07.05.2013 Views

descargar nº 3-4 / 2009 - Sociedad Chilena de Salud Mental

descargar nº 3-4 / 2009 - Sociedad Chilena de Salud Mental

descargar nº 3-4 / 2009 - Sociedad Chilena de Salud Mental

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Editorial<br />

Los números simples y dobles <strong>de</strong> la revista<br />

Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> en perspectiva<br />

Este segundo número doble <strong>de</strong> <strong>2009</strong>, aunque misceláneo, también mantiene alguna relación<br />

con nuestro 8º Congreso <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, realizado en enero <strong>de</strong>l mismo año, a<br />

través <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> los invitados extranjeros a ese evento, el profesor franco-español Dr. Jean<br />

Garrabé <strong>de</strong> Lara. En efecto, recor<strong>de</strong>mos que no sólo intervino en esa oportunidad, escrito que<br />

será motivo <strong>de</strong> otra próxima publicación suya en nuestra Revista, sino que nos proporcionó<br />

un estudio sobre Philippe Pinel, ya publicado en el pasado Nº 3-4 2008, y también ofreció<br />

una conferencia sobre el pensador francés René Girard, cuyo texto se incluye en el presente<br />

número doble y al que nos referiremos en su momento. Cabe en estas líneas reiterar nuestro<br />

agra<strong>de</strong>cimiento por la generosidad con la que el profesor Garrabé nos ha compartido su<br />

amplia sabiduría.<br />

El presente número está integrado por 11 trabajos, presentados brevemente en el mismo<br />

or<strong>de</strong>n interno <strong>de</strong> aparición. Inicia el grupo el <strong>de</strong> los Drs. César Jara, Carlos Ibáñez y cols.,<br />

acerca <strong>de</strong> un grave caso clínico, que asocia la utilidad <strong>de</strong> administrar dosis a<strong>de</strong>cuadas <strong>de</strong><br />

complejo B (tiamina, piridoxina y cianocobalamina) a los pacientes alcohólicos con encefalopatía<br />

<strong>de</strong> Wernicke. Continúa un estudio sobre un grupo <strong>de</strong> 64 pacientes con estructura<br />

limítrofe <strong>de</strong> personalidad, <strong>de</strong> los Drs. Raúl Riquelme, Jorge Luengo y cols., atendidos entre<br />

los años 2006-2008 en la Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad, <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador<br />

<strong>de</strong> Santiago. Lo sigue la presentación <strong>de</strong> los resultados <strong>de</strong> los tratamientos <strong>de</strong> intervención<br />

en crisis <strong>de</strong> 335 casos evaluados a través <strong>de</strong>l cuestionario OQ 45.2 entre los años 2006-<strong>2009</strong><br />

en la Unidad especializada <strong>de</strong> este mismo Hospital, presentado por los psicólogos Andrés<br />

Fogar, Carolina Villena y cols.<br />

El cuarto trabajo es <strong>de</strong> la EU Ana Marchandón, la Dra. Andrea Reyes y la TO Javiera Castillo,<br />

<strong>de</strong>dicado a analizar el rol <strong>de</strong>l médico psiquiatra en diferentes equipos <strong>de</strong> salud mental<br />

comunitaria <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano Oriente mediante entrevistas directas que<br />

midieron las expectativas <strong>de</strong> tales equipos, realizadas durante los años 2008-<strong>2009</strong>. El quinto<br />

es una breve presentación histórica <strong>de</strong>l Dr. Enrique Escobar sobre el <strong>de</strong>stacado psiquiatra<br />

Dr. Octavio Peralta Varela (1902–1998), activo en el Manicomio Nacional – Hospital Psiquiátrico<br />

<strong>de</strong> Santiago <strong>de</strong>s<strong>de</strong> fines <strong>de</strong> los años 30 hasta comienzos <strong>de</strong> los años 60, prototipo<br />

<strong>de</strong>l rol asilar <strong>de</strong> entonces y verda<strong>de</strong>ro contrapunto <strong>de</strong> lo que se espera actualmente <strong>de</strong>l rol<br />

comunitario <strong>de</strong> este profesional, abordado en el trabajo anterior. El sexto, <strong>de</strong>l Dr. Mario<br />

Quijada, nos lleva a una materia <strong>de</strong> creciente importancia clínica, el transexualismo, presentación<br />

surgida <strong>de</strong> su propia experiencia terapéutica en un centenar <strong>de</strong> casos atendidos.<br />

Los siguientes tres trabajos son ensayos con diferente intención general. El séptimo es la<br />

conferencia <strong>de</strong>l Dr. Jean Garrabé, ya aludida al inicio <strong>de</strong> esta Editorial, sobre el filósofo, literato<br />

e historiador francés René Girard y sus proposiciones acerca <strong>de</strong>l sacrificio y el <strong>de</strong>seo<br />

114<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 114 - 115


mimético, temáticas poco conocidas entre nosotros pero claves para quienes intentamos<br />

laborar en el <strong>de</strong>nso campo <strong>de</strong> las pasiones humanas y sus psicodinamismos. El octavo reproduce<br />

otra conferencia <strong>de</strong>l Dr. Jacques Mabit, director fundador <strong>de</strong>l centro Takiwasi, sobre<br />

uso terapéutico <strong>de</strong>l Ayahuasca, práctica indígena amazónica ancestral, que creemos será<br />

<strong>de</strong> interés entre nuestros profesionales <strong>de</strong> la salud mental por su eventual aplicación en el<br />

campo <strong>de</strong> las adicciones, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> su interés etnográfico específico. El noveno <strong>de</strong>staca la<br />

personalidad y los aportes profesionales <strong>de</strong>l psiquiatra peruano Prof. Dr. Javier Mariátegui<br />

Chiappe (1928–2008), gran amigo <strong>de</strong> nuestro país; su autor, el Dr. Eduardo Medina, envió<br />

esta versión a nuestra Revista luego <strong>de</strong> una polémica publicación <strong>de</strong> una versión anterior,<br />

formalmente no autorizada por él, en la Revista <strong>de</strong> Neuropsiquiatría <strong>de</strong> la Universidad<br />

Peruana Cayetano Heredia.<br />

El décimo trabajo, <strong>de</strong>l Dr. José Gengler, es una presentación <strong>de</strong> la Logoterapia, una específica<br />

orientación psicoterapéutica inicialmente propuesta <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l campo <strong>de</strong>l psicoanálisis por<br />

Víctor Frankl, que paulatinamente <strong>de</strong>vino en <strong>de</strong>sarrollo in<strong>de</strong>pendiente como Análisis Existencial<br />

con los aportes <strong>de</strong> Alfred Längle. Finalmente, el undécimo trabajo es <strong>de</strong> la psicóloga<br />

María Macarena Fierro, en el cual presenta el cambio terapéutico ocurrido en una muestra<br />

<strong>de</strong> 43 pacientes <strong>de</strong>presivos hospitalizados en una clínica psiquiátrica <strong>de</strong> Santiago durante<br />

el año <strong>2009</strong>, tratados en su mitad sólo con medicación y en la otra mitad también con psicoterapia,<br />

cambio medido en todos ellos mediante el mismo cuestionario OQ-45.2, el cual<br />

fue utilizado en el tercer trabajo contenido en este número.<br />

Con este nuevo número doble <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> se completa el lustro 2005-<br />

<strong>2009</strong> en tal nuevo formato, porque anteriormente habían sido <strong>de</strong> aparición sólo ocasional<br />

(7-8 1985, 10-11 1986, 3-4 1992, 3-4 1995 y 2-3 2004). En una simple estadística, entonces,<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> su número inicial en 1984 hasta fines <strong>de</strong> <strong>2009</strong>, en estos 26 años <strong>de</strong> existencia<br />

el 28.8 % <strong>de</strong> todos sus números ha sido editado en la modalidad doble, cuya causa fundamental<br />

ha tenido que ver con condiciones inestables, primero financieras y posteriormente<br />

académicas, esto es, con la facilidad/dificultad <strong>de</strong> cubrir su costo económico y con la mayor/<br />

menor obtención <strong>de</strong> trabajos publicables. Para los estándares Scielo que nuestra Revista<br />

aspira (ver el Editorial <strong>de</strong>l número 3-4 2006) la aparición <strong>de</strong> dos números anuales también<br />

es aceptable, incluso en edición simple y no doble como los ya analizados. Invitamos a<br />

nuestros lectores y amigos a pronunciarse al respecto, sean o no integrantes <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong><br />

<strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>.<br />

Eduardo Medina Cár<strong>de</strong>nas<br />

Editor<br />

114 - 115, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 115


Vitamina B en Paciente Alcohólico:<br />

Relato <strong>de</strong> un Caso<br />

César Jara 1 , Carlos Ibáñez 2 , Roberto Gallardo 3 , Geraly Carrasco 4 , José Tamblay 4<br />

Resumen<br />

Métodos:<br />

A partir <strong>de</strong>l año 2007 se efectúan estudios en nuestro Instituto<br />

para precisar una dosis a<strong>de</strong>cuada <strong>de</strong> complejo B a<br />

aplicar en el Síndrome <strong>de</strong> Deprivación Alcohólico (Ibáñez<br />

y Bustamante)<br />

Resultados:<br />

Después <strong>de</strong> tres semanas <strong>de</strong> tratamiento con benzodiacepina<br />

y complejo B (tiamina) según el nuevo protocolo se<br />

logra una recuperación motora y mental <strong>de</strong> un paciente<br />

con un Síndrome Korsakoiwi<strong>de</strong>o alcohólico y un cuadro<br />

<strong>de</strong> paraparesia.<br />

Conclusión:<br />

Los resultados sugieren que la encefalopatía <strong>de</strong> Wernicke<br />

tratada con dosis superiores a 300 mg/diarios <strong>de</strong> tiamina<br />

pue<strong>de</strong> tener un resultado altamente beneficioso para el<br />

paciente con síndrome <strong>de</strong> <strong>de</strong>privación alcohólico.<br />

Palabras clave: alcoholismo; tiamina.<br />

Fabiola Jaramillo 4 , Sergio Bazaes 5<br />

Vitamine B in Alcoholic<br />

Patient: Case Report<br />

Abstract<br />

Method:<br />

Since 2007, different studies have been ma<strong>de</strong> in our Institute,<br />

in or<strong>de</strong>r to find the right dose of Vitamin B Complex<br />

in cases of Alcohol Withdrawal Syndrome (Ibáñez y<br />

Bustamante).<br />

Results:<br />

After a 3 weeks treatment with Benzodiazepine and Vitamin<br />

B Complex (Thiamine), according to the new protocol,<br />

a patient with Alcoholic Korsakow Syndrome and Paraparesis,<br />

recovers his mental and motor functions.<br />

Conclusions:<br />

Wernicke’s encephalopathy can be treated with high doses<br />

of Thiamine (around 300 mg/a day), on patients with<br />

Alcohol Withdrawal Syndrome with highly good results.<br />

Key words: alcoholism; thiamine.<br />

1. Médico Psiquiatra, Médico Unidad <strong>de</strong> Investigación <strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico "Dr. José Horwitz Barak".<br />

2. Médico Psiquiatra, Académico <strong>de</strong> la Clínica Psiquiátrica <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Chile.<br />

3. Académico <strong>de</strong>l Departamento <strong>de</strong> Fisiología, Fac. <strong>de</strong> Medicina Norte, Universidad <strong>de</strong> Chile.<br />

4. Médicos Becarios <strong>de</strong> Psiquiatría, Instituto Psiquiátrico "Dr. José Horwitz Barak".<br />

5. Alumno en Práctica <strong>de</strong> Química y Farmacia en Instituto Psiquiátrico "Dr. José Horwitz Barak".<br />

Introducción<br />

El déficit <strong>de</strong> vitaminas hidrosolubles <strong>de</strong>l complejo B (tiamina,<br />

riboflavina, niacina, ácido pantoténico, piridoxina,<br />

biotina, ácido fólico y cobalamina) es común en pacientes<br />

alcohólicos.<br />

116<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 116 - 122


El consumo <strong>de</strong> alcohol en forma sostenida provoca inflamación<br />

<strong>de</strong>l tubo digestivo, dificultándose la absorción <strong>de</strong><br />

vitaminas hidrosolubles. A esto se agrega frecuentemente<br />

una dieta con bajo aporte <strong>de</strong> vitaminas, tanto <strong>de</strong>l complejo<br />

B, como vitamina C la que, a su vez, favorece la absorción<br />

<strong>de</strong> tiamina. Otro punto a consi<strong>de</strong>rar es que el daño<br />

hepático frecuente en estos pacientes conlleva a una disminución<br />

<strong>de</strong> las reservas <strong>de</strong> tiamina a nivel hepático.<br />

La tiamina (vitamina B1) actúa como coenzima en el<br />

metabolismo lipídico y <strong>de</strong> producción <strong>de</strong> amino ácidos y<br />

neurotransmisores <strong>de</strong>rivados <strong>de</strong> glucosa. Juega un rol importante<br />

en el metabolismo energético cerebral, su déficit<br />

pue<strong>de</strong> iniciar daño tisular al inhibir el metabolismo en<br />

regiones cerebrales con alta <strong>de</strong>manda metabólica y gran<br />

requerimiento <strong>de</strong> ésta.<br />

La encefalopatía <strong>de</strong> Wernicke (EW) es un síndrome agudo<br />

caracterizado clínicamente por nistagmo, oftalmoplejia en<br />

especial <strong>de</strong> los músculos rectos laterales; alteraciones mentales<br />

como confusión y pérdida parcial <strong>de</strong> la memoria; inestabilidad<br />

postural y <strong>de</strong> la marcha. El déficit <strong>de</strong> vitamina B1<br />

(tiamina) y la consecuente alteración metabólica a nivel cerebral<br />

pue<strong>de</strong> conducir a neuro<strong>de</strong>generación en zonas específicas<br />

<strong>de</strong>l SNC. Estudios realizados con Resonancia Nuclear<br />

Magnética <strong>de</strong> alta resolución han permitido correlacionar<br />

el cuadro clínico con lesiones <strong>de</strong>l tálamo medial y atrofia<br />

<strong>de</strong> los cuerpos mamilares <strong>de</strong>l hipotálamo entre otros.<br />

Se consi<strong>de</strong>ra la EW un cuadro grave con un 20% <strong>de</strong> mortalidad<br />

y que en un 80% <strong>de</strong> los casos evoluciona a un<br />

síndrome <strong>de</strong> Korsakoff. Este último es un cuadro crónico<br />

que se caracteriza clínicamente por una alteración severa<br />

<strong>de</strong> la memoria <strong>de</strong> evocación, lo que se correlaciona anatómicamente<br />

con la pérdida <strong>de</strong> neuronas <strong>de</strong> la región dorso<br />

medial talámica y <strong>de</strong> los núcleos anteriores <strong>de</strong>l tálamo<br />

asociado a gliosis (Zuccoli y cols. <strong>2009</strong>).<br />

En pacientes alcohólicos tratados por un síndrome <strong>de</strong><br />

privación alcohólica con el protocolo <strong>de</strong> suplemento <strong>de</strong><br />

tiamina en dosis 90 mg/día por tres días, se han pesquisado<br />

alteraciones neuropsiquiátricas subclínicas mediante<br />

estudios <strong>de</strong> movimientos oculares (Ibáñez Bustamante,<br />

2007). Consi<strong>de</strong>rando estos hallazgos, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el año 2007 en<br />

116 - 122, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 117<br />

VITAMINA B EN PACIENTE ALCOHÓLICO: RELATO DE UN CASO<br />

el Servicio <strong>de</strong> Estabilización <strong>de</strong> Trastornos Adictivos se ha<br />

modificado la dosis <strong>de</strong> complejo B administradas en este<br />

tratamiento aumentando la dosis <strong>de</strong> tiamina a 200 mg/día.<br />

El objetivo <strong>de</strong> este trabajo, es dar a conocer un caso atendido<br />

en la unidad <strong>de</strong> Alcoholismo <strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico<br />

“Dr. José Horwitz B.”<br />

Caso clínico:<br />

Paciente varón <strong>de</strong> 56 años edad, con antece<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong><br />

consumo <strong>de</strong> alcohol (hasta 4 litros <strong>de</strong> vino diarios) durante<br />

más <strong>de</strong> diez años al momento <strong>de</strong> la consulta.<br />

Fue hospitalizado en la unidad antialcohólica <strong>de</strong> esta institución<br />

refiriendo último consumo <strong>de</strong> alcohol 15 días<br />

previos a su ingreso.<br />

Se realizó evaluación neuropsiquiátrica <strong>de</strong>stacando que<br />

el paciente aparenta mayor edad que la cronológica,<br />

enflaquecido, vigil, confuso, <strong>de</strong>sorientado temporoespacialmente,<br />

bradipsíquico, presenta confabulaciones <strong>de</strong><br />

relleno, falsos reconocimientos y fenómenos alucinatorios<br />

visuales y auditivos.<br />

Al examen físico se pesquisó una paraparesia con predominio<br />

distal.<br />

Se ingresa con diagnostico <strong>de</strong> Alcoholismo Inveterado y<br />

Demencia Alcohólica.<br />

Posteriormente se realizaron exámenes <strong>de</strong> laboratorio que<br />

mostraron alteración <strong>de</strong> las pruebas hepáticas especialmente<br />

gamma-glutamil-transpeptidasa (GGT) como indicador<br />

claro <strong>de</strong>l consumo alcohol; proteínas plasmáticas<br />

levemente disminuidas, hemograma compatible con anemia<br />

macrocítica, hipoprotrombinemia.<br />

Se realizó estudio imagenológico con TAC cerebral, en el<br />

que se evi<strong>de</strong>ncian signos involutivos cerebrales caracterizados<br />

por cisternas basales y peritroncales aumentadas <strong>de</strong><br />

volumen, sistema ventricular infra y supratentorial amplio,<br />

espacio subaracnoi<strong>de</strong>o cortical prominentes.<br />

Figura 1.


Figura 1<br />

Tratamiento:<br />

Se utilizó el siguente esquema: Diazepam 40 mg/día, Tiamina<br />

200 mg, piridoxina 100 mg, cianocobalamina 500<br />

mg (Tol 12 forte im) y Tiamina 8 mg, Piridoxina 8 mg,<br />

ácido fólico 4 mg (polivitamínicos orales).<br />

Los primeros tres días el paciente se encontraba inquieto,<br />

confuso, lenguaje incoherente, con hiporreflexia rotuliana,<br />

paresia <strong>de</strong> EEII e incontinencia urinaria.<br />

Se <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> incrementar la dosis <strong>de</strong> vitaminas a: Tiamina<br />

412 mg (Tol 12 F, 6 ampollas <strong>de</strong> Tiamina 30 mg, 4 comprimidos<br />

<strong>de</strong> polivitamínicos orales) por 5 días, Piridoxina 300<br />

mg, ácido fólico 5 mg/día, vitamina K 20 mg.<br />

Resultados<br />

El paciente mejora progresivamente el nivel <strong>de</strong> conciencia<br />

en una semana. Al cabo <strong>de</strong> tres semanas se completa<br />

la mejoría <strong>de</strong>l cuadro clínico con bienestar general, recupera<br />

continencia esfinteriana, sin alteraciones en la marcha,<br />

recupera funciones motoras evolucionando con tono<br />

muscular normal en extremida<strong>de</strong>s inferiores. No presenta<br />

alteraciones <strong>de</strong> sueño-vigilia ni falsos reconocimientos.<br />

Debido a su evi<strong>de</strong>nte estabilización <strong>de</strong> <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> su alta.<br />

Discusión y Conclusiones<br />

El complejo B participa y juega un importante rol en el<br />

metabolismo celular, y en diversos procesos bioquímicos.<br />

118<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 116 - 122


Un déficit <strong>de</strong> tiamina produce una compleja falla metabólica<br />

<strong>de</strong>pendiente <strong>de</strong> la falla enzimática <strong>de</strong> la α–cetoglutatrato<br />

DH que <strong>de</strong>riva en un aumento <strong>de</strong> glutamato,<br />

causando daño cerebral por exitotoxicidad.<br />

La EW constituye una emergencia médica, cuyo diagnóstico<br />

es principalmente clínico. Cabe <strong>de</strong>stacar la importancia<br />

<strong>de</strong> realizar un diagnóstico diferencial con<br />

otras encefalopatías como la encefalitis límbica, acci<strong>de</strong>nte<br />

cerebrovascular, hiponatremia, etc. (Sánchez RT y<br />

cols. <strong>2009</strong>)<br />

Su manejo <strong>de</strong>be ser instaurado <strong>de</strong> inmediato ante la sospecha<br />

mediante la administración <strong>de</strong> tiamina vía ev. o im.<br />

116 - 122, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 119<br />

VITAMINA B EN PACIENTE ALCOHÓLICO: RELATO DE UN CASO<br />

para asegurar su disponibilidad a nivel <strong>de</strong>l sistema nervioso<br />

central.<br />

Se ha visto que la recuperación <strong>de</strong> la sintomatología <strong>de</strong>l<br />

paciente se produce <strong>de</strong> manera secuencial: primero se<br />

recupera la oftalmoparesia, luego la ataxia y posteriormente<br />

los aspectos conductuales (apatía, confusión), sin<br />

embargo el nistagmo pue<strong>de</strong> permanecer por un tiempo<br />

más prolongado.<br />

Cabe <strong>de</strong>stacar que se pue<strong>de</strong>n presentar reacciones alérgicas<br />

a algunos componentes <strong>de</strong>l complejo B, mecanismo<br />

<strong>de</strong>sconocido que se podría explicar como una hipersensibilidad<br />

a algunos componentes <strong>de</strong>l complejo.


Estudios recientes sugieren utilizar tratamientos enérgicos,<br />

<strong>de</strong>pendiendo si se está frente a un paciente con EW o<br />

con riesgo <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollarla. Después <strong>de</strong> nuestra observación,<br />

sugerimos que pacientes con cuadro compatible <strong>de</strong><br />

EW <strong>de</strong>ben ser tratados empíricamente con un mínimo <strong>de</strong><br />

300 mg/día. Debe mantenerse suplemento oral <strong>de</strong> tiamina<br />

por varios meses, una vez superado el cuadro agudo.<br />

Bibliografia<br />

1. Cook CC, Hallwood PM, Thomson AD. B vitamin <strong>de</strong>ficiency and<br />

neuropsychiatric syndromes in alcohol misuse. Alcohol Alcohol.<br />

1998;33:317-336.<br />

2. Hoffman RS, Goldfrank LR. Ethanol-associated metabolic disor<strong>de</strong>rs.<br />

Emerg Med Clin North Am 1989;7(4):943-61.<br />

3. Thomson AD, Cook CC, Touquet R, Henry JA, Royal College of<br />

Physicians, London. The Royal College of Physicians report on<br />

alcohol: gui<strong>de</strong>lines for managingWernicke's encephalopathy<br />

in the acci<strong>de</strong>nt and emergency <strong>de</strong>partment. Alcohol Alcohol<br />

2002;37(6):513-21 [Erratum in: Alcohol Alcohol. 2003 May-<br />

Jun;38(3):291].<br />

4. Donnino MW, Vega J, Miller J, Walsh M. Myths and misconceptions<br />

of Wernicke's encephalopathy: what every<br />

emergency physician should know. Ann Emerg Med. 2007<br />

Dec;50(6):715-21. Epub 2007 Aug 3.<br />

5. Victor M, Adams RD, Collins GH. The Wernicke-Korsakoff Syndrome<br />

and Related Neurologic Disor<strong>de</strong>rs Due to Alcoholism<br />

and Malnutrition. 2nd ed. Phila<strong>de</strong>lphia, PA: FA Davis; 1989.<br />

6. CHRISTOPHER C. H. COOK, PHILLIP M. HALLWOOD and ALLAN<br />

D. THOMSON. B vITAMIN DEFICIENCY AND NEUROPSYCHIA-<br />

TRIC SYNDROMES IN ALCOHOL MISUSE. Alcohol & Alcoholism<br />

Vol. 33, No. 4, pp. 317-336, 1998.<br />

7. Tanphaichitr V. Thiamin. In: Shils ME, Olson JA, Shike M, Ross<br />

AC, eds. Mo<strong>de</strong>rn Nutrition in Health and Disease, 9th edn.<br />

Baltimore MD: Williams and Wilkins, 1999: 381–89.<br />

8. Leevy CM. Thiamin <strong>de</strong>fi ciency and alcoholism. Ann N Y Acad<br />

Sci 1982; 378: 316–26.<br />

9. Schenker S, Hen<strong>de</strong>rson GI, Hoyumpa AM jr, Mc Candless<br />

DW.Hepatic and Wernicke’s encephalopathies: current concepts<br />

ofpathogenesis. Am J Clin Nutr 1980; 33: 2719–26.<br />

10. Thomson AD, Cook CCH, Touquet R, Henry JA. The Royal College<br />

of Physicians report on alcohol: gui<strong>de</strong>lines for managing<br />

Wernicke’s encephalopathy in the acci<strong>de</strong>nt and emergency<br />

<strong>de</strong>partment. Alcohol Alcohol Suppl 2002; 37: 513–21.<br />

11. Lockman PR, McAfee JH, Gel<strong>de</strong>nhuys WJ, Allen DD. Cation<br />

transport specifi city at the blood-brain barrier. Neurochem<br />

Res 2004;29: 2245–50.<br />

12. Manzo L, Locatelli C, Candura SM, Costa LG. Nutrition and<br />

alcohol neurotoxicity. Neurotoxicology 1994; 15: 555–65.<br />

13. Iwata H. Possible role of thiamine in the nervous system.<br />

Trends Pharmacol Sci 1982; 4: 171–73.<br />

No existe evi<strong>de</strong>ncia suficiente con estudios aleatorios controlados<br />

para establecer una dosis óptima, frecuencia, duración<br />

y vía <strong>de</strong> administración <strong>de</strong> tiamina para el manejo<br />

y profilaxis <strong>de</strong> EW. Por lo que cada caso <strong>de</strong>be evaluarse según<br />

juicio clínico y severidad <strong>de</strong>l cuadro clínico. Des<strong>de</strong> ese<br />

punto <strong>de</strong> vista nos parece pertinente el presente estudio.<br />

14. Hakim AM, Pappius HM. Sequence of metabolic, clinical, and<br />

histological events in experimental thiamine <strong>de</strong>fi ciency. Ann<br />

Neurol 1983; 13: 365–75.<br />

15. McCool BA, Plonk SG, Martin PR, Singleton CK. Cloning of<br />

human transketolase cDNAs and comparison of the nucleoti<strong>de</strong><br />

sequence of the coding region in Wernicke-Korsakoff and<br />

non-Wernicke- Korsakoff individuals. J Biol Chem 1993; 268:<br />

1397–404.<br />

16. Victor M, Adams RD, Collins GH. The Wernicke-Korsakoff syndrome:<br />

a clinical and pathological study of 245 patients, 82<br />

with post-mortem examinations. Contemp Neurol Ser 1971;<br />

7: 1–206.<br />

17. Toth C, Voll C, Macaulay R. Primary CNS lymphoma as a cause<br />

of Korsakoff syndrome. Surg Neurol. 2002;57:41-45.<br />

18. Yoneoka Y, Takeda N, Inoue A, et al. Acute Korsakoff síndrome<br />

following mammillothalamic tract infarction. AJNR Am J<br />

Neuroradiol. 2004;25:964-968.<br />

19. C Zubaran, JG Feran<strong>de</strong>s, R Rodnight. Wernicke - Korsakoff síndrome.<br />

Postgrad MedJ 1997; 73: 27-31 © The Fellowship of<br />

Postgraduate Medicine, 1997<br />

20. Ihara M, Ito T, Yanagihara C, et al. Wernicke’s encephalopathy<br />

associated with hemodialysis: report of two cases and review<br />

of the literature. Clin Neurol Neurosurg. 1999;101:118-121.<br />

21. Chiossi G, Neri I, Cavazzuti M, et al. Hyperemesis gravidarum<br />

complicated by Wernicke encephalopathy: background, case<br />

report, and review of the literature. Obstet Gynecol Surv.<br />

2006; 61:255-268.<br />

22. Adams RD, Victor M. In: Principles of neurology. New York:<br />

McGraw-Hill, 1989, pp 821-4.<br />

23. Campbell ACP, Russel WR. Wernicke’s encephalopathy: the<br />

clinical features and their probable relationship to vitamin B<br />

<strong>de</strong>fi ciency. Q J Med 1941; 10: 41–64.<br />

24. Torvik A. Wernicke’s encephalopathy—prevalence and clinical<br />

spectrum. Alcohol Alcohol Suppl. 1991;1:381-384.<br />

25. Harper CG, Sheedy DL, Lara AI, et al. Prevalence of Wernicke-<br />

Korsakoff syndrome in Australia: has thiamine fortification<br />

ma<strong>de</strong> a difference? Med J Aust. 1998;168:542-545.<br />

26. Harper CG, Giles M, Finlay-Jones R. Clinical signs in the Wernicke-<br />

Korsakoff complex: a retrospective analysis of 131<br />

cases diagnosed at necropsy. J Neurol Neurosurg Psychiatry.<br />

1986;49: 341-345.<br />

120<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 116 - 122


27. Naidoo DP, Bram<strong>de</strong>v A, Cooper K. Autopsy prevalence of<br />

Wernicke’s encephalopathy in alcohol-related disease. S Afr<br />

Med J. 1996;86:1110-1112.<br />

28. Boldorini R, Vago L, Lechi A, et al. Wernicke’s encephalopathy:<br />

occurrence and pathological aspects in a series of 400 AIDS<br />

patients. Acta Biomed Ateneo Parmense. 1992;63:43-49.<br />

29. Bleggi-Torres LF, <strong>de</strong> Me<strong>de</strong>iros BC, Werner B, et al. Neuropathological<br />

findings after bone marrow transplantation:<br />

an autopsy study of 180 cases. Bone Marrow Transplant.<br />

2000;25:301-307.<br />

30. Torvik A, Lindboe CF, Rog<strong>de</strong> S. Brain lesions in alcoholics. A<br />

neuropathological study with clinical correlations. J Neurol<br />

Sci. 1982;56:233-248.<br />

31. Harper C, Fornes P, Duyckaerts C, Lecomte D, Hauw JJ. An<br />

international perspective on the prevalence of the Wernicke-<br />

Korsakoff syndrome. Metab Brain Dis 1995; 10: 17–24.<br />

32. Victor M. The Wernicke-Korsakoff syndrome. In: Vinken PJ,<br />

Bruyn GW, eds. Handbook of clinical neurology, vol 28, part<br />

II. Amsterdam: North-Holland Publishing Company, 1976:<br />

243–70.<br />

33. Butterworth RF, Kril JJ, Harpe CGR. Thiamine-<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nt<br />

enzyme changes in the brains of alcoholics: relationship to<br />

the Wernicke- Korsakoff syndrome. Alcohol Clin Exp Res.<br />

1993;17:1084-1088.<br />

34. Hazell AS, Todd KG, Butterworth RF. Mechanisms of neuronal<br />

cell <strong>de</strong>ath in Wernicke’s encephalopathy. Metab Brain Dis<br />

1998; 13: 97–122.<br />

35. Fattal-Valevski A, Kesler A, Sela BA, et al. Outbreak of lifethreatening<br />

thiamine <strong>de</strong>ficiency in infants in Israel caused<br />

by a <strong>de</strong>fective soy-based formula. Pediatrics. 2005;115:e233e238.<br />

36. Kountchev J, Bijuklic K, Bellmann R, et al. A patient with severe<br />

lactic acidosis and rapidly evolving multiple organ failure:<br />

a case of Shoshin beri-beri [letter]. Intensive Care Med.<br />

2005;31:1004.<br />

37. Oriot D, Wood C, Gottesman R, et al. Severe lactic acidosis<br />

related to acute thiamine <strong>de</strong>ficiency. JPEN J Parenter Enteral<br />

Nutr. 1991;15:105-109.<br />

38. Klein M, Weksler N, Gurman GM. Fatal metabolic acidosis<br />

caused by thiamine <strong>de</strong>ficiency. J Emerg Med. 2004;26:301-<br />

303.<br />

39. Navarro D, Zwingmann C, Hazell AS, Butterworth RF. Brain<br />

lactate synthesis in thiamine <strong>de</strong>fi ciency: a re-evaluation<br />

using 1H-13C nuclear magnetic spectroscopy. J Neurosci<br />

Res 2005; 79: 33–41.<br />

40. Matsushima K, MacManus JP, Hakim AM. Apoptosis is restricted<br />

to the thalamus in thiamine-<strong>de</strong>fi cient rats. Neuroreport<br />

1997; 8: 867–70.<br />

41. Desjardins P, Butterworth RF. Role of mitochondrial dysfunction<br />

and oxidative stress in the pathogenesis of selective<br />

neuronal loss in Wernicke’s encephalopathy. Mol Neurobiol<br />

2005; 31: 17–25<br />

42. Chan F, Butterworth RF, Hazell AS. Primary cultures of rat<br />

astrocytes respond to thiamine <strong>de</strong>fi ciency-induced swelling<br />

by downregulating aquaporin-4 levels. Neurosci Lett 2004;<br />

366: 231–34.<br />

43. Victor M, Adams RD, Collins GH. The Wernicke-Korsakoff<br />

syndrome (WKS) and related neurologic disor<strong>de</strong>rs due to al-<br />

116 - 122, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 121<br />

VITAMINA B EN PACIENTE ALCOHÓLICO: RELATO DE UN CASO<br />

coholism and malnutrition, 2nd edn. Phila<strong>de</strong>lphia: FA Davie,<br />

1989: 61–110.<br />

44. Tanphaichitr V. Thiamin. In: Shils ME, Olson JA, Shike M, Ross<br />

AC, eds. Mo<strong>de</strong>rn Nutrition in Health and Disease, 9th edn.<br />

Baltimore MD: Williams and Wilkins, 1999: 381–89.<br />

45. GianPietro Sechi, Alessandro Serra. Wernicke’s encephalopathy:<br />

new clinical settings and recent advances in diagnosis<br />

and management. Lancet Neurol 2007; 6: 442–55.<br />

46. Jiang W, Gagliardi JP, Raj YP, Silvertooth EJ, Christopher EJ,<br />

Krishanan KR. Acute psychotic disor<strong>de</strong>r after gastric bypass<br />

surgery: diff erential diagnosis and treatment. Am J Psychiatry<br />

2006; 163: 15–19.<br />

47. Wor<strong>de</strong>n RW, Allen HM. Wernicke’s encephalopathy after<br />

gastric bypass that masquera<strong>de</strong>d as acute psychosis: a case<br />

report. Curr Surg 2006; 63: 114–16.<br />

48. Reuler JB, Girard DE, Cooney TG. Wernicke’s encephalopathy.<br />

N Engl J Med 1985; 312: 1035–39.<br />

49. Doss A, Mahad D, Romanowski CA. Wernicke’s encephalopathy:<br />

unusual fi ndings in nonalcoholic patients. J Comput<br />

Assist Tomogr 2003; 27: 235–40<br />

50. Foster D, Falah M, Kadom N, Mandler R. Wernicke’s encephalopathy<br />

after bariatric surgery: losing more than just weight.<br />

Neurology 2005; 65: 1987.<br />

51. Vasconcelos MM, Silva KP, Vidal G, Silva AF, Domingues RC,<br />

Berditchevsky CR. Early diagnosis of pediatric Wernicke’s encephalopathy.<br />

Pediatr Neurol 1999; 20: 289–94.<br />

52. Sechi GP, Bosincu L, Cossu Rocca P, Deiana GA, Correddu<br />

P, Murrighile RM. Hyperthermia, choreic dyskinesias and<br />

increased motor tone in Wernicke’s encephalopathy. Eur J<br />

Neurology 1996; 3 (suppl 5): 133.<br />

53. Caine D, Halliday GM, Kril JJ, Harper CG. Operational criteria<br />

for the classifi cation of chronic alcoholics: i<strong>de</strong>ntifi cation of<br />

Wernicke’s encephalopathy. J Neurol Neurosurg Psychiatry<br />

1997; 62: 51–60.<br />

54. Antunez E, Estruch R, Car<strong>de</strong>nal C, et al. Usefulness of CT and<br />

MR imaging in the diagnosis of acute Wernicke’s encephalopathy.<br />

AJR Am J Roentgenol. 1998;171:1131-1137.<br />

55. Thomson AD, Marshall EJ. The treatment of patients at risk<br />

of <strong>de</strong>veloping Wernicke’s Encephalopathy in the community.<br />

Alcohol Alcohol Suppl 2006; 41: 159–67.<br />

56. Chataway J, Hardman E. Thiamine in Wernicke’s syndrome—<br />

how much and how long? Postgrad Med J. 1995;71:249.<br />

57. Day E, Benthan P, Callaghan R, Kuruvilla T, George S. Thiamine<br />

for Wernicke-Korsakoff syndrome in people at risk<br />

from alcohol abuse. Cochrane Database Syst Rev 2004; 1:<br />

CD004003.<br />

58. Thomson AD. Mechanisms of vitamin <strong>de</strong>fi ciency in chronic<br />

alcohol misusers and the <strong>de</strong>velopment of Wernicke-Korsakoff<br />

syndrome. Alcohol Alcohol Suppl 2000; 35: 2–7.<br />

59. Thomson AD, Marshall EJ. The natural history and pathophysiology<br />

of Wernicke’s encephalopathy and Korsakoff ’s<br />

psychosis. Alcohol Alcohol 2006; 41: 151–58.<br />

60. Cook CC. Prevention and treatment of Wernicke-Korsakoff<br />

Syndrome. Alcohol Alcohol Suppl 2000; 35: 19–20.<br />

61. Hope LC, Cook CCH, Thomson AD. A survey of the current<br />

clinical practice in the UK concerning vitamin supplementation<br />

for chronic alcohol misusers. Alcohol Alcohol Suppl<br />

1999; 34: 862–67.


62. Brown LM, Rowe AE, Ryle PR, Majumdar SK, Jones D, Thomson<br />

AD, Shaw GK. Effi cacy of vitamin supplementation in<br />

chronic alcoholics un<strong>de</strong>rgoing <strong>de</strong>toxifi cation. Alcohol Alcohol<br />

Suppl 1983;18: 157–66.<br />

63. Tallaksen CM, Bell M, Bohmer T. Thiamin and thiamin<br />

phosphate ester <strong>de</strong>fi ciency assessed by high performance<br />

liquid chromatography in four clinical cases of Wernicke’s<br />

encephalopathy. Alcohol Clin Exp Res 1993; 17: 712–16.<br />

64. Bligh JG, Mad<strong>de</strong>n JS. Managing alcohol <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nce. Practitioner<br />

1983; 227: 82–85.<br />

65. Tallaksen CM, San<strong>de</strong> A, Bohmer T, et al. Kinetics of thiamin<br />

and thiamin phosphate esters in human blood, plasma and<br />

urine after 50 mg intravenously or orally. Eur J Clin Pharmacol.<br />

1993;44: 73-78.<br />

66. Weber W, Nitz M, Looby M. Nonlinear kinetics of the thiamine<br />

cation in humans: saturation of nonrenal clearance<br />

and tubular reabsorption. J Pharmacokinet Biopharm.<br />

1990;18:501-523.<br />

67. Wrenn KD, Murphy F, Slovis CM. A toxicity study of parenteral<br />

thiamine hydrochlori<strong>de</strong>. Ann Emerg Med. 1989;18:867-870.<br />

68. Stephen JM, Grant R, Yeh CS. Anaphylaxis from administration<br />

of intravenous thiamine. Am J Emerg Med. 1992;10:61-63.<br />

69. Thomson AD, Cook CC. Parenteral thiamine and Wernicke’s encephalopathy:<br />

the balance of risks and perception of concern.<br />

Alcohol Alcohol. 1997;32:207-209.<br />

70. Johri S, Shetty S, Soni A, et al. Anaphylaxis from intravenous<br />

thiamine—long forgotten? Am J Emerg Med. 2000;18:642-643.<br />

71. Van Haecke P, Ramaekers D, Van<strong>de</strong>rwegen L, et al. Thiamineinduced<br />

anaphylactic shock. Am J Emerg Med. 1995;13: 371-372.<br />

72. Mancall EL. Nutritional disor<strong>de</strong>rs of the nervous system. In:<br />

Aminoff MJ, ed. Neurology and general medicine. New York:<br />

Churchill Livingstone, 1995; pp 285-301.<br />

73. Ibañez y Cols. un caso <strong>de</strong> encefalopatía <strong>de</strong> wernicke-korsakoff:<br />

dificulta<strong>de</strong>s diagnósticas y terapéuticas. Presentado en 62º<br />

Congreso Chileno <strong>de</strong> Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía ,<br />

1, 2 y 3 <strong>de</strong> Noviembre <strong>de</strong> 2007, Temuco.<br />

Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

La Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> invita a los profesionales <strong>de</strong> la psiquiatría, <strong>de</strong> la<br />

psicología, <strong>de</strong> las ciencias sociales y <strong>de</strong> otras áreas relacionadas con la salud mental, chilenos<br />

y extranjeros, a enviar trabajos originados en sus respectivos campos <strong>de</strong> acción a fin <strong>de</strong> que<br />

sean consi<strong>de</strong>rados para su publicación. Se aceptará trabajos inéditos, los cuales <strong>de</strong>berán ser<br />

enviados al mail <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong>. El Comité Editorial podrá <strong>de</strong>cidir como excepción calificada la<br />

publicación <strong>de</strong> trabajos que no cumplan estas normas.<br />

Lo invitamos a ser socio <strong>de</strong> nuestra institución. Esperamos contar con su participación y<br />

sugerencias, por tal razón, lo instamos a visitar nuestro sitio web, o a escribirnos a nuestro mail.<br />

Para nosotros es muy importante su opinión.<br />

122<br />

Dr. Edgardo Thumala Piñeiro<br />

Presi<strong>de</strong>nte<br />

<strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

www.schilesaludmental.cl<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 116 - 122


123 - 131, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 123<br />

ESTUDIO DESCRIPTIVO DE 64 PACIENTES CON ESTRUCTURA LIMÍTROFE DE PERSONALIDAD<br />

Estudio Descriptivo <strong>de</strong> 64 Pacientes con<br />

Estructura Limítrofe <strong>de</strong> Personalidad<br />

Raúl Riquelme 1 , Jorge Luengo 2 , Patricia López 2 , Carla Ávila 2 , Loreto Hernán<strong>de</strong>z 3 , Macarena Quiñones 3<br />

Resumen<br />

Objetivo:<br />

Describir un grupo <strong>de</strong> pacientes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un punto <strong>de</strong> vista<br />

<strong>de</strong>mográfico, psicopatológico y terapéutico que presentan<br />

Estructura Llimítrofe <strong>de</strong> Personalidad. Esta organización<br />

<strong>de</strong> personalidad subyace en varios <strong>de</strong> los trastornos<br />

<strong>de</strong> personalidad más graves, que <strong>de</strong>mandan altos costos<br />

en su atención. Se tomaron 488 fichas <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong><br />

Trastornos <strong>de</strong> Personalidad <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador que<br />

correspon<strong>de</strong>n a un seguimiento <strong>de</strong> los pacientes ingresados<br />

entre los años 2006 y 2008. De estas se seleccionaron<br />

las 256 que presentaron Estructura Limítrofe <strong>de</strong> Personalidad<br />

(diagnóstico clínico) y luego se consi<strong>de</strong>raron las 64<br />

que se encontraban activas.<br />

Resultados:<br />

Destaca un promedio <strong>de</strong> edad <strong>de</strong> 39,3 años. Mayor porcentaje<br />

<strong>de</strong> mujeres (94%). El 51% tiene trabajo o está<br />

estudiando al momento <strong>de</strong>l ingreso a la Unidad. Estado<br />

civil <strong>de</strong> los pacientes: 19% casado(a), 11% convive, 31%<br />

separado(a), 39% soltero (a). Nivel educacional: 6% educación<br />

básica, 53% educación media y 14% nivel universitario.<br />

El 56% ha presentado al menos una hospitalización.<br />

Discusión:<br />

El reconocimiento clínico <strong>de</strong> estos pacientes, la precisión<br />

<strong>de</strong> los síntomas más prevalentes que ellos presentan nos<br />

permite generar estrategias terapéuticas multidisciplinarias<br />

en el corto plazo, y planificar a partir <strong>de</strong> criterios <strong>de</strong><br />

selección en algunos pacientes <strong>de</strong> psicoterapias más prolongadas<br />

que permitan un cambio más permanente. Se<br />

discuten algunos criterios terapéuticos y <strong>de</strong>safíos futuros<br />

para su tratamiento.<br />

Palabras Claves: estructura limítrofe <strong>de</strong> la personalidad;<br />

terapia basada en la mentalización; enfoque multimodal.<br />

Descriptive Analysis of<br />

64 Bor<strong>de</strong>line Personality<br />

Structure Patients<br />

Summary<br />

Objetive:<br />

To <strong>de</strong>scribe a group of Bor<strong>de</strong>rline Personality Structure<br />

patients from <strong>de</strong>mographic, psychopatologic and therapeutic<br />

perspectives. This anomalous personality organization<br />

behind several more serious personality disor<strong>de</strong>rs<br />

<strong>de</strong>manding high cost of its assistance.<br />

We consi<strong>de</strong>r 488 clinic sheets of the Personality Disor<strong>de</strong>r<br />

Unit, Del Salvador Hospital, Santiago, Chile, which correspon<strong>de</strong>d<br />

to a follow-up of patients admitted between<br />

2006 to 2008. From these we selected 256 ones who presented<br />

Bor<strong>de</strong>rline Personality Structure (clinical diagnosis)<br />

and then consi<strong>de</strong>red the 64 active cases.<br />

Results:<br />

The group had 39.3 years of average age, with higher women<br />

percentage (94%). The 51% had job or were studying<br />

at admission time. Marital status: 19% married, 11% coexists,<br />

31% separated, 39% single. Educational level: 6%<br />

basic, 53% secondary and 14% university level. The 56%<br />

had submitted one hospitalization at least.<br />

1. Médico Psiquiatra Psicoanalista (APCH/FEPAL/IPA) Jefe <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l. Salvador, Profesor<br />

Asistente <strong>de</strong>l Depto. <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Oriente, Universidad <strong>de</strong> Chile, Profesor <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong> las Universida<strong>de</strong>s Andrés Bello,<br />

Santo Tomás y <strong>de</strong>l Desarrollo.<br />

2. Médico Resi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong>l Depto. <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Oriente, U. <strong>de</strong> Chile.<br />

3. Psicóloga <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador.


Discussion:<br />

The better clinical recognition of these patients, as well<br />

as the accuracy of the most prevalent symptoms they<br />

presented, the more we could generated multidisciplinary<br />

therapeutic strategies in the short time, and to plan selection<br />

criteria for more protracted psychotherapy for some<br />

of them to allow a more permanent change.<br />

Finally we discuss some therapeutic criteria and future<br />

challenges for the treatment of these patients.<br />

Key Words: bor<strong>de</strong>rline personality structure; mental<br />

based therapy; multimodal aproach.<br />

Introducción<br />

El término límite comenzó a ser utilizado por Stern en<br />

1938 para referirse a personas neuróticas, pero refractarias<br />

a la intervención psicoterapéutica. (8-19-20).<br />

En 1953, Knight contribuyó <strong>de</strong> manera esencial <strong>de</strong>scribiendo<br />

la “<strong>de</strong>bilidad <strong>de</strong>l yo”. El yo <strong>de</strong>l paciente límite opera<br />

<strong>de</strong>fectuosamente como resultado <strong>de</strong> ten<strong>de</strong>ncias constitucionales<br />

y sucesos traumáticos con perturbaciones <strong>de</strong> las<br />

relaciones humanas (13).<br />

Es <strong>de</strong>stacable que antes, en 1921, Kraepelin concebía<br />

el temperamento irritable como una mezcla <strong>de</strong> estados<br />

fundamentales que <strong>de</strong>scribió como la "personalidad<br />

irritable" y que reúne los criterios que actualmente<br />

recoge la clasificación DSM-IV <strong>de</strong>l trastorno límite <strong>de</strong><br />

personalidad: impulsividad, inestabilidad afectiva <strong>de</strong> las<br />

relaciones interpersonales, ira intensa e inapropiada, y<br />

actos autolesivos.<br />

En 1923, Schnei<strong>de</strong>r <strong>de</strong>scribe la "personalidad lábil", caracterizada<br />

por cambios rápidos y súbitos <strong>de</strong>l estado anímico<br />

con reacciones violentas ante estímulos insignificantes a<br />

los que atribuía un componente constitucional. (17-19-20).<br />

La estructura <strong>de</strong> personalidad limítrofe <strong>de</strong>finida por<br />

Kernberg (7-8-11-19-20) engloba a varios trastornos <strong>de</strong><br />

personalidad <strong>de</strong>finidos en el DSM-IV: el Trastorno <strong>de</strong> Personalidad<br />

Limítrofe, narcisista, histriónico, antisocial, todos<br />

los <strong>de</strong>l clúster A, <strong>de</strong>pendiente y otros (1-2).<br />

El concepto <strong>de</strong> Kernberg <strong>de</strong> organización límite <strong>de</strong> la<br />

personalidad centra su atención en la naturaleza <strong>de</strong> la<br />

integración <strong>de</strong> elementos intrapsíquicos que son estables<br />

a lo largo <strong>de</strong>l tiempo y que se encuentran a medio<br />

camino en un continuo entre la neurosis y la psicosis<br />

(7-8-11-19-20).<br />

Las 3 características principales, según este autor, <strong>de</strong> la<br />

organización límite <strong>de</strong> personalidad son:<br />

1. Debilitación <strong>de</strong>l yo.<br />

2. Manifestaciones emocionales primitivas <strong>de</strong> intensidad<br />

elevada.<br />

3. Problemas <strong>de</strong> control <strong>de</strong> los impulsos.<br />

Al igual que el neurótico, el límite conserva la capacidad<br />

<strong>de</strong> juicio <strong>de</strong> la realidad, sin embargo, el paciente neurótico<br />

cuenta con un amplio abanico <strong>de</strong> operaciones <strong>de</strong>fensivas<br />

maduras mientras que el sujeto límite presenta, comparativamente,<br />

variantes más primitivas <strong>de</strong> disociación, que<br />

<strong>de</strong>nominamos escisión. Las imágenes buenas y malas <strong>de</strong><br />

los objetos están activamente separadas. Estas imágenes<br />

constituyen sistemas <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificación que se proyectan<br />

en el sí mismo o en el mundo externo. Esto hace que los<br />

individuos limítrofes pasen rápidamente <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>alización<br />

<strong>de</strong> los <strong>de</strong>más a la completa <strong>de</strong>valuación.<br />

El origen <strong>de</strong> esta disociación se explica, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una perspectiva<br />

<strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo, por un estancamiento que se produciría<br />

en la fase <strong>de</strong> separación – individuación <strong>de</strong>scrita<br />

por Mahler que es previa a la etapa en que se logra la<br />

constancia objetal. El niño no podrá diferenciar entre su<br />

propia i<strong>de</strong>ntidad y la <strong>de</strong> los <strong>de</strong>más si antes no ha llegado<br />

a internalizar una imagen <strong>de</strong> la figura cuidadora como<br />

una presencia constante. El paciente límite adulto vuelve<br />

a experimentar la amenazadora ansiedad <strong>de</strong> separación<br />

(6-11-19-20).<br />

Gun<strong>de</strong>rson (8) <strong>de</strong>scribe una visión <strong>de</strong>l Trastorno Límite<br />

como un trastorno <strong>de</strong>finido <strong>de</strong> la personalidad diferenciable<br />

claramente <strong>de</strong> los síndromes esquizofrénicos y <strong>de</strong> los<br />

estados neuróticos.<br />

124<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 123 - 131


Gun<strong>de</strong>rson y Zanarini configuran <strong>de</strong> esta forma el mo<strong>de</strong>lo<br />

ecléctico-<strong>de</strong>scriptivo <strong>de</strong>l concepto límite que es el seguido<br />

por el DSM (1-2). Este mo<strong>de</strong>lo se centra en 5 áreas:<br />

1. Impulsos y acciones: alcohol, autoagresiones, promiscuidad<br />

y bulimia.<br />

2. Afectos: <strong>de</strong>presión, rabia, ansiedad y <strong>de</strong>sesperación<br />

3. Psicosis: episodios cortos y <strong>de</strong> poca gravedad<br />

4. Relaciones Interpersonales: <strong>de</strong>pendientes, masoquistas,<br />

manipuladores y <strong>de</strong>svalorizadoras.<br />

5. Adaptación Social: aparentemente sin dificulta<strong>de</strong>s<br />

(8-19-20).<br />

Des<strong>de</strong> la perspectiva cognitivo conductual Marshall Linehan<br />

1993 (8-24), consi<strong>de</strong>ra que el trastorno límite <strong>de</strong> personalidad<br />

es una disfunción <strong>de</strong> la regulación emocional,<br />

que se produce como resultado <strong>de</strong> una ten<strong>de</strong>ncia genética<br />

más un entorno invalidante en que los padres fracasan<br />

en ayudar al niño a manejar las emociones.<br />

El objetivo <strong>de</strong> la investigación fue estudiar un grupo <strong>de</strong><br />

pacientes con estructura limítrofe <strong>de</strong> personalidad consultantes<br />

en el Policlínico <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad<br />

<strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador y <strong>de</strong>scribir las características <strong>de</strong>mográficas,<br />

clínicas y terapéuticas.<br />

Materiales y métodos<br />

El presente estudio es <strong>de</strong> tipo <strong>de</strong>scriptivo, cuantitativo, <strong>de</strong><br />

diseño no experimental.<br />

La casuística estudiada correspon<strong>de</strong> a todos los sujetos<br />

con diagnóstico <strong>de</strong> Estructura Limítrofe <strong>de</strong> Personalidad<br />

según criterios clínicos y con el diagnostico <strong>de</strong> trastorno<br />

<strong>de</strong> personalidad <strong>de</strong> acuerdo al DSM IV TR, que se encontraban<br />

activos en tratamiento. El grupo quedó conformado<br />

por 64 sujetos.<br />

La fuente <strong>de</strong> información para extraer los datos fueron<br />

las fichas clínicas. Se revisaron la totalidad <strong>de</strong> las fichas <strong>de</strong><br />

pacientes activos <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad<br />

<strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador entre los meses <strong>de</strong> Agosto<br />

y Septiembre <strong>de</strong>l año <strong>2009</strong>. De las 488 fichas <strong>de</strong> pacientes<br />

en control, 256 presentaban como diagnóstico clínico<br />

123 - 131, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 125<br />

ESTUDIO DESCRIPTIVO DE 64 PACIENTES CON ESTRUCTURA LIMÍTROFE DE PERSONALIDAD<br />

una Estructura <strong>de</strong> Personalidad Limítrofe y <strong>de</strong> éstas, 64<br />

se encontraban activos. Se excluyeron aquellos casos en<br />

que el diagnóstico estructural fuera otro (neurótico o<br />

psicótico) y los casos que no fueran pacientes activos<br />

<strong>de</strong>l policlínico como una forma <strong>de</strong> asegurarnos estar estudiando<br />

pacientes representativos <strong>de</strong>l momento actual.<br />

Se consi<strong>de</strong>raron activos aquellos usuarios que presentaron<br />

su último control <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Abril <strong>de</strong>l <strong>2009</strong> en a<strong>de</strong>lante,<br />

e inactivos los que tuvieron su último control antes <strong>de</strong><br />

esa fecha.<br />

Las variables consi<strong>de</strong>radas fueron género, edad actual,<br />

estado civil, situación laboral, número <strong>de</strong> hijos, escolaridad,<br />

número <strong>de</strong> hospitalizaciones, diagnósticos en el<br />

eje I y II, fármacos actualmente en uso, presencia <strong>de</strong><br />

síntomas psicóticos, existencia <strong>de</strong> intentos <strong>de</strong> suicidio,<br />

antece<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> abuso sexual e indicación y adherencia<br />

a la psicoterapia.<br />

Resultados<br />

Datos <strong>de</strong>mográficos <strong>de</strong> la muestra:<br />

El 94% (60) son mujeres y el 6% (4) hombres. Al momento<br />

<strong>de</strong>l estudio el promedio <strong>de</strong> edad general fue <strong>de</strong> 39,3<br />

años. Entre los hombres el promedio <strong>de</strong> edad fue <strong>de</strong> 45,25<br />

años y entre las mujeres <strong>de</strong> 38,9 años. En cuanto al estado<br />

civil 25 pacientes son solteros (39%), 20 separados<br />

(31,25%), 7 conviven (11%) y 12 están casados (19%).<br />

(Ver gráfico Nº 1).<br />

41,3% tiene hijos y <strong>de</strong> estos el promedio <strong>de</strong> hijos es <strong>de</strong> 2,3.<br />

Respecto a su estado ocupacional el 46% (29 pacientes)<br />

se encontraba ocupado, el 28% (18 pacientes) estaba cesante,<br />

el 17% (11 pacientes) era dueña <strong>de</strong> casa, el 5% (3<br />

pacientes) era estudiante, el 2% (1 paciente) jubilado y un<br />

2% (1 paciente) no se obtiene la información <strong>de</strong> la ficha<br />

clínica. (Ver gráfico Nº 2) Respecto al nivel educacional<br />

el 6% (4 pacientes) presenta nivel <strong>de</strong> educación básico<br />

completo o incompleto, el 53% (34 pacientes) educación<br />

media completa, el 24% (15 pacientes) educación técnica,<br />

el 14% (9 pacientes) educación universitaria y el<br />

3% (2 pacientes) no se encuentra el registro en la ficha<br />

clínica. (Ver gráfico Nº 3).


Gráfico Nº 1<br />

Estado Civil<br />

Convivientes<br />

Separados<br />

11%<br />

31%<br />

19%<br />

Diagnósticos en los ejes I y II<br />

39%<br />

Casados<br />

Solteros<br />

Los diagnósticos consignados en la ficha clínica en el eje<br />

I fueron: Depresión en 21 casos (32,8 %); Distimia en 6<br />

caso, (9,3%), Trastorno Afectivo Bipolar en 6 casos, (9,3%),<br />

Trastornos <strong>de</strong> Ansiedad en 6 casos, (9.3%) Abuso <strong>de</strong> Sustancias<br />

en 4 casos, (6.25 %) Trastornos Alimentarios en 3<br />

casos (4.6 %), Descontrol <strong>de</strong> Impulsos en 3 casos (4.6 %)<br />

y Trastorno por Stress post Traumático en 2 casos. (3.1 %)<br />

La suma da 51 porque no todos los pacientes presentaron<br />

algún diagnóstico en el eje I.<br />

Dentro <strong>de</strong> los diagnósticos en el eje II el más frecuente fue<br />

el Trastorno <strong>de</strong> Personalidad Límite con 49 casos (76.5%).<br />

A<strong>de</strong>más se <strong>de</strong>tectaron 6 Trastornos <strong>de</strong> Personalidad Histriónicos,<br />

(9.37%) 6 narcisistas (9.37%) y 4 <strong>de</strong>pendientes<br />

(6.25%). La suma da 65 porque algunos pacientes cumplían<br />

criterios para más <strong>de</strong> un trastorno <strong>de</strong> personalidad.<br />

(Ver gráfico Nº 4)<br />

Gráfico Nº 2<br />

Situación Ocupacional<br />

Hospitalizaciones<br />

El 56% (36 <strong>de</strong> 64) <strong>de</strong> los pacientes requirió al menos una<br />

hospitalización siendo el Intento <strong>de</strong> Suicidio y los Episodios<br />

Depresivos Severos las dos causas más frecuentes <strong>de</strong><br />

ingreso hospitalario.<br />

Episodios Psicóticos<br />

El 10% <strong>de</strong> los pacientes habían tenido al menos un episodio<br />

psicótico registrado en la ficha clínica.<br />

Suicidalidad<br />

El 59% (38 <strong>de</strong> 64) <strong>de</strong> los pacientes habían tenido al menos<br />

un intento <strong>de</strong> suicidio. El 14% (9 <strong>de</strong> 64) había tenido<br />

i<strong>de</strong>ación suicida y el 27% (17 <strong>de</strong> 64) no había presentado<br />

intentos <strong>de</strong> suicidio ni i<strong>de</strong>ación suicida. Estas variables se<br />

buscaron en las fichas clínicas durante todo el periodo <strong>de</strong><br />

control en la Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad <strong>de</strong>l<br />

Hospital <strong>de</strong>l Salvador.<br />

126<br />

Cesantes<br />

Dueñas <strong>de</strong> casa<br />

Jubilado<br />

28%<br />

17%<br />

2%<br />

2%<br />

No respon<strong>de</strong><br />

5%<br />

Estudiantes<br />

46%<br />

Ocupados<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 123 - 131


Gráfico Nº 3<br />

Nivel Educacional<br />

Técnica<br />

Universitaria<br />

24%<br />

14%<br />

No se sabe<br />

3%<br />

6%<br />

53%<br />

Básica completa<br />

o incompleta<br />

Media<br />

Etiología<br />

Buscamos el antece<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> abuso sexual encontrándose<br />

registrado en el 22% <strong>de</strong> las fichas revisadas. Este dato se<br />

buscó en los registrados en la ficha clínica durante todo el<br />

periodo en control en esta unidad. Sin embargo es esperable<br />

que en muchos casos pudiera existir este antece<strong>de</strong>nte,<br />

pero no estar registrado <strong>de</strong>bido a que aun el (la) paciente<br />

no ha revelado una situación que frecuentemente requiere<br />

una sólida alianza terapéutica.<br />

Tratamiento Farmacológico y<br />

Psicoterapéutico<br />

En cuanto al tratamiento farmacológico el promedio <strong>de</strong><br />

medicamentos indicados por paciente fue <strong>de</strong> 3,5 al momento<br />

<strong>de</strong>l último control, con un máximo <strong>de</strong> 7 fármacos.<br />

La clase <strong>de</strong> medicamentos más utilizada fueron los anti<strong>de</strong>presivos,<br />

que se indicaron en 57 pacientes (89% <strong>de</strong> 64).<br />

123 - 131, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 127<br />

ESTUDIO DESCRIPTIVO DE 64 PACIENTES CON ESTRUCTURA LIMÍTROFE DE PERSONALIDAD<br />

Gráfico Nº 4<br />

Tipos <strong>de</strong> trastornos <strong>de</strong> personalidad<br />

50<br />

45<br />

40<br />

35<br />

30<br />

25<br />

20<br />

15<br />

10<br />

5<br />

0<br />

49<br />

6 6<br />

4<br />

Limítrofe Histriónico Dependiente Narcisista<br />

Los medicamentos antipsicóticos fueron indicados en 49<br />

casos (77% <strong>de</strong> 64), benzodiacepinas en 35 (55% <strong>de</strong> 64) y<br />

estabilizadores <strong>de</strong>l ánimo en 22 casos (34% <strong>de</strong> 64).<br />

(Ver gráfico Nº 5).<br />

También se evaluó la indicación y la adherencia a la psicoterapia<br />

encontrándose que un 71,4% (46 <strong>de</strong> 64) <strong>de</strong> los<br />

pacientes tenía indicada psicoterapia mientras el 28,6%<br />

(18 <strong>de</strong> 64) restante no. Dentro <strong>de</strong> los pacientes que se<br />

encontraban con psicoterapia indicada, 13 (20% <strong>de</strong> 64,<br />

dos <strong>de</strong> ellos en DBT) estaban activos al momento <strong>de</strong> la<br />

revisión, 16 (25% <strong>de</strong> 64) abandonaron, 6 (9% <strong>de</strong> 64) tuvieron<br />

alta administrativa y 5 (8% <strong>de</strong> 64) tuvieron alta<br />

<strong>de</strong> psicoterapia como se muestra en el gráfico Nº 6.


Gráfico Nº 5<br />

Tratamiento farmacológico<br />

Gráfico Nº 6<br />

Psicoterapia<br />

16<br />

14<br />

12<br />

10<br />

8<br />

6<br />

4<br />

2<br />

0<br />

Benzodiazepinas<br />

E. Ánimo<br />

35%<br />

22%<br />

49%<br />

Antipsicóticos<br />

128<br />

57%<br />

Anti<strong>de</strong>presivos<br />

Actual Abandono Alta Adm. Alta<br />

DBT<br />

Sin<br />

Psicoterapia<br />

Información<br />

Otros<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 123 - 131


Discusión<br />

Los resultados obtenidos en este estudio retrospectivo nos<br />

permite conocer <strong>de</strong> mejor forma como es la población <strong>de</strong><br />

pacientes con estructura limítrofe <strong>de</strong> personalidad que se<br />

controla en el policlínico <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong><br />

Personalidad <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador.<br />

El Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador es el<br />

centro terciario <strong>de</strong> <strong>de</strong>rivación <strong>de</strong>l área Oriente <strong>de</strong> Santiago<br />

(Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano Oriente, SSMO) y por<br />

lo tanto po<strong>de</strong>mos pensar que los casos atendidos en esta<br />

Unidad son <strong>de</strong> alta complejidad <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista<br />

psiquiátrico, médico y social. Por esto han sobrepasado la<br />

complejidad <strong>de</strong> los otros 2 niveles <strong>de</strong> atención (Atención<br />

Primaria y Corporación <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, COSAM).<br />

Los datos <strong>de</strong>mográficos obtenidos revelan un elevado<br />

porcentaje <strong>de</strong> pacientes mujeres (94%) que supera lo<br />

obtenido por otros estudios (Riquelme <strong>2009</strong>, Gun<strong>de</strong>rson<br />

2002, París 2005, López 2010; (8-16-18-22).<br />

Un 46% (29 <strong>de</strong> 64) tiene trabajo, valor superior al 33,7<br />

y, 33,3% obtenidos en estudios similares efectuados, en<br />

Santiago <strong>de</strong> Chile, en el Policlínico <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad<br />

<strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico José Horwitz Barak y<br />

en la Clínica Psiquiátrica Universitaria (CPU) (18-22) que<br />

atien<strong>de</strong>n a la población <strong>de</strong>l SSMN (Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano<br />

Norte), un área <strong>de</strong> Santiago quizá con menos<br />

oportunida<strong>de</strong>s laborales que el área Oriente, don<strong>de</strong> se<br />

concentran las comunas con más recursos económicos.<br />

Aunque la población atendida en la CPU tiene características<br />

socio <strong>de</strong>mográficas distintas, <strong>de</strong> un nivel socioeconómico<br />

medio.<br />

En uno <strong>de</strong> los estudios citados <strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico<br />

(18) sólo la mitad <strong>de</strong> los pacientes tenía educación media<br />

completa, en el otro CPU el 91% tenía educación universitaria<br />

o secundaria (24) mientras que en nuestra muestra<br />

este porcentaje se eleva al 91%, lo que pue<strong>de</strong> tener la<br />

misma explicación citada en el párrafo anterior.<br />

Con respecto a los diagnósticos en el eje I, Depresión y<br />

Distimia tienen la más alta prevalencia sumando ambos<br />

un 50%. El Trastorno Bipolar se diagnostica en un 12% <strong>de</strong><br />

123 - 131, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 129<br />

ESTUDIO DESCRIPTIVO DE 64 PACIENTES CON ESTRUCTURA LIMÍTROFE DE PERSONALIDAD<br />

los casos al igual que los Trastornos <strong>de</strong> Ansiedad. El Abuso<br />

<strong>de</strong> Sustancias solo se diagnosticó en un 9% <strong>de</strong> los casos<br />

lo que hace sospechar en subdiagnóstico o subregistro en<br />

una población en que la impulsividad suele ser un síntoma<br />

presente y causante <strong>de</strong> consumo <strong>de</strong> sustancias <strong>de</strong><br />

abuso. Los otros estudios citados presentaban cifras similares<br />

<strong>de</strong> comorbilidad, siendo la Depresión la comorbilidad<br />

más frecuente (18 y 22).<br />

En relación al diagnóstico en el eje II encontramos una<br />

alta prevalencia <strong>de</strong> Trastorno Límite <strong>de</strong> Personalidad<br />

(76%). Esto concuerda con las series <strong>de</strong> Riquelme et al.<br />

<strong>2009</strong> (18) y <strong>de</strong> López et al., 2010, <strong>de</strong> la CPU (22). Cabe<br />

<strong>de</strong>stacar que <strong>de</strong> los 4 pacientes <strong>de</strong> sexo masculino hay 3<br />

diagnosticados con Trastorno <strong>de</strong> Personalidad Narcisista,<br />

lo que da un 75% <strong>de</strong> prevalencia en este género.<br />

Observamos que más <strong>de</strong> la mitad <strong>de</strong> los pacientes habían<br />

sido hospitalizados alguna vez. Esto da cuenta <strong>de</strong> su gravedad<br />

y complejidad <strong>de</strong>l abordaje terapéutico, como en<br />

las otras muestras nacionales comentadas.<br />

Los síntomas psicóticos en los pacientes con estructura<br />

limítrofe <strong>de</strong> personalidad son prevalentes, alcanzando en<br />

esta serie un 10%.<br />

El espectro suicidal, que incluye i<strong>de</strong>as suicidas e intentos<br />

<strong>de</strong> suicidio propiamente tales, es un aspecto presente en el<br />

73% <strong>de</strong> los pacientes. Un 59% ha presentado al menos un<br />

intento <strong>de</strong> suicidio. Esto pone <strong>de</strong> manifiesto uno <strong>de</strong> los criterios<br />

diagnósticos <strong>de</strong>l DSM-IV-TR y da cuenta <strong>de</strong>l gran sufrimiento<br />

personal, familiar y gran costo <strong>de</strong> recursos asistenciales.<br />

Las otras muestras comentadas exhiben cifras<br />

similares <strong>de</strong> Suicidalidad, lo que parece ser como la han<br />

<strong>de</strong>finido otros autores (5-7-8-11-18-19) una característica<br />

altamente prevalente en estas patologías <strong>de</strong>l carácter.<br />

El abuso sexual fue encontrado en un 22% <strong>de</strong> casos. Esto<br />

constituye sólo los casos registrados en la ficha clínica, lo<br />

que po<strong>de</strong>mos suponer que correspon<strong>de</strong> a una cifra inferior<br />

a la real puesto que los antece<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong> violencia y<br />

abuso en este tipo <strong>de</strong> pacientes ha sido bien documentada<br />

por Clarkin 2005, y en las muestras nacionales comentadas<br />

(5-18-22).


