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Rinitis, sinusitis y alergia<br />

204<br />

Revista Alergia México 2009;56(6):204-16<br />

Artículo de revisión<br />

Blanca Estela del Río-Navarro,* Fernando Mitsutoshi Ito-Tsuchiya,** Benjamín Zepeda-Ortega***<br />

RESUMEN<br />

Los padecimientos alérgicos e infecciosos de la mucosa nasal representan dos de las enfermedades más frecuentes de las vías aéreas<br />

superiores crónicas en niños y adultos jóvenes. Son un problema de salud pública de gran magnitud debido a su alta prevalencia,<br />

lo que ocasiona gran presión asistencial en términos de consultas ambulatorias, deterioro significativo de la calidad de vida para el<br />

paciente y sus familiares; además, implica un fuerte impacto en la comunidad por los altos costos socioeconómicos que generan. Es<br />

indispensable conocer su fisiopatología para realizar el diagnóstico oportuno y con ello proporcionar el tratamiento adecuado para<br />

disminuir su recurrencia.<br />

Palabras clave: rinitis alérgica, sinusitis.<br />

ABSTRACT<br />

The allergic and infectious diseases of the nasal mucous represent two of the most frequent and chronic upper airways diseases in<br />

children and young adults. They are a public health problem of great magnitude due to the high prevalence that causes a great welfare<br />

pressure in terms of ambulatory consultations, significant deterioration of the quality of life so much for the patient who suffers them,<br />

like for the relatives and affect the community for the high socioeconomic costs that these generate. It is indispensable to know the<br />

physiopathology to be able to realize in time a suitable diagnosis and with it to offer a treatment adapted to diminish it recurrence.<br />

Key words: allergic rhinitis, sinusitis.<br />

La afección nasal y de los senos paranasales<br />

son enfermedades con alta prevalencia en la<br />

edad pediátrica que deterioran significativamente<br />

la calidad de vida de los pacientes. Su<br />

diagnóstico y tratamiento aún generan controversia, pues<br />

suelen superponerse diferentes factores desencadenantes,<br />

como agentes infecciosos, alérgicos y ambientales.<br />

* Alergóloga pediatra. Jefa del Departamento de Alergia e<br />

Inmunología Clínica Pediátrica, Hospital Infantil de México<br />

Federico Gómez.<br />

** Alergólogo pediatra. Puebla, Puebla.<br />

*** Alergólogo pediatra. Jefe de la División de Enseñanza e<br />

Investigación del Hospital para el Niño del Instituto Materno<br />

Infantil del Estado de México.<br />

Correspondencia: Dra. Blanca Estela del Río Navarro. Departamento<br />

de Alergia e Inmunología Clínica, Hospital Infantil de<br />

México Federico Gómez. Dr. Márquez 162, colonia Doctores,<br />

CP 06720, México, DF.<br />

Correo electrónico: blancadelrio@yahoo.com.mx<br />

Recibido: agosto, 2009. Aceptado: septiembre, 2009.<br />

Este artículo debe citarse como: Del Río-Navarro BE, Ito-Tsuchiya<br />

FM, Zepeda-Ortega B. Rinitis, sinusitis y alergia. Rev Alerg Mex<br />

2009;56(6):204-16.<br />

La versión completa de este artículo también está disponible en:<br />

www.nietoeditores.com.mx<br />

Debido a que la inflamación de los senos paranasales<br />

(sinusitis) es precedida, en la mayoría de los casos, por<br />

inflamación de la mucosa de la cavidad nasal (rinitis),<br />

es frecuente utilizar el término “rinosinusitis”.<br />

El predominio de enfermedades alérgicas se ha elevado<br />

considerablemente en los últimos 20 a 30 años, 1,2<br />

con el efecto de que ahora se les considera una carga<br />

importante dentro de las sociedades occidentales. Los<br />

síntomas principales de alergia en niños pequeños son<br />

dermatitis (eccema), alteraciones gastrointestinales y<br />

sibilancias, mientras que en los niños mayores predominan<br />

el asma, la rinitis y la conjuntivitis. 3 Es importante<br />

establecer el diagnóstico y tratamiento adecuados de la<br />

rinitis alérgica, porque su impacto se refleja en la calidad<br />

de vida y en el padecimiento de otras comorbilidades,<br />

como el asma.<br />

DEFINICIONES<br />

Rinitis<br />

Inflamación de la mucosa que reviste la nariz, que se<br />

distingue por uno o más de los siguientes síntomas: estornudo,<br />

prurito, rinorrea y obstrucción nasal. La rinitis<br />

frecuentemente se acompaña de síntomas que afectan las<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009


