leerlos y/o<br />
escucharlos; más escuelas,<br />
colegios y universidades<br />
para estudiarlos;<br />
más calidad en la tecnología<br />
de impresión de los<br />
mismos, etc., da brega<br />
entender que su lectura<br />
no se exprese en el mismo<br />
sentido y que los escritores<br />
dominicanos –en<br />
su grandísima mayoríano<br />
tengan mayor protagonismo<br />
en la sociedad y<br />
sigan siendo héroes anónimos<br />
de la cultura nacional.<br />
En ese sentido, no se entiende<br />
que a estas alturas el<br />
escritor, además de producir<br />
la obra, tenga que ser el<br />
IDEANDO<br />
Publica los miércoles<br />
que la patrocine y al mismo<br />
tiempo quien la venda, motive<br />
su adquisición y muchas<br />
veces el que menos<br />
ganancia obtenga de sus<br />
ventas.<br />
Los escritores nuestros<br />
son cada vez menos conocidos,<br />
menos valorados y<br />
menos distinguidos por esta<br />
generación.<br />
Personalidades que antes<br />
eran veneradas y reservadas<br />
para tareas mayores<br />
de los pueblos y sus autoridades,<br />
ahora subyacen en<br />
una categoría social irrelevante<br />
y hasta pordiosera,<br />
gravitando entre penurias<br />
y olvido.<br />
Esta generación ignora a<br />
sus escritores. Menosprecia<br />
a sus intelectuales. La política<br />
cultural del país ha sido<br />
pobre en ese sentido y ni siquiera<br />
ha logrado reivindicar<br />
su estelaridad social.<br />
Tenemos una grandísima<br />
deuda con nuestros escritores.<br />
Deudas para justipreciarlos<br />
y deudas para promover<br />
sus nombres y darles<br />
más vigencia en la vida cultural<br />
y docente del país.<br />
Se hace necesario que<br />
sus condiciones cambien<br />
para que no sigan viviendo<br />
de las dádivas de amigos y<br />
de mecenas de ocasión.<br />
Al mismo tiempo, esta<br />
sería una forma de evitar<br />
que la mediocridad siga<br />
enajenando y mediocratizando<br />
nuestra población.<br />
Así, los aplausos no serán<br />
para los imbéciles, sino para<br />
la flor y nata del pensamiento<br />
nacional.<br />
JURISPRUDENCIA CONSTITUCIONAL<br />
Publica los miércoles<br />
WANDA MÉNDEZ<br />
Carrera<br />
Administrativa<br />
Cuatro exservidores públicos de<br />
carrera administrativa interpusieron<br />
una acción de amparo,<br />
en reclamo de su reposición en<br />
el Ministerio de Interior y Policía,<br />
alegando violación del debido proceso y<br />
otros derechos fundamentales.<br />
La acción fue acogida por el Tribunal Superior<br />
Administrativo, que ordenó su reposición,<br />
pero la institución pública recurrió el<br />
fallo ante el Tribunal Constitucional, que invocó<br />
los despidos fueron realizados en base a<br />
la ley 41-08, de Función Pública.<br />
La Alta Corte acogió el recurso de revisión<br />
de amparo y revocó la sentencia impugnada,<br />
reiterando el criterio de que la vía efectiva<br />
para resolver el conflicto es la contenciosoadministrativa,<br />
y no el amparo, en virtud del<br />
artículo 70.1 de la ley 137-11. (TC-0297-22)