En cuanto al tratamiento farmacológico encontramos<br />

una gran cantidad <strong>de</strong> prescripciones <strong>de</strong> varias familias <strong>de</strong><br />

fármacos, con un promedio <strong>de</strong> 3,5 (con un máximo <strong>de</strong> 7)<br />

en el último control. Esto habla nuevamente <strong>de</strong> usuarios<br />

<strong>de</strong> alta complejidad en que el uso <strong>de</strong> medicamentos es un<br />

intento <strong>de</strong> manejar la gran variedad <strong>de</strong> síntomas que suelen<br />

presentar, los que a su vez, son múltiples, recurrentes,<br />

cambiantes y complejos.<br />

Consi<strong>de</strong>rando los resultados y la experiencia clínica en el<br />

manejo <strong>de</strong> pacientes con estructura limítrofe <strong>de</strong> personalidad,<br />

pensamos que un manejo racional <strong>de</strong> la farmacoterapia<br />

<strong>de</strong>bería estar dirigida a 4 dimensiones sintomáticas:<br />

angustia, <strong>de</strong>scontrol impulsivo, inestabilidad<br />

afectiva y distorsiones cognitivas. Para tratar estas manifestaciones<br />

creemos que el manejo <strong>de</strong>biera centrarse<br />

en tres grupos farmacológicos: los anti<strong>de</strong>presivos con<br />

efecto antiimpulsivo, los antipsicóticos atípicos y los<br />

antiepilépticos por su efecto estabilizador <strong>de</strong>l ánimo y<br />

antiimpulsivo. Esto por una menor frecuencia <strong>de</strong> efectos<br />

adversos, un buen perfil <strong>de</strong> eficacia y el bajo potencial <strong>de</strong><br />

abuso y riesgo <strong>de</strong> sobredosis.<br />

En el grupo se observa una elevada prescripción <strong>de</strong> benzodiacepinas<br />

(21% <strong>de</strong> los pacientes), lo que predispone al<br />

abuso <strong>de</strong> estos medicamentos por su potencial adictivo<br />

y efectos paradojales, como aumento <strong>de</strong> la impulsividad,<br />

criterio que hemos ido modificando en esta Unidad pero<br />

aún se mantienen estas indicaciones <strong>de</strong> poca utilidad y <strong>de</strong><br />

potencial iatrogenia. Consi<strong>de</strong>ramos que incluir una benzodiacepina<br />

al comienzo <strong>de</strong>l tratamiento <strong>de</strong> estos casos<br />

Bibliografia<br />

1. American Psychiatric Association, Manual Diagnóstico y Estadístico<br />

<strong>de</strong> los Trastornos <strong>Mental</strong>es, 4ta Edición, Ed. Masson,<br />

Barcelona, 1995<br />

2. American Psychiatric Association, Manual Diagnóstico y Estadístico<br />

<strong>de</strong> los Trastornos <strong>Mental</strong>es III, Edición Revisada. Ed.<br />

Masson, Barcelona, 1987<br />

3. Binks CA, et al. Psychological therapies for people with bor<strong>de</strong>rline<br />

personality disor<strong>de</strong>r (Review), The Cochrane Library<br />

2007 (3).<br />

para tratar los altos montos <strong>de</strong> ansiedad, constituye una<br />

indicación posiblemente ineficaz en el largo plazo y potencialmente<br />

inductora <strong>de</strong> otra patología.<br />

Respecto a la psicoterapia observamos que sólo un 20%<br />

<strong>de</strong> los pacientes adhiere activamente a ella. Es <strong>de</strong>cir, cuatro<br />

quintos <strong>de</strong> los pacientes no reciben el tratamiento<br />

que, probablemente, sea el más eficaz a largo plazo (Clarkin<br />

2007) (5) cifra que se <strong>de</strong>biera modificar para po<strong>de</strong>r<br />

preten<strong>de</strong>r una mejoría más dura<strong>de</strong>ra. En esta Unidad<br />

hemos intentado lograr una mayor adherencia organizando<br />

grupos <strong>de</strong> psicoeducación previos al inicio <strong>de</strong> una<br />

psicoterapia.<br />

Entre los pacientes a los que se le indica la psicoterapia<br />

más <strong>de</strong> la mitad abandona o recibe un alta administrativa<br />

lo que es habitual en un tipo <strong>de</strong> usuarios con gran<strong>de</strong>s<br />

dificulta<strong>de</strong>s interpersonales, que se ven reproducidas en<br />

la transferencia y la contratransferencia con el terapeuta.<br />

Esto habitualmente termina en el quiebre <strong>de</strong> los procesos<br />

psicoterapéuticos. Hay un 10% <strong>de</strong> pacientes que participan<br />

en grupos <strong>de</strong> apoyo lo que pue<strong>de</strong> servir como herramienta<br />

psicoeducativa o como paso previo a una psicoterapia<br />

individual <strong>de</strong> mejor pronóstico y adherencia.<br />

Es un <strong>de</strong>safío tratar a estos pacientes, el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> tratamientos<br />

mas breves, eficaces y replicables es una tarea<br />

en evolución, como la terapia MBT (Terapia basada en la<br />

<strong>Mental</strong>ización) <strong>de</strong> Fonagy y Bateman (23) en el contexto<br />

<strong>de</strong> un enfoque multimodal <strong>de</strong> tratamiento, (Riquelme et<br />

al. 2003) (20).<br />

4. Clarkin J, Posner M. Defining the mechanisms of bor<strong>de</strong>rline<br />

personality disor<strong>de</strong>r. Psychopathology 2005; 38: 56-63<br />

5. Clarkin J, et al.. Evaluating three treatments for bor<strong>de</strong>rline<br />

personality disor<strong>de</strong>r: A multiwave study. Am. J Psychiatry<br />

2007; 164: 922-928<br />

6. Gabbard G. Psiquiatría Psicodinámica en la Práctica Clínica.<br />

Ed. Médica Panamericana, Buenos Aires, 2000<br />

7. Gomberoff L. Otto Kernberg: Introducción a su Obra. Ed. Mediterráneo,<br />

Santiago, 1999<br />

130<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 123 - 131


8. Gun<strong>de</strong>rson J. Bor<strong>de</strong>rline personality disor<strong>de</strong>r: a clinical gui<strong>de</strong>.<br />

American Psychiatric Press, Washington DC, 2001<br />

9. Jorgensen C. Disturbed sense of i<strong>de</strong>ntity in bor<strong>de</strong>rline personality<br />

disor<strong>de</strong>r. Journal of Personality Disor<strong>de</strong>rs, 2006, 20(6),<br />

618-644<br />

10. Kaplan HI, Sadock B. Sinopsis <strong>de</strong> Psiquiatría, 8va Edición. Ed.<br />

Panamericana, Madrid, 1999<br />

11. Kernberg O. Desór<strong>de</strong>nes Fronterizos y Narcisismo Patológico.<br />

Ed. Paidós, Buenos Aires, 1999<br />

12. Knight R. Management and psychotherapy of the bor<strong>de</strong>rline<br />

schizophrenic patient, in psychoanalytic psychiatry and psychology.<br />

Ed International Universities Press, Nueva York, 1954<br />

13. Lis E, et al. Neuroimaging and genetics of bor<strong>de</strong>rline personality<br />

disor<strong>de</strong>r: a review. J Psychiatry Neurosci 2007; 32(3):<br />

162-73<br />

14. Mack J. Bor<strong>de</strong>rline states in psychiatry. Ed. Grune & Stratton,<br />

Nueva York, 1975<br />

15. Oldham J. Bor<strong>de</strong>rline personality disor<strong>de</strong>r and suicidality. Am J<br />

Psychiatry 2006; 163 (1) 20-26<br />

16. Paris J. Bor<strong>de</strong>rline Personality disor<strong>de</strong>r. CMAJ 2005; 172 (12):<br />

1579-83<br />

17. Riquelme R. La personalidad, sus Trastornos y Estructura Limítrofes.<br />

Rev. Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> 2002; XIX; 4; 204-218<br />

123 - 131, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 131<br />

ESTUDIO DESCRIPTIVO DE 64 PACIENTES CON ESTRUCTURA LIMÍTROFE DE PERSONALIDAD<br />

18. Riquelme R, Salas A, García J. Estudio Descriptivo <strong>de</strong> 101 pacientes<br />

con Estructura limítrofe <strong>de</strong> personalidad (Rev. GPU<br />

<strong>2009</strong>; 5; 2: 256-262)<br />

19. Riquelme R, Quijada M. Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Ed. <strong>Sociedad</strong><br />

<strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Santiago, 2007.<br />

20. Riquelme R, Oksenberg A. Trastornos <strong>de</strong> Personalidad: Hacia<br />

una mirada integral. Chile, Ediciones <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong><br />

<strong>Mental</strong>. 2003.<br />

21. Millon Theodore. Trastornos <strong>de</strong> la Personalidad en la Vida Mo<strong>de</strong>rna.<br />

2° edición.2002.<br />

22. López C., Pérez F., Troncoso M., Saldaña J., Bustamante L., Jerez<br />

S. Caracterización <strong>de</strong> las hospitalizaciones realizadas en la<br />

Unidad <strong>de</strong> Trastornos <strong>de</strong> Personalidad <strong>de</strong> la Clínica Psiquiátrica<br />

<strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Chile entre los años 2006 y 2008.Rev Chil<br />

Neuro-Psiquiat 2010; 48 (2): 123-134.<br />

23. Bateman A. y Fonagy P. <strong>Mental</strong>ization based treatment for<br />

bor<strong>de</strong>rline personality disor<strong>de</strong>r. World Psychiatry. 2010 February;<br />

9(1): 11–15.<br />

24. Linehan M. M. Cognitive-Behavioral Treatment of Bor<strong>de</strong>rline<br />

Personality Disor<strong>de</strong>r. New York, Guilford Press, 1993.<br />

Misión<br />

<strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

La <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> tiene por objeto el estudio, investigación, difusión y <strong>de</strong>sarrollo<br />

<strong>de</strong> las diversas disciplinas científicas relacionadas con la salud mental.<br />

En el cumplimiento <strong>de</strong> sus objetivos la Corporación podrá:<br />

a) Promover, realizar y auspiciar todo tipo <strong>de</strong> eventos científicos, tales como: Congresos Científicos,<br />

Simposios, Conferencias, Mesas Redondas y Charlas.<br />

b) Promover y realizar estudios, investigaciones científicas y cursos <strong>de</strong> perfeccionamiento.<br />

c) Promover el intercambio científico entre las diversas disciplinas relacionadas con la salud mental.<br />

d) Promover el intercambio societario con otras corporaciones similares, nacionales o extranjeras.<br />

e) Editar y publicar revistas y todo tipo <strong>de</strong> escritos científicos.<br />

f) Crear y sostener Bibliotecas.<br />

g) En general, realizar todas aquellas acciones encaminadas al mejor logro <strong>de</strong> los fines propuestos.<br />

“La salud mental es tarea <strong>de</strong> todos”


Resultados <strong>de</strong> los Tratamientos en la<br />

Unidad <strong>de</strong> Intervención en Crisis<br />

<strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l<br />

Salvador, Región Metropolitana: 2006-<strong>2009</strong><br />

Andrés Fogar Ferretti 1 , Carolina Villena Castillo 1 , Ramón Florenzano Urzua 2 , Alejandra Cobos Suarez 3 ,<br />

Loreto Hernan<strong>de</strong>z Bohmwald 4 , Antonio Vukusich Valdivieso 5<br />

Resumen<br />

Para evaluar los resultados <strong>de</strong> intervenciones en crisis en<br />

un servicio público, aplicamos el cuestionario Outcome<br />

Questionnaire 45.2 entre los años 2006 y <strong>2009</strong>. Se analizan<br />

las características socio-<strong>de</strong>mográficas e indicadores<br />

<strong>de</strong> respuesta terapéutica <strong>de</strong> un total <strong>de</strong> 335 casos evaluados,<br />

<strong>de</strong> los cuales tenemos medición pre-intervención<br />

(M1) <strong>de</strong> 221, 70 casos con dos mediciones (M2), y 23 con<br />

tres (M3). La edad promedio <strong>de</strong> los 335 casos ingresados a<br />

la Unidad fue 41,4 años (DS 15,8), y el número promedio<br />

<strong>de</strong> atenciones 7,6 (DS 4,2). Se presentan los casos con Indice<br />

<strong>de</strong> Cambio Confiable en el OQ 45.2 y se clasifican <strong>de</strong><br />

acuerdo al método <strong>de</strong> Jacobson y Truax. El puntaje global<br />

promedio al ingreso fue <strong>de</strong> 91 puntos (DS 24), que <strong>de</strong>scendió<br />

a un promedio <strong>de</strong> 77,5 (DS 27,6) en M2, y a 60<br />

(DS 23,9) en M3. Se concluye que el principal problema<br />

en la evaluación naturalística <strong>de</strong> estas intervenciones, es<br />

el alto porcentaje <strong>de</strong> abandono. Por otra parte, los pacientes<br />

tratados en esta modalidad mejoran en promedio<br />

sus puntajes en esta escala, los mejores resultados se ven<br />

en los casos que persisten en terapia por lo menos ocho<br />

sesiones.<br />

Palabras Claves: evaluación <strong>de</strong> resultados; crisis<br />

psicológica; psiquiatría en hospital general.<br />

Outcome of treatmet in the<br />

Crisis Unit of a Psychiatric<br />

Service in a General Hospital<br />

in the Metropolitan Region of<br />

Santiago <strong>de</strong> Chile: 2006-<strong>2009</strong><br />

Abstract<br />

To evaluate the results of crisis interventions in a public<br />

psychiatric service in Santiago <strong>de</strong> Chile, we applied the<br />

Outcome Questionnaire (OQ 45.2) in a pre-intervention<br />

measurement (M1) to 221 patients of a total of 335 assisted<br />

between 2006 and <strong>2009</strong> with pre-intervention measurement<br />

(M1); 70 early treatment measurements (M2)<br />

and 23 advanced treatment measurements (M3). We present<br />

the socio-<strong>de</strong>mographic characteristics of 335 and<br />

outcome indicators of 70 cases with two measurements<br />

and of 25 with three measurements. Mean age was 41,4<br />

years (DS 15,8), and mean number of sessions was 7,6 (DS<br />

4,2). Cases are presented with Reliable Change Scores and<br />

are classified according to the method suggested by Jacobson<br />

and Truax. The mean score at intake was 91 points<br />

in the global scale (DS 24). This <strong>de</strong>creased to a mean of<br />

77,5 (DS 27,6) in M2, and to 60 (DS 23,9) en M3. To evaluate<br />

a dose-response curve, we correlated the number of<br />

1. Psicólogo pasante, Hospital <strong>de</strong>l Salvador.<br />

2. Médico Psiquiatra, Hospital <strong>de</strong>l Salvador, Profesor Universidad <strong>de</strong>l Desarrollo. E-mail: rflorenzano@gmail.com<br />

3. Psicóloga Hospital <strong>de</strong>l Salvador, Coordinadora <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Intervención en Crisis.<br />

4. Psicóloga Hospital <strong>de</strong>l Salvador, Coordinadora Unidad Trastornos <strong>de</strong> Personalidad.<br />

5. Médico en formación en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría Hospital <strong>de</strong>l Salvador.<br />

132<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 132 - 142


RESULTADOS DE LOS TRATAMIENTOS EN LA UNIDAD DE INTERVENCIÓN EN CRISIS DEL SERVICIO DE PSIQUIATRÍA DEL HOSPITAL DEL SALVADOR.<br />

sessions and change between M1 and M2 or M3, finding<br />

a Pearson correlation coefficient +0.38 for M1 M2 and<br />

the number of sessions, and one of -0.406 for M1 M3. The<br />

main problem in this naturalistic study was the high attrition<br />

rate. On the other hand, patients treated in a crisis<br />

intervention approach improve, with the better results in<br />

case that stay in therapy at least for eight sessions.<br />

Key Words: outcome evaluation; psychological crisis;<br />

general hospital psychiatry.<br />

Introducción<br />

La psicoterapia ha sido <strong>de</strong>finida como la "cura a través<br />

<strong>de</strong> la palabra": un diálogo enmarcado en una relación<br />

terapéutica que provoca alivio sintomático y mejor calidad<br />

<strong>de</strong> vida en los consultantes. Como toda intervención<br />

terapéutica la psicoterapia está sujeta a evaluación y la<br />

pregunta: ¿sirve la psicoterapia? ha sido progresivamente<br />

más insistentemente formulada. El primer paso para<br />

respon<strong>de</strong>rla objetivamente es aplicar indicadores cuantificables.<br />

En segundo término es necesario indagar en la<br />

relación costo-beneficio <strong>de</strong> las técnicas psicológicas utilizadas.<br />

Esta investigación versa sobre ambos pasos.<br />

Si bien los procedimientos psicoterapéuticos existen <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

la antigüedad clásica, la investigación acerca <strong>de</strong> sus<br />

resultados es comparativamente reciente (1). Los mo<strong>de</strong>los<br />

psicoanalíticos lograron gran aceptación durante la<br />

primera mitad <strong>de</strong>l siglo XX y fueron el tipo más habitual<br />

<strong>de</strong> psicoterapia (2). Se trabajaba la subjetividad, intentando<br />

compren<strong>de</strong>r el mundo interno para provocar cambios<br />

significativos en el paciente. Estas terapias tenían amplia<br />

aceptación cultural y no se cuestionaban sus beneficios<br />

reales. La investigación se limitaba al estudio <strong>de</strong>tallado<br />

<strong>de</strong> casos clínicos individuales. Sólo a partir <strong>de</strong> la segunda<br />

mitad <strong>de</strong>l siglo XX se enjuicia a esta mo<strong>de</strong>rna disciplina,<br />

cuando en 1952 Eysenck publica “The Effects of Psychotherapy:<br />

An Evaluation” (3), don<strong>de</strong> planteó que la evolución<br />

natural <strong>de</strong> la neurosis es hacia la remisión sin necesidad<br />

<strong>de</strong> ningún tipo <strong>de</strong> tratamiento: para él la psicoterapia<br />

era una pérdida <strong>de</strong> tiempo. La II Guerra Mundial presenció<br />

un amplio uso <strong>de</strong> las intervenciones psicológicas y <strong>de</strong>bió<br />

respon<strong>de</strong>r a la <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> millones <strong>de</strong> heridos afectados<br />

132 - 142, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 133<br />

psicológicamente por la guerra. La psicoterapia pasó a<br />

ser un tema <strong>de</strong> salud pública, y el antes citado trabajo<br />

<strong>de</strong> Eysenck planteó el <strong>de</strong>safío <strong>de</strong> evi<strong>de</strong>nciar cuantitativamente<br />

el impacto <strong>de</strong> esa popular técnica. Des<strong>de</strong> su origen<br />

a comienzos <strong>de</strong> la centuria anterior, las neurosis <strong>de</strong> guerra<br />

(llamadas en la I Guerra Mundial “Shell Shock”) y su tratamiento<br />

fue un tema polémico, insistiendo Sigmund Freud<br />

en su psicogénesis, a diferencia <strong>de</strong>l Profesor <strong>de</strong> Psiquiatría<br />

<strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Viena en esa época, Von Jauregg, que<br />

pensaba que se producían por el impacto <strong>de</strong> micro esquirlas<br />

<strong>de</strong> granada en la guerra en las trincheras (4). En<br />

la II Guerra Mundial el tema reapareció, pudiendo mostrar<br />

psiquiatras militares norteamericanos <strong>de</strong> orientación<br />

psicoanalítica, como Roy Grinker, la efectividad <strong>de</strong> las intervenciones<br />

breves psicodinámicas en el <strong>de</strong>sembarco <strong>de</strong><br />

Normandía (5).<br />

En la actualidad contamos con métodos estadísticos más<br />

<strong>de</strong>sarrollados, por lo que es posible evaluar las psicoterapias<br />

en situaciones <strong>de</strong> crisis. Esto en especial en los servicios<br />

públicos <strong>de</strong> salud mental, para organizar y optimizar<br />

los precarios recursos materiales, humanos y económicos<br />

existentes. En Chile, la reforma <strong>de</strong>l sistema sanitario requiere<br />

<strong>de</strong> organizar prestaciones <strong>de</strong> un modo sustentable<br />

en el tiempo, buscándose distribuir en la forma más eficiente<br />

los recursos <strong>de</strong> que disponen y evaluar la relación<br />

costo-efectividad <strong>de</strong> las diferentes acciones <strong>de</strong>splegadas<br />

en salud mental. La pregunta <strong>de</strong> Eysenck ha sido hoy contestada<br />

afirmativamente: los estudios meta-analíticos (6)<br />

han <strong>de</strong>mostrado la eficacia <strong>de</strong> los tratamientos psicoterapéuticos.<br />

El <strong>de</strong>safío actual está en probar su eficiencia,<br />

<strong>de</strong>mostrando que los pacientes tratados mejoran en la<br />

práctica cotidiana <strong>de</strong> los servicios <strong>de</strong> salud (7).<br />

Esta investigación se inscribe precisamente como un intento<br />

<strong>de</strong> comprobar dicha premisa y, en ese sentido, representa<br />

un avance <strong>de</strong>s<strong>de</strong> estudios centrados en la eficacia<br />

a otros centrados en la efectividad. Para este fin se ha<br />

utilizado el cuestionario OQ-45.2 que mi<strong>de</strong> externamente<br />

los cambios <strong>de</strong>l paciente a lo largo <strong>de</strong> la psicoterapia. El<br />

presente trabajo muestra los resultados <strong>de</strong> su aplicación<br />

entre los años 2006 y <strong>2009</strong> en la Unidad <strong>de</strong> Intervención<br />

en Crisis <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador.<br />

Entre estos años, <strong>de</strong> un total <strong>de</strong> 345 ingresos, se<br />

analizan 235 mediciones pre-intervención (M1); 70 me


diciones tempranas post-intervención (M2) y 23 mediciones<br />

posteriores (M3).<br />

Objetivos<br />

El objetivo general <strong>de</strong>l presente trabajo es evaluar los resultados<br />

<strong>de</strong>l tratamiento recibido por los pacientes <strong>de</strong> la<br />

Unidad <strong>de</strong> Intervención en Crisis <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría<br />

<strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador ocupando el cuestionario<br />

OQ-45.2 como indicador <strong>de</strong> cambio psicoterapéutico.<br />

Los objetivos específicos <strong>de</strong>l trabajo son:<br />

1. Describir las características socio-<strong>de</strong>mográficas <strong>de</strong> la<br />

muestra.<br />

2. Determinar tasas <strong>de</strong> abandono <strong>de</strong>l tratamiento y atrición<br />

<strong>de</strong> la muestra.<br />

3. Analizar la significación clínica <strong>de</strong> los cambios <strong>de</strong>tectados<br />

en las distintas mediciones <strong>de</strong>l OQ-45.2 según el<br />

método propuesto por Jacobson y Truax (8).<br />

Metodología<br />

Des<strong>de</strong> el año 2005 la Unidad <strong>de</strong> Intervención en Crisis <strong>de</strong>l<br />

Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador ha utilizado,<br />

<strong>de</strong> forma habitual, el cuestionario OQ-45.2 con el<br />

fin <strong>de</strong> evaluar cambios terapéuticos y medir así la efectividad<br />

<strong>de</strong>l tratamiento <strong>de</strong>splegado en dicha unidad. Este<br />

instrumento es un cuestionario breve <strong>de</strong> auto-evaluación<br />

creado por Lambert el año 1996 para medir progreso en<br />

psicoterapia a través <strong>de</strong> mediciones sucesivas (9). Consta<br />

<strong>de</strong> 45 ítems que evalúan tres dominios o dimensiones:<br />

sintomatología (malestar subjetivos, síntomas <strong>de</strong>presivos<br />

y ansiosos), relaciones Interpersonales (aspectos <strong>de</strong> la vida<br />

familiar, <strong>de</strong> pareja, amista<strong>de</strong>s y conflictos interpersonales,<br />

aislamiento e ina<strong>de</strong>cuación) y Rol Social (rendimiento<br />

laboral, distracción y tiempo libre). Su versión chilena<br />

mostró alta sensibilidad y confiabilidad para la medición<br />

cuantitativa <strong>de</strong> resultados psicoterapéuticos (10, 11). Los<br />

puntajes <strong>de</strong> corte (PC) establecidos para la población<br />

chilena, es <strong>de</strong>cir, aquellos que diferencian una población<br />

funcional <strong>de</strong> una disfuncional, están representados por la<br />

Tabla 1.<br />

El índice <strong>de</strong> Cambio Confiable (ICC) para la población chilena,<br />

es <strong>de</strong>cir, la diferencia entre el puntaje inicial y final<br />

que indica que el cambio terapéutico es significativo, esta<br />

representado en la Tabla 2. Este instrumento es aplicado<br />

en los pacientes <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Intervención en Crisis en<br />

tres momentos; se realiza la primera medición al ingresar<br />

a la unidad (M1), la segunda aplicación se realiza en la<br />

cuarta sesión (M2) y la tercera medición se efectúa entre<br />

la sexta y la octava sesión, ya que el número <strong>de</strong> sesiones<br />

que contempla la unidad es <strong>de</strong> seis a ocho pudiendo llegar<br />

a 12 en los casos más graves. Por lo tanto, esta última<br />

medición es la más problemática dado que, tanto el alta<br />

como el nivel <strong>de</strong> <strong>de</strong>serción <strong>de</strong> los pacientes es, en su gran<br />

mayoría, anterior a la octava sesión.<br />

Tabla Nº1<br />

Puntajes <strong>de</strong> corte para versión chilena <strong>de</strong>l OQ 45.2, modificada <strong>de</strong> Von Bergen y De la Parra, 2002.<br />

OQ 73<br />

Área <strong>de</strong> sintomatología 43<br />

Área <strong>de</strong> relaciones interpersonales 16<br />

Área <strong>de</strong> Rol Social 14<br />

134<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 132 - 142


RESULTADOS DE LOS TRATAMIENTOS EN LA UNIDAD DE INTERVENCIÓN EN CRISIS DEL SERVICIO DE PSIQUIATRÍA DEL HOSPITAL DEL SALVADOR.<br />

Se analizan los pacientes ingresados a la Unidad <strong>de</strong> Intervención<br />

en Crisis durante los años 2006 a Julio <strong>de</strong>l <strong>2009</strong>,<br />

existiendo un registro <strong>de</strong> 335 pacientes ingresados durante<br />

dicho período. Se analizan las características socio<strong>de</strong>mográficas,<br />

e indicadores <strong>de</strong> respuesta terapéutica <strong>de</strong><br />

221 casos con mediciones pre-intervención (M1) 70 casos<br />

con dos mediciones (M2) y 23 con tres mediciones (M3).<br />

Un problema frecuente en la medición <strong>de</strong> resultados son<br />

los elevados porcentajes <strong>de</strong> pacientes que abandonan las<br />

terapias, lo que hace que frecuentemente las mediciones<br />

secuenciales se apliquen a menos casos <strong>de</strong> los ingresados<br />

a los estudios. En otros trabajo hemos focalizado en tres<br />

aspectos específicos: la atrición <strong>de</strong> las muestras estudiadas,<br />

los resultados que mi<strong>de</strong>n la variación promedio <strong>de</strong> las<br />

escalas y sub-escalas <strong>de</strong>l OQ 45.2, y el cálculo <strong>de</strong> la significación<br />

clínica utilizando el método propuesto por Jacobson<br />

y Truax (12). Estos autores han propuesto el concepto,<br />

que conjuga el cambio estadísticamente confiable con la<br />

significación clínica. Señalan que un cambio sea estadísticamente<br />

significativo no implica que sea clínicamente<br />

útil. Por ejemplo, en un estudio <strong>de</strong> una población tratada<br />

por obesidad, pue<strong>de</strong> haber una disminución <strong>de</strong> peso<br />

promedio tal que se pue<strong>de</strong> afirmar que las diferencias<br />

encontradas son estadísticamente confiables. Lo anterior<br />

es distinto <strong>de</strong> mostrar que el <strong>de</strong>scenso es suficiente para<br />

disminuir la mortalidad por enfermedad coronaria, en la<br />

cual el sobrepeso es un claro factor <strong>de</strong> riesgo. Los métodos<br />

<strong>de</strong>sarrollados para <strong>de</strong>scribir el cambio clínicamente significativo<br />

apuntan a lo segundo.<br />

132 - 142, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 135<br />

Resultados<br />

El origen <strong>de</strong> los casos se concentró en comunas <strong>de</strong>nsamente<br />

pobladas <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano<br />

Oriente <strong>de</strong> la Región Metropolitana <strong>de</strong> Santiago, especialmente<br />

en aquellas <strong>de</strong> menores ingresos: el 49,3% provenía<br />

<strong>de</strong> Peñalolén, Macul y Ñuñoa. Un porcentaje menor<br />

(27,3%) provenía <strong>de</strong> comunas fuera <strong>de</strong>l sector Oriente <strong>de</strong><br />

Santiago. La edad promedio fue <strong>de</strong> 41,4 años (DS 14,387),<br />

con un predominio femenino (70,3% <strong>de</strong> los casos), como<br />

se ve en la Figura 1 y Tabla 3. La tabla 4 ilustra a<strong>de</strong>más<br />

como más <strong>de</strong> la mitad <strong>de</strong> los casos tenía trabajo estable<br />

(55,5%), y casi la mitad vivía en su familia <strong>de</strong> procreación<br />

(49,7%); un 45,5% vive en pareja (casados o conviviendo),<br />

y un 17,6% están separados. Más <strong>de</strong> la mitad son cristianos<br />

(53,6%), y un 19,4% no profesa ninguna religión.<br />

La aplicación <strong>de</strong>l OQ 45.2 mostró una importante disminución<br />

en sintomatología, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un promedio <strong>de</strong> 58,3 en<br />

la aplicación pre-terapia M1, a 37,6 en la post-terapia tardía<br />

(M3), por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l punto <strong>de</strong> corte <strong>de</strong> 43. Lo mismo<br />

se constata para la mejoría <strong>de</strong> relaciones interpersonales,<br />

<strong>de</strong> 19,3 a 14,8, casi en el punto <strong>de</strong> corte <strong>de</strong> 14, y en rol<br />

social, don<strong>de</strong> baja <strong>de</strong> 15,6 a 10,4. Los puntajes totales disminuyen<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> 93,4 (M1) a un 78,04 (M2) para finalizar<br />

en un 63,2 en M3, bajo el punto <strong>de</strong> corte <strong>de</strong> 73. La tabla 5<br />

y la Figura 2 ilustran lo anterior.<br />

Al examinar la variación <strong>de</strong> los diferentes puntajes se pue<strong>de</strong><br />

constatar que estos disminuyeron en la segunda me-<br />

Tabla Nº2<br />

Índice <strong>de</strong> Cambio Confiable para versión chilena <strong>de</strong>l OQ 45.2 (Von Bergen y De la Parra, 2002).<br />

OQ 17<br />

Área <strong>de</strong> sintomatología 12<br />

Área <strong>de</strong> relaciones interpersonales 9<br />

Área <strong>de</strong> Rol Social 8


dición y más aún en la tercera. Estas positivas variaciones<br />

se confirman al constatar el Índice <strong>de</strong> Cambio Confiable.<br />

El ICC para M2 fue <strong>de</strong> un 15,4 y para M3 fue <strong>de</strong> un 30,28.<br />

Por otra parte, hay un porcentaje importante <strong>de</strong> abandonos:<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> los 235 casos con aplicación <strong>de</strong> M1 se baja a 70<br />

con M2 y solo 23 con M3, o sea tenemos datos solo para<br />

el 30% <strong>de</strong> los casos en la segunda aplicación y 11% en la<br />

tercera. La tasa <strong>de</strong> atrición entre M1 y M3 es <strong>de</strong> un 89%.<br />

Tabla Nº3<br />

Distribución por género, 335 casos tratados en UIC-SPHDS, 2006-<strong>2009</strong><br />

Presentaron cambio estable y clínicamente significativo<br />

un 52,2% <strong>de</strong> los casos con tres mediciones, así como<br />

mejora un 13% adicional. Un 34,8% no presenta cambio.<br />

Para ilustrar el efecto <strong>de</strong> la atrición antes mencionado, estos<br />

porcentajes bajan a un 3,6%, 0,9% y 2,4% <strong>de</strong> la muestra<br />

total, como se ve en la Tabla y Figura 3.<br />

Sexo Frecuencia Porcentaje<br />

Masculino 232 70,3<br />

Femenino 90 27,3<br />

Sin información 8 2,4<br />

TOTAL 330 100<br />

Conclusiones<br />

La principal limitación <strong>de</strong> este trabajo es el elevado porcentaje<br />

<strong>de</strong> abandono <strong>de</strong> los casos, que llega a un 89%,<br />

lo que hace preguntarse si la importante mejoría encontrada<br />

se aplica solo a quienes completan el tratamiento.<br />

En todo caso, se <strong>de</strong>muestra la importancia <strong>de</strong> realizar<br />

mediciones cuantitativas sistemáticas y rutinarias <strong>de</strong> los<br />

tratamientos psicoterapéuticos: esta es la única forma <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>mostrar que la psicoterapia surge efecto en los pacientes.<br />

Esta <strong>de</strong>mostración adquiere mayor relevancia aún en<br />

los servicios <strong>de</strong> psiquiatría <strong>de</strong> hospitales públicos, don<strong>de</strong><br />

es posible hacer estudios naturalísticos como este.<br />

Estos estudios imponen al clínico nuevos <strong>de</strong>safíos; ya no<br />

sólo tendrán que hacer frente a las complejida<strong>de</strong>s conceptuales<br />

<strong>de</strong> los cuadros psicopatológicos en su expresión<br />

individual, sino que también <strong>de</strong>berán agregar mediciones<br />

rutinarias <strong>de</strong> los efectos <strong>de</strong> las intervenciones en la búsqueda<br />

<strong>de</strong> la mejoría sintomática. Ya no basta únicamente<br />

con las impresiones subjetivas <strong>de</strong> los psicoterapeutas respecto<br />

a los cambios en sus pacientes; los cambios ahora<br />

<strong>de</strong>ben cuantificarse. Esta <strong>de</strong>mostración es el modo <strong>de</strong> <strong>de</strong>mostrar<br />

que las terapias psicológicas surten efecto en los<br />

consultantes. Esto adquiere mayor relevancia en servicios<br />

psiquiátricos <strong>de</strong> hospitales generales, que han reemplazado<br />

en forma importante a los antiguos establecimientos<br />

para enfermos mentales.<br />

Es importante asimismo mejorar la adherencia al tratamiento:<br />

el mayor problema en esta medición <strong>de</strong> resultados<br />

son los elevados porcentajes <strong>de</strong> pacientes que abandonan<br />

la terapia. Esto hace que las mediciones secuenciales se<br />

apliquen a menos casos que los ingresados al estudio. Es<br />

136<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 132 - 142


RESULTADOS DE LOS TRATAMIENTOS EN LA UNIDAD DE INTERVENCIÓN EN CRISIS DEL SERVICIO DE PSIQUIATRÍA DEL HOSPITAL DEL SALVADOR.<br />

interesante notar que el mayor número <strong>de</strong> abandonos se<br />

da antes <strong>de</strong> la cuarta sesión, lo que también es útil en<br />

la supervisión <strong>de</strong> los tratamientos: los casos que mejoran<br />

tien<strong>de</strong>n a bajar sus puntajes rápidamente, lo que no suce<strong>de</strong><br />

en los casos refractarios.<br />

Este estudio corrobora hallazgos anteriores en el mismo<br />

grupo que muestran que, a pesar <strong>de</strong> las tasas <strong>de</strong> abandono<br />

y atrición <strong>de</strong> la muestra, los tratamientos <strong>de</strong>splegados<br />

en la Unidad <strong>de</strong> Intervención en Crisis son eficientes, al<br />

conseguir con un número limitado <strong>de</strong> sesiones, mejoría<br />

importante. Esto, en comparación a otras unida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l<br />

mismo servicio, con tasas semejantes <strong>de</strong> abandono (13).<br />

Las variaciones encontradas en las distintas mediciones<br />

<strong>de</strong>l OQ-45.2, así como en los ICC y cambio clínicamente<br />

significativo son muy similares a la investigación realizada<br />

el año 2007 (14).<br />

Tabla Nº4<br />

Características socio-<strong>de</strong>mográficas, 335 casos tratados en UIC-SPHDS, 2006-<strong>2009</strong><br />

132 - 142, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 137<br />

Otro punto <strong>de</strong> interés para el clínico es el número <strong>de</strong><br />

sesiones necesarias para que aparezca cambio estable<br />

(cambio confiable, en la terminología <strong>de</strong>l OQ 45.2). Todos<br />

los puntajes, tanto globales como <strong>de</strong> las sub-escalas,<br />

disminuyen en las sucesivas aplicaciones, pero las diferencias<br />

estadísticamente significativas aparecen entre<br />

la primera y la tercera aplicación en la escala <strong>de</strong> sintomatología<br />

y escala global <strong>de</strong>l OQ-45.2. Las personas<br />

tratadas en la unidad informan, en promedio, que sus<br />

molestias disminuyen <strong>de</strong> manera consi<strong>de</strong>rable al llegar<br />

a la 8ª sesión. El 50% <strong>de</strong> los pacientes que llegan a esta<br />

alcanzan cambio clínicamente significativo; otro 13%<br />

experimenta mejoría. Por lo tanto, es en tratamientos<br />

<strong>de</strong> mayor extensión (cercano a las 8 sesiones) en don<strong>de</strong><br />

se reportan los mayores niveles e índices <strong>de</strong> cambio clínico<br />

significativo y mejoría.<br />

Comuna Número (N) Porcentaje<br />

La Reina 8 2,4<br />

Las Con<strong>de</strong>s 21 6,4<br />

Lo Barnechea 16 4,8<br />

Macul 44 13,3<br />

Ñuñoa 44 13,3<br />

Peñalolén 75 22,7<br />

Provi<strong>de</strong>ncia 30 9,1<br />

Vitacura 2 0,6<br />

Otras 75 27,3<br />

TOTAL 315 100


Ocupación Número (N) Porcentaje<br />

Cesante 34 10,3<br />

Dueña <strong>de</strong> Casa 47 14,2<br />

Estudiante 16 4,8<br />

Ocupado 18 55,5<br />

Jubilado 11 3,3<br />

Otros 39 11,8<br />

Sin información 0 0,0<br />

TOTAL 165 99,9<br />

Grupo Familiar Número (N) Porcentaje<br />

Familia <strong>de</strong> origen 46 13,9<br />

Familia nuclear 164 49,7<br />

Familia extendida 60 18,2<br />

Sola 10 3,0<br />

Sin información 50 15,2<br />

TOTAL 330 100<br />

Estado Civil Número (N) Porcentaje<br />

Casada 123 37,3<br />

Convive 27 8,2<br />

Separada 58 17,6<br />

Soltera 82 24,8<br />

Viuda 15 4,5<br />

Sin información 25 7,6<br />

TOTAL 330 100<br />

138<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 132 - 142


RESULTADOS DE LOS TRATAMIENTOS EN LA UNIDAD DE INTERVENCIÓN EN CRISIS DEL SERVICIO DE PSIQUIATRÍA DEL HOSPITAL DEL SALVADOR.<br />

Religión Número (N) Porcentaje<br />

Católica 147 44,5<br />

Cristiana 30 9,1<br />

Otra 5 1,5<br />

Ninguna 64 19,4<br />

Sin información 84 25,5<br />

TOTAL 330 100<br />

Tabla Nº5<br />

Puntajes promedios en sub-escala <strong>de</strong> síntomas, relaciones interpersonales y rol social, 335 casos tratados en<br />

UIC-SPHDS, 2006-<strong>2009</strong><br />

Sub - Escalas Número (N) Mínimo Máximo Media<br />

Desv.<br />

Estándar<br />

Síntomas M1 221 5 148 58,36 18,843<br />

Síntomas M2 70 1 89 48,46 18,732<br />

Síntomas M3 23 12 72 37,60 16,391<br />

Rel. Interpersonal M1 221 2 43 19,34 7,144<br />

Rel. Interpersonal M2 70 4 33 16,49 6,799<br />

Rel. Interpersonal M3 23 3 32 14,76 27,870<br />

Rol Social M1 221 1 32 15,62 6,465<br />

Rol Social M2 70 0 30 12,81 6,614<br />

Rol Social M3 23 4 23 10,40 5,107<br />

Total M1 221 18 195 93,44 28,036<br />

Total M2 70 9 138 78,04 28,241<br />

Total M3 23 21 127 63,16 26,419<br />

132 - 142, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 139


Tabla Nº6<br />

Cambio clínicamente significativo según método Jacobson y Truax, 335 casos tratados en UIC-SPHDS,<br />

2006-<strong>2009</strong>.<br />

Categoría Frecuencia Porcentaje Porcentaje<br />

Válido<br />

Mejoran 3 9 13<br />

Sin cambio 8 2,4 34,8<br />

Cambio clñinicamente significativo 12 3,6 52,2<br />

Empeoran 0 0,0 0,0<br />

TOTAL 23 7,0 100<br />

Figura Nº1<br />

Distribución por edad, 335 casos tratados en UIC SPHDS, 2006-<strong>2009</strong><br />

Frecuencia<br />

25<br />

20<br />

15<br />

10<br />

5<br />

0<br />

Histograma Media m=41,39<br />

Desviación típica: 14,387<br />

N=319<br />

20 40 60 80<br />

Edad<br />

140<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 132 - 142


RESULTADOS DE LOS TRATAMIENTOS EN LA UNIDAD DE INTERVENCIÓN EN CRISIS DEL SERVICIO DE PSIQUIATRÍA DEL HOSPITAL DEL SALVADOR.<br />

Figura Nº2<br />

Variación <strong>de</strong> puntajes totales y por sub-escala en tres aplicaciones <strong>de</strong>l OQ 45.2, 335 casos tratados<br />

en UIC-SPHDS, 2006-<strong>2009</strong><br />

Frecuencia<br />

120<br />

100<br />

80<br />

60<br />

40<br />

20<br />

0<br />

Total M1<br />

Figura Nº3<br />

Cambio clínicamente significativo, 23 con tres mediciones tratados en la UIC-SPHDS 2006-<strong>2009</strong><br />

Cambios Clínicos<br />

94,7<br />

Total<br />

70<br />

Total<br />

60,1 60<br />

Sint M1<br />

Sint<br />

43,4<br />

Sint<br />

132 - 142, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 141<br />

36<br />

Rim 1<br />

18,7<br />

Ri<br />

15,7 13,8<br />

57%<br />

Ri<br />

RSM1<br />

16,4<br />

Rs<br />

Mejoran<br />

Sin Cambio<br />

10,8 9,9<br />

Rs<br />

Cambio clínico significativo<br />

Sin Cambio


Bibliografia<br />

1. Foucault, M. (2005) El po<strong>de</strong>r psiquiátrico. Buenos Aires: Fondo<br />

<strong>de</strong> Cultura Económica.<br />

2. Bienenfeld, D. (2002) History of Psychotherapy. En M. Hersen,<br />

W. Sledge (Eds.): Encyclopedia of Psychotherapy (pp. 925-<br />

935). New York: Aca<strong>de</strong>mic Press.<br />

3. Eysenck H. (1952) The Effects of Psychotherapy: An Evaluation.<br />

Journal of Consulting Psychology, 16, 319-324.<br />

4. FLORENZANO, R., Principios <strong>de</strong> psicoterapias dinámicas, Editorial<br />

Universitaria, Santiago, 1984.<br />

5. Florenzano R. Breve Historia <strong>de</strong>l Psicoanálisis. Santiago, Editorial<br />

Universitaria, 1999<br />

6. Smith ML, Glass GV, Miller TJ: The Benefits of Psychotherapy.<br />

Baltimore, Johns Hopkins University Press, 1980<br />

7. Barkham M, Mellor-Clark J. Rigor and relevance: The role of<br />

practice-based evi<strong>de</strong>nce in the psychological therapies. En:<br />

Rowland N, Goss S. Evi<strong>de</strong>nce-Based Counselling and Psychological<br />

Therapies. Routledge, Londres, 2000.<br />

8. Jacobson NS y Truax P. Clinical significance: a statistical<br />

approach to <strong>de</strong>fining meaningful change in psychotherapy<br />

research. J Consult Clinical Psychology, 1991; 59:12-19<br />

9. Lambert M, Hansen N, Umpress V, Lunnen K, Okiiski J, Burlingame<br />

G. Administration and Scoring Manual for the OQ45-2.<br />

American Professional Cre<strong>de</strong>ntialing Services LLC USA. 1996.<br />

10. Von Bergen A. Investigación empírica en psicoterapia: Validación<br />

<strong>de</strong>l cuestionario <strong>de</strong> resultados terapéuticos OQ45.2. Tesis<br />

(Licenciatura <strong>de</strong> Psicología). Universidad Nacional Andrés Bello.<br />

Santiago <strong>de</strong> Chile. 2000.<br />

11. De la Parra G, Von Bergen A. El instrumento OQ45.2 que mi<strong>de</strong><br />

resultados terapéuticos como herramienta <strong>de</strong> investigación<br />

psicoanalítica. En: Revista <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> Psicoanálisis 2000; 17<br />

(2): 143-56.<br />

12. Jacobson NS y Truax P. Clinical significance: a statistical<br />

approach to <strong>de</strong>fining meaningful change in psychotherapy<br />

research. J Consult Clinical Psychology, 1991; 59:12-19<br />

13. Retamal P, Florenzano R, Vaccarezza A, Chamorro X, Armijo I,<br />

Leighton C, Espinoza MT. Evaluación <strong>de</strong>l Tratamiento <strong>de</strong> Depresiones<br />

Severas: Un Estudio en un Centro Especializado <strong>de</strong><br />

Referencia. Rev Latinoamericana Psiquiatría, 2006: 6:18-24<br />

14. Florenzano R, Cal<strong>de</strong>rón A, Cobos A, Bruzzone C, Larraín M.<br />

Mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> Intervención en Crisis en el Servicio <strong>de</strong> Psiquiatría<br />

<strong>de</strong>l Hospital <strong>de</strong>l Salvador. Actas <strong>de</strong>l LXII Congreso Chileno <strong>de</strong><br />

Neurocirugía, Psiquiatría y Neurocirugía, 1-3 <strong>de</strong> Noviembre <strong>de</strong><br />

2007, Temuco.<br />

142<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 132 - 142


143 - 149, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 143<br />

ROL DEL MÉDICO PSIQUIATRA SEGÚN EQUIPOS DE SALUD MENTAL COMUNITARIA S.S.M.O.<br />

Rol <strong>de</strong>l Médico Psiquiatra Según Equipos <strong>de</strong><br />

<strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Comunitaria Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong><br />

Metropolitano Oriente (S.S.M.O)<br />

Resumen<br />

Se presenta la evolución <strong>de</strong> la práctica médica <strong>de</strong>l psiquiatra,<br />

según cambios <strong>de</strong>l enfoque <strong>de</strong> la psiquiatría y <strong>de</strong>l<br />

sistema <strong>de</strong> servicios <strong>de</strong> salud, en que esta labor se ha <strong>de</strong>sarrollado.<br />

La psiquiatría, como una práctica biopsicosocial,<br />

se ve continuamente afectada por los cambios enunciados,<br />

que <strong>de</strong>terminan el <strong>de</strong>sempeño real <strong>de</strong>l psiquiatra<br />

y las expectativas <strong>de</strong> este rol, tanto <strong>de</strong>l equipo <strong>de</strong> salud<br />

mental como <strong>de</strong> los usuarios, en el sector público.<br />

En base a que existen escasos estudios empíricos sobre lo<br />

que ocurre en la realidad práctica <strong>de</strong>l psiquiatra, a nivel <strong>de</strong><br />

salud mental comunitaria, se presenta este estudio exploratorio,<br />

sobre la percepción <strong>de</strong> los distintos profesionales<br />

acerca <strong>de</strong>l trabajo <strong>de</strong>l psiquiatra: visión <strong>de</strong>l rol real, rol <strong>de</strong>seado<br />

y las competencias valoradas por los equipos, para<br />

la buena práctica psiquiátrica.<br />

Palabras clave: rol médico psiquiatra; equipo salud<br />

mental; psiquiatría comunitaria.<br />

Psychiatrist's Role as <strong>Mental</strong><br />

Health Teams S.S.M.O<br />

Abstract<br />

It is presented the evolution of medical practice of the<br />

psychiatrist, according to changes in approach to<br />

psychiatry and health care system, that this work has<br />

Ana Marchandón 1 , Andrea Reyes 2 , Javiera Castillo 3<br />

been conducted. Psychiatry, as a biopsychosocial practice,<br />

is continually affected by the changes set forth, which<br />

<strong>de</strong>termine the actual performance of the psychiatrist and<br />

the expectations of this role, both mental health team<br />

and users in the public sector.<br />

On the basis that there are few empirical studies about<br />

what happens in actual psychiatrist’s practiced at, community<br />

mental health level, this exploratory study presents<br />

the perception of the different professionals about<br />

the work of psychiatrist: real vision of the role, expectations<br />

of it, and skills valued by the teams for a good<br />

psychiatric practice.<br />

Key Words: psychiatrist’s role; mental health team;<br />

community psychiatry.<br />

Antece<strong>de</strong>ntes<br />

La Psiquiatría ha experimentado cambios sustanciales en<br />

su práctica clínica a nivel mundial. Des<strong>de</strong> la segunda mitad<br />

<strong>de</strong>l siglo XX, el mo<strong>de</strong>lo tradicional biomédico centrado<br />

en el Hospital Psiquiátrico entra en crisis, propiciada por el<br />

<strong>de</strong>sarrollo científico técnico, las condiciones internas <strong>de</strong>l<br />

manicomio y los gran<strong>de</strong>s movimientos sociales en la Europa<br />

<strong>de</strong> la post-guerra, en don<strong>de</strong> el ejercicio <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos<br />

<strong>de</strong>l hombre son fundamentales (1,2,3). Se producen<br />

movimientos reformadores <strong>de</strong> la Psiquiatría llevándola a<br />

cambiar cualitativamente (4). Sin embargo, estrictamente<br />

hablando, la Psiquiatría Comunitaria surge en los pasados<br />

1. Enfermera Universitaria, Departamento <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Facultad <strong>de</strong> Medicina Oriente, Universidad <strong>de</strong> Chile.<br />

Dirección: amarchandon@med.uchile.cl<br />

2. Médico Cirujano, Departamento <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Facultad <strong>de</strong> Medicina Oriente, Universidad <strong>de</strong> Chile.<br />

3. Terapeuta Ocupacional, Departamento <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Facultad <strong>de</strong> Medicina Oriente, Universidad <strong>de</strong> Chile.


años sesenta en el contexto <strong>de</strong> la política <strong>de</strong>sinstitucionalizadora<br />

<strong>de</strong> EE.UU., y se extien<strong>de</strong> por todo el mundo<br />

llegando a <strong>de</strong>signar el mo<strong>de</strong>lo clínico asistencial <strong>de</strong> la Reforma<br />

Psiquiátrica.<br />

En el informe <strong>de</strong> la OMS <strong>de</strong> 1953, se utiliza el término “comunitario”<br />

para referirse a aquellos hospitales mentales<br />

en los que se realizan no solamente ingresos hospitalarios,<br />

sino que también se <strong>de</strong>sarrollan servicios ambulatorios<br />

que actúan en la comunidad (5).<br />

Para entonces ya en Italia e Inglaterra, la Reforma, con<br />

respaldo legal ha avanzado en el cierre <strong>de</strong> los Hospitales<br />

Psiquiátricos; en EEUU, la Ley Kennedy en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

instala los Centros Comunitarios <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>; en<br />

Francia se <strong>de</strong>sarrolla la Psiquiatría <strong>de</strong> Sector, con énfasis<br />

en la población a cargo y en la programación local; y la<br />

Reforma Española se <strong>de</strong>sarrolla con énfasis en la acción<br />

<strong>de</strong> profesionales en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> (6).<br />

Des<strong>de</strong> 1957, en Gran Bretaña se empezó a generalizar el<br />

término “psiquiatría comunitaria”, abordando el tratamiento<br />

<strong>de</strong> las enfermeda<strong>de</strong>s mentales, el que ya no requería<br />

tratamiento exclusivo a nivel intrahospitalario, y<br />

<strong>de</strong> ser necesario, se transformaban en periodos <strong>de</strong> corta<br />

estadía (5).<br />

El origen <strong>de</strong> este enfoque <strong>de</strong> atención a la salud mental<br />

se basa en la reflexión sobre la asistencia que ofrecen los<br />

hospitales psiquiátricos a los enfermos mentales. Según<br />

afirma Goffman (1961), “con el paso <strong>de</strong>l tiempo, éstos se<br />

han convertido en centros don<strong>de</strong> los pacientes que permanecen<br />

en ellos se convierten en enfermos crónicos, en<br />

muchas ocasiones fruto <strong>de</strong> la incapacidad producida por<br />

su enfermedad, combinada con los efectos <strong>de</strong> la institucionalización”<br />

(5).<br />

En 1966, el mo<strong>de</strong>lo que <strong>de</strong>sarrolla Caplan para la “psiquiatría<br />

comunitaria”, incluye los conceptos <strong>de</strong> prevención,<br />

poblaciones en riesgo y teoría <strong>de</strong> la crisis (5).<br />

Freu<strong>de</strong>nberg (1976) hace referencia a que la “psiquiatría<br />

comunitaria, se enfoca en que las personas con trastornos<br />

psiquiátricos pue<strong>de</strong>n ser más efectivamente ayudadas<br />

cuando viven con sus familias y amigos y son mantenidos<br />

por la sociedad en general. Teniendo como objetivo proporcionar<br />

prevención, tratamiento y servicios <strong>de</strong> rehabilitación<br />

para un sector comunitario” (5).<br />

En 1977, Serban <strong>de</strong>scribe la “psiquiatría comunitaria”<br />

incorporando tres nuevos aspectos: “primero como un<br />

movimiento social; segundo como una estrategia <strong>de</strong> suministro<br />

<strong>de</strong> servicios que enfatiza la accesibilidad a los<br />

mismos y la globalidad <strong>de</strong> la responsabilidad sobre las necesida<strong>de</strong>s<br />

<strong>de</strong> salud mental <strong>de</strong> toda la población; y tercero,<br />

pone el énfasis en los trastornos psiquiátricos mayores y<br />

en el tratamiento fuera <strong>de</strong> las instituciones” (5).<br />

La <strong>de</strong>finición <strong>de</strong> “psiquiatría comunitaria” abarca una serie<br />

<strong>de</strong> conceptos e incorpora una nueva concepción <strong>de</strong> la<br />

salud (Bennett y Freeman, 1991). Términos como prevención,<br />

territorialización, continuidad <strong>de</strong> cuidados, <strong>de</strong>sinstitucionalización,<br />

equipos interdisciplinarios, configuran<br />

este enfoque <strong>de</strong> atención a la salud mental (5).<br />

En Chile, alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> 1968 se <strong>de</strong>scriben las primeras experiencias<br />

<strong>de</strong> Programas Intracomunitarios apoyados por<br />

una Unidad <strong>de</strong> Psiquiatría o <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> (6), intentando<br />

reemplazar el mo<strong>de</strong>lo asilar en varias partes <strong>de</strong>l país. Entre<br />

las experiencias en Psiquiatría Comunitaria que se inician<br />

entonces (7), se <strong>de</strong>stacan las li<strong>de</strong>radas por el Dr. Luis<br />

Weinstein, el Dr. Juan Marconi (8) y el Dr. Martín Cor<strong>de</strong>ro.<br />

El Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano Oriente (SSMO), ha<br />

implementado el Mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> y Psiquiatría<br />

Comunitaria priorizando el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> programas, logrando<br />

importantes avances en cobertura <strong>de</strong> atención<br />

<strong>de</strong> la población beneficiaria (9, 10). El nuevo Mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong><br />

Atención sustituye el protagonismo <strong>de</strong>l hospital como lugar<br />

básico <strong>de</strong>l tratamiento, aunque no niega su utilidad<br />

en <strong>de</strong>terminadas situaciones. A<strong>de</strong>más promueve la creación<br />

<strong>de</strong> los Equipos <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> y Psiquiatría Ambulatoria<br />

que son las unida<strong>de</strong>s clave, alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> los cuales se<br />

<strong>de</strong>sarrolla la asistencia psiquiátrica, y con los que siempre<br />

existirá una conexión hacia/<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Hospitalización<br />

<strong>de</strong> Corta Estadía (11).<br />

Dado el progresivo movimiento <strong>de</strong> los recursos asistenciales<br />

en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> (12), <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los hospitales psiquiátricos<br />

hacia los centros comunitarios, el médico psiquiatra,<br />

144<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 143 - 149


en su <strong>de</strong>sempeño (13, 14), se ve enfrentado a cambios<br />

importantes, <strong>de</strong>biéndose adaptar a las nuevas ten<strong>de</strong>ncias<br />

<strong>de</strong> estructuras y funcionamiento <strong>de</strong> la red asistencial, caracterizadas<br />

por:<br />

• Trabajo integrado a equipo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Interdisciplinario<br />

• Trabajo en ambiente nuevo y menos jerarquizado que<br />

la atención cerrada.<br />

• Métodos diagnósticos y terapéuticos contemporáneos,<br />

con equilibrio entre los ejes biológico, psicológico y<br />

social (15).<br />

Tal como lo presentan los antece<strong>de</strong>ntes mencionados,<br />

el rol <strong>de</strong>l psiquiatra a nivel comunitario es diferente al<br />

<strong>de</strong>sempeñado tradicionalmente. En nuestro país no existe<br />

una <strong>de</strong>scripción estandarizada <strong>de</strong> este rol <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l Equipo<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, a pesar que se espera que cumplan a<br />

cabalidad tanto su labor clínica como otras tareas relacionadas<br />

a su capacidad técnica.<br />

El Plan Nacional <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> y Psiquiatría enuncia guías<br />

<strong>de</strong> atención para el Equipo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> (16). Sin embargo,<br />

la <strong>de</strong>scripción operacional <strong>de</strong> las acciones a realizar por<br />

el médico psiquiatra, a nivel comunitario, no son claramente<br />

explicitadas. Este hecho toma relevancia al existir patologías<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> actualmente incorporadas al sistema<br />

GES, cuyas prestaciones <strong>de</strong>ben ser realizadas por éste.<br />

Experiencias internacionales han <strong>de</strong>lineado lo que podríamos<br />

establecer como un perfil <strong>de</strong>l médico psiquiatra,<br />

<strong>de</strong>terminando que el quehacer práctico <strong>de</strong> la Psiquiatría<br />

no concluye en su ámbito médico-clínico, sino que abarca<br />

tanto aspectos relacionados con la prevención <strong>de</strong> la patología<br />

mental, como con la rehabilitación y reinserción social<br />

<strong>de</strong>l enfermo, para lo que se ayuda y complementa con<br />

otras disciplinas afines. Es por eso que la consi<strong>de</strong>ración<br />

<strong>de</strong> la Psiquiatría pue<strong>de</strong> ser ampliada, tanto en la teoría<br />

como en la práctica, <strong>de</strong> acuerdo al mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> atención<br />

comunitaria que consi<strong>de</strong>ra la promoción y fomento <strong>de</strong> la<br />

salud mental, protección, prevención y control <strong>de</strong> las enfermeda<strong>de</strong>s<br />

mentales a nivel comunitario (14).<br />

El <strong>de</strong>sarrollo en la red <strong>de</strong> servicios psiquiátricos en los últimos<br />

años, explicita la necesidad <strong>de</strong>l carácter cada vez más<br />

143 - 149, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 145<br />

ROL DEL MÉDICO PSIQUIATRA SEGÚN EQUIPOS DE SALUD MENTAL COMUNITARIA S.S.M.O.<br />

plural <strong>de</strong> la formación <strong>de</strong>l médico psiquiatra. Esta formación<br />

<strong>de</strong>biese lograr un equilibrio en el papel <strong>de</strong>sempeñado<br />

tradicionalmente en los servicios hospitalarios y el nuevo<br />

papel requerido en los servicios comunitarios, tanto en su<br />

actividad docente como asistencial (17). A juicio <strong>de</strong> los autores,<br />

el psiquiatra es el médico especialista con amplios<br />

conocimientos teóricos y prácticos en el diagnóstico y<br />

tratamiento, <strong>de</strong> personas que sufren trastornos mentales.<br />

Por lo tanto, el médico psiquiatra <strong>de</strong>be ser capaz, a nivel<br />

comunitario, <strong>de</strong> complementar sus tareas médicoclínicas,<br />

con fines ligados a la promoción <strong>de</strong> la salud<br />

mental, psicoeducación y evaluación <strong>de</strong> los resultados<br />

<strong>de</strong> los programas comunitarios, integrando acciones <strong>de</strong><br />

programación, coordinación y capacitación <strong>de</strong>l equipo<br />

interdisciplinario <strong>de</strong> salud mental, entre otras funciones<br />

a realizar (18).<br />

El lograr i<strong>de</strong>ntificar las acciones que realiza el médico psiquiatra<br />

(“rol real”) y conocer las expectativas que tiene el<br />

equipo <strong>de</strong> salud frente a su <strong>de</strong>sempeño (“rol <strong>de</strong>seado”)<br />

permitiría potenciar y favorecer el funcionamiento exitoso<br />

<strong>de</strong>l equipo <strong>de</strong> salud mental y sus resultados. Por otra<br />

parte, el conocer las competencias necesarias <strong>de</strong>l médico<br />

psiquiatra, valoradas para un buen <strong>de</strong>sempeño al interior<br />

<strong>de</strong>l equipo <strong>de</strong> salud mental comunitario, permitiría crear<br />

nuevos programas <strong>de</strong> formación que faciliten su rol.<br />

Investigación<br />

De acuerdo al planteamiento anterior, surge el interés por<br />

realizar un estudio a fin <strong>de</strong> explorar la percepción <strong>de</strong> los<br />

distintos profesionales <strong>de</strong>l área <strong>de</strong> salud mental comunitaria,<br />

acerca <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sempeño <strong>de</strong>l rol real y <strong>de</strong>l rol <strong>de</strong>seado<br />

<strong>de</strong>l médico psiquiatra y sus competencias para el buen<br />

ejercicio <strong>de</strong> su profesión.<br />

Para cumplir el propósito anteriormente mencionado, se<br />

establecen los siguientes objetivos:<br />

• I<strong>de</strong>ntificar el rol real <strong>de</strong>l médico psiquiatra en su ejercicio<br />

profesional.<br />

• Conocer las expectativas <strong>de</strong>l rol <strong>de</strong>l médico psiquiatra<br />

según el equipo <strong>de</strong> salud mental comunitario.


• I<strong>de</strong>ntificar las competencias <strong>de</strong>l médico psiquiatra valoradas<br />

por el equipo <strong>de</strong> salud mental comunitario.<br />

Con el fin <strong>de</strong> lograr estos objetivos, se <strong>de</strong>sarrollaron entrevistas<br />

con preguntas abiertas y directrices sobre el foco <strong>de</strong><br />

estudio, a distintos equipos <strong>de</strong> salud mental pertenecientes<br />

a la red <strong>de</strong> atención <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano<br />

Oriente. Esta muestra correspon<strong>de</strong> a 86 profesionales<br />

<strong>de</strong> 7 Centros <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Familiar (CESFAM), 7 Centros <strong>de</strong><br />

<strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Comunitarios (COSAM), 2 Centros <strong>de</strong> Atención<br />

Ambulatoria y 2 Centros <strong>de</strong> Atención Cerrada. La in-<br />

Gráfico Nº1<br />

Rol Real Médico Psiquiatra<br />

% <strong>de</strong> respuestas <strong>de</strong> profesionales<br />

100<br />

90<br />

80<br />

70<br />

60<br />

50<br />

40<br />

30<br />

20<br />

10<br />

0<br />

COSAM y<br />

Atención<br />

Ambulatoria<br />

vestigación se <strong>de</strong>sarrolló durante el periodo comprendido<br />

entre los años 2008 -<strong>2009</strong>.<br />

Se encontraron 2 perfiles que <strong>de</strong>scriben el rol real <strong>de</strong>l<br />

médico psiquiatra según los equipos <strong>de</strong> salud mental. El<br />

primero correspon<strong>de</strong> a un <strong>de</strong>sempeño mayoritariamente<br />

clínico y se <strong>de</strong>sarrolla en los COSAM y centros <strong>de</strong> atención<br />

ambulatoria, siendo <strong>de</strong>scrito en la atención cerrada<br />

como la única función <strong>de</strong>sempeñada por el médico<br />

psiquiatra. Dentro <strong>de</strong> los CESFAM prevalece el rol <strong>de</strong><br />

interconsultor.<br />

CESFAM Atención<br />

Cerrada<br />

146<br />

Clínico<br />

Interconsultor<br />

Otros<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 143 - 149


Dentro <strong>de</strong> lo esperado por el equipo <strong>de</strong> salud mental, se<br />

encuentran diferentes funciones a <strong>de</strong>sempeñar por el<br />

médico psiquiatra. A fin explicativo, las clasificaremos<br />

en tres categorías <strong>de</strong> acuerdo al ámbito que abordan. Se<br />

Gráfico Nº2<br />

Rol Deseado Médico Psiquiatra<br />

% <strong>de</strong> respuestas <strong>de</strong> profesionales<br />

100<br />

90<br />

80<br />

70<br />

60<br />

50<br />

40<br />

30<br />

20<br />

10<br />

0<br />

Lí<strong>de</strong>r<br />

Integrante y Formador<br />

Relaciones Humanas<br />

Equipo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong><br />

En la primera categoría, trabajo con el Equipo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong>,<br />

se <strong>de</strong>scriben como roles esperados: Lí<strong>de</strong>r, Integrador y<br />

Formador <strong>de</strong> Equipos <strong>de</strong> Trabajo; Precursor y Mantenedor<br />

<strong>de</strong> buenas Relaciones Humanas. En el trabajo <strong>de</strong><br />

los Programas <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Comunitaria, el equipo<br />

espera que el médico psiquiatra sea un activo gestor,<br />

ejecutor y evaluador <strong>de</strong> los programas y a la misma<br />

vez, se convierta en un agente que aporte innovación a<br />

éstos. Finalmente <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> su trabajo con la Comunidad,<br />

se <strong>de</strong>sea que el médico psiquiatra como primera función<br />

realice Psicoeducación <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> su entorno, tanto a<br />

pacientes como familias, sea Comprometido en su labor<br />

y por último se Desempeñe <strong>de</strong> acuerdo al contexto<br />

en el cual se <strong>de</strong>senvuelve, es <strong>de</strong>cir, su modo <strong>de</strong> actuar<br />

143 - 149, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 147<br />

ROL DEL MÉDICO PSIQUIATRA SEGÚN EQUIPOS DE SALUD MENTAL COMUNITARIA S.S.M.O.<br />

<strong>de</strong>staca el médico psiquiatra y su trabajo con el Equipo<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong>; su trabajo en los Programas <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> y su trabajo<br />

con la Comunidad.<br />

Activo, Gestor,<br />

Ejec. y Eval.<br />

Innovación y<br />

Continuidad<br />

Psicoeducación<br />

Comprometido<br />

Desempeño acor<strong>de</strong><br />

a contexto<br />

Programas Comunidad<br />

y conducirse sean acor<strong>de</strong>s al ambiente y cultura <strong>de</strong> la<br />

comunidad. Cabe <strong>de</strong>stacar que no existen diferencias entre<br />

estas expectativas <strong>de</strong> rol, entre los diferentes centros<br />

<strong>de</strong> salud, excluyendo los centros <strong>de</strong> atención cerrada en<br />

don<strong>de</strong> solo se espera que el médico psiquiatra se <strong>de</strong>sempeñe<br />

clínicamente.<br />

Al observar los resultados que dan cuenta <strong>de</strong>l tercer objetivo<br />

<strong>de</strong>l estudio, i<strong>de</strong>ntificar las competencias <strong>de</strong>l médico<br />

psiquiatra valoradas por equipo <strong>de</strong> salud mental comunitario,<br />

se pue<strong>de</strong>n reconocer 6 aptitu<strong>de</strong>s que <strong>de</strong>ben ser<br />

<strong>de</strong>sarrolladas por el médico psiquiatra para lograr un<br />

<strong>de</strong>sempeño óptimo en su trabajo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un equipo<br />

<strong>de</strong> salud mental.