estructuras cercanas, como los ojos, los oídos, los senos<br />

paranasales y la garganta. 4<br />

Sinusitis<br />

Inflamación de la mucosa que reviste los senos paranasales,<br />

secundaria a procesos infecciosos o no infecciosos,<br />

caracterizada por descarga nasal (anterior o posterior,<br />

que puede ser hialina o mucopurulenta), halitosis, tos<br />

persistente, obstrucción nasal, dolor o presión facial,<br />

cefalea y alteraciones olfatorias.<br />

El uso de los términos sinusitis y rinosinusitis ha generado<br />

gran controversia. El término “sinusitis” sugiere<br />

que la enfermedad es la manifestación de un proceso<br />

infeccioso en los senos paranasales, mientras que el de<br />

“rinosinusitis” indica que la mucosa nasal y sinusal se<br />

encuentran afectadas simultáneamente por un proceso<br />

inflamatorio. 5,6<br />

Clasificación<br />

La rinitis se clasifica, por evolución y origen, como se<br />

muestra en el cuadro 1, mientras que la sinusitis, como<br />

se indica en el cuadro 2.<br />

RINITIS ALÉRGICA<br />

Definiciones<br />

Hipersensibilidad alérgica<br />

Conjunto de signos y síntomas reproducibles objetivamente,<br />

iniciados por la exposición a un estímulo definido<br />

a una dosis tolerada por sujetos sanos.<br />

Atopia<br />

Tendencia personal o familiar de producir anticuerpos<br />

IgE en respuesta a bajas dosis de alergenos, habitualmente<br />

proteínas, expresando síntomas típicos de asma,<br />

rinoconjuntivitis o eccema.<br />

Rinitis alérgica<br />

Inflamación crónica de la mucosa nasal que resulta de<br />

alguna reacción de hipersensibilidad mediada inmunológicamente<br />

por IgE, con la subsiguiente liberación de<br />

mediadores inflamatorios, activación y reclutamiento<br />

celular en respuesta a la exposición a ciertos alergenos<br />

(polen, moho, epitelio de animales o ácaros del<br />

polvo). 7<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009<br />

Rinitis, sinusitis y alergia<br />

Epidemiología<br />

La rinitis alérgica es una enfermedad con elevada<br />

prevalencia, que se ha incrementado en los países industrializados<br />

en las últimas décadas. Sin embargo, son<br />

pocos los estudios epidemiológicos efectuados en la<br />

población infantil y los factores de riesgo aún no están<br />

bien establecidos. 8,9 Por ello y con la finalidad de conocer<br />

la prevalencia de diferentes enfermedades alérgicas<br />

en la infancia, se creó un protocolo de investigación<br />

internacional denominado: Estudio Internacional sobre<br />

Asma y Alergias en la Infancia (The International Study<br />

of Asthma and Allergies in Childhood, por sus siglas en<br />

inglés, ISAAC), 10,11 que constituye una investigación<br />

epidemiológica en todo el mundo de las tres enfermedades<br />

alérgicas más frecuentes en la población infantil:<br />

asma, rinitis alérgica y eccema atópico, mediante una<br />

metodología común, desarrollada en tres fases. En la<br />

fase I se midió la prevalencia de los síntomas en la<br />

población de referencia, constituida por los niños de 6<br />

a 7 y de 13 a 14 años de edad, respectivamente. En la<br />

fase II se realizaron pruebas diagnósticas y en la fase<br />

III se volvió a determinar la prevalencia de los síntomas<br />

alérgicos para estimar la tendencia temporal después de<br />

cinco años.<br />

La prevalencia en Europa es de 15%, en Estados<br />

Unidos entre 18 y 30%, en Australia de 35% y en México<br />

se estima una prevalencia de 5.5% para los grupos<br />

estudiados. 12,13<br />

La rinitis alérgica y el asma son enfermedades comórbidas:<br />

un alto porcentaje de pacientes con rinitis<br />

(20-40%) tiene asma, mientras que 30 a 50% de los casos<br />

con asma tiene rinitis. Se ha sugerido que el tratamiento<br />

óptimo de la rinitis puede prevenir o retrasar la aparición<br />

del asma y disminuir la enfermedad existente.<br />

La prevalencia de rinitis alérgica incluye síntomas<br />

de rinoconjuntivitis en 8.5% de los pacientes escolares<br />

de todo el mundo. En México la prevalencia general de<br />

rinoconjuntivitis en pacientes escolares es de 11.6%,<br />

sobre todo en el Distrito Federal (17.2%), Villahermosa<br />

(13.9%) y Mérida (13.5%). Mientras que la prevalencia<br />

global de síntomas de rinitis en el mismo grupo es de<br />

30.3%, principalmente en el Distrito Federal (centro:<br />

46% y norte: 42%), Villahermosa (32.4%) y Mérida<br />

(38.8%). En adolescentes de todo el mundo se estimó la<br />

prevalencia de síntomas de rinoconjuntivitis en 12 meses<br />

205


Del Río Navarro BE y col.<br />

Cuadro 1. Clasificación de la rinitis<br />

Tiempo de evolución Rinitis aguda: menos de 14 días<br />

Rinitis crónica: más de 14 días<br />

Origen Rinitis alérgica<br />

Origen<br />

• Mediada por IgE<br />

• No mediada por IgE (eosinófilos)<br />

Periodicidad<br />

• Intermitente (antes estacional)<br />

• Persistente (antes perenne)<br />

Gravedad<br />

• Leve<br />

• Moderada-grave<br />

206<br />

Rinitis no alérgica<br />

Infecciosa<br />

• Aguda: viral, bacteriana.<br />

• Crónica: difteria, Klebsiella, bacilo de la tuberculosis, bacilo de Hasen (lepra),<br />

agentes micóticos (Mucor, Aspergillus, etc.).<br />

No infecciosa<br />

• Vasomotora (neurogénica o idiopática).<br />

• No alérgica con eosinofilia.<br />

• Ocupacional: químicos, polvos industriales, contaminación.<br />

• Hormonal: pubertad, embarazo, enfermedad tiroidea.<br />

• Inducida por medicamentos: antinflamatorios no esteroides, ácido acetilsalicílico,<br />

antihipertensivos, descongestionantes tópicos, estrógenos orales, cocaína.<br />

• Asociada con alteraciones inmunológicas: síndrome de Churg-Strauss, lupus eritematoso<br />

sistémico, síndrome de Sjogren, sarcoidosis, granulomatosis de Wegener.<br />

• Alteraciones anatómicas: desviación septal, poliposis, hipertrofia adenoidea, atresia de<br />

coanas, neoplasias, cuerpo extraño.<br />

• Alteraciones genéticas: fibrosis quística, síndrome de discinesia ciliar primaria.<br />

• Procesos atróficos: adultos mayores con complicaciones posquirúrgicas o posradioterapia.<br />

• Alteración del sentido del gusto (asociado con alimentos picantes o especias).<br />

Modificado de: Quillen DM, Feller DB. Diagnosing rhinitis: allergic vs non allergic. Am Fam Physician 2006;73:1583-90.<br />

