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VOGUE
2021
MODA
ESPECIAL ALTA COSTURA
B E L L A H A D I D
O T O Ñ O - I N V I E R N O
Asentamiento utópico bajo el mar gobernado por Medusa, Donatella Versace se sintió impulsada por la nueva
frontera digital de la moda. ‘Me he dado cuenta de que este es el futuro, la nueva forma de comunicar
colecciones’, dijo en las notas de la colección para su presentación Otoño/Invierno 2021. Si alguien
puede lograr una celebración virtual de la moda, es Donatella y su lista de supermodelos. Llamó a
Bella y Gigi Hadid (que regresó de la baja por maternidad como una explosión), e Irina Shayk, Precious
Lee y Mona Tougaard para que le dieran a su nueva imagen motivos de Greca y emoticones de Medusa.
Gigi regresó de la baja de maternidad
Gigi hizo la primera salida a la pasarela: un laberinto de bloques entrelazados con
la forma del icónico motivo Greca de Versace. Bella y la poster girl de Versace,
Irina Shayk, siguieron, mientras el video pasaba del momento de la pasarela a
viñetas de hombres y mujeres de Versace ajustando la apariencia del otro como si
estuvieran en el baño de la fiesta más exclusiva de la ciudad. ¿La descripción de
Donatella del escenario del espectáculo? ‘Asombro’.
Donatella animó a las modelos a ‘sentir’
‘Los modelos son como actores, dan vida a los diseños, como cuando
un artista interpreta a un personaje’, señaló Donatella del elenco de
estrellas que eligió para encarnar la esencia de Versace. ‘Durante el
rodaje de este programa vi lo importante que es dar tiempo a las
modelos para sentir la ropa que usan en la pasarela. A pesar de vivir
en una era digital de inmediatez, tomarse este tiempo es crucial para
formar una conexión genuina. Así es para mí el presente y el futuro’.
El logo manía fue protagonista
El conjunto gráfico y geométrico se hizo eco en la ropa, ya que el motivo de Greca
salpicó en abrigos, minivestidos, trajes, lo que sea, en una paleta opulenta que se
equilibró con muchas piezas negras para usar también. Para contrarrestar esta
nitidez, se introdujo el grafiti de Medusa, que, según la marca, es ‘un símbolo de
celebración, libertad y comunidades de la pista de baile’.
Las bolsas vienen personalizadas y llenas de vida
A primera vista, los bolsos femeninos de Versace son pura elegancia
empresarial, pero mira más de cerca y los artículos de cuero estructurados
cuentan con divertidas “baratijas” con clip. Las bolsas de noche que
tintinean con cadenas son llamativos y de colores que chocan, y los totes
tienen correas que combinan y bolsas desmontables. Durante lo que es un
momento universalmente desafiante para las marcas, este enfoque en la
personalización de los productos básicos dará sus frutos.
Todos necesitamos una bandana Versace
Los pañuelos de seda negra evocaban un aire de nostalgia, mientras se veían decididamente modernos cuando
se combinaban con tacones de plataforma con correas de cristal. Estos dos accesorios clave para llevar
simbolizan la visión de Versace de Donatella: mirar hacia el futuro sin perder nunca de vista su pasado o la
iconografía que subyace a la marca. El hecho de que Shayk haya estado luciendo su elegante foulard en la
previa al desfile lo convirtió en un producto muy publicitado incluso antes de que hubiera pisado la pasarela.
Otro golpe de genialidad que también demostró que un pañuelo de Versace funciona en todas las ocasiones.
ENTREVISTA BELLA HADID
¿Cómo aprendiste todo sobre belleza?
Aprendí de belleza gracias a mi madre, aunque sobre todo en cuanto al
cuidado de la piel. Siempre me decía que una piel sana es mucho más
importante que las cosas que le pones encima. Mi papá, mientras tanto,
nunca quiso que usáramos maquillaje, así que no lo hicimos. Montaba a
caballo y mi hermana [Gigi Hadid] jugaba al voleibol. En mi familia no
importaba tu look, sino cómo crecías.
Y ahora, ¿qué haces cuando alguien hace algún
comentario negativos sobre ti?