Gráfico Nº3<br />

Competencias <strong>de</strong>l Médico Psiquiatra<br />

% <strong>de</strong> respuestas <strong>de</strong> profesionales<br />

35<br />

30<br />

25<br />

20<br />

15<br />

10<br />

5<br />

0<br />

Competencias <strong>de</strong>l Médico Psiquiatra<br />

esperadas por el Equipo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

La Empatía, Atención y Comprensión son consi<strong>de</strong>radas<br />

las competencias mayormente valoradas por el equipo<br />

<strong>de</strong> salud, siguiéndole en or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> preferencia, el Conocimiento,<br />

Seguridad y Profesionalismo; Respeto y Trato<br />

Amable a Pacientes y Equipo <strong>de</strong> <strong>Salud</strong>; Interés en el Paciente,<br />

Programa y Comunidad; Buena Práctica Profesional<br />

(incluyendo puntualidad, claridad y eficiencia en sus<br />

funciones) y finalmente el equipo <strong>de</strong> salud valora como<br />

competencia importante en el <strong>de</strong>sempeño <strong>de</strong>l médico<br />

psiquiatra la Confiabilidad.<br />

Conclusiones<br />

Conforme a los resultados obtenidos en el estudio presentado,<br />

se pue<strong>de</strong> afirmar que no existen diferencias entre las<br />

expectativas <strong>de</strong>l equipo <strong>de</strong> salud mental en relación al rol<br />

<strong>de</strong>seado <strong>de</strong>l médico psiquiatra, tanto en el nivel primario<br />

como secundario <strong>de</strong> atención en salud.<br />

Como elemento esencial valorado por los equipos <strong>de</strong><br />

salud mental comunitaria, se encuentran las competen-<br />

cias personales <strong>de</strong>l médico psiquiatra, que son percibidas<br />

como un complemento <strong>de</strong> los conocimientos técnicos especializados<br />

<strong>de</strong>l profesional, para una atención efectiva y<br />

eficaz <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sempeño <strong>de</strong> su función, al interior <strong>de</strong>l<br />

equipo <strong>de</strong> salud mental y trabajo comunitario.<br />

Por lo tanto, es imprescindible incorporar lo señalado<br />

por el equipo <strong>de</strong> salud mental comunitaria, en relación<br />

al rol <strong>de</strong>seado <strong>de</strong>l médico psiquiatra: buenas prácticas<br />

a nivel <strong>de</strong>l Equipo <strong>de</strong> Trabajo, el Desarrollo <strong>de</strong> Programas<br />

y la Atención a la Comunidad, para el logro <strong>de</strong> una<br />

"Clínica Integral".<br />

Se pue<strong>de</strong> concluir <strong>de</strong>l estudio que, conforme a los cambios<br />

que se han presentado a nivel <strong>de</strong> <strong>de</strong>l sistema <strong>de</strong> servicios<br />

<strong>de</strong> salud, se pue<strong>de</strong> potenciar el rol <strong>de</strong>l psiquiatra a través<br />

<strong>de</strong>l <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> prestaciones que incluyan trabajo con el<br />

equipo <strong>de</strong> salud mental, los programas que se imparten; y<br />

participación activa en la comunidad.<br />

148<br />

Empatía, atención y comprensión (29%)<br />

Conocimiento, seguridad y<br />

profesionalismo (20%)<br />

Respeto y trato amable hacia pacientes<br />

y equipos <strong>de</strong> salud (17%)<br />

Interés en el paciente, programa<br />

y comunidad (13%)<br />

Buena práctica profesional (puntualidad,<br />

claridad, eficiencia) (12%)<br />

Confiabilidad y honestidad (6%)<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 143 - 149


Bibliografia<br />

1. Evaristo P. Manual <strong>de</strong>l operador en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Comunitaria:<br />

Ministerio para la Inversión Extranjera y la Colaboración<br />

Económica; Italia: Ministerio <strong>de</strong> Relaciones Exteriores. 2000.<br />

2. Barrientos G. Las alternativas <strong>de</strong> la Psiquiatría. Enfoques para<br />

un <strong>de</strong>bate en <strong>Salud</strong> mental. Colectivo <strong>de</strong> autores. 2000.<br />

3. Dorner K. Faces of work in the psychiatry yesterday-todaytomorrow.<br />

Psychiatr Prax. 1999; 26 (Suppl 1) : 53-6<br />

4. Rodríguez Pérez L., La Reorientación <strong>de</strong> la Psiquiatría a la Comunidad:<br />

un salto cualitativo. Interpsiquis 1; Mayo, 2010<br />

5. Moreno Küstner, Berta, Análisis <strong>de</strong> patrones <strong>de</strong> utilización <strong>de</strong><br />

servicios en pacientes esquizofrénicos. Tesis Univ. <strong>de</strong> Granada.<br />

Departamento <strong>de</strong> Medicina legal, Toxicología y Psiquiatría.<br />

2002<br />

6. Torres, R. Experiencias <strong>de</strong> Psiquiatría Comunitaria en Chile.<br />

Universidad <strong>de</strong> Santiago. Servicio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Metropolitano Sur.<br />

2001<br />

7. Bascuñan, H., Correa, N., Fuentealba, H. Centros Comunitarios<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> Familiar. Rev. Psiquiatría VIII: 954-955, 1991.<br />

8. Marconi, J. Política <strong>de</strong>l Alcohol en Chile: Análisis Crítico y Propuesta<br />

<strong>de</strong> una Nueva Política. Acta Psiquiát. Psicol. Am. Lat.<br />

44, 4: 322-329, 1998.<br />

9. Sepúlveda, R. Una reflexión sobre la Organización <strong>de</strong> los Servicios<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> y Psiquiatría en Chile. Cuad.Méd. Soc.<br />

XXXIX; 3 -4: 16-21, 1998.<br />

10. Riquelme, R., Vicente, B., Olivos, P., Pemjean, A., Vidal, M., Cor<strong>de</strong>ro,<br />

M., Cabrera, J., Weinstein, L., Thumala, E. Mesa Redonda,<br />

143 - 149, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 149<br />

ROL DEL MÉDICO PSIQUIATRA SEGÚN EQUIPOS DE SALUD MENTAL COMUNITARIA S.S.M.O.<br />

“Psiquiatría Comunitaria en la Década <strong>de</strong>l ´90”. Rev. Psiquiatría<br />

VIII: 970 -981, 1991<br />

11. Ministerio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong>. Mo<strong>de</strong>lo Integral <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> con enfoque<br />

Familiar y Comunitario, contexto sinérgico para la profundización<br />

<strong>de</strong> la <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> y Psiquiatría Comunitaria. Presentación<br />

<strong>de</strong> la Dra. Francisca Toro, Docente Nacional <strong>de</strong>l Taller.<br />

12. Desviat, M.Vigencia <strong>de</strong>l Mo<strong>de</strong>lo Comunitario en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>:<br />

Teoría y Práctica. Rev GPU. 2007. 1:88-96.<br />

13. Olivos, P. El Trabajo <strong>de</strong>l Psiquiatra en Consulta Privada en Santiago<br />

<strong>de</strong> Chile. En “Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>”. Eds. Santiago.<br />

Ediciones <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> 2008; Jul.-Dic.<br />

3,4:71-88.<br />

14. Rojas, G., González, M., Fisher, C. El rol <strong>de</strong>l Psiquiátra en la Comunidad.<br />

Rev. Psiquiát. Clínica 28, 2: 178-189, 1991.<br />

15. Minoletti, A., Zaccaria, A., Plan Nacional <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> en<br />

Chile: 10 años <strong>de</strong> Experiencia. Rev. Panam <strong>Salud</strong> Publica/Pan<br />

AM J Public Health 2008. 18 (4/5).<br />

16. García, A., De las Cuevas, C., El Rol <strong>de</strong>l Especialista en Psiquiatría.<br />

Psiquiatría Pública.1998. Vol.10. Núm. 5. Septiembre- Octubre.<br />

17. Barrientos, M., Sepúlveda, R. Trabajo en <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> en Contextos<br />

Comunitarios: I<strong>de</strong>as para la Sinergia entre la Perspectiva<br />

Clínica y la Perspectiva Comunitaria. Cuad. Méd. Soc. XXX-<br />

VII, 2:21-30, 1996.<br />

18. Associació Ressi<strong>de</strong>nt Psiquiatria Catalunya. Psquiatría. Planes<br />

<strong>de</strong> Formación. 2010. Disponible en :<br />

www.pulso.com/resi<strong>de</strong>ntes/planes.httm<br />

“TRASTORNOS DE PERSONALIDAD:<br />

HACIA UNA MIRADA INTEGRAL"<br />

Esta obra fue concebida como una instancia <strong>de</strong> ayuda y consulta para los profesionales <strong>de</strong><br />

la salud mental y quienes <strong>de</strong>seen compren<strong>de</strong>r, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una mirada integral, los trastornos <strong>de</strong><br />

personalidad y su tratamiento. Este trabajo posee el gran mérito <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r reunir a cincuenta<br />

y cinco profesionales <strong>de</strong> primer nivel, entre médicos y psicólogos, quienes a través <strong>de</strong> una<br />

mirada integradora y multidimensional, <strong>de</strong>sarrollan distintos tópicos que permiten no sólo<br />

una aproximación al tema <strong>de</strong> los trastornos <strong>de</strong> personalidad, sino también una mayor<br />

comprensión y actualización.<br />

Número <strong>de</strong> páginas: 892.


Resumen<br />

Octavio Peralta Varela (1902 - 1998)<br />

Una Vida Realizada<br />

El Dr. Octavio Peralta como psiquiatra trabajó en el Manicomio<br />

Nacional <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1932 hasta su jubilación en 1968,<br />

cuando ocupaba el cargo <strong>de</strong> Jefe <strong>de</strong> Servicio. Paralelamente<br />

ejerció la docencia en las Escuelas <strong>de</strong> Medicina<br />

y Enfermería <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Chile. Asimismo trabajó<br />

en su consulta y fue Director <strong>de</strong> dos Clínicas Privadas.<br />

Ayudante <strong>de</strong>l Profesor Dr. Arturo Vivado, colaboró en la<br />

implementación <strong>de</strong> las nuevas terapias biológicas aparecidas<br />

a mediados <strong>de</strong>l siglo XX .De carácter tranquilo, sereno<br />

y optimista, resistió los embates y dificulta<strong>de</strong>s que<br />

le tocó vivir. Cofundador <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> <strong>de</strong> Neurología,<br />

Psiquiatría y Neurocirugía, le correspondió dirigirla en<br />

más <strong>de</strong> una ocasión. Hombre amante <strong>de</strong> la clínica escribió<br />

varios artículos sobre distintas enfermeda<strong>de</strong>s.<br />

Palabras clave: Octavio Peralta; psiquiatra; biografía.<br />

Octavio Peralta Varela<br />

(1902 - 1998), a Fulfilled Life<br />

Abstract<br />

Dr. Octavio Peralta was a psychiatrist who worked at<br />

National Madhouse since 1932 until his retirement in<br />

1968. In this moment his position was Service Chief. At<br />

the same time he was professor at Medicine School and<br />

Nurse School in the University of Chile. He had private<br />

medical office and was Director of two private psychiatric<br />

clinics. At the University, he was the assistant of Professor<br />

Arturo Vivado, with whom he collaborated in the introduction<br />

of the new biologic therapies in the middle of<br />

the XX Century. He was a quiet and optimistic person, and<br />

resisted calmly the reverses that he had to endure in his<br />

Enrique Escobar Miguel 1<br />

life. He is one of the cofoun<strong>de</strong>rs of the Chilean Neurology,<br />

Psychiatry and Neurosurgery Society, of which he<br />

was more than once the Presi<strong>de</strong>nt. He was fond of Clinic<br />

Psychiatry and wrote several articles oriented to different<br />

illnesses / diseases.<br />

Key Words: Octavio Peralta; psychiatrist; biography.<br />

Desarrollo<br />

El Dr. Octavio Peralta nació en La Serena en 1902, ciudad<br />

don<strong>de</strong> cursó sus estudios básicos y secundarios. En 1925<br />

se trasladó a Santiago para estudiar medicina en la Universidad<br />

<strong>de</strong> Chile, trabajando en las noches para ayudarse<br />

económicamente. Des<strong>de</strong> 1929 todavía como alumno<br />

fue contratado como resi<strong>de</strong>nte interno en el Manicomio<br />

Nacional. Recibido en 1932 con la memoria “Dificultad<br />

diagnóstica en los Estados Paranoí<strong>de</strong>os” se contrató en<br />

ese mismo Hospital empezando su carrera funcionaria<br />

y académica.<br />

Octavio Peralta fue alumno <strong>de</strong> los Profesores Joaquín Luco<br />

y Oscar Fontecilla, ambos con una trayectoria académica<br />

<strong>de</strong>stacada, el primero enfatizando lo neurológico y el<br />

segundo -discípulo <strong>de</strong>l anterior- netamente psiquiátrico.<br />

El Dr. Peralta se casó con la Sra. Sara Miro, Asistente Social<br />

<strong>de</strong>l Manicomio. Tuvieron dos hijos, uno <strong>de</strong> ellos médico<br />

gastroenterólogo (5).<br />

Su carrera profesional se inició en 1932 como médico<br />

asistencial, alcanzando el cargo <strong>de</strong> Jefe <strong>de</strong> Clínica y posteriormente<br />

<strong>de</strong> Jefe <strong>de</strong>l Servicio C en 1949, jubilándose<br />

en 1968 . En varias ocasiones fue director subrogante <strong>de</strong>l<br />

Establecimiento (6).<br />

1. Médico Psiquiatra, ex Jefe <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> Urgencia <strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico "Dr. José Horwitz Barak". E mail: doctorescobar123@hotmail.com<br />

150<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 150 - 152


Entretanto el Dr. Peralta comenzaba a distinguirse como<br />

docente <strong>de</strong>dicado a sus alumnos. En efecto, como ayudante<br />

<strong>de</strong>l Dr Vivado fue ascendiendo en la carrera académica<br />

alcanzando el cargo <strong>de</strong> Profesor Auxiliar. Al fallecer<br />

el Profesor Vivado en 1949 fue nombrado Profesor Suplente<br />

<strong>de</strong> la Cátedra <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong><br />

Chile. Sin embargo el concurso para el cargo <strong>de</strong> titular lo<br />

ganó el psiquiatra Dr. Ignacio Matte Blanco. Dado su interés<br />

por la docencia y sus méritos fue nombrado Profesor<br />

Titular <strong>de</strong> la Escuela <strong>de</strong> Enfermería <strong>de</strong> la Universidad<br />

<strong>de</strong> Chile.<br />

Junto a su actividad como psiquiatra y profesor, ejercía<br />

en su consulta particular y a<strong>de</strong>más fue director <strong>de</strong> las<br />

Clínicas <strong>de</strong>l Carmen y Santa Marta. El Dr. Peralta sufrió<br />

un grave acci<strong>de</strong>nte que le ocasionó acortamiento <strong>de</strong> una<br />

pierna y la necesidad <strong>de</strong> usar muletas, hecho que elaboró<br />

con un tesón y humildad ejemplares. Interesado en perfeccionarse<br />

residió dos años en EEUU en el Johns Hopkins<br />

Hospital y el Medical Center <strong>de</strong> New Cork, volviendo<br />

a Chile a continuar su carrera profesional (4 ).<br />

De este modo Peralta tuvo a su disposición el conocimiento<br />

clásico y contemporáneo <strong>de</strong> esa época, si bien no<br />

compartió el interés por el psicoanálisis que empezaba a<br />

mostrarse en el medio nacional promovido por el profesor<br />

Ignacio Matte Blanco.<br />

Así preparado <strong>de</strong>dicó su atención, año tras año, al cuidado<br />

<strong>de</strong> los enfermos, al mismo tiempo que interesado en<br />

el crecimiento <strong>de</strong> la especialidad publicó varios trabajos,<br />

algunos <strong>de</strong> los cuales comentaremos más a<strong>de</strong>lante. Por<br />

otra parte, participó en 1932 en la fundación <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong><br />

<strong>de</strong> Neurología, Psiquiatría y Medicina Legal antecesora<br />

<strong>de</strong> la actual <strong>Sociedad</strong> <strong>de</strong> Neurología, Psiquiatría y<br />

Neurocirugía (SONEPSYN).<br />

Años más tar<strong>de</strong> fue elegido Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la Sonepsyn, en<br />

cuya calidad participó en el comité organizador <strong>de</strong>l Centenario<br />

<strong>de</strong> la Casa <strong>de</strong> Orates en 1952. Justamente por ausencia<br />

<strong>de</strong>l Director titular le correspondió presidir como<br />

Director subrogante las distintas activida<strong>de</strong>s programadas<br />

en relación con aquel aniversario. A propósito <strong>de</strong> esa<br />

celebración el Dr. Peralta, dando muestra <strong>de</strong> su carácter<br />

150 - 152, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 151<br />

OCTAVIO PERALTA VARELA (1902 - 1998) UNA VIDA REALIZADA<br />

solidario, donó la mitad <strong>de</strong>l premio <strong>de</strong> la lotería que entonces<br />

ganó en ayuda al financiamiento <strong>de</strong>l Centenario.<br />

De carácter tranquilo, sociable, franco, activo, pragmático<br />

y estudioso, tenía amigos <strong>de</strong> todas las i<strong>de</strong>ologías políticas<br />

y religiosas (4). Por su parte su hijo médico escribió<br />

que su padre “respetó al genero humano sin mostrar<br />

un gesto hiriente hacia nadie, perdonando las ofensas<br />

en aras <strong>de</strong> una atmósfera <strong>de</strong> tranquilidad en el contacto<br />

cotidiano”. También su hijo <strong>de</strong>stacó el estilo silencioso <strong>de</strong><br />

su padre, sin ser parco,”… sino más bien apropiado para<br />

escuchar con respeto a sus enfermos. Silencio que significaba<br />

paz, comprensión, reflexión, y aceptación” (4).<br />

Al Dr Peralta le correspondió vivir en sus primeros años<br />

<strong>de</strong> ejercicio profesional un período duro <strong>de</strong> la psiquiatría,<br />

por el nihilismo terapéutico imperante, panorama que<br />

cambiaría drásticamente (6). En efecto, abandonada la<br />

Malarioterapia por la Penicilina así como el Absceso <strong>de</strong><br />

Fijación, por su ineficacia y maltrato, le correspondió vivir<br />

la revolución terapéutica con la sucesiva implementación<br />

<strong>de</strong> los conocidos tratamientos biológicos. Como anécdota<br />

valga recordar que importó una máquina <strong>de</strong> electroshock<br />

que prestó al Hospital, pues éste carecía <strong>de</strong> ese recurso.<br />

El otro tratamiento que conoció y practicó fue la cura<br />

<strong>de</strong> Sakel, es <strong>de</strong>cir, la provocación <strong>de</strong> coma hipoglicémico,<br />

con lo que se observaba una mejoría en los enfermos esquizofrénicos,<br />

introducido por el Profesor Arturo Vivado;<br />

Naturalmente que este tratamiento fue abandonado con<br />

la aparición <strong>de</strong> los psicofármacos a comienzos <strong>de</strong> los años<br />

cincuenta y que conoció muy bien (2).<br />

El Dr. Peralta se preocupó <strong>de</strong> la atención psiquiátrica y<br />

publicó especialmente trabajos <strong>de</strong> índole clínica y también<br />

algunos <strong>de</strong> los cuales comentaremos a continuación<br />

(1, 3, 7, 8, 9,10, 11). Así tenemos que con el profesor Manuel<br />

Francisco Beca, <strong>de</strong> la Universidad Católica, y el Dr.<br />

Sergio Rodríguez , <strong>de</strong> la Clínica Psiquiátrica Universitaria,<br />

escribieron un trabajo sobre la Enfermedad <strong>de</strong> Alzheimer,<br />

don<strong>de</strong> revisan su patología y su falta <strong>de</strong> tratamiento, hecho<br />

este último aun vigente (1). Por otra parte, junto al<br />

Dr. Gustavo Mujica, su colaborador en el Servicio C, en el<br />

trabajo “Clínica Comparada <strong>de</strong> las Esquizofrenias” analizan<br />

las diferencias diagnósticas <strong>de</strong> distintas presentaciones<br />

patológicas parecidas a la Esquizofrenia Procesal (8),


entre ellas las Esquizofrenias Reaccionales, aludiendo a<br />

síndromes con algunas características <strong>de</strong> la Esquizofrenia<br />

básica pero que surgen “a consecuencia <strong>de</strong> insultos<br />

ambientales ya sean psicológicos u orgánicos”. Actualmente<br />

ese cuadro correspon<strong>de</strong>ría a un Trastorno Esquizofreniforme<br />

o a un Trastorno Psicótico Breve; otros cuadro<br />

con los cuales confundirse son <strong>de</strong> origen somático,<br />

como encefalitis u otras infecciones <strong>de</strong>l neuroeje, o como<br />

reacción en la adolescencia, a propósito <strong>de</strong> las llamadas<br />

Crisis Puberales. También distingue a la Parafrenia, que<br />

pue<strong>de</strong> confundirse con una Esquizofrenia Paranoi<strong>de</strong>. Por<br />

otra parte recuerda las diferencia con Psicosis Maníaco<br />

Depresivas, Alcoholismo, Psicosis Puerperal, etc.. Los<br />

autores realizan un análisis <strong>de</strong> los síntomas utilizando<br />

el método fenomenológico y aplicando los criterios <strong>de</strong><br />

Kraepelin y Schnei<strong>de</strong>r.<br />

El trabajo “Análisis Critico a la Nomenclatura y Clasificación<br />

<strong>de</strong> la A.P.A.”, <strong>de</strong> 1933, llama la atención porque el autor<br />

realiza una discusión <strong>de</strong>tallada <strong>de</strong> los cuadros <strong>de</strong>scritos<br />

y va exponiendo puntos <strong>de</strong> vista más mo<strong>de</strong>rnos para<br />

su época en la década <strong>de</strong> los sesenta <strong>de</strong>l siglo pasado. Hay<br />

momentos que recuerdan las críticas que hoy día se hacen<br />

al DSM IV, que por lo <strong>de</strong>más tiene como antece<strong>de</strong>nte a la<br />

clasificación <strong>de</strong> la APA (9).<br />

El trabajo <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong>l Cardiazol para provocar convulsiones<br />

- pionero <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ese punto <strong>de</strong> vista - nos fue imposible<br />

encontrarlo pues no estaba en las bibliotecas médicas<br />

y la Biblioteca Nacional estaba cerrada a causa <strong>de</strong>l terre-<br />

Bibliografia<br />

1. Beca M, Peralta O y Rodríguez S. “Enfermedad <strong>de</strong> Alzheimer”<br />

Rev Chil Neuropsiquiat; N° 2, 3 y 4 : 417-420 1968.<br />

2. Escobar E. “Los Tratamientos Biológicos en el Manicomio Nacional<br />

Chileno (1894 – 1959)” An. hist. med. 19 (2) <strong>2009</strong><br />

3. Hortwiz J, Catan L, Peralta O, Pasmanik J y Otero J. “Nuevas terapias<br />

en psiquiatría“ Rev. Chil. Neuropsiquiat., N° 2 : 36-48, 1957<br />

4. Obituario Dr Octavio Peralta.<br />

5. Peralta O. Comunicación Personal, 1992.<br />

6. Peralta O. Comunicación Personal, 1994.<br />

7. Peralta O. y cols. “Organización <strong>de</strong>l Hospital Psiquiátrico y Asistencia<br />

<strong>de</strong> los Alienados” Actas <strong>de</strong> la 9° Jornadas Nacionales <strong>de</strong><br />

Psiquiatría N° 1 y 2: 16 - 24, 1958.<br />

moto. En todo caso al comparar posteriormente el uso <strong>de</strong>l<br />

Electro Schock fue aclarándose que este último era más<br />

eficaz y con menos efectos perjudiciales (11).<br />

Por último vamos a señalar el primer trabajo sobre el uso<br />

<strong>de</strong> los nuevos medicamentos neurolépticos buscando<br />

comprobar la utilidad <strong>de</strong>scritas en la literatura. Aludimos<br />

a la Reserpina y a la Clorpromazina, estudiados por los<br />

equipos <strong>de</strong> los Servicios “A” y “C” <strong>de</strong>l Manicomio, dirigidos<br />

por José Horwitz y Peralta, respectivamente (8). Ya al<br />

comienzo hacen notar la escasez <strong>de</strong> esos medicamentos<br />

en el Hospital por lo que advierten que sus conclusiones<br />

<strong>de</strong>ben evaluarse con precaución. En todo caso lograron<br />

juntar 108 pacientes, constituyendo tres grupos: uno<br />

con Reserpina, otro con Clorpromazina y uno más don<strong>de</strong><br />

usaron ambas drogas. Describen resultados semejantes a<br />

los <strong>de</strong> la literatura extranjera: ambas son tranquilizantes<br />

especialmente recomendados para apagar la agitación<br />

psicomotora <strong>de</strong> cualquier origen, pues se utilizaron los<br />

medicamentos en una variada gama <strong>de</strong> enfermos, tales<br />

como Esquizofrénicos, Maníacos - Depresivos, Psicosis Alcohólicas,<br />

etc.<br />

Los autores no señalan efectos especifícos antipsicóticos,<br />

con excepción <strong>de</strong>l Delirium Tremens, don<strong>de</strong> apreciaron<br />

ese beneficio especialmente con la Clorpromazina, a pesar<br />

<strong>de</strong> que el grupo <strong>de</strong> la Clorpromazina fue la cuarta parte<br />

<strong>de</strong> los con Reserpina por la escasez <strong>de</strong>l medicamento Sin<br />

embargo establecen que <strong>de</strong>l total <strong>de</strong> pacientes un 51%<br />

salió mejorado y fueron dados <strong>de</strong> alta.<br />

8. Peralta O y Mujica G. “Clínica Comparada <strong>de</strong> la Esquizofrenia”<br />

Rev. Chil. Neuropsiquiat N°1 y 2: 16 - 24 ,1958. Congreso<br />

Internacional <strong>de</strong> Neuropsiquiatría, Aniversario <strong>de</strong>l Centenario<br />

<strong>de</strong>l Manicomio Nacional, 1952.<br />

9. Peralta O. “Análisis Crítico a la Nomenclatura y Clasificación<br />

<strong>de</strong> la A.P.A. <strong>de</strong> 1933” Rev. Chil. Neuropsiquiat; N° 2: 41 - 44,<br />

1966.<br />

10. Peralta O. “Depresión Involutiva Relaciones Etiopatogénicas”<br />

Rev. Chil. Neuropsiquiat., N° 1: 49 - 54, 1965.<br />

11. Peralta O “La convulso terapia en la Esquizofrenia utilizando<br />

Cardiazol” Rev.d e Psiquiatría y Disciplinas Conexas; Año III<br />

Vol.9: 1-11, 1938.<br />

152<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 150 - 152


Resumen<br />

153 - 162, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 153<br />

TRANSEXUALISMO, UN TRASTORNO DE LA IDENTIDAD SEXUAL<br />

Transexualismo<br />

Un Trastorno <strong>de</strong> la I<strong>de</strong>ntidad Sexual<br />

La frecuencia <strong>de</strong> consulta <strong>de</strong> personas que solicitan evaluación<br />

psiquiátrica y psicológica para cambio <strong>de</strong> sexo,<br />

ha aumentado. Se <strong>de</strong>be, pensamos, a que los resultados<br />

<strong>de</strong> la cirugía son cada vez mejores. La sociedad también<br />

ha contribuido a tolerar este trastorno. Los medios <strong>de</strong><br />

información han hecho también lo suyo.<br />

A lo anterior, le sumamos un mejor enfoque <strong>de</strong> la sociedad,<br />

que tolera y ve con mejores ojos a estas personas.<br />

Ello ha motivado a escribir y dar a conocer las experiencias<br />

que ocurren en Chile, con el afán <strong>de</strong> colaborar a un<br />

mejor entendimiento <strong>de</strong>l futuro <strong>de</strong> las personas aquejadas<br />

<strong>de</strong> este trastorno <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual.<br />

Palabras clave: transexualismo; i<strong>de</strong>ntidad sexual;<br />

i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> género.<br />

Transexualism<br />

A Disor<strong>de</strong>r of Sexual I<strong>de</strong>ntity<br />

Abstract<br />

The frequency of consultation of people seeking psychiatric<br />

and psychological evaluation for sex change, has increased.<br />

It means we think that the results of surgery are getting<br />

better. The society has also contributed to tolerate this<br />

condition. The media have also been contributed for him.<br />

To this we add a better society approach, that tolerates<br />

and better judges to these people. This has led, who works<br />

on the subject, write and disseminate the experiences<br />

Mario Quijada Hernán<strong>de</strong>z 1<br />

that occur in Chile, with the aim of collaborating with a<br />

better un<strong>de</strong>rstanding and future of people suffering from<br />

the disor<strong>de</strong>r of sexual i<strong>de</strong>ntity.<br />

Palabras clave: transexualism; sex i<strong>de</strong>ntity; gen<strong>de</strong>r i<strong>de</strong>ntity.<br />

Introducción<br />

La Clasificación Internacional <strong>de</strong> Enfermeda<strong>de</strong>s, en su<br />

décima edición (CIE-10) <strong>de</strong>fine tres trastornos diferentes:<br />

Trastorno <strong>de</strong> la I<strong>de</strong>ntidad Sexual en la infancia, Transvestismo<br />

<strong>de</strong> Rol Doble y Transexualismo; en el DSM-IV, estas<br />

tres entida<strong>de</strong>s están comprendidas <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> una sola<br />

categoría, <strong>de</strong>nominada Trastorno <strong>de</strong> la I<strong>de</strong>ntidad Sexual.<br />

Se consi<strong>de</strong>ran trastornos <strong>de</strong> la <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> en la medida<br />

en que se producen patrones <strong>de</strong> comportamiento que<br />

conllevan un sufrimiento significativo y una gran <strong>de</strong>sventaja<br />

adaptativa.<br />

Es cada vez más frecuente en Chile la presencia <strong>de</strong> personas<br />

que acu<strong>de</strong>n a centros <strong>de</strong> salud a solicitar ayuda por este<br />

trastorno. La razón que se esgrime es una disconformidad<br />

con el sexo anatómico y el <strong>de</strong>seo imperioso <strong>de</strong> ser cambiado<br />

al sexo opuesto por intermedio <strong>de</strong> la cirugía. Por lo general,<br />

ya se encuentran ingiriendo preparados hormonales<br />

<strong>de</strong>l sexo contrario -y al que creen pertenecer- Han aparecido<br />

algunos caracteres sexuales secundarios esperados y,<br />

como una forma <strong>de</strong> lograr completamente lo que <strong>de</strong>sean,<br />

acu<strong>de</strong>n para ser examinados por un médico psiquiatra,<br />

para que les confirme el diagnóstico y <strong>de</strong> esa forma, solicitar<br />

el cambio quirúrgico <strong>de</strong>finitivo al sexo opuesto.<br />

Se piensa que <strong>de</strong>be concordar en una persona el aspecto<br />

físico, con su forma <strong>de</strong> atracción sexual. Así, quien posea<br />

1. Médico Psiquiatra <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> Urgencia <strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico "Dr. José Horwitz Barak".<br />

Pastpresi<strong>de</strong>nt <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> .<br />

Nota <strong>de</strong>l Editor: las citas <strong>de</strong> autores sin respaldo directo en la bibliografía son extraídas <strong>de</strong> otras obras <strong>de</strong> ésta.


caracteres sexuales masculinos, <strong>de</strong>berá sentir atracción<br />

por quien tenga caracteres sexuales femeninos y viceversa.<br />

Esto no siempre es así. La persona que presenta un Trastorno<br />

<strong>de</strong> la I<strong>de</strong>ntidad Sexual, posee un sexo psicológico<br />

opuesto al somático. Como pensará que la naturaleza “se<br />

ha equivocado” con él (o ella) tratará por todos los medios<br />

<strong>de</strong> hacer concordar su sexo psicológico con el sexo<br />

físico. Hará todo lo posible para adaptar su apariencia al<br />

sexo opuesto para hacer <strong>de</strong>saparecer el conflicto que esto<br />

le provoca.<br />

Quienes <strong>de</strong>sconocen el problema, pue<strong>de</strong>n tener confusiones<br />

al respecto. Piensan que se trata <strong>de</strong> un homosexual,<br />

por su aspecto, vestido o vestida con ropas <strong>de</strong>l sexo opuesto,<br />

adoptando una conducta concordante con la vestimenta.<br />

Otras veces se piensa que se trata <strong>de</strong> un transvestista.<br />

No, sólo se ha vestido así para tratar <strong>de</strong> concordar<br />

su sexo psicológico con el somático. O sea, el transexual<br />

no es un homosexual, aunque podría tener una conducta<br />

sexual homosexual. No podría ser tildado tampoco como<br />

enfermo con un trastorno <strong>de</strong>l pensamiento, como poseedor<br />

<strong>de</strong> una psicosis, porque su convicción no está <strong>de</strong>ntro<br />

<strong>de</strong> sintomatología <strong>de</strong>lirante. Al hablar <strong>de</strong> este cuadro, nos<br />

referimos a un trastorno <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual.<br />

La i<strong>de</strong>ntidad sexual es la percepción y autoconciencia que<br />

tiene el individuo <strong>de</strong> ser varón o mujer. En la mayor parte<br />

<strong>de</strong> los casos, este proceso aparece en la primera infancia.<br />

Con mucho menos frecuencia, los pacientes perciben una<br />

congruencia inicial entre su i<strong>de</strong>ntidad sexual y su cuerpo<br />

durante muchos años, incluso hasta ser adultos, antes<br />

<strong>de</strong> adquirir la noción <strong>de</strong> que pertenecen al sexo opuesto.<br />

Cuando existe este período <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo normal inicial,<br />

se suele <strong>de</strong>cir que los pacientes pa<strong>de</strong>cen una transexualidad<br />

“secundaria” que se distingue <strong>de</strong> la “primaria” <strong>de</strong><br />

inicio precoz.<br />

La transexualidad secundaria pue<strong>de</strong> aparecer en la adolescencia<br />

o en adultos jóvenes y suele producirse tras un<br />

suceso traumático grave. La intensidad <strong>de</strong> la convicción<br />

que tienen estos pacientes <strong>de</strong> “haber nacido en un cuerpo<br />

equivocado” pue<strong>de</strong> oscilar en el tiempo, no así en los casos<br />

<strong>de</strong> transexualismo primario don<strong>de</strong> la convicción permanece<br />

estable e inamovible <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los primeros años <strong>de</strong> vida.<br />

El rol sexual es el comportamiento <strong>de</strong>l individuo que lo<br />

i<strong>de</strong>ntifica ante los otros como hombre o como mujer. La<br />

orientación sexual es la atracción erótica que siente un<br />

individuo (Por ej. excitación por los hombres, las mujeres,<br />

los niños, los objetos, etc.)<br />

En el caso <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual, ésta se <strong>de</strong>sarrolla en los<br />

primeros años <strong>de</strong> vida y se establece cercana a la edad<br />

<strong>de</strong> los tres años. Una vez que ésta se ha establecido, es<br />

muy resistente al cambio. Se <strong>de</strong>sconocen los factores que<br />

influyen en su <strong>de</strong>sarrollo. Aun no han sido <strong>de</strong>scubiertos.<br />

Diversas teorías tratan <strong>de</strong> respon<strong>de</strong>r a esta interrogante.<br />

Es posible que existan factores biológicos que influyen en<br />

el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual, aun no <strong>de</strong>scubiertos.<br />

En algunos casos, autores han sugerido que los factores<br />

biológicos pue<strong>de</strong>n anular la asignación sexual en el<br />

momento <strong>de</strong>l nacimiento. En la teoría psicoanalítica, la<br />

i<strong>de</strong>ntidad sexual se <strong>de</strong>sarrolla como parte <strong>de</strong> la formación<br />

general <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad, en la fase <strong>de</strong> separación e individuación<br />

y <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> en gran medida <strong>de</strong> la calidad <strong>de</strong> la<br />

relación materna filial. Posteriormente, en la fase edípica,<br />

se <strong>de</strong>termina el rol y la orientación sexuales.<br />

En lo somático po<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>cir que la i<strong>de</strong>ntidad sexual es<br />

el conjunto <strong>de</strong> las características sexuales biológicas <strong>de</strong><br />

una persona: Cromosomas, órganos genitales externos,<br />

órganos genitales internos, composición hormonal, gónadas,<br />

y características sexuales secundarias. En el <strong>de</strong>sarrollo<br />

normal forman un padrón coherente, <strong>de</strong> manera que la<br />

persona no abriga dudas respecto a su sexo. La i<strong>de</strong>ntidad<br />

<strong>de</strong> género es el sentido <strong>de</strong> femineidad o masculinidad <strong>de</strong><br />

la persona.<br />

Los estudios embriológicos mo<strong>de</strong>rnos han <strong>de</strong>mostrado<br />

que todos los embriones mamíferos genéticamente macho<br />

y genéticamente hembra, son anatómicamente hembras<br />

durante las primeras fases <strong>de</strong> su vida fetal. La diferencia<br />

entre macho y hembra es el resultado <strong>de</strong> la acción <strong>de</strong>l<br />

andrógeno fetal; esa acción se inicia aproximadamente a<br />

la sexta semana <strong>de</strong> vida embrionaria y concluye al final<br />

<strong>de</strong>l tercer mes. Estudios recientes han explicado los efectos<br />

<strong>de</strong> las hormonas fetales en la masculinización o feminización<br />

<strong>de</strong>l cerebro. La estimulación hormonal prenatal<br />

<strong>de</strong>l cerebro es necesaria en los animales para sus conductas<br />

reproductoras y copulativas masculinas y femeninas.<br />

154<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 153 - 162


Durante este período el feto también es vulnerable a la<br />

administración exógena <strong>de</strong> andrógeno. Por ejemplo, si la<br />

madre preñada recibe suficiente andrógeno exógeno, un<br />

feto femenino que tiene ovarios pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollar órganos<br />

genitales externos similares a los masculinos (4).<br />

Historia<br />

Fue a partir <strong>de</strong> la publicación <strong>de</strong>l DSM – IV que <strong>de</strong>sapareció<br />

el término Transexualismo, para incluir esta anormalidad<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> los trastornos <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual. Ello<br />

permite que ya no sea consi<strong>de</strong>rado como una entidad<br />

separada, sino que estaría <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un espectro mayor.<br />

El término Transexualismo sigue siendo consi<strong>de</strong>rado y es<br />

el que en muchos casos se prefiere, sobre todo en los<br />

casos adultos.<br />

Este trastorno es conocido <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el año 1960, a raíz <strong>de</strong> la<br />

<strong>de</strong>scripción <strong>de</strong> un grupo <strong>de</strong> niños que poseían conductas<br />

compatibles con lo que más tar<strong>de</strong> se <strong>de</strong>scribió como un<br />

Trastorno <strong>de</strong> la I<strong>de</strong>ntidad Sexual Infantil. En 1974 fue publicado<br />

un estudio que se refería a varios casos <strong>de</strong> varones<br />

con este conflicto. En base a éstos y otros estudios, a partir<br />

<strong>de</strong> 1980 se incorporó este diagnóstico al DSM.<br />

Debe mencionarse a<strong>de</strong>más que en el año 1966 Harry<br />

Benjamín, pionero en el tema, introdujo la cirugía modificadora<br />

<strong>de</strong>l sexo en el Hospital John Hopkins. Ello legitimó<br />

la práctica.<br />

Diagnóstico<br />

criterios DSM – IV (F64 x)(1)<br />

Se exigen las siguientes características para formular el<br />

diagnóstico:<br />

a. I<strong>de</strong>ntificación acusada y persistente con el sexo opuesto<br />

(no sólo el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> obtener las supuestas ventajas<br />

relacionadas con las costumbres culturales).<br />

En los niños el trastorno se manifiesta por cuatro o más<br />

<strong>de</strong> los siguientes rasgos:<br />

1. Deseos repetidos <strong>de</strong> ser, o insistencia en que uno es,<br />

<strong>de</strong>l otro sexo.<br />

153 - 162, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 155<br />

TRANSEXUALISMO, UN TRASTORNO DE LA IDENTIDAD SEXUAL<br />

2. En los niños, preferencia por el transvestismo, o por<br />

simular vestimenta femenina; en las niñas, insistencia<br />

en llevar solamente ropa masculina.<br />

3. Preferencia marcada y persistente por el papel <strong>de</strong>l sexo<br />

opuesto o fantasías referentes a pertenecer al otro sexo.<br />

4. Deseo intenso <strong>de</strong> participar en los juegos y en los pasatiempos<br />

propios <strong>de</strong>l otro sexo.<br />

5. Preferencia marcada por compañeros <strong>de</strong>l otro sexo.<br />

En los adolescentes y adultos la alteración se manifiesta<br />

por síntomas tales como un <strong>de</strong>seo firme <strong>de</strong> pertenecer al<br />

otro sexo, ser consi<strong>de</strong>rado como <strong>de</strong>l otro sexo, un <strong>de</strong>seo<br />

<strong>de</strong> vivir y ser tratado como <strong>de</strong>l otro sexo o la convicción<br />

<strong>de</strong> experimentar las reacciones y las sensaciones típicas<br />

<strong>de</strong>l otro sexo.<br />

b. Malestar persistente con el propio sexo o sentimiento<br />

<strong>de</strong> ina<strong>de</strong>cuación con su rol.<br />

En los niños la alteración se manifiesta por cualquiera<br />

<strong>de</strong> los siguientes rasgos: sentimientos <strong>de</strong> que<br />

el pene o los testículos son horribles o van a <strong>de</strong>saparecer,<br />

<strong>de</strong> que sería mejor no tener pene o aversión<br />

hacia los juegos violentos y rechazo a los juguetes,<br />

juegos y activida<strong>de</strong>s propias <strong>de</strong> los niños;<br />

en las niñas, rechazo a orinar en posición sentada,<br />

sentimientos <strong>de</strong> tener o <strong>de</strong> presentar en el futuro<br />

un pene, <strong>de</strong> no querer poseer pechos ni tener la<br />

regla o aversión acentuada hacia la ropa femenina.<br />

En los adolescentes y en los adultos, la alteración<br />

se manifiesta por síntomas como preocupación por<br />

eliminar las características sexuales primarias y secundarias,<br />

(por ejemplo, pedir tratamiento hormonal,<br />

quirúrgico u otros procedimientos para modificar físicamente<br />

los rasgos sexuales y <strong>de</strong> esta manera parecerse<br />

al otro sexo) o creer que se ha nacido con el<br />

sexo equivocado.<br />

c. La alteración no coexiste con una enfermedad intersexual.<br />

d. La alteración provoca malestar clínicamente significativo<br />

o <strong>de</strong>terioro social, laboral o <strong>de</strong> otras áreas<br />

importantes <strong>de</strong> la actividad <strong>de</strong>l individuo.


Recomienda especificar si (para individuos sexualmente<br />

maduros):<br />

Con atracción sexual por los varones.<br />

Con atracción sexual por las mujeres.<br />

Con atracción sexual por ambos sexos.<br />

Sin atracción sexual.<br />

Por lo tanto, en el grupo <strong>de</strong> los trastornos <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad<br />

sexual, en la subclase transexualismo, las características<br />

esenciales para el diagnóstico son: “un sentimiento persistente<br />

<strong>de</strong> malestar e ina<strong>de</strong>cuación respecto al propio<br />

sexo anatómico, y un <strong>de</strong>seo persistente <strong>de</strong> <strong>de</strong>shacerse<br />

<strong>de</strong> los genitales y <strong>de</strong> vivir como una persona <strong>de</strong>l<br />

otro sexo”.<br />

Diagnóstico<br />

criterios CIE - 10 (F64.0)(2)<br />

Transexualismo<br />

a. Deseo <strong>de</strong> vivir y ser aceptado como un miembro <strong>de</strong>l<br />

sexo opuesto, por lo general, acompañado por el <strong>de</strong>seo<br />

<strong>de</strong> modificar, mediante métodos hormonales o quirúrgicos,<br />

el propio cuerpo para hacerlo lo más congruentemente<br />

posible con el género preferido<br />

b. Presencia <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad transexual persistentemente al<br />

menos por 2 años.<br />

c. No se trata <strong>de</strong> un síntoma <strong>de</strong> otro trastorno mental, tal<br />

como esquizofrenia, ni secundario con una anomalía<br />

cromosómica.<br />

Epi<strong>de</strong>miología<br />

Si bien es cierto esta anormalidad está presente <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

la infancia, don<strong>de</strong> se hace más notoria es en la edad<br />

adulta, ya que es cuando el (o la) paciente, se preocupa<br />

<strong>de</strong> corregir esto que ellos llaman una "equivocación" <strong>de</strong><br />

la naturaleza.<br />

En la infancia, las consultas tienen lugar durante los primeros<br />

años <strong>de</strong> escolaridad. En adultos, aunque las cifras<br />

son dudosas, se estima, por estudios provenientes <strong>de</strong>l Reino<br />

Unido, Suecia y Australia, que sería 1:50.000, siendo<br />

más frecuente en los hombres. Se da una proporción en<br />

relación con mujeres <strong>de</strong> 3 a 4:1.<br />

Se ha visto en Chile, al igual que en el resto <strong>de</strong>l mundo,<br />

que la mayor parte <strong>de</strong> los consultantes son varones biológicamente.<br />

Su atracción sexual es predominantemente<br />

homosexual. Aunque se han visto casos en que, o el<br />

paciente tiene poco o ningún interés por tener relaciones<br />

sexuales, existen algunos que mantienen relaciones<br />

lésbicas al cambiar a sexo femenino. En las personas <strong>de</strong><br />

sexo femenino que <strong>de</strong>sean ser cambiados a hombre quirúrgicamente,<br />

también se han visto algunos hiposexuales<br />

o asexuales.<br />

En la evaluación, tanto psiquiátrica como psicológica,<br />

efectuada con la finalidad <strong>de</strong> ser cambiados <strong>de</strong> sexo, se ha<br />

visto en un pequeño porcentaje (aunque cercano a cifras<br />

en personas sin este trastorno) <strong>de</strong> consultantes con patología<br />

psiquiátrica concomitantes como Trastorno Límite<br />

<strong>de</strong> la Personalidad, Personalidad Antisocial o Narcisista,<br />

Abuso <strong>de</strong> Drogas, Depresión y conductas auto<strong>de</strong>structivas<br />

o suicidas. (personas con personalida<strong>de</strong>s muy anormales,<br />

al serles contra indicada la intervención quirúrgica, se ha<br />

visto que amenazan y agre<strong>de</strong>n a los equipos tratantes en<br />

forma verbal, luego <strong>de</strong> haberlos examinado y no haber<br />

recomendado la intervención).<br />

Etiología<br />

Como ya se mencionó, no existen explicaciones claras<br />

para el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l trastorno <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual. Se<br />

piensa que está influida por factores psicosociales que<br />

ocurren durante los primeros años <strong>de</strong> vida. Habrá factores<br />

biológicos posibles que predispongan al individuo a pa<strong>de</strong>cer<br />

dicha anormalidad.<br />

Existen diversas teorías. Todas, <strong>de</strong> una forma u otra, contribuyen<br />

a explicar el cuadro. Si bien es cierto en todos<br />

estos aspectos existen elementos que apoyan la etiología,<br />

se citarán sólo los más importantes.<br />

156<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 153 - 162


Con respecto a las influencias hormonales, cabe <strong>de</strong>stacar<br />

la acción virilizante <strong>de</strong> la hiperplasia suprarrenal congénita.<br />

En niñas con esta patología se advierte producción<br />

excesiva <strong>de</strong> andrógenos <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la vida intrauterina. Tienen<br />

aspecto más varonil. Por otra parte, la exposición prenatal<br />

en varones a las hormonas femeninas, afectaría la<br />

expresión <strong>de</strong>l comportamiento masculino convencional.<br />

Los niveles anormales <strong>de</strong> hormonas sexuales antes <strong>de</strong><br />

nacer y sus efectos podrían modificar las experiencias<br />

sociales y conductuales tempranas, sobre todo en activida<strong>de</strong>s<br />

que se refieren a los juegos y preferencias atribuibles<br />

a su sexo.<br />

Algunos investigadores han observado niveles bajos <strong>de</strong><br />

testosterona en hombres transexuales y niveles anormalmente<br />

elevados en mujeres transexuales.<br />

Por otro lado, se ha visto que el tamaño <strong>de</strong> un área <strong>de</strong>l<br />

sector anterior <strong>de</strong>l tálamo, podría ser importante en la<br />

orientación sexual. También se han notificado casos <strong>de</strong><br />

individuos que presentan un trastorno en la i<strong>de</strong>ntidad<br />

sexual <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l inicio <strong>de</strong> crisis convulsiva originada<br />

en el lóbulo temporal y que remiten con el uso <strong>de</strong> fármacos<br />

anticonvulsivantes. Estudios mediante electroencefalograma<br />

en hombres y mujeres transexuales han<br />

<strong>de</strong>mostrado que entre el 30 y 70% <strong>de</strong> los casos, el trazado<br />

electroencefalográfico presentaba anomalías.<br />

Teorías Psicosociales. Si bien existen varias, se sugiere<br />

que la simbiosis madre-hijo exagerada, con un contacto<br />

constante, podría generar comportamiento femenino<br />

en el niño. Este hecho se atribuye a la imposibilidad <strong>de</strong><br />

diferenciarse <strong>de</strong> la madre <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista psicológico.<br />

En el caso <strong>de</strong> niñas, no habrían recibido el afecto<br />

materno.<br />

Y sin duda, una <strong>de</strong> las teorías más importantes es la psicoanalítica.<br />

Robert Stoller, preten<strong>de</strong> explicar la etiología<br />

<strong>de</strong> este cuadro en un grupo específico <strong>de</strong> varones biológicos<br />

a los que llama varones verda<strong>de</strong>ros y que según el<br />

DSM-IV son portadores <strong>de</strong> un trastorno <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad<br />

sexual y que sienten atracción por varones.<br />

153 - 162, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 157<br />

TRANSEXUALISMO, UN TRASTORNO DE LA IDENTIDAD SEXUAL<br />

Dentro <strong>de</strong> las teorías psicoanalíticas, este cuadro sería<br />

un Trastorno trans generacional. La teoría se inicia con<br />

la abuela <strong>de</strong>l futuro transexual, que trata a su hija con<br />

frialdad y que no alienta ni ejemplifica la feminidad. El<br />

abuelo tiene un vínculo más estrecho con su hija, pero<br />

promueve la masculinidad. Por lo tanto, esa mujer <strong>de</strong>sarrolla<br />

un trastorno leve <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad sexual. Durante<br />

la adolescencia abandona sus <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> convertirse en<br />

varón y asume la fachada heterosexual. No obstante, a<br />

nivel inconsciente sigue envidiando el pene.<br />

Con el tiempo, la madre <strong>de</strong>l futuro transexual se casa<br />

con un individuo pasivo y distante, cuya presencia en el<br />

hogar es física, pero ausente psciológicmente. El proceso<br />

patógeno final empieza a operar cuando la mujer tiene<br />

un hijo varón, al que consi<strong>de</strong>ra muy bello. El niño, que<br />

representa su falo feminizado, cumple con su anhelo <strong>de</strong><br />

tener un pene. La interacción madre-hijo, una simbiosis<br />

dichosa en las palabras <strong>de</strong> Stoller, que incluye un contacto<br />

corporal íntimo, excesivo y prolongado. La conducta<br />

<strong>de</strong> la madre traduce su necesidad <strong>de</strong> tratar al niño<br />

como una extensión <strong>de</strong> su propio cuerpo, exacerbando<br />

su narcisismo.<br />

Las experiencias transexuales iniciales producen compenetración<br />

exagerada con la madre e imprecisión <strong>de</strong> los<br />

límites <strong>de</strong>l yo. El varón transexual (THaM) nunca establece<br />

una relación heterosexual con la madre y, por lo<br />

tanto, se mantiene en una relación simbiótica con ésta,<br />

no <strong>de</strong>sarrollando en su totalidad el conflicto edípico, que<br />

aseguraría su rol heterosexual, i<strong>de</strong>ntificándose con el padre<br />

y compitiendo por la madre.<br />

Esto explicaría por qué el varón transexual no es capaz <strong>de</strong><br />

competir y se queda fijado en una relación <strong>de</strong>pendiente<br />

con sus parejas o con su madre.<br />

En el caso <strong>de</strong>l transexual mujer (TMaH), la niña transexual<br />

se i<strong>de</strong>ntifica con el padre y, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> este punto <strong>de</strong> vista,<br />

compite por el amor <strong>de</strong> la madre con el padre. Esto también<br />

se observa con los transexuales femeninos, que son<br />

competitivos y fálicos.


El diagnóstico y<br />

manifestaciones clínicas<br />

La persona que requiere cambio <strong>de</strong> sexo y concurre a solicitar<br />

evaluación, con frecuencia viene vestido o vestida <strong>de</strong><br />

la forma que <strong>de</strong>sea ser. Si viene con vestimenta femenina,<br />

por lo general es un hombre biológico. Sus ropas son llamativas,<br />

su aspecto no pasa <strong>de</strong>sapercibido y sus modales<br />

por lo general son amanerados. Algunos han adoptado<br />

un nombre <strong>de</strong>l otro sexo y les agrada ser llamados así.<br />

Sus caracteres sexuales secundarios, especialmente mamas,<br />

ca<strong>de</strong>ras, formas <strong>de</strong>l cuerpo, han sido notoriamente<br />

<strong>de</strong>stacados (por lo general <strong>de</strong> manera falsa por el uso <strong>de</strong><br />

sustancias o elementos exógenos). Si es mujer y <strong>de</strong>sea ser<br />

transformada en hombre, viene vestida como varón, corte<br />

<strong>de</strong> pelo como tal, generalmente con pantalones o blue<br />

jeans. Su voz enronquecida y a<strong>de</strong>manes <strong>de</strong> tinte masculino.<br />

En ocasiones tatuajes en los brazos preten<strong>de</strong>n exacerbar<br />

aún más el aspecto masculino, las mamas, si son<br />

prominentes, se han disimulado con una blusa amplia o<br />

con una faja que ro<strong>de</strong>a fuertemente el tórax.<br />

Estas personas rechazan roles y activida<strong>de</strong>s tradicionales<br />

asignadas a su sexo biológico. El <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> vivir como<br />

miembro <strong>de</strong>l sexo opuesto es intenso. Poseen un gran<br />

conflicto entre las sensaciones subjetivas <strong>de</strong> ser hombre o<br />

mujer. Ello les impi<strong>de</strong> disfrutar con plenitud las relaciones.<br />

La actividad sexual con el propio sexo, por lo general se<br />

encuentra restringida no queriendo que les vean o toquen<br />

los genitales.<br />

Sus características sexuales le <strong>de</strong>sagradan, le provocan<br />

aversión. En varones existen casos en que evitan lo más<br />

posible tocar su pene, anhelan tener hijos procreados en<br />

su vientre y la menstruación la consi<strong>de</strong>ran una característica<br />

femenina envidiable. Por lo general, al ir a orinar<br />

al baño, lo hacen sentados. Suelen usar ropa interior femenina.<br />

Se ha conocido casos en que transexuales físicamente<br />

masculinos se han seccionado el pene por sus<br />

propios medios.<br />

En las mujeres, la situación es opuesta. Usan fajas elásticas<br />

para disimular sus mamas e intentan aparecer con un<br />

tórax masculino.<br />

El proceso diagnóstico y terapéutico, i<strong>de</strong>almente <strong>de</strong>be<br />

contener los siguientes pasos:<br />

• Evaluación diagnóstica: Diagnóstico <strong>de</strong>l trastorno,<br />

diagnósticos diferenciales, comorbilidad, criterios <strong>de</strong><br />

elegibilidad y disposición.<br />

• Psicoterapia<br />

• Experiencia en la vida real<br />

• Terapia hormonal<br />

• Tratamiento quirúrgico.<br />

El objetivo es aportar elementos diagnósticos y terapéuticos<br />

en un sentido amplio, para favorecer la adaptación<br />

personal a largo plazo con el sexo con el que se produce<br />

la i<strong>de</strong>ntificación (7).<br />

Debe tenerse especial cuidado por la posibilidad <strong>de</strong><br />

cometer un error diagnóstico. La evaluación <strong>de</strong>be ser<br />

completa. No será posible la corrección quirúrgica si el<br />

sujeto es menor <strong>de</strong> edad. Tampoco lo será si posee un<br />

coeficiente intelectual límite o menor o si se plantea la<br />

sospecha <strong>de</strong> una psicosis y el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> cambiar <strong>de</strong> sexo<br />

es síntoma <strong>de</strong> su enfermedad. Obviamente que en este<br />

último caso, tratando la psicosis, <strong>de</strong>saparecerá la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong><br />

cambio <strong>de</strong> sexo.<br />

Los individuos con grave trastornos <strong>de</strong> la personalidad, en<br />

particular los poseedores <strong>de</strong> un Trastorno Límite, pue<strong>de</strong>n<br />

referir <strong>de</strong>seos pasajeros <strong>de</strong> cambiar <strong>de</strong> sexo, <strong>de</strong>bido en<br />

parte a su alteración global <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad durante los<br />

períodos <strong>de</strong> <strong>de</strong>scompensación.<br />

En ocasiones los homosexuales afeminados <strong>de</strong>sean cambiar<br />

<strong>de</strong> sexo para resultar más atractivos a los hombres. En<br />

el caso <strong>de</strong> los transvestistas, el uso <strong>de</strong> ropa femenina los<br />

excita. Esta característica sirve para aclarar el diagnóstico.<br />

Es recomendable contactarse con miembros <strong>de</strong> la familia<br />

para la evaluación clínica. Ello ayudará enormemente<br />

para esclarecer el diagnóstico. Los compañeros sexuales a<br />

veces también son <strong>de</strong> gran ayuda en estos casos.<br />

158<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 153 - 162


Comorbilidad<br />

Es necesario, mediante la entrevista clínica, o con el uso<br />

<strong>de</strong> tests, <strong>de</strong>scartar la presencia <strong>de</strong> otras patologías concomitantes.<br />

Los más relevantes <strong>de</strong>scritos en la bibliografía<br />

son: trastornos graves <strong>de</strong> la personalidad, <strong>de</strong>presivos, <strong>de</strong><br />

ansiedad, <strong>de</strong> la alimentación, <strong>de</strong> estrés post traumático,<br />

adaptativo, <strong>de</strong> aversión al sexo, fobia social, disfunciones<br />

sexuales y consumo anormal <strong>de</strong> drogas psicoactivas.<br />

Tratamiento<br />

Inicialmente <strong>de</strong>berá <strong>de</strong>terminarse si el tratamiento será<br />

hormonal o quirúrgico. Una vez que se ha <strong>de</strong>terminado el<br />

diagnóstico <strong>de</strong> transexualidad, el psiquiatra que ha efectuado<br />

la evaluación, apoyándose con la información entregada<br />

por el psicólogo especializado en el tema, emite un informe<br />

<strong>de</strong> recomendación para dar paso al tratamiento (8).<br />

En adultos, por lo general, la consulta es para solicitar<br />

transformación quirúrgica y darle las características anheladas<br />

a su cuerpo. La evaluación previa, tanto psiquiátrica<br />

como psicológica es indispensable. Ya hemos dicho<br />

que está contraindicado en presencia <strong>de</strong> una psicosis o un<br />

trastorno severo <strong>de</strong> la personalidad.<br />

En todos ellos, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> entregarles información, el primer<br />

paso es ayudarlos a reconciliarse con el papel que les<br />

tocó en suerte, o por lo menos, a apren<strong>de</strong>r a <strong>de</strong>sempeñarse<br />

en forma razonable.<br />

Estos pacientes, la mayoría con una disforia sexual se encuentran<br />

ingiriendo hormonas que han sido prescritas por<br />

un médico no psiquiatra (y en algunos casos, sin haber<br />

sido prescritas por médicos, sino a sugerencia <strong>de</strong> sus iguales).<br />

Es muy difícil que acepten un tratamiento distinto al<br />

cambio <strong>de</strong> sexo quirúrgico. Rechazan la psicoterapia con<br />

frecuencia <strong>de</strong>bido a que suponen que sería ésta una vía<br />

para <strong>de</strong>salentarlos <strong>de</strong> una cirugía. No obstante, la psicoterapia<br />

es necesaria, ya que la cirugía es un tratamiento<br />

irreversible y <strong>de</strong>berá ser preparado(a) para asumir su nuevo<br />

rol. La psicoterapia pue<strong>de</strong> tener diferentes propósitos,<br />

pero es importante para ayudar eficazmente en la adaptación<br />

post quirúrgica <strong>de</strong> estos pacientes.<br />

153 - 162, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 159<br />

TRANSEXUALISMO, UN TRASTORNO DE LA IDENTIDAD SEXUAL<br />

Otra cosa que <strong>de</strong>be mencionarse es consi<strong>de</strong>rar la contratransferencia<br />

<strong>de</strong>l terapeuta, ya que pue<strong>de</strong> afectar<br />

negativamente este proceso. Éste <strong>de</strong>be sentirse cómodo<br />

tratando a este tipo <strong>de</strong> personas, respecto <strong>de</strong> su propia<br />

i<strong>de</strong>ntidad sexual. Sus otros aspectos sexuales <strong>de</strong>ben ser lo<br />

suficientemente normales para no interferir en la terapia.<br />

Psicoterapia<br />

La psicoterapia no intenta curar el trastorno. El objetivo<br />

fundamental es lograr un estilo <strong>de</strong> vida estable a largo<br />

plazo en los ámbitos personal, familiar, laboral y social.<br />

El procedimiento técnico a utilizar <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>rá <strong>de</strong> cada<br />

caso en particular. En algunos pacientes, está indicado<br />

también el tratamiento farmacológico.<br />

Se ha recomendado la psicoterapia dinámica, aplicando<br />

similares parámetros a los utilizados con los pacientes con<br />

un trastorno límite <strong>de</strong> la personalidad.<br />

Experiencia <strong>de</strong> la vida real<br />

El nuevo rol que representará el (o la) paciente, ante los<br />

acontecimientos y circunstancias <strong>de</strong> la vida, es recomendable<br />

que sea practicado a lo menos un año antes <strong>de</strong>l tratamiento<br />

<strong>de</strong>finitivo. Deberá evaluarse cuidadosamente no<br />

solo los recursos y estrategias con los que cuenta el (o la)<br />

paciente para afrontar el estrés, sino también sus apoyos<br />

sociales, ya que esta experiencia conlleva consecuencias<br />

personales y sociales inmediatas y profundas. A veces esta<br />

prueba es fundamental para corroborar el diagnóstico o<br />

para modificarlo (7).<br />

Tratamiento hormonal<br />

El tratamiento médico sería otra opción, es efectuado<br />

cuando la disforia es grave e intratable. La mejor solución<br />

sería la reasignación sexual. El proceso se inicia con<br />

hormonoterapia, supervisada por un endocrinólogo. El<br />

objetivo <strong>de</strong>l tratamiento hormonal para la reasignación<br />

<strong>de</strong> sexo es adquirir las características sexuales <strong>de</strong>l sexo<br />

opuesto. Exceptuando el aparato genital externo y el fe-


notipo <strong>de</strong> éstos, las características secundarias adquiridas,<br />

<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>rán en mayor o menor medida <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong><br />

esteroi<strong>de</strong>s sexuales.<br />

El tratamiento se centra en dos aspectos: Eliminación <strong>de</strong><br />

características secundarias <strong>de</strong>l propio sexo e inducción <strong>de</strong><br />

los caracteres sexuales <strong>de</strong>l <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificación. Es a<strong>de</strong>cuado<br />

que sepan <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el principio, tanto el médico como el paciente,<br />

que los objetivos son difíciles <strong>de</strong> cumplir.<br />

En transexuales <strong>de</strong> hombre a mujer (THaM) no hay forma<br />

<strong>de</strong> modificar el esqueleto si se ha completado la maduración<br />

puberal, tampoco se observa una completa respuesta<br />

a la modificación <strong>de</strong> los caracteres sexuales secundarios<br />

(vello facial, voz, etc.).<br />

En los transexuales mujer a hombre (TMaH) es más sencillo<br />

obtener las características masculinas con el tratamiento,<br />

pero no es así tan fácil con la genitoplastia masculinizante.<br />

En los varones biológicos, se emplean dosis diarias <strong>de</strong> estrógenos<br />

orales. Se produce ginecomastia creciente durante<br />

alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> dos años. La magnitud final es muy variable.<br />

También se obtiene atrofia testicular y disminución<br />

<strong>de</strong> la libido y la posibilidad <strong>de</strong> erección. Con frecuencia se<br />

observa reducción <strong>de</strong>l vello facial y corporal. Se ha observado<br />

también disminución <strong>de</strong>l tamaño <strong>de</strong>l pene.<br />

Las mujeres biológicas reciben enantato o ciprionato <strong>de</strong><br />

testosterona intramuscular, quincenal o mensual. Como<br />

los efectos <strong>de</strong> la testosterona exógena son más acentuados<br />

que los <strong>de</strong> los estrógenos, el enfoque <strong>de</strong>be ser más<br />

conservador. A medida que las cuerdas vocales adquieren<br />

mayor grosor, el tono <strong>de</strong> voz se hace cada vez más masculino.<br />

El clítoris se agranda unas tres veces, en el transcurso<br />

máximo <strong>de</strong> un año. Este fenómeno se acompaña a menudo,<br />

<strong>de</strong> incremento <strong>de</strong> la líbido. Con frecuencia aparece<br />

pilosidad facial y se produce calvicie parcial. Las menstruaciones<br />

cesan en menos <strong>de</strong> cuatro meses.<br />

A los varones que se les aplican hormonas femeninas, <strong>de</strong>be<br />

consi<strong>de</strong>rarse que esto no está exento <strong>de</strong> complicaciones<br />

médicas y <strong>de</strong>be efectuarse un seguimiento minucioso <strong>de</strong><br />

los pacientes. Entre los efectos secundarios <strong>de</strong>l tratamiento<br />

con estrógenos se encuentra la trombosis venosa profunda,<br />

los trastornos trombo embólicos, el aumento <strong>de</strong> la presión<br />

arterial, el aumento <strong>de</strong> peso, el aumento a la tolerancia a<br />

la glucosa, las alteraciones hepáticas y la <strong>de</strong>presión.<br />

Los efectos secundarios <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong> la testosterona en las<br />

mujeres biológicas, son el acné, el e<strong>de</strong>ma secundario povocado<br />

por la retención <strong>de</strong> sodio y el <strong>de</strong>terioro <strong>de</strong> la función<br />

hepática.<br />

Tratamiento quirúrgico<br />

La otra estrategia es la quirúrgica, la que se efectúa en<br />

centros especializados, (la primera operación <strong>de</strong> cirugía<br />

transexual se realizó en 1930 a Elgar Jejenes, quien pasó a<br />

ser Lily Elbe, pero la <strong>de</strong> mayor resonancia en el mundo fue<br />

la <strong>de</strong> Christian Jorgesen, en 1952, en Dinamarca).<br />

La cirugía genital <strong>de</strong> reasignación <strong>de</strong> sexo, sólo será llevada<br />

a cabo una vez que la psiquiatría y la psicología asociada<br />

a lo endocrinológico emitan un informe en el que se<br />

testifique que el (o la) paciente cumple con los requisitos<br />

(diagnóstico <strong>de</strong> transexualismo, CI normal, sin patología<br />

concomitante, mayor <strong>de</strong> edad).<br />

En el caso <strong>de</strong> reasignación <strong>de</strong> sexo hombre a mujer<br />

(THaM), todo <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>rá <strong>de</strong> las características fenotípicas<br />

<strong>de</strong>l paciente para la vaginoplastia, por lo tanto la técnica<br />

quirúrgica a emplear <strong>de</strong>berá estar acor<strong>de</strong> a la situación<br />

clínica <strong>de</strong>l paciente.<br />

En el sexo opuesto, la cirugía <strong>de</strong> reasignación <strong>de</strong> sexo<br />

mujer a hombre (TMaH), se efectuará luego <strong>de</strong> iniciado el<br />

tratamiento hormonal y psicológico que <strong>de</strong>berá ser satisfactorio<br />

a lo menos durante seis meses.<br />

Las etapas y técnicas <strong>de</strong> la operación <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>rán <strong>de</strong> las<br />

características <strong>de</strong> la paciente (8). En estos casos es bueno<br />

referir que el resultado <strong>de</strong> la genitoplastía masculinizante<br />

rara vez interesa totalmente a la paciente, ya que lo<br />

que <strong>de</strong>sea es más que nada el rol masculino y el comportamiento<br />

sexual acor<strong>de</strong> con éste, sin <strong>de</strong>tenerse mayormente<br />

el las características y funcionalidad <strong>de</strong> su órgano<br />

genital operado.<br />

160<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 153 - 162


Resultados terapéuticos<br />

En general, todos los pacientes están conformes con la<br />

<strong>de</strong>cisión tomada. La cirugía ha facilitado la adaptación<br />

psicosocial. Los mayores beneficios los advierten en las<br />

relaciones interpersonales y las manifestaciones psicológicas<br />

y el estado <strong>de</strong> ánimo se normalizan. La vida social<br />

post cirugía en estos pacientes es normal.<br />

Consi<strong>de</strong>raciones finales<br />

El autor, luego <strong>de</strong> haber evaluado aproximadamente un<br />

centenar <strong>de</strong> pacientes transexuales, pue<strong>de</strong> concluir lo<br />

siguiente:<br />

a. La mayoría, más <strong>de</strong>l 90% son personas cuya personalidad<br />

es catalogada como normal luego <strong>de</strong> la evaluación<br />

psicológica. Los elementos anormales están presentes<br />

en la misma proporción que en grupos <strong>de</strong> personas sin<br />

este trastorno.<br />

b. La mayoría <strong>de</strong> los pacientes que concurren a solicitar<br />

evaluación para una posterior operación, obtiene una<br />

confirmación <strong>de</strong>l diagnóstico y logran su objetivo.<br />

c. Los pacientes que son rechazados, ya sea por una anormal<br />

personalidad, o por ser portadores <strong>de</strong> un coeficiente<br />

intelectual menor <strong>de</strong> lo normal, o por elementos clínicos<br />

importantes como una psicosis, han sido escasos.<br />

No más <strong>de</strong> un 5%.<br />

d. Han llegado a solicitar atención psiquiátrica para evaluación<br />

por eventual tratamiento quirúrgico, pacientes<br />

menores <strong>de</strong> 18 años, pero en número menor al 3%.<br />

e. La gran mayoría <strong>de</strong> los pacientes que solicitan cambio<br />

<strong>de</strong> sexo y se les confirmó el diagnóstico, fueron<br />

transexuales biológicamente hombres y <strong>de</strong>seaban ser<br />

transformados quirúrgicamente a mujer.<br />

f. Las mujeres biológicas que <strong>de</strong>searon ser transformadas<br />

quirúrgicamente en hombres fueron en una proporción<br />

notoriamente menor, una mujer por cada 3 a<br />

4 hombres.<br />

g. Prácticamente todos los transexuales que solicitaron<br />

operación mencionaron en la anamnesis, haber sufrido<br />

153 - 162, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 161<br />

TRANSEXUALISMO, UN TRASTORNO DE LA IDENTIDAD SEXUAL<br />

agresiones verbales, <strong>de</strong>scalificación, ofensas y vejaciones<br />

provocadas por terceros a raíz <strong>de</strong> su problema. Un<br />

gran porcentaje refiere haber recibido malos tratos por<br />

funcionarios públicos, cuando <strong>de</strong>bieron presentarse a<br />

votar o a efectuar trámites relacionados con el Servicio<br />

Militar, o durante su educación escolar.<br />

h. Fueron escasos los transexuales que en la anamnesis<br />

mencionaron haber realizado activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> prostitución<br />

como una forma <strong>de</strong> ganarse la vida. La mayoría<br />

realizó activida<strong>de</strong>s que tradicionalmente son asignadas<br />

al sexo que <strong>de</strong>sean pertenecer, como peluquería, ven<strong>de</strong>dores<br />

<strong>de</strong> cosméticos, etc.<br />

i. Todos los casos en que se conoció el resultado post<br />

operatorio, éste fue catalogado <strong>de</strong> exitoso, especialmente<br />

en la adaptación social. En las relaciones sexuales<br />

aquellas mujeres operadas para transformarse en<br />

hombres, el pene lo utilizan escasamente.<br />

j. La mayoría <strong>de</strong> los pacientes post operados cuando han<br />

querido obtener su documentación civil para <strong>de</strong>sempeñarse<br />

en el nuevo sexo tuvieron muchos problemas<br />

para obtener tal documentación. Se hace evi<strong>de</strong>nte una<br />

modificación en la legislación para consi<strong>de</strong>rar este tipo<br />

<strong>de</strong> problemática.<br />

k. La adaptación sociolaboral pasa <strong>de</strong> ser mala o regular,<br />

a buena. La mayoría <strong>de</strong> los pacientes luego <strong>de</strong> ser<br />

operados mejoran su actividad laboral y adquieren un<br />

trabajo estable.<br />

l. La totalidad <strong>de</strong> los pacientes evaluados se consi<strong>de</strong>ra<br />

heterosexual y cree que su pareja también lo es, por<br />

consi<strong>de</strong>rar que su sexo verda<strong>de</strong>ro es el que quieren ser.<br />

m. De todos lo pacientes operados, se conoce sólo un caso<br />

que falleció por suicidio al cabo <strong>de</strong> algunos años <strong>de</strong><br />

haber sido operado exitosamente. Las razones que motivaron<br />

la autoeliminación fueron <strong>de</strong>bidas a un cuadro<br />

<strong>de</strong>presivo severo asociado a problemática familiar distinta<br />

a su situación sexual, ya que se encontraba haciendo<br />

vida <strong>de</strong> pareja en condiciones aceptables.<br />

n. De los pacientes que fueron operados, todos han quedado<br />

satisfechos. Prácticamente ninguno <strong>de</strong> ellos, luego<br />

<strong>de</strong> ser evaluados, se muestra arrepentido <strong>de</strong> su <strong>de</strong>cisión.