Cuadro 2. Clasificación de la sinusitis<br />

Tiempo de evolución<br />

• Aguda: menos de 30 días (menos de cuatro semanas),<br />

con curación completa de los síntomas.<br />

• Aguda recurrente: cuatro o más episodios por año,<br />

al menos de siete días de duración, sin signos<br />

ni síntomas entre los episodios.<br />

• Subaguda: 30 a 90 días (entre cuatro a doce semanas,<br />

pero menos de tres meses), en ocasiones hasta 120 días.<br />

• Crónica: entre 90 y 120 días (más de 12 semanas).<br />

• Exacerbación de la sinusitis crónica: síntomas por más<br />

de tres meses, con episodios de agudización<br />

Recurrente<br />

• Pacientes que mejoran su estado con el tratamiento,<br />

pero experimentan múltiples episodios.<br />

Resistente<br />

• Pacientes que no responden con el tratamiento convencional<br />

Complicada<br />

• Complicación local o general en cualquier fase.<br />

de 14.6%, más alta en África (18%) y América Latina<br />

(17.3%), y baja en el norte y este de Europa (9.2%).<br />

En México la prevalencia general de rinoconjuntivitis<br />

en adolescentes es de 15.4%, sobre todo en Mexicali<br />

(28.1%), Villahermosa (17.7%), Mérida (15.7%) y<br />

Distrito Federal (centro 14.7%). La prevalencia global<br />

de síntomas de rinitis en adolescentes es de 30.3%.<br />

En México fue más alta en Mexicali (41.3%), Mérida<br />

(39.7%), Villahermosa (39.5%) y Distrito Federal (centro<br />

35.3%, norte 29.5%). 14<br />

Fisiopatología (figura 1)<br />

La reacción alérgica se inicia a partir de la inhalación de un<br />

alergeno, que al ponerse en contacto con la mucosa nasal se<br />

encuentra con las células dendríticas, las cuales lo fagocitan<br />

y procesan. Los antígenos procesados son presentados a las<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009


Figura 1. Fisiopatología de la rinitis alérgica. 15,16<br />

células T cooperadoras a través de un mecanismo en el que<br />

intervienen el complejo mayor de histocompatibilidad de<br />

clase II de la célula dendrítica y el receptor de las células<br />

T. El linfocito Th2, por medio de las interleucinas IL-4 e<br />

IL-13, estimula la secreción de IgE.<br />

La respuesta linfocitaria varía según el tipo de citocina<br />

que produce. El linfocito Th1 secreta, básicamente:<br />

IL-2, interferón gamma (INF-γ) y factor de necrosis<br />

tumoral (TNF). El linfocito Th2 secreta: IL-4, IL-5, IL-6,<br />

IL-9, IL-10 e IL-13 y promueve la síntesis y secreción<br />

de IgE, mientras que los Th1 la inhiben. 15,16<br />

Reacciones de fase temprana (figura 2)<br />

Las manifestaciones clínicas de la rinitis alérgica corresponden<br />

a una reacción de hipersensibilidad tipo I.<br />

Al principio, cuando un paciente sensibilizado se pone<br />

en contacto con el alergeno correspondiente, la IgE<br />

específica lo capta y forma un complejo que se une a<br />

los receptores de alta afinidad de las células cebadas y<br />

de los basófilos, donde se explica en forma didáctica la<br />

secuencia de la liberación de mediadores preformados,<br />

mediadores secundarios derivados del ácido araquidónico<br />

y citocinas.<br />

En la fase temprana la liberación de histamina y<br />

otros mediadores provocan el estornudo, prurito nasal y<br />

rinorrea. Las fibras nerviosas del sistema parasimpático<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009<br />

Rinitis, sinusitis y alergia<br />

secretan acetilcolina, sustancia que estimula la actividad<br />

glandular. Las cininas son potentes vasodilatadores que<br />

originan edema y dolor local.<br />

Reacciones de fase tardía (figura 3)<br />

Se manifiesta 3 a 12 horas después de la exposición<br />

al alergeno. Se distingue por acumulación de células<br />

inflamatorias en la mucosa nasal, que desde el punto<br />

de vista clínico se caracteriza por congestión nasal. Al<br />

inicio aumenta la concentración periférica de neutrófilos,<br />

eosinófilos y linfocitos T, y después de 96 horas sólo<br />

persiste la eosinofilia y linfocitosis.<br />

Las citocinas secretadas por los linfocitos Th2 mantienen<br />

y amplifican el fenómeno inflamatorio en la vía<br />

respiratoria. La IL-5 estimula la acumulación de eosinófilos<br />

y su activación, e inhibe la apoptosis. La IL-4<br />

e IL-13 estimulan la secreción de RANTES, eotaxina,<br />

cofactor proteínico de membrana y el factor quimiotáctico<br />

de los eosinófilos en los fibroblastos. Estas células<br />

tienen receptores para IgE, que al activarse promueve<br />

la degradación de la membrana plasmática con la subsiguiente<br />

síntesis de leucotrienos y prostaglandinas. Los<br />

leucotrienos atraen eosinófilos al sitio de la inflamación,<br />

facilitan la permeabilidad capilar, aumentan el edema<br />

y la secreción de las glándulas mucosas, y potencian la<br />

acción de las cininas. 17<br />

207


Del Río Navarro BE y col.<br />

Figura 2. Reacción de fase temprana en la rinitis alérgica.<br />

Figura 3. Reacción de fase tardía en la rinitis alérgica.<br />

Los radicales libres de oxígeno producidos por los<br />

eosinófilos, como el anión superóxido y el peróxido de<br />

hidrógeno, dañan el epitelio y promueven la reacción<br />

208<br />

inflamatoria intensa, que provoca la hiperactividad nasal<br />

distintiva a través de la secreción de diversas sustancias<br />

por las células implicadas en la reacción inflamatoria,<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009