Me ha llevado mucho tiempo aprender a no
escuchar. Apago el teléfono y pienso en que las
personas de mi entorno son las únicas cuyas
opiniones me importan realmente. ¿Por qué
debería leer esos comentarios? Suelen venir más
por mi personalidad que por mi aspecto, lo cual
duele más.
¿Alguna vez respondes?
No. He aprendido que la gente te va a odiar y que no
puedes hacer nada al respecto, excepto ser tú misma
y quererte. Pero siento esa energía de la gente muy
intensamente. A veces pienso: "Solo quiero
conocerte y decirte que no soy una mala persona. No
tienes por qué ser malo conmigo."
Y en la adolescencia, ¿tuviste que superar
algún momento difícil?
Sí. Tenía una cintura pequeña y unas caderas
grandes, y estaba gordita. Ahora las amo, pero
siempre fui consciente de mis caderas, mientras
que mi hermana lucía abdominales y era muy
atlética. También pensaba que tenía una cara muy
rara... Recuerdo haber sufrido de acoso
precisamente por mi aspecto.
¿Te considerabas una marimacho?
Definitivamente más marimacho que cualquier otra
niña, pero también tenía mi lado femenino. Cuando
iba a la escuela, me ponía botas Dr. Martens con faldas
y medias. Recuerdo haberle dado un cambio de
imagen a una de mis amigas porque era incluso más
marimacho que yo. Estábamos en sexto de primaria,
le traje ropa y así nos hicimos las mejores amigas.
¡Aprendí que puedes cambiar la vida de las personas
en la escuela (risas)! Y así también encontré mi amor
por la moda.
¿Cuál ha sido tu momento beauty más loco?
He pasado por muchas fases. Cuando tenía 16 años, tenía unos grill
[un tipo de joyería que se lleva en los dientes] antes de que fuera cool
y, sin duda, no lo eran. Me teñí el pelo de azul y rosa. Y también llevé
el cabello color arcoíris alguna vez. Fue muy loco. En cuanto al
maquillaje, realmente no sabía cómo hacer nada en mi cara hasta que
comencé a trabajar con Dior y Peter Philips. No tenía ni idea de cómo
aplicar los productos cosméticos o cómo hacerme las cejas. Echo la
vista atrás y pienso "guau, chica, realmente has aprendido".
Pues claro, son ellos los que tienen un problema, no tú.
Me gustaría escribirles: "Si estás pasando por un mal
momento, quiero estar ahí para ti". Obviamente, están
pasando por algún problema. Sé que no se trata de mí. Todos
tenemos que superar nuestras cosas, y eso es lo que quiero
transmitir a los niños hoy en día. El año pasado pasé por una
depresión seria, y creo que pasó porque, cuando era pequeña,
en la escuela los niños me acosaban. Y ahora supongo que no
debería ser tan cohibida (la gente me lo dice todos los días),
pero eso es algo muy personal. Al final, todos pasamos por eso
porque somos seres humanos.
HISTORIA DE PRECIOUS LEE
Resulta irónico que a alguien con la belleza de Precious
Lee (Atlanta, 1989) se le recomendara lanzar su
carrera bajo otro nombre que no era el suyo, ‘Preciosa’
en castellano. Sus primeros agentes consideraron que
solo lograría la fama llamándose Victoria. "Al principio
no pensé que fuera grave. Llegué a modelar tres años
bajo ese alias sin darme cuenta de lo raro que era. Pero
con el tiempo vi que no estaba siendo honesta conmigo,
así que lo cambié. Hubo cierto revuelo, pero no me
importó porque sabía que quería llegar a triunfar con
el nombre que mi padre me había puesto cuando vio
mi cara por primera vez", cuenta a Harper’s Bazaar en
una charla con motivo de su nueva campaña para
Marina Rinaldi.
Lee tiene constantemente a su familia en la boca.
