Sandino - Parte 2 - Biblioteca Enrique Bolaños
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Expulsión 77<br />
acuerdos N° 6 y N° 8 de la sesión extraordinaria: El N° 6:<br />
"Que no teniendo nuestro ejército en esta República<br />
ningún medio para obtener recursos para regresarnos a las<br />
montañas segovianas, después de convencernos de la supuesta<br />
traición, haga las gestiones de contratar un empréstito con<br />
personas o instituciones simpatizadoras, ordenar a Ud. que en<br />
nombre de nuestro ejército haga las gestiones necesarias de<br />
contratar un empréstito con personas o instituciones<br />
simpatizadoras de nuestra causa y que sean indohispanas, por la<br />
cantidad de diez mil pesos mejicanos para regresarnos todos los<br />
aquí presentes a Las Segovias, único lugar que nos corresponde<br />
como a hombres libres y de honor". (Hasta ahora se da<br />
cuenta?)<br />
Y el 8° dice así: "Arrojar al Gobierno Mejicano la<br />
responsabilidad de las consecuencias que hayan sobrevenido a<br />
nuestro ejército, desde el 1° de junio de 1929 hasta el día en que<br />
tenga lugar el regreso del suscrito Jefe Supremo del Ejército<br />
Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua a los<br />
campamentos de Las Segovias. Firma: Patria y Libertad. A. C.<br />
<strong>Sandino</strong> y el sello fatídico".<br />
Según estas palabras suyas, no se llevó ni regular con<br />
sus ardientes partidarios los mejicanos, que antes lo aclamaban.<br />
¿Por qué ese cambio tan brusco? Porque lo aclamaban cuando<br />
lo desconocían y sólo se guiaban por las informaciones falsas<br />
que él sacaba de su escondido rancho en las montañas<br />
segovianas; pero ahora, puesto en contacto con la culta sociedad<br />
mejicana, el prisma roto mostraba el engaño:<br />
Él no era tal General; casi todas sus victorias eran<br />
falsas. No peleaba a la par de sus soldados y oculto en su rancho<br />
se dedicaba a fabricar mentiras junto a su querida en su<br />
incansable máquina de escribir. No es lo mismo decir: "Soy<br />
general", que en realidad ser general. No es lo mismo decir "soy<br />
ingeniero", a ser ingeniero de verdad.<br />
Con todita seguridad que cuando llegó a Méjico,<br />
muchos generales de veras del Ejército Mejicano, se llegaron