principalmente la proteína básica mayor, proteína catiónica,<br />

peroxidasa y neurotoxina de los eosinófilos.<br />

Estas proteínas dañan el epitelio de la vía respiratoria e<br />

incrementan su actividad al exponer las fibras nerviosas<br />

locales por la destrucción del epitelio protector; además,<br />

la producción de endopeptidasa neutral se interrumpe y,<br />

debido a que los neuropéptidos secretados por las fibras<br />

nerviosas no pueden degradarse, el efecto inflamatorio<br />

se prolonga de manera indefinida.<br />

La infiltración de diferentes células, primordialmente<br />

de los eosinófilos y de diversas citocinas, provoca la<br />

obstrucción nasal. 17<br />

Clasificación<br />

Según la Iniciativa de Rinitis Alérgica y su Impacto en<br />

el Asma (Allergic Rhinitis and its Impact on Asthma,<br />

ARIA), desarrollada en conjunto con la Organización<br />

Mundial de la Salud (OMS), la clasificación se basa en<br />

la intensidad de los síntomas (leve, moderada-grave),<br />

tiempo de manifestación (intermitente, persistente) y<br />

calidad de vida de los pacientes (cuadro 3).<br />

Cuadro 3. Clasificación ARIA de la rinitis alérgica. Tiempo de<br />

manifestación, intensidad y calidad de vida 18<br />

Intermitente<br />

Síntomas que duran menos de<br />

cuatro días a la semana<br />

Leve<br />

No interfiere con el sueño<br />

No interfiere con las actividades<br />

diarias, deportivas,<br />

recreativas, laborales y escolares<br />

Persistente<br />

Síntomas que duran más de<br />

cuatro días a la semana<br />

Moderada-grave (uno o más)<br />

Interfiere con el sueño<br />

Interfiere con las actividades<br />

diarias, deportivas y recreativas<br />

Dificultades laborales y escolares<br />

La rinitis alérgica se subdividió previamente, con base<br />

en la duración de la exposición, en estacional, perenne<br />

y ocupacional; sin embargo, esta subclasificación no es<br />

del todo satisfactoria. 18,19<br />

Diagnóstico<br />

La historia clínica y la exploración física (el rascado<br />

frecuente de la nariz “saludo alérgico” o las gesticulaciones<br />

faciales para aliviar el prurito nasal, los círculos<br />

periorbitales obscuros llamados “ojeras alérgicas” indican<br />

estasis venosa y linfática crónica en esa región,<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009<br />

Rinitis, sinusitis y alergia<br />

secundaria al edema crónico de la vía aérea, manifestaciones<br />

de otras enfermedades alérgicas, como asma,<br />

dermatitis atópica o alergia a alimentos) son la piedra<br />

angular para el diagnóstico de rinitis alérgica; aunado<br />

a esto, en la práctica pediátrica serían útiles la determinación<br />

de IgE sérica total y la biometría hemática para<br />

valorar la concentración de eosinófilos (la cuenta de más<br />

de 500 eosinófilos totales es sugerente de enfermedad<br />

alérgica, siempre y cuando se descarten otras causas de<br />

eosinofilia [parasitosis]). Al obtener estos datos, el paso<br />

siguiente es referir al paciente con el alergólogo pediatra<br />

para efectuarle pruebas diagnósticas específicas.<br />

El antecedente familiar aporta datos importantes de la<br />

enfermedad alérgica. Estudios prospectivos han demostrado<br />

que si un familiar en primer grado (padre, madre<br />

o hermano) padece alergia, existe posibilidad de 40 a<br />

60% de que su hijo sea alérgico. Si ambos padres son<br />

alérgicos, la posibilidad de padecer alguna enfermedad<br />

alérgica se incrementa entre 60 y 80%.<br />

Los pacientes preescolares padecen frecuentemente<br />

alergia relacionada con alergenos intradomiciliarios,<br />

como ácaros del polvo, mohos y epitelios de animales; la<br />

alergia a pólenes requiere, por lo menos, dos temporadas<br />

de exposición para inducir los síntomas relacionados. En<br />

escolares, la alergia al polen es común, aunque puede<br />

ocurrir más tempranamente. La alergia a alimentos es<br />

una causa poco común de rinitis alérgica; no obstante,<br />

puede haber reactividad nasal con algún alimento, como<br />

los síntomas producidos por anafilaxia. Además de los<br />

alergenos, existen sustancias irritantes que incrementan<br />

el proceso inflamatorio en la vía aérea. Es importante<br />

interrogar acerca de tabaquismo pasivo, contacto con<br />

humo de leña o carbón, gases relacionados con el uso<br />

de estufas, vapores de cloro en albercas, pinturas, solventes,<br />

insecticidas, perfumes, aromatizantes, polvos<br />

derivados de la construcción u otras sustancias volátiles<br />

cercanas.<br />

La mucosa nasal se explora mediante rinoscopia anterior,<br />

cuyos hallazgos más importantes son inflamación,<br />

coloración rosa-pálido y puentes de secreción hialina. Sin<br />

embargo, esta apariencia característica puede reemplazarse<br />

por otra menos clásica, como una mucosa que parece<br />

estar sana, en ocasiones eritematosa, con secreciones<br />

espesas, algunas veces amarillentas o verdosas, y puede<br />

o no haber infección de las vías aéreas superiores.<br />

209


Del Río Navarro BE y col.<br />

Los niños con enfermedad nasal crónica pueden<br />

experimentar disfunción de la trompa de Eustaquio,<br />

secundaria a edema e inflamación en el orificio tubario.<br />

Con frecuencia se observan membranas timpánicas opacas,<br />

con poco movimiento a la neumatoscopia y líquido<br />

sugerente de otitis concomitante. 20<br />

El cuadro 4 muestra el diagnóstico diferencial para<br />

rinitis alérgica, según el grupo etario, y la figura 4 señala<br />

las causas de rinitis no alérgica y su tratamiento.<br />

Fármacos asociados con rinitis<br />

1. Analgésicos: antinflamatorios no esteroides, aspirina.<br />

2. Antihipertensivos: inhibidores de la enzima convertidora<br />

de angiotensina, amiodarona, b-bloqueadores.<br />

3. Psicotrópicos: risperidona, clorpromazina, amitriptilina.<br />

4. Inhibidores de la fosfodiesterasa-5: sildenafil,<br />

tadalifil, verdenafil.<br />

5. Otros: cocaína, gabapentina.<br />

Tratamiento<br />

El tratamiento de la rinitis alérgica se orienta a restaurar<br />

la función nasal, el paso aéreo, controlar las secreciones,<br />

corregir las alteraciones estructurales e infecciosas y<br />

evitar complicaciones y secuelas.<br />

A continuación se resumen los medicamentos para el<br />

control de la rinitis alérgica. 21,22<br />

Cuadro 4. Diagnóstico diferencial por grupo de edad<br />

Hasta 1 año de edad Rinitis infecciosa: infección de las vías aéreas superiores, sinusitis, sífilis, Chlamydia.<br />

Rinitis alérgica: alergenos intramuros, alergia a alimentos.<br />

Rinitis no alérgica: irritativa, obstructiva (trisomía 21, atresia de coanas), tumores (encefalocele, meningocele),<br />

enfermedad por reflujo gastroesofágico, química.<br />

1 a 3 años de edad Rinitis infecciosa: infección de las vías aéreas superiores, sinusitis, síndrome de discinesia ciliar.<br />