Ellos son su pilar y su mayor tesoro, quienes le
enseñaron a entender que no existe una belleza
única en un tiempo, su adolescencia, en el que los
apretados cánones sociales se empeñaban en
establecerlo. "Decir ‘no puedo’ estaba
terminantemente prohibido en mi casa. Me
educaron en el amor propio radical y desde muy
pequeña me inculcaron que ser afroamericana era
un superpoder, que soy una líder innata. Aprendí a
defender lo correcto y lo justo, no importa a qué
nivel, porque siempre es un buen momento para
hacer las cosas bien. Me enseñaron a ser honesta… Y
sí, ¡a lucir estupenda en el camino!", señala. Creció en
Atlanta y, dice, sus principales referentes y modelos
a seguir fueron su madre y su hermana, Charisma.
"Ellas me transmitieron, además del amor por la
moda, valores tan importantes como el tener un
buen corazón, a elevar a los demás y a ser libre".
Aunque de adolescente soñaba con ser abogada, las
páginas de las revistas de moda siempre habían
llamado su atención. Quería estar ahí, quería
cambiar las cosas. Su discurso y su activismo a favor
de la diversidad le hicieron darse cuenta de que
podría tocar muchas más vidas desde una
plataforma como la industria de la moda que desde
un juzgado, así que terminó por casualidad en un
casting a los 18 y todo empezó a cobrar sentido. Se
mudó a Nueva York, trabajó duro y no perdió la
esperanza: "Vivía en un apartamento de modelos,
iba a todas las pruebas que podía y me rechazaron
incontables veces. He cambiado de agencias, de
managers, ¡hasta de corte de pelo! No lo conseguí de
la noche a la mañana, pero eso me motivó más,
porque esta carrera no es solo belleza, es también
tener valor y echarle narices, y a mí de eso me
sobraba cuando aterricé en Manhattan", sentencia.
Así se convirtió en la primera modelo afroamericana
y de talla grande en aparecer en las principales
cabeceras de moda o en las páginas de baño de
Sports Illustrated. Fue portada de Harper’s Bazaar
USA el pasado mes de mayo; ha posado frente al
objetivo de los mejores fotógrafos de las últimas
décadas, de Steven Meisel a Cass Bird; desfilado para
Christian Siriano, Tommy Hilfiger o Versace, y
prestado su imagen a firmas como Miu Miu o, claro,
Marina Rinaldi. Ella es precisamente la imagen de la
nueva colección de Marco De Vincenzo para la firma
italiana. "¡Quiero todas y cada una de las prendas de
esta cápsula! En la sesión de fotos parecía una niña
en una tienda de chucherías", comenta. Lee valora la
perseverancia de la casa en la lucha por cambiar las
tornas de esta industria: "Llevan años creando
piezas maravillosas para mujeres que no utilizan
una talla de muestrario. La ropa bonita no debe ser
un privilegio limitado a un rango único de cuerpos, y
ellos han estado siempre comprometidos con hacer
prendas que sienten bien sin perder la calidad ni el
diseño".
GIGI HADID REGRESA A LAS PASARELAS
PARA LA SEMANA DE LA MODA.
Desde que la modelo se embarazó y dio a luz, se alejó de los reflectores, pero esta
aparición marca un nuevo capítulo en su carrera.
Gigi Hadid está oficialmente de regreso en la
pasarela. La nueva madre dio a luz a su hija, Khai, en
septiembre y volvió a entrar en la esfera de la Semana
de la Moda hoy, a través del desfile otoño / invierno
2021 de Versace. La modelo lució un look atrevido de
la casa italiana, en el que mostró el estómago con un
conjunto negro de pies a cabeza. Ella posó de la mano
con su hermana Bella Hadid en el backstage, vestida
con un elegante corsé negro con cremallera, un abrigo
largo a medida, una falda elegante y unas enormes botas
de plataforma.
Esto ocurre hace poco más de un mes desde que
apareció en la portada de Vogue Magazine, en la que la
modelo Gigi Hadid habló sobre su trabajo de parto de
14 horas y su introducción a la maternidad. 'Cuando
ves a alguien hacer eso, lo miras de manera un poco
diferente. De hecho, probablemente me veía loca', dijo
sobre su parto en casa. ‘Yo era una mujer distinta’.
