P A C - Mother of Christ Catholic Church

semejantes, el amar con el sacrificio del dolor propio y la entrega de
ese dolor como El hizo para nuestra salvación.
¿Como podemos quedarnos inmóviles ante tal avance anti-Dios de la
sociedad mundial? ¿Si realmente creemos en El, como permitimos a
la mentira el tratar de adueñarse de nuestra familia y de nuestra
sociedad? ¿Si realmente creemos en El, cuando vamos a decidirnos
a tomar parte activa en su defensa? ¿Quienes somos para
rendirnos, cuando nuestra acción individual y colectiva, nos salva y
nos nutre a la vez?
No, no hay tiempo. No hay un mañana de alegría y vida en el
espíritu divino de Dios, sin un hoy de sacrificio y testimonio de
nuestra fe con nuestro más completo compromiso de oración,
sacramentos y acción. Nuestro caminar diario junto a Cristo
moverá al indeciso e inquietará al hermano equivocado. Pero
estemos claros, que caminar debemos; que actuar debemos; que
servir debemos; que ser ejemplos de Cristo debemos.
No, no hay tiempo. No hay excusas cuando ya hemos encontrado a
Cristo, ya creemos en El, y hemos decidido, o quizás aún estamos
en ese proceso, en seguirlo. El ejército de Dios en la tierra somos
nosotros. Satanás está cada día aumentando el suyo basado en
obscuras y falsas promesas.
Cristo ya nos lo dio todo. Su palabra de vida, y su vida hecha
palabra. No, no hay tiempo para dudar.
Nosotros, hijos de Dios todos, tenemos la libertad de decisión con
respecto a cada segundo de nuestra vida. Esa palabra, esa realidad,
“decisión” es nuestra salvación o perdición. Ella conlleva la
profundísima pero humana alternativa de nuestra obra individual,
en ella se escribe nuestra historia de actuación diaria, el contenido
de nuestra afirmación y creencia en El, o por el contrario nuestro
despegue.
PAC Taller #16-Enero 2009 7