Rinitis alérgica: alergenos intra y extramuros, alergia a alimentos.<br />

Rinitis no alérgica: irritativa, obstructiva (hipertrofia adenoidea y de cornetes, cuerpo extraño), enfermedad<br />

por reflujo gastroesofágico.<br />

3 a 12 años de edad Rinitis infecciosa: infección de las vías aéreas superiores, sinusitis, síndrome de discinesia ciliar.<br />

Rinitis alérgica: alergenos intra y extramuros.<br />

Rinitis no alérgica: cambios térmicos, del gusto, reflejo (sol), irritativa, medicamentosa (descongestivos<br />

tópicos), obstructiva (hipertrofia adenoidea y de cornetes, cuerpo extraño, pólipos), tumores.<br />

12 a 18 años de edad Rinitis infecciosa: infección de las vías aéreas superiores, sinusitis.<br />

Rinitis alérgica: alergenos intra y extramuros.<br />

Rinitis no alérgica: cambios térmicos, del gusto, reflejo, irritativa, medicamentosa (cocaína), idiopática<br />

(vasomotora), obstructiva (hipertrofia adenoidea y de cornetes, pólipos, desviación septal), tumoral<br />

(angiofibroma).<br />

210<br />

Antihistamínicos<br />

Los antagonistas de receptores de histamina H1 constituyen<br />

una alternativa útil y práctica en el control de los<br />

síntomas de la rinitis, sobre todo la rinorrea, el prurito<br />

y los estornudos; sin embargo, no son tan efectivos para<br />

disminuir la congestión nasal. 23<br />

Cada grupo de antihistamínicos tiene características<br />

farmacológicas diferentes, según su farmacocinética,<br />

vida media y efectos secundarios. Éstos se clasifican<br />

en antihistamínicos de primera generación (bromfeniramina,<br />

clorfeniramina, clorpiramina, difenhidramina<br />

e hidroxicina), que al atravesar la barrera hematoencefálica<br />

producen sedación; por tanto, su prescripción<br />

tiene reservas en pacientes sensibles a dichas sales; y<br />

antihistamínicos de segunda generación: azelastina,<br />

cetirizina, ebastina, loratadina, terfenadina. Entre los<br />

fármacos más recientes se encuentran: fexofenadina,<br />

desloratadina y levocetirizina.<br />

El poco efecto sedante de estos fármacos, así<br />

como la facilidad de administración (cada 12 a 24<br />

h), los ha colocado como un método terapéutico<br />

importante. 24<br />

Descripción de la actividad y farmacocinética de los antihistamínicos<br />

H1 Mecanismo de acción: los agonistas inversos (antagonistas)<br />

del receptor H se indican preferentemente por<br />

1<br />

su estado inactivo.<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009


Figura 4. Rinitis no alérgica.<br />

Rinitis no alérgica<br />

Inflamatoria Inducida por fármacos No inflamatoria<br />

RNASE Irritante/ocupacional<br />

Esteroides tópicos Evitar exposición<br />

Descongestivos<br />

Antihistamínicos<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009<br />

Rinitis, sinusitis y alergia<br />

Atrófica Vasomotora Hormonal Rinitis medicamentosa<br />

Debridación Bromuro de ipratropio Cromonas Régimen de retiro<br />

Lavados Considerar corticoesteroides del descongestivo con<br />

Antibióticos cobertura de corticoesteroides<br />

tópicos<br />

Farmacocinética: en los antihistamínicos de primera<br />

generación no se ha estudiado óptimamente la farmacocinética<br />

en adultos sanos ni en niños. Los de segunda<br />

generación se han estudiado ampliamente en ambos<br />

grupos (cuadro 5).<br />

Entre los efectos adversos se incluyen: cefalea, somnolencia,<br />

fatiga, nerviosismo, erupción cutánea, dolor<br />

abdominal, hipercinesia.<br />

Descongestivos<br />

La congestión nasal es el síntoma más común en los<br />

pacientes con rinitis alérgica y el de más difícil control.<br />

Los simpaticomiméticos tópicos se clasifican, según<br />

su efecto, en corta o larga duración. Entre los primeros<br />

se encuentran la efedrina, nefazolina, fenilefrina y tetrahidrozolina;<br />

mientras que los segundos incluyen la<br />

oximetazolina y xilometazolina.<br />

Su efecto ocurre en pocos minutos y puede durar hasta<br />

12 horas; sin embargo, su consumo excesivo produce un<br />

rebote vasoconstrictor, después de ingerirlos por más de<br />

cinco a siete días. No deben indicarse en niños menores<br />

de dos años, adultos hipertensos ni en ancianos.<br />

Los descongestivos orales más comunes son efedrina,<br />

pseudoefedrina (no disponible en México) y<br />

fenilpropanolamina, generalmente en combinación con<br />

antihistamínicos o antinflamatorios. Tienen adecuado<br />

efecto descongestivo, pero sus efectos secundarios<br />

(excitación o depresión del sistema nervioso central,<br />

insomnio, somnolencia, alucinaciones, cefalea, taquicardia,<br />

anorexia, exantema, sequedad de boca y nariz,<br />

retención urinaria) limitan, en ocasiones, su prescripción.<br />

25<br />

Corticoesteroides<br />

Representan el tratamiento de elección en los pacientes<br />

con rinitis alérgica, pues su efecto principal consiste en<br />

modificar la síntesis proteica y de esta forma ejercer<br />

su acción antinflamatoria. La eficacia de los corticoesteroides<br />

tópicos es excelente, porque disminuyen<br />

los síntomas nasales (congestión) y los resultados son<br />

superiores al compararlos con los antihistamínicos. Los<br />

corticoesteroides tópicos son inocuos, universalmente,<br />

y los efectos secundarios son, en específico, locales<br />

(irritación, epistaxis y candidiasis en las mucosas), con<br />

211


Del Río Navarro BE y col.<br />

Cuadro 5. Farmacocinética de los antihistamínicos H 1<br />

212<br />

Anti-H 1<br />

Concentración<br />

máxima<br />

Eliminación terminal<br />

vida media (h)<br />

Eliminación sin<br />

cambios en orina/<br />

heces (%)<br />

Interacciones clínicas<br />

relevantes con<br />

otros fármacos<br />

Inicio/duración<br />

de acción<br />

Clorfenamina 2.8 ± 0.8 27.9 ± 8.7 n/a Posible 3/24<br />

Difenhidramina 1.7 ± 1.0 9.2 ± 2.5 n/a Posible 2/12<br />

Hidroxicina 2.1 ± 0.4 20.0 ± 4.1 n/a Posible 2/24<br />

Cetirizina 1.0 ± 0.5 6.5-10 60/10 Poco probable 1/≥24<br />

Desloratadina 1-3 27 41/47 Poco probable 2/≥24<br />

Fexofenadina 2.6 14.4 11/80 Poco Probable 2/24<br />

Ebastina 2.6-5.7 10.3-19.3 75-95/0 n/a 2/≥24<br />

Levocetirizina 0.8 ± 0.5 7 ± 1.5 86/13 Poco probable 1/>24<br />

Loratadina 1.2 ± 0.3 (1.5 ± 0.7) 7.8 ± 4.2 (24 ± 9.8) trazas Poco probable 2/24<br />

