Sandino - Parte 2 - Biblioteca Enrique Bolaños
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Armamento 85<br />
vida.<br />
Pero volviendo a las necesidades de crearse un héroe, la<br />
verdad histórica nos dice que no fue a Nelson a quien derrotó<br />
Rafaela Herrera, sino que once años antes había llegado otra<br />
expedición inglesa al mando de (no recuerdo el nombre de su<br />
jefe); y entonces fue cuando la señorita, incendiando unos<br />
breñales secos y trapos viejos, echados en la corriente del río,<br />
logró hacer que éste se retirara, eran barcos de madera, para que<br />
sus barcos no fueran incendiados. Cuando Nelson se retiró ella<br />
ya no estaba viva y fue por causas del paludismo; razón por la<br />
cual desde entonces en Nicaragua al banano le llaman<br />
irónicamente patriota, porque la mata de banano produce<br />
muchos zancudos; éstos producen paludismo y también la<br />
muerte, causa del retiro de Nelson (obra patriótica<br />
indudablemente).<br />
Insistiendo siempre en la factura de héroes la raza<br />
encontró uno en la persona de A.C. <strong>Sandino</strong>; y haciendo<br />
derroche de retórica y como buen latinoamericano (por lo de<br />
latas), le empezaron a hacer propaganda diciendo todo lo que<br />
una imaginación afiebrada, puede producir. Y él valiente, con<br />
ciertas cualidades de militar, ambicioso, farsante y mentiroso,<br />
con sentimierntos patrióticos entendidos a su manera,<br />
inteligente pero sin nada de instrucción, aprovechó esa<br />
corriente y llegó a pisar los umbrales de la historia.<br />
No es el primero que por ignorancia logra hacer<br />
historia. Citar los incontables casos sería el cuento de nunca<br />
acabar, y solamente citaré unos pocos para justificar mi aserto.<br />
Don Cristóbal Colón ignoraba el tamaño real de<br />
nuestro planeta, creyendo que el radio de la tierra era tres veces<br />
menor. Y de acuerdo a su error almacenó en sus bajeles, agua y<br />
alimentos para la duración de ese viaje tres veces menor. Su<br />
concepto de la dimensión del planeta estaba equivocado, el igual<br />
que el de todos los sabios de aquella época.<br />
He aquí la prueba. ¿Cómo se llama el mar que está entre<br />
Europa y Africa? Mediterráneo. Es decir la mitad de la tierra.