Boletín “Desde Adentro” - Central Mexicana de Servicios Generales ...

El impacto
del alcoholismo
Alcoholismo, causa principal de choques
Por Edith Mendoza
Más allá de la factura que el consumo del alcohol pasa
al organismo, las importantes pérdidas a nivel social y
económico orillan a considerarlo como un problema de
salud pública, recalcó Rómulo Moreira Flores, director
del Hospital General de Zona 1 del Instituto Mexicano
del Seguro Social (IMSS).
Sólo durante el año pasado y en lo que va de éste, hasta
junio, en Saltillo la Policía Municipal Preventiva registró
302 accidentes viales relacionados con el alcoholismo.
A nivel mundial México ocupa uno de los primeros lugares
como una sociedad enferma de alcoholismo, de
acuerdo con el último estudio de la Organización Mundial
de la Salud.
Dentro del país hay varias zonas endémicas de alcoholismo
patológico. En primer lugar se encuentra el centro
de México, seguido del sur y luego el norte, pero hay
datos particulares muy alarmantes en la ciudad.
Durante los últimos tres años casi 900 accidentes viales
ocurren en Saltillo han estado vinculados con el consumo
de alcohol, lo que anualmente representa millones
de pesos en pérdidas.
En el mismo periodo, por ingerir bebidas embriagantes
en vía pública fueron puestos a disposición del juez calificador
casi cuatro mil personas mayores de edad.
En el mismo lapso, por la compra de bebidas embriangantes
fuera de horario se han puesto a disposición del
juez calificador poco más de 4 mil 400 personas, entre
los que figuran casi 140 menores de edad.
El ámbito laboral es también afectado por el consumo
de estimulantes, principalmente por el alcohol. Es común
que los accidentes laborales, si bien no en estado
de ebriedad, se den en la etapa que se denomina como
resaca o cruda, cuando el trabajador no se encuentra
en óptimas condiciones para desempeñar sus labores.
Rómulo Moreira Flores comentó que aunque es difícil
cuantificar dicho escenario, la incidencia de empleados
que acuden a sus áreas de trabajo en estado inconveniente
es relativamente alta, lo que tiene muchas repercusiones
económicas.
“El mexicano no toma la bebida como un complemento
alimenticio, como lo hacen los italianos o los españoles.
El mexicano toma por resentimiento, por pena, porque
no tiene un futuro. Ésta es la embriaguez que se conoce
como patológica”, dijo el especialista.
“Es un problema que ha sido atendido por entidades no
gubernamentales, no se ha considerado como un problema
de salud pública. Se permite la venta de bebidas
fuera de horarios establecidos, que conllevan a que el
individuo siga tomando. Todo mundo sabemos dónde
conseguirlo, los domingos sobre todo”, explicó.
La afectación que un individuo padece a nivel fisiológico
a causa de la ingesta del alcohol, llega hasta el cerebro,
modificando la percepción de la misma realidad y, con
ello, resta la capacidad de discernimiento y sus capacidades
mecánicas. Éste es el daño que más repercusiones
económicas tiene sobre la sociedad.
Los tratamientos contra el alcoholismo incluyen programas
de desintoxicación realizados por instituciones
médicas. Esto puede suponer la estancia del paciente
durante un periodo indeterminado en hospitales especializados,
donde puede que se utilicen determinados
medicamentos para evitar el síndrome de abstinencia.
Después del periodo de desintoxicación, puede someterse
al paciente a diversos métodos de terapia de grupo
o psicoterapia para tratar problemas psicológicos de
fondo que hayan llevado al paciente a la dependencia.
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