Azelastina 5.3 ± 1.6 22-27.6 2(3)/0 No 0.5/12<br />

Olopatadina 0.5 7.1-9.4 59.73/n/a No 0.25/12<br />

2 a 6% en la mayor parte de las series reportadas. 26 Los<br />

corticoesteroides tópicos nasales incluyen: acetónido de<br />

triamcinolona, budesonida y propionato de fluticasona;<br />

entre los más recientes se encuentran: furoato de mometasona,<br />

ciclesonida y furoato de fluticasona.<br />

Antagonistas de leucotrienos<br />

Los antagonistas de cisteinil-leucotrienos se han postulado<br />

como coadyuvantes en el control de los síntomas<br />

de rinitis alérgica, sobre todo en combinación con antihistamínicos<br />

de segunda generación. Los antagonistas<br />

de cisteinil-leucotrienos disminuyen la hiperreactividad<br />

nasal y son eficaces en el tratamiento de pacientes con<br />

poliposis nasal y rinosinusitis. 27 Los antagonistas de<br />

leucotrienos comprenden montelukast, pranlukast y<br />

zafirlukast; mientras que los inhibidores de leucotrienos,<br />

incluyen a zileutón (no disponible en México).<br />

Inmunoterapia<br />

Consiste en la administración repetida y controlada<br />

de alergenos específicos para pacientes con padecimientos<br />

donde está implicada la IgE, en quienes se<br />

reduce la gravedad de la enfermedad con la exposición<br />

espontánea a los alergenos. En conjunto con el control<br />

ambiental, son las únicas intervenciones capaces de<br />

reducir, a largo plazo, los síntomas de las enfermedades<br />

alérgicas. Algunos estudios demuestran la eficacia de<br />

la inmunoterapia en la reducción de la evolución de<br />

rinitis a asma.<br />

Control ambiental<br />

Educar al paciente y a su familia acerca de la exposición<br />

a los alergenos es un aspecto fundamental en el<br />

tratamiento de la rinitis alérgica (figura 5). Desafortunadamente,<br />

en muchas ocasiones es difícil y poco práctico.<br />

Evitar el ejercicio al aire libre durante las estaciones de<br />

polinización (primavera-verano), el contacto estrecho<br />

con mascotas y la limpieza adecuada del hogar son medidas<br />

útiles que el paciente debe conocer y llevar a cabo<br />

para obtener resultados satisfactorios en el tratamiento<br />

de su enfermedad.<br />

Intermitente<br />

leve<br />

Intermitente<br />

moderadagrave<br />

Persistente<br />

leve<br />

Corticoesteroides tópico nasal<br />

Cromona tópica<br />

Antagonistas del receptor cis-LT 1 por vía oral<br />

Antihistamínico H 1 no sedante, oral o tópico<br />

Persistente<br />

moderadagrave<br />

Descongestionante tópico nasal (menos de 10 días) u oral<br />

Evitar el contacto con alergenos e irritantes<br />

Valorar la inmunoterapia<br />

Figura 5. Esquema de tratamiento de la rinitis alérgica según<br />

ARIA.<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009


SINUSITIS<br />

Los niños manifiestan, en promedio, entre seis y ocho<br />

infecciones de las vías aéreas respiratorias superiores<br />

por año, de las cuales 5 a 10% se complican con rinosinusitis<br />

(alteración común en la práctica pediátrica y<br />

otorrinolaringológica).<br />

En la mayoría de los casos es difícil diferenciar entre<br />

alguna infección viral de las vías aéreas superiores y<br />

la rinosinusitis aguda. Los niños pueden sufrir rinosinusitis<br />

crónica cuando falla el tratamiento médico<br />

convencional.<br />

Los senos paranasales corresponden a cavidades<br />

neumáticas alrededor de la cavidad nasal, constituidos<br />

por cuatro componentes anatómicos: seno maxilar, etmoidal,<br />

esfenoidal y frontal (dos en número par [frontal y<br />

maxilar] y dos cavidades únicas [etmoidal y esfenoidal]),<br />

cuya forma, tamaño y extensión son diferentes en cada<br />

individuo. El desarrollo y neumatización de los senos<br />

paranasales varían según la edad del paciente: desde<br />

el nacimiento existen los senos maxilares y etmoidal;<br />

al año inicia la neumatización de los senos frontales y<br />

finaliza entre los seis y ocho años; mientras que el seno<br />

esfenoidal inicia su neumatización a los tres y finaliza<br />

a los 12 años de edad.<br />

La fisiología de los senos paranasales depende del<br />

adecuado drenaje de las secreciones, mediante la permeabilidad<br />

del ostium u orificios de drenaje, integridad<br />

del aclaramiento mucociliar y calidad de las secreciones<br />

mucosas. La mucosa de los senos paranasales está<br />

constituida por epitelio ciliar columnar estratificado,<br />

glándulas submucosas y células caliciformes. Las<br />

glándulas submucosas producen una capa de moco<br />

superficial que contiene inmunoglobulinas y proteínas<br />

específicas y no específicas, como lactoferrina, con<br />

potente acción bactericida. Las bacterias o sustancias<br />

extrañas atrapadas en el revestimiento superficial<br />

del moco se transportan por aclaramiento mucociliar<br />

hacia el ostium, donde drenan su contenido dentro de<br />

la cavidad nasal, con la eliminación posterior hacia la<br />

nasofaringe. 28<br />

La sinusitis es mejor conocida como rinosinusitis,<br />

pues la cavidad nasal suele estar afectada; incluso, existe<br />

la tendencia actual de reemplazar el término de sinusitis<br />

por rinosinusitis. Es la inflamación de la mucosa de las<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009<br />