Bibliografia<br />

1. American Psychiatric Ass. (1995). DSM – IV Manual Diagnóstico<br />

y Estadístico <strong>de</strong> los Trastornos <strong>Mental</strong>es. Ed. Masson,<br />

España.<br />

2. CIE-10 Clasificación Internacional <strong>de</strong> Enfermeda<strong>de</strong>s. Décima<br />

Revisión. OMS. 2003.<br />

3. Ey, Henry (1980). Tratado <strong>de</strong> Psiquiatría. Edit. Masson, España.<br />

4. Gramegna S., Gloria. Sexualidad Humana. Psiquiatría Clínica.<br />

A, Heerlein. Edic. <strong>Sociedad</strong> <strong>de</strong> Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía,<br />

Santiago, Chile (2000).<br />

5. Kaplan, Sadock (1995). Tratado <strong>de</strong> Psiquiatría. España: Intermédica.<br />

6. Moore, David P, Jefferson, James (2005) Manual <strong>de</strong> Psiquiatría<br />

Médica, 2ª Edición. Edit. Elsevier, España.<br />

7. Salazar, Peralta, Pastor (2010) Tratado <strong>de</strong> Psicofarmacología,<br />

2ª Edición, Edit. Panamericana.<br />

Beneficios Socios<br />

<strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

Quienes cancelen sus cuotas <strong>de</strong>l año en forma anticipada, podrán optar sin costo alguno a:<br />

REVISTA<br />

• Un empaste <strong>de</strong> 4 revistas correspondientes al año que elijan.<br />

• Escoger 3 revistas <strong>de</strong> números anteriores y <strong>de</strong> cualquier año.<br />

• Entrega gratuita <strong>de</strong> la Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> (4 ediciones al año).<br />

• Valor rebajado para nuestros socios en Revistas <strong>de</strong> años anteriores.<br />

CURSOS DE PSIQUIATRÍA PARA LA ATENCIÓN PRIMARIA<br />

Los profesionales al día con sus cuotas tienen entrada liberada a los<br />

Cursos <strong>de</strong> Psiquiatría para la Atención Primaria que se llevan a cabo en regiones.<br />

LIBROS<br />

Valor preferencial en los libros editados por la <strong>Sociedad</strong>.<br />

“Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>”<br />

$25.000 (normal $30.000 pesos).<br />

“Trastornos <strong>de</strong> Personalidad"<br />

$20.000 (normal $25.000 pesos).<br />

"Avances en Psicoterapia y Cambio Psíquico”<br />

$10.000 (normal $15.000 pesos).<br />

162<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 153 - 162


EL SACRIFICIO: DE LA MITOLOGIA A LA PSICOPATOLOGÍA. CLAVES PARA UNA APROXIMACIÓN A LA OBRA DE RENÉ GIRARD<br />

El Sacrificio: <strong>de</strong> la Mitología a la Psicopatología.<br />

Claves para una aproximación a la obra <strong>de</strong><br />

René Girard 1<br />

Introducción<br />

El estudio <strong>de</strong> las conductas violentas y <strong>de</strong> la violencia patológica<br />

es antiguo y reiterativo en la psiquiatría y <strong>de</strong>más<br />

disciplinas que se ocupan <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r y manejar estas<br />

pasiones humanas. En los últimos años ha surgido un significativo<br />

aporte al respecto <strong>de</strong> la extensa serie <strong>de</strong> publicaciones<br />

<strong>de</strong>l filósofo, literato e historiador francés René<br />

Girard, en particular a partir <strong>de</strong> su libro La violence et le<br />

sacré (1). Consi<strong>de</strong>ro como psiquiatra que su obra nos da<br />

una clave para estudiar la psicopatologia <strong>de</strong> la violencia.<br />

I. La obra <strong>de</strong> René Girard<br />

Aunque hay en Chile conocedores atentos <strong>de</strong> este autor,<br />

ignoro si es apreciada su obra por el gran público. Como<br />

en Francia, en don<strong>de</strong> nació en 1923 y no obstante ser<br />

miembro <strong>de</strong> la Aca<strong>de</strong>mia Francesa <strong>de</strong>s<strong>de</strong> diciembre <strong>de</strong><br />

2005 sigue mal conocido, voy a presentar brevemente<br />

cómo se ha <strong>de</strong>sarrollado, tarea que me la ha facilitado<br />

el propio René Girard en la introducción que ha escrito<br />

163 - 171, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 163<br />

Jean Garrabé <strong>de</strong> Lara 2<br />

para la recopilación reciente <strong>de</strong> sus cuatro principales libros<br />

publicada con el titulo general De la violence à la<br />

divinité (2) 3 , entre los cuales La violence et le sacré, para<br />

mí el fundamental, es el tercero. Hay que precisar que<br />

Girard, nacido en Aviñón en 1923, con formación inicial<br />

en Francia <strong>de</strong> filólogo e historiados medieval antes <strong>de</strong> su<br />

marcha como joven profesor <strong>de</strong> literatura a los Estados<br />

Unidos <strong>de</strong> América, en don<strong>de</strong> la importancia <strong>de</strong> su obra<br />

fue reconocida antes <strong>de</strong> su regreso a su patria natal 4 . Por<br />

lo tanto la mayoría <strong>de</strong> sus glosas proce<strong>de</strong>n, como vamos<br />

a verlo, <strong>de</strong> la literatura tanto la <strong>de</strong> la antigüedad como <strong>de</strong><br />

los tiempos mo<strong>de</strong>rnos.<br />

Para explicar en esta introducción en qué consiste lo que<br />

llama el <strong>de</strong>seo mimético, tema recurrente <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el primer<br />

libro <strong>de</strong> la tetralogía <strong>de</strong> la que estoy hablando, publicado<br />

en 1961 5 , recurre a una cita <strong>de</strong> Dante Alighieri (1265-<br />

1321). Éste cuenta en el Canto V <strong>de</strong> La Divina Comedia<br />

lo que le dice el alma <strong>de</strong> Francesca <strong>de</strong> Rímini cuando se<br />

encuentra con ella en el Infierno, por cierto, hija <strong>de</strong> un<br />

amigo <strong>de</strong>l poeta, para explicar como surgió su fatal amor<br />

1. Texto <strong>de</strong> la conferencia impartida por el autor en la Facultad <strong>de</strong> Ciencias Sociales <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Chile el día 6 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> <strong>2009</strong> (presentación<br />

y notas aclaratorias <strong>de</strong>l Editor <strong>de</strong> la Revista). El Prof. Dr. Garrabé, invitado al 8º Congreso Chileno <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, llevado a cabo<br />

en Santiago los días 8-10 <strong>de</strong> enero <strong>de</strong> <strong>2009</strong>, gentilmente accedió a a<strong>de</strong>lantar su viaje con el objeto <strong>de</strong> realizar esta presentación.<br />

2. Director Médico <strong>de</strong>l Instituto Marcel Rivière <strong>de</strong> París y Director <strong>de</strong> enseñanza clínica en la Universidad René Descartes - Paris V. Presi<strong>de</strong>nte<br />

Honorario <strong>de</strong> L’Evolution Psychiatrique y Presi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> l’Association pour une Fondation Henri Ey. Profesor Honorario <strong>de</strong> la Universidad<br />

<strong>de</strong> Guadalajara y <strong>de</strong>l Instituto <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong> Lengua Española. Socio Honorario <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> Española <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>de</strong> la Asociación<br />

Mundial <strong>de</strong> Psiquiatría. Algunos <strong>de</strong> sus libros han sido traducidos al castellano, entre ellos Histoire <strong>de</strong> la schizophrénie Paris: Seghers, 1992<br />

- La noche oscura <strong>de</strong>l ser México: Fondo <strong>de</strong> Cultura Económica, 1996 / Henri Ey et la pensée psychiatrique contemporaine Paris: Institut<br />

Synthélabo, 1997 - Henri Ey y el pensamiento psiquiátrico contemporáneo México: Fondo <strong>de</strong> Cultura Económica, 2002.<br />

3. Esta tetralogía compren<strong>de</strong>, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> La violencia y lo sagrado, las siguientes tres obras, también traducidas al español: Mentira romántica<br />

y verdad novelesca, El chivo expiatorio, y El misterio <strong>de</strong> nuestro mundo; tal como aquélla, las primeras dos también tienen ediciones <strong>de</strong><br />

Editorial Anagrama <strong>de</strong> 1985 y 1986 (originales franceses <strong>de</strong> 1961 y 1982), en tanto que la última es <strong>de</strong> Editorial Sígueme, Salamanca, <strong>de</strong> 1982<br />

(original francés <strong>de</strong> 1978). Otras obras importantes para compren<strong>de</strong>r el pensamiento <strong>de</strong> René Girard son La ruta antigua <strong>de</strong> los hombres<br />

perversos (Edit. Anagrama, Barcelona, 2002; original francés <strong>de</strong> 1985), Shakespeare Los fuegos <strong>de</strong> la envidia (Edit. Anagrama, Barcelona,<br />

1995; original francés <strong>de</strong> 1990), Veo a Satán caer como el relámpago (Edit. Anagrama, Barcelona, 2002; original francés <strong>de</strong> 1999) y Los<br />

orígenes <strong>de</strong> la cultura (Edit. Trotta SA Madrid, 2006; original francés <strong>de</strong> 2004).<br />

4. En USA se <strong>de</strong>sempeñó como profesor sucesivamente en las Universida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> Indiana, Duke, Johns Hopkins y Stanford, jubilándose <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ésta<br />

en 1995.


incestuoso con su cuñado Paolo Malatesta. No me resisto<br />

ante un público <strong>de</strong> habla hispana a leer estos versos en la<br />

traducción <strong>de</strong>l poeta Ángel Crespo (1926-1995) (3):<br />

“Como el amor a Lanzalote hiriera (Verso 127)<br />

Por <strong>de</strong>leite, leíamos un día<br />

soledad sin sospecha la nuestra era.<br />

Pali<strong>de</strong>cimos, y nos suspendía<br />

nuestra lectura, a veces la mirada<br />

Y un pasaje por fin nos venciera;<br />

Al leer que la risa <strong>de</strong>seada<br />

Besada fue por el fogoso amante,<br />

éste, <strong>de</strong> quien jamás será separada<br />

la boca me besó todo anhelante.<br />

Galeoto fue el libro y quién lo hiciera:<br />

no leímos ya mas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> este instante”. (Verso 138)<br />

Mientras un alma hablaba, la otra era<br />

presa <strong>de</strong>l llanto; entonces apiadado<br />

lo mismo me sentí que si muriera;<br />

Y así como cuerpo inanimado;” (Verso 142)<br />

Galeoto es el personaje que en la novela Lancelote <strong>de</strong>l<br />

Lago estimula a Lanzalote y a Ginebra que se revelen su<br />

amor (p.57-57). La otra alma presa <strong>de</strong> llanto que apiada a<br />

Dante es la <strong>de</strong> Paolo Malatesta. Por lo tanto el <strong>de</strong>seo entre<br />

Francesca y Paolo, que no lo habían sentido antes, nace, en<br />

la opinión <strong>de</strong> Girard, por “mimesis” <strong>de</strong>l <strong>de</strong>seo <strong>de</strong>l caballero<br />

andante Lanzalote y <strong>de</strong> la reina Ginebra, que <strong>de</strong>scubren<br />

leyendo juntos el libro que cuenta sus amores novelescos.<br />

Po<strong>de</strong>mos pensar que asimismo el amor <strong>de</strong> Don Quijote a<br />

Dulcinea también nació <strong>de</strong> esta lectura <strong>de</strong> Lazanlote <strong>de</strong>l<br />

Lago 6 , aunque lo leyese Alonso Quijano cuando estaba<br />

solo en su biblioteca llena <strong>de</strong> libros <strong>de</strong> caballería.<br />

En su libro sobre el <strong>de</strong>seo mimético, que lleva también<br />

el título <strong>de</strong> “Mentira romántica y verdad novelesca”, da<br />

Girard otros ejemplos escogidos en las obras <strong>de</strong> cinco escritores:<br />

Cervantes naturalmente, Stendhal, Flaubert, Dostoievski<br />

y Proust. Habla también para calificar este <strong>de</strong>seo<br />

por mimesis <strong>de</strong> <strong>de</strong>seo según el otro, <strong>de</strong> <strong>de</strong>seo prestado<br />

o <strong>de</strong> <strong>de</strong>seo mediatizado, según lo que Hegel llama mediación.<br />

Po<strong>de</strong>mos también pensar en el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong>l otro,<br />

según el psiquiatra y psicoanalista francés Jacques Lacan<br />

(1901-1991)<br />

En esta misma introducción a su recopilación escribe Girard:<br />

“cuando se interroga a los expertos sobre las causas<br />

<strong>de</strong> la violencia cada vez más amenazadora en nuestro<br />

mundo, contestan <strong>de</strong> manera evi<strong>de</strong>ntemente equivocada<br />

con una sola palabra: agresión “(2 p. 14). Creo que cuando<br />

escribía esto pensaba en el etólogo y Premio Nobel Konrad<br />

Lorenz (1903-1989) que publicó su libro “la Agresión,<br />

una historia natural <strong>de</strong>l mal” en 1969. Para Girard la<br />

violencia nace <strong>de</strong> la mimesis: cuando imitamos el mo<strong>de</strong>lo<br />

<strong>de</strong> nuestros <strong>de</strong>seos, <strong>de</strong>seamos lo mismo que él. De la exasperación<br />

recíproca <strong>de</strong> los <strong>de</strong>seos nace miméticamente la<br />

violencia tanto la individual como la colectiva.<br />

No sé si soy uno <strong>de</strong> esos expertos <strong>de</strong> la violencia <strong>de</strong> los<br />

que habla Girard, pero como psiquiatra me preocupa lo<br />

que se llama violencia patológica, <strong>de</strong> la que se discute si<br />

es diferente <strong>de</strong> una violencia que sería “normal”, pero creo<br />

que si me interrogasen contestaría con otra palabra sacer,<br />

que significa a la vez sagrado y sacrificio, palabra clave <strong>de</strong><br />

La violence et le sacré, la obra en la que el filósofo ha<br />

estudiado los gran<strong>de</strong>s mitos religiosos.<br />

II. La violencia colectiva <strong>de</strong> los<br />

atentados suicidas<br />

Ha surgido a fines <strong>de</strong>l siglo XX, posteriormente a la publicación<br />

por Girard <strong>de</strong> sus libros que en cierto modo la<br />

anunciaban, una violencia colectiva utilizada por movimientos<br />

terroristas <strong>de</strong> diversas i<strong>de</strong>ologías que amenaza a<br />

la humanidad, una manera nueva <strong>de</strong> cometer atentados,<br />

los llamados “atentados suicidas”, en los que el autor no<br />

duda en sacrificar su propia vida para matar a la mayor<br />

cantidad <strong>de</strong> víctimas inocentes, consiguiendo así un doble<br />

efecto terrorífico. Los islamistas dicen <strong>de</strong> los autores <strong>de</strong><br />

5. Se refiere a Mentira romántica y verdad novelesca, cuya primera versión francesa fue publicada ese año.<br />

6. Ortografía española en El Quijote <strong>de</strong>l nombre Lancelot o Lancelote.<br />

7. Se refiere al libro cuya traducción castellana tiene por título “Sobre la agresión: El pretendido mal” (Siglo XXI editores, con varias ediciones<br />

entre los años 70 – 90).<br />

164<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 163 - 171


EL SACRIFICIO: DE LA MITOLOGIA A LA PSICOPATOLOGÍA. CLAVES PARA UNA APROXIMACIÓN A LA OBRA DE RENÉ GIRARD<br />

estos atentados que son “mártires” y no suicidas. En la<br />

historia <strong>de</strong>l Islam se recuerda el empleo en el siglo XI <strong>de</strong><br />

nuestra era por el Viejo <strong>de</strong> la Montaña Hassan Al Sabbah<br />

<strong>de</strong> “haschishinos” para asesinar a sus rivales políticos y religiosos<br />

8 . Se los llama también kamikaze, comparándolos<br />

así con los jóvenes pilotos japoneses que al final <strong>de</strong> la II<br />

Guerra Mundial en el teatro <strong>de</strong> operaciones <strong>de</strong>l Océano<br />

Pacifico, precipitaban voluntariamente sus aviones sobre<br />

los buques norteamericanos para evitar la invasión <strong>de</strong> su<br />

país. Esta <strong>de</strong>nominación indigna no sólo a los pocos kamikaze<br />

sobrevivientes sino a la mayoría <strong>de</strong> los japoneses,<br />

que consi<strong>de</strong>ran que tenían otras motivaciones, ya que la<br />

violencia estaba dirigida contra otros combatientes y no<br />

contra civiles sin <strong>de</strong>fensa. Debemos acordarnos <strong>de</strong>l mito<br />

<strong>de</strong> los “vientos divinos” –tal es el sentido etimológico <strong>de</strong><br />

kamikaze- o sea, la tormenta que <strong>de</strong>struyó la armada <strong>de</strong><br />

los mongoles cuando estaba punto <strong>de</strong> invadir Japón, protección<br />

divina que hizo que el Imperio <strong>de</strong>l Sol Levante no<br />

fuera nunca invadido o conquistado militarmente hasta<br />

1945 y <strong>de</strong> la importancia que tiene este relato mítico para<br />

su cultura. La asociación entre los atentados con muerte<br />

voluntaria <strong>de</strong> sus autores y los kamikaze se <strong>de</strong>be sin duda<br />

a que históricamente se empleó por primera vez este método<br />

en Palestina en 1972 por la Fracción Japonesa <strong>de</strong>l<br />

Ejército Rojo Revolucionario.<br />

III. Violencia y sacrificio, <strong>de</strong>l<br />

mito a la psicopatología<br />

En Noviembre <strong>de</strong> 2007 se celebró en Tokio un coloquio<br />

organizado por las socieda<strong>de</strong>s franco-japonesas <strong>de</strong> medicina,<br />

cuyo tema fue la violencia. En la conferencia <strong>de</strong><br />

clausura hablé <strong>de</strong> Violence et sacrifice: du mythe à la<br />

psychopathologie, basándome ya en la obra <strong>de</strong> René Girard<br />

(1). Pretendía así “matar dos pájaros <strong>de</strong> un tiro”. Primero,<br />

dar a conocer a los colegas nipones la obra <strong>de</strong> este<br />

antropólogo francés, como lo estoy haciendo ahora aquí,<br />

en don<strong>de</strong> he llegado viajando hacia Occi<strong>de</strong>nte y no hacia<br />

163 - 171, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 165<br />

Oriente. Y segundo, ver si podía encontrar en la mitología<br />

<strong>de</strong> las religiones arcaicas japonesas – sintoísmo o budismo<br />

zen- ejemplos que confirmasen la hipótesis mimética <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>seo. Girard en efecto se apoya sobre todo en la mitología<br />

que su formación inicial <strong>de</strong> filólogo le había permitido<br />

conocer, o sea, la relatada en los textos <strong>de</strong> la literatura<br />

griega antigua y en los bíblicos <strong>de</strong>l Antiguo Testamento,<br />

ya que consi<strong>de</strong>ra que los <strong>de</strong> la Biblia no son sólo religiosos<br />

sino también míticos, lo cual, para él, no les quita ningún<br />

valor. Pero no habla <strong>de</strong> mitos <strong>de</strong> otras culturas, sólo hace<br />

una breve alusión a uno <strong>de</strong> una cultura latino-americana<br />

estudiada por Clau<strong>de</strong> Lévi- Strauss 9 . Por eso me pareció<br />

interesante ver si se encuentran en ellas otros ejemplos (el<br />

texto <strong>de</strong> mi conferencia en Tokio no se ha publicado aun<br />

en francés ni en japonés).<br />

IV. Sacrificio religioso y<br />

mitología pagana<br />

La mayoría <strong>de</strong> las religiones tiene por origen un mito: el<br />

relato <strong>de</strong>l sacrifico <strong>de</strong> un ser humano a la divinidad para<br />

pedir a ésta que ponga fin a una catástrofe o un cataclismo,<br />

que la comunidad afectada vive como un castigo<br />

divino por una transgresión <strong>de</strong> una prohibición, un tabú<br />

por uno <strong>de</strong> los suyos. En la mitología griega abundan los<br />

relatos <strong>de</strong> sacrificios hechos a los numerosos dioses <strong>de</strong>l<br />

paganismo, relatos que han inspirado a artistas y pensadores<br />

occi<strong>de</strong>ntales hasta nuestros días.<br />

Recor<strong>de</strong>mos lo que nos cuenta Homero en la Ilíada, en la<br />

que se relatan, conforme a sus <strong>de</strong>scripciones por la medicina<br />

hipocrática, episodios <strong>de</strong> frenesis, <strong>de</strong> locura violenta,<br />

en que los héroes matan a animales o a seres humanos<br />

confundiéndolos con victimas sacrificiales. Las más conocidas<br />

<strong>de</strong> estos ataques <strong>de</strong> manía – lo que significa locura<br />

en griego- son los <strong>de</strong> Ajax y Aquiles. Aquiles, invulnerable<br />

porque su madre Tetis le había bañado al nacer, sujetándolo<br />

por el talón en el rio infernal, el Stix, masacró pri-<br />

8. El autor recuerda el uso <strong>de</strong> hashish por los seguidores <strong>de</strong> este personaje (los hashishies o secta <strong>de</strong> los comedores <strong>de</strong> hashish), quienes,<br />

fanatizados bajo el efecto psicotrópico <strong>de</strong> este cáñamo índico, realizaban tales encargos. Algunos lingüistas concuerdan que con el tiempo<br />

<strong>de</strong>vino en ‘asesinos’.<br />

9. Se trata <strong>de</strong>l grupo aborigen brasilero amazónico Bororo, estudiado por Lévi- Strauss en general en su obra etnográfica Tristes Trópicos (1ª<br />

edición francesa <strong>de</strong> 1955), uno <strong>de</strong> cuyos mitos luego es analizado en Lo crudo y lo cocido (1ª edición francesa <strong>de</strong> 1964), primer volumen <strong>de</strong><br />

su tetralogía Mitológicas.


sioneros troyanos in<strong>de</strong>fensos; murió <strong>de</strong> una herida en el<br />

talón y po<strong>de</strong>mos pensar simbólicamente que el talón <strong>de</strong><br />

Aquiles <strong>de</strong>l ser humano es su violencia incontrolada.<br />

La victima humana más célebre <strong>de</strong> la mitología griega es<br />

Ifigenia, sacrificada por su propio padre Agamenón al dios<br />

Neptuno, acto que <strong>de</strong>senca<strong>de</strong>na a la vez la violencia colectiva<br />

<strong>de</strong> la guerra <strong>de</strong> Troya y la serie <strong>de</strong> crímenes <strong>de</strong> la<br />

familia <strong>de</strong> los Atridas, que acaba con la locura <strong>de</strong> Orestes.<br />

En el VIII° Congreso Mundial <strong>de</strong> Psiquiatría <strong>de</strong> Atenas me<br />

obsequiaron con un grabado representando esta locura<br />

que para los franceses recuerda el verso <strong>de</strong> Racine “Pour<br />

qui sont ces serpents qui sifflent sur vos têtes?”, grabado<br />

que adorna mi <strong>de</strong>spacho parisino y que simboliza la locura<br />

engendrada en una familia por un sacrificio.<br />

V. De Edipo-Rey al complejo<br />

El sacrificio mítico más conocido, y al mismo tiempo <strong>de</strong><br />

más difícil interpretación es el <strong>de</strong> Edipo, ya que éste había<br />

recién nacido escapado al sacrifico <strong>de</strong>cidido por su<br />

padre para evitarle el terrible <strong>de</strong>stino anunciado por el<br />

oráculo. Edipo, a pesar <strong>de</strong> haber matado a su padre y <strong>de</strong><br />

haberse casado con su madre en una absoluta inocencia,<br />

se castiga a sí mismo cuando <strong>de</strong>scubre su doble crimen<br />

reventándose los ojos para que se acabe la peste que asola<br />

Tebas. Es por lo tanto a la vez el ejemplo <strong>de</strong> un auto sacrificio,<br />

un sacrificio <strong>de</strong> sí mismo, y <strong>de</strong> un sacrificio en que la<br />

víctima es un ser sagrado puesto que Edipo era Rey por su<br />

matrimonio con su madre.<br />

No es <strong>de</strong> extrañar que Freud haya escogido el nombre <strong>de</strong>l<br />

héroe <strong>de</strong> la mitología que da su titulo a la tragedia <strong>de</strong><br />

Sófocles (497-405 aC.) para <strong>de</strong>signar las representaciones<br />

inconscientes complejas que marcan la ambivalencia <strong>de</strong><br />

los sentimientos <strong>de</strong> amor y odio hacia los padres vividos<br />

por el niño en esta fase <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo libidinal. Se ha dis-<br />

cutido y se sigue discutiendo la universalidad <strong>de</strong>l complejo<br />

<strong>de</strong> Edipo o sus peculiarida<strong>de</strong>s según las culturas.<br />

Kosawa Heisaku 10 (1897-1968), introductor <strong>de</strong> las i<strong>de</strong>as<br />

<strong>de</strong> Freud en Japón, habló <strong>de</strong>l Complejo <strong>de</strong> Ajase, lo que<br />

disgustó al padre <strong>de</strong>l psicoanálisis, que pensaba que el<br />

único y verda<strong>de</strong>ro complejo era el que él había <strong>de</strong>scubierto<br />

en el inconsciente occi<strong>de</strong>ntal. Ajase es el héroe <strong>de</strong> un<br />

mito que nos cuenta el Sutra <strong>de</strong>l Nirvana o contemplación<br />

<strong>de</strong> la vida infinita. Este relato budista introducido<br />

en Japón en el siglo VII <strong>de</strong> nuestra era se inspira en la vida<br />

<strong>de</strong>l príncipe indio Ajatutsu (492-462 a. C.), por cierto contemporáneo<br />

<strong>de</strong> Sófocles, que para ser rey <strong>de</strong> Magadha había<br />

<strong>de</strong>stronado y encarcelado a su padre Bimbasura. Lleno<br />

<strong>de</strong> remordimiento cuando nació su propio hijo preguntó<br />

a varios religiosos qué <strong>de</strong>bía hacer para conseguir el perdón<br />

<strong>de</strong> su crimen y éstos le aconsejaron matarse. Pero su<br />

hermanastro Jivaka que era médico le llevó ante el Buda,<br />

quien le dijo que sólo arrepintiéndose <strong>de</strong>jaría <strong>de</strong> cumplir<br />

actos negativos sin borrar sin embargo su crimen. Este<br />

mito me parece más a<strong>de</strong>cuado para <strong>de</strong>signar el complejo<br />

infantil <strong>de</strong> la mentalidad budista que el <strong>de</strong> Edipo.<br />

Girard nos recuerda que para los griegos el sacrificio ritual<br />

provoca una catarsis, una purificación o purgación<br />

<strong>de</strong>l alma como la que según Aristóteles provoca el teatro.<br />

Algunas ciuda<strong>de</strong>s griegas guardaban individuos catárticos<br />

como prisioneros <strong>de</strong> guerra, esclavos, criminales, etc. para<br />

sacrificarlos en caso <strong>de</strong> necesidad 11 .<br />

Ya en los primeros siglos <strong>de</strong> la era cristiana pensadores<br />

como Plutarco (46 o 49?-125?) buscaron el origen <strong>de</strong> los<br />

mitos griegos en una religión más antigua, la <strong>de</strong> Egipto.<br />

La teogonía egipcia está marcada por la lucha entre dos<br />

dioses, uno benéfico Osiris y otro maléfico y violento Seth.<br />

El segundo mata y <strong>de</strong>scuartiza a Osiris, pero éste resucita<br />

con la ayuda <strong>de</strong> su hermana y esposa Isis, que consiguió<br />

reunir las partes <strong>de</strong>sperdigadas <strong>de</strong> su cuerpo, salvo<br />

10. El autor usa en el texto la costumbre tradicional japonesa <strong>de</strong> poner antes el apellido que el nombre.<br />

11. En el cap. IV “La génesis <strong>de</strong> los mitos y los rituales” <strong>de</strong> La violencia y lo sagrado, Girard se refiere a la función catártica <strong>de</strong>l sacrificio, institución<br />

comunitaria que busca una doble sustitución simbólica: <strong>de</strong> todos los miembros <strong>de</strong> la comunidad por uno solo, y <strong>de</strong> uno solo original<br />

<strong>de</strong> la comunidad por otro sacrificable. En la base <strong>de</strong>l proceso existe el mecanismo <strong>de</strong> chivo expiatorio, abordado más específicamente en otro<br />

<strong>de</strong> sus libros acá recordados por el autor <strong>de</strong>l presente trabajo. En este contexto surge en la Grecia Antigua el Pharmakos, <strong>de</strong>nominación para<br />

una categoría <strong>de</strong> individuos usados en sacrificios rituales colectivos cuando alguna calamidad amenazaba o caía sobre la ciudad (epi<strong>de</strong>mia,<br />

invasión extranjera, disensiones internas, etc.).<br />

166<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 163 - 171


EL SACRIFICIO: DE LA MITOLOGIA A LA PSICOPATOLOGÍA. CLAVES PARA UNA APROXIMACIÓN A LA OBRA DE RENÉ GIRARD<br />

el pene, y reconstruirlo. En los templos construidos en los<br />

sitios en don<strong>de</strong> se habían encontrado los restos <strong>de</strong> Osiris<br />

se hicieron sacrificios <strong>de</strong> animales. Fue el dios Ra, el sol,<br />

quien prescribió que se sustituyeran en los sacrificios a los<br />

seres humanos por animales escogidos según reglas simbólicas<br />

que los relacionaban con estos lugares sagrados.<br />

El mito <strong>de</strong> Osiris correspon<strong>de</strong> a una antiquísima cosmogonía<br />

que hace nacer el mundo material <strong>de</strong>l enfrentamiento<br />

entre dos fuerzas, dos principios antagonistas, uno creativo,<br />

otro negativo. Para Heráclito (550? - 480?a.C.) se formaban<br />

así los átomos que constituyen para él la unidad<br />

fundamental <strong>de</strong> la materia. El médico y filósofo Empedocles<br />

(490? - 435 a.C.) hizo <strong>de</strong> la lucha entre Eros y Tanatos<br />

el fuego <strong>de</strong> la vida psíquica, la base <strong>de</strong>l movimiento en<br />

el mundo; escenificó su concepción con su sacrifico o<br />

suicidio tirándose en el volcán <strong>de</strong>l Etna.<br />

Sabina Spielrein (1885-1942), la psicoanalista rusa judía<br />

que mataron los nazis, había estudiado en 1911 la componente<br />

<strong>de</strong>structiva <strong>de</strong> la libido, concepto que Freud acabó<br />

por aceptar como pulsión <strong>de</strong> muerte To<strong>de</strong>strieb, opuesta<br />

a la pulsión originaria, Eros. Girard solo pudo conocer<br />

esta i<strong>de</strong>as psicoanalíticas a través <strong>de</strong> los textos <strong>de</strong> Freud,<br />

ya que los <strong>de</strong> Sabina Spielrein se han re<strong>de</strong>scubierto más<br />

recientemente en Francia y en Rusia, re<strong>de</strong>scubrimiento al<br />

que he contribuido (4). A<strong>de</strong>más sólo se refiere a la obra<br />

<strong>de</strong> Freud.<br />

VI. La violencia y lo sagrado<br />

Girard ha estudiado las fiestas paganas que reproducen<br />

las crisis sacrificiales, en particular las celebradas en honor<br />

a Dionisos-Baco, las famosas bacanales, en don<strong>de</strong> se<br />

sacrificaba el representante <strong>de</strong>l dios, en los primeros tiempos<br />

un ser humano y luego un animal, un chivo. Para él “el<br />

sacrificio existe sin referencia a ninguna divinidad en función<br />

solo <strong>de</strong> lo sagrado, o sea, la violencia maléfica transformada<br />

por la inmolación en benéfica.”(1.p. 245). Esto<br />

permite en nombre <strong>de</strong> lo sagrado toda violencia puesto<br />

163 - 171, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 167<br />

que éste transforma por el sacrificio <strong>de</strong> la vida lo maléfico<br />

en benéfico. Girard aprueba la importancia que da Freud<br />

a la ambivalencia en el complejo <strong>de</strong> Edipo y recuerda que<br />

en Totem y Tabú habla <strong>de</strong>l “chivo <strong>de</strong> Dionisos”, pero va<br />

mas allá: para él la sexualidad es impura porque está ligada<br />

con la violencia (1 p. 56). El Antiguo Testamento nos<br />

habla ya <strong>de</strong>l ritual <strong>de</strong>l chivo expiatorio, que carga con los<br />

crímenes <strong>de</strong> una comunidad humana. Da Girard como<br />

argumento en favor <strong>de</strong> su opinión datos proce<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong><br />

otras culturas, haciendo alusión al chamanismo. Personalmente<br />

en un viaje <strong>de</strong> estudios a Ulán Udé, capital <strong>de</strong><br />

la República Buriata en Siberia, he observado que la llegada<br />

en la región <strong>de</strong> los lamas tibetanos en el siglo XVII<br />

ha dado nacimiento a un sincretismo chamano-budista<br />

todavía muy activo a pesar <strong>de</strong> la persecución religiosa <strong>de</strong><br />

la época soviética e incluso actual, puesto que el gobierno<br />

ruso prohíbe a petición <strong>de</strong>l chino que el Dalai Lama visite<br />

los monasterios <strong>de</strong> esta región siberiana.<br />

En su libro El sacrificio humano entre los Mexicas (5)<br />

Yolotl González Torres se refiere à la violencia y lo sagrado<br />

<strong>de</strong> Girard y aprueba lo que dice <strong>de</strong> la transformación<br />

<strong>de</strong> la violencia maléfica en benéfica por el sacrifico. Opina<br />

que “en América, con excepción <strong>de</strong> Mesoamérica el<br />

sacrificio humano era relativamente poco común” pero<br />

aña<strong>de</strong> que “se consi<strong>de</strong>raba como el más apreciado por los<br />

dioses y sólo se llevaba a cabo en ocasiones <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s<br />

crisis” (p.51).<br />

Indica que “en la cima <strong>de</strong> algunas montañas <strong>de</strong> los An<strong>de</strong>s<br />

se han hallado, perfectamente conservados, cuerpos <strong>de</strong><br />

niños y jóvenes sacrificados al parece por congelamiento.<br />

En la cima <strong>de</strong> la montaña <strong>de</strong>l Toro, en Chile, se encontraron<br />

los restos <strong>de</strong> un niño que parecía dormir.” (p.52) 12 . Para<br />

González Torres el canibalismo ritual que tanto escandalizó<br />

a los primeros europeos cuando llegaron a América,<br />

a pesar <strong>de</strong> que nuestros antepasados lo han practicado<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el neolítico, era más bien alimenticio o al menos<br />

no tenía un carácter sacrificial. Se parecería por lo tanto<br />

al canibalismo <strong>de</strong> los pascuenses que persistió hasta<br />

la evangelización <strong>de</strong> Rapa Nui iniciada por el hermano<br />

12. La referencia <strong>de</strong> este libro es confusa porque en Chile existe el cerro <strong>de</strong>l Toro en el Parque Nacional Torres <strong>de</strong>l Paine, Región <strong>de</strong> Magallanes y la<br />

Antártica <strong>Chilena</strong>. Debe tratarse <strong>de</strong>l cerro El Plomo, en los An<strong>de</strong>s chilenos centrales, don<strong>de</strong> en 1954, a 5.420 metros <strong>de</strong> altura, se encontró el<br />

cadáver momificado <strong>de</strong> un niño <strong>de</strong> unos 8 años <strong>de</strong> edad, sacrificado en honor al dios inca Inti unos 500 años antes. Estos restos se encuentran<br />

en el Museo Nacional <strong>de</strong> Historia Natural, <strong>de</strong> Santiago.


Eugène Eyraud (1820-1868), <strong>de</strong> la Congregación <strong>de</strong> los<br />

Pères du Saint Esprit, que salió <strong>de</strong> Chile para su misión<br />

en 1862 (6).<br />

Girard habla también <strong>de</strong>l carácter sacrificial <strong>de</strong> las revoluciones<br />

políticas, que culmina a menudo con la muerte<br />

violenta <strong>de</strong> personajes consi<strong>de</strong>rados hasta su estallido<br />

como sagrados. La revolución francesa nos da un ejemplo<br />

<strong>de</strong> ello con la <strong>de</strong>capitación <strong>de</strong>l rey Luis XVI, guillotinado<br />

en 1793 en la actual plaza <strong>de</strong> la Concordia <strong>de</strong> Paris. La<br />

actitud <strong>de</strong> la muchedumbre que asistió a este sacrifico<br />

indignó a Philippe Pinel, el fundador <strong>de</strong> la psiquiatría, que<br />

estaba presente al pie <strong>de</strong>l patíbulo como guardia nacional.<br />

Resulta paradójico que el monumento que se escogió<br />

como neutral para apaciguar la plaza sea el obelisco que<br />

en el templo <strong>de</strong> Tebas celebraba la gloria <strong>de</strong> un rey-sagrado,<br />

el faraón Ramsés II.<br />

VII. Del sacrificio <strong>de</strong> Abraham<br />

a la con<strong>de</strong>nación <strong>de</strong>l suicidio<br />

Las tres religiones monoteístas, llamadas por ello abrahámicas,<br />

el Judaismo, el Cristianismo y el Islam, celebran lo<br />

que curiosamente se llama sacrificio <strong>de</strong> Abraham, según<br />

cuentan tanto la Biblia como el Corán, ya que la víctima<br />

humana que por or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> Dios este patriarca iba a inmolar<br />

no era él mismo sino su hijo Isaac. Afortunadamente<br />

Dios, que sólo le había dado tal or<strong>de</strong>n para probar su fe,<br />

hizo interrumpir el gesto por un ángel. Esta escena ha<br />

dado lugar a una producción artística tan innumerable<br />

como el sacrificio <strong>de</strong> Ifigenia. En nuestra época los mahometanos<br />

conmemoran el gesto <strong>de</strong> Abraham sacrificando<br />

cor<strong>de</strong>ros según un riguroso ritual que no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> plantear<br />

problemas en ciuda<strong>de</strong>s como París.<br />

El nacimiento <strong>de</strong>l cristianismo va a provocar largas discusiones<br />

sobre la significación <strong>de</strong> la muerte <strong>de</strong> Cristo por<br />

crucifixión, muerte reservada en el mundo romano a los<br />

criminales. Se ha interpretado la muerte <strong>de</strong> Jesús, hijo <strong>de</strong><br />

Dios hecho hombre, como un auto sacrificio para salvar la<br />

humanidad <strong>de</strong>l pecado original. Pero esta interpretación<br />

podía para la Iglesia primitiva llevar a errores o incluso a<br />

herejías. Se ha publicado hace poco un manuscrito copto,<br />

traducción <strong>de</strong> uno griego más antiguo, El Evangelio<br />

<strong>de</strong> Judas (4) que muestra que algunos <strong>de</strong> los primeros<br />

cristianos pensaban que Judas no era culpable <strong>de</strong> haber<br />

traicionado a Jesús , castigándose <strong>de</strong> ello por el suicidio,<br />

sino que sólo había cumplido con la voluntad <strong>de</strong> Cristo<br />

<strong>de</strong> sacrificarse.<br />

Esta interpretación ha podido, durante los primeros siglos<br />

<strong>de</strong>l cristianismo en Occi<strong>de</strong>nte incitar a los recién convertidos<br />

a buscar la muerte como mártires, incluso provocando<br />

las autorida<strong>de</strong>s paganas para hacerse crucificar. Lo mismo<br />

ocurrió en Japón en el siglo XVII, en que los conversos<br />

aceptaron como un martirio sacrificial que los i<strong>de</strong>ntificaba<br />

a Cristo la crucifixión impuesta por el shogun.<br />

Pero ya en el siglo V, en el momento en que el cristianismo<br />

se convertía en la religión oficial <strong>de</strong>l Imperio Romano,<br />

San Agustín (354- 430), pagano convertido, había <strong>de</strong>clarado<br />

que el tiempo <strong>de</strong> los mártires pertenecía al pasado,<br />

con<strong>de</strong>nando el hecho <strong>de</strong> darse o <strong>de</strong> hacerse dar voluntariamente<br />

la muerte (el homicidio <strong>de</strong> sí mismo sólo se<br />

nombró suicidio en el siglo XVIII, cuando el abate Prévost<br />

(1697-1763), el autor <strong>de</strong> Manon Lescaut, emplea por primera<br />

vez esta palabra). Las iglesias cristianas con<strong>de</strong>naron<br />

la muerte voluntaria privando al suicida <strong>de</strong> un entierro<br />

religioso, con la excepción <strong>de</strong> la locura, en la que el ser<br />

humano pier<strong>de</strong> por la alienación mental su libre albedrío.<br />

Se establece así una diferencia radical entre dos formas<br />

<strong>de</strong> muerte violenta, una prohibida como el suicidio, en el<br />

que el sujeto se mata a sí mismo, y otra permitida e incluso<br />

recomendada, en la que el sujeto mata otros hombres<br />

en nombre <strong>de</strong> Dios sacrificando su vida, especialmente en<br />

las guerras entre comunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> religiones distintas o<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> ellas. Estas “guerras <strong>de</strong> los dioses” son siempre<br />

<strong>de</strong> una violencia extrema, como lo <strong>de</strong>muestra <strong>de</strong>sgraciadamente<br />

la actualidad.<br />

El 10 <strong>de</strong> Octubre <strong>de</strong> 680 <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> Cristo, Yazid, el califa<br />

omeya, mató a Ali, el nieto <strong>de</strong> Mahoma. Esta muerte,<br />

consi<strong>de</strong>rada por parte <strong>de</strong> los musulmanes como un sacrificio,<br />

se conmemora aún en nuestros días con ceremonias<br />

en las que los participantes se infligen castigos violentos.<br />

Ha provocado este crimen el cisma entre chiitas y sunitas<br />

y es el origen <strong>de</strong> la mayoría <strong>de</strong> los llamados “atentadossuicidas”<br />

actuales, en que el autor miembro <strong>de</strong> una co-<br />

168<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 163 - 171


EL SACRIFICIO: DE LA MITOLOGIA A LA PSICOPATOLOGÍA. CLAVES PARA UNA APROXIMACIÓN A LA OBRA DE RENÉ GIRARD<br />

munidad, se sacrifica para dar muerte a la mayor cantidad<br />

posible <strong>de</strong> víctimas para castigarlas <strong>de</strong> pertenecer a<br />

la otra.<br />

En el mundo cristiano la conquista sangrienta <strong>de</strong> Constantinopla<br />

en 1204 por los cruzados ha provocado <strong>de</strong> la<br />

misma manera el gran cisma <strong>de</strong> Occi<strong>de</strong>nte que aún divi<strong>de</strong><br />

Europa, como lo vemos en los Balcanes, provocando<br />

violencias colectivas y crímenes contra la humanidad.<br />

Poco <strong>de</strong>spués en 1281 Japón se libra <strong>de</strong> la violencia <strong>de</strong><br />

los mongoles, al <strong>de</strong>struir un tifón provocado por las divinida<strong>de</strong>s<br />

o kumis la flota <strong>de</strong> los invasores. En este relato<br />

mítico por lo tanto es el cataclismo natural <strong>de</strong>senca<strong>de</strong>nado<br />

por las divinida<strong>de</strong>s la que protege <strong>de</strong> la violencia<br />

humana. Reiterando mis referencias anteriores, la <strong>de</strong>nominación<br />

tradicional <strong>de</strong> estos vientos divinos kamikaze<br />

se utiliza al final <strong>de</strong> la Segunda Guerra Mundial en 1945<br />

para hablar <strong>de</strong> los pilotos <strong>de</strong> las fuerzas especiales Kamikaze<br />

Tokubetsu Kôgekitaï y posteriormente para los<br />

autores <strong>de</strong> los atentados suicidas que aparecen en 1972<br />

en Palestina.<br />

VIII. Psicopatología y<br />

psicopatología <strong>de</strong>l suicidio<br />

Uno <strong>de</strong> las raíces <strong>de</strong>l alienismo ha sido el estudio <strong>de</strong> esa<br />

“locura suicida” que para la Iglesia católica excusaba el<br />

hecho <strong>de</strong> darse la muerte a sí mismo. Para el alienista<br />

francés <strong>de</strong>cimonónico Jean-Etienne Esquirol (1772-<br />

1840) el hecho mismo <strong>de</strong> darse la muerte era una prueba<br />

<strong>de</strong> locura. Como en la opinión <strong>de</strong> la época ésta se <strong>de</strong>bía<br />

a las pasiones <strong>de</strong>l alma, se podía sospechar la existencia<br />

en el ser humano <strong>de</strong> una pasión a dar la muerte a los<br />

otros o a sí mismo, lo que los psicoanalistas llamaran<br />

pulsión <strong>de</strong> muerte.<br />

Los psiquiatras hemos estudiado <strong>de</strong>talladamente estos<br />

“suicidios patológicos”, lo que da a enten<strong>de</strong>r que existen<br />

otros “normales” <strong>de</strong> los que no se ocupa la psicopatologia.<br />

Se han estudiado así el estado mental <strong>de</strong> los suicidas en el<br />

momento <strong>de</strong> su acto, las modalida<strong>de</strong>s, los medios más o<br />

menos violentos utilizados, la frecuencia según la edad, el<br />

163 - 171, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 169<br />

sexo, distintos factores socio-económicos y la religión. Se<br />

han estudiado también <strong>de</strong>talladamente otras conductas<br />

violentas como los suicidios <strong>de</strong> pareja, los suicidios colectivos,<br />

los crímenes en particular los infanticidios seguidos<br />

<strong>de</strong>l suicidio <strong>de</strong>l criminal, etc., pero hay que reconocer que<br />

no se ha conseguido aún establecer una correlación entre<br />

todos estos factores. La Organización Mundial <strong>de</strong> la <strong>Salud</strong><br />

se preocupa <strong>de</strong> hacer estadísticas comparándolos en las<br />

distintas naciones o regiones <strong>de</strong>l mundo.<br />

Al enfoque exclusivamente psicopatológico se opone el<br />

<strong>de</strong>sarrollado por Emile Durkheim (1858-1917) en su obra<br />

Le suici<strong>de</strong>. Etu<strong>de</strong> sociologique publicada en 1867. Apoyándose<br />

en los datos estadísticos <strong>de</strong> la frecuencia <strong>de</strong>l<br />

suicidio en relación con factores sociales Durkheim distingue<br />

dos formas principales: el suicidio que llama “anómico”<br />

y el “altruista” (a<strong>de</strong>más agrega una tercera forma<br />

que llama con otros criterios muy personales “egoísta”).<br />

La anomia –<strong>de</strong>l griego a sin, y nomos, ley- califica el estado<br />

<strong>de</strong> una sociedad en que las reglas morales, jurídicas<br />

y económicas se han <strong>de</strong>bilitado y resultan incoherentes,<br />

<strong>de</strong>senca<strong>de</strong>nando la violencia. Da mucha importancia al<br />

factor religioso como lazo social, especialmente al suicidio<br />

que llama “altruista”, que obe<strong>de</strong>ce por lo contrario a<br />

las reglas <strong>de</strong> una sociedad coherente. Sería la fuerza <strong>de</strong><br />

este lazo más que la con<strong>de</strong>nación por la Iglesia, lo que<br />

explicaría la tasa menor <strong>de</strong> suicidios entre los católicos<br />

que entre los protestantes. Si la hipótesis <strong>de</strong> Durkheim no<br />

está equivocada podríamos pensar que si en una sociedad<br />

disminuye la cohesión religiosa <strong>de</strong>bería aumentar el número<br />

<strong>de</strong> suicidios.<br />

Los psiquiatras hablamos también <strong>de</strong> suicido altruista,<br />

pero en otro sentido. Se trata <strong>de</strong>l sujeto melancólico que<br />

mata a su mujer o la madre que mata a sus hijos para<br />

evitarles un sufrimiento, antes <strong>de</strong> matarse. Hubo en Francia<br />

un caso famoso, el <strong>de</strong>l filósofo Louis Althusser (1918-<br />

1990), que sufría <strong>de</strong> psicosis maniaco-<strong>de</strong>presiva y que en<br />

una crisis melancólica mató a su mujer antes <strong>de</strong> intentarse<br />

suicidarse, aunque no consiguió hacerlo. Althusser fue<br />

<strong>de</strong>clarado irresponsable por los psiquiatras y por lo tanto<br />

no se le juzgó ni con<strong>de</strong>nó penalmente. Ha escrito varios<br />

años <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> su episodio melancólico un libro sobre su<br />

propia historia: L’avenir dure longtemps (7).


IX. Budismo y muerte<br />

voluntaria<br />

Es precisamente cuando se publica la tesis <strong>de</strong> Durkheim<br />

que los filósofos europeos <strong>de</strong>scubren directamente<br />

en Occi<strong>de</strong>nte el budismo, por ejemplo, Schopenhauer<br />

(1788-1860).<br />

Otro autor francés contemporáneo, Maurice Pinguet, ha<br />

estudiado la relación entre la muerte voluntaria (en Japón<br />

no existía hasta hace poco el concepto <strong>de</strong> suicidio en el<br />

sentido occi<strong>de</strong>ntal) y la religiones <strong>de</strong>l Imperio <strong>de</strong>l Sol Naciente.<br />

A propósito <strong>de</strong>l mito <strong>de</strong> Edipo hace observar que<br />

la teogonía japonesa también evoca la violencia infantil y<br />

el sacrificio materno: la diosa Izanami da a luz el dios <strong>de</strong>l<br />

fuego y muere quemada por el ardor <strong>de</strong> su propio hijo...<br />

y la diosa Luz <strong>de</strong>l Cielo Amateratsu, antepasada mítica<br />

<strong>de</strong>l clan imperial, es ofendida por la conducta <strong>de</strong> su joven<br />

hermano y se retira en una gruta hundiendo el mundo en<br />

las tinieblas <strong>de</strong> la muerte. Otra diosa consigue apaciguarla<br />

bailando y todo se ilumina y renace, se perdonan las ofensas<br />

(8). Pienso naturalmente aquí en las danzas rituales <strong>de</strong><br />

las bacanales <strong>de</strong>l rito a Dionisos.<br />

Para Pinguet el budismo original evita las prácticas sacrificiales<br />

(acordémonos <strong>de</strong> la historia <strong>de</strong>l príncipe Ajase)<br />

pero sin embargo ve un retorno al sacrificio con los consejos<br />

<strong>de</strong> algunos monjes budistas <strong>de</strong>l siglo XIV: “Hay que<br />

odiar constantemente su cuerpo y cultivar con todo su<br />

corazón el gusto <strong>de</strong> la muerte”. El mito <strong>de</strong>l renacimiento<br />

en el paraíso por ahogamiento <strong>de</strong>l amidismo también le<br />

parece <strong>de</strong> naturaleza sacrificial. Los jesuitas al llegar al Japón<br />

para evangelizarlo juzgaron que esas prácticas eran<br />

diabólicas. Estos ejemplos, y otros que nos da Pinguet,<br />

<strong>de</strong>muestran para él que “el budismo respeta menos la vida<br />

que el dolor que significa vivir” (p.195), o sea, que el hecho<br />

mismo <strong>de</strong> vivir es un dolor pero que no se <strong>de</strong>be calmarlo<br />

dándose la muerte. Schopenhauer, cuya visión <strong>de</strong>l<br />

mundo como voluntad y representación proce<strong>de</strong> en parte<br />

<strong>de</strong>l budismo, sigue fiel al pensamiento <strong>de</strong> Buda cuando<br />

<strong>de</strong>saconseja el suicidio como un acto violento que impi<strong>de</strong><br />

la liberación.<br />

13. Ver nota al pie 10.<br />

Pinguet recuerda también los atentados o los golpes <strong>de</strong><br />

estado que marcan la historia política <strong>de</strong>l Japón en el siglo<br />

XX, cuyos actores parecen haber olvidado el código <strong>de</strong><br />

honor <strong>de</strong> los samuráis, ya que matan a sus víctimas por<br />

sorpresa y si fracasan en su intento no se sacrifican por<br />

sepuku como era tradicional en el Japón antiguo.<br />

X. El terrorismo revolucionario<br />

El 25 <strong>de</strong> Noviembre <strong>de</strong> 1970 el escritor Mishima Yukyo 13<br />

(1925-1970) se mató <strong>de</strong> una manera extravagante que<br />

sorprendió al mundo entero y que le hizo más celebre que<br />

su importante obra literaria. No es fácil calificar su gesto,<br />

mezcla <strong>de</strong> una parodia <strong>de</strong> sepuku tradicional y <strong>de</strong> suicidio<br />

patológico. Existe una abundante literatura sobre la<br />

psicopatología <strong>de</strong>l escritor a la que he contribuido personalmente<br />

con una conferencia en una <strong>de</strong> las primeras<br />

reuniones <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> Franco-Japonesa <strong>de</strong> Medicina<br />

en Paris (9).<br />

Sólo quiero ahora subrayar la fecha 1970 en que cometió<br />

su acto, porque ya he recordado el atentado terrorista que<br />

va a cometer en 1972 la Fracción Japonesa <strong>de</strong>l Ejército<br />

Rojo Revolucionario, que en cierto modo parece anunciar<br />

y prefigurar <strong>de</strong> manera espectacular. La aparición <strong>de</strong> lo<br />

que po<strong>de</strong>mos llamar terrorismo sacrificial nos va a llevar<br />

a un cuestionamiento sobre el origen <strong>de</strong> esta violencia<br />

revolucionaria que parece <strong>de</strong> inspiración religiosa.<br />

XI. Psicoanálisis <strong>de</strong> la<br />

violencia<br />

En un coloquio que se celebró entonces sobre el Psicoanálisis<br />

<strong>de</strong> la violencia, mi maestro Henri Ey (1900-1977)<br />

insistió en que la violencia forma el corazón mismo <strong>de</strong>l ser<br />

humano: “esta en todo, en el sacrifico, el heroísmo...está<br />

implicada en lo que le separa <strong>de</strong> sí mismo o en ese otro sí<br />

mismo que es otro ser humano.” Todos los movimientos<br />

<strong>de</strong> la violencia, la <strong>de</strong> nuestras pasiones, la <strong>de</strong>l sacrificio<br />

siguen los <strong>de</strong> la libertad humana bien sea en lo que ata-<br />

170<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 163 - 171


EL SACRIFICIO: DE LA MITOLOGIA A LA PSICOPATOLOGÍA. CLAVES PARA UNA APROXIMACIÓN A LA OBRA DE RENÉ GIRARD<br />

ña a la violencia individual o a la violencia colectiva. “La<br />

violencia <strong>de</strong> las crisis por las que pasan las civilizaciones...<br />

es la dialéctica <strong>de</strong> una progresión que implica el conflicto<br />

entre el Bien y el Mal”. Ey se refiere al filósofo Günther<br />

Stern(1902-1992), conocido sobre todo en nuestros días<br />

como el primer marido <strong>de</strong> Hannah Arendt (1906-1975).<br />

Durante su exilio en París huyendo <strong>de</strong> la persecución nazi,<br />

antes <strong>de</strong> su marcha para Estados-Unidos, publicó en francés<br />

un ensayo sobre la libertad humana firmado con el<br />

pseudónimo <strong>de</strong> An<strong>de</strong>rs, o sea, “Otro modo”, que ha servido<br />

a Ey para proponer su propia <strong>de</strong>finición <strong>de</strong> la patología<br />

mental como patología <strong>de</strong> la libertad en uno <strong>de</strong> sus Estudios<br />

psiquiátricos, cuya traducción al español acaba <strong>de</strong><br />

Bibliografia<br />

1. Girard R. La violence et le sacré (1972) in 2. p. 293- 699 14 .<br />

2. Girard R. De la violence à la divinité. Paris: Bernard Grasset;<br />

2007.<br />

3. Dante Alighieri. La Divina Comedia. Edición bilingüe (traducción,<br />

prólogo y notas <strong>de</strong> Ángel Crespo). Barcelona: Seix Barral<br />

1973,1994.<br />

4. Garrabé J. « Sabina Spielrein.: la naissance <strong>de</strong> la schizophrénie<br />

(1906-1912) » Evolution psychiatrique, 1995, I, Janv.-Mars,<br />

37-68.<br />

5. González Torres Y. El sacrificio humano entre los mexicas.<br />

México: F.C.E.; 1992.<br />

14. Traducido al español como La violencia y lo sagrado, Edit. Anagrama, Barcelona, 4ª edición 2005.<br />

163 - 171, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 171<br />

publicarse en Buenos Aires (11). Para Ey el problema <strong>de</strong><br />

la violencia maléfica sólo se pue<strong>de</strong> resolver a nivel <strong>de</strong> la<br />

consciencia y <strong>de</strong> la ética.<br />

Volvemos por lo tanto a través <strong>de</strong>l psicoanálisis <strong>de</strong> la violencia<br />

a lo que pue<strong>de</strong> ser una mitología: la construcción<br />

en el espíritu humano gracias a la consciencia <strong>de</strong> una ética<br />

que permite controlar la violencia natural <strong>de</strong>l ser humano.<br />

Dentro <strong>de</strong> este propósito, la contribución final <strong>de</strong><br />

los proposiciones <strong>de</strong> René Girard, luego <strong>de</strong> sus conceptos<br />

‘<strong>de</strong>seo mimético’, ‘chivo expiatorio’ y otros, correspon<strong>de</strong> a<br />

una ética <strong>de</strong> control consciente <strong>de</strong> la violencia.<br />

6. Métraux A. L’île <strong>de</strong> Pâques. Paris: Gallimard; 1941.<br />

7. Althusser L. L’avenir dure longtemps. Paris: Stock/IMEC; 1992.<br />

8. Pinguet M. La mort volontaire au Japon. Paris: Gallimard;<br />

1984.<br />

9. Garrabé J. “Pathographie <strong>de</strong> Mishima” en La beauté. Le Pavillon<br />

d’Or. Paris: Ellipses; 1986.<br />

10. Ey H. “Psychanalyse <strong>de</strong> la violence » en La violence. Recherches<br />

et Débats. (P.42-52)<br />

11. Ey H. Estudios psiquiátricos. Primera traducción española.<br />

Buenos Aires: Polemos; 2008.