Desde entonces, ha mantenido un perfil bajo en la
bucólica casa de su familia en el condado de Bucks,
Pensilvania, y solo se la ha visto en la ciudad de Nueva
York unas cuantas veces. En su historia de portada, le
dijo a Vogue que estaba buscando frenar las cosas, en
cuanto al modelaje. ‘Estoy cambiando hacia cosas que
se sienten más estables que estar en un país diferente
cada semana’, dijo. Su presentación en Versace marca
un nuevo capítulo en su carrera.
LA HISTORIA DE IRINA SHAYK
De niña, Irina Shayk soñaba con ser escritora. Sin embargo, el
destino tenía preparado otro plan para ella, el de cotizadísima top
model.
Shayk creció en la estepa rusa en el seno de una
familia humilde. “Nací en un pueblecito de
Rusia. Mi padre era minero, trabajaba en una
mina de carbón; mi madre era profesora de
música. Nunca tuvimos demasiado dinero, pero
los lazos familiares eran y siguen siendo muy
fuertes. Mi padre murió cuando yo tenía 14 años,
y ese fue el momento más difícil para nosotras;
mi madre se buscó dos trabajos y mi hermana y
yo ayudábamos en el hospital local en verano
para sacar un dinero extra”, rememoraba.
Precisamente, mientras acompañaba a su
hermana a un instituto de belleza situado junto a
una escuela de modelos, fue descubierta por un
cazatalentos. Animada por él se presentó a Miss
Chelyabinsk, un certamen regional que, ganó.
Aquel fue el empujón definitivo que le animó a dar
el salto y a lanzarse de lleno a desarrollar su
carrera como modelo. “Tenía 19 años, e irme al
extranjero era todo un reto. Sabía que habría
mucha rivalidad y no hablaba inglés, pero mi
familia necesitaba el dinero y mi hermana estaba
embarazada, así que decidí asumir el riesgo. La
primera parada fue París. Leo mucho –su autor
favorito es Dostoyevski–, tenía cierta idea de la vida en Occidente, y sabía que había un
mundo más allá de mi hogar, pero la realidad fue muy distinta. Me sentía una extranjera,
tenía grandes problemas para comunicarme y apenas me llegaba para comer, y mucho
menos para comprarme ropa”, relataba.
Su suerte cambió al conocer a Carlyne Cerf de
Dudzeele. Le dio la oportunidad de trabajar con
Mario Testino, un hecho que cambió por
completo el curso de los acontecimientos. Tras
aquello conoció a Carine Roitfeld y Riccardo
Tisci la contrató en exclusiva para el desfile de
Givenchy. La cotización de Shayk subía como la
espuma. Desde entonces, sus exuberantes
rasgos han aparecido en las campañas de
Intimissimi, Guess, La Perla o Morellato, y han
ilustrado la portada de revistas tales como
Sports Illustrated –fotografiada de nuevo por
Testino– o Vogue España (en multitud de
ocasiones).
Shayk divide su tiempo entre su intachable
carrera como modelo, su carrera
cinematográfica, sus colaboraciones –diseño de
su segunda colección de ropa de baño con
Beach Bunny– y su faceta de madre.
Su estrellato se ha desarrollado sin
descuidar su casa materna –“el lugar en
el que me siento completamente feliz”– y
a su familia y, sobre todo a sus dos
abuelas, personas que aparecían
recurrentemente en su cuenta de
Instagram: “La mayor de ellas es una
veterana de la II Guerra Mundial;
nunca se ha teñido el pelo, y sólo utiliza
productos orgánicos. A ambas les han
tocado vidas difíciles, pero tienen una
personalidad increíble, y nunca les ha
vencido la adversidad; creo que esto lo he
heredado de ellas”, aseguraba.
Convertida en un icono de estilo gracias a
la ayuda de su estilista, Jennifer Mazur,
Shayk acostumbra a lucir un look
perfecto –incluso empujando un carrito
de bebé- que la coloca siempre entre las
mejor vestidas de listas anuales y
alfombras rojas.
Una de sus apariciones más espectaculares fue durante la fiesta posterior a los Bafta de
2020 que organizaba Vogue y Tiffany & Co, y a la que acudió con un impresionante
vestido de red de pedrería en color 'nude' bajo el que únicamente llevaba un body.
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