Rinitis, sinusitis y alergia<br />

fosas nasales y de los senos paranasales, secundaria a<br />

procesos infecciosos y no infecciosos. La mayor parte<br />

de las infecciones virales provoca sinusitis bacteriana<br />

(80%), mientras que el componente alérgico es significativo<br />

en el resto de los casos (20%). 29<br />

Epidemiología<br />

La rinosinusitis representa una alteración con un alto<br />

y claro incremento en su prevalencia. Entre los padecimientos<br />

alérgicos y virales de la vía aérea superior,<br />

la rinosinusitis constituye una de las alteraciones más<br />

frecuentes del aparato respiratorio. Actualmente, México<br />

no cuenta con datos estadísticos que refieran la incidencia<br />

de este padecimiento, mientras que los reportes<br />

del Centro Nacional de Estadística de Salud de Estados<br />

Unidos indicaron que la sinusitis fue el padecimiento<br />

más frecuente que afectó a 31.2 millones de individuos<br />

en 1985 y aumentó a 50 millones en 1993. 30<br />

Fisiopatología<br />

La sinusitis es un proceso inflamatorio que afecta la<br />

membrana mucosa de uno o más senos. La rinosinusitis<br />

aguda es generalmente precedida por la inflamación<br />

inducida por alguna infección viral en los senos; entre 5<br />

y 10% de las infecciones de las vías aéreas superiores en<br />

los niños evoluciona a rinosinusitis aguda. El crecimiento<br />

y la debilidad inmunológica de la membrana mucosa<br />

y el bloqueo del seno por la infección viral son factores<br />

que se piensa causan sobreinfección bacteriana del<br />

seno paranasal estéril, sobre todo por microorganismos<br />

locales. La rinosinusitis crónica se origina por alguna<br />

alteración en la ventilación y el drenaje de los senos,<br />

secundario al bloqueo osteomeatal del meato medio,<br />

que produce cambios inflamatorios en la mucosa nasal<br />

de los senos paranasales.<br />

Los mecanismos patológicos que originan que la<br />

rinosinusitis se convierta en un evento crónico son la<br />

disfunción mucociliar, mucostais, hipoxia consecutiva<br />

y descarga de productos microbianos.<br />

El origen de la rinosinusitis puede ser alérgico,<br />

irritativo o infeccioso (viral, bacteriano o micótico<br />

[Aspergillus, Rhizopus y Fusarium en pacientes inmunodeficientes]),<br />

la causa viral (rinovirus, influenza,<br />

parainfluenza y adenovirus) es la más frecuente. La<br />

rinosinusitis de origen bacteriano representa sólo 0.5 a<br />

213


Del Río Navarro BE y col.<br />

2% de las rinosinusitis agudas y generalmente evoluciona<br />

después de un episodio viral. S. pneumoniae, H.<br />

influenzae y M. catarrhalis son los microorganismos<br />

encontrados en 75% de los casos de rinosinusitis aguda,<br />

mientras que en la rinosinusitis crónica, los agentes<br />

aislados frecuentemente son S. aureus, S. pyogenes, P.<br />

aeruginosa, bacterias anaerobias y agentes micóticos.<br />

El líquido obtenido de la irrigación de los senos<br />

paranasales en pacientes con rinosinusitis crónica contiene<br />

neutrófilos, eosinófilos, mastocitos y basófilos.<br />

Las altas concentraciones de histamina, leucotrienos<br />

y prostaglandina D2 indican la participación de dichas<br />

células en la inflamación crónica de los senos. La<br />

infusión continua de neutrófilos se atribuye al efecto<br />

quimiotáctico de IL-8, la cual es sintetizada por las células<br />

epiteliales, glandulares y los leucocitos. También,<br />

la función de la IL-3 es importante, pues se sintetiza<br />

por las células T activadas y permite la estimulación,<br />

diferenciación y activación de macrófagos, neutrófilos,<br />

mastocitos y eosinófilos.<br />

La rinorrea prolongada (más de 10 días) permite<br />

pronosticar la infección bacteriana (90% en pacientes<br />

de entre dos y seis años y 70% en mayores de seis años<br />

de edad). 31<br />

El cuadro 6 muestra los microorganismos más<br />

frecuentemente encontrados según el tiempo de evolución.<br />

Clasificación<br />

Desde el punto de vista clínico, debe establecerse la<br />

distinción entre rinosinusitis aguda, aguda recurrente y<br />

crónica, para lo cual se utiliza la clasificación modificada<br />

por Luna y Kennedy:<br />

Cuadro 6. Causas de la rinosinusitis<br />

214<br />

- Sinusitis aguda: comprende síntomas de hasta 12<br />

semanas o seis episodios al año.<br />

- Sinusitis aguda recurrente: episodios recurrentes<br />

con curación completa de los síntomas.<br />

- Sinusitis crónica: síntomas por más de 12 semanas o<br />

más de seis episodios al año (cuadro 2, clasificación<br />

de sinusitis).<br />

Manifestaciones clínicas<br />

Las manifestaciones clínicas de rinosinusitis aguda<br />

incluyen: obstrucción nasal, rinorrea (en ocasiones<br />

purulenta), secreción retronasal, cefalea grave que comúnmente<br />

se proyecta a los senos paranasales; vómito,<br />

sobre todo secundario a episodios de tos. En pacientes<br />

con rinosinusitis crónica los síntomas son menos graves<br />

y se distinguen por obstrucción nasal y cefalea inespecífica.<br />

Los signos y síntomas mayores son: rinorrea<br />

purulenta, descarga nasal posterior, fiebre igual o mayor<br />

de 39°, dolor a la presión facial e hiposmia o anosmia.<br />

Los signos y síntomas menores incluyen: halitosis, cefalea,<br />

edema periorbitario, tos persistente y dolor dental.<br />

Diagnóstico<br />

Desde el punto de vista clínico, se diagnostica por el<br />

tiempo de evolución de los síntomas. El diagnóstico de<br />

rinosinusitis se establece con la historia clínica, examen<br />

físico y técnicas adicionales (estudios de imagen, pruebas<br />

alérgicas y parámetros inflamatorios).<br />

El diagnóstico diferencial de rinosinusitis se realiza<br />

con: rinitis viral, alérgica o no alérgica, inducida por<br />

fármacos, anormalidades sistémicas (fibrosis quística,<br />

discinesia ciliar, meningocele, meningoencefalocele),<br />

causas mecánicas (cuerpo extraño, mucocele, piocele,<br />

Características clínicas Microorganismos frecuentes Microorganismos poco frecuentes<br />