Ayahuasca: Memoria y Conciencia<br />

Nuevas Aplicaciones <strong>de</strong> una Práctica<br />

Indígena Ancestral 1<br />

Conferencia inaugural para el 25 aniversario <strong>de</strong> la<br />

<strong>Sociedad</strong> <strong>de</strong> Antropología <strong>de</strong> la Conciencia, 15 <strong>de</strong> abril<br />

<strong>de</strong>l 2005, Universidad <strong>de</strong> Massachusetts, USA.<br />

Presentación<br />

Mi presencia aquí no se <strong>de</strong>be a que yo sea un gran científico,<br />

un especialista <strong>de</strong> la neurofisiología ni un <strong>de</strong>stacado<br />

filósofo <strong>de</strong> la conciencia sino, creo yo, al hecho <strong>de</strong><br />

que puedo testimoniar <strong>de</strong> una experiencia poco usual<br />

en la auto-exploración <strong>de</strong> la conciencia y sus aplicaciones<br />

terapéuticas. Y ello ilustra <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un principio la situación<br />

actual <strong>de</strong>l <strong>de</strong>bate contemporáneo alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong><br />

los fenómenos <strong>de</strong> la conciencia: la aceptación implícita<br />

o intuición <strong>de</strong> que <strong>de</strong>bamos pasar <strong>de</strong> un discurso "sobre"<br />

la conciencia a una experimentación directa <strong>de</strong> ella y <strong>de</strong><br />

sus modificaciones. Por cierto soy médico, especialista en<br />

medicina natural <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Paris, especialista<br />

en Patología Tropical en Amberes (Bélgica), profesor asociado<br />

a la Universidad Científica <strong>de</strong>l Sur <strong>de</strong> Lima, pero esos<br />

títulos no convocan en sí sino por el hecho que con ellos,<br />

o a pesar <strong>de</strong> ellos, me a<strong>de</strong>ntré personalmente en las prácticas<br />

<strong>de</strong>l chamanismo amazónico. Y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> allí extraje una<br />

aplicación terapéutica mediante la elaboración <strong>de</strong> un protocolo<br />

<strong>de</strong> atención a pacientes adictos. O sea, me atreví a<br />

cruzar ciertas fronteras, culturales, mentales, científicas,<br />

por varias circunstancias <strong>de</strong> mi vida y se presiente que<br />

se está globalizando esta ubicación "entre-fronteras" para<br />

muchos occi<strong>de</strong>ntales llamados a franquear un umbral similar<br />

en su búsqueda, a asumir un salto cualitativo en la<br />

empresa <strong>de</strong> su vida. Así me ubico hoy como un occi<strong>de</strong>ntal<br />

que se dirige a otros occi<strong>de</strong>ntales para testimoniar <strong>de</strong> una<br />

Jacques Mabit 2<br />

experiencia personal y reflexionar en base a ella. Permítanme<br />

entonces salir <strong>de</strong> los formalismos académicos para<br />

compartir sencillamente mi pensar en un lenguaje no sólo<br />

linear y racional pero también analógico o metafórico.<br />

Definición <strong>de</strong> la conciencia<br />

Para enten<strong>de</strong>rnos se requiere <strong>de</strong>finir qué es la conciencia<br />

y ahí empieza el primer obstáculo: nadie sabe lo que es<br />

la conciencia y no existe en la actualidad ninguna teoría<br />

científica unificada sobre este tema! El más gran<strong>de</strong> misterio<br />

científico y <strong>de</strong>l conocimiento humano es la naturaleza<br />

<strong>de</strong> la conciencia y por en<strong>de</strong> la naturaleza humana. Seríamos<br />

sumamente pretenciosos en pensar que vamos a<br />

<strong>de</strong>velar este misterio hoy entre amigos!<br />

El fisico Nick Herbert', se atreve a <strong>de</strong>cir que "lo único que<br />

creemos saber es que la conciencia tiene más que ver con<br />

la cabeza que con los pies"!<br />

Po<strong>de</strong>mos arriesgarnos a <strong>de</strong>cir lo que ciertamente no es<br />

la conciencia: no es un sistema formal; no es una función<br />

psíquica aislada; no es solamente la cara subjetiva<br />

<strong>de</strong>l mundo neurónico como lo postulaba el pensamiento<br />

materialista freudiano; no es asimilable al "yo" porque lo<br />

<strong>de</strong>sborda; no está limitada al sujeto ya que existen fenómenos<br />

<strong>de</strong> conciencia interpersonal; no pue<strong>de</strong> ser un sistema<br />

auto-referencia ya que estaría cerrado sobre sí mismo<br />

cuando los sistemas vivos son siempre abiertos; no pue<strong>de</strong><br />

ser una mera función racional ya que sería auto-contradictorio<br />

(por ejemplo, qué grado <strong>de</strong> veracidad tendría la<br />

afirmación "yo miento"?).<br />

1. Conferencia inaugural para el 25 aniversario <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> <strong>de</strong> Antropología <strong>de</strong> la Conciencia, 15 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 2005, Universidad <strong>de</strong> Massachusetts, USA.<br />

2. Médico, fundador <strong>de</strong>l Centro Takiwasi (www.takiwasi.com)<br />

* Nota <strong>de</strong>l Editor: el autor gentilmente autorizó a este edior a reproducir su texto.<br />

172<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


Intentaré <strong>de</strong>cir que conozco diferentes estados <strong>de</strong> conciencia<br />

que apelan a una percepción global <strong>de</strong> mi presencia<br />

a mí mismo y al mundo y que <strong>de</strong>finen un sujeto:<br />

yo. Tampoco ello me permite <strong>de</strong>finir este yo como una<br />

especie <strong>de</strong> núcleo preciso ubicado en mí cuya ilusión fue<br />

postulada por la filosofía hindú (Shankará y Nágárjuna) y<br />

avanzado inclusive <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los inicios <strong>de</strong> la enseñanza budista'.<br />

Esos estados <strong>de</strong> conciencia sin embargo incluyen<br />

no solamente la auto-percepción que parece venir <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

a<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> mí sino también experiencias que parecen revelar<br />

realida<strong>de</strong>s concientes internas y externas, autónomas<br />

en relación a mi yo.<br />

Los límites <strong>de</strong> la ciencia<br />

Antes <strong>de</strong> ir más a<strong>de</strong>lante, creo necesario proponer un rápido<br />

panorama <strong>de</strong>l estado <strong>de</strong> la ciencia actual. De hecho<br />

la pregunta que se plantea <strong>de</strong> inmediato es <strong>de</strong> saber si<br />

po<strong>de</strong>mos esperar <strong>de</strong>l progreso científico respuestas sobre<br />

nuestra naturaleza humana y nuestra conciencia. La<br />

constatación básica se impone en cuanto al mo<strong>de</strong>lo dominante<br />

<strong>de</strong> la ciencia mo<strong>de</strong>rna: se revela inoperante para<br />

<strong>de</strong>cirnos quienes somos.<br />

La ciencia alcanza hoy una gran complejidad en sus datos<br />

factuales que es inasequible a los individuos. Vale <strong>de</strong>cir<br />

que un individuo no pue<strong>de</strong> averiguar por sí mismo lo que<br />

la ciencia afirma y <strong>de</strong>be contentarse con creer lo que se<br />

afirma. A tal punto que se <strong>de</strong>sarrolla un sistema don<strong>de</strong> la<br />

información se repite en una manera <strong>de</strong> psitacismo verbal<br />

peligroso porque fácil <strong>de</strong> manipular. Por ejemplo sorpren<strong>de</strong><br />

cómo la difusión <strong>de</strong> las teorías sobre el HIV se difundieron<br />

en la prensa <strong>de</strong> vulgarización antes <strong>de</strong> se tratadas en<br />

revistas científicas, saltando las exigencias <strong>de</strong> la pruebas<br />

y averiguaciones habituales, sin que hasta ahora se haya<br />

podido comprobar una causalidad entre el virus <strong>de</strong>l HIV y<br />

el síndrome <strong>de</strong> inmuno-<strong>de</strong>ficiencia.<br />

Se actúa como si supiéramos perfectamente cómo funciona<br />

el mundo y con una falsa certidumbre cuando en realidad<br />

lo que ignoramos supera <strong>de</strong> mucho lo que creemos<br />

saber sobre nuestro universo. Ello permite que la industria<br />

por ejemplo se atreva a tomar altísimos riesgos <strong>de</strong>scartando<br />

el principio <strong>de</strong> precaución en las biotecnologías o el<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 173<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

genio genético. Fingimos dominar el curso <strong>de</strong> los eventos<br />

dando explicaciones racionales posteriores a eventos que<br />

no se controlaron ni previeron. Ello conviene al comercio<br />

y al espectáculo permanente que nos ofrece la sociedad<br />

consumista. La ciencia los alimenta y se nutre <strong>de</strong> ello.<br />

En realidad, si revisamos algunos temas estrellas que ilustran<br />

el pensamiento científico convencional y globalizado,<br />

nos damos cuenta por ejemplo:<br />

• Que la teoría <strong>de</strong> la relatividad general y <strong>de</strong> la mecánica<br />

cuántica son incompatibles;<br />

• Que el mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong>l Big Bang está sumamente cuestionado;<br />

• Que existen "eslabones" faltantes en una teoría <strong>de</strong> la<br />

evolución continúa;<br />

• Que el principio científico <strong>de</strong> la medida se contradice<br />

con la in<strong>de</strong>terminación cuántica (no se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>terminar<br />

a la vez la velocidad y la posición <strong>de</strong> una partícula);<br />

• Que el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l tiempo no es lineal como lo supone<br />

un mero sistema causa-efecto y la estructura racional<br />

<strong>de</strong>l lenguaje científico;<br />

• Que la famosa objetividad científica no tiene asi<strong>de</strong>ro<br />

cuando se comprobó que :<br />

• las partículas adoptan comportamientos <strong>de</strong> onda<br />

o corpúsculo (¿<strong>de</strong> qué "objeto" hablamos?)<br />

• que todo acto <strong>de</strong> medición interfiere con el objeto:<br />

ello anula la noción <strong>de</strong> estricta objetividad<br />

sobre la cual se preten<strong>de</strong> apoyar el mo<strong>de</strong>lo<br />

dominante<br />

• <strong>de</strong> que en función <strong>de</strong> la variedad <strong>de</strong> respuestas a<br />

una misma experiencia (reproductibilidad supuesta),<br />

ya no se habla <strong>de</strong> "causalidad fisica" sino <strong>de</strong><br />

"causalidad estadística", o sea <strong>de</strong> hechos "probables"<br />

• que no sabemos lo que es un fotón o un electrón<br />

sino "una especie <strong>de</strong> paquete <strong>de</strong> energía fluctuante"<br />

En el campo matemático los sistemas formales <strong>de</strong> Gó<strong>de</strong>l<br />

tocan otros límites conceptuales.<br />

La explicación cartesiana <strong>de</strong>l todo mediante el análisis<br />

<strong>de</strong> las partes también contradice las observaciones "holísticas"<br />

que <strong>de</strong>muestran la interrelación <strong>de</strong> todos los fe-


nómenos y objetos en el universo. El todo es más que la<br />

suma <strong>de</strong> sus partes y la parte pue<strong>de</strong> contener la totalidad<br />

<strong>de</strong>l objeto inicial. Por esa misma lógica, se pue<strong>de</strong> dudar<br />

que el romper partículas en aceleradores permita <strong>de</strong>tectar<br />

la naturaleza profunda <strong>de</strong> la materia, como el niño que<br />

<strong>de</strong>sarma su juguete para enten<strong>de</strong>r que lo anima.<br />

Los cuadros <strong>de</strong> Dalí nos dieron una i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> lo que son<br />

las estructuras fractales don<strong>de</strong> el cambio <strong>de</strong> escala revela<br />

otras estructuras sub-yacentes. La conciencia podría funcionar<br />

según este mo<strong>de</strong>lo, <strong>de</strong>scubriendo nuevas realida<strong>de</strong>s<br />

a medida que uno cambia <strong>de</strong> nivel <strong>de</strong> comprensión,<br />

sin que un nivel niegue y anule al otro.<br />

La física tuvo que introducir el "principio <strong>de</strong> incertidumbre":<br />

instaurar en principio la incertidumbre ilustra perfectamente<br />

y <strong>de</strong> manera paradójica la falta <strong>de</strong> certidumbres<br />

<strong>de</strong> la ciencia actual que se supone estable y fundada.<br />

Existe un margen <strong>de</strong> incapacidad para pre<strong>de</strong>cir los eventos,<br />

una in<strong>de</strong>terminación fundamental. Este conjunto <strong>de</strong><br />

incapacida<strong>de</strong>s, <strong>de</strong> incertidumbres, nos dan una medida <strong>de</strong><br />

la ignorancia actual <strong>de</strong> la ciencia.<br />

Sin embargo, no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> sorpren<strong>de</strong>r que a pesar <strong>de</strong> esas<br />

extremas limitaciones para rendir cuenta <strong>de</strong> nuestro universo,<br />

se imponga muchas veces a la ciencia como vara<br />

para <strong>de</strong>cretar lo que es verda<strong>de</strong>ro o cierto. Los mismos<br />

postulados <strong>de</strong> la lógica científica no autorizan esta osadía<br />

ya que la ciencia misma no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir lo verda<strong>de</strong>ro sino<br />

solamente formular "lo que no está consi<strong>de</strong>rado como<br />

falso en un momento dado". El mismo proceso científico<br />

supone la superación constante <strong>de</strong> las teorías formuladas<br />

por otras más amplias en un tiempo ulterior. Al momento<br />

<strong>de</strong> su elaboración una teoría contiene en germen la teoría<br />

siguiente que la remplazará: nunca podrá colocarse un<br />

punto final a este abordaje.<br />

Y es que la ciencia, sólo pue<strong>de</strong> respon<strong>de</strong>r, por lo menos<br />

parcialmente al "cómo" <strong>de</strong> las cosas y no al "por qué". Esta<br />

apropiación abusiva <strong>de</strong>l —"por qué" constituye un salto<br />

conceptual inaceptable, una trasgresión lógica grave, y<br />

entraña consecuencias lamentables que repercuten profundamente<br />

en la psicología occi<strong>de</strong>ntal actual. La ciencia<br />

reclama entonces el estatus <strong>de</strong> religión y su culto llega a<br />

tales extremos que <strong>de</strong>creta irracional lo que no pue<strong>de</strong> explicar<br />

y que pone en peligro su pretensión. La razón es su<br />

diosa como en los peores tiempos <strong>de</strong> la Revolución francesa<br />

don<strong>de</strong> se hacía <strong>de</strong>sfilar la Diosa Razón por la calles<br />

<strong>de</strong> París con gran cortejo y Robespierre a la cabeza con<br />

vestidura sacerdotal. Esa i<strong>de</strong>ntificación <strong>de</strong> la ciencia con<br />

la razón, escon<strong>de</strong> en realidad una grave pérdida <strong>de</strong> juicio<br />

ya que la ciencia se vuelve insensata, precisamente "pier<strong>de</strong><br />

la razón", porque extravía lo esencial <strong>de</strong> su función:<br />

establecer o dar sentido.<br />

Añadiendo más contradicciones, la ciencia respon<strong>de</strong> al<br />

"por qué", que se atreve a abordar, diciendo que todo<br />

se <strong>de</strong>be al azar, o sea que precisamente "no tiene sentido".<br />

Así, el mo<strong>de</strong>lo dominante se califica a sí mismo<br />

<strong>de</strong> "insensato".<br />

En cierto modo, el mo<strong>de</strong>lo científico ha tomado la posta<br />

<strong>de</strong> los gran<strong>de</strong>s mitos fundadores <strong>de</strong> nuestra sociedad para<br />

intentar dar cuenta <strong>de</strong> la realidad contemporánea y permitirnos<br />

reorganizar nuestra información global. Sin embargo,<br />

hoy en día, el mo<strong>de</strong>lo convencional, precisamente<br />

no pue<strong>de</strong> dar cuenta <strong>de</strong> una seria <strong>de</strong> eventos o fenómenos.<br />

El lenguaje categorizante, seco y duro <strong>de</strong> la ciencia<br />

exacta, no pue<strong>de</strong> dar cuenta con suficiente coherencia <strong>de</strong><br />

los datos traídos por la experiencia.<br />

Es el caso por ejemplo <strong>de</strong>l conjunto <strong>de</strong> los fenómenos paranormales,<br />

extra-sensoriales o fenómenos "psi". En este<br />

campo existe un corpus enorme <strong>de</strong> datos que el mo<strong>de</strong>lo<br />

convencional <strong>de</strong>ja simplemente <strong>de</strong> lado. Lo mismo en todas<br />

las prácticas terapéuticas calificadas groseramente <strong>de</strong><br />

"energéticas" y que <strong>de</strong>muestran ampliamente su eficacia<br />

sin que sean coherentes en relación al mo<strong>de</strong>lo dominante:<br />

homeopatía, osteopatía, terapia celular, etc. Cuando<br />

el científico francés Jacques Benveniste se atrevió a <strong>de</strong>mostrar<br />

una memoria <strong>de</strong>l agua en diluciones a potencias<br />

superiores al número <strong>de</strong> Avogadro fue sencillamente ridiculizado<br />

por la comunidad científica antes <strong>de</strong> que se<br />

averiguara sus experiencias. El dogma científico <strong>de</strong>cía que<br />

sin partículas no podía haber información almacenada en<br />

el agua y la experiencia fue rechazada porque la realidad<br />

<strong>de</strong> los hechos no coincidía con la teoría. Lo mismo por<br />

la curaciones con diluciones <strong>de</strong> células fetales animales<br />

174<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


inyectadas al ser humano (Niehans) que colisionaba con<br />

la teoría inmunológica y fueron prohibidas en Francia a<br />

pesar <strong>de</strong> que la experiencia clínica y biológica enseñaba<br />

que no había reacciones <strong>de</strong> rechazo fisiológico y que los<br />

órganos-metas reaccionaban a las inyecciones. Ni el famoso<br />

cirujano cardiaco Dr. Christian Barnard que trató<br />

su reumatismo invalidante en Suiza con esas medicinas<br />

pudo levantar este bloqueo.<br />

Encontramos las mismas limitaciones con la observación<br />

<strong>de</strong> faculta<strong>de</strong>s psíquicas no racionales como la telepatía, la<br />

precognición, la clarivi<strong>de</strong>ncia, la psicoquinesia, etc.<br />

Des<strong>de</strong> hace unos veinte años, se van acumulando datos<br />

sobre los estados <strong>de</strong> muerte inminente (EMI) o NDE (Near<br />

Death Experience) que traen nueva información que no<br />

cuadra con el mo<strong>de</strong>lo imperante (Raymond Moody, Elizabeth<br />

Kübler-Ross, Kenneth Ring, etc.).<br />

Muchas tradiciones médicas y espirituales ancestrales<br />

proporcionan datos sobre EMC inhabituales y que merecen<br />

mucha atención como los estados <strong>de</strong> meditación<br />

profunda. el control <strong>de</strong>l dolor por yoguis o fakires, la resistencia<br />

al sueño, al hambre o a la sed por ascetas <strong>de</strong><br />

diversas culturas. Existen pocos estudios sobre la neurobiología<br />

<strong>de</strong> la contemplación, <strong>de</strong>l éxtasis, <strong>de</strong> la meditación<br />

profunda, <strong>de</strong>l trance. Llama la atención constatar que el<br />

registro cerebral <strong>de</strong> la meditación profunda corresponda<br />

al mismo registro calificado <strong>de</strong> "muerte cerebral" por la<br />

ciencia actual y que sirve <strong>de</strong> <strong>de</strong>terminación oficial <strong>de</strong>l <strong>de</strong>ceso<br />

(en especial para la posible extracción <strong>de</strong> órganos<br />

para injertos).<br />

Nuestra misma tradición espiritual occi<strong>de</strong>ntal ofrece amplios<br />

datos sobre fenómenos extraordinarios <strong>de</strong> místicos<br />

cristianos como la anedia (ausencia <strong>de</strong> alimentación total<br />

durante años), los estigmas (Padre Pio, Marthe Robin,<br />

etc.), la incorrupción <strong>de</strong> cadáveres, emanación <strong>de</strong> aceites<br />

y olores <strong>de</strong>l cuerpo <strong>de</strong> santos, que han sido abordados por<br />

escasos científicos como el tanatólogo Dr. Hubert Larcher<br />

(4) que nunca accedieron a ser tomados en serio por el<br />

conjunto <strong>de</strong> la comunidad científica.<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 175<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

Conciencia y psicoterapia<br />

Des<strong>de</strong> los años 60 crecieron <strong>de</strong> manera exponencial los<br />

intentos <strong>de</strong> auto-inducción <strong>de</strong> modificaciones <strong>de</strong> la conciencia,<br />

básicamente con el uso <strong>de</strong> sustancias psicoactivas<br />

<strong>de</strong> todo índole. Esa inducción química se realizó <strong>de</strong><br />

manera <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nada, sin control, sin cuadro ni contexto<br />

<strong>de</strong> contención, sin guía... y <strong>de</strong>sembocó en el consi<strong>de</strong>rable<br />

fenómeno <strong>de</strong> las adicciones y toxicomanías. En el mismo<br />

tiempo ello dio acceso a po<strong>de</strong>rosas experiencias individuales<br />

frente a las cuales no hubo respuesta <strong>de</strong> la comunidad<br />

científica más que la psiquiatrización <strong>de</strong> los sujetos<br />

en pacientes <strong>de</strong>lirantes.<br />

Si la conciencia escapaba a la observación <strong>de</strong> las ciencias<br />

exactas, se podía suponer que era un tema central <strong>de</strong> las<br />

ciencias <strong>de</strong> la mente. Sin embargo, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Freud, la escuela<br />

materialista señala que la conciencia no es más que<br />

la cara sujetiva <strong>de</strong> problemas neurológicos, ubicada a la<br />

periferia <strong>de</strong>l mundo interior y <strong>de</strong> los sistemas memoriales.<br />

Entonces no existe ninguna conciencia ajena al "yo".<br />

En otros términos la conciencia se reduce al cerebro, éste<br />

a fenómenos biológicos y, en fin, ellos mismos a mecanismos<br />

finos moleculares: se perfila con evi<strong>de</strong>ncia que la<br />

psiquiatría clásica tiene como único futuro la prescripción<br />

<strong>de</strong> fármacos <strong>de</strong>stinados a restablecer el <strong>de</strong>sequilibrio<br />

bioquímico cerebral inductor <strong>de</strong> las perturbaciones<br />

mentales y por en<strong>de</strong> conductuales <strong>de</strong>l sujeto. El sujeto<br />

se reduce a fin <strong>de</strong> cuentas en un <strong>de</strong>terminismo genéticoneurofisiológico.<br />

Con esa misma lógica todo fenómeno no racional es<br />

etiquetado como alucinatorio por la psiquiatría y así se<br />

evacua automáticamente la cuestión <strong>de</strong>l sentido. Esa exclusión<br />

dogmática <strong>de</strong> la dimensión trans-racional <strong>de</strong> la<br />

realidad correspon<strong>de</strong> a la negación por el corpus <strong>de</strong> la<br />

ciencia racionalista a tomar en consi<strong>de</strong>ración una dimensión<br />

trascen<strong>de</strong>ntal o espiritual <strong>de</strong> la vivencia humana. Lo<br />

religioso o lo sagrado constituyen los nuevos tabúes <strong>de</strong><br />

una ciencia convertida en religión. Este reduccionismo<br />

racionalista occi<strong>de</strong>ntal instaura una ceguera en la observación<br />

<strong>de</strong> los fenómenos, un sesgo conceptual, y coloca<br />

como <strong>de</strong>finitivo que lo espiritual sería meramente un subproducto<br />

<strong>de</strong> lo mental, una producción <strong>de</strong> la psique.


El Dr. Larson (5) <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Oxford señala que<br />

los estudios psiquiátricos que toman en cuenta la variable<br />

espiritual o religiosa en sus mediciones son escasos. En un<br />

estudio retrospectivo, en cinco años, entre 1978 y 1982,<br />

menos <strong>de</strong>l 1% <strong>de</strong> los estudios cuantitativos en psiquiatría<br />

publicados en 4 <strong>de</strong> las mayores revistas <strong>de</strong> psiquiatría<br />

anglo-sajona incluyen una o varias mediciones <strong>de</strong>l<br />

compromiso religioso <strong>de</strong> los pacientes: sólo 3 <strong>de</strong> los 2348<br />

estudios examinados están centrados sobre una variable<br />

religiosa. Ello a pesar <strong>de</strong> que la OMS ha introducido en la<br />

lista <strong>de</strong> factores esenciales para la salud plena la dimensión<br />

espiritual en los primeros 6 factores esenciales para<br />

la calidad <strong>de</strong> vida en todas la culturas.<br />

La misma clasificación <strong>de</strong> las patologías mentales por el<br />

DSM ubica todo fenómeno "místico" en la categoría <strong>de</strong><br />

disturbio psiquiátrico. De este modo, la lista <strong>de</strong> patologías<br />

va aumentando progresivamente y pasó <strong>de</strong> 180 disturbios<br />

mentales i<strong>de</strong>ntificados en 1952 a 320 en 1995 con la consecuencia<br />

inevitable <strong>de</strong> que 100% <strong>de</strong> la población norteamericana<br />

sufre <strong>de</strong> por lo menos un disturbo psiquiátrico<br />

profundo. La segunda consecuencia inmediata es que<br />

toda la población llegará a consumir permanentemente<br />

algún psicofármaco... sino varios al día, para <strong>de</strong>spertar<br />

para dormir, para estimularse y para tranquilizarse...<br />

Las insistencias <strong>de</strong> los sociólogos en especial sobre la<br />

"fabricación" <strong>de</strong> la locura y <strong>de</strong>l <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>n como concepto<br />

cultural (Foucault) y postura social dogmática están relegadas<br />

por las imposiciones <strong>de</strong>l mo<strong>de</strong>lo neuro-biológico.<br />

Se pue<strong>de</strong> hasta suponer que ciertos síndromes como<br />

la <strong>de</strong>presión son voluntariamente creados y amplificados<br />

con el fin <strong>de</strong> abrir nuevos mercados a la industria<br />

farmacéutica.<br />

El Dr. Ronald Kesler ha publicado un estudio en el "Journal<br />

of the American Medical Association" sobre la <strong>de</strong>presión<br />

en el mundo. Revela que hay unos 150 millones <strong>de</strong> personas<br />

<strong>de</strong>presivas en el mundo y que esta patología afecta<br />

tanto a los países <strong>de</strong>l Norte como a los <strong>de</strong>l Sur. Alcanza<br />

la cifra <strong>de</strong> 10% <strong>de</strong> la población total tanto en Estados<br />

Unidos como en Rusia y en la India. La <strong>de</strong>presión unipolar<br />

sería la primera fuente <strong>de</strong> discapacidad a nivel mundial.<br />

Esta noticia tan alarmante mereció figurar en la carátula<br />

<strong>de</strong>l semanario Newsweek (June 21, 2004) con el título:<br />

-'Planeta Triste: la <strong>de</strong>presión se ha vuelto una enfermedad<br />

globalizada" (6). La revista asume una cobertura <strong>de</strong><br />

este tema, insistiendo sobre el carácter universal <strong>de</strong> esa<br />

patología sumamente invalidante.<br />

Es <strong>de</strong> notar que las perspectivas sombrías <strong>de</strong> un mundo<br />

sin sentido, sin valores estables, genera una <strong>de</strong>presión colectiva.<br />

La funcionalidad <strong>de</strong> una vida materialista no satisface<br />

les necesida<strong>de</strong>s espirituales.<br />

El Vaticano realizó en noviembre <strong>de</strong>l 2003 el l8º Congreso<br />

Internacional <strong>de</strong>l Consejo Pontifical <strong>de</strong> la Pastoral <strong>de</strong> la<br />

<strong>Salud</strong> sobre el tema <strong>de</strong> la <strong>de</strong>presión nerviosa, en consi<strong>de</strong>ración<br />

<strong>de</strong> que es actualmente "la enfermedad más mortífera<br />

<strong>de</strong> la humanidad, primera causa <strong>de</strong> <strong>de</strong>cesos". Pero el<br />

Papa Juan-Pablo II agregó que en su opinión -'la <strong>de</strong>presión<br />

es siempre una prueba espiritual".<br />

De hecho la <strong>de</strong>presión plantea interrogantes personales<br />

acuciantes sobre el sentido <strong>de</strong> la vida propia y se teme<br />

que al evacuar medicalmente sin más consi<strong>de</strong>ración este<br />

síndrome, en el mismo tiempo, se confisque al paciente la<br />

oportunidad <strong>de</strong> acce<strong>de</strong>r al sentido <strong>de</strong> la crisis que atraviesa<br />

y por en<strong>de</strong>, a su feliz resolución. Esa ten<strong>de</strong>ncia a<br />

borrar todo malestar sin acce<strong>de</strong>r a su significado profundo<br />

parece una característica <strong>de</strong>l esquema occi<strong>de</strong>ntal. En<br />

un congreso sobre el dolor en Francia en noviembre 2003<br />

(SETD, Montpellier), se señaló:<br />

• Que la venta <strong>de</strong> medicamentos antálgicos cubría alre<strong>de</strong>dor<br />

<strong>de</strong> 30% <strong>de</strong>l mercado farmacéutico<br />

• Que se estaba promocionando el "<strong>de</strong>recho" <strong>de</strong> todo paciente<br />

a no sufrir.<br />

Desaparición <strong>de</strong>l sufrimiento físico, <strong>de</strong>saparición <strong>de</strong>l<br />

sufrimiento psíquico... se pagan con la <strong>de</strong>saparición <strong>de</strong>l<br />

acceso al sentido <strong>de</strong> su vida y tien<strong>de</strong>n a alimentar el<br />

mito <strong>de</strong> la felicidad química ofrecida por diferentes tipos<br />

<strong>de</strong> anestésicos.<br />

176<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


La vía <strong>de</strong> la revelación y la<br />

reapropiación <strong>de</strong> la subjetividad<br />

Así vemos que en la situación actual, el mo<strong>de</strong>lo clásico<br />

<strong>de</strong> la ciencia no respon<strong>de</strong> a las necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> tratar el<br />

crecimiento <strong>de</strong> la información que <strong>de</strong>sborda ampliamente<br />

los límites <strong>de</strong> su campo. Se requiere un salto cualitativo<br />

en base a una revisión epistemológica que permita acce<strong>de</strong>r<br />

a una ciencia <strong>de</strong> la complejidad y formular un nuevo<br />

paradigma. Del mismo modo como Einstein introdujo en<br />

el mo<strong>de</strong>lo euclidiano la variable <strong>de</strong>l tiempo para formular<br />

su teoría <strong>de</strong> la relatividad, necesitamos introducir en los<br />

mo<strong>de</strong>los contemporáneo la variable <strong>de</strong> la conciencia para<br />

acce<strong>de</strong>r a una propuesta más amplia y unificadora.<br />

Des<strong>de</strong> 1905 y la propuesta <strong>de</strong> Einstein, no hubo ninguna<br />

otra introducción fundamental en la física y en nuestra<br />

manera <strong>de</strong> concebir al mundo. Ya va un siglo en que no<br />

se nota un avance notable en la cosmovisión occi<strong>de</strong>ntal<br />

<strong>de</strong>l universo y <strong>de</strong> la vida. El <strong>de</strong>sarrollo abrumador <strong>de</strong> las<br />

tecnologías generadas en base a este nuevo concepto nos<br />

hace pensar que la ciencia avanzó. Pero se trata <strong>de</strong> aplicaciones<br />

diversas <strong>de</strong> un único aporte fundamental.<br />

Un sistema no pue<strong>de</strong> auto-justificarse completamente<br />

sino sería auto-referente, o sea clausurado sobre sí mismo,<br />

y en los sistemas vivos sabemos que no están cerrados<br />

sino abiertos por <strong>de</strong>finición. Explicar un sistema supone<br />

pasar a un nivel superior con la ayuda <strong>de</strong> una meta-teoría<br />

que lo supere. Sin embargo, una teoría formal apela a<br />

otra meta-teoría para justificarla completamente... pero<br />

esa última igualmente requiere <strong>de</strong> otra meta-teoría para<br />

justificarse, y así sucesivamente. En tal sistema, el real es<br />

finalmente incognosible.<br />

El ser humano no podría así conocerse por esfuerzo propio<br />

sobre sí mismo. ¿Cómo el ser humano podría contenerse<br />

en su auto-<strong>de</strong>scripción? ¿Cómo pue<strong>de</strong> superar sus<br />

propios límites? ¿Cómo no caer en la ilusión <strong>de</strong>l yo que<br />

parece auto-generarse?<br />

En la medida en que la conciencia es más amplía que el<br />

concepto <strong>de</strong> "yo", en que abarca un Yo trascen<strong>de</strong>nte y<br />

el universo mismo, en que en cierto modo trascien<strong>de</strong> al<br />

mundo visible o mundo <strong>de</strong> la manifestación, señala una<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 177<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

vía <strong>de</strong> acceso al conocimiento a través <strong>de</strong> la revelación.<br />

No sería el "yo" que buscaría a la conciencia trascen<strong>de</strong>ntal<br />

sino ella que llegaría a revelarse a este "yo" como realidad<br />

dinámica e inteligente. En otras palabras, la conciencia<br />

tendría un grado <strong>de</strong> autonomía en relación al "yo" o <strong>de</strong><br />

in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia en relación al sujeto que piensa y siente...<br />

Y es una experiencia innata en nosotros no po<strong>de</strong>r concebirnos<br />

sólo como una especie <strong>de</strong> complejo psico-somático<br />

llamado "John" o "Ana". Sabemos sin pruebas que lo esencial<br />

no resi<strong>de</strong> en lo que <strong>de</strong>scriben los sentidos ni en la<br />

formalidad <strong>de</strong>l ser social. Vale <strong>de</strong>cir, que realizamos que el<br />

conocimiento último resi<strong>de</strong> en dimensiones metafísicas.<br />

La esencia <strong>de</strong> las cosas parece escapar <strong>de</strong> nuestros sentidos<br />

inmediatos: los fenómenos, las apariencias, las manifestaciones<br />

sensibles... no hacen sino señalar este "algo"<br />

escondido <strong>de</strong>trás. Nuestras más profundas experiencias<br />

<strong>de</strong> la vida tienen algo <strong>de</strong> in<strong>de</strong>cible, son internas (o así lo<br />

percibimos), invisibles afuera y sin embargo fundamentales.<br />

Des<strong>de</strong> Platón con su mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> las I<strong>de</strong>as, Jung con la<br />

dimensión <strong>de</strong>l "numen" (experiencias numinosas), o <strong>de</strong> la<br />

antropología con las Formas arquetípicas que presi<strong>de</strong>n a<br />

la manifestación sensible, el hombre presintió la existencia<br />

<strong>de</strong> una realidad invisible. Para los aborígenes australianos,<br />

este mundo invisible es más real que nuestra realidad<br />

<strong>de</strong>l aquí y ahora. Los hindúes evocaron la gran ilusión<br />

(maya) <strong>de</strong> la percepción habitual <strong>de</strong> nuestra existencia. Es<br />

ese mundo primigenio y fundador que vendría a revelarse<br />

a nuestra conciencia. Los místicos <strong>de</strong> todas las culturas<br />

no pue<strong>de</strong>n <strong>de</strong>cir mucho <strong>de</strong> sus éxtasis que los lleva a un<br />

universo supra-verbal.<br />

Este or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> la revelación podría darse por la vía <strong>de</strong> la<br />

inspiración o por la vía <strong>de</strong> la naturaleza. De la vía <strong>de</strong> la inspiración<br />

han surgido por ejemplo los monoteísmos abrahamicos<br />

(judaísmo, cristianismo, islam) basados en los<br />

Libros (Talmud, Biblia, Corán). Sin embargo, la institucionalización<br />

<strong>de</strong> las iglesias llevó al clero a una <strong>de</strong>sconfianza<br />

progresiva hacia las experiencias directas <strong>de</strong> revelación<br />

que obvian su autoridad, toda postura mística siendo catalogada<br />

<strong>de</strong> sospechosa <strong>de</strong>s<strong>de</strong> sus inicios. De este modo,<br />

se produjo una confiscación <strong>de</strong> parte <strong>de</strong> las iglesias hacia<br />

el acceso directo al conocimiento. La ciencia contemporánea<br />

proce<strong>de</strong> <strong>de</strong>l mismo modo cuando adopta posturas<br />

igualmente institucionalizadas que la transforman en re-


ligión dogmática. Se solicita muchas veces al individuo<br />

que acepte lo que los "sabios" afirman sin po<strong>de</strong>r acce<strong>de</strong>r<br />

a la averiguación propia <strong>de</strong> lo avanzado. Del mismo modo<br />

en que la ciencia contradice sus propios postulados y no<br />

da acceso a la averiguación individual, la religión contradice<br />

los suyos ya que la fe se <strong>de</strong>fine teológicamente como<br />

"la adhesión <strong>de</strong> la inteligencia a las verda<strong>de</strong>s reveladas". O<br />

sea, se supone que el creyente pueda averiguar <strong>de</strong> algún<br />

modo la veracidad <strong>de</strong>l contenido <strong>de</strong> su fe y no solamente<br />

hipotecar su ser o su espíritu crítico para someterse ciegamente<br />

a un credo.<br />

Esa confiscación lleva actualmente a muchos occi<strong>de</strong>ntales<br />

a atreverse a ir al encuentro consigo mismo saltando<br />

encima <strong>de</strong> todos los dogmas científicos o religiosos. Se<br />

pue<strong>de</strong> ver ahí un intento legítimo <strong>de</strong> recuperación <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>recho al conocimiento directo, a la averiguación <strong>de</strong> lo<br />

revelado, a una reapropiación <strong>de</strong> la libertad individual <strong>de</strong><br />

acceso a su propia conciencia.<br />

Otro or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> revelación parte <strong>de</strong> la observación <strong>de</strong> la naturaleza<br />

como lugar <strong>de</strong> manifestación <strong>de</strong>l conocimiento.<br />

La ciencia occi<strong>de</strong>ntal se encargó <strong>de</strong> ello pero <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la vía<br />

<strong>de</strong>l conocimiento objetivo, <strong>de</strong>jando <strong>de</strong> lado la dimensión<br />

sujetiva <strong>de</strong>l abordaje <strong>de</strong> la naturaleza. Para los mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong><br />

la mecánica clásica hasta <strong>de</strong> la termodinámica, esos datos<br />

fueron suficientes y eficientes. Sin embargo, el advenimiento<br />

<strong>de</strong> la era molecular y luego atómica y sub-atómica<br />

revela la ina<strong>de</strong>cuación <strong>de</strong> esos mo<strong>de</strong>los.<br />

Mientras tanto, los pueblos <strong>de</strong> cultura ancestral, enfocaron<br />

su exploración <strong>de</strong>l mundo precisamente por la vía <strong>de</strong>l<br />

conocimiento subjetivo <strong>de</strong> la naturaleza. Esa subjetividad<br />

<strong>de</strong>svalorizada y <strong>de</strong>nigrada por las pretensiones <strong>de</strong>l pensamiento<br />

occi<strong>de</strong>ntal objetivizante, recupera hoy plena<br />

vali<strong>de</strong>z. Porque los indígenas no solamente elaboraron<br />

<strong>de</strong>scripciones valiosas <strong>de</strong> realida<strong>de</strong>s no visibles <strong>de</strong> carácter<br />

metafísico <strong>de</strong> las cuales se ríen muchos occi<strong>de</strong>ntales prisioneros<br />

<strong>de</strong> sus prejuicios y su soberbia, sino que <strong>de</strong>mostraron<br />

que la coherencia <strong>de</strong> sus métodos les permite alcanzar<br />

también conocimientos sobre la realidad tangible.<br />

La medicina mo<strong>de</strong>rna ya se ha proveído <strong>de</strong> muchos conocimientos<br />

ancestrales para constituirse. La quinina (el<br />

árbol <strong>de</strong> la Quina es un símbolo <strong>de</strong>l Perú) permitió enfrentar<br />

la malaria aportada por lo españoles. La digitalina fue<br />

un aporte esencial para la cardiología. El curare permitió<br />

realizar las intervenciones <strong>de</strong> cirugía interna. La coca proporcionó<br />

los anestésicos locales para la cirugía ocular...<br />

La lista es muy larga y hasta 70% <strong>de</strong> los medicamentos<br />

<strong>de</strong>rivan <strong>de</strong>l conocimiento fitoterapéutico tradicional. No<br />

es exagerado <strong>de</strong>cir que la medicina mo<strong>de</strong>rna no existiera<br />

sin el aporte consi<strong>de</strong>rable <strong>de</strong>l saber ancestral empírico. Y<br />

es necesario insistir sobre el hecho <strong>de</strong> que esos conocimientos<br />

no pue<strong>de</strong>n ser fruto <strong>de</strong>l azar dado su extrema<br />

complejidad como en el caso <strong>de</strong> la elaboración <strong>de</strong>l curare<br />

que requiere <strong>de</strong> varios días <strong>de</strong> procedimientos, la mezcla<br />

<strong>de</strong> 40 especies vegetales, evadir vapores mortales, inventar<br />

el modo <strong>de</strong> inyección sub-cutáneo no tóxico, etc. Las<br />

probabilida<strong>de</strong>s que se <strong>de</strong>n todos los factores necesarios<br />

a su producción escapan totalmente a la casualidad y al<br />

método ensayo-error sino revelan una producción inteligente<br />

e "inspirada".<br />

Esa "inspiración" inicial necesaria al acceso elaborado al<br />

conocimiento no <strong>de</strong>bería extrañarnos si se ubica también<br />

a la raíz <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong>scubrimientos occi<strong>de</strong>ntales como<br />

Arquíme<strong>de</strong>s en su baño <strong>de</strong>scubriendo la presión, Newton<br />

y su manzana para la gravedad, Poincarré y sus "sueños<br />

matemáticos" o el premio Nobel 1993 <strong>de</strong> química, Kary B.<br />

Mullís que encontró el método PCR (polymerase chain<br />

reaction) gracias, según dice, a sus tomas <strong>de</strong> LSD7. ¡Hasta<br />

el profeta <strong>de</strong> la razón, Descartes, merece este título por<br />

haber sido inspirado por un ángel como el mismo cuenta<br />

para escribir el "El Discurso <strong>de</strong>l Método"!<br />

Las vías <strong>de</strong>l conocimiento ancestral no occi<strong>de</strong>ntal nos<br />

permitirían recuperar y revalorizar nuestra subjetividad en<br />

el proceso <strong>de</strong> acceso al conocimiento. Es que los indígenas<br />

no solamente observaron la naturaleza exterior sino<br />

que profundizaron en la exploración <strong>de</strong>l mundo interno,<br />

tomando su propio cuerpo como ubicación en el aquí y<br />

ahora <strong>de</strong> su conciencia. Desarrollaron técnicas extremadamente<br />

sofisticadas <strong>de</strong> inducción <strong>de</strong> estados modificados<br />

<strong>de</strong> la conciencia, actuando sobre los sentidos mediante<br />

técnicas reduciendo (hipo) o aumentando (híper)<br />

los estimuli sensoriales. Abarcan el uso <strong>de</strong> ritmos, danzas,<br />

ayunos, aislamiento sensorial, agotamiento físico, técnicas<br />

sexuales, inducción <strong>de</strong>l dolor, alteración <strong>de</strong>l sueño, y<br />

178<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


el recurso <strong>de</strong>l enorme potencial <strong>de</strong> plantas psicoactivas y<br />

otras sustancias animales o minerales.<br />

Esas modificaciones inducidas <strong>de</strong> la conciencia permiten<br />

al sujeto incorporar experiencias <strong>de</strong> la dimensión cuántica<br />

<strong>de</strong> la vida. Esas últimas no son accesibles al sentido<br />

común y a las percepciones inmediatas.<br />

Somos hechos <strong>de</strong> un cuerpo que no ha superado conscientemente<br />

vivencias <strong>de</strong> nivel molecular pero con una<br />

mente que tiene datos <strong>de</strong> nivel cuántico. Nuestra memoria<br />

somática se encuentra disociada <strong>de</strong> nuestra memoria<br />

psíquica. Este divorcio es extremadamente doloroso y perturbador,<br />

hasta llegar a generar un estado disociativo en<br />

nosotros generador <strong>de</strong> patología mental.<br />

Tocamos y vemos materia <strong>de</strong>nsa don<strong>de</strong> se nos dice que<br />

hay sólo vacío, y en <strong>de</strong>l aire que vemos vació se nos dice<br />

que está lleno <strong>de</strong> ondas. ¿Cómo integrar la reversibilidad<br />

<strong>de</strong>l tiempo cuando vivimos atados a relojes que andan<br />

inexorablemente <strong>de</strong> manera linear en el tiempo y estructuran<br />

nuestra vida cotidiana?<br />

Las estructuras cerebrales nos ofrecen un soporte esquemático<br />

<strong>de</strong> nuestro funcionamiento interno. Y digo esquemático<br />

ya que no se trata más que <strong>de</strong> una metáfora que<br />

ilustra nuestro propósito pero no lo encierra ni agota con<br />

ella todos sus significados. De hecho el cerebro se pue<strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>scribir como dos hemisferios unidos por un puente pero<br />

McLean propone también la <strong>de</strong>scripción en tres pisos que<br />

no excluye la vali<strong>de</strong>z <strong>de</strong> la primera.<br />

Si el cerebro izquierdo reúne las funciones cerebrales<br />

<strong>de</strong> lógica conceptual, racionalidad, pensamiento linear,<br />

categorizante, epicrítico, el cerebro <strong>de</strong>recho apela a las<br />

funciones transracionales, emocionales, melódicas, metafóricas,<br />

analógicas. Por 10 estudios sobre el cerebro izquierdo,<br />

sólo hay uno sobre el cerebro <strong>de</strong>recho (8). Ello<br />

ilustra perfectamente la orientación clara <strong>de</strong> la ciencia<br />

occi<strong>de</strong>ntal hacia una forma unilateral <strong>de</strong> observación<br />

<strong>de</strong> lo real. El pensamiento dominante racional tien<strong>de</strong> a<br />

ignorar los datos proporcionados por las funciones cerebrales<br />

no racionales, y ello se adiestra <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la más<br />

tierna infancia. Sin embargo, la "coloración" emocional,<br />

ambiental, integrada por el cerebro <strong>de</strong>recho, acompaña<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 179<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

toda praxis, gnosis o mnesis <strong>de</strong>l cerebro izquierdo y es<br />

indispensable a la correcta integración <strong>de</strong> esas funciones,<br />

aunque sean generalmente inconscientes en nuestro<br />

espacio cultural. Nos encontramos así con un hemisferio<br />

izquierdo muy <strong>de</strong>sarrollado pero con una atrofia funcional<br />

<strong>de</strong>l cerebro <strong>de</strong>recho.<br />

A la inversa, los pueblos tradicionales ejercitan <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el<br />

nacimiento las funciones analógicas, el lenguaje metafórico<br />

y tien<strong>de</strong>n a <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> lado el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> las funciones<br />

racionales. Ya entrevemos que un fructífero intercambio<br />

se pue<strong>de</strong> establecer entre ambos espacios culturales<br />

para el adiestramiento mutuo <strong>de</strong> las funciones psíquicas<br />

atrofiadas <strong>de</strong>l otro.<br />

La zona puente entre ambos hemisferios es precisamente<br />

la parte límbica que correspon<strong>de</strong> a la regulación <strong>de</strong>l humor,<br />

<strong>de</strong>l ánimo. El intercambio requiere entonces <strong>de</strong> esa<br />

empatía hacia "lo otro" con el fin <strong>de</strong> conocerlo y <strong>de</strong>scubrirlo.<br />

El cuerpo calloso, se<strong>de</strong> <strong>de</strong>l "humor" psíquico, reactivado<br />

por la fecundación <strong>de</strong> ambos hemisferios vividos<br />

como complementarios y no opuestos, restableciendo la<br />

dinámica <strong>de</strong> sistemas abiertos y por en<strong>de</strong> vivos, nos da la<br />

esperanza <strong>de</strong> cambiar la tristeza mortífera imperante en<br />

alegría dadora <strong>de</strong> vida.<br />

La <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong> MacLean <strong>de</strong> un cerebro tri-único revela<br />

tres niveles <strong>de</strong> integración <strong>de</strong> la información:<br />

• La parte cortical superior es <strong>de</strong> la integración simbólica<br />

y supone el acceso a fenómenos racionales y la adquisición<br />

<strong>de</strong>l lenguaje hasta el discurso racional humano. Integración<br />

mediante el logos. Correspon<strong>de</strong> a estructuras<br />

moleculares y la medicina alopática clásica. Lugar <strong>de</strong> la<br />

gnosis o conocimiento racional. Memoria conceptual.<br />

• La parte sub-cortical es <strong>de</strong> los mamíferos superiores y<br />

da acceso al subconsciente con un lenguaje no linear,<br />

transracional, metafórico, zona <strong>de</strong> los sueños, <strong>de</strong> la<br />

elaboración <strong>de</strong> los mitos, <strong>de</strong> la integración mediante la<br />

emoción. Correspon<strong>de</strong> a la medicina psico-corporal o<br />

energética, al nivel atómico. Lugar <strong>de</strong> la praxis o acción<br />

o dinamización <strong>de</strong>l pensamiento por los afectos. Memoria<br />

emocional.<br />

• El cerebro profundo o paleo-cerebro, cerebro reptiliano,<br />

correspon<strong>de</strong> al inconsciente profundo, las fun-


ciones inconscientes <strong>de</strong> supervivencia, al lenguaje<br />

analógico rítmico (ikaros, cantos <strong>de</strong> cuna), a la integración<br />

mediante el cuerpo, a las memorias somáticas<br />

que afectan funciones fisiológicas básicas<br />

como la reproducción, la nutrición la temperatura,<br />

las <strong>de</strong>fensas. Correspon<strong>de</strong> a la medicina chamánica<br />

y estructuras sub-atómicas. Lugar <strong>de</strong> la mnesis.<br />

Según este esquema se entien<strong>de</strong> que las medicinas chamánicas<br />

permiten acce<strong>de</strong>r a las memorias más escondidas.<br />

Las vivencias inducidas a este nivel darán lugar a<br />

nuevas engramaciones en el cuerpo, que permitan corregir<br />

las matrices anteriores. Esas experiencias <strong>de</strong> EMC inducidas,<br />

permitirán al sujeto vivenciar en directo fenómenos<br />

<strong>de</strong> naturaleza cuántica y así integrar esa dimensión en su<br />

esfera psíquica-emocional. Los últimos estudios <strong>de</strong> Rick<br />

Strassman sobre la DMT muestran que esa sustancia que<br />

encontramos en la Ayahuasca es también secretada por la<br />

glándula pineal ubicada en la base <strong>de</strong>l cerebro y presente<br />

en los estados místicos o situaciones similares como<br />

por ejemplo las NDE (9). Los indígenas supieron ello <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

hace miles <strong>de</strong> años.<br />

Supieron también que el uso <strong>de</strong> perfumes y olores subliminales<br />

podían transformar el ánimo <strong>de</strong> una persona y es<br />

ampliamente utilizado en su terapéutica psíquica lo que<br />

no es extraño ahora que sabemos <strong>de</strong> la conexión directa<br />

<strong>de</strong>l nervio olfativo con esa zona cerebral. El premio Nobel<br />

2004 <strong>de</strong> medicina fue atribuido Richard Axel y Linda B.<br />

Buck por <strong>de</strong>scubrimiento importantes sobre el funcionamiento<br />

<strong>de</strong>l olfato, calificado por la Aca<strong>de</strong>mia Noruega<br />

como el "más enigmático <strong>de</strong> nuestros sentidos".<br />

Este cerebro profundo no se alcanza mediante la palabra<br />

racional (cerebro cortical, mamíferos superiores, ego<br />

consciente), ni por el abordaje psico-emocional (cerebro<br />

intermedio <strong>de</strong> los mamíferos inferiores, inconsciente individual),<br />

sino mediante los estados modificados <strong>de</strong> conciencia<br />

y el abordaje psico-espiritual <strong>de</strong>l cuerpo físico (cerebro<br />

reptiliano, paleo o archeo-cerebro, inconsciente colectivo).<br />

* Nota <strong>de</strong>l Editor: EMC: Estados modificados <strong>de</strong> conciencia<br />

Mo<strong>de</strong>los científicos coherentes<br />

con la sabiduría ancestral<br />

Así, igual que con el mo<strong>de</strong>lo neuro-anatómico <strong>de</strong> MacLean<br />

creo útil señalar cómo emergen últimamente numerosos<br />

puentes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las avanzadas <strong>de</strong> la ciencia occi<strong>de</strong>ntal que<br />

permiten establecer mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> coherencia posibles con<br />

las experiencias chamánicas, tejiendo entramado o puentes<br />

entre saber ancestral y ciencia occi<strong>de</strong>ntal.<br />

La física cuántica no contradice la práctica chamánica<br />

y más bien coinci<strong>de</strong> con ella, especialmente durante los<br />

EMC cuando constata:<br />

• La inexistencia <strong>de</strong> la separación observador-observado<br />

por lo tanto no hay objetividad absoluta y siempre<br />

interviene la subjetividad <strong>de</strong>l sujeto que observa una<br />

experiencia. El chamán que toma ayahuasca es el observador<br />

y el observado a la vez;<br />

• El <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l tiempo no es linear sino circular, eliptoí<strong>de</strong>,<br />

distorsionable, reversible;<br />

• Se trata <strong>de</strong> un sistema vivo, siempre abierto, con un<br />

grado <strong>de</strong> incertidumbre o imposibilidad parcial <strong>de</strong><br />

predicción;<br />

• Las probabilida<strong>de</strong>s nunca encierran una obligación<br />

única (todo es posible en todo momento, los "posibles"<br />

coexisten);<br />

• Se da la posibilidad <strong>de</strong> existencia <strong>de</strong> universos paralelos;<br />

• El intercambio materia-energía (E=mc2) permite entrever<br />

la posibilidad <strong>de</strong> fenómenos <strong>de</strong> procesos <strong>de</strong> materialización<br />

y <strong>de</strong>smaterialización;<br />

• Etc.<br />

Otros mo<strong>de</strong>los o disciplinas contemporáneas <strong>de</strong>muestran<br />

coherencia con los marcos conceptuales (o mas bien vivenciales)<br />

<strong>de</strong> las medicinas tradicionales indígenas. Esa resonancia<br />

no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> llamar la atención y <strong>de</strong>spertar el interés.<br />

Quiero citar a continuación y brevemente algunos <strong>de</strong> ellos.<br />

180<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


Mo<strong>de</strong>los neurofisiológicos:<br />

Ver por ejemplo el concepto <strong>de</strong> "alucinaciones controladas"<br />

<strong>de</strong>l británico Richard Gregory que nos acerca a la<br />

noción <strong>de</strong> percepción por contraste y el interés <strong>de</strong> los<br />

procedimientos <strong>de</strong> <strong>de</strong>sfocalización (con el ayahuasca por<br />

ejemplo) para ver mejor la realidad habitual.<br />

Mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> la fisica <strong>de</strong>l caos:<br />

Del premio Nobel llya Prigogine que fueron retomados por<br />

el doctor en psicología Manuel Almendro en su "Psicología<br />

<strong>de</strong>l Caos" que se ubica en el campo <strong>de</strong> lo transpersonal.<br />

Abre perspectivas sobre la posibilidad <strong>de</strong> salto cualitativo<br />

en una crisis emergente cuando un sistema vivo y abierto<br />

llega a un punto máximo <strong>de</strong> inestabilidad. Ofrece en el<br />

concepto <strong>de</strong>l ser humano como sistema abierto una salida<br />

neguentrópica a las crisis psicológicas o espirituales.<br />

Mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> la psicología transpersonal:<br />

De Stan Grof con sus matrices peri-natales (Grof, S., 1983,<br />

1984) o <strong>de</strong> Ken Wilber, (Wilber, K., 1990, 1996).<br />

Mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong>l análisis estructural <strong>de</strong> los sueños:<br />

Para la interpretación <strong>de</strong> los fenómenos <strong>de</strong> la conciencia y<br />

en especial <strong>de</strong> las visiones inducidas en rituales iniciáticos.<br />

Mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> la biología molecular:<br />

Que permiten poner en evi<strong>de</strong>ncia similitu<strong>de</strong>s entre el ADN<br />

y la "serpiente cósmica' (Narby, J., 1999)<br />

Mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> la biología animal:<br />

Con los campos morfo-genéticos <strong>de</strong>l biólogo británico<br />

Rupert Sheldrake que se prestan particularmente a esclarecer<br />

los métodos <strong>de</strong>l aprendizaje tradicional y transmisión<br />

<strong>de</strong>l conocimiento así como la operatividad <strong>de</strong> las<br />

matrices <strong>de</strong> las plantas medicinales (o "espíritus-madres")<br />

Mo<strong>de</strong>los cibernéticos <strong>de</strong> los sistemas <strong>de</strong><br />

información:<br />

Abiertos y vivos. Esos mo<strong>de</strong>los permiten concebir al ser<br />

humano como un sistema encargado <strong>de</strong> la gestión <strong>de</strong><br />

la información que recibe en cantidad a cada instante y<br />

especialmente a nivel psíquico. Esclarecen la función <strong>de</strong><br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 181<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

la intencionalidad en la práctica ritual como soporte <strong>de</strong> la<br />

reorganización <strong>de</strong> la información.<br />

Mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> la psiconeuroinmunología:<br />

Que vinculan la i<strong>de</strong>ntidad biológica con la i<strong>de</strong>ntidad<br />

psíquica (Andrea Márquez López Mato,2002)<br />

El aporte <strong>de</strong>l Ayahuasca<br />

Así que hemos constatado que:<br />

• El mo<strong>de</strong>lo clásico dominante aún <strong>de</strong> la ciencia occi<strong>de</strong>ntal<br />

se revela a la vez ina<strong>de</strong>cuado e insuficiente para dar<br />

cuenta <strong>de</strong> los datos objetivos proporcionados por sus<br />

propias experiencias;<br />

• Tampoco pue<strong>de</strong> preten<strong>de</strong>r a ello en vista <strong>de</strong>l marco<br />

epistemológico <strong>de</strong>l pensamiento racional occi<strong>de</strong>ntal;<br />

• Menos pue<strong>de</strong> dar cuenta <strong>de</strong> la dimensión subjetiva<br />

que envuelve el acopio <strong>de</strong> esos datos experimentales<br />

ni tampoco <strong>de</strong> lo vivido por el ser humano en su fuero<br />

interno y que escapa al mundo fenomenológico, como<br />

es la conciencia;<br />

• Sin embargo, en los campos más avanzados <strong>de</strong> la ciencia<br />

contemporánea, se proponen mo<strong>de</strong>los que reclaman<br />

la vali<strong>de</strong>z <strong>de</strong> la dimensión sujetiva <strong>de</strong>l ser y proporcionan<br />

sistemas que requieren abordar el espacio<br />

metafísico e introducir la variable <strong>de</strong> la conciencia en<br />

sus ecuaciones;<br />

• Esos mo<strong>de</strong>los se revelan coherentes con las propuestas<br />

<strong>de</strong> las medicinas tradicionales o prácticas llamadas<br />

chamánicas y a la vez pue<strong>de</strong>n enriquecerse <strong>de</strong> ellas, en<br />

especial en su maestría en la inducción <strong>de</strong> modificación<br />

<strong>de</strong> los estados <strong>de</strong> conciencia (EMC).<br />

Es precisamente en este punto que queremos ahora consi<strong>de</strong>rar<br />

<strong>de</strong> manera más cercana el ejemplo <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong>l brebaje<br />

Ayahuasca en el contexto <strong>de</strong> las prácticas chamánicas<br />

<strong>de</strong> la Amazonía.<br />

Creemos que el uso <strong>de</strong>l Ayahuasca es una ilustración <strong>de</strong><br />

un procedimiento más general <strong>de</strong> las prácticas <strong>de</strong> los pueblos<br />

ancestrales que mantienen ciertas características a


través <strong>de</strong>l tiempo, <strong>de</strong>l espacio y <strong>de</strong> las culturas. Esas principales<br />

constantes en la inducción <strong>de</strong> modificación <strong>de</strong> la<br />

conciencia son las siguientes:<br />

• Existe una intencionalidad <strong>de</strong> quién es sujeto <strong>de</strong>l EMC:<br />

nunca se da con un propósito únicamente lúdico o <strong>de</strong><br />

mera curiosidad:<br />

• La inducción es guiada por un experto (maestro) experimentado,<br />

iniciado;<br />

• El experimentador requiere <strong>de</strong> un grado <strong>de</strong> preparación<br />

(o sea, no se improvisa la experiencia);<br />

• Se establece un contexto para la inducción que incluye<br />

reglas precisas, en especial en el manejo energético <strong>de</strong>l<br />

cuerpo (dieta, comportamiento sexual, posturas...) y en<br />

el manejo <strong>de</strong>l entorno<br />

• Inmediato (ubicación <strong>de</strong> la experiencia en un lugar y un<br />

tiempo a<strong>de</strong>cuados);<br />

• El cuerpo es el instrumento esencial <strong>de</strong> la inducción <strong>de</strong>l<br />

EMC y por en<strong>de</strong> <strong>de</strong> la iniciación, el resto constituyendo<br />

la logística secundaria y variable;<br />

• A medida que uno va dominando las técnicas <strong>de</strong> inducción,<br />

para conseguir el mismo efecto se reduce la<br />

intensidad <strong>de</strong>l estímulo inductor;<br />

Aunque el modo <strong>de</strong> inducción pue<strong>de</strong> ser muy variado,<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el uso <strong>de</strong> sustancias psicoactivas hasta técnicas <strong>de</strong><br />

híper o hipo estimulación, como ya señalamos (música,<br />

ritmos, hiperventilación, esfuerzo extremo, dolor intenso,<br />

aislamiento sensorial, etc.), los elementos <strong>de</strong>l marco <strong>de</strong><br />

inducción según las constantes arriba señaladas se manifiestan<br />

a través <strong>de</strong>l procedimiento ritual.<br />

El ritual es la puesta en forma en el mundo sensible <strong>de</strong> la<br />

relación con el mundo invisible. Establece así una puerta<br />

entre el mundo fenoménico <strong>de</strong> la manifestación y el mundo<br />

numinoso <strong>de</strong> la esencia <strong>de</strong> las cosas o universo invisible<br />

<strong>de</strong> las Formas. En otras palabras, vincula el "mundo-este"<br />

con el "mundo-otro" y permite pasar <strong>de</strong> uno al otro en<br />

ambos sentidos. Se reconoce como fundamental el hecho<br />

<strong>de</strong> que en esta encarnación nos toca estar en el aquí<br />

y ahora y que todo pasaje hacia el mundo-otro requiere<br />

<strong>de</strong> un procedimiento cauteloso y respetuoso que permita<br />

volver <strong>de</strong>l "viaje" enriquecido <strong>de</strong> las informaciones adqui-<br />

ridas. El contacto con las dimensiones numinosas supone<br />

la asimilación <strong>de</strong> cargas psíquicas <strong>de</strong> alta energía y por<br />

lo tanto potencialmente <strong>de</strong>sestabilizadoras. Acercarse a<br />

las realida<strong>de</strong>s trascen<strong>de</strong>ntales exige <strong>de</strong> manera absolutamente<br />

indispensable un contexto <strong>de</strong> contención y <strong>de</strong> posintegración<br />

<strong>de</strong> las experiencias vividas. Las experienciascumbres<br />

(peak-experience) son fáciles <strong>de</strong> provocar con<br />

cualquier sustancia pero su integración es condicionada<br />

al respeto <strong>de</strong> las formas rituales. La trasgresión <strong>de</strong> esas<br />

formas, provoca una irrupción violenta <strong>de</strong> cargas energéticas<br />

que ni la mente ni el cuerpo pue<strong>de</strong>n soportar: la<br />

consecuencia es la enfermedad fisica o mental.<br />

El cuerpo constituye nuestro único bien permanente en<br />

esta vida. La integración <strong>de</strong>l mundo perceptual o sensitivo<br />

fundamental se realiza como lo vimos a nivel <strong>de</strong>l paleocortex<br />

y tiene que ver con lo que conceptualizamos como<br />

nuestra presencia a nosotros mismos y en el mundo. Es<br />

precisamente la <strong>de</strong>finición <strong>de</strong> la conciencia fundamental,<br />

básica. Nos encontramos al punto opuesto <strong>de</strong>l concepto<br />

occi<strong>de</strong>ntal habitual <strong>de</strong> una conciencia <strong>de</strong> origen cortical<br />

superior. La conciencia primigenia surge ante todo<br />

<strong>de</strong> nuestra existencia corporal y se iría integrando piso<br />

por piso, a nivel emocional primero y luego a nivel cortical<br />

superior o sea simbólico y racional. En otras palabras,<br />

nuestro cuerpo "sabe" antes que nuestro corazón y<br />

que nuestra cabeza! Cierta escuela psiquiátrica reconoce<br />

que la función simbólica es una función psíquica y, como<br />

en el chamanismo y en las tradiciones ancestrales, acepta<br />

consecuentemente que el cuerpo humano asume une<br />

función psíquica <strong>de</strong> integración <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l mundo''. El<br />

cuerpo humano como microcosmos es imagen <strong>de</strong>l macrocosmos<br />

y como dice San Gregorio el Gran<strong>de</strong> : "El hombre<br />

comparte la existencia con las piedras, la vida con los<br />

vegetales, la sensación con los animales, el conocimiento<br />

con los ángeles y si así es , es porque es <strong>de</strong> cierta manera<br />

cada uno <strong>de</strong> ellos".<br />

Los EMC permiten salir <strong>de</strong>l mundo conceptual racional<br />

y "bajar" en las emociones y luego en el cuerpo, franqueando<br />

los umbrales sucesivos que nos aíslan <strong>de</strong> nuestra<br />

memoria somática. En el contexto occi<strong>de</strong>ntal, muchas<br />

veces el mundo mental se ha conformado como<br />

una cárcel don<strong>de</strong> la conciencia se reduce a un raciocino<br />

razonante.<br />

182<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


Nuestra conceptualización <strong>de</strong>l mundo se elabora en base<br />

a nuestra experiencia somática y ello <strong>de</strong>s<strong>de</strong> nuestra concepción.<br />

Los sentidos nos traen datos sobre la realidad<br />

<strong>de</strong>l entorno que se inscriben <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un espectro perceptual<br />

<strong>de</strong>finido por el uso habitual <strong>de</strong> nuestros sentidos<br />

y la transmisión cultural ó educativa. Así los Aguaruna<br />

que viven sumergidos en un mundo vegetal distinguen<br />

muchos más varieda<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l color ver<strong>de</strong> que un occi<strong>de</strong>ntal<br />

promedio. La represión racional occi<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong> las percepciones<br />

extra-sensoriales en los niños por sus padres<br />

inducen en ellos una auto-censura y negación <strong>de</strong> esas<br />

faculta<strong>de</strong>s mentales comunes a todo ser humano. Si en<br />

estado ordinario <strong>de</strong> conciencia vemos generalmente <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

las frecuencias luminosas <strong>de</strong>l rojo al violeta, técnicas<br />

<strong>de</strong> inducción <strong>de</strong> modificaciones perceptuales generan la<br />

conciencia <strong>de</strong> otros colores en las franjas <strong>de</strong>l infra-rojo<br />

o <strong>de</strong>l ultra-violeta. El mapeo visual <strong>de</strong> nuestra realidad<br />

se amplía entonces y adquiere mayor riqueza: el mundo<br />

invisible se vuelve visible. Lo mismo se pue<strong>de</strong> formular en<br />

relación a los <strong>de</strong>más sentidos elementales y así el ensanchamiento<br />

<strong>de</strong> nuestro espectro perceptual habitual <strong>de</strong> la<br />

realidad nos permite acce<strong>de</strong>r a una realidad mucho más<br />

amplia o en cierta forma a otras realida<strong>de</strong>s. Por otra parte,<br />

no existe discontinuidad entre nuestros sentidos y se<br />

pue<strong>de</strong> experimentar entonces percepciones cruzadas: se<br />

"escucha un color", se "ve un sonido", se "toca un olor"...<br />

Del mismo, modo, se agrega a esos sentidos clásicos que<br />

nos orientan hacia la realidad externa, todas las funciones<br />

fisiológicas internas (propiocepción) y su integración<br />

en faculta<strong>de</strong>s mentales diversas: sentido noético <strong>de</strong> la<br />

realidad, esquema corporal, sentido <strong>de</strong>l pasar <strong>de</strong>l tiempo<br />

cronológico, ubicación en el espacio, etc. La inducción <strong>de</strong><br />

la modificación <strong>de</strong> la conciencia pue<strong>de</strong> afectar todos esos<br />

datos <strong>de</strong> nuestra realidad interna y así hacernos acce<strong>de</strong>r a<br />

un mundo-otro interno insospechable.<br />

El experimentador <strong>de</strong> los EMC se da cuenta rápidamente<br />

que su experiencia <strong>de</strong>sborda también el espectro cubierto<br />

por el lenguaje habitual. Cuando ello ocurre, no encuentra<br />

las palabras a<strong>de</strong>cuadas para expresar su vivencia<br />

interna. Más allá <strong>de</strong>l espacio verbalizable, alcanza formas<br />

extáticas inefables e in<strong>de</strong>cibles, accediendo en plena<br />

conciencia a un mundo supra-verbal. Este estado se tendrá<br />

que diferenciar <strong>de</strong>l mutismo <strong>de</strong>l adicto que más bien<br />

exploró un mundo fusional y primitivo infra-verbal, <strong>de</strong>l<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 183<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

cual no pue<strong>de</strong> dar cuenta porque sus vivencias ocurren<br />

en plena inconciencia.<br />

La experiencia clínica nos permite a<strong>de</strong>más agregar que<br />

las memorias somáticas no encierran solo las vivencias <strong>de</strong><br />

la biografía individual sino que son portadoras <strong>de</strong> las herencias<br />

mnésicas <strong>de</strong> los ancestros. Más allá <strong>de</strong> este bagaje<br />

familia), se aña<strong>de</strong> el bagaje cultural étnico, religioso o nacional...<br />

y más allá aún las memorias <strong>de</strong> nuestro origen biológico<br />

y finalmente <strong>de</strong> nuestro origen como humanos. En<br />

otras palabras, somos portadores <strong>de</strong> la memoria universal.<br />

Por lo tanto, la ampliación inducida <strong>de</strong> la conciencia nos<br />

pue<strong>de</strong> dar acceso a muchas memorias dolorosas, individuales,<br />

familiares, colectivas y hasta universales. Se entien<strong>de</strong><br />

entonces que no existe una auténtica iniciación<br />

al universo interior propio, a la conciencia <strong>de</strong> la realidad<br />

<strong>de</strong> las cosas y <strong>de</strong> nuestro ser, sin atravesar sufrimientos.<br />

El contexto ritual permite or<strong>de</strong>nar la experiencia <strong>de</strong> tal<br />

modo que uno no acceda a cargas que no esté preparado<br />

a soportar. Las diferentes preparaciones apuntan a ello y a<br />

purificar el cuerpo <strong>de</strong> tal modo que tenga las condiciones<br />

que le permitan engramar (registrar, grabar) esas nuevas<br />

informaciones sin <strong>de</strong>sestabilizarse. No es <strong>de</strong> extrañar entonces<br />

el hecho que los indígenas <strong>de</strong> la Amazonía califiquen<br />

ante todo al Ayahuasca <strong>de</strong> "purga".<br />

El contexto ritual es doble. Se da en el mismo momento <strong>de</strong><br />

la experiencia <strong>de</strong> modificación <strong>de</strong> la conciencia, pero se da<br />

también <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l espacio cultural en el cual se realiza la<br />

experiencia. En ese sentido, los indígenas han elaborado a<br />

lo largo <strong>de</strong> los siglos una cosmovisión que les da un marco<br />

innato para integrar las vivencias surgidas en estados no<br />

ordinarios <strong>de</strong> conciencia inducidos mediante las técnicas<br />

que dominan. De esta manera, la transferencia <strong>de</strong> técnicas<br />

o <strong>de</strong> uso <strong>de</strong> sustancias <strong>de</strong> un contexto cultural a otro<br />

requiere <strong>de</strong> precauciones. El tabaco, planta maestra <strong>de</strong> la<br />

Amazonía, se ha vuelto un po<strong>de</strong>roso veneno occi<strong>de</strong>ntal<br />

mientras el vino que estructura las culturas mediterráneas<br />

<strong>de</strong>struye culturas aborígenes o indias. Igual podríamos<br />

<strong>de</strong>cir <strong>de</strong> la coca andina versus la cocaína occi<strong>de</strong>ntal, <strong>de</strong> la<br />

amapola asiática versus la heroína occi<strong>de</strong>ntal...<br />

Así, es notorio que para los occi<strong>de</strong>ntales, las funciones<br />

corticales superiores siendo dominantes, atribuyen a la


"visión" una función esencial sin tomar en cuenta que<br />

viene como resultado <strong>de</strong> la integración paulatina <strong>de</strong> los<br />

datos somáticos y luego emocionales. El querer acce<strong>de</strong>r<br />

directamente a la integración cortical sin respetar el proce<strong>de</strong>r<br />

natural genera atrevimientos peligrosos. Los occi<strong>de</strong>ntales<br />

tien<strong>de</strong>n a <strong>de</strong>spreocuparse <strong>de</strong> la preparación física<br />

y luego psico-emocional al momento <strong>de</strong> inducir una<br />

modificación <strong>de</strong> la conciencia. Creen que pue<strong>de</strong>n abstenerse<br />

<strong>de</strong> las formas rituales que atribuyen a meras obligaciones<br />

culturales que no les correspon<strong>de</strong>n. Su pérdida <strong>de</strong><br />

la dimensión simbólica como activa, eficaz y operatoria,<br />

les hace pensar <strong>de</strong> que se trata <strong>de</strong> una recreación virtual<br />

sin mayor importancia y <strong>de</strong> la cual pue<strong>de</strong>n exonerarse.<br />

Los indígenas nos recuerdan entonces que hay invariantes<br />

universales y que si bien existen leyes <strong>de</strong> la naturaleza<br />

visible, existen igualmente leyes <strong>de</strong> la naturaleza invisible.<br />

En otras palabras nos hacen recordar que el mundo está<br />

or<strong>de</strong>nado y que lo peor que le pue<strong>de</strong> pasar al ser humano<br />

es <strong>de</strong> volverse auto-referente y olvidarse <strong>de</strong> que existe un<br />

"otro". La experiencia <strong>de</strong> EMC apunta entonces a reconectarnos<br />

con esta memoria ontológica y así reintegrar<br />

nuestro or<strong>de</strong>n interno en el seno <strong>de</strong>l gran or<strong>de</strong>n universal,<br />

lo que es profundamente curativo y sanador. Dentro <strong>de</strong><br />

la sesión <strong>de</strong> ayahuasca, el maestro-curan<strong>de</strong>ro restablece<br />

un super-or<strong>de</strong>n que permite a su paciente pasar por una<br />

fase <strong>de</strong> relativo <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>n en el proceso <strong>de</strong> la exploración<br />

<strong>de</strong> sus <strong>de</strong>sarreglos internos y luego reintegrarse a sí mismo<br />

enriquecido <strong>de</strong> su experiencia. La intencionalidad <strong>de</strong>l<br />

sujeto hace eco entonces con la intencionalidad <strong>de</strong>l que<br />

dirige la experiencia. Ello nos remite a la <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong><br />

los sistemas vivos como sistemas <strong>de</strong> información abiertos<br />

don<strong>de</strong> la acumulación <strong>de</strong> datos llega a activar tanto el<br />

sistema que lo lleva a una situación pre-caótica. En esta<br />

fase <strong>de</strong> hiperactivación <strong>de</strong>l sistema, se presenta una crisis<br />

don<strong>de</strong> se ofrece una bifurcación posible hacia la entropía<br />

(<strong>de</strong>generación y muerte) <strong>de</strong>l sistema o bien se presenta<br />

un salto cualitativo neguentrópico (vital) hacia un nuevo<br />

or<strong>de</strong>n integrador. Por ejemplo, una enfermedad fisica<br />

pue<strong>de</strong> resolverse o por lo menos aliviarse mediante la integración<br />

<strong>de</strong>l sentido <strong>de</strong> esa patología somática a nivel<br />

psico-emocional. Del mismo modo, para una patología<br />

psico-somática como la <strong>de</strong>presión, el salto cualitativo<br />

pue<strong>de</strong> darse hacia el or<strong>de</strong>n trascen<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong> la dimensión<br />

espiritual. En cada uno <strong>de</strong> esos pasos, existe para el ser<br />

humano un momento <strong>de</strong> <strong>de</strong>liberación interna don<strong>de</strong> se<br />

encuentra solo con su conciencia profunda, diría ontológica,<br />

para optar libremente hacia la entropía o la neguentropía,<br />

hacia la muerte o hacia la vida.<br />

El mundo occi<strong>de</strong>ntal carece hoy en día <strong>de</strong> una cosmovisión<br />

compartida y más bien se encuentra en ese estado<br />

<strong>de</strong> crisis emergente don<strong>de</strong> una bifurcación se ofrece en<br />

su camino: la elección individual y colectiva por la vida<br />

o por la muerte. Esa ausencia <strong>de</strong> marco conceptual que<br />

sirva <strong>de</strong> referente universal impone una transferencia<br />

<strong>de</strong> las prácticas indígenas <strong>de</strong> EMC que sean pru<strong>de</strong>ntes.<br />

La tentación frecuente <strong>de</strong> abandono <strong>de</strong> las raíces occi<strong>de</strong>ntales<br />

para adoptar modales pertenecientes a culturas<br />

ajenas, plantea <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su inicio una incoherencia ya que se<br />

busca la reintegración <strong>de</strong> su naturaleza profunda negando<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el inicio un componente esencial <strong>de</strong> esa misma<br />

naturaleza. La auto-negación <strong>de</strong> una parte <strong>de</strong> sí mismo<br />

<strong>de</strong> hecho impi<strong>de</strong> resolver procesos disociativos que son<br />

una característica <strong>de</strong> la patología occi<strong>de</strong>ntal colectiva. A<br />

este nivel también el abordaje intercultural requiere encontrar<br />

puentes que alcanzan dimensiones universales o<br />

invariantes <strong>de</strong> la naturaleza humana, tras <strong>de</strong> las fronteras<br />

culturales. Muchos antropólogos establecieron como<br />

imposible esta tarea, encerrando las prácticas indígenas<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un espacio supuestamente infranqueable para<br />

el occi<strong>de</strong>ntal. Ello se <strong>de</strong>be esencialmente a su acercamiento<br />

a esas prácticas, marcado por el distanciamiento <strong>de</strong> la<br />

supuesta y obligada objetividad científica cuya inanidad<br />

ya hemos señalado. El temor a per<strong>de</strong>r el estatus académico<br />

que les otorga su contexto occi<strong>de</strong>ntal les mantiene en<br />

la otra orilla don<strong>de</strong> se excluyen <strong>de</strong> la experiencia directa y<br />

viva. Sin embargo, ya sabemos que la integración cortical<br />

superior en esos casos no pue<strong>de</strong> abstenerse <strong>de</strong>l compromiso<br />

personal con el cuerpo y la psique. Este riesgo <strong>de</strong>spierta<br />

en las mentes occi<strong>de</strong>ntales un gran miedo, que es<br />

el <strong>de</strong> la pérdida <strong>de</strong> control y por en<strong>de</strong> <strong>de</strong> la locura. A la vez<br />

revela la presencia inconsciente <strong>de</strong> la fractura disociativa<br />

<strong>de</strong>l pensamiento y <strong>de</strong>l modo <strong>de</strong> vivir en un Occi<strong>de</strong>nte con<br />

ten<strong>de</strong>ncias esquizofrénicas, y señala con razón la necesidad<br />

<strong>de</strong> establecer sistemas <strong>de</strong> contención e integración<br />

<strong>de</strong> la conciencia. Se vuelve problemático el hecho que<br />

muchas autorida<strong>de</strong>s académicas, religiosas, políticas, enfrentadas<br />

a este temor (o hasta terror) personal, <strong>de</strong>cidan<br />

establecer una contención colectiva, proyectando así sus<br />

184<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


miedos a la colectividad y confiscando a los <strong>de</strong>más el acceso<br />

a su mundo interior. El mito <strong>de</strong>l riesgo cero constituye<br />

una fantasía casi <strong>de</strong>lirante que obsesiona a numerosos<br />

occi<strong>de</strong>ntales y los lleva a escoger la muerte como único<br />

lugar <strong>de</strong>finitivamente seguro.<br />

Los puentes interculturales se encuentran en la dimensión<br />

simbólica <strong>de</strong> las culturas, expresadas en el arte y todas<br />

las expresiones religiosas. En ese sentido, nuestra cultura<br />

occi<strong>de</strong>ntal posee raíces religiosas po<strong>de</strong>rosas que pue<strong>de</strong><br />

reencontrar en la dimensión mística <strong>de</strong> su tradición espiritual.<br />

La vida <strong>de</strong> numerosos ascetas o místicos <strong>de</strong>muestra<br />

ampliamente cómo vivieron una espiritualidad experimentada<br />

que incluía el cuerpo y la parte psico-afectiva <strong>de</strong><br />

su personalidad. Experimentaron estados no ordinarios <strong>de</strong><br />

conciencia similares a los <strong>de</strong> los chamanes <strong>de</strong> las culturas<br />

indígenas. Serafin <strong>de</strong> Sarov comía hierbas en el bosque<br />

ruso, se relacionaba con los animales, tenía fenómenos<br />

luminosos, veía hechos a la distancia y en el tiempo, tenía<br />

dotes <strong>de</strong> ubicuidad, telepatía, etc. (12). Basta al hombre<br />

occi<strong>de</strong>ntal indagar en el riquísimo legado espiritual <strong>de</strong><br />

su cultura para encontrar todo lo necesario para explorar<br />

su mundo interno. Sin embargo, el agregar las técnicas<br />

chamánicas le proporciona un instrumento po<strong>de</strong>roso para<br />

hacer frente a la urgencia <strong>de</strong> su pronunciamiento hacia<br />

la vida o la muerte en una situación <strong>de</strong> crisis emergente<br />

que exige respuestas inmediatas. Un número creciente <strong>de</strong><br />

individuos en Occi<strong>de</strong>nte llegan a vivenciar a nivel personal<br />

esa crisis <strong>de</strong> "emergencia espiritual" a tal punto que<br />

la escuela <strong>de</strong> psicología transpersonal se vio obligada a<br />

<strong>de</strong>finir criterios <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntificación <strong>de</strong> esas crisis para diferenciarlas<br />

<strong>de</strong> brotes psicóticos o disociación <strong>de</strong>lirante.<br />

La bifurcación posible hacia un estatuto involutivo u otro<br />

evolutivo en toda crisis con aspectos <strong>de</strong>lirantes merece un<br />

discernimiento ya que se pue<strong>de</strong> frustrar un proceso curativo<br />

y encerrar al sujeto en una camisa <strong>de</strong> fuerza química<br />

<strong>de</strong> por vida.<br />

El uso indiscriminado <strong>de</strong> sustancias psicoactivas induce<br />

una multiplicación <strong>de</strong> esas crisis, en especial con el cannabis,<br />

don<strong>de</strong> se ven más y más jóvenes con "psicosis canabinoí<strong>de</strong>".<br />

En esos casos, el joven franquea el umbral <strong>de</strong><br />

contención mental-cultural sin preparación espiritual y se<br />

encuentra con información sobre el mundo-otro <strong>de</strong> las<br />

formas esenciales que trata <strong>de</strong> integrar a nivel psíquica-<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 185<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

emocional. Su mente <strong>de</strong>sbordada se <strong>de</strong>sintegra parcialmente<br />

y enuncia verda<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l mundo-otro que sabe ciertas<br />

pero que asimila a su dimensión egotica infantil. Su<br />

ampliación <strong>de</strong> la conciencia se transformó en inflación<br />

<strong>de</strong>l ego: asume como suyas realida<strong>de</strong>s trascen<strong>de</strong>ntales,<br />

transpersonales. La extrema potencia <strong>de</strong> esas realida<strong>de</strong>s<br />

genera en el sujeto un estado <strong>de</strong> fascinación que lo aliena.<br />

No está loco en el sentido <strong>de</strong> lo que dice no es la<br />

verdad en esencia sino por el hecho <strong>de</strong> que interpreta<br />

esas realida<strong>de</strong>s con su capacidad limitada y las ubica en<br />

el lugar erróneo.<br />

Los EMC en las toxicomanías<br />

Reconocemos aquí el mecanismo <strong>de</strong> las adicciones o fármaco-<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncias<br />

que ejemplarizan en nuestra opinión<br />

todas las contradicciones <strong>de</strong>l mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> vida occi<strong>de</strong>ntal.<br />

Sabemos ahora que este mecanismo <strong>de</strong> la <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia<br />

abarca más que el uso <strong>de</strong> sustancias como por ejemplo la<br />

<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia al juego, a las compras, al internet, a la televisión,<br />

a la comida, etc. En este proce<strong>de</strong>r, el ser humano<br />

invierte sus esperanzas <strong>de</strong> felicidad mediante la ingesta, la<br />

incorporación fisica o psíquica <strong>de</strong> algo consi<strong>de</strong>rado ajeno<br />

a sí mismo y supuesto portador <strong>de</strong> lo que le faltaría. No<br />

escucha la voz <strong>de</strong> la tradición que le enseña a través <strong>de</strong> los<br />

siglos que el conocimiento y la sabiduría se encuentran<br />

en sí mismo: lo busca afuera. El objeto exterior (sustancia,<br />

dinero, pantalla, etc.) se idolatra como fuente <strong>de</strong> plenitud<br />

para colmar la sensación sumamente angustiante <strong>de</strong>l vacío<br />

interior. Dejan <strong>de</strong> ser instrumentos <strong>de</strong> la logística para<br />

la realización <strong>de</strong> la vida, para transformarse en portadores<br />

<strong>de</strong> significados trascen<strong>de</strong>ntales que el ser humano proyecta<br />

en ellos. Este mo<strong>de</strong>lo ha terminado por invadir por<br />

completo la sociedad occi<strong>de</strong>ntal y hacer <strong>de</strong> todos sus individuos<br />

toxicómanos activos y muchas veces inconscientes.<br />

Bastaría cancelar por unos pocos días el consumo <strong>de</strong><br />

azúcar refinada y <strong>de</strong> ansiolíticos, por ejemplo, para darse<br />

cuenta <strong>de</strong> la importancia <strong>de</strong>l síndrome <strong>de</strong> abstinencia<br />

que generaría a nivel colectivo, prueba contun<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la<br />

adicción colectiva. De hecho, las fármaco-<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncias<br />

surgen <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l contexto <strong>de</strong> la sociedad occi<strong>de</strong>ntal y<br />

son casi ausentes <strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s tradicionales ancestrales.<br />

Y hay que precisar que este paradigma occi<strong>de</strong>ntal<br />

en su <strong>de</strong>generación supera ampliamente los límites geo-


gráficos <strong>de</strong> los países <strong>de</strong>l Norte y <strong>de</strong> los "blancos" y que<br />

ha contaminado casi todo el planeta, se ha infiltrado en<br />

las culturas más ajenas. El po<strong>de</strong>r <strong>de</strong> universalización <strong>de</strong><br />

mo<strong>de</strong>lo occi<strong>de</strong>ntal es una fuerza consi<strong>de</strong>rable que afecta<br />

ahora a toda la humanidad en grados diversos.<br />

En las terapias sistémicas se i<strong>de</strong>ntifica a un individuo que<br />

expresa inconscientemente la disfuncionalidad <strong>de</strong> una<br />

dinámica familiar. Del mismo modo, las toxicomanías revelan<br />

hoy en día la enfermedad colectiva occi<strong>de</strong>ntal que<br />

consiste básicamente en la negación <strong>de</strong> la subjetividad<br />

y la naturaleza trascen<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong> la realidad humana. La<br />

espiritualidad es rechazada como un sub-producto <strong>de</strong> la<br />

mente y un espíritu "libre" sería un individuo sin raíces,<br />

sin obligaciones, sin memoria, sin límites, sin ataduras.<br />

En realidad, este sujeto i<strong>de</strong>alizado, en un sistema autoreferencial<br />

cerrado se encontraría preso <strong>de</strong> sí mismo y<br />

entregado a todas las fuerzas psíquicas inconscientes individuales<br />

y colectivas. En otras palabras, se trataría <strong>de</strong><br />

un ser "salvaje". Representa un sujeto fácil <strong>de</strong> manipular<br />

por los intereses mercantiles que en su afán insaciable <strong>de</strong><br />

lucro tratan <strong>de</strong> estandardizar al individuo para facilitar el<br />

mercado <strong>de</strong> la gran distribución. Desprovisto <strong>de</strong> soli<strong>de</strong>z<br />

interior y engañado por su seudo-libertad, se presta a la<br />

uniformización <strong>de</strong>l mercado como <strong>de</strong> las sectas o <strong>de</strong> los<br />

sistemas políticos u religiosos autoritarios. Tenemos aquí<br />

a un buen candidato al fanatismo y a todas formas <strong>de</strong><br />

dogmatismos. Así cuando <strong>de</strong>cimos "el adicto" nos referimos<br />

al individuo occi<strong>de</strong>ntal tal como se estructura en<br />

todos nosotros: no se trata <strong>de</strong>l "otro" sino <strong>de</strong> yo, <strong>de</strong> tu,<br />

<strong>de</strong> él o ella.<br />

El adicto se encuentra libre <strong>de</strong> todo límite, rompe todas<br />

las barreras y pue<strong>de</strong> llegar a todas las aberraciones... siendo<br />

<strong>de</strong> hecho preso <strong>de</strong> la droga. Y a mirar bien, no es la<br />

droga, una simple sustancia, que lo encierra, sino la potencialización<br />

<strong>de</strong> su imaginación egótica por energías psíquicas<br />

no integradas a su Yo fundamental (su Self) y que<br />

se comportan como fuerzas autónomas que se apo<strong>de</strong>ran<br />

<strong>de</strong> su yo infantil. De algún modo, el sujeto se encuentra<br />

en estado <strong>de</strong> posesión porque está habitado por energías<br />

psíquicas que lo esclavizan y escapan <strong>de</strong> su control.<br />

Su pérdida <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad psíquica se refleja en la similar<br />

pérdida <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad espiritual, cultural, y luego sexual y<br />

somática. Desaparece la diferenciación <strong>de</strong>l sujeto, el proceso<br />

<strong>de</strong> individuación, el reconocimiento <strong>de</strong> la unicidad<br />

<strong>de</strong>l ser. El individuo tien<strong>de</strong> a regresionar a formas fusionales<br />

en todos los ámbitos <strong>de</strong> su vida. Se traduce a nivel<br />

físico por el aumento exponencial <strong>de</strong> las patologías <strong>de</strong>generativas<br />

o <strong>de</strong> inmuno-<strong>de</strong>ficiencia. Se manifiesta a nivel<br />

psico-afectivo por el crecimiento incesante <strong>de</strong> los procesos<br />

disociativos y en especial <strong>de</strong> las crisis <strong>de</strong> brote psicótico.<br />

El mercado enorme <strong>de</strong> los fármacos psicotrópicos y<br />

antálgicos nos pinta una sociedad que vive bajo anestesia<br />

permanente y rechaza todo esfuerzo hacia el crecimiento<br />

individual y su inevitable tránsito por el sufrimiento.<br />

Aplicaciones <strong>de</strong>l Ayahuasca<br />

en contexto occi<strong>de</strong>ntal<br />

Las prácticas tradicionales <strong>de</strong> los EMC nos enseñan a<br />

acce<strong>de</strong>r al conocimiento <strong>de</strong> sí mismo sin apropiarse <strong>de</strong><br />

los elementos <strong>de</strong> soportes que permiten el acceso a una<br />

conciencia no ordinaria. Los pueblos indígenas tienen una<br />

reverencia enorme para con las plantas o elementos <strong>de</strong><br />

la naturaleza que les revelan realida<strong>de</strong>s escondidas a la<br />

conciencia ordinaria. Pero, sus usos no se constituyen en<br />

religiones don<strong>de</strong> se diviniza el Ayahuasca, el Peyote o la<br />

(boga que se consi<strong>de</strong>ran como manifestaciones <strong>de</strong> una<br />

dimensión divina trascen<strong>de</strong>ntal incognoscible. La creación<br />

<strong>de</strong> nuevas iglesias vinculadas al uso <strong>de</strong> una plantamaestra<br />

(Santo Daime. Native American Church, Bwiti...)<br />

carecen <strong>de</strong> raíces ancestrales y son formas sincréticas que<br />

incluyen algún elemento <strong>de</strong>l mundo occi<strong>de</strong>ntal. Son generalmente<br />

intentos <strong>de</strong> recuperación <strong>de</strong> los orígenes culturales<br />

o espirituales individuales inscritos ya en un contexto<br />

occi<strong>de</strong>ntalizado.<br />

El Ayahuasca, así como todas esas plantas maestras, dan<br />

así acceso a realida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l mundo invisible que se hacen<br />

entonces visibles a la conciencia. Son plantas visionarias.<br />

Los científicos occi<strong>de</strong>ntales <strong>de</strong>sconectados <strong>de</strong> su yo profundo<br />

e ignorantes <strong>de</strong> la realida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l mundo-otro no<br />

supieron reconocer en esas visiones manifestaciones <strong>de</strong>l<br />

mundo <strong>de</strong> las Formas o <strong>de</strong>l Numen. En su incapacidad <strong>de</strong><br />

i<strong>de</strong>ntificar el material simbólico surgido, proyectaron su<br />

percepción disociativa <strong>de</strong> la realidad para calificar a esas<br />

visiones <strong>de</strong> "alucinaciones" y a esas plantas como "aluci-<br />

186<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


nógenas'. La alucinación supone la ausencia <strong>de</strong> un objeto<br />

real y por en<strong>de</strong> la producción <strong>de</strong> una imagen en base a la<br />

falsificación <strong>de</strong> las percepciones. La clínica <strong>de</strong>muestra que<br />

no es así y que las visiones inducidas por el Ayahuasca<br />

poseen un alto grado <strong>de</strong> coherencia en relación a la vida<br />

<strong>de</strong>l sujeto. Requieren un proceso <strong>de</strong> interpretación a la<br />

manera <strong>de</strong> la lectura simbólica <strong>de</strong> los sueños.<br />

Los pacientes con baja capacidad <strong>de</strong> simbolización como<br />

muchos toxicómanos se benefician útilmente <strong>de</strong> la inducción<br />

visionaria. De hecho la invasión <strong>de</strong> su psique con experiencias<br />

avasalladoras que lo hacen regresionar a estados<br />

fusionales pre-verbales, no les permite acce<strong>de</strong>r a una<br />

verda<strong>de</strong>ra palabra. La conscientización <strong>de</strong> su problemática<br />

mediante el "ver" les otorga la posibilidad <strong>de</strong> tomas <strong>de</strong><br />

conciencia sin pasar por el lenguaje. Luego se acce<strong>de</strong> al<br />

verbo <strong>de</strong>scriptivo <strong>de</strong> las escenas simbólicas visualizadas<br />

y se va reajustando paulatinamente un verbo auténtico,<br />

conectado con la emoción.<br />

El Ayahuasca se presenta así como una matriz psíquica<br />

don<strong>de</strong>, en un contexto a<strong>de</strong>cuado, un sujeto pue<strong>de</strong> revisar<br />

los archivos <strong>de</strong> su memoria conceptual, emocional y somática.<br />

En esta exploración encontrará "nudos" dolorosos<br />

individuales, colectivos y hasta universales que pue<strong>de</strong>n<br />

liberarse mediante crisis catárticas que abarcan el cuerpo<br />

(vómitos, diarrea), la emoción (llantos), y la conciencia<br />

cortical superior (tomas <strong>de</strong> conciencia). Siendo protagonista<br />

<strong>de</strong> su propia exploración, don<strong>de</strong> es observador y observado<br />

a la vez, podrá <strong>de</strong>cidir en esas mini crisis emergentes<br />

el camino <strong>de</strong> la vida por el cual optar. La intensidad<br />

<strong>de</strong> la experiencia genera una nueva engramación profunda<br />

(o anclaje), una reparación <strong>de</strong> las memorias dolorosas<br />

integradas en un sentido más amplio <strong>de</strong> la vida. La sesión<br />

<strong>de</strong> Ayahuasca bien conducida se vive entonces como una<br />

experiencia semántica, portadora <strong>de</strong> sentido y por ello sumamente<br />

sanadora.<br />

El individuo pue<strong>de</strong> averiguar por sí mismo la veracidad<br />

<strong>de</strong> las afirmaciones <strong>de</strong> las tradiciones expresadas en los<br />

mitos, las leyendas, los relatos simbólicos <strong>de</strong> su cultura.<br />

A partir <strong>de</strong> allí, su fe se basa en el conocimiento directo<br />

y no en la aceptación ciega <strong>de</strong> lo que se le propone. La fe<br />

que expresa una adhesión <strong>de</strong> la inteligencia a verda<strong>de</strong>s<br />

reveladas constituye una verda<strong>de</strong>ra sabiduría, como es el<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 187<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

caso <strong>de</strong> la enseñanza iniciática indígena. No participa <strong>de</strong><br />

la acumulación <strong>de</strong> informaciones inaveriguables como se<br />

observa en la enseñanza occi<strong>de</strong>ntal académica, don<strong>de</strong> el<br />

individuo no tiene los medios técnicos para averiguar lo<br />

que se le afirma y <strong>de</strong>be prestarle crédito ciego. Este individuo,<br />

repetirá luego lo mismo a sus alumnos, creando <strong>de</strong><br />

este modo una ca<strong>de</strong>na repetitiva que se parece a una forma<br />

<strong>de</strong> psitacismo verbal que pue<strong>de</strong> fácilmente <strong>de</strong>generar.<br />

A nivel <strong>de</strong> psicoterapia, el Ayahuasca autoriza al paciente<br />

a acce<strong>de</strong>r por sí mismo a la contemplación <strong>de</strong> su mundo<br />

interior y averiguar la certeza <strong>de</strong> las propuestas interpretativas<br />

<strong>de</strong> su psicoterapeuta. No <strong>de</strong>be creer el diagnóstico<br />

<strong>de</strong> su psicólogo sino averiguarlo y eventualmente<br />

corregirlo, contemplarlo y hasta <strong>de</strong>scartarlo. La fuerza <strong>de</strong><br />

convicción <strong>de</strong> tal proce<strong>de</strong>r don<strong>de</strong> el sujeto es pleno partícipe<br />

<strong>de</strong> su terapia es clínicamente admirable. Es frecuente<br />

ver a un paciente en fin <strong>de</strong> sesión <strong>de</strong> Ayahuasca confesar<br />

humil<strong>de</strong>mente sus errores que se hicieron tan evi<strong>de</strong>ntes<br />

que no pue<strong>de</strong> más que reconocerlos, solicitar el perdón y<br />

corregir su rumbo <strong>de</strong> vida.<br />

El Ayahuasca actúa como un suero <strong>de</strong> la verdad pero sin<br />

jamás violar la intimidad <strong>de</strong>l individuo ya que como lo<br />

señalamos antes, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l contexto ritual <strong>de</strong> contención<br />

simbólica, la intencionalidad <strong>de</strong>l sujeto es primordial<br />

e instituye un or<strong>de</strong>n sub-yacente a la experiencia. Si una<br />

persona no quiere realmente acce<strong>de</strong>r a su mundo interior<br />

o en ciertos espacios <strong>de</strong> ellos, no lo hará por más cantidad<br />

<strong>de</strong> ayahuasca que ingiere. Simplemente no pasará nada.<br />

Es común observar a pacientes que escon<strong>de</strong>n ciertos aspectos<br />

claves <strong>de</strong> su pasado por miedo o vergüenza.., en<br />

este caso, el sujeto no percibe ningún efecto <strong>de</strong>l brebaje.<br />

Por ello, en muchos grupos étnicos, la confesión inicial<br />

<strong>de</strong> los errores, faltas y transgresiones en relación a las leyes<br />

universales <strong>de</strong> la vida, constituye un paso previo a la<br />

ingesta <strong>de</strong> la planta iniciática. La falta <strong>de</strong> sinceridad es<br />

la principal contra-indicación a la toma <strong>de</strong> ayahuasca. La<br />

motivación <strong>de</strong>l paciente se va construyendo paulatinamente<br />

a medida que se da cuenta que no avanza en su<br />

proceso mientras otros sí lo hacen cuando participan <strong>de</strong><br />

las mismas terapias.<br />

En el contexto indígena la cosmovisión que impregna <strong>de</strong><br />

manera permanente la cultura y la vida cotidiana permite<br />

ubicar inmediatamente las vivencias rituales con EMC.


En la ausencia <strong>de</strong> una cosmovisión coherente y unificada<br />

en el mundo occi<strong>de</strong>ntal, las inducciones <strong>de</strong> EMC <strong>de</strong>ben<br />

necesariamente ser seguidas <strong>de</strong> procesos <strong>de</strong> integración<br />

cortical, en especial mediante la verbalización <strong>de</strong> lo vivido<br />

y una retro-alimentación (feedback) <strong>de</strong>l guía, terapeuta o<br />

quién dirigió la sesión. La tarea fundamental <strong>de</strong>l terapeuta<br />

en este caso es <strong>de</strong> discernir la fuente <strong>de</strong> las informaciones<br />

<strong>de</strong>l sujeto, para distinguir entre los datos surgiendo <strong>de</strong>l<br />

Yo profundo y los elaborados por su yo superficial egotico.<br />

La conexión con este Yo profundo es muchas veces<br />

sopren<strong>de</strong>nte para el sujeto que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su localización <strong>de</strong>l<br />

yo mental no reconoce la expresión <strong>de</strong>l Self y lo percibe<br />

como una fuente ajena. La sensación vivida por el sujeto<br />

es entonces la <strong>de</strong> una enseñanza surgida <strong>de</strong> una fuente<br />

<strong>de</strong> gran sabiduría, <strong>de</strong> gran rigurosidad e inteligencia. Este<br />

Self conecta al individuo con la psique colectiva, con arquetipos<br />

universales y con la dimensión trascen<strong>de</strong>ntal <strong>de</strong><br />

la vida, el mundo <strong>de</strong> la Formas o mundo numinoso. No<br />

es raro ver sujetos analfabetos acce<strong>de</strong>r a conocimientos<br />

ajenos a su cultura y <strong>de</strong>scribir figuras míticas <strong>de</strong>scritas<br />

en los mitos griegos por ejemplo. Esa "extrañeza" <strong>de</strong> la<br />

fuente <strong>de</strong> enseñanza ha conducido los indígenas a calificar<br />

al Ayahuasca <strong>de</strong> "planta-maestra" en el mismo tono<br />

como Graf Durckheim en Occi<strong>de</strong>nte señala la existencia<br />

<strong>de</strong>l "Maestro interior".<br />

El Yo profundo o trascen<strong>de</strong>ntal, <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un contexto<br />

ritual <strong>de</strong> contención simbólica a<strong>de</strong>cuado, no es percibido<br />

como amenazante y queda bajo la regulación <strong>de</strong>l superor<strong>de</strong>n<br />

establecido por el maestro o terapeuta. Este sistema<br />

permite al sujeto acercarse al famoso "núcleo psicótico"<br />

sin que se produzcan fenómenos disociativos peligrosos.<br />

El eventual hiato psíquico (clivage) se pue<strong>de</strong> explorar para<br />

<strong>de</strong>sactivar su potencia <strong>de</strong>sintegradora para luego recuperar<br />

su integridad <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la cohesión establecida por la<br />

forma ritual y la persona <strong>de</strong>l maestro <strong>de</strong> ceremonia que<br />

evi<strong>de</strong>ntemente requiere para sí mismo estabilidad mental<br />

y serenidad emocional.<br />

El Ayahuasca permite <strong>de</strong>splazar la problemática vivencial<br />

<strong>de</strong> los pacientes en el escenario <strong>de</strong> lo imaginario para permitir<br />

la re-elaboración <strong>de</strong> sus conflictos intra-psíquicos.<br />

Surgen entonces elementos psíquicos que escapan al<br />

control <strong>de</strong>l paciente, surgiendo <strong>de</strong> fuentes ajenas a su yo<br />

habitual y que le permiten encontrar nuevas opciones re-<br />

solutivas. El Ayahuasca activa procesos <strong>de</strong> reparación psíquica<br />

como por ejemplo:<br />

• Aumento <strong>de</strong> la agu<strong>de</strong>za intelectual.<br />

• Aumento <strong>de</strong> la capacidad <strong>de</strong> concentración.<br />

• Afloramiento <strong>de</strong> memorias y recuerdos.<br />

• Reformulación <strong>de</strong> conflictos.<br />

• Reducción <strong>de</strong> la ansiedad.<br />

• I<strong>de</strong>ntificación <strong>de</strong> la "sombra" que entonces <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> poseer<br />

al sujeto.<br />

• Reducción <strong>de</strong> los fenómenos proyectivos.<br />

• Gratificación rápida <strong>de</strong>l esfuerzo con aumento <strong>de</strong> la tolerancia<br />

a la frustración.<br />

• Mejora <strong>de</strong> auto-estima mediante el <strong>de</strong>scubrimiento <strong>de</strong><br />

una dimensión trascen<strong>de</strong>ntal única <strong>de</strong>l yo.<br />

El Ayahuasca es ingerida por vía oral y respeta las barreras<br />

naturales digestivas <strong>de</strong>l organismo. A<strong>de</strong>más, sus alcaloi<strong>de</strong>s<br />

se encuentran en la sangre y el cerebro humano y se<br />

<strong>de</strong>scribe lo que se llama una "endoayahuasca". La glándula<br />

pineal, el tercer ojo <strong>de</strong> las tradiciones esotéricas, secreta<br />

los alcaloi<strong>de</strong>s triptamínicos que provocan los fenómenos<br />

luminosos y se encuentra muy aumentado en experiencias<br />

extremas <strong>de</strong> la conciencia humana como en la NDE<br />

o los estados místicos". No se trata <strong>de</strong> principios activos<br />

ajenos a nuestra naturaleza. Las tomas reproducen entonces<br />

mecanismos fisiológicos naturales, amplificándolos. Es<br />

admirable observar la coinci<strong>de</strong>ncia entre las manifestaciones<br />

<strong>de</strong>l cerebro reptiliano y las muy altas frecuencias<br />

<strong>de</strong> visiones <strong>de</strong> serpientes hasta en ciudadanos que no tienen<br />

ningún vínculo con una vida silvestre. El Ayahuasca<br />

genera en la mente una estructura-energía al modo <strong>de</strong><br />

los campos morfo-genéticos <strong>de</strong> Rupert Sheldrake (14) que<br />

correspon<strong>de</strong> a su forme visible <strong>de</strong> liana enroscada sobre sí<br />

misma, en conformidad con la teoría <strong>de</strong> las asignaturas.<br />

La forma sensible refleja la Forma insensible.<br />

La intensidad <strong>de</strong> la experiencia y su dramatismo suscitan<br />

interrogantes agudos sobre el sentido y la naturaleza <strong>de</strong> lo<br />

real, <strong>de</strong> la vida, <strong>de</strong> la enfermedad, <strong>de</strong> la muerte y <strong>de</strong> todo<br />

el universo que nos ro<strong>de</strong>a. Nos dan la medida <strong>de</strong> nuestra<br />

ignorancia sobre nosotros mismos y el mundo y restablece<br />

188<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 172 - 189


un estado <strong>de</strong> humildad sanadora frente al misterio trascen<strong>de</strong>ntal<br />

<strong>de</strong> la existencia humana.<br />

El Ayahuasca asocia entonces varias funciones simultáneas:<br />

• Efectos somáticos <strong>de</strong> reequilibrio <strong>de</strong>l sistema nervioso<br />

autónomo simpático.<br />

• Efectos reparadores en procesos psicoterapéuticos<br />

• Re-integración <strong>de</strong> la dimensión semántica <strong>de</strong> la existencia<br />

humana.<br />

• Efectos purificantes, purgativos y catárticos en todos<br />

esos niveles.<br />

El Ayahuasca representa entonces un po<strong>de</strong>roso instrumento<br />

<strong>de</strong> sanación <strong>de</strong>l ser humano en sus diversas dimensiones,<br />

restableciendo or<strong>de</strong>n y armonía. Su función<br />

esencial consiste en realizar procesos <strong>de</strong> RECONCILIA-<br />

CIÓN. Reconciliación con nuestra biografia, con nuestros<br />

orígenes familiares y culturales, con nuestro cuerpo, con<br />

nuestra historia individual y colectiva. El reor<strong>de</strong>namiento<br />

Bibliografia<br />

1. MORISSON Jocely n. "De vive voix... Nouvelle science, nouvelle<br />

conscience: intégration ou désintégration?", Les Cahiers <strong>de</strong><br />

Lands-France, n°5, oct. 2000, París.<br />

2. STUART James. "Swami Abhishiktánanda, his life told through<br />

his letters", french translation "Le Bénédictin et le Grand Eveil",<br />

Maisonneuve Ed., París. 1999.<br />

3. GIRALDO Roberto. Junio 2002, "SIDA y agentes estresantes",<br />

Universidad <strong>de</strong> Antioquia ed., Colombia. www.robertoeiraIdo.<br />

com \s W\ .free-news.ori, info@aliveandwell.orz<br />

4. LARCHER Hubert. "La Mémoire du Soleil: Aux frontiéres <strong>de</strong> la<br />

mort", Déslris ed., Francia, 1990.<br />

5. LARSON David. "Handbook of Religion and Health": Harold G.<br />

Koenig, Michael McCullough, David Larson ed., 672p, 2001.<br />

6. Sad Planet: Depression Has Become a Global Disease, Breathing<br />

New Life Into Talk Therapy" by Tara Pepper and James<br />

Cunningham, Newsweek, June 21, 2004 pp.40-45 (cover<br />

story).<br />

7. MULLIS Kary, "Dancing Naked in the Mind Field". Pantheon Books,<br />

New York, 1998.<br />

172 - 189, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 189<br />

AYAHUASCA: MEMORIA Y CONCIENCIA. NUEVAS APLICACIONES DE UNA PRÁCTICA INDÍGENA ANCESTRAL<br />

<strong>de</strong> nuestras diversas instancias es eficaz y dura<strong>de</strong>ro sólo si<br />

se inscribe <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l Or<strong>de</strong>n Universal don<strong>de</strong> la reconciliación<br />

fundamental se <strong>de</strong>be hacer con nuestra naturaleza<br />

humana que se revela portadora <strong>de</strong> su fuente divina. En<br />

un mundo occi<strong>de</strong>ntalizado que globaliza también dramáticamente<br />

sus <strong>de</strong>ficiencias y sus fracturas, el restablecer<br />

puentes conciliadores se ha vuelto una emergencia: el uso<br />

correcto <strong>de</strong>l Ayahuasca y las sabidurías ancestrales pue<strong>de</strong>n<br />

contribuir po<strong>de</strong>rosamente a alcanzar esta meta.<br />

El ser humano sabe quién es en el fondo <strong>de</strong> su alma, pero<br />

se le olvidó. Recobrar la memoria es recuperar los orígenes.<br />

Somos amenazados por el olvido colectivo tan bien<br />

ilustrado actualmente por la endémica <strong>de</strong>mencia senil o<br />

enfermedad <strong>de</strong> Alzheimer que se asemeja a una regresión<br />

en la inconsciencia infantil. Una lengua altamente simbólica<br />

y sagrada como el hebreo nos revela que la estructura<br />

<strong>de</strong> la palabra "recordar" es la misma que la que significa<br />

"ser hombre".<br />

El ser humano en su plenitud se acuerda quién es haciendo<br />

memoria <strong>de</strong> su filiación.<br />

8. SACKS Oliver, "The Man Who Mistook His Wife for a Hat", USA,<br />

Pan Books ed., 1986.<br />

9. STRASSMAN Rick. "DMT: The Spirit Molecule", A Doctor's<br />

Revolutionary Research into the Biology of Near-Death and<br />

Mystical Experiences, Vermont, USA. Park Street Press, 2001.<br />

10. SHELDRAKE Rupert, "A New Science of Life", Paladin Books,<br />

Londres, 1984.<br />

11. '' MOURET Michel, "Le Temple du Corps", Actualités Psychiatriques<br />

n°4, XXéme année, pp.37-43, France, 1990.<br />

12. «Séraphim <strong>de</strong> Sarov, Sa vie, Entretiens avec Motovilov et Instructions<br />

spirituelles », Spiritualité Orientale, n°11, Abbaye <strong>de</strong><br />

Bellefontaine, 2004.<br />

13. MÁRQUEZ LÓPEZ-MATO Andrea, "Psiconeuroinmunoendrocrinología:<br />

Aspectos epistemológicos, clínicos y terapéuticos",<br />

Ed. Polemos, Buenos-Aires, 2002.<br />

14. SHELDRAKE Rupert, "A New Science of Life", Paladín Books,<br />

Londres, 1984.


Dr. Javier Mariátegui Chiappe (1928- 2008)<br />

Psiquiatra y Maestro Peruano e<br />

Hispanoamericano 1<br />

Resumen<br />

Artículo escrito en recuerdo <strong>de</strong> la amistad personal entre<br />

el personaje analizado y el autor <strong>de</strong> esta publicación.<br />

Se presenta la obra científica <strong>de</strong> Mariátegui <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 5 diferentes<br />

perspectivas:<br />

1. Contexto sociocultural <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong> alcohol.<br />

2. Psiquiatría social.<br />

3. Investigación transcultural en psiquiatría.<br />

4. Investigación etnohistórica sobre uso <strong>de</strong> etanol y otros<br />

psicotrópicos.<br />

5. Psiquiatría institucional latinoamericana.<br />

Como conclusión se propone que el tema común <strong>de</strong> todas<br />

estas perspectivas es la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> la psiquiatría latinoamericana,<br />

tanto en el presente, perspectiva sincrónica,<br />

cuanto en lo histórico, perspectiva diacrónica, importante<br />

asunto que él consi<strong>de</strong>ró más una aspiración que una realidad.<br />

Palabras clave: Javier Mariátegui Chiappe; psiquiatría<br />

peruana; psiquiatría hispanoamericana; psiquiatría<br />

latinoamericana.<br />

Eduardo Medina Cár<strong>de</strong>nas 2<br />

Dr. Javier Mariátegui Chiappe<br />

(1928- 2008). A Peruvian and<br />

Hispanoamerican psychiatrist<br />

and master teacher<br />

Summary<br />

In memorian publication where the author remembers his<br />

aca<strong>de</strong>mic and personal friendship with this personage.<br />

The scientific opus by Mariátegui is presented from five<br />

different points of view:<br />

1. Sociocultural context of alcoholic beverages consumption.<br />

2. Social Psychiatry.<br />

3. Transcultural research in Psychiatry.<br />

4. Ethnohistoric research about the use of ethanol and<br />

other psychotropic substances.<br />

5. Latinoamerican Institutional Psychiatry.<br />

As a conclusion, it is proposed the i<strong>de</strong>ntity of Latinoamerican<br />

Psychiatry as the common subject among the Mariateguian<br />

opus, referred to the present, or sinchronic<br />

perspective, and to the past, or diachronic perspective,<br />

important subject but more a fancy than a reality for him.<br />

1. Una primera versión <strong>de</strong> este trabajo fue publicada en la Revista <strong>de</strong> Neuro-Psiquiatría, <strong>de</strong> la Universidad Peruana Cayetano Heredia (Vol. 71, Nº 1-4:<br />

26-33, 2008), solicitada directamente al autor por su Editor-en-Jefe. Esa versión lamentablemente sufrió varias <strong>de</strong>safortunadas modificaciones en<br />

su forma y contenido respecto al texto original, no consultadas ni menos aprobadas por este autor, siendo incluso posteriormente rechazada una<br />

correspondiente ‘fe <strong>de</strong> erratas’. Por la importancia que significó su amistad personal con el Dr. Javier Mariátegui se entrega esta segunda versión<br />

para su publicación chilena, la cual respecto a la versión original sólo tiene modificaciones menores apropiadas al nuevo público. Esta versión<br />

es la única que su autor reconoce como propia y, por lo mismo, es la que ha incorporado en sus antece<strong>de</strong>ntes profesionales.<br />

2. Médico especialista en Psiquiatría y <strong>Salud</strong> Pública. Maestro en Antropología Social.<br />

Profesional Asesor, Ministerio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>de</strong> Chile. E-mail: emedina@minsal.cl Profesor Asociado, Departamento <strong>de</strong> Ciencias Históricas,<br />

Facultad <strong>de</strong> Filosofía y Humanida<strong>de</strong>s, Universidad <strong>de</strong> Chile edmedina@uchile.cl<br />

190<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 190 - 199


Key words: Javier Mariátegui Chiappe; peruvian psychiatry;<br />

hispanoamerican psychiatry; latinoamerican psychiatry.<br />

I. Introducción<br />

Según su Curriculum Vitae (1) el Dr. Javier Mariátegui<br />

Chiappe estuvo por primera vez en Chile en agosto <strong>de</strong><br />

1966, con motivo <strong>de</strong>l Simposio Internacional sobre Alcohol<br />

y Alcoholismo a la memoria <strong>de</strong>l Prof. E.M. Jellinek 3 (4):<br />

en esa ocasión presentó conjuntamente con el Dr. Alfredo<br />

Saavedra un amplio relato sobre la situación epi<strong>de</strong>miológica<br />

latinoamericana al respecto (5). Entre esta publicación<br />

y su participación en el II Congreso Iberoamericano<br />

<strong>de</strong> Alcohol y Alcoholismo <strong>de</strong> 1981, en nuestro medio chileno<br />

se conocían cuando menos otras 3 publicaciones suyas<br />

relacionadas, dos similares en sus perspectivas a la recién<br />

mencionada (6, 9) y una tercera que incluía el contexto<br />

sociocultural en sus análisis (8), esto es, que afinaba la<br />

interpretación simplemente cuantitativa <strong>de</strong> las conductas<br />

<strong>de</strong> ingestión, mediante la consi<strong>de</strong>ración <strong>de</strong> la cosmovisión<br />

cualitativa que ro<strong>de</strong>aba y daba significados particulares<br />

a tales conductas. El trabajo aportado en esa nueva visita<br />

fue nuevamente cuantitativo (12), una versión actualizada<br />

<strong>de</strong>l presentado por él 2 años antes en Córdoba,<br />

Argentina, con motivo <strong>de</strong>l 1º Congreso Ibero-Americano<br />

<strong>de</strong> Problemas <strong>de</strong>l Alcohol (10). En esa oportunidad fue<br />

uno <strong>de</strong> los fundadores <strong>de</strong> la Asociación Iberoamericana<br />

<strong>de</strong> Estudio <strong>de</strong> los Problemas <strong>de</strong>l Alcohol (AIEPA), entidad<br />

también organizadora <strong>de</strong>l evento <strong>de</strong> Santiago <strong>de</strong> Chile y<br />

<strong>de</strong> otros que se recuerdan a continuación.<br />

190 - 199, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 191<br />

DR. JAVIER MARIÁTEGUI CHIAPPE (1928- 2008) PSIQUIATRA Y MAESTRO PERUANO E HISPANOAMERICANO<br />

Un segundo encuentro personal con el Dr. Mariátegui<br />

ocurrió en Lima en octubre <strong>de</strong> 1983, en el Instituto Nacional<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> “Honorio Delgado – Hi<strong>de</strong>yo Noguchi”,<br />

fundado en julio <strong>de</strong> 1982 y siendo a la sazón su primer<br />

Director. Entre 1984 y 1998 suce<strong>de</strong>n los Congresos III al<br />

VIII <strong>de</strong> la Asociación Iberoamericana ya mencionada 4 . De<br />

ellos son <strong>de</strong>stacables el III, <strong>de</strong> Cuenca, Ecuador, en junio<br />

<strong>de</strong> 1984, don<strong>de</strong> él presentó la conferencia “Consumo <strong>de</strong><br />

alcohol y alcoholismo en el Antiguo Perú” (15), así como<br />

el V, realizado en Madrid en noviembre <strong>de</strong> 1989, vivo en<br />

mi recuerdo no tanto por sus aportes académicos sino<br />

porque en uno <strong>de</strong> esos días me invitó a acompañarlo para<br />

una visita a casa <strong>de</strong> su amigo el Dr. Pedro Laín Entralgo 5 .<br />

Otros encuentros personales formales fueron con motivo<br />

<strong>de</strong>l XI Congreso Peruano <strong>de</strong> Psiquiatría (Lima, octubre <strong>de</strong><br />

1990), el IV Congreso Chileno <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> y 1º <strong>de</strong> Rehabilitación<br />

en Psiquiatría (Santiago, noviembre / diciembre<br />

<strong>de</strong> 1993), y el X Congreso <strong>de</strong>l Instituto <strong>de</strong> Psiquiatras<br />

<strong>de</strong> Lengua Española y III Congreso <strong>de</strong> la Asociación Psiquiátrica<br />

<strong>de</strong> Jalisco (Guadalajara, Jalisco, México, octubre<br />

/ noviembre <strong>de</strong> 2002).<br />

Finalmente, constituyendo simbólicamente otros encuentros<br />

mediatizados por intereses académicos comunes,<br />

tuvo la gentileza <strong>de</strong> enviarme regularmente <strong>de</strong>s<strong>de</strong> mediados<br />

<strong>de</strong> los 90 las diferentes publicaciones en las cuales<br />

tuvo alguna activa intervención, tales como revistas 6 , la<br />

reedición <strong>de</strong> las obras <strong>de</strong> Honorio Delgado 7 y varios <strong>de</strong> sus<br />

3. Jellinek EM (2). Esta asesoría al Servicio Nacional <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> (SNS) se extendió <strong>de</strong>s<strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 1956 a enero <strong>de</strong> 1957, <strong>de</strong>spertando gran interés<br />

entre muchos profesionales <strong>de</strong> la medicina <strong>de</strong> entonces. Es el antece<strong>de</strong>nte directo <strong>de</strong> la realización <strong>de</strong>l Symposium sobre Alcoholismo<br />

y Problemas <strong>de</strong>l Alcohol a mediados <strong>de</strong> ese mismo año (3), así como <strong>de</strong>l SIMPOSIO INTERNACIONAL SOBRE ALCOHOL Y ALCOHOLISMO En<br />

Homenaje a LA MEMORIA DEL PROFESOR E. M. JELLINEK (4). Elvin Morton Jellinek (1890-1963), fisiólogo norteamericano pionero en estudios<br />

sobre alcoholismo en cuanto a su condición <strong>de</strong> enfermedad, en particular sus características ‘incapacidad <strong>de</strong> abstenerse’ y ‘pérdida <strong>de</strong> control’.<br />

Ver: http://www.todayinsci.com/cgi-bin/in<strong>de</strong>xpage.pl?http://www.todayinsci.com/8/8_15.htm<br />

4. Des<strong>de</strong> el V Congreso esta Asociación fue transformada en AIEPAD (Asociación Iberoamericana <strong>de</strong> Estudio <strong>de</strong> los Problemas <strong>de</strong>l Alcohol y la<br />

Droga). Hasta don<strong>de</strong> hay noticias, el último <strong>de</strong> los congresos que realizó AIEPAD fue el VIII, nuevamente en Santiago <strong>de</strong> Chile, en mayo <strong>de</strong> 1998.<br />

5. El Dr. Pedro Laín Entralgo (1908 – 2001), figura máxima <strong>de</strong>l campo <strong>de</strong> la historia y la filosofía <strong>de</strong> la medicina iberoamericanas <strong>de</strong> su tiempo,<br />

estuvo en Chile en 1963 dictando un Curso <strong>de</strong> Antropología Médica en la Facultad <strong>de</strong> Medicina <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Chile, seguido por numeroso<br />

público, entre ellos este autor, entonces estudiante <strong>de</strong> la carrera. La oportunidad <strong>de</strong> esta invitación madrileña me permitió un segundo<br />

contacto personal con tan distinguido personaje.<br />

6. Revista <strong>de</strong> Neuropsiquiatría, Anales <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, Acta Herediana y Boletín Informativo <strong>de</strong>l Centenario <strong>de</strong> José Carlos Mariátegui.<br />

7. Freud y el psicoanálisis (1989), El médico, la medicina y el alma (1992), Ecología, tiempo anímico y existencia (1993), Curso <strong>de</strong> Psiquiatría<br />

(1993)y De la cultura y sus artífices (2001). Todas estas obras son ediciones <strong>de</strong> la Universidad Peruana Cayetano Heredia.


libros <strong>de</strong>dicados a personajes o hechos más relevantes <strong>de</strong><br />

la psiquiatría y la cultura peruanas 8 .<br />

II. Javier Mariátegui, psiquiatra<br />

comprometido con sus<br />

circunstancias 9<br />

Los numerosos aportes <strong>de</strong>l Dr. Javier Mariátegui Chiappe<br />

en los campos <strong>de</strong> la psiquiatría y la salud mental fueron<br />

bastante variados, una proporción <strong>de</strong> ellos centrados en<br />

la realidad peruana pero otros ampliables a las realida<strong>de</strong>s<br />

chilena e hispanoamericana en general. Cabe <strong>de</strong>stacar<br />

5 temas importantes según su aparición cronológica,<br />

en los cuales hizo contribuciones significativas para<br />

nuestra situación regional: el contexto sociocultural <strong>de</strong>l<br />

uso <strong>de</strong> alcohol, la psiquiatría social, la investigación en<br />

psiquiatría, la investigación etnohistórica sobre el uso <strong>de</strong><br />

alcohol y <strong>de</strong> otros psicotrópicos, y la psiquiatría institucional<br />

latinoamericana.<br />

1) Contexto sociocultural <strong>de</strong>l uso <strong>de</strong> alcohol<br />

Valgan dos citas suyas para ir directamente al meollo <strong>de</strong><br />

su pensamiento al respecto:<br />

“La investigación <strong>de</strong>l alcoholismo requiere, necesariamente,<br />

una aproximación interdisciplinaria… La búsqueda<br />

y la interpretación <strong>de</strong> los datos reveladores <strong>de</strong>l<br />

problema tienen que situarse en la perspectiva <strong>de</strong>l conocimiento<br />

y la gravitación <strong>de</strong> los factores culturales y<br />

socioeconómicos que <strong>de</strong>finen las poblaciones estudiadas…<br />

(el) consumo <strong>de</strong> alcohol, tanto <strong>de</strong>l situado <strong>de</strong>ntro<br />

<strong>de</strong> la tolerancia social cuanto <strong>de</strong>l excesivo, se encuentra<br />

inmerso en la estructura social y en la complicada urdimbre<br />

<strong>de</strong> costumbres, tradiciones, modos <strong>de</strong> vida, etc.,<br />

factores estos últimos que si no necesariamente patogé-<br />

nicos, resultan obligadamente patoplásticos (8, p. 24)/" …<br />

son escasos los estudios epi<strong>de</strong>miológicos <strong>de</strong> la región e<br />

igualmente limitadas las averiguaciones en torno <strong>de</strong> los<br />

factores socio-antropológicos que se encuentran en la<br />

base misma <strong>de</strong> la problemática” (9, p. 93).<br />

La primera referencia, <strong>de</strong> 1967, recoge la influencia <strong>de</strong><br />

tres distinguidos antropólogos funcionalistas norteamericanos<br />

(Dwight B. Heath, William P. Mangin y Ozzie G.<br />

Simmons) que en el <strong>de</strong>cenio anterior habían investigado<br />

específicamente entre poblaciones andinas al respecto,<br />

a<strong>de</strong>más que consi<strong>de</strong>ra las entonces recientes proposiciones<br />

respecto a <strong>de</strong>finiciones transculturales para estudios<br />

epi<strong>de</strong>miológicos <strong>de</strong> José Horwitz y Juan Marconi, dos <strong>de</strong><br />

los tres editores <strong>de</strong> la monografía que incluyó su propio<br />

trabajo 10 . La segunda referencia, <strong>de</strong> 1974, amplía tal influencia<br />

antropológica (toma en cuenta a Ruth Bunzel,<br />

Michael Kearney, Larissa Lomnitz, Michael Maccoby y<br />

William Sayres) pero a<strong>de</strong>más agrega la importancia <strong>de</strong><br />

la cultura comunitaria en el diagnóstico y resolución <strong>de</strong>l<br />

problema, por entonces formulada por Mario Chiappe y<br />

colaboradores, bajo la influencia <strong>de</strong>l Prof. Carlos A Seguín,<br />

como “terapia mágica <strong>de</strong>l alcoholismo” (16).<br />

Someramente resumidos, cabe enfatizar que entonces, a<br />

partir <strong>de</strong> la epi<strong>de</strong>miología <strong>de</strong>l beber, es uno <strong>de</strong> los primeros<br />

investigadores médicos latinoamericanos que inicia<br />

el estudio <strong>de</strong> su asociación con la cultura autóctona, la<br />

aculturación, la urbanización y migración, la estratificación<br />

social y la estructura social, temas que aborda<br />

somera, pero sustantivamente, en la primera <strong>de</strong> estas<br />

referencias.<br />

2) Psiquiatría social<br />

“Después <strong>de</strong> los libros Psiquiatría y <strong>Sociedad</strong>. Estudios<br />

sobre la realidad peruana por Carlos Alberto Seguín y<br />

8. La Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y Disciplinas Conexas (1987), Honorio Delgado Magister Honorabilis (1990), La medicina como arte literario en el<br />

Perú (1993), El Mercurio Peruano y la Medicina (1994), La Aca<strong>de</strong>mia Nacional <strong>de</strong> Medicina Perspectivas (1995) y Juan Francisco Valega y la<br />

Lima <strong>de</strong> su tiempo (2000), entre otros.<br />

9. Es asunto conocido la apertura que José Carlos Mariátegui, padre <strong>de</strong> Javier, tuvo hacia Sigmund Freud y el psicoanálisis. Como falleció en<br />

1930, es <strong>de</strong>cir, cuando Javier era un niño <strong>de</strong> 2 años, todavía no ha sido precisada su eventual influencia en la orientación profesional suya a<br />

la medicina y la psiquiatría.<br />

10. Pue<strong>de</strong> consultarse esta fuente en sus propias referencias bibliográficas.<br />

192<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 190 - 199


colaboradores (1962) 11 y Estudios <strong>de</strong> psiquiatría social en<br />

el Perú <strong>de</strong> Baltasar Caravedo, Humberto Rotondo y Javier<br />

Mariátegui (1963), la psiquiatría peruana se <strong>de</strong>fine como<br />

social” (17, p. 269).<br />

Esta frase, pronunciada en 1996 en el contexto <strong>de</strong> un homenaje<br />

suyo al Dr. Humberto Rotondo Grimaldi a los 10<br />

años <strong>de</strong> su muerte, nos retrotrae a la situación existente<br />

a comienzos <strong>de</strong> los años 60. El segundo <strong>de</strong> estos estudios<br />

es impresionante por su amplitud, su metodología<br />

y sus metas, a<strong>de</strong>más que trascen<strong>de</strong>nte por sus implicaciones<br />

regionales como lo habían sido en su oportunidad<br />

las monografías ya citadas sobre alcoholismo (7) y epi<strong>de</strong>miología<br />

psiquiátrica (19). Todavía en Chile <strong>de</strong> los años 90<br />

existía una interesante serie <strong>de</strong> son<strong>de</strong>os respecto <strong>de</strong> la ingestión<br />

<strong>de</strong> alcohol, pero comparativamente poco respecto<br />

<strong>de</strong> otras patologías mentales analizadas <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> su<br />

medio socioeconómico (21, 22), es <strong>de</strong>cir, existían estudios<br />

cuantitativos crudos pero carentes <strong>de</strong> afinamientos respecto<br />

<strong>de</strong> variables tales como <strong>de</strong>sorganización, conducta<br />

antisocial, “moral”, vida <strong>de</strong> relación, fracasos y logros, uso<br />

<strong>de</strong> horas libres y otros, como los había en éste.<br />

Por continuar vigente su interés pese al transcurso <strong>de</strong> los<br />

años es <strong>de</strong>l caso presentar un breve resumen <strong>de</strong> Los Estudios<br />

<strong>de</strong> Psiquiatría Social en el Perú (23). Ellos fueron<br />

llevados a cabo durante los años 50 utilizando el Índice<br />

Médico <strong>de</strong> Cornell como instrumento <strong>de</strong> "screening"<br />

<strong>de</strong> síntomas somáticos, psicosomáticos y psíquicos entre<br />

muestras <strong>de</strong> población general urbana y rural, realizando<br />

posteriormente una entrevista psiquiátrica convencional<br />

sólo a los casos sospechosos <strong>de</strong> patología mental. Señalemos<br />

también que se intentó pesquisar las respectivas<br />

características <strong>de</strong> personalidad básica al grupo urbano<br />

seleccionado, mediante entrevistas a informantes claves,<br />

cuestionarios, historias <strong>de</strong> vida y la aplicación <strong>de</strong> los tests<br />

psicométricos <strong>de</strong> Rorschach y <strong>de</strong> Apercepción Temática.<br />

La primera sección estudió la prevalencia <strong>de</strong> <strong>de</strong>sór<strong>de</strong>nes<br />

mentales y otros problemas sociales en los habitantes <strong>de</strong><br />

190 - 199, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 193<br />

DR. JAVIER MARIÁTEGUI CHIAPPE (1928- 2008) PSIQUIATRA Y MAESTRO PERUANO E HISPANOAMERICANO<br />

una barriada limeña marginal (Mendocita) surgida <strong>de</strong> una<br />

reciente migración rural-urbana <strong>de</strong> población <strong>de</strong> origen<br />

tanto serrano como costeño. En este sentido, fueron encontrados<br />

altos niveles <strong>de</strong> ansiedad, <strong>de</strong>presión y alcoholismo,<br />

ten<strong>de</strong>ncias hipocondríacas, ina<strong>de</strong>cuación y agresividad.<br />

En cuanto a su "moral" (confianza, perseverancia<br />

en el trabajo y fi<strong>de</strong>lidad a los i<strong>de</strong>ales) hubo predominio<br />

<strong>de</strong> "<strong>de</strong>smoralización" (pesimismo, anomia, <strong>de</strong>sesperanza,<br />

<strong>de</strong>sinterés y cambios en la escala tradicional <strong>de</strong> valores),<br />

así como bajísima afiliación a grupos voluntarios<br />

formales y aislamiento social. Los grupos senescente y<br />

adolescente plantearon problemas especiales, tales como<br />

ansiedad y <strong>de</strong>presión en aquéllos y más altos niveles <strong>de</strong><br />

conducta antisocial en éstos, asociados con sentimientos<br />

<strong>de</strong> minusvalía y empleo inconveniente <strong>de</strong>l tiempo libre,<br />

respectivamente.<br />

La segunda sección aplicó el mismo Índice Médico a una<br />

colectividad rural tradicional (Pachacamac), la cual mostró<br />

menores prevalencias <strong>de</strong> <strong>de</strong>presión, ina<strong>de</strong>cuación y<br />

agresividad, con también menor alcoholismo, pero mayor<br />

ingestión intemperante <strong>de</strong> bebidas alcohólicas, bajo cuyo<br />

efecto se cometían numerosas faltas menores tales como<br />

agresión intradoméstica y hurtos.<br />

La tercera sección intentó pesquisar las características <strong>de</strong><br />

personalidad básica <strong>de</strong> los mestizos tradicionales y <strong>de</strong> los<br />

cholos “nuevos” o “emergentes”, habitantes <strong>de</strong> Mendocita,<br />

mediante la aplicación <strong>de</strong> los dos instrumentos psicométricos<br />

mencionados al inicio.<br />

La cuarta sección estudió la salud mental <strong>de</strong> una muestra<br />

<strong>de</strong> población industrial, que tuvo como sujetos <strong>de</strong> investigación<br />

a dos grupos, uno <strong>de</strong> ejecutivos y otro <strong>de</strong> lí<strong>de</strong>res<br />

sindicales, pertenecientes a 33 empresas limeñas. Se pudo<br />

<strong>de</strong>mostrar entre éstos mayor tensión emocional y somatizaciones<br />

ansiosas, susceptibilidad, irritabilidad y agresión<br />

en sus relaciones intepersonales, fatiga e insomnio y reacciones<br />

psicofisiológicas digestivas, así como trastornos<br />

somáticos diversos; por otra parte, ambos grupos tuvieron<br />

similar prevalencia <strong>de</strong> alcoholismo. A ambos luego se les<br />

11. Obra citada en 26, publicada en 1962. Es <strong>de</strong>l caso señalar que este aporte surgió en el marco <strong>de</strong>l GLADET (Grupo Latinoamericano <strong>de</strong> Estudios<br />

Transculturales) creado en 1957 entre el mismo Seguín, el cubano José A Bustamante y el mexicano Guillermo Dávila, <strong>de</strong> efímera existencia<br />

entonces pero reactivado con ocasión <strong>de</strong>l <strong>de</strong>nominado Primer Congreso Internacional GLADET llevado a efecto en Guadalajara, Jalisco, México,<br />

el 17 - 20 abril 2008.


aplicó el Inventario <strong>de</strong> Personalidad <strong>de</strong> Bernreuter, el cual<br />

concluyó que aunque aquéllos presentaban menos disturbios<br />

emocionales y ten<strong>de</strong>ncia a la neurosis, así como mayor<br />

in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia y extroversión, ambos poseían mayor<br />

ten<strong>de</strong>ncia a la sumisión que a la dominación. Se pesquisó<br />

a<strong>de</strong>más que el personal directivo estaba insuficientemente<br />

capacitado para apreciar las relaciones interpersonales<br />

<strong>de</strong> la gente a su cargo, así como que las dificulta<strong>de</strong>s en<br />

las relaciones obrero-patronales eran atribuidas <strong>de</strong> manera<br />

importante sólo a problemas salariales. Se estimó esta<br />

situación como negativa para las relaciones industriales.<br />

En estos Estudios las tres primeras secciones estuvieron<br />

bajo la coordinación <strong>de</strong> los Drs. Rotondo y Mariátegui, en<br />

tanto que la cuarta <strong>de</strong>pendió <strong>de</strong>l Dr. Baltasar Caravedo.<br />

Posteriormente Mariátegui encabezó otra investigación<br />

análoga también en Lima, pero correspondiente a Lince,<br />

distrito ubicado en el casco metropolitano (18, 20). Como<br />

en su introducción se refiere a que seis años luego <strong>de</strong> aplicada<br />

la encuesta y <strong>de</strong>bido a la postergación in<strong>de</strong>finida <strong>de</strong>l<br />

estudio integral propuesto en la oportunidad se entregan<br />

los datos epi<strong>de</strong>miológicos psiquiátricos, es <strong>de</strong>l caso asumir<br />

que originalmente este nuevo equipo investigador quiso<br />

realizar algo equivalente a los trabajos que constituyeron<br />

los Estudios <strong>de</strong> Psiquiatría Social en el Perú, ahora tal vez<br />

realizando mediciones <strong>de</strong>l mismo tipo que las resumidas<br />

recientemente para Mendocita. No obstante, la comparación<br />

cuantitativa <strong>de</strong> los resultados urbanos generales <strong>de</strong><br />

ambos estudios (Mendocita y Lince), teniendo en cuenta<br />

sus contextos sociológicos <strong>de</strong> referencia, dan valor a su intención<br />

epi<strong>de</strong>miológica psiquiátrica. Al final también hace<br />

comparaciones con investigaciones análogas en Santiago<br />

<strong>de</strong> Chile, San José <strong>de</strong> Costa Rica y Cali, Colombia, similares<br />

en cuanto a haber pesquisado una relación inversa entre<br />

patología psiquiátrica y nivel socioeconómico, entre otras<br />

variables, importante hallazgo para los años 60.<br />

Si bien la <strong>de</strong>nominación Psiquiatría Social correspon<strong>de</strong><br />

más ampliamente a la primera publicación consi<strong>de</strong>rada en<br />

esta sección, la pura epi<strong>de</strong>miología psiquiátrica <strong>de</strong> la segunda<br />

también representa un aporte en esta perspectiva.<br />

Humberto Rotondo (1915-1985) tuvo gran influencia en<br />

el <strong>de</strong>sarrollo que logró Javier Mariátegui en psiquiatría<br />

social, patente en dos intervenciones específicas suyas<br />

recordando al maestro, la recién citada y otra ubicada<br />

10 años antes, poco <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> fallecido aquél (24), a las<br />

que hay que agregar otra extensa referencia específica en<br />

su capítulo “La psiquiatría en el Perú” (35) <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la<br />

edición <strong>de</strong> su libro LA PSIQUIATRÍA EN AMÉRICA LATI-<br />

NA (34). Rotondo pudo aportarle directamente <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su<br />

propia formación norteamericana con personajes <strong>de</strong> este<br />

enfoque social (Erik Erikson, Erich Fromm, Adolf Meyer,<br />

Harry Stack Sullivan y John C. Whitehorn,) y otros <strong>de</strong> la<br />

socioantropología anglosajona <strong>de</strong> entonces, encrucijada<br />

también conocida como ‘cultura y personalidad’ (Gregory<br />

Bateson, Ruth Benedict, Abram Kardiner, Oscar Lewis,<br />

Ralph Linton, Margaret Mead, etc.). Esta influencia resulta<br />

confirmada en sus respuestas al cuestionario sobre i<strong>de</strong>ntidad<br />

<strong>de</strong> la psiquiatría latinoamericana, don<strong>de</strong> expresa<br />

que a su inicial aproximación a la patología psiquiátrica<br />

como un aspecto más <strong>de</strong> la marginalidad social “… fueron<br />

Enrique Encinas y Humberto Rotondo las personalida<strong>de</strong>s<br />

que influyeron <strong>de</strong> modo <strong>de</strong>finido en la elección <strong>de</strong> la especialidad…<br />

Rotondo añadiría <strong>de</strong>spués un interés por la<br />

sociometría y la microsociología, en auge mayormente en<br />

el mundo sajón” (25, p. 438).<br />

Han pasado más <strong>de</strong> 30 años <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que Seguín y Mariátegui<br />

propusieran que el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la investigación en<br />

psiquiatría social <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la Región requería consi<strong>de</strong>rar<br />

sus complementarios aspectos transculturales y epi<strong>de</strong>miológicos<br />

(26). El estudio integral <strong>de</strong> la realidad biosociocultural<br />

latinoamericana <strong>de</strong>bería estar integrado por<br />

las características <strong>de</strong> los diferentes grupos humanos <strong>de</strong><br />

cada país (indios, negros, mestizos, blancos, etc.), sus peculiarida<strong>de</strong>s<br />

psicopatológicas, nosológicas y nosográficas,<br />

la epi<strong>de</strong>miología, los estudios terapéuticos y la psiquiatría<br />

folklórica. Esta publicación se gestó como un relato conjunto<br />

para un congreso <strong>de</strong> la APAL<br />

El Dr. Carlos Alberto Seguín (1907-1995) influyó primero<br />

en el <strong>de</strong>sarrollo que logró Javier Mariátegui en psiquiatría<br />

dinámica. En efecto, en su misma publicación histórica<br />

recién citada (35) hay otra extensa referencia a las incursiones<br />

<strong>de</strong> éste en psiquiatría dinámica y en medicina<br />

psicosomática, cuando realizó una extensa estadía en los<br />

Estados Unidos <strong>de</strong> América, lo que <strong>de</strong> regreso en su país se<br />

expresó en publicaciones y cursos respecto <strong>de</strong> estas ma-<br />

194<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 190 - 199


terias. Con el correr <strong>de</strong> los años esta publicación conjunta<br />

es una muestra <strong>de</strong> una segunda influencia formativa respecto<br />

<strong>de</strong> psiquiatría transcultural o folklórica.<br />

4) Investigación etnohistórica sobre uso <strong>de</strong><br />

etanol y otros psicotrópicos.<br />

Javier Mariátegui no hizo incursiones académicas explícitas<br />

en etnohistoria, pero sus estudios sobre el uso <strong>de</strong><br />

etanol y otros psicotrópicos por los pueblos originarios <strong>de</strong>l<br />

actual Perú pue<strong>de</strong>n en propiedad calificarse como aportes<br />

en esta perspectiva; más aún, no obstante que se refieren<br />

a realida<strong>de</strong>s locales <strong>de</strong> su propia nación, metodológicamente<br />

son un estímulo para otros emprendimientos regionales<br />

análogos.<br />

La etnohistoria, siguiendo al médico y antropólogo mexicano<br />

Gonzalo Aguirre Beltrán 12 (27), busca en nuestra<br />

región latinoamericana <strong>de</strong>scubrir en la documentación<br />

atingente al español y al indio originario, el dato histórico<br />

que lleva a enten<strong>de</strong>r eventos ya extinguidos sobre las<br />

condiciones culturales existentes al momento <strong>de</strong>l contacto<br />

y las presiones impuestas por el invasor sobre los patrones<br />

culturales aborígenes: el estudio <strong>de</strong>l contacto cultural<br />

antiguo conduce al conocimiento <strong>de</strong> las resultantes <strong>de</strong> la<br />

aculturación, tanto <strong>de</strong> un proceso ocurrido en el tiempo<br />

histórico, cuanto <strong>de</strong> los términos presentes <strong>de</strong> un conflicto<br />

<strong>de</strong> culturas cuyos actores originales han <strong>de</strong>saparecido.<br />

En lo formal, siguiendo al antropólogo norteamericano<br />

Robert H. Lavenda 13 (28), tres puntos <strong>de</strong> vista categorizan<br />

a la etnohistoria: la historia <strong>de</strong> socieda<strong>de</strong>s sin historia<br />

escrita, la historia propia <strong>de</strong> una sociedad antigua ya sin<br />

presencia real, y el tratamiento que en el pasado tuvieron<br />

temas antropológicos tradicionales. Con todas sus posibles<br />

limitaciones y relativida<strong>de</strong>s, ambas perspectivas sin<br />

duda que aportan al entendimiento <strong>de</strong> dinámicas internas<br />

que también tocan nuestros campos profesionales.<br />

190 - 199, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 195<br />

DR. JAVIER MARIÁTEGUI CHIAPPE (1928- 2008) PSIQUIATRA Y MAESTRO PERUANO E HISPANOAMERICANO<br />

Estos aportes etnohistóricos están contenidos en 4 publicaciones<br />

orientadas al antiguo Perú, sobre el hombre<br />

y el alcoholismo, el hombre y la enfermedad, y el uso <strong>de</strong><br />

sustancias psicotrópicas como materia médica o farmacéutica.<br />

Sobre el hombre y alcoholismo (15, 29), consi<strong>de</strong>ró<br />

como fuentes históricas y socioculturales a los cronistas<br />

coloniales, al lenguaje asociado al consumo y a estudios<br />

arqueológicos y etnográficos. A partir <strong>de</strong> ellos se refiere a<br />

las diferentes chichas existentes (<strong>de</strong> maíz, oca, yuca, quinoa,<br />

molle, algarrobo, huarango, frutilla, piña, maguey y<br />

maní), en conjunto con costumbres, usos y abusos acompañantes<br />

<strong>de</strong> etapas <strong>de</strong>l ciclo vital, así como a varias voces<br />

autóctonas relacionadas con el consumo <strong>de</strong> ellas. Concluye<br />

en un uso tradicional <strong>de</strong> alcohol con caracteres <strong>de</strong> tipo<br />

ceremonial, ritual y convivencial, en particular referido a<br />

un consumo mayoritario <strong>de</strong> chicha <strong>de</strong> maíz. Sin <strong>de</strong>scartar<br />

alguna ingestión excesiva, Mariátegui <strong>de</strong>stacó que hay<br />

que tener presente que el ethos incaico estimulaba en el<br />

adulto un rol cuerdo y <strong>de</strong> razón, un sujeto trabajador y<br />

cumplidor <strong>de</strong> sus <strong>de</strong>beres, realidad <strong>de</strong> entonces que requería<br />

escasas medidas represoras y punitivas <strong>de</strong> los excesos.<br />

Concluyó que la imagen <strong>de</strong> los cronistas respectos<br />

<strong>de</strong> la cuantía <strong>de</strong> los excesos correspon<strong>de</strong> a una etapa ya<br />

contaminada con el trauma <strong>de</strong> la conquista.<br />

Sobre la concepción <strong>de</strong>l hombre y la enfermedad (30), los<br />

antiguos precolombinos consi<strong>de</strong>raban a ésta como impureza,<br />

un castigo por el pecado <strong>de</strong> <strong>de</strong>sviación o trasgresión<br />

<strong>de</strong> las normas que el hombre <strong>de</strong>bía a la divinidad. De allí<br />

la diferenciación <strong>de</strong> prácticas curativas con orientación<br />

religiosa: ritos curativos catárticos, terapéutica sugestiva<br />

enérgica y una potente materia médica vegetal. A partir<br />

<strong>de</strong> explicitar que magia y ciencia son dos formas <strong>de</strong> interpretar<br />

lo existente o <strong>de</strong> explicar los orígenes, es <strong>de</strong>stacable<br />

la vinculación <strong>de</strong> la medicina con la religión, así como el<br />

arte <strong>de</strong> curar con la creencia mítica: siendo la enfermedad<br />

un fenómeno total, <strong>de</strong>l cuerpo y <strong>de</strong>l alma, su enfrenta-<br />

12. Gonzalo Aguirre Beltrán (1908-1996), médico y antropólogo mexicano <strong>de</strong>stacado por sus aportes a la teoría y praxis indigenista <strong>de</strong> su país y<br />

el resto <strong>de</strong> Latinoamérica, en particular hacia el entendimiento <strong>de</strong> los procesos <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la comunidad, <strong>de</strong> las medicinas interculturales<br />

antigua mágica y contemporánea racional, <strong>de</strong> la educación bilingüe y <strong>de</strong>l rol <strong>de</strong> la inmigración negra en su país <strong>de</strong> origen, entre otros varios<br />

temas a los que <strong>de</strong>dicó su interés.<br />

13. Robert H. Lavenda es Profesor <strong>de</strong> Antropología en la St. Cloud State University, Minnesota, USA, don<strong>de</strong> dirige el Programa <strong>de</strong> Estudios Latinoamericanos.<br />

Es un antropólogo cultural interesado en aspectos simbólicos y expresivos <strong>de</strong> la vida humana, con varias publicaciones al respecto.<br />

Ha hecho trabajo <strong>de</strong> campo en Venezuela, Ecuador, Costa Rica y Chile, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> su propio país.


miento se basaba en procedimientos psicoterapéuticos y<br />

el uso <strong>de</strong> los ingentes recursos vegetales, con remedios<br />

para matar, alocar y atontar, logrados por una constante<br />

observación y experimentación <strong>de</strong>l mundo vegetal circundante.<br />

Diferencia distintos agentes <strong>de</strong> salud: el hombre<br />

<strong>de</strong> las medicinas para los po<strong>de</strong>rosos (hampi Camayoc<br />

– hampi mana) y otro para el pueblo común (ccamascas,<br />

hacariecue, villac), a los que <strong>de</strong>ben agregarse el sabio<br />

consejero (amauta), el especialista confesor <strong>de</strong> pecados<br />

(inchuri) y los curan<strong>de</strong>ros itinerantes (callahuayas). La<br />

conquista quebró este mundo creencial y su contexto <strong>de</strong><br />

apoyo, con efectos negativos <strong>de</strong>vastadores.<br />

Sobre materia médica y sustancias psicotrópicas en el Antiguo<br />

Perú (31), <strong>de</strong>sarrollo muy próximo al anterior, parte<br />

proponiendo que el tema también podría <strong>de</strong>nominarse<br />

protofarmacología psicotrópica. Resulta interesante su<br />

realce respecto a que la farmacopea aborigen, las plantas<br />

medicinales, consi<strong>de</strong>ran tanto la materia médica como<br />

el mundo animista, es <strong>de</strong>cir, no sólo los vegetales sino<br />

también su animación <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la naturaleza. Siguiendo<br />

al distinguido médico y antropólogo Fernando Cabieses<br />

Molina 14 (32), a su vez receptor <strong>de</strong> los estudios <strong>de</strong> Carlos<br />

Gutiérrez-Noriega 15 (33), divi<strong>de</strong> botánicamente al Perú en<br />

3 áreas: <strong>de</strong> mescalinismo (cactáceas <strong>de</strong> valles y zonas <strong>de</strong>sérticas<br />

<strong>de</strong> la costa <strong>de</strong>l género Trichocereus, en particular<br />

el <strong>de</strong>nominado San Pedro), <strong>de</strong> cocaísmo (valles y mesetas<br />

andinas don<strong>de</strong> existe el Erytroxylum coca) y <strong>de</strong> harminismo<br />

(región amazónica don<strong>de</strong> existen plantas con contenido<br />

<strong>de</strong> harmina, tal como ayahuasca). Otros consumos<br />

locales ocurridos en áreas más circunscritas originaron<br />

nicotinismo (tabaco), daturismo (chamico) y bufotenismo<br />

(bufotenina encontrada en la piel <strong>de</strong> sapos <strong>de</strong>l género<br />

Bufo y en las plantas <strong>de</strong>l género Ana<strong>de</strong>nanthera). A<strong>de</strong>más<br />

se refiere a los estados oniroi<strong>de</strong>s y la productividad<br />

artística bajo efecto <strong>de</strong> tales psicotrópicos, también en la<br />

base <strong>de</strong> lo que llama esoterismo <strong>de</strong> las antiguas culturas<br />

andinas. En la actualidad se consume coca mascada<br />

y aguardiente en reemplazo <strong>de</strong> la chicha, reservándose<br />

numerosos recursos vegetales psicotrópicos al curan<strong>de</strong>ro<br />

chamánico en sus ritos y trances.<br />

Cerrando este aspecto <strong>de</strong> sus aportes, qué mejor que citarlo<br />

directamente en su enfoque <strong>de</strong> las fuentes etnohistóricas.<br />

En la segunda obra citada comenta que este tipo<br />

<strong>de</strong> estudios “… pue<strong>de</strong> ser realizado a través <strong>de</strong> tres ór<strong>de</strong>nes<br />

testimoniales:<br />

1. El examen crítico <strong>de</strong> los relatos <strong>de</strong> la conquista, tanto<br />

<strong>de</strong> cronistas indios como españoles, seglares y clérigos;<br />

2. El estudio <strong>de</strong>l lenguaje, en especial <strong>de</strong>l léxico relacionado<br />

con las conductas…;<br />

3. Los estudios arqueológicos o monumentales, y las<br />

indagaciones etnológicas <strong>de</strong> algunos objetos testimoniales…<br />

en general los estudios etnográficos que<br />

incluyen los realizados en los tiempos recientes en<br />

comunida<strong>de</strong>s aisladas o más o menos libres <strong>de</strong>l contaminante<br />

hispano… La utilización <strong>de</strong> estos recursos<br />

no está exenta <strong>de</strong> riesgos… Los testimonios <strong>de</strong> los cronistas…<br />

son <strong>de</strong>scripciones pocas veces objetivas… Los<br />

pobladores <strong>de</strong>l Imperio Incaico… no conocieron la escritura<br />

pero supieron conservar la memoria colectiva<br />

<strong>de</strong> los conglomerados humanos… En lo que concierne<br />

a la fuente lingüística, se tropieza con el escollo insalvable<br />

<strong>de</strong> toda traducción, que no transvasa o refleja el<br />

espíritu <strong>de</strong> otra lengua”. (29, pp 36-37). Como es posi-<br />

14. Fernando Cabieses Molina (1920-<strong>2009</strong>). Médico peruano especializado en neurología y neurocirugía. Personalidad creativa múltiple <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

estudiante, su Tesis <strong>de</strong> Grado <strong>de</strong> 1946 fue “La acción antifatigante <strong>de</strong> la cocaína y la habituación a la coca en el Perú”, en don<strong>de</strong> inicia la<br />

refutación <strong>de</strong> prejuicios hasta entonces muy arraigados entre autorida<strong>de</strong>s médicas y políticas respecto al rol <strong>de</strong> esta planta en las postergadas<br />

condiciones <strong>de</strong> vida <strong>de</strong> las poblaciones quechuas y aymaras. Des<strong>de</strong> los años 50 sus investigaciones se ampliaron a aspectos históricos y<br />

antropológicos <strong>de</strong> sus intereses médicos y botánicos, logrando la creación <strong>de</strong>l Instituto <strong>de</strong> Medicina Tradicional <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l Ministerio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong><br />

Pública <strong>de</strong>l Perú.<br />

15. Carlos Gutiérrez-Noriega (1906-1950). Médico psiquiatra y farmacólogo peruano con importantes estudios sobre los efectos humanos <strong>de</strong><br />

numerosos psicotrópicos. Respecto al uso <strong>de</strong> coca participó a favor <strong>de</strong> los prejuicios recién mencionados, los que en su época fueron impugnados<br />

por Cabieses.<br />

16. Faltaron presentaciones <strong>de</strong> El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua y Paraguay.<br />

17. Jorge J Saurí (1923-2003). Médico psiquiatra argentino recibido en 1949 y especializado en 1952 (Universidad <strong>de</strong> Buenos Aires), a<strong>de</strong>más <strong>de</strong><br />

tener formación en filosofía y en teología católica. De orientación analítica existencial y fenomenológica, escribió varios otros libros <strong>de</strong>ntro<br />

<strong>de</strong> sus campos <strong>de</strong> intereses. Ver: http://sisbib.unmsm.edu.pe/BVrevistas/Neuro_psiquiatria/Vol67_N1-2_2004/Pdf/a09.pdf<br />

196<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 190 - 199


le apreciar, su aproximación coinci<strong>de</strong> por entero con<br />

los dos autores académicos citados al inicio.<br />

5) Psiquiatría institucional latinoamericana<br />

La publicación <strong>de</strong> LA PSIQUIATRÍA EN AMÉRICA LATINA<br />

(34) fue un interesante intento <strong>de</strong> Javier Mariátegui por<br />

comunicar la realidad regional a través <strong>de</strong> aportes nacionales<br />

solicitados a diferentes psiquiatras <strong>de</strong> cada uno <strong>de</strong><br />

los países consi<strong>de</strong>rados 16 , escritos que fueron precedidos<br />

<strong>de</strong> un prólogo por Guillermo Vidal y <strong>de</strong> un <strong>de</strong>sarrollo contemporáneo<br />

<strong>de</strong> las i<strong>de</strong>as psiquiátricas a cargo <strong>de</strong> Jorge J<br />

Saurí 17 , así como finalizados mediante un análisis global<br />

<strong>de</strong> Renato D. Alarcón. En la presentación <strong>de</strong> la obra su responsable<br />

conecta este esfuerzo <strong>de</strong> la psiquiatría latinoamericana<br />

por ir adquiriendo i<strong>de</strong>ntidad propia con la labor<br />

<strong>de</strong> algunos psiquiatras pioneros, la existencia <strong>de</strong> algunas<br />

publicaciones científicas periódicas locales y la creación<br />

<strong>de</strong> la Asociación Psiquiátrica <strong>de</strong> América Latina (APAL).<br />

Como toda obra exploratoria inicial, aunque reunió relatos<br />

<strong>de</strong> diferentes formas y calida<strong>de</strong>s, fue un primer intento<br />

<strong>de</strong> un enfoque regional que su impulsor esperó fuera<br />

seguido por otros más extensos y con equivalente plan <strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>sarrollo, asunto no ocurrido hasta ahora.<br />

Esta obra, todavía única en la Región, resulta compendiada<br />

en su publicación enviada al Suplemento 1989 <strong>de</strong><br />

CURRENT ENCYCLOPEDIA OF PSYCHIATRY (36).<br />

III. Javier Mariátegui en<br />

perspectiva.<br />

¿Cuál pue<strong>de</strong> ser la síntesis o su i<strong>de</strong>a común entre estos 5<br />

temas <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo recién propuestos? De nuevo el cuestionario<br />

sobre la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> la psiquiatría latinoamericana<br />

nos ayuda: se trata precisamente <strong>de</strong> tal i<strong>de</strong>ntidad,<br />

situación que en todo caso le parece más una aspiración<br />

que una realidad. Citemos algunas <strong>de</strong> sus frases <strong>de</strong> respuesta:<br />

“Hablar <strong>de</strong> una psiquiatría latinoamericana no sólo<br />

es posibilidad sino tarea prioritaria… supera el relativismo<br />

cultural y se inscribe en la búsqueda <strong>de</strong> lo latinoamericano<br />

esencial” (25, pp. 439-440). “Pienso que… el perfil (<strong>de</strong>l<br />

psiquiatra) latinoamericano se caracteriza por su vuelco a<br />

los social, y en ello radica su autenticidad, en lo que pu-<br />

190 - 199, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 197<br />

DR. JAVIER MARIÁTEGUI CHIAPPE (1928- 2008) PSIQUIATRA Y MAESTRO PERUANO E HISPANOAMERICANO<br />

diera llamarse una psiquiatría comprometida” (25, p. 441).<br />

Pero al mismo tiempo advierte lo poco institucionalizada<br />

que está esta perspectiva: “La psiquiatría académica fue<br />

eurocéntrica y ahora se <strong>de</strong>splaza gradualmente hacia el<br />

pragmatismo angloamericano… (25, p. 441) Había gente<br />

madura, gente que trabajaba <strong>de</strong> manera muy consistente<br />

por la forja <strong>de</strong> una psiquiatría latinoamericana… las<br />

generaciones <strong>de</strong> relevo… las que <strong>de</strong>bieron contribuir a<br />

este edificio… no lo han hecho… en los psiquiatras jóvenes<br />

ese interés es todavía mucho menos preciso, está<br />

mucho más diluido en otras urgencias… Por ejemplo, el<br />

fenómeno DSM-III es muy significativo… como si la gente<br />

encontrara <strong>de</strong> repente algo <strong>de</strong> qué cogerse, como un sistema,<br />

como un ‘libro <strong>de</strong> horas’… está muy bien que exista<br />

una clasificación tan interesante… pero está muy mal que<br />

ése sea un texto que se tome indiscriminadamente y que<br />

empobrezca la capacidad <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> nuestra gente<br />

joven…” (25, p. 449-450).<br />

Las expresiones anteriores correspon<strong>de</strong>n a un corte en su<br />

trayectoria correspondiente a 1990, el año <strong>de</strong> publicación<br />

<strong>de</strong> IDENTIDAD DE LA PSIQUIATRÍA LATINOAMERICANA<br />

(25). Pero la bibliografía consi<strong>de</strong>rada en este análisis <strong>de</strong> la<br />

obra <strong>de</strong> Mariátegui llega hasta 1997, es <strong>de</strong>cir, se extien<strong>de</strong><br />

hasta sus últimas publicaciones etnohistóricas, período<br />

que hemos observado se inicia en 1984. Complementando<br />

la reflexión anterior acerca <strong>de</strong> su búsqueda <strong>de</strong> la<br />

i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> la psiquiatría latinoamericana, que podríamos<br />

consi<strong>de</strong>rar una aproximación analítica sincrónica a<br />

su pensamiento, su inquietud por el hombre, el proceso<br />

salud-enfermedad-atención, el uso <strong>de</strong> alcohol y la materia<br />

médica <strong>de</strong>l Antiguo Perú nos lleva a otra apreciación<br />

diacrónica, a lo largo <strong>de</strong>l tiempo, <strong>de</strong> sus intereses intelectuales.<br />

No obstante que este aspecto quedó restringido<br />

a la zona andina, sus consi<strong>de</strong>raciones metodológicas<br />

<strong>de</strong> alguna manera invitan a la búsqueda <strong>de</strong> fuentes para<br />

la realización <strong>de</strong> este tipo <strong>de</strong> estudios en otras partes <strong>de</strong><br />

nuestra Región, por lo tanto también se relacionan con la<br />

búsqueda <strong>de</strong> tal i<strong>de</strong>ntidad.<br />

Es <strong>de</strong>l caso mencionar al final <strong>de</strong> este análisis <strong>de</strong> su obra,<br />

mi aporte personal <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> LA PSIQUIATRÍA EN AMÉ-<br />

RICA LATINA (37), materializado luego <strong>de</strong>l requerimiento<br />

inicial, por su constante y hasta severa correspon<strong>de</strong>ncia


durante un par <strong>de</strong> años previos a su edición. Este logro<br />

fue un punto <strong>de</strong> partida para mi propia comprensión <strong>de</strong><br />

la i<strong>de</strong>ntidad <strong>de</strong> la psiquiatría chilena e hispanoamericana.<br />

Por la influencia indirecta <strong>de</strong> su pensamiento, expresada<br />

Bibliografia<br />

1. http://www.javiermariategui.org/CV.html<br />

2. Jellinek EM “Informe <strong>de</strong>l Consultor Técnico <strong>de</strong> la OMS, Dr. E.M.<br />

Jellinek, sobre Alcoholismo en Chile” Boletín <strong>de</strong>l Servicio Nacional<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> Año (vol.) III, 5: 716-748, 1957.<br />

3. SNS - <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> Neurología, Psiquiatría y Neuro-<br />

Cirugía - <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> Salubridad Symposium sobre<br />

Alcoholismo y Problemas <strong>de</strong>l Alcohol Santiago <strong>de</strong> Chile,1957<br />

(72 pp, varios autores).<br />

4. Mardones J y Varela A, editores Simposio Internacional sobre<br />

Alcohol y Alcoholismo a la memoria <strong>de</strong>l Prof. E.M. Jellinek<br />

(Santiago <strong>de</strong> Chile, 15-20 <strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 1966). Archivos <strong>de</strong><br />

Biología y Medicina Experimentales, Suplemento Nº 3. Centro<br />

<strong>de</strong> Publicaciones Biológicas – Universidad <strong>de</strong> Chile, 1969 (339<br />

pp., varios autores).<br />

5. Saavedra A y Mariátegui J “Epi<strong>de</strong>miología <strong>de</strong>l alcoholismo<br />

en América Latina” En Mardones J y Varela A, editores (1969)<br />

Simposio Internacional sobre Alcohol y Alcoholismo a la<br />

memoria <strong>de</strong>l Prof. E.M. Jellinek (Op. Cit. 4): 265-276 (relato<br />

reproducido con mínimas variaciones en Revista <strong>de</strong> Neuropsiquiatría<br />

T. XXX, Nº 1: 3-23, marzo 1967. Lima, Perú).<br />

6. Mariátegui J “Alcoholismo y <strong>Sociedad</strong>. Sobre la investigación<br />

epi<strong>de</strong>miológica <strong>de</strong>l alcoholismo en América Latina” Acta psiquiát.<br />

psicol. Amér. lat., 13, 221-228, 1967.<br />

7. Horwitz J, Marconi J y Adis Castro G, editores Bases para una<br />

epi<strong>de</strong>miología <strong>de</strong>l alcoholismo en América Latina ACTA Fondo<br />

para la <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>. Buenos Aires, 1967.<br />

8. Mariátegui J “Ingestión <strong>de</strong> alcohol y factores socioculturales”<br />

En Horwitz J, Marconi J y Adis Castro G, editores (Op. Cit. Nº<br />

7) Bases para una epi<strong>de</strong>miología <strong>de</strong>l alcoholismo en América<br />

Latina: 24-31.<br />

9. Mariátegui J “Investigación epi<strong>de</strong>miológica <strong>de</strong>l alcoholismo<br />

en América Latina” Acta psiquiát. psicol. Amér. lat., 20, 86,<br />

1974.<br />

10. Mariátegui J “Alcohol y alcoholismo en el Perú. Una visión<br />

actualizada” Trabajo presentado al Primer Congreso Ibero-<br />

Americano <strong>de</strong> Problemas <strong>de</strong>l Alcohol. Córdoba, Argentina,<br />

mayo <strong>de</strong> 1979.<br />

11. Ugarte G y Medina E, editores II Congreso Iberoamericano <strong>de</strong><br />

Alcohol y Alcoholismo, 11-14 noviembre <strong>de</strong> 1981, 2 tomos.<br />

Santiago <strong>de</strong> Chile, 1981.<br />

12. Mariátegui J (1981) “Magnitud <strong>de</strong>l problema <strong>de</strong>l alcoholismo<br />

en América Latina. La situación en el Perú” En Ugarte G<br />

y Medina E, editores II Congreso Iberoamericano <strong>de</strong> Alcohol y<br />

Alcoholismo (Op. Cit. 11), tomo II: 77-82.<br />

en esta revisión <strong>de</strong> sus aportes, más su presencia personal<br />

directa y constante como amigo, en propiedad puedo<br />

expresar que el Dr. Javier Mariátegui fue para mí también<br />

un maestro.<br />

13. Mariátegui J HERMILIO VALDIZAN El Proyecto <strong>de</strong> una Psiquiatría<br />

Peruana Minerva, Lima, 1981.<br />

14. Vintimilla Moscoso F y Pacurucu Castillo S, editores III Congreso<br />

Iberoamericano sobre Alcohol y Alcoholismo, 18-22 junio<br />

<strong>de</strong> 1984. Cuenca, Ecuador.<br />

15. Mariátegui J “Consumo <strong>de</strong> alcohol y alcoholismo en el Antiguo<br />

Perú” En Vintimilla Moscoso F y Pacurucu Castillo S, editores<br />

III Congreso Iberoamericano sobre Alcohol y Alcoholismo<br />

(Op. Cit. 14): 305-316 (una 2ª versión ampliada <strong>de</strong> este relato<br />

fue publicada en Anales <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>. Ver referencia 29).<br />

16. Chiappe Costa M, Campos Fuentes J y Dragunsky L “Psiquiatría<br />

folklórica peruana: tratamiento <strong>de</strong>l alcoholismo” Acta<br />

psiquiát. psicol. Amér. lat., 18, 385-394, 1972.<br />

17. Mariátegui J “Humberto Rotondo y la psiquiatría peruana”<br />

Revista <strong>de</strong> Neuropsiquiatría 59: 265-271, diciembre 1996.<br />

Lima, Perú.<br />

18. Mariátegui J, Alva V y De León O EPIDEMIOLOGÍA PSIQUIÁTRI-<br />

CA DE UN DISTRITO URBANO DE LIMA Un estudio <strong>de</strong> prevalencia<br />

en Lince Ediciones <strong>de</strong> la Revista <strong>de</strong> Neuro-Psiquiatría,<br />

Lima – Perú, 1969.<br />

19. Mariátegui J y Adis Castro G, editores Estudios sobre epi<strong>de</strong>miología<br />

psiquiátrica en América Latina ACTA Fondo para la<br />

<strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>. Buenos Aires, 1970.<br />

20. Mariátegui J “Estudios <strong>de</strong> epi<strong>de</strong>miología psiquiátrica en el<br />

Perú” En Mariátegui J y Adis Castro G, editores Estudios sobre<br />

epi<strong>de</strong>miología psiquiátrica en América Latina (Op. Cit. Nº 19):<br />

140-160.<br />

21. Horwitz J y Muñoz LC “Investigaciones epi<strong>de</strong>miológicas acerca<br />

<strong>de</strong> morbilidad mental en Chile” Revista <strong>de</strong>l SNS, vol. III, Nº<br />

3-4: 277-309. Santiago <strong>de</strong> Chile, 1958.<br />

22. Horwitz J y Marconi J “Estudios epi<strong>de</strong>miológicos y sociológicos<br />

acerca <strong>de</strong> salud mental en Chile” Acta psiquiát. psicol.<br />

Amér. lat., 13 (1): 52-58, 1967.<br />

23. Caravedo B, Rotondo H y Mariátegui J, editores ESTUDIOS<br />

DE PSIQUIATRÍA SOCIAL EN EL PERÚ. Ediciones <strong>de</strong>l Sol, Lima,<br />

1963.<br />

24. Mariátegui J “HUMBERTO ROTONDO GRIMALDI Proyecto, trayectoria<br />

y <strong>de</strong>stino” Anales <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> 1: 251-269. Instituto<br />

Nacional <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> “Honorio Delgado – Hi<strong>de</strong>yo<br />

Noguchi”, Lima, 1985.<br />

25. Alarcón RD IDENTIDAD DE LA PSIQUIATRÍA LATINOAMERICA-<br />

NA Voces y exploraciones en torno a una ciencia solidaria Siglo<br />

XXI editores, México, 1990.<br />

198<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 190 - 199


26. Seguín CA y Mariátegui J “Perspectivas <strong>de</strong> la investigación<br />

psiquiátrica en América” Acta psiquiát. psicol. Amér. lat., 21,<br />

175, 1975.<br />

27. Aguirre Beltrán G EL PROCESO DE ACULTURACIÓN Universidad<br />

Nacional Autónoma <strong>de</strong> México, 1957.<br />

28. Lavenda RH “Fundamentos teóricos <strong>de</strong> la etnohistoria” Folklore<br />

Americano Nº 18: 191-201, México, 1974.<br />

29. Mariátegui J “Concepción <strong>de</strong>l hombre y alcoholismo en el<br />

Antiguo Perú” Anales <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> 1:33-49. Instituto Nacional<br />

<strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> “Honorio Delgado – Hi<strong>de</strong>yo Noguchi”,<br />

Lima, 1985.<br />

30. Mariátegui J “La concepción <strong>de</strong>l hombre y la enfermedad en el<br />

Antiguo Perú” Revista <strong>de</strong> Neuropsiquiatría Tomo LV, Nº 3:156-<br />

166, septiembre 1992. Lima, Perú.<br />

31. Mariátegui J “Materia médica y sustancias psicotrópicas en el<br />

Antiguo Perú” Revista <strong>de</strong> Neuropsiquiatría T. LX, Nº 1: 52-63,<br />

marzo 1997. Lima, Perú.<br />

190 - 199, Nº 3 - 4 , XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 199<br />

DR. JAVIER MARIÁTEGUI CHIAPPE (1928- 2008) PSIQUIATRA Y MAESTRO PERUANO E HISPANOAMERICANO<br />

32. Cabieses F “Las plantas mágicas <strong>de</strong>l Perú primigenio” Revista<br />

<strong>de</strong> Neuropsiquiatría 50 1: 24-35. Lima, Perú, 1987.<br />

33. Gutiérrez-Noriega C “Área <strong>de</strong> mescalinismo en el Perú” América<br />

Indígena 10: 215-220, México, 1950.<br />

34. Mariátegui J, editor LA PSIQUIATRÍA EN AMÉRICA LATINA Edit.<br />

Losada, Buenos Aires, 1989.<br />

35. Mariátegui J “LA PSIQUIATRÍA EN EL PERÚ” En Mariátegui J,<br />

editor LA PSIQUIATRÍA EN AMÉRICA LATINA: 163-182 (op. Cit.<br />

34).<br />

36. Mariátegui J “Estado actual <strong>de</strong> la psiquiatría latinoamericana”<br />

Versión en español <strong>de</strong>l texto publicado en japonés en el<br />

ANNUAL SUPLEMENT 1989 <strong>de</strong>l CURRENT ENCYCLOPEDIA OF<br />

PSYCHIATRY: 3-21. Nakayama-Shoten Co. Ltda., Tokio, JAPON.<br />

37. Medina, E “Apuntes para la historia <strong>de</strong> la psiquiatría chilena”<br />

En Mariátegui J, editor LA PSIQUIATRÍA EN AMÉRICA LATINA<br />

(op. Cit. 34): 103-127.<br />

Beneficios Socios<br />

<strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

Quienes cancelen sus cuotas <strong>de</strong>l año en forma anticipada, podrán optar sin costo alguno a:<br />

REVISTA<br />

• Un empaste <strong>de</strong> 4 revistas correspondientes al año que elijan.<br />

• Escoger 3 revistas <strong>de</strong> números anteriores y <strong>de</strong> cualquier año.<br />

• Entrega gratuita <strong>de</strong> la Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> (4 ediciones al año).<br />

• Valor rebajado para nuestros socios en Revistas <strong>de</strong> años anteriores.<br />

CURSOS DE PSIQUIATRÍA PARA LA ATENCIÓN PRIMARIA<br />

Los profesionales al día con sus cuotas tienen entrada liberada a los<br />

Cursos <strong>de</strong> Psiquiatría para la Atención Primaria que se llevan a cabo en regiones.<br />

LIBROS<br />

Valor preferencial en los libros editados por la <strong>Sociedad</strong>.<br />

“Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>”<br />

$25.000 (normal $30.000 pesos).<br />

“Trastornos <strong>de</strong> Personalidad"<br />

$20.000 (normal $25.000 pesos).<br />

"Avances en Psicoterapia y Cambio Psíquico”<br />

$10.000 (normal $15.000 pesos).


Análisis Existencial y Logoterapia:<br />

Bases Teóricas para la Práctica Clínica<br />

Resumen<br />

Se bosqueja teóricamente en qué consiste el Análisis Existencial<br />

y la Logoterapia, enfoque psicoterapéutico que en<br />

Chile se ha ido <strong>de</strong>sarrollando paulatinamente. La Logoterapia<br />

fue inicialmente propuesta por Viktor Frankl como<br />

un complemento para el Psicoanálisis; con el paso <strong>de</strong>l<br />

tiempo se constituyó como un enfoque in<strong>de</strong>pendiente.<br />

Este autor, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el Análisis Existencial, <strong>de</strong>sarrolla a partir<br />

<strong>de</strong> los Valores Personales, una Teoría <strong>de</strong>l Sentido Existencial,<br />

según la cual, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> éste último, el ser humano es capaz<br />

<strong>de</strong> alzarse por sobre su situación concreta. Längle amplía<br />

la base analítico – existencial <strong>de</strong> ésta aproximación,<br />

al elaborar fenomenológicamente una rigurosa sistematización,<br />

con arreglo a cuatro Motivaciones Fundamentales<br />

(MF) planteadas por él: 1MF: po<strong>de</strong>r existir; 2MF: gustar<br />

existir; 3MF: permitirse ser como uno esencialmente es;<br />

4MF: Sentido Existencial. Lo expuesto es consistente con<br />

los sistemas <strong>de</strong> diagnóstico y tratamiento psicoterapéutico<br />

actualmente empleados. La dimensión dialógica, en<br />

su ascepción más amplia, y la relación profundamente<br />

personal entre el paciente y su terapeuta, son la piedra<br />

angular, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la cual, el proceso se <strong>de</strong>spliega.<br />

Palabras Clave: análisis existencial; logoterapia; psicoterapia;<br />

sentido existencial; motivaciones fundamentales.<br />

José Gengler *<br />

Existential Analysis and<br />

Logotherapy: Theoretical<br />

Bases for Clinical Practice<br />

200<br />

Abstract:<br />

Existential Analysis and Logotherapy is gradually <strong>de</strong>veloping<br />

in Chile; consequently, a theoretical account is given.<br />

Logotherapy was initially proposed by Viktor Frankl<br />

as a complement for Psychoanalysis; as time passed, it<br />

set itself as an in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nt psychotherapeutic approach.<br />

Based on Existential Analysis, this author <strong>de</strong>veloped a<br />

Theory of Existential Meaning or Sense, which is rooted<br />

in Personal Values. According to him, the human being<br />

can rise up above his concrete situation, based upon his/<br />

her Existential Meaning or Sense. Längle expands the<br />

existential foundation of this approach, making as rigurous<br />

phenomenological systematization according to four<br />

Fundamental Motivations (FM) of Existence, suggested by<br />

him: 1FM: to be able to exist; 2FM: to like existence; 3FM:<br />

to let oneself exist as one essentially is; 4FM: Existential<br />

Meaning or Sense. This is consistent with the current<br />

diagnostic and psychotherapeutic treatments. Dialogue,<br />

in its most broad sense, and the profoundly personal relationship<br />

between the patient and his/her therapist, are<br />

the cornerstones from which all the process spreads out.<br />

Key Words: existential analysys; logotherapy; psychotherapy;<br />

existential meaning or sense; fundamental<br />

motivations.<br />

* Medico Psiquiatra. Terapeuta Gestaltico. Profesor <strong>de</strong> la Escuela <strong>de</strong> Psicoterapia Gestalt 'Anchimalen'. Formacion en Analisis Existencial y<br />

Logoterapia (egresado).<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 200 - 209


Introducción:<br />

Breve reseña histórica <strong>de</strong>l análisis<br />

existencial y logoterapia 1 : la logoterapia <strong>de</strong><br />

Viktor Frankl<br />

Viktor Frankl propuso inicialmente, una psicoterapia que<br />

no pretendía separarse <strong>de</strong>l Psicoanálisis como un enfoque<br />

distinto y autónomo. Muy por el contrario, <strong>de</strong>seaba constituirse<br />

como un complemento indispensable y humanizador<br />

<strong>de</strong> una concepción <strong>de</strong> ser humano que pretendía<br />

explicarse la realidad psíquica humana completa, casi exclusivamente<br />

mediante mecanismos psicodinámicos. Con<br />

el paso <strong>de</strong>l tiempo, sin embargo, la Logoterapia se constituyó<br />

como un enfoque psicoterapéutico in<strong>de</strong>pendiente.<br />

La proposición frankliana <strong>de</strong> consi<strong>de</strong>rar el Psicoanálisis<br />

Clásico como un reduccionismo psicodinámico, no es sólo<br />

una abstracción teórico - filosófica, sino también se basa<br />

en los sentimientos y experiencias personales <strong>de</strong> Frankl,<br />

tanto hacia el Psicoanálisis ortodoxo <strong>de</strong> su época, como<br />

hacia el adleriano.<br />

Una vivencia <strong>de</strong> vacío posterior a las sesiones con Fe<strong>de</strong>rn2 (psicoanalista discípulo <strong>de</strong> Freud), le volvió evi<strong>de</strong>nte que<br />

no todos los ámbitos fenomenológicamente obvios <strong>de</strong>l<br />

alma humana pue<strong>de</strong>n explicarse en función <strong>de</strong> una concepción<br />

mecanicista. Es así como en prácticamente toda<br />

su obra, Frankl consi<strong>de</strong>ra que el ser humano tiene principalmente<br />

tres dimensiones, a saber3 :<br />

a. Dimensión Somática: constituída por todo el ámbito<br />

biológico y corporal <strong>de</strong>l ser humano.<br />

b. Dimensión Psíquica: constituída por toda la realidad<br />

psicodinámica <strong>de</strong>l ser humano.<br />

c. Dimensión Noética: (<strong>de</strong>l griego Nous: significa "Espíritu"):<br />

se trata <strong>de</strong> ámbitos fenomenológicamente evi<strong>de</strong>ntes<br />

<strong>de</strong>l alma humana, que no pue<strong>de</strong>n ser sometidos<br />

ni a un reduccionismo biologicista, ni a un reduccionismo<br />

psíquico. Como su nombre lo indica, pue<strong>de</strong>n <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

un punto <strong>de</strong> vista filosófico, consi<strong>de</strong>rarse pertenecien-<br />

1. Längle, A. (Formación GLE: Libro 1)<br />

2. Längle, A. (2000): p. 53 – 54<br />

3. Längle, A. (2000), p. 211 – 214<br />

4. Längle, A. (2000), p. 203 – 210<br />

200 - 209, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 201<br />

ANÁLISIS EXISTENCIAL Y LOGOTERAPIA: BASES TEÓRICAS PARA LA PRÁCTICA CLÍNICA<br />

tes a una dimensión que trascien<strong>de</strong> las otras dos dimensiones<br />

y, que por tal razón pue<strong>de</strong> bien <strong>de</strong>nominarse<br />

una dimensión espiritual. Ejemplos <strong>de</strong> temas noéticos<br />

son la Libertad, la Responsabilidad y la Dignidad. En la<br />

raiz <strong>de</strong> estas esencias, existe una concepción filosófica<br />

y antropológica, la cual es una <strong>de</strong> las bases <strong>de</strong> este sistema<br />

psicoterapéutico. Es especialmente en la dimensión<br />

noética en don<strong>de</strong> Frankl sentía que había un vacío<br />

en la práctica psicoterapéutica, y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> don<strong>de</strong> pensaba<br />

predominantemente complementar al Psicoanálisis.<br />

Estas tres dimensiones constituyen una unidad inseparable.<br />

El planteamiento recién expuesto, surgía en Frankl<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> una raíz fenomenológica, antropológica, filosófica,<br />

religiosa, espiritual y existencial. En efecto, era prácticamente<br />

la primera vez que un enfoque psicoterapéutico se<br />

<strong>de</strong>jaba mol<strong>de</strong>ar tan explícita y profundamente por una<br />

concepción antropológica y filosófica. En los enfoques<br />

prece<strong>de</strong>ntes, en nombre <strong>de</strong> la rigurosidad científica, la dimensión<br />

noética carecía <strong>de</strong> un lugar y un espacio <strong>de</strong>finido<br />

<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un proceso psicoterapéutico. Pero sobre todo,<br />

luego <strong>de</strong> su extremadamente dolorosa experiencia en el<br />

Campo <strong>de</strong> Concentración <strong>de</strong> Auschwitz, para Frankl, la Dimensión<br />

Espiritual es la principal forma que tiene el ser<br />

humano <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r integrar las experiencias dañinas <strong>de</strong> la<br />

existencia, y <strong>de</strong>sarrollar una vida psicológicamente sana.<br />

Así, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una concepción que integra la Dimensión Noética<br />

al proceso picoterapéutico, el alta se produce cuando<br />

el paciente, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su ámbito espiritual, es capaz <strong>de</strong> alzarse<br />

por encima <strong>de</strong> su situación dañina concreta, y pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir<br />

plenamente (como dijo Frankl): "A PESAR DE TODO digo sí<br />

a la Vida" o más aún (como dice Längle): "CON TODO digo<br />

sí a la Vida". Es <strong>de</strong>s<strong>de</strong> este punto <strong>de</strong> vista, mientras Freud<br />

se refiere al Psicoanálisis como una "Psicología Profunda",<br />

Frankl <strong>de</strong>nomina a la Logoterapia como una "Psicología<br />

Elevada": el ser humano, al tener una esencia espiritual,<br />

en toda situación concreta, tendrá, en algún grado, la potencialidad<br />

<strong>de</strong> pararse sobre sus dos pies, y sobrevolar el<br />

mundo fáctico inevitable 4 .


Pero aún falta preguntarse qué es específicamente aquello<br />

espiritual que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un punto <strong>de</strong> vista clínico y práctico<br />

se traduce en una sanación psicológica concreta. Para<br />

Frankl, aquello concretamente terapéutico, en <strong>de</strong>finitiva,<br />

es encontrarle el Sentido a la Situación Concreta y a<br />

la Existencia. El Descubrimiento <strong>de</strong>l Sentido <strong>de</strong>bería ser,<br />

por excelencia, el foco más esencial <strong>de</strong> la psicoterapia.<br />

En la Dimensión Noética no pue<strong>de</strong> hablarse en rigor <strong>de</strong><br />

enfermeda<strong>de</strong>s psicológicas, sino más bien, Frankl habla<br />

genéricamente <strong>de</strong> una Pérdida <strong>de</strong>l Sentido. Esta Pérdida,<br />

con mucha frecuencia en nuestra época, se configura<br />

esencialmente como un Vacío Existencial. Si bien es cierto<br />

que en la Dimensión Noética no po<strong>de</strong>mos hablar <strong>de</strong><br />

enfermedad psicológica, no es menos cierto según Frankl<br />

que la Falta <strong>de</strong> Sentido, o lo que es lo mismo, el Vacío<br />

Existencial son la raíz más esencial <strong>de</strong> muchos trastornos<br />

mentales. Se trataría <strong>de</strong> una condición noética esencial,<br />

que encuentra su expresión en múltiples trastornos en la<br />

Dimensión Psicológica. Predominantemente, tanto la Falta<br />

<strong>de</strong> Sentido como el Vacío Existencial, se pue<strong>de</strong>n sospechar,<br />

<strong>de</strong> acuerdo a tres grupos <strong>de</strong> síntomas psincipales:<br />

a. Los síntomas <strong>de</strong>presivos.<br />

b. Los síntomas agresivos con o sin <strong>de</strong>scontrol <strong>de</strong> impulsos.<br />

c. Y, por último, las adicciones.<br />

Ahora surge la interrogante <strong>de</strong> cómo encaminar la Búsqueda<br />

<strong>de</strong> Sentido, en un paciente que siente que carece<br />

<strong>de</strong> él. En primer lugar, el tema <strong>de</strong>l Sentido, se arraiga para<br />

Frankl, en una concepción platónica <strong>de</strong> la realidad, y está<br />

fuertemente influenciada por la Teoría <strong>de</strong> los Valores <strong>de</strong><br />

Max Scheller. Según esta perspectiva, el Sentido <strong>de</strong> una<br />

Situación, o lo que es lo mismo, el Sentido Existencial,<br />

siempre están presentes y, se <strong>de</strong>velan al hombre<br />

sano, o bien, éste no los encuentra cuando está enfermo.<br />

Entonces, en la Antropología Frankliana se trata<br />

continuamente <strong>de</strong> la búsqueda y encuentro <strong>de</strong>l Sentido;<br />

cuando éste es inaparente, no se trata <strong>de</strong> que no exista,<br />

sino que tan sólo no hemos aun encontrado el modo <strong>de</strong><br />

quitar el velo para que se muestre. Frankl en este sentido,<br />

dice que el camino hacia el Sentido son los Valores, y que<br />

el órgano mediante el cual se conoce o <strong>de</strong>vela el Sentido<br />

es la Conciencia Moral.<br />

5. Längle, A. (2000), p. 206<br />

En alguna medida entonces, aquí se trata <strong>de</strong> unos valores<br />

que aún cuando surgen <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la intimidad profunda <strong>de</strong><br />

la persona, culminan luego en valores más o menos universales,<br />

y en <strong>de</strong>finitiva, coinci<strong>de</strong>n en gran parte con los<br />

sistemas culturales, filosóficos o religiosos que son externos<br />

a la persona. En la Teoría <strong>de</strong> Valores <strong>de</strong> Frankl, los<br />

valores provenientes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la tradición y la cultura son<br />

muy tomados en cuenta como punto <strong>de</strong> referencia. En<br />

todo caso, es <strong>de</strong> notar, que toda vez que se habla <strong>de</strong> valores<br />

existenciales, estos lo son plenamente, solo cuando se<br />

hacen verda<strong>de</strong>ramente propios.<br />

Des<strong>de</strong> aquí, ahora Frankl avanza aun más, distinguiendo<br />

cómo es concretamente aquel Sentido que en efecto se<br />

traduce en una mejoría clínica; y contenido <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la<br />

misma interrogante, está el tema <strong>de</strong> cuál categoría <strong>de</strong><br />

Sentido es relativamente inefectiva <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong><br />

vista clínico. Al respecto, se <strong>de</strong>stacan principalmente dos<br />

categorías <strong>de</strong> Sentido:<br />

202<br />

a. Sentido Ontológico: el Sentido Ontológico respon<strong>de</strong>,<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el contexto más amplio posible y, con la mayor<br />

profundidad que sea factible, a la interrogante <strong>de</strong> por<br />

qué algo existe. Esta pregunta sólo pue<strong>de</strong> en rigor ser<br />

respondida por el Creador <strong>de</strong> la cosa. Cuando el ser humano<br />

se pregunta por su propio Sentido Ontológico, las<br />

respuestas pue<strong>de</strong>n ser, por ejemplo, <strong>de</strong> or<strong>de</strong>n místico o<br />

religioso, contenidas metafóricamente en leyendas, mitos<br />

y relatos sagrados. En todo caso, el hombre también<br />

pue<strong>de</strong> quedarse perplejo y reconocer que en <strong>de</strong>finitiva,<br />

no está en su po<strong>de</strong>r conocer el Sentido Ontológico <strong>de</strong><br />

su propia existencia, pues tal facultad residiría en la entidad<br />

que lo creó, si tal entidad existe.<br />

b. Sentido Existencial 5 : por otro lado, el Sentido Existencial,<br />

es la mejor respuesta disponible, que un ser humano<br />

pue<strong>de</strong> dar a su situación concreta. Se trata <strong>de</strong> una<br />

respuesta que realiza plenamente el ser-en-el-mundo<br />

<strong>de</strong> la persona, y no <strong>de</strong> una mera reacción en el sentido<br />

conductual. Si en el Sentido Ontológico veíamos que<br />

este sobrepasa infinitamente el ámbito personal, en el<br />

Sentido Existiencial, en cambio, muy por el contrario,<br />

se trata <strong>de</strong> la realización personal concreta. El Sentido<br />

Existencial <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> totalmente <strong>de</strong> una relación dialógi-<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 200 - 209


ca entre la persona y su situación concreta. Y más aún,<br />

el Sentido Existencial, es la concretización <strong>de</strong> un valor.<br />

En clínica se observa que hay una relación entre el Sentido<br />

Existencial y el sentimiento <strong>de</strong> bienestar psicológico.<br />

En cambio, el Sentido Ontológico carece totalmente <strong>de</strong><br />

influencia sobre la vida psicológica <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista<br />

terapéutico. El Sentido Ontológico sólo inci<strong>de</strong> favorablemente<br />

en el ámbito psíquico, cuando se acompaña <strong>de</strong> un<br />

Sentido Existencial.<br />

Ahora Frankl se pregunta cómo pue<strong>de</strong> el Sentido Existencial<br />

ser abordado y <strong>de</strong>sarrollado psicoterapéuticamente.<br />

Siguiendo metafóricamente al Giro Copernicano, en el<br />

que el ser humano giró <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una Cosmovisión Geocéntrica<br />

a una Cosmovisión Heliocéntrica, Frankl expone <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

el punto <strong>de</strong> vista filosófico y psicológico el concepto<br />

<strong>de</strong> Giro Existencial 6 . Se trata <strong>de</strong> que en la mentalidad<br />

occi<strong>de</strong>ntal imperante, nosotros estamos profundamente<br />

acostumbrados a hacerle preguntas al Mundo, obligándolo<br />

a él nos responda. En cambio, en el Giro Existencial,<br />

el ser humano se abre a su situación concreta, y es ella la<br />

que continuamente lo interpela a él, para que sea él el que<br />

se anime a respon<strong>de</strong>r a ella. Existencialmente, la situación<br />

está en forma permanente preguntándole al ser humano,<br />

y en toda situación, este pue<strong>de</strong> pronunciarse <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

su esencia, y dar respuesta <strong>de</strong> la mejor manera posible. El<br />

Giro Existencial es la disposición personal necesaria para<br />

la realización plena <strong>de</strong>l Sentido Existencial, y esta realización<br />

sí <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> la persona y su relación dialógica.<br />

La reacción <strong>de</strong>l terapeuta ante la concepción personal <strong>de</strong>l<br />

paciente en cuanto al Sentido Ontológico es <strong>de</strong> respeto<br />

profundo hacia sus creencias, pero a continuación le dice<br />

que la respuesta a esa pregunta va más allá <strong>de</strong> lo que la<br />

psicología pue<strong>de</strong> abarcar. Tal manera <strong>de</strong> respon<strong>de</strong>r acerca<br />

el terapeuta al paciente y lo vuelve más humano (este<br />

acercamiento surge <strong>de</strong>l reconocimiento honesto por parte<br />

<strong>de</strong>l terapeuta, <strong>de</strong> que este, al compartir con el paciente<br />

la misma esencia humana, no pue<strong>de</strong> pronunciarse con<br />

certeza en lo que al Sentido Oncológico concierne). De<br />

ahí en a<strong>de</strong>lante se enfoca hacia la pregunta en torno al<br />

Sentido Existencial.<br />

6. Längle, A. (2000), p. 205 – 206<br />

7. Längle, A. (Formación GLE: Libros 1, 2, 3, 4 y 5)<br />

200 - 209, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 203<br />

ANÁLISIS EXISTENCIAL Y LOGOTERAPIA: BASES TEÓRICAS PARA LA PRÁCTICA CLÍNICA<br />

Correspon<strong>de</strong> ahora señalar la diferencia que existe entre<br />

Sentido y Éxito: mientras el éxito se orienta hacia, y<br />

<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>l logro <strong>de</strong> una meta, el Sentido, en cambio,<br />

se orienta hacia la plenitud existencial. El Sentido necesita<br />

que <strong>de</strong> vez en cuando se alcance el Éxito (y también<br />

es permanentemente necesario que el Éxito siempre se<br />

oriente hacia algo bueno), pero no <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> él. Lo esencial<br />

<strong>de</strong>l Sentido es que se mantiene en la realización <strong>de</strong><br />

algo valorado por la persona, in<strong>de</strong>pendientemente <strong>de</strong> si al<br />

final la meta es alcanzada o no. No se trata <strong>de</strong> una terapia<br />

exitista, sino <strong>de</strong> una terapia volcada hacia la Existencia.<br />

Cuando el paciente logra asir plenamente su propio<br />

Sentido Existencial, surgen en él preguntas tales como:<br />

"¿Para qué concretamente es bueno que yo exista?" o<br />

"¿Qué concretamente puedo hacer para que el mundo<br />

sea un poco mejor? ¿Algo que me involucre plenamente<br />

como persona?"<br />

La culminación <strong>de</strong> todo este proceso suce<strong>de</strong> cuando se<br />

llega <strong>de</strong> manera concreta a una Decisión y, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> esta, a<br />

una Acción. La Decisión no es reductible a mecanismos<br />

psíquicos ni biológicos. Más aún, constituye la integración<br />

plena <strong>de</strong> todos los aspectos <strong>de</strong>l ser humano, y expresa<br />

ámbitos espirituales tales como la Libertad, la Responsabilidad<br />

y la Dignidad. En efecto, la Decisión requiere que<br />

la persona tenga <strong>de</strong> hecho forjada una I<strong>de</strong>ntidad sólida.<br />

En las palabras <strong>de</strong> Frankl, "Nunca el yo es más yo, que<br />

cuando <strong>de</strong>ci<strong>de</strong>”.<br />

El análisis existencial <strong>de</strong> Alfried Längle 7 :<br />

Correspon<strong>de</strong> ahora preguntarse, más esencialmente, qué<br />

es aquello a través <strong>de</strong> lo cual el Sentido es terapéutico.<br />

Y se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir al respecto con propiedad, que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el<br />

momento en que existe un ser humano en una situación<br />

concreta y, entre ambos hay una relación dialógica, surge<br />

entonces en el ser humano una Fuerza Motivacional. Es<br />

<strong>de</strong>cir, en el ser humano, la Fuerza Pulsional no es la única<br />

fuerza que existe, sino a<strong>de</strong>más, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el ámbito libre<br />

(in<strong>de</strong>pendientemente <strong>de</strong> lo extenso o pequeño que este<br />

sea) inherente a todo ser humano y toda situación, surge<br />

una Motivación, que no es reductible a una concepción


exclusivamente pulsional. La Fuerza Pulsional pue<strong>de</strong> reconocerse<br />

porque <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ella, la persona se siente empujada<br />

hacia aquello que satisface su necesidad (y así, el movimiento<br />

pulsional no es un movimiento libre). En cambio,<br />

la Fuerza Motivacional es vivenciada por el ser humano<br />

como ser atraído por aquello en la situación, que él valora<br />

(y que al configurarse como una <strong>de</strong>cisión, se trata entonces<br />

<strong>de</strong> un movimiento que siempre es libre, al menos<br />

en algún grado). Se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>s<strong>de</strong> aquí fácilmente enten<strong>de</strong>r<br />

entonces, que la Fuerza Pulsional surge <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la Dimensión<br />

Somato - Psíquica, mientras que, la Fuerza Motivacional,<br />

<strong>de</strong> la manera existencial y logoterapéutica en que<br />

aquí se la concibe, no es totalmente reductible al ámbito<br />

Somato – Psíquico, sino muy por el contrario, necesita<br />

a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> la Dimensión Noética para po<strong>de</strong>r ser plenamente<br />

comprendida 8 . Por ejemplo, el acto sexual, evi<strong>de</strong>ntemente,<br />

tiene una Fuerza Pulsional a la base; sin embargo,<br />

con quién, cuándo, dón<strong>de</strong> y cómo la persona <strong>de</strong>ci<strong>de</strong><br />

tener relaciones sexuales, es un ámbito no totalmente explicable<br />

en términos pulsionales; más bien se trata <strong>de</strong> otra<br />

fuerza, la Motivacional y, <strong>de</strong> otra dimensión, la Noética,<br />

pues en una persona plena, se trata <strong>de</strong> una <strong>de</strong>cision libre<br />

y responsable. Längle <strong>de</strong>sarrolla una psicoterapia fenomenológica<br />

analítico - existencial, basada en una Teoría<br />

<strong>de</strong> la Motivación, que integra todas las dimensiones <strong>de</strong>l<br />

ser humano, y que así, incluye también su ser noético. Se<br />

trata <strong>de</strong> consi<strong>de</strong>rar lo Pulsional y, también, junto con ello,<br />

reconocer lo Motivacional. Ambas fuerzas existen en el ser<br />

humano, y abordar tan solo una <strong>de</strong> ellas parcializa y reduce<br />

su Unidad Fenomenológica. En las Cuatro Motivaciones<br />

Fundamentales que se <strong>de</strong>tallarán más a<strong>de</strong>lante, existe una<br />

integración completa <strong>de</strong> todas estas dimensiones.<br />

Las psicoterapias existenciales se reconocen por el paradigma<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el cual surgen, lo cual, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong><br />

vista práctico, significa que la puerta <strong>de</strong> entrada a la experiencia<br />

terapéutica es <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la vivencia 9 . Y se trata, simultáneamente,<br />

tanto <strong>de</strong> la vivencia <strong>de</strong>l paciente como<br />

<strong>de</strong>l terapeuta, por lo que la relación terapéutica se horizontaliza,<br />

sin per<strong>de</strong>r <strong>de</strong> vista, que el encuentro terapéutico,<br />

es un encuentro totalmente <strong>de</strong>dicado al paciente.<br />

8. Längle, A. (Formación GLE: Libro 1)<br />

9. Längle, A. (Formación GLE: Libro 1)<br />

10. Längle, A. (2004)<br />

Al tener aquí la vivencia personal mutua una importancia<br />

mucho más esencial, surgen principalmente dos muy<br />

importantes diferencias, entre la Logoterapia original <strong>de</strong><br />

Frankl y el Análisis Existencial <strong>de</strong> Längle: la primera, consiste<br />

en un cambio radical <strong>de</strong> la Teoría <strong>de</strong> Valores. Para<br />

Längle, los Valores surgen <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la Vivencia personal <strong>de</strong><br />

cada ser humano. La persona consi<strong>de</strong>ra que algo es valioso,<br />

porque siente la vivencia <strong>de</strong> afinidad con aquello.<br />

No se trata necesariamente <strong>de</strong> vivencias agradables. Por<br />

ejemplo, colocarse una inyección <strong>de</strong> penicilina en forma<br />

preventiva cuando se pa<strong>de</strong>ce una amigdalitis pultácea,<br />

ciertamente es una experiencia <strong>de</strong>sagradable. Pero en este<br />

caso, el valor vivenciado y esperado, es la experiencia <strong>de</strong><br />

una vida sana en el futuro. El origen vivencial <strong>de</strong> los valores<br />

es <strong>de</strong> una relevancia fundamental. Por ejemplo, Längle<br />

afirma que en la Depresión hay una pérdida <strong>de</strong> capacidad<br />

<strong>de</strong> percibir valores ; ahora bien, un lector cuya convicción<br />

es que los valores tienen un origen predominantemente<br />

social y cognitivo, podría erróneamente pensar que para<br />

Längle la Depresión es un trastorno que surge predominantemente<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> un compromiso <strong>de</strong> la cognición. Sin<br />

embargo, al quedar aclarado el origen afectivo <strong>de</strong> los<br />

valores <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista existencial, como aquí se<br />

ha expuesto, queda entonces claro, que en la Depresión,<br />

entonces, también se trata <strong>de</strong> un trastorno afectivo. Entonces,<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista sano, un valor es algo vivenciado<br />

personalmente como bueno.<br />

La otra diferencia con la Logoterapia frankliana, es que según<br />

el Análisis Existencial, la Falta <strong>de</strong> Sentido no es la única<br />

y más profunda condición <strong>de</strong> falta <strong>de</strong> plenitud humana<br />

(como lo postula la Logoterapia). Es <strong>de</strong>cir, según el Análisis<br />

Existencial, la raíz <strong>de</strong> las patologías <strong>de</strong> la mente no es<br />

única, sino que hay varias condiciones humanas esenciales<br />

diferentes que pue<strong>de</strong>n expresarse como enfermedad.<br />

Expuestos estos dos aspectos fundamentales <strong>de</strong> divergencia,<br />

es importante ahora esbozar más concretamente el<br />

aporte analítico–existencial al enfoque logoterapéutico<br />

original. Des<strong>de</strong> un punto <strong>de</strong> vista hei<strong>de</strong>ggeriano, el valor<br />

vivencial personal se expresa en el ser – en – el – mun-<br />

204<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 200 - 209


do, en una relación dialógica permanente e ineludible.<br />

Esta relación dialógica no es únicamente entre mi YO y el<br />

OTRO, sino que también contempla el diálogo entre mi YO<br />

y mi PERSONA PROFUNDA 11 . Es <strong>de</strong>cir, aquí se trata <strong>de</strong> una<br />

doble apertura, una hacia el mundo exterior, <strong>de</strong>jándose<br />

interpelar por la situación, y otra, hacia el mundo intrapsíquico.<br />

De esta manera, cuando se trata <strong>de</strong> la realización<br />

<strong>de</strong> un valor, el sentimiento <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el cual éste surge, no<br />

es el único ámbito que se encuentra en juego. Una vez<br />

puesto el valor en movimiento, este entra en la dimensión<br />

dialógica <strong>de</strong>l ser humano, tanto en relación con la otredad,<br />

como en relación con la profundidad personal. De<br />

esta manera, no se trata exclusivamente <strong>de</strong> consi<strong>de</strong>rar el<br />

sentimiento personal, sino igualmente importante es tener<br />

muy presente que el ser humano se encuentra en todo<br />

momento en una relación dialógica tanto con el mundo<br />

como consigo mismo. Centrarse exclusivamente en el<br />

sentimiento propio reduce la existencia dañinamente a<br />

una sobrevaloración narcisística. Y no es menos cierto que<br />

consi<strong>de</strong>rar exclusivamente al otro, ignora el sentimiento<br />

personal íntimo, con la consiguiente difusión i<strong>de</strong>ntitaria.<br />

De modo que en realidad, ambos aspectos integrados<br />

conforman una base sana para una existencia plena.<br />

Des<strong>de</strong> estas consi<strong>de</strong>raciones básicas preliminares Längle<br />

avanza hacia una sistematización más rigurosa y concordante<br />

<strong>de</strong>l enfoque, con las categorías nosológicas actuales.<br />

En tal sentido, <strong>de</strong>scribe Cuatro Motivaciones Existenciales<br />

Fundamentales (MF) <strong>de</strong>l ser humano, cada una<br />

<strong>de</strong> las cuales plantea un trabajo terapéutico profundo. El<br />

logro <strong>de</strong> la primera, en rasgos generales, es necesaria para<br />

entrar en la temática <strong>de</strong> la segunda; y <strong>de</strong> la misma manera,<br />

el abordaje <strong>de</strong> cada motivación es más fácil, si su motivación<br />

prece<strong>de</strong>nte ya está lograda 12 . Así es como surge la<br />

or<strong>de</strong>nación secuencial <strong>de</strong> estas cuatro motivaciones, que<br />

se expone a continuación, con el propósito <strong>de</strong> sugerir una<br />

posible sistematización <strong>de</strong>l proceso psicoterapéutico:<br />

200 - 209, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 205<br />

ANÁLISIS EXISTENCIAL Y LOGOTERAPIA: BASES TEÓRICAS PARA LA PRÁCTICA CLÍNICA<br />

1. Primera motivación fundamental13 :<br />

Su tema esencial se centra en el siguiente dilema existencial:<br />

"Yo soy pero, ¿Puedo ser?". Vemos que aquí se<br />

aborda lo concerniente al tema <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r, y a ser capaz<br />

<strong>de</strong> ocupar un espacio. Es una motivación principalmente<br />

relacionada con el mundo fáctico. Un ejemplo <strong>de</strong> enfoque<br />

psicoterapéutico fuertemente fáctico es el enfoque cognitivo<br />

conductual. La incapacidad <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r ser, entonces,<br />

se vivencia como angustia. La pregunta existencial profunda<br />

que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ella aflora (y que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego se trabaja<br />

en terapia), es: "Si todo aquello en que confío <strong>de</strong>saparece,<br />

entonces ¿Qué me sostiene?" Aparece <strong>de</strong>s<strong>de</strong> aquí una<br />

esencia trascen<strong>de</strong>ntal, a la cual llamamos el Fondo <strong>de</strong>l Ser.<br />

Un ejemplo nosológico predominantemente relacionado<br />

con la pérdida <strong>de</strong> relación con el Fondo <strong>de</strong>l Ser, está representado<br />

en los trastornos <strong>de</strong> angustia, <strong>de</strong> los cuales un<br />

ejemplo es la crisis <strong>de</strong> pánico. Biográficamente, la percepción<br />

y vivencia <strong>de</strong> tener espacio personal para po<strong>de</strong>r ser,<br />

sentirse sostenido y sentirse protegido, <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> mucho<br />

<strong>de</strong> una relación plena con el padre. Metafóricamente, po<strong>de</strong>mos<br />

representar la 1MF como un tazón <strong>de</strong> greda (ya<br />

que contiene y protege un espacio).<br />

2. Segunda Motivación Fundamental14 :<br />

Su tema esencial se centra en el siguiente dilema existencial:<br />

"Yo estoy vivo pero, ¿Me gusta vivir?". Vemos que<br />

aquí se aborda lo concerniente a la vida afectiva y a ser<br />

capaz <strong>de</strong> conmoverse. Un ejemplo <strong>de</strong> enfoque psicoterapéutico<br />

fuertemente <strong>de</strong>dicado a la dinámica <strong>de</strong> los afectos<br />

es el enfoque psicoanalítico. La incapacidad <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r<br />

gustar ser, entonces, pue<strong>de</strong> expresarse vivencialmente <strong>de</strong><br />

muy diversas maneras; entre estas posibles expresiones<br />

<strong>de</strong>stacan la pena, la rabia, la apatía y la <strong>de</strong>presión. La pregunta<br />

existencial profunda que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ella aflora (y que<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego se trabaja en terapia), es: "¿Cómo es para mí,<br />

muy personalmente, eso <strong>de</strong> estar vivo?" Aparece <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

aquí, en la concepción Analítico Existencial, una relación<br />

11. Längle, A. (2000): p. 203s.<br />

12. El Análisis Existencial suele insistir en el abordaje secuencial <strong>de</strong> las Cuatro Motivaciones Fundamentales. Sin embargo, es importante aclarar<br />

que no se trata en modo alguno <strong>de</strong> una prescripción rígida; muy por el contrario, la psicoterapia transcurre flexiblemente abordando cada<br />

Motivación <strong>de</strong> la mejor manera posible.<br />

13. Längle, A. (Formación GLE: Libro 2)<br />

14. Längle, A. (Formación GLE: Libro 3)


con la Vida, a la cual, llamamos la Relación Fundamental,<br />

y el valor <strong>de</strong> la Vida en sí, lo llamaremos entonces, el Valor<br />

Fundamental. Un ejemplo nosológico predominantemente<br />

relacionado con la pérdida <strong>de</strong> relación con la Vida, está<br />

representado en los trastornos afectivos, en especial, el<br />

Trastorno Depresivo. El extremo más grave <strong>de</strong> esta condición<br />

es el Delirio <strong>de</strong> Cottard, en don<strong>de</strong> el ser humano,<br />

se sale totalmente <strong>de</strong> los ritmos biológicos, hasta lo que<br />

ha sido <strong>de</strong>scrito por Otto Dörr como crematización 15 . Biográficamente,<br />

la consolidación <strong>de</strong>l Relación con la Vida,<br />

<strong>de</strong>pen<strong>de</strong> mucho <strong>de</strong> una relación plena con la madre. Metafóricamente,<br />

po<strong>de</strong>mos representar la 2MF como el agua<br />

<strong>de</strong>ntro tazón <strong>de</strong> greda (a la inmovilidad fría <strong>de</strong> la greda, se<br />

agrega ahora la cali<strong>de</strong>z <strong>de</strong>l movimiento vivencial).<br />

3. Tercera motivación fundamental16 :<br />

Su tema esencial se centra en el siguiente dilema existencial:<br />

"Yo existo pero, ¿Me permito ser plenamente como<br />

yo soy?" o bien, “¿Tengo permitido ser como yo soy?”. Vemos<br />

que aquí se aborda lo concerniente a la autenticidad,<br />

autoestima, libertad, responsabilidad y dignidad. Así,<br />

la persona es capaz <strong>de</strong> consolidar su toma <strong>de</strong> posición,<br />

en forma integrada y sincera. Es una motivación principalmente<br />

relacionada con la i<strong>de</strong>ntidad y el encuentro<br />

dialógico auténtico. Un ejemplo <strong>de</strong> un enfoque psicoterapéutico<br />

que acentúa fuertemente la autenticidad es el<br />

enfoque humanista rogeriano, o Enfoque Centrado en la<br />

Persona. La incapacidad <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r ser auténtico, entonces,<br />

se vivencia como difusión <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad. La pregunta existencial<br />

profunda que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ella aflora (y que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego<br />

se trabaja en terapia), es: "Si yo por un momento fuese<br />

totalmente libre, entonces, ¿Qué haría con mi libertad?".<br />

Y si tal libertad existiría, entonces “¿Cómo sería una tal libertad?”.<br />

Aparece <strong>de</strong>s<strong>de</strong> aquí el Setimiento <strong>de</strong> Autoestima,<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la experiencia <strong>de</strong> ser reconocido y valorado por los<br />

otros y, por sí mismo. Un ejemplo nosológico predominantemente<br />

relacionado con la pérdida <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad, está<br />

representado en los Trastornos Limítrofes <strong>de</strong> Personalidad.<br />

Des<strong>de</strong> un punto <strong>de</strong> vista relacional, la 3MF trascien<strong>de</strong> los<br />

meros límites <strong>de</strong> la individualidad y, en el encuentro, sur-<br />

15. Dörr, O. (1995), p. 231s.<br />

16. Längle, A. (Formación GLE: Libro 4)<br />

17. Längle, A. (Formación GLE: Libro 5)<br />

ge el NOSOTROS. Metafóricamente, po<strong>de</strong>mos representar<br />

la 3MF como una sopa <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un tazón <strong>de</strong> greda (el<br />

cocinero solo toma la receta como referencia, pero en <strong>de</strong>finitiva,<br />

cocina la sopa muy personal y auténticamente).<br />

4.Cuarta motivación fundamental17 :<br />

Su tema esencial se centra en el siguiente dilema existencial:<br />

"Yo existo pero, ¿Para qué es bueno que yo exista?".<br />

Vemos que aquí el tema no es reductible al ámbito individual<br />

y se vuelca hacia la trascen<strong>de</strong>ncia en el encuentro. Es<br />

una motivación principalmente relacionada con el sentido.<br />

Un ejemplo <strong>de</strong> enfoque psicoterapéutico fuertemente<br />

relacional e interaccional es el enfoque sistémico. La incapacidad<br />

<strong>de</strong> po<strong>de</strong>r encontrar el sentido existencial, entonces,<br />

se vivencia como vacío existencial. La pregunta existencial<br />

profunda que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ella aflora (y que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> luego<br />

se trabaja en terapia), es: "Durante las próximas semanas,<br />

¿Cuál es la pregunta más importante <strong>de</strong> mi vida?" Se trata<br />

aquí, esencialmente, <strong>de</strong>l Giro Existencial y <strong>de</strong> <strong>de</strong>jarse interpelar<br />

por la situación. Aparentemente, por su énfasis<br />

en la acción, podría confundirse el <strong>de</strong>senlace terapéutico<br />

que aquí se produce con una prescripción <strong>de</strong> tipo conductista;<br />

sin embargo, muy por el contrario, aquí se trata<br />

<strong>de</strong> una expresión que se sustenta en el sólido y profundo<br />

andamiaje <strong>de</strong> todas las Motivaciones Fundamentales. Un<br />

ejemplo nosológico predominantemente relacionado con<br />

la pérdida <strong>de</strong> sentido está representado en las adicciones.<br />

Relacionalmente, con el NOSOTROS plenamente consolidado<br />

en la 3MF, la 4MF pue<strong>de</strong> ser representada, sobre<br />

todo en su aspecto trascen<strong>de</strong>ntal y <strong>de</strong> Sentido, por los<br />

hijos. Metafóricamente, po<strong>de</strong>mos representar la 4MF mediante<br />

la cena preparada por el cocinero para una familia.<br />

206<br />

Discusión y Conclusiones:<br />

Por el énfasis <strong>de</strong> cumplimiento existencial en la acción<br />

y la concretización <strong>de</strong> la <strong>de</strong>cisión durante todo el proceso<br />

terapéutico, podría confundirse el AE y L con una<br />

forma elaborada <strong>de</strong> conductismo. Es fácil creer que probablemente<br />

el terapeuta aconseja al paciente durante la<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 200 - 209


sesión, eligiendo por él, fomentando <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia patológica<br />

o, induciéndolo artificial y solapadamente a expresar<br />

concretamente cosas que el paciente en realidad<br />

no quiere hacer. Si bien esa duda podría surgir <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una<br />

consi<strong>de</strong>ración hipotética <strong>de</strong>l cuerpo teórico, imaginando<br />

cómo podría ser una sesión como la que allí se <strong>de</strong>scribe,<br />

no es menos cierto que en la práctica, tal como se<br />

aprecia en el ejemplo dado mediante el caso clínico, se<br />

trata <strong>de</strong> una aproximación a la persona <strong>de</strong>l paciente, <strong>de</strong><br />

naturaleza muy distinta a la recién señalada. En particular,<br />

hay un fuerte énfasis en que el terapeuta intervenga<br />

principalmente mediante preguntas. Éstas, abren el campo<br />

dialógico tanto externo como interno, mientras que,<br />

las aseveraciones, en cambio, lo acotan 18 . Preguntando, el<br />

terapeuta se protege <strong>de</strong> aconsejar y la actividad procesual<br />

permanece permanentemente en manos <strong>de</strong>l paciente. No<br />

se trata pues, <strong>de</strong> <strong>de</strong>cisiones sugeridas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> afuera por<br />

un experto, sino muy por el contrario, <strong>de</strong> acciones consecuentes<br />

en la realidad, que surgen naturalmente como la<br />

consumación plena y <strong>de</strong>cantada <strong>de</strong> un proceso. Por otro<br />

lado, la acción <strong>de</strong>cidida <strong>de</strong>l paciente no se trata <strong>de</strong> una<br />

mera respuesta conductual explicable <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una perspectiva<br />

cognitiva o emocional, sino más bien, <strong>de</strong> una acción<br />

que involucra a la persona en la existencia. En vez <strong>de</strong> que<br />

la vida le pase por <strong>de</strong>lante, en la acción existencial se trata<br />

<strong>de</strong> vivir en la vida, con sentido, y cumplir plenamente <strong>de</strong><br />

esa manera, con la propia existencia. La primera conclusión<br />

entonces, es que es sumamente importante integrar<br />

mediante apertura dialógica en el proceso terapéutico, el<br />

logro concreto <strong>de</strong> la plenitud existencial 19 . De lo contrario,<br />

se corre el riesgo <strong>de</strong> diversos reduccionismos <strong>de</strong> la esencia<br />

humana y, también, el <strong>de</strong> confundir la incondicionalidad<br />

terapéutica con un consentimiento dañino a la posible<br />

pasividad vital <strong>de</strong>l paciente.<br />

En la misma línea, cabe preguntarse ¿Es posible proponer<br />

un tratamiento psicoterapéutico para condiciones psicológicas<br />

graves, tales como el trastorno limítrofe <strong>de</strong> personalidad<br />

o la esquizofrenia?<br />

18. Längle, A. (Formación GLE: Libro 1)<br />

19. Längle, A. (Formación GLE: Libro 4)<br />

20. Längle, A. (Formación GLE: Libro 2)<br />

21. Längle, A. (Formación GLE: Libro 1)<br />

200 - 209, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 207<br />

ANÁLISIS EXISTENCIAL Y LOGOTERAPIA: BASES TEÓRICAS PARA LA PRÁCTICA CLÍNICA<br />

Para comenzar a contestar esta pregunta, es necesario<br />

antes preguntarse ¿Cuáles son las expectativas realistas<br />

en el contexto <strong>de</strong>l tratamiento <strong>de</strong> pacientes tan graves?<br />

¿Es posible plantearse verda<strong>de</strong>ramente la expectativa <strong>de</strong><br />

darlos <strong>de</strong> alta alguna vez? Y si las expectativas <strong>de</strong> sanación<br />

<strong>de</strong> ellos son más bien escasas, ¿Es ético proponerles embarcarse<br />

en un tratamiento largo como el aquí propuesto<br />

o, correspon<strong>de</strong> ni si quiera realizar el intento y ofrecerles<br />

tan solo psicoterapia <strong>de</strong> apoyo? 20<br />

Evi<strong>de</strong>ntemente, si la expectativa <strong>de</strong>l terapeuta es la resolución<br />

ad integrum, la sola formulación <strong>de</strong> estas preguntas<br />

tiene un evi<strong>de</strong>nte carácter omnipotente y, las posibles<br />

respuestas <strong>de</strong>s<strong>de</strong> esa omnipotencia pue<strong>de</strong>n realmente<br />

ser muy daiñinas. Pero en cambio, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un enfoque que<br />

consi<strong>de</strong>ra la dimensión espiritual <strong>de</strong>l ser humano integralmente,<br />

es posible proponer la expectativa mucho más<br />

humil<strong>de</strong>, <strong>de</strong> que el paciente sea Persona en el sentido antropológico<br />

y filosófico 21 . Y en tal caso, se pue<strong>de</strong> concluir<br />

en este sentido, que si surge alguna expresión <strong>de</strong> Libertad,<br />

aunque por ejemplo en el caso <strong>de</strong> una esquizofrenia sea<br />

esta muy sutil y transitoria, entonces la terapia ya valió la<br />

pena <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista ético y humano, aunque no<br />

haya realmente un cambio estructural contun<strong>de</strong>nte.<br />

La misma conlusión, centrada esencialmente en la ampliación<br />

y consolidación <strong>de</strong>l ser Persona y secundariamente<br />

en el cambio estructural es plenamente aplicable a los<br />

pacientes limítrofes, consi<strong>de</strong>rando a<strong>de</strong>más, eso sí, que en<br />

ellos, tal como se observa en el caso terapéutico aquí expuesto,<br />

la estructura <strong>de</strong> personalidad que todavía tiene un<br />

núcleo sano, es mayor que en el caso <strong>de</strong> los esquizofrénicos<br />

y así, tanto las expectativas como los recursos terapéuticos<br />

pue<strong>de</strong>n ser más amplios. Como el daño estructural<br />

limítrofe está asociado frecuentemente a experiencias<br />

extremas <strong>de</strong> maltrato, tanto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el entorno <strong>de</strong>l paciente<br />

hacia él, como <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el paciente hacia el entorno o, <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

el paciente hacia sí mismo, es extremadamente necesario,<br />

que en el enfoque utilizado para el tratamiento exista una<br />

formulación y práctica explícita <strong>de</strong> la Conciencia Moral.