Sin criterios de duración ni gravedad Rinovirus, adenovirus, virus<br />

influenza y parainfluenza<br />

Rinorrea >10 días o fiebre ≥39º C con tos<br />

diurna ≥3 días o cefalea intensa<br />

S. pneumoniae (30%)<br />

H. influenzae (20%)<br />

M. catarrhalis (20%)<br />

Estéril (30%)<br />

Enfermedad dental Anaerobios<br />

Subaguda (4 a 12 semanas) o<br />

crónica (>12 semanas)<br />

Factores no infecciosos: alérgicos, irritantes<br />

ambientales, fibrosis quística, alteraciones<br />

anatómicas<br />

S. pyogenes<br />

S. aureus<br />

Gérmenes gramnegativos<br />

S. aureus<br />

Anaerobios<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009


desviación septal), tumores benignos o malignos, y<br />

rinitis secundaria a síndrome de Wagener, sarcoidosis,<br />

inmunodeficiencia, sensibilidad al ácido acetilsalicílico<br />

e infecciones específicas.<br />

Dentro de la exploración física es necesaria la rinoscopia<br />

anterior y posterior. La endoscopia de la cavidad<br />

nasal y nasofaríngea con endoscopio óptico rígido es el<br />

estándar de referencia en la evaluación clínica (realizado<br />

por otorrinolaringólogos). La tomografía computada en<br />

plano coronal o axial es el mejor estudio de imagen para<br />

evaluar el sistema de los senos paranasales. 32<br />

Tratamiento<br />

En pacientes con rinosinusitis aguda de origen bacteriano<br />

se indican antibióticos, antihistamínicos en caso<br />

de proceso alérgico asociado, corticoesteroides tópicos<br />

para disminuir el proceso inflamatorio y analgésicos,<br />

sólo para el tratamiento del dolor. En la sinusitis crónica<br />

sólo se ha demostrado evidencia terapéutica con<br />

corticoesteroides tópicos y analgésicos para aliviar el<br />

dolor.<br />

Los objetivos del tratamiento son: disminuir la evolución<br />

del proceso infeccioso y evitar las complicaciones,<br />

como osteomielitis facial, trombosis del seno cavernoso,<br />

meningitis, celulitis periorbitaria y abscesos cerebrales.<br />

Para la selección del antibiótico debe considerarse<br />

la exposición previa al tratamiento con antimicrobianos<br />

(uno a tres meses), edad del paciente, asistencia o no a<br />

guarderías y hallazgos microbiológicos.<br />

La amoxicilina es el antimicrobiano de primera<br />

elección. Su resistencia es más frecuente en niños menores<br />

de dos años de edad que han recibido antibióticos<br />

en los últimos tres meses antes de iniciar el cuadro.<br />

En pacientes con reacciones alérgicas a b-lactámicos<br />

pueden prescribirse macrólidos, como azitromicina y<br />

claritromicina. La respuesta del antibiótico se valora<br />

entre 48 y 72 horas después de su inicio, con disminución<br />

de la descarga nasal y estado general del paciente.<br />

La duración adecuada del tratamiento de la sinusitis<br />

no complicada varía de 10 a 14 días, aunque no se ha<br />

establecido en forma precisa. Se recomienda continuar<br />

siete días más después del control de los síntomas, para<br />

asegurar la erradicación total del germen. Se indica<br />

el esquema de tres semanas para los pacientes con<br />

sinusitis complicada.<br />

Revista Alergia México Volumen 56, Núm. 6, noviembre-diciembre, 2009<br />

La intervención quirúrgica se indica cuando falla el<br />

tratamiento conservador; las indicaciones absolutas son:<br />

complicaciones orbitarias o intracraneales, sospecha de<br />

complicaciones sépticas y de algún proceso maligno en<br />

crecimiento. 33,34<br />

El cuadro 7 muestra las dosis adecuadas de antibióticos<br />

y su espectro bactericida.<br />

Cuadro 7. Tratamiento antibiótico en rinosinusitis<br />

Antibiótico Dosis Agente causal<br />

Amoxicilina 90 mg/kg/día Neumococo<br />

M. catarrhalis<br />

H. influenzae<br />

Amoxicilina + ácido<br />

clavulánico<br />

90 mg/kg/día Neumococo<br />

M. catarrhalis<br />

H. influenzae<br />

Anaerobios<br />

Staphylococcus<br />

Cefuroxima 30 mg/kg/día Staphylococcus B<br />

lactamasa<br />

Clindamicina 15 a 40 mg/kg/día Staphylococcus<br />

Anaerobios<br />

Claritromicina 15 mg/kg/día Neumococo<br />

M. catarrhalis<br />

H. influenzae<br />

La solución salina hipertónica es un tratamiento común,<br />

que por su acción osmótica reduce el edema de<br />

la mucosa y mejora el flujo nasal, además de su acción<br />

mecánica para eliminar el exceso de secreciones.<br />

CONCLUSIONES<br />

Rinitis, sinusitis y alergia<br />

La rinitis alérgica es una enfermedad respiratoria<br />

importante debido a su elevada prevalencia, gran<br />

impacto en la calidad de vida, desempeño, productividad<br />

en el trabajo y la escuela, carga económica<br />

y a su asociación con el asma. Esta enfermedad se<br />

asocia con sinusitis y otras comorbilidades, como la<br />

conjuntivitis. Debe considerarse un factor de riesgo<br />

de asma. Se ha propuesto una nueva clasificación,<br />

con base en la gravedad de los síntomas y resultados<br />

de la calidad de vida. Según la clasificación, se ha<br />

propuesto un abordaje terapéutico. El tratamiento<br />

combina evitar el alergeno (cuando sea posible), tratamiento<br />

farmacológico, inmunoterapia y educación<br />

del paciente y sus familiares.<br />

215


Del Río Navarro BE y col.<br />

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