Es igualmente esencial la integridad personal <strong>de</strong>l terapeuta.<br />

Des<strong>de</strong> aquí, el <strong>de</strong>sarrollo terapéutico <strong>de</strong> la i<strong>de</strong>ntidad,<br />

se basa fuertemente en que el paciente adquiera la capacidad<br />

<strong>de</strong> arrepentirse <strong>de</strong> sus propios actos dañinos y,<br />

<strong>de</strong> que <strong>de</strong>cida en consecuencia salirse o <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>rse <strong>de</strong><br />

las situaciones <strong>de</strong> maltrato. Es fundamental aquí que el<br />

terapeuta tenga una toma <strong>de</strong> posición activamente ética,<br />

particularmente en lo que se refiere a la prevención,<br />

evitación y reparación <strong>de</strong> todo tipo <strong>de</strong> daños 22 . Si bien es<br />

cierto que siempre intentamos concretamente el diálogo<br />

hasta don<strong>de</strong> este sea posible, muchas veces el precio <strong>de</strong>l<br />

término <strong>de</strong>l maltrato es la ruptura familiar o el emprendimiento<br />

<strong>de</strong> las acciones legales pertinentes. Pero si tales<br />

exilios están al servicio <strong>de</strong> una diferenciación sana y una<br />

consolidación i<strong>de</strong>ntitaria, entonces bien valen la pena. En<br />

cambio, una actitud con escasa expresión concreta en la<br />

realidad, tanto <strong>de</strong>l paciente como <strong>de</strong>l terapeuta con respecto<br />

al maltrato en sus diversas formas, pue<strong>de</strong> dañar<br />

muy gravemente el pronóstico en estos casos. En conclusión,<br />

la relación dialógica concreta y activa, junto con<br />

la validación <strong>de</strong> la aprobación interna y la consecuente<br />

diferenciación con respecto al ven<strong>de</strong>rse o prestarse, son<br />

componentes existenciales indispensables <strong>de</strong>l proceso terapéutico<br />

en pacientes limítrofes.<br />

Por otra parte, cabe la inevitable interrogante, <strong>de</strong> que<br />

si hay tantos enfoques e intervenciones terapéuticas ya<br />

científicamente consolidadas, tanto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong><br />

vista teórico como <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista práactico, entonces,<br />

¿Para qué <strong>de</strong>sarrollar un nuevo enfoque?<br />

En primer lugar no se trata <strong>de</strong> un nuevo enfoque, pues<br />

tanto la Logoterapia como el Análisis Existencial tienen ya<br />

una larga tradición en el mundo. Sin embargo, es importante<br />

consi<strong>de</strong>rar, que tanto las Cuatro Motivaciones Fundamentales,<br />

como la sistematización <strong>de</strong>l AEP, junto con<br />

muchos otros aportes, han sido <strong>de</strong>sarrollados por Längle a<br />

lo largo <strong>de</strong> los últimos años, por lo que la pregunta recién<br />

expuesta, es en verdad atingente.<br />

Tal como se expuso en las Cuatro Motivaciones, el AE y<br />

LT es un enfoque autónomo, pero su paradigma abierto,<br />

al tener una naturaleza integradora, permite incorporar<br />

22. Längle, A. (Formación GLE: Libro 4)<br />

armónicamente comocimiento proveniente <strong>de</strong> otros enfoques.<br />

Por ejemplo, si se consi<strong>de</strong>ra el énfasis paradigmático<br />

que enfoque sistémico ejerce sobre la importancia<br />

<strong>de</strong> la interacción, muchas veces ocurre en la práctica que<br />

tal énfasis va en <strong>de</strong>smedro y pasa por alto el sí mismo<br />

<strong>de</strong> cada paciente que integra un <strong>de</strong>terminado sistema<br />

familiar. Tales parcialida<strong>de</strong>s, junto con otras <strong>de</strong> la misma<br />

especie, se resuelven <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una mirada antropológica y<br />

existencial como ésta y pue<strong>de</strong>n tener expresiones prácticas<br />

muy contun<strong>de</strong>ntes.<br />

Pero a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> estas consi<strong>de</strong>raciones generales, es importante<br />

poner en innegable relevancia el aporte antropológico<br />

existencial <strong>de</strong> integrar la dimensión espiritual<br />

<strong>de</strong>l ser humano a la psicoterapia. Por ejemplo, en el tratamiento<br />

<strong>de</strong>l sindrome <strong>de</strong> stress post traumático grave,<br />

se trata con frecuencia <strong>de</strong> experiencias traumáticas tan<br />

dañinas, que es prácticamente ineludible en algún momento<br />

<strong>de</strong>l tratamieto, integrar la realidad trascen<strong>de</strong>nte al<br />

proceso terapéutico, con todo lo que ésta personalmente<br />

requiera, para que éste resulte verda<strong>de</strong>ramente efectivo.<br />

Y en este sentido, el aporte <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la dimensión espiritual<br />

se pue<strong>de</strong> consi<strong>de</strong>rar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un contexto ético más amplio.<br />

Pue<strong>de</strong>n surgir preguntas tales como ¿Tiene sentido <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

un punto <strong>de</strong> vista analítico existencial centrar el objetivo<br />

terapéutico en la capacidad <strong>de</strong> adaptación?<br />

Sin duda, cuando entramos en contextos más amplios, la<br />

discusión <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> circunscribirse al ámbito técnico o procesual,<br />

para abocarse a otras preguntas más radicales. En<br />

lo concreto, en la actualidad nuestro quehacer terapéutico<br />

clínico, interactúa con una cultura predominantemente<br />

comerciante. Es necesaria una toma <strong>de</strong> posición concreta<br />

en lo que se refiere a las relaciones humanas tanto<br />

laborales como afectivas que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la ética centrada en la<br />

productividad se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>n. En esencia, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> un punto<br />

<strong>de</strong> vista existencial, los terapeutas tenemos una responsabilidad<br />

concreta, que consiste en no permitir que la<br />

cultura nos reduzca a nosotros y a nuestros pacientes a su<br />

valor <strong>de</strong> uso y, hacer todo lo posible por validar y rescatar<br />

el valor personal <strong>de</strong> cada uno.<br />

208<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 200 - 209


Bibliografia<br />

1. Dörr, O. (1995): “El síndrome <strong>de</strong>presivo nuclear visto <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una<br />

fenomenología <strong>de</strong> la corporalidad” en “Psiquiatría Antropológica<br />

(contribuciones a una Psiquiatría <strong>de</strong> orientación Fenomenológica<br />

– Antropológica)”, Editorial Universitaria, Santiago,<br />

Chile.<br />

2. Längle, A. (2000): “Víctor Frankl. Una Biografía”, Empresa Editorial<br />

Her<strong>de</strong>r, S. A., Barcelona<br />

3. Längle, A. (2004): en Revista <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> Neuro-Psiquiatría<br />

2004; 42(3): 195-206<br />

4. OTROS TEXTOS NO PUBLICADOS HASTA EL MOMENTO, A LOS<br />

QUE EL AUTOR TUVO ACCESO DURANTE LA FORMACIÓN EN<br />

ANÁLISIS EXISTENCIAL Y LOGOTERAPIA:<br />

a. Längle, A. (Formación GLE: Libro 1): "Análisis Existencial<br />

(Logoterapia): Fundamentos", por publicar: Cuatro Vientos<br />

Editorial, Santiago, Chile.<br />

200 - 209, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 209<br />

ANÁLISIS EXISTENCIAL Y LOGOTERAPIA: BASES TEÓRICAS PARA LA PRÁCTICA CLÍNICA<br />

b. Längle, A. (Formación GLE: Libro 2): "Análisis Existencial<br />

(Logoterapia): La 1ª Motivación Fundamental <strong>de</strong> la existencia:<br />

El requisito fundamental <strong>de</strong> la existencia: El po<strong>de</strong>rser<br />

en el mundo".<br />

c. Längle, A. (Formación GLE: Libro 3): "Análisis Existencial<br />

(Logoterapia): La 2ª Motivación Fundamental <strong>de</strong> la existencia:<br />

La Condición Fundamental <strong>de</strong> la Vida y la Relación<br />

al Valor <strong>de</strong> la Vida".<br />

d. Längle, A. (Formación GLE: Libro 4): “Tercera Motivación<br />

Fundamental: Permitirse Ser”.<br />

e. Längle, A. (Formación GLE: Libro 5): “Cuarta Motivación<br />

Fundamental: El Sentido”.<br />

“AVANCES EN PSICOTERAPIA Y CAMBIO PSÍQUICO"<br />

Este libro reúne a <strong>de</strong>stacados especialistas chilenos y extranjeros en el intento <strong>de</strong><br />

dilucidar los mecanismos y factores que promueven el cambio en las personas.<br />

Los Editores son psiquiatras, iniciaron juntos sus estudios <strong>de</strong> Medicina en la Universidad<br />

<strong>de</strong> Chile, en 1969. Se han interesado especialmente en el trabajo en <strong>Salud</strong><br />

<strong>Mental</strong>. El Dr. Riquelme primero como director <strong>de</strong>l Hospital Psiquiátrico <strong>de</strong> Putaendo<br />

y posteriormente como Director <strong>de</strong>l Instituto Psiquiátrico "Dr. José Horwitz Barak",<br />

mientras el Dr. Thumala formó y coordinó los tres primeros centros <strong>de</strong> salud mental<br />

comunitarios intersectoriales en el SSMO en la década <strong>de</strong> los 80. Paralelamente,<br />

ambos han ejercido como psicoterapeutas. El Dr. Riquelme formándose como psicoanalista<br />

y el Dr. Thumala como terapeuta familiar y luego como terapeuta grupal<br />

psicoanalítico.<br />

Número <strong>de</strong> páginas: 464


Cambio Terapéutico con Psicofármacos<br />

Solos Versus Adición <strong>de</strong> Psicoterapia en<br />

Pacientes Depresivos Hospitalizados<br />

Resumen<br />

Objetivo:<br />

Describir y comparar el grado <strong>de</strong> Cambio Terapéutico en<br />

2 grupos <strong>de</strong> pacientes, con <strong>de</strong>presión <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>rada a severa,<br />

con intento y/o i<strong>de</strong>ación suicida, bajo internación<br />

psiquiátrica; según el tipo <strong>de</strong> intervención que reciben.<br />

Metodología:<br />

Se seleccionaron 43 pacientes, don<strong>de</strong> un grupo <strong>de</strong> 21 sujetos<br />

recibió atención psiquiátrica y psicológica durante la<br />

internación y posteriormente tuvieron 8 sesiones <strong>de</strong> psicoterapia.<br />

El segundo grupo se compuso <strong>de</strong> 22 pacientes,<br />

quienes sólo recibieron atención psiquiátrica durante la<br />

hospitalización. Ambos grupos fueron evaluados con el<br />

instrumento Outcome Questionnaire (OQ-45.2) al momento<br />

<strong>de</strong>l alta y en una segunda aplicación posterior a 8<br />

semanas <strong>de</strong>l alta.<br />

Resultados:<br />

El grupo con psicoterapia tuvo 1 sujeto sin cambio confiable<br />

y 20 pacientes con cambio confiable, representando<br />

el 4,8% y 95,2 % respectivamente. Por otra parte, el grupo<br />

sin psicoterapia presenta 21 pacientes sin cambio confiable<br />

(95,5%) y 1 sujeto con éste, que sólo representa un 4,5%.<br />

Conclusión:<br />

El nivel <strong>de</strong> cambio terapéutico alcanzado por el grupo 1<br />

(con psicoterapia) respecto <strong>de</strong>l grupo 2 (sin psicoterapia),<br />

es estadísticamente significativo (p


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

and 95.2% respectively. The second group has 21 patients<br />

without reliable change (95.5%) and 1 subject with it,<br />

which constitutes only 4.5%.<br />

Conclusion:<br />

The level of therapeutic change achieved by the group 1<br />

compared to group 2, is statistically significant (p


entre actos suicidas no mortales (i<strong>de</strong>ación e intento suicida)<br />

y mortales pue<strong>de</strong> llegar a ser <strong>de</strong> 100-200:1. (3).<br />

Tanto en el ámbito público como privado se encuentran<br />

opciones <strong>de</strong> internación e intervención para estos cuadros<br />

psiquiátricos. Como las modalida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> atención son<br />

diversas y heterogéneas, más la complejidad y particularidad<br />

<strong>de</strong> cada caso, es clave <strong>de</strong>terminar la eficacia y éxito<br />

<strong>de</strong> los tratamientos. Siendo no menor el consi<strong>de</strong>rar que<br />

normalmente las orientaciones técnicas y cantidad <strong>de</strong> recursos<br />

humanos para realizar el seguimiento post intervención<br />

<strong>de</strong> un caso son reducidas.<br />

En el caso <strong>de</strong> la psicología clínica y sus dispositivos <strong>de</strong><br />

intervención, en un contexto psiquiátrico <strong>de</strong> internación,<br />

para pacientes que presenten i<strong>de</strong>ación y/o intento suicida,<br />

se hace primordial tener la posibilidad <strong>de</strong> evaluar los<br />

resultados <strong>de</strong> estas intervenciones a través <strong>de</strong> medir el<br />

grado <strong>de</strong> cambio terapéutico que pue<strong>de</strong>n generar éstos.<br />

En base a lo anterior, el problema <strong>de</strong> investigación se basa<br />

en aplicar una intervención psicológica breve, como una<br />

forma más eficiente <strong>de</strong> tratamiento y una herramienta<br />

efectiva para un cambio terapéutico mayor, en pacientes<br />

en crisis con <strong>de</strong>presión, intento y/o i<strong>de</strong>ación suicida, en<br />

conjunto con la atención psiquiátrica.<br />

Es importante entonces, evaluar si un proceso <strong>de</strong> terapia<br />

psicológica breve más tratamiento psiquiátrico, influyen directamente<br />

en un nivel mayor <strong>de</strong> cambio terapéutico positivo,<br />

que sólo una intervención psiquiátrica farmacológica.<br />

Por lo que el objetivo general <strong>de</strong> esta investigación es medir<br />

y comparar el grado <strong>de</strong> cambio terapéutico en 2 grupos <strong>de</strong><br />

pacientes, con <strong>de</strong>presión <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>rada a severa, con intento<br />

y/o i<strong>de</strong>ación suicida, bajo el régimen <strong>de</strong> internación psiquiátrica;<br />

según el tipo <strong>de</strong> intervención que reciben.<br />

Para este estudio, se enten<strong>de</strong>rá la noción <strong>de</strong> cambio terapéutico<br />

por medio <strong>de</strong> una visión integral <strong>de</strong>l estado <strong>de</strong> un<br />

sujeto en un momento <strong>de</strong>terminado, el cual se expresa a<br />

través <strong>de</strong> 3 áreas: la sintomatología, las relaciones interpersonales<br />

y el rol social.<br />

Materiales y Método<br />

Esta investigación es <strong>de</strong> carácter <strong>de</strong>scriptivo y correlacional;<br />

el enfoque es cuantitativo y el diseño <strong>de</strong> investigación<br />

cuasi experimental <strong>de</strong> corte transeccional o transversal<br />

(7).<br />

La población o universo <strong>de</strong>l estudio lo constituyen sujetos<br />

<strong>de</strong> ambos sexos, entre 14 y 65 años <strong>de</strong> edad, que hayan<br />

tenido internación psiquiátrica y que presentan <strong>de</strong>presión<br />

<strong>de</strong> mo<strong>de</strong>rada a severa e i<strong>de</strong>ación y/o intento suicida.<br />

La unidad <strong>de</strong> estudio para esta investigación son sujetos<br />

internados durante el año <strong>2009</strong> en la Clínica Psiquiátrica<br />

Pedro Montt 2 .<br />

La estrategia <strong>de</strong> muestreo fue no probabilística e intencionada,<br />

extrayéndose la muestra <strong>de</strong> un grupo <strong>de</strong> pacientes<br />

que se encuentran en modalidad resi<strong>de</strong>ncial en la clínica<br />

anteriormente señalada. Siendo los médicos psiquiatras<br />

quienes <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l período <strong>de</strong> marzo a diciembre <strong>de</strong>l<br />

<strong>2009</strong>; realizaron los diagnósticos <strong>de</strong> trastorno <strong>de</strong>l estado<br />

<strong>de</strong> ánimo y <strong>de</strong>rivaciones <strong>de</strong> los pacientes, tanto a psicoterapia,<br />

como a las evaluaciones <strong>de</strong>l Outcome Questionnaire<br />

(OQ-45.2) para la presente investigación.<br />

Es así como el tamaño muestral obtenido en esta investigación<br />

se conformó por los siguientes grupos:<br />

• Grupo 1: 21 pacientes que presentaron al ingreso un<br />

diagnóstico psiquiátrico <strong>de</strong> <strong>de</strong>presión mo<strong>de</strong>rada a severa,<br />

intento y/o i<strong>de</strong>ación suicida, internados en la clínica<br />

psiquiátrica, que recibieron atención psicológica<br />

durante el tiempo que duró su estadía, pero que a<strong>de</strong>más<br />

fueron parte <strong>de</strong> un proceso psicoterapéutico que<br />

constó <strong>de</strong> 8 sesiones, extendiéndose la intervención<br />

psicológica post alta.<br />

212<br />

• Grupo 2: 22 pacientes que presentaron al ingreso un<br />

diagnóstico psiquiátrico <strong>de</strong> <strong>de</strong>presión mo<strong>de</strong>rada a<br />

severa, intento y/o i<strong>de</strong>ación suicida, internados en la<br />

clínica psiquiátrica, que no recibieron atención psico-<br />

2. Clínica Pedro Montt Ltda., constituida el 13 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1982. Atien<strong>de</strong> adultos y adolescentes <strong>de</strong> ambos sexos. Especializada en tratamientos<br />

<strong>de</strong> patologías agudas y crónicas recidivantes o resistentes. A<strong>de</strong>más, centro <strong>de</strong> diagnóstico y <strong>de</strong>sintoxicación <strong>de</strong> alcoholismo y drogadicción,<br />

<strong>de</strong> orientación médica y psicológica.<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

lógica, sino sólo psiquiátrica con la prescripción <strong>de</strong> un<br />

tratamiento farmacológico.<br />

De los 43 pacientes evaluados, 10 pacientes <strong>de</strong>l grupo 1 se<br />

presentaron con intento <strong>de</strong> suicidio y 11 sujetos con i<strong>de</strong>ación,<br />

lo que representa un 48% y 52% respectivamente.<br />

Asimismo el grupo 2, hubieron 7 personas (32%) con intento<br />

<strong>de</strong> suicidio y 15 pacientes (68%) con i<strong>de</strong>ación.<br />

Del total <strong>de</strong> la muestra, el 48,8% correspondía al sexo<br />

masculino y el 51,2% al sexo femenino. El promedio <strong>de</strong><br />

edad fue <strong>de</strong> 39 años, con un rango entre 16 y 71 años.<br />

Ambos grupos in<strong>de</strong>pendientes son comparables en sus<br />

características socio<strong>de</strong>mográficas.<br />

Cabe señalar que todos los sujetos cumplieron con los<br />

criterios <strong>de</strong> caracterización <strong>de</strong> la muestra y aceptaron<br />

someterse a la evaluación en forma voluntaria.<br />

El instrumento utilizado para lograr los objetivos <strong>de</strong> esta<br />

investigación; es el Outcome Questionnaire (OQ-45.2). La<br />

aplicación <strong>de</strong> esta prueba, fue clave para la <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong><br />

los resultados obtenidos <strong>de</strong> cada grupo para medir cambio<br />

terapéutico.<br />

Tabla Nº1<br />

Puntajes <strong>de</strong> corte (PC) para Chile (4).<br />

OQ Total 73<br />

Área <strong>de</strong> sintomatología 43<br />

Área <strong>de</strong> relaciones interpersonales 16<br />

Área <strong>de</strong> Rol Social 14<br />

210 - 226, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 213<br />

Este instrumento es un cuestionario <strong>de</strong> auto-evaluación<br />

creado por Lambert en 1996, para medir progresos en<br />

psicoterapia a través <strong>de</strong> mediciones sucesivas. La evaluación<br />

se realiza en tres áreas: sintomatología, relaciones<br />

interpersonales y rol social. Ha <strong>de</strong>mostrado ser confiable<br />

y válido en su sensibilidad a la psicopatología y al cambio<br />

(1). El OQ-45.2 fue validado en Chile en el año 2000 por<br />

Von Bergen y De la Parra. Fue diseñado para ser práctico<br />

(<strong>de</strong> tiempo breve y bajo costo), pero también psicométricamente<br />

riguroso (5).<br />

El OQ-45.2 es una herramienta para evaluar en forma<br />

externa el curso <strong>de</strong> un proceso terapéutico. Permite medir<br />

tanto el nivel <strong>de</strong> funcionamiento en un cierto momento<br />

como <strong>de</strong>tectar la variación en el tiempo. El Instrumento<br />

evalúa en 45 ítems tres dominios <strong>de</strong> las personas que buscan<br />

ayuda terapéutica (5).<br />

Los Puntajes <strong>de</strong> Corte (PC) establecidos para la población<br />

chilena, es <strong>de</strong>cir, aquellos que diferencian una población<br />

funcional <strong>de</strong> una disfuncional son los siguientes, tanto<br />

para la escala total, como para cada una <strong>de</strong> sus subescalas<br />

(Ver Tabla Nº 1):


El Cambio Terapéutico se <strong>de</strong>fine operacionalmente como<br />

una variable a ser medida a partir <strong>de</strong> la aplicación <strong>de</strong>l<br />

OQ-45.2. En base al Índice <strong>de</strong> Cambio Confiable (ICC),<br />

que se refiere a la diferencia entre el puntaje inicial y fi-<br />

Tabla Nº2<br />

Valores respecto <strong>de</strong>l Índice <strong>de</strong> Cambio Confiable (ICC)<br />

Para que el cambio ocurrido durante el curso <strong>de</strong> la psicoterapia<br />

sea estadísticamente significativo, la diferencia<br />

entre el pre y post tratamiento <strong>de</strong>be exce<strong>de</strong>r el Índice <strong>de</strong><br />

Cambio Confiable y estar por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong>l Puntaje<br />

<strong>de</strong> Corte. La consistencia interna <strong>de</strong>l OQ-45.2 en múltiples<br />

estudios es alta ( =93) y la confiabilidad test-retest es <strong>de</strong><br />

0.84 (4).<br />

Procedimiento<br />

OQ Total 17<br />

Área <strong>de</strong> sintomatología 12<br />

Área <strong>de</strong> relaciones interpersonales 9<br />

Área <strong>de</strong> Rol Social 8<br />

• Una vez explicados verbalmente los objetivos y procedimientos<br />

a cada uno <strong>de</strong> los integrantes <strong>de</strong> la investigación,<br />

se les solicitó firmar una carta <strong>de</strong> consentimiento<br />

informado.<br />

• Se realizaron 2 sesiones <strong>de</strong> intervención psicoterapéutica<br />

al grupo 1 durante la internación. Cabe consi<strong>de</strong>rar<br />

que cada sesión <strong>de</strong> psicoterapia tuvo una duración <strong>de</strong><br />

60 minutos aprox.<br />

• Posteriormente, se aplicó una primera medición a través<br />

<strong>de</strong>l OQ-45.2 para los 2 grupos una vez dada el alta 3 .<br />

nal que indica que el cambio terapéutico es significativo<br />

(al exce<strong>de</strong>r el error muestral <strong>de</strong> medición), tanto para el<br />

Cuestionario Global como para cada una <strong>de</strong> sus áreas<br />

(Ver Tabla Nº 2).<br />

214<br />

• Junto a lo anterior, se realizaron 8 sesiones <strong>de</strong> psicoterapia<br />

post alta al grupo 1, con una duración aproximada<br />

<strong>de</strong> 2 meses.<br />

• Finalmente, se aplicó una segunda medición a los dos grupos,<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> dos meses <strong>de</strong>l alta, a través <strong>de</strong>l OQ-45.2.<br />

• El plan <strong>de</strong> análisis es <strong>de</strong>scriptivo y comparativo <strong>de</strong> los datos<br />

obtenidos. El procesamiento <strong>de</strong> la información se llevó<br />

a cabo por medio <strong>de</strong>l software computacional Statistical<br />

Package for Social Science (SPSS v 15 for Windows).<br />

Resultados<br />

• La adherencia al tratamiento <strong>de</strong>l grupo 1 fue <strong>de</strong>l 100%,<br />

ya que ningún paciente abandonó el tratamiento.<br />

• Respecto <strong>de</strong> los resultados <strong>de</strong> la primera evaluación con<br />

el OQ-45.2, se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong> que:<br />

• Del grupo 1 (n = 21) 19 pacientes califican como disfuncionales,<br />

correspondientes al 90,5% y sólo 2 (9.5%)<br />

como funcionales.<br />

3. No se aplicó el instrumento <strong>de</strong> medición al ingreso, <strong>de</strong>bido al estado <strong>de</strong> <strong>de</strong>scompensación <strong>de</strong> los pacientes, imposibilitándose por tanto, la<br />

autoevaluación a través <strong>de</strong>l OQ-45.2.<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

• Del grupo 2 (n = 22) 7 pacientes califican como disfuncionales,<br />

correspondiendo al 31,8%, en tanto 15<br />

pacientes califican como funcionales representando al<br />

68,2%.<br />

• Posteriormente, al realizar el análisis <strong>de</strong> los puntajes<br />

<strong>de</strong> la segunda aplicación <strong>de</strong>l OQ-45.2, se observa lo<br />

siguiente:<br />

Tabla Nº3<br />

Comparación <strong>de</strong> OQ-45.2<br />

pre y post tratamiento en dos grupos <strong>de</strong> paciente internados<br />

Nº <strong>de</strong> Pacientes<br />

25<br />

20<br />

15<br />

10<br />

5<br />

0<br />

2<br />

1º OQ-45.2<br />

Grupo 1<br />

Pre - tratamiento Post - tratamiento<br />

19<br />

1º OQ-45.2<br />

Grupo 2<br />

Así mismo, en el análisis por área <strong>de</strong>l grupo 1 (1er. OQ), se<br />

observa lo siguiente (Ver Tabla Nº 4):<br />

• En el área <strong>de</strong> síntomas, 19 pacientes son disfuncionales,<br />

lo que correspon<strong>de</strong> al 90,5% y 2 pacientes funcionales<br />

correspondientes al 9.5%.<br />

• En el área <strong>de</strong> relaciones interpersonales, 15 pacientes<br />

evi<strong>de</strong>nciaron ser disfuncionales, lo que correspon<strong>de</strong> al<br />

71,4% y 6 pacientes funcionales correspondientes al<br />

28,6%.<br />

• En el área <strong>de</strong> rol social 17 pacientes son disfuncionales,<br />

lo que correspon<strong>de</strong> al 81,0% y 4 pacientes funcionales<br />

correspondientes al 19,0%.<br />

210 - 226, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 215<br />

15<br />

7<br />

• Del grupo 1 (n = 21) las cifras se invierten, con 1 paciente<br />

calificando como disfuncional (4,8%) y 20 pacientes<br />

como funcionales, correspondiendo al 95,2%.<br />

• Del grupo 2 (n = 22) 13 pacientes califican como disfuncionales,<br />

correspondiendo al 59% y 9 pacientes<br />

(40,9%) como funcionales. Esto es posible visualizarlo<br />

en la Tabla N º3.<br />

20<br />

1<br />

1º OQ-45.2<br />

Grupo 1<br />

1º OQ-45.2<br />

Grupo 2<br />

Funcional<br />

Disfuncional<br />

De esta misma manera, en el análisis por área <strong>de</strong>l grupo 2<br />

(1er. OQ), se observa lo siguiente:<br />

• En el área <strong>de</strong> síntomas 7 pacientes son disfuncionales,<br />

lo que correspon<strong>de</strong> al 31,8% y 15 pacientes funcionales<br />

correspondientes al 68,2%.<br />

• En el área <strong>de</strong> relaciones interpersonales 6 pacientes son<br />

disfuncionales, lo que correspon<strong>de</strong> al 27,3% y 16 pacientes<br />

funcionales correspondientes al 72,7%.<br />

• En el área <strong>de</strong> rol social 3 pacientes son disfuncionales,<br />

lo que correspon<strong>de</strong> al 13,6% y 19 pacientes funcionales<br />

correspondientes al 86,4%.<br />

9<br />

13


Tabla Nº4<br />

Comparación <strong>de</strong> subescalas <strong>de</strong> OQ.45.2 previo al inicio <strong>de</strong> terapia<br />

Áreas: 1º OQ-45.2<br />

Nº <strong>de</strong> Pacientes<br />

20<br />

18<br />

16<br />

14<br />

12<br />

10<br />

8<br />

6<br />

4<br />

2<br />

0<br />

2<br />

19<br />

G1<br />

Síntomas<br />

G2<br />

Síntomas<br />

Así, en los resultados <strong>de</strong> la autoevaluación <strong>de</strong>l OQ-45.2<br />

pre y post tratamiento encontramos que:<br />

En el área <strong>de</strong> síntomas, por ejemplo, la mayoría <strong>de</strong> los pacientes,<br />

en el ítem 23: “Me siento sin esperanza en el futuro”,<br />

en la primera evaluación el grupo 1 respon<strong>de</strong> “Con<br />

frecuencia” y el grupo 2 “Nunca”. En la segunda medición<br />

el grupo 1 refiere “Nunca” y el grupo 2 “Casi siempre”.<br />

En el área <strong>de</strong> relaciones interpersonales, en el ítem 30:<br />

“Tengo dificulta<strong>de</strong>s para llevarme bien con mis amigos y<br />

conocidos” en la primera evaluación el grupo 1 respon<strong>de</strong><br />

“Casi siempre” y el grupo 2 “Nunca”. En la segunda medición<br />

el grupo 1 refiere “Nunca” y el grupo 2 “Casi siempre”.<br />

15<br />

7<br />

6<br />

15<br />

G1<br />

Relaciones<br />

Interpersonales<br />

Sumando otro ejemplo, en el área <strong>de</strong> rol social se observa<br />

en el ítem 4: “Me siento presionado (estresado) en el<br />

trabajo/escuela” en la primera evaluación el grupo 1 respon<strong>de</strong><br />

“A veces” y el grupo 2 “Casi nunca”. En la segunda<br />

medición el grupo 1 refiere “Nunca” y el grupo 2 “Con<br />

frecuencia”.<br />

Respecto <strong>de</strong> las medias <strong>de</strong> los grupos 1 y 2 en el 1er. OQ,<br />

se encuentra lo siguiente:<br />

• En los puntajes totales, el grupo 1 presenta una media<br />

<strong>de</strong> 105,2 lo que refleja mayor disfuncionalidad y el grupo<br />

2 tiene 56,8 lo que implica más funcionalidad, tal<br />

como lo refleja la Tabla Nº 5.<br />

216<br />

16<br />

6<br />

G2<br />

Relaciones<br />

Interpersonales<br />

4<br />

17<br />

G1<br />

Rol Social<br />

Funcional<br />

Disfuncional<br />

19<br />

G2<br />

Rol Social<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225<br />

3


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

Tabla Nº5<br />

Valores Medias Totales <strong>de</strong> OQ-45.2<br />

en el pre tratamiento <strong>de</strong> dos grupos <strong>de</strong> pacientes internados<br />

Valores Medias Totales<br />

Nº <strong>de</strong> Pacientes<br />

Tabla Nº6<br />

Valores Medias Totales <strong>de</strong> OQ-45.2<br />

en el post tratamiento <strong>de</strong> dos grupos <strong>de</strong> pacientes internados<br />

Valores Medias Totales<br />

Nº <strong>de</strong> Pacientes<br />

120<br />

100<br />

80<br />

60<br />

40<br />

20<br />

0<br />

90<br />

80<br />

70<br />

60<br />

50<br />

40<br />

30<br />

20<br />

10<br />

0<br />

56,8182<br />

35,2857<br />

210 - 226, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 217<br />

105,1905<br />

Grupo 2 Grupo1<br />

79,7273<br />

Grupo 2 Grupo1<br />

1º OQ-45.2<br />

1º OQ-45.2


Tabla Nº7<br />

Valores <strong>de</strong> Cambio Confiable Total según OQ-45.2 en dos grupos <strong>de</strong> pacientes internados<br />

Tabla <strong>de</strong> contingencia por Grupo: Categoría <strong>de</strong> cambio confiable Total<br />

Recuento<br />

Grupo<br />

OQ Total<br />

Referente a la ten<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>l efecto <strong>de</strong> la psicoterapia, en<br />

las medias <strong>de</strong> los grupos 1 y 2 se observó lo siguiente:<br />

• En los puntajes totales, el grupo 1 presenta una media<br />

<strong>de</strong> 35,3 lo que refleja funcionalidad y el grupo 2 tiene<br />

79,7 lo que implica disfuncionalidad (Ver Tabla Nº 6).<br />

En cuanto a las comparaciones por grupo respecto al Índice<br />

<strong>de</strong> Cambio Confiable (ICC), las tablas <strong>de</strong> contingencia<br />

por grupo presentan los siguientes resultados:<br />

• En relación a la categoría <strong>de</strong> cambio confiable total: el<br />

grupo con psicoterapia tiene 20 pacientes con cambio<br />

confiable y 1 sujeto sin cambio, representando el 95,2<br />

% y el 4,8% respectivamente. Por otra parte, el grupo<br />

sin psicoterapia presenta 21 pacientes sin cambio confiable,<br />

que son el 95,5% y 1 sujeto con cambio confiable,<br />

que solo representa un 4,5% (Ver Tabla Nº 7).<br />

• En cuanto al ICC por áreas <strong>de</strong> la escala: en síntomas se<br />

observa que el grupo con psicoterapia tiene 1 sujeto sin<br />

1<br />

2<br />

218<br />

Categoría <strong>de</strong> cambio confiable<br />

Total<br />

Sin cambio Con cambio Total<br />

1 20 21<br />

21 1 22<br />

Total 22 21 43<br />

cambio confiable y 20 pacientes con cambio confiable,<br />

representando el 4,8% y 95,2 % respectivamente. A<br />

su vez, el grupo sin psicoterapia presenta 21 pacientes<br />

sin cambio confiable, que son el 95,5% y 1 sujeto con<br />

cambio confiable, con solo un 4,5%.<br />

• El Índice <strong>de</strong> cambio confiable en el área <strong>de</strong> relaciones<br />

interpersonales <strong>de</strong>l grupo con psicoterapia arroja 2 sujetos<br />

sin cambio confiable (9,5%) y con cambio confiable<br />

se encuentran 19 pacientes, que correspon<strong>de</strong> al<br />

90,5%. Así mismo, el grupo sin psicoterapia presenta 20<br />

pacientes sin cambio confiable, con el 91% y 2 individuos<br />

con cambio confiable (9%).<br />

• Respecto al área <strong>de</strong> rol social; los resultados dicen que<br />

en el grupo con psicoterapia hay 4 personas sin cambio<br />

confiable, con el 19% y 17 pacientes presentan un índice<br />

<strong>de</strong> cambio confiable, correspondiente al 81%. Por otra<br />

parte, el grupo sin psicoterapia tiene 22 pacientes sin<br />

cambio confiable, lo que implica un 100% (Ver tabla Nº 8).<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

Tabla Nº8<br />

Valores <strong>de</strong> Cambio Confiable en subescalas <strong>de</strong>l OQ-45.2 en dos grupos <strong>de</strong> pacientes internados.<br />

Índice <strong>de</strong> cambio confiable<br />

Nº <strong>de</strong> Pacientes<br />

25<br />

20<br />

15<br />

10<br />

5<br />

0<br />

1<br />

G1<br />

Luego <strong>de</strong> realizadas las pruebas paramétricas para dos<br />

grupos in<strong>de</strong>pendientes, se han encontrado diferencias estadísticamente<br />

significativas en todas las mediciones, las<br />

cuales señalan que el grupo con psicoterapia <strong>de</strong>sarrolló<br />

una mejoría superior al grupo que sólo mantuvo tratamiento<br />

médico-psiquiátrico.<br />

Conclusiones<br />

20<br />

Síntomas<br />

Es <strong>de</strong> relevancia que el grupo con psicoterapia no solamente<br />

mejora, sino que el grupo sin psicoterapia empeora luego<br />

<strong>de</strong> 8 semanas una vez dada el alta, observándose una<br />

variación estadísticamente significativa <strong>de</strong> los puntajes.<br />

El empeoramiento <strong>de</strong>l estado <strong>de</strong> los pacientes <strong>de</strong>l grupo<br />

2 podría <strong>de</strong>berse a la no existencia <strong>de</strong> un proceso <strong>de</strong><br />

psicoterapia post alta y por lo tanto la carencia <strong>de</strong>l establecimiento<br />

<strong>de</strong> una alianza terapéutica. La importancia<br />

<strong>de</strong> la alianza terapéutica pone <strong>de</strong> manifiesto la relevancia<br />

210 - 226, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 219<br />

21<br />

G2<br />

1<br />

Síntomas<br />

2<br />

G1<br />

19<br />

Relaciones<br />

Interpersonales<br />

20<br />

G2<br />

2<br />

Relaciones<br />

Interpersonales<br />

Sin cambio<br />

Con cambio<br />

<strong>de</strong> la dimensión relacional entre terapeuta y paciente, lo<br />

que refleja el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong>l proceso <strong>de</strong> cambio durante la<br />

terapia.<br />

Por en<strong>de</strong>, los integrantes <strong>de</strong>l grupo 2 no tuvieron una<br />

figura que les haya otorgado orientación, contención<br />

emocional y apoyo psicológico durante este período, lo<br />

que sumado a la exigencia <strong>de</strong> presentar funcionalidad<br />

en su medio familiar, laboral y social; genera dificulta<strong>de</strong>s<br />

a nivel personal, en sus vivencias actuales producto <strong>de</strong><br />

conflictivas no tratadas ni resueltas, viéndose finalmente<br />

afectada su motivación al cambio.<br />

Así mismo, es importante tener en cuenta que en un comienzo,<br />

es <strong>de</strong>cir, durante la aplicación <strong>de</strong>l primer OQ-<br />

45.2 y <strong>de</strong> acuerdo a las condiciones <strong>de</strong> internación, los<br />

pacientes se encuentran evaluados, tratados farmacológicamente,<br />

contenidos emocionalmente, para muchos<br />

aparecen sus re<strong>de</strong>s <strong>de</strong> apoyo, reportando mayor eficacia<br />

4<br />

G1<br />

17<br />

Rol Social<br />

22<br />

G2<br />

0<br />

Rol Social


en el área social según los resultados <strong>de</strong>l instrumento,<br />

condiciones con las que posterior al egreso ya no cuentan.<br />

Sin embargo, en el caso <strong>de</strong>l único paciente que se<br />

mantiene en un nivel a<strong>de</strong>cuado <strong>de</strong> mejoría al momento<br />

<strong>de</strong> la aplicación <strong>de</strong>l segundo OQ-45.2, esto se explica<br />

mediante sus propios recursos y habilida<strong>de</strong>s personales,<br />

familiares y sociales, pese a que en el área <strong>de</strong> rol social no<br />

logra un índice <strong>de</strong> cambio confiable.<br />

Respecto <strong>de</strong> mi visión como terapeuta, los pacientes<br />

<strong>de</strong>l grupo 1 mejoraron <strong>de</strong>bido a una serie <strong>de</strong> factores,<br />

a saber:<br />

• Los propios <strong>de</strong>l proceso psicológico, como las técnicas<br />

empleadas y metodología <strong>de</strong>l trabajo terapéutico.<br />

• Los recursos, valoraciones y motivaciones personales<br />

<strong>de</strong>l paciente.<br />

• Las habilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l terapeuta, entre las que se cuenta<br />

principalmente la capacidad <strong>de</strong> vincularse, ya que<br />

el vínculo terapeuta-paciente es un factor clave a la<br />

hora <strong>de</strong> trabajar con seres humanos. Este vínculo se<br />

impregna <strong>de</strong> la sensibilidad <strong>de</strong>l terapeuta, <strong>de</strong> su receptividad<br />

y aceptación hacia el que sufre o pa<strong>de</strong>ce<br />

un conflicto, <strong>de</strong> la empatía, flexibilidad y capacidad <strong>de</strong><br />

poner límites tanto consigo mismo como con el paciente;<br />

y <strong>de</strong>l compromiso con el otro impulsado por<br />

los afectos y el profesionalismo <strong>de</strong>l psicólogo clínico.<br />

En cuanto al grupo 1, sería relevante la realización <strong>de</strong> un<br />

seguimiento para corroborar la mantención <strong>de</strong> la mejoría<br />

<strong>de</strong> los pacientes.<br />

Lo anterior en función <strong>de</strong> que los pacientes <strong>de</strong>l grupo 1,<br />

así como mejoraron con psicoterapia, podrían eventual e<br />

hipotéticamente disminuir los puntajes <strong>de</strong>l instrumento<br />

aplicado una vez terminado el proceso psicoterapéutico,<br />

observándose recaídas como en el caso <strong>de</strong>l grupo 2<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l alta <strong>de</strong> internación, ya que no cuentan con<br />

acompañamiento terapéutico.<br />

En acuerdo con que la salud mental es fundamental en la<br />

vida individual como en sociedad, siendo así mismo una<br />

<strong>de</strong> las priorida<strong>de</strong>s nacionales <strong>de</strong>l Ministerio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong>, es<br />

que las ventajas <strong>de</strong> una buena administración <strong>de</strong> los re-<br />

cursos tanto humanos, como materiales y económicos,<br />

hacen reflexionar que la psicoterapia como estrategia<br />

<strong>de</strong> intervención es rentable en el sentido que reduce el<br />

riesgo <strong>de</strong> recaídas <strong>de</strong> los pacientes por <strong>de</strong>scompensaciones,<br />

al tener éstos un proceso terapéutico durante la<br />

internación como luego <strong>de</strong> ella, por tanto es importante<br />

consi<strong>de</strong>rar el hecho <strong>de</strong> que, si un proceso <strong>de</strong> psicoterapia<br />

breve, durante la estadía <strong>de</strong> los pacientes sirve, más<br />

aún serviría la psicoterapia <strong>de</strong> manera ambulatoria como<br />

continuación <strong>de</strong>l proceso resi<strong>de</strong>ncial <strong>de</strong> las personas.<br />

En función <strong>de</strong> lo anterior, la psicoterapia ambulatoria<br />

como continuación y seguimiento <strong>de</strong>l tratamiento que<br />

se realiza durante la internación <strong>de</strong> los pacientes, sería<br />

lo más efectivo <strong>de</strong>bido a que los pacientes requieren<br />

continuar con psicoterapia post alta e i<strong>de</strong>almente con el<br />

mismo terapeuta (psicólogo). Este punto es clave, ya que<br />

sabemos cuan importante es el vínculo paciente - terapeuta<br />

y lo beneficioso que es para la terapia y recuperación<br />

<strong>de</strong> los pacientes. Para cualquier persona, <strong>de</strong>spués<br />

<strong>de</strong> haber logrado establecer una forma <strong>de</strong> trabajo psicoterapéutico,<br />

haber puesto su confianza y motivación<br />

en ello, tanto como en la labor y persona <strong>de</strong>l terapeuta,<br />

no le es fácil al egreso narrar su situación nuevamente a<br />

otro profesional. Se necesita más bien una gradual finalización<br />

<strong>de</strong>l tratamiento, por lo que lo aconsejable sería,<br />

la realización <strong>de</strong> un mínimo <strong>de</strong> 8 sesiones psicoterapéuticas<br />

ambulatorias al alta <strong>de</strong> los pacientes, una vez por<br />

semana y con el mismo terapeuta, preparándose al paciente<br />

si es que fuese necesaria una <strong>de</strong>rivación para otro<br />

tratamiento psicoterapéutico. Sabemos <strong>de</strong> acuerdo a los<br />

resultados obtenidos en esta investigación, <strong>de</strong> la efectividad<br />

que tiene el tratamiento psicoterapéutico con una<br />

mayor cantidad <strong>de</strong> sesiones y con el mismo terapeuta.<br />

Lo anterior se logra manteniendo la complementariedad<br />

que <strong>de</strong>be existir entre psiquiatra y psicólogo, tanto<br />

durante la estadía <strong>de</strong> los pacientes como en el trabajo<br />

ambulatorio. De hecho, existe evi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> diversos estudios<br />

que avalan que las intervenciones más efectivas,<br />

son aquellas que se hacen <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lo farmacológico y lo<br />

psicoterapéutico (1).<br />

Una <strong>de</strong>presión no tratada oportunamente y/o <strong>de</strong> forma<br />

ina<strong>de</strong>cuada, pue<strong>de</strong> generar cuadros recurrentes o cróni-<br />

220<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

cos, muertes por suicidio o situaciones con excesivo sufrimiento<br />

y complicaciones tanto para el paciente como<br />

para quienes lo ro<strong>de</strong>an, <strong>de</strong>teriorándose finalmente la calidad<br />

<strong>de</strong> vida en una sociedad mo<strong>de</strong>rna <strong>de</strong> la que todos<br />

somos parte.<br />

Al tener en cuenta los elevados costos relacionados con<br />

la <strong>de</strong>presión, como lo son la disminución <strong>de</strong> la productividad<br />

a causa <strong>de</strong>l ausentismo, la incapacidad o dificulta<strong>de</strong>s<br />

en el <strong>de</strong>sempeño laboral, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> los costos<br />

que surgen producto <strong>de</strong>l aumento <strong>de</strong> mortalidad por<br />

suicidios. El consi<strong>de</strong>rar que el suicidio está correlacionado<br />

con la <strong>de</strong>sesperanza <strong>de</strong> la persona que sufre no<br />

está <strong>de</strong> más, por tanto, si realizamos intervenciones más<br />

efectivas, es <strong>de</strong>cir, aquellas que se hacen <strong>de</strong>s<strong>de</strong> lo farmacológico<br />

y psicoterapéutico, podríamos transformar<br />

o al menos mejorar el nivel <strong>de</strong> funcionamiento <strong>de</strong> los<br />

pacientes en crisis, a través <strong>de</strong> un trabajo conjunto entre<br />

terapeuta y paciente, modificándose la forma <strong>de</strong> verse,<br />

sentirse y significar el vivir en el mundo. Así mejora la<br />

ecuación costo efectividad en el país, en lo que respecta<br />

a la disminución <strong>de</strong> costos totales para el sistema <strong>de</strong><br />

salud, institucional laboral y familiar.<br />

Referente a la variable <strong>de</strong>l suicidio, esta es <strong>de</strong> suma relevancia<br />

a la hora <strong>de</strong> pensar en la necesidad <strong>de</strong> internación<br />

<strong>de</strong> un paciente que corre riesgo vital, como ha sido<br />

el caso <strong>de</strong> todos los pacientes con diagnóstico <strong>de</strong> <strong>de</strong>presión<br />

<strong>de</strong> este estudio. Tanto el grupo 1 como el grupo<br />

2 al momento <strong>de</strong>l alta <strong>de</strong> internación, ya no presentan<br />

intento y/o i<strong>de</strong>ación suicida, sin embargo luego <strong>de</strong> 8<br />

semanas, varios <strong>de</strong> los pacientes <strong>de</strong>l grupo 2 se sentían<br />

tristes, con poca esperanza en el futuro, insatisfechos<br />

<strong>de</strong> su situación y/o la vida, lo que nos lleva a pensar<br />

en la posibilidad <strong>de</strong> riesgo suicida a mediano o largo<br />

plazo si no recibieran la atención profesional necesaria.<br />

En cuanto al grupo 1, se observa que el 100% <strong>de</strong> los<br />

pacientes finalizan el proceso psicoterapéutico sin i<strong>de</strong>ación<br />

y/o intento <strong>de</strong> suicidio, teniendo en cuenta el que<br />

al ingreso tanto el grupo 1 como el grupo 2 presentaban<br />

i<strong>de</strong>ación y/o intento suicida, incluso aquel paciente <strong>de</strong>l<br />

grupo 1, que no alcanzó un nivel <strong>de</strong> cambio terapéutico<br />

estadísticamente significativo, mejoró pasando <strong>de</strong> 90 a<br />

210 - 226, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 221<br />

76 su puntaje total según el OQ-45.2. Esto se afirma en<br />

los resultados <strong>de</strong>l área <strong>de</strong> síntomas <strong>de</strong> la escala, don<strong>de</strong><br />

los sujetos <strong>de</strong>l grupo 1 arrojan niveles <strong>de</strong> mejoría consi<strong>de</strong>rables,<br />

obteniéndose un índice <strong>de</strong> cambio confiable<br />

que alcanza el 95%, a diferencia <strong>de</strong>l grupo 2 que en esta<br />

área presenta solo un 5% <strong>de</strong> índice <strong>de</strong> cambio confiable.<br />

Concerniente a dificulta<strong>de</strong>s <strong>de</strong> los procesos <strong>de</strong> psicoterapia<br />

en el grupo 1, puedo señalar que se observó el fenómeno<br />

<strong>de</strong> la resistencia frente a la posibilidad <strong>de</strong> cambio<br />

terapéutico por parte <strong>de</strong> los pacientes, sobre todo en<br />

las primeras sesiones. Lo anterior era esperable, <strong>de</strong>bido<br />

a que mi visión <strong>de</strong> la resistencia es concebida como una<br />

dinámica inherente a la interacción terapeuta-paciente,<br />

como un elemento que siempre pue<strong>de</strong> estar presente<br />

en el proceso, con diferentes intensida<strong>de</strong>s, pero nunca<br />

se pue<strong>de</strong> tener la expectativa <strong>de</strong> que la resistencia no<br />

estará presente, ya que es una herramienta clave para<br />

analizar la transferencia y construir la alianza terapéutica,<br />

elementos sin los cuales no se pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollar la<br />

psicoterapia.<br />

Es preciso también señalar algunas limitaciones <strong>de</strong> esta<br />

investigación, como el tamaño muestral que es pequeño<br />

y la selección <strong>de</strong> los pacientes fue no probabilística<br />

e intencionada. No obstante, recordar que el diseño es<br />

cuasi experimental, por lo que los sujetos no se asignaron<br />

al azar a los grupos ni se emparejaron, sino que<br />

dichos grupos ya están formados antes <strong>de</strong>l experimento:<br />

son grupos intactos, la razón por la que surgen y la<br />

manera como se formaron es in<strong>de</strong>pendiente o aparte <strong>de</strong>l<br />

experimento (6).<br />

Interesante sería la realización <strong>de</strong> futuras investigaciones,<br />

evaluándose la calidad <strong>de</strong> las intervenciones psicoterapéuticas<br />

en los distintos centros <strong>de</strong> salud mental <strong>de</strong>l<br />

país, a través <strong>de</strong> mediciones constantes en el tiempo <strong>de</strong><br />

los tratamientos con las personas; pudiendo incorporar<br />

a los estudios otros tipos <strong>de</strong> patologías y un número mayor<br />

<strong>de</strong> pacientes. Conjuntamente hubiera sido relevante<br />

analizar, pese a no ser objetivo <strong>de</strong> este estudio, el rol terapéutico<br />

<strong>de</strong>l médico psiquiatra y como lo significan los<br />

pacientes mientras vivencian su proceso <strong>de</strong> intervención.


Cuestionario <strong>de</strong> resultados OQ-45.2<br />

222<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225


CAMBIO TERAPÉUTICO CON PSICOFÁRMACOS SOLOS VERSUS ADICIÓN DE PSICOTERAPIA EN PACIENTES DEPRESIVOS HOSPITALIZADOS<br />

210 - 226, Nº 3 - 4, XXVI, <strong>2009</strong> PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL 223


Developed by Michael Lambert, Ph.D. and Gary M. Burlingame, Ph. D. C Copyright 1996 American Professional Cre<strong>de</strong>ntialing Services LLC.<br />

All Rights Reserved. License Required For All Uses. Validado en Castellano por Guillermo <strong>de</strong> la Parra C. y Alejandra von Bergen R.<br />

Para mayor información contactar: Guillermo <strong>de</strong> la Parra C. / E-mail: g<strong>de</strong>lap@vtr.net - Alejandra von Bergen R. / E-mail: avonbergen@terra.cl<br />

Bibliografia<br />

1. Acuña, J. Botto, A. & Jiménez, J. (<strong>2009</strong>). Psiquiatría para Atención<br />

Primaria y el Médico General. Depresión, ansiedad y somatización.<br />

1ª Edición. Chile: Mediterráneo.<br />

2. Correa, J. & Florenzano, R. (2006). "El uso <strong>de</strong>l cuestionario OQ-<br />

45.2 como indicador <strong>de</strong> psicopatología y <strong>de</strong> mejoría en pacientes<br />

psiquiátricos hospitalizados". Revista <strong>Chilena</strong> Neuro-<br />

Psiquiatría. 44 (4): 258-262. Santiago, Chile.<br />

3. Cruz, F. & Roa, V. (2005). “Intento Suicida en Niños y Adolescentes:<br />

Criterios para un Mo<strong>de</strong>lo <strong>de</strong> Intervención en Crisis<br />

Des<strong>de</strong> el Enfoque Constructivista Evolutivo”. Tesis para optar<br />

el título <strong>de</strong> Psicólogo. Universidad <strong>de</strong> Chile, Santiago, Chile.<br />

4. De la Parra, G. & Von Bergen, A. (2006). "Medición <strong>de</strong> los resultados<br />

en psicoterapia: uso <strong>de</strong>l OQ-45.2, un instrumento validado<br />

en Chile". Rev. Gaceta Universitaria, Año 2, Vol. 2- Nº 2.<br />

Facultad <strong>de</strong> Medicina. Universidad <strong>de</strong> Chile. Santiago.<br />

5. Florenzano, R. & Ortega, P. (2005). Uso sistemático <strong>de</strong>l Outcome<br />

Questionnaire (OQ-45.2). 1ª Edición. Chile: Universidad <strong>de</strong>l<br />

Desarrollo.<br />

6. Hernán<strong>de</strong>z, R., Fernán<strong>de</strong>z, C. & Baptista, P. (2008). Metodología<br />

<strong>de</strong> la Investigación. 4ª Edición. México: McGraw-Hill.<br />

7. Ivanovic-Zuvic & Correa (<strong>2009</strong>). "Trastornos <strong>de</strong>l Ánimo". Rev.<br />

Trastornos <strong>de</strong>l Ánimo v.5 n.1 <strong>de</strong> la Unidad <strong>de</strong> Trastornos<br />

Bipolares. Facultad <strong>de</strong> Medicina <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Chile.<br />

Santiago.<br />

8. Ministerio <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>de</strong> Chile. (1998). Diagnóstico y Tratamiento<br />

<strong>de</strong> la Depresión en Nivel Primario <strong>de</strong> Atención. División <strong>de</strong><br />

<strong>Salud</strong> <strong>de</strong> las Personas. Gobierno <strong>de</strong> Chile. MINSAL.<br />

9. Poblete, F., Sapag, J. & Bossert, T. (2008). "Capital social y<br />

salud mental en comunida<strong>de</strong>s urbanas <strong>de</strong> nivel socioeconómico<br />

bajo, en Santiago, Chile. Nuevas formas <strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r la<br />

relación comunidad-salud". Rev. méd. Chile v.136 n.2 Santiago<br />

<strong>de</strong> Chile.<br />

10. Rossel, L. (1999). Los Puentes entre el Duelo y la Esperanza;<br />

Psicoterapias específicas en Depresión. 1ª Edición. Chile: LOM.<br />

11. Segura, P. & Espinoza N. (2005). Síndrome Depresivo en la<br />

Región Metropolitana. Tesis para optar al título <strong>de</strong> Psicólogo.<br />

Universidad ARCIS, Santiago, Chile.<br />

224<br />

PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL <strong>2009</strong>, XXVI, Nº 3 - 4 , 210 - 225


REVISTA PSIQUIATRÍA Y SALUD MENTAL<br />

Normas <strong>de</strong> publicación<br />

La Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> invita a los profesionales<br />

<strong>de</strong> la psiquiatría, <strong>de</strong> la psicología, <strong>de</strong> las ciencias<br />

sociales y <strong>de</strong> otras áreas relacionadas con la salud mental,<br />

chilenos y extranjeros, a enviar trabajos originados en sus<br />

respectivos campos <strong>de</strong> acción a fin <strong>de</strong> que sean consi<strong>de</strong>rados<br />

para su publicación. Se aceptará trabajos inéditos, los cuales<br />

<strong>de</strong>berán ser enviados al Editor. El Comité Editorial podrá<br />

<strong>de</strong>cidir como excepción calificada la publicación <strong>de</strong> trabajos<br />

que no cumplan estas normas. Los que se acepten pasarán a<br />

ser propiedad privada <strong>de</strong> la revista Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

y no podrán traducirse ni reproducirse sin consentimiento<br />

escrito <strong>de</strong>l Editor.<br />

Artículos Originales<br />

Deben estar escritos <strong>de</strong> manera clara y concisa, con letra<br />

Arial, tamaño 12, en un documento <strong>de</strong> word. Se enviará al<br />

Editor por mail y/o correo postal impreso y grabado en CD,<br />

incluyendo cuadros <strong>de</strong> texto, figuras y fotos originales. La<br />

extensión aproximada <strong>de</strong>l texto será <strong>de</strong> 15 hojas tamaño<br />

carta. La Revista se reserva el <strong>de</strong>recho <strong>de</strong> introducir modificaciones<br />

formales en el título y/o en el texto, <strong>de</strong> solicitar modificaciones<br />

al autor principal o <strong>de</strong> rechazar la publicación,<br />

para tal efecto <strong>de</strong>be indicar dirección, mail y teléfono, para<br />

también enviar posteriormente, un ejemplar <strong>de</strong> la revista con<br />

el artículo publicado. El material enviado no será <strong>de</strong>vuelto.<br />

La primera página <strong>de</strong>berá contener:<br />

• Título <strong>de</strong>l trabajo en español e inglés.<br />

• Nombre completo <strong>de</strong>l autor (es), institución(es) <strong>de</strong> perte<br />

nencia.<br />

• Dirección postal, mail y teléfono <strong>de</strong>l autor principal.<br />

• Resumen en español e inglés <strong>de</strong> un máximo <strong>de</strong> 200<br />

palabras.<br />

• Hasta 5 palabras claves, tanto en español como en inglés<br />

(Key words).<br />

Cada cuadro o figura se enviará en hojas separadas y numeradas<br />

con cifras arábicas <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l texto. Sus títulos y<br />

pies <strong>de</strong> figura <strong>de</strong>ben ser claros y breves y llevar el número<br />

correspondiente que los i<strong>de</strong>ntifiquen.<br />

Las fotografías <strong>de</strong>ben ser originales impresas o en formato<br />

jpg bien contrastadas y <strong>de</strong> tamaño apropiado, las que se publicarán<br />

en blanco y negro, indicando el número <strong>de</strong> la figura<br />

y señalando la parte superior <strong>de</strong> la misma.<br />

Los mapas, esquemas, diagramas y similares serán con figuras<br />

en negro con fondo en blanco, y seguirán las mismas<br />

instrucciones <strong>de</strong> las fotografías.<br />

Esquema <strong>de</strong> Presentación<br />

1. En la sección trabajos <strong>de</strong> investigación se aceptarán estudios<br />

cuyos resultados estén a<strong>de</strong>cuadamente documentados<br />

y, cuando sea el caso, que cuenten con análisis estadísticos<br />

apropiados. Cada trabajo <strong>de</strong>berá estar organizado en lo posible<br />

y cuando corresponda <strong>de</strong> la manera siguiente:<br />

Introducción: Esta <strong>de</strong>be ser una breve exposición <strong>de</strong> los antece<strong>de</strong>ntes<br />

<strong>de</strong> la investigación y los objetivos <strong>de</strong>l trabajo.<br />

Material y Método: Información <strong>de</strong>tallada <strong>de</strong>l trabajo experimental<br />

y <strong>de</strong> la tecnología empleada.<br />

Resultados: Descritos <strong>de</strong> manera precisa y concisa en lo posible<br />

en términos cuantitativos.<br />

Discusión: En especial <strong>de</strong> la importancia <strong>de</strong> los resultados o<br />

<strong>de</strong> sus limitaciones interpretativas.<br />

Referencias Bibliográficas:<br />

1. Deberán limitarse a las citadas en el texto, situarse<br />

al final <strong>de</strong>l texto numeradas por or<strong>de</strong>n alfabético.<br />

Las Revistas se citarán <strong>de</strong> la siguiente forma: autores, título<br />

<strong>de</strong>l trabajo, nombre <strong>de</strong> la revista según abreviatura <strong>de</strong>l<br />

In<strong>de</strong>x Medicus, volumen (número), página inicial: final y<br />

año. Para los libros <strong>de</strong>berá indicarse autores, título, editorial,<br />

ciudad en que fue publicado y año. En el texto <strong>de</strong>berá<br />

señalarse con el número que corresponda en la bibliografía.<br />

2. En otras secciones se aceptarán artículos relacionados<br />

con la salud mental, revisiones bibliográficas, ensayos, observaciones<br />

clínicas, cartas relacionadas con trabajos publicados<br />

o temas <strong>de</strong> interés, etc. Su extensión máxima será la<br />

misma que los trabajos <strong>de</strong> investigación, aplicándose también<br />

las mismas instrucciones para figuras, cuadros, fotografías,<br />

esquemas, etc.<br />

Reproducción <strong>de</strong> publicaciones:<br />

El Comité Editorial excepcionalmente acordará la reproducción<br />

<strong>de</strong> publicaciones antiguas, tales como artículos,<br />

documentos y similares, en razón <strong>de</strong>l interés <strong>de</strong> su<br />

contenido y la dificultad <strong>de</strong> acceso a la fuente original.<br />

La Revista acepta solicitu<strong>de</strong>s o sugerencias en este sentido,<br />

las que <strong>de</strong>ben ser dirigidas al Editor.


SOCIEDAD CHILENA<br />

DE SALUD MENTAL<br />

Fecha:<br />

Adjunto mi pago <strong>de</strong> $20.000.- Por un año (4 números), Estudiantes ($10.000)<br />

Adjunto mi pago <strong>de</strong> $36.000.- Por dos años (8 números), Estudiantes ($18.000)<br />

Me interesa una colección <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1984 hasta 1993. (4 números por año) $40.000.-<br />

Me interesa una colección <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 1994 hasta 2000. (4 números por año) $70.000.-<br />

Datos <strong>de</strong>l suscriptor y <strong>de</strong>spacho <strong>de</strong> revista<br />

Nombre: RUT:<br />

Profesión:<br />

Dirección: Comuna:<br />

Fono: FAX:<br />

E-mail:<br />

Forma <strong>de</strong> pago<br />

Suscripción<br />

Revista Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

AL DÍA Efectivo: Cheque Nº: Banco:<br />

A PLAZO 1. Cheque Nº: Banco: Fecha:<br />

2. Cheque Nº: Banco: Fecha:<br />

Formas <strong>de</strong> cancelar:<br />

• En el momento <strong>de</strong>l <strong>de</strong>spacho.<br />

• Depositar en Cta. Cte. Nº 4684650 <strong>de</strong>l Banco ITAÚ, posterior envío <strong>de</strong> comprobante <strong>de</strong> <strong>de</strong>pósito al fax: 738 25 03 o al<br />

mail: sociedad.saludmental@gmail.com<br />

• Enviar cheque nominativo y cruzado a nombre <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong> por correo a Av. La Paz 841.<br />

Recoleta, Santiago.<br />

Av. La Paz 841, Recoleta, Santiago, Chile | Fonos: (56 - 2) 777 8051 - 738 2503 - 5759019 | www.schilesaludmental.cl


SOCIEDAD CHILENA<br />

DE SALUD MENTAL<br />

Nombre: RUT:<br />

Profesión:<br />

Dirección Profesional: Comuna:<br />

Fono: FAX:<br />

Dirección Particular: Comuna:<br />

Fono: E-mail:<br />

Nota: Indicar dirección preferencial para el <strong>de</strong>spacho <strong>de</strong> correspon<strong>de</strong>ncia y <strong>de</strong> la Revista <strong>de</strong> Psiquiatría y <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>.<br />

Cuota <strong>de</strong> Incorporación<br />

Efectivo<br />

Documento<br />

Cheque Nº: Banco:<br />

Cantidad: $25.000 (veinticinco mil pesos)<br />

Fecha <strong>de</strong> Incorporación:<br />

Formulario <strong>de</strong> Incorporación a la<br />

<strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong><br />

Firma Socio Activo Firma Socio Activo Firma Nuevo Socio<br />

Observaciones: Firmas <strong>de</strong> dos socios activos para patrocinar al nuevo integrante. (Artículo 6º b <strong>de</strong> los estatutos)<br />

Av. La Paz 841, Recoleta, Santiago, Chile | Fonos: (56 - 2) 777 8051 - 738 2503 - 5759019 | www.schilesaludmental.cl


SOCIEDAD CHILENA<br />

DE SALUD MENTAL<br />

Por el presente documento, autorizo se me <strong>de</strong>scuente por planilla <strong>de</strong> sueldo la cantidad <strong>de</strong> $5.000.- (cinco mil pesos),<br />

correspondiente a cuota social <strong>de</strong> la <strong>Sociedad</strong> <strong>Chilena</strong> <strong>de</strong> <strong>Salud</strong> <strong>Mental</strong>, <strong>de</strong> la cual soy socio activo.<br />

Nombre:<br />

RUT: E-mail:<br />

Profesión:<br />

Institución:<br />

Jefe <strong>de</strong> Personal:<br />

Dirección: Comuna:<br />

Fono: FAX:<br />

Fecha:<br />

Autorización<br />

Firma<br />

Av. La Paz 841, Recoleta, Santiago, Chile | Fonos: (56 - 2) 777 8051 - 738 2503 - 5759019 | www.schilesaludmental